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“AÑO de lA luchA cOntrA lA cOrrupción y lA impunidAd”

UNIVERSIDAD PRIVADA
SAN CARLOS

DERECHO PENAL
TEMA N°1: TITULOPRELIMINAR: PRINCIPIOS GENERALES
DOCENTES: Dr. Vidal Michael Huanatico Condori
INTEGRANTES:
 Jhonatan Manuel Chata Mamani
 Laura Pilar Quispe Apaza
 Alan Raphael Vilcanqui Pacheco
ESCUELA PROFESIONAL: DERECHO

AÑO: 2019 SEMESTRE: III


Puno-Perú
CODIGO PENAL
TITULO PRELIMINAR PRINCIPIOS GENERALES
FINALIDAD PREVENTIVA
Artículo I.- Este Código tiene por objeto la prevención de delitos y faltas como
medio protector de la persona humana y de la sociedad.

PRINCIPIO DE LEGALIDAD
Artículo II.- Nadie será sancionado por un acto no previsto como delito o falta
por la ley vigente al momento de su comisión, ni sometido a pena o medida de
seguridad que no se encuentren establecidas en ella.
EL PRINCIPIO DE LEGALIDAD EN EL DERECHO PENAL PERUANO
En el Perú, a través de la vida republicana se han proclamado repetidas veces
el Principio de Legalidad.
Desde el Estatuto Provisional de San Martín y en las sucesivas constituciones
se han consagrado la inviolabilidad de la libertad civil.
En la Constitución de 1828, el art. 150o. declara: "Ningún peruano está
obligado a hacer lo que no manda la ley, o impedido de hacer lo que ella no
prohíbe". '' En el Código Penal de 1863, aparece el Principio en el art. 1 o. que
dice: "Las acciones u omisiones voluntarias y maliciosas penadas por la ley,
constituyen los delitos y las faltas".
EL PRINCIPIO DE LEGALIDAD EN EL
PROYECTO DEL CODIGO PENAL (1984)
Las garantías de la ley penal se encuentran situadas en el Título 1 de las
Disposiciones Generales del Proyecto.
Este Título 1, consta de cinco artículos, de los cuales los dos primeros y el último
desarrollan el principio que estudiamos. El art. 1o. que se inspira en el art. 3o.
del Código Penal vigente y del inciso 20 letra d) del art. 2o. de la Constitución,
dice: "Nadie será procesado o condenado por acto u omisión que al tiempo de
cometerse no estuvieren previamente calificados en la ley, de manera expresa e
inequívoca, como infracciones punibles ... ". En éste primer párrafo se establece
el principio tratado anteriormente: "Nullum crimen sine lege". El segundo párrafo
de la primera parte configura la prohibición de aplicar por analogía la ley penal,
para constituir un hecho en delito: " ... En ningún caso se podrá configurar hechos
delictuosos por aplicación analógica de la ley penal". Por lo expuesto, éste primer
artículo está acorde con el art. 233o. inc. 8 de la Constitución. A toda esta parte
del primer artículo, se ha añadido un párrafo en el que se señala que "Las
medidas de seguridad sólo se aplicarán a quienes reúnan las condiciones
previstas en la ley penal". Es importante señalar que a diferencia del actual
Código Penal el Proyecto trata a las penas en el Título IV separadamente de las
Medidas de Seguridad que se encuentran tipificadas en el Título XV. Las
Medidas de Seguridad, que prevé el artículo 103o. del Proyecto se clasifican en
Curativas, de Vigilancia y de 1 internación. El art. 2o. afirma que: "Nadie será
condenado a sufrir pena o sentencia a medida de seguridad distintas a las que
sancionadas en la ley, ni a cumplir pena diferente a la prevista para la infracción
juzgada". El principio del "Nulla poena sine lege" se hace presente en esta
primera parte del artículo. La ·última parte de este art. 2o. que dice: "No hay pena
de muerte para los delitos tipificados en este código", cumple con lo consagrado
en la Constitución en el art. 235o., que establece dicha abolición, estableciendo
la pena de muerte sólo por traición a la patria en caso de guerra exterior. La
presunción de inocencia que está consagrada en la Constitución en el art. 2o. in
c. 20 letra f): "Toda persona es considerada inocente mientras no se haya
declarado judicialmente su responsabilidad", ha sido recogido por el art. 5o. del
Proyecto consagrando así una elemental garantía para toda persona que es
sometida a un proceso pena 1: "La persona sometida a proceso por la comisión
de un delito tiene derecho a la presunción de inocencia mientras no se pruebe
su responsabilidad en sentencia condenatoria y firme". Partiendo de este
principio podemos deducir que cualquier persona sometida a un proceso penal
será absuelta por el principio del "lndubio Pro Reo", si no se ha probado su
responsabilidad. Asímismo de este art. 5o., deducimos también, que toda
persona será impuesta por una sentencia judicial.
("Nulla poena sine judicio"). Posteriormente en el Proyecto del Código Penal ya
revisado (*) se ubica el Principio de legalidad en el Título Preliminar, en su art.
111 complementado por el art. l. El Título Preliminar trata de las garantías
que la ley otorga a las personas que son procesadas en ·la vía penal. El art. 1
recoge una garantía de carácter procesal que se inspira en el artículo 1o. del
Código Penal vigente ( 1924) y que vuelve a ser incorporada aunque el primer
proyecto no la tomó en cuenta. El art. 111 dice: "Nadie puede ser condenado por
hecho no tipificado en la ley, de manera previa y expresa, como delito o falta ...
" Esta primera parte recoge el aforismo latino "Nullum crimen sine lege",
consagrado por la Constitución de 1979 (art. 233o. inc. 8), y en relación al art. V
del Título Preliminar del Proyecto: "La Ley Penal es inaplicable por ana· logia".
La segunda parte del art. 111 dice: " ... ni sufrir pena o medida de seguridad
distintas de las que ella (La ley) establece para la infracción juzgada". Esta última
parte consagra el Principio del "Nulla poena sine lege".

PROHIBICIÓN DE LA ANALOGÍA
Artículo III.- No es permitida la analogía para calificar el hecho como delito o
falta, definir un estado de peligrosidad o determinar la pena o medida de
seguridad que les corresponde.
La palabra analogía significa “Relación de semejanza entre cosas distintas” y en
concreto aplicado su uso al ámbito del derecho: “Método por el que una norma
jurídica se extiende, por identidad de razón, a casos no comprendidos en ella”.
A continuación vamos a profundizar en la definición de la analogía en el derecho
y en concreto en el derecho penal español.

El principio de legalidad implica la prohibición de la analogía en el derecho penal,


pero debemos analizarla más profundamente para saber como funciona esta
afirmación. Podemos definir a la analogía de la siguiente forma: La analogía
consiste en la aplicación de una norma a un supuesto que no está recogido en
la ley o su espíritu, pero presenta semejanzas a los supuestos que dicha norma
comprende.

De acuerdo a lo afirmado en el párrafo anterior, la analogía se encuentra


prohibida en nuestro ordenamiento jurídico, pero debemos observar como
funciona en la práctica en cada caso, ya que podemos encontrar supuestos
donde la analogía podría aplicarse en contra del reo o a favor del reo.
¿QUÉ ES UN REO EN DERECHO?
De acuerdo con su autor, Guillermo Cabanellas de Torres, la definición de Reo
proporcionada por el Diccionario Jurídico Elemental es: En tanto que adjetivo:
criminoso, culpado, acusado, objeto de cargos. ... Cuando el acusado o
procesado por un delito no ha sido capturado o ha huido, se produce la rebeldía
en lo penal.

LA ANALOGÍA CONTRARIA AL REO


En el supuesto donde la analogía se presenta como la aplicación de una norma
contraria al reo, (in malam partem), el principio de legalidad la prohíbe
claramente, por lo que es ilícito el calificar un delito o aplicar una pena mediante
la analogía. Aunque su funcionamiento es claro en este caso, si es verdad que
es posible encontrar casos donde se ha aplicado la misma.

LA ANALOGÍA EN FAVOR DEL REO


A diferencia del anterior supuesto, no se contrapone al principio de legalidad, la
aplicación de la analogía a favor del reo, (in bonam partem). Sin embargo el
Código Penal español no contempla la analogía favorable en todos los casos, ya
que por ejemplo la analogía se encuentra aceptada en el caso de los atenuantes,
no siendo tan claro este criterio en el caso de los eximentes. Cuando un
magistrado se encuentra ante una situación donde las características de un
supuesto son similares a las de una eximente del código penal, no puede aplicar
estas últimas de forma directa sino que debe proceder por la vía del indulto y la
modificación de la ley. Otras posturas respecto a esto último sostienen por el
contrario que si debería aplicarse la eximente por analogía dada la ausencia de
legislación en ciertas situaciones del código penal.

PRINCIPIO DE LESIVIDAD
Artículo IV.- La pena, necesariamente, precisa de la lesión o puesta en peligro
de bienes jurídicos tutelados por la ley.
Sólo puede existir un delito cuando las acciones ejecutadas por un individuo
afectan al derecho de otro; en consecuencia, el poder punitivo del Estado se
manifiesta sólo cuando la conducta de un sujeto afecta a los demás. Es la
consagración de la libertad como valor supremo; la libertad para hacer lo que se
quiera sin más límite que la libertad de los otros.
Como consecuencia del “principio de lesividad” y la idea de afectación a los
derechos de terceros, nace lo que se constituye en la esencia del derecho penal,
esto es, la violación a un bien jurídico. Los bienes jurídicos son el conjunto de
garantías, derechos e intereses que se hallan protegidos a lo largo de la
Constitución de la República y en otras leyes, tales como el derecho a la vida, a
la libertad, a la honra, a la propiedad, en suma, todo aquello a lo tenemos
derecho de disponer. Con los bienes jurídicos colectivos ocurre lo mismo, sólo
que son muchos los titulares. Cuando esa libertad, esos derechos, son afectados
por la acción de otro, estamos en presencia de una conducta que menoscaba un
bien jurídico, y que, por consiguiente, puede ser tipificada como delito si el
legislador lo considera conveniente y si ningún otro límite constitucional se lo
impide.

GARANTÍA JURISDICCIONAL
Artículo V.- Sólo el Juez competente puede imponer penas o medidas de
seguridad; y no puede hacerlo sino en la forma establecida en la ley.
DE FI NI CI O N
L a s ga ra n t ía s ju risd iccio n a le s co n stit u ye n lo qu e a lgú n a u to r ha
d e no m ina do " la ju risd icció n co n st it u cio na l de la lib e rt a d" y
co m p re n de n e l con ju n to de in st rume n t o s p ro ce sa le s qu e -d e nt ro
d e l siste ma ju ríd ico e st a ta l - cum p len la f un ció n de la t u te la d ire ct a
d e lo s de re ch o s hu m an o s. In st ru men t o s que vie n e n co n sa gra d o s
co n st it u cion a lm e nte y lo s o rga n ismo s ju d icia le s en carga d o s d e
im p a rt ir la p ro t e cció n .
P o r ú lt im o, la ga ra n t ía d e e je cució n co n lle va que , u n a ve z
im p ue st a un a pe na , se lle va rá a ca b o d e la f o rma p re vist a , y n o
d e o t ra . E l a rt . 3 .2º CP com p le ta e l co n ju nt o a l d e cir: “T am p o co
p o d rá e je cu ta rse pe n a n i m e d id a de se gu rid a d e n o t ra f o rm a qu e
la p re scrit a p o r la L e y y re gla m e n t os qu e la d e sa rro lla n , n i con
o t ra s circu n sta n cias o a ccid e nt e s que lo s e xp re sa do s e n su te xt o .
L a e je cu ció n d e la p e na o d e la me d id a de se gu rid ad se re a liza rá
b a jo e l con t ro l de lo s Jue ce s y T rib u na le s com pe t en t e s. ” To d o e llo
b a jo p re sid ido por la id ea de qu e ya e s b a st a nt e ma lo e l se r
co n de n ad o co mo pa ra qu e ve n ga a lgu ie n a em pe o ra rlo .
PRINCIPIO DE GARANTÍA DE EJECUCIÓN
Artículo VI.- No puede ejecutarse pena alguna en otra forma que la prescrita por
la ley y reglamentos que la desarrollen. En todo caso, la ejecución de la pena
será intervenida judicialmente.
DEFINICION
El Derecho Penal expresa la prohibición de cualquier otra forma de ejecución de
una pena que ese encuentra fuera del margen de la ley o los reglamentos que la
desarrollen. Así, mientras el principio de legalidad exige que nadie podrá ser
sancionado o penado si es que su comportamiento no se encuentra constituido
como un delito o falta en el ordenamiento jurídico al momento de su realización
el principio de garantía de ejecución exige toda pena tiene que ser cumplida,
ejecutada y aplicada única y exclusivamente de acuerdo a lo dictado por la ley.
La "intervención judicial" a que se refiere el precepto debe entenderse como que,
en todo caso, la legalidad de la ejecución o el cumplimiento de la ejecución legal
de una pena, por la afectación delos derechos fundamentales que implica, debe
ser "controlada" o "supervisada" por el órgano jurisdiccional competente (juez
penal, Sala penal, etc., pero también por el Ministerio Público en el ámbito de su
competencia). En tal sentido, intervenir la ejecución de la pena significa controlar,
comprobar, verificar que se esté llevando acabo conforme a la ley y a los
reglamentos que la desarrollen. En otras palabras, por el principio de
intervención judicial, la actuación de la Administración Penitenciaria queda
limitada por el control jurisdiccional de los jueces penales. Estos, en virtud de su
deber de control judicial de la ejecución de la pena, deben velar por la legalidad
de la actuación de las autoridades penitenciarias en el ejercicio de sus facultades
y el respeto a los derechos fundamentales durante la ejecución de las penas.

RESPONSABILIDAD PENAL
Artículo VII.- La pena requiere de la responsabilidad penal del autor. Queda
proscrita toda forma de responsabilidad objetiva.

PROPORCIONALIDAD DE LA PENA
Artículo VIII.- La pena no puede sobrepasar la responsabilidad por el hecho. La
medida de seguridad sólo puede ser ordenada por intereses públicos
predominantes.(*)
(*) Artículo modificado por el Artículo 1 de la Ley N° 28730, publicada el 13 mayo
2006, cuyo texto es el siguiente:
“Artículo VIII.- Proporcionalidad de las sanciones
La pena no puede sobrepasar la responsabilidad por el hecho. Esta norma no
rige en caso de reincidencia ni de habitualidad del agente al delito. La medida de
seguridad sólo puede ser ordenada por intereses públicos predominantes.”
Frente a la constante tensión entre arbitrio judicial y tasación legal en el proceso
de individualización de la pena, y a la ausencia de una sólida teoría que la
oriente, nace la necesidad de depurar los criterios que sean idóneos para recoger
aquellas circunstancias objetivas y subjetivas que rodearon al hecho, desde un
enfoque eminentemente retrospectivo. Aquí el principio de proporcionalidad tiene
un fértil terreno para desplegarse, y su incipiente autonomía le otorga la
virtualidad de dar concreción a las finalidades retributivas de la norma penal, y
de esa forma constituirse en unas de las más relevantes directrices de
racionalización en el ejercicio del iuspuniendi.

FINES DE LA PENA Y MEDIDAS DE SEGURIDAD


Artículo IX.- La pena tiene función preventiva, protectora y resocializadora. Las
medidas de seguridad persiguen fines de curación, tutela y rehabilitación.

APLICACIÓN SUPLETORIA DE LA LEY PENAL


Artículo X.- Las normas generales de este Código son aplicables a los hechos
punibles previstos en leyes especiales.

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