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Foto: Archivo
Según el Minproíección Social, buena parte de los 1,2 billones que se desembolsaron en
2008 para pagar drogas y tratamientos obtenidos a través de fallos judiciales obedecen a
solicitudes exóticas. i „• t -
Para el Ministerio de la Protección es evidente que este es uno de los casos en los que
juez y accionante abusan de la tutela, en detrimento de cientos de colombianos que han
encontrado en este mecanismo el único acceso a los servicios de salud y la diferencia
entre la vida y la muerte.
Entre otros fallos, el Gobierno -a través del Fosyga- ha tenido que pagar depilaciones de
glúteos como complemento de tratamientos para el VIH; perroterapia en locales elegidos
por el juez; casa para familia de pacientes; terapias en el exterior basados en diagnósticos
por Internet, y tratamientos con cámara hiperbárica retardante del envejecimiento.
Demandas a jueces
Los estratos altos son quienes más solicitan esos procedimientos. Por eso, se empezará a
demandar a los jueces que han aprobado este tipo de tutelas, para que paguen de su
bolsillo los fallos improcedentes.Para esto ya se contrató al ex magistrado Ricardo Hoyos.
También se le pedirá a los jueces que cumplan la Ley omitiendo en los fallos marcas de
medicamentos, elementos y tratamientos. Y se pondrán a disposición de los jueces
comités científicos regionales para que acudan a ellos si así lo consideran.
"No se trata de desprestigiar ni de limitar la tutela como vía para acceder a la salud -
advierte el ministro de la Protección, Diego Palacio-. El propósito es racionalizarla, mermar
el impacto económico que esos fallos exóticos causan al Sistema y blindarla del abuso de
personas que acuden a ella sin necesidad".
Y agrega que mientras un colombiano promedio le cuesta al Sitema 470 mil pesos al año,
280 mil personas que han acudido a la tutela valen 4 millones y medio, cada una.
Pero para expertos en el tema, como el abogado Mauricio Rodríguez, el problema no son
las tutelas exóticas, que para él son minoría, sino las debilidades del Sistema.
Cifras recientes señalan que EPS siguen negándose a prestar servicios y tratamientos -
incluso previstos en el Plan Obligatorio de Salud (POS)-, a pesar de que el Gobierno les
pagó buena parte de la deuda por ese rubro, argumento que venían usando para justificar
ta no atención.
Un informe, que la Defensoría del Pueblo está a punto de revelar, señala que de las 344
mil 468 tutelas presentadas el año pasado, 143 mil fueron en salud. Contrario 3 lo
esperado por la Corte Constitucional -que hace un año ordenó ampliar el POS y garantizar
los servicios-, el mecanismo sigue en aumento.
Juan Manuel Diázgranados, vocero de Acemi, gremio que reúne a las EPS, dice que hay
una zona gris en esta materia que hace que la gente acuda a la tutela: "Hay al menos 100
medicamentos y procedimientos que no es claro si están o no en el POS".
Pero añade que contrario a lo que muestran las cifras, el uso de la tutela ha empezado a
descender: "Tenemos información de que han bajado a 40 mil al año, en promedio".
Para salir de esta encrucijada vital el senador liberal Carlos Julio González prepara un
proyecto que pretende que la Superintendencia de Salud pueda sancionar EPS que no
cumplan con el POS.
"También hay que regular el ejercicio médico, pues las EPS los obligan a prescribir un
límite de procedimientos so pena de perder el puesto", asegura González.
Mientras esto sucede y el Gobierno ajusta finamente el POS, los goles siguen: Dos
extranjeros acaban de saltarse toda la lista de espera de trasplante de órganos, vía tutela,
sin justificación alguna.
Una paciente con disfunción de vasos sanguíneos del cerebro, le solicitó a su EPS ser
remitida al exterior para que le realizaran un tratamiento. Para su petición, la paciente se
basó únicamente en las consultas que ella misma realizaba a través de Internet, por lo que
la EPS rechazó inicialmente la solicitud de enviarla al exterior.
Pero la paciente interpuso una acción de tutela y el juez de primera instancia le otorgó la
razón basado únicamente en la búsqueda en Internet. A pesar de no contar con orden de
un médico que la estuviera tratando, el juzgado ordenó que la paciente fuera remitida a
E.U. Al final, el tratamiento no sirvió y la paciente regresó a Colombia.
Para realizarle un transplante, un paciente tuvo que ser trasladado a Bogotá. Como debía
esperar turno para el delicado procedimiento, le exigió a su EPS que le proporcionara a su
familia vivienda (pidió un apartamento independiente) y viáticos, antes, durante y hasta
terminar el procedimiento de recuperación. Un juzgado concedió la tutela y ordenó a la
EPS cumplir las peticiones.
UNIDAD INVESTIGATIVA
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