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Medidas Cautelares.
Facilitador: Integrantes:
Yusmelis Marcano. Cordero David-V-22.822.496
Daniels Windys -V-24.851.178
Urrieta Ivonne-V-16.614.036
Mayo/2019.
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INDICE
6 El embargo. 7
7 El secuestro. 7
10 Solicitud. 9
11 Decreto y Ejecución. 9
12 Tramite. 10
15 Objeción a la garantía. 12
16 Articulación y Decisión. 12
17 El depositario judicial. 13
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Introducción.
Las medidas cautelares como instituto procesal están relacionadas como es obvio
al proceso de una necesidad de proteger al actor de modo más eficaz y restablecer
la respetabilidad y majestad del poder judicial
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Las Medidas Preventivas.
Son aquellas medidas que tienen por objeto garantizar las resultas del juicio
previniendo que el cautelado, demandado o notificado, o ejecutado se desprenda
de los bienes de su propiedad; prenda común de sus acreedores.
Cuando exista riesgo manifiesto de que quede ilusoria la ejecución del fallo o el
Fomus Periculum in Mora.
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medidas cautelares pueden causar desastres patrimoniales a las personas contra
quien se dirige.
Estatuye el artículo 70 de la Ley Orgánica del Poder Judicial en el Capítulo IV, que
trata “De los Juzgados de Municipios”, que: “Los jueces de municipio actuarán como
jueces unipersonales. Los juzgados de municipio serán ordinarios y especializados
en ejecución de medidas. Los juzgados especializados en ejecución de medidas
tienen competencia para cumplir las comisiones que le sean dadas por los tribunales
de la República, de acuerdo con la ley”.
Las medidas cautelares son las dictadas mediante resoluciones judiciales, con el fin
de asegurar, conservar o anticipar la efectividad de la resolución estimatoria que
pueda dictarse en el curso de un proceso judicial considerado principal, de modo
que cierto derecho podrá ser hecho efectivo en el caso de un litigio en el que se
reconozca la existencia y legitimidad de tal derecho. Las medidas cautelares no
implican un prejuicio respecto de la existencia de un derecho en un proceso, pero
sí la adopción de medidas judiciales tendentes a hacer efectivo el derecho que
eventualmente sea reconocido.
Por tanto, son todas aquellas actuaciones o decisiones que, sin prejuzgar del
resultado final, de contenido positivo o negativo, que un órgano de la Administración
Pública o un juez o magistrado del poder judicial, puede adoptar para que las
resultas de la resolución administrativa o judicial surtan plenos efectos para los
interesados o para la parte procesal. Para ello, se exige la concurrencia de dos
requisitos: el fumus boni iuris o apariencia de buen Derecho y el periculum in mora o
peligro/riesgo por el paso del tiempo.
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Clases de medidas preventivas.
El artículo 585 CPC establece el presupuesto para que la medida sea decretada por
el Juez:
1. Exista un riesgo manifiesto de que quede ilusoria la ejecución del fallo (FUMUS
PERICULUM IN MORA).
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El fundamento del requisito legal de la presunción grave del derecho que se reclama
radica en la necesidad de que se pueda presumir al menos que el contenido de la
sentencia definitiva del juicio será de condena, como justificación de las
consecuencias limitativas al derecho de propiedad que conlleva la medida. Resulta
conveniente un juicio que previamente haga presumir la garantía de que la medida
preventiva va a cumplir su función, instrumentalizada, de garantizar el resultado
práctico de la ejecución forzosa, la cual, a su vez, depende de la estimación de la
demanda.
El Embargo.
El Embargo de bienes muebles: Para Calvo Baca (2002), es una medida cautelar
adoptada por la autoridad judicial para asegurar el resultado de un proceso y que
recae sobre determinados bienes cuya disponibilidad se impide.
Para Balza (2003), es el acto judicial en virtud del cual, a requerimiento de parte,
se sustrae en un depositario cualquier bien mueble del poseedor contra quien obra,
con el objeto de suspender provisionalmente los atributos de su derecho de
propiedad y tener losa las resultas de juicio.
El Secuestro.
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es una convención, impone al secuestrario las mismas obligaciones que el
secuestro convencional al depositario.
En este mismo orden de ideas Ortiz (1990), expresa que se conoce como
prohibición de enajenar y gravar aquella medida preventiva o cautelar a través de la
cual el Tribunal, a solicitud de parte y cumpliéndose lo requisitos del artículo 585 del
Código De Procedimiento Civil vigente, impide que el afectado por la medida pueda
de alguna forma vender o traspasar la propiedad de un bien inmueble, litigioso o no,
o de alguna manera gravarlo en perjuicio de su contraparte.
Según lo que emana del artículo 590 del Código de Procedimiento Civil podrá
también el Juez decretar el embargo de bienes de bienes muebles o prohibición de
enajenar y gravar bienes muebles sin estar completamente llenos los extremos que
exige la ley siempre y cuando se ofrezca caución a la parte contra quien se dirija la
medida.
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Sólo se admitirá ante el Tribunal fianza principal y solidaria de empresas de seguro
e instituciones bancarias, hipotecas de primer grado cuyo justiprecio conste en
autos, prenda sobre bienes y valores y la consignación de una suma de dinero, la
cual sea señalada por el Juez. En caso de que el fiador sea un establecimiento
mercantil el Juez requerirá que se consignen los balances del Contador Público de
este.
Solicitud.
Decreto y ejecución.
Causalidad
a. Exista riesgo manifiesto de que quede ilusoria la ejecución del fallo (Periculum in
mora); en la doctrina se ha abierto paso el criterio de que la tardanza o la morosidad
que presupone un proceso judicial que trae intrínseco un peligro que unida a otras
condiciones propias de la litis tramitada, constituye lo que se ha dado en llamar
perículum in mora.
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quede ilusoria la ejecución del fallo y siempre que se acompañe un medio de prueba
que constituye presunción grave de esta circunstancia.
El peligro en la mora tiene dos causas motivas: una constante y notoria, que no
necesita ser probada, cual es la inexcusable tardanza del juicio de conocimiento, el
arco de tiempo que necesariamente transcurre desde la deducción de la demanda
hasta la sentencia ejecutoriada; otra causa es los hechos del demandado durante
ese tiempo para burlar o desmejorar la efectividad de la sentencia esperada. A este
supuesto se refiere la presunción hominis exigida por este artículo in comento.
Henríquez La Roche (1995), expresa que Fumus boni íuris, se refiere a Humo, olor,
a buen derecho, presunción grave del derecho que se reclama.
Tramite
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trae diversas complicaciones que atentan contra el derecho a la defensa. La
incidencia cautelar, cuando se sustancia correctamente, se decide en primera
instancia a través de un fallo susceptible de ser apelado en un solo efecto. Esta
apelación es independiente y autónoma de la apelación que pueda haberse
intentado contra la sentencia definitiva. Si se decide el juicio principal y la medida
cautelar en una misma sentencia, la eventual nulidad del fallo, por un motivo
atinente a la cautelar o al juicio principal, generará la nulidad de ambos
pronunciamientos al unísono, admitiéndose el recurso en ambos efectos por
tratarse de una sentencia definitiva. De esta forma, se distorsiona la posibilidad de
ejercer recursos independientes de apelación y casación contra las decisiones que
resuelvan la incidencia cautelar”.
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de los bienes y se quede sin la medida; damos a conocer los alegatos que el
ejecutado puede formular en la oposición de parte, el cual solo puede alegar
violación de normas e insuficiencia de pruebas para decretarse la medida, no así la
insuficiencia de caución como algunos abogados lo hacen, porque para esto se
tiene la incidencia prevista en el único aparte del artículo 589 CPC; la apelación al
decreto y a la sentencia y la declaratoria con lugar o sin lugar de la misma, y los
perjuicios frente al demandado cuando se declara con lugar la oposición, dado que
solo se puede apelar en un efecto; suministramos las diferencias entre la “oposición
de parte” y la “oposición de terceros” al embargo; y, finalmente analizamos la
imposibilidad procesal y material de formular la oposición de parte en la medida
ejecutiva de intimación, así como en el juicio de hipoteca.
Objeción a la garantía.
Articulación y decisión.
El término “haya habido o no oposición”, permite inferir que la apertura del lapso
probatorio, ocurre el día después de haberse vencido el termino de tres días de
despacho establecidos para la oposición.
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practicar la medida, apareciera un tercero con prueba fehaciente alegando ser
tenedor legítimo de la cosa, pero en el mismo momento también algunas de las
partes presentare prueba fehaciente contradiciendo tal oposición, se practica la
medida, pero se apertura la articulación probatoria, como antes se mencionó.
Decisión: El tribunal sentenciará la articulación, a más tardar, dentro de los dos días
de despacho siguientes a la expiración del lapso probatorio (Oposición de Parte).
El depositario judicial
CAPITULO I
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puestos bajo la posesión de un depositario, por orden de un Juez o de otra autoridad
competente para decretar el secuestro, embargo, ocupación, comiso o depósito de
bienes y roda actividad conexa o necesaria para el cumplimiento de esta función.
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Conclusión.
De esta manera, se puede destacar que estas medidas son importantes para
asegurar que cierto derecho, por ser hecho efectivo en el caso de un litigio en el que
se reconozca su existencia, pueden ser adoptadas aunque no encuadren en
algunos de los tipos específicamente previsto por la legislación procesal, puede ser
solicitadas y ordenadas en razón de su aptitud para asegurar provisionalmente la
efectividad de un derecho entre los posibles tipos de medidas cautelares.
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BIBLIOGRAFÍA.
http://proccivil.blogspot.com/2014/06/medidas-cautelares_28.html
http://www.enciclopedia-juridica.biz14.com/d/depositario/depositario.htm
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