Sunteți pe pagina 1din 12

Complutum, 6, 1995: 281-291

ANÁLISIS DE INDICADORES BIOQUÍMICOS


DEL CONTENIDO DE RECIPIENTES ARQUEOLÓGICOS

Maria Luisa Cañabate Guerrero, Alberto Sánchez Vizcaíno *

Rnsuwrzv.- El análisis de indicadores bioquímicos de contenidos en recipientes cerámicos tiene la capee;-


dad de suministrar una iqiormación de alto interés para la investigación arqueológica. Dentro de esos indica-
dores los lípidos han sido los más extensamente empleados. No obstante, para conocer con más profundidad
sus ventajas es necesario aproximarse tanto a las investigaciones que han aportado resultados más interesan-
¡es, como a las características propias de dichos indicadores. Finalmente, y mediante el empleo de la Croma-
¡ografla de Gases-Espectrometria de Masas, se presentan los resultados del análisis de un recipiente cerámico
procedente del yacimiento romano de Puente La Olla, Manos (Jaén,).

ARsm4cr TIte analysis of biochemical markers of contents in ceramic vessels provides highly relevant in-
-

formation for archaeological researciz. Among such markers, lipids are the most commonly used However, an
approach to their advantages necessarily requires rin appraisal both of tIte mosí suggestive research based on
these organie remains and of tIte properties of lipids as biochemical markers. Finall~v. ¡líe results obtained
through Gas Chromatography-Mass Spectrometryfrom a vessel recoveredfrom ¡he Roman site of Puente La
Olla, Martos (Jaén). are atw presented and interpreted.

P.4nn~sCs~re: Arqueometria, Lípidos. Cerámica, Cromatografia de Gases. Espectrometria de Masas.

Ksr Wopns: Archaeometrv, Lipids, Ceramics. Gas Chromatographv. Mass Spectrometty.

1. INTRODUCCIÓN cargadas de precisar esos sectores de la investigación


(Palinologia, Carpología, etc.).
El análisis de indicadores bioquímicos de Otra área de investigación que resultaria
contenidos en recipientes cerámicos debe ser entendi- muy beneficiada sería de la de los estudios arqueoló-
do como una línea más de investigación dentro de los gicos microespaciales. Es sabido que uno de los obje-
estudios de caracterización de cerámicas. Sin embar- tivos de la excavación microespacial es la delimita-
go, hasta el momento, bien por su desconocimiento, ción y definición de áreas de actividad, entendiendo
bien por su complejidad, no ha encontrado los cauces por ésta la unidad espacial mínima del registro ar-
de desarrollado adecuados en el mareo de la investi- queológico en la que las acciones sociales y económi-
gación arqueológica en España. Este hecho resulta cas quedan impresas (Manzanilla 1990). Para cum-
un tanto extraño por cuanto caracterizar una cerámi- plir ese objetivo el arqueólogo normalmente parte del
ca no debe consistir sólo en su definición tipológica, estudio de la disposición espacial de los artefactos,
o en el estudio fisico-quimico de las pastas para de- ecofactos y estructuras, no siendo consciente muchas
terminar los procesos de fabricación y la procedencia veces de que existen restos no tangibles en el registro
de las arcillas. arqueológico con capacidad de aportar información.
La caracterización cerámica debería incluir Nos referimos en este caso a los indicadores quími-
este tipo de análisis para lograr un acercamiento lo cos y bioquímicos presentes tanto en los pavimentos
más exacto posible al contenido y función de los reci- de las unidades y estructuras de habitación, como en
pientes. De esta manera podrian abrirse nuevas vías el interior de los recipientes cerámicos. En ambos ca-
de estudio en el campo de las dietas o la subsistencia, sos la distribución de los indicadores, su presencia en
de gran ayuda para las disciplinas ya existentes en- determinadas concentraciones o su ausencia, puede

* Departamento de Territorio y Patrimonio Histórico. Area de Prehistoria. Universidad de Jaén. Paraje Las Lagunillas
qn. 23071 Jaén.
282 MARIA LUISA CAÑAI3ATE GUERRERO Y ALBERTO SÁNCHEZ VIZCAINO

ser determinante a la hora de establecer una clasifi- chas ~‘ecesen la determinación de las propiedades fi-
cación funcional de espacios. sicas de esos residuos usando pruebas simples como
Partiendo de estas consideraciones previas, el punto de fusión o medidas de solubilidad. El pro-
las Áreas de Prehistoria y Arqueología dcl Departa- ceso hacia una identificación precisa de los residuos
mento de Territorio y Patriníonio Histórico de la estuvo mediatizado por la inherente complejidad de
Universidad de Jaén, han iniciado el estudio de indi- las composiciones de las sustancias sometidas a in-
cadores bioquímicos de contenidos en recipientes ce- vestigación, y complicada aun más por los efectos del
ránjicos como parte de una serie dc proyectos de in- paso del tiempo y los procesos degradativos.
vestigación de mayor rango. Entre los indicadores A pesar de las limitaciones anteriores, las
que están siendo objeto de estudio deben destacarse primeras investigaciones consiguieron resultados
principalmente los lípidos, cuya presencia habitual bastante interesantes como los aportados por Von
en diversos alimentos y sus caracteristicas químicas, Stokar (Evershed 1993). quien logró determinar la
los hacen idóneos para la determinación de conteni- presencia de aceite de linaza cíl un recipiente vikingo
dos. y advirtió sobre la iínportancia de examinar los restos
En este trabajo presentamos los primeros re- cerámicos y trabajar sobre ellos antes de limpiarlos
sultados obtenidos sobre un recipiente procedente del definitivamente.
yacimiento romano de Puente La Olla, en Martos. El avance tecnológico experimentado a par-
Jaén. Además de concretar el contenido del recipien- tir de los años 60 en el campo de la Cromatografia dc
te, la investigación presenta otros importantes objeti- Gases propició que a partir de 1976 se publicaran los
vos: dar a conocer los trabajos que se han realizado trabajos de Condamin y Formentí (1976) centrados
sobre material arqueológico y que han tenido como en la investigación de ácidos grasos en cerámicas ar-
protagonista a los lípidos, el estudio de sus caracte- qucológicas. En concreto, trataban de determinar la
rísticas, y el desarrollo de la aplicación de la Croma- presencia de aceite de oliva en un ánfora romana, y
tografia de Gases-Espectrometria de Masas. ello lo consiguieron a partir de la identificación de
Los lípidos no son los únicos indicadores los ésteres metílicos de los ácidos grasos más caracte-
bioquímicos empleados en Arqueología. Aunque la rísticos de dicho aceite.
mayoría de las investigaciones sobre contenidos par- En concreto, para llevar a cabo la investiga-
ten de ellos, debe hacerse notar que existen otros in- ción trabajaron sobre cuatro posibilidades: aceite de
dicadores que son capaces de caracterizar otros tipos oliva como referencia, fragmento de un ánfora que
de contenidos. Entre ellos debe destacarse el oxalato por su forma y origen podría haber contenido aceite,
de calcio como indicador de la cerveza (Michel et al. fragmentos de una lucerna galo-romana y fragmentos
1993). y principalmente el ácido tartárico como com- de un ánfora recuperada de un horno y que no debió
puesto característico del vino y que ya ha sido em- contener sustancia alguna.
pleado con éxito en trabajos arqueológicos (Conda- En el caso del ánfora con posible contenido
mm y Formenti 1976, 1978; Condamin el al. 1976; dc aceite sc estudió su parte interna y externa, así co-
Badíer et al. 1990; N4ichel eta?. 1993). En cl campo mo la tierra que estuvo en contacto con ella. Los re-
de los alimentos sólidos podemos citar la miel, cuya sultados pusieron de manifiesto la presencia abun-
presencia ha sido puesta de manifiesto a través de la dante de ácidos grasos característicos del aceite de
identificación de cera de abeja y de glucosa (Need- oliva en la pared interna, mientras que en la pared
ham y Evans 1987; Evershed 1993). Una novedosa externa y en la tierra su existencia era mínima. El es-
investigación en el campo de los contenidos no ali- tudio de la lucerna galo-romana se llevó a cabo para
menticios fue la realizada por Gerhardt el al. (¡990). contrastar la efectividad de la metodología empleada
encaminada a la verificación de aceites y esencias puesto que se conocía el uso dado a ese recipiente.
perfumadas en pequeños recipientes a partir de la de- Finalmente, el áíifora procedente del horno aportó un
tección de constituyentes característicos como son los gradiente de concentración de ácidos grasos inverso
terpenos y sus derivados. al obtenido en la otra ánfora, es dccir. casi ausencia
total de ácidos grasos en su interior como cabría es-
perarse en un recipiente que no fue usado.
2. INVESTIGACIONES SOBRE EL En 1978 son presentados por Rottlánder
ANÁLISIS DE LÍPIDOS (Rottlitnder y Schlichherle 1978) los primeros resul-
tados obtenidos en la Universidad de Tílbingen en
El inicio de las investigaciones de residuos análisis de contenidos. En ellos, además del análisis
orgánicos estuvo inevitablemente marcado por la au- de recipientes arqueológicos, se incluyen análisis
sencia de técnicas analíticas sensibles, y se basó mu- químicos de los sedimentos que los rodean, de resi-
ANÁLISIS DE INDICADORES BIOQU MICOS DEL CONTENIDO DE RECIPIENTES ARQIJEOLGICOS 283

duos de comida actuales, y análisis óptico de restos medio en la citada región. En un porcentaje impor-
vegetales (semillas) mediante microscopio. Así mis- tante de fragmentos cerámicos se descubrió un resi-
mo se experimentó con la temperatura de descompo- duo marrón que pasó a ser analizado por Cromato-
sición de sustancias comunes en alimentos como el grafia de Gases estudiando los ésteres metílicos de
almidón, la celulosa y las grasas, con el fin de esta- los ácidos grasos. Lo más interesante dc los resulta-
blecer sus variaciones con los cambios de temperatu- dos aportados fue la identificación del ácido nervóni-
ra. co cuya presencia suponía un posible contenido dc
La investigación se dividió entre cuatro ya- origen marino en los recipientes. Por otra parte, la
cimientos pertenecientes al Neolítico Final de Cen- alta recuperación de huesos de foca en el yacimiento
trocuropa (50004000 a.C.). y dos yacimientos aun- les llevó a trabajar experimentalmente con muestras
flacienses alemanes (32000 a.C.), siendo uno de ellos de tejidos de foca con el objetivo de conseguir repro-
una cueva. En ambos casos las técnicas utilizadas ducir el mismo tipo de residuo en un recipiente mo-
fueron la Cromatografia de Gases (a partir de los és- derno mediante su calentamiento. Los datos obteni-
teres metílicos de los ácidos grasos) y la Cromatogra- dos en la composición de ácidos grasos fueron muy
fia en Capa Fina. En los fragmentos de recipientes coincidentes con aquellos registrados para la muestra
correspondientes al grupo de los cuatro yacimientos arqueológica. La conclusión que se desprendió de to-
neolíticos fueron identificados restos de grasa de le- do ello fue que carne de animal marino, posiblemen-
che, grasa de buey y aceite de semillas diversas. te foca, estuvo siendo hervida en recipientes ceram¡-
En el caso de los yacimientos auriflacienses, cos.
en el primero de ellos se detectó ácido oleico en un Siguiendo la metodología de Condamin y
hogar junto a restos de huesos quemados. La inter- Fonnenti. Lecarpentier el al. (1987) estudiaron el
pretación propuesta por los investigadores apuntaba a contenido graso de una ánfora Dressel 20 de la villa
la posibilidad de una correspondencia entre ese ácido Galo-Romana de Grand Loou, Roquebrussanne, Var
y el aceite desprendido de los huesos quemados (pro- (siglo II a.C.),junto con dos fragmentos de cerámica
bablemente renos). En el yacimiento en cueva se re- que probablemente sirvieron para la cocción de ali-
gistró un alto porcentaje de ácido cerótico, presente mentos. Además, como elementos de comparación
en las glándulas sebáceas de todos los mamíferos con realizaron también análisis de aceite de oliva y de
pelo, junto con el lanosterol y alcohol cerilico. A par- manteca de cerdo, realizándose todos los análisis por
tir de aquí se propuso, no sin reservas, que tales pa- Cromatografia de Gases empleando los ésteres metí-
trones correspondían a las pieles que debieron cubrir licos de los ácidos grasos. Teniendo en cuenta el me-
el suelo de la cueva. tabolismo de las bacterias y los procesos de degrada-
Junto al empleo de Cromatografia de Capa ción química y bioquímica a los que son sometidos
Fina, Rothschild-Boros (1981) introdujo la aplica- los ácidos grasos por la cocción, llegaron a concluir
ción de otra técnica al trabajo arqueológico: la Cro- que el ánfora contuvo aceite de oliva, y que los frag-
matografia Líquida de Alta Resolución (I-IPLC). Tra- mentos cerámicos indicaban la utilización del aceite
bajando con ambas técnicas estudió un grupo de án- de oliva en la preparación y cocción de alimentos,
foras del siglo V de Sehola Praeconum que dividió en Retomando la investigación iniciada en
cuatro tipos: jarras micáceas de Anatolia, ánforas de 1978 por Róttlander pueden destacarse sus dos traba-
Gaza, ánforas norteafricanas, y ánforas no identifi- jos publicados en 1990. El primero de ellos referido
cadas aunque también procedentes del Mediterráneo al estudio del contenido de un recipiente fabricado en
Oriental. De todos los tipos sólo el primero aportó re- mármol (Róttlander 1990a), y el segundo con un ma-
sultados concluyentes ya que la presencia de triacil- yor carácter experimental y destinado a poner de ma-
gliceroles, ácidos grasos libres y esteroles sugirió el nifiesto la efectividad del análisis de ácidos grasos
contenido de una sustancia lipídica, que el análisis (Róttlander 1 990b).
por HPLC concretó en aceite de oliva. Estas eviden- El recipiente de mármol pcrtenece al Bronce
cias, junto a la forma y tamaño reducidos del reci- Antiguo y procede de las Islas Cicladas (3200-2700
piente llevaron a esta investigadora a proponer un a.C.). Como en otros casos, las técnicas utilizadas
ungúento como contenido del mismo. fueron la Cromatografia de Capa Fina y la Cromato-
En 1985 Patrick et al. publicaron los resul- grafia de Gases mediante la conversión de los trigli-
tados correspondientes al yacimiento costero de Kas- céridos en los metil ésteres derivados de los ácidos
teelberg, Península de Vredenburg, en la región del grasos. Los resultados indicaron que el perfil dc los
Suroeste del Cabo. Suráfríca. Sus investigaciones se ácidos grasos del recipiente se correspondía con el de
enmarcaron en un proyecto más amplio, encaminado las gramincas, derívándose de ello que la cerveza po-
a la comprensión de las estrategias de explotación del dna haber sido el contenido del mismo. Por otra par-
284 MARíA LUISA CAÑABATE GUERRERO Y ALBERTO SÁNCHEZ VIZCAÍNO

te. la presencia de colesterol fue atribuida a una con- lípidos absorbidos por el recipiente durante su uso.
Por otra parte, la identificación en el extrac-
taminación posterior al abandono del recipiente,
El segundo trabajo es una defensa a ultranza to lipídico total de compuestos alquilicos de cadena
larga (nonacosano y derivados oxigenados) caracte-
de los ácidos grasos como indicadores de contenidos
frente a otros como los carbohidratos y las proteínas. rísticos de las ceras epicuticulares de las hojas de
El razonamiento que soporta esta posición de privile- plantas superiores como las pertenecientes al género
gio de los ácidos grasos es su estabilidad a lo largo Brassica oleracea, pusieron de manifiesto el consu-
del tiempo y su resistencia al calor (Hasta 4000C en mo de este tipo de vegetales (Evershed et al 1991),
atmósfera de helio). Asimismo, como resultado de su principalmente repollo y nabo, en época medieval en
trabajo se hace referencia a la elaboración de una ba- Gran Bretaña.
se de datos en la que se incluyen cromatogramas de Otro campo de actuación interesante dentro
referencia de lípidos de alimentos antiguos y actua- del análisis de lípidos, por las implicaciones en el ni-
les, así como de aquellos transformados por el proce- vel interpretativo, es el de los procesos de degrada-
so de preparación. ción de los ácidos grasos. De nuevo, Evershed el al?
Aunque ya desde 1985 el Dr. R. Evershed y (1992) afrontaron este problema con una relación y
sus colaboradores venían trabajando en el análisis de explicación de los efectos de dichos procesos, a saber,
residuos orgánicos, no será hasta 1990 cuando él y hidrólisis, oxidación y degradación microbiológica.
otros investigadores como 1. Goad y C. Heron, afron- La variación dc la distribución de los lípidos
ten la investigación de esos residuos en recipientes en diferentes partes de recipientes de distinta tipolo-
cerámicos arqueológicos. gía ha sido también tema de estudio por el citado
La primera aportación de sus investigacio- grupo de investigadores (Charters eta?. 1993). Man-
nes consistió en definir una nueva metodología de teniendo la metodología y la zona de estudio se anali-
trabajo a partir del análisis de muestras de cerámicas zaron 62 recipientes (reconstruidos) tomando las
altomedievales prodecentes de un conjunto de yaci- muestras en la base, cuerno y borde, Se pudieron ob-
mientos situados en el Valle del Nene, Northamp- servar variaciones significativas en el contenido de
tonshire, Reino Unido (Evershed et al. 1990). La in- lípidos dentro de cada recipiente según la zona de
novación consistió no sólo en la mejora del instru- muestreo, lo cual es valorado como un elemento a
mental utilizado en la Cromatografia de Gases y en considerar en la técnica de muestreo actual, Asimis-
la Cromatograifia de Gases-Espectrometria de Masas, mo esas variaciones pueden ser tenidas en cuenta co-
sino también en el proceso de tratamiento y extrac- mo un criterio para la clasificación de los recipientes
ción de la muestra. En lugar de trabajar con los éste- en función de su uso.
res metílicos de los ácidos grasos se 0pta por sus
derivados silanizados, procedimiento éste que ha re-
sultado ser más satisfactorio tanto para el proceso de 3. LOS LiPIDOS COMO
análisis, como para la interpretación de los resulta- INDICADORES BIOQUÍMICOS
dos al obtenerse más información. No obstante, para
que ésto sea posible es necesario contar con un inyec- Del grupo de indicadores bioquímicos sus-
tor On-column en el cromatógrafo de gases, lo cual ceptibles de apodar información arqueológica, elegi-
no es lo común en dichos aparatos. mos para nuestro estudio a los lípidos. El conoci-
Siguiendo en esa línea innovadora, el mis- miento de sus características y propiedades químicas,
mo grupo de trabajo afrontó el problema de los efec- así como de los procesos degradativos que les pueden
tos de la migración de los lípidos del suelo y su in- afectar, constituye un paso previo a cualquier investi-
fluencia sobre los residuos de los recipientes entena- gación que tenga a los lípidos como protagonistas.
dos (Heron et al. 1991). Se trata sin duda de una in- Bajo el nombre genérico de lípidos se englo-
teresante investigación porque hasta el momento el ba un conjunto dc moléculas presentes en las grasas
problema de los efectos postdeposicionales había sido tanto de origen animal como vegetal, y que constitu-
tratado en poca profundidad. Con la metodología de- ven una parte muy importante de la dieta humana. Se
finida anteriormente y sobre recipientes de la misma trata de una mezcla compleja de ácidos grasos carbo-
zona se abordó el análisis tanto de cerámicas como xílicos. esteroles, acilgliceroles, etc., que tienen como
de los sedimentos a ellos asociados. Los resultados características principales el ser insolubles en agua,
mostraron que en la mayoría de los casos se podía es- lo que favorece su permanencia en el lugar donde
tablecer una diferencia cualitativa y cuantitativa en- fueron depositados. y ser solubles en disolventes or-
tre los lípidos del suelo (procedentes de la putrefac- gánicos como éter, cloroformo, etc. Todos los lípidos
ción de las plantas y de los microorganismos), y los están constituidos mayoritariamente por carbono, hi-
ANÁLISIS DE INDICADORES BIOQUIMICOS DEL CONTENIDO DE RECIPIENTES ARQUEOLÓGICOS 285

drógeno y oxigeno, y en menor medida por fósforo y colesterol es el esterol más abundante en los anima-
nitrógeno (Aurand eta?. 1987). les, está presente en las células y tiene muchas e im-
portantes funciones biológicas. Por el contrario, el
3.1. Composición de los lípidos campesterol y el sitosterol, son los esteroles más
abundantes en las plantas. La detección de algún es-
Los lípidos de mayor interés en el campo de terol, algo que resulta relativamente dificil dada su
la investigación arqueológica son: baja proporción, nos puede orientar acerca del tipo de
grasa asociada con cl contenido del fragmento.
3.1.1. Acidosgrasos
La mayoría son ácidos grasos monocarboxi- 3.2. Conservación del material lipídico
licos de cadena lineal, distinguiéndose unos de otros
en la longitud de la cadena y en el grado de insatura- El grado de conservación de los lípidos pue-
ción, es decir, en la presencia y número de dobles en- de depender en gran medida de tres factores:
laces. La mayoría de los ácidos grasos presentes en la
naturaleza poseen un número par de átomos de car- 3.2.1. Las condiciones de enterramiento. Condicio-
bono en su estructura, oscilando el número entre 4 y nes homogéneas a lo largo del período de enterra-
30, aunque ácidos grasos con más de 20 átomos de miento favorecen la conservación. Por el contrario,
carbono no son muy frecuentes (Fig. 1). acusados y continuos cambios medioambientales tie-
Los ácidos grasos más comúnmente encon- nen una incidencia negativa sobre ella.
trados en los fragmentos cerámicos son:
3.2.2. El material cerámico. Debido a las característi-
- Ácidos grasos saturados
cas de la matriz arcillosa de las cerámicas, los lípidos
C14:O Ácido miristico CH,.<CH2).2-COOH quedan atrapados en ella, permaneciendo protegidos
C16:O Ácido palmítico
CIS:O Ácido esteárico CH,.<CH2)~-COOH de agresiones degradativas externas (Heron et al.
C20:O Acido araquidico CH3-<CH2)..COOH 1991).
CH,-<CH2),..COOH
- Ácidos grasos insaturados 3.2.3. Carbonización. Cuando los tejidos orgánicos
C16: 1 Ácido palnaitoleico CH~-(CH2)4-CH=CH-(CH2),-COOH se carbonizan a baja temperatura, la actividad de
C18:1 Ácido oleico CH,-(CH.).-CH=CH-(CW),-COOH cualquier microorganismo presente en esos tejidos
disminuye y las superficies externas se fusionan pro-
3.1.2. Acilgliceroles porcionando una barrera carbonizada contra el ata-
Son componentes abundantes de grasas y que microbiológico, ello es debido a que los microor-
aceites tanto de origen vegetal como animal, y se for- ganismos son incapaces de digerir el carbén. (Evans
man por una reacción de esterificación entre el glice- 1993: Needhan y Evans 1987; Evershed 1993). De
rol y los ácidos grasos. Existen varias clases en flm- una manera más simple se podría decir que el efecto
ción del tipo y número de ácidos grasos que conten- final es la formación de una especie de vesículas en
gan en su estructura y se denominan generalmente: las que el material lipídico permanece intacto hasta
monoacilgliceroles, díacilgliceroles y tríacilgliceroles el momento en que se rompen para su análisis.
(según que el glicerol esté esterificado con uno, dos,
o tres ácidos grasos). 33. Procesos degradativos y de contaminación

3.1.3. Esteroles Como se ha mostrado antes, los lípidos pre-


Los esteroles son alcoholes de alto peso mo- sentan unas características que favorecen su elección
lecular presentes minoritariamente en la fracción in- como indicadores bioquímicos, no obstante, hay que
saponificable de las grasas. Son insolubles en agua y tener en cuenta un conjunto de procesos degradativos
solubles en los disolventes comunes de las grasas. El y/o de contaminación que pueden tener lugar en la
matriz de enterramiento.

CH3 -CH2 -(CH2)0 -CH2 -COOH 3.3.1. En condiciones normales no se suele producir

cadena lineal de carbonos


LiGrupo
Carboxalo
migración entre el material cerámico y la tierra con
la que está en contacto (Heron et al. 1991). No obs-
tante, sería conveniente siempre que sea posible, y
como medida de control, analizarla también.

Figura 1.- Estructura química general de un ácido graso. 3.3.2. Reutilización del recipiente. Es ésta una posi-
286 MARIA LUISA CAÑABATE GUERRERO Y ALBERTO SÁNCHEZ VIZCAiNO

bilidad que debe ser tenida en cuenta y que es dificil — Degradación microbiológica. La materia
de detectar. No obstante, la presencia simultánea de orgánica enterrada, a menos que esté protegida de al-
compuestos exclusivos de ciertas especies animales o guna forma, puede sufrir procesos degradativos por
vegetales podria indicar la reutilización del recipien- microorganismos activos en la matriz de enterra-
te. miento. La población de microorganismos, en condi-
ciones acróbicas, estaria influida por las condiciones
3.3.3. Cambios químicos producidos por procesos de- físicas del enterramiento, p.ej.. clima, grado de airea-
gradativos en la materia orgánica. El conocimiento ción, humedad y pH.
de los procesos degradativos que pueden tener lugar — Contaminación lipídica post-excavación.
en las sustancias orgánicas es de gran importancia a Un tipo de contaminación, que no tiene un origen
la hora de interpretar los datos que se desprenden de biológico. surge del almacenamiento dc las ínuestras
los análisis químicos de los restos arqueológicos. Los en plásticos. Las sustancias contaminantes proceden-
principales procesos degradativos son los siguientes tes de este tipo de almacenamiento son los ptalatos.
(Evershed el al. 1992): fácilmente identificables por Cromatografía de Ga-
ses-Espectrometría de Masas. Otro modo muy co-
— Hidrólisis. Este proceso, provocado por rriente de contaminación proviene de los lípidos de
la humedad, temperatura, enzimas y diversos micro- la piel introducidos a través de la manipulación de
organismos. produce la ruptura del enlace éster, dan- los artefactos, de ahí la importancia de su correcto al-
do lugar a La liberación de los ácidos grasos que for- macenaje y transporte hasta el laboratorio.
man parte de los acilgliceroles. A efectos de inter-
pretación, la hidrólisis produciría una alteración de
las proporciones relativas de ácidos grasos y acilgli- 4. ANÁLISIS DE UN RECIPIENTE
ceroles. CERAMICO POR CROMATOGRA-
HA DE GASES-ESPECTROME-
— Oxidación. Ciertos grupos funcionales TRÍA DE MASAS
presentes en los lípidos son particularmente sensibles
a la oxidación. Entre estos grupos encontramos prin- En 1993 se llevó a cabo una excavación dc
cipalmente los dobles enlaces, y en consecuencia, los urgencia en el yacimiento romano de Puente La Olla
ácidos grasos insaturados sufrirán en mayor exten- en Martos, Jaén (siglos 1-N/). En el transcurso dc la
sión este proceso (Evershed el al. 1992), de ahí que intervención sc recuperó un fondo de cerámica co-
resulte dificil encontrar ácidos grasos con un número mún de clasificación tipológica incierta pero con ca-
de insaturaciones superior a una. Por tanto serian los rácter de contenedor de uso doméstico (mitad del
ácidos grasos con una insaturación. como el ácido siglo II) (Foto 1). El espacio en el que apareció pare-
oleico (C18:1). los que se podrían detectar en recI- ce corresponder a un exterior no cubierto que estaría
pientes cerámicos. Este hecho es importante porque funcionando como patio situado eíitrc las tres zonas
la variación en la concentración de este ácido proba- principales de la villa: edificio residencial, complejo
blemente pueda reflejar el tipo de alimento deposita- termal y áreas de trabajo. Los motivos que conduje-
do en cl recipiente así como el nivel de conservación ron a su selección fueron:
y/o degradación experimentado por el material lipí- — Al ser el fragmento que se analiza el fon-
dico. do de un recipiente. existe una mayor seguridad de
contacto continuo con el líquido o sustancia que en
su momento pudiera contener,
— Por otra parte. siendo un recipiente de
cerámica común es de suponer su utilización en fin-
ciones domésticas y. por tanto, ello incidiría aún más
en la posibilidad de identificar algún contenido.

~fl 4.1. Condiciones experimentales

Tras limpiar el fragmento de la tierra adhe-


<
¿~
<
~Lr.

1
- rida a él, se recuperan mediante su raspado 2 gramos
dc ¡nuestra de su interior. A partir de aquí la muestra
~IOZ9 ¿ debe ser sometida a un doble proceso antes de su in-
veeción en el cromatógrafo: extracción ;‘ derivatiza-
lolograilia 1 clon.
ANÁLISIS DE INDICADORES BIOQUÍMICOS DEL CONTENIDO DE RECIPIENTES ARQUEOLÓGICOS 287

CtI:I
eles

4. BES

e 3-BES
a
cu
-u
£
~ 2-
.8
c14:I
DIOCIIL
NAIJIO
1.

5 iB 15 25 se
Time Cmlnfl

Figura 2.- Croniatograma lotal dc Iones del fraguiento cerámico.

4.1.3. Cromatografia de Gases-Espectrometría de


4.1.1. Extracción
Masas
Los 2 gr. de muestra se extraen dos veces
Para el análisis se ha empleado un cromató-
con una mezcla de cloroformo:metanol 2:1 (y/y) du- grafo Hewlett-Packard 5890A acoplado mediante una
rante 30 minutos con ultrasonidos. A continuación se
interfase a un espectrómetro de masas. La muestra se
centrífuga la muestra a 3500 r.p.m., y el líquido so-
introduce a través de un inyector Split-Splitless a una
brenadante se decanta en un matraz de fondo redon-
temperatura de 280 0C en una columna capilar de
do y se evapora a presión reducida en un rotavapor
medí silicona de 25 cm x 0.2 mm de diámetro inter-
(Evershed et aL 1990).
no. Se utiliza helio como gas portador. El programa
de temperatura empleado comienza a 80 0C y llega
4.1.2. Derivatización
hasta 320 0C a razón de 10 0C por minuto, mante-
La derivatización consiste en transformar
niéndose al final el horno a 320 0C durante 10 minu-
los ácidos grasos presentes en la muestra en sus co-
tos.
rrespondientes ésteres metílicos para conseguir com-
puestos menos polares y térmicamente estables ya
4.2. Estudio e interpretación de los resultados
que. de no ser así, no sería posible su análisis por
Cromatografia de Gases.
El cromatograma obtenido (Fig. 2) aporta
La transformación se realiza de la siguiente
una interesante información acerca del contenido del
manera (Evershed el al. 1990): el material extraído
recipiente. La identidad de cada uno de los picos que
se trata durante una hora a una temperatura de 70 0C
con 1.5 ml de una mezcla al 5% (y/y) de ácido sulfú- aparecen en él se determina a través del estudio de
rico concentrado en metanol. A continuación se dilu- sus espectros de masas. Los espectros de masas nos
ye con 5 ml de agua destilada y se extrae tres veces informan del tipo de iones fragmentados en los que
con 2 ml de éter etílico en cada extracción, obtenién- se ha dividido cada una de las moléculas registradas
dose los ésteres metílicos de los ácidos grasos presen- en el cromatograma. Cada molécula se fragmenta de
tes en la muestra. Tras la evaporación del éter etílico un modo característico en función de que el tipo de
bajo una corriente de nitrógeno, la muestra se disuel- enlaces que haya en su estructura scan más o menos
ve en 0.5 ml de hexano y ya queda lista para la in- débiles o que se encuentren cercanos a determinados
vección de l ~tI en el cromatógrafo. gmpos funcionales; o bien según ciertas reglas com-
288 MARIA LUISA CANABATE GUERRERO Y ALBERTO SÁNCHEZ VIZCAÍNO

CI5.ULU su1.~>
10001 A
~oe• 74
e muí
loe,
43
~ fluí
a
¡ sun,
:
3,,.
2005
ini 11k 1. L ‘ml

L.~
143

.1
171 ‘u.
~
“u

1~e 2 Be 250
— 50 1 Él! Kass/Charr

Figura 3.- Espectros dc Masa de los ácidos grasos saturados. A: .Xcido Palmítico. B: Ácido Esleárico,

plejas que se han formulado a partir de estudios con dos obtenidos es la elevada proporción de ácidos
compuestos modelo. En definitiva, cada espectro de grasos insaturados presentes en la muestra (Cl6:l y
masas se puede considerar como la huella dactilar de C18:1) (Tabla 1). Esto nos da una idea de las buenas
cada estructura. condiciones de conservación a las que ha estado so-
En nuestro caso, dado que hemos transfor- metido el fragmento cerámico ya que, como se ha co-
mado los ácidos grasos en sus metil ésteres derivados mentado en un apartado anterior, los ácidos grasos
para poder analizarlos por Cromatografía de Gases,
sc puede observar en todos los espectros de masas ÁCIDOS GRASOS ]‘ORCIINí’AJE
una señal a núz=74, correspondiente al reagrupa- C14:t) 3.77%
miento de MacLafferty propio de los ésteres metílicos Cl5:0 1.88%
(Christic 1989). En la mayoría de ellos también está
presente el ión Molecular M~ que es el que proviene C16:I 4.90%
directamente de la molécula padre y nos da idea del C16:0 13.98%
peso molecular de la misma, aunque en otros casos C17:0 1,70%
este pico tiene una abundancia tan escasa que no lle- CIS:l 16.39%
ga a registrarse. En las figuras 3 y 4 se representan
los espectros de masas de los ácidos grasos más inte- CIS:0 8.67%
resantes y representativos para este estudio,
Lo que primero se desprende de los resulta- Tabla 1.- Principales ácidos grasos detcctados en el extracto.
ANÁLISIS DE INNCADORES BIOQUTIMICOS DEL CONTENIDO DE RECIPIENTES ARQUFOLOGICOS 289

<17,371
11111-
u u
sIn>
B
‘III.
es..
‘u..
~
a 6111
1 511•
a

1j
Sil.,
2 IIi~
a•4 BBS
111*
j
u-—.,
1
211
5-u lii ji”. 2S1
Has s~Charg.

Figura 4.- Espectros de Masas de los ácidos grasos con una ¡osaluracién. A: Ácido Palrnitoleieo, 13: Ácido Oleico.

con dobles enlaces serian los que sufrirían más fácil- tipo de grasa animal o vegetal debido a la detección
mente la oxidación, reduciéndose este proceso si las de ácidos grasos en su extracto. Un estudio más por-
condiciones de enterramiento han sido favorables. menorizado de esos ácidos nos ayudará a determinar
Para valorar el posible grado de contamina- con mas precisión el contenido del recipiente.
ción postdeposíeional de la muestra se ha realizado Lo primero que llama la atención es la alta
también un análisis por Cromatografia de Gases de proporción en la que se encuentra el ácido palmito-
la tierra que se encontraba en contacto con el recI- leico (CIÓ: 1). Este ácido normalmente no está pre-
piente, no detectándose ácidos grasos en su extracto. sente en los extractos de los fragmentos cerámicos y.
lo que confirma que no se ha producido migración de cuando lo está, se detecta en muy baja proporción.
componentes lipidicos entre el fragmento y la tierra Asimismo, no forma parte del conjunto de ácidos
en contacto. Por otra parte, se ha detectado en el cro- grasos característicos de las grasas vegetales siendo,
matograma un pico que, tras el estudio de su espectro por el contrario, propio de las de tipo animal (Gun-
de masa (caracterizado por una señal intensa a m/z= stone et al? 1986). Del estudio de las proporeiones de
149), nos lleva a determinar la presencia del dioctil los diferentes ácidos grasos en los distintos tipos de
ptalato procedente de las bolsas de plástico utilizadas grasas de origen animal, podríamos concluir que lo
en el almacenaje. que contuvo el recipiente fue algún tipo de producto
De una manera global, lo primero que se lácteo. Las clases de ácidos grasos encontrados en el
desprende del estudio del cromatograma es que este extracto coinciden con los que componen ese tipo de
recipiente se ha utilizado como contenedor de algún grasas animales. Aunque la constatación de este tipo
290 MARIA LUISA CAÑABATE GUERRERO Y ALBERIO SÁNCHEZ VIZCAINO

de contenido no ha sido muy corriente en materiales la tipología del material arqueológico deben ir enca-
arqueológicos, podemos citar como precedente la in- minados, en la medida de lo posible, a una Inejor de-
vestigación realizada por Rottlánder y Schlichtherle finición de lugares y áreas de actividad. Muchas acti-
(1978) sobre una serie de fragmentos cerámicos pro- vidades no pueden a veces ser precisadas simpleinen-
cedentes de un contexto neolítico alemán. te por la distribución espacial dcl material arqueoló-
gico, y menos aún cuando éste es escaso. Desde este
punto de vista la inclusión de los análisis químicos
5. CONSIDERACIONES FINALES permitiría salvar en parte esas limitaciones. De esta
manera, la identificación de aceite, vino, derivados
La presente investigación ha pretendido lácteos, asi coíno de otras grasas de tipo animal o ve-
mostrar una metodología general de trabajo para re- getal, junto con la disposición espacial de los reci-
cipientes arqueológicos. Se trataría en definitiva de pientes y otros materiales arqueológicos, puede facili-
una primera fase de investigación que debe ser cu- tar la interpretación funcional de determinados espa-
bierta de la manera más completa posible porque de cios y, a una mayor escala, contribuir a la explica-
nada serviría pasar a estudios más amplios si no se ción del mismo asentamiento.
cuenta con una base de partida sólida. A partir de Finalínente, otra vertiente que inicia esta in-
aquí las posibilidades de este tipo de investigación vestigación consiste en la valoración del producto
van más allá de la ínera identificación de un conteni- identificado en una doble dirección. En primer lugar
do. Si bien, a veces, la excepcionalidad del mismo la recurrencia del mismo en los grupos de recipientes
puede justificar por sí sola estudios aislados de reci- analizados estaría indicando la importancia de ese
pientes, lo ideal, y lo que desde aquí se defiende, es producto en la economía del asentamiento y. en se-
el inicio de análisis de grupos de fragmentos perfec- gundo lugar, se podría inferir su carácter alóctono o
lamente contextualizados y la integración de los re- autóctono, lo que podría ser de gran ayuda para las
sultados con aquellos otros obtenidos tanto en cera- investigaciones centradas en las rutas y redes de in-
mícas como sobre pavimentos y suelos de ocupación. tercambio.
Incidiendo en lo que ya se decía al principio
de este artículo, los análisis de indicadores bioquííni- .4gradecínuíentos
Deseamos expresar nuestro agradecimienlo a José Luis
cos de contenidos en recipientes cerámicos, los análi- Sanano x Joaquín Zafra, directores de la excavación arqueologíca de
sis químicos de pavimentos, la distribución espacial y urgencia del yacinsienlo de Puente La Olla.

BIBLIOGRAFIA
Aui~r~n, L.W.; WOODS. A.E.; WELLS. MR. (1987): antiques. Piglina, 1:143-158.
Food composilion and analysis. Wan Nostrand CONLAMIN. J.: Fo taí, F. (1978): Determination of
Reinhold, New York. the ancient content of amphorae. J?evue dAr-
BADLER. VR.; MCOOVERN’. PE.; Míc~L. R.H. (1990): chéométrie, 2: 43-57.
DrinIc and be merryL Infrared spectroscopv and CONDAMIN. i.; FORN~NTI. F.; METAIS. MO.: MICHEL. M.;
Ancient Near Eastern wine. MISC4 Research BLONO. P. (1976): The application of gas chroma-
Paper iii Selence andArchaeology 7: 25-36. tography to the tracing of oíl in ancient ampho-
CHARThRS. 5.; EVERSI.W.D, R P GOAD. L.J.; LEYDEN. A.;
, rae. ..4rchaeometrv; 18: 195-201.
BLINEPOEN. P.W.; DENmsxl, V. (1993): Quantifica- FVAI4S, J. (1993): ldentifring problematic remains of
tion and distribution of lipid in archaeological ce- aneient plant food: a comparison of [he role of
ramies: implications for sampling potsherds for chemical, histological and morphological criteria.
organie residuc analysis and the classification of WorldArchaeologv, 25(1): 94-121.
vessels use. Archaeomnetrv, 35(2): 211-223. EVERSHED. R.P. (1993): Biomolecular archaeologv
CHRISTIE, W.W. (1989): Gas Chromatograp/w ant? II- and lípids. World.4rchaeologv 25(l): 74-93.
pids. A practica? guie/e. Tite Oily Press. Scotland. EVERSHED. R.P.: HERON. C.; GOAD. J. (1990): Analysis
Cotinasm~. i.; FORMENTI, F. (1976): Recherche de tra- of organic residues of archaeological origin bv
ces d’huile d’olive et de vin dans les amphores high - temperature gas chromatograflw and gas
ANÁLISIS DE INDICADORES BIOQIflMJCOS DEL CONTENIDO DE RECIPIENTES ARQUEOLÓGICOS 291

chromatography-mass spectrometrv. A nalvst, lI5 de Antropología Americana, 20: 9-18.


(lO): 1339-1342. MICHEL. R.H.; MCGOVERN, PE.; BAULER VR. (1993):
EVERSIffD, R.P.; 1-InRON. C.; GoAn. J. (1991): Epi- The flrst ivine and beer. Chemical detection of
cuticular wax components preserved in potsherds ancient fermented beverages. Analytical Chemis-
as chemical indicators of leat’ vegetables in an- Dy, 65(8): 408-4t3.
cient diets. Antiquity, 65(248): 540-44. NEEDHAM, 5.; EVANS, J. (1987): Honey and dripping;
EVERSHED, R.P.; HERON, C.; CNARTERS, 5.; Go~\n, L.J. Neolithic food residues from Runnymede Bridge.
(1992): The survival of food residues: new me- Oxford .Journal of.4rchaeology, 6(1): 21-28.
thods of analysis, interpretation and application. PATRtCK,M.;DEKONINC,A.J.; Swrim, AB. (1985): Gas
Proceedins of the British Academv, 77: 187-208. liquid chromatographic analysis of fatty acids in
GERJ4ARDT. KO.; Su~tEs, 5.; Brns~s, W.R. (1990): Co- food residues from ceramies found in the south-
rinthian figure vases: Non-destructive extraction western Cape, South Mrica. .4rchaeomehy, 27
and gas chromatography-mass spectrometrv. (2): 3214.
APIScA Research Paper in Selence andArchaco- Rorusdutlz-EoRos, MC. (1981): The determination
logv, 7:41-50. of amphora contents. Archaeology ant? Italian
GuNSToN¶. F.D. HARDWOOD. J. L.; PAflLEY F.B. (eds.) Societv (Barker, G.; Hodges, R., eds.), British Ar-
(1986): The Lipid Handbook. Chapman and Hall, chaeological Report, International Series, 102,
London-New York. Oxford: 79-89.
HERON, A.; EVERSEED, P.; Go~xx J. (1991): Effects of ROTrLÁNDER, R.C.A. (1990a): lnvestigations into a
migration of soil lipids on organic residues asso- vessel of the Cyclades. Fresenius journal of .4na-
ciated with buried potsherds. .Journal ofArchaco- lytical Chemistry, 338: 138-139.
logical Science, 18: 641-659. ROTTLÁNLER, R.C.A. (1990b): Lipid analysis in the
LECARPENTIER, C.; MALATEZ.zE, E.; BF.RATQ, J.; CLAIR, P.; identification of vessel contents. MASCA Re-
T.Aa~ms. E. (1987): Analyse des matiéres grasses search Paper Science andArchaeology 7: 37-40.
extraites des céramiques antiques. Revue dA,’- ROTITANDER, R.C.A.; ScllLlcm-1mmc. H. (1978): Food
chéonzétrie, 11: 11-16. identification by analysis of samples from ar-
MANZANILLA, L. (1990): Niveles de análisis en el estu- chaeological sites. Archaeophisika, 10: 260-267.
dio de unidades habitacionales. Revista española

S-ar putea să vă placă și