Sunteți pe pagina 1din 52

Derecho

El concurso de delitos
culposos
Hugo A. Restrepo
Abogado, Docente de la Facultad de Derecho, Universidad de San Buenaventura Cali

Abstract Resumen

Partiendo de la evolución histórica del concep-


Beginning with the historical evolution of
the concept of concurrent penal offenses to del concurso de tipos penales, desde el
from Roman Law to the present, and Derecho Romano hasta nuestros días, pasan-
reviewing the doctrinal contributions of the do por los aportes doctrinarios de las escue-
classical, positivist, and dogmatic German las clásica, positivista y la dogmática penal ale-
Penal Law, it is the purpose of this paper mana, este trabajo se propone precisar los
to specify the requirements to determine requisitos para determinar la existencia de un
the existence of concurrence of culpable concurso de delitos culposos.
crimes.
Naturalmente que para llegar a este propósito
Obviously, to this end, this paper discuss- en este trabajo se estudian los aportes de la
es the doctrinal contributions with regard
doctrina en materia de delito culposo, tanto
to culpable crime both in the traditional
dentro del esquema tradicional que se limita a
scheme, which is limited to determine the
determinar la existencia del mismo por la sola
existence of it, solely based on an
producción de un resultado, a riesgo de incu-
outcome, thus running the risk of incurring
rrir en responsabilidad objetiva, como dentro
objective liability, as well as within the
guidelines and contributions of modern de los planteamientos y aportes de la doctrina
doctrine which focuses the concept of guilt moderna, que centra el concepto de culpa en
on the breach of the objective duty of care la violación del deber objetivo de cuidado,
as a necessary assumption. como presupuesto necesario.

This paper also provides a review of leg- Además en el trabajo se hace un estudio de
islative systems for the incrimination of cul- los sistemas legislativos para la incriminación
pable crime, i.e. crimina culpae and crimi- del delito culposo, conocidos como crimina
na culposa, and draws the conclusion that culpae y crimina culposa, para concluir que
only one of them considers the possibility tan solo uno de ellos admite la posibilidad del
of establishing concurrence of culpable concurso de delitos culposos, mientras que
crimes, while the other one does not.
el otro cierra las puertas a esta posibilidad. 77
Aspectos generales Dependiendo de la manera como se conciba
el concepto de acción, así mismo dependerá
A. El concurso de tipos penales.
Concepto si en un caso concreto dado puede entender-

Hablar de un concurso de hechos punibles se que exista unidad o pluralidad de accio-

equivale a entender que una misma persona nes, y de ello mismo puede depender que se

puede realizar una conducta relevante para el admita o no una pluralidad delictiva o concur-
Derecho Penal, que puede adecuarse en dos so de delitos.
o más tipos penales, o bien, de un número B. Evolución histórica de la figura
plural de conductas que encajen en una mis-
El Derecho Romano analizaba el tema del
ma descripción típica o en varias de ellas. Se
concurso de delitos desde un punto de vista
trata entonces de la confluencia de varias fi-
exclusivamente procesal, sin hacer referencia
guras delictivas efectuada con una o más con-
a él dentro del Derecho Penal material. Resul-
ductas, o de la confluencia de una misma fi-
ta innegable que el fenómeno del concurso
gura delictiva realizada con conductas diver-
de delitos tiene repercusiones en materia del
sas. En el primer evento estamos en presen-
derecho procesal, como que puede determi-
cia de un concurso heterogéneo de tipos, en
nar competencias, cuantías, términos de pres-
tanto que en el segundo se habla de un con-
cripción, etc.1 Sin embargo, los doctrinantes
curso homogéneo.
modernos han preferido ubicar la figura den-
En todo caso, el concurso de hechos punibles
tro del derecho sustancial, bien sea como parte
o la teoría de la concurrencia de conductas
de la teoría del delito y específicamente den-
punibles implica la realización de una o varias
tro de la tipicidad o como un elemento que
acciones típicas, antijurídicas y culpables, rea-
debe estudiarse dentro del tema de la
lizadas por un mismo sujeto. Y si lo típico, lo
punibilidad a efectos de determinar el monto
antijurídico y lo culpable son calificativos que
de la pena a aplicar a un sujeto en un mo-
se le dan a la “acción”, un estudio del fenó-
mento dado.
meno jurídico denominado “concurso de he-
chos punibles” debe partir necesariamente por Desde el Derecho Romano hasta la escuela
estudiar el concepto de acción, pues depen- clásica de Carrara, el fenómeno del concurso
diendo del mismo se podrá hablar de unidad de delitos fue conocido con el nombre de
o multiplicidad de comportamientos delictivos. “Delito Continuado”. La teoría de la continua-
Fue precisamente la diferencia al concebir el ción delictiva tiene su fundamento en la Lex
concepto de acción lo que determinó el sur- 25 de furtis y en la Lex 7 de injurias recopila-
gimiento de las diferentes escuelas dogmáti- das en el Corpus Uiris Civilis de Justiniano.
cas del Derecho Penal, y cada una de ellas Ulpiano supone el caso del individuo que va-
presentó su propia teoría del delito sobre la rias veces ha agredido a un adversario suyo
misma base lingüística: “El delito es una ac- pero unas de palabra y otras de obra, y dice
ción típica, antijurídica y culpable”. que Marcelo, siguiendo la opinión de Neracio,

78 1. MEZGUER, Edmundo. Derecho Penal Parte General. Traducción de Ricardo Nuñez. Editorial Cárdenas. México 1985, pág. 330.
acepta que se han de acumular las ofensas mente dicho del delito continuado, entendien-
sufridas a un mismo tiempo.2 do este último como las repetidas violaciones
Es decir que, en el Derecho Romano, la acu- de una misma disposición penal pero con

mulación de ofensas suponía la acumulación unidad de fin, caso en el cual se aplica la re-

de penas, ordenado únicamente por el siste- gla de “la unificación del fin parece que debe

ma aritmético, precisamente porque la propor- conducir a la unificación del delito”.

ción aritmética corresponde a la etimología de En términos de hoy queda claro para Carrara
la palabra: Pena, derivada de pendere, que que el delito continuado no implica un con-
significa: pesar, medir. Por ello, en términos curso de delitos. Por lo demás opera la re-
de Papiniano: “Poena est aestimatio delicti” (La gla diversa, es decir: “Quien comete varias
pena es la estimación del delito), con lo cual violaciones por fines diversos, cuantos sean
se quiere indicar que la pena no es sino un los fines, serán los delitos que se han de
cambio de valores, es la moneda con la cual imputar al agente, separadamente uno del
se paga el delito, y si se acumulan las ofen- otro”.3
sas, se deben acumular las penas. Desde esta No obstante, a diferencia del Derecho Roma-
perspectiva, una pluralidad de delitos debe no y medieval, Carrara rechaza enfáticamente
traer como consecuencia inexorable la plurali- la suma aritmética de penas como consecuen-
dad de penas sumadas aritméticamente. cia del concurso de delitos, pues expresa que:
Este esquema, aunque nos parezca muy pri- “La proporción entre la pena y el delito no debe
mitivo, es el que se aplica en la actualidad en tomarse como una relación material, sino en
los Estados Unidos de América, donde no es un sentido enteramente sicológico: No se tra-
inusual escuchar que a una persona se le con- ta de ninguna proporción entre un hecho ma-
dene a purgar dos o tres cadenas perpetuas terial y otro hecho material, sino entre un efec-
por la comisión de varios delitos. Este mismo to moral y otro efecto moral. Este recibirá siem-
criterio fue el que guió al Derecho Penal de la pre, es cierto, algún influjo del efecto material,
Edad Media. y así como el daño es el criterio para la canti-
Carrara ubica el concepto del concurso de dad intrínseca de los delitos, así también el
delitos dentro del Capítulo X de su primer vo- sufrimiento material será el criterio para la can-
lumen bajo la denominación de “Delito Conti- tidad intrínseca de la pena”.4
nuado”, pero en su desarrollo precisa que hay Sin embargo, Carrara cuestiona el hecho de
diferencia entre las varias violaciones de dis- que los varios resultados de una misma con-
tintas disposiciones penales y las repetidas ducta y de una misma finalidad generen por sí
violaciones de una misma ley penal, y dentro mismos un concurso de delitos, eventos en
de esta última categoría diferencia lo que hoy los cuales prefiere hablar de un delito com-
se denomina el concurso homogéneo propia- plejo. Así lo indica el maestro de Pisa:

2. CARRARA, Francisco. Programa de Derecho Criminal, Volumen 1, Capítulo X. Temis, Bogotá, 1956, pág. 343.
3. CARRARA, ob. cit. Volumen 1, pág. 344
4. CARRARA, ob. cit. Volumen 2, pág. 140 79
“No me ha sido posible convencerme de que culposos cuando de una misma conducta
se pueda incluir entre los delitos continuados imprudente, como puede ser la invasión de
el caso de un disparo de escopeta que deja calzada contraria en el ejercicio de la conduc-
heridos a varios individuos. Siendo única la ley ción de automotores, sobreviene una colisión
violada, única la resolución y único el acto, en y una pluralidad de muertos.
virtud de la pluralidad de resultados tendre- Pese a la existencia de una unidad de acto, y
mos en ello un delito complejo, pero encon- ser única la norma violada, así como única la
trar continuación jurídica donde sólo hay un infracción al reglamento de tránsito, se proce-
momento moral y sólo un momento físico, es sa y juzga por concurso homogéneo de ho-
cosa que a mis estrechas entendederas pa- micidios culposos, siguiendo el criterio de la
rece repugnante, al menos en teoría”.5 pluralidad de resultados.
En consecuencia, Carrara hace un aporte fun- Para la escuela positivista del Derecho Penal,
damental a lo que hoy se conoce como la cuyos defensores más destacados fueron
figura del concurso de delitos, consistente en Ferri, Garófalo y Lombroso, el fenómeno del
que no considera posible que con una sola concurso de delitos no tenía una importancia
acción se puedan cometer varios delitos, aun- significativa, sencillamente porque la causa de
que los resultados de esa misma acción sean las conductas desviadas se atribuía a la per-
múltiples, pues parte de la premisa según la sonalidad peligrosa del sujeto agente y por ello,
cual “Para que exista la figura de varios delitos la consecuencia curativa en defensa de la
es necesaria la existencia de varias acciones, sociedad consistente en la exterminación del
cada una de las cuales debe representar por delito se conseguía con el aislamiento indefi-
sí misma una ofensa a la ley”.6 Y por esta vía nido de esas personas peligrosas. Por tanto,
llega a la siguiente conclusión: “La unidad de desde esta perspectiva, independientemente
acto conduce al delito único, pero complejo, del número de conductas penalmente re-
cuando hay pluralidad de derechos violados”,7 prochadas que fueran cometidas por deter-
entiéndase cuando hay pluralidad de resul- minado sujeto, la sanción le llegaba por su
tados. personalidad peligrosa y no por sus com-
En la actualidad resulta importante rescatar este portamientos.
aporte, sobre todo en lo que tiene que ver con Es decir, que el concurso de delitos viene a
el concurso de delitos culposos, puesto que adquirir singular importancia cuando la causa
en la práctica judicial éste está siempre deter- de la producción de conductas penales deja
minado por los resultados de una misma ac- de considerarse como un problema de peli-
ción calificada como imprudente. Así, contra- grosidad del agente y se pone un mayor énfa-
riando los postulados del maestro de Pisa, hoy sis en el acto o en la conducta materializada
se entiende que hay concurso de homicidios por el individuo. En otras palabras, la regula-

5. CARRARA, ob. cit. Volumen 1, pág. 354


6. CARRARA, ob. cit. Volumen 1, pág. 347
80 7. CARRARA, ob. cit. Volumen 1, pág. 358
ción del concurso de tipos penales adquiere En términos jurídicos, si estas varias acciones
mayor importancia cuando se pasa de un así naturalmente entendidas, con sus resulta-
Derecho Penal de autor a un Derecho Penal dos, han sido recogidas por el Derecho Pe-
de acto. nal, estaremos en presencia de un concurso
Si el reproche no se fundamenta en la perso- de delitos. Indica lo anterior que la escuela
nalidad del sujeto agente sino en las activida- dogmática clásica manejó un concepto na-

des desplegadas, se hace necesario deter- turalista para determinar la existencia de una

minar cuándo se está en presencia de un solo unidad o una pluralidad de delitos, pues lo
decisivo era el número de inervaciones mus-
delito cometido o de varios, a fin de precisar
culares, con lo cual se llegaba al curioso re-
qué cantidad de pena debe aplicarse. Con
sultado de que quien da muerte a otro de diez
razón ha dicho Zaffaroni:
cuchilladas, realiza igual número de acciones.
“Cuando un sujeto ha cometido un delito, co-
Sin embargo, von Liszt, sin lugar a dudas el
rresponde aplicarle una pena. Si ha cometido
más destacado expositor de esta escuela,
varios delitos, corresponde aplicarle varias
estima que esa pluralidad de acciones sólo
penas. Este razonamiento es propio de un
constituye concurso de delitos cuando en-
Derecho Penal de acto, en tanto que para un cuentran adecuación en diferentes disposicio-
Derecho Penal de autor, cualquiera sea el nú- nes penales.
mero de delitos que el autor haya cometido,
Aclara el citado autor, siguiendo los pasos del
corresponderá la aplicación de una única pena
maestro de Pisa, que cuando una sola acción
adecuada a la personalidad que sus accio-
penal produce varios resultados de la misma
nes haya evidenciado”.8
especie, la norma penal varias veces
La escuela dogmática clásica, fiel a un con- transgredida sólo se aplica una sola vez, pues
cepto naturalista y mecanicista de acción, en casos como este la pluralidad de resulta-
definido como el movimiento muscular que dos no debe necesariamente conducir a la
produce una transformación en el mundo ex- existencia de un concurso homogéneo de
terior perceptible por los sentidos, manejó este delitos, porque en tales casos se hablará de
criterio naturalista para entender cuándo ha- un delito con varios resultados pero nunca de
bía unidad o pluralidad de delito. Esta con- una pluralidad delictiva.9 Vuelve a tomar im-
cepción proclamó que el obrar humano portancia esta consideración para efectos de
constituiría uno o varios delitos, según sea determinar la existencia o no de un concurso
naturalmente uno o plural el proceder, esto homogéneo de delitos culposos cuando con
es, hay pluralidad de acciones cuando son una misma acción imprudente se ocasionan
varios los movimientos musculares que pro- varios resultados iguales, como se apuntó al
ducen varias transformaciones del mundo momento de precisar los aportes de Carrara so-
exterior. bre esta materia y se ampliará más adelante.

8. ZAFFARONI, Eugenio Raúl. Tratado de Derecho Penal. Parte General. Editorial Ediar. Buenos Aires 1982, pág. 511
9. VON LISZT, Franz. Tratado de Derecho Penal, Tomo 3. Segunda edición. Traducción de Luis Jiménez de Asúa. Editorial Reus.
Madrid 1929, pág. 145. 81
La escuela dogmática neoclásica manejó una y a la inversa, que las varias acciones sean
concepción normativa de la acción y por ello, consideradas como un delito único, todo ello
la unidad o pluralidad de delitos se deduce con independencia del mundo de la naturale-
exclusivamente de la norma penal.10 Desde za, esto es, independientemente de un crite-
esta perspectiva lo importante para definir la rio naturalista u ontológico. Uno de los defen-
unidad de delito es el tipo penal o tatbestand. sores del criterio normativo es Pavón Vascon-
Recuérdese que los neokantianos no mane- celos, quien sostiene que sólo desde un pun-
jaron un concepto pretípico de acción al defi- to de vista jurídico puede conseguirse, como
nir el delito como una acción típicamente lo ha expresado con claridad Mezguer, una
antijurídica y culpable. Por ejemplo, para Frank unidad de conducta cuando se da una plura-
cometer un delito no significa otra cosa que lidad de acciones naturales que no pueden
ejecutar, sin que intervenga una causa de jus- funcionarenformaindependiente.Enestoscasoseltipopenalsepresenta
tificación de responsabilidad, una conducta como“abrazadera”queunelasdiversasconductas,lascualesapa-
que se adecúe a un tipo de delito. recen así vinculadas unas a las otras.11

Algunos expositores de esta corriente consi- La escuela dogmática finalista maneja un con-
deran que para el Derecho no existen con- cepto ontológico normativo para definir cuán-
ceptos naturalistas, lo que existen son con- do existe unidad o pluralidad de acción y con
ceptos jurídicos, sólo que en algunas oportu- ello la posibilidad de que exista concurso de
nidades los conceptos jurídicos corresponden hechos punibles. Entiende la acción como
de manera exacta con los conceptos natura- concepto prejurídico, es decir, de naturaleza
les, cuando el Derecho toma de la naturaleza ontológica pero con contenido final por estar
la materia que pretende regular. Pero en oca- impregnada necesariamente de voluntad. Bajo
siones el Derecho regula fenómenos natura- este criterio el concepto de acción que debe
les a los que le confiere características que no manejar el Derecho Penal es óntico, lo cual
necesariamente encuentran correspondencia no obsta para que una conducta naturalmen-
con el concepto que tiene en el mundo de la te entendida sea posteriormente sometida a
naturaleza o de lo extrajurídico. Por ello, los una valoración que desde ningún punto de
conceptos de unidad de acción en sentido vista permite desnaturalizar esa acción óntica-
naturalista y en sentido jurídico no siempre son mente entendida, ya que el hecho de que una
coincidentes. norma reproche el acto de matar, no cambia

Bajo un criterio normativo, como el manejado para nada la conducta natural de suprimir la

por la escuela dogmática neoclásica, es la vida a otro.12

omnipotencia del legislador la que determina, La escuela de la acción final hizo grandes apor-
a través de la norma penal, que una sola ac- tes al Derecho Penal, al considerar que el
ción genere o no una multiplicidad de delitos concepto de acción debe tener necesariamen-

10. ROMERO SOTO, Luis Enrique. El Concurso Aparente de Leyes. Editorial Temis, Bogotá 1993, pág. 14.
11. PAVON VASCONCELOS, Francisco. Concurso Aparente de Normas. Editorial Porrúa, cuarta edición. México 1994, pág. 90.
82 12. REYES ALVARADO, Yesid. El Concurso de Delitos. Ediciones Reyes Echandía Abogados. Bogotá 1990, pág. 29.
te un aspecto volitivo y toda voluntad está ne- sos bienes jurídicos; es lo que acontece, por
cesariamente encaminada al logro de una fi- ejemplo, cuando el conductor a exceso de
nalidad. Luego la acción o conducta humana velocidad atropella a un grupo de espectado-
es esencialmente voluntaria y finalista.13 Por res que presencian un espectáculo callejero,
tanto, un criterio ontológico normativo para dando muerte a cinco personas y lesionan-
determinar si hay una o varias acciones, parte do a otras tres. Por el contrario, se plantea
del concepto final de acción al cual se adicio- una pluralidad de acción si cada lesión o
na la valoración jurídico-social a través de los muerte se produce en accidentes separa-
tipos penales correspondientes. La unidad o dos.
pluralidad delictiva está determinada entonces Claro está que algunos autores aceptan el cri-
por el plan de autor o finalidad concreta traza- terio ontológico normativo sin que necesaria-
da y por el tipo penal correspondiente dentro mente se adscri-
del cual se adecúa su comportamiento. ban a la escuela
finalista de la ac-
Bajo este criterio, si el hecho punible no es un Según el criterio ontológico
ción, por no
mero acontecer físico, sino una actividad va- normativo de acción, puede
compartir otros
lorada por el ordenamiento jurídico, el número
aspectos de la afirmarse que hay unidad de
de movimientos realizados no tiene trascen-
dencia para determinar la unidad o la plurali-
teoría del delito acción en los hechos culposos
predicados por
dad delictiva puesto que un solo movimiento cuando mediando una viola-
la escuela de
puede conformar una única ación, como tam- ción del deber de cuidado, el
Welzel. Tal es el
bién una sola acción puede ser producto de
caso del profe- sujeto agente realiza una
un número plural de movimientos siempre y
cuando éstos impliquen el plan del autor se-
sor Reyes Alva- conducta generadora de múl-
rado.
gún la finalidad trazada. tiples resultados que pueden
Otros doctrinan-
Por el contrario, si el agente cambia comple- o no afectar a diversos bie-
tes critican el
tamente su plan y confecciona uno nuevo, ya
concepto onto-
nes jurídicos.
no se puede sostener la tesis de la unidad de
lógico normativo
acción, pues allí se presenta una finalidad di-
que intenta explicar la unidad y pluralidad de
versa a la inicialmente concretada.
acción y de delito, porque consideran que un
Para los efectos de este trabajo, según el cri- concepto final de acción no podría explicar la
terio ontológico normativo de acción, puede existencia del concurso de delitos culposos,
afirmarse que hay unidad de acción en los porque en ellos no hay una voluntad dirigida
hechos culposos cuando mediando una vio- finalmente a la producción del resultado ilícito,
lación del deber de cuidado, el sujeto agente pues una o varias infracciones penales deri-
realiza una conducta generadora de múltiples van de la imprudencia, impericia o negligen-
resultados que pueden o no afectar a diver- cia de quien no tiene orientada una conducta

13. ZAFFARONI, Eugenio Raúl. Ob. cit. Pág. 343. 83


hacia la comisión del hecho delictivo, como cional y se distingue porque dentro de esta
finalidad propuesta. concepción el énfasis está puesto en el resul-

Lo anterior porque en los delitos culposos es tado. Lo que constituye el injusto culposo es
absolutamente imposible encontrar un ele- el desvalor del resultado, porque se puso en
mento voluntario, pues el resultado no es que- peligro o se lesionó un bien jurídico tutelado.
rido por el sujeto agente. Entonces, lo importante para la doctrina tradi-
cional es la producción de un resultado des-
No obstante, los defensores de esta corriente
valorado.
consideran que si el Derecho Penal maneja
un concepto óntico de acción, la conducta La segunda forma de entender y explicar el
desplegada por el sujeto agente sigue siendo delito culposo es conocida como la doctrina
voluntaria, sólo que la finalidad resulta irrele- moderna que se caracteriza porque el énfa-
vante para el Derecho Penal. Por ejemplo, si sis no se hace en el resultado calificado como
una persona conduce un vehículo con el pro- culposo, sino que lo importante es la forma
pósito de llegar puntualmente a su boda y por en que se ejecuta la acción. El resultado, en
la premura viola la luz roja del semáforo y como esta concepción, no es determinante para la
consecuencia de esta violación atropella a un configuración del delito culposo.
motociclista ocasionándole la muerte, pues Obsérvese que estas dos corrientes de pen-
debe decirse que la conducta (trasladarse en samiento van de la mano con las escuelas
su vehículo y violar la luz) es realizada volun- dogmáticas que pretenden explicar la teoría
tariamente, pero su finalidad (llegar puntual-
del delito, pues la doctrina tradicional del deli-
mente a su boda), no es relevante para el
to culposo es coherente con un esquema
Derecho Penal.
causalista y por ello el resultado es calificado
En este caso el reproche penal deviene no de como doloso o culposo en el ámbito de la
la finalidad de la conducta, sino de la volunta- culpabilidad, en tanto que la doctrina moder-
ria violación al reglamento de tránsito que pro- na del delito culposo aparece con la concep-
dujo la muerte del motociclista. ción finalista de la acción, pues pretende ex-
plicar el delito culposo como un problema de
tipicidad, porque es en este primer nivel des-
de donde comenzamos a diferenciar un deli-
Evolución dogmática to culposo de un delito doloso, o en su caso
del delito culposo
hasta concluir que ni siquiera hay delito de-
A. Aspectos generales pendiendo de la forma en que se ejecuta la
En términos generales, puede decirse que la acción.
evolución dogmática del delito culposo se Para la doctrina moderna solamente puede ser
desenvuelve dentro de dos concepciones a constitutivo de homicidio culposo la muerte
saber: de una persona producida por el comporta-
Una primera forma de entender este tipo de miento de otro en el cual se encuentra un nexo
84 delitos es conocida como la doctrina tradi- de causalidad, siempre y cuando con ese
comportamiento se haya infringido el deber dantes, restituirá a los perjudicados una canti-
objetivo de cuidado. dad de grano proporcional a la cosecha del

La diferencia entre las dos concepciones se vecino”


aprecia en un ejemplo práctico: A conduce Y el artículo 251 de la ley más antigua conoci-
su vehículo por una avenida cumpliendo con da expresa:
todas las exigencias del tráfico automotor, con
“Si un toro tiene la costumbre de cornear, y
toda la prudencia y la pericia requeridas para
sabiéndolo su propietario no le despunta los
este comportamiento, pero de repente se atra-
cuernos, ni lo encierra, y este animal embiste
viesa un transeúnte y lo atropella producién-
a un hombre libre por nacimiento causándole
dole la muerte.
la muerte, el dueño del toro pagará media mina
Para la doctrina tradicional se tiene el resulta- de plata”.14
do muerte causado por el conductor, que es
El Derecho Romano también manejó este
objeto de valoración, y bien puede ser posi-
concepto a través de un sistema de tabulación
ble que esa valoración no implique imputa-
objetiva, pues a través de jurisprudencia se
ción subjetiva, pero en todo caso se recono-
ce que la conducta es típica y antijurídica, lue- introdujo un catálogo de referencias genera-

go el actor ha cometido una conducta injusta. les, como “el comportamiento de un buen
Para la doctrina moderna en cambio, como lo padre de familia”, “el cuidado debido y pro-
más importante es el modo de ejecución de curado por el verdadero dueño de una cosa”,
la acción, el conductor ni siquiera cometió una etc., y de esta manera se estratificó la culpa
conducta típica, no obstante que naturalmen- en grave, leve y levísima, presente en la codi-
te produjo el resultado muerte, jurídicamente ficación civil de nuestros días.
la conducta es atípica porque ejecutó la ac- El Derecho Penal medieval penetrado del con-
ción (conducir vehículo automotor) respetan- cepto moralista propio del Derecho Canónico
do el deber objetivo de cuidado. introdujo el aspecto subjetivo como elemento

B. Teorías que conforman la doctrina


sustancial del delito comprendido por el dolo
tradicional y la culpa. Sólo que por razones de orden
Hablar de la evolución del delito culposo equi- procedimental se presumía el dolo teniendo
vale a hablar de la evolución del concepto de el sindicado la carga de demostrar haber ac-
culpa y su ubicación dentro del esquema dog- tuado con culpa o en su defecto compelido
mático del delito. Puede decirse que desde el por un caso fortuito o fuerza mayor.
Código de Hammurabi ya aparece un con- Sin embargo, tan solo a partir del Derecho
cepto de culpa por negligencia, especialmente Penal moderno y especialmente el de la se-
en los artículos 55 y 251. Así dice la primera
gunda década del siglo XIX, se producen es-
de las normas citadas:
fuerzos doctrinarios que buscan explicar el
“Si una persona por negligencia deja que el concepto de culpa y a ubicar este concepto
agua de su pozo inunde los campos circun- dentro de lo que más adelante se conocería

14. REYES ECHANDIA, Alfonso. Código de Hammurabi, traducción y comentarios. Publicaciones Universidad Externado de Colombia.
Bogotá 1966, págs. 8 y 72. 85
como la estructura tripartita del delito. Las teo- voluntad la que origina el movimiento o la ac-
rías más destacadas son las siguientes: tuación del ser humano así como origina su
a) La teoría intelectualista. Denominada así inhibición, que es no producir un movimiento
porque explicaba la culpa como un vicio de la corporal determinado. Por ello se dice que la
inteligencia. Apoyada en el auge de las cien- voluntad funciona como dinamogénesis y
cias médicas y psiquiátricas, esta teoría con- como inhibición. Pero además, la voluntad
sideró que el ser humano goza de las faculta- genera la atención que implica mirar hacia el
des de comprensión y de conocimiento. futuro para entender el posible resultado pro-
Cuando la persona presenta fallas en alguna pio de un comportamiento, y ello se denomi-
de estas dos esferas se presenta el actuar na previsibilidad. El delito culposo se explica
culposo, en tanto que el dolo es un vicio en entonces, porque el sujeto voluntariamente
una facultad mental diferente: la voluntad. pone en acción su cuerpo para desarrollar una
conducta de la cual sobreviene un resultado
Por tanto la conducta culposa es propia de
no querido pero que por su atención, debió
determinados individuos, pues sólo es predi-
haber previsto. Se critica esta teoría porque
cable de aquellos que presentan el defecto
no explica la culpa inconsciente, la insupera-
mental indicado, es decir, que depende de
ble coacción ajena y el estado de necesidad
una condición intrínseca del sujeto.
disculpante.15
b) La teoría dependiente. Llamada de esta
manera porque vincula a la culpa como de- Estas tres primeras teorías tienen en común el

pendiente o apéndice del delito doloso. Para tratar de explicar el delito culposo como un

esta teoría surge la culpa y se estará en pre- problema fundamentalmente psicológico, y

sencia de un delito culposo cuando el delito esto les dio el apelativo de “teorías no norma-

doloso se realiza con error vencible. Basta una tivas de la culpa”. Posteriormente los tratadistas
simple operación mental, descartado el dolo entendieron que el problema del delito culposo
por haberse demostrado que el sujeto actuó es fundamentalmente un asunto de reprocha-
con una convicción errada, pero calificado ese bilidad con lo cual se dio paso a las denomi-
error como vencible o superable, la conducta nadas “teorías normativas de la culpa” dentro
se le imputa a título de culpa. Esta teoría es- del ámbito de la doctrina tradicional, pues se
tancó el estudio del delito culposo, porque los continuó poniendo el énfasis en el resultado
autores solamente se ocupaban del tema del comportamiento para estructurar el delito
cuando se encontraban frente a la teoría del culposo.
error. Entonces, las teorías normativas se diferen-
c) La teoría psicológico-voluntarista. Propia cian de las anteriores porque abandonan una
de la doctrina tradicional, explicaba el dolo y la explicación psicológica de la culpa para in-
culpa como la necesaria existencia de un nexo corporar un concepto nuevo, sobre el cual se
psíquico entre el querer y el resultado. Es la estructura el reproche, como es el deber de

15. AGUDELO BETANCUR, Nódier. Curso de Derecho Penal. Esquemas del delito. Segunda edición 1993, págs. 46 y 47
86
cuidado o la falta del cuidado debido. Cuan- deducir responsabilidad por fuera de sus co-
do se habla del deber de cuidado (sea este nocimientos y de sus capacidades perso-
objetivo o subjetivo) tenemos que hablar de nales.
una normativización de la culpa, porque se e) La teoría del deber objetivo de cuidado
incluye la expresión “deber”, lo que implica que como límite de la culpabilidad. Esta teoría
ya no estamos en el mundo del “ser”, ya no distingue entre el deber objetivo de cuidado y
estamos ante una explicación naturalista o el deber subjetivo de cuidado, para conside-
causalista del fenómeno, sino ante un razona- rar que el deber objetivo de cuidado es el lími-
miento que comporta una valoración para te de la culpabilidad en tanto que el deber
poder explicar el fenómeno de la culpa y por subjetivo de cuidado es el fundamento de la
supuesto, el delito culposo. misma. El deber objetivo de cuidado es
Las teorías normativas de la culpa son las si- predicable no ya de una persona en particu-
guientes: lar, sino de todas las que conforman el con-

d) La teoría del deber subjetivo de cuidado. glomerado, lo cual significa una tabulación

Esta posición doctrinal considera que el de- objetiva del comportamiento prudente. Recuér-

ber subjetivo de cuidado es el fundamento y dese que en el Derecho Romano se manejó

el límite de la reprochabilidad por culpa. Lo una tabulación objetiva para determinar la cul-

anterior quiere decir que en el juicio de culpa- pa, así, el buen padre de familia es el paradig-

bilidad un reproche al sujeto agente en sí mis- ma del comportamiento prudente.

mo considerado, es el reconocimiento máxi- La doctrina penal alemana tomó este concepto


mo del individualismo. Por tanto, el deber de de deber objetivo de cuidado, de las
cuidado no es el objetivo, el aplicable a cual- tabulaciones dadas por el artículo 276 del
quiera de los miembros de la sociedad, sino Código Civil alemán, según el cual: “Actúa
que se trata de un deber de cuidado de ca- negligentemente quien viola el cuidado o aten-
rácter subjetivo, determinado para cada caso, ción exigible en el trato social”, de donde se
porque depende de los conocimientos y las desprende que hay conducta imprudente para
capacidades del sujeto agente. todo aquel que no observa el cuidado nece-

En esta teoría el deber subjetivo es fundamento sario en el tráfico automotor, pues esta activi-

del reproche porque a una persona sólo le dad se rige por pautas de comportamiento

pueden reprochar la conducta culposa por no social como por ejemplo el límite de veloci-

haber actuado conforme al deber que le era dad, los conocimientos del operario, las con-

inherente a sus conocimientos y capacidades diciones mecánicas del automotor y en gene-

especiales. Desde esta óptica, una misma ral el respeto a las normas que rigen el tráfico

conducta puede ser reprochada a título de automotor.

culpa para un sujeto y no reprochada para otro. Según esta teoría, entonces, primero debe
Pero además, el deber subjetivo de cuidado establecerse si se infringió o no el deber obje-
se convierte en límite de la culpabilidad, por- tivo de cuidado, porque de no ocurrir esta pre-
que a un sujeto determinado no le pueden misa el juez no puede indagar si se infringió o 87
no el deber subjetivo de cuidado. En esa me- especiales, el cumplimiento del deber objeti-
dida el deber objetivo es límite de la culpabili- vo de cuidado no resulta suficiente para exi-
dad. Sólo cuando se demuestre una violación mirlo de responsabilidad culposa. Desde esta
al deber objetivo de cuidado puede el funcio- perspectiva, si se investiga a Juan Pablo
nario judicial investigar si se violó o no el de- Montoya, campeón mundial de automovilismo
ber subjetivo de cuidado, donde ya se estu- en la fórmula Kart por un homicidio en acci-
diarán las capacidades y los conocimientos dente de tránsito, no le bastaría demostrar el
individuales del sujeto agente. cumplimiento del deber objetivo de cuidado
Lo anterior es razonable si se tiene en cuen- para entenderlo eximido de responsabilidad
ta que muchas de las actividades sociales penal, porque debe investigarse si para él, y
generan un riesgo permitido, lo que condu- dadas las circunstancias en que ocurrieron los
ce a aceptar un riesgo que es previsible. Por hechos, estuvo o no en la capacidad de pre-
ejemplo, cuando una persona es sometida ver y evitar el resultado.
a una intervención quirúrgica, siempre exis-
C. El aporte de Exner y Engisch
te la posibilidad de una complicación que
le ocasione la muerte, pero al médico le Los profesores Frank Exner y Karl Engisch die-
basta con respetar las normas y procedi- ron los primeros pasos para el entendimiento
mientos de la ciencia médica (la lex artis), de la doctrina moderna del delito culposo. Para
es decir, los procedimientos que respetaría el primero de los mencionados, la causa del
cualquier médico en el mismo caso (deber comportamiento culposo sigue siendo un pro-
objetivo de cuidado), para que se entienda que blema no sólo de voluntad, entendida como
su comportamiento no merece una de las condiciones para representarse o
reprochabilidad por culpa. Nótese que en es- prever un resultado, sino además del mayor o
tos eventos el resultado es previsible, pero el menor grado de aprecio que se tenga por los
cumplimiento del deber objetivo de cuidado bienes jurídicos. Con estas dos consideracio-
impide un análisis de la capacidad individual nes, edifica la que se conoce como la teoría
del médico (deber subjetivo de cuidado). de la culpabilidad de sentimientos. El repro-

f) Teoría mixta. Esta teoría plantea que el fun- che de la conducta radica precisamente en la

damento y el límite de la responsabilidad por falta de atención y el poco aprecio por los bie-

culpa están compuestos por las infracciones nes jurídicamente tutelados.16

tanto al deber objetivo de cuidado como al Pero además de todo lo anterior, el profesor
deber subjetivo de cuidado, bajo la conside- Exner considera que para que pueda existir
ración de que en casos excepcionales el as- responsabilidad penal a título de culpa, se re-
pecto subjetivo prima respecto del objetivo. quiere que el sujeto haya actuado por fuera
Lo anterior indica que cuando el sujeto agen- del riesgo permitido, pues de lo contrario su
te posee unos conocimientos y capacidades conducta se encontraba autorizada por el

16. RODRIGUEZ DEVESA, José María. Derecho Penal Español, Parte General. Artes Gráficas Carasa, octava edición. Madrid 1981,
88 pág. 449.
Derecho, específicamente por el artículo 276 nes jurídicos de los asociados (a este plan-
del Código Civil alemán. teamiento se le ha llamado la teoría de la evi-
El tráfico automotor y aéreo implica riesgos, tación). Obsérvese que hablar de evitar un
pero la sociedad y el ordenamiento no prohi- daño implica abandonar el acento en el resul-
be estas actividades, solamente exige que se tado como soporte para el juicio de reproche,
desarrollen dentro del riesgo permitido. Lo y ponerlo en el modo de ejecución de la con-
mismo puede decirse de las actividades qui- ducta.
rúrgicas o las que impliquen el uso del fuego De lo anterior colige el profesor alemán que si
o de combustibles o de elementos radioacti- la persona realiza la actividad peligrosa con la
vos, etc. Una sociedad que no esté dispues- atención requerida por el ordenamiento jurídi-
ta a asumir riesgos, está sujeta a desaparecer co, independientemente del resultado que
o en todo caso a estancarse en su desarrollo. cause, su comportamiento no es contra dere-
Es decir que, si el ordenamiento permite el cho, por tanto ya claramente se advierte que
desarrollo de una actividad riesgosa con la el deber objetivo de cuidado no es un proble-
observancia de ciertos parámetros, quien así ma de culpabilidad sino que pertenece al
ajuste su conducta, actúa autorizado por el ámbito de la antijuridicidad, de suerte que el
Derecho y esto anula el juicio de reproche y cumplimiento del deber objetivo de cuidado
de culpabilidad, pues mal puede el Derecho se erige como causal supralegal de justifica-
Penal reprimir lo que otras ramas del ordena- ción.18
miento autorizan. Con esta concepción se Sin embargo, posteriormente el mismo Karl
unen indisolublemente la antijuridicidad y la Engisch, desde el ámbito de la doctrina tradi-
culpabilidad, pues una conducta realizada cional, dio el paso definitivo y consideró que
dentro del riesgo permitido no es objeto de el deber objetivo de cuidado debía ser estu-
reproche porque no es contraria al ordena- diado en la tipicidad, como uno de los ele-
miento en general. En todo caso, con el apor- mentos normativos del tipo. Es decir, que si
te de Exner el deber objetivo de cuidado co- se realiza la actividad peligrosa con el cumpli-
mienza a dejar de ser un asunto exclusivo de miento del deber objetivo de cuidado, ni si-
la culpabilidad para ubicarse en el injusto.17 quiera existe conducta típica, independiente-
Posteriormente el profesor Karl Engisch, si- mente del resultado que se produzca.19
guiendo los postulados de Exner, consideró D. La doctrina moderna del delito
que el juicio de reproche por culpa se centra culposo

en la falta de atención que debe tener toda Como se dijo anteriormente, la doctrina mo-
persona que realiza una actividad peligrosa derna del delito culposo es aquella que colo-
para evitar la causación de daños a los bie- ca el énfasis en el modo en que se ejecuta la

17. BUSTOS RAMIREZ, Juan. Culpa y Finalidad. Editorial Jurídica de Chile, Santiago 1967, pág. 22
18. BUSTOS RAMIREZ, Juan. Ob. cit. Pág. 23. En el mismo sentido CHOCLAN MONTALVO, José Antonio. Deber de Cuidado y Delito
Imprudente. Editorial BOSCH, primera edición. Barcelona 1998, pág. 33.
19. BUSTOS RAMIREZ, Juan. Ob. cit. Pág. 25. 89
acción, de suerte que el resultado debe ser Para Welzel, las conductas que impliquen un
consecuencia de un modo especial de la eje- riesgo permitido se encuentran socialmente
cución de la acción, como producto de la in- adecuadas y los daños que se produzcan
fracción al deber objetivo de cuidado en la dentro de dicho riesgo permitido o socialmente
medida en que la ciudadanía y el ordenamiento tolerado no pueden considerarse como da-
toleran la realización de conductas dentro de ños sujetos a sanción penal, pues no hay nada
más adecuado socialmente y tan inherente al
un riesgo permitido.
avance de la civilización como los riesgos, por
Por supuesto que los aportes de Exner y
ello ni la sociedad ni el Derecho Penal pueden
Engisch fueron definitivos para la estructura- prohibir los riesgos o las actividades riesgosas,
ción de esta forma de estudiar el delito cul- simplemente lo que deben hacer es limitar
poso. Pero también contribuyeron a la doctri- esos riesgos, para que las actividades peli-
na moderna del delito culposo los aportes de grosas se ejecuten dentro de unos parámetros
Graf Zu Dhona,20 para quien el dolo y la culpa socialmente adecuados. Así las cosas, el in-
deben ubicarse en la tipicidad, y de Von justo culposo se estructura no por la causación
Weber,21 quien consideró que los tipos pena- del resultado sino por la infracción de esos
les culposos involucran dentro de su descrip- parámetros que impone la sociedad y el or-
ción un deber objetivo de cuidado, para con- denamiento jurídico a una actividad peligrosa
cluir que el deber objetivo de cuidado se ubi- o riesgosa. En otras palabras, el injusto culposo
se funda en la infracción al deber objetivo de
ca en el tipo penal en tanto que el deber sub-
cuidado.
jetivo de cuidado (denominado poder indivi-
dual) se ubica dentro de la culpabilidad como En esta perspectiva, el resultado no juega un
elemento del juicio de reproche. papel estructurante del delito culposo, porque
éste apenas cumple un papel seleccionador
Sin embargo, es el finalismo welzeliano el que,
de lo punible, en la medida en que sólo es
sin desconocer los aportes anteriores, acaba
digno de sanción penal la infracción al deber
de estructurar una concepción moderna del objetivo de cuidado que conlleva a la produc-
delito culposo,22 con la consideración de que ción de un resultado, luego entre la infracción
en este tipo de conductas punibles sí existe del deber objetivo de cuidado y la producción
una finalidad real, sólo que el resultado pro- del resultado debe existir un nexo de
ducido no está vinculado con el propósito que causalidad (o relación de determinación),23
el individuo se ha impuesto para desarrollar para que la conducta pueda sancionarse
su acción, sino que el resultado está vincula- como delito culposo. Así quien teniendo ex-
do con los medios escogidos para la realiza- periencia conduce su vehículo sin la licencia
ción de esa acción. de conducción y arrolla a un suicida desen-

20. AGUDELO BETANCUR, Nódier. Ob. cit. Pág 123.


21. WEBER, Helmuth. Para la estructuración del sistema de Derecho Penal, en revista Nuevo Foro Penal, número 13, Bogotá 1982.
22. WELZEL, Hans. El Nuevo Sistema del Derecho Penal. Ediciones Ariel, Barcelona 1964. Pág. 31
23. BUSTOS RAMIREZ, Juan. Ob. cit. Pág. 69; en el mismo sentido VELASQUEZ VELASQUEZ, Fernando. Derecho Penal, Parte
General. Editorial Temis, tercera edición. Bogotá 1998, pág. 435 y AGUDELO BETANCUR, Nódier, Revista Nuevo Foro Penal
número 11, Temis, Bogotá 1981, pág. 348. Los autores no son coincidentes en la denominación de este elemento, algunos lo
90 llaman “nexo de antijuridicidad”, otros “nexo de infracción al deber”, otros “nexo del riesgo” y otros “relación de causalidad”.
gañado de amores no incurre en homicidio criminación del delito culposo conocidos
culposo, pues el resultado muerte no estuvo como: crimina culpae y crimina culposa. Uno
determinado por la infracción a un deber ob- de ellos admite la posibilidad del concurso de
jetivo de cuidado que apenas constituye una delitos culposos en tanto que el otro cierra las
falta administrativa. No hay relación de causa- puertas a esta posibilidad.
lidad entre la falta de licencia de conducción y
a) El Crimina culpae.
el resultado muerte, si se sabe que se trata de
un conductor experto. Este sistema legislativo se caracteriza porque
la imprudencia se considera una conducta
punible autónoma, de tal manera que la culpa
no se maneja como un adjetivo que califica
Requisitos para la una conducta
existencia del concurso sino como un
delictivo en los delitos
culposos sustantivo, por Aunque para algunos autores
tanto no se tipi- el concepto de unidad o plu-
Teniendo en cuenta los avances doctrinarios fica el delito de
respecto del fenómeno del concurso de deli- ralidad de acciones es lo que
homicidio culpo-
tos y de la evolución del delito culposo hasta so sino que se determina la existencia del
llegar a la concepción moderna, según lo es- describe el deli- concurso de hechos punibles
tudiado en los capítulos anteriores, correspon-
to de impruden- culposos, tal tesis no tiene ca-
de ahora determinar los requisitos que deben
cia del cual se
darse para que pueda existir un concurso de
deriva una o va-
bida en nuestro ordenamien-
delitos culposos. Este dependerá de dos va- to porque el legislador colom-
rias muertes co-
riantes: La primera tiene que ver con la mane-
ra como se regule el delito culposo, y la se-
mo resultado de biano de manera expresa
ese comporta-
gunda está relacionada con la pluralidad de contempló la posibilidad del
miento. La im-
resultados, es decir, con una múltiple afecta- concurso delictivo con una
ción de bienes jurídicamente tutelados. prudencia en sí
misma configura sola acción.
Aunque para algunos autores el concepto de
un comporta-
unidad o pluralidad de acciones es lo que
miento punible
determina la existencia del concurso de he-
independientemente del resultado que con
chos punibles culposos, tal tesis no tiene ca-
bida en nuestro ordenamiento porque el le- ésta se produzca.

gislador colombiano de manera expresa con- Un sistema legislativo de esta naturaleza no


templó la posibilidad del concurso delictivo con permite la posibilidad de un concurso de deli-
una sola acción. tos culposos, porque si el conductor de un
Veamos cada uno de estos aspectos: vehículo invade la calzada contraria y por ello
colisiona con un bus causando la muerte de
A. El sistema legislativo adoptado
doce personas, no comete un concurso de
Dependiendo del objeto regulado, en el mun- homicidios culposos, sino un solo delito, el
do se conocen dos grandes sistemas de in- delito de imprudencia. 91
Este sistema rigió en España hasta el año de Esta privación se impondrá con carácter defi-
1996, pues los artículos 565, 586 y 600 del nitivo cuando el culpable hubiera sido conde-
Código Penal de 1822 (con algunas adicio- nado dos veces a la retirada temporal del per-
nes de reformas penales posteriores) regula- miso, por delito previsto en el párrafo primero
ban el delito imprudente. El primero de los ar- de este artículo, en el 340 o por ambos.
tículos citados tenía el siguiente contenido: En ningún caso se impondrá pena que resul-
“El que por imprudencia temeraria ejecutare tare igual o superior a la que correspondería al
un hecho que, si mediare malicia, constituiría mismo delito cometido intencionalmente”.
delito, será castigado con la pena de prisión Por su parte, el artículo 586 decía:
menor.
“Serán castigados con multa superior a 1.000
Al que con infracción de los reglamentos e inferior a 20.000 pesetas y reprensión priva-
cometiere un delito por simple imprudencia o da: ...
negligencia se le impondrá la pena de arresto
3o. Los que, por simple imprudencia o por
mayor.
negligencia, sin cometer infracción de los re-
En la aplicación de estas penas procederán glamentos causare un mal a las personas que,
los tribunales a su prudente arbitrio, sin suje- si mediare malicia constituiría delito, y los que
tarse a las reglas prescritas en el artículo 61. por cualquier clase de imprudencia causen
Lo dispuesto en los dos primeros párrafos de un mal a las personas que, si mediare malicia
este artículo no tendrá lugar cuando la pena constituiría falta”.
señalada al delito sea igual o menor que las El párrafo último de esta norma disponía:
contenidas en los mismos, en cuyo caso los
“Las infracciones penadas en el párrafo ter-
tribunales aplicarán la inmediata inferior a la que
cero de este artículo, cometidas con vehículo
corresponda en el grado que estimen conve-
automotor, llevarán aparejada además la pri-
niente.
vación del permiso de conducción por tiem-
Cuando se produjere muerte o lesiones gra- po de uno a tres meses”.
ves a consecuencia de impericia o de negli-
Finalmente el artículo 600 estaba redactado
gencia profesional se impondrán en su grado
de esta manera:
máximo las penas señaladas en este artículo.
“Serán castigados con multa superior a 1.000
Dichas penas se podrán elevar en uno o dos
e inferior a 20.000 pesetas los que por impru-
grados, a juicio del tribunal, cuando el mal
dencia o negligencia simples, sin cometer in-
causado fuere de extrema gravedad.
fracción de los reglamentos, causen daños en
Las infracciones penadas en este artículo, las cosas, que si mediare malicia, constituirían
cometidas con vehículo de motor llevarán apa- delito y los que por cualquier clase de impru-
rejada la privación del permiso de conducción dencia causen daños en las cosas que, si
por tiempo de tres meses y un día a diez años. mediare malicia, constituirían falta”.24

24. Recordemos que el Código Penal español de 1822 incluía en el libro III una tipificación de las faltas, consideradas como delitos
menores para algunos autores y simples contravenciones para otros. La doctrina hizo bastantes críticas a la inclusión de estas
92 conductas dentro del Código Penal.
De los artículos anteriores puede decirse que Esta peculiaridad de la legislación española
la imprudencia en sí misma era punible y con- permite entender que se adoptó un sistema
figuraba un delito autónomo, pero ésta a su de crimina culpae donde lo esencial no es la
vez estaba graduada en imprudencia temera- realización culposa del hecho, no es el resul-
ria o en imprudencia simple y a su vez la im- tado típico, sino la imprudencia misma, la falta
prudencia simple podía presentarse con in- de atención o de cuidado, caso en el cual el
fracción a los reglamentos o sin infracción a resultado opera simplemente como un pro-
los mismos. También la imprudencia se casti- cedimiento de selección de las imprudencias
gaba no como delito sino como falta, siendo punibles. Por ello es que la jurisprudencia no
indiferente la clase de culpa que intervenga. hablaba de un homicidio culposo o por im-
La jurisprudencia se encargó de definir estas prudencia (como ocurre en el sistema penal
clases de culpas, así la imprudencia temera- colombiano) sino de “un delito de impruden-
ria se entendía como la que comete quien cia con resultado de muerte” lo cual es propio
omite el cuidado, diligencia y atención que del crimina culpae.
puede exigírsele al menos cuidadoso, atento Las consecuencias que se derivan del siste-
o diligente. La jurisprudencia española utilizó ma crimina culpae son básicamente las si-
algunas frases para precisar el concepto de guientes:
imprudencia temeraria, entre las que podemos
1o. Si el delito consiste en la imprudencia mis-
citar: “La más elemental prudencia” (Senten-
ma, en conducir distraído, en no haber frena-
cia del 4 de marzo de 1963); “Lo fácilmente
do a tiempo pudiendo hacerlo, en invadir con
previsible para cualquier persona mínima-
el vehículo la parte que no le corresponde de
mente prudente” (Sentencia del 28 de sep-
la calzada, se impone la doble consecuencia
tiembre de 1967); “No prever aquello que es
de que el tipo del “delito de imprudencia” no
elementalmente previsible en el obrar huma-
es el del delito doloso y que la imprudencia
no, aun en las personas menos cuidadosas y
no está referida al resultado, cuando de deli-
diligentes” (Sentencia del 24 de diciembre de
tos de resultado se trata.
1973).25
Si estamos en un crimen culpae es suficiente
En cambio la imprudencia simple o negligen-
con la ocurrencia del resultado, aunque éste
cia consiste en la omisión del cuidado y de la
fuera inevitable para que si el conductor falta a
atención que cualquier persona debe poner
las normas de prudencia conduciendo, tenga
de ordinario al ejecutar una conducta capaz
que sufrir la pena que señala la ley.
de perjudicar a otro. Su gravedad depende
de que vaya o no acompañada de la infrac- 2o. Si se producen culposamente con una sola
ción de reglamentos cuando ésta guarde re- acción varios resultados, hay un solo delito y
lación con el hecho punible. La imprudencia no varios, y así lo entendió la jurisprudencia
simple con violación de reglamentos es una española: El sistema de crimina culpae no
especie cualificada. permite el concurso de delitos culposos.26

25. RODRIGUEZ RAMOS, Luis. La Nueva Regulación de los Delitos Culposos en el Proyecto de Código Penal español. Publicado en
Revista La Ley el 4 de noviembre de 1980.
26. RODRIGUEZ DEVESA, José María. Ob. cit. Pág. 452. 93
Sin embargo, la doctrina española siempre se por lesiones graves y otros dos de daños
opuso a la idea de aceptar un sistema de por imprudencia. El Fiscal recurrió en casa-
crimina culpae con la consideración de que ción alegando que era una sola la infrac-
la terminología “Delito de imprudencia del que ción cometida, opinión que el Tribunal Su-
resultó homicidio” resulta desafortunada, por- premo estimó acertada, casando la senten-
que hablar de delito de imprudencia es tan cia recurrida.
carente de sentido como hablar de delito de b) El crimina culposa
dolo, según lo expresan Juan del Rosal, Ma-
Es el sistema que acoge nuestro Código Pe-
nuel Cobo y Gonzalo Mourullo.27
nal acorde con la doctrina y la jurisprudencia
En el mismo sentido se expresa Rodríguez nacional. Mientras en el sistema del crimina
Devesa cuando considera que: culpae la imprudencia se tenía como sustan-
“La Jurisprudencia del Tribunal Supremo, con tivo para conformar una conducta punible au-
una pertinacia digna de mejor causa, se nie- tónoma, el sistema de crimina culposa se ca-
ga sin embargo, a aplicar las reglas del con- racteriza porque la culpa es un adjetivo que
curso de delitos, en los casos en que de un califica a una conducta y por ello la impruden-
mismo hecho se deriven dos o más eventos cia deja de considerarse como delito en sí
culposos. No es lo mismo cometer un homi- mismo. Ya no se trata de un delito de impru-
cidio culposo que veinticinco, aunque sea con dencia del que deriva como resultado una o
una sola acción. varias muertes, sino que se tipifica el homici-
Esta constante exclusión del concurso de de- dio con el calificativo de culposo o el delito de
litos culposos motivó que el legislador espa- lesiones personales culposas, etc.
ñol mitigara los resultados injustos a que se Este sistema es acorde con las teorías que
llega, consignando a partir de 1944 para los fundan el injusto penal como desvalor de re-
delitos cometidos por medio de vehículo au- sultado y no como desvalor de acción, preci-
tomotor y desde 1963 con carácter más ge- samente porque lo que se califica o adjetiviza
neral para los delitos cometidos por impericia es el resultado.
o negligencia profesional, una agravación fa-
El sistema crimina culposa permite entonces,
cultativa de la pena ‘cuando el mal causado
al contrario del sistema anterior, la posibilidad
fuere de extrema gravedad’. Lo que sucede
de un concurso de delitos culposos, porque
es que no es fácil imaginar un mal más grave
si una persona con una misma acción produ-
que el de la muerte o lesiones graves”28.
ce varios resultados, se dice que esos resul-
Pese a toda la crítica de la doctrina, el Tribunal tados son el producto de la culpa realizada.
de Audiencias de Las Palmas, en sentencia Así, el conductor de bus que conduce em-
del 18 de octubre de 1927, condenó a un con- briagado y se estrella con otro vehículo dando
ductor imprudente por dos delitos culposos como resultado treinta muertes, en principio,

27. DEL ROSAL, Juan; COBO, Manuel y MOURULLO, Gonzalo. Derecho Penal Español, Parte Especial, Delitos contra las personas.
Imprenta Silverio Aguirre Torre, primera edición 1963, pág. 145.
94 28. RODRIGUEZ DEVESA, José María. Ob. cit. Pág. 38.
podría afrontar una sentencia por treinta homi- varias infracciones al deber objetivo de cuida-
cidios culposos en concurso. Decimos en do se causa un solo resultado.
principio, porque ello también depende del Quienes comparten tal posición consideran
criterio que se adopte para determinar lo que que sólo hay pluralidad de acciones y por tan-
se entiende como unidad o pluralidad de ac- to sólo es posible la existencia de un concur-
ción, según se verá enseguida. so de delitos culposos cuando la persona oca-
En todo caso, obsérvese que la presencia de sione varios resultados con la inobservancia
estos dos sistemas está ligada a la discusión de varios deberes de cuidado en un espacio
sobre la cual versa toda la evolución del delito prolongado de tiempo, como por ejemplo si
culposo, esto es, entre doctrina tradicional y un motociclista a exceso de velocidad atro-
doctrina moderna del delito culposo. Recuér- pella a un peatón y le causa lesiones, conti-
dese que el eje sobre el cual gira la doctrina núa con su carrera y se pasa el semáforo en
tradicional del delito culposo es la considera- rojo y produce la muerte de una anciana y ante
ción del resultado como objeto de valoración un trancón monumental en el tráfico se sube
del delito, luego el sistema crimina culposa se al andén y atropella a un niño causándole la
identifica más con esta doctrina; en tanto que muerte.
el eje central sobre el que gira la doctrina mo- Esta tesis tiene su origen en las consideracio-
derna del delito culposo es la forma de reali- nes de Carrara, para quien no era posible que
zación de la acción, dejándose de lado el re- con una sola acción se cometieran varios de-
sultado de la conducta, por ello decimos que litos, pues afirmaba de manera categórica que
el crimina culpae se identifica más con esta “La unidad de acto conduce al delito único,
concepción. pero complejo, cuando hay pluralidad de de-
B. Afectación de varios bienes jurídicos rechos violados”. La misma tesis fue expues-

Para algunos autores no es la pluralidad de ta posteriormente por Von Liszt quien escribió
lo siguiente:
resultados lo que determina la existencia de
un concurso de delitos culposos, sino la plu- “Cuando por una misma acción culposa se
ralidad de infracciones al deber objetivo de ocasiona la muerte a centenares de perso-
cuidado. Jescheck, por ejemplo, considera nas, nunca existe más que un acto. En este
que si en el desarrollo de una conducta se punto nada puede modificar tampoco la di-
presenta una sola violación al deber objetivo versidad de los varios resultados producidos.
de cuidado con producción de múltiples re- Si la piedra lanzada ha matado a una perso-
sultados, no puede predicarse la existencia de na, herido a una segunda y además ha roto
un concurso delictivo,29 tal es el caso de quien un cristal, sólo podemos hablar de un acto
violando la luz roja del semáforo ocasiona la con varios resultados, pero nunca de varios
muerte de cinco personas. Tampoco hay con- actos... Al delito único corresponde una sola y
curso de delitos, según este autor, cuando con única pena. Esto procede también sin excep-

29. JESCHECK, Hans Heinrich. Tratado de Derecho Penal, Parte General. Editorial Bosch, Barcelona. Traducción de Mir Puig y Francisco
Muñoz Conde, Volumen II, 1978. Pág. 1000. 95
ción cuando existe una pluralidad de resulta- que el concurso de delitos culposos no se
dos de la misma especie, es decir que caen determina por el número de infracciones al
bajo la misma disposición penal; la ley penal deber objetivo de cuidado sino por la efectiva
varias veces transgredida sólo se aplica una causación de una pluralidad de afectaciones
sola vez y la pluralidad de resultados sólo pue- a los bienes jurídicos. En síntesis, para que
de tomarse en consideración para medir la exista delito culposo se requiere la presencia
pena dentro de la escala penal”.30 de por lo menos una infracción al deber obje-
La primera crítica que puede formulársele a tal tivo de cuidado, pero para que se pueda ha-
posición doctrinal, es de carácter legislativo, blar de concurso de este tipo de delitos se
porque la redacción del artículo 31 del Nuevo requiere indefectiblemente de la lesión a di-
Código Penal colombiano admite la posibili- versos bienes jurídicos.31
dad del concurso delictivo cuando con una
Las múltiples infracciones al deber objetivo de
sola acción se infrinjan varias disposiciones
cuidado en el desempeño de una misma ac-
de la ley penal o varias veces la misma dispo-
tividad, nos pondrá en presencia de un delito
sición. Por tanto, así se considere que una sola
culposo, pero los varios resultados derivados
violación al deber objetivo de cuidado com-
de esa actividad desarrollada con violación al
porta una sola acción, ésta puede generar la
deber objetivo de cuidado nos colocan en
afectación de varios bienes jurídicos tutelados
presencia del concurso delictivo culposo. Una
(homogéneos o heterogéneos), ante lo cual
posición en tal sentido se muestra acorde con
estaríamos en presencia del concurso.
la consideración de que el injusto penal no
Pero además, si se afirma que en materia de
sólo es desvalor de acción, sino también
delitos culposos, los varios resultados lesivos
desvalor de resultado.
no determinan la existencia del concurso
delictivo, con esa misma fórmula se está acep- Cuando alguien conduce en contravía, a ex-

tando la negación del concurso de delitos ceso de velocidad y desconoce la luz roja del
dolosos cuando se presenta la figura del dolo semáforo, incurre en tres infracciones al de-
eventual, pues dolo eventual y culpa con re- ber objetivo de cuidado. Si en tales condicio-
presentación tienen un mismo soporte fácti- nes atropella a un peatón y le causa la muerte
co, como es la probabilidad de la producción sólo puede hablarse de un delito de homici-
de múltiples resultados. dio culposo. Si en las mismas condiciones, y

Partiéndose entonces, como debe hacerse, aun en el evento de una sola de las infraccio-

de la posibilidad establecida en el artículo 31 nes al deber objetivo de cuidado señaladas,


de nuestro Nuevo Código Penal, donde se se causa la muerte a una mujer y a sus dos
acepta el concurso de delitos cuando con una hijos con los cuales pretendía cruzar correcta-
sola acción se cometen varios hechos puni- mente la calle, se estará en presencia de un
bles (homogéneos o heterogéneos), creemos concurso homogéneo de delitos culposos.

30. VON LISZT, Franz. Ob. cit. Págs. 145 y 156.


96 31. REYES ALVARADO, Yesid. Ob. cit. Pág. 321
Del mismo modo, se habla de concurso de de afectaciones a los bienes jurídicos, entién-
delitos imprudentes cuando los varios resul- dase pluralidad de resultados.
tados se producen con varias violaciones al De tal suerte que, si una persona conduce su
deber objetivo de cuidado, en una acción que vehículo respetando todas las normas de trán-
se prolonga en el tiempo. Tal es el caso de sito y con el automotor en excelentes condi-
quien conduce su vehículo y por violar la luz
ciones mecánicas, pese a lo cual, atropella a
roja atropella a un motociclista causándole le-
tres transeúntes que debieron usar un puente
siones, continúa su acción y más adelante tran-
peatonal, la falta de violación al deber objetivo
sitando en contravía colisiona con otro auto-
de cuidado impedirá la existencia de un delito
motor produciéndole la muerte al conductor y
culposo, y por ello mismo, no se podrá predi-
unos kilómetros más adelante al hacer un giro
car en este caso un concurso de tipos pena-
prohibido causa la muerte de un peatón. En
les, aunque se haya presentado una multipli-
este caso, una misma conducta (conducir ve-
cidad de resultados.
hículo automotor) con tres infracciones al de-
ber objetivo de cuidado (violación de semáfo-
ro, transitar en contravía y ejecutar un giro pro-
hibido) producidas en diferente momento, dan
lugar a un concurso heterogéneo de hechos Conclusiones
punibles culposos (lesiones personales y Los temas tratados anteriormente, nos permi-
muertes). ten llegar a las siguientes conclusiones:
Finalmente, y aunque parezca de perogrullo, 1a. Para Carrara no se presenta el concurso
debe decirse que para que exista el concurso de tipos cuando se realiza una sola acción,
de delitos culposos, debe existir por lo menos aunque los resultados o afectaciones a los bie-
un delito de esta naturaleza y a su vez, para nes jurídicos sean múltiples; sobre todo si es
que exista el delito culposo debe existir la vio- una misma la disposición penal que se vulne-
lación al deber objetivo (y subjetivo para algu- ra. Este criterio es compartido posteriormente
nos, dependiendo de la teoría que se adopte) por Franz von Liszt.
de cuidado.
2a. Para la escuela positivista del Derecho Pe-
Lo que determina la existencia del delito nal el concurso de delitos no tenía una impor-
culposo es la infracción al deber objetivo de tancia significativa, porque la responsabilidad
cuidado, no la multiplicidad de afectaciones a penal estaba fundada en la peligrosidad. Esto
los bienes jurídicos; aunque no negamos que lleva a pensar que el tema del concurso de
el resultado es elemento cofundante, éste delitos adquiere importancia cuando se im-
debe existir y tener relación de causalidad con plementa un Derecho Penal de acto, pues para
la violación al deber objetivo de cuidado; en un Derecho Penal de autor la pena se impone
cambio, lo que determina el concurso de de- de acuerdo a la personalidad del sujeto agen-
litos culposos no son las varias violaciones al te, cualquiera sea el número de delitos que
deber objetivo de cuidado sino la pluralidad cometa. 97
3a. Las escuelas dogmáticas manejaron cri- ley en sentido amplio o en su defecto las re-
terios diferentes para establecer cuándo hay glas técnicas (lex artis) las que determinan cuál
unidad o pluralidad de delito. La escuela dog- es el deber objetivo de cuidado para el desa-
mática clásica propugnó un “concepto natu- rrollo de una actividad específica.
ralista”, los neoclásicos manejaron una “con-
6a. Los aportes de Exner y Engisch fueron de-
cepción normativa” y los finalistas propusie-
finitivos para ubicar el deber objetivo de cui-
ron un “concepto ontológico normativo”.
dado en el injusto penal, para lo cual tomaron
Es evidente que nuestro Código Penal mane- como fundamento el principio de la unidad del
ja un concepto normativo para definir cuándo
ordenamiento. Según este principio, lo que es
hay pluralidad de delitos, porque es la norma
permitido por otras ramas del Derecho no
(artículo 31 del Nuevo Código Penal) la que
puede ser prohibido por el Derecho Penal.
determina cuándo existe la figura del concur-
so, con independencia de que exista unidad 7a. La infracción del deber objetivo de cuida-

o pluralidad de acción. Es la ley la que definió do es un elemento normativo del tipo, por tanto
que aun con una sola acción se puede pre- si esta no se presenta la conducta será atípica,
sentar un concurso homogéneo o heterogé- aunque haya producido resultados lesivos.
neo de delitos. 8a. El sistema legislativo denominado crimina
4a. La doctrina tradicional del delito culposo culpae, según el cual la conducta imprudente
determina la existencia del mismo en la pro- es delito autónomo, no permite el concurso
ducción de un resultado, a riesgo de incurrir de delitos culposos.
en una responsabilidad objetiva. Para la doc- 9a. Para que exista delito culposo se requiere
trina moderna, en cambio, el delito culposo
la violación al deber objetivo de cuidado, por
se comete siempre y cuando se verifique la
lo menos la afectación a un bien jurídicamen-
violación al deber objetivo de cuidado.
te tutelado y un nexo de causalidad entre la
Creemos que una combinación de las dos conducta y el resultado: La pluralidad de vio-
teorías se ajusta a la consideración de que el
laciones al deber objetivo de cuidado, por sí
injusto penal implica desvalor de acción y
misma, no configura el concurso de delitos
desvalor de resultado. Por tanto, para que exis-
culposos.
ta delito culposo deben presentarse acumula-
tivamente estos tres requisitos: 10a. Para que exista concurso de delitos cul-

a) La infracción al deber objetivo de cuidado. posos se requiere:

b) La producción de un resultado que lesio- a) Que se adopte el sistema legislativo de-


na o pone en peligro el bien jurídicamente nominado crimina culposa
tutelado. b) Que se produzca por lo menos un delito
c) La existencia de un nexo de causalidad culposo, con todos los requisitos indica-
entre la conducta y el resultado. dos anteriormente.
5a. El concepto de deber objetivo de cuidado c) Que se presente una afectación plural de

98 necesariamente es de tipo normativo. Es la bienes jurídicamente tutelados.


Bibliografía
– AGUDELO BETANCUR, Nódier, Revista Nuevo Foro – REYES ALVARADO, Yesid. El Concurso de Delitos.
Penal número 11, Temis, Bogotá 1981. Ediciones Reyes Echandía Abogados. Bogotá 1990.
– AGUDELO BETANCUR, Nódier. Curso de Derecho – REYES ECHANDIA, Alfonso. Código de Hammurabi,
Penal. Esquemas del delito. Segunda edición 1993. traducción y comentarios. Publicaciones Universidad
– BUSTOS RAMIREZ, Juan. Culpa y Finalidad. Editorial Externado de Colombia. Bogotá 1966.
Jurídica de Chile, Santiago 1967. – RODRIGUEZ DEVESA, José María. Derecho Penal
– CARRARA, Francisco. Programa de Derecho Crimi- Español, Parte General. Artes Gráficas Carasa, octa-
nal, Volumen 1, Capítulo X. Temis, Bogotá, 1956. va edición. Madrid 1981.
– CARRARA, Francisco. Programa de Derecho Crimi- – RODRIGUEZ RAMOS, Luis. La Nueva Regulación de
nal, Volumen 2, Temis, Bogotá, 1956. los Delitos Culposos en el Proyecto de Código Pe-
– CHOCLAN MONTALVO, José Antonio. Deber de nal español. Publicado en Revista La Ley el 4 de no-
Cuidado y Delito Imprudente. Editorial BOSCH, pri- viembre de 1980.
mera edición. Barcelona 1998. – ROMERO SOTO, Luis Enrique. El Concurso Aparen-
– DEL ROSAL, Juan; COBO, Manuel y MOURULLO, te de Leyes. Editorial Temis, Bogotá 1993.
Gonzalo. Derecho Penal Español, Parte Especial, – VELASQUEZ VELASQUEZ, Fernando. Derecho Pe-
Delitos contra las personas. Imprenta Silverio Aguirre nal, Parte General. Editorial Temis, tercera edición.
Torre, primera edición 1963. Bogotá 1998.
– JESCHECK, Hans Heinrich. Tratado de Derecho – VON LISZT, Franz. Tratado de Derecho Penal, Tomo
Penal, Parte General. Editorial Bosch, Barcelona. Tra- 3. Segunda edición. Traducción de Luis Jiménez de
ducción de Mir Puig y Francisco Muñoz Conde, Vo- Asúa. Editorial Reus. Madrid 1929.
lumen II, 1978. – WEBER, Helmuth. Para la estructuración del sistema
– MEZGUER, Edmundo. Derecho Penal Parte Gene- de Derecho Penal, en revista Nuevo Foro Penal, nú-
ral. Traducción de Ricardo Nuñez. Editorial Cárde- mero 13, editorial Temis, Bogotá 1982.
nas. México 1985. – WELZEL, Hans. El Nuevo Sistema del Derecho Pe-
– PAVON VASCONCELOS, Francisco. Concurso Apa- nal. Ediciones Ariel, Barcelona 1964.
rente de Normas. Editorial Porrúa, cuarta edición. – ZAFFARONI, Eugenio Raúl. Tratado de Derecho Pe-
México 1994. nal. Parte General. Editorial Ediar. Buenos Aires 1982.

99
Derecho

La justicia alternativa,
alternativa de justicia
Javier Ospina
Director Centro de Conciliación. Consultorio Jurídico
Universidad de San Buenaventura Cali

Resumen
Abstract
La administración de justicia pronta y rápi-
Timely and expeditious administration of jus-
da, corresponde a un ideal que forma par-
tice is an ideal that is part of the juridical imagi-
te del imaginario jurídico. Es una realidad
nation. It is a reality that we hopelessly have to
que debemos soportar sin remedio como
face as one of the woes of law. Nevertheless,
las miserias del derecho. Sin embargo,
why hold on to securing justice –the ultimate
cómo renunciar a la justicia, fin último del
goal of law– in spite of being pushed into the
derecho, tentación a la cual nos empuja
temptation of giving up because of sluggish,
una justicia lenta, costosa, tardía y enreda-
expensive, and untimely justice, tangled up in
da en sus propios legalismos, como se
its own legalisms, as it currently occurs.
vive en este momento.
A widely experienced attorney discusses the
Un abogado, escribe sobre las razones
different reasons for not getting into a litigation
para no embarcarse en un pleito, de las
such as, the time-consuming process re-
que sobresale el tiempo que requiere su
quired for carrying it through, considering the
terminación, al plantearlo a la paquidérmica
lumbering bureaucracy of justice administra-
maquinaria de la administración de justicia
tion and attorneys’ delaying tactics or a com-
y a las tácticas dilatorias de los abogados
bination of both.
100 o a las dos.
Introducción “...como consecuencia de la más absoluta
impunidad, entendida ésta como la no solu-
Transcurridos diez años de expedida la Ley
ción o la solución inoportuna de las deman-
23 de 1991, en desarrollo del inciso final ar-
das presentadas por los ciudadanos en los
tículo 116 constitucional, cuya presentación
campos civil, penal, laboral y de familia... el
correspondió hacer al entonces ministro de
ciudadano que tiene un conflicto... tiene que
Justicia Jaime Giraldo Angel, es oportuno exa-
recurrir a un despacho judicial en donde no
minar las actuales circunstancias que rodean
podrá pensar en una solución antes de un lap-
el tema en términos de contexto, expectati-
so de tres años... Esta puede ser una de las
vas, oportunidades y obstáculos. Injusto re-
causas mayores de la violencia en nuestro
sultaría negar los esfuerzos hechos por el Es-
país, porque si el ciudadano no encuentra una
tado para hallar una salida a la demanda de
respuesta pronta por parte del Estado a sus
justicia. Forzosamente dentro del análisis cons-
justas reclamaciones, acaba haciendo justi-
tituye elemento fundamental del tema los es-
cia por su propia mano”.1
fuerzos que el Estado ha hecho para hallar una
salida a la grave congestión que de siempre El asesinato de catedráticos, investigadores

ha padecido la administración de justicia, sin sociales, estudiantes universitarios, periodis-

duda por la cultura litigiosa atada al talante tas y personajes capaces de mover opinión,

nacional que la picaresca ha recogido en el es la expresión más acabada de la subcultura

aforismo conocido: se presumen abogados de la violencia y de la intolerancia. Como tam-


bién lo es recurrir a las vías de hecho para
todos los colombianos mientras no se de-
solucionar conflictos. De alguna manera la
muestre lo contrario.
hemos aceptado. Pero los niveles incalificables
Constituye casi un hecho notorio que para el
de su desarrollo y también las respuestas de
ciudadano del común existe la convicción de
movimientos religiosos, ONGs, movimientos
que los conflictos en su gran mayoría se des-
cívicos, colectivos de simples ciudadanos y
atan previa judicialización. Tan marcada ten-
de madres y padres de familia, para el caso
dencia han querido explicarla algunos en una
de los soldados y policías secuestrados, no
desafortunada interpretación de la reforma
retenidos, así como el creciente interés por la
constitucional de 1945, la cual consagró el
conciliación y los demás métodos alternos de
principio de la separación de las ramas del
solución de conflictos, permiten columbrar que
poder público, asumiendo que a los jueces y
existe al menos el anhelo de buscar otras op-
sólo a ellos corresponde la resolución de con-
ciones distintas a la resignación o a la inercia
flictos, pero sin tener en cuenta el concepto del día a día. La conciliación, si bien puede
de la colaboración armónica entre ellas para ser una figura jurídica que colabora para la
la consecución de los fines del Estado. descongestión de los despachos judiciales,
Decía el entonces presidente Gaviria con oca- es mucho más que eso: es un instrumento
sión de la expedición de la Ley 23 de 1991: para la cultura de paz, como quiera que la justi-

1. La Conciliacion. Ministerio de Justicia. Imprenta Nacional. Bogotá. 1992. P. 29. 101


cia pronta, rápida y oportuna, es el articulador riamente investidos de la función pública de
por excelencia de la convivencia pacífica,2 administrar justicia. No obstante el número de
esencial para garantizar la cohesión social. La actores en el tema, es inocultable las grandes
justicia como valor social abandona el nicho dificultades para acceder a la justicia y no sólo
clásico de función soberana del Estado para para llegar a ella sino para obtener soluciones
ser un producto social articulador de la paz prontas y oportunas. Sin pretender agotarlas,
pública y de la tranquilidad ciudadana, sin las enuncio algunos de los que juzgo componen-
cuales ninguna comunidad será ni civilizada tes críticos de la administración de justicia.
ni viable.
• La estructural congestión judicial
Quizá las múltiples violencias que nos acorra-
El corazón de la definición de los conflictos lo
lan y que nos han confinado a los límites de
constituye el núcleo de jueces quienes sos-
nuestras ciudades, como quiera que el Esta-
tienen el paradigma de interpretar y aplicar en
do tampoco ha podido o al menos no está
veces de manera mecánica la ley para dirimir
pudiendo ser capaz de ejercer el monopolio
diferencias dentro de formales esquemas nor-
de la fuerza, constituyan de por sí el estímulo
mativos. Estructuralmente, y si se tiene en
que necesitamos los colombianos para que
cuenta que el impulso de los procesos se hace
comprendamos que esta patria nos pertene-
de manera escrita, encontramos el primer
ce y que no es de soñadores desear un futuro
componente para la congestión de los des-
mejor y en paz, especialmente si reflexiona-
pachos judiciales, como quiera que casi cada
mos que un ínfimo porcentaje ha arrinconado
petición requiere de términos, traslados, trá-
a la inmensa mayoría.
mites, etc., además del propio impulso de los
procesos conforme los ciudadanos acuden a
ellos para satisfacer sus pretensiones siem-

Componentes críticos pre en aumento. Según la investigación ade-


de la administración lantada por el Consejo Superior de la Judica-
de justicia tura y la Corporación Excelencia en la Justicia

El mandato constitucional (artículo 116) deter- –C.E.J.– teniendo en cuenta la productividad

mina que la Corte Constitucional, la Corte Su- obtenida en 1998, se necesitan más de tres

prema de Justicia, el Consejo de Estado, el años para descongestionar los despachos


Consejo Superior de la Judicatura, la Fiscalía judiciales y ponerlos al día, siempre que du-
General de la Nación, los tribunales y los jue- rante esos tres años de receso no haya nue-
ces, administran justicia. También lo hace la vos procesos.3 El tiempo de cierre por juris-
justicia penal militar. Excepcionalmente tam- dicciones sería: (Ver Cuadro 1)
bién lo hace el Congreso, algunas autorida- El inventario de procesos finalizado 1999, se-
des administrativas y los particulares transito- ría de 3.200.000 procesos de los 4.300.000

2. Curso de Derecho Procesal Civil. Hernando Morales M.. Editorial ABC. Bogotá 1973. P. 29.
102 3. Ambito Juridico. Año II. No. 26. Bogotá 8 al 21 de febrero de 1999. P. 4.
Cuadro 1

Jurisdicción Tiempo de cierre Procesos egresados Inventario final

Penal 1.7 años 358.550 604.506


Civil 3.3 años 371.621 1.235.334
Laboral 6.4 años 50.860 326.178
Familia 3.8 años 158.570 599.132
Promiscuo 3.7 años 83.118 303.589
TOTALES
TOTALES 3.8 1.022.719 3.068.739

registrados en el transcurso de ese año, de dadano común. Esa profusión de leyes gene-
los cuales sólo fue evacuado el 26%. La juris- ra más conflictos por cuanto en ocasiones se
dicción civil tramitó un total de 1.200.000 pro- contradicen entre sí, para no relacionar las dis-
cesos ejecutivos de los cuales resolvió un 10%. posiciones de los códigos declaradas total o
En cuanto a la justicia penal, a junio de 2000 la parcialmente inexequibles. Toma fuerza teóri-
Fiscalía conocía de 900.000 procesos pena- ca aceptada lo que hasta ahora sólo es un
les (Fuente: Informe Anual de la Justicia- Cor- enunciado: la capacidad ordenadora y pre-
poración Excelencia en la Justicia 2000). A ventiva de la Ley, a la luz de su definición clá-
1999, según informe del Consejo Superior de sica del artículo 4 del Código Civil que man-
la Judicatura, en el año se registraban unos da, prohíbe, permite o castiga, no es apta para
3.500.000 atentados contra los derechos de regular la vida social, fundamentalmente por-
los ciudadanos, más de la mitad eran atenta- que a los problemas sociales el establecimien-
dos contra la propiedad, de los cuales sólo to pretende darle soluciones artificiales me-
700.000 fueron denunciados y de ellos aproxi- diante iniciativas legislativas carentes de resul-
madamente 400.000 pasarían con resolución tados reales. Ello genera desconfianza y pro-
de acusación a conocimiento de los jueces duce en el ciudadano un comportamiento que
penales para el juicio. lo conduce según lo que a su leal saber y en-
tender puede o no puede hacer.
• La hiperlegislación
El segundo componente es sin duda la legis- • El desempleo y el sub-empleo

lación y en ocasiones la hiperlegislación: un Según el DANE el 60% de la población eco-


promedio de 71 leyes anuales, más los de- nómicamente activa en Colombia gana me-
cretos de emergencias económicas, los ex- nos de dos salarios mínimos mensuales. La
pedidos en desarrollo de leyes de facultades tasa de desempleo está entre el 19 y el 21%,
extraordinarias, de leyes marcos y decretos re- lo que significa que cerca del 80% no puede
glamentarios, además de otras disposiciones acceder a la justicia ordinaria porque la cuan-
administrativas, que hace imposible sin duda tía de los asuntos es tan baja que no permiten
su conocimiento por parte de jueces, funcio- asumir los costos de un abogado ni los gas-
narios abogados y con mayores veras del ciu- tos judiciales, porque el principio de gratuidad 103
de la justicia es un mero enunciado. Un ejem- judiciales, y adicionalmente algo que puede
plo de muestra: los honorarios de un perito ser más preocupante aún: Un alto porcentaje
son de al menos el 70% de un salario mínimo. de colombianos que no tienen acceso a la
Igual puede decirse de un Curador Ad Litem educación se marginan voluntariamente por
o de un edicto emplazatorio. Invocar el ampa- temor a reclamar sus derechos ante la juris-
ro de pobreza equivale a dejar su demanda dicción respectiva o por considerarlo inútil.
languideciendo sin esperanza en algún ana- A lo anterior se agrega que los conflictos, no
quel del despacho judicial. necesariamente propios de la jurisdicción pe-
nal, relacionados con el crecimiento normal
• Razones para no acudir a la justicia
de comunidades urbanas, aumentados por
Hay un grupo de personas que no acuden a
la migración de población de veredas y muni-
la justicia por diferentes razones. Un estudio
cipios a los grandes centros urbanos, aumen-
del Consejo Superior de la Judicatura y DANE
tan también. Y como la cultura les ha dictado
(Primera encuesta nacional de justicia. 1997)
por años que las controversias las solucionan
arrojó los siguientes resultados que organizo
los jueces, para el colombiano promedio no
en orden decreciente:
existe otro camino para satisfacer su necesi-
Cuadro 2 dad de justicia o su deseo de venganza –de-
Desconocimiento de derechos, pende la orilla donde se encuentre– que la
costos judiciales y honorarios decisión judicial antes que explorar una solu-
de abogado 45%
ción mediante la comunicación de sus intere-
Lentitud de procesos 39.1%
ses, dado que la única alternativa conocida
Falta de pruebas para hacerlas
valer en el proceso 32.5% es la de vencedores y vencidos ya que no
Falta de credibilidad en el existen contradictores sino contendores. De
sistema judicial 30,0% dónde nace ésta condición y cómo se desa-
Exceso de trámites para rrolló este talante que resume lo que María Te-
iniciar proceso 18.8%
resa Uribe denomina las prácticas sociales y
Temor de represalias 17.1%
las representaciones colectivas de los co-
No saben cómo hacerlo 6.2%
Otras razones 16.9% lombianos, constituye el siguiente compo-
nente en el cual subyace el problema de la
justicia en Colombia, que no es otro que el
En la misma encuesta realizada en siete ciu-
transfondo cultural de la forma de resolver los
dades del país por el Consejo Superior de la
conflictos.
Judicatura, se halló que cuando los afecta-
dos por conflictos tienen nivel educativo su- • La estirpe intolerante de las
perior acuden a la autoridad a ventilar sus di- comunidades colombianas

ferencias en un 63.6%; les siguen los de se- La identidad y la consolidación de una socie-
cundaria con 55.5% y cierran quienes sólo tie- dad en sus prácticas y en sus símbolos que
nen estudios de preescolar y primaria con la integran, requieren de elementos construi-
51.3%. El estudio reveló desconfianza, insoli- dos desde una forma discursiva integradora y
104 daridad e indiferencia frente a las instituciones aglutinante, a partir de los cuales explican su
ser y se identifican con quienes comparten tal establecimiento. Se impuso una cosmovisión:
manera de ver la vida. Dice María Teresa Uribe: la de los vencedores. Sobre otra cosmovisión:
“Toda sociedad que pueda llamarse así pre- la de los vencidos. La cosmovisión de los blan-
cisa de una institucionalización del saber so- cos, de los que no son de aquí, que no tienen
cial y del orden colectivo (expresiones del que ver con los de aquí porque provienen de
mundo instituido de sentido) y precisa tam- otros mundos mejores y más estéticos que
bién de regularidad, estabilidad e inter- los de aquí, avasallando la cosmovisión de
subjetividad de su sistema cultural. Igualmen- los de aquí, indios y negros, no importa que
te requiere de una periodización de las prácti- los últimos no provinieran de aquí, al fin que
cas sociales en el más amplio sentido del tér- eran vencidos también. Poco a poco fueron
mino: económicas, religiosas, políticas, sexua- alinderándose dos grupos alrededor de dos
les, lúdicas, en orden a garantizar la cohesión modelos de pensamiento desarrollados a partir
y la integración de la sociedad. de la explicación desde lo sacro y racional a
La producción social de sentido es histórica y hechos y comportamientos explicados sólo
muy vulnerable a los cambios y a las transfor- desde lo religioso. Cuando la república pre-
maciones sociales; los cambios desplazan y tende fundar su visión del Estado desde las
reconstruyen los ethos socioculturales; los vie- leyes organización en la cual la iglesia católica
jos referentes colectivos dejan de operar como empezaba a disminuir su protagonismo, tie-
guías ciertas en la dirección de las acciones y nen origen las dos corrientes políticas que
los juicios morales no son ya unívocos y cla- constituyen los partidos políticos tradicionales,
ros; ...” el uno, defensor de la tradición católica del

En el caso colombiano el sustento religioso o Estado como regulador de lo moral (lo priva-

sacro de nuestras instituciones más tempra- do como lo público), defensor de la hispani-

nas fue un hecho indiscutible. La intolerancia dad, de las jerarquías heredadas de la Colo-

que acompañó a los conquistadores en la nia, con fuertes raíces agrarias. El otro, eman-
confrontación con el mundo primitivo al cual cipador, que separa lo público de lo privado,
entraron a saco, es históricamente reconoci- lo sacro (la Iglesia) de lo profano (el Estado ),
do, como también lo es que las poblaciones enfrentada la cosmovisión hispánica religiosa
arrancaron teniendo como referente arquitec- medieval con el iluminismo europeo4 y aún con
tónico la iglesia, con su torre y sus campanas principios protestantes como el libre examen.
presidiendo la plaza que en ciertos días se Ambas perspectivas de la vida, del mundo y
convertía y todavía se convierte en algunos de las cosas, no se encontraron en las mesas
pueblos en la plaza de mercado. Pero la reali- de diálogo, en la construcción de espacios
dad multiétnica y la visión del mundo de in- de convivencia pacífica, sino en los campos
dios y negros con su propios mitos y creen- de batalla. Con algunas modificaciones un
cias se negó a desaparecer, desafió el anate- poco más sofisticadas, la confrontación se ha
ma y finalmente terminaron excluidos por el mantenido con el mismo modelo hasta hoy.

4. Legitimidad y violencia. Una dimensión de la crisis política colombiana. Universidad de Antioquia. Medellín. 1990. P. 33 y S.S. 105
No es éste el espacio para reflexionar sobre fuerza, la guerra y la violencia. Así, conflictos
las guerras civiles de la historia colombiana, étnicos, vecinales, entre localidades y regio-
para algunos, inacabadas aún, sólo que con nes, interindividuales, conflictos por la tierra,
otros actores, donde el común denominador por el control de recursos naturales y de toda
sigue siendo el mismo: la violenta intolerancia índole se politizaron y se desarrollaron en esa
como una actitud, una disposición que reco- matriz histórico-partidista que sustituyó lo pú-
rre e informa todas las estructuras sociales e blico en Colombia. La sobrepolitización de los
individuales, desde el iletrado hasta el acadé- conflictos tuvo como corolario el debilitamien-
mico. to de las sociabilidades y la dificultad para
Y como lo público sólo podía ser expresado consolidar una sociedad civil fuerte y organi-
por los partidos, de manera que para el en- zada”.
tendimiento popular Estado y partidos eran lo A comienzos de 1980 en algunos muros del
mismo, el antagonismo político reemplazó lo centro de Cali aparecían afiches en los que la
que debió ser el libre intercambio de ideas y la Unión Patriótica proponía como su candidato
mentalidad excluyente, prevaleció sobre la to- a la presidencia al líder guerrillero Jacobo Are-
lerancia y la comprensión. En palabras de nas. Poco después vino la derrota de la UP
María Teresa Uribe “La escisión del referente más que en las urnas, a punta de pistola. La
público no permitió la consolidación del Esta- lúcida descripción que la profesora Uribe hace
do como ‘el otro generalizado’ (tal como lo de los orígenes sociales y culturales de los
concebía Durkheim). El Estado existía formal- colombianos, sigue siendo válida para la Co-
mente en el ordenamiento jurídico pero no era lombia de hoy. La intolerancia y la incapaci-
percibido así por la mayor parte de los sujetos dad de aceptar las controversias como algo
sociales. Estos carecían de representaciones propio de la dinámica social y en particular la
colectivas para identificar la diferencia entre pobre capacidad dialógica y discursiva des-
Estado y partidos, lo que condujo a la cons- emboca en múltiples expresiones de violen-
trucción del primero como un aparato débil, cia no necesariamente gangsteriles. Se perci-
fragmentado y con dificultades reales para ben en la escuela, en el hogar, en el gobierno
mantener el orden y organizar la vida social. local, en las aulas universitarias, en la iglesia.
‘La confusión entre lo público y lo privado im- Y por supuesto, en los despachos judiciales,
pidió el nacimiento de la verdadera sociedad en los escritos de abogados e intervenciones
civil’. La escisión de lo público y su represen- de contrapartes.
tación en forma partidista, aunada a la debili-
dad del Estado determinó que la mayor parte
de los conflictos transitaran por los canales de
los partidos y se debatieran en el espacio de Datos estadísticos
lo propiamente político, aunque originalmente
de la administración
de justicia para Cali
no tuvieran dicho carácter. De allí resultarían
las confrontaciones sobrepolitizadas que ante Jurisdicciones civil, laboral, familia y conten-
106 la escisión de lo público se resolvían por la cioso administrativo. Procesos terminados
por sentencia y por conciliación. Porcenta- ticia a nivel local, en este caso de Cali, las lec-
jes. Análisis de la conciliación judicial: la turas que a partir de las cifras pueden hacerse
judicialización del desjurisdiccionalizador. y las conclusiones que a partir de ellas po-
Los inútiles debates ¿Es un fracaso la conci- drían intentarse, especialmente midiendo el
liación judicial? impacto que la conciliación en los despachos
El referente del capítulo anterior sirve para in- judiciales ha tenido en estos diez años de vi-
troducir en cifras, el comportamiento de la jus- gencia.

Cuadro 3

Tribunal Administrativo Valle del Cauca

AÑO ENTRADAS SALIDAS

DEMANDAS SENTENCIAS % CONCILIACION % TRANSACCION %

1997 444 182 41 74 17 0 0


1998 603 206 34 62 10 1 0
1999 4.262 1.581 0.37 579 13 20 0.005

Cuadro 4

Juzgados Civiles del Circuito


(15 despachos)

AÑO ENTRADAS SALIDAS

DEMANDAS SENTENCIAS % CONCILIACION % TRANSACCION %

1997 11.733 1.395 11.9 53 0.05 144 0.01


1998 9.061 1.117 12.33 76 0.08 156 0.01

1999 17.417 1.968 11.30 94 0.05 235 0.01

Cuadro 5

Juzgados Civiles Municipales


(28 despachos)

AÑO ENTRADAS SALIDAS

DEMANDAS SENTENCIAS % CONCILIACION % TRANSACCION %

1997 14.332 1.627 11.35 128 0.89 58 0.04


1998 16.603 1.911 11.50 103 0.62 65 0.39

1999 25.550 3.456 13.52 152 0.59 124 0.48


107
Cuadro 6

Juzgados de Familia
(10 despachos)

AÑO ENTRADAS SALIDAS

DEMANDAS SENTENCIAS % CONCILIACION % TRANSACCION %

1997 9.686 3.661 37.79 722 7.45 22 0.22


1998 12.389 5.373 43.36 1.176 9.49 15 0.12

1999 19.907 9.829 49.37 2.040 10.24 66 0.33

Cuadro 7

Juzgados Laborales
(10 despachos)

AÑO ENTRADAS SALIDAS

DEMANDAS SENTENCIAS % CONCILIACION % TRANSACCION %

1997 2.534 788 31.09 158 6.23 2 0.07


1998 2.578 1.009 39.13 151 5.85 7 0.27

1999 6.267 2.259 36.04 239 3.81 10 0.15

Por contraste, el número de audiencias y con- liación del Consultorio Jurídico de la U.S.B. Cali
ciliaciones realizadas en el Centro de Conci- para igual número de años.

Cuadro 8

Estadística de conciliaciones 1997 al 2000

Año Cciones. CIVIL FLIA


FLIA.. LABOR. ADMINIS- PENAL TOT AL
TOTAL
solicitadas TRATIVO
TRATIVO CONCILIADAS

Conciliadas Conciliadas Conciliadas Conciliadas

1997 122 15 8 6 1 30

1998 546 54 46 19 1 120


1999 499 60 23 18 4 105
2000 459 72 44 25 3 2 146

TOT 1626 201 121 68 3 8 401

El examen de los datos anteriores exige expli- anterior cómo el ethos sociocultural colombia-
caciones a partir de una reflexión y es si la es- no no ha permitido que la producción social
tructura judicial permite el desarrollo de la con- sea decisiva sino que, su débil participación
ciliación para la terminación anticipada de pro- en las grandes decisiones estructurales de la
108 cesos. Ya se había mencionado en el capítulo comunidad colombiana hace que todo sea
impuesto o decidido por mandato legal: por a la alternativa de retirar la demanda para
decreto. volverla a presentar en otro despacho o
La conciliación es insertada sin concierto y sin pedir la reposición de la providencia, re-
posibilidad de articulación al proceso judicial curso cuya decisión toma dos o tres me-
y el juez, quien dispone de un estructura dise- ses, sin descartar que resulte confirmado,
ñada para definir quién es vencedor y quién por lo cual tendrá que enfrentarse a otra
vencido, termina desempeñando un rol para alternativa: apelar el rechazo de la deman-
el cual no está ni preparado ni tampoco for- da o resignarse a retirarla o someterse al
mado. Así, por ejemplo, el artículo 101 de capricho del despacho. Pertinente es juz-
C.P.C. determina, juntamente con lo que que- gar si se ha agilizado el proceso o se ha
da del Decreto 2651 de 1991, un dispendioso retardado más.
procedimiento, con plazos y exigencias de im- 2. Citar a las partes, y aquí viene la primera
posible cumplimiento, temas que, entre otros, discusión.
olvidó la Ley 640 porque en la gran mayoría Bastará con notificar por estado la provi-
de los casos el juez tiene que: dencia que señala fecha y hora para la ce-
1. Citar a audiencia de conciliación al déci- lebración de la audiencia, con la adverten-
mo día siguiente al del vencimiento del tras- cia de las consecuencias de la inasistencia
lado de la demanda principal y de la re- de las partes o es necesario notificar a las
convención, si la hubiere, a menos que se partes mediante otro medio diferente. Gran
propongan excepciones previas, en cuyo discusión, serios debates, recursos de re-
caso los plazos serán otros, que bien po- posición y en subsidio apelación, trámites
drían no existir porque no los cumplen. y traslados, discusiones van y vienen. ¿Es
Es sabido que mientras dictan el auto ad- lo mismo citar que notificar?, se preguntan
misorio o inadmisorio de la demanda, se los litigantes. Contesta un grupo de
notifica la misma al demandado, éste des- falladores: sí, por eso la notificación, se
corre el traslado, propone excepciones, consuma al publicarse en el estado. No,
pide pruebas, el juzgado corre traslado de responde otro grupo: son las partes quie-
las excepciones y luego señala fecha y nes tienen la obligación de comparecer a
hora para la audiencia de conciliación. la audiencia, con o sin sus apoderados; la
Entre el día de la presentación de la de- notificación debe hacerse a ellas en sus
manda y el día de la celebración de la au- residencias, además de notificarse la pro-
diencia de conciliación han podido trans- videncia que ordena la audiencia. No,
currir meses y hasta el año mismo. Ténga- ripostan los primeros, porque la notifica-
se en cuenta que entre la presentación de ción entonces sería personal y la notifica-
la demanda y el auto admisorio o inad- ción para ordenar la comparecencia a las
misorio de la misma, pueden transcurrir audiencias de conciliación no está, como
uno o dos meses. Y, notificado el auto dicen los especialistas, “enlistada” (sic) en
admisorio, puede el despacho judicial las reguladas por el artículo 314 del C.P.C.,
inadmitir la demanda por razones absur- así que en el evento en que alguna de las
das ante las cuales el litigante se enfrenta partes no comparezca porque su apode- 109
rado olvidó avisarle o no miró el estado, o judicial está en el piso 12 ó 14 y las filas
no leyó con atención, quedó sancionada eran enormes. El ciudadano quedará al
y su proceso archivado; sus pretensiones arbitrio de si el funcionario judicial es de
canceladas, todo porque la ley sencilla- los que entiende que en la conciliación el
mente considera que las partes, las que conciliador o quien funge como tal, no es
tienen el derecho de disposición sobre el el importante, ni quien impone decisiones.
asunto litigioso, las que deciden si conci- Son las partes las importantes. Serán ellas
lian o no, quedan en las manos de un ter- las que deciden si terminan o continúan
cero que ni siquiera es indispensable en la una controversia. Pero es inútil. La estruc-
etapa conciliatoria, para que les informe de tura procesal funciona como una máqui-
la celebración de una audiencia, la cual, si na al servicio de incisos y parágrafos, no
no es celebrada, resultará fatal para sus del ciudadano, resolviendo litigios a espal-
intereses porque sencillamente los ente- das de los interesados parapetados en
rrará lesionando prácticamente sin reme- absurdos criterios santanderistas.
dio derechos sustanciales.5 4. Sin prejuzgar, proponer una fórmula que
3. Si las partes no asisten y si se excusan estime justa (?) si las partes no tienen pro-
antes o después. puesta. Si no lo hace, incurrirá en una falta
sancionable.
Otro debate promovido desde la misma
Corte Suprema de Justicia.6 ¿Qué ocurre Forzoso es preguntarse, cómo podrá ser
si alguna o ambas partes llegan minutos recibida por un litigante una invitación a
después de la hora convenida y la audien- conciliar en la que el juez propone una de-
cia se ha cerrado? Dentro de los cinco días cisión que en síntesis desestima las pre-
siguientes solo podrán alegar fuerza ma- tensiones de la demanda o de la contes-
yor o caso fortuito para que no les impon- tación sin que ello signifique anticipar el re-
gan la sanción. Pero asistieron, luego po- sultado del litigio. Un problema físico tan
drán alegar fuerza mayor o caso fortuito por insoluble como exponerse al fuego sin
unos minutos o quizá por horas. No, dirán abrasarse. Cómo no prejuzgar si a alguna
algunos falladores, porque comparecieron. de las partes el juez le sugiere ceder en
No existen situaciones imprevisibles ni irre- beneficio de las pretensiones del otro, así

sistibles, la prueba es su comparecencia. sea en mínima parte, entendiéndose que

Otros falladores se apartarán diciendo: si no concilian ya se sabe cuál podrá ser


el fallo, porque prácticamente lo ha adelan-
habrá que examinar las circunstancias. Los
tado, lo cual carece de toda presentación.
incumplidos dirán: ocurrió una marcha de
Equivale tanto como que la ley misma ex-
protesta de los maestros, de los transpor-
pone al juez a situación insostenible.
tadores por las calles principales impidien-
do el acceso. Otro argumentará: sólo ha- Basta examinar los puntos anteriores para
bía disponible un ascensor y el despacho concluir sin mayores esfuerzos que el tema

5. Ambito Juridico. Ibid. P. 11.


110 6. Ibid. Año II. No. 28 8 al 21 de marzo de 1999. P. 3
de la conciliación es vino nuevo que no Decreto 2651/91 tienen que ser modificados
puede guardarse en odres viejos, parafra- a fondo. Los jueces deben y pueden conciliar
seando la parábola bíblica. El vino nuevo pero no se les puede imponer la conciliación
estropea el odre viejo. Vino nuevo no por- por la misma razón que las partes pueden y
que la ley lo dice, sino porque obedece a deben conciliar, pero tampoco se les puede
una cultura que no encuadra en la rígida sancionar porque no asisten a la audiencia,
estructura procesal legal. Porque no forma clara manifestación de su rechazo al acuerdo,
parte ni puede ser una instancia procesal de lo cual también son libres. La estirpe auto-
como la han querido imponer, con lo cual ritaria heredada de antiguas confrontaciones
se logra judicializar al desjudicializador. Es no resueltas, aparece como paracaidista
decir, anula el querer del constituyente. indeseado a un ambiente en el que de co-
Además porque desmontar la cultura con- mienzo a fin no puede haber otra cosa que
tenciosa de profunda raigambre en el alma actos de buena voluntad. Que su resultado
nacional, como se dice, no puede crearse debe y tiene que ser garantizado coacti-
de la noche a la mañana, por decreto. vamente por el Estado para efectos de su cum-
plimiento, resulta incuestionable. Pero que para
Tampoco puede sostenerse, sin faltar a la
llegar al espacio donde las partes se encuen-
más elemental justicia que, por definición,
tren, es necesario conducirlas bajo férula ame-
todos los jueces son ineptos para conci-
nazante, constituye un despropósito por com-
liar. Los hay profundamente convencidos
pleto innecesario. Si el juez quisiera abrir el
de las bondades de la institución. Creen
espacio dentro del proceso, en cualquier eta-
en ella y son excelentes conciliadores, pero
pa, aún existiendo sentencia de segunda ins-
tienen que lidiar con sus realidades: El
tancia, que lo haga. Que no se le impida. Las
Consejo Seccional de la Judicatura les partes libremente se pondrán de acuerdo o
exige un número determinado de senten- definitivamente decidirán seguir hasta el final
cias so pena de exponer su calificación si del resultado material del debate. Pero con-
tal número no se alcanza. De ahí que para vertir la conciliación en otra fuente más de de-
algunos jueces, emplear tres horas o más bates, de ríos de tinta y papel, de alegatos,
en una conciliación constituye una pérdi- traslados y apelaciones, como si no hubiera
da de tiempo. Mirando las estadísticas, suficientes en la cultura contenciosa que cier-
cuántos procesos requieren de audiencia tamente nos tiene agobiados bajo el peso de
y cuántas audiencias tendrían que celebrar sus tan estériles como costosos debates, es
en el mes, no por cumplir con una instan- necio sobremanera.
cia procesal más sino porque es una opor-
El esquema dentro del cual se ha introducido,
tunidad para construir justicia más que para
a las malas, a la conciliación, conduce al fra-
sentenciar justicia. Y por supuesto, al ce- caso. Mantiene el sistema de cosas de existir
lebrarlas con el tiempo y dedicación reque- en el papel. Sin resultados realistas. Los resul-
ridas, cuántas sentencias, no importa su tados de la conciliación en materia judicial no
calidad sino su cantidad, dejarían de pro- pueden ser más pobres (Ver cuadros com-
ducir. parativos). El desempeño de un centro de
La Ley debe ser modificada. Los artículos 101 conciliación de consultorio jurídico, lo supera
del Código Procesal Civil y sobrevivientes del con creces, con todas sus limitaciones. 111
Cuánto tiempo es necesario esperar para que ethos tradicional con el ethos de la moderni-
ésta realidad sea conocida y superada, por dad, lo sacro y lo profano, discusión que si-
supuesto, es imposible decirlo. En el entre- gue en punta, simplemente porque lo sacro
tanto, seguimos en lo mismo. La Ley 640, le- no negocia, no concilia, no razona con lo pro-
jos de desbrozar el camino de tanta zarandaja fano u otras versiones de lo sacro a quienes
legalista, antes las aumenta. considera sus oponentes. Es su enemigo. A
los enemigos hay que vencerlos o hay que
unírseles. Contrario a lo que sucede con el
contradictor, a quien se convence o con quien
La Conciliación
es una cultura se llega a un acuerdo. Cientos de años y mi-
les de mártires necesitó el cristianismo antes
Qué es cultura. Cómo se construye una cul- del edicto de Milán, si bien de mártires pasa-
tura. La cultura de los vencedores y venci- ron a inquisidores con la misma actitud de in-
dos que sólo nos hace ver contendientes no tolerancia de la que fueron víctimas en el ini-
contradictores. La verdadera democracia y
cio.7 Esta manera de mirar las contradiccio-
la participación. La generación del estado
nes es lo que se llama cultura, la cual no es ni
de sitio. La justicia como producto social más
buena ni mala. Es lo que es, como quiera que
que función soberana del Estado.
no consiste ni en buenos modales, ni en las
Necesaria es la presencia del conflicto. Las muchas lecturas. En principio, cultura es la co-
sociedades libres, o por lo menos que se pre- lección de todas las tradiciones y hábitos de
cien de serlo, tienen que enfrentar el día a día
un pueblo, particularmente los transmitidos de
de las diferencias de su evolución hacia un
padres a hijos y entre éstos. Incluye el acervo
conflicto. De la necesidad de solucionarlo.
común de imágenes y percepciones del mun-
Pero lo importante es cómo se para esa so-
do en que viven (la producción social de sen-
ciedad o esa comunidad delante del conflic-
tido de Durkheim o las estructuras de concien-
to: ¿lo sataniza? ¿lo intenta comprender? En el
cia de Max Weber). Por tanto incluye sus opi-
medio colombiano el antecedente autoritario
niones de lo práctico y posible y lo que defini-
e intransigente que ha permeado todas las
tivamente no lo es; de lo que es y de lo feo; lo
esferas comunitarias, con orígenes en cente-
bueno y lo malo; lo correcto y lo incorrecto. La
narias discusiones no resueltas, es el compo-
cultura funciona como un código de conduc-
nente cultural por excelencia. Sus orígenes los
ta que le dice a la gente cuándo avanzar y
intenté explicar en pasaje anterior: la confron-
tación de lo sacro con otras visiones sacras o cuándo detenerse, sugiriendo constantemente
mágicas o míticas de otras culturas, enfrenta- lo que se hace y lo que no se hace; lo que
das a sangre y fuego frente a otras explicacio- sería sorprendente que se hiciera y lo que es
nes del mundo desde lo racional, un reto pos- de esperar que ocurra. Como ninguna cultura
terior, que llevó a enfrentamientos severos e es rígida e inmutable, los hombres y las muje-
inacabados. Es decir, la confrontación del res pueden hacerla y rehacerla con su aten-

112 7. La historia del cristianismo. Paul JOHNSON. Javier Vergara Editores. Buenos Aires. 1993. P. 83 y S.S.
ción o con su indiferencia, con sus acciones da puramente militar a la cual se recurre con
o sus omisiones.8 el solo objeto de organizar la defensa nacio-
Resulta bien difícil resocializar. Remontar la nal cuando se lleve a cabo una invasión por
corriente. Reversar maneras de pensar y có- fuerzas extranjeras. En esta circunstancia toda
digos secretos de comportamiento colectivo. autoridad civil pasaría al comandante militar,
El colombiano promedio entiende que los quien la ejercería exclusivamente bajo su res-
conflictos se solucionan con un buen aboga- ponsabilidad personal. Se trataba de una ley
do, entendiendo como buen abogado no sólo marcial, restringida a personas y lugares so-
el diligente, idóneo y recursivo, sino el que no metidas a condiciones de plazas de guerra y
se para en reatos de conciencia para conse- puestos militares.9 La institución fue trasplan-
guir el resultado favorable. El tal no sólo es tada al territorio
admirable sino recomendable. El recién gra- nacional, cómo
duado de la facultad de Derecho que recibe a no, por el cons- El colombiano promedio en-
su primer cliente después de escuchar lo que tituyente de
el otro desea obtener, lo primero que piensa 1886, quien des-
tiende que los conflictos se
es en la demanda, los requisitos formales, las pués de liquidar solucionan con un buen abo-
pruebas, las pruebas que hacen falta, los fun- a los radicales gado, entendiendo como
damentos de derecho, etc. ¿Llamar a la con- en el combate
traparte a una conciliación, está en la lista de
buen abogado no sólo el dili-
de La Humareda
posibilidades a barajar? ¿Serán iguales los facultó al ejecu- gente, idóneo y recursivo,
honorarios para un proceso que para una con- tivo para impo- sino el que no se para en
ciliación? Quizá sean éstas sus preocupacio- nerla con la con-
reatos de conciencia para
nes. ¿Las escuelas de Derecho del país es- siguiente dismi-
tán pensando sus programas académicos nución de la li-
conseguir el resultado favo-
desde la cultura contenciosa o han conside- bertad y seguri- rable.
rado la posibilidad de desmontarla mediante dad individuales.
la implementación de otros enfoques, como Al amparo de tal
por ejemplo, la cultura de la concordia men- ayo, creció mutilada y deforme la democracia
cionada por el profesor Ramiro Bejarano Guz- colombiana y la participación ciudadana, ra-
mán? quítica y recortada, acostumbrada a las vías
¿Será que la academia mediante sus faculta- de hecho para ser escuchada porque no ha
des de Derecho son las primeras multiplica- tenido canales adecuados de participación,
doras de la cultura contenciosa y del binomio si por canales se entiende otras formas de ex-
vencedor-vencido? ¿Será que para la acade- presión diferentes a los partidos tradicionales.
mia no existen contradictores sino enemigos? Y no pueden ser los partidos tradicionales por
Pertenezco, como muchos otros colombianos, una razón sencilla: porque los partidos tradi-
a la generación del estado de sitio, una medi- cionales interpretan o por lo menos pretenden

8. Política y Gobierno. Karl W. DEUTSCH. F.C.E. 1976. P. 135, 238.


9. El Poder Legislativo en las constituciones Latinoamericanas. Carlos PISANO FISCHER. Editorial Jurídica de Chile. Santiago de
Chile. 1968. P. 95. 113
interpretar a sus partidarios siempre y cuando cillamente abstenernos, con la justificación de
no accedan al poder pero, una vez instalados que “yo a la política no le jalo”. La lectura que
en el poder, sus intereses ya son los del Esta- se hace de la abstención no puede ser igual
do. Estas otras formas moldean, dan forma a para el caso colombiano que para el caso
una organización superior a la estadounidense, o francés o canadiense. Es-
simple población civil, la sociedad civil, que tas son democracias con sociedades civiles
tampoco se organiza porque la repitan los pe- y con partidos políticos fuertes. En Colombia,
riodistas de noticiero, en medio de las chivas ni los partidos tradicionales sobreviven a me-
deportivas y las entrevistas light, sino como nos que entendamos como partidos unas ra-
zones sociales organizadas para empleos,
manifestación del interés de la ciudadanía por
contratos y demás prebendas, en cuyo caso
los asuntos de su comunidad expresado me-
el panorama no podría ser más desolador. En
diante movimientos sociales representativos
cuanto a sociedad civil, no existe. Habrá dife-
al margen de la estructura partidista y aun del
rentes colectivos, pero no sociedad civil en el
mismo Estado. No un modelo de sociedad
estricto sentido de lo que esto significa. Una
construida por el Estado y desde el Estado, la
cosa es, desde la confrontación armada, la
cual recibe qué tiene o no tiene que hacer y
sociedad civil y otra la población civil. Confun-
por supuesto, espera de ese Estado progeni- dir ambos conceptos nos lleva a otras confu-
tor lo que le quiera o le pueda dar. Sino más siones y ya hay suficientes.
bien que el Estado sea revisado y reformado
En todo caso, con o sin sociedad civil organi-
desde la sociedad, por la interacción de acto-
zada, es necesario entender que la justicia,
res sociales capaces de generar consensos
que es el tema que nos ocupa, que la justicia
y con ellos propuestas transformadoras del alternativa, más específicamente, nada tiene
Estado, lo cual creará sentido de pertenencia que ver para su reconocimiento y existencia
y de identidad, sin depender para ello de los con la justicia formal. Paso a explicar en qué
goles de la selección de fútbol. consiste esta afirmación. Si bien la adminis-
Allí sí tendríamos sociedad civil, constituida por tración de justicia dentro de la clásica concep-
agentes sociales autónomos, capaces de ción liberal burguesa depende de la función
generar modificaciones a la sociedad como soberana del Estado, la cual administra con

articuladores de intereses no necesariamente independencia de otras ramas del poder pú-


blico, es necesario avanzar para superar el
políticos. El problema en Colombia es la gran
paradigma de que es función soberana del
confusión que aún persiste entre los límites
Estado administrar justicia a un estadio más y
de lo público y de lo privado, hasta el punto
concluir que la justicia es un producto social,
de llegar a pensar que esa falta de definición
sin el cual la convivencia civilizada y pacífica
conspira en contra de una verdadera socie-
es mera retórica. Esto significa que adminis-
dad civil.
trar justicia no le compete exclusiva y exclu-
Pero nosotros creemos que tenemos liberta- yentemente al Estado, sino que la sociedad
des porque tenemos elecciones periódicas y también puede participar y recrear formas al-
114 podemos votar por el uno o por el otro, o sen- ternas de justicia de manera que no sean so-
lamente los jueces los que produzcan solu- las llamadas protecciones inherentes al siste-
ciones de fondo, sino que otras organizacio- ma. Al igual que muchos otros elementos bien
nes civiles reconocidas como tales también intencionados de nuestro ordenamiento posi-
puedan obtener los mismos o mejores resul- tivo, por regla general estas “normas tutela-
tados, como quiera que la justicia es una ne- res”, amparos o protecciones tienden a pro-
cesidad social más que política. La justicia que ducir el efecto contrario al deseado. No am-
tarda no es justicia, dice el socorrido aforis- paran a nadie, o por lo menos no protegen a
mo. La justicia oportuna, pronta y rápida, for- quienes debieran proteger. En efecto, lo único
ma parte del imaginario jurídico del deber ser. que logran las protecciones es poner en mar-
Tiene que formar parte de una realidad mate- cha un intrincado esquema en el que ocupan
rial y más que jurídica, una posibilidad social. lugar destacado las tácticas dilatorias y en el
que, dado que el tiempo es oro, la parte con
mayores recursos tiene una clara ventaja al
margen de los méritos de la causa.

Comentarios Aunque no sea una frase que se enseñe en


y conclusiones las facultades de Derecho, ni una táctica que
cuente con el respaldo oficial del Colegio Nor-
La administración de justicia pronta y rápida,
teamericano de Abogados, el método de ac-
corresponde a un ideal olímpico, forma parte
tuación en muchos casos no es otro que “eli-
del imaginario jurídico, es una realidad que
minar al contrario por agotamiento” lo que con-
debemos soportar sin remedio como las mi-
fiere un sentido remozado al viejo tópico de
serias del derecho. Sin embargo, cómo re-
“retrasar una acción o decisión inminentes”.10
nunciar a la justicia, fin último del derecho, ten-
tación a la cual nos empuja una justicia lenta, Y concluye el mismo autor:
costosa, tardía, enredada en sus propios lega- “Una última razón para pensarlo bien antes de
lismos. iniciar lo que cabría conceptuar como un plei-
Un abogado norteamericano escribe sobre las to discrecional nos la proporciona una vieja
razones para no embarcarse en un pleito, una maldición gitana de una lucidez realmente
de las cuales es el tiempo que requiere su demoníaca: “Ojalá te metas en un pleito con
terminación, atribuible a la paquidérmica ma- la razón de tu lado”
quinaria de la administración de justicia, a las Como es lógico, la ruindad de la maldición se
tácticas dilatorias de los abogados o a las dos. contiene en la idea de ser uno la parte que
Transcribo un aparte de sus reflexiones: lleva la razón, la parte no culpable”.11

“¿Por qué los trámites legales, y en especial Sin duda alguna pocas experiencias tan
un litigio, requieren tanto tiempo? Por irónico traumáticas como iniciar una acción judicial
que parezca, muchos, por no decir casi to- en Colombia, o si nos atenemos a las confe-
dos los retrasos legales, guardan relación con siones del autor mencionado, en Estados

10. Toda la verdad sobre los abogados. Mark H. MCCORMACK. Editorial Grijalbo. Barcelona. 1989. P. 244.
11. Ibid. P. 261 115
Unidos, la meca de la tecnología. La morosi- no necesariamente terminan todos en solu-
dad es la constante. Porque la justicia formal ciones dialógicas o discursivas, ni toda con-
requiere de las seguridades mencionadas por troversia es susceptible de terminar porque las
el autor, seguridades sustentadas en normas partes construyen su solución con la ayuda
constitucionales y legales: el debido proceso, de un tercero neutral como el conciliador, por
el derecho a la contradicción, la igualdad de ejemplo. Inexorablemente, el Estado tendrá
las partes, el derecho procesal como normas que atender con su aparato jurisdiccional e
de orden público, etc. impartir justicia para desatar divergencias pa-
trimoniales o criminales. Pero si el porcentaje
Sin embargo, la estructural congestión judicial
de demandas hechas al Estado por sus ciu-
no puede convertirse en el pretexto para so-
dadanos disminuye por existir otras formas de
portar lo que termina por aceptarse como un
justicia igualmente válidas, autónomas, acep-
mal insuperable de la administración de justi-
tadas y legítimas, lejos de obstaculizar su cre-
cia. Pero la respuesta a ésta o similar afirma-
cimiento debe ser estimulado. Al fin y al cabo
ción se puede sostener diciendo lo mismo
la justicia es indispensable para la conviven-
respecto de la abstención electoral en demo-
cia social, sea que provenga del Estado o de
cracias como la estadounidense, canadien-
la misma comunidad. Incluso más allá de la
se, francesa o inglesa: así como la absten-
ley misma, porque la ley solamente materiali-
ción en estas democracias no puede tener la
za hechos sociales ya que los hechos socia-
misma lectura que en Colombia, el nivel de
les marchan mucho más rápido que las leyes
congestión y la lentitud de los despachos ju-
hasta incluso aventurar que las sociedades se
diciales en aquéllas no puede tener la misma
las han arreglado bastante bien sin la ley con
lectura por no tener tampoco igual nivel de
sus excepciones. En principio las leyes son
conflictividad y de violencia nuestro, que su- hechas por las clases o sectores dominantes
pera de lejos el de cualquiera de las socieda- y las leyes son factor de desequilibrio social.
des mencionadas. La justicia tardía o la difi- De hecho, la lectura de los códigos es la lec-
cultad a acceder a la justicia y de obtener una tura de los sectores sociales dominantes o por
respuesta pronta y cumplida, constituye un lo menos influyentes. En los códigos y las le-
factor de violencia. Si a lo anterior agregamos yes subyace la ideología de los sectores más
la cultura violenta por cuenta de nuestras an- representativos y por supuesto más podero-
cestrales diferencias sin resolver, es necesa- sos. Un ejemplo es el Código de Comercio
rio aceptar a la justicia alternativa y sus desa- cuyo estatuto, lejos de ser un instrumento de
rrollos como una solución apremiante, por fue- regulación, es de dominación. Sólo basta re-
ra del Estado, aunque en el Estado, depen- flexionar cómo el liberalismo burgués rompió
diendo del Estado pero no determinada por el el absolutismo monárquico si no fue con el
Estado, creada y definida por organizaciones artilugio de ley sacralizada como la expresión
civiles con facultades de terminar con las dis- de la voluntad general, así el ciudadano no la
crepancias con decisiones que hagan tránsi- conozca (recordar el aforismo autoritario y
to a cosa juzgada pero respaldada por el Es- antidemocrático que el de la ignorancia de la
tado. Con ello no se pretende traer una ver- ley no puede servir de excusa) o le sea, con la
sión trasnochada de anarquismo o quizá una actual polución legislativa, un imposible co-
versión del Estado gendarme. Los conflictos nocerla.
116
En el caso de la justicia alternativa, el sistema pública estatal. La sociedad sostiene al Esta-
judicial formal no está dispuesto a entregar el do y lo legitima, lo modifica y lo transforma. El
poder de administrar justicia a los particulares sentido del Estado en las sociedades demo-
y no por un justo temor a que el Estado aban- cráticas no puede ser otro. Pero de todos los
done la función pública de administrar justi- ideales, sin duda el ideal de justicia entendida
cia. No han sido pocas las reservas que la como la convivencia pacífica no por la ausen-
jurisprudencia ha arrojado sobre el arbitramen- cia de conflictos sino porque los conflictos se
to con el pretexto de que sus fallos benefician resuelven en términos pacíficos y oportunos
a poderosos intereses económicos. Tal afir- discursiva o, en su defecto, impositivamente,
mación, lejos de descalificar a la justicia arbi- es el determinante para una convivencia civili-
tral, más bien desvía la discusión en otra di- zada. En la atmósfera enrarecida de los tiem-
rección, porque, ¿qué decir de anónimas sen- pos de hoy, o por lo menos de los tiempos
tencias dictadas contrariando las leyes por in- que nos ha tocado vivir, la justicia alternativa
terpretaciones acomodadas, o qué decir de como herramienta de construcción de una
las sentencias contradictorias cuando el De- cultura de paz entendida como proceso de
recho y las normas son las mismas? ¿Cuál de construcción permanente, me parece un im-
las sentencias fue la equivocada? No por ello perativo no solo moral y ético sino socialmen-
es menester concluir que todo el sistema judi- te lógico.
cial colombiano está bajo sospecha. La expli-
cación podrá ser que el Derecho no es unívoco
pero aspira a la univocidad. No es perfecto Bibliografía
pero procura ser llegar a la condición de per- – Ambito Jurídico. Año II. No. 26. Bogotá 8 al 21 de
fectible. El Derecho no es asunto de jueces y febrero de 1999.
– . Año II. No. 28 8 al 21 de marzo de 1999.
abogados. El Derecho somos todos y se hace
– DEUTSCH. F.C.E. Karl W. Política y Gobierno. 1976.
el Derecho al andar.12
– JOHNSON, Paul. La historia del cristianismo. Buenos
La justicia alternativa es el derecho vivido lejos Aires: Javier Vergara Editores, 1993.
– Legitimidad y violencia. Una dimensión de la crisis
del derecho escrito. En el primero caben to- política colombiana. Universidad de Antioquia. Me-
dos, tanto ciudadanos como funcionarios, dellín. 1990.

abogados.13 – MCCORMACK, Mark H. Toda la verdad sobre los


abogados. Barcelona: Editorial Grijalbo, 1989.
Quizá en ésta última frase pueda sintetizar la – MORALES M., Hernando. Curso de Derecho Pro-
cesal Civil. Bogotá: Editorial ABC, 1973.
hipótesis sostenida en el presente ensayo: la
– Ministerio de Justicia. La Conciliación. Bogotá: Im-
justicia no le pertenece al Estado, siendo él prenta Nacional, 1992.
quien la administra. La justicia le pertenece a – NIETO, Alejandro; FERNANDEZ, Tomás- Ramón. El
Derecho y el Revés. Barcelona: Editorial Ariel S.A.,
la comunidad. La convivencia pacífica le con- 1998.
cierne a la comunidad. La justicia es un pro- – PISANO FISCHER, Carlos. El Poder Legislativo en
ducto social, como lo es también una función las constituciones latinoamericanas. Santiago de
Chile: Editorial Jurídica de Chile, 1968.

12. El Derecho y el Revés. Alejandro NIETO. Tomás- Ramón FERNÁNDEZ. Editorial Ariel S.A. Barcelona. 1998. P. 101.
13. Ibid. 117
Derecho

Aproximaciones conceptuales:
El acceso a los recursos
genéticos y la biopiratería
Diana María Vásquez
Abogada, Profesora Hora Cátedra de la Facultad de Derecho de la Universidad de San Buenaventura Cali
Profesora Asistente de la Escuela de Recursos Naturales y del Ambiente
de la Facultad de Ingeniería de la Universidad del Valle

Abstract Resumen

This article presents some considerations En el presente artículo se expondrán algu-

regarding the overall problems involved with nas consideraciones sobre los problemas
the illegal appropriation of biological re- generales que conlleva la apropiación ilegal
sources, or what is currently known as de los recursos biológicos o lo que en el
“biopiracy”. To approach this problem it is lenguaje actual se denomina biopiratería.
necessary to ask oneself a few questions
Para abordar este problema es necesario
such as: Who holds dominion of biological
plantearse interrogantes como:
resources? Who grants consent to the ap-
propriation and exploitation thereof? or, How ¿Sobre quién recae el dominio de los recur-
should benefits from the exploitation of bio- sos biológicos? ¿Quién debe otorgar el con-
logical resources be distributed? sentimiento para su apropiación y explota-
It is recognized against the backdrop of these ción? o ¿Cómo se deben distribuir los be-
issues that the biodiversity available in differ- neficios derivados de la explotación de los
ent countries is an outstanding element in
recursos biológicos? No se debe descono-
the current economic scenario of market glo-
cer que la biodiversidad se ha convertido
balization. Biodiversity has become both a
en un factor determinante y en una ventaja
determining factor and a relative competi-
tive advantage that requires biotechnologi- competitiva relativa que para ser altamente
cal support to ensure optimal use, perfor- rentable, debe estar soportada en su am-
mance, and profitability. plio aprovechamiento y utilización.
118
Introducción Revisión sobre el acceso
a los recursos genéticos
El tema que se presenta sin lugar a dudas ha y su relación directa con
generado y seguirá generando diversas con- la distribución de
beneficios y con los
troversias, dadas las implicaciones que de éste conocimientos
se derivan en el ámbito económico, social y tradicionales
jurídico.
Con el Convenio de Diversidad Biológica se
Interrogantes como: ¿Sobre quién recae el
consagró la urgencia de instituir un marco le-
dominio de los recursos biológicos? ¿Quién
gal para regular el acceso a los recursos ge-
debe otorgar el consentimiento para su apro-
néticos. Y podría decirse, tal como lo expone
piación y explotación? o ¿Cómo se deben dis-
Jorge Mariaca, que son dos los factores esen-
tribuir los beneficios derivados de la explota-
ciales que fundamentan dicha regulación:
ción de recursos biológicos? son los que más
“... 1. La diversidad de recursos biológicos –y
suscitan discusiones, especialmente cuando
en este caso genéticos– que provee impor-
en el escenario internacional la biotecnología
tantes servicios para el bienestar de la comu-
predomina en forma creciente y la biodiversi-
nidad local y global (medicamentos, nuevas
dad es, en consideración de algunos, una
variedades para hacer frente a plagas y enfer-
ventaja relativa ya que lo importante es saber-
medades, adaptación al entorno, y muchos
la utilizar a través de las técnicas biotecno-
lógicas, pues quienes dominen estos méto- otros...)

dos productivos habrán adquirido enormes “... 2. Los poseedores-guardianes de dichos


ventajas sobre sus competidores. Para otros, recursos permanecen generalmente sin com-
la biodiversidad se transforma en una riqueza pensaciones (beneficios) por los servicios
potencial o fuente de materia prima de gran suministrados (los países de origen, las co-
valor económico para los países que la munidades locales y pueblos indígenas, en-
detentan en la medida en que se convierte en tre otros...)
materia prima para los desarrollos biotecnoló- Bajo estos dos supuestos, es decir, el reco-
gicos. nocimiento a los servicios y a las compensa-
A continuación se expondrán algunas consi- ciones por los servicios suministrados se de-
deraciones sobre los problemas generales bía orientar la regulación. Ahora bien, para el
que conlleva la apropiación ilegal de los re- caso de los recursos genéticos, los métodos
cursos biológicos o biopiratería. de retribución formales estuvieron ausentes
Para facilitar el análisis, resulta pertinente, como hasta la introducción de la noción o concepto
primer punto, efectuar una simple revisión so- de “ acceso a los recursos genéticos”, que
bre el acceso a los recursos genéticos y su se traduce en todos aquellos aspectos que
relación directa con la distribución de benefi- regulan la canalización de beneficios hacia las
cios y con los conocimientos tradicionales. Un fuentes originarias de la biodiversidad y del
segundo punto recoge ciertas reflexiones so- conocimiento asociado.
bre la significación y consecuencias de la bio- Podría decirse que el acceso a los recursos
piratería en los ámbitos antes propuestos. genéticos es la entrada hacia la distribución 119
de beneficios; y la Decisión 391,1 en los tér- Estas comunidades han visto que la mejor
minos empleados por el profesor Mariaca, manera de reivindicar sus derechos es a tra-
“...es la norma que operativiza este flujo de vés de un referente: la normativa de acceso a
beneficios...” Cabe recalcar que con anteriori- los recursos genéticos y los conocimientos tra-
dad a la norma comunitaria referida no existía dicionales, primero por haberse incorporado
ningún tipo de regulación normativa que esta- conceptos mercantilistas del conocimiento, y
bleciera el flujo de beneficios hacia las fuen- segundo por el dinamismo jurídico de esta
tes originarias. área en el ámbito nacional e internacional. De
esta forma el acceso a los recursos
genéticos se ha convertido en objeto de lu-
cha; desafortunadamente, no la más efecti-
Resultados va para todo el conjunto de demandas de
de la Decisión 391 las comunidades.
de la Comunidad Andina
de Naciones sobre acceso b) Inobservancia de aspectos técnicos, so-
a recursos genéticos cio-culturales e incluso ambientales que con-
lleva el acceso a los recursos genéticos y a
Luego de haber transcurrido un quinquenio de
la distribución económica de sus beneficios.
la implementación y puesta en marcha de la
Decisión 391, los resultados no son nada alen- Se brinda una exagerada expectativa econó-
tadores. Recientemente en el seminario so- mica de los recursos genéticos y del conoci-

bre biodiversidad organizado por la Comuni- miento asociado, pero se desconocen otros
elementos técnicos, socio-culturales e inclu-
dad Andina, se expuso una serie de proble-
so ambientales que conlleva el acceso a los
mas inherentes a la norma y otros de carácter
mismos y la distribución económica de sus
contextual que hacen que su aplicación no sea
beneficios, tales como el largo tiempo que
eficaz, entre los cuales se pueden citar:
toma generar beneficios de los recursos ge-
a) Reivindicaciones por parte de las comu- néticos; los beneficios pueden ser no mone-
nidades de la más amplia gama de dere- tarios; falta de certeza sobre el éxito que se
chos a través de la normativa de acceso a espera obtener y esto tiene relación directa con
los recursos genéticos y los conocimientos la existencia de beneficios; la complejidad en
tradicionales. la distribución de los beneficios, si se tiene en
Pese a que las demandas de representativi- cuenta la presencia de tres partícipes: 1) País
dad de los pueblos indígenas y de los cam- de origen, solicitante. 2) Institución Nacional
pesinos en la política, salud, educación y terri- de Apoyo, dueño del predio, poseedor del
torio, han sido reconocidas en las constitucio- conocimiento asociado; y 3) entre quiénes
nes modernas y en los convenios internacio- comparten el conocimiento asociado.
nales (Convenio 169 de la OIT, Convenio so- c) Exagerado favoritismo por las técnicas
bre la Diversidad Biológica), su pleno ejercicio importadas frente al olvido o menosprecio
se encuentra distante. por las técnicas nativas.

120 1. Decisión Comunitaria 391 de la Comunidad Andina de Naciones.


La transferencia tecnológica se convierte en Este punto es relevante para la efectiva parti-
una de las mayores expectativas en cuanto al cipación de la población en los procesos de
beneficio esperado a cambio del acceso a acceso a los RG. La participación en las ne-
nuestros recursos. Así las cosas se acentúa gociaciones de distribución de beneficios, y
el respeto y el favoritismo por las técnicas im- en posibles reformas a la normativa, sólo será
portadas y el olvido o menosprecio por las téc- efectiva si los encargados de éstas están
nicas nativas. ampliamente capacitados para estos fines.
Paradójicamente los beneficios que se obtie-
nen se derivan del trabajo de iniciativas nacio-
nales-locales. Estas iniciativas, fortalecidas con Significación
trabajo colectivo y sobre la base de las capa- y consecuencias
de la biopiratería
cidades existentes, tienen un gran potencial
para la generación de beneficios, por ello se Nuestros países, que se caracterizan por su
hace necesario impulsar este tipo de inicia- extraordinaria biodiversidad y riqueza étnica,
tivas. hoy se encuentran en la mira de algunas gran-
La suscripción de contratos sobre acceso a des corporaciones farmacéuticas y biotec-
los recursos genéticos con entidades extran- nológicas que buscan apropiarse de ciertos
jeras generan grandes expectativas sobre los recursos naturales de la región y beneficiarse
beneficios a obtener, y es precisamente esta del conocimiento indígena que los acompa-
idea la que debe abandonarse y lograr una ña.2 Pero es justamente la biodiversidad,3 la
sinergia hacia la acción local y colectiva. que ahora se encuentra en peligro por causa
de la biopiratería y bioprospección.4
d) Se evidencia una escasa capacidad para
la aplicación de la norma sobre acceso a Para hablar sobre la biopiratería es preciso
los recursos genéticos. hacer primero referencia a la bioprospección,

Sin lugar a dudas la temática del acceso a los pues a través de ésta se identifican los recur-

recursos genéticos es compleja; nuestra ex- sos biológicos y el conocimiento tradicional

periencia en aplicar la norma referida al tema con un potencial comercial. Es decir, la bio-

es relativamente nueva. Pero esto no puede prospección es la búsqueda de los recursos

servir de excusa para su incorrecta aplicación. biológicos y del conocimiento indígena, prin-

Por el contrario, se deben manejar con toda cipalmente con el propósito de su explotación

precisión temas como el conocimiento de comercial.

nuestra biodiversidad, el marco institucional- Por su parte el término biopiratería, que fue
administrativo y una alta capacidad de nego- utilizado por Pat Mooney, de la Rural Advance-
ciación. ment Foundation International (RAFI), premio

2. Fuente clave de alimentos, productos farmacéuticos y agrícolas


3. Como lo advierte “ la biodiversidad tiene un potencial de mercado extremadamente lucrativo. De hecho, el comercio de productos
y procesos biológicos es ahora casi la mitad de la economía mundial, con ganancias concentradas en la naciente industria de
“ciencias de la vida” (comida, fármacos y producción agrícola)..”
4. Biopiratería: Nueva amenaza a los indígenas y cultura de México. 121
Nóbel alternativo, y socializado o difundido por su parte los socios corporativos detentan los
personalidades como Vandana Shiva, se tra- mayores beneficios económicos a través de
duce en la apropiación ilegal de la vida, las regalías que generan los productos comer-
microorganismos, plantas y animales y el co- cializados.5 Lo anterior sugiere plantear los si-
nocimiento tradicional que le acompaña sin guientes interrogantes: ¿Cuál es el compro-
que medie la voluntad o consentimiento de miso de los sujetos intermediarios, es decir,
las comunidades ni exista una compensación universidades y ONG con la justicia social y la
justa por dicha expropiación. Así las cosas, preservación del medio ambiente que tanto
los individuos y las corporaciones, recurrien- proclaman? ¡Sencillamente se generan mu-
do a las prácticas de manipulación genética chas dudas sobre la filosofía y los móviles que
hacia los recursos obtenidos, logran a través les lleva a realizar dichas acciones!
de la figura de las patentes reclamar la propie- ¿Por qué los grupos indígenas no patentan
dad de los recursos biológicos y acceder tam- su propio conocimiento, sus recursos y sus
bién al conocimiento de estos asociados ge- productos? Existen dos aspectos fundamen-
nerando una control monopólico sobre los re- tales:
cursos naturales de los cuales depende nues-
1. Los valores tradicionales y sus estilos de
tra supervivencia; monopolio que a la postre
vida que están basados en la vida en co-
niega el acceso a las medicinas tradicionales
munidad, en la interdependencia de todo
y obliga a pagar regalías por la utilización de
ser vivo y en los recursos compartidos, por
las mismas o por los productos que se deri-
lo que la idea de patentar la vida contradi-
ven de éstas.
ce el sistema de valores en que basan su
Infortunadamente la bioprospectiva corporati- vida. Esta figura monopólica es propia de
va y los proyectos de biopiratería se realizan a la cultura occidental, cuyos valores como
través de ciertos organismos o instituciones
la propiedad privada y la riqueza individual
intermediarias como: universidades, gobier-
es diametralmente opuesta a los valores
nos y organizaciones no gubernamentales
de las culturas indígenas.
(ONGs), que pueden contribuir con expertos
2. Los costos excesivos para la adquisición
o investigadores que cuentan con fácil acce-
y mantenimiento de la patente en el exte-
so a los centros o sitios ricos en biodiversidad
rior, precisamente en aquellos países don-
y que son contratados a precios muy econó-
de se recurre a la figura de la patente.
micos; más aún, estos sujetos intermediarios
brindan gran credibilidad a los proyectos. ¿Pero
cuál es la contraprestación a su trabajo?: “Los
socios intermediarios a menudo reciben fon- Regulación normativa
y biopiratería
dos económicos para proyectos de investi-
gación, en algunas ocasiones becas o Así las cosas, vemos que la biopiratería es una
equipamiento para futuras investigaciones. Por conducta ilegal porque no respeta lo conteni-

122 5. Ibídem.
do en las convenciones internacionales y en los principios del Derecho Internacional como
las leyes nacionales. principio que “…los estados tienen el dere-

Nuestro país es firmante de la Convención In- cho soberano de explotar sus propios recur-

ternacional de la Diversidad Biológica y de la sos en aplicación de su propia política am-

Convención 169 de la Organización Interna- biental…”.

cional del Trabajo, e igualmente como miem- La ley antes referida fue declarada exequible
bro de la Comunidad Andina de Naciones por la Corte Constitucional a través de la Sen-
debe acatar la Decisión 391 sobre acceso a tencia C519 de 1994; en ésta se afirma que:
los recursos genéticos. Estos instrumentos “…La riqueza natural y cultural pertenece a la
jurídicos consagran un grado de protección a nación, así los recursos que se encuentran en
los indígenas con respecto al uso sustentable cada Estado le pertenece a él y, por tanto, sólo
de la biodiversidad, a la distribución de los ese Estado tiene la facultad de utilizarlos y apro-
beneficios que se generen con el uso comer- vecharlos económicamente de acuerdo con
cial y a la preservación del conocimiento tradi- sus propios intereses”.
cional y prácticas relacionadas. Igualmente, la Corte Constitucional resalta la
Nuestra Constitución Política impone al Esta- importancia que revisten los recursos y la in-
do entre otras obligaciones la de “...proteger formación genética que ha sido aprovechada
las riquezas culturales y naturales de la na- por las comunidades cuyo conocimiento tra-
ción…” (artículo 8); “…proteger la integridad dicional debe ser reconocido y respetado al
y diversidad del ambiente y conservar la áreas momento de entrar a negociar sobre una ri-
de especial importancia ecológica…” (artícu- queza que le pertenece al Estado Colombia-
lo 79); “…planificar el manejo y aprovecha- no, pero que requiere de la activa participa-
miento de los recursos naturales, para garan- ción de esas comunidades, como lo exige,
tizar su desarrollo sostenible, su conservación, para el caso de los indígenas, el parágrafo del
restauración o sustitución…” (artículo 80). El artículo 330 constitucional.6
inciso final del artículo 81 establece que “El Por su parte, la sala de consulta del servicio
Estado regulará el ingreso al país y la salida civil del Consejo de Estado conceptuó a tra-
de él de los recursos genéticos, y su utiliza- vés del magistrado César Hoyos la naturaleza
ción, de acuerdo con el interés nacional”. jurídica de los recursos naturales y concluyó
Con posterioridad a la expedición de nuestra que:
Constitución, se expide la Ley 165 de 1994 • “…El régimen jurídico de la propiedad apli-
por medio de la cual se aprueba el Convenio cables a los recursos genéticos, de utilidad
de Diversidad Biológica que reafirma que los real o potencial, es el establecido para los bie-
estados tienen derechos soberanos sobre sus nes de dominio público, en forma general en
propios recursos biológicos y se consagra de la Constitución Política, y de manera particu-
conformidad con las Naciones Unidas y con lar, en la Decisión 391 de la Comisión del

6. Castro de Arena Rosa Herminia, La revolución genética y sus implicaciones ético jurídicas, Ediciones Doctrina y Ley, Santafé de
Bogotá. 123
Acuerdo de Cartagena, en el Decreto 2811 Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB),
de 1974, la Ley 165 de 1994 y las disposicio- por lo que incorpora disposiciones en torno a
nes legales que en el futuro se expidan…”. la biopiratería, los derechos sobre los recur-
• El tratamiento jurídico de los recursos gené- sos genéticos y sobre la patentabilidad de los
ticos no es el mismo que le da la legislación seres vivos, entre las que se pueden exponer
colombiana a los recursos naturales no reno- las siguientes:
vables, porque éstos tienen un régimen legal • El reconocimiento que hacen los países
especial, el cual no dispone que sus normas miembros al derecho y a la facultad para de-
se apliquen también a los recursos naturales cidir que tienen las comunidades indígenas,
renovables. afroamericanas o locales, sobre sus conoci-
• Al recurso genético puede dársele un trata- mientos colectivos. [Artículo 3]
miento jurídico de propiedad independiente al • No se considerarán invenciones [...] el todo
previsto para el recurso biológico. Aunque éste o parte de seres vivos tal como se encuentran
contiene al primero, mientras formen unidad o
en la naturaleza, los procesos biológicos na-
estén integrados, la función ecológica impues-
turales, el material biológico existente en la
ta a la propiedad privada y el interés nacional
naturaleza o aquel que pueda ser aislado, in-
garantizan la propiedad pública de la nación y
clusive genoma o germoplasma de cualquier
una vez separados cada uno se sujeta al régi-
ser vivo natural. [Artículo 15(b)]
men jurídico que le es propio
• No serán patentables [...] las invenciones
La Decisión 391 reitera en su artículo 5 la so-
cuya explotación comercial en el país miem-
beranía de los países miembros respecto de
bro respectivo deba impedirse necesariamen-
sus recursos genéticos y sus productos deri-
te para proteger la salud o la vida de las per-
vados establece que “...Dichos recursos son
sonas o de los animales, o para preservar los
inalienables, imprescriptibles e inembargables,
vegetales o el medio ambiente. [Artículo 20(b)]
sin perjuicio de los regímenes de propiedad
aplicables sobre los recursos biológicos que • No serán patentables [...] las plantas, los
los continúen, el predio en que se encuen- animales y los procedimientos esencialmente
tran, o el componente intangible asociado...”. biológicos para la producción de plantas o

En conclusión, los recursos genéticos son bie- animales que no sean procedimientos no bio-
nes de dominio público y pertenecen a la na- lógicos o microbiológicos. [Artículo 20(c)]
ción por formar parte de los recursos o rique- • Para obtener una patente de invención, la
zas naturales de la misma. solicitud, deberá contener [...] la copia del
Ahora bien, existe otra normativa comunitaria contrato de acceso, cuando los productos o
que debe ser observada y es la ‘Decisión 486 procedimientos cuya patente se solicita han
de la Comunidad Andina de Naciones, con- sido obtenidos o desarrollados a partir de re-
cerniente al nuevo régimen de propiedad in- cursos genéticos o de sus productos deriva-
telectual; esta Decisión, que entró a regir el 1º dos de los que cualquiera de los países miem-
124 de diciembre de 2000, tiene como referente el bros es país de origen. [Artículo 26(h)]
• Para obtener una patente de invención la • La autoridad nacional competente decreta-
solicitud deberá contener [...] la copia del do- rá de oficio o a solicitud de cualquier persona
cumento que acredite la licencia o autoriza- y en cualquier momento, la nulidad absoluta
ción de uso de los conocimientos tradiciona- de una patente, cuando [...], de ser el caso,
les de las comunidades indígenas, afroameri- no se hubiere presentado la copia del docu-
canas o locales de los países miembros, cuan- mento que acredite la licencia o autorización
do los productos o procedimientos cuya pro- de uso de los conocimientos tradicionales de
tección se solicita han sido obtenidos o desa- las comunidades indígenas afroamericanas o
rrollados a partir de dichos conocimientos de locales de los países miembros, cuando los
los que cualquiera de los países miembros productos o procesos cuya protección se
solicita han sido obtenidos o desarrollados a
es país de origen, de acuerdo a lo estable-
partir de dichos conocimientos de los que
cido en la Decisión 391 y sus modificacio-
cualquiera de los países miembros es país de
nes y reglamentaciones vigentes. [Artículo
origen. [Artículo 75(h)]
26(i)]
• No podrán registrarse como marcas aque-
• [...] Cuando la patente proteja material bio-
llos signos cuyo uso en el comercio afectara
lógico capaz de reproducirse, la patente no
indebidamente a un tercero, en particular cuan-
se extenderá al material biológico obtenido por
do [...] consistan en el nombre de las comuni-
reproducción, multiplicación o propagación del
dades indígenas, afroamericanas o locales, o
material introducido en el comercio [en cual- las denominaciones, las palabras, las letras,
quier país por el titular de la patente, o por otra caracteres o signos utilizados para distinguir
persona con su consentimiento o económi- sus productos, servicios o la forma de proce-
camente vinculada a él] [...], siempre que la sarlos, o que constituyan la expresión de su
reproducción, multiplicación o propagación cultura o práctica, salvo que la solicitud sea
fuese necesaria para usar el material confor- presentada por la propia comunidad o con su
me a los fines para los cuales se introdujo en consentimiento expreso. [Artículo 136(G)]
el comercio y que el material derivado de tal • Los microorganismos serán patentables
uso no se emplee para fines de multiplicación hasta tanto se adopten medidas distintas re-
o propagación. [Artículo 54] sultantes del examen previsto en el apartado
• La autoridad nacional competente decreta- b) del artículo 27, numeral 3 del ADPIC [TRIPS].
rá de oficio o a solicitud de cualquier persona Para tal efecto se tendrán en cuenta los com-
y en cualquier momento, la nulidad absoluta promisos asumidos por los países miembros
de una patente, cuando [...], de ser el caso, en el ámbito del Convenio sobre la Diversidad
no se hubiere presentado la copia del contra- Biológica. [Segunda Disposición Transitoria].
to de acceso, cuando los productos o proce- A primera vista, esta decisión contiene elemen-
dimientos cuya patente se solicita han sido tos progresistas; no obstante, la discusión se
obtenidos o desarrollados a partir de recursos centra en considerar que la Decisión 486, al
genéticos o de sus productos derivados de intentar adaptar al formato de un régimen de
los que cualquiera de los países miembros es DPI los derechos comunitarios sobre el saber
país de origen. [Artículo 75(g)] tradicional y el control soberano del acceso a 125
los recursos genéticos, lo que se hace es más en la naturaleza. En otros países como en
que una adaptación acomodaticia que en úl- EE.UU. se han otorgado patentes a descubri-
timas facilita involucrar a los pueblos indíge- mientos pues puede ser patentable el mate-
nas, a los afroamericanos y al campesinado y rial biológico o genético aislado de su entor-
a la población rural de los países andinos en no...]
el funcionamiento de un sistema de patentes • Un gen de plantas y animales y/o sus pro-
libre de fricciones que permite otorgarle a otros piedades, no deberían ser patentables debi-
sujetos los derechos exclusivos de comercia-
do a que ya existen en la naturaleza, por lo
lización de la biodiversidad local.
que es catalogado como descubrimiento y no
En conclusión, algunos artículos de la Deci- invención.
sión 486 resultan contraproducentes con el fin
En Colombia la novedad es absoluta. No obs-
que persiguen las comunidades, es decir, el
tante, en otros países se maneja el concepto
de fortalecer los derechos de la gente a nivel
de novedad relativa, que se refiere a que una
local sobre sus propios conocimientos, recur-
invención es novedosa si no se conocía a tra-
sos y formas de sustento y contra el abuso de
vés de publicaciones u otros medios con un
los bioprospectores y la codicia de los
tiempo determinado de antelación a la solici-
biopiratas que tanto daño hacen a la riqueza
tud de la patente. Lo anterior indica que po-
de la humanidad.
drían ser novedosos los conocimientos tradi-
En resumen, las posiciones internacionales cionales en el supuesto de que no se cono-
referidas al tema se encuentran totalmente ciera publicación antes de ser solicitada la
opuestas; se pueden observar movimientos patente aun cuando ya existiera.
en el mundo que se oponen a todo tipo de
• Un gen alterado a través de la biotecnología
patentamiento sobre la vida. En cambio, suje-
podría ser patentable porque cumple los re-
tos vinculados a sectores como los de la in-
quisitos para que se pueda proteger como
dustria farmacéutica, química, agrícola y
invenciones. No obstante, los estados que
alimentaria luchan a toda costa por obtener
permiten el patentamiento genético aducen
patentes sobre sus descubrimientos. Convie-
que el hecho de aislar un gen ya le confiere
ne a continuación conocer los argumentos.
características de novedad porque los genes
• Toda materia viva existente en la naturaleza
no existen aislados como tales en la natura-
no debería ser objeto de patentamiento en ra-
leza.
zón a que el hombre no ha incidido en su crea-
ción y por ello no serían aplicables la novedad
y la altura inventiva.
Cuatro casos
• [....Pero si alguna variedad se le aplica al- significativos de
gún tipo de tratamiento biotecnológico para biopiratería y
bioprospección
obtener una variedad diferente, o para mejo-
rar la anterior, se podría permitir el patenta- Los siguientes cuatro casos de estudio de-
miento debido a que el hombre ha intervenido muestran la amenaza a la cultura indígena y
para la mejoría de dicho organismo vivo o la su ambiente por proyectos de bioprospección
126 creación de otro que antes no existía como tal y biopiratería.
• En 1994 POD-NERS, una compañía de se- traste, Diversa accedió a pagar el 10% de las
millas de siembra basada en Colorado, com- regalías al Departamento del Interior de Esta-
pró semillas de frijol amarillo en Sonora, Méxi- dos Unidos en proyectos de bioprospección
co. Dos años más tarde el presidente de la en el Parque Natural de Yosemite. Hacia fines
empresa, Larry Proctor, solicitó y obtuvo una del año 2000 se suspendió el programa
patente exclusiva (US #5984079) sobre la UNAM-Diversa bajo la base de que la UNAM
semilla llamada Enola y procedió a demandar no poseía la autoridad para permitir el acceso
a dos productores mexicanos, Productos Ver- a recursos genéticos y calificando el contrato
de Valle y Tutuli Produce, quienes vendían el como ilegal.
frijol en Estados Unidos. Proctor clamó que la
Para finalizar, no debe desconocerse el valio-
actividad comercial de estas dos compañías
so aporte del profesor Germán Velásquez,7
mexicanas eran una violación a su patente.
quien en su estudio sobre el impacto de la
• Pozol es una bebida tradicional derivada del mundialización en el acceso a los medicamen-
maíz fermentado elaborado por los mayas tos “Libro rojo” establece que los países del
durante generaciones; es importante tanto por tercer mundo pueden defender sus sistemas
su valor nutricional como por sus propieda- de salud y garantizar el acceso a los medica-
des medicinales como preventivo para cier- mentos esenciales. Así mismo expuso que los
tos males intestinales. En 1999 la corporación ADPIC permiten que en los casos graves de
holandesa Quest International y la Universidad salud pública los países puedan recurrir a la
de Minnesota obtuvieron una patente (US fabricación al menor costo a través de las li-
#5919695) y clamaron, en un ejemplo clási- cencias obligatorias. Finalmente advierte que
co de reducción genética, no haber patentado los países pueden importar medicamentos
el pozol, sino haber aislado un microorganis- más baratos de otros Estados, así sean pro-
mo (o componente activo) que contiene la
ducidos por el laboratorio en el mismo país a
bebida. Presentando este argumento se ne-
través de importaciones paralelas sin necesi-
garon en reconocer el conocimiento tradicio-
dad de indemnizar a los afectados.
nal indígena utilizado en la elaboración del
pozol.
• En 1998 la corporación Diversa (San Diego),
Bibliografía
firmó un contrato con la Universidad Nacional
Autónoma de México UNAM, otorgando a Di- 1. Decisión Comunitaria 391 de la Comunidad Andina
de Naciones
versa acceso a los parques naturales de Méxi-
2. CASTRO DE ARENA, Rosa Herminia. “La revolución
co con los propósitos de bioprospección. Este genética y sus implicaciones ético jurídicas”. Edicio-
nes Doctrina y Ley. Santafé de Bogotá. 1998.
acceso fue otorgado a cambio de equipa-
3. Convención 169 de la Organización Internacional del
miento para investigación, $50 dólares por Trabajo.
muestra obtenida y regalías del 0.5% y del 0.3% 4. Constitución Política de Colombia.
de la venta resultante de productos farmacéu- 5. Sentencia C519 de 1994 de la Corte Constitucional
de Colombia
ticos y químicos que serán empleados para 6. Concepto de la Sala de Consulta del Servicio Civil
la reinversión en zonas de extracción. En con- del Consejo de Estado de Colombia.

7. Investigador colombiano, asesoró al gobierno de Nelson Mandela en la redacción de la ley de medicamentos genéricos contra el
SIDA; esta norma permitió que el país fabricara e importara medicamentos contra el SIDA. 127
128

S-ar putea să vă placă și