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Éste tema aborda la forma en la que la relación médico-paciente ha cambiado en este

tiempo, los derechos de los que ahora goza el paciente, el respeto que se le debe; cosa
que ahora es tan importante que forma parte del profesionalismo de un profesional de la
salud. El trato que recibe un paciente de parte de su médico, ahora define el nivel de éxito
que puede alcanzar éste.

Per entonces, si es esto de tal importancia, debemos estar bien familiarizados con el tema,
por eso en este ensayo se tocaran temas como: ¿Qué es la bioética?, ¿cómo la podemos
aplicar como profesionales de la salud?, ¿Qué relación tiene ésta con la declaración de
Ginebra? Y una gran cuestión que surge, ¿En qué grado afecta la ética de un médico en
una decisión que por derecho solo puede tomar el paciente?

Ésta innovadora relación entre las dos personas, se vuelve compleja, pues al estar
involucrado más de uno, existe una diversidad de ideas y pensamientos, nunca es fácil que
un grupo de personas compartan una idea, y hay ocasiones en que incluso está
involucrada toda la familia, volviéndolo mas difícil todavía. A una institución clínica,
pueden llegar todo tipo de personas, con distintas formas de pensar y con distintos
principios. Su forma de ver las cosas, hablando éticamente, serán distintas
inevitablemente, pues entran en discusión los valores de las personas.

Es aquí donde entra la bioética como un aliado del profesional de la salud, pues lo prepara
para estos posibles conflictos, y les da herramientas que los ayudan a tomar decisiones
sabias y sin afectar su carrera profesional.

La bioética se define actualmente como una disciplina que logra unir el conocimiento
biológico con el conocimiento de los sistemas de los valores humanos, tratando no solo de
acabar con el problema técnico medicamente, sino mejorar la calidad de vida de la
persona.

Aunque los médicos estén conformes a veces con sus tratamientos, en esta época se
precisa cada vez más de ser asesorados por comités de ética para la asistencia sanitaria.

Su relación con la declaración de Ginebra.

La declaración de Ginebra es una de las políticas más antiguas de la AMM adoptada en


1948, tiene como finalidad principal crear una base moral para todos los médicos. Se creó
después de algunos horrores médicos que se cometieron durante la Segunda Guerra
Mundial. En el momento de ser admitido como médico, éste promete entre cosas: dar su
vida al servicio de la humanidad, ejercer la profesión dignamente, no permitir que cosas
como edad, sexo, credo, orientación sexual, etc, interfieran con los deberes médico-
paciente; velar con el máximo respeto la vida del paciente y no violar los derechos
humanos ni las libertades ciudadanas.

Como podemos leer, la declaración se basa ampliamente en dejar claro el respeto y la


dignidad con la que debe ejercer un médico sus deberes. Cuando por principios éticos
entran en conflicto el profesional de la salud con el paciente, normalmente es el principio
de justicia el que media entre ellos, pero siempre basándose en una política sanitaria y en
igualdad de derechos.

En conclusión, desde el principio de nuestra formación en el ámbito clínico, debemos


siempre tener en cuenta la bioética y como se puede relacionar con nosotros en cada caso
clínico que estudiemos, pues, respondiendo a la pregunta que hacíamos al principio, en el
caso de que la ética del médico se vea comprometida con los principios morales del
paciente, se pueden buscar otros tratamientos, otras instituciones clínicas, o incluso
buscar la ayuda legal que pueda mediar entre ambas partes; es por eso que nunca
debemos dejar de informarnos acerca de todas las alternativas médicas que existen y los
derechos que ambas partes tienen.

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