LAS APERTURAS

ELECCION Y DESARROLLO
"

R. Keene
D. Levy

~
HISPANO EUROPEA
 LAS APERTURAS
ELECCIÓN
Y DESARROLLO
En ejedrez no es posible dar
más importancia a una situación
que a otra, pues tanto las aper-
turas como el juego medio y las
finales tienen su propia impor-
tancia.
Pero obviamente, todas las
demás situaciones están supedi-
tadas a la apertura y su posterior
desarrollo. Se llegará a un defi-
ciente juego medio si la apertura
ha sido mal escogida o peor de-
sarrollada.
En la presente obra, de la ma-
no de dos prestigiosos campeo-
nes se nos introduce en el apa-
sionante juego de la aperturas
más conocidas y las variantes
que en las mismas han llevado a
cabo algunos de los más famo-
sos Maestros.
El lector, aficionado o experto
en ajedrez, hallará en las siguien-
tes páginas descripciones y de-
sarrollos de aquellas aperturas,
haciendo hincapié en las particu·
laridades de cada una, con espe-
cial énfasis en aquellas jugadas
clave que condicionarán el desa-
rrollo de la partida.
Partiendo de la iniciativa de
las blancas en la apertura se de-
sarrolla tanto en el juego siguien-
te de éstas como las contrajuga-
das más oportunas a efectuar
por las negras.
El control de los cuadros cen-
trales, el desarrollo de caballos y
alfiles, el fianchetto, la vulnerabi-
lidad de determinadas piezas y la
seguridad del rey son constan-
LAS APERTURAS
ELECCIÓN Y DESARROLLO

[1
HERAKLES
 Colección JAQUE MATE

LAS APERTURAS
ELECCIÓN Y DESARROLLO

Raymond Keene
y David Levy

Contiene 142 ilustraciones esquemáticas

EDITORIAL HISPANO EUROPEA S. A.

 Director de la Colección: Lorenzo Ponce Sala

Título de la edición original: How to Play the

Opening in chess.

© de la traducción: Enrique Belza Valls.

Es propiedad, 1995
© Raymond Keene y David Levy.

Edición en lengua inglesa publicada por B.T.

Batsford Limited. 4 Fitzhardinge Street. London
W1 H OAH (Inglaterra).

© de la edición en castellano 1995: Editorial

Hispano Europea, S. A. Bori i Fontestá, 6-8. 08021
Barcelona (España).

Autoedición y fotomecánica realizada en TGSP,

S. A. Lluís Millet, 69. 08950 Esplugues de Llobregat
(Barcelona).

Quedan rigurosamente prohibidas, sin la autoriza-

ción escrita de los titulares del «Copyright», bajo las
sanciones establecidas en las Leyes, la reproduc-
ción total o parcial de esta obra por cualquier medio
o procedimiento, comprendidos la reprografía y el
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plares de ella mediante alquiler o préstamo públi-
cos, así como la exportación e importación de esos
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Depósito Legal: B. 451 93-1 995.

ISBN: 84-255-1105-4.

IMPRESO EN ESPAÑA PRINTED IN SPAIN

LIMPERGRAF, S. l. - Carrer del Riu, 17 (Nave 3) - 08291 Ripollet
 Índice

1. Desarrollo y tácticas ..... 7 Defensa de dos caballos ..... 54

Variante Wilkes Barre ... . .. . . 56
Desarrollo ................. 7
La iniciativa ....... . .. . .... 8 5. Ruy López (Apertura espa-
El centro de peones . ........ 9 ñola) ..................... 59
Control central ... . . ........ 11
Desarrollo de los caballos .. . . 11 Defensa cerrada .. . ......... 60
Desarrollo de los alfiles ... . . . 14 Defensa abierta ... . ........ 64
El fianchetto ...... . ........ 17 Variante del cambio . . ....... 67
La vulnerabilidad de 2AR/7AR. 19 Defensa Schliemann ...... . . 70
Seguridad del rey ........... 20
6. Defensa siciliana ........ 73
2. Importancia de los peones 23
Variante Lowenthal. ......... 74
Debilidades de los peones .. . . 23
Variante Rauzer .. ........ . . 76
Estructuras de peones .... . .. 31
Variante Dragón . . .......... 78
Los peones y el control del es-
Variante Kan/Taimanov ...... 80
pacio .. . .. . ...... . ........ 34
Una nota sobre peones pasa-
dos .................. .. .. 7. Defensa francesa ........ 83
35

APERTURAS DE PEÓN DE Variante clásica ............ 84

REY ................... . . 37 Variante Winawer ........ . .. 87
Variante Tarrasch ........ . .. 89
Introducción ........... . ... 39 Variante de Avance ... . .... . 91

3. Gambito de rey . ......... 41 8. Defensa Caro-Kann ...... 95

Gambito de rey aceptado ..... 41 Sistema clásico con 4 ... , A4A. 96

Defensa moderna ........... 44 Sistema clásico con 4 ... , C3A. 98
Contra-Gambito Falkbeer ..... 45 Ataque Panov ....... . ..... 100
Defensa clásica ........... . 47 Variante de Avance ...... . .. 102

4. Juego italiano . .......... 49 PEÓN DE DAMA Y APERTU-

RA DE FLANCO ........... . 105
Giuoco piano . . ........ . ... 49
Gambito Evans .... . ....... . 52 Introducción ....... . ....... 107
6 Índice

9. Gambito de dama. . . . . . . . 109 Variante Samisch . . . . . . . . . . . 139

Gambito de dama aceptado. .. 11 O 12. Defensa holandesa . . . . . 143

Defensa Tchigorin . . . . . . . . .. 112 Gambito Staunton . . . . . . . . .. 144
Defensa Tarrasch. . . . . . . . . .. 114 Variante Stonewall . . . . . . . . .. 146
Defensa ortodoxa . . . . . . . . . .. 116 Centro fluido con 6 .. . , P3D . .. 149
Variante Leningrado . . . . . . . .. 150
1O. Defensa Nimzo India . . . . 121
13. Defensa moderna. . . . . . . 155
Variante Samisch. . . . . . . . . . . 122
Las negras "fianchetean" su Variante de tijera . . . . . . . . . .. 156
alfil de dama. . . . . . . . . . . . . . . 125 Asalto blanco al rey negro . . .. 158
Variante Hübner. . . . . . . . . . . . 127 Ataque austríaco . . . . . . . . . .. 160
Las blancas evitan los peones Variante seudo india de rey . .. 162
doblados . . . . . . . . . . . . . . . . . 129
14. Apertura por el flanco
11. Defensa india de rey .... 133 1 P3CD; 1 C3AR; 1 P4AD .... 165
Ataque Nimozowitsch-Larsen 166
Variante clásica . . . . . . . . . . . . 134 Catalana. . . . . . . . . . . . . . . . . . 168
Ataque de cuatro peones. . . . . 136 :Ataque indio de rey . . . . . . . . . 171
Variante del fianchetto . . . . . . . 138 Inglesa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 173
 1
Desarrollo y tácticas
En ajedrez la apertura es la parte
del juego en la que cada uno de los
contendientes trata de situar sus ar-
mas tan ventajosamente como le
sea posible para la lucha que se
avecina en el juego medio.
DESARROLLO
El proceso de mover las piezas
más allá de su cuadro original se de-
nomina «desarrollo ". Al decidir en
qué casilla estará mejor situada (o
desarrollada) una pieza, hay que to-
mar en cuenta varios factores. Ge-
neralmente no es una buena idea
desarrollar una pieza a un cuadro en
particular, si la única razón para ello
es ejercer alguna amenaza táctica
18
transparente. Una vez la amenaza
ha sido anulada por la réplica del
contrario, la pieza desarrollada que-
da mal situada; no sirve para nada.
Un simple ejemplo lo puede consti-
tuir un movimiento normalmente ju-
gado por principiantes: después de
1 P4R, P4R, el movimiento 2 D5T
conlleva la amenaza de 3 DxPR+ y
la poco profunda idea de 3 A4A se-
guida de 4 DxPA++ (mate del Pas-
tor). Las negras replican a 2 D5T
con 2 ... C3~ (1).
Su P4R queda entonces protegido
y puede contribuir a acelerar su de-
sarrollo atacando la dama blanca ya
sea con 3 ... C3AR con 3 ... P3CR
seguido de .. . A2C.
Normalmente es una buena tácti-
ca realizar un movimiento que desa-
rrolle una pieza a un cuadro útil y
que al mismo tiempo lleve consigo
una amenaza. De esta forma pode-
mos salvar un «tempo, (unidad de
tiempo equivalente a un movimien-
to) porque nuestro rival puede utili-
zar su movimiento de réplica para
reaccionar contra la amenaza. Si es-
ta réplica no contribuye a su propio
desarrollo, entonces nuestro último
movimiento ha sido hecho libre de
carga; hemos ganado un tempo. Si
la réplica de nuestro contrario es
también un movimiento de desarro-
llo , realmente no hemos ganado na-
da porque cada bando ha hecho un
movimiento de desarrollo más. Ni
8 Desarrollo y tácticas
unos ni otros hemos perdido nada
en esa transacción.
Consideremos por ejemplo la si-
guiente secuencia de movimientos:
1 P4R C3AR (Defensa Alekhine) 2
P5R C4D. Las blancas parecen ca-
paces de llegar a un movimiento de
desarrollo jugando 3 A4A porque tal
movimiento ataca al caballo negro;
sí las negras retiran el caballo con
3 C3C, el alfil de las blancas está
ahora bajo el fuego y el tiempo que
fue «ganado» en el tercer movi-
miento debe ser devuelto en el cuar-
to, cuando el alfil se retire (4 A3C o
4 A2R) .
LA INICIATIVA
La palabra «iniciativa» aparece
una y otra vez en los libros de aje-
drez. Veamos qué se entiende por
iniciativa y por qué tiene tanta im-
portancia. Al iniciarse una partida,
las blancas tienen ventaja porque
es su turno de mover. Esta ventaja
se ha comparado muchas veces
con la del servicio en tenis, pero
mientras el servicio consigue la vic-
toria en casi el 90 % de las partidas
en el tenis de clase superior, la ven-
taja de las piezas blancas corres-
ponde aproximadamente a un 32 %
en partidas entre maestros (un 22%
las ganan las negras y el 46 % ter-
minan en tablas). Estos valores indi-
can una ventaja global medía para
las blancas de aproximadamente 55
a 45.
Una característica evidente de la
iniciativa es la de que sí las negras
hacen los mismos movimientos que
las blancas mientras sea lícito, más
pronto o más tarde las blancas ten-
drán una ventaja aplastante. Razo-
nando sobre un nivel menos artifi-
cial, casi siempre se da el caso de
que las pos1c1ones simétricas son
favorables al jugador al que toca
mover. La única excepción a esta re-
gla se da en el juego final , asunto
que ahora no nos concierne.
No deseando mantener una posi-
ción simétrica, normalmente las ne-
gras rompen la simetría entre los
dos primeros movimientos.
Cada movimiento de las negras
juega su papel para contrarrestar los
planes de desarrollo de las blancas.
Si la estrategia de apertura de las
negras tiene éxito, neutraliza la ini-
ciativa de las blancas, o aun mejor,
toman la iniciativa para sí mismas.
Sí las negras fallan a este respecto,
las blancas pueden emplear su ini-
ciativa para montar un ataque, ga-
nar material o conseguir alguna ven-
taja posicional significativa.
¿Cómo es posible decir quién es
el que toma la iniciativa? Esta pre-
gunta no es tan ingenua como pue-
da parecer, porque muchos jugado-
res confunden la iniciativa con una
serie corta de amenazas fácilmente
contrarrestables. De hecho sólo los
jugadores experimentados pueden
juzgar cuándo una iniciativa es ima-
ginaria (temporal) o real.
La iniciativa por sí misma no
constituye una ventaja tangible ; su
valor radica en la posibilidad de
cambiarla por una ventaja de otra
índole; por material, por un ataque o
por un final ventajoso. Probable-
mente le parecerá paradójico al lec-
tor que discurramos tanto en busca
de un final ventajoso, cuando esta-
mos dedicados a exponer los princi-
pios de las aperturas. No obstante,
es muy corriente encontrar en libros
sobre aperturas en el ajedrez , afir-
maciones tales como "···Y las ne-
gras tienen el mejor final >• . En la va-
riante de Ruy López tenemos un
excelente ejemplo de las blancas
 Desarrollo y tácticas 9

utilizando su iniciativa al jugar con dremos haber perdido un tempo ,

vistas al mejor final desde tan tem- porque su desarrollo se ha visto
prano como es el cuarto movimiento acrecentado por ese último movi-
(ver pág. 61 ). miento , mientras que los nuestros
La lucha por la iniciativa es uno de no han recibido ayuda alguna al mo-
los motivos base en el juego de ver la pieza atacada. Si por otra par-
aperturas. Las blancas parten con te el atacante es una pieza recién
un movimiento (o un tempo) de ven- movida entonces no hemos perdido
taja y mientras está desarrollando un tempo .
sus fuerzas trata de mantener e in-
cluso acrecentar esa ventaja. Por
tanto, es de la mayor importancia no EL CENTRO DE PEONES
sólo desarrollar piezas a buenos
cuadros, sino también hacerlo lo Mientras el control del centro es la
más rápidamente posible. Durante tarea primariamente asignada a las
el siglo XIX, cuando aún no se había piezas durante las primeras etapas
iniciado un estudio científico de las del juego, la ocupación real del cen-
aperturas en el ajedrez, la rapidez tro normalmente se deja a los peo-
de desarrollo se consideraba tan im- nes. En cuanto al centro de peones ,
portante, que los jugadores sacrifi- existen dos puntos de vista distintos.
caban gustosos material, en su inte- El planteamiento clásico aboga por
rés de conseguir una gran iniciativa. la idea de instalar tantos peones co-
El Gambito Muzio (pág. 40) es un mo sea posible en las proximidades
ejemplo sobre este tema. Las blan- del centro apoyando tales peones
cas sacrifican primero un peón y lue- con cualesquiera medios necesa-
go un caballo a fin de conseguir un rios. Así los clásicos gozarían te-
sustancial avance de desarrollo. niendo un centro de peones blancos
Existe tan sólo un principio gene- en muchas de las variantes de la
ralizado que puede tomarse como lí- Defensa India de Rey : 1 P4D,
nea orientativa para quienes desean C3AR; 2 P4AD, P3CR; 3 C3AD,
emplear correctamente su tiempo, A2C; 4 P4R (2).
desarrollar rápidamente sus piezas
e impedir que el contrario retenga
una iniciativa importante. Durante la
apertura no mover dos veces la mis-
ma pieza. Esto es un principio, más
que una regla rígida. Es fácil ver lo
que hay detrás de ello: si movemos
una pieza que ya ha sido movida co-
rrectamente , hemos malgastado un
tempo que podría haberse emplea-
do para desarrollar otra unidad.
Naturalmente, tal principio admite
numerosas excepciones. Si una pie-
za es atacada, puede verse obliga-
da a mover. Si el atacante es una
pieza que nuestro contrario está ju-
gando por primera vez nosotros po- 2N
1O Desarrollo y tácticas
Los peones blancos controlan los
cuadros 5AD , 50, 5R y 5AR. Pero,
¿son realmente tan tremendos co-
mo parece?
Hay muchas formaciones de peo-
nes que siendo típicas de alguna
apertura o variante en particular,
han aparecido millares de veces en
las partidas de maestros. Otro cen-
tro de peones notable es el que sur-
ge de la variante de cambio de la
Defensa Grünfeld: 1 P4D, C3AR;
2 P4AD, P3CR; 3 C3AD, P4D;
4 PxP, CxP; 5 P4R, CxC; 6 PxC (3).
3N
Estas dos posiciones tienen en co-
mún el hecho de que los peones blan-
cos salen para ejercer tanta influencia
en el centro, que llega a parecer ex-
tremadamente difícil para las negras
rebatir el control central de las blan-
cas. Éste es verdaderamente un acto
de socavar el centro de peones blan-
cos, lo que representa una segunda
aproximación al problema total que es
la aproximación hipermoderna.
La escuela hipermoderna que fue
fundada por Breyer, Réti y Nimzo-
witsch , comparte el punto de vista
de que puede permitirse que el con-
trario construya una pared de peo-
nes aparentemente fuerte , siempre
que más tarde se puedan tomar me-
didas para socavarla y derribarla.
Así, en la posición de Defensa Grün-
feld expuesta en el diagrama ante-
rior, las negras atacan al centro blan-
co con un ... P4AD precoz, de forma,
que tal tensión se introduce en el
cuadro 40 de las blancas, en cuyo
caso el P4D pasará súbitamente a
ser vulnerable y quedar expuesto al
furor del alfil negro fianchiettado . Los
métodos empleados por las negras
para contrarrestar el centro de peo-
nes blanco en la Defensa India de
Rey serán comentados en el capítu-
lo oportuno (pág. 117).
No es difícil darse cuenta de que
las estructuras centrales de peones
más enérgicas, son aquellas en las
que el peón-dama y el peón-rey es-
tán ambos en la cuarta fila. De esta
forma controlan entre ellos cuatro
cuadros centrales en la mitad opues-
ta del tablero. Pero no siempre es
posible mantener peones en 40 y
4R. En la Defensa Francesa, por
ejemplo, después de los movimien-
tos 1 P4R, P3R; 2 P4D, P4D el peón-
rey en muchas variantes, avanza
eventualmente hasta 5R. Las negras
tienen entonces dos cam inos por los
que puede situarse y deshacer la es-
tructura del centro de peones blan -
co. Se puede atacar desde el frente
con P3AR o desde detrás con
P4AD. Ambos métodos se ilustrarán
en el capítulo de la Defensa France-
sa (pág . 75) , pero demos una mirada
rápida a una vari<¡.nte en particular:
1 P4R, P3R; 2 P4\D, P4D; 3 C3AD,
C3AR; 4 P5R, / C2D; 5 C3-2R,
P4AD. La base de peones blanca es
atacada de forma que 6 P3AD,
C3AD; 7 P4AR , P4C; 8 C3A, P5C
(4) , -y la cadena de las blancas es
nuevamente atacada desde junto a
la base :

4B
La idea de las negras es la de cam-
biar peones dos veces con ... PxPA
seguido de ... PxPD. De esta forma la
base de la cadena de peones blanca
se desplaza hacia la parte superior
dei tablero en donde es más vulnera-
ble a un ataque por las piezas negras.
Esta estrategia para arruinar una ca-
dena de peones resulta útil en mu-
chas posiciones. El principio es: cuan-
do la base de una cadena de peones
se desplaza hacia arriba del tablero,
va aumentando su vulnerabilidad.
CONTROL CENTRAL
El concepto más importante rela-
cionado con el desarrollo es el control
del centro del tablero. Contando el
número de movimientos que puede
hacer un caballo o un alfil; colocado
primeramente en uno de los cuatro
cuadros centrales de un tablero va-
cío, luego en uno de los cuadros de
la segunda fila (por ejemplo) y final-
mente en uno de los cuadros en el
borde o rincón del tablero, es fácil ver
que una pieza situada en el centro
normalmente ataca a más casillas
que la situada en otro lugar del table-
Desarrollo y tácticas 11
ro. De este simple experimento pode-
mos deducir la conclusión lógica de
que si es posible, nuestras piezas de-
ben ponerse en cuadros desde los
que se facilite el control del centro.
Por esta vía será posible ocupar más
tarde el centro y en consecuencia do-
minar una mayor parte del tablero.
El lector puede verse ahora tenta-
do a preguntar «¿sobre qué cuadro
debería yo desarrollar mis piezas?».
Si fuera posible dar una respuesta
simple, la mayoría de los más avan-
zados libros sobre aperturas en el
ajedrez quedarían obsoletos. Exis-
ten muchos planes de desarrollo dis-
tintos que las blancas pueden adop-
tar. En réplica a cada uno de estos
planes, las negras también pueden
elegir entre varios sistemas de desa-
rrollo. La combinación entre ambos
planes es lo que da origen a una
apertura determinada o a variantes
sobre tal apertura.
Mejor que intentar dar unas normas
generales para el desarrollo de pie-
zas, es de mayor utilidad que el inte-
resado se confeccione una lista de las
ventajas y desventajas de desarrollar
los caballos y los alfiles sobre cuadros
particulares. Normalmente el desarro-
llo de la dama y de las torres depende
más de la estrategia del juego medio.
Sólo se puede dar una regla general:
No desarrolles prematuramente la da-
ma en la partida. A lo largo de este li-
bro el lector recorrerá varias posicio-
nes que ayudarán a comprender este
principio. También se encontrarán,
como en toda generalización, unos
pocos ejemplos contrarios.
DESARROLLO DE LOS
CABALLOS
Las casillas tradicionales para los
caballos son 3AR y 3AD tanto para
12 Desarrollo y tácticas
las blancas como para las negras.
Desde 3AR por ejemplo, un caballo
ataca los dos cuadros centrales 4D
y 5R y puede eventualmente mover
a 5C para unirse en un ataque con-
tra los oponentes 7AR y 7TR. Al de-
sarrollar un caballo a 3AR existe un
contragolpe importante que debe
ser recordado y salvaguardado don-
de sea necesario. Si el PR ha sido
movido, entonces la clavada puede
ser un fuerte golpe del oponente.
Consideremos la siguiente varian-
te del Giuco Piano: 1 P4R, P4R;
2 C3AR, C3AD; 3 A4A, A4A;
4 C3A, C3A; 5 P3D, P3D (5).
56
Hemos ya mencionado que las
posiciones simétricas favorecen al
lado que le toca mover, y ello sin ex-
cepción. Después de la iniciativa de
las blancas, virtualmente les garanti-
za alguna ventaja. Sin embargo , si
las blancas juegan 6 0-0 son ahora
las negras las que toman la iniciativa
con 6 ... , A5CR! y es el caballo de
las blancas que queda clavado con
su dama. Trata de aliviar la clavada
con 7 P3TR, A4T; 8 P4CR resulta un
error. Después de 8 ... , CxPC;
9 PxC, AxP (6) las negras han arrui-
nado el ala de rey blanca, ganado
dos peones por una pieza y amena-
zado tanto ... C4D como ... D3A.
6B
Así, 7 P3TR de las blancas no ha
servido para nada útil. Por el contra-
rio ha reaccionado ante las desven-
tajas blancas porque ha debilitado la
zona alrededor de su rey. Para que
las blancas se muevan fuera de la lí-
nea de fuego de los alfiles (es decir
fuera de la diagonal 1D-5T) se debe-
rá permitir que las negras rompan
las posiciones del rey blanco me-
diante ... , AxC . Tales debilidades
normalmente se evitan cuanto sea
posible.
Existen dos métodos corrientes de
tratar la clavada A5CR , tanto las
blancas como las negras.
(1) Evitarla moviendo P3TR .
(2) Los efectos de la clavada se
pueden reducir sustancialmente con
el movimiento A2R . Ambas válidas
para las dos bandos.
La clavada A5CD es normalmente
menos peligrosa que el correspon-
diente movimiento en el lado de rey.
Esto es debido a que el enroque es
mucho más frecuente por el lado del
rey que por el de dama, y el cambio

AxC doblando el peón AD no consti-
tuye corrientemente una amenaza.
El lector encontrará un comentario
completo de la clavada ... , ASCO en
el capítulo dedicado a la Defensa
Nimzo-lndia.
Las casillas alternativas para los
caballos son la 2R y la 20. El caba-
llo de rey normalmente se desarrolla
a 3AR en parte porque al mismo
tiempo que ejerce su influencia en el
centro con la posibilidad de ese,
protege el cuadro 2TR cuadro que
frecuentemente se hace vulnerable
después de enrocar por el lado de
rey. El movimiento CD20 se juega
por consiguiente con mucha más
frecuencia que el CR2R. Desde es-
tos cuadros de la segunda fila los
caballos controlan uno solo de los
cuatro cuadros centrales (4R o 40) ,
pero esto no significa necesaria-
mente que los movimientos sean in-
feriores bajo el punto de vista del
control central. Por ejemplo, el movi-
miento C020 deja el peón AD libre
para avanzar. Después de P3AD el
cuadro 40 recibe apoyo adicional
mientras P4AO añade presión en el
cuadro 50. En la Ruy-López cerrada
(pág. 56) se encuentra un ejemplo
de CD20 jugado en conjunción con
P3AD.
Un caso más agresivo de desple-
gar un caballo en la segunda fila, es
el que más tarde puede replegarse a
4AR o 4AO , desde donde su influen-
cia se deja sentir desde tan lejos co-
mo es la sexta fila. Durante la aper-
tura (o al principio del juego medio)
el movimiento C4AR o C4AD nor-
malmente se juega sólo después de
que el peón rey enemigo (o el peón
dama) haya, o bien avanzado a la
quinta fila, o eliminado del tablero.
Evidentemente, si nuestro contrario
tiene aún un peón en 20 o en 30
cuando nosotros jugamos C4AO él
Desarrollo y tácticas 13
puede expulsar el caballo jugando
P40 salvo, naturalmente, que su
peón dama esté inmovilizado (blo-
queado por nuestro propio peón da-
ma). Sin embargo no es sólo desde
los peones centrales que los caballos
en 4AR y 4AD deben temer un ata-
que. Es completamente normal para
el movimiento PSCO , actuar para ex-
pulsar a un enemigo al mismo tiempo
que se pretende mayor espacio en el
lado de dama. Consideremos por
ejemplo la siguiente variante de la
Defensa India de Rey: 1 P4D, C3A;
2 P4AD, P3CR; 3 C3AD, A2C;
4 P4R, P3D; 5 C3A, 0-0; 6 A2R,
P4R ; 7 0-0, CD2D; 8 PSD, C4A (7)
El caballo negro 4AO no puede
ser ahuyentado simultáneamente
con 9 P4CO porque el peón rey está
aprisionado.
78
Por tanto, las blancas continúan
con 9 D2A defendiendo el peón rey
y ahora las negras deben actuar in-
mediatamente para evitar 1O P4CO!
El tema principal para las negras es
el movimiento 9 ... , P4TO. Esto evita
un inmediato 1O P4CO. Si las blan-
cas eligen preparar el avance con
P3TO y T1 CD, las negras pueden
14 Desarrollo y tácticas

responder a P3TD con P4TD, de for- puede ayudar al contrario a ganar

ma que puede llegarse a un even- fuerza para un ataque por el flanco
tual P4CD por .. . PxP. como en el siguiente ejemplo (8).
En este ejemplo las negras podían El último movimiento blanco fue
jugar C4AD antes de .. . P4TD por- 7 ASCR clavando el caballo negro
que las blancas debieron tomarse frente a la dama. La partida prosigue
tiempo para acudir a la defensa de 7 ... P3TR; 8 A4T. Si las blancas reti-
su peón rey. Sin embargo en muchas
posiciones de este tipo ... , C4AD no
supone ninguna amenaza inmediata,
y por tanto las negras deberán
ver .. . P4TD antes que C4AD. Este
tema se encuentra frecuentemente
en la Defensa India de Rey.
Un comentario final sobre el desa-
rrollo de caballos: Raramente es bue-
no situar un caballo en el borde del ta-
blero. Desplegar un caballo a las
casillas 3TR o 3TD es generalmente
una inversión a largo plazo , porque
no influye sobre el centro. Ocasio-
nalmente se juega el movimiento
C3TR/C3TD como parte de una ma-
niobra para llevar el caballo a 8N
4AR/4AD. Un ejemplo de ello lo cons-
ran el alfil a 4A entonces 8 ... P4CR
tituye el Gambito Réti 1 C3AR, P4D;
también gana fuerza para el asalto
2 P4AD, PxP. Ahora las blancas jue-
de las negras en el ala blanca de rey.
gan frecuentemente 3 C3TD; segui-
8 AxC concede a las negras la venta-
do de CxP. Ésta es una de las relati-
ja de los dos alfiles sin ninguna com-
vamente pocas excepciones a la
pensación. 8 ... 2AC; 9 P4R, P4CR;
regla anterior.
10 A3C, C4T {9).

DESARROLLO DE LOS
ALFILES
En su virtud de su amplia libertad
de movimiento, los alfiles gozan de
grandes posibilidades de desarrollo.
Cuando se juega A5CD o A5CR el
alfil clava frecuentemente un caballo
contra el rey o dama enemigos. El
valor de tal clavada es una cualidad
más bien variable. Algunas veces
puede restringir al contrario a una
posición defensiva (el clásico ejem-
plo es 3 A5CD de las blancas en la
Ruy López) . En otras situaciones 98

Los movimientos 7º y 9º de las ne-
gras han sido los preliminares a un
ataque al ala de rey. El alfil proceden-
te de 1AD blanco habiendo sido des-
plazado por los alrededores del lado
de rey por el avance de los peones
negros, está a punto de ser cambia-
do (ver el último movimiento negro) .
Con esto se concede a las blancas la
ventaja de los dos alfiles, esperando
que al actuar de esta forma podrá sa-
car ventaja de la flojedad del ala de
rey. Como veremos, la actuación en
ese lado trabaja a su favor por la po-
sibilidad de un posterior avance de
los peones CR y TR. A esta posición
se ha llegado pocas veces en parti-
das de maestros. La experiencia en-
seña que el ataque de las negras que
se avecina es tan fuerte que constitu-
ye una gran ventaja.
Seguiremos ahora una partida
maestra que alcanza esta posición.
No esperamos que el lector com-
prenda los fines de muchos de los
movimientos. El propósito de este
ejemplo es demostrar cuán fácil-
mente se construye un ataque negro
después de que las blancas hayan
enrocado y mostrar la parte jugada
en el ataque por los peones que han
avanzado con ganancia de tiempo.
La partida sigue 11 A5C+, R1A (no
importa que las negras pierdan su
derecho a enrocar porque se nece-
sita su torre de rey en la fila TR para
ayudar en el ataque); 12 A2R (aquí
la mejor ocasión para las blancas es
el gambito 12 P5R que rompe el
centro antes de que las negras pue-
dan asegurar la posición de su rey)
12 ... CxA; 13 PTxC, C2D; 14 C2D,
D2R; 15 P4CR (esperando mante-
ner el avance de los peones negros)
15 ... P3TD; 16 P4TD, ASO! (aña-
diendo presión a la zona de alrede-
dor del rey blanco y preparando la
posibilidad de 17... D3A, que ame-
Desarrollo y tácticas 15
nazaría mate en 2AR y la ganancia
de un peón por 18 ... AxC 19 PxC,
DxPA); 17 0-0, C3A; 18 C4A, P4TR;
(ahora el ataque empieza en serio y
con unos pocos movimientos más la
partida queda superada); 19 PxP (Si
las blancas intentan ganar material
jugando 19 C6C, PxP; 20 CxT, se
encontrarán ellas mismas en mate
después de 20 .. . D4R); 19 ... PSC;
20 C3R, CxP (Las blancas están in-
defensas. Las negras amenazan
tanto 21 ... D5T como 21 ... C6C.)
21 AxP, D5T; 22 P3CR, CxPC;
23 R2C, CxT; 24 RxC, AxC3R y las
blancas abandonan.
Este ataque era posible porque el
rey negro estaba situado en lugar
seguro, 1AR y las blancas descuida-
ron su ocasión -12 P5R!- para rom-
per y explotar las líneas abiertas. Si
un jugador ha enrocado por el lado
de rey es mucho menos probable
que se pueda permitir el lujo de ju-
gar P3TR seguido de P4CR porque
deja al rey peligrosamente expues-
to. Como norma aproximada pode-
mos decir que la clavada es proba-
blemente ventajosa si el rey enemigo
está confinado en el ala de rey.
Lo mismo puede decirse de la situa-
ción correspondiente en el lado de
dama.
Otros aspectos del movimiento de
clavada 1 A5C se han comentado o
citado en el apartado del desarrollo
de los caballos.
En el cuadro 4AD un alfil ejerce
presión a lo largo de la diagonal de
2TD a 8 CR (y viciversa para 4AR) .
Frecuentemente esta presión es
muy útil en el caso del alfil desplega-
do a 4AD en una apertura de peón
de rey. La razón para esto aparece-
rá clara en el apartado sobre la debi-
lidad de los cuadros 2AR/7AR. Es
más bien poco corriente ver el alfil
de dama desarrollado a 4AR en una
 16 Desa'rr-C!IIO y tácticas
apertura de peón de dama, porque
la diagonal de 2TR a BCD es de re-
lativamente menor importancia, sal-
vo que el contrario haya enrocado
por el lado de dama.
Al desarrollar el alfil de rey a 4AD
es necesario considerar si es o no
es (o será) ventajoso para el contra-
rio atacar este alfil con el movimien-
to .. . C4TD. Al igual que con otras
muchas preguntas sobre el ajedrez,
la respuesta depende de la naturale-
za exacta de la posición, no siendo
posible acogerse a una generaliza-
ción satisfactoria. Sin embargo, po-
demos plantear al lector un par de
preguntas que él mismo se plantea-
ría al intentar valorar los méritos del
movimiento ... C4TD en tal posición.
(1) Si el alfil se retira a 30 o 2R, el
caballo enemigo en 4TD ¿está bien
situado o no? Salvo que el caballo
pueda ocupar más tarde el cuadro
5R la respuesta es casi siempre ne-
gativa porque poco puede hacer el
caballo que no sea retornar a 3AD
de donde vino. En muchas posicio-
nes derivadas de la Defensa Sicilia-
na será posible situar el caballo en
4AD apoyando primeramente esa
casilla en alguno o en todos los mo-
vimientos ... P4CD, ... T1 CD o D2A.
Aun así, a veces se da el caso de
que el caballo en 4AD logre poco.
(2) Si el alfil se retira a 3CD el cam-
bio ... CxA ¿da ventaja a un lado o al
otro? Generalmente este cambio de-
ja a uno de los jugadores con la ven-
taja de los dos alfiles. Por el contra-
rio, al recapturar el caballo con el
peón TD la columna de la torre se se-
miabre ejerciendo por tanto presión
en PT contrario, introduciendo la po-
sibilidad de llevar la torre de dama rá-
pidamente al centro o al lado de rey
después de T4TD. Estos dos facto-
res deben ser considerados conjun-
tamente con los efectos a corto plazo
del cambio. Sólo entonces se puede
hacer un asesoramiento preciso.
Un contragolpe importante es un
recurso táctico conocido como tijera
u horquilla y que normalmente es
empleado por las negras. Es nece-
saria la disposición que muestra el
diagrama.
10 N
No importa que el peón dama ne-
gro esté en 2D o en 3D. Las negras
juegan ... CxP. Si las blancas replican
CxC las negras recuperan la pieza
sacrificada formando tijera de alfil y
caballo con .. . P4D. La idea de esta
jugada es que conduce a la liquida-
ción del centro del enemigo. En posi-
ción anterior las blancas tienen dos
peones en los cuatro cuadros centra-
les y dos piezas apoyando el centro.
Después de completar las manio-
bras de la tijera, las blancas han cam-
biado un peón y una pieza; y su
control del centro se ha reducido sus-
tancialmente. El siguiente ejemplo ha
sido tomado de una partida jugada en-
tre los Grandes Maestros Ljubojevic y
Donner. La apertura fue así: 1 P4R,
P3D; 2 P4D, C3AR: 3 C3AD, P3CR;
4 P4A, A2C; 5 A4AD, CxP! (11).

11 B
Cuando las negras están en con-
diciones de usar el ardid de la tijera,
la blancas deben adoptar uno de los
dos caminos de actuación. Pueden
o bien capturar el caballo tal como
está descrito en el ejemplo esque-
mático de más arriba o bien pueden
intentar primeramente debilitar la
posición del rey negro. Este segun-
do camino es el que adoptó Ljuboje-
vic en la partida en cuestión:
6 AxP+, RxA; 7 CxC. Ahora se ha
restablecido el equilibrio de material
pero las negras tienen la ventaja de
los dos alfiles y el centro de las blan-
cas no es tan fuerte como lo fue dos
movimientos antes. El único incon-
veniente de la transacción bajo el
punto de vista de las negras es el
hecho de que su rey está aparente-
mente inseguro, pero este problema
se puede solventar sin muchas difi-
cultades. La partida continuó:
7... T1R; 8 C3AR, R1C; 9 0-0, 2CD;
10 P3A, P3C; 11 D3C+, P3R;
12 C3-5C, C1 A y las blancas no tie-
nen ventaja alguna.
En 3R o 3D un alfil apoya el centro
normalmente sin temor a un ataque.
La forma más corriente de ser ata-
cado un alfil en la tercera fila es por
Desarrollo y tácticas 17
medio de un caballo enemigo apare-
ciendo en 4CR. Usualmente la se-
cuencia ... C5CR, ... CxA se evita
tanto por P3AR como por P3TR. Sin
embargo esta maniobra se puede
permitir porque después de CxA la
recaptura PxC crea un centro de peo-
nes fuerte que proporciona por lo
menos una compensación adecua-
da por la pérdida de alfil por caballo.
Frecuentemente las blancas des-
pliegan ambos alfiles a la tercera fila
en la variante Kan/Taimanov de la
Defensa Siciliana (pág. 72).
Una línea orientativa, virtualmente
una regla de oro relativa al desarro-
llo de alfiles en la tercera fila dice: no
desarrolles alfiles en la tercera línea
frente a un peón rey o un peón da-
ma. El peón central debe quedar li-
bre para mover, ocupar, añadir apo-
yo al centro y abrir camino para el
desarrollo de las piezas.
2 R/7R y 2 D/7D son cuadros que
normalmente están ocupados sólo
por alfiles empleándose para la de-
fensa . Esto es en parte debido a que
el alcance de tal alfil quedará limita-
do por un caballo en la tercera fila.
La excepción más notable a esa re-
gla se ve en muchas variantes de la
Defensa Siciliana en la que el alfil de
las blancas en 2R se emplea fre-
cuentemente en el juego medio tan-
to en ataque como en defensa. En la
variante Dragón , por ejemplo, (pág.
70), 7 A2R blanca evita que las ne-
gras jueguen ... C5CR, lo que ataca-
ría al alfil en 3R y más tarde este al-
fil apoyará al avance P4CR .
EL FIANCHETTO
«Fianchetto " es el nombre que se
le da a la secuencia P3CR/P3CD se-
guido de A2CR/A2CD en la que el al-
fil se desarrolla en una de las diago-
18 Desarrollo y tácticas
nales largas (1 TR-8TD o 1TD-8 TR) .
De un alfil desarrollado de esta for-
ma se dice que está fianchetado. En
algunos de los modernos sistemas
de defensa, la primerísima opera-
ción de las negras es «fianchetar»
su alfil de rey : 1 P4R, P3CR; 2 P4D,
A2C.
12 8
Desde 2CR o 2CD un alfil incre-
menta el apoyo al centro al igual que
aplicando una presión latente al
cuadro más distante sobre la diago-
nal (1TD y 2CD). En los primeros
tiempos de la teoría del ajedrez, los
alfiles rara vez se desarrollaban en
las diagonales largas. Durante el úl-
timo medio siglo transcurrido, el
fianchetto ha sido mejor comprendi-
do y actualmente se le ve frecuente-
mente en partidas de todos los nive-
les. Un alfil fianchetado no sólo
puede emplearse bajo el punto de
vista ofensivo , sino también suponer
una defensa para un rey enrocado
situado tras él en 1CR.
A veces se desea cambiar un alfil
fianchetado contrario. La forma de
llevarlo a cabo se muestra en el si-
guiente diagrama.
13 8
Las blancas han desarrollado su al-
fil de dama a 3R asegurando (al jugar
P3AR) que las negras no puedan ata-
car el alfil mediante .. ., C5CR. Enton-
ces las blancas sitúan su dama detrás
del alfil de forma que ahora, después
del movimiento A6T, este alfil estará
defendiendo. En 6T las blancas ame-
nazan cambiar alfiles en ?C. Las ne-
gras no pueden retirar su alfil a 1T
porque ello dejaría su torre expuesta
a un ataque o captura. Por tanto de-
berá cambiar alfiles por sí mismo con
A6TR o dejar que las blancas cam-
bien alfiles a su voluntad.
Naturalmente las negras admiten
la secuencia P3AR, P3R, D2D,
A6TR, mientras se está formando y
se pueden tomar disposiciones para
evitar el cambio de su alfil fiancheta-
do. Se puede, por ejemplo, mover la
torre desde 1AR de manera que
cuando las blancas jueguen A6TR
se pueda retirar a 1TR desde donde
su influencia abarca toda la diagonal
larga. Otro método consiste en repli-
car a A3R con ... P3TR y a D2D con
R2T. Por este camino la blancas
pierden la posibilidad de jugar su alfil
a 6T porque ahora esta casilla está
guardada por el rey negro y su alfil.

LA VULNERABILIDAD DE
2AR/7AR
Para ambos jugadores los cua-
dros 2AR/7AR son los más vulnera-
bles ante un ataque temprano. Mu-
cho de la anterior teoría sobre las
aperturas de peón de rey ha sido
montada alrededor de esta vulnera-
bilidad; por esto el Gambito de Rey y
el Giuoco Piano fueron extremada-
mente populares durante el pasado
siglo y principios del actual.
Los cuadros 2AR/7AR deben su
importancia y su vulnerabilidad al
hecho de que al iniciarse la partida
están defendidos por el rey y por
ninguna otra pieza. Esto da lugar a
varias posibilidades de mate que a
veces se pueden emplear contra
buenos rivales. Casi con seguridad
el lector habrá caído alguna vez en
el mate del pastor poco después de
empezar a jugar. Tal desastre precoz
puede llegar sólo a consecuencia de
un gran descuido, aunque a veces
jugadores experimentados pierden
fácilmente por un truco táctico basa-
do en un ataque sobre 2AR/7 AR.
Seguidamente van algunos ejem-
plos:
14 8
Desarrollo y tácticas 19
(1) 1 P4R, P4R; 2 e3AR, P3D;
3 A4A, ASe; 4 e3A, P3TR?
S exP!!, AxD?; (si 5 ... PxC; 6 DxA y
las blancas llevan un peón de venta-
ja, con mucho mejor juego) 6 AxP+,
R2R; 7 eso++ .
(2) 1 P4, P4R; 2 e3AR, P3D;
3 A4A, A2R; 4 P4D, PxP; S exP,
e3AR; 6 e3AD, e3A; 7 0-0, 0-0;
8 P3TR, T1R; 9 T1R, e2D?;
1 O AxP+!, RxA (si el rey se mueve a
1A o a 1T entonces 11 C6R gana la
dama) 11 e6R!!, Rxe; 12 DSD+,
R3A; 13 OSA++.
(3) 1 P4R, P4R; 2 e3AR, e3AD;
3 ASe, P3TD; 4 A4T, P4eD; S A3e,
e3A; 6 P4D, exP?·, 7 AxP+ ' RxA·,
8 exP+, R1 R; 9 Dxe. Las blancas
han recuperado la pieza con un peón
como interés.
(4) 1 P4D, P3eR; 2 P4R, A2e;
3 e3AR, P3D; 4 e3A, e2D;
S A4AD, e1-3A; 6 PSR!, PxP?
7 PxP, e4T; 8 AxP+, RxA; (8 ... R1 A
pierde una pieza hacia 9 P6R); 9
ese+, R1 e (los demás movimientos
del rey conducen a la pérdida de la
dama después de 1OC6R) 1O DSD+,
y las negras abandonan pues no se
puede evitar mate en 7A R.
(5) 1 P4R, P3R; 2 P4D, P4D;
3 e20, P4AD,· 4 PxPD ' PRxP·,
S PxP, AxP; 6 e2R??, D3e; y las
blancas pierden . Deberán ceder un
caballo para evitar que se le haga
mate. Si por ejemplo 7 C3AR, las ne-
gras ganarán con 7 ... , AxP+; 8 R2D,
D6R++ .
(6) 1 P4R, P4AD; 2 e3AR, e3AD;
3 P4D, PxP; 4 exP, e3A; S e3AD,
P3D; 6 A4AD, P3eR; 7 exe, Pxe;
8 PSR, PxP??; 9 AxP+, RxA;
10 DxD y ganan .
En cada uno de los ejemplos ante-
riores una de las partes ha llegado
rápidamente a una posición perde-
dora porque ha fallado al no mante-
ner una vigilancia apropiada sobre
20 Desarrollo y tácticas
la casilla 2AR/7AR. Éstos no son
ejemplos aislados; existen literal-
mente millares de casos escondidos
en la literatura ajedrecística. El lec-
tor recorrerá más ejemplos durante
el estudio de la segunda parte de
este volumen. No podemos resaltar
con suficiente energía la importan-
cia del cuadro 2AR/7 AR en las aper-
turas. Hay que estar siempre al ace-
cho de los ataques y sacrificios en
los cuadros 2AR/7AR.
SEGURIDAD DEL REY
El rey es la pieza más importante
sobre el tablero. Debe siempre con-
templarse con el mayor cuidado. Al
principio de una partida el rey situa-
do en el centro del tablero es rara-
mente vulnerable. Si el juego se ha-
ce abrupto y de naturaleza táctica,
tener el rey en el centro es un gran
inconveniente porque puede verse
envuelto en una refriega con resulta-
dos posiblemente desastrosos.
Afortunadamente las reglas del
ajedrez ya nos dan medios para
apartar al rey del centro : el enroque.
Normalmente es aconsejable enro-
car más bien pronto en la partida.
Habitualmente el enroque forma
parte de la estrategia de la apertura.
Es raro dejar el enroque hasta el
juego medio, pero bajo ciertas cir-
cunstancias, particularmente si se
han cambiado damas, puede ser po-
sible prescindir totalmente del enro-
que. Después de todo, la idea de en-
rocar es principalmente para poner
al rey en un lugar seguro. Una vez
se hayan permutado las damas, el
peligro de un ataque sobre el rey
queda notablemente reducido, tan-
to, que las negras, satisfechas con
igualar en la apertura, a veces re-
nuncian al derecho de enrocar a fin
de cambiar las damas. La siguiente
variante es un ejemplo: 1 P4D,
C3AR; 2 P4AD, P3D; (la vieja De-
fensa India) 3 C3AD, P4R. Ahora las
blancas tienen opción de privar a las
negras de su derecho a enrocar:
4 PxP, PxP 5 DxD+, RxD (15).
15 B
Las negras pronto prepararán un
refugio para su rey con ... P3AD, de
forma que pueda establecerse se-
guro en 2AD en preparación para el
juego final. Con el cambio de damas
la ventaja de la apertura para las
blancas se ha reducido al mínimo y
un juego juicioso asegura tablas a
las negras.
En muchas aperturas es corriente
que enroquen ambos contendientes.
Por tanto el lector hará bien estu-
diando cuidadosamente los varios ti-
pos de debilidades que existen en
las posiciones de rey enrocado, para
aprender a evitarlas en su propio rey,
examinando los varios planes de de-
sarrollo que saquen ventaja de la de-
bilidad de la posición del contrario.
El punto clave para la seguridad
de un rey enrocado es la formación
de peones que lo protege. Una es-
tructura de peones que es ·al. mismo

tiempo segura y flexible es la dispo-
sición básica de peones en 2TR,
2CR y 2AR (suponiendo que haya
tenido lugar el enroque por el lado
de rey de las blancas). Normalmen-
te el peón en 2TR está apoyado por
el caballo en 3AR; así como por el
rey en 1C. Puede haber ahí un fuer-
te ataque en el cuadro 2TR a lo lar-
go de la diagonal 2TR-8CD , ataque
que se puede mitigar jugando
P3CR. Si el peón TR está en 3TR en
lugar de 2TR el contrario tiene un
objetivo que puede emplearse para
acelerar el ataque por el lado de rey,
ya sea a través del avance ... , P4CR
o amenazando sacrificar un alfil o
caballo en el cuadro 6TR.
Debido a la debilidad de la estruc-
tura de peones 3TR, 2CR y 2AR el
movimiento 3TR no debe ser jugado
al azar. Otro aspecto desventajoso
del movimiento 3TR se ha visto en la
sección sobre el desarrollo de los ca-
ballos. El movimiento crea una cierta
debilidad pero frecuentemente es
necesario y beneficioso. El ser capaz
de juzgar cuándo el movimiento 3TR
debe ser jugado o no jugado se ad-
quiere sólo por experiencia.
Hemos tratado del fianchetto en la
sección sobre el desarrollo del alfil.
Desarrollo y tácticas 21
Un rey enrocado normalmente que-
da bien disimulado detrás de un alfil
fianchettado. Para introducirse en
los dominios del rey el enemigo de-
be buscar un punto de entrada. La
forma normal de atacar tales posi-
ciones es abriendo la columna TR
avanzando P4TR , P5TR y PxPC.
Por este camino, una vez el alfil ha
sido cambiado con la maniobra an-
tes descrita, puede abrirse el cami-
no para un ataql.\e a mate a lo largo
de la columna TR.
Enrocar detrás de un peón CR
bastante avanzado (o recorriendo el
tablero con el peón CR frente al rey
enrocado) es una táctica muy agre-
siva con frecuentes rebotes . Si el
ataque no resulta bien, el rey ata-
cante queda sometido al furor del
contraataque del rival.
Mientras que el avance del peón
TR y del peón CR frecuentemente
debilita al rey enrocado, el avance
del peón AR normalmente no conlle-
va un peligroso riesgo. Con frecuen-
cia forma una parte útil del ataque
por el lado de rey o puede ayudar a
sostener un paso central con CR. La
única debilidad en la que se incurre
cuando se mueve el peón AR es a lo
largo de la diagonal 1CR-7TD.
 2
Importancia
de los peones
Los peones son el alma del aje-
drez- Philidor
Nadie puede aspirar a dominar las
intrincadas aperturas del ajedrez,
salvo que tenga ya algunos conoci-
mientos de la forma apropiada de
manejar sus propios peones y tener
idea de la actitud correcta a adoptar
frente a los peones enemigos. Los
peones forman la estructura firme, el
esqueleto, del tablero y si tus peo-
nes son débiles toda tu posición pro-
bablemente lo será también.
Si por otro lado , tus peones son
fuertes probablemente toda tu posi-
ción será sana y floreciente .
La estructura de peones desde la
apertura puede muy bien determinar
la actividad de tus piezas. Puedes
verte envuelto en la defensa de un
peón débil, o pueden tus piezas ser
expulsadas de la partida por peones
desafortunadamente situados. Más
tarde es en la configuración de peo-
nes donde residen factores tales co-
mo la debilidad de los cuadros.
Vamos a introducirnos, dentro de
lo posible, en un análisis sistemático
del juego de los peones.
DEBILIDADES DE LOS
PEONES
Los peones pueden llegar a debili-
tarse por dos caminos distintos.
Pueden ser flojos en la defensa o en
el ataque (normalmente se emplean
los términos de debilidad «estática,,
y «dinámica»). Consideremos en pri-
mer lugar los peones débiles en la
defensa. Los peones son las piezas
menos movibles en el ajedrez, por lo
que cuando un peón se ve amena-
zado de ser capturado, es a veces
bastante difícil sacarlo del campo de
las fuerzas atacantes. La forma más
económica de defender a un peón
en peligro es con otro peón; proteger
tal peón con una pieza puede hacer
perder actividad a dicha pieza que
así queda relegada a un papel de-
fensivo.
Cualquier peón que no pueda pro-
tegerse con otro peón deberá ser mi-
rado con desconfianza. Puede haber
una dificultad latente. Los prototipos
para esta clave de debilidades son
los peones aislados y los retrasados.
Un peón está «aislado» si los peo-
nes hermanos en columnas han de-
saparecido, y está «retrasado» si los
peones en columnas contiguas es-
tán demasiado adelantados para
defenderlo.
Naturalmente, los comentarios
del párrafo anterior no son más que
generalizaciones útiles . Ya sean
aislados o retrasados, son realmen-
te debilidades dependientes de la
configuración sobre el tablero del
conjunto. A medida que vayas le-
yendo y jugando las aperturas que
24 Importancia de los peones
figuran en este libro irás encontran-
do ejemplos (sobre todo en el Gam-
bito de Dama Aceptado) de posicio-
nes en las que un peón dama
aislado se presenta como un poten-
te instrumento de ataque . También
en la Defensa Siciliana hay varias
líneas en las que las negras juegan
un temprano ... , P4R quedándose
él mismo con un peón dama retra-
sado alcanzando así un buen juego
porque las blancas no tienen su
ejército bien dispuesto para explo-
tar este defecto. Sin embargo esto
son excepciones más que reglas.
El siguiente sorprendente ejemplo
convencerá al lector de lo serias
que pueden ser las flaquezas de
los peones.
16 N
Esta posición aparece en la parti-
da Sir George Thomas-Aiekhine,
Baden-Baden 1925. Sus notables
características son las debilidades
de dos peones blancos, -el peón
TD aislado y el peón AD retrasa-
do-. Esto ha llevado a una desmo-
ralización general en el campo
blanco. Las piezas blancas se ven
obligadas a ocupar puntos defensi-
vos , en particular el alfil de las blan-
cas se parece más a un peón mag-
nificado que a una columna de un
templo. Aun cuando el proceso ga-
nador es largo, no se presenta nin-
guna duda real sobre el resultado fi-
nal, pues las blancas en ningún
momento permiten una pizca de jue-
go activo . Siguiendo el diagrama la
partida termina: 1 ... , D4D; 2 D3R,
D4CD; 3 020, T4D; 4 P3TR, P3R;
5 T1 R, DST; 6 T1T, P4CD; 7 01 D,
TSA; 8 D3C, T3D; 9 R2T, T3T;
10 T3-1A, A2R; 11 R1T, T5-3A; (es-
to proyecta agrupar ... , D5A ... ,
T5TD y T3-3T, después de lo cual no
se puede defender el peón T; debido
a esta amenaza las blancas pronto
se verán forzadas a cambiar damas)
12 T1A-1CD, AST; 13 T1AR, OSA;
14 DxD, TxD; 15 P3T, A2R; 16 T1A·
1CD, A3D; 17 P3C, R1A; 18 R2C,
R2R; 19 R2A, R2D; 20 R2R, R3A;
21 T2T, T5-5T; 22 T1-1TD, R4D;
23 R3D, T3-4T; 24 A1A, P3TD;
25 A2C, P4TR; (con todas las pie-
zas blancas atadas es fácil forzar
nuevas dificultades en el ala de rey;
la amenaza es: ... PST); 26 P4T,
P3A; 27 A1A, P4R; (forzando el co-
lapso final) 28 PAxP, PxP; 29 A2C,
PxP; 30 PxP, PSC; 31 PxP, TxT; 32
PxT, TxA; 33 abandonan .
Este ejemplo ilustra sobre la relati-
va permanencia de las flojedades de
los peones, ya que una vez apare-
cen éstas, es difícil erradicarlas. En
la posición del diagrama 16 aun
cuando no existe una forma inme-
diata de que las negras ganen mate-
rial, éstas gozan de una ventaja de-
cisiva. El juego de las blancas
queda reducido a una pasividad
completa debido a la constante ne-
cesidad de defender sus débiles pe-
ones y las negras pueden construir
su posición a placer.

Antes de proseguir, mencionemos
dos cuestiones obvias pero impor-
tantes: en primer lugar, un peón ais-
lado o retrasado situado sobre una
columna abierta normalmente es
mucho más débil que otro que no lo
esté. Esto es debido a que un peón
sobre una columna abierta puede
ser atacado frontalmente por las pie-
zas mayores del contrario, y en se-
gundo lugar, no es sólo el peón por
sí mismo el que puede resultar de-
bilitado sino también la casilla en-
frente del mismo. Por ejemplo , en la
partida Thomas-Aiekhine arriba de-
sarrollada el cuadro 4AD estaba fir-
memente bajo el control de las ne-
gras sirviendo de avanzadilla de las
piezas negras.
A medida que se va reduciendo
por cambios el material sobre el ta-
blero, tienden a aumentar los incon-
venientes de los peones débiles en
lugar de disminuir, pues cada vez se
ha haciendo más difícil combinar la
defensa de los débiles con el juego
activo en otro lugar. En el diagrama
17 se ve gráficamente lo que ocurre
en el juego entre Rubinstein y Mars-
hall , Breslau 1912 :
17 8
Importancia de los peones 25
En las pnm1c1as de la partida,
Rubinstein rechazó un juego me-
dio prometedor en el que él tenía
dos alfiles contra dos caballos de
Marshall , a fin de' He_gar a este final
de piezas mayores. Su decisión
era indudablemente correcta tanto
subjetiva (Marshall era mejor en el
ataque que jugando finales) como
objetivamente. En un juego medio
la columna AR pudo ser utilizada
por las negras como punto de apo-
yo para un asalto al rey blanco
mientras que en el final realmente
alcanzado, el control de esta co-
lumna no tiene gran importancia y
las negras no tienen compensa-
ción alguna por sus peones aisla-
dos AD y AR. La debilidad de es-
tos peones fue suficiente para
decidir el resultado de la partida.
La partida siguió: 1 P4R!, D4TR;
(2 DxPA?, T3T; 3 P4TR, DSC deja
a las negras con juego en el lado
de rey con buenas ocasiones de
tablas. Normalmente puede sacri-
ficarse una torre para dar jaque
continuo . Las blancas no necesi-
tan apresurarse para ganar los peo-
nes débiles -que no escaparán-
y deberá primero garantizar la
seguridad de su rey), 2 ... , D4T;
3 PSR, T3T; 4 T2A, D3C+; 5 R2C,
T1 D; 6 T1-2A. Ahora las negras se
libran de las amenazas tácticas y
su posición queda colapsada. 6 ... ,
T1 A; 7 T2AR-2D, R1 T; 8 T6D,
D1C; 9 TxPA, T1C; 10 T8A, y las
blancas ganan.
El peón dama aislado constituye
una regla por sí mismo. Tarrasch di-
jo una vez: «Quien tema al peón de
dama aislado debe dejar el aje-
drez. , La debilidad estática de este
peón queda equilibrada frecuente-
mente por la gran tensión dinámica.
Dos ejemplos contribuirán a aclarar
la cuestión:
26 Importancia de los peones
18 8
• 19 8
En el diagrama 18 las blancas han
tenido éxito en su lucha contra el
peón dama aislado. Las torres blan-
cas están activamente colocadas en
la fila abierta y los caballos perfecta-
mente colocados dominan la situa-
ción. La pieza más débil sobre el ta-
blero es evidentemente el alfil negro
que queda encerrado por el peón
dama.
Es poco sorprendente, en vista de
la gran superioridad posicional blan-
ca, que resulte útil una combinación
que traduzca esta superioridad en
términos de material. La partida del
diagrama continúa: 1 DxT!, DxD;
2 CSxA, DxT; (si la dama se aleja,
sencillamente las blancas ganarán
dos torres y un alfil por la dama sa-
crificada) 3 TxD, PxC; 4 CxP, y las
blancas surgen con un peón extra
en una final fácil de ganar.
Consideremos ahora el diagrama
19. Nuevamente las blancas tienen
una gran ventaja, pero esta vez ve-
remos al peón dama aislado , como
. Debido al peón en 40 , las
b . ncas han podido colocar un ca-
ballo en el agresivo cuadro 5R. Las
demás también están dispuestas ac-
tivamente. Contrariamente, las fuer-
zas negras están muy pasivas y no
han podido bloquear el peón dama
blanco estableciendo una pieza en
50. En tal posición las blancas deben
vigilar las combinaciones basadas en
el perjudicial avance P5D. Ahora las
blancas ganan con: 1 CxPA!, RxC;
2 PSD, CxP; 3 CxC, D1C; (3 ... , PxC
sería contestado con 4 AxP+, R3C;
5 AxA, TxA; 6 DxT, CxD ganando)
4 CxA, TxC (si 4 ... , CxC; 5 TxA,
TxT; 6 DxP+); 5 AxT, etc.
En general podemos decir que la
tensión dinámica del peón dama ais-
lado procede del control de los cua-
dros avanzados 4R/4R y 4AD/4AD
así como de las posibilidades de
abrir el juego en un momento venta-
joso con P5D-P5D. En la posición
normal en la que el peón en 40 está
contrarrestado por un peón enemigo
en 3R el propietario del peón dama
aislado tendrá también alguna ven-
taja espacial en el centro. Cuando
se juega contra ello hay que poner
cuidado para neutralizar estas ven-
tajas blocando el peón y guardándo-
se de ataques directos contra el rey
enrocado o a lo largo de la columna
AD abierta. Si se llega a un desenla-

ce, el aislado peón dama corriente-
mente será otra flojedad distinta (po-
siblemente fatal).
En los dos diagramas siguientes
se muestran otras configuraciones
de peones que frecuentemente se
ven , y que pueden ser tanto débiles
como fuertes.
20 B
21 N
Los peones negros en 40 y 4AD
se denominan «peones colgan-
tes ».o «flotantes ». La fortaleza o de-
bilidad de estos peones depende del
Importancia de los peones 27
lado que tenga la iniciativa y de que
los propios peones estén inmoviliza-
dos o puedan avanzar libremente. El
diagrama 20 corresponde a una po-
sición de la sexta partida del Cam-
peonato Mundial entre Spassky y
Fischer, 1972. Aquí los peones son
algo dudosos pues están sometidos
a ataque y las negras no pueden
avanzarlos. Las negras han defendi-
do los peones con piezas , pero a
consecuencia de las medidas defen-
sivas tomadas para proteger los peo-
nes las fuerzas negras quedan algo
desorganizadas. Obsérvese en par-
ticular que el peón AD está clavado ,
lo que las blancas (Fisher) explota-
ron con su siguiente movimiento ;
1 C4D y la partida continuó: 1 ... ,
D1A ; 2 CxA, PxC; 3 P4R!, P5D
(después de 3 ... PxP, la estructura
de peones negros es desesperanza-
dora y Fischer hubiera recuperado
fácilmente y con intereses el peón) ;
4 P4A; D2R; 5 P5R, T1 C; 6 A4A,
RH; 7 D3T, C1 A; 8 P3CD. Pode-
mos ver cuán fácilmente el juego de
Spaz:ky ha decaído . Fischer ha ga-
na<;)o la ventaja de alfi l contra caba-
llo 1estando preparado para iniciar
con P5A un ataque decisivo por el
lado de rey. El cambio del alfil de da-
ma de Spassky ha dejado los cua-
dros claros de alrededor de su rey
muy debilitados. La formación de las
negras es abatida y guarda pocas es-
peranzas de contraatacar. El rey ne-
gro y los peones AD están sometidos
a una severa presión y el peón AD
pasado no ayuda, ya que está blo-
queado por el alfil y dama blancos.
Volviendo al diagrama 21 nos en-
contramos con una situación distinta.
Aquí los peones flotantes están bien
defendidos por piezas activas, y
avanzándolos inmediatamente las
negras pueden crear un peón pasado
verdaderamente fuerte . El final fue :
28 Importancia de los peones
1 ... , P50!; 2 02R, C4R; 3 PxP, PxP
(3 ... AxT?, 4 PxC); 4 TxT, AxT; 5 T1R,
P60! (6 DxC, DxD; 7 TxD, P?D y cot
ronan); 6 010, A5C; 7 OH, P70fi
8 TxC, P80:0; 9 T8R+, TxT; 1O Ox)2>,
A7R; 11 C3C, A2C; 12 06A, A4C;
13 01A, OxO; 14 AxO, T8R; 15 A3R,
T8T; 16 P4TO, A60; 17 P4A, T8C;
18 R2A, AxA; 19 CxA, TxP, y las
blancas abandonaron. El final es una
victoria fácil para las negras.
Una conclusión general a tener en
cuenta es que los peones flotantes
son débiles en la defensa (en efecto,
hay peones retrasados en columnas
contiguas) pero pueden formar una
fuerza de ataque si están libres para
avanzar.
Como ya indicamos en nuestros
comentarios sobre las aperturas, la
flojedad en la defensa no es la única
forma de debilidad que se manifies-
ta con los peones. Consideremos la
situación un tanto artificial del dia-
grama 22:
22
Éste es un final simple de rey y
peón. El material es el mismo pero
la posición de los peones no está
equilibrada. Las negras tienen una
mayoría de tres a dos en el ala de
rey mientras las blancas tienen una
posición semejante en el lado de
dama. La única diferencia en la po-
sición radica en los peones blancos
doblados. Si esta posición surge en
una partida maestra pocos jugado-
res con las piezas blancas dudarán
antes de abandonar, pLJeS la situa-
ción es sin esperanza; ¿a qué po-
dremos atribuir la derrota de las
blancas? Ninguno de los peones
blancos es débil en la defensa, to-
dos ellos se pueden defender tan fá-
cilmente como sus contrarios ne-
gros. Sin embargo, debido a los
peones CD blancos doblados los
peones del lado de dama son muy
flojos en el ataque. Las negras pue-
den avanzar su mayoría del ala del
rey y conseguir rápidamente un peón
pasado, pero ante un juego correcto
las blancas no tienen forma de crear
un peón pasado de la mayoría del
lado de dama.
23 B
En el diagrama 23 se exhibe una
forma distinta de debilidad en el ata-
que. Las blancas tienen un centro
de peones impresionante; así como

un alfil contra caballo y a primera
vista parece que todo marcha bien.
Sin embargo un examen más o fon-
do revela que todas las ocasiones
ganadoras están con las negras. El
magnífico centro de las blancas se
mantiene bueno mientras se con-
serve estacionario , pero si intenta
avanzar se deshará en polvo. El
lector recordará que un centro de
peones no se mira nunca como un
final por sí mismo , sino más bien
como un medio para adelantar un
ataque .
En esta posición el avance normal
P5R es posicionalmente suicida por
cuanto deja a las blancas con dos
series de peones doblados y aisla-
dos. La pretensión de atacar por el
ala de dama llevando un peón a
5AD está también condenada al fra-
caso ya que no hay ningún peón en
la columna CD para apoyar seme-
jante avance. Todo lo que pueden
hacer las blancas es situarse detrás
de su masivo pero inmóvil centro,
esperando que alguna cosa altere la
situación mientras las negras em-
piezan a organizar un ataque por el
lado de rey. La continuación fue .
1 TSC, D3T; 2 T5-5C, P3AR; 3 T5-4C,
P3C; 4 A3D, T2R; 5 P4A, C2C;
6 P3A, (6 DxP, DxD+; 7 TxD, C3R,
seguido de 8 ... , CxP; también es bue-
no para las negras) 6 ... , C3R; 7 A1A,
P4AR; 8 T4-2C, T3A; 9 A3D, P4CR
(amenazando 10 ... DxP+); 10 T1TR,
PSC; 11 A2R, C4C; 12 PAxP, P6A;
13 T3C; PxA y las blancas abando-
nan (Janowski-Lasker. Campeonato
mundial, 1909).
Como se puede ver en estos
ejemplos , grupos de peones que
contengan peones doblados, fre-
cuentemente son débiles para el
ataque. Sin embargo no sería justo
decir que todo complejo de peones
doblados constituyen una desventa-
Importancia de los peones 29
ja. Por ejemplo , al leer la sección
que trata de la Defensa Nimzo-lndia
encontrarás posiciones en las que
la perjudicial movilidad del complejo
de peones doblados queda com-
pensada por la tensión que la dupli-
cidad de peones comunica al cen-
tro. Otra desmostración de peones
dobles comunicando tensión al cen-
tro, nos la facilita la partida Gelfer-
Keener más adelante en este mis-
mo capítulo.
Ellecto~ebe convencerse de que
los peqnes dobles aislados son
unos serios inconvenientes en casi
todas las posiciones , pues a las nor-
males dificultades relacionadas con
los peones aislados se suma el he-
cho de que el principal peón no pue-
de ser defendido por piezas ma-
yores.
24 B
En el diagrama 24 tenemos otro
ejemplo que demuestra que la debi-
lidad real frecuentemente puede ser
el cuadro frente a los peones . El ca-
ballo blanco domina la posición ne-
gra y evita que las piezas negras al-
cancen la defensa del rey. Así se
llegó al bonito final de mate : 1 T3R,
30 Importancia de los peones
RH; 2 P4CR, T1CR; 3 ~P+!!,
RxD; 4 T3T+, CST; 5 TxC+, 'R3C;
6 T6T+, R4C; 7 P4A+, RxP; 8 C3R++.
Un tema táctico común es el sacri-
ficio del cambio para formar peones
dobles aislados. Normalmente esto
es más eficaz cuando las defensas
se quiebran en el proceso . Los
ejemplos mejor conocidos de este
tema se encuentran en la variante
Dragón de la Defensa Siciliana, pero
aquí se encuentran dos casos para
dar idea.
25 N
La continuación en el diagrama 25
fue: 1 ... , TxA!?; 2 PxT, DxP.
El sacrificio de las negras no con-
duce necesariamente a una ganan-
cia forzada pero proporciona exce-
lentes ocasiones prácticas contra el
rey descubierto y los peones débiles
de las blancas. La partida terminó:
3 CSR?, CxC; 4 PxC, T1A; 5 D3C,
OSA; 6 T2-1T, T5A; 7 P3A, C4A; 8
D6C, CxP; 9 DxPR+, R2T; 10 D3T,
DxPA; 11 P6R, CxP+; 12 R2C,
DxP+; 13 R3C, TST; 14 TxC, D3C+;
15 R2T, TxD+; 16 TxT, DxP; 17
T3CR, D4R, y las blancas abando-
naron.
26 N
Del diagrama 26 la partida siguió
1 ... , TxC; 2 PxT, 01 R; 3 D2A, (des-
pués de 3 R2A las negras simple-
mente juegan 3 ... D3R y 4 .. . T1 R)
3 ... DxP+; 4 R1T, C4R; 5 T1AR,
T1 R; 6 T4A, P3A; 7 D4R, C3C;
(7 ... DxPA; 8 TxPD no es muy claro)
8 DxD, TxD; 9 TxPD, (las negras
también ganan después de 9 T2A,
C4R, pues ambos peones AD pron-
to caerán) 9 ... CxT; 1O PxC, TxPR;
11 TxPT, T7AR; 12 T7C, TxPA;
13 TxPC, TxP; 14 T3C, RZA. No les
fue difícil a las negras ganar el final.
Puesto que cualquier grupo de peo-
nes conectados debe contener por
lo menos uno que no esté defendido
por sus compañeros, se deduce que
una posición con muchos peones
aislados normalmente contiene más
peones débiles que el que tiene po-
cos. Para terminar esta sección he
aquí una historia para ilustrar este
principio.
La posición del diagrama 27 pro-
viene de la partida Petrosian-Barc-
za, Budapest 1955. En su libro de
las mejores partidas de Petrosian , P.
H. Clarke dijo: «La formación de las
blancas está en perfecto orden. Las
negras están hechas trizas. Como

norma general los grupos más pe-
queños de peones (a veces llamados
«islas») son los mejores. A lo largo
de lo que resta de la partida los peo-
nes irán cayendo como ciruelas ma-
duras». La partida terminó 1 ... A2R;
2 TxPC, T3A; 3 TxT, TxT; 4 T8T+,
R20; 5 T7T+, T2A; 6 TxT+; RxT;
7 OxP, 07T+; 8 R3A, 070; 9 0 1C,
P4A; 10, C3C, A5T; 11 C2R, A2R;
12 P3T, A5C; 13 C3C, R3A; 14 CxP,
R4C; 15 C60+, R5T; 16 CxP, A6T;
17 C5R, y las negras abandonaron.
27 N
ESTRUCTURAS DE
PEONES
Aparte de la debilidad individual de
los peones, pueden surgir otros va-
rios tipos de defectos posicionales
atribuibles directamente a una es-
tructura de peones inferior. Normal-
mente esto sucede cuando demasia-
dos peones han quedado fijados en
cuadros del mismo color. La manifes-
tación más corriente es el «mal alfil »
(un alfil cuya movilidad está obstruida
por sus propios peones) y la apari-
ción de cuadros vacíos (huecos) .
Aquí tenemos un ejemplo llamativo.
Importancia de los peones 31
28 B
En el diagrama 28 las blancas lle-
van una enorme ventaja debido a
los huecos en 5AR y 5TR que se
pueden usar como avanzada para
sus piezas y debido también al de-
sesperado alfil negro en 2C que en
esta posición es mucho menos va-
lioso que un peón. Las dificultades
de las negras se ven aumentadas
por un caso serio de ahogo. Los peo-
nes blancos han ganado tanto espa-
cio que las negras se ahogan. El
plan ganador no es difíci l de seguir.
Meramente, las blancas han de rea-
grupar sus piezas para apoyar un
eventual sacrificio CxPD. Nueva-
mente las negras están desampara-
das pues no tienen ninguna jugada
activa y lo único que pueden hacer
es ir barajando sus piezas. La parti-
da continúa: 1 01 A, T1 O; 2 03T,
A1A; 3 A3R, T20; 4 T1T-1A, T1 O;
5 T1 R-1 O, A20; 6 CxPO!, CxC;
7 AxPA, A1A; 8 A4CR!, AxA; 9
PxA, T20; 10 CSA, 010; 11 AxC,
C1A; 12 PSA, C3C; 13 P6A, PxP;
14 PxP, TxA; 15 OxT, OxO; 16 TxD y
las negras abandonan .
El mal alfil es una situación casual
de ciertas aperturas, particularmen-
te de la Defensa Francesa. Si se
32 Importancia de los peones
bloquea la estructura de peones, la
debilidad de estas piezas puede
persistir durante toda la partida.
29 B
En el diagrama 29 vemos el triunfo
de un buen caballo sobre un mal alfil
en una final. La norma general en to-
da posición de alfil contra caballo es
que el jugador que tiene el alfill debe-
rá intentar no poner sus peones en
cuadros del mismo color de su alfil.
En el diagrama, la posición del alfil
negro tiene un objetivo tan limitado
que ni siquiera el peón AD pasado es
suficiente para salvar la partida; el
juego continuó: 1 P5A (un falso sacri-
ficio para liberar el avance 4AR para
el caballo), 1 ... , P4C; 2 P4TR, P3A; 3
PxP, PxPC; 4 C1C, A2D; 5 P6A+,
R1R; 6C3A, P5C; 7 C4T, A3R;
8 C6C, A2A; 9 C4A; R2D; 10 R2R,
P4T, 11 R3R. (Ahora las negras está
virtualmente en zugzwang -cual-
quier movimiento que se haga debe
perder material, pues su rey debe
permanecer en 20 para detener el
P6R y su alfil debe seguir en 2AR pa-
ra guardar los peones de dama y
TR-. 11 ... A1C; 12 CxPT, A2A;
13 C4A; A1C; 14 C2R, A3R; 15 R4A,
R1A; 16 R5C, R2A; 17 C3A, R1A;
18 R6C, R1C; 19 P7A+, R1A; (si
19 ... AxP+, 20 R6A, R1 A por traspo-
sición) 20 R6A, AxP; 21 P6R, A4T;
22 CxP, A1 R; 23 C3A, y las negras
abandonan. El avance del peón de
dama es inmediato y decisivo.
30 N
Volviendo al diagrama 30 se ve
otro tipo de desventajas nacidas por
poner demasiados peones en cua-
dros del mismo color.
Aquí los peones negros en 2TR,
3CR y 4AR están todos ellos en
cuadros claros y en consecuencia
los cuadros oscuros en el ala de rey
han resultado seriamente debilita-
dos. La flojedad de estos cuadros
viene acrecentada por el hecho de
que el alfil de rey negro, que debe-
ría cubrirlos normalmente ha sido
ya cambiado. Los huecos en los
6AR y 6TR negros son especial-
mente prominentes. Las blancas
ganan rápidamente después de 1 ...
D2A; 2 PxP, PxP; 3 P6C!, DxP;
(3 ... , PxP ; 4 C5C conduce al mate)
4 AxC, DxD+ (4 .. ., DxA; 5 TH-1 C);
5 AxD, etc.
Es bien sabido que una estructura
de peones equilibrada y simétrica
tiende a posiciones de empate,, Las

aperturas más agresivas en el aje-
drez pretenden crear posiciones de
peones desequilibradas formándose
así mayores situaciones ganadoras.
En cuanto a las posiciones desequi-
libradas distinguiremos entre dos
clases de peones: la mayoría de peo-
nes en el centro y la mayoría de
peones en una ala.
31 N
En el diagrama 31 las blancas tie-
nen una magnífica mayoría central
de peones hábilmente apoyada por
dos alfiles. A los dos alfiles no les
gustan las posiciones bloqueadas,
pero en situaciones abiertas como la
del diagrama, la posesión de los dos
alfiles es una ventaja importante. El
rápido avance de los peones blan-
cos dificulta a las negras la coordi-
nación de sus fuerzas. La partida
continúa: 1 ... R2D; 2 T1A-1R, P3R;
3 T1T-1D, C1D; 4 A4A, T1AD;
5 P4A, T1 R; 6 P5A, R2R; 7 A6D+,
R2D; 8 P4CD, P3TD; 9 A3C, T2R;
10 A4T, P3A; 11 P5D, PxP; 12 A4C+,
C3R; 13 TxP+, R3A; 14 T6D+, R4C;
15 T6C+ , y las negras abandonan.
He aquí un ejemplo ilustrativo de
un juego que muestra los devasta-
dores efectos que puede ejercer un
Importancia de los peones 33
ejército de peones centrales móvi-
les . Gelfer-Keene , Studént Olym-
piad, Dresden 1969: 1 P4AD,
P4AD; 2 C3AD, P3CR; 3 P3CR,
A2C; 4 A2C, C3AD; 5 C3A, P3R;
6 P3D, CR-2R; 7 A4A, P4R; 8 A5C,
P3TR; 9 A3R, P3D; 10 D1A, P3T;
11 T1CD, T1CD; 12 P3TD, P4CD;
13 PxP, PxP; 14 P4CD, P5A; 15 PxP,
PxP; 16 0-0, C5D; 17 D1 D, C2-4A,
18 C2D, A3R; 19 A5D, T1AD,
20 T1A, 0-0; 21 AxA, PxA (el peón
doblado aquí no supone una debili-
dad, sólo ayuda a reforzar el centro
de las negras), 22 AxC, PxA (la fuerza
de los peones blancos pasados, del
ala de dama, carecen relativamente
de valor ya que no pueden situar sus
piezas eficazmente para apoyar su
avance) ; 23 C3-4R, P6A; 24 C3C,
D3C; 25 D3D, P4R; 26 TR-1 D,
T2AR; 27 T1T, T1-1AR; 29 T1AR,
P4D; 29 C4-5A, P5R; 30 D1 D,
C6R!; 31 C7D, D3D, {32) y las blan-
cas abandonan. La posición final
bien merece un diagrama.
32 8
Un tipo muy corriente de posición
desequilibrada es cuando ambos
contendientes tienen mayoría de peo-
nes en alas opuestas. Si los dos han
34 Importancia de los peones

enrocado corto, el jugador con ma- tegia de las blancas ha triunfado y no

yoría de peones en el lado de dama se puede defender el peón dama;
frecuentemente tiene una ventaja. 22 T1A-1C, 020; 23 C4xPO, T1-1A;
Esto sucede por dos razones. En el 24 C4CTi.25 04R, P4A?; (un error,
juego medio, los peones del lado de pero las negras fueron perdiendo de
dama normalmente tienen libertad todas formas) 26 050+, OxO, 27
para avanzar mientras que los del C3x0 1-0.
lado de rey sólo pueden adelantar
con grandes precauciones por la po-
sibilidad de que su marcha adelante LOS PEONES Y EL
cree desventajas frente al rey enro- CONTROL DEL ESPACIO
cado. Además en el final, cuando los
dos rivales intentan crear peones Como norma general es bueno
pasados, puede ser ventajoso tener ganar espacio siempre que se pue-
un peón pasado en el lado de dama da, en el supuesto de que al hacerlo
que no pueda ser bloqueado por el no se introduzcan debilidades en el
monarca contrario. campo propio. La forma más segura
Un plan estratégico importante di- de fijar territorio es a través del
señado para contrarrestar la superio- avance de peones. Hemos visto ya
ridad latente de la mayoría de peo- (diagrama 28) un notable ejemplo
nes en el lado de dama es el «ataque de las dificultades que acompaña a
minoritario». Un ataque minoritario una posición trabada. El lector en-
consiste en el avance de un peón mi- contrará no pocos ejemplos más en
noritario contra un peón mayoritario lo que resta de este libro.
contrario, sobre la misma ala. El ata- Unas palabras más de aviso, ¡cui-
cante minoritario, espera que una dado con los golpes de flanco! Con-
vez despejado el humó de la batalla, sideremos el diagrama 33.
el peón <<extra» en;(a m¡3.yoría de su
contrario pasará a ~er débil y expues-
to. A manera de ejemplo de la estra-
tegia involucrada seguimos la partida
Keene-Patterson, 1963, que fue un
caso extremo de éxito de un ataque
minoritario 1 P40, C3AR; 2 P4AO,
P3CR; 3 C3AO, P40; 4 C3A, A2C;
5 A5C!, C5R; 6 PxP, CxA; 7 CxC,
P3R; 8 020, P3TR; 9 C3T, PxP;
10 C4A, P3AO; 11 P3R, A4A;
12 A30, 03A; 13 0-0, 0-0. (El esce-
nario queda ahora dispuesto para un
ataque minoritario. Las blancas ade-
lantarán sus peones y después de
haberse cambiado éstos, los peones
negros que quedan en el lado de
33 N
dama se debilitan.) 14 P4CO, C20;
15 P5C, AxA; 16 OxA, C3C; 17 P4TO,
T1T-1A; 18 P5T, C5A; 19 P6T, 02R; En esta posición las blancas han
20 PxPC, OxP; 21 PxP, TxP; la estra- intentado ganar un espacio extra en

el centro avanzando su peón dama
hasta 50. Debido a esto, la posi-
ción central ha quedado bloqueada.
Tradicionalmente la forma de en-
frentarse correctamente a un ata-
que por el flanco es contraatacando
por el centro. A las blancas les pa-
recerá que esto no es posible aquí
porque no tiene juego en el centro y
por tanto las negras pueden co-
menzar una avalancha de peones
por el ala de rey contra la que las
blancas son impotentes . La conti-
nuación fue: 1 ... P4AR; 2 A6T,
PSA; 3 AxA, RxA; 4 030, P4CR;
(la victoria es casi automática)
5 C2T, C3A; 6 P3A, P4TR; 7 R2A,
PSC; 8 PxP, PxP; 9 R2R, (tratando
de evacuar la zona del desastre,
pero esto pierde inmediatamente)
9 ... P6C; 10 C4C, CxC; 11 PxC,
AxP+ y ganan las negras.
UNA NOTA SOBRE
PEONES PASADOS
El estudio de los peones pasados
realmente corresponde más a un
manual de finales que a un libro so-
bre la teoría de las aperturas ya que
normalmente es en la etapa final en
la que el peón pasado entra en ac-
ción . Pero la acostumbrada división
del ajedrez en las tres partes: apertu-
ra, juego medio y final, es un tanto
arbitraria, y los peones pasados pue-
den aparecer muy pronto en la parti-
da. Normalmente es una buena idea
formar peones pasados . La partida
Gelfer-Keene antes transcrita es una
fina demostración de los fuerte que
puede ser un peón pasado protegido.
Importancia de los peones 35
Otro ejemplo instructivo es el peón
rey en la sexta jugada del Campeo-
nato Mundial entre Spassky y Fis-
cher en 1972.
Naturalmente los peones pasados
pueden ser también un inconvenien-
te , especialmente si están aislados ,
de forma que hay que asegurarse
de que se podrá apoyar al peón pa-
sado una vez se haya formado. Fre-
cuentemente no es bueno avanzar
un peón pasado demasiado rápida-
mente en el juego medio , sino más
bien retenerlo hasta tanto se pueda
llegar a un final. Si el peón se extra-
vía demasiado apartado de casa,
las fuerzas enemigas pueden co-
mérselo.
34N
En el diagrama 34 el peón negro
puede aparecer terrorífico, pero de
hecho pronto se perderá, pues las
negras no tienen defensa alguna
frente a la amenaza de T1 A-1 A, T2A
y T2xP.
APERTURAS DE PEÓN
DE REY

INTRODUCCIÓN
El movimiento 1 P4R es una de
las opciones más naturales de las
blancas como movimiento de aper-
tura de la partida, pues establece un
derecho en el centro y abre líneas
para el alfil-rey y la dama blancos .
Las réplicas a 1 P4R se pueden
agrupar en dos categorías genera-
les: aquellas en las que las negras
impiden que las blancas formen un
centro completo de peones con
2 P4D y aquellas otras en las que
las negras permiten tal centro con la
esperanza de utilizarlo a manera de
blanco de tiro más tarde en la propia
partida. Dentro de la primera clase
entran todas las defensas simétricas
empezando con 1 ... P4R, así como
la Defensa Siciliana (1 ... P4AD). La
segunda clase está representada
por la Defensa Francesa (1 .. . P3R),
la Defensa Caro Kann (1 ... P3AD, y
la Defensa Moderna (1 ... P3CR).
La répl ica más obvia a considerar
es 1 ... P4R pues por lo menos pare-
ce que con este movimiento no se
reducen las perspectivas de las ne-
gras. Todas estas razones para 1
P4R se aplican con igual validez pa~
ra las negras 1 ... , P4R. Naturalmen-
Aperturas de peón de Rey 39
te dado que la posición es simétrica,
las blancas aún tienen la ventaja del
movimiento -en cualquier caso las
blancas empiezan con esta ventaja-.
¿Cómo deben continuar ahora las
blancas? De acuerdo con el principio
general de que cada movimiento de-
be desarrollarse con una amenaza,
cuando sea posible. El curso lógico
de las blancas es observar los movi-
mientos que contribuyen a su desa-
rrollo atacando al mismo tiempo el
desprotegido peón rey negro.
El camino por el que las blancas
emprenden estas tareas depende
mayormente del estilo de juego que
prefieran. Frecuentemente el juga-
dor atacante decide una apertura en
la que las complicaciones empiezan
en una etapa temprana, como por
ejemplo en el Gambito de Rey. El ju-
gador posicional normalmente elige
para mantener la tensión algún tiem-
po y prefiere una de las aperturas
derivadas de 2 C3AR. Esto tiene la
virtud de introducir un Cé!ballo en el
juego y allanar el camino para el
eventual avance temático P4D. Las
negras, a su vez, deben buscar mo-
vimientos de desarrollo que protejan
al peón rey. Normalmente se eligirá
2 ... , C3AD.
 3
Gambito de Rey

Durante el último siglo el Gambito P4D posterior. Sin embargo el mejor

de Rey fue con mucho la apertura sistema de defensa de las negras
más popular a todos los niveles de supone aceptar el Gambito y recu-
juego. Las blancas ofrecen el sacrifi- perar el peón en forma que facilite el
cio de un peón en el segundo movi- desarrollo .
miento con la idea de conseguir un Por la verdadera naturaleza de las
desarrollo rápido abriendo líneas posiciones dinámicas que se deri-
para un ataque precoz contra el rey van del Gambito de Rey, la apertura
negro. En su época, el Gambito de es más popular con los jugadores
Rey frecuentemente supuso para principiantes o de club, quienes gus-
las blancas unas brillantes victorias tan de las tácticas de cortes y arre-
después de haber construido un pe- metidas . Contrariamente, hay que
ligroso ataque en la apertura, pero a considerar que el Gambito se jugó
medida que fue evolucionando la teo- tanto y durante tanto tiempo, que el
ría de las aperturas, se descubrió que análisis lo ha liberado de su terror a
las negras desarrollando sus propias nivel de maestro.
fuerzas en forma sensible, pudieron
conseguir una posición perfectamen-
te satisfactoria.
GAMBITO DE REY
Al ofrecer su peón AR en su segun- ACEPTADO
do movimiento las blancas pretenden
utilizar la columna AR para atacar al
débil punto negro en 2AR. Hemos
visto, en la introducción, como este
cuadro frecuentemente viene someti-
do a presión por un alfil en 4AD y un
caballo en 5R o en 5CR. Aquí las
blancas esperan abrir una tercera lí-
nea de ataque enrocando por el lado
de rey. Esto lleva la torre rey a 1AR
desde donde puede ejercer su in-
fluencia a lo largo de la columna AR .
Otro aspecto del Gambito es que
si las negras aceptan el peón (2 ...
PxP) su única unidad central es des-
viada facilitando a las blancas au-
mentar su control del centro con un 35 B
42 Gambito de Rey
1 P4R P4R
2 P4AR PxP (35)
3C3AR
Éste es el movimiento más natu-
ral. Evita el jaque D5T +y concuerda
con la estrategia general de las
blancas de desarrollo rápido del la-
do de rey.
3 ... P4CR
Las negras se anticipan a que las
blancas jueguen P4D en un futuro
no muy lejano, amenazando recupe-
rar el peón sacrificado con AxP.
4A4A
Nuevamente las blancas prosi-
guen su política de desarrollo del la-
do de rey sin olvidar el cuadro 7AR
de las negras.
4 ... P3D
Un movimiento sólido que impide al
caballo de las blancas usar su casilla
5R abriendo camino para el alfil de
dama negro. Después de 4 ..., P5C
las blancas pueden intentar el intere-
sante Gambito Muzio 5 0-0 cuando
sacrifica un caballo por una fuerte
presión a lo largo de la columna AR
5 0-0
En retorno del peón del gambito
las blancas tienen ahora tres tiem-
pos que favorecen el desarrollo. Su
último movimiento intensifica su pre-
sión contra el cuadro 7AR negro lle-
vando la torre a la columna AR.
5... P3TR
Es esencial apoyar el peón CR ya
sea ahora o después de 5 ... A2C ; 6
P4D, porque las blancas estarán en-
tonces amenazando 7 CxP, DxC;
8 AxP abriendo la columna e inician-
do por tanto un ataque muy peligroso.
6 P4D
Las blancas se benefician de otro
aspecto de su compensación . Cuan-
do las negras realizan la captura
2 .. ., PxP sacan un peón del centro
renunciando de este modo al control
de la zona. Ahora las blancas mon-
tan un formidable centro de peones
y sólo entonces avanza el ataque
por el lado de rey
6 ... A2C
Éste es mejor cuadro para el alfil
que 2R porque eventualmente las
blancas optan por abrir la posición
con P5R lo que resultaría útil para
tener tanto control como sea posible
sobre ese cuadro. Si se requiere el
alfil sobre la diagonal 1D-5TR en al-
guna etapa posterior, las negras
quedarán libres para jugar ... , -A3A
como de hecho ya hace en la línea
principal. Otro motivo para dejar va-
cante el cuadro 2R en esta etapa es
que puede ser un buen cuadro para
que las negras desarrollen su caba-
llo de rey.
7 P3A
Un movimiento de doble objetivo:
apoyando al peón dama posibilitan-
do D3C lo que añade ayuda al ata-
que contra 7AR. ·
7 ... C3AD
8 P3CR!
Ahora las blancas están prepara-
das para atacar. El texto pronto lleva
a abrir la columna AR.
 Gambito de Rey 43

8 ... P5C
9 C4T P6A

Las negras han tenido éxito man-

teniendo cerrada la columna AR ¿o
no?

10 C2D A3A

Parece como si las negras estu-

vieran buscando una ventaja. Con-
servan aún su peón extra e inician
un ataque sobre el caballo de rey
blanco. El caballo no puede retroce-
der ni avanzar a 5AR porque des-
pués de 11 C5A, AxC, 12 PxA, D2R, 36 N
el peón blanco AR es extremada-
mente débil y no queda ninguna es-
peranza de un ataque por la colum- La partida Spielmann-Grünfeld ,
na AR. No obstante quedan otras Teplitz Schonau 1922, continuó
posibilidades.
13 ... T2C
11 C2xP! PxC
12 DxP No 13 ... , PxC que pierde rápida-
mente ante 14 AxC, T2C; 15 A3C ,
Las blancas despejan la obstruc- A2R (forzado); 16 AxP, T2T; 17 A7 A+ ,
ción del peón a 3AR y su presión so- R2D; 18 D4C++.
bre el cuadro 7AR negro llega ahora
a su máximo. 14 C4A A5C

12 ... T2T Las blancas amenazaban C5T

Defendiendo su Talón de Aquiles.
15 D2C A4C
16 P3TR A2D
13 C6C
17 C5T T2T
18 P5R!
Un movimiento sorprendente por-
que en 6CR eiCaballo blanco en es-
te momento no está haciendo nada, Abriendo otra línea de ataque
ni atacando cosa alguna. (columna de rey) y desocupando si-
El objetivo de este movimiento es multáneamente el cuadro 4R para
acercar el caballo al centro mediante la dama.
C4A. Este fin no se puede lograr con
13 C2C, porque entonces las negras 18 ... PxP
podrían jugar 13 ..., A6T clavando el 19 D4R P4A
caballo frente a la torre blanca y se-
guidamente cambiar el caballo por el Forzado, ya que 19 ... T1T permite
hasta cierto punto inútil alfil. 20 C7C+ seguido de mate .
44 Gambito de Rey

20 TxP! AxT 4 ... , C3AR

21 DxA
Un movimiento de desarrollo que
Las blancas tienen una posición amenaza al peón dama blanco.
extraordinaria. 4 ... , DxP sacaría la dama demasia-
do pronto, p. ej., 5 C3AD, D3R+,
6 R2A amenazando 7 A5C+ y 8 T1 R
DEFENSA MODERNA
5 A5C+
1 P4R P4R
2 P4AR PxP Este jaque está proyectado para
3 C3AR P4D (37) cambiar el peón dama atacado, invi-
tando a las negras a replicar P3AD.
Naturalmente, a las negras les es po-
sible librarse del jaque interponiendo
una pieza en 20 pero esto no da a las
negras un juego activo semejante.

5 ... P3A
6 PxP CxP

Este movimiento fue adoptado por

Spassky después de aplicarlo varias
veces en partidas de exhibiciones
simultáneas. El cuadro 3AD es des-
pués de todo, el cuadro natural para
el caballo de dama negro y no hay
razón para que las negras teman el
cambio.
37 B

Las negras restituyen inmediata-
mente para abrir líneas de desarro-
llo. Su alfil de dama tiene ahora li-
bertad de movimiento y la función de
la dama se ha incrementado. Hubo
un tiempo en que este sistema cons-
tituyó la defensa favorita de muchos
de los jugadores mundiales más
fuertes , Spassky y Botvinnik entre
ellos.
7 P4D
Las blancas no pueden enrocar en
seguida debido a ?7 0-0? D3C+, ga-
nando el alfil. Ello bloquea la diagonal
1CR-7TD al mismo tiempo que ataca
sobre el peón AR negro adelantado.
7 ... A3D
Defendiendo el peón atacado.

4 PxP 8 D2R+

Las blancas están obligadas a Una alternativa especulativa a 8 0-0.

aceptar este peón, ya que 4 P5R? ¿Podrán las blancas sacar ventaja
está fuertemente atacado por 4 de la clavada que se aproxima sobre
P4CR. la columna de rey?
 Gambito de Rey 45

8 ... A3R
9 ese
Ciertamente parece como si las
negras estén en apuros. Ahora las
blancas amenazan ganar un peón.
Obsérvese que 9 P4A ?, 0-0; 1O
PSD, permite a las negras tomar ple-
na ventaja de la posición relativa de
la dama y el rey blancos con 1O ... ,
ASCR! (11 PxC? T1 R) .

9 ... 0-0

Sacrificando el peón por el interés

de acelerar el desarrollo y de abrir 38 8
una importante línea (la columna de
rey) para su contraataque 17 03A P4A
18 PSO P4e!
10 exA Pxe 19 P3TR P4TR
11 Axe PxA 20 030 PSe
12 OxP+ R1T
Las negras tienen un ataque ver-
Ahora las negras amenazan ga- daderamente fuerte.
nar la dama con 12 ... , T1 R. Sus
piezas menores se desarrollan en
cuadros activos, mientras que el CONTRA-GAMBITO
ala completa del rey blanco queda FALKBEER
subdesarrollada. En una posición
abierta tal como ésta, el H9erazgo 1 P4R P4R
en el desarrollo, y las o-ca8iones de 2 P4AR P40 (39)
ataque relacionadas, proporcionan
una amplia compensación por el
peón.

13 0-0 02A (38)

La partida Bhend-Medina, Lugano

1970 prosiguió:

14 03T 03e
15 030 T0-1R
16 e3A 01e

Amenazando 17 ... , P6A; 18 DxP

(no 18 P3CR?, AxP; 19 PxA, DxP+;
20 RH, D7C++); 18 ... , AxP+; 19
RH, C4T con juego ganador. 39 8
46 Gambito de Rey
Las negras pasan por alto el ofreci-
miento de un peón por parte de las
blancas, prefiriendo (temporalmente)
sacrificar ellas mismas un peón en
su interés de acelerar su desarrollo.
Después de su segundo movimiento
ambos alfiles negros tienen libertad
de acción y no deben enfrentarse
con ningún problema de desarrollo
3 PxPD
Naturalmente no 3. PxPR??,
D5T +, ganando.
3 ... PSR
Aspecto secundario del contra-
gambito. Las negras no sólo han fa-
cilitado su propio desarrollo (con
2 ... , P4D) sino que también obsta-
culizan a las blancas evitando un
temprano C3AR. También se puede
jugar inmediatamente 3 ... , P3AD con
rápido desarrollo , o bien 3 ... , PxPA.
4 P3D
Dando alguna ocasión al alfil de
dama y atacando el peón rey negro .
Como en posiciones similares en la
Defensa Moderna del Gambito de
Rey aceptado , un temprano P4AD
no es una tentativa para sostener el
peón dama, sino el inicio de un plan
para ganar control del cuadro 50 .
Sin embargo después de 4 ... , P3AD,
5 P4A, C3AR ; 6 P4D, PxPD; las ne-
gras tienen un buen juego debido
al fuerte peón en 5R por ejemplo
7 D3C, A2R: 8 PxP, 0-0; 9 C2R ,
CD2D ; 1O C3C, C3C ; con buen jue-
go para las negras.
4 ... C3AR
Las negras no pueden recuperar el
peón con 4 .. . DxP, debido a 5 D2R,
P4AR; 6 C3AD, A5CD ; 7 A2D , AxC
(única forma de conservar el peón) ,
8 AxA, C3AR; 9 0-0-0 ! DxPT; 1O PxP,
CxP (10 ... D8T+? ; 11 R2D, CxP+??
pierde una pieza con 12 DxC+);
11 P3CD, 0-0 ; 12 D4A+, R1 T; 13 A2C
y con la dama negra eliminada de la
partida las blancas disponen de un
enérgico ataque.
5 PxP CxP
Ahora las negras están amena-
zando 6 ... D5T+; 7 P3C, CxP!
6 C3AR A4AD
Cuadro natural para el alfil golpean-
do la debilidad de las blancas en 2AR.
7 D2R
Con este movimiento presionando
sobre la columna de rey aseguran
las blancas la ventaja para sí mis-
mas.
7 ... A4A
Existen otras formas para apoyar
el caballo pero ninguna de ellas es
satisfactoria para las negras (a) 7 .. .
D2R; 8 A3R!. (b) 7 .. ., P4AR ; 8 A3R ,
DxP; 9 AxA, DxA; 1O C3A. (e) 7 ... ,
DxP ; 8 C3-2D, P4AR ; 9 C3AD . (d)
7.. ., A7A+ ; 8 R1D , DxP+; 9 C3-2D! ,
P4AR; 1O C3AD. En cada caso las
blancas tienen ventaja.
8 C3A
Aumentando la tensión sobre la
columna de rey, 8 P4CR parece a
simple vista que gana una pieza,
pero las negras pueden permitir
que su alfil sea capturado: 8 .. . 0-0!;
9 PxA, T1 R y las blancas están per-
didas ahora que las negras han to-

mado el control de la columna de
rey.
8 ... D2R
No 8 ... , A5CD? ; 9 05C+
9 A3R AxA
Las negras pueden ganar un peón
con 9 ... CxC; 10 AxA , CxD; 11 AxD,
CxP; 12 A5CR , CxPD, pero des-
pués de 13 0-0-0 las blancas tienen
la iniciativa a manera de compensa-
ción.
10 DxA CxC
11 DxD+ RxD
12 PxC AxP
13 R2D (40)
40 N
Las blancas tienen la iniciativa,
por ejemplo 13 ... , A5T; 14 T1 R+,
R1 D; 15 T4R. Alternativamente
13 ... , A4A; 14 T1R+, R3A; 15 C4D ,
A2D; 16 P3TR planeando P4CR que
es sustancialmente mejor para las
blancas, de acuerdo con el análisis
realizado por el Gran Maestro Joe
Gallagher, experto en Gambitos de
Rey.
Gambito de Rey 47
DEFENSA CLÁSICA
1 P4R P4R
2 P4AR A4A
41 8
Este movimiento introduce la De-
fensa Clásica que fue el primer mé-
todo popular de rehusar el Gambito
de Rey. Las negras toman inmedia-
tamente ventaja de la vulnerabilidad
de las blancas a lo largo de la diago-
nai1CR-7TD. La idea es retrasar al-
gún tiempo el enroque de las blan-
cas por el lado de rey limitando así
la presión que puede actuar sobre
7AR de las negras.
3C3AR
Este movimiento de despliegue
ataca al peón rey por segunda vez.
Obsérvese que capturar inmedia-
tamente este peón le cuesta a las
blancas una torre: 3 PxP??, D5T +;
4 P3C , DxPR+ ; y 5 ... , DxT.
3 ... P3D
Defendiendo el peón rey y abrien-
do vía para el desarrollo del alfil de
48 Gambito de Rey

dama. Obsérvese que 3 ... C3AD se blancos. Son preferibles 6 ... 0-0 y
une con la tijera 4 CxP, CxC; 5 P40! 6 ... P3TD.

4 C3A 7C4TD C5D

Un movimiento de desarrollo natu- Consecuente con su último movi-

ral que prepara la posibilidad de ju- miento.
gar C4TD y cambiar el irritante alfil.
También 4 P3AD es prometedor in- 8 CxA PxC
tentado ocupar el centro con 5 P40. 9 P3A

4 ... C3AR 9 PxP es peligroso por 9 ... , C20

(amenazando 1O ... , CxPR) con un
El movimiento de desarrollo más juego irresistible debido al efecto de
natural. la clavada) 1O A4A , D2R; 11 0-0,
0-0-0; cuando las negras tienen un
5A4A juego verdaderamente activo.

Nuevamente un movimiento nor- 9 9 ... CxC+

mal manteniendo la estrategia de 10 PxC A4T
las blancas de ejercer presión con-
tra 7AR si 5 PxP, PxP; 6 CxP, las ne- 1O, CxP es interesante pero erró-
gras pueden poner a las blancas neo por 11 0-0!
en un terrible aprieto con 6 ... , 050;
7 C30, A3C.

5... C3A

Después de 5 ... , A3R, 6 AxA, PxA,

7 PxP, PxP; 8 CxP 050; 9 C30,
CxP; 1O CxC, DxC+; 11 02R, DxD+;
12 RxD las blancas tienen el mejor
final debido al peón rey negro aisla-
do. Pero también se puede jugar
5 ... P3AD; 6 P30, P4CD; 7 A3C,
02R, como en la partida Short-Spe-
elman, en la competición de candi-
datos de Londres de 1991.

6 P3D A5CR
42 8
El movimiento más corriente aun-
que no el mejor. La idea de las ne-
gras es la de debilitar el ala de rey Las blancas tienen ventaja por el
blanca por ... C50 seguido de cam- par de alfiles y la gran influencia que
bio en 3AR doblando los peones AR sus peones ejercen sobre el centro.
 4
Juego italiano
1 P4R P4R
2 C3AR C3AD
3 A4A (43)
43 N
Todas las aperturas que figuran en
esta sección surgen después del
movimiento 3 A4A de las blancas.
En el capítulo sobre la Ruy López
remarcamos que el movimiento del
alfil 3 A5C representa la continua-
ción lógica de la presión posicional
de las blancas contra el peón rey ne-
gro ¿qué se puede decir de este de-
sarrollo alternativo del alfil? Cierta-
mente el alfil en 4AD no está mal
situado ya que ayuda a controlar el
cuadro central 50 al mismo tiempo
que amenaza el débil cuadro negro
· ?AR. Pero la impresión general en-
tre los Maestros modernos es la de
que esto no es suficiente. Los recur-
sos defensivos de las negras son
bien conocidos, y frecuentemente
pueden igualarse a través de algu-
nas posibilidades tácticas que com -
prenden el emplazamiento del alfil
en 4AD (por ejemplo) , o la ocasión
de cambiar el caballo por el alfil con
... C4TD . Las aperturas tratadas en
esta sección son muy interesantes
tanto histórica (fueron las grandes
favoritas en el siglo XIX) , como tácti-
camente (sacrificando el alfil en 7AR
negro frecuentemente aparecen in-
teresantes combinaciones), pero sin
ser propenso a dar a las blancas
mucha ventaja contra jugadores ra-
zonablemente experimentados.
GI UOCO PIANO
1 P4R P4R
2 C3AR C3AD
3A4A A4A (44)
Desarrollando su alfil de rey en
su tercer movimiento en lugar del
caballo de rey, se evitan algunas de
las posibilidades tácticas que sur-
gen después de 3 ... , C3AR, por
ejemplo en respuesta a 3 ..., A4A ,
las blancas no pueden tomar en
consideración jugar 4C5C porque
la dama negra aún cubre este cua-
dro. Habiendo decidido que mover el
50 Juego italiano
alfil de rey es un plan sensato, debe-
mos preguntarnos si 4AD de las ne-
gras es el cuadro apropiado para
ello . La respuesta es claramente que
sí, porque ningún otro cuadro supon-
dría una desventaja para las negras.
Desarrollar el alfil en 2R es innece-
sariamente pasivo, en 30 evita que
las negras muevan el peón dama y
en 5CD sólo ayuda a las blancas a
formar un fuerte centro de peones.
(Las blancas responderían 3 ... ,
A5CD? con 4 P3A atacando al alfil y
preparando P4D.) Además el alfil en
4AD está bien situado pues guarda
el cuadro central 50 y ataca el cua-
dro central 2AR.
44 8
4 P3D
Después de este movimiento, a
esta apertura se la denomina fre-
cuentemente «Giuoco Pianissimo'' ·
Comentemos aquí simplemente que
4 P3D abre líneas para el alfil de da-
ma y deja libre la casilla 3AD para
ser ocupada por el caballo. Así ve-
mos que la orientación estratégica
de las blancas en esta apertura con-
siste en tratar de conseguir una ven-
taja por un desarrollo armonioso, ac-
tivo y rápido de sus fuerzas. En lu-
gar de 4 P3D, 4 P3AD es una ide~
popular que apunta a conseguir un
avance de P4D temprano. No obs-
tante después de, 4 ... , C3AR; 5 P4D,
PxP; 6 PxP, A5C+ las negras no se
encuentran en dificultad.
4 ... C3A
Las negras a su vez también de-
sean introducir sus piezas en el jue-
go rápidamente . No necesitan preo-
cuparse más de las amenazas
dirigidas contra su cuadro 2 AR, por
ejemplo, después de 5 C5C?, 0-0,
6 AxP+ , TxA; 7 CxT, RxC , tiene dos
piezas por una torre y un peón (que
por sí misma es una situación mate-
rial ligeramente favorable) y todas
las piezas blancas desarrolladas
han desaparecido del tablero dejan-
do a las negras con una gran ventaja.
5 C3A
Otro movimiento de desarrollo
simple. El caballo atañe claramente
a 3AD donde evita el avance .. ., P4D
del peón libre amenazando por sí
mismo ocupar el cuadro avanzado
50 en un momento posterior.
5 ... P3D
Ahora la posición es simétrica. Di-
fícilmente podemos decir igualada,
porque las blancas tienen aún la
ventaja de mover primero.
6ASCR
Continuación más agresiva de las
blancas clavando el caballo de rey
negro . Esta clavada es algo desa-
gradable para las negras pues las
blancas amenazan jugar C5D segui-

do de CxC+ deteriorando la estruc-
tura de peones del ala de rey.
6 ... P3TR
Tratando de romper la clavada in-
mediatamente. Si las blancas ahora
juegan 7 A4T, las negras continuarían
con operaciones para romper la cla-
vada con 7 ... , P4CR. Normalmente
este avance de peones del lado de
rey crearía serios problemas frente
al rey pero como las negras no han
jugado ... , 0-0 probablemente se po-
drán escapar.
7 AxC OxA
8 C50
Las blancas mueven su caballo
hacia un cuadro dominante. Las ne-
gras ahora tienen que defenderse
contra CxD y CxPA+ formando do-
ble de rey y torre.
8 ... 010
8 ... , D3C es una táctica alternati-
va interesante aunque probable-
mente inferior.
9 P3A
Las blancas emplean su iniciativa
para reforzar su centro y ganar es-
pacio en el ala de dama. Este movi-
miento mantiene a las piezas negras
apartadas del cuadro 4D y prepara
el avance P4CD.
9 ... C2R
Naturalmente las negras desean
cambiar el molesto caballo blanco.
10 P4CO
Atacando el alfil negro.
Juego italiano 51
10 ... A3C
11 CxA PTxC
12 P40!
El avance temático en el centro.
12 ... PxP
Después de este movimiento, las
blancas ganan ventaja en el centro
pero no había ninguna alternativa ra-
zonable. El peón rey negro está do-
blemente atacado y los intentos para
defenderlo fallan. Por ejemplo, 12 .. .,
C3C?; 13 PxP, CxP; 14 CxC, PxC; 15
DxD+, RxD; 16 AxP o 12 ... , A5C?;
13 PxP, PxP; 14 AxP+ , PxA; 15 CxP+
ganando material en cada caso.
13 CxP
Después de 13 CxP las negras pu-
dieron responder 13 ... , P4D atacan-
do el centro blanco. El mejor plan pa-
ra las blancas consiste en asegurar
un puesto activo para sus piezas,
preferiblemente a intentar establecer
un centro de peones que no se pue-
da mantener cómodamente.
13 ... 0-0
14 0-0 (45)
45 N
52 Juego italiano
El juego de las blancas es ligera-
mente superior ya que sus piezas
están mejor situadas. El mejor plan
para las negras es continuar con
14 .. . C3AD tratando de cambiar pie-
zas y llegar a un final de tablas. La
continuación 14 ... P40 es algo du-
dosa porque después de 15 PxP,
CxP; 16 03A las blancas poseen
gran presión.
GAMBITO EVANS
1 P4R P4R
2 C3AR C3AD
3 A4A A4A
4 P4CD!? (46)
46 N
Tal como ya vimos en el apartado
sobre el Giuoco Piano, no parece
probable que las blancas puedan
sacar mucha ventaja después de 4
P30 o de 4 P3AD. El argumento re-
presenta un importante intento de
inyectar vida al sistema. Al precio de
un peón las blancas esperan alcan-
zar el tiempo extra que necesitan
para construir un centro de peones
verdaderamente potente y dominan-
te. También se abre la posibilidad de
desarrollar su alfil de dama a 2CD o
a3TD.
4 ... AxP
«La refutación de un gambito fre-
cuentemente reside en su acepta-
ción» -Steinitz. Las negras deben
tomar este peón pues de lo contrario
las blancas ganarían espacio y tiem-
po sin haber una compensación evi-
dente para las negras.
5 P3AD
La principal virtud del gambito es
que ahora las blancas pueden jugar
este movimiento con ganancia de
tiempo, ya que el alfil negro está ata-
cado. Las blancas esperan ganar
control sobre el centro establecien-
do peones en 40 y en 4R.
5 ... A4T
Éste parece ser el refugio más ló-
gico para el alfil, ya que después de
6 P4D, PxP, el peón AD blanco está
clavado. De todas formas las blan-
cas no tienen motivos para temer
esta clavada.
6 P4D PxP
Se puede tener una defensa más
sólida mediante 6 ... , P30; 7 03C,
020; 8 PxP, A3C; 9 0-0, C4T, pero
en la práctica frecuentemente las
negras capturan el segundo peón.
7 0-0!
Las blancas ofrecen alegremente
un segundo peón.
7 ... P3D
Capturar el tercer peón mediante
7 ... PxP?! resulta algo goloso. Lo
 Juego italiano 53

que figura en el texto es un movi- Las negras no están amenazando

miento defensivo útil que bloquea la
débil diagonai1AR-7TD, abre líneas
para el alfil de dama y contribuye en
el control del cuadro 4R de las ne-
gras, conservando bajo control el
centro de peones de las blancas .
realmente con ganar el alfi l de rey
blanco pues después de 000CxA las
blancas siempre pueden recuperar
la pieza mediante D4T +.
10 A5CR

8 PxP Atacando la dama negra con un

Las blancas han cumplido su pri-
mer objetivo: el establecimiento de
peones en 40 y en 4R, amenazando
desalojar el caballo negro con P5D
tras de lo cual D4T +ganaría el alfil.
8 ... A3C
Defendiéndose contra la amenaza
de las blancas. Hemos llegado así a la
llamada <<posición normal» del Gam-
bito Evans que ha sido comentado y
movimiento de desarrollo.
Las negras aceptan una flojedad
en el ala de rey a fin de forzar el
cambio de alfiles de rey blancos.
11 A4A CxA
12 04T+ 020
Esto se juega preferentemente a
12 A2D porque las negras desean
000

analizado durante ¡más de 150 años! poder cubrir la diagonal 1CR-7TD

con su dama.
9 C3A
13 OxC 0 2A
Las blancas pueden proseguir es-
te ataque de varias formas, pero es- Retando a la dama blanca activa-
te simple movimiento de desarrollo mente situada.
actualmente se considera mejor.
14C50 (47)
9 ... C4T

Jugada con vistas al cambio del

alfil de rey blanco o forzándole a re-
tirarse de forma que ya no pueda
atacar más al débil cuadro 7AR de
las negras. Este movimiento parece
abandonar el desarrollo de las ne-
gras, pero de hecho es bien difícil
para las ellas desarrollarse normal-
mente en esta posición. Por ejemplo
después de 9 C3A seguiría el sa-,
000

crificio de apertura 1O P5R! , PxP ;

11 A3T! , y el ataque de las blancas
es muy fue rte (probablemente ga-
nando, puesto que el rey negro que-
da expuesto en el centro). 47 N
54 Juego italiano
Naturalmente las blancas no de-
ben permitir el cambio de damas. En
esta posición las blancas tienen
ventaja. El fuerte centro y las piezas
muy activas generan suficientes
ocasiones de ataque para proveer
amplias compensaciones por el peón
sacrificado.
DEFENSA DE DOS
CABALLOS
1 P4R P4R
2C3AR C3AD
3 A4A C3A
Con este movimiento las negras
inician la Defensa de los Dos Caba-
llos, complicada y táctica. Después
del evidente 4C5C las blancas ten-
drán una presión verdaderamente
fuerte contra el débil cuadro 7AR de
las negras . Por otra parte, las blan-
cas habrán movido dos veces su ca-
ballo de rey descendiendo en cuanto
a desarrollo. Las negras esperan
aprovecharse de esto (normalmente
al precio de un peón) contraatacando
y forzando las blancas a la defensiva.
48 8
4C5C
Las blancas aceptan el reto. Tam-
bién han sido analizadas profunda-
mente las jugadas 4 P4D, PxP ; 5 0-0,
A4A; 6 P5R (ataque Max Lange) y
5 ..., CxP; 6TIR, P4D; 7 AxP, DxA;
8 C3AD con grandes complicacio-
nes en ambos casos.
4 ... P4D
Defendiendo 2AR cortando la línea
del alfil. Una aguda idea resulta ser
la Variante Wilkes Barre, 4 ... , A4A,
que comentaremos en la próxima
sección. Ningún otro cuarto movi-
miento de las negras es válido consi-
derado a la larga; 4 ... , CxP? se ha
visto una o dos veces pero perderá
rápidamente después de 5 AxP+
(pero no 5 CxC?, P4D! (un movi-
miento de desarrollo que evita CxC)
5 PxP
Naturalmente las blancas no pue-
den jugar 5 AxP? por ... CxA; 6 PxC,
DxC; 7 PxC, DxPC gana para las
negras.
5 ... C4TD
Moviendo el caballo atacado y
amenazando cambiar el alfil de rey
blanco desprotegido. Después de
5 ... , CxP?! ; 6 CxPA, RxC; 7 D3A+
R3R; 8 C3A, da a las blancas un
ataque feroz.
6 A5C+
La continuación más lógica y con
la que las blancas aseguran mante-
ner un peón. Después de una retira-
da tal como 6 A3C?, las negras sim-
plemente pudieron jugar 6_... , Cxf!J... y
entonces recuperar su peon.

6 ... P3A
Virtualmente forzada, ya que des-
pués de 6 ... A2D ; 7 D2R (protegien-
do el alfil y atacando al peón blanco
de rey) 7 ... A3D; 8 0-0, 0-0; 9 C3A,
las blancas están con un peón por
encima y las negras tienen pocas
ocasiones de ataque . Obsérvese
que 7 ... , AxA?? ; 8 DxA+ pierde una
pieza negra y 7 ... , CxP; 8 AxA+,
DxA; 9 P4D, pierde el peón de rey
clavado .
7 PxP PxP
7 ... CxP? protege la estructura de
peones del ala de dama, pero sin
compaginar con las características
de la apertura, ya que el caballo ne-
gro se clava a sí mismo y cede a las
blancas un tiempo libre para un mo-
vimiento de desarrollo. Después de
todo, las negras tienen un peón me-
nos, y para ajustar este déficit de
material deben esforzarse en abrir
líneas y en aprovechar su mejor de-
sarrollo para atacar. Después de lo
ya expuesto, las blancas deberán
gastar otro tiempo moviendo nueva-
mente el alfil.
8A2R
Esta retirada es más segura que
8 A4T?!, (después de 8 D3A, T1 CD!
las negras sacrifican alegremente un
segundo peón para un gran desarro-
llo) que deja desprotegido el alfil pu-
diendo quedar expuesto a futuras
amenazas si las negras encuentran
la oportunidad de jugar ... 050 por
ejemplo: 8 A4T, P3TR; 9 C3A, P5R;
1O C5R, D5D ; (atacando a ambos:
alfil y caballo), 11 AxP+, CxA; 12 CxC ,
D4A! cuando el caballo blanco es
atrapado.
Juego italiano 55
8 ... P3TR
Retrocediendo el agresivo caballo
blanco.
9 C3A PSR
Nuevamente el caballo se ve for-
zado a mover. Ahora ya que 1O C1 C?
(subdesarrollando una pieza) deja-
ría a las negras con una gran inicia-
tiva en desarrollo, el caballo deberá
aventurarse solo y desprotegido en
el centro del tablero.
10 CSR
A primera vista esta posición pare-
ce buena para las negras, que apa-
rentan tener una amplia compensa-
ción por sus peones en forma de
mejor desarrollo y ocasiones de ata-
car. Sorprendentemente no hay nin-
gún camino conocido para que las
negras estén más seguras que en
una partida igualada,
10 ... A30
Una continuación lógica : atacar al
caballo negro con un movimiento de
desarrollo.
11 P4AR
Las blancas querrían mantener el
caballo en 5R . Lo indicado es mejor
que 11 P4D porque las blancas de-
sean enrocar tan pronto como sea
posible. Para ello y con seguridad se
necesita, o bien el caballo en 5R (en
donde bloquea la vital diagonal
2AR-8CD) o bien en 3AR (en donde
cubre el punto débil 2TR), así se
puede jugar 11 P4AR, PxP a.p.; 12
CxP, D2A; 13 0-0 , porque el caballo
protege el peón TR pero después de
11 P4D, PxP a.p. ; 12 CxP el caballo
56 Juego italiano
queda mal situado para la defensa
del ala de rey.
11 ... D2A
El caballo blanco apoyado en 5R
es como una espina en el lado de
las negras. Las negras esperan for-
zarlo a moverse amenazando recu-
perar su peón sacrificado.
12 0-0
Las blancas prosiguen su desarro-
llo satisfechas de devolver material ,
si al hacerlo se aminora el ataque de
las negras, ya que éstas acusan nu-
merosas debilidades en el lado de
dama.
12 ... 0-0
Las negras llevan su rey a lugar
seguro desarrollando una torre es-
perando continuar con el ataque.
13 e3A
Otro buen movimiento de desa-
rrollo.
13 ... Axe
Este movimiento restablece la
igualdad de material pero con el
cambio del alfil de rey negro desa-
parecen también muchas perspecti-
vas de ataque. Una idea mucho más
prometedora es 13 ... , A4AR como
fue jugado en Timman-Giigoric, Bad
Lauterberg 1977.
14 PxA DxP
15 P4D
Las blancas juegan muy activa-
mente abriendo líneas para que su
alfil de dama entre en el juego.
15 ... PxP a.p.
16 DxP (49)
49 N
16 AxP es menos preciso , pudien-
do las negras mantener el ataque
con 16 ... , C5C.
Ahora se ha aclarado la situación
que es favorable a las blancas. En
la partida Fine-Reshevsky, Nueva
York 1940, las negras siguieron con
16 ... , C5C creando dos amenazas ,
la evidente ... OxPT ++ y la más sutil
17 ... , 04A+; 18 RH, C7A+ . Pero
16 ... , C5C puede enfrentarse ven-
tajosamente con . .. 17 T4A! y si
17 ... , 04A+ entonces 18 040! for-
zando a las negras a entrar en un fi-
nal que seguramente ganarán las
blancas por sus dos alfiles y por los
peones aislados.
VARIANTE WILKES BARRE
1 P4R P4R
2 e3AR e3A[).__- ·
3 A4A e3A
4 ese A4A
Las negras ignoran la amenaza a
su cuadro 2AR en cuanto a desa-

rrollar una pieza y contraatacar in-
mediatamente contra el cuadro
2AR. El lector, si ve esta línea por
primera vez, puede muy bien que-
dar impresionado por la compleji-
dad de las operaciones tácticas si-
guientes. Pero todos los fuegos
artificiales parecen conducir sola-
mente a tablas.
50 8
5CxP
La respuesta natural: ganancia de
un peón, haciendo tijera de dama y
torre negras, y atreviéndose las ne-
gras a actuar según su antojo. Sin
embargo probablemente es más
fuerte 5 AxP+, R2R; 6 A5D , Anand-
Beliavsky Linares 1991 , uniendo
6 .. . T1 A con C3AR o 6 .. . 01 R con
7 P3D .
5 ... AxP+!
El hecho de que se pueda jugar el
movimiento anterior es por el con-
junto de 4 ..., A4A. Esta completa y
complicada variante refuerza los co-
mentarios hechos en la introducción
sobre la relativa debilidad de los
cuadros 2AR y 7AR.
Juego italiano 57
6 RxA
6 R1 A no ayuda a las blancas des-
pués de 6 ... , D2R; 7 CxT, P4D! con
buen contrajuego.
6 ... CxP+
7 R1C!
Éste es el único cuadro volante.
Después de 7 R3R las negras alcan-
zan un fuerte ataque con 7 .. ., D5T p.
ej. 8 D3A (para detener la amenaza-
da ... D7A+,) 8 ... , C4A 9 CxT (ahora
las blancas amenazan mate, pero
las negras llegan primero) 9 .. .,
050+; 10 R2R, DxA+; 11 R1R, C5D
(ahora las negras tienen amenazas
de ... CxD+ y ... CxPA+) 12 D7A+,
DxD; 13 CxD, CxP+; 14 R1 O, CxT;
15 CxP, P3D; 16 C4A, (amenazando
jugar 17 C3R manteniendo atrapado
el caballo negro) 16 ... , C7A!; 17 RxC,
A4A+; para ser seguido de .. . AxC
cuando las negras salgan con un
peón más .
7 ... DST
amenazando 8 ... 07 A++.
8 P3CR
Nuevamente lo mejor. Si 8 D3A,
C5D es fuerte, a veces 8 D1A es
contestado con 8 .. ., T1 A. Por ejem-
plo 9 P3D (expulsando el caballo
amenazante) 9 ... C3D (amenazando
reconquistar la pieza con 1O ... CxC)
10 CxC+, PxC; 11 D2R, C5D; 12 020 ,
D5C, y las negras ganan en consi-
deración de las dobles amenazas
13 .. . C6A+ y 13 ... C7R+. Observe-
mos de pasada que 12 ... , D4C!!
también gana y es más bonito (13
01 O, DxD!).
58 Juego italiano

8 ... CxPC te, pero las negras tienen aún tirada

a mano.
Un segundo sacrificio para romper
la posición abierta del rey blanco . 10 ... DSC+
11 RxC DSR+
9 CxT 12 RIC DSC+
13 R2A DST +
El movimiento 9 PxC? es dudoso 14 R1C
pero lleva a algún juego exquisito:
9 ... DxP+; 10 R1A; T1A!: 11 D5T! y Las blancas no tienen un buen ca-
el analista checo Rohlicek demues- mino para escapar del jaque conti-
tra que ahora pueden ganar las ne- nuado. Movimientos semejantes a
gras después de 11 .. . , P4D! (el ini- 13 D2C no ayudan : Por ejemplo
cio de una combinación diseñada 13 .. ., 050+ ; 14 R1T, (14 R1A?,
para separar el alfil blanco del caba- DxA+) , 14 ... , DxA; 15 DxP, D8A+;
llo y de su defensa en 7AR) 12 AxP, 16 01 C, D6A+; 17 D2C, 080+, etc.
C5C; 13 A4A, (si 13 A3C, se amena-
zaba ... CxPA) 13 ... , P4CD; 14 AxP+,
P3A; 15 A4A, C4D entonces la torre
negra de rey pronto entrará en el
juego con efectos devastadores.

9 ... CxT
10 D1A

Después de 1O RxC , DxA las ne-

gras ganarían el caballo blanco atra-
pado sacando dos peones. 10 A7A+,
R2R; 11 RxC, D5R+; 12 R 1C, con-
cede a las negras tiempo para aña-
dir otra pieza al ataque con 12 .. .
C5D. El movimiento del texto prote-
ge al alfil de dama amenazando ma- 51 N
 5
Ruy López
(apertura española)
1 P4R P4R
2 C3AR C3AD
3 ASC (52)
52 N
Ésta es la más fuerte de las alter-
nativas del tercer movimiento de las
blancas. Es el dominio favorito del
campeón mundial Gary Kasparov,
del ex campeón mundial Bobby Fis-
cher y de Nigel Short. Las blancas
desarrollan rápidamente su ala de
rey y continúan el plan iniciado mo-
viéndose hacia dos de los peones
de rey atacantes negros, esta vez
socavando sus defensas. Esta idea
básica es lógica, simple y sorpren-
dentemente difícil de contrariar. Nor-
malmente las blancas consiguen por
lo menos una ligera iniciativa persis-
tiendo bien en el juego medio .
La Ruy López es una de las más
antiguas aperturas en el ajedrez. Ruy
López fue un sacerdote español que
en 1561 escribió sobre las aperturas
en su obra Libro del Ajedrez. Este
mismo libro está considerado como
el primer intento científico de estudiar
la teoría de las aperturas. Desde en-
tonces casi todos los jugadores fa-
mosos han contribuido a enriquecer
la técnica que empezó Ruy López.
La Ruy López tiene numerosas
variantes distintas , cada una de las
cuales tiene sus propias característi-
cas. Algunas son reposadas, líneas
posicionales en las que las blancas
cierran el centro y maniobran para
un ataque al lado de rey, mientras
las negras reaccionan en el ala de
dama. Otras variantes son agudas y
complejas.
Las primeras luchas de la apertura
acostumbran a girar alrededor de
las fuerzas y debilidades de ambos
peones de rey. La primera presión
de las blancas va dirigida al peón
rey negro y a preparar P4D . Las ne-
gras dedican su atención a desarro-
llar sus piezas de tal forma que es-
tén preparadas para encontrarse
con P4D cuando éstas vengan. Al-
gunas de las justificaciones de la
Ruy López pueden ser algo difíciles
de comprender por los novatos pero
su conocimiento prepara el camino
para el futuro estudio de la más en-
sayada de las aperturas.
60 Ruy López (apertura española)
En esta sección veremos cuatro
ramas de la Ruy López: la variante
cerrada en la que las negras luchan
para mantener sus peones de rey en
4R a manera de punto fuerte en el
centro; la variante abierta, en la que
las negras abren el centro en el
quinto movimiento (cuando las blan-
cas dan la oportunidad de hacerlo);
la variante del cambio, en la que las
blancas consiguen la mejor estruc-
tura de peones al precio de ceder
la pareja de alfiles, y la Defensa
Schliemann , un enérgico contra-
gambito ensayado por las negras.
DEFENSA CERRADA
1 P4R P4R
2 C3AR C3AD
3 ASC (53)
53 N
Posicionalmente la mejor alternati-
va del tercer movimiento de las blan-
cas. Con este movimiento las blan-
cas desarrollan rápidamente su ala
de rey e indirectamente ejercen pre-
sión actuando sobre el peón rey ne-
gro atacando al caballo que lo está
guardando.
3 ... P3TD
Es sabido desde los tiempos de
Morphy que esta réplica es la mejor
para las negras. La justificación resi-
de en que una vez que las negras ha-
yan avanzado su peón dama (como
deberá hacer pronto o tarde a fin de
proteger su peón de rey y desarrollar
su alfil de dama) el caballo de dama
negro quedará clavado. El movimien-
to 3 ... P3TD aminora por adelantado
los efectos de esta clavada.
4 A4T
Vamos a tratar de la variante del
cambio (en una sección aparte) con
todo detalle (4 AxC) pero tal vez co-
mentemos aquí que 4 AxC no gana
un peón para las blancas porque
después de 4 ... PxA; 5 CxP, las ne-
gras tienen 5 .. . D5D recuperando el
peón con un juego fácil.
4 ... C3AR
Un plausible movimiento que de-
sarrolla una pieza con un contraata-
que contra el peón blanco de rey.
Más tarde las negras proyectan in-
cluir el movimiento ... P4CD expul-
sando el alfil blanco ganando espa-
cio en el lado de dama, pero sería
erróneo jugar para 4 ... , P4CD por-
que estaría insuficientemente desa-
rrollado para tratar inmediatamente
de un ataque contra sus peones de
ala de dama; por ejemplo P4TD.
5 0-0
Las blancas llevan su rey a lugar se-
guro preparando un avance\ por el
centro. El sacrificio implicado del peón
de rey es sólo un seudosacrificio co-
mo veremos en el apartado relativo
a la Defensa Abierta.

5 ... A2R
La Defensa Abierta que empieza
con el movimiento 5 ... , CxP será co-
mentada en otra sección . Con 5 ... ,
A2R las negras optan por una Defen-
sa Cerrada que es más popular
y en la que se intenta mantener un
peón en 4R de forma que el centro
blanco no resulte demasiado fuerte.
Con este fin a la vista, el alfil de rey
negro queda mejor situado en 2R
que, por ejemplo, en 4A pues en el úl-
timo cuadro será atacado al jugar las
blancas después de preparar P4D.
6 T1R
Los planes de las blancas van diri-
gidos a jugar P4D en circunstancias
favorables. La mayor parte querrían
poder montar y sostener un centro
de peones completo (peones en 4R
y en 40) . Así, la preparación natural
para P4D son los movimientos T1 R
(defendiendo el peón de rey) y
P3AD (intentando, después de P4D
llegar a ... , PxPD, con PAxP, con la
captura de un peón) .
6 ... P4CD
Ahora las negras han desarrollado
su lado de rey; ha llegado el momento
de ahuyentar el alfil de rey blanco. Si
las negras retrasan esto y juegan 6 ...,
P3D primero, las blancas replican
7 P3AD de forma que 7 ... , P4CD pue-
de unirse a 8 A2A salvando un tiempo.
7 A3C P3D
Abriendo líneas para el alfil de da-
ma y apoyando al peón de rey. En
lugar de 7 ... , 0-0 ; 8 P3AD, P4D, se
tiene el popular Ataque Marshall que
ha sido extensamente analizado por
los grandes maestros.
Ruy López {apertura española) 61
8 P3AD 0-0
El movimiento 8 ... , ASC es menos
preciso, porque las blancas tienen
un método efectivo de deshacer la
clavada aumentando su propia ven-
taja posicional, a saber, la secuencia
de movimientos 9 P3D seguido de
CD-20-1AR-3R. El caballo quedará
bien situado cuando llegue a 3R
pues podrá atacar los débiles cua-
dros blancos 50 y 5A. Si el peón da-
ma blanco ha llegado ya a 40 esta
maniobra no es posible pues un ca-
ballo en 3R separaría la torre de rey
blanca de la defensa del peón de rey
pudiendo entonces las negras ame-
nazar ganar. Por tanto la mejor polí-
tica de las negras es demorar el de-
sarrollo de su alfil de dama hasta
tanto las blancas se comprometan
definitivamente con P4D.
9 P3TR
Como sin duda el lector habrá de-
ducido de nuestro anterior comenta-
rio, la alternativa 9 P4D sería con-
testada por 9 .. ., A5C! con enérgica
clavada sobre el caballo de rey blan-
co. El texto está diseñado para evi-
tarlo. Sin embargo como 9 P3TR es
esencialmente un movimiento profi-
láctico , no de desarrol lo, las negras
han cedido un tiempo para iniciar
operaciones en el ala de dama.
9 ... C4TD
Las negras desean expansionarse
por el lado de dama jugando
... P4AD para lo que, primero, debe
mover el caballo que bloquea el ca-
mino del peón AD . Se elige 4T por-
que en ese cuadro el caballo ame-
naza cambiar el valioso alfil de rey
blanco. No obstante, igualmente se
podría jugar 9 ... , C1 C (intentando ...
62 Ruy López (apertura española)
CD2D) 9 .. . , A2C , 9 ... , P3TR y 9 ... ,
C2D.
10 A2A
Naturalmente las blancas no ceden
gustosamente la ventaja de los dos
alfiles. A primera vista el movimiento
A2A parece una nueva pérdida de
tiempo para las blancas, pero esto no
es realmente así, pues una vez el al-
fil blanco se ha movido fuera de al-
cance, el caballo negro queda más
bien mal situado en el borde del ta-
blero. Las negras pronto tendrán que
gastar un movimiento devolviendo el
caballo a una posición más central.
10 ... P4A
11 P4D
El tan esperado avance por el cen-
tro. Ahora las blancas tienen amena-
zas inmediatas contra el peón de rey
negro.
11 ... D2A (54)
54 8
Defendiendo el peón de rey y des-
pejando 1D para ser más tarde ocu-
pado por una torre.
Esta posición ha sido vista literal-
mente millares de veces en juegos
entre maestros, y muchos grandes
maestros siguen esta línea tanto
con blancas como con negras . Los
juegos medios resultantes son bata-
llas entre grandes sutilezas posicio-
nales y tácticas . Las negras todavía
no han igualado completamente pe-
ro nadie ha admitido sus desventa-
jas en la fase de apertura de la par-
tida para incrementar un poco la
presencia en el centro , pero mien-
tras las negras mantengan un peón
en 4R las blancas encontrarán difi-
cultades para progresar en esa par-
te del tablero.
Las perspectivas de las blancas
son notablemente superiores en el
ala de rey, y con un juego cuidadoso
se puede construir un fuerte ataque.
Se deberá desarrollar el caballo de
dama por la vía 20 y 1AR para 3R o
para 3C, para colaborar en el ataque.
En contrapartida, las negras tienen
las mejores ocasiones en el ala de
dama pero cuidando de no excederse
ya que esto conduciría sólo a debilitar
sus peones avanzados (el contrapun-
to P4TD es una de las ideas temáti-
cas de las blancas en la Ruy López).
La partida Fischer-Shocron, Mar
del Plata 1959 continuó:
12 CD-20 A2D
13 C1A TR-1R
Las negras esperan su momento
reforzando su posición. No empren-
derán operaciones activas hasta
tanto no sepan lo que pretenden ha-
cer las blancas.
14 C3R P3C \,
Jugada para evitar que los caba-
llos blancos invadan el cuadro 5AR.
Además se va preparando redistri-
 Ruy López (apertura española) 63

bu ir el alfil por la vía 1A a 3T o 2C en nes que pueden favorecer a las

algunas líneas. blancas.

15 PxPR 21 C4C AxC

Las blancas reducen algo la ten- Forzado, ya que las negras no

sión central a fin de acrecentar la pre- pueden permitir C6A+
sión sobre el cuadro SD negro, que
es un «agujero, en la posición negra. 22 DxA C3C

15 ... , PxP Evitando 23 P4TD

16 C2T
23 P3CR
Preparando el cambio del caballo
negro de rey, una útil pieza defen- Preparando mover el rey y situar
siva. la torre en la columna TR.

16 ... T1T-1D 23 ... P5A!

17 03A
Las negras amenazan 17 .. ., AxPT
exhibiendo un ataque sobre la dama.
17 ... A3R
17 ... , P4TR, 18 CSD!, CxC; 19
PxC deja el ala de rey negra más
bien debilitada.
Para defensa las negras desean
mover su caballo de dama llevándo-
lo al ala de rey pero· previamente
deben jugar este movimiento blo-
queando la diagonal 1CR-7TD. A un
23 .. ., C2D? seguiría 24 P4TD , PSC ;
25 PxP, PxP; 26 A3C y el alfil blanco
de rey queda magníficamente situa-
do.

18 C24C CxC 24 R2C C2D

19 PxC 25 T1T C1A
26 P4C
Las blancas abren la columna TR
con la esperanza de utilizarla más Un cambio de ataque al ala de
tarde para un ataque. dama.

19 ... D3A 26 ... , D3R

20 P5C!?,
Esperando cambiar damas.
desocupando 4C para un caballo.
27 D2R P4TD
20 ... C5A 28 PxP D3T
29 A3R DxP
Retornando el caballo al centro 30 P4T T1T
del tablero. Una línea más crucial
es 20 ... , AxP; 21 CSD, AxA (21 ... , 30 .. . DxP; 31 PxP puede ser me-
AxC? ; 22 AxA y las negras pierden jor para las negras que lo que fue ju-
material); 22 C6A+ con complicado- gado.
64 Ruy López (apertura española)

31 PxP OxPC
32 T1TR-1CO 03A
33 TGC!

La dama negra es perseguida y

las blancas ganan el control de la
columna TD.

33 ... 02A
34 T6-6T TxT
35 TxT T1A

Las blancas amenazaban 36 T7T

cuando la dama negra no podía de-
fender simultáneamente el alfil y el
peón AD. 55 8

36 04C

Amenazando jugar T7T seguido Con este último movimiento (5 0-0) ,

de 38 TxA y 39 DxT. parece que las blancas hayan deja-
do su peón de rey desprotegido. En
36 ... C3R la presente sección examinaremos
37 A4T T1C lo que puede suceder si las negras
38 T6A 010? capturan el peón.

Un error: Después de 38 ... , D2D 6 P40

el asunto aún es dudoso.
Naturalmente las blancas pueden
39 TxC! 01AO recuperar inmediatamente el peón
ya sea con 6 T1 R o con 6 D2R pero
39 ... PxT; 40 DxP+, R1A, 41 DxPR en cualquier caso las negras res-
con ataque ganador. ponderían con 6 ... , C4A forzando el
cambio del alfil de rey blanco por un
40 A7D! 1-0 caballo con lo que se llegaría a la
igualdad. Con 6 P4D las blancas ha-
Las negras abandonan ya que llan un plan mejor: abrir el juego a fin
después de 40 ... , DxA; 41 TxPC+ explotar su mejor desarrollo. Des-
perderían su dama. pués de todo las negras han emplea-
do tiempo capturando el peón de rey
blanco.
DEFENSA ABIERTA
1 P4R P4R 6 ... ~4CO
2 C3AR C3AO \
3A5C P3TO Rompiendo la clavada potencial
4A4T C3A en el caballo de dama, preparándo-
5 0-0 CxP se para jugar ... P4D

7 A3C P4D
8 PxP
Ahora se ha restablecido la igual-
dad de material. La posición de las
negras no parece demasiado mal
pero como ya iremos viendo aún se
presentarán dificultades.
8 ... A3R
Protegiendo el peón de dama que
está doblemente atacado.
9 D2R
Liberando el cuadro 1 D para una
torre de forma que las blancas pue-
dan ejercer presión a lo largo de la
columna de dama.
9 ... A2R
En esta etapa hay varios movi-
mientos alternativos para las negras
pero este simple desarrollo del alfil
de rey se consideró corrientemente
como la más sólida continuación pa-
ra las negras.
10 T1D 0-0
También es perfectamente jugable
a través de un complicado complejo,
10 ... , C4A; 11 AxP, AxA; 12 C3A, A5A!
11 P4A!
Explotando la clavada sobre el
peón de dama para posteriormente
abrir el juego. Ahora las blancas
amenazan PxPD ganando una pieza.
11 ... PCxP
12 AxP D2D
Una posible mejora es: 12 ... , A4AD;
13 A3R, AxA; 14 DxA, D1C; 15 A3C,
Ruy López (apertura española) 65
C4T; 16 CD2D , D2T; 17 C4D, CxC;
18 DxC, D3C ; 19 A2A, P4AD;
20 C5A, AxC; 21 AxA , TH-1 D;
22 T1 R, C3A, con oportunidades
equilibradas. Kavalek-Tal , Montreal
1979. En este punto se convinieron
tablas.
13 C3A
Después de 13 AxPT C4A! , las
negras tienen un excelente juego
13 ... CxC
14 PxC P3A
Eliminando el peón de rey blanco
y llegando aparentemente a un buen
juego para el alfil de rey negro en la
diagonal larga.
15 PxP AxP (56}
56 B
Esta posición se consideró alguna
vez que ofrecía iguales oportunida-
des a ambos jugadores, pero proba-
blemente esta valoración es inco-
rrecta. Un movimiento fuerte a
disposición de las blancas es 16
A5CR por ejemplo. 16 ... , AxP (16 ...
66 Ruy López (apertura española)

C4T?, 17 DxA+, DxD; 18 AxPD, ga- Todavía más presión sobre el peón
na un peón) , 17 T1T-1A, A3A; 18 dama negro. Las numerosas clava-
A3C! (amenazando A4TD ganando das y amenazas de clavadas en es-
el caballo) 18 ... , C1 D; 19 AxP, TxP; ta partida son de un efecto verdade-
20 D2A y las blancas quedan mejor, ramente placentero.
o 16 ... , R1T (evitando amenazas
tácticas tales como DxA+); 17 AxA, 23 ... e3A
TxA; 18 C5C (amenazando CxA 24 P4AO! T0-1AO
después de lo cual el peón de dama
debe caer) 18 ... , A1C ; 19 AxPT y 24 ... P5D?; 25 TxC y las blancas ga-
las blancas salen por lo menos con nan después de 25 ... , TxT; 26 DxTD+,
un peón por delante (19 ... P3TR; 20 o de 25 ... , PxT; 26 AxPT.
C3A, TxA!? ; 21 DxT, C5D; 22 C5R
gana para las blancas. 25 PxP A1C
La antigua continuación
La única defensa.
16 ese
26 A4A!
también proporciona buenas ocasio-
nes a las blancas.
Las negras no tienen permitido
Esto queda reflejado en la partida
ningún contrajuego de su peón alfil
Schmid-Kristinsson, Siegen 1970
pasado.
que terminó:

16 ... Axe 26 ... e20

17 AxA P3T 27 03e e4R
18 A3R 030 28 A3e!

Preparando ... C4R. La variante 28 AxPT, DxA; 29 TxT,

TxT; 30 DxC, PxP ; 31 AxPA, D7A!;
19 A3e e4R 32 040, T5A; 33 020, DxD; 34 TxD ,
20 T40! T5A sólo conduce a tablas después
de que las negras ganen el peón de
Amenazando 21 A4AR. dama.

20 ... P4A 28 ... P5A

21 T4AR! 29 TxT TxT
30 A2A T1R
Abriendo posibilidades de AxPA
seguido de DxC.
31 A40!
)
Ahora el caballo queda nueva-
21 ... R1T mente clavado por la amenaza de
mate; así las negras deben evitar
Despejando 1CR como cuadro de 32 P4A.
refugio para el alfil.
31 ... A2T
22 T10 e20 32 AxA RxA
23 03A! 33 A3A 1-0

Las negras abandonan porque no
hay defensa contra la clavada 34
T1 R.
VARIANTE DEL CAMBIO
1 P4R P4R
2 C3AR C3AD
3A5C P3TD
4 AxC PDxA (57)
57 8
Para un principiante, el movimien-
to 4 AxC siempre parece ligeramen-
te paradójico pues las blancas dan
voluntariamente a su rival la ventaja
de los dos alfiles. El secreto está en
que incluso tan prematuramente co-
mo es el cuarto movimiento, las
blancas intentan conseguir un final
de juego ventajoso. Después de que
las blancas subsecuentemente ha-
yan jugado P4D y cambiado su peón
dama por el peón de rey surge una
formación de peones que es favora-
ble a las blancas. Las blancas ten-
drán una mayoría de peones de
cuatro a tres en el lado de rey, ma-
yoría que se podrá utilizar en el final
del juego para crear un peón pasado
Ruy López (apertura española) 67
que a su vez se podrá intentar coro-
nar. Naturalmente las negras ten-
drán una mayoría de peones de
cuatro a tres en el lado de dama, pe-
ro los peones negros están paraliza-
dos ya que sus peones de AD están
doblados y ante el mejor juego de
las blancas, las negras no pueden
conseguir por sí mismas un peón
pasado.
A manera de experiencia, el lector
debe retirar del tablero el peón de
dama blanco y el peón de rey negro
así como todas las piezas y enton-
ces intentar jugar algunos finales de
rey y peón. Pronto se convencerá
uno mismo de que las blancas tie-
nen muy buenas ocasiones para ga-
nar estos finales . Sin embargo, a
manera de una conocida filosofía
del ajedrez, se puede decir que «En-
tre la apertura y el final los dioses
han colocado el juego medio". Es
en el juego medio en donde reside la
salvación de las negras. Se debe
buscar una compensación a la debi-
lidad de los peones a través del jue-
go de las piezas activas (aquí ayu-
darán los dos alfiles). La variante del
cambio tuvo la reputación de ser
muy tendente a las tablas, incluso
con las mejoras de Fischer, las ne-
gras no tienen motivo para temer es-
te sistema.
La recaptura 4 ... , PDxA que abre lí-
neas para el alfil de dama negro es
preferible a 4 ... PCxA ya que las
blancas están mejor situadas des-
pués de 5 P4D, PxP; 6 DxP. Hemos
ya observado en otro lugar que el in-
tento de ganar un peón con 5 CxP?!
es defectuoso debido a 5 ... D5D
cuando las negras igualan fácilmente.
5 0-0
Éste es un antiguo movimiento
que ha sido reintroducido moderna-
68 Ruy López {apertura española)
mente en la práctica por el maestro
holandés Barendregt y luego adop-
tado por Bobby Fischer en 1966. An-
tes de esta fecha la continuación
más utilizada fue 5 C3AD y 5 P4D
(jugando para cambiar las damas:
5 ... , PxP; 6 DxP, DxD; 7 CxD) pero
ninguno de éstos parece llevar más
que a igualar. Con 5 0-0, las blancas
completan el desarrollo de su ala de
rey y revive la amenaza al peón de
rey negro.
5 .. . P3A
Ahora el peón de rey necesita ser
defendido. Defendiendo con la da-
ma 5 ... , D3A se permite a las blan-
cas ganar tiempo atacando poste-
riormente , por ejemplo 6 P4D, PxP ;
7 A5C, D3C; 8 DxP. Defendiendo
con el alfil, 5 ... , A3D también parece11 ... , D2A.
inferior debido a 6 P4D, PxP (6 ... ,
P3A 7 PxP, PxP; 8 CxP! y las blan-
cas recuperarán la pieza con D5T +);
7 DxP (atacando el peón-CA); 7 ... ,
P3A; 8 CD2D!, para ser seguido de
9 C4A con presión sobre la posición
negra. Finalmente el plan más agre-
sivo es 5 .. ., A5CR ; 6 P3TR , P4TR!?,
que las blancas harán bien en olvi- / eiunado más arriba, sino con la
dar por 7 P3D.
6 P40 ASCR
6 ..., PxP abandona el centro de-
jando campo libre a las blancas. Por
ejemplo: 7 CxP, A3D y ahora las
blancas pueden mover 8 D5T + ,
P3C ; 9 D3A debilitando el lado de
rey negro, porque 9 ... , AxPT +; 1O
RxA, DxC; 11 T1 D deja a las negras
luchando para evitar una derrota ful-
minante. Alternativamente la parti-
da 9 Fischer-Spassky, Belgrado
1992, confirmó estas apreciaciones,
es decir, 6 .. ., PxP; 7 CxP, P4AD ;
8 C3C, DxD ; 9 Tx D, A5CR ; 1O P3AR, ser preferible mantener la clavada
A3R ; 11 C3A, A3D ; 12 A3R, P3CD ;
13 P4TD! con iniciativa blanca. El
movimiento jugado, clavando el ca-
ballo de rey blanco constituye una
defensa mucho más activa.
7 P3A
Apoyando al peón de dama con la
esperanza de montar un centro de
peones completo. Este movimiento
supone el sacrificio potencial de un
peón, que probablemente es dema-
siado peligroso aceptar por las ne-
gras después de 7 ... , PxP; 8 PxP,
AxC; 9 DxA, DxP las blancas pue-
den jugar 1O T1 D y las negras debe-
rán emplear mucho tiempo manio-
brando su dama hasta una casilla
razonable , por ejemplo 1O ... D5A;
11 A4A (atacando al peón AD) ,
Obviamente las blancas tienen
compensación por el peón.
7... PxP
Abriendo un poco el juego. Esto
no se juega como aceptación del
riesgo del sacrificio del peón men-
idea de proseguir con . .. D2D y
0-0-0 y presionar al centro blanco .
Una alternativa sólida para las ne-
gras es 7 ... , A3D ; 8 P3TR , A4T
con buenas ocasiones de juego
igualado.
8 PxP 020
9 P3TR
Atacando al alfil y apartándolo an-
tes no resulte demasiado molesto.
9 ... A3R
Una retirada natural pero podría
 Ruy López (apertura española) 69

con 9 ... , A4T! El final después de y pronto perdieron. La partida conti-

(9 ... , A4T); 1O C5R, AxD; 11 CxD, nuó:
RxC; 12 TxA es mejor para las blan-
cas , pero probablemente no lo sufi- 12 T1A C3C
ciente para ganar. La voracidad de 13 A3C A3D
9 .. ., AxC; 10 DxA, DxP; 11 T1D es 14 C4TD!
todavía bueno para las blancas.
Cabecera para C5A
10 C3A 0-0-0
11 A4A! (58) 14 ... AxA
15 PxA R1C

Las negras no pueden mantener

apartado al caballo con 15 .. . , P3CD
debido a 16 P5D, PxP; 17 Cx6C+
ganando la dama.

16 CSA D3D
17 D4T!

Presionando con gran vigor en un

ataque .

17 ... .R2T?

Un disparate que precipita el final.

58 B Relativamente mejor es 17 ... , A1A
para impedir el siguiente movimien-
Atacando al PAD, el cuadro en to de las blancas.
frente del rey negro. Ahora amena-
zan las blancas 12 P5D por ejemplo: 18 CxPT!
12 ... , PxP; 13 T1A, PxP; 14 C4TD!,
DxD; 15 TxP+, R1C; 16 T8A+, RxT; Esperando 19 PxA, DxPC+ con al-
17 C6C++ (si 16 ... , R2T,; 17 A8C+, gunas complicaciones en el ala de
R1T; 18 C6C++) . La mejor continua- rey. Las negras no pueden jugar
ción para las negras es 11 ... , A3D; 18 ... , PxC porque 19 TxP conduce a
12 AxA, DxA; que elimina algunas de mate o a la pérdida de la dama
las dificultades, pero aun así las blan-
cas retienen cierta ventaja porque su 19 PSR CxP
centro de peones sujeta el juego de
las negras y además puede emplear Ahora ninguno de los movimientos
el magnífico cuadro 4AD como avan- tiene esperanzas.
zadilla para su caballo de dama. En
la partida Fischer-Giigoric, Olimpiada 20 PxC PxP
de La Habana, 1966, las negras con- 21 C5A+ R1C
tinuaron poco correctamente con 22 PxA PSR
23 CxPR D2R
11 ... C2R 24T3A
70 Ruy López (apertura española)

Amenazando 25 T3T.

24 ... P4CD
25 D2A 1-0

Las negras, que tienen dos piezas

menos deciden abandonar.

DEFENSA SCHLIEMANN
1 P4R P4R
2C3AR C3AD
3 A5C P4A?!
La estrategia tras la defensa
Schliemann a la Ruy López es en
cierta manera semejante a la que
motiva el Gambito de Rey -se ofre-
ce un peón a cambio de un desarro-
llo rápido y activo, y la posibilidad
de un ataque directo contra el rey
contrario a lo largo de la columna
AR abierta-. Sin embargo en este
caso son las negras más que las
blancas las que ofrecen el peón y
las negras las que inician un movi-
miento atrás. / ----
4 C3A (59)
La política más prudente para las
blancas es un desarrollo rápido.
4 PxP, P5R es menos claro, por
ejemplo, que 5 D2R, D2R; 6 AxC,
PCxA; 7 C4D, C3A; 8 0-0, P4A y el
fuerte peón central negro le supone
alguna compensación. Otro plan que
no funciona es 4 AxC?! , PDxC; 5
CxP, 050; 6 D5T+?, P3CR; 7 CxPC,
PxC; 8 OxP+, R1 D y el prematuro
ataque blanco ha llegado a su fin de-
jando a las negras con la ventaja.
No obstante el simple 4 P30 es
perfectamente jugable e impide las
engañosas complicaciones de la lí-
nea principal.
59 N
4 ... PxP
Abriendo la columna AR. Otra for-
ma deseable 4 ... C3A; 5 PxP, P4A,
atacando 7AR blanco forma la tijera
6 CxP.
5 CDxP P4D
Esperando aprovecharse de la ex-
puesta posición del caballo de dama
blanco, ganando un tiempo.
6 CxP!
Explotando la clavada sobre el ca-
ballo negro. Después del flojo 6
C3C, A5CR ; 7 P3TR, AxC ; 8 OxA,
C3A las blancas no tienen ninguna
ventaja ya que el fuerte peón central
negro compensa por los dos alfiles
blancos. Si 6 ... , A3D? entonces 7
CxP, AxC ; 8 05T+ y las blancas re-
cuperan su pieza y salen con un
peón por delante.
6 ... PxC
6 .. ., 02R sería contestado simple-
mente con 7 P40.
 Ruy López (apertura española) 71

7 CxC PxC Si 10 ... , R2A, entonces 11 D5D+,

y las negras pierden inmediata-
Las negras tienen dos movimientos mente.
mejores, ambos muy complicados. Si
pretendes jugar todo esto por cual-
quier lado, deberás memorizar la teo-
ría, pues de no hacerlo te puedes
perder rápidamente . Las alternati-
vas son: 7 ... , D4D; 8 P4AD, D3D;
9 CxPT+, A2D; y 7 ... D4C; 8 D2R,
C3A;9P4AR,D5T+;10P3CR,D6~
con complicaciones confusas.

8 AxP+ A2D
9 D5T+,

Esto es más preciso que 9 AxT. El

rey negro queda expuesto en el cen-
tro del tablero.
60 B
9 ... R2R

Si 9 ... , P3CR, entonces 1O D5R+ Ahora las blancas tienen una ven-
y las blancas ganaron por lo menos taja ganadora pues después de
el cambio. 11 AxT, DxA; 12 DxP+ tiene una to-
rre y tres peones por dos piezas y el
10 D5R+ A3R (60) rey negro está muy abierto.
 6
Defensa siciliana
1 P4R P4AD (61)
61 B
La Defensa Siciliana ha sido anali-
zada más que cualquier otra apertu-
ra en el ajedrez. Se han escrito nu-
merosos libros y folletos sobre
variantes en particular. Más del 25
por ciento de todas las partidas
maestras son Sicilianas. ¿Por qué
esta popularidad?
Con sus primeros movimientos las
negras anuncian sus intenciones
para la lucha. Atacando el centro
desde la columna AD crean un de-
sequilibrio que conduce a posicio-
nes abiertas ofreciendo muchas po-
sibilidades interesantes para los dos
bandos. En este capítulo estudiare-
mos cuatro variantes que difieren
fundamentalmente en un aspecto: la
estructura de peones negros.
De las varias estructuras de peo-
nes entre las que las negras pueden
elegir, cada una de ellas tiene sus
propios puntos fuertes y débiles . Si
las negras tienen un peón en 4R
(por ejemplo la variante Lówenthal) ,
su cuadro 4D es vulnerable con el
resultado de que eventualmente las
blancas podrán ocupar dicho cuadro
con una pieza. Además, natural-
mente, si las negras tienen poco o
ningún control sobre el cuadro 4D,
será incapaz de forzar el avance te-
mático de su peón dama. La ventaja
del peón negro en 4R es que priva al
caballo de rey blanco de su puesto
natural en 4D, y prepara el camino
para la posibilidad de un posterior
... , C5D.
En la disposición Kan/Taimanov
las negras tienen peones en 3TD
(evitando la invasión de un caballo
blanco en 5CD preparando para
avanzar con ... P4CD) y en 3R (ayu-
dando al desarrollo de su alfil de rey
y en algunas variantes de su caballo
de rey, así como apoyando un even-
tual ... P4D). A veces el peón de da-
ma se adelanta a 3D a fin de evitar
la amenaza blanca de 7 P5R. Esta
forma de estructura de peones tien-
de a debilitar ligeramente los cua-
dros oscuros.
Cuando las negras «fianche-
tean » su alfil de rey (por ejemplo
74 Defensa siciliana

en la variante Dragón) incurren en Abriendo la pos1c1on , mejorando

alguna debilidad en el lado de rey, las posibilidades de desarrollo de
pero por otro lado su estructura de sus piezas apostando por el centro.
peones no es vulnerable en forma
alguna. 3 ... PxP
Las negras tienen dos objetivos
principales en la Siciliana una vez De otra forma las blancas alterarán
completado su desarrollo. El más las posiciones negras con 4 P5D .
importante de ellos es el ataque so-
bre el peón de rey blanco normal- 4 e xP P4R (62)
mente tomado por su caballo en
3AR y a veces por su alfil de dama
en 20. Algunas veces el ataque se
completa por medio del movimiento
libre ... , P4D. Cuando las blancas
pueden hacer impunemente este
movimiento, inevitablemente el jue-
go resultará satisfactorio.
El otro motivo de la disposición de
las negras es el ataque a lo largo de
la columna AD , normalmente conse-
guido desarrollando su torre de da-
ma a 1AD. Algunas veces esta torre
se sacrifica a cambio del caballo de
dama blanco (que está defendiendo
el peón de rey) inmovilizando peo-
nes blancos del ala de dama soca- 62 B
vando su peón de rey.

Este movimiento introduce la va-

VAR IANTE LÓWENTHAL riante Lbwenthal. Las negras toman
la iniciativa pero al precio de quedar-
1 P4R P4AD se permanentemente con el flojo
2C3AR cuadro 40. Nuestros comentarios a
esta variante abarcan muchos de
El movimiento de desarrollo más los importantes aspectos de las po-
natural. Se podría escribir todo un li- siciones Sicilianas en las que las ne-
bro sobre el segundo movimiento de gras juegan un prematuro P4R.
las blancas.
s ese
2 ... C3AD
El único movimiento activo 5
También un movimiento natural C5A? , P4D! ; 6 DxP, DxD; 7 PxD,
que añade apoyo al cuadro 50 ne- AxC; 8 PxC es bueno para las ne-
gro que está próximo a convertirse gras. En casi todas las posiciones
en el eje de la posición . Sicilianas las blancas se deben abs-
tener del cambio del caballo CxC
3 P4D porque deja a la blancas con una He

gera desventaja en los cuadros os-
curos, ya que cuando las negras re-
capturan con un peón su cuadro 40
recibe mejor protección. Esta posi-
ción no es una excepción: 5 CxC,
PCxC; 6 A4AO , A3T con partida
equilibrada. Si 7 AxA?, entonces
7 .. ., 04T +seguido de 8 ... , DxA evi-
tando que más adelante las blancas
enroquen.
5 ... P3TO
Continuación lógica de su plan .
Las negras juegan el provechoso
movimiento, ... P3TD ganando un
tiempo y conservando la iniciativa.
6 eGO+ Axe
7 OxA 03A
Usando su iniciativa para ofrecer
el cambio de damas.
8 010!
Resulta paradójico que después
de cuanto llevamos escrito sobre el
desarrollo, este movimiento «anti-
desarrollo» sea probablemente el
único que da a las blancas la venta-
ja final,
8 ... 03e
Atacando el peón rey blanco y ha-
ciendo presión sobre el peón caballo
se evita el desarrollo del alfil de rey
blanco
9 e3A eR-2R
No 9 ... , C3A que parece más na-
tural, por 1O 060 cuando las negras
no pueden enrocar.
10 P4TR!
Defensa siciliana 75
Un movimiento desacostumbrado
tomando ventaja de la posición de la
dama negra para forzar futuras des-
ventajas en los cuadros oscuros .
Ahora las blancas toman la iniciativa,
10 ... P4TR
1O ... , P3T? da a las blancas la
oportunidad de acrecentar su espa-
cio conservando al mismo tiempo la
iniciativa: 11 P5T, D3A; 12 A3R, 0-0;
13 020, P4CD; 14 0-0-0, P5C; 15
C4T y las blancas tienen una clara
ventaja. La posición de las negras
está plagada de cuadros débiles.
11 ASeA
Enrocando sobre cuadros débiles
oscuros.
11 ... P40
Las negras no disponen de un mo-
vimiento mejor: Deben intentar libe-
ralizar su juego. Si 11 ... , P3A; 12
A3R, P4D, las blancas deben captu-
rar con el caballo mejor que con el
peón porque después de 13 CxP,
CxC; 14 DxC las negras no tienen el
movimiento .. ., A3R a su disposi-
ción.
12 PxP ese
Si 12 ... , C5D entonces 13 A3D,
A4A; 14 0-0 y las negras no tienen
compensación por el peón sacrifi-
cado.
13 Axe RxA
No 13 ... , CxP+?; 14 R2D , CxT; 15
A5CR , cuando las blancas ganan el
caballo y resultan con dos piezas
por torre y peón.
76 Defensa siciliana
14 A3D! (63).
63 N
Pudiendo las negras parar a las
blancas con peones de dama dobla-
dos. Pero las blancas tienen aún un
peón más y sus fuerzas cooperan
bien en el juego final; 14 ... , CxP+;
15 DxC, DxD; 16 PxD, P4CD (de
otra forma 17 P4TD restringe la li-
bertad de las negras en el ala de
dama); 17 0-0-0!, T1 O; 18 TR1 R.
Las blancas están amenazando 19
P4D (desdoblando sus peones) tie-
nen la ventaja. En el diagrama las
negras naturalmente no pueden
mover 14 ... DxPC?? teniendo en
cuenta 15 A4R! con P3TD para se-
guir. Alternativamente 14 ... , CxA+;
15 DxC, DxPC; 16 P6D+ seguido de
0-0-0 cede a las blancas un fuerte
ataque.
VARIANTE RAUZER
1 P4R P4AD
2 C3AR P3D
3 P4D PxP
4 CxP C3AR
5C3AD C3A (64)
64 8
Las negras empiezan presionando
en el centro, invitando a las blancas a
actuar por sí mismas antes de com-
pletar el desarrollo de su ala de rey.
6ASCR
Introduciendo la posibilidad de
AxC en cierta etapa, las blancas po-
nen indirectamente presión sobre el
peón de dama negro. Por ejemplo
6 ... , P3CR; 7 AxC , PxA deja el peón
de dama aislado y débil; después de
8 P4AR si las negras continúan con
su plan normal de desarrollo son
puestas inmediatamente bajo una
fuerte presión en el centro : 8 ... , A2C;
9 CD5C, 0-0; 1O DxP, P4A; 11 0-0-0
y el juego de las blancas es mejor.
6 A3R se responde simplemente
con 6 ... , C5CR y 7 .. ., CxA.
6 ... A2D
En el movimiento más moderno,
las negras planean movilizacio-
nes rápidas del ala de dama con
.. ., T1AD y ... , D4T seguido en mu-
chos casos por el sacrificio del cam-
bio .. ., TxC mencionado en la intro-

ducción. Otro movimiento popular y
sensible es 6 ... , P3R viz.; 7 D2D,
A2R; 8 0-0-0, 0-0; 9 P4AR, exe; 1O
Dxe, D4T; 11 A4AD, A2D; 12 PSR,
PxP; 13 PxP y ahora 13 ... , A3A! evi-
ta la pérdida de material como en la
partida 7 lvanchuk-Anand, Linares
1992.
7 020 T1A
8 0-0-0
Puede parecer arriesgado enro-
car en estas condiciones en vista
del juego que se avecina de las ne-
gras en el ala de dama, pero un es-
tudio de las alternativas parece indi-
car que las blancas no tienen nada
mejor.
8 ... CxC
Abriendo la columna AD para su
torre.
9 OxC 04T
Se ha cumplido la primera parte
del plan de las negras. Su lado de
dama está plenamente desarrollado
y preparado para el sacrificio temáti-
co ... , Txe. Ahora las blancas deben
hacer algo respecto a su alfil de da-
ma atacado.
10 P4A
El camino más natural para defen-
der su alfil incrementando simultá-
neamente su control del centro
10 ... TxC!?
11 PxT
11 Axe? pierde material a 11
T2A; 12 AxPe (12 A4T, DxPT deses-
peranzado para las blancas) 12 ... ,
P4R!. También es pobre 11 DxT,
Defensa siciliana 77
DxD; 12 PxD, exP cuando las ne-
gras tienen un peón para el cambio y
varias amenazas desagradables.
11 ... P4R!
Un movimiento atrevido , conside-
rando que el rey negro está todavía
en el centro . Pero las negras deben
permanecer activas.
12 04C
Otros movimientos de dama per-
miten 12 .. . , ese amenazando 13 ... ,
P3TR, seguido 14 ... , PxP
12 ... OxO
13 PxO CxP (65)
Las negras tienen un peón para el
cambio y numerosos factores que
añadir a sus compensaciones : sus
amenazas incluyen 14 ... , e7A ha-
ciendo doble de las torres blancas y
14 ... , e6A seguido de 15 ... , exPT+
y 16 ... , exPe. La experiencia prácti-
ca sugiere que las negras tienen
una posición perfectamente satis-
factoria. La partida Unzicker-Ghe-
orghiu, Ljubljana 1969 continuó:
65 B
78 Defensa siciliana

14 A4T P4CR! .. ., P4D por el que las negras bus-

15 PxP can liberar su juego .
Si el movimiento liberador temá-
No 15 AxP?, e7 A cuando las ne- tico de la negras puede cierta-
gras recuperan el cambio. mente sostenerse , rápidamente
se llegará a una posición pasiva
15 ... A2R que ofrece poco o ningún contra-
16 T1R P4D juego .
17 A3D P3TR
18 P4A PxPC 5 C3AD P3CR (66)
19 PxP TxA
20TxC TxT
21 AxT P4A

Pronto se acordaron tablas. Una

ligera mejora para las blancas de
acuerdo con el análisis del último
Gran maestro soviético Boleslavsky
es : 18 Axe, PxA; 19 TxP, PxP; 20
A3e , P3A; 21 A3A.

VARIANTE DRAGÓN
1 P4R P4AD
2C3AR P3D 66 B

Abriendo camino para el alfil de

dama blanco y evitando un tempra-
no P5R de las blancas
3 P4D PxP
4CxP C3AR
Una parte importante de la estrate-
gia de la apertura de las negras ata-
cando el peón de rey para estimular
el siguiente movimiento de las blan-
cas y por tanto guardar el peón AD
blanco. Si las negras juegan contra-
riamente 4 ..., P3eR, las blancas
pueden jugar 5 P4AD estableciendo
lo que se conoce como «Maroczy
Bind >> (famoso maestro húngaro ha-
cia 1920).
La idea es evitar en todo momen-
to (con optimismo) el movimiento
Este movimiento introduce la Va-
riante Dragón , así llamada porque la
estructura de peones negros ase-
meja el perfil de un dragón. Las ne-
gras «fianchetan » su alfil de rey po-
niendo presión sobre la diagonal
larga (1TR-8TD) y creando una zo-
na segura para el rey.
6 A3R A2C
No 6 .. ., ese? por 7 A5e+ , A2D;
8 Dxe ganando una pieza pero aho-
ra 7 .. ., ese es una amenaza.
7 A2R
Algunas de las posiciones más es-
pantosamente compl icadas en el

ajedrez surgen después de la alter-
nativa 7 P3AR, C3A; 8 020, 0-0 ,
cuando las blancas pueden jugar, ya
sea 9 0-0-0, o bien 9 A4AO .
En un torneo o competición debes
consultar un manual especializado
en esta materia antes de arriesgarte
en uno u otro sentido.
7 ... C3A
8 0-0 0-0
Ambos lados están realizando mo-
vimientos de desarrollo normales.
9 C3C
Al desocupar el cuadro 40 las
blancas dificultan a las negras la
creación de juego basado en la posi-
bilidad de ... , P40. Este movimiento
también prepara para 1O P4AR (el
inmediato 9 P4AR está fuertemente
unido por 9 .. ., 03C).
Una alternativa tranquila que da
pocos problemas a las negras es
9 020. La respuesta natural 9 ... ,
C5C; 1O AxC, AxA crea una posición
un tanto estéril.
9 ... A3R
El cuadro más activo para el alfil,
preparando para la eventual ocupa-
ción de 5A por el alfil o por el caballo
de dama. 9 ... , A20 es demasiado
pasivo.
10 P4A
Las blancas también reaccionan
enérgicamente. Si las negras no ha-
cen nada, se encontrarán haciendo
ellas mismas un ataque fuerte al ala
de rey después de P5AR, P4CR y
P5CR.
10 ... D1A!
Defensa siciliana 79
Un movimiento de triple objetivo:
evitar 11 P5A, amenazar las manio-
bras de cambio , 11 ... , C5CR y deso-
cupar el cuadro 1O para la torre.
11 P3TR
Para evitar 11 ..., C5CR.
11 ... P4TD!
Las negras continúan en vena ac-
tiva. La amenaza es aho ra 12 ...,
P5T; 13 C40 , P6T debilitando las
blancas a lo largo de la diagonal
larga.
12 P4TD CSCD
Las negras gozan de una posi-
ción plenamente satisfactoria. Su
dama, caballo de dama, alfil de da-
ma y alfil de rey apuntan todos ha-
cia el ala de dama en donde tiene
suficientes ocasiones para com-
pensar el algo mejor control blanco
del centro. La inmediata amenaza
negra es 13 ... , CxP!; 14 CxC ,
CxPA.
13 A4D ASA (67)
67 B
80 Defensa siciliana
En esta airosa posición las oportu-
nidades están aproxi madamente
igualadas.
VARIANTE KAN/TAIMANOV
1 P4R P4AD
2 C3AR P3R (68)
68 8
Habiendo comentado más de una
vez la importancia del cuadro de las
negras 40, giramos ahora nuestra
atención a una variante en la que la
estructura de peones negros se
construye alrededor del control de
tal cuadro.
El texto expuesto abre camino pa-
ra introducir en el juego, por P3D o
por P4AD al alfil de rey negro (e in-
cluso por seo en algunas varian-
tes) . El lector deberá observar cui-
dadosamente las maniobras de esta
útil pieza, ya que desempeña un pa-
pel activo en más de un cuadro
3 P4D PxP
4 CxP P3TD
El juego de las negras dista de
ajustarse a cuanto llevamos escrito
relativo a la importancia del desarro-
llo rápido. La lógica tras esta prime-
ra estrategia de peones, es que las
negras están construyendo una es-
tructura de peones inexpugnable,
esperando que las blancas sitúen
sus piezas antes de desarrollar las
suyas propias en el óptimo lugar.
5 C3AD
Las blancas llevan ya dos tiempos
de adelanto en cuanto a desarrollo.
Obsérvese que 5 P4AD se une bien
con 5 ..., C3AR ; 6 C3AD , A5C.
5 ... D2A
Algunas veces se ve también 5 ...
P4CD en partidas entre maestros,
pero parece ser que después de 6
A3D , A2C ; 7 0-0, la delantera de las
blancas en cuanto a desarrollo les
da una posición fina y activa.
6 A3D C3AD
Un movimiento natural de desarro-
llo, atacando al caballo de dama
blanco .
7 A3R
7 CxC, como es corriente en la Si-
ciliana, sirve únicamente para refor-
zar el control negro de su cuadro
40: 7 ..., PCxC; 8 0-0 , C3AR y las
oportunidades son aproximadamen-
te las mismas.
7 ... C3A
En este tipo de variantes (por ej .
con ..., P3R) a veces las negras jue-
gan para aliviar tensiones mediante
... , CxC seguido de ... , C2R y ... ,
C3A. Tales tácticas tienen sin em-
bargo el inconveniente de que el ala

de rey negra queda desprotegida,
por ejemplo, 7 ... , CxC; 8 AxC, C2R;
9 0-0, C3A ; 1O A3R, P4CD ; 11
P4AR, P2C; 12 D5T cuando las
blancas tienen la iniciativa y oportuni-
dades de ataque sobre el ala de rey.
8 0-0
Después de 8 D2R , A3D el activo
alfil negro garantiza la igualdad de
oportunidades. Las blancas deberán
continuar con 9 P3CR (para impedir
la maniobra de cambio 9 ... A5A y
10 ... , AxA), 9 ... , A4R!; 10 C3C,
AxC+; 11 PxA, P4D ; 12 PxP, CxP;
13 A2D cuando tales oportunidades
son aproximadamente iguales.
Lo que figura en el texto es un mo-
vimiento más natural que ofrece a
las blancas mayores ocasiones de
retener la ventaja.
8 ... A3D
Amenazando al peón TR y contro-
lando los interesantes cuadros 4R y
5AR. La primera ocupación de las
blancas debe ser la de salvar el
peón amenazado.
9 P3TR
9 P4AR? pierde un peón en 9 ... ,
CxC; 10 AxC ; AxP mientras 9 RH,
está bien introducido por 9 ..., A5A;
1O AxA; DxA; 11 C42R, D2A, con
oportunidades igualadas. (No 9 ...,
AxPT?; 10 P3CR, AxP ; "11 PxA, DxP;
"12 D3A cuando la pieza extra blanca
vale más que tres peones negros).
9 ... P4CD
El movimiento más activo prepa-
rando el desarrollo del alfil de dama
a 2C incrementando así la presión
sobre el peón de rey blanco .
Defensa siciliana 81
10 CxC
Puesto que las negras están in-
tentando situar su alfil sobre la dia-
gonal larga (1TD-8TR), las blancas
deciden salvar un tiempo cambian-
do en 6AD mejor que permitir a las
negras cambiar caballos. Cuando
las negras recapturan el caballo , su
dama entra en el camino de su pro-
pio alfil. A fin de incrementar las fun-
ciones de su alfil se deberá más tar-
de retirar la dama perdiendo un
tiempo .
10 ... DxC
11 A4D
Situando el alfil en un cuadro más
agresivo y amenazando 12 P5R se-
guido de "13 A4R.
11 ... A2C
Evitando 12 PSR por obvias razo-
nes.
12 P3T
Frecuentemente una precaución
conveniente en posiciones en las
que las negras tienen un peón en
4&!. Ahora ya no le será posible a las
negras jugar más .. ., P5C retirando
el caballo y ganando el peón de rey.
12 ... P4R!
A simple vista es un movimiento
sorprendente pues debilita los cua-
dros negros 40 y 5AR. Pero de he-
cho no hay forma de que las blancas
puedan sacar provecho de estas de-
bilidades, ya que no tienen ningún
caballo en 40 para ir a 5A, y el ca-
ballo negro guarda el cuadro 40 en
caso de que las blancas tengan la
idea de jugar C5D.
82 Defensa siciliana

El texto excluye también la posibi- A fin de cambiar un par de alfiles.

lidad de P5R por las blancas. Después de 14 D3A, AxA; 15 DxA,
0-0; 16 TD-1 D, P3D, las oportunida-
13 A3R A4A (69) des son sensiblemente iguales .

69 B
 7
Defensa francesa
1 P4R P3R
2 P4D P4D (70)
70 B
Ésta es una defensa muy antigua y
verdaderamente sólida de 1 P4R. Con
el movimiento 1 ... , P3R las negras
anuncian su voluntad de aceptar una
posición inferior en el centro a cambio
de una relativa seguridad del ataque
directo que proporciona su cadena de
peones. Además tiene la perspectiva
lejana de una formación de peones
superior en el final. En contraste con la
Defensa Siciliana, que generalmente
produce un juego dinámico, las parti-
das derivadas de la Francesa frecuen-
temente recuerdan un sitio militar.
Luego de unos pocos movimientos,
normalmente el centro se cierra y
aparecen dos conflictivas cadenas
de peones (peones blancos en 40 y
5R, y peones negros en 40 y 3R).
Entonces la lucha se alterna en las
dos columnas de alfiles, con cada ju-
gador tratando de socavar y aventa-
jar la posición del contrario. Como ya
veremos cuando comentemos la Va-
riante de Avance, las blancas pueden
jugar el avance temático P5R tan
pronto como es al tercer movimiento,
pero si se juega este movimiento pre-
maturamente perderá la iniciativa.
Muchos jugadores con la piezas
blancas prefieren esperar a que las
negras hayan jugado .. ., C3AR de
modo que P5R viene con la amenaza
PxC , ganando así un tiempo.
Cualesquiera que sean los cam-
bios que se produzcan en esta es-
tructura bloqueada de peones , son
debidos al intento de socavar las ne-
gras ... 4AO y/o ... 3AR. La actua-
ción por el flanco ... 4AO es más efi-
caz cuando las blancas tienen un
caballo en 3AO de forma que resulta
ineficaz como apoyo de su centro de
peones colocando un peón en tal
cuadro. El movimiento .. ., P3AR por
parte de las negras normalmente es
un ensayo menos afortunado por-
que las blancas pueden permitir a
las negras jugar ... , PxPR y enton-
ces recapturar con su caballo de rey
(desde 3AR o, si es posible con su
peón de AR que frecuentemente
adelanta a 4AR en el apoyo del peón
de rey.
84 Defensa francesa
Antes de examinar en detalle al-
gunas variantes, diremos unas po-
cas palabras relativas al " Alfil Fran-
cés" . El alfil de referencia es el alfil
de dama negro que frecuentemente
aguanta en la apertura al ser lanza-
do en pos del peón en 3R . El proble-
ma de cómo activar (o cambiar) esta
pieza no está nunca lejos de la men-
talidad del jugador de la Defensa
Francesa. Aún cuando en general
un alfil es ligeramente más potente
que un caballo , un mal alfil pasivo
vale bastante menos que un caballo
activamente situado.
VARIANTE CLÁSICA
1 P4R P3R
2 P4D
Ésta es, evidentemente, la res-
pues"ta más agresiva y natural, a
1 ... , P3R. Con este movimiento las
blancas refuerzan su posición en el
centro y crean mayor espacio para
sus piezas y más líneas abiertas pa-
ra su desarrollo.
2 ... P4D (71)
71 B
Las negras desean construir un
«punto fuerte >> en su casilla de 4D y
fijar un centro de peones blancos.
Un centro móvil y libre es un instru-
mento de ataque mucho más poten-
te que otro que esté bloqueado.
3 C3AD
Defendiendo el peón de rey con un
movimiento de desarrollo. Éste es el
tercer movimiento más natural de las
blancas, si bien frecuentemente se
juega tanto 3 C2D como 3 P5R. Es-
tos movimientos se consideran en
secciones aparte. Obsérvese que 3
PxP no es particularmente recomen-
dable pues después de 3 ..., PxP el
alfil de dama negro es restituido a
plena libertad de actividad. Sin em-
bargo Gary Kasparov ha conducido
algunas interesantes partidas inclu-
so con esta línea aparentemente flo-
ja que muestra cuán profundo, rico y
fascinante es el ajedrez.
3 ... C3AR
Las negras también desarrollan
una pieza y continúan aplicando
presión al peón de rey blanco. 3 ... ,
A5C es una importante alternativa
(la Variante Winawer) que conside-
raremos más adelante.
4A5CR
Otro movimiento natural que desa-
rrolla una pieza y clava el caballo
negro aliviando así el ataque sobre
el peón de rey.
Ahora las blancas amenazan 5
P5R. También es popular el inme-
diato 4 P5R, C3-2D y entonces 5
P4AR con juego similar a la variante
principal.
4 ... A2R

El mejor camino para desclavar el
caballo de rey negro.
En su lugar 4 ... , A5C (la variante
MacCutcheon) lleva a una posición
difícil después de 5 P5R , P3TR ;
6 A2D, AxC ; 7 PxA, C5R ; 8 D4C.
5 PSR
No hay ningún camino bueno para
mantener el peón de rey en 4R,
p. ej., después de 5 A3D , CxP ; 6 CxC,
PxC ; 7 AxP cuando las negras han
cambiado un par de caballos, liberan-
do así su juego. Como norma gene-
ral, el lado que tenga una posición ce-
rrada debe procurar cambiar piezas
dejando más espacio para que pue-
dan maniobrar el resto de las fuerzas.
Después de lo del texto, los peo-
nes blancos quedan fijados facilitán-
dose así los motivos de ataque. En
compensación las blancas gozan de
supe rioridad de espacio
5 ... C3-2D
El caballo atacado retira y elige un
cuad ro en el que pueda apoyar el
avance ... , P4AD y cubrir el peón de
rey blanco, peón que se va debilitan-
do luego en la partida.
6AxA
Este cambio , ¿beneficia a las
blancas o a las negras? El lector
puede suponer por nuestros co-
mentarios anteriores que el cambio
de piezas ayuda únicamente a libe-
rar posiciones negras. En contras-
te, también hemos remarcado que
la utilidad de un alfil se ve seria-
mente reducida por la presencia de
una cadena de peones fijada en
cuadros del mismo color que el alfil
-de esta forma las blancas se van
desembarazando de su «mal alfil »-
Defensa francesa 85
a cambio del negro «bueno ». En
cualquier caso , retrasa r el alfil su-
pone una pérdida de tiempo que las
negras pueden emplear para mover
..., P4AD. Las blancas también pue-
den intentar 6 P4TR (ataque Alekhi-
ne-Chatard) por lo que ofrece un
peón para abrir líneas y acelerar el
desarrollo.
6 ... DxA
7 P4A
La continuación más enérgica de
las blancas. En posiciones en las
que el centro ,esté bloqueado, la ra-
pidez de desarrollo tiene menos im-
portancia que el emplazamiento co-
rrecto de peones y piezas. Así las
blancas pueden demorar la activa-
ción de su caballo de rey hasta ha-
ber avanzado antes su peón AR.
El peón en 4A aumenta el control
de las blancas ,sobre 5R lo que es
muy importante como veremos más
adelante.
7 ... 0-0
Las negras ponen rápidamente su
rey a seguro al mismo tiempo que
sitúan la torre en la conveniente co-
lumna AR . Pronto las negras avan-
zarán su propio peón de AR a fin
de neutralizar la creciente presión
blanca.
8 C3A
Un movimiento natural de desarro-
llo. 3AR es el mejor cuadro en el que
poner el caballo ya que desde ahí
guarda los puntos clave 40 y 5R .
8 ... P4AD
Las negras contraatacan en el
centro atacando uno de los peones
base en la cadena blanca.
86 Defensa francesa

9A30 es mejor que 11 P3CR, por cuanto

Desarrollando el alfil e introducien-
do la terrible amenaza del sacrificio
del alfil en 7TR. Aun cuando el estu-
dio de los motivos tácticos pertene-
ce más a un libro sobre el juego me-
dio que a uno sobre la estrategia en
la apertura el interesado debe fami-
liarizarse por sí mismo con es-
tas combinaciones ya que con el
juego actual se dan frecuentemente
estas situaciones. La idea principal
es (9 A30), P3TD, 1O AxP+, RxA;
11 C5C+, R1 C; 12 05T y las negras
no pueden evitar el mate. P. ej;
12 ..., T1 O (desocupando 1AR para
el rey), 13 07T+, R1A; 14 08T ++.
Las negras no pueden escapar de
su sino introduciendo al rey en la
apertura: 11 ..., R3C; 12 030+, P4A
(si 12 ... , R3T o 12 ..., R4T entonces
13 D3T+, R3C ; 14 D?T ++) 13 03Ty
las negras deben ceder varias pie-
zas para detener 4 07T ++.
9 ... P4A
El último movimiento de las blan-
cas fuerza una reacción inmediata
en el ala de rey. Con este movimien-
to, las negras amenazan bloquear
las posiciones de peones dificultan-
do progresar a las blancas.
10 PxP a.p.
permite a las blancas introducir su
torre de dama en el juego más fácil-
mente.
11 ... C3A
Atendiendo a su desarrollo poste-
rior. Abrir el juego con un 11 ..., CxP
inmediato no sería ventajoso para
las negras, pero después del movi-
miento del texto amenazan 12 ... ,
PxP.
12 PxP CxP
El movimiento 12 ... , DxP evita
que las blancas jueguen 13 0-0, pe-
ro 12 ... , CxP debe preferirse, por-
que no sólo amenaza cambiar el alfil
del rey activo blanco, sino que clari-
fica el cuadro 20 para el alfil de da-
ma negro, apresurando así el desa-
rrollo del ala de dama.
13 0-0 CxA
14 PxC (72)

Las blancas con su desarrollo su-

perior desean abrir el juego. Des-
pués de lo indicado, el peón de rey
negro que ahora puede ser atacado
desde el frente, eventualmente se
debilitará.

10 ... TxP 72N

11 020
La eliminación del alfil de rey blan-
Las blancas deben proteger su co ha reducido la posibilidad de un
peón AR atacado. Lo aquí indicado ataque afortunado contra el rey ne-

gro. Posicionalmente el juego de las
negras está lejos de ser feliz. Su
peón de rey está retrasado, lo que
junto con el hecho que el alfil de da-
ma negro está inactivo (un típico "al-
fil francés" de hecho) da ventaja a
las blancas.
VARIANTE WINAWER
1 P4R P3R
2 P4D P4D
3C3AD A5C (73)
73 B
Este movimiento inaugura la Va-
riante Winawer que corrientemente
es el sistema más popular de las
negras en el complejo de la Defen-
sa Francesa. La estrategia de las
negras consiste en lanzar un vigoro-
so ataque sobre el ala de dama; el
juego de las blancas se dará mayor-
mente en el ala de rey, donde puede
intentar sacar provecho de la au-
sencia de alfil del rey atacando al
desprotegido peón eR. La partida
puede complicarse mucho más que
en la mayoría de las demás varian-
tes de la Defensa Francesa. Ambos
Defensa francesa 87
reyes se quedan frecuentemente
clavados en el centro del tablero.
En el texto, clavando el caballo de
dama blanca renueva el ataque so-
bre el peón rey de las blancas resul-
tando bastante más activo que la Va-
riante Rubinstein, 3 ... , PxPR que
proporciona a las blancas un juego
prometedor después de 4 e xP, e2D ;
S e3AR, e1-3A; 6 e xe+, exe ; 7 A3D .
4 P5R P4AD
Avance blanco en el centro y las
negras reaccionan prontamente ata-
cando la base de la cadena de peo-
nes recién formada.
5 P3TD
La clavada se ha hecho muy mo-
lesta y las blancas deciden acabar
con ella aunque sea a costa de jugar
un movimiento, no de desarrollo.
Otra forma de romper la clavada es
con S A2D pero este modesto movi-
miento no dará a las negras ningún
problema. Después de S A2D lo me-
jor para las negras es S ... , e2R de-
sarrollando su ala de rey. La réplica
S ... , PxP es mala por 6 ese cuando
el alfil negro no tiene un buen cua-
dro para retirarse (6 ... , A2R bloquea
el caballo de rey mientras que 6 ... ,
A4A se une con 7 P4eD) y si las ne-
gras cambian alfiles su cuadro de
3D se debilita.
5 ... AxC+
Las negras no pueden mantener la
clavada con S ..., A4T por 6 P4eD!,
PxPe ; 7 ese, PxPT+; 8 P3AD, A2A
(evitando 9 e6D+) ; 9 AxP y las blan-
cas están bien adelantadas en cuan-
to a desarrollo y disponen de un fuer-
te ataque a cambio del peón
sacrificado.
88 Defensa francesa

6 PxA e2R como 10 ... , DxPA; 11 T1C son ma-

Las negras desarrollan su ala de
rey antes de que la dama blanca lle-
gue a poner dificultades.
7 D4e
Ésta es la continuación más
abrupta para las blancas. 7 ... , C4A
permitiría a las negras desarrollarse
normalmente y consolidar su posi-
ción después de lo cual las debilida-
des en la estructura en el ala de da-
ma aseguran a las negras un contra-
juego adecuado.
7 ... PxP
Después de 7 ... , 0-0 unos simples
movimientos de desarrollo darían
a las blancas un fuerte ataque;
por ejemplo 8 C3A, C1-3A; 9 A3D,
(amenazando el sacrificio en 7TR)
9 ... , P4A; 1O 03C!
El movimiento del texto concuerda
en lógica con el plan de las negras
de contraatacar inmediatamente.
los porque ayudan al desarrollo de
las blancas. Actualmente se emplea
el más popular 1O C2R, C1-3A;
11 P4AR , A2D ; 12 030, PxP con
grandes complicaciones.
10 ... eD-3A
Entrando otra pieza en acción con fu-
turas amenazas contra el peón de rey.
11 e3A
Las blancas meten otra pieza en
el ataque planeando 12 C5C con
amenazas contra 7AR.
11 ... PxP
Recuperando el peón sacrificado.
12 ese exP
13 P4A
Expulsando al caballo defensor. El
siguiente movimiento de las negras
es virtualmente forzado.

8 DxPe T1e 13 ... Txe

9 DxPT 14 PxT e4-3e (74)

Ahora las blancas han completado

la demolición del ala de rey negra,
pero la posición en el otro lado del
tablero dista mucho de ser clara, ya
que ahora las blancas están retrasa-
das en desarrollo.

9 ... D2A

Ahora las negras tienen la fuerte

amenaza de ... , DxPA+ y ... , DxPR+.

10 R1D

Un interesante recurso defensivo.

Ahora tanto 1O ... , DxPR; 11 C3A, 74 8

Encerrando la dama blanca e impi-
diendo 15 D8T +. Hemos ido siguien-
do el análisis de Keres y hemos
alcanzado una posición verdadera-
mente interesante. Las negras están
considerablemente compensadas
por el cambio sacrificado . Tienen un
peón extra y una impresionante ma-
sa central de peones. Ambos reyes
están algo expuestos pero las blan-
cas lo están más que las negras (las
negras amenazan llevar su caballo a
lugar relativamente seguro jugando
... , A2D seguido de ... 0-0-0). Ade-
más la dama blanca está fuera del
juego. Ésta es una posición altamente
compleja llena de situaciones propias
para investigaciones individuales.
VARIANTE TARRASCH
1 P4R P3R
2 P4D P4D
3 C2D (75)
75 N
A primera vista esto parece raro
pues 2D es ciertamente un puesto
menos activo que 3AD y además el
caballo en 2D bloquea líneas de ac-
ción para el alfil de dama de las blan-
Defensa francesa 89
cas y su dama. Por otra parte 3 C2D
impide la Winawer (3 ... , A5C? sería
contestado con 4 P3AD) y en algu-
nas líneas permite a las blancas apo-
yar su peón de dama jugando P3AD
como en la Variante del Avance.
3 ... P4AD
Este movimiento y el 3 ... , C3AR
se ven con aproximadamente igual
frecuencia en partidas de torneo
(3 ..., CAD también es muy corrien-
te). 3 ... , C3AR invita a las blancas a
jugar 4 P5R y establecer la sabida
cadena de peones de la Defensa
Francesa con la que las negras pro-
cederán a atacar. El movimiento del
texto evita el avance P5R aplicando
inmediatamente presión al peón de
dama de las blancas de forma que
las blancas han de tratar de asegu-
rarse una ventaja por otros caminos.
4 PxPD
Las blancas deciden sobre un cam-
bio en el centro, esperando dejar a
las negras con un peón aislado. (El
poseedor de un peón aislado se en-
frenta con dos inconvenientes. Pri-
mero, su peón no puede protegerse
ya con otro peón , por lo que cuando
es atacado debe emplear piezas pa-
ra defenderlo. Segundo, el cuadro de
enfrente de un peón aislado resulta
muy débil y puede servir de avanza-
dilla o refugio para las piezas contra-
rias, pues una pieza situada directa-
mente no puede ser desbloqueada
por el avance de un peón porque los
peones sobre columnas adyacentes
no están ya sobre el tablero.)
4 ... PRxP
Las negras aceptan la posibilidad
de que su peón de dama pueda que-
90 Defensa francesa
dar aislado en el futuro y espera ob-
tener una compensación por ello a
través de un desarrollo activo y del
juego de piezas. En particular el de-
sarrollo del alfil de dama de las ne-
gras ya no es un problema serio.
También es popular a nivel de
grandes maestros 4 .. ., OxP aunque
las blancas pueden ganar tiempo
atacando la dama mientras el alfil de
dama negro sigue siendo un pro-
blema.
5 C1-3A
Aislar inmediatamente el peón de
dama negro con 5 OxP sería un
error, ya que las negras podrían res-
ponder con un movimiento de desa-
rrollo (5 ... , AxP) ganando un tiempo .
Las blancas deben demorar el movi-
miento OxP hasta después de que
las negras hayan movido verdadera-
mente su alfil de rey si pueden .
Mientras tanto, el rápido desarrollo
de su ala de rey es la política más
prudente de las blancas.
5 ... C3AD
Las negras también quieren intro-
ducir rápidamente sus piezas en ac-
ción. Este movimiento es más preci-
so que 5 ... , C3AR ya que si las
blancas ponen su alfil de rey en 5CO
el caballo de rey negro podría estar
mejor situado en 2R.
6 A5C
Un buen movimiento de desarrollo
que clava el caballo de dama negro
presionado por el peón en 40.
6 ... A3D
Las negras no tienen tiempo de
romper la calvada con 6 ... , P3TO
porque después de la réplica forza-
da 7 AxC+ (no 7 A4T?? , P4CO ;
8 A3C , P5A cuando las blancas
pierden una pieza) las blancas ju-
garán 8 0-0 , seguido de 9 T1 R y la
nueva clavada en la columna de
rey será mucho más preocupante
que la anterior. Por motivos simila-
res tanto 6 ... , C3AR como 6 ... ,
A2R son inferiores; por ejemplo
después de 6 ... , C3AR debería se -
guir 7 0-0 (amenazando 8 T1 R+) ,
7 .. . , A2R; 8 PxP y entonces las ne-
gras no pueden recapturar 8 ... ,
AxP porque 9 T1 R+, A2R; 1O 02R
y las negras no pueden enrocar sin
perder una pieza.
7 0-0
Completando el desarrollo del ala
de rey y amenazando T1 R+
7 ... C2R
Virtualmente forzado. Cualquier
otra continuación deja a las negras
en considerable desventaja.
8 PxP
Finalmente las blancas vuelven al
tema posicional básico de aislar el
peón de dama de las negras.
8 ... AxPA
9 C3C
El caballo está, naturalmente , en-
cabezado por el sutil refugio de 40.
A lo largo del camino ataca el alfil de
las negras.
9 ... A3 D
El alfil está mejor situado sobre la
diagonai1C0-7TR.
 Defensa francesa 91

1O C3C-40 0-0 16 P3CR 0 20

11 A3R 17 R2C

Este alfil está colocado lógicamen- Ninguno de los dos lados parece
te aquí para ayudar a controlar los estar progresando.
cuadros 40 y 5A.

11 ... ASCR VARIANTE DE AVANCE

1 P4R P3R
2 P40 P40
3 PSR (77)

76 8

Aun cuando su peón de dama aisla-

do negro ha surgido de la apertura con
el juego igualado, sus piezas están si-
tuadas activamente no presentando
ninguna otra debilidad. Pachman-Por-
tisch, Bled 1961 , continuó así:
12 P3TR A4T
13 020 T1A
14 A2R A1C
En conjunción con el siguiente
movimiento de las negras se crea
una configuración que ejerce pre-
sión tanto a lo largo de la columna
AO abierta como contra el rey de las
blancas.
15 P3A 0 2A
Amenazando 16 ..., CxC seguido
de 17 .. ., AxC y 18 ..., 07++.
77N
Este segundo empuje no forzado
del peón de rey da nombre a la Va-
riante de «Avance ». Ya en el tercer
movimiento la estrategia general de
las blancas aparece clara. Se ha op-
tado por convertir su ventaja tempo-
ral en espacial , esperando que sea
más resistente . Mientras este plan
es por sí mismo lógico , la pérdida de
tiempo involucrada pasa la iniciativa
sobre las negras durante un tiempo
considerable, por lo que esta línea,
aunque se considera buena, no es
tomada muy en consideración por
los maestros modernos que prefie-
ren una aproximación más dinámica
para abrir el juego.
92 Defensa francesa
3 ... P4AD
La natural (y mejor) réplica. Las ne-
gras ganan espacio en el ala de dama
y atacan inmediatamente la base de
la cadena de peones de las blancas.
4 P3AD
Pronto o tarde las negras tratarán
de socavar el centro de las blancas
con .... PxPD. Las blancas dan pa-
sos para asegurarse de que pueden
aunar ese movimiento con la recap-
tura de un peón y por tanto mante-
ner su avanzada cadena de peones.
4 ... C3AD
La contraestrategia de las negras
es atacar el peón de dama blanco
con todas las fuerzas disponibles.
Aun cuando realmente no se espera
ganar ese peón, sí se espera atar
muchas piezas blancas a su defensa.
5C3A
Desarrollando una pieza y aña-
diendo otro guardián al peón en 40.
5 ... D3C
Una importante excepción a la re-
gla de que la dama no debe mover-
se demasiado prematuramente en
la partida. La dama negra inmune al
ataque en 3C está magníficamente
situada pues no sólo añade otro ata-
cante al peón de dama de las blan-
cas, sino que también restringe la
función del alfil de dama blanco que
no puede moverse sin exponer la
captura del peón de CD.
6A2R
La opción de poner este alfil en
2R o en 30 es una de las decisio-
nes más importantes que deben to-
mar las blancas en esta apertura.
Nirnzowitsch que fue el que primero
desarrolló la teoría de esta variante,
sostiene que A2R «protege» el peón
de 40 más a fondo que A3D lo que
significa.que A2R no priva al peón
de dama de su servicio de defensa
de la dama blanca. Obsérvese que
después de A3D las negras no pue-
den ganar un peón con 6 ... , PxP;
7 PxP, CxPD; 8 CxC, DxC??, debi-
do a 9 A5C+ ganando la da-
ma, pero se puede reanudar la
amenza al peón de dama insertan-
do 7 ... , A2D.
6 ... PxP
Este cambio es una parte del plan
de las negras. Si las negras se retra-
san en cualquier medida, las blan -
cas pueden ensayar por sí mismas
PxP.
7 PxP CR2R
Las negras intentan incrementar la
presión sobre el peón de dama de
las blancas maniobrando su caballo
de rey a 4AR.
8C3T
Las blancas replican acercando
prontamente otro defensor al pobre
peón sitiado: este caballo se dirige
hacia 2AD.
8 ... C4A
9 C2A A5C+
Una idea interesante. Las piezas
blancas están sobrecargadas por la
necesidad de conservar P4D y P2C
y en consecuencia las blancas aho-
ra deben mover su rey y por tanto
perder su derecho a enrocar.
 Defensa francesa 93

10 R1A 12 R2C (78)

Las blancas no pueden seguir de- Esta posición se ha alcanzado va-

fendiendo su peón débil después ya rias veces en prácticas entre maes-
sea de 10 CxA o de 10 A2D y el rey tros. Posiblemente es un poco mejor
debe darse un paseo. Sin embargo para las blancas que han mantenido
las blancas , según del texto , tienen su ventaja en espacio a pesar de to-
también algunas amenazas. Si les dos los esfuerzos de las negras.
es posible jugarán P3TD aumentan-
do su ventaja de espacio mientras
se desembarazan de uno de sus
peones débiles.

10 ... A2R

Eliminando su alfil de forma que

pueda unir 11 P3TD con 11 ... , P4TD.

11 P3CR

Las blancas hacen espacio para

su rey de forma que su torre de
rey no queda fuera del juego en un
rincón.
11 ... A2D
Las negras no han resuelto toda-
vía el problema de cómo activar su
alfil de dama -siempre un motivo
de preocupación en la Defensa
Francesa-. De momento se pone
en 2D para liberar el cuadro 1AD pa-
ra una torre que quedará bien colo-
cada en la columna abierta.
78 N
Pero las negras no se deben de-
sanimar. Aparte de algún caso de li-
gera sujeción , su posición está libre
de puntos débiles . Se han forzado
piezas blancas a una posición un
tanto defensiva y más adelante po-
drá continuar su asalto temático so-
bre el centro de peones blanco, pre-
parando el avance ... , P3A.
 8
Defensa Caro-Kann
1 P4R P3AD (79)
79 B
La idea estratégica que hay detrás
de la Defensa Caro-Kann es hasta
cierto punto semejante a la que ins-
piró la Defensa Francesa (P4R,
P3R). En estas dos aperturas las
blancas están capacitadas para
construir un centro de peones com-
pleto con 2 P4D e intentos de contra-
rrestar la influencia de las negras es-
tableciendo un peón en 4D. Muchos
jugadores punteros, incluidos los ex-
campeones mundiales Botvinnik y
Petrosian han alternado entre sí, jun-
tando estas dos aperturas repetidas
veces a lo largo de sus carreras.
La pregunta de cuál de las dos
aperturas es más acertada es difícil
de responder. Los partidarios de la
Defensa Francesa puntualizan que
en la línea principal de la Caro-Kann
después del 1 P4R, P3AD ; 2 P4D ,
P4D; C3AD las negras no tienen una
buena forma de mantener su peón
de dama y debe ceder el centro mo-
viendo 3 .. ., PxP. Los adictos a la Ca-
ro-Kann pueden alegar que en la De-
fensa Francesa el movimiento de
apertura 1 .. ., P3R cierra innecesa-
riamente el alfil de dama y condena
a esta pieza a un papel pasivo.
La principal ventaja de la estructu-
ra Caro-Kann de peones es que in-
mediatamente se cambia uno de los
peones blancos centrales de tal for-
ma que no se puede hacer una
unión duradera como sucede en la
Defensa Francesa. Tampoco las
piezas negras tienen dificultades
para desarrollarse , pero los espa-
cios que se ocupan son más fre-
cuentemente defensivos que acti-
vos . Lo más notable de esta
defensa es el defecto de relegar a
las negras a un papel pasivo en el
que las probabilidades de ganar de-
penden más de los errores de las
blancas que del éxito de cualquier
planteamiento propio .
Históricamente el desarrollo de la
Caro-Kann es mucho más reciente
que el de la Francesa. Los dos
maestros que dieron nombre a esta
apertura, H. Caro y M. Kann , fueron
ambos jugadores activos hacia
1890 pero la mayor parte de la teo-
96 Defensa Caro-Kann
ría de la apertura data desde el rei-
nado de Botvinnik como campeón
mundial en los años 1950.
SISTEMA CLÁSICO CON
4 ... , A4A
1 P4R P3AD
2 P4D P4D
3 C3AD (80)
80 N
La continuación más evidente, de-
sarrollando una pieza y protegiendo
el peón de rey.
3 ... PxP
Las negras no gozan de ninguna
alternativa buena a esta captura.
Protegiendo el centro avanzado
con 3 ... , P3R se llegaría simple-
mente a una suerte de Defensa
Francesa en la que las blancas tie-
nen un movimiento extra, pues casi
seguro que las negras tendrán que
gastar un tiempo más adelante
avanzado ..., P4AD. También es
inapelable un simple desarrollo con
3 ... , C3AR, pues las blancas po-
drían replicar con 4 P5R expulsan-
do el caballo sin pérdida de tiempo,
y después de 4 ... , CR2D las blan-
cas pueden jugar el atrevido sacrifi-
cio de peón 5 P6R! PxP; 6 C3A es-
tableciendo una unión duradera en
las posiciones negras . (Las negras
encontrarán dificultades para desa-
rrollar sus piezas.)
4 CxP
Aun cuando las negras han teni-
do que ceder el centro con 3 ... ,
PxP ahora esperan sacar provecho
de la expuesta posición del caballo
de dama blanco atacándolo con un
movimiento de desarrollo. Si ahora
las blancas retrasan el caballo a
3AD las negras habrán ganado cla-
ramente un tiempo , pero si las blan -
cas mueven el caballo a 3C las
negras no ganan tiempo. La alter-
nativa ... , C3AR la veremos en otra
sección.
5 C3C
Éste es el mejor movimiento de
las blancas.
5 ... A3C
No se toma en consideración otro
refugio duradero: 5 ..., A3R bloquea
al peón de rey y a las negras el de-
sarrollo de su alfil de rey: 5 ..., A2D
obstaculiza al caballo de dama de-
jando prisionero al alfil después de
que las negras jueguen ... , P3R y
después de 5 .. ., P3R; 6 CxA, D4T +
y 7 ..., DxC las negras habrán cedi-
do el par de alfiles.
6 P4TR
Amenazando ganar el alfil con
7 P5T. Normalmente tal movimiento

debe jugarse con precaución ya que
crea debilidades frente al rey blan-
co. Sin embargo, en esta posición
las blancas piensan en enrocar por
el lado de dama no dándose así ta-
les debilidades.
6 ... P3TR
La alternativa 6 .. ., P4TR?! es muy
dudosa ya que las blancas podrían
continuar con la maniobra C3T-4A
que fuerza ya sea a cambiar el alfil
de dama de las negras por un caba-
llo o a ganar el peón TR.
7C3A
Desarrollando una pieza y amena-
zando C5R.
7 .. . C2D
8 P5T
Iniciando un plan para inmovilizar
completamente el ala de rey de las
negras.
8 ... A2T
9A3D
Bajo el punto de vista de las blan-
cas el alfil de dama de las negras ha
cumplido su misión actuando a ma-
nera de objetivo para el peon TR
blanco. El siguiente paso lógico es
cambiarlo pues estando bien situa-
do restringe la libertad de acción del
caballo de las blancas en 3CR.
9 ... AxA
10 DxA D2A
Esto es más preciso que 1O ... ,
P3R o 10 .. ., C1-3A después de lo
cual el alfil de dama de las blancas
pudo apoderarse del punto más acti-
vo 4AR .
Defensa Caro-Kann 97
11 A2D P3R
12 D2R
La siguiente etapa en los planes
de las blancas es preparar el movi-
miento CSR.
12 ... C1 -3A
13 0-0-0 0-0-0
El intento de cubrir el cuadro SR
con 13 ... , A3D falla en 14 CSA! Si
las negras continúan 14 ... , ASA el
sacrificio 15 CxPC+ , R1 R; 16 CxP+,
PxC; 17 DxP da a las blancas tres
peones y un feroz ataque para sus
piezas .
14 C5R
Suponiendo un punto fuerte en
el centro del tablero y atacando
7AR.
14 ... CxC
Realmente el caballo era dema-
siado fuerte para dejarlo vivir. Otros
métodos de defender el peón AR no
son muy recomendables ; por ejem-
plo 14 ... , C3C se enfrentaría con 15
AS T.
15 PxC C2D
15 ... , C4D puede ser una mejora
pero eventualmente el caballo es
expulsado por P4AD .
16 P4AR (81)
Apoyando al peón de rey, las blan-
cas tienen ahora un sustancial con-
junto en el lado de rey, y las negras
tendrán que jugar cuidadosamente
para no morir estrangulado. La parti-
da que hemos ido siguiendo es la 13
entre Spassky y Petrosian del Cam-
98 Defensa Caro-Kann

peonato Mundial del 1966. Vencie- Existen dos alternativas a 4 ... ,

ron las blancas después de una lar-
ga batalla, pero la posición de las
negras es todavía muy difícil de que-
brantar.
A4A, el movimiento del texto, y 4 ... ,
C2D. Después de 4 ... , C2D las
blancas normalmente siguen 5
A4AD, C1-3A ; 6 C5C, P3R; 7 D2R
(amenazando 8 CxPA!) 7 ... , C3C y
ahora después de 8 A3D o de 8 A3C
las blancas tienen buenas ocasio-
nes de sacar ventaja.

5 CxC+

Esta captura es mejor porque no

pierde ningún tiempo y plantea in-
mediatamente problemas de las ne-
gras sobre cómo recapturar. Des-
pués de 5 C3C las negras pueden
liquidar inmediatamente el centro
con 5 ... , P4AD!.

5 ... PCxC!?
81 N
La otra posibilidad 5 .. ., PRxC, es
menos arriesgada, pero deja las
SISTEMA CLÁSICO CON blancas con una ventaja duradera
4 ... , C3A debido a la superioridad de la es-
tructura de peones (para un comen-
1 P4R P3AD tario sobre por qué tal estructura de
2 P4D P4D peones favorece a las blancas, el
3C3AD PxP lector deberá consultar la sección
4 CxP C3A (82) sobre la Variante del Cambio de la
Ruy López).
Siguiendo el texto, la posición se
hace escabrosa. Las negras han
comprometido seriamente su ala
de rey y ciertamente el rey puede
no encontrar un refugio ahí. Su fu-
turo plan debe ser desarrollar rápi-
damente su ala de dama, jugar ... ,
0-0-0 y buscar ocasiones de ata-
que a lo largo de la abierta colum-
na CR.

6 P3AD

No es fácil determinar cuál es la

mejor continuación blanca; la del
82 B texto es la más corriente pues prote-
 Defensa Caro-Kann 99

ge al peón de dama, refuerza el cen- T1 CR cuando las negras tienen con-

tro y en ciertos casos evita posibili- trajuego en la columna de CR.
dades tácticas basadas en la rápida
transferencia de la dama negra al 8 ... C2D
ala de rey a través del movimiento 9 C3C A5C
intermedio ... , D4T +. 10 A2R

6 ... A4A 1O P3A debilita el ala de rey de las

7C2R blancas.

Dirigiéndose hacia 3C para acosar 10 ... AxA

al alfil negro y proteger el lado de 11 DxA D4T
rey. 7 D3C?! , D2A; 8 A4AR? es un 12 0-0 0-0-0
error instructivo cuando las blancas
sacrifican un alfil a fin de ganar una Las negras han completado la pri-
torre de dama de las negras. Sin mera parte de su plan, pero dema-
embargo después de 8 ... , DxA; 9 siado lentamente, pues el ataque de
DxPC, A3T (amenazando mate con las blancas está preparado para em-
10 ... , D7D) 10 C3A, 0-0; 11 DxT; pezar.
D2A. 13 P4AD P3R (83)
La dama blanca está atrapada y
no se puede salvar con 12 P5D de- Esta posición aparece en el 18º
bido a 12 ... , D3C; 13 A4A (no existe Campeonato de la URSS Averbakh-
un movimiento mejor) 13 ... , A1A Sokolsky. En esa partida las blancas
(amenazando ... , A2C) 14 PxP, CxP probaron:
y ahora A2C no se puede de-
tener.

7 ... P4TR

Con la idea de, o bien quitar el ca-

ballo del cuadro 3C o bien facilitar el
cambio de los alfiles de los cuadros
claros. Después de un movimiento de
desarrollo tal como 7 ... , C2D el alfil
negro deberá ser desplazado a una
mala posición. P. ej., 8 C3C, A3C; 9
P4TR, P3TR; 1O P5T, A2T; 11 A4AD y
las blancas tienen la iniciativa.

8 P4TR
Asegurándose de que el caballo
blanco pueda mantenerse perma-
nentemente en 3C. Más incorrec-
to es 8 C3C, A5C; 9 A2R , AxA;
10 DxA, D4D!; 11 0-0, P5T; 12 C4R,
C2D; 13 A4A , 0-0-0 ; 14 P3TR,
83 B
14 P3T
provocando una tormenta de peo-
nes en el ala de dama, pero este
movimiento dio tiempo suficiente pa-
100 Defensa Caro-Kann
ra introducir en el juego al alfil de
dama.
14 ... A3D!
Por el contrario Boleslavsky reco-
mienda 14 A4A, después de lo cual
las blancas tienen excelentes oca-
siones de ataque, ya que sus piezas
están mejor coordinadas, como por
ejemplo 14 ... , A3T? 15 AxA, TxA;
16 P5D!, PAxP; 17 PxP, DxP; 18
D3R con ataque simultáneo sobre la
torre de rey y un peón.
ATAQUE PANOV
1 P4R P3AD
2 P4D P4D
3 PxP PxP
Después de 3 ... , DxP? las blan-
cas ganarían un tiempo mediante 4
C3AD atacando la dama con un mo-
vimiento de desarrollo.
4 P4AD (84)
84 N
Con este movimiento las blancas
inician el Ataque Panov. En los
años 1930 se pensó que este siste-
ma desbancaría el Caro-Kann , pero
habiendo habido en aquel tiempo
unas notables mejoras defensivas
se pudo restablecer el teórico equi-
librio existente. Si ahora las negras
juegan 4 .. ., PxP se dejará a las
blancas con un peón de dama ais-
lado pero no hay por qué asustar-
se. Si por ejemplo 5 AxP, P3R; 6
C3AR y ahora la apertura se con-
vierte en un Gambito de Dama
Aceptado. En tales posiciones el
peón aislado se reconoce más co-
mo reforzante que como debilita-
dor, por el potencial de ataque que
genera.
4 ... C3AR
Defendiendo el peón de dama
con un movimiento de desarrollo .
4 ... , C3AD?! es menos preciso,
pues después de 5 PxP, DxP la da-
ma negra alcanza nuevamente
una posición más bien expuesta y
las blancas podrán jugar C3AD
con ganancia de tiempo (después
de defender su peón de dama).
5 C3AD
La fascinante idea Gunderam, 5
P5A, puede unirse con 5 ... , P4R lo
que conduce a posiciones que-
bradas.
5 ... P3R
La defensa más sólida, aseguran-
do que las negras puedan mantener
un peón en 4D. Las negras no pue-
den conseguir la igualdad después
de 5 ..., P3CR; 6 D3C!, A2C ; 7 PxP,
0-0; 8 A2R, CD2D; 9 A3A ya que es
difícil para ellas recuperar cómoda-
mente su peón.

6 C3A A2R
7 PSA!?
A 7 A5C se respondería con 7 ... ,
0-0 o con 7 .. . , C5R llevando cual-
quiera de los dos a la igualación . Así
las blancas optan por una ventaja a
través del avance rápido de los peo-
nes del lado de dama.
7 ... 0-0
8 A3D
Manteniendo el caballo negro
apartado de 4R. Después de un in-
mediato 8 P4CD debería seguir: 8 ... ,
C5R!; 9 D2A, (9 CxC , PxC; 1O C5R,
P3A; 11 C4A, C3A) lo que costaría a
las blancas un peón: 9 ... , C3A; 1O
P3TD, P4R! con ventaja para las ne-
gras. P. ej. 11 PxP, CxC; 12 DxC,
A5C con un fuerte ataque aparente
ya que las blancas no han puesto
aún su rey a salvo.
8 ... P3CD!
Lanzando un contraataque contra
el peón AD de forma que las blancas
no tengan tiempo de consolidar sus
fuerzas.
9 P4CD P4TD
10 C4T
Atacando al peón de caballo. Ju-
gar 1O P3TD? no ayudaría a preser-
var la cadena de peones blanca,
porque después de ... , PxPC el peón
queda clavado con la torre.
10 ... CD2D
Después de 1O ... , PxPA ?; 11 PCxPA,
el peón AD blanco protegido y pasa-
do causará molestias a las negras.
Lo del texto supone una ligera mejora
sobre 1O ... , CR2D a lo que las blan-
Defensa Caro-Kann 101
cas pueden contestar 11 P5C. Ame-
nazando, 11 .. ., PxPA; 12 PxP, P4R! ;
(no 12 ... , CxP?; 13 CxC, AxC; 14
AxPT+, etc.); 13 P6A, P5R; 14 PxC,
CxP; 15 0-0 y las blancas aún conser-
van una ligera ventaja.
11 P3TD
Parece como si la cadena de peo-
nes blanca se impusiera completa-
mente, pero de hecho las negras dis-
ponen de una simple combinación
igualatoria. Esto proporciona un buen
ejemplo de cuánto se puede debilitar
una cadena de peones a medida que
la base de la cadena se va despla-
zando hacia arriba del tablero .
11 ... PxPC
12 PTxP PxP
13 PCxP
Después de 13 PDxP, P5R los pe-
ones centrales negros están mejor
que los blancos en el lado de dama.
13 ... P4R!
14 CxP
Otras posibilidades son peores.
P. ej., 14 PxP, CxPA!; 15 PxC, (15
CxC permite 15 ... , xT) 15 ... , CxA+;
16 DxC, AxP; 17 C4D, D1 R+; 18 A3R ,
TxC; (14 P6A, P5R; 15 PxC, AxP).
14 ... AxP!
15 0-0
15 CxC, A5C+; 16 A2D, AxA+; 17
DxA, AxC con ganancia para las ne-
gras ya que las blancas no pueden
salvar el caballo en 4T.
15 ... CxC
15 ... , AxP sería respondido con
16 AxPT+.
102 Defensa Caro-Kann
16 PxC
16 PxA? sería un error ya que
16 ... , CxA; 17 DxC , A3T gana ca-
lidad.
16 ... C5R
85 B
También es posible la especulati-
va 16 ... , C5C!?, p. ej. 17 A4AR (de-
sarrollando una pieza y protegiendo
el peon de rey) 17 ... , AxP+; 18 TxA,
CxT; 19 RxC, D5T +; 20 A3C, (a 20
A3C, DxPT+), 20 ... , D5D+; 2 R1A,
RH, previniendo 22 AxPT + ganan-
do la dama, y teniendo las negras al-
gunas ocasiones ganadoras debi-
das al mal caballo en 4T, y a la
expuesta posición del rey blanco .
Después del movimiento del texto la
posición está completamente iguala-
da. El mejor juego para las blancas
es 17 AxC , PxA; 18 DxD (18 CxA?
aún permite 18 ... , TxT) , 18 ... , TxD;
19 A5C, T4D (para proteger el alfil
ya que ahora el caballo blanco esta
desclavado); 20 CxA (20 TR-1A? se
uniría con 20 .. ., A5D) 20 ... , TxT; 21
TxT, TxC seguido de un rápido em-
pate.
VARIANTE DE AVANCE
1 P4R P3AD
2 P4D P4D
3 P5R (86)
Esta variante es con mucho la fa-
vorita del Gran Maestro y candidado
a campeón mundial Nigel Short que
la ha empleado contra jugadores
punteros tales como Ljubojevic, Sei-
rawan, Timman y Karpov.
86N
El lector deberá comparar esta po-
sición con la alcanzada en la varian-
te de avance de la Defensa France-
sa (1 P4R, P3R; 2 P4D, P4D;
3 P5R). Existen dos diferencias sig-
nificativas.
(a) En la Defensa Francesa nor-
malmente las negras empujan su
peón de alfil hacia 4A a fin de atacar
la base de la cadena de peones
blanca. Este avance realmente les
cuesta a las negras un tiempo en la
Caro-Kann porque verdaderamente
se ha jugado este peón a 3AD.
(b) En la Defensa Francesa el alfil
de dama negro se lanza tras el peón
en 3R, y debido a la naturaleza ce-
rrada de la posición , normalmente

queda inmovilizado durante bastan-
te tiempo . Por el contrario, después
de 3 P5R en la Caro-Kann las ne-
gras pueden desarrollar libremente
esta pieza al agresivo punto 4AR.
La teoría del ajedrez sostiene que
desde el punto de vista de las blan-
cas la ventaja de (a) viene contra-
rrestrada por los inconvenientes de
(b) y por tanto esta línea no es muy
tenida en cuenta.
3 ... A4A
Es preferible desarrollar inmedia-
tamente este alfil puesto que las ne-
gras pronto querrán jugar .. ., P3R
fijando los peones blancos y refor-
zando su centro.
4 P4AO!?
Una interesante e instructiva conti-
nuación que da a esta variante un
carácter propio. A simple vista pare-
ce como si las negras pudieran ex-
plotar este movimiento mediante la
captura 4 ... , PxP seguido de ... ,
P3R dejando lastimosamente el pe-
ón de dama en retaguardia no obte-
niendo por ello ninguna compensa-
ción evidente. Sin embargo, ésta no
es la historia completa: El peón de
rey adelantado de las blancas conti-
nuará cediendo alguna superioridad
de espacio, y lo que es más impor-
tante, si desaparece el peón negro
de 4D, las blancas recuperarán el
uso de su cuadro 4R que servirá de
valioso refugio para sus caballos. El
mismo Nigel Short corrientemente
juega el simple movimiento de desa-
rrollo 4 C3AR seguido de A2R y 0-0.
La partida del texto es más aguda.
4 ... PxP
Aceptando el desafío.
Defensa Caro-Kann 103
5 AxP P3R
Fijando el peón de dama de las
blancas, impidiendo permanente-
mente el avance P5D.
6 C3AO C20
7 CR-2R
Esto es mucho más lógico que
7 C3AR porque en esta variante el
caballo de rey blanco pertenece a
3C desde donde puede mantenerse
la vista puesta en 4R y quizás ayu-
dar en el avance del peón AR (una
de las amenazas blancas a largo
plazo la constituye la maniobra posi-
cional P4AR-P5A).
7 ... C2R
No hay mucha dificultad en desa-
rrollar el alfil de rey con 7 .. ., A5CD,
pues las negras flO están en ningún
caso amenazando seriamente cam-
biar este alfil por un caballo blanco.
Si las negras jugasen ... , AxC y las
blancas respondiesen PxA el resul-
tado neto sería reforzar el débil peón
blanco y crear un agujero: el cuadro
3D negro, para ser ocupado por el
caballo blanco restante. Así, des-
pués de 7 ... , A5C, las blancas sim-
plemente retiran el alfil con movi-
mientos de peones mientras van
ganando espacio en el ala de dama.
8 0-0 C3CO
Mientras piezas blancas están lu-
chando para ganar control sobre 4R
uno de los caballos negros apunta
hacia la ocupacíon del cuadro 4D.
9 A3C 020
Preparando el enroque por el lado
de dama lo que aumentará la pre-
104 Defensa Caro-kann

sión en la columna de dama contra 13 DxA e2-4D

el peón blanco retrasado.
10 P4TD!
Jugando para disuadir 1O ... , 0-0-0
p. ej., 11 P5T, C3-4D ; 12 C4T, con
presión en el ala de dama.
10 ... P4TD!
Aceptar el sacrificio con 13 ... ,
DxP?! es muy peligroso . P. ej ., 14
A3R , D5C (o 14 ... , D1D 15 D3C)
(15 T3T, amenazando ganar el ca-
ballo) 15 ... , C2 40 ; 16 T3C , CxA;
17 PxC, D4A; 8 D2A y las negras no
pueden defender al mismo tiempo
su caballo y su débil peón de 2AR

Deteniendo el molesto avance del 14 e3A-4R ese

peón TD de las blancas. Natural-
mente ahora es muy arriesgado ju-
gar ... , 0-0-0 porque los peones del
lado de dama llegan a un compromi-
so, pero en compensación las ne-
gras han ganado 5CD como un nue-
vo cuadro para refug io de sus
caballos.
11 eJe A3e
A las negras no les gustaría con-
ceder la ventaja de los dos alfiles.
Asimismo después de esta retirada,
amenazan 12 ... , C4A aumentando
la presión en el peón de dama.
15 D2R e3-4D (87)
15 ... , DxP?! es aún dudoso ya que
las blancas podrían jugar 16 A3R ,
D1D ; 17 D4C amenazando 18 C5T.
Sin embargo siguiendo el texto, las
negras tienen un buen juego para sus
caballos y no andarán muy lejos de
una desventaja. Hemos ido siguiendo
la partida jugada por Tal y Golombek
en la Olimpiada de Munich de 1958.

12 A2A!

Impidiendo .. ., C4A y forzando el

cambio de alfiles en cuadros claros,
después de lo cual las blancas tie-
nen un control indiscutible sobre 4R.
Evidentemente este movim iento su-
pone el sacrificio potencial de un
peón, lo que comentaremos luego
en nuestra observación siguiente.

12 ... AxA 87 8
 PEÓN DE DAMA Y
APERTURA DE FLANCO
 Peón de dama y apertura de flanco
INTRODUCCIÓN
Al jugar P4R en su primer movi-
miento las blancas no sólo estable-
cen un puntal en el centro, lo que
normalmente es un principio venta-
joso a seguir, sino que además pre-
para un desarrollo rápido al abrir
diagonales para sus alfiles de rey y
de dama. Después de 1 P4R , fre-
cuentemente las blancas están en
condiciones de lanzar un ataque ba-
sado en la potencial rapidez de de-
sarrollo. Si las negras se ponen a la
defensiva al responder con 1 .. ., P4R,
las blancas pueden explotar el he-
cho de que el peón de rey negro ca-
rece de protección para movilizar
rápidamente sus fuerzas con ame-
nazas constantes contra el peón de
rey como en la Ruy López.
1P4D aun cuando ópticamente es
similar a 1 P4R conduce a un con-
cepto de apertura completamen-
te distinto. Ciertamente las blancas
aún mantienen su centro, pero
1 P4D no permite a las blancas de-
sarrollar sus piezas tan rápidamen-
te como lo hace 1 P4R . Además, si
las negras responden con 1 ... , P4D
el peón de dama queda automáti-
camente protegido por la dama ne-
gra; así el simple movimiento de
desarrollo 2 C3AD no aporta más
que la obstrucción del peón AD
blanco. Esto es una mala cosa
puesto que el peón AD se requiere
frecuentemente a manera de palan -
ca central para atacar al peón de
dama opuesto, en aperturas por el
lado de dama.
Después de 1 P4D el principal ob-
jetivo de las blancas no es el desa-
rrollo rápido de piezas, sino el inten-
to de formar una estructura masiva
central de peones bajo la que se
puede preparar un asalto a las posi-
ciones negras. Examinaremos tres
107
tipos de respuestas de las negras a
esta estrategia blanca.
(1) Las negras luchan para formar
un centro de peones blanco ocupan-
do el centro mismo con peones
(Gambito de Dama).
(2) Las negras luchan para formar
un centro de peones blanco contro-
lando con sus piezas los cuadros cen-
trales clave (Defensa Nimzo-lndia).
(3) El tratamiento más actual. Las
negras estimulan positivamente la
formación de un centro de peones
blanco, esperando probar que tales
estructuras están sobreextendidas y
propensas a contener puntos débi-
les (Defensa India de Rey y una lí-
nea de la Defensa Moderna). Antes
de entrar en el análisis de variantes
específicas, demos un vistazo a una
partida con apertura 1 P4D en la que
las blancas llevan a cabo su estrate-
gia. La partida se puede subdividir
en las siguientes etapas:
(1) Las blancas forman un centro
de peones fuerte.
(2) Las blancas reúnen sus piezas
preparándose para un ataque prote-
gido por sus peones.
(3) Las blancas adelantan sus
peones para despejar líneas de ata-
que para su ejército de piezas.
(4) Las piezas blancas emancipa-
das convergen hacia el rey negro y
llevan a mate.
Obsérvese como en esta partida
el control central permite a las blan-
cas el objeto de su ataque. Las pie-
zas negras están distribuidas alre-
dedor del borde del tablero y no
pueden ejercer una resistencia efec-
tiva.
Esta partida fue jugada en 1962
entre dos Grandes Maestros soviéti-
cos: Keres con las blancas y Geller
con las negras.
Etapa 1: 1 P4D, C3AR; 2 P4AD,
P3R; 3 C3AR, P4D; 4 C3A, P4A;
108 Peón de dama y apertura de flanco
5 PxPD, CxP; 6 P3R, C3AD; 7 A4A,
CxC? No es recomendable. Esto re-
fuerza el centro blanco permitiéndole
capturar con un peón lateral hacia el
centro (PCxC) sin ceder a las negras
ningún género de contraataque.
Etapa 2: 8 PxC, A2R; 9 0-0, 0-0;
10 P4R, P3CD; 11 A2C, A2C; 12
D2R, C4T; 13 A3D, T1A; 14 TD-10
(88)
88 N
Etapa 3: 14 ... PxP; 15 PxP, ASC;
16 PSD! Súbitamente todas las pie-
zas blancas apuntan hacia el infortu-
nado rey negro. 16 ... , PxP; 17 PxP,
D2R; (17 .. ., DxP?; 18 AxPT+) gana
la dama, mientras 17 ... , AxP; 18
D5R, P3A; 19 D5T es también de-
sastroso para las negras que no
pueden esquivar las amenazas a las
posiciones de su rey. P. ej. , 19 .. . ,
P3C; 20 AxP, PxA; 21 DxP+, R1T;
22 C5C, D2D; 23 TxA!). 18 CSR,
P3A, 19 DST.
Etapa 4: 19 ... , P3C; 20 CxP. Un ti-
po muy corriente de sacrificio para
derribar la barrera de peones prote-
giendo un rey. Hemos visto ya algo
parecido a esto en la nota al movi-
miento 17. 20 ... , PxC; 21 AxPC,
D2C.
El mismo Keres escribió en rela-
ción a esta posición: «La defensa de
las negras es extremadamente difí-
cil. Las blancas tienen dos peones
por la pieza sacrificada y además
prácticamente todas sus piezas es-
tán preparadas para atacar al debili-
tado rey enemigo. Aun en términos
generales parece que las negras
pueden esperar poco para salir sa-
nos y salvos de esta situación" . 22
T3D, A3D; 23 P4A, D1T; 24 D4C,
A4A+; 25 R1T, T2AD; 26 A7T+,
R2A; (26 ... , RxA; 27 T3T++) 27
D6R+, R2C; 28 T3CR+, y mate en el
siguiente movimiento , después de
28 ... , RxA; 29 D3T ++.
Después de este impresionante
ejemplo de control central, que lleva
a un ataque aplastante, prestare-
mos nuestra atención al análisis
concreto del Gambito de Dama.
 9
Gambito de Dama
1 P4D P4D
2 P4AD (89)
89 N
Hasta el último cuarto del siglo
XIX fue normal jugar P4R como pri-
mer movimiento en torneos interna-
cionales. (Naturalmente no eran
desconocidos otros movimientos.)
Sin embargo, en este estado de de-
sarrollo del ajedrez también 1 P4D
se hizo popular, e invariablemente
las negras respondían con ... , P4D
marchando hacia el gambito de da-
ma. El Gambito aceptado ha ido
surgiendo esporádicamente duran-
te los últimos cien años pero nunca
se ha tomado con mucho entusias-
mo. Inicialmente las defensas más
populares fueron la Ortodoxa (re-
curso negro para atrincherarse) y la
Tarrasch (actividad a costa de la
debilidad de peones). Aunque am-
bas experimentan una disminución
con las ideas hipermodernas (como
la Nimzo India) de los años 1920,
aún quedan actualmente muchos
partidarios. Mientras Tarrasch ela-
boraba su defensa al Gambito de
Dama a finales del siglo XIX, el
gran maestro ruso Mikhail Tchigorin
fue pionero de sus propios plantea-
mientos . Aun cuando la idea rusa
no gozó nunca de aceptación gene-
ral , aún ofrece parcelas fascinantes
e inexploradas en la defensa del
Gambito de Dama .
Después de 1 P4D la réplica 1 ... ,
P4D es el camino más evidente de
impedir que las blancas aumenten
la función del centro de peones con
2 P4R. Hemos visto que 1 P4D, 2
P4D, C3AD no tiene sentido porque
el peón de dama negro queda auto-
máticamente protegido por su dama
y por tanto normalmente las blancas
ofrecerán un gambito en este mo-
mento con 2 P4AD, esperando con-
vencer al peón de dama negro, de
forma que las blancas puedan cons-
truir su centro en paz.
Ahora examinaremos tres formas
de respuesta negra al Gambito de
Dama.
(a) El Gambito de Dama acepta-
do. Las negras toman el peón y con-
fían para su contrajuego en el hecho
de que las blancas deben emplear
11 O Gambito de Dama
tiempo recuperando su material. Es-
to es un paso verdaderamente
arriesgado para las negras ya que
normalmente las blancas ganan
control en el centro, aunque para lle-
gar a esto pueden tener que aceptar
un peón de dama aislado.
(b) Las negras lanzan un rápido
contraataque contra el peón de da-
ma blanco ya sea valiéndose de pie-
zas (la Defensa Tchigorin) o de peo-
nes (la Defensa Tarrasch) .
(e) Las negras defienden firme-
mente el peón de dama en 4D con-
tra todos los asaltos blancos (la De-
fensa Ortodoxa) .
GAMBITO DE DAMA
ACEPTADO
1 P4D P4D
2 P4AD PxP (90)
90 B
Ostensiblemente esto falla con to-
dos los planes de las blancas. Las
negras abandonan su lugar en el
centro y ceden a las blancas un cen-
tro de peones mayoritario. Además
las blancas pueden recuperar fácil-
mente su peón atacándolo con su
alfil de rey, y si es necesario con el
caballo de dama y con la dama.
Puesto que 3P4R puede unirse a
3 ... , P4R contraatacando en el cen-
tro, normalmente las blancas juga-
rán primero ...
·
3 C3AR
.. . a fin de evitar acometidas negras.
Pero ahora se les concede a las ne-
gras algún tiempo para organizar un
contraataque. Sin embargo el Gam-
bito de Dama Aceptado comporta
una defensa verdaderamente arries-
gada para las negras. 3 D4T+ es
otro camino para recuperar el peón,
pero es preferible desarrollar el alfil
de rey que la dama en 4AD tan tem-
prano en la partida.
3 ... C3AR
El desarrollo es esencial para las
negras. 3 ... , C3A también evita 4
P4R.
4P3R
Preparándose para recuperar el
peón desarrollando simultáneamen-
te el alfil de rey en un cuadro verda-
deramente útil,
4 ... P3R
Las negras desean jugar ... , P4AD
para atacar el peón de dama de las
blancas. El movimiento del texto
permite al alfil de rey negro cubrir el
cuadro 4AD. En su lugar 4 ... , A5CR
permite a las blancas desarrollarse
en forma sencilla con 5 AxPA (ame-
nazando 6 AxPA+) 5 ... , P3R; 6
C3AD, CD2D; 7 0-0; A3D; 8 P3TR,
A4T; P4R, P4R; 1O A2R con una
ventaja asegurada.

5 AxP P4A
6 0-0
6 PxP permitiendo el cambio de
damas y deshaciendo la mayoría
blanca de peones centrales es cla-
ramente vano , pero frecuentemente
se elige cuando las blancas sólo
pretenden tablas .
6 ... P3TD
Este movimiento parece una juga-
da de peón irrelevante, pero ahora
las negras amenazan P4CD y ...,
A2C desarrollando su alfil de dama
sobre una fina diagonal ganando un
tiempo. Naturalmente las blancas
detienen esta situación .
7 P4TD!
Ahora las blancas están preparán-
dose para concentrar sus piezas
para el ataque, tras sus peones cen-
trales, que actúan a manera de pan-
talla.
7 ... C3A
8 D2R PxF
9 T1D A2R
No 9 ..., P4R?; 1O PxP y se clava
el peón de rey. 9 ..., A4A parece
bien, desarrollando y protegiendo el
peón, pero después de 1O PxP, CxP;
11 CxC, AxC; 12 A3R la clavada es
muy potente.
10 PxP 0-0
11 C3A
Las blancas están plenamente de-
sarrolladas y preparadas para el
avance disruptivo P5D ; por tanto las
negras bloquean el peón de dama
aislado en la forma conocida:
Gambito de Dama 111
11 ... C4D
12 A3D! (91 )
91 N
Apuntando agresivamente al rey
negro. Hemos llegado a la posición
típica que resulta del Gambito de
Dama Aceptado. Posiciones seme-
jantes a ésta se han presentado en
miles de ocasiones en partidas de
torneos. Esta es una de las ocasio-
nes en que el peón aislado es una
ventaja positiva para las blancas ya
que les proporciona u¡;¡ agarre firme
en el centro , mientras que las ne-
gras están insuficientemente bien
desarrolladas y sus piezas no están
eficazmente colocadas para aprove-
charse de la debilidad de los peo-
nes. Compárese la sección sobre la
Defensa Tarrasch en donde las
blancas, en virtud de mover primero,
pueden combinar idealmente las
piezas para explotar el peón de da-
ma negro aislado.
Gligoric-Portish del tablero nº 1 de
la competición Yugoslavia-Hungría
en 1971 que continuó:
12 ... C3-5C
13 A1C
112 Gambito de Dama

Se lucha para mantener el alfil en centro blanco por medio de la activi-

su estupenda diagonal.
13 ... P3CD
14 P5T! A2D
15 C5R
Moviendo hacia adelante para
ocupar uno de los cuadros controla-
dos por el peón de dama asilado.
15 ... PxP
16 T3T
Amenazando un mate típico por
medio de 17 CxC seguido de 18
AxPT +, RxA; 19 T3T+ y 20 D5T. Las
negras deben debilitar la cubierta de
peones que rodean su rey para re-
chazar esta amenaza pudiéndose
así apreciar el valor de A 1C.
dad de las piezas. Sin embargo, 2
.. ., C3AD descarta un importante
principio: que el peón AD no debe
quedar bloqueado por un caballo en
la apertura del peón de dama. Este
error puede compararse al bloqueo
del peón de dama por A3D en una
apertura de peón de rey, si bien no
es en forma alguna tan enojoso. La
Defensa Tchigorin es bastante juga-
ble, pero aquí ofrecemos análisis
que sugieren que las negras no pue-
den llegar a igualar a las blancas si
éstas juegan correctamente.

16 ... P4A
17 CxC CxC
18 CxA DxC
18 ... AxT??; 19 DxP+,
T2A; 20 C5R.
19 TxP

Las blancas tienen una posJcJon

muy buena con sus dos alfiles y filas
abiertas contra el peón TD y el alfil
de rey negro . También las blancas
92 8
tienen un magnífico cuadro en 5R
para una pieza mientras las negras
no tienen nada que decir contra el
peón de dama aislado . 3C3AD

Es correcto incrementar la presión

DEFENSA TCHIGORIN contra el peón de dama negro. Aho-
ra las negras deben ceder su agarre
1 P4D P4D en el centro ya que no es capaz de
2 P4AD C3AD (92) mantener su peón de dama defendi-
do por su peón AD . Obsérvese que
Esta defensa fue promocionada un inmediato 3 C3AR se aviene bien
por el gran maestro ruso del siglo con 3 .. ., A5C.
XIX Tchigorin. Las negras plantean
un contraataque rápido contra el 3 ... PxP
 Gambito de Dama 113

Las negras podrían mantener su Normalmente se recomienda cap-

peón de dama por medio de 3 ... ,
P3R, pero ello encerraría su alfil de
dama en forma lamentable, y con su
caballo ya en 3AD. Las negras ten-
drían muchas dificultades para libe-
ralizar sus posiciones apiñadas por
medio de P4AD.
4C3A
turar con un peón del ala hacia el
centro, pero aquí PRxA es correcto
ya que abre camino del alfil de rey
blanco de tal forma que pueda unir-
se en un peligroso ataque contra el
rey negro aún sin enrocar.
6 ... C4R
7 A4A!

Este movimiento de desarrollo ha- Hostilizando todavía al desgracia-

cia el centro es mejor. Las blancas do caballo . Ahora si 7 ... , C3C enton-
necesitan no tener prisa para recu- ces 8 AxP4A!, CxA; 9 A5C+ , P3AD ;
perar el peón sacrificado. Incidental- 1O PxP y las blancas tienen un ata-
mente este movimiento de desarro- que ganador.
llo refuerza su propio peón de dama
que fue indirectamente amenazado 7 ... C2D
en el segundo movimiento de las ne- 8 AxP4A
gras.
Amenazando C5C que las negras
previenen . -
4 ... ASC
8 ... P3TD
Las negras persisten en su tema 9 0-0
de atacar el peón de dama blanco
con piezas. Después de 4 ..., C3A; 5 Las blancas completan su movili-
P5D, C4TD; 6 D4T+, P3C; 7 PxP, zación.
CxP; 8 P4R, seguido de AxP. El su-
periorxdesarrollo de las blancas les 9 ... CR-3A
garantiza la ventaja. 10 T1R (93)

5 P5D!

Sólo ahora las blancas desplazan

al pobre caballo de dama negro y
así vemos un defecto adicional en
2 ... , C3AD.

5 ... AxC

Consistente pero inservible . Las

negras retiran el caballo de rey blan-
co a fin de que su propio caballo de
dama pueda ocupar un lugar en el
centro.

6 PRxA 93 N
114 Gambito de Dama
Ocupando automáticamente la co-
lumna abierta que conduce al rey ne-
gro. Ahora las blancas tienen una
clara ventaja ya que tienen el par de
alfiles en posición abierta y con am-
plio desarrollo, mientras que el rey
negro está claramente expuesto a un
ataque. A partir de aquí cabe la posi-
ble continuación: 1O ... , C4T; 11 A3R,
P3CR; 12 PéD! (abriendo líneas pa-
ra atacar) 12 ... , PAxP; 13 D3C, P3R ;
14 A4D , A2C; 15 AxP! PxA (15 ... ,
AxA; 16 AxC+, RxA; 17 DxPC+, D2A;
18 7R+,etc.); 16 DxP+, R1A; 17TD-
1D y gana.
En resumen: las dudas que hemos
dejado caer sobre la Defensa Tchigo-
rin al Gambito de Dama revela un im-
portante principio: los requerimientos
de la estrategia a largo plazo pueden
ser, con mucho, más importantes que
la velocidad de desarrollo en las
aperturas por el ala de dama.
DEFENSA TARRASCH
1 P4D P4D
2 P4AD P3R
3C3AD
El mejor movimiento de desarrollo,
ya que pone presión sobre el peón
de dama negro.
3 ... P4AD (94)
El movimiento clave de la Ta-
rrasch. Las negras buscan a toda
costa ganar juego activo en el centro
para sus piezas . A principios de este
siglo bajo la influencia del Gran
Maestro alemán Dr. Siegbert Ta-
rrasch , esto fue considerado como
la única defensa «correcta, al Gam-
bito de Dama, pero a medida que se
fue desarrollando la teoría del aje-
drez, la Tarrasch cayó en despresti-
gio. En la Tarrasch las negras se en-
cuentran casi siempre cargando con
un peón de dama aislado (el precio
que debe pagar por su temprana ac-
tividad) y los maestros de los años
1920 consideraron esta flojedad de
las posiciones negras como dema-
siado arriesgada, aunque de vez en
cuando ha sido empleada por los
Campeones Mundiales Kaspárov y
Spassky.
94 B
4 PxPD
El ataque contra el peón de dama
negro constituye el tema de toda la
apertura ya que nuevamente vuelve
a ser lo mejor. El simple desarrollo
con 4 C3A es insuficiente en el pun-
to a que hemos llegado, mientras
que la otra captura 4 PxPA? , permiti-
ría a las negras hacer un avance im-
portante en el centro 4 ... , P5D des-
plazando al caballo blanco recién
desarrollado. Después de 5 C4T las
negras pueden recuperar fácilmente
su peón mediante el pequeño ardid
5 ... , AxP; 6 CxA, D4T +; 7 A2D , DxC
y el control del centro por las negras
(el peón de dama avanzado) da
unas razonables oportunidades. Su
 Gambito de Dama 115

dama ha salido más bien demasiado nera más eficaz posible al peón de
pronto, debemos reconocerlo, pero dama negro.
las blancas no están lo suficiente-
mente bien desarrolladas para apro- 6 ... C3A
vechar esta circunstancia. La dama
negra en 4AD ataca al peón AD El juego de apertura de las negras
blanco y las blancas deberán em- en la Tarrasch consiste casi totalmen-
plear un tiempo para protegerlo. te en movilizar sus piezas con pruden-
cia y rapidez sobre los cuadros centra-
4 ... PRxP les más atractivos y así tenemos un
5 C3A desarrollo «clásico" opuesto al desa-
rrollo «moderno" de las blancas, de
Una vez más, la cesión del cuadro un alfil en el cuadro 2CR del flanco.
central 4D mediante 5 PxP, P5D ; 6
C4T no es recomendable. Si las 7 A2C A2R
blancas desean atacar un peón de 8 0-0 0-0
dama negro allá donde esté, debe- 9 A3R (95)
rán mantener un fuerte agarre en su
propio cuadro 4D para impedir el
avance del peón de dama. El plan
de las blancas ~s jugar PxP en un
momento en que las negras no pue-
dan mover en seguida P5D en répli-
ca. Entonces las blancas bloquean
el peón de dama (normalmente co-
locando un caballo en su propio 4D)
procediendo a reunir sus piezas pa-
ra atacar al peón de dama negro.
Una útil norma ideada por Nimzo-
witsch para situaciones en las que
pretendas atacar a un peón débil es
la siguiente: primero restringir la de-
bilidad del peón, luego bloquearlo
(de manera que no pueda avanzar 95 N
con seguridad) y seguidamente des-
truirlo.
En el movimiento noveno las blan-
5 ... C3AD cas tienen varias posibilidades. 9
PxP es todavía prematuro. Después
5 ... , PxP?; 6 CxP ayudaría a las de 9 .. ., P5D!; 10 C4TD el peón de
blancas a llevar su caballo de rey a dama escapa del bloqueo y nueva-
4D libre de cargas. mente el caballo de dama blanco es
perseguido al borde del tablero. En-
6 P3CR! tonces las blancas tienen algunas
ocasiones de retener su peón AD
Un desarrollo altamente eficaz pa- extra. Muchos jugadores maestros
ra el alfil de rey blanco. Desde 2C se rechazan esta línea para las blancas
pueden dirigir sus fuegos de la ma- en vista del juego activo de las ne-
116 Gambito de Dama

gras por sus piezas y la fuerza del El control negro sobre sus cua-
peón de dama que va aumentando dros 4AD y 4R es una de las princi-
en potencia cuanto más se acerca a pales formas de compensación para
la posición blanca. Continuando con un peón aislado. Con 12 P3C!, las
1O ..., A4AR pretendiendo ... , P6D, blancas retiran del uso uno de estos
las negras mantienen una peligrosa cuadros que las negras amenazan
iniciativa. 9 A5C fue una elección de ocupar.
Pretosian en el Campeonato Mun-
dial de 1969 jugado con Spassky 12 ... C3A
después de 9 ... , A3R ; 1O PxP, AxP; 13 030
11 AxC , DxA; 12 CxP, DxPC. Las
negras han conseguido una posi-
Tratando de construir tras el caba-
ción equilibrada. El movimiento del
llo con TR-1 D.
texto (9 A3R) fue jugado por
Spassky en una partida entre la
URSS y el Canadá en 1970. Las ne- 13 ... C4R
gras las tenía Yanofsky. 14 D2A
Con 9 A3R las blancas atacan al
peón AD negro con una segunda Concentrando ahora en la colum-
pieza incrementando al mismo tiem- na abierta
po su control sobre su propio cuadro
40. La siguiente marcha del juego 14 ... D4T
revela de forma clara la debilidad 15 C3-5C A2D
potencial de un peón aislado. 16 D7A!
9 ... PxP
Ocupar la séptima fila con dama o
Esto más bien falla en cuanto a los torre es casi siempre ventajoso .
planes blancos. Lo mejor para las
negras es probablemente 9 ... , P5A; 16 ... DxD
1O C5R, P3TR! con casi igualdad , 17 CxD TH-1 D
como entre Larsen-Kasparov, en 18 CxP CxC
Bruselas 1987. 19 AxC A6TR
20 A2C
10 CxP4D

Esto es muy importante porque el Las blancas han ganado el peón

bloqueo del caballo constituye la de dama negro allá donde estuvo.
clave del cuadro 4D . Media batalla Las negras no tienen compensación
está ya ganada para las blancas. alguna: 20 ..., AxA; 21 RxA, C5C; 22
C5A!, CxA+; 23 CxC, T7D; 24 T2A!
10 ... P3TR perdiendo después de 42 movi-
mientos.
Las negras temen A5C atacando
su caballo de rey que está apoyando
el peón de dama aislado. DEFENSA ORTODOXA
11 T1A C4TD 1 P4D P4D
12 P3C! 2 P4AD P3R (96)

96 B
Defendiendo enérgicamente el
peón de dama. La defensa con 2 ... ,
C3AR es ilusoria. Después de
3 PxP, CxP; 4 P4R se forma un
centro de peones blancos mayori-
tario y peligroso. Sin embargo 2 ... ,
P3AD (Defensa Eslava) constituye
una alternativa aunque el juego se
muestra completamente estéril
después de: 3 PxP, PxP; 4 C3AR,
C3AR; 5 C3A, C3A; 6 A4A , A4AR o
6 ... , P3R.
3C3AD C3AR
4 A5C
Desarrollando con amenazas y
prosiguiendo el asalto sobre el peón
de dama clavando el caballo negro
de rey. Ahora 4 .. ., P3TR sería de-
sastroso para las negras: 5 AxC! ,
PxA (5 ... , DxA; 6 PxP gana un peón
a cambio de nada) 6 PxP, PxP y las
negras se ven afectadas por una de
las peores situaciones que se pue-
den dar: un peón doblado y aislado.
Obsérvese que el cuadro 5AR po-
dría así convertirse en un refugio
ideal para las piezas blancas desde
donde amenazar las posiciones ne-
gras (p. ej. , A3D/C2R-3C) y donde la
Gambito de Dama 117
escasez de peones blancos en las
columnas de rey y CR significaría
que una pieza blanca establecida en
5AR nunca se podrá sacar.
También es muy corriente la Va-
riante del Cambio 4 PxP, PxP; 5
A5C, A2R ; 6 P3R, P3AD ; 7 A3D ,
0-0; 8 C3A, CD2D ; 9 0-0, T1 R; 1O
D2A, C1 A, después de lo cual nor-
malmente las blancas optan por un
ataque minoritario con 11 TD-1 C, in-
tentado P4CD-5C.
4 ... A2R
Rompiendo la clavada.
5 C3A 0-0
5 P3R
En esta línea es preferible desa-
rrollar el alfil de rey blanco en 3D .
El desarrollo del fianchetto con 6
P3CR y A2C , aquí estaría fuera de
lugar porque el peón de dama está
fuertemente protegido . En 3D el al-
fil de rey mira agresivamente al rey
negro.
6 ... CD-20
'"'·
Reforzando su caballo de rey. El
movimiento más natural 6 .. ., C3A es
un error pues obstruye al peón AD ne-
gro. Una vez más debemos señalar
que esta obstrucción se podría evitar
en la apertura de peón de dama. Una
alternativa aplicable es 6 ..., P3TR; 7
A4T, P3CD (la variante Tartakower)
que ha sido empleada con frecuencia
por Nigel Short y Boris Spassky.
7T1A
Ocupando una columna que pue-
da ser abierta más tarde por medio
de PxP. También más tarde veremos
lo útil que puede ser esto.
118 Gambito de Dama
7 ... P3A
Prestando protección al peón de
dama extra, las negras se preparan
lentamente, pero seguro, para libe-
rar su juego liberando piezas.
8 A30 PxP!
Abandonando ahora el centro, se
obliga a las blancas a mover su alfil
de rey por segunda vez. Esto da a
las negras la oportunidad de esta-
blecer sobre la marcha una manio-
bra de cambio ideada por el Gran
Campeón Mundial cubano Capa-
blanca. Las negras siguen en una
posición apiñada intentando cam-
biar piezas para liberarse uno
mismo.
9 AxPA C40!
Ahora el alfil de dama blanco no
tiene retiro pues ...
10 AxA OxA
11 0-0
Completando el desarrollo.
11 ... CxC
12 TxC
12 PxC reforzaría el centro pero
también encajonaría la torre.
12 ... P4R
El eslabón final de las maniobras
de liberación. Esta posición se ha
dado numerosas veces en partidas
entre maestros. Después de 13 PxP,
CxP; 14 CxC, DxC; 15 P4A, D5R; 16
A3C (planeando A2A) 16 ... , A4A, las
negras tienen iguales oportunidades
en cuestión de retener la iniciativa;
las blancas deben jugar.
13 02A
Ahora el alfil blanco apunta hacia el
cuadro 2AR negro tradicionalmente
vulnerable, mientras su dama apunta
al cuadro 7TR de las negras. Las
blancas tienen la estructura de un po-
deroso asalto contra el rey negro.
13 ... PxP
14 PxP
Produciéndose un caso claro de
situación en la que voluntariamente
se acepta un peón de dama aislado,
a fin de conservar el control de los
cuadros clave centrales y abrir lí-
neas para las piezas. Aquí las blan-
cas gozan de una ligera ventaja, es-
pecialmente en vista de su control
de la columna de rey.
97 N
Una posible continuación que in-
cluye una brillante combinación de
los tipos que actualmente puede
aprender un estudiante es:
14 ... C3A
15 T1R 030
16 C5C A5C
 Gambito de Dama 119

16 .. ., DxP; 17 T3A amenazando 20 AxP+ TxA

tanto 18 TxC y 19 DxPT ++, como 21 T8T+ RxT
18 ... , CxPA, TxC; 19 T?R. 22 CxT+ R1C
23 CxD T1D
17 T3CR A4T 24 T6R
18 T3TR A3C?
Después de esta brillante exhibi-
18 ... , D5C! es necesario y las ne- ción de pirotecnia las blancas tienen
gras pueden aún luchar con éxito. un final ganador.

19 DxA!! PxD
 10
Defensa Nimzo India
1 P4D C3AR
2 P4AD P3R
3 C3AD ASC (98)
98 8
Una de las principales aspiracio-
nes de las blancas en esta apertura
es la de establecer un potente cen-
tro de peones tras del cual poder
acumular tranquilamente las piezas
para el ataque. Después de 1 P4D
las blancas amenzan 2 P4R consi-
guiendo parcialmente su objetivo:
anteriormente ya vimos a las negras
desviando esta amenaza hacia la
defensiva 1 .. ., P4D. Aquí 1 .. ., C3AR
llega al mismo final pero con desa-
rrollo de piezas en lugar de movi-
miento de peones. Después de 2
P4AD, P3R; 3 C3AD las blancas
amenazan nuevamente al potente
4R y las negras, una vez más , lo evi-
tan con la clavada ... , A5C mejor que
con el bloqueo ... , P4D del peón.
Jugar en contra del cuadro 4R de
las blancas es uno de los motivos de
la estrategia de las negras en la De-
fensa Nimzo India y frecuentemente
las negras reforzarán este tema de-
sarrollando su alfil de dama en 2CD
presionando contra el punto vital.
A la larga, las negras no son capa-
ces de evitar que las blancas avan-
cen el P4R pero en compensación sí
serán capaces de imponer peones
doblados en el juego del contrario
moviendo .. ., AxCD . El creador de la
Defensa Nimzo India, el gran maes-
tro Aron Nimzowitsch que fue un
contendiente para el Campeonato
Mundial en los últimos 1920 y prime-
ros 1930 fue un gran experto en el
manejo de situaciones en las que él
había impuesto un peón doblado a
su rival.
Ya comentamos anteriormente las
relativas fuerzas y debilidades de
los complejos de peones doblados,
y puesto que aparecen tan frecuen-
temente en la Defensa Nimzo India,
tres de nuestras cuatro secciones
examinarán situaciones en las que
las negras crearán peones doblados
en el campo de las blancas. Estu-
diando este asunto, el lector podrá
discernir cuáles tipos de estructuras
de peones doblados favorecen a las
122 Defensa Nimzo India
blancas y cuáles a las negras. En la
sección final contemplaremos las lí-
neas en las que las blancas impiden
los peones doblados protegiendo su
caballo de dama con una pieza en el
cuarto movimiento.
Cualquier defensa en la que las
negras renuncien voluntariamente al
par de alfiles creando así también
una estructura de peones desequili-
brada, tiende a una situación violen-
ta y dinámica en la que son poco
probables las tablas . Por tanto, la
defensa Nimzo India atrae a los ju-
gadores posicionales ambiciosos de
ganar partidas con negras contra
1 P4D .
VA RIANTE SAMISCH
1 P4D C3AR
2 P4AD P3R
3C3AD ASC
4 P3TD (99)
99 N
Tratando del complejo de peones
doblados en su forma más amplia.
Las blancas fuerzan a las negras a
cambiar alfil por caballo razonando
que el peón doblado aportará al cen-
tro su propia resistencia aumentada:
4AxC+
5 PxC 0-0
Las negras retiran su rey del cen-
tro antes de concentrar su ataque
sobre los peones doblados . Ésta es
una prudente precaución en vista
del hecho de que los peones cen-
trales blancos pronto avanzarán
precipitadamente. El rey negro está
más seguro fuera de la ruta de su
avance.
6 P3R
Esencialmente las blancas de-
sean establecer una vasta zona de
peones que se extiende desde 4AD
hasta P4AR. Existen dos métodos
para conseguir esta deseada forma-
ción: (a) P3R, A3D , P4R con P4AR
a continuación, y (b) P3AR, P4R,
A3D y P4AR. Ambos métodos supo-
nen la pérdida de un tiempo ya sea
con el peón de rey o con el peón AR.
6 ... P4A
¡Muy importante ! Las negras blo-
quean el peón AD frontal preparán-
dose para su asalto que comprende
los siguientes movimientos: ... , C3A-
4TD/T1 A (amenazando .. ., PxP des-
cubriendo un ataque sobre el peón
AD blanco), ..., D2D-5T (si las ne-
gras omiten ... , P3D) ... , C1 R-30. El
sexto movimiento de las negras fija
sus objetivos (el peón AD blanco de-
lantero) firmemente en su lugar.
7 A3D
7 PxP? es suicida. La ganancia de
un peón es temporal. Después de
7 ... , C3T y .. ., D4T el frente triplica-

do de peones se derrumbará rápida-
mente y las blancas se quedarán
con uno de los inconvenientes a evi-
tar a toda costa: un peón aislado do-
blado en una columna abierta.
7 ... C3A
8 C2R
Aquí mejor que P3A ya que las
blancas no desean bloquear la ruta
de su peón AR.
8 ... P3CD
Preparando ... , A3T
9 P4R
Amenazando A5C y P5R de forma
que las negras eviten la clavada an-
tes de que ésta se produzca.
9 ... C1R!
4o . O· o
Un brillante movimiento originado
por Capablanca. Otra forma de la
clavada antes mencionada es 9 ... ,
P3TR pero esto debilitaría los peo-
nes frente al rey negro y por tanto es
mejor evitarlo.
Existe una idea posterior, tras esa
retirada del caballo. El juego de las
negras está estimulado por el de-
seo de bloquear y parar el avance
de la avalancha central de los peo-
nes blancos. Así se aclara el cami-
no para que el peón AR negro
avance hasta 4A bloqueando la ac-
ción del alfil de rey blanco obstru-
yendo el camino del peón AR blan-
co. Las negras apoyan su peón de
bloqueo en 4A por medio de ... ,
P3C y ... , C1-2C.
En una situación tan cerrada co -
mo ésta , los caballos negros son
equivalentes a los alfiles blancos .
Defensa Nimzo India 123
100 N
En cierto sentido esto representa
una posición ideal en la que ambos
bandos han empleado sus respecti-
vas estrategias en la forma más efi-
caz posible .
Tanto negras como blancas han
anotado brillantes triunfos desde es-
ta posición , y a continuación mostra-
remos un ejemplo de cada uno de
los textos para evidenciar las res-
pectivas debilidades y fortalezas de
los peones doblados. .,,
En primer lugar tenemos una par-
tida en la que las negras son acosa-
das por el avance del peón AR blan-
co . El segundo caso es un magnífico
ejemplo de restricción . En ningún
momento las negras ceden a su rival
ocasiones de ataque, y eventual-
mente las blancas sucumbirán al fi-
nal como consecuencia de la floje-
dad de sus peones.
(a) Bronstein-Najdorf, Budapest
1950.
10 ... P3D
11 P4A A3T?
11 ... , P4A era esencial.
124 Defensa Nimzo India

12 P5A! P4R 19 ... T2C

20 A6T T1C
Esperando bloquear la posición 21 T3T 1-0
completa después de 13 P5D, C4T;
14 D4T, P3A. (b) Botvinnik-Reshevsky, Campeo-
nato Mundial 1948
13 P6A!
10 ... A3T
Brillante. 13 ... , PCxP ; 14 A6T, 11 A3R P30
C2C, 5 C3C es horrible para las ne- 12 C3C C4T
gras, mientras 13 ..., CxPA; 14 A5C 13 02R 020!
seguido de AxC es igualmente de-
sagradable. De todas formas, las Amenazando ..., D5T en algunas
negras no pueden impedir esta va- líneas, soportando también ... , P4AR
riante durante mucho tiempo . y prestando una protección extra a
su cuadro 4AR.
13 ... R1T
14 P4A
Ignorando el peón con la esperan-
za de que ya se marchará, pero no 14 P5R es más fuerte , abriendo
lo hace. una línea para un alfil de rey.

14 P50 C4T 14 ... P4A!

15 T0-1 R P3C
El ataque sobre el peón AD blanco 16 T10 02AR
ya no es relevante .
16 ... , D5T; 17 P5D es demasiado
15 C3C PxP arriesgado. Las negras se concen-
tran en un bloqueo en el ala de rey.
15 ... , CxPAR, 16 A5C y C5T es
siempre malo. 17 P5R T1A

16 C5A Atacando incidentalmente 4AD

blanco.
Un cuadro ideal de bloqueo para
un caballo, frente a peones negros 18 TR-1 R PxPR
doblados que han adquirido mayor 19 POxPR C2C f\
responsabilidad que los blancos. 20 C1A TR-10

16 ... A1A Si se cambian todas las piezas

17 05T AxC mayores, automáticamente las ne-
18 PxC T1CR gras ganarán el peón AD blanco
19T3A adelantado.

Amenazando 20 DxPT+, RxD; 21 21 A2AR C4T

T3T +, R2C; 22 A6T + , R2T; 23 22 A3C 01R
ASA++. 23 C3R 05T
 Defensa Nimzo India 125

iPorfin!

24 D2T CxA
25 PxC P4T

Paralizando el segundo grupo de

peones doblados.

26 A2R R2A
27 R2A D6C
28 DxD CxD
29 A3D R2R
30 R2R C4T
31 T2D T2A
32 P4C T2-2D 101 N

La posición de las negras es tan

sólida que pueden ignorar el sacrifi- Éste es el cuarto movimiento elegi-
cio de las blancas. do en casi el 75 % de las modernas
partidas jugadas con Nimzo India.
Las blancas rechazan firmemente
33 PxPA PCxP gastar un movimiento (P3TD) para
34 T1-1D P5T forzar a las negras a cambiar su alfil
35 R1R C6C de rey por un caballo. También 4 P3R
prepara un desarrollo clásico normal
Cuanto sigue no es más que pura con A3D, C3A, 0-0.
desesperación de las blancas. En la cumbre de esto las blancas
introducen la opción de CR-2R que
permite recapturar, sobre,. 3AD con
36 C5D+ PxC
una pieza, esquivando as( cualquier
37 AxP CxT
desventaja que pueda surgir de un
38 TxC PxP
peón doblado.
39 AxT TxA
40 T2AR R3R
41 T3A T6D 4 ... P3CD
42 R2R 0-1
Lógicamente las negras continúan
la lucha por 4R blanco desarrollando
su alfil de dama en 2CD. Un plan al-
LAS NEGRAS ternativo de bloqueo del centro será
«FIANCHETEAN» comentado en la próxima sección ,
SU ALFIL DE DAMA mientras 4 ... , 0-0; 5 A3D, P4A; 6
C3A, P4D; 7 0-0 , C3A es también ju-
gable para las negras.
1 P4D C3AR
2 P4AD P3R
3C3AD A5C 5 A3D A2C
4P3R(101) 6 C3A
126 Defensa Nimzo India

P3A modificaría el alcance del alfil 9 P5D!

de dama negro pero privaría al ca-
ballo de rey blanco de un cuadro útil. Si ahora 9 ... , PxP; 1O PxP, AxP;
11 P4A, A2C ; 12 C4D, o 12 A2C y
6 ... C5R los alfiles blancos emanan potencia.
Lo mejor para las negras es intentar
Tomando posesión del cuadro 5R bloquear los peligrosos alfiles con
de las blancas. Las negras esperan
con tiempo ya que esto ataca al ca- 9 C4A
ballo de dama blanco por segunda 10 ... A3T, C1-3T
vez y antes de que las blancas pue-
dan jugar D2A, lo que supone la Protegiendo a su colega. Si 1O ... ,
conquista permanente de 5R y si- CxA entonces 11 DxC y las negras
multáneamente negar la amenaza ya no podrán enrocar.
del peón doblado al caballo de da-
ma. Una posible alternativa es: 6 ... , 11 A2A, (1 02)
0-0, p. ej., 7 0-0, P4D o bien 7 0-0,
P4A; 8 C4TD, pero entonces las ne-
gras deberían renunciar a la estrate-
gia de infligir peones doblados en
blanco en la columna AD.

7 0-0!

Un sacrificio muy prometedor de

un peón.

7 ... AxC

Entra en acción el complejo del

peón doblado. Aceptar aquí el sacri-
ficio del peón con 7 ... , CxC; 8 PxC,
AxP es muy aventurado después de
9 T1CD.
8 PxA P4AR
Esto debilita el ala de rey de las
negras y priva al peón de rey de pro-
tección , pero incrementa el control
de 5R y apoya al caballo en ese
cuadro. Ahora el único camino para
que las blancas exploten el poten-
cial dinámico de sus peones dobla-
dos es avanzarlos audazmente co-
mo sacrificios para abrir rutas para
sus alfiles.
102 N
Los caballos negros están unidos
en grupos y fuera de juego quedan-
do colgados en el borde del tablero.
El principal inconveniente en la posi-
ción de las negras es que sus piezas
están dirigidas directamente hacia el
control 5R de las blancas y no a la
fuerza de los peones blancos dobla-
dos que se han convertido en una
fuerza potente en el control del cen-
tro. Esto sugiere que el plan está re-
lacionado con 6 ... , C5R y 7 ... , AxC
es defectuoso.
 Defensa Nimzo India 127

Después de 11 A2A han explotado 20 P4AD A2A

a fondo las blancas el potencial di- 21 e4D ese
námico de los peones doblados y 22 A1e T2e
tienen una considerable ventaja en 23 A2e
cuanto a espacio extra y líneas
abiertas para sus piezas mejor colo- Observa estos alfiles. No es bue-
cadas. no eliminar uno de ellos por una me-
Desde esta posición , Gligoric-Caf- ra torre.
ferty, Teeside 1972 continuaron:
23 ... D1D
11 ... 0-0 24 D2D P4TD
12 e4D! 25 esA T3e
26 D4D 1-0
Una importante centralización con
amenazas indirectas al peón AR
negro. VARIANTE HÜBNER
12 ... T3A 1 P4D e3AR
2 P4AD P3R
Según Gligoric «Este ataque es 3 e3AD ASe
falso pues lo único que hace es po- 4 P3R P4AD (103)
ner la posición más incómoda para
las negras». Eligiendo blancas para jugar
P3TD , cuando las negras pudieron
13 P3A T3T revertir a una Samisch con peones
14 D2R D3A AD blancos bloqueados. Pero ¿qué
15 TD-1 D sucede si las blancas rehúsan?

Piezas masificadas tras el centro

de peones están conformes con las
reglas.

15 T18
16 A1A

El alfil prepara un golpe a la móvil

torre negra.

16 ... P4eR
17 P4e

Abriendo magníficamente la posi-

ción para el alfil. ¡Un buen principio
a seguir si tienes la pareja de alfiles! 103 8

17 PxPD
18 exPA T3e 5 A3D e3A
19 PxP AxP 6 e3A Axe+
128 Defensa Nimzo India
La alternativa es 6 ... , 0-0 y ... , P4D
que ya mencionamos en la sección
relacionada con 4 ... , P3CD. Siguien-
do el texto , las negras ceden un
tiempo para castigar a las blancas
con peones doblados, lo que ha sido
tiempo perdido (las blancas no han
empleado ningún tiempo con P3TD
para forzar .. . AxC+ como en la Sa-
misch). Aquí es demasiado arries-
gado para las negras atacar el peón
AD con .. ., C4TD . Por tanto las ne-
gras optan por un plan distinto que
comprende la transferencia de su
caballo de dama al ala de rey. Este
plan es el preferido por el Gran
Maestro alemán Robert Hübner.
7 PxA P3D
Las negras preparan el bloqueo
del centro con 8 ..., P4R para mini-
mizar el ámbito del par de alfiles
blancos. Se debe conservar la posi-
ción cerrada si el contrario tiene dos
alfiles contra dos caballos , o contra
alfil y caballo. Inversamente, si po-
sees el par de alfiles debes tratar de
abrir la posición aunque sea al pre-
cio de sacrificar un peón.
8 P4R P4R
9 PSD
Naturalmente sería un gran cri-
men posicional mover 9 PxPA, o 9
PxPR . Los peones blancos dobla-
dos y aislados quedarían expuestos
sin esperanzas, y las blancas no po-
drían nunca maniobrar un caballo a
50 para proteger su debilidad: p. ej. ,
9 PxPA, PxP; 1O D2A, A3R!; 11
C2D , C4TD y las blancas ya no tie-
nen bastante tiempo para jugar
C1 A-3R-5D (análisis por Gligoric).
9 ... C2R
Ahora las negras amenazan con
llevar a cabo un peligroso ataque
por el ala de rey mediante ..., P3TR
... , P4CR y ... C3C de forma que las
blancas deben tomar medidas para
evitarlo.
10 C4T! P3TR
Preparando para ... , P4CR No
1O ... , C3C porque 11 C5A es bueno
para las blancas .
11 P4A
Esperando que las negras fallen
en el plausible intento de ganar ma-
terial con 11 ... , PxP; 12 AxP, P4CR
pero luego viene 13 P5R! con un po-
tente ataque.
11 ... C3C!
Una respuesta brillante que an i-
quila el juego de las blancas en la
columna AR. Además elimina la pie-
za blanca más agresivamente situa-
da, ya que 12 C5A falla en 12 ... ,
AxC ; 13 PxA, CxPA.
12 CxC PxC (104)
Por fin , las negras tienen un juego
igualado. Los alfiles blancos no son
muy notables y sus peones doblados
son más vulnerables que los negros .
El Gran Maestro yugoslavo Gligoric
hizo la siguiente valoración de la po-
sición después de 12 movimientos:
«La posición está bloqueada y las
blancas simplemente no tienen na-
da. Las negras pueden defender fá-
cilmente sus puntos débiles , mien-
tras que las blancas no son inferiores
en número. » Spassky-Fischer; Cam-
peonato Mundial, vieron a las ne-
gras explotando las debilidades de
 Defensa Nimzo India 129

los peones blancos de varias formas

eficaces.

105 N

104 B El único método de evitar los peo-

nes doblados que es corriente en
13 PxP PxP partidas maestras. (Otros movimien-
14A3R P3C tos para evitar el doblado de los peo-
15 0-0 0-0 nes AD son muy insulsos.) Teórica-
16 P4TO P4TO mente, la idea de las blancas (la de
17 T1C A20 obtener el par de alfiles sin permitir
18 T2C T1C el doblado de sus peones AD) es
19 T2-2AR 02R verdaderamente buena pero el tiem-
20A2A P4CR po consumido por la dama blanca
21 A20 01R para trasladarse de 1D a 3AD en la
22 A1R 03C apertura, da a las negras abundante
23 030 C4T contrajuego. ·
24 TxT+ TxT
25 TxT+ TxT 4 ... 0-0
26 A10 C5A
27 02A? AxP! No es probable que entre en con-
28 0-1 sideración una reacción juiciosa
desde el enroque en el ala de dama.
28 DxA, DxP es fatal. Naturalmente 4 ... , P4AD y 4 ... , P5D
son alternativas bien razonables.

LAS BLANCAS EVITAN 5 P3TO

LOS PEONES DOBLADOS
Las blancas pudieron penetrar en
1 P40 C3AR el centro con 5 P4R pero esto lleva-
2 P4AO P3R ría a una típica combinación 5 .. .
3C3AO A5C P4A!; 6 P5D (6 P5R?, PxP) 6 ... ,
4 02A PxP; 7 PAxP, CxPR!; 8 DxC, T1 R y
130 Defensa Nimzo India

las negras ganan. 7 PRxP, T1 R+ 10 A3D P4A

también es bueno para las negras.
Mientras las blancas están aún
5 ... AxC+ sacando sus piezas , las negras es-
tán en posición de ataque al centro
Si 5 ..., A2R las blancas habrían de peones blancos. -
ciertamente movido 6 P4R y las ne-
gras habrían sido aplastadas por el 11 C2R T1A(106)
centro de las blancas.

6 DxA P3CD

Tal como sucede frecuentemente

en esta defensa, las negras se api-
lan en el cuadro 4R blanco para evi-
tar la formación de un centro de peo-
nes blanco masivo.

7 A5C

Clavando el caballo de rey para

reducir la influencia de la pieza ne-
gra en 4R.

7 ... A2C 106 8

8 P3R
Las negras concentran sus fuegos
Un movimiento normal para com- sobre el peón AD blanco. Tienen un
pletar el desarrollo. desarrollo fácil y un plan preparado
para compensar los alfiles blancos.
8 ... P3D Una partida jugada entre dos juga-
9 P3A dores punteros ingleses en el Cam-
peonato Británico de 1971 continuó
Las blancas están preparadas pa- así:
ra sacrificar el desarrollo del caballo
de rey en su mejor cuadro a fin de 12 0-0 P3TR
imponer su control sobre 4R, pero 13 A4T A3T
esto cede a las negras más tiempo
para completar su propia moviliza- Una pieza más sobre el peón AD.
ción. Las blancas deben hacer algo sobre
esto.
9 ... CD-20
14 P5D C4R
Apoyando su caballo de rey de 15 P4R CxA
manera que la dama se pueda mo- 16 DxC P4R
ver. Ciertamente las negras no de-
sean permitir que sean doblados Completamente igualados. La po-
sus propios peones de AR. sición está bloqueada y las blancas

ya no disponen más de los dos alfi-
les. Pronto se convinieron tablas.
(Whiteley-Cafferty, Blackpool, 1971.)
Alternativamente las blancas po-
drían haber optado por 14 P3CD pe-
Defensa Nimzo India 131
ro después de 14 ... , PxP; 15 DxP (si
15 PxP?, P4CD! atacando el P4AD)
15 ... , P4D, la posición está nivelada
de acuerdo con el análisis de Kas-
párov.
 11
Defensa India de Rey
1 P4D C3AR
2 P4AD P3CR
3C~AD A2C
107 B
Esta defensa va un paso por de-
lante incluso que la Nimzo India,
permitiendo que las blancas formen
el deseado centro de peones virtual-
mente invariable , con la confianza
de que este centro no sea, después
de todo, tan terrible para las negras.
A últimos del siglo XIX y principios
del XX un jugador experto habría
considerado que tenía virtualmente
ganada una partida si podía estable-
cer peones incontroversibles en
4AD, 4D y 4R en la etapa de apertu-
ra. Pero en los años 1920 y 1930 es-
te panorama fue superado por lo
que se llamó «Hipermoderno » (los
Maestros Nimzowitsch , Réti , Breyer)
quienes demostraron que un centro
de peones masivo contiene también
en sí el germen de la derrota, ya que
está expuesto a los contragolpes de
los peones contrarios que han sido
retenidos deliberadamente. La De-
fensa India de Rey pertenece a esta
categoría y fue desarrollada entre
los años 1940 y 1950 por los Gran-
des Maestros Soviéticos , especial-
mente Boleslavsky y Bronstein.
Desde entonces ha ocupado un lu-
gar prominente en el repertorio de
todo Gran Maestro.
La Defensa India de Rey es una
apertura abrupta con numerosas po-
sibilidades tácticas y muchas oca-
siones asequibles desde ambos la-
dos. Es considerablemente más
arriesgada que el Gambito de Dama
rehusado o Nimzo India y su aplica-
ción está dedicada a jugadores que
prefieran posiciones tácticas con
buenas posibilidades de ataque so-
bre los reyes de ambos jugadores.
Esta situación es la favorita tanto del
Campeón Mundial , Gary Kaspárov
como del anterior Campeón Bobby
Fischer, quienes la emplearon nu-
merosas veces contra réplica a Bo-
ris Spassky en 1992.
La estrategia negra se basa en un
ataque demorado al centro blanco
mediante .. ., P4AD invitando P5D
cuando las negras socavan el centro
134 Defensa India de Rey

blanco con los impulsos ..., P3R y ... ,

P4CD. Alternativamente las negras
pueden jugar .. ., P3R (en lugar de
... , P4AD) y si las blancas ganan es-
pacio con P5D las negras pueden
mover su caballo de rey a 1R o a
4TR y empezar un avance por el ala
de rey con .. . P4AR. Tales ataques
con ... , P4AR, P5A y ... , P4CR se
presentan frecuentemente como un
ganador automático para las negras
si las blancas han enrocado por el
lado de rey.
En nuestra segunda sección dare-
mos un vistazo a las desgracias que
pueden acontecer a las blancas si 108 N
ocupan el centro en proporciones de
megalomanía, con peones alargán- pidamente posible, seguido de un
dose desde 4AD vía 4D y 4R hasta avance de sus peones del ala de
4AR. En subsiguientes secciones rey. 5 A3D no es tan bueno . No hay
analizaremos sistemas para las ninguna ocasión para un ataque por
blancas, que afiancen las conqu is- el lado de rey en el que esté involu-
tas territoriales centrales ya exis- crado el alfil de rey y el 3D quedaría
tentes. expuesto al ataque si el caballo de
dama negro alcanzase 4AD .

VARIANTE CLÁSICA 5 ... 0-0

1 P4D C3AR
2 P4AD P3CR
3C3AD A2C
Aquí 3 ... , P4D es la Defensa
Grünfeld por la que las blancas es-
tán capacitadas para construir un
centro de peones después de 4 PxP,
CxP; 5 P4R, CxC ; 6 PxC que las ne-
gras esperan poder minar en dos
movimientos.
4 P4R P3D
5 AJR (108)
2..
Es la marca distintiva del Sistema
Clásico. Las blancas desarrollan sus
piezas rápidamente sobre buenos
cuadros centrales. Con 5 A2R las
blancas se proponen 0-0 lo más rá-
6 C3A P4R
Casi universalmente elegido aquí.
Las negras esperan que las blancas
jueguen P5D estabilizando el centro
cuando las negras muevan su caba-
llo de rey y avancen su peón AR po-
niendo en movimiento la bien cono-
cida avalancha de peones. El
desarrollo con 6 ..., C3AD está fuera
de lugar. Después de 7 P5D el caba-
llo de dama no tiene ningún cuadro
bueno para escapar. Sin embargo
6 ... , P4AD es razonable; por ejem-
plo, 7 P5D , P3R alcanzando un tipo
de posición Benoni.
7 0-0
La aceptación de los peones ofre·-
cidos no conduce a nada después
 Defensa India de Rey 13S

de 7 PxP, PxP; 8 DxD, TxD; 9 CxP
CxP!, cori ataque a la descubierta
sobre el caballo avanzado blanco.
Aquí es posible 7 A3R y este movi-
miento natural de desarrollo fue el
favorito del Gran Maestro americano
Reshevsky. Normalmente tal movi-
miento sería inferior en vista de 7 ... ,
ese, pero aquí las blancas pudieron
mover su alfil en relación con la da-
ma negra 8 ASC, P3AR ; 9 A4T con
iguales oportunidades.
7 ... e020
para invadir el ala de dama negra
con P4AD , PSAxPD, seguido de
ese y D2A.
El peón de dama indefenso de-
berá ser el blanco de las piezas
blancas. En esta posición las ne-
gras están preparadas para mover
su caballo de rey y mover ... , P4AR
lo que sería desagradable para las
blancas. Las blancas no tienen op-
ción salvo la de ir a por la siguiente
maniobra, lo que ha ocurrido nu-
merosas veces en partidas de
maestros .

En apoyo del peón de rey y prepa-

rando también 8 ... , PxP; 9 CxP,
C4A; y ... , T1 R presionando el peón
de rey de las blancas. Por consi-
guiente las blancas desarman la
amenaza. 7 ... , C3A jugada frecuen-
temente por Kaspárov es una buena
alternativa, pero muy complicada.

8 PSD e4A

El caballo pasa a un buen cuadro

central ganando tiempo. Las blan-
cas deben proteger ahora su peón
de rey con ...
109 B
9 D2A
10 ASe
... lo que da a las negras tiempo para
salvaguardar la posición de su caba- Clavando el caballo de rey.
llo de dama.
10 ... P3T
9 ... P4TD (1 09)
Las negras deben romper la cla-
Si las negras no hubieran jugado vada.
esto, las blancas hubieran jugado
P4CD ahuyentando el caballo negro 11 A3R ese
y ganando espacio en el ala de da-
ma. Con ello sería fácil para las Desbloqueando el peón AR con
blancas arreglarse para jugar P4AD ganancia de tiempo sobre el alfil de
poniendo, por ejemplo, su alfil de dama blanco.
dama en 3TD y una torre en 1AD.
Las blancas quedarían dispuestas 12 Axe!
136 Defensa India de Rey
Normalmente es muy malo dar un
alfil por un caballo como en la De-
fensa India de Rey, ya que las blan-
cas necesitan su alfil de dama para
proteger sus cuadros oscuros, pero
aquí hay algunos puntos tácticos ex-
cepcionales.
12 ... PxA
13 P3TR! C3A
¿Dónde más? Las negras privan a
su caballo de rey de un posible retiro
cuando rompen la clavada en el mo-
vimiento 1O.
14 CxP CxPD
Descubriendo un ataque sobre el
caballo blanco. Ésta es la única for-
ma de recuperar el peón.
15 PAxC
Capturando alrededor del centro.
15 ... AxC
16 P4A A5D+
17 R2T
Como compensación por los dos
alfiles negros las blancas tienen un
centro verdaderamente potente que
puede ser apoyado por A4A y por
TD-1 R. Nosotros preferimos ligera-
mente las suertes de las blancas,
pero existe un valioso argumento a
favor de lo contrario que se basa en
que Fischer ha jugado con éxito esta
posición llevando las negras.
ATAQUE DE CUATRO
PEONES
1 P4D C3AR
2 P4AD P3CR
3 C3AD A2C
4 P4R P3D
5P4A(110)
Las blancas aprovechan la opor-
tunidad propiciada por los movi-
mientos de apertura de las negras
para ocupar el centro con peones
de la forma más extrema posible.
En los primeros tiempos de la De-
fensa India de Rey la conquista te-
rritorial de las blancas se consideró
casi decisiva , pero actualmente se
reconoce que el amplio centro de
peones blanco contiene debilida-
des. En particular, el movimiento
P4AR debilita los cuadros alrede-
dor del rey blanco. Las negras pue -
den asaltar el distendido centro
blanco con ... , P4AD atrayendo ha-
cia adelante el peón de dama blan-
co y empezando seguidamente las
operaciones de derribo con ... , P3R
y ... , P4CD . El Ataque de Cuatro
Peones ya no tiene gran populari-
dad en partidas de maestros pero
lo analizaremos para mostrar que
tal centro amplio de peones puede
hacerse inocuo con un juego de-
fensivo en la parte negra.
110 N

5 ... 0-0
6 A2R
Las blancas prefieren desarrollar
su alfil de rey antes que su caballo
de rey, ya que después de 6 C3A,
las negras podrían jugar 6 ... , A5C
seguido de C3A haciendo presión
desde estas piezas sobre el cuadro
4D blanco. Este asunto lo veremos
más profundamente en nuestro tra-
tamiento del ataque Austriaco, en el
capítulo dedicado a la Defensa Mo-
derna.
6 ... P4A!
Esto bate al peón de dama blanco
en debida forma. Si ahora las blan-
cas mueven 7 PxP seguidamente
vendrá 7... , D4T con la amenaza de
... , CxP y el mayor desarrollo de las
negras les supone una excelente
posición. Lo más seguro para las
blancas es reivindicar algún terreno
en el centro con ...
7 PSD P3R
Empiezan las operaciones de so-
cavado. Si ahora las blancas jue-
gan 8 PxP esperando imponer al
contrario un peón de dama retrasa-
do , las negras replican ... , AxP se-
guido de ..., C3A con desarrollo rá-
pido y con la posibilidad de atacar
el peón de rey blanco en la semia-
bierta columna de rey. Para las
blancas es mejor intentar conservar
la posición cerrada mientras se re-
trasa en desarrollo.
8 C3A
Intentando prudentemente com-
pletar su desarrollo.
8 ... PxP
Defensa India de Rey 137
9PAxP(111)
111 N
Con este movimiento las blancas
intentan mantener una mayoría de
peones móvil en el centro. En esta
posición las negras disponen de un
dispositivo táctico verdaderamente
útil que es típico para jugar en posi-
ciones contra un centro de peones
blanco.
Las negras juegan 9 ... , P4CD
amenazando .. ., P5C , atacando al
caballo de dama y permitiendo por
tanto a las negras capturar el peón
de rey libre de cargas. 9 .. ., P4CD
parece absurdo porque el peón es-
tá doblemente atrapado , siéndole
difícilmente posible a las blancas
capturarlo. Después de 1O CxP las
negras simplemente capturan el
peón de rey blanco. Después de
AxP sigue la clara combinación
10 .. ., CxP; 11 CxC, D4T+; 12 R2A
(si 12 C3A, AxC+ ; 13 PxA, DxA y
la posición de las blancas es una
ruina) 12 ... , DxA; 13 CxPD, D3T;
14 CxA, TxC y las negras tienen su-
ficiente contrajuego para su peón
en vista de la desigual posición y lo
expuesto de su rey.
138 Defensa India del Rey

Las blancas harán bien moviendo

1O rehusando el sacrificio de peón y
adelantando en el centro con sus
peones mayoritarios; por lo que de-
berá jugar 1O P5R, PxP ; 11 PxP, pe-
ro después de 11 ... , C5C el contraa-
taque contra el peón de rey blanco
se demuestra más que suficiente
para mantener el equilibrio .
Ésta es una posición sumamente
complicada de la que se han hecho
abundantes análisis y que requeriría
todo un libro de tratados específicos
más que de principios generales,
para desenmarañar todos sus se-
cretos. Las complicaciones comien- 112 N
zan después de 12 A5C , D3C pero
las negras también tienen a su al-
cance -y éste es el movimiento que 4 ... 0-0
recomendamos- 12 ... , P3AR; 13 5A2C P3D
PxP, AxP; 14 AxA , DxA con una po- 6 0-0 CD-20
sición sólida y algún juego en los
cuadros oscuros. Particularmente el Las negras se preparan para arre-
cuadro 3R es muy débil. Esta línea meter en el centro con ... , P4R. Tam-
posiblemente es correcta y no es bién son muy corrientes 6 ... , P4AD
necesario en esta situación compli- y 6 ... , C3A.
carse uno mismo con la compleja
«línea teórica>>. 7C3A

Desarrollando una pieza, contro-

VARIANTE DEL lando 4R y preparando el avance del
FIANCHETTO peón de rey.

1 P4D C3AR 7 ... P4R

2 P4AD P3CR
3 C3AR A2C
4P3CR(112)
Ésta es una línea sumamente po-
sicional que sugiere una actitud
cautelosa por parte de las blancas.
Se prepara rápidamente para 0-0
adelantándose a la inmediata cons-
trucción de un centro de peones.
Sólo después de haber desarrolla-
do sus piezas las blancas intenta-
rán tomar el control de la zona con
sus peones.
Las negras intentan una maniobra
como ... , T1 R seguido de ... , P3A.
Entonces las negras estarán en posi-
ción de avanzar en el centro y recla-
mar algún territorio valioso con P4R.
Las blancas no pueden llegar a esto.
8 P4R P3A
Ahora la estrategia de las negras
consiste en atacar el peón de dama
de las blancas con la esperanza de
forzar P5D estabilizando el centro.

Después de esto las negras moverán,
como es lo usual, su caballo de rey
para seguidamente avanzar su peón
AR con un ataque Indio de Rey por el
ala de rey. Naturalmente las negras
tratan de evitar, si es posible, ..., PxP
ya que esto cedería el control del cen-
tro a las blancas con sus piezas.
9 P3TR
Las blancas desean desarrollar su
alfil de dama en 3R pero si fueran a
mover esto ahora, las negras res-
ponderían ... , C5C , un motivo muy
familiar que en este caso es más
embarazoso para las blancas.
9 ... D3C
Presionando más sobre el peón
de dama blanco. Ahora las blancas
aflojan su presión con:
10 PSD (113)
113 N
Sería un error mover 1O PxP, PxP
ya que las blancas tendrían un hue-
co en su propio cuadro 40 mientras
que el 40 negro está guardado por
Defensa India del Rey 139
su propio peón en 3A. Una alternati-
va, aunque complicada es 1O P5A ?!,
PxPA; 11 PxPR, C1 R y ambos ban-
dos tienen oportunidades . Hübner-
Kaspárov. Dortmund 1992.
Después de 1O P5D negras, lo
mejor es bloquear el centro con
1O .. ., P4AD tras lo cual puede pre-
pararse el golpe en el flanco ... ,
P4AR. Mientras tanto las blancas in-
tentarán avanzar con P3TD, T1 C y
P4CD. En esta posición las oportu-
nidades son casi iguales.
Algo peor es ...
10 ... C4A
... ya que después de
11 T1R
(protegiendo el peón de rey)
11 ... A2D
vendrá
12 T1C
El centro es aún fluido y por tanto
es dificultoso para las ñegras arre-
glarse para jugar .. ., P4AR con se-
guridad. Además las blancas tienen
la posibilidad de mover P4CD con
más o menos impedimentos, pues
las negras tienen un caballo en lugar
de un peón en el cuadro 4AD. Las
blancas se mantienen ligeramente
mejor.
VARIANTE SAMISCH
1 P4D C3AR
2 P4AD P3CR
3C3AD A2C
4 P4R P3D
5 P3A (114)
140 Defensa India de Rey
114 N
Éste es el movimiento clave de la
variante Samisch desarrollado por el
maestro germano Fritz Samisch en
los años 1920. 5 P3A puede parecer
extraño puesto que no hace nada
para el desarrollo de las blancas in-
terviniendo también el cuadro 3A del
caballo de rey blanco. Sin embargo
5 P3A tiene muchos puntos y ha si-
do favorecido por seis Campeones
Mundiales -Aiekhine, Botvinnik,
Petrosian, Tal, Spassky y Karpov- .
Este movimiento refuerza el centro
de las blancas preparando movi-
mientos tales como A3R, seguido de
D2D. El plan de las blancas es enro-
car por el ala de dama y entonces
asaltar la posición del rey negro con
un avance de sus peones del lado
de rey apoyados por la posibilidad
de A6TR. 5 P3A no sólo refuerza el
peón rey blanco frente a un contraa-
taque, sino que también prepara
P4CR que ayudará avanzar el peón
TR blanco a 4TR. Si las blancas lo-
gran abrir la columna TR y cambiar
el alfil de rey negro puede estar casi
seguro de ganar un decisivo ataque
contra el mismo. En las notas al tex-
to principal se encuentran numero-
sos ejemplos de esta aguda estrate-
gia terminada brillantemente para
las blancas.
5 ... 0-0
Tiene poca ventaja retrasar el
traslado del rey negro al ala de rey.
Es muy difícil para las negras orga-
nizar ... , 0-0-0.
6A3R
El mejor cuadro para el desarrollo
del alfil. Las blancas preparan D2D y
0-0-0. Obsérvese que el peón en
3AR evita que las negras jueguen
..., ese molestando al alfil en 3R. Si
el alfil de dama fuera a 5CR, podría
ser expulsado por .. ., P3TR por las
negras y si fuera a 4A al sexto movi-
miento, las negras podrían replicar
... , C3A amenazando tijera con
CxPD y ... , P4R.
6 ... P4R
Éste es el método tradicional de
ganar juego en el centro para las ne-
gras en la Defensa India de Rey, pe-
ro una alternativa muy buena es
6 ... , C3A; 7 CR2R, P3TD; 8 P4TR,
P4TR! ; 9 C1A, C2D! ; 1O C3C!?,
P4T!; 11 P4T, C5C; 12 A2R, P3C
planteando ... , P4AD como en la
partida Spassky-Fischer, Belgrado
1992.
7P5D
Este movimiento no sólo gana al-
gún terreno en el centro, sino que
también cierra la posición central y
por tanto minimiza el contrajuego
negro contra la intención de ataque
blanco sobre el rey negro. Siempre
es una buena idea bloquear el cen-

tro cuando se planea un ataque por
el ala.
7 ... C4T
Las negras preparan un asalto de
peones por el ala de rey, típico de la
Defensa India de Rey, por medio de
P4AR-P5A y ... , P4CR . Sin embargo
Kaspárov en sus propias partidas es
partidario del plan 7 ... , P3AD segui-
do de ... , PxP y sólo entonces ... ,
C4T. Esto está diseñado para abrir
la columna AD y con ello disuadir a
las blancas de enrocar por el lado de
dama.
8 020 P4AR
9 0-0-0
Las blancas han cumplido la pri-
mera parte de su plan.
9 ... C20
10 A30
El alfil entra en juego en un buen
cuadro central desde donde apunta
también hacia el rey negro.
10 ... CD-3A
Las negras intentan poner presión
sobre el peón de rey blanco, con la
esperanza de que las blancas aban-
donen el centro con P5A cediendo a
las negras una mayoría móvil. Sin
embargo esto es un esquema más
bien peligroso para las negras, ya
que la mayoría de peones está falta
del apoyo de un peón CR que puede
resultar más bien perdido, especial-
mente en los cuadros claros. Las
negras deben tener siempre mucho
cuidado con la invasión de los cua-
dros claros por las blancas en la De-
fensa India de Rey. El procedimiento
más prudente para las negras debe-
Defensa India del Rey 141
ría haber sido 1O .. ., P5A intentando
bloquear el lado de rey minimizando
las ocasiones de ataque . Pero con
el lado de rey completamente blo-
queado las blancas podrían haber
intentado un avance por el lado de
dama, moviendo su rey a 1C y si-
guiendo luego con T1 AD y P4AD.
11 PxP PxP
Naturalmente habría sido un error
estratégico mayor por parte de las
negras recapturar con una pieza
en el cuadro 4AR. Así, después de
11 .. ., AxP? las blancas replicarían
12 CR-2R y eventualmente estable-
ciendo una pieza en el cuadro 4R
que habría anulado para siempre la
función del alfil de rey negro . Si las
blancas siempre sitúan en 4R una
pieza que no pueda ser desviada
por el peón AR negro y que además
bloquee el peón de rey negro que
está aprisionando el alfil de rey ne-
gro, las blancas podrán razonable-
mente considerar ganadora su es-
trategia.
12 C3T! (115)
115 N
142 Defensa India del Rey
Ahora las blancas tienen una po-
derosa amenaza en C5CR-6R ex-
plotando la debilidad de los cuadros
claros en el bando negro que ya he-
mos mencionado. Además las blan-
cas tienen la posibilidad de llevar
una torre a la columna CR siguien-
do con P4CR, abriendo algunas lí-
neas contra el rey negro. En vista
de estas posibilidades debemos
concluir que las blancas gozan de
una notable ventaja. La partida Por-
tisch-Giigoric jugada en Siegen
1970 prosiguió a partir de esta posi-
ción:
12 ... P3A
Las negras pudieron imponer,
peones de torre doblados y aisla-
dos a las blancas mediante 12 ... ,
P5A; 13 A2A, AxC, pero después
de 14 PxA el alfil de rey blanco
queda completamente sin oposi-
ción por parte de su equivalente
negro en cuadros claros lo que da-
rá a las blancas el control completo
de los cuadros claros , por ejemplo
por medio de A5A-6R+. Además
las blancas tendrán unas posibili-
dades peligrosas en la columna
CR.
13 TR-1C PxP
14 PxP R1T
15 R1C A2D
16 CSCR D2R
17 A5C A1A
Naturalmente las negras no pue-
den permitir el cambio de alfiles en
cuadros claros ya que el caballo
blanco tendría paso libre a 6R y es
bien sabido que un caballo estable
situado en la sexta fila es virtual-
mente una garantía de victoria.
18 A4AD
El caballo de rey blanco llega a 6R
de cualquier forma. Las negras ten-
drán que cambiar su alfil por él y las
blancas obtendrán un peligroso
peón pasado en su lugar. La posi-
ción de las blancas está estratégica-
mente ganada.
 12
Defensa Holandesa
1 P4D P4AR (116)
116 B
La Defensa Holandesa es muy po-
pular entre jugadores agresivos con
las piezas negras cuyo principal ob-
jetivo es atacar al rey contrario. El
primer movimiento de las negras ya
gana algún espacio en el ala de rey
y las negras normalmente utilizarán
este espacio para llevar a cabo la si-
guiente maniobra: ... , P3R ... , C3AR-
P4R ... , A2R o bien ... , P3D/O-O se-
guido de ... , P3TR y .. ., D1 R-4TR.
Las negras pueden ahora adelan-
tar su peón CR en un intento de alla-
nar su camino al cuadro 7 TR
blanco .
Adoptando este plan, las negras
han ganado numerosas partidas
abrumadoras. Sin embargo el pri -
mer movimiento de las negras peca
contra varios principios: (a) ... , P4AR
no desarrolla ninguna pieza si hace
de ello un objetivo ; (b) moviendo el
peón AR se debilita la posición del
rey negro. Si las blancas juegan co-
rrectamente deberán ser capaces
de conseguir alguna ventaja avan-
zando con P4R en el momento opor-
tuno , abriendo el centro y exponien-
do todas las debilidades de las
negras.
Las blancas pueden ir a por 4R a
la primera, jugando un gambito para
un desarrollo rápido o bien pueden
desarrollar sus piezas quedamente
pensando impulsar a 4R más tarde.
Nosotros opinamos que el segundo
procedimiento es más eficaz. La De-
fensa Holandesa debilita la posición
negra por lo que no es necesario sa-
crificar ningún peón para conseguir
alguna ventaja.
Muchas de las líneas tan lejanas
que hemos examinado representan
ciertas etapas en el desarrollo histó-
rico del pensamiento ajedrecístico.
Así, el Gambito de Rey y el Giuoco
Piano raramente se ven en torneos
modernos, y su lugar ha sido toma-
do por el más sofisticado Ruy Ló-
pez. También es evidente que en el
ala de dama las Defensas Nimzo In-
dia e India de Rey han evolucionado
a una etapa histórica más tardía que
el corriente Gambito de Dama
144 Defensa Holandesa
Rehusado; pero la Defensa Holan-
desa no presume de tal patrimonio
ya que no representa ninguna etapa
específica del pensamiento ajedre-
cístico. Ella ha sido siempre favorita
de jugadores agresivos a los que no
asusta aceptar puntos débiles en su
propia posición.
En primer lugar examinaremos la
línea de gambito blanco .
GAMBITO STAUNTON
1 P4D P4AR
2P4R(117)
117 N
El Gambito Staunton nominado así
en honor del gran maestro inglés Ho-
ward Staunton, que fue de lo más ac-
tivo a mediados del siglo XIX. Es la
respuesta más agresiva a la Holan-
desa. Puesto que el primer movi-
miento de las negras no hace nada
para su desarrollo , las blancas consi-
deran que pueden aprovechar el sa-
crificio de un peón para maximizar la
eficacia de su propia movilización.
Sin embargo este gambito no prome-
te mucho más que una igualada. No-
sotros preferimos 2 C3AR considera-
do en los tres títulos subsiguientes.
2 ... PxP
Las negras sólo pueden probar el
gambito de las blancas aceptándolo
(véase también la nota al cuarto mo-
vimiento negro) . ·
3 C3AD
Atacando ambos al peón de rey
frontal negro desarrollando una
pieza.
3 ... C3AR
Asimismo las negras defienden su
peón extra con un movimiento de
desarrollo.
4 P3A
Haciendo de la apertura un verda-
dero gambito. Las blancas renun-
cian a toda esperanza de recuperar
su peón confiando en un rápido de-
sarrollo seguido de un ataque, tam-
bién rápido , contra el rey negro.
Igualmente posible es 4 A5CR que
es mejor unido por 4 ... , C3A; 5 P5D,
C4R; 6 040, C2A.
4 ... PxP
Las negras pudieron devolver vo-
luntariamente su peón con 4 ... , P3R
o con 4 ... , C3A pero tales movi-
mientos no tienen la precisión que
tiene un gambito de las blancas.
5 CxP
Es posible 5 OxP pero esto resta-
ría el cuadro 3AR del caballo de rey
blanco siendo 3AR el cuadro de de-
sarrollo más natural.

5 ... P3CR
Este movimiento refuerza la posición
del rey negro. Además se prepara ...,
A2C, seguido rápidamente por ... , 0-0
recogiéndose el rey en un rincón bien
apartado de la presión blanca en las
columnas abiertas de rey y alfil rey.
6A4AR
Un buen movimiento de desarrollo
que también prepara D2D seguido
de 0-0-0.
6 ... A2C
7 D2D 0-0
Ambos bandos juegan de acuerdo
a un plan .
8 0-0-0
Enrocar en lados opuestos del ta-
blero conduce siempre a una partida
muy encarnizada. Las blancas se-
guirán con movimientos semejantes
a A6TR y a P4TR 5T posiblemente
sacrificando más peones para llegar
al rey negro. Mientras tanto las ne-
gras pueden mantener vivas sus po-
sibilidades jugando ... , P4D ..., P4AD
y ... , D4T tratando de abrir la colum-
na AD para sus torres en combina-
ción con la presión del alfil de 2CR
contra la fortaleza del rey blanco.
En esta posición sería una idea
equivocada jugar inmediatamente 8
A6TR, P4D; 9 AxA, RxA; 1O 0-0-0,
A4A; 11 A3D, AxA; 12 DxA, C3A.
Esto fue jugado en una partida entre
Bronstein y Alexander, 1953/54. Las
blancas cometieron el error de cam-
biar demasiadas piezas estando en
inferioridad de material. Después de
12 ... , C3A las negras tuvieron un
peón extra y una posición sólida per-
siguiendo ganar la partida. 8 0-0-0
Defensa Holandesa 145
es muy fuerte ya que evita el cambio
prematuro de piezas.
8 ... P4D
Las negras establecen un asidero
en el centro que es muy necesario ,
pero que debilita su cuadro 4R que
pronto ocuparán las blancas con
9 CSR CD2D (118)
118 8
Disputando el caballo blanco la
avanzadilla en 5R. En esta posición
las blancas tienen más espacio y
más piezas activas. Además se pue-
de atacar con A3D y P4TR , pero las
negras tienen en compensación un
peón central extra con lo que las
oportunidades son aproximadamen-
te iguales. Sin embargo esto no
quiere decir que la partida terminará
probablemente en tablas, sino que
la posición es tan desequilibrada
que ambos bandos tienen las mis-
mas probabilidades de ganar. Esta
posición después del noveno movi-
miento es un análisis ruso que inten-
ta mejorar la partida Bronstein-Aie-
xander.
146 Defensa Holandesa
Debemos llegar a la conclusión de
que el Gambito Staunton puede su-
poner un ataque aplastante para las
blancas si las negras se equivocan,
pero no asegura una gran ventaja si
las negras se defienden acertada-
mente. No obstante debe haber una
importante ventaja psicológica sobre
el tratamiento posicional que esta-
mos prontos a analizar. Quienquiera
que juegue la Holandesa deseará
llegar a ello con la misión de atacar
al rey blanco. Evidentemente se ha-
llará muy molesto si ha de defender
una posición difícil en la que es el
contrario quien tiene ocasiones de
atacar como compensación por un
peón sacrificado. Por tanto se puede
intentar el Gambito Staunton para
perturbar a quien pretenda atacarte.
VARIANTE STONEWALL
1 P4D P4AR
2 C3AR (119)
119 N
Esto promete una iniciativa posi-
cional duradera y es por tanto más
fidedigno que 2 P4R .
2 ... C3AR
3 P3CR
El mejor método de desarrollar el
alfil de rey blanco , P3CR, no sólo
refuerza la posición del rey blanco
como cuestión de prioridad frente al
ataque negro que se avecina en
esa zona, sino que también sitúa el
alfil de rey en un buen cuadro para
ayudar más tarde al pretendido
P4R.
3 ... P3R
En una subsiguiente sección exa-
minaremos el desarrollo alternativo
3 ..., P3CR.
4 A2C A2R
5 0-0
No es cuestión de demorar esto.
Las blancas no están bien prepara-
das para 0-0-0.
5 ... 0-0
6 P4A
Ahora que su rey está a salvo, las
blancas reclaman más territorio en
el centro.
6 ... P4D
Éste es el movimiento que da
nombre a la Stonewall. Las negras
bloquean la parte central con su
triángulo de peones en 4D/3R/4AR
ganando un agarre en el cuadro 5R.
Las negras razonan que con el cen-
tro fijado se puede empezar con se-
guridad una acción por el ala contra
el rey blanco. Pero este razona-
miento es engañoso en vista de lo
que sigue:
(a) El centro no es completamente
estático , ni las negras ejercen un
 Defensa Holandesa 14 7

control genuino sobre la casilla 4R. 9 CSR CD2D

Si las blancas pueden arreglarse pa- 10 C3D! (120)
ra jugar P3AR y P4R en el momento
oportuno , las negras se verán forza- Un movimiento ciertamente muy
das a retirarse y el peón trasero en fino. Puesto que las piezas negras
3R puede pasar a ser un serio in- están sujetas a su desarrollo, las
conveniente. blancas evitan cualquier cambio de
(b) Si las blancas pueden cambiar piezas (p. ej. 1O CxC? , AxC), lo
su alfil de dama por el alfil de rey ne- que puede permitir a las negras li-
gro, las negras serán lamentable- berar sus posiciones restringidas.
mente débiles en los cuadros oscu- Además, el caballo magníficamen-
ros y las piezas blancas podrán te centralizado en 3D domina todos
utilizar estos cuadros para invadir los importantes cuadros oscuros
posiciones negras. Aun sin estos (5AD/5R/4AR).
cambios, las negras son muy débi-
les en los cuadros oscuros -espe-
cialmente 4R y SAR que pueden ac-
tuar de refugio para las piezas
blancas.
(e) Parece como si los peones ne-
gros cedieran su control de los cua-
dros claros, pero al mismo tiempo
dificulta la función del alfil de dama.
Esto podría ser un factor importante
si se llega a una final. (Examinare-
mos 6 ... , P3D en la próxima sec-
ción .)

7 P3C

Otro plan verdaderamente bueno

es 7 CD2D seguido de CSR-30 y
C2-3AR. Por este camino las blan-
cas dominarían el cuadro SR negro
que ya no puede seguir siendo pro-
tegido por un peón.
7 ... P3A
Podemos afirmar que las blancas
tienen una clara ventaja lo que fue
explotado con gran precisión en una
partida entre Hübner y Mariotti en
Sombor 1970.

Completando la formación Stone- 10 ... CSR

wall de cuadros claros.
De acuerdo con el plan.
8 C3A D1R
11 A2C A3D
Las negras se preparan a aportar 12 P3R P4CR
piezas para atacar al rey blanco .... ,
D1 R-4T es un enlace común en esta El ataque prosigue. De hecho este
cadena de ataque. movimiento seudoagresivo agrava
148 Defensa Holandesa

la ineficacia de las negras en los cargada de debilidades por todas

cuadros oscuros. partes . Si 27 .. ., TxP; 28 D6C+ es le-
tal. Si las negras previenen la incur-
13 P3A sión de la dama blanca con 27 ... ,
01 R, entonces 28 T1-1 AR , R2C
Probando que el control de las ne- (28 ... , C2D ; 29 T7A!) ; 29 C4C, C2D ;
gras sobre las blancas en 5R ha si - 30 TxT, CxT; 31 D3R, (amenazando
do ilusorio . un jaque decisivo en 5R) 31 .. ., C3C ;
32 C6A, D2R ; 33 C5T +, R2T; 34
13 ... CxC A4R y las negras se ven metidas en
14 AxC C3A un horrible revoltijo . De hecho las
15 02R 04T negras estaban tan deprimidas por
estas posibilidades que renunciaron
Esto se prolonga hasta donde al- sin lucha después del movimiento
cance el ataque negro. 27 de las blancas .
El gran maestro americano Pils-
16 A4C! bury que estuvo en activo a últimos
del siglo XIX y principios del XX, una
Llevando a cabo el cambio vital de vez se vio envuelto en una conver-
los alfiles de los cuadros oscuros. sación con un doctor que a su vez
i Posicionalmente ahora las negras era un entusiasta del ajedrez. El
están perdidas! doctor quedó sorprendido de la velo-
cidad a la que Pilsbury pudo com-
16 ... AxA prender las fuerzas y las debilidades
17 CxA P4T de la estructura de peones.
18 C30 P3C Entonces Pilsbury explicó al doc-
19 C5R tor que la estructura de peones es el
esqueleto de cualquier posición y
Invasión de los cuadros oscuros. así como un médico puede recono-
cer a simple vista los defectos de un
19 ... 01 R hueso en fermo en una estructura,
20 020 P3T así un maestro en ajedrez puede dar
21 P4R! por perdida una posición en vista de
sus muchas flojedades que se pue-
Esto llega con toda su fuerza por den quebrar de la siguiente forma:
haber sido retrasado. Las blancas (a) El avance del peón CR negro
recuperan fácilmente su peón. crea un objetivo para el ataque blan-
co (p. ej . P4TR) . Además todos los
21 ... PAxP cuadros detrás del peón CR
22 PAxPR PxPR (6AR/6CR) carecen de protección
23 03R A2C del peón formando un vacío dentro
24AxP T10 del cual las piezas blancas pueden
25 A2C T30 ser aspiradas. La dama y caballo
26T2A 010 blancos ponen su mirada en 6CR.
27 03 0 (b) Obsérvese la inviolabilidad del
caballo blanco firmemente atrinche-
La posición de las negras ha sido rado ante un peón de rey negro re-
descrita como una cosa confusa trasado y aislado. El único punto dé-

bil es el peón de dama en una co-
lumna abierta, pero las negras están
tan sujetas a la defensa de sus pro-
pias debilidades que no le queda
tiempo para explotar esta circuns-
tancia. Si el peón CR negro estuvie-
ra en 2C y su peón TR en 2T enton-
ces el único defecto estructural
negro sería el peón de rey y tendría
ocasiones para empatar la partida.
CENTRO FLUIDO CON
6 ..., P3D
1 P4D P4AR
2 C3AR C3AR
3 P3CR P3R
4A2C A2R
5 0-0 0-0
6 P4AD P3D (121)
121 B
Con este movimiento las negras
planean su asalto al ala de rey me-
diante ... , D1R-4T, etc. , pero 6 .. .,
P3D es consideramente más flexible
que 6 ... , P4D que hemos visto en la
sección anterior. Las negras no
comprometen sus peones en una
formación rígida después de 6 .. .,
Defensa Holandesa 149
P3D y en particular no debilita el
cuadro 4R como hace en la Stone-
wall. En algunas líneas después de
... , P3D las negras pueden decidir
jugar .. ., P4R.
Sin embargo las blancas aún pue-
den ganar la ventaja intentando
atravesar 4R lo que abriría líneas
para atacar el peón de rey negro re-
trasado.
7C3A
Claramente mejor, poniendo el ca-
ballo en contacto con el vital cuadro
4R .
7 ... D1R
Desde ahora este tema deberá
ser familiar.
8 T1R
Preparándose nuevamente para
jugar P4R.
8 ... D3C
Las negras modifican sus planes a
fin de captar presión contra el pro-
yectado P4R blanco . Las negras
también pudieron detener este mo-
vimiento ocupando el cuadro con
una pieza pero después de 8 .. .,
C5R ; 9 CxC , PxC ; 1O C2D , P4D; 11
P3A, P6R; 12 C1 C, el centro negro
empieza a colapsarse. En esta oca-
sión las blancas pueden subdesa-
rrollar su caballo sin peligro ya que
pronto ganarán una potente mayoría
en el centro de peones. Si las ne-
gras optan por 11 .. ., PxP entonces
12 CxP y las blancas tienen contro-
lado el cuadro 5R negro enfrente del
retrasado peón de rey.
9 P4R
150 Defensa Holandesa

Esto parece un disparate pero no 12 D2R

lo es. Una ingeniosa táctica permite
a las blancas llevar a cabo un impor- interviniendo con el peón
tante avance estratégico. Pero de
hecho puede ser más eficaz retrasar 12 ... A3A
el movimiento. 13 A2D P4R!
14 PxP CxP
9 ... PxP 15 CxC AxC
10 CxP CxC
11 TxC (122) igualando posiciones.

VARIANTE LENINGRADO
1 P4D P4AR
2 C3AR C3AR
3 P3CR P3CR (123)

122 N

El débil peón de rey negro está ex-

puesto a la presión blanca en la co-
lumna abierta de rey y posiblemente
a la del alfil de rey blanco viniendo a
3TR. No obstante las piezas negras
están activas y pueden igualar la
partida contrarrestando con ... P4R,
eliminando con ello todas las debili-
dades.
No sirve 11 .. ., DxT?; 12 C4T! y
sorprendentemente la dama negra
queda atrapada en medio del table-
ro . Por tanto las negras tienen que
desarrollarse lo más rapidamente
posible con
11 ... C3A
cuando debiera seguir
123 B
El característico movimiento de la
variante Leningrado. Fue descrito
en los años 1950 por un grupo de
maestros de Leningrado (ciudad
que ahora ha recuperado su tradi-
cional nombre de San Petersburgo),
que se sentían molestos por la com-
plejidad estratégica que le falta alia-
do negro, ofrecida por las líneas nor-
males de la Defensa Holandesa. El
plan de las negras es traducir a ver-
sión de Defensa India de Rey, en la

que se haya conseguido el avance
... , P4AR. Sin embargo los defectos
del Leningrado son serios :
(a) Como de costumbre, el tem-
prano ..., P4AR resulta ser una debi-
lidad de la propia posición de su rey.
(b) Las blancas pueden jugar P5D
antes de que las negras estén pre-
paradas para ... , P4R. Esto quiere
decir que las negras adolecerán de
un hueco en su cuadro 3R . Alternati-
vamente, si las negras persisten con
... , PAR, las blancas pueden desviar
con PxP, por ej., rompiendo la masa
de peones negros e infligiendo más
cuadros débiles sobre las posicio-
nes negras.
(e) En vista de la estructura de
peones negros, su alfil de dama fre-
cuentemente se presenta como una
pieza no muy valiosa cerrada por
sus propios peones.
4 A2C, A2C
5 0-0, 0-0
6 P4A
Preparándose para sostener P5D.
6 ... P3D
Con la intención de 7 ... , C3Ay 8 ... ,
P4R cuando las negras tengan un
juego más que satisfactorio con
peones muy movibles.
Por tanto ...
7P5D!
Consiguiendo una conquista terri-
torial importante.
7 ... P4A
Las negras deben cambiar com-
pletamente sus planes. Siguiendo el
texto, deciden organizar un avance
por el ala de dama para ganar algún
Defensa Holandesa 151
espacio para sus piezas. Si las ne-
gras optan por evitar 7 .. ., P4R , el
peón de dama blanco que lo está su-
jetando muy mal termina en una si-
tuación terrible : 8 PxP!, AxP; 9 C4D
(amenazando AxPC y CxP) , 9 .. .,
A 1A, 1O C3AD y las blancas llevan
una buena ventaja en desarrollo. El
alfil de dama negro se ha visto obli-
gado a mover dos veces, sólo para
volver al mismo sitio de origen , mien-
tras que el caballo de rey blanco ha
empleado este mismo tiempo para
avanzar a un puesto central potente .
8 C3A C3T
Sorprendentemente ahora es este
cuadro el mejor para el caballo que
retrocederá al centro en 2A y ayuda
a forzar a través de P4CD. Pero la
posición de las negras está lejos de
ser satisfactoria, en vista de los de-
fectos posicionales en el campo es-
bozados en el tercer movimiento.
9 T1C
Un movimiento muy bueno . Las
blancas quieren desarrollar su alfil
de dama en la diagonal larga oscura
(1TD-8TR) con la esperanza de
cambiar esa pieza por el alfil de rey
negro . El objeto de esta maniobra es
la reducción de piezas defendiendo
al rey negro. Cuando eventualmente
las blancas abren el centro con P4R
el peón de rey negro retardado ac-
tuará como una barrera, dificultando
a las negras el movimiento de pie-
zas defensivas para la ayuda a su
monarca.
Pero 9 P3C? inmediato fallaría an-
te ... , C5R!. Por tanto las blancas
mueven primero su torre de la dia-
gonal del alfil de rey negro.
9 ... C2A
152 Defensa Holandesa

10 P3C P3TD Después de 13 C2R, A2D , la parti-

11 A2C P4CD da Keene-Ree (jugada en una com-
12 P3R petición entre Inglaterra y Holanda
en Paignton, 1970) se atestiguó el
Creando un cuadro para el caba- éxito completo de la estrategia blan-
llo de dama en 2R a fin de poder ca: comprendiendo oportunidades
eventualmente transferir a 4AR para las negras en el ala de dama
ocultando el hueco en 6R . En esta combinadas con un progreso contra
situación las blancas nunca deben el rey negro.
jugar PxPC ya que ello arruinaría
su propia cadena de peones privan- 14 A3A C1T
do su peón de dama de su soporte
vital. Uno de los peores cuadros del ta-
blero para un caballo , pues las ne-
12 ... T1C gras abandonan cosas constructivas
13 C2R A2D (124) que hay que hacer.

15 C5C
Las blancas tienen una posición
muy buena. El contrajuego negro re- Evidenciando la debilidad en 3R.
side exclusivamente en la columna
CD que puede abrise mediante .. ., 15 ... A3T
PCxP, pero es fácil para las blancas 16 P4TR PxP
vigilar los cuadros de acceso que 17 PxP TxT
puedan utilizarse por una torre o da- 18 DxT D3C
ma negras. Además si las negras 19 D2A
juegan ... , P4R la respuesta PxP
a.p. deja una herida abierta en 30 Las blancas necesitan su dama
en forma de un peón vulnerable re- para el ataque sobre el rey negro.
trasado en una columna abierta.
19 ... T1C

Todo preparado pero sin ningún

sitio a donde ir.

20 C4A

Ahora ambos caballos apuntan

hacia 6R.

20 ... C2A
21 P4R!

Con cuatro piezas negras en el lado

malo de su retrasado peón, éste es el
momento adecuado para atacar.

124 8 21 ... A2C

 Defensa Holandesa 153

22 PSR ese 27 ... R1R

23 PxP PxP 28exe Pxe
24 PxA RxA 29TxP TxT
25 T1R e4R 30 DxT P3T
26 e3D T1R 31 P6D! 1-0
27 D3A

Nuevamente esos cuadros oscu -

ros . Esto justifica la maniobra inicia-
da en 9 T1CD!
 13
Defensa Moderna
1 P4R P3CR
2 P4D A2C
125 B
Esta consecuencia defensiva ya ha
adquirido popularidad al más alto ni-
vel desde que a primeros de los años
1960 el Gran Maestro sovietice
Korchnoi la empleó con las negras
para batir a Fischer en un campeona-
to Mundial por eliminatorias. Fue en
esta época cuando se empleó fre-
cuentemente por especialistas en sis-
temas de defensa activa, tales como
Botvinnik. La defensa Moderna es
también la gran favorita de uno de los
coautores, Raymond Keene, que la
ha empleado para vencer a los Gran-
des Maestros Gligoric y Donner y es
por ello por lo que le llamamos Defen-
sa Moderna. Por todo el mundo, a
esta defensa se le dan distintos nom-
bres: En Yugoslavia se le llama el
Pire, en Rusia el Ufimtsev, en Austria
el Robatsch. Nosotros opinamos que
Defensa Moderna es más sencillo.
En tiempos anteriores esta defen-
sa era vista con desagrado. En los
1930 el Campeón Mundial, el brillan-
te Franco-ruso Alexander Alekhine
escribió , referido a 1 ... , P3CR: «Es-
te movimiento está considerado,
con razón o sin ella, como inferior ya
que concede a las blancas el pleno
control de las casillas centrales. "
Actualmente todos los principales
Maestros reconocen que esta defensa
es perfectamente jugable y se ha em-
pleado incluso por Fischer en el Cam-
pe~mato Mundial en 1972, con Spasky.
Este es un sistema altamente sofis-
ticado que incita a las blancas a for-
mar una estructura masiva de peones,
pero deseando la eventual demolición
de tal estructura mediante avances
destructores como ..., P4AD. Las ne-
gras planean hacer presión en 4D
blanco en particular y frecuentemente
a lo largo de la diagonal de cuadros
oscuros (1 TD-8TR) en general.
La particular ingeniosidad del Sis-
tema Moderno quedará revelada
cuando examinemos aquellas líneas
en las que las blancas combaten con
desarrollo normal e ingenioso de sus
piezas (p. ej. , la línea de tijera) .
Debemos remarcar que ésta es
una defensa difícil de manejar, pero
156 Defensa Moderna

su contraataque puede ser muy sa- VARIANTE DE TIJERA

tisfactorio si se han estudiado sus
secretos. El secreto de destruir una 1 P4R P3CR
formación central de peones presio- 2 P4D A2C
nando desde las alas del tablero. Un 3 C3AR (126)
problema pendiente relacionado con
la Defensa Moderna es que el méto-
do apropiado de jugar para las ne-
gras frecuentemente requiere violar
principios que antes hemos tratado
de inculcar en secciones anteriores
de este mismo volumen . Pero la ha-
bilidad de apreciar el momento
exacto adecuado para prescindir de
un principio general constituye una
de las delicias que hacen del aje-
drez una fascinante y rica variedad.
Aparentemente la estrategia de la
Defensa Moderna puede parecerse a
la de la Defensa India de Rey pero
con una diferencia importante: La De-
fensa India de Rey es una respuesta a 126 N
1 P4D, mientras que la Defensa Mo-
derna es respuesta a 1 P4R. Aunque
las blancas pueden continuar (y fre- Con este movimiento las blancas
cuente lo hacen) después de 1 P4R a anuncian estar satisfechas de desa-
2 P4D, A2C con 3 P4AD (es decir rrollar normalmente sus piezas en
transponiendo en algo parecido a una buenas casillas, mejor que intentar
Defensa India de Rey), normalmente una avalancha de peones con 3
se preferirá desarrollar una pieza con C3AD y 4 P4AR.
3 C3AD. Así, en la Defensa Moderna
las negras no sólo se han de enfrentar 3 ... P3D
a un gran centro de peones blanco 4 C3A
(como en la Defensa India de Rey), si-
no también a los peligros procedentes El otro caballo también entra en
de la capacidad de las blancas para juego en su mejor cuadro.
desarrollarse rápidamente.
Admitiendo que cuanto antecede 4 ... C3AR
sucede entre las fuerzas negras, 5A4AD
tendremos una indicación de los infi-
nitos recursos ocultos en las sesen- Otro movimiento simple de desa-
ta y cuatro casillas del tablero. rrollo que debe permanecer en su
Nota: Las negras también pueden lugar en la mayor parte de aperturas
introducir esta defensa con el orden de peón de rey que hemos ya co-
de movimientos 1 P4R, P3D; 2 P4D, mentado (p. ej., la Defensa Siciliana
C3AR y sólo entonces ... , P3CR o o el Gambito de Rey). Se puede pre-
bien empezar con 1 ... , P3CR y se- sumir ahora que las blancas están
guir con ... , P3D. bien situadas ya que todas sus pie-

zas van a alcanzar buenos cuadros
centrales después de unos pocos
movimientos (p. ej. , 0-0 seguido de
A4AR , D2D, TD-1 D, etc. , con un de-
sarrollo ideal). Sin embargo, el sutil
despliegue de sus fuerzas permite a
las negras un enérgico contrajuego.
Un camino más prudente para las
blancas es ; 5 A2P, 0-0 ; 6 0-0.
5 ... 0-0
Ahora las negras amenazan ... ,
A5C seguido de .. ., C3A con un mo-
lesto ataque contra el peón de dama
blanco. Por ejemplo , si las blancas
hubieran jugado 6 0-0 debería se-
guir 6 .. ., A5C , 7 P3TR, AxC; 8 DxA,
C3A; 9 A3R , CD2D y si 1O TD-1 D
entonces 1O ... , P4R; 11 P5D, C4D,
con buen juego para las negras, o
bien 1O C2R, CD-4R !; 11 PxC, CxP,
recuperando las negras su pieza
con ventaja. Por tanto
6 P3TR
Evitando la clavada, pero ahora lle-
ga el ardid de la tijera; una estratage-
ma común en la Defensa Moderna
para aniquilar el centro blanco.
6 ... CxP!
7CxC
La alternativa 7 AxP+, TxP; 8 CxC
daría a las negras las siguientes
ventajas ; (a) un centro de peones
mayoritario ; (b) el par de alfiles; (e)
la utilización de la semiabierta co-
lumna AR para un ataque contra el
rey blanco.
7 ... P4D
y así las negras recuperan su pieza.
8A3D
Defensa Moderna 157
Es mucho peor jugar 8 AxP, DxA
ya que esto desarrollaría la dama
negra llevándola a un potente cua-
dro central , cediendo las negras el
par de alfiles transfiriendo también
las oportunidades de ataque negras
contra el peón de dama blanco.
8... PxC
9AxP
Si sumamos los resultados del
muy natural movimiento de desarro-
llo blanco 5 A4AD , veremos que su
centro se ha ido reduciendo y su alfil
de rey se ha visto forzado a moverse
tres veces para terminar en una ca-
silla inferior a 4AD .
9 ... C2D
Las negras pudieron también ju-
gar 9 ..., P4AD , 1O PxP, D4T + pero
las blancas retienen la delantera en
desarrollo después de 11 P3A,
DxP4A, 12 A3R. Después de 1O
PxP, D2A es malo para las negras .
Las blancas pueden prescindir de
las normas relativas al desarrollo
prematuro de su dama jugando 11
D5D cuando es difícil para las ne-
gras recuperar su peón , por ejem-
plo: 11 ... , C3T; 12 P6A!
10 0-0 P4AD!
Este golpe al peón de dama blan-
co (obsérvese la cooperación del al-
fil de rey negro presionando en la
diagonal larga de cuadros oscuros)
es absolutamente típico del juego de
las negras en la Defensa Moderna.
El centro blanco queda finalmente li-
quidado y las negras tienen por lo
menos un juego igualado.
11 PxP
158 Defensa Moderna

11 P5D? , C3A perdería un peón Las blancas están retrocediendo

para las blancas. por el avance de peones negros.

11 ... D2A 16 ... C3R

Recuperando un peón. Natural-
mente también es posible 11 ... , CxP.
12 P6A (127)
17 D2R TR-1R
18 T1R P4AR
Las negras tomaron la iniciativa. El
avance de los peones del ala de rey
pronto estará apoyado por el alfil de
dama negro , que surgirá después de
que las negras jueguen ... , P4AD.

ASALTO BLANCO AL REY

NEGRO
1 P4R P3CR
2 P4D A2C
3 C3AD P3D
4 A3R (128)

127 N

Como las blancas no pueden con-

servar su peón extra, deciden devol-
verlo a fin de imponer dos peones
aislados a su oponente. Sin embar-
go esto incrementa el control negro
del centro y la combinación del jue-
go libre de las piezas negras y la
mayoría de peones móviles del ala
de rey da a las negras un excelente
juego. 128 N
Desde esta posición la partida
Ghizdavu-Botterill, Graz 1972 conti- Uno de los movimientos más
nuó así: agresivos a disposición de las blan-
cas. Las blancas anuncian su inten-
12 ... PxP ción de continuar con 020, 0-0-0, y
13 C4D A2C P4TR «mandando a paseo, al rey
14 P3AD C4A negro .
15 A2A P4R
16 C3C 4 ... C3AR
 Defensa Moderna 159

Preparando ... , C5C para moles- 7 0-0-0 P4CD

tar al alfil de dama que las blancas
evitan.
5 P3A
Incidentalmente esto aumenta la
protección al peón de rey blanco.
Además de ello, las blancas están
también preparadas para reforzar el
ataque proyectado con P4CR. Esta
posición puede compararse con la
Variante Samisch de la Defensa In-
dia de Rey. También ahí las blancas
urden un asalto aniquilador contra el
rey enrocado.
5 ... 0-0
En esta ocasión damos delibera-
damente un movimiento inferior en
el texto principal para insistir sobre
un importante principio: Nunca de-
bes enrocar dentro de un ataque si
no tienes contrajuego en el centro o
contra el rey contrario.
Las negras no gozan de tal contra-
juego aquí, sino que son severa-
mente castigadas por sus crímenes.
Por el contrario es preferible 5 ...,
P3AD intentando crear contrajuego
con ... , P4CD.
6 D2D
Preparando A6TR para cambiar el
defensivo alfil.
8 A6T
Mucho más de acuerdo con el plan.
Abriendo la columna TR en conjun-
ción con P4TR-5T tenemos un méto-
do típico de asaltar un rey enrocado
defendido por un alfil fianchetado.
8 P5C
9 C3-2R P4T
10 P4TR!
Por ahora la posición de las negras
carece de esperanzas. No hay defen-
sa ante un ataque a muerte del blan-
co. El dominio de las técnicas de tales
ataques prueba la utilidad de un re-
gistrador de puntos para todo intere-
sado en juegos de club o de torneos.
10 ... D2A
11 P5T!
Parece como si este avance no
fuera posible y que las blancas de-
ben prepararlo con P4CR, pero esto
no es así. Si ahora 11 .. ., CxPT el
sacrificio 12 TxC, PxT; 13 D5C con-
duce a jaque mate.
11 ... P4R
Optando por el contrajuego en el
centro, pero es con mucho demasia-
do tarde.
12 AxA

6 ... P3A Rebajando un defensor.

Las negras a su vez organizan un 12 ... RxA

avance contra el rey blanco pero re- 13 PTxP PAxP
sulta terriblemente lento . Puede ser
más práctico desarrollar ahora una O bien 13 ... , PTxP, 14 D6T +,
pieza, p. ej. , 6 ... , C3A seguida de .. ., R1 C; 15 D8A++
P4R ganando alguna influencia en
el centro. 14 D6T+ R1C
1 60 Defensa Moderna

Forzado 14 ... , R2A; 15 DxPT+, Ahora 19 ... , CxD; 20 TxC+, R1 R;

CxD; 16 TxC+, R1 R y 17 TxD gana 21 TxD deja a las blancas el cambio
rápidamente para las blancas. Este y un peón más con posición domi-
tema se repite en la partida. nante. Esta partida Malachi-Bjórns-
son pertenece al campeonato «Stu-
15 PxP dent's World Team Championship ",
Dresden 1969.
Abriendo una fila para la torre de
dama.
ATAQUE AUSTRÍACO
15 ... PxP
16 C4A!! 1 P4R P3CR
2 P4D A2C
Anunciando brillantemente la in- 3 C3AD (130)
tervención de su alfil de rey. Las ne-
gras sólo pueden evitar A4A+ me-
diante 16 ... , A3T pero entonces
viene 17 DxT+, RxD; 18 C6R+ con
absoluta matanza.

16 ... PxC
17 A4A+ T2A

17 ... , C4D, 18 PxC y 17 ... , RH; 18

DxT+tampoco son esperanzadores.

18 AxT RxA

o bien 18 ... DxA 19 T8D+

19 DxPT+ (129) 130 N

Con mucho, la elección más co-

rriente: aquí, las blancas desarrollan
una pieza y retienen la opción de
construir con el agresivo PAR un
centro de peones imponente.

3 ... P3D
4 P4A C3AR

En vista de las amenazas blancas

a la actividad central, las negras de-
sarrollan su caballo de rey con la in-
tención de enrocar tan pronto se
pueda.

129 N 5 C3A

Desarrollo típico para las blancas
en el ataque Austríaco. Las blancas
acumulan sus piezas en el más
agresivo de los cuadros centrales.
5 ... 0-0
6 A3D
6 A4A atiende más la cuestión,
pero permite la tijera con 6 ... , CxP y
... , P4D.
6 ... C3A
La estrategia de las negras con-
siste en socavar el vasto centro de
peones blanco de forma que esta
obstrucción del peón AD pueda re-
sultar antitemática. Sin embargo un
6 ... , P4A caería de plano después
de 7 PxP!, PxP; 8 P5R y las blancas
tienen una potente cuña en el cen-
tro, mientras el peón de rey negro
parece más bien simple, sin quedar-
le nada para hacer.
6 ... , C3A es un método más sutil
de hacer presión sobre el peón de
dama blanco. Las negras planean
... , A5C y ... , P4R completando su
desarrollo con ganancia de tiempo.
7 P5R
El centro de blancas avanza para
cortar la diagonal del alfil de rey negro.
7 ... PxP
8 PAxP
El ambicioso 8 PDxP, C4D; 9 CxC,
DxC no da a las blancas más que un
juego equilibrado. Superficialmente
esta posición puede parecerse a la de
después de 6 ... , P4AD, pero en este
caso las negras han desarrollado útil-
mente una pieza (C3AD) en lugar de
tener sus peones útiles en 4AD y esta
diferencia reacciona a su favor.
Defensa Moderna 161
8 ... C4TR!
Lo cierto es que esto sitúa a un ca-
ballo en el borde del tablero y ahora
nos encontramos en una de esas si-
tuaciones en las que es necesario
quebrantar alguna norma en vista de
otros factores primordiales. Todos los
demás movimientos de caballo son
inferiores. La cuestión estriba en que
las negras pretenden terminar el cen-
tro blanco con ... , P3AR, debiéndose
conservar libre el cuadro 4CR para
que el alfil de dama intensifique la
presión contra los peones blancos
centrales. Así 8 ... , C5C es inferior,
como lo es 8 ... , C1 R que meramente
obstruye el movimiento de las propias
piezas. Finalmente 8 ... , C4D bloquea
al propio ataque negro contra el peón
de dama blanco que queda preso
después de 8 ... , C4TR!
9A3R
Las blancas protegen su peón de-
sarrollando una pieza.
9 ... A5C
Amenazando una vez más el peón
de dama blanco.
10 A4R
Ahora la dama defiende el peón.
Además, las blancas pueden actuar
en AxC eliminando una pieza ata-
cante si la presión crece demasiado.
P3A
El golpe temático al centro avan-
zado blanco . La presión ha adquirido
un valor de pico tal, que las blancas
deben conformarse con un cambio.
11 PxP CxP!
162 Defensa Moderna

Retrocediendo el caballo al centro
con ganancia de tiempo en el alfil de
las blancas, ya que las negras ame-
nazan 12 ... , CxA; 13 CxC, AxC y ...,
CxP.
... y las negras siguen con ... , P4R
allanando todas sus debilidades.
Ninguno de ambos bandos puede
reivindicar ninguna ventaja después
de 17 ..., D3D .

12 AxC PxA
13 0-0
Las blancas deben enrocar antes
de que sea demasiado tarde. En es-
ta posición (de cuatro a dos islas de
peones) los peones negros están
partidos pero tienen multitud de
líneas abiertas para sus piezas, pa-
ra su buen desarrollo y para el par
de alfiles .
Debemos valorar las distintas oca-
siones por igual, especialmente en
vista de la posible continuación .
VARIANTE SEUDO INDIA
DE REY
1 P4R P3CR
2 P40 A2C
3 P4AO (132)
Como ya hemos visto , normalmen-
te las blancas aprovechan la oportuni-
dad de desarrollar un caballo en su
tercer movimiento, pero tampoco es
raro lo que figura en el texto invitando
a las negras a pasar a la Defensa In-
dia de Rey. Sin embargo las negras
pueden retener los contornos de la
Defensa Moderna rehusando desa-
rrollar su caballo de rey concentrán-
dose en su lugar para incrementar la
presión con su alfil de rey y caballo de
dama contra el peón de dama blanco.

131 N

13 ... C40
14 CxC

¿y que más?
132 N
14 ... PxC
15 P3TR AxC
16 TxA TxT 3 ... P30
17 OxT 030 4 C3AO
 Defensa Moderna 163

Es mejor desarrollar el caballo de Las blancas esperan poder forzar

dama aquí. 4 C3AR permite ... , A5C
aumentando la presión contra el
peón de dama blanco.
4 ... C3AO
desarrollando el caballo con amena-
za al peón de dama blanco. Esto
concuerda con el plan negro de la
campaña esbozada antes.
4 ... , C3AR significaría una trans-
posición directa a una Defensa India
de Rey. Sin embargo, en vista de las
dificultades encontradas por las ne-
gras en la línea principal, éste es el
camino que nosotros recomendaría-
mos.
5 P50
Una reacción natural es atacar el
caballo , aunque 5 A3R también es
perfectamente jugable.
5 ... C50
el cambio de caballos. Ahora 7 ... ,
CxC; 8 AxC significaría que las ne-
gras han empleado tres movimien-
tos (... C3AD - 5DxC) para desarro-
llar una pieza blanca (alfil de rey).
Las blancas también pudieron jugar
7 PxP, PCxP, pero las negras pudie-
ron completar su desarrollo sin más
problemas.
7 ... 03C
Éste es un caso en el que es ne-
cesario el desarrollo precoz , pues
de otra forma las negras ya no se-
rían capaces de apoyar su caballo.
8 0 20
Las blancas plantean T1 D, un pa-
so para aumentar la presión contra
el caballo .
8 ... A5C

El refugio 5 ..., C1 C difícilmente se

toma en consideración. Ahora las
blancas han conseguido su objetivo
y ocupado la casilla 5D blanca con
una pieza (en general se aconseja
jugar en la mitad opuesta) y se pre-
sentará una enérgica batalla para
mantener el caballo en su puesto
avanzado.

6A3R

Atacando al caballo.

6 ... P4AO 133 N

Apoyando al caballo sin bloquear

el camino del alfil de rey con 6... Atacando a una de las piezas que
P4R . amenazan el caballo. El intento de
sostener su caballo con 8 ... , P4R
7CR2R fracasa estrepitosamente 8 .. ., P4R ;
164 Defensa Moderna

9 PxP a.p., PxP; 10 T10 , P4R ; 11 11 CxC PxC

C50, 01 O; 12 CxC, PxC; 13 A5C y 12 AxP AxA
las blancas adquieren una posición 13 DxA C3A
activa mientras las negras tienen un 14 PSA!! 041+
punto «muerto » en lugar de una pie- 15 C3A PxP
za en 50 . 16 DSR ASC
17 P6D
9 P3A! (133)
... y las blancas tienen una gana-
Timman-Suttles . Hastings 1973/7 4 cia forzada. Según el diagrama, la
continuando; única oportunidad negra habría sido
9 ... , A20 pero entonces 1O T10 re-
9 ... AxP chaza la estrategia negra forzándole
10 C4T D3T a cambiar su caballo en 50.
 14
Apertura por el flanco
1 P3CD; 1 C3AR; 1 P4AD
En anteriores apartados hemos
visto como las blancas usan las ren-
tas de su primer movimiento, para
comenzar la construcción de un cen-
tro de peones, ya sea con 1 P4R o
con 1 P4D, y ciertamente estos mo-
vimientos naturales, directos y agre-
sivos son las opciones más popula-
res a todos los niveles del juego.
Pero debe existir una alternativa
sutil e indirecta de flanco . En este
sistema las blancas no van directa-
mente a ocupar el centro con peo-
nes. Por el contrario se observa el
centro de las alas normalmente
«fianchetando » uno o los dos alfiles.
Además las blancas retienen sus
peones centrales con la esperanza
de eventualmente conquistar la zo-
na central con mayor fuerza , en vir-
tud de este retraso. En este sistema
las negras están positivamente invi-
tadas a que ocupen el centro con
peones, y entonces las blancas usa-
rán sus peones del ala (especial-
mente el peón CD y el peón AD) a
manera de palanca para desviar los
peones negros del centro del tablero.
Como se verá, las blancas no des-
cuidan el centro cuando se emplea
una apertura por el flanco. Simple-
mente dirigen la atención hacia esa
zona. Finalmente cabe la esperanza
de crear una mayoría central de peo-
nes , sostenidos por sus alfiles avan-
zando en el centro del flanco mayo-
ritario .
El lector observará que la estrate-
gia para las blancas en las aperturas
por el flanco tiene cierta semejanza
con la empleada por las negras en la
Defensa India de Rey y la Defensa
Moderna de modo que un estudio
completo de esos tres particulares
conjuntamente, enriquecerá induda-
blemente el conocimiento de este ti-
po de aperturas para negras y para
blancas .
Aquí figuran los movimientos de
aperturas de una partida jugada por
uno de los precusores de las aper-
tura por el flanco: Richard Réti, en
la que la estrategia blanca de retra-
sar sus peones accede a la perfec-
ción (Réti-Rubinstein, Carlsbad
1923): 1 C3AR , P4D; 2 P3CR, «in-
directamente» con las tácticas hi-
permodernas de las blancas como
opuesto a las directrices clásicas
de las negras 2 ... , C3AR; 3 A2C,
P3CR; 4 P4A , P5D; 5 P3D , A2C; 6,
P4CD .
Golombek en su libro sobre Réti
ha escrito <<El peón de dama negro
se ve privado de su soporte natural
por un peón en 4AD y eventual-
mente tendrá que ser cambiado
cuando las blancas conquisten el
centro con una fuerza mayor por
haber sido retardado ». 6 ... , 0-0 ; 7
CD2D , P4A; 8 C3C , PxP; 9 A2C
¡sin prisas! el peón de dama negro
eventualmente caerá en manos de
las blancas: 9 .. ., C3A; 1O, C3CxP,
166 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD

CxC; 11, AxC, P3C; 12, P3TD,
A2C; 13, A2C, PxP; 14, Tx~ D2A;
15, OH, C1 R; 16, AxA, intercam-
biando uno de los defensores próxi-
mo al rey negro. 16 ... , CxA ; 17 0-0 ,
C3R; 18 T1 C, A3A; 19 P4D (134).
contra un experto Nimzo Indio sin
permitirles su defensa favorita, pue-
des intentar 1 P4AD, C3AR ; 2 C3AD,
P3R; 3 C3A! y si 3 .. ., A5C no nece-
sitarás jugar 4 P4D mientras que si
el contrario mueve 3 ... , P4D enton-
ces podrás seguir 4 P4D con ecua-
nimidad.

ATAQUE NIMZOWITSCH-
LARSEN
1 P3CD (135)

134 N

Las blancas han conseguido ya

una mayoría central de peones que
las negras no pueden tocar. Se ganó
la partida en el movimiento 50 des-
pués de aplastar a las negras, ade-
lantando el centro como una ava-
135 N
lancha.
Las aperturas por el flanco son de-
masiado numerosas para estudiar-
Empleado esporádicamente por el
las exhaustivamente y por ello limi-
gran escritor y maestro Aron Nimzo-
taremos nuestra investigación a los
witsch. La popularidad de esa aper-
cuatro siguientes casos:
tura aumentó grandemente cuando
1 P3CD Ataque Nimzowitsch/Lar-
fue adoptada por Bent Larsen, uno
sen
de los jugadores de torneos que
1 C3AR seguido de P4AD el siste-
más éxitos ha conseguido moderna-
ma Catalan/Réti
mente.
1 C3AR seguido de P3CR y P3D:
el Ataque Indio de Rey
1 P4AD la apertura Inglesa 1 ... P4R
Una importante ventaja de 1 C3AR
y 1 P4AD es la posibilidad que ofre- La respuesta de comprobación
ce de pasarse a otra apertura. Así, si tras la que las blancas tendrán difi-
deseas jugar un Gambito de Dama cultades para impedir que su contra-
 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD
rio forme un amplio centro de peo-
nes con ;.. , P4D. Después de 1
P4D; 2 A2C , evita 2 ... , P4R.
2A2C
Desarrollando el alfil de dama con
ganancia de tiempo contra el peón
de dama negro. De hecho, el asalto
al audaz peón de rey negro es uno
de los temas de la futura estrategia
blanca.
2 ... C3AD
Mejor, defendiendo el peón desa-
rrollando una pieza. Mover el peón
fuera del ámbito del alfil de dama
con 2 .. ., P4R sería absurdo. La obs-
trucción a las intenciones del alfil de
dama blanco desaparecerá y el peón
en 4R quedaría expuesto al ataque
(p. ej. P3D, C3AD)
3 P4AD
Es una forma de desanimar a las
negras a jugar ... , P4D .
3 ... C3A
Nuevamente las negras amena-
zan ... , P4D ya que ahora pueden
recapturar con un caballo en 4D .
4C3AR
Demorando todavía ... , P4D y com-
paginándose con el ataque contra el
peón de rey negro, resulta muy arries-
gado ya que las blancas se retrasan
en cuanto a desarrollo después del si-
guiente movimiento de las negras.
4 ... PSR!
Ahora éste es un movimiento ver-
daderamente bueno ya que tiene lu-
167
gar con ganancia de tiempo sobre el
caballo blanco.
5 C4D
5 C4T dejaría el caballo como muy
solitario al borde del tablero .
5 ... A4A
Desarrollando , pero las blancas
pueden doblar peones negros.
6 CxC PDxP!!
Las negras saben exactamente
cuándo quebrantar las normas. Pri-
mero se atraen peones doblados y
ahora se recapturan del centro. Or-
dinariamente esto sería necio , pero
aquí las negras están ampliamente
compensadas en forma de : (a) lí-
neas abiertas para sus piezas; (b)
una vasta delantera en desarrollo ;
(e) presión contra el peón de dama
blanco posterior. 6 ... , PCxC parece
más normal , intentando construir el
centro con .. ., P4D, pero las negras
ven que la cuestión más importante
es desarrollar su alfil de dama lo
más rápidamente posible.
7 P3R A4A
8 D2A D2R
9A2R 0-0-0 (136)
Ahora las blancas no pueden li-
berarse por sí mismas avanzando
su peón de dama y las negras tie-
nen con mucho lo mejor de la situa-
ción.
Esta posición aparece en el table-
ro uno en la segunda vuelta de una
competición entre la selección mun-
dial y la URSS en 1970. Larsen jugó
con las blancas y Spassky con las
negras . La partida prosiguió :
168 Apertura por elflanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD
136 8
10 P4A?
Debilitando la estructura de peo-
nes alrededor de su rey.
Hay que ser muy cuidadoso en
cuanto a mover tu peón AR, tu peón
CR o tu peón TR dos cuadros ade-
lante si no se ha enrocado o si se ha
hecho por el lado de rey. Era impres-
cindible el desarrollo por 1O C3A!
10 ... ese
Las negras explotan inmediata-
mente las debilidades para abrir la
diagonal a fin de que su dama vaya
a 5T.
11 P3e
Evitando el jaque.
11 ... P4TR
La forma usual de tomar al asalto
en contra de un peón en 3CR, lo que
ahora es especialmente eficaz ya
que no hay ningún alfil blanco en
2CR para asumir la defensa.
12 P3TR PST!
Iniciando un brillante ataque en el
curso del cual las negras sacrifican
dos piezas pero sólo puede esperar-
se tener éxito con el rey blanco pe-
gado al centro y sin haber piezas del
lado de dama sin desarrollar.
13 Pxe PxP
14 T1e
14 TxT, TxT; 15 R1 A, D5T es
claramente desesperado para las
blancas .
14 ... T8T!!
Un movimiento genial. Ningún
principio general te podrá enseñar
cómo deducir un movimiento como
este ¡Hay que verlo! Pero los princi-
pios generales sí pueden enseñarte
a construir una posición fu~rte, la vi-
sión combinativa, para concluir su
juego ganador con brillantes sacrifi-
cios ante el talento y la experiencia.
El final es soberbio.
15 TxT P7e
16 T1A DST+
17 R1D PxT:D+
18 0-1
Si las blancas hubiesen jugado 16
T1 C las negras habrían ganado co-
mo a continuación 16 ... , D5T +; 17,
R1D, D8T; 18 D3A, DxT+; 19 R2A,
D7A; 20 PxA, P8C=D.
CATALANA
1 e3AR P4D (137)
1 C3AR es una reacción natural
para ocupar el centro con peones
después del primer movimiento de
las blancas y como 1 ... P4R es im-
 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD
posible a la vista de 2 CxP, 1 ..., P4D
es lo mejor.
2 P4AD
137 8
Atacando el peón de dama negro
y con la esperanza de atraerlo lejos
de su posición central. Después de
2 ... , PxP, 3 P3R, las blancas pue-
den pasar (siguiendo con AxP y
P4D) a una variante favorable del
Gambito de Dama aceptado.
2 ... P3R
Rehusando imperturbablemente
ceder ningún espacio en el centro.
3 P3CR
Las blancas intentan continuar
con P4D después de algunos movi-
mientos yendo a una variante de
Gambito de Dama Rehusado, De-
fensa Ortodoxa pero con su alfil de
rey desarrollado en 2CR. Las blan-
cas esperan que este alfil en 2CR
les ayudará a aumentar la presión
sobre el peón de dama de las ne-
gras.
169
3 ... C3AR
Si 3 ... , PxP entonces 4 D4T+ y
DxP con lo cual la dama blanca está
muy bien situada en la columna AD
abierta. Las negras prefieren con-
centrarse en la defensa de su peón
de dama, punto clave de esa posi-
ción. Todas sus piezas están ahora
desarrolladas para tocar ese punto.
La apertura se transforma en una
suave lucha para el control de esta
casilla.
4 A2C A2R
Aquí un error típico seria 4 ... ,
A4A. Lo que parece ser un buen em-
plazamiento para el alfil , pero de he-
cho es un error serio por dos razo-
nes:
(a) El alfil bloquea el peón AD de
las negras lo que adelantaría la libe-
ración de su juego.
(b) Las blancas pronto jugarán
P4D atacando el alfil ganando tiem-
pos de desarrollo.
5 0-0 0-0
6 P4D
Entrando en posición de gambito
de Dama. Si las negras, desoyendo
la teoría, ceden su dominio en el
centro con 6 .. ., PxP las blancas re-
cuperan su peón con 7 C5R o 7 D2A
Después del anterior movimiento
7 ... , P4CD es imposible: 8 P4TD,
P3A; 9 PxPC, CxP; 1O C5C! ganan-
do una torre . Esto es una celada que
el lector deberá anotar.
6 ... CD-20
7 D2A P3CD
Los caminos normales de desarro-
llo del alfil de dama negro no están
170 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD

disponibles : así pues las negras se 10 ... AxC

desarrollarán vía 2eD . Incidental- 11 P4R A2C
mente el alfil de dama en 2eD está 12 A4A( 138)
también apuntando hacia el cuadro
4D de las negras.

8 PxP

Abriendo la columna AD para la

dama blanca.

8 ... CxP!

Existen varios inconvenientes en

8 ... , PxP:
a) Bloquea permanentemente la
diagonal 1TD-8TR para el alfil ne-
gro.
b) Tanto 9 A4AR como 9 esR da-
138 N
rían iniciativa a las blancas.
e) Y lo peor de todo , después de
8 ... , PxP las blancas pueden explo-
tar el hueco en 6AD , con 9 D6A! in- Desarrollando una pieza con ga-
nancia de tiempo atacando el peón
movilizando a las negras; p. ej., 9 .. .,
T1 e; 1OA4A!. Después de 8 .. ., e xP; AD. La fase de apertura está com-
9 D6A, T1 e el movimiento 1O A4A pleta y las blancas tienen ligera ven-
taja. Estamos siguiendo la partida
ya no es bueno, pues las negras tie-
entre Keenne-Robatsch , primer ta-
nen tiempo para expulsar a la dama
blanca con ... , ese o ... , A2e . Des- blero del match Inglaterra-Austria en
pués de esto las blancas tienen ma- «West European Team Tourna-
ment» en Madrid en 1971 .
yoría de peones en el centro pero
las negras están bien desarrolladas
12 ... P4AD
y tienen posibilidades de igualar.
Necesariamente para desafiar el
9 C3A A2C
centro de las blancas antes de que
centralicen su torre en las columnas
Desde luego no 9 ... , exe ; 10 Pxe de dama o rey.
lo que reforzaría el centro de las
blancas. 13 PSD PxP
14 PxP A3AR
10 CxC
14 ... , AxP es imposible por 1S
Para ganar un tiempo para el TD1D , e3A; 16 ese amenazando
avance central atacando el alfil de TxA. y si 16 ... , P3e entonces 17
dama negro ya que 1O ... , Pxe blo- ASR ganando material. 1S ... , A3AD ;
quearía una vez más la diagonal de 16 ese, Axe; 17 AxA es también
esta pieza. muy bueno para las blancas. A la
 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD 171

vista de todo esto las blancas tienen 23 P6D+

éxito manteniendo un potente peón
central. El peón pasado empieza a hacer
notar su presencia.
15 ... P4TR

Apoyando un ataque al rey negro 23 ... R2D

con C5C; 15 ... , AxP ; 16 TD1 D aún 24 T7A+ e2R
es bueno para las blancas.
O bien 24 ... , R1A; 25 T7A+, R1C ;
15 ... T1 R 26 TxA+, RxT; 27 CxP+ y ganan.
16 ese e1A
17 TD-10 ASO 25 D4T+ R1A
25 ... A3A; 26 A3T ++
Para cortar el apoyo del peón pa- 26 P7D+!
sado.
El peón pasado asume el golpe
18 A3R! P3TR
final.
18 ... , AxA; 19 PxA descubre un
ataque de la torre blanca a 7 AR. 26 ... DxP
27 A3T 1-0
19 e4R
27 .. ., DxA; 28 DxT+ siendo inmi-
Un buen cuadro central para el ca- nente el mate.
bailo.

19 ... AxA
20 PxA e3e
ATAQUE INDIO DE REY

El caballo negro también buscará 1 e3AR

el cuadro 4R del cual nunca podrá
ser desalojado. Esto daría a las ne- El mismo movimiento inicial que
gras una buena compensación por la Catalana, pero en el Ataque Indio
el peón blanco en la columna de da- de Rey las blancas planean conti-
ma, pero no sería así. Era esencial nuar con P3D y P4R en lugar de
primero 20 .. , D2R. Ahora las blan- P4AD .
cas tienen la oportunidad para un
movimiento que destruiría la protec-
1 ... P4D
ción del caballo negro que ya ha si- 2 P3eR e3AR
do debilitado con 18 ... , P3TR. 3A2e P4A
21 TxP!! RxT
22 T1A+ R2R Ocupando el centro con peones
de la forma tradicional.
O 22 ... , R1 C; 23 C6A+!, PxC; 24
DxC+, R1T; 25 DxPT+, R1 C; 26 TxP 4 0-0 e3A
y las blancas ganan. 5 P3D (139)
172 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD
139 N
Anunciando una formación de Ata-
que Indio de Rey, los movimientos
de apertura de las blancas son muy
flexibles y también era posible jugar
aquí 5 P4AD e incluso 5 P4D con
una inmediata presión sobre el cen-
tro de peones de las negras.
5 ... P3R
Asegurando el peón de dama co-
mo en el juego de negras en la anti-
catalana.
6 CD-20
Para soportar P4R, 6 C3AD tam-
bién lo conseguiría pero permitiría el
cambio de damas y si las negras
juegan ... , PxP en el momento nece-
sario y las blancas necesitan la da-
ma en el tablero para su ataque.
6 ... A2R
Éste es el mejor cuadro. 6 ... , A3D
expandiría el alfi l a una potencial ti-
jera después de que las blancas ju -
gasen P4R .
7 P4R 0-0
8 T1R P4CD
La situación está fijada: las blan-
cas atacan el flanco de rey por me-
dio de P5R apartando el alfil de rey
negro seguido por P4TR-5T-6T.
Las negras contrarrestan esta es-
trategia haciendo marchar sus peo-
nes hacia el flanco de dama de las
blancas.
9 PSR C1R
9 .. ., C2D es desde luego buena
jugada.
10 C1A
Esto parece un poco raro pero es
un movimiento bien fundado. Las
blancas tienen dos ideas en la men-
te sea C1 A-3R-4CR o C1 A-2T-4CR.
En 4CR el alfil de dama blanco apo-
ya el empujón del peón TR y en ge-
neral ayuda al asalto sobre el rey
negro .
10 ... P4TD
11 P4TR PST
12A4A
Nótese la cantidad de piezas blan-
cas en contacto con el peón avanza-
do en 5R que restringe el juego de
las negras. Esto pone en evidencia
la cooperación entre las piezas blan-
cas que adquiriría gran significado si
se llegase a abrir el flanco de rey.
12 ... P6T
Creando agujeros en cuadros os-
curos en la estructura de peones
blancos del flanco de dama. Las
blancas obviamente no pueden ju-
gar PxP ya que su peón TD aislado
quedaría muy expuesto.
 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD
13 P3C A2C (140)
140 B
Ambos bandos han implantado sus
ataques de la forma más eficiente po-
sible. Como tan frecuentemente ocu-
rre en estas oscuras aperturas de
flanco , la posición alcanzada no es,
objetivamente hablando, favorable a
ninguna de las partes. Es puramente
una cuestión de gusto el preferir la
posición de las blancas o las negras
llegados a este punto. Por ejemplo, el
prestigioso Gran Maestro alemán
Uhlmann es un gran partidario de la
posición de las negras en esta típica
situación mientras que el Gran Maes-
tro rumano Gheorghiu toma precisa-
mente el punto de vista opuesto.
Tal vez nosotros veríamos el ata-
que de las blancas como más peli-
groso por las siguientes razones:
después de que las blancas han
avanzado su peón TR tan lejos como
sea posible, pueden intentar el jugar
A5CR forzando al alfil de rey negro.
Entonces las blancas pueden jugar
con sus caballos para ocupar los
cuadros oscuros claves 5CR y 6AR
desde donde amenazarán al rey ne-
gro. El asalto de las negras en el ala
173
opuesta no pone en peligro nada tan
importante como el rey blanco.
INGLESA
1 P4AD P4AD (141)
141 B
La apertura inglesa 1 P4AD ataca
desde el flanco al cuadro 50 al que
esperan controlar las blancas y do-
minarlo con sus piezas. En las sec-
ciones previas relacionadas con las
aperturas de flanco vimos las va-
riantes donde las negras se oponen
resueltamente a la presión lateral de
las blancas estableciendo una cade-
na de peones en el centro. En esta
sección analizaremos un tipo de res-
puesta diferente de las negras: su
actitud, imitación de los movimien-
tos de las blancas. También el muy
común 1 ... , P4R que conduce a un
tipo de Siciliana con los colores
cambiados.
2C3AD
Aumentando la presión sobre 40
negro.
174 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD

2 ... C3AD 7 ... PxP

Desafiando las negras al cuadro 40 Es peligroso prolongar la imitación:

de las blancas de la misma manera.
3 P3CR
El alfil de rey blanco también se de-
sarrolla dominando 50. Este juego
alrededor del cuadro 50 da a las ma-
niobras de apertura de las blancas un
tema y objetivo primarios. Una vez se
ha alcanzado este objetivo el plan
para el medio juego surgirá de forma
natural , por sí mismo, de la posición
estratégica de las piezas blancas.
3 ... P3CR
4A2C A2C
5 C3A
El desarrollo natural del caballo de
rey en 3AR es superior a la alternati-
va más pasiva 5 P3R con intención
de CR2R. Entonces las negras pue-
den obtener una igualdad completa
simplemente copiando los movi-
mientos de las blancas . Por ejem-
plo: 5 P3R, P3R ; 6 CR2R, CR2R; 7,
0-0,0-0; 8 P4D, PxP; 9 CxP, CxC; 1O
PxC, P4D; 11 PxP, CxP; 12 CxC,
PxC ; con una posición de igualdad.
7 ... , P4D ; 8 PxPA, PxP; 9 D4T y el
peón AD de las negras tiene proble-
mas : p. ej. 9 ... , A3R ; 1 O C5C! , un
bien conocido método de molestar a
un alfil en 3R. Si las negras permiten
CxA perderán la pareja de alfiles y
tendrán sus peones muy debilitados
mientras que si el alfil de dama deja
libre 3R caerá el peón AD .
8CxP
Ahora las negras tienen problemas
para completar su desarrollo porque
8 .. ., P3D ; 9 CxC, PxC; 1O AxP daría
a las blancas un peón libre.
Así las negras deben jugar:
8 ... CxC
9 DxC P3D
En orden de desarrollar su alfil de
dama.
10A5C (142)

5 ... C3A
6 0-0 0-0
7 P4AD!

Este avance central promete a las

blancas alguna ventaja ya que la da-
ma blanca también ha entrado en
contacto con la casilla de 50. Más
aun 7 P4D abre líneas para que las
blancas completen su desarrollo . El
intento más !entro 7 P3CD de desa-
rrollo de todos los alfiles sobre las dia-
142 N
gonales largas es un error: 7 ... , C5R;
8 A2C . CxC; 9 AxC , AxA; 1O DxA y el
blanco ha permitido doblar sus peo- Estos movimientos se jugaron en
nes sin compensación aparente. la 8ª partida del match Fischer-
 Apertura por el flanco 1P3CD; 1C3AR; 1P4AD 175

Spassky para el Campeonato Mun- 11 ... 04T

dial de 1972. Las blancas (Fischer) 12 TD-1A TD-1C
tienen un pequeño extra en vista de 13 P3C TR-1A
su libre desarrollo y firme sujeción 14 020 P3TO
del cuadro 50. Aquí tenemos una 15 A3R T2A
posible continuación que muestra
cómo esta ventaja abstracta del do- Spassky jugó 15 ... P4CD, des-
minio sobre un cuadro clave puede pués de lo cual 16 A7T! forzó el
ser utilizada para ganar algo más cambio.
tangible y concreto:
16 C50!
10 ... A3R
Amenazando DxD
Que fue el movimiento de
Spassky, pero habría sido más lógi- 16 ... OxO
co jugar P3TR para capturar de una 17 AxD CxC
vez el alfil de dama blanco. 18 PxC TxT

11 D4A No puede mover su alfil de dama

primero porque su torre está amena-
Las negras amenazan 11 ... , C4D zada.
abriendo un ataque desde el alfil de
rey sobre la dama blanca seguido 19 TxT A2D
por .. ., CxC sumiendo a las blancas 20T7A
en un juego débil de peones do-
blados. Con ventaja.
tes sobre las que se insiste para
ayudar a elegir la apertura más
apropiada y asegurar su desarro-
llo efectivo.
La obra está estructurada en
dos grandes bloques, según se
opte por abrir el juego con el
peón de rey o el peón de dama,
y en cada bloque se recogen
con abundantes ejemplos cómo
han iniciado sus partidas los
más famosos Maestros, ya sea
en salida clásica o en cualquiera
de las variantes más acredita-
das.
Por poco iniciado que el lector
esté en el ajedrez estamos segu-
ros que disfrutará con la lectura
de la presente obra, aportándole
conocimientos que le ayudarán a
obtener mejores resultados en
sus partidas.

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HISPANO EUROPEA