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Este informe resume soluciones prácticas y exitosas para inspirar a los administradores de la
ciudad, a los líderes de la comunidad y a los ciudadanos comprometidos que buscan diseñar su
espacio comunitario para una mejor salud, abundantes recursos hídricos y una mejor calidad de
vida.
Las aguas pluviales urbanas continúan siendo una fuente persistente y creciente de
contaminación del agua en los Estados Unidos. El cambio climático está provocando eventos
climáticos más intensos y la disminución de los suministros de agua.
Las comunidades están sintiendo los efectos del cambio climático ahora a través de
inundaciones, sequías, olas de calor y erosión costera. Juntas, estas condiciones acentúan el
desempeño de la infraestructura de agua de la nación y nos desafían a todos a considerar formas
nuevas e integradas de administrar nuestros recursos hídricos.
Las comunidades pueden usar los principios de infraestructura verde como un método holístico
y de adaptación para cumplir con sus objetivos ambientales y comunitarios ahora y en el futuro.
La implementación a gran escala de la infiltración y la recolección de agua de lluvia puede
aumentar la resiliencia a medida que las diferentes partes del país se vuelven más secas, más
húmedas o más calientes.
Este informe resume los resultados del programa de asistencia técnica de infraestructura verde
de la EPA para ciudades, comunidades y ciudadanos que desean aprender de las experiencias
de otros y encontrar las mejores soluciones para sus desafíos únicos. Es una guía de referencia
rápida que combina problemas con soluciones probadas del mundo real.
La infraestructura verde utiliza plantas, suelos y la naturaleza misma para gestionar las aguas
pluviales y crear entornos urbanos más saludables.
Las prácticas de infraestructura verde se pueden usar para reducir la necesidad de una
infraestructura gris costosa (tuberías, instalaciones de almacenamiento y sistemas de
tratamiento) porque las plantas y los suelos absorben, almacenan y utilizan el agua de lluvia. Las
comunidades también pueden crear o preservar las áreas con vegetación existentes para
mantener una alta calidad de vida para los residentes a través de la protección contra
inundaciones, aire y agua más limpios, y corredores de transporte y espacios exteriores más
atractivos.
Los techos verdes son techos ajardinados que usan un sustrato de cultivo especializado,
almacenamiento, tapete de drenaje y vegetación que es tolerante a los climas extremos que se
experimentan en los techos. Los techos verdes mitigan el escurrimiento de las aguas pluviales,
reducen el efecto de isla de calor de las superficies impermeables de los techos, prolongan la
vida útil de la membrana del techo, conservan la energía, reducen el ruido y la contaminación
del aire, proporcionan hábitats de vida silvestre en entornos urbanizados y mejoran la
resistencia de los edificios. Estos sistemas se han utilizado en Europa durante décadas y se están
volviendo más frecuentes en los EE. UU. Como prácticas de retención de aguas pluviales que
proporcionan valor estético. Como medida de control de aguas pluviales (SCM, por sus siglas en
inglés), los techos verdes son más efectivos para reducir los volúmenes de escorrentía
resultantes de tormentas pequeñas en lugar de proporcionar reducciones de carga de
contaminantes provenientes de escorrentía superficial impermeable.
Inversión a largo plazo: los techos verdes se consideran una inversión a largo plazo porque son
una de las prácticas de desarrollo de bajo impacto estructural (LID, por sus siglas en inglés) más
caras por construcción de un pie cuadrado. Dependiendo de la profundidad del sustrato y del
volumen de escorrentía retenido, los techos con vegetación pueden ser bastante pesados. La
construcción sola se considera un costo de capital costoso cuando se necesita refuerzo de la
estructura del edificio. Aunque los techos verdes son una práctica costosa, la capa de vegetación
y el sustrato protegen la membrana del techo de la radiación ultravioleta (UV) y las temperaturas
extremas, y pueden extender la vida útil de las membranas del techo. En ausencia de techos
verdes, las membranas de los techos experimentan fuertes fluctuaciones de temperatura que
hacen que se expandan y contraigan, lo que resulta en daños y eventuales reemplazos. Los datos
de Europa han demostrado que los techos verdes duplican la vida útil de las membranas de
techos.
Huella: los techos verdes se han utilizado en tejados industriales, comerciales y residenciales. La
instalación de un techo verde se adapta bien a las áreas ultraurbanas porque ofrece beneficios
de aguas pluviales y servicios ecosistémicos, pero no da como resultado ningún uso adicional de
la tierra.
Pendiente: la capacidad de un techo verde para retener el agua de lluvia disminuirá con el
aumento de la inclinación del techo, los techos normalmente se utilizan para los techos verdes.
Se recomienda una pendiente del techo del 8% o menos cuando se planifican techos verdes para
la cantidad de agua o los beneficios potenciales de la calidad del agua. Los techos verdes con
una pendiente de <2% no se recomiendan debido a un drenaje deficiente que resulta en agua
estancada que puede dañar la vegetación y aumentar la necesidad de apoyo estructural.
Techos verdes intensivos: los techos verdes intensivos son similares a los paisajes que se
encuentran a nivel del suelo. Los techos verdes intensivos tienen una profundidad de sustrato
por lo general> 8 "y pueden soportar una comunidad de plantas diversa con sistemas de raíces
más profundos. Aunque los techos verdes intensivos son generalmente más atractivos debido a
su apariencia de jardín, también son más caros y requieren que el edificio soporte el mayor peso
de la profundidad del sustrato. El mantenimiento tiende a ser más costoso para este tipo de
techo verde debido a la estética y el mantenimiento general que requieren las diversas
comunidades de plantas. Los techos verdes intensivos pueden diseñarse para adaptarse al
tránsito peatonal y usarse como un espacio al aire libre con senderos de jardín a lo largo. El
acceso de los visitantes no solo hace que la estética sea un servicio importante, sino que también
significa que los problemas de seguridad deben abordarse al principio del proceso de diseño.
Las temperaturas extremas de los techos verdes pueden ser un peligro para los humanos que lo
utilizan como un espacio recreativo.
Techos ecológicos extensos: una instalación extensiva de techos verdes es más común porque
es ideal para muebles retro y menos costosos. Un extenso sistema de techo verde requiere
menos soporte estructural porque la profundidad del sustrato generalmente es de 8 ". La
profundidad típica del sustrato varía de 3 a 5 "de espesor con 4" de sustrato recomendado en el
sureste. Los techos verdes extensos ofrecen todos los beneficios ambientales asociados con los
techos verdes intensivos, pero están diseñados para ser de bajo mantenimiento y, por lo
general, no permiten el acceso público. Estos sistemas pueden proporcionar un hábitat no
perturbado para insectos, aves y microorganismos porque el acceso es limitado
Diseño
Este manual se centra en el diseño y la construcción de techos verdes de tipo extenso debido a
su creciente popularidad y costos reducidos.
Componentes
Sustrato: un sustrato de techo verde debe ser relativamente ligero, retener nutrientes para el
crecimiento de las plantas y ser persistente. La capa superficial del suelo no se debe utilizar como
un medio de cultivo para techos verdes porque es demasiado pesado y permanece demasiado
húmedo. El sustrato debe estar compuesto de un compuesto mineral liviano, como pizarra,
pizarra, arcilla o terracota. El sustrato debe contener aproximadamente 40 a 60% de agua en
peso y tener un rango de densidad aparente (seco) de 35 a 50 lb / ft3. Aunque las raíces y brotes
de la vegetación interceptan la lluvia, el sustrato debe gestionar la tasa de liberación de las aguas
pluviales. Una capacidad de retención de agua objetivo de 40 a 60% es ideal para la
supervivencia de la planta y para liberar y drenar suficiente agua para mantener el peso
adecuado en la estructura del edificio. Se han reportado volúmenes de captura que van desde
0.5 "a 1.2" en varios techos verdes
Profundidad del sustrato: La profundidad del sustrato se basa en gran medida en el clima local
y los patrones de precipitación. Aunque la investigación de Michigan muestra que las
profundidades de los substratos de al menos 2.75 "pueden respaldar exitosamente las
suculentas y brindar una cobertura adecuada, se recomienda 4" de substrato en Alabama para
respaldar las suculentas y las plantas perennes. También se debe tener en cuenta que cuando
se instala el riego, la disminución de la profundidad del sustrato ha sido exitosa.
Materia orgánica del sustrato: la materia orgánica en el sustrato debe ser del 15% o menos. Los
componentes con alto contenido de materia orgánica no se recomiendan debido a una mayor
descomposición que resulta en la contracción del sustrato. El reemplazo del sustrato es costoso
y no es práctico, por lo tanto, los componentes del sustrato deben tener tasas de
descomposición mínimas.
Fertilizante: se necesita algo de fertilización para el establecimiento de la planta, sin embargo,
demasiado puede resultar en la lixiviación de nutrientes y mayores niveles de nutrientes en la
escorrentía de aguas pluviales. Los fertilizantes de liberación controlada (CRF) han demostrado
ser efectivos para el establecimiento de plantas a tasas tan bajas como 3.5 oz por 20ft2 (13N-
6P-11K).
Compost: Otras investigaciones han utilizado tasas bajas de compost (hasta 20%) en la mezcla
de sustratos para proporcionar nutrientes y materia orgánica. Las altas tasas de compost en el
sustrato del techo verde pueden filtrar nitrógeno y fósforo, lo que puede ser problemático en
las cuencas hidrográficas sensibles a los nutrientes. Se planea una investigación futura en la
Universidad de Alabama en Birmingham para analizar los impactos en la calidad del agua
asociados con el uso de compost y fertilizantes.
Tela de filtro: se coloca una capa de tela de filtro de geotextil entre el sustrato y la estera de
drenaje. El tejido del filtro protege la estera de drenaje al evitar que el sustrato se obstruya y
disuade el crecimiento de la raíz en la estera y la superficie del techo.
Tapete de drenaje: el tapete, la capa o la red de drenaje evita que el agua se acumule al
transportarla desde el techo para proteger y preservar la superficie del techo. El rápido drenaje
del sustrato reducirá el peso del techo verde. La estera de drenaje seleccionada debe drenar
adecuadamente el techo de la tormenta de diseño. Las alfombras de drenaje deben drenar a
una velocidad de 15 gal / min / pie o más.
Orientación de diseño
Cabe señalar que el diseño presentado en este manual está limitado para techos verdes debido
a los estándares estructurales que limitan su aplicación. Se debe consultar a un ingeniero
estructural con licencia para verificar el uso de un techo verde. Las actualizaciones estructurales
pueden tener un costo prohibitivo para un proyecto.
Peso del techo: El peso del techo verde debe considerarse durante el proceso de diseño. El peso
de los medios saturados, las cargas vivas o muertas, y cualquier acumulación de nieve deben
examinarse para garantizar que se cumplan los requisitos de soporte estructural. Las cargas
muertas para techos verdes consisten en el sustrato, la esterilla de drenaje y el agua en los
espacios porosos. Estas cargas deben cumplir con los códigos de construcción estatales y locales.
El estado de Alabama cumple con el Código Internacional de Construcción (IBC). Bajo la Tabla
1607.1 de IBC, los techos utilizados para jardines o ensamblajes deben estar diseñados para una
carga viva uniforme de 100 libras por pie cuadrado (PSF). El sustrato utilizado debe tener la
capacidad de retención de lluvia y equilibrio de retención de escorrentía con carga (peso).
Una vez que se calcula el coeficiente de escorrentía (Rv), se puede utilizar en EQN 4.7.3 para
determinar el volumen de escorrentía total (V)
Las propiedades hidrológicas específicas del sustrato o medio de cultivo se utilizan para
determinar la capacidad de retención de lluvia. La porosidad, el contenido de humedad en la
capacidad de campo, el contenido de humedad en el punto de marchitamiento y la
conductividad hidráulica saturada (Ksat) son necesarios para determinar la retención de agua y
el coeficiente de escorrentía racional.
La aplicación de los conceptos de este modelo nos permite construir un conjunto básico de
hipótesis para la trayectoria a largo plazo de las salidas de N y P de los ecosistemas de techos
verdes (Fig. 5.6). Estas hipótesis se basan en observaciones de concentraciones de escorrentía
de nutrientes provenientes de ecosistemas de techos verdes (Sección 5.5 y se resumen a
continuación), y reconocen las características únicas de los techos verdes extensos como
ecosistemas diseñados (Sección 5.4).
• Los techos verdes son una fuente de alto P y N en la escorrentía, para techos nuevos y después
de los eventos de fertilización.
• El sustrato generalmente contiene muy poco N: P, es decir, está enriquecido en P en relación
con el suministro de N y en relación con la demanda de la planta o microbiana.
• Los techos verdes son una fuente de alto P y N en la escorrentía, para techos nuevos y después
de los eventos de fertilización.
Después de un período inicial de lixiviación, los techos verdes pueden ser una fuente o un
sumidero para N.
• Los techos verdes son siempre una fuente de P en la escorrentía, pero las concentraciones de
escorrentía pueden ser bajas para los techos más viejos.
Existen algunas formas en que el desarrollo de los techos verdes a lo largo del tiempo es
claramente diferente al desarrollo de los ecosistemas forestales como se propone en el modelo
de 3 compartimentos (Vitousek et al. 1998), y en modelos generales de la dinámica de nutrientes
terrestres a lo largo del tiempo de sucesión (Chapin et al. 2011; Vitousek y Reiners 1975). Una
diferencia es que los techos verdes como se construyen actualmente comienzan con una
abundancia de nutrientes en el sistema, en relación con las necesidades de la planta. Como
resultado, se puede esperar que los techos verdes filtren altos niveles de nutrientes cuando se
construyen nuevamente (Fig. 5.6), y esto se ha observado ampliamente (por ejemplo, las Tablas
5.1, 5.2, 5.3 y 5.4). Esto contrasta con los modelos de sucesión primaria en ecosistemas
forestales (Fig. 5.5), en los cuales los nutrientes son escasos, por lo que se mantienen
firmemente dentro del sistema durante la sucesión temprana. La creación de un ecosistema de
techo verde puede, en cambio, ser análoga a una perturbación en un ecosistema natural, que
generalmente es seguida por un breve período de alto nivel de lixiviación de nutrientes.
Una fase donde salidas <entradas. Este parece ser el caso con P para la mayoría de los techos
verdes como se construye actualmente.
Este modelo tiene implicaciones interesantes cuando se aplica a los ecosistemas de techos
verdes. Suponiendo que se apliquen los modelos y paradigmas básicos de los ecosistemas
forestales naturales, los techos verdes con el tiempo tenderán a acercarse al estado estacionario
con respecto a los nutrientes; sin embargo, se debe tener en cuenta que incluso en los
ecosistemas forestales la situación real suele ser más compleja de lo que el modelo podría
predecir. (Vitousek et al. 1998; Aber y Melillo 2001). Incluso si los sistemas generalmente se
acercan al estado estacionario, una pregunta clave es cuánto tiempo lleva esto. Las
observaciones hasta la fecha sugieren que esto puede suceder con relativa rapidez (en unos
pocos años) para N, pero puede tomar muchos años / décadas para P.
Existen, además, varios factores que pueden evitar que los techos verdes se ajusten a las
predicciones basadas en el modelo de 3 compartimentos. En primer lugar, el modelo es una
simplificación extrema de un ecosistema complejo y dinámico, y para muchos techos verdes
puede ser necesario incluir otros procesos para caracterizar con precisión el sistema. Por
ejemplo, en extensos ecosistemas de techos verdes, la productividad puede
estar limitado por factores distintos a la disponibilidad de nutrientes, como la disponibilidad de
humedad, el estrés del viento, el bajo potencial de crecimiento de las plantas o las opciones de
manejo. Además, las especies de plantas, que por su diseño suelen tener un crecimiento lento
y carecen de una capa exterior, tienen una productividad potencial y una acumulación de
biomasa más bajas que un bosque.
Introducción
Los céspedes, como otros tipos de vegetación agronómica, hortícola y paisajística, requieren
agua para el crecimiento y la supervivencia. Sin el agua adecuada, el césped se vuelve marrón,
desecado y puede morir en casos severos. La pérdida de cobertura del suelo por el césped puede
tener un impacto negativo significativo en la estética y la funcionalidad de nuestro entorno, ya
que el césped saludable proporciona muchos beneficios importantes (consulte la Sección 2). Por
lo tanto, el riego es deseable para mantener los beneficios funcionales de céspedes sanos y en
crecimiento activo en áreas donde la lluvia no puede satisfacer la demanda de agua de las
plantas. A medida que la disponibilidad de agua es cada vez más limitada y más costosa, la
conservación del agua en el cultivo de césped se ha vuelto extremadamente importante.
El uso del agua de los céspedes se evalúa según la cantidad total de agua requerida para el
crecimiento y la transpiración (pérdida de agua de la hoja) más la cantidad de agua perdida de
la superficie del suelo (evaporación). El consumo de agua transpiracional representa más del
90% de la cantidad total de agua transportada a las plantas, con un 1 a 3% realmente utilizado
para procesos metabólicos (Beard 1973; Hopkins 1999). Las tasas de uso de agua varían según
las especies y los cultivares y son afectadas por muchas Factores externos, especialmente
condiciones ambientales. Este artículo revisa las características de uso de agua de diferentes
especies de césped y examina los factores ambientales que afectan el uso de agua de césped.
La cantidad de agua utilizada bajo riego deficitario puede calcularse en función de la tasa real
de evapotranspiración (ET). Uno de los métodos más simples y antiguos para estimar la ET es
medir la evaporación desde una gran bandeja estandarizada. La ET real puede medirse con
mayor precisión utilizando lisímetros de pesaje. Más recientemente, los investigadores han
desarrollado modelos matemáticos (o ecuaciones modificadas de Penman) para estimar la
evapotranspiración potencial (PET) utilizando datos climáticos de radiación solar, velocidad del
viento, humedad relativa y temperatura. Los valores de PET representan un estado hídrico de la
planta no limitante y una cobertura extendida de vegetación verde y corta sobre la superficie
del suelo. La referencia ET es un punto de partida para estimar el riego necesario para las áreas
de césped al multiplicar con el coeficiente de cultivo (Kc). El Kc para césped depende del tipo de
césped (estación cálida o fría), la altura de corte y la calidad deseada del césped.
Características del uso del agua de las especies de césped de temporada fría y de temporada
cálida
Los céspedes se clasifican en dos grupos según su adaptación climática: temporada fría y
temporada cálida. Las gramíneas de estaciones frías crecen principalmente en climas templados
y subárticos, mientras que las gramíneas de estaciones cálidas se adaptan a las áreas tropicales
y subtropicales (consulte las regiones climáticas de los Estados Unidos en la Sección 5). Estos
dos grupos de especies de césped tienen diferentes requisitos de agua (Tabla 11.1) y varían en
las características de uso del agua. La mayoría de los pastos de estación fría generalmente son
más usuarios de agua que los pastos de estación cálida. Las tasas típicas de ET oscilan entre 3 y
8 milímetros (mm) por día para los pastos de temporada fría y de 2 a 5 mm por día para los
pastos de estación cálida (Beard 1994). La disminución de los niveles de humedad del suelo
reducirá progresivamente la tasa de uso del agua hasta en un 80% (Figura 11.1). Además, las
clasificaciones comparativas de uso del agua para diferentes especies y cultivares pueden
cambiar a través de diferentes condiciones climáticas y regímenes culturales, y también
dependen de las especies individuales y la adaptación de cultivares.
Los céspedes de estación fría de uso común en céspedes, campos deportivos, parques, terrenos,
campos de golf y bordes de carreteras incluyen Festuca L., Poa L., Agrostis L. y Lolium L. Dentro
de los céspedes de temporada fría, las especies varían en la máxima ET tasa, que varía de 7 a 8,5
mm por día a más de 10 mm por día (Tabla 11.1). Fescue alta (Festuca arundinacea Schreb.),
Bentgrass (Agrostis stolonifera L.) y bluegrass anual (Poa annua L.) se consideran los usuarios de
agua más altos, mientras que la festuca dura (Festuca longifolia Thuill.), La festuca de Chewing
(Festuca rubra L. ssp. commutata Gaud.), y la festuca roja (Festuca rubra L. ssp. rubra) son los
usuarios de agua más bajos (Beard 1989, 1994). DaCosta y Huang (2006) en Nueva Jersey
compararon el uso del agua entre tres especies de bentgrass y encontraron que el bentgrass de
terciopelo (Agrostis canina L.) usaba menos agua que el bentgrass y el bentgrass colonial
(Agrostiscapillaries L.)
Puede haber tanta variación en la tasa de uso de agua entre los cultivares dentro de ciertas
especies como entre las especies de césped (Beard 1989). La diferencia en ET entre los cultivares
puede variar entre 20 y 60% (Kjelgren, Rupp y Kilgren 2000).
Céspedes de estación cálida incluyen Cynodon L.C. Rich, Buchloe Engelm., Zoysia Willd.,
Paspalum L., Eremochloa ophiuroides [Munro] Hack. Y Stenotaphrum secundatum [Walt.]
Kuntze. Su uso máximo de agua varía de menos de 6 mm por día a 8,5 a 10 mm por día (Tabla
11.1). Entre las gramíneas de estación cálida, el bermudagrass (Cynodon spp.), Zoysiagrass
(Zoysia spp.) Y el buffalograss (Buchloe dactyloides [Nut.] Engelm.) Tienen tasas de uso de agua
relativamente bajas, mientras que la costa de pascua (Paspalum vaginatum Swartz.) Y St.
Augustinegrass (Stenotaphrum secundatum ([Walt.] Kuntze.) Tiene tasas de uso de agua
relativamente altas (Tabla 11.1). Dentro de una especie de césped de temporada cálida, los
cultivares pueden variar en la tasa de uso de agua
Características del crecimiento de las plantas que afectan el uso del agua
El uso del agua del dosel del césped se ve afectado por la pérdida de agua a través de la
transpiración de brotes y la evaporación del suelo, y por la absorción de agua del suelo a través
del sistema radicular. Por lo tanto, las variaciones de las especies de césped en las tasas de uso
del agua se asocian con diferencias en las características de los brotes y las raíces, como la
configuración del dosel o la orientación de la hoja, la densidad del sierpe o brote, el hábito de
crecimiento, la profundidad de las raíces y la densidad de las raíces (Beard 1973; Huang y Fry
1999 ).
Las especies que tienen un hábito de crecimiento de brotes postrados típicamente tienen una
tasa de uso de agua más baja que las gramíneas con un hábito de crecimiento vertical (Kim y
Beard 1988). El primer grupo a menudo tiene una mayor resistencia a la evapotranspiración
(Johns, Van Bavel y Beard 1981, 1983). En general, los céspedes con una tasa de extensión de
brotes vertical rápida tienden a tener mayores tasas de uso de agua que los pastos de
crecimiento más lento o de tipo enano debido al aumento del área foliar desde la cual se
produce la transpiración (Kim y Beard 1988; Shearman y Beard 1973). Shearman (1986) informó
que la tasa de extensión vertical de los brotes se correlacionó positivamente con la tasa de uso
de agua para 20 cultivares de Kentucky bluegrass
con patrón de crecimiento vertical. Sin embargo, no se encontró correlación entre el uso de agua
y la tasa de extensión de la hoja dentro de varias especies de césped de estación cálida que
tienen un hábito de crecimiento postrado.
como bermudagrass (Beard, Green, and Sifers 1992) y zoysiagrass (Green, Sifers, and Beard
1991). La característica de crecimiento más horizontal puede ser dominante debido a la mayor
cubierta
resistencia. Los toldos de césped denso y compacto tienen una menor pérdida de agua debido
a la evaporación del suelo que los delgados y abiertos. Es evidente que las especies de gramíneas
de bajo consumo de agua pueden poseer al menos una de las características combinadas de
crecimiento vertical lento, patrón de crecimiento postrado y dosel denso. Bajo el estrés hídrico
de la planta, el cierre del estoma y la formación de la cutícula pueden ser factores clave que
controlan el uso del agua (Beard 1973; Kim 1983).
PAG 28 manual 3
La Tabla 2.1 compara las diferencias entre cada ubicación de modificación, en términos de la
facilidad con la que se encuentran, la simplicidad del diseño, la facilidad de los permisos /
aprobaciones y los costos de tratamiento. Como se puede ver, las modificaciones de
almacenamiento son generalmente más fáciles de encontrar y tienen bajos costos de
tratamiento, aunque su diseño y permisos son más complejos. Por el contrario, la mayoría de
las modernizaciones en el lugar son más difíciles de encontrar y tienen costos de tratamiento de
moderados a altos, aunque en general son más fáciles de diseñar y se permiten.
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Este grupo de modernizaciones en el sitio captura, almacena, trata y luego libera gradualmente
la escorrentía de techos individuales. El objetivo es modernizar sistemáticamente la mayor
cantidad posible de techos residenciales y no residenciales dentro de una subcuenca
determinada. Las diferentes formas en que se pueden adaptar los techos se muestran en la
Figura 1. Se pueden emplear una variedad de opciones de tratamiento de aguas pluviales para
las modificaciones de los techos, como se muestra a continuación:
PAG 137
las pequeñas modificaciones son simplemente demasiado pequeñas como para que valga la
pena una búsqueda de SIG en el escritorio o incluso un análisis de fotografías aéreas de
resolución fina. Generalmente se encuentran durante las investigaciones de campo de sitios
más grandes. El equipo puede querer buscar propiedades escolares y lotes vacíos con
impuestos revertidos antes de salir al campo (Figuras 3 y 4).
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Capacidad de las opciones de tratamiento de aguas pluviales para abordar los objetivos de
adaptación
Detención extendida
Estanques mojados
Humedales
Bioretención
Filtración
Infiltración
Swales
Otro
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Costos de instalación para otras modificaciones de aguas pluviales (por pie cúbico tratado)