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Hola, estoy un poco caliente por algunos relatos que he visto hoy en internet, creí

que Yo era la mujer mas PUTA DEL MUNDO por haberle sido infiel a mi esposo, y
ahora me doy cuenta que lo que hice no fue mayor cosa: Somos casados y vivimos
muy felices, pero la rutina llega y muchas noches pasamos espalda con espalda,
nada de sexo, …mis amigas lo primero que me dicen es que mi esposo tiene otra
vieja, por eso es que no me picha. . Me considero una mujer madura, elegantona,
con unas piernas y un culo redondito y grande, mis tetas si son pequeñas y mi
vulvita es igualmente pequeña, muy seguramente por que el uso que ha tenido es
de una sola POLLA, la de mi marido, por eso, mas que celos con mi esposo, lo que
tengo verdaderamente es CURIOSIDAD por conocer otras cosas, y es este internet
el que me tiene recalentada, les cuento que fui INFIEL por primera vez con mi
ESPOSO el sábado pasado 30 de abril de 2011, y eso me tiene asustada, leo estas
historia de infieles y eso me ha mermado los nervios, pero quiero contarla, por que
asi me lo han recomendado, para desahogar y descargar un gran peso que no me
deja en paz.
En mi trabajo uno de los jefes me viene acosando a cado rato, yo no le paro bolas
por que no me interesa, siempre me hace regalitos, me intenta besar, un dia en el
ascensor se me abalanzo y me apretó tan fuerte que sentí toda esa cosa
puyándome mi vientre, me le retire con fuerza y le dije de todo, pero en el fondo no
estaba disgustaba, al contrario esa cosa la sentí tan grande que me puso a pensar
miles de cosas……. Un dia el muy lanzado me dijo… Usted guardándole fidelidad
a su esposo y el hombre dizque anda con viejas pa´todo lado, y Usted la pobrecita
perdiéndose de algo bien rico….mija no sea pendeja! Esas palabras, la falta de
sexo con mi esposo y el haberle sentido esa polla tan grande en el el ascensor, me
estaban dando el brazo a torcer….le contesté feo, para que las chismosas se dieran
cuenta que ahi no habia nada!.
Un sabado que no se trabaja en mi empresa, mi esposo organizo un paseo a otra
ciudad para visitar su familia, cuando mis hijos y todos estábamos dentro del carro,
fingí estar maluca, les pedí que fueran ellos y que mejor si seguía mala me iría para
donde mi Mama, ellos (con el perdón de Dios) me comieron el cuento, salieron para
otra ciudad y yo me quede sola en mi casa, inmediatamente decidí calmar mi
curiosidad con el julano ese, lo llame a su celular y lo primero que me dijo el idiota
ese fue….Sabia que me llamarías amorcito lindo, tu esposo tiene otra y por eso no
te coge….págale con la misma moneda,…Yo aproveche esas palabras, le dije…Si
ese es un desgraciado y por eso quiero desquitarme, si tu lo quieres, estoy
dispuesta a todo lo que siempre has querido. Me recoges a eso de las diez de la
mañana en este centro comercial y a partir de ese momento seré para ti, si no
puedes hoy, te la perdiste para siempre. Me arregle rápidamente, me puse sexy, y
cometí el peor error de mi vida, por ese maldito internet, que muestra tanta cosa
rara…. Me rasure totalmente mi panochita, que al verla, quedó como la de una
bebecita, mi puse un hilito dental y salí a esperar al tío ese. Cuando llegue
anticipadamente al centro comercial, ya el julano ese, estaba con sonrisa gigante
esperando a su victima, pero yo me hice la guapa para no devolverme, me mataba
la curiosidad de conocer otra polla y mas, la de ese tio, que había sentido grane en
el ascensor. Subí rápidamente en el carro y le dije, rápido larguemos de aquí, el
me dijo cálmate muñeca que nadie te ha visto y de una me mando la mano a mi
pierna que se mostraba rozagante… le quite la mano y le pedí que solo adentro del
sitio, me podía tocar….El aceleró ese carro y al cabo de unos minutos lo ingreso a
un MOTEL, yo estaba súper asustada, quería salir corriendo y devolverme,
pensaba en mi esposo y eso me llenaba de terror… Corrió a abrirme la puerta del
carro, y al bajarme, el pudo observar mi tanguita muy seguramente mas mojada
que cualquier agua. Inmediatamente ese hombre se puso como un Animal en celo,
me abrazo y me beso con tanta pasión que se me olvido todo suto, su lengua se
metia entre mi boca y yo comence a responderle, senti ahora con mayor fuerza su
miembro duro y grande, el que me rastrillaba fuertemente, me moría de ganas por
verlo, cuando de pronto el muy estupido de un jalon me rompio mi tanguita
dejándome sin calzones, mando su mano y pudo notar que mi vulva estaba
totalmente mojada, sin un pelito y muy seguramente sus dejos se dieron la idea
que mi panocha era muy pequeña, lo cual emociono mas al julano, quería meterme
los dedos, pero no podía, yo en cambio le mande la mano a su bragueta le abri su
cremallera y salio semejante cosa, la cual quede mirando como embrutecida…Dios
mio….eso er el doble que la de mi marido…no entendía por que tan grande,
siempre pense que esos videos eran montajes, por que la verdad sea dicha, la polla
de mi esposo es bien chica, y eso lo acabo de comprobar hoy…..No pude mas, me
desvanecía de la emoción….eran mis dos manos las que tenian atrapada esa polla,
queria gritar de la emocion, me le quite al julano que me besaba locamente y me
lance como presa a su trofeo a esa enorme polla, le dije….que cosa tan linda, dios
mio eso es muy grande, perdoname, pero me enloqueció tu polla e inmediatamente
me arrodille a mamársela, lo hacia con tanta pasion por que casi con mi marido
nunca lo hago, el me cogia de las orejas y queria que me la metiera toda a su boca,
pero la verdad no me cabia o no sabia como se hacia, solo queria chuparmela toda,
quedamos finalmente desnudos totamente, me tiro en la cama boca arriba y se
lanzo sobre mi panochaita, exclamo, …tu esposo no te ha hecho nada…eres casi
virgen, y estas muy rica…su boca me cubrió toda la vulvita y comenzo a meterme
su lengua la cual no podia entrar a mis entrañas, mi clitores me dolia y creo que se
estaba creciendo, con mis dedos pude sentir una bola como grande, eso me
asustaba por que nunca lo habia tenido asi, su lengua queria metermela toda y eso
me enolquecia, tome mi trofeo al cual no dejaba de admirar y me lo chupaba
fuertemente, por fin ingresaba su mayor parte a mi boca, pareciera ser, que mi
garganta se abriera ayudándome a semejante manjar….la de mi marido cuando
me la mamaba siempre quedaba adentro toda, esta apenas una parte, quería que
me atravesara la garganta, no sentia ahogo, el me mamaba mi vaiginita y yo
intentaba comerme toda su polla, el me dijo sacala que me vengo, yo no le deje y
senti que se su leche me inundaba mi boca, me la tragaba de la emoción pero parte
de esa leche se regaba por mi cara….lamía toda su punta y gritaba
impresionantemente por que tambien mi panocha explotaba en su cara, el cubrió
con su boca toda mi vulva e intentaba sacarme todos mis jugos para tragárselos,
mi clitores reventaba de dolor, mis pesosnes igualmente, la emocion era
impresionante, era mi segundo hombre en mi vida…. y conocer en vivo una nueva
polla y mas esa, me arrechaba muchísimo al punto de haberme olvidado de mi
marido…. le chupe toda su polla, dejandosela sin nada de semen, todo me lo
trague, nunca lo habia hecho, pero esa emocion me obligo, el tio ese hacia lo mismo
con mi vulvita, me la dejaba seca…al rato exclamo…. tu clitoris siempre te crese
así?, yo me mire, lo toque y le dije..nunca…..no entiendo por que crecio como una
bola roja y grande que sobresale por mi vulva, el ahora aprovecha para meterselo
a su boca y eso me enloquece mas. Le chupo suavemente sus boloas, a el le gusta,
pero la emocion es tan grande en mi clitores ya gigante, que el tio aprovecha para
ponerme su culito sobre mi bopca y yo que estoy a punto de gritar de esa emosion,
no hago sino meterle mi lengua fuertemente lo que hace que el tio grite como loco,
yo nunca habia hecho algo asi, escasamente chuparle la pollita a mi marido pero
deahi a chparle el culo nunca, mi clitores quiere reventar y este tipo comienza a
gritar….Meteme algo por favor…..rompeme el culo….meteme los dedos…….hace
algo rapido!, …. yo solo medio le mordizqueba su culo y mi lengua intentaba meterla
pero eso no pasaba, al instante su polla se viene en mi cara y de una sola me la
mete en la boca, igualmente otro orgasmo en mi, cae también en su boca,
quedamos como muertos besándonos y limpiándonos con nuestras lenguas
nuestros líquidos. Nos bañamos y ahi en la ducha me toca fuertemente mi vulvita,
la cual arde de ganas de pichar, es cuando le digo….METEME ESA POLLOTA Y
ROMPEME ESA PANOCHA, SOY TUYA, LO QUE TU QUIERAS. caemos a la
cama, el prepara su lanza y yo con ese deseo de ser atravezada por semejante
polla tan linda……Cuadra su polla en la punta de mi panocha, le digo suave papi,…
hunde su punta, pero no pasa, le digo que me duele, saca un aceitico y me unta
toda mi vulva, yo no puedo de la emocion y empujo con fuerza mi panocha contra
sus huevas y eso pasa como si me estubiera desvirgando, me duele un poco pero
me arrecha mucho, empieza a meterla y a sacarla, me duele, grito y no aguanto
mas y lo que nunca hago con mi esposo aqui lo hago, grito duro diciendole,
ROMPEME ESA PANOCHA ES TUYA!…TE GUSTA MI PANOCHITA?,
ROMPELA!…..SOY TUYA….SOY TU PUTA!……TE AMO…TE AMO.
ENTIERRALA TODA…TODA!… nos venimos una vez mas, como nunca me habia
venido, siento esa cosa inmensa como se derrite dentro de mi, vuelvo y le
grito….TE GUSTO ESTA PUTA?… y el me dice,,,,si eres muy rica, eres una
maquina! tu esposo no te ha hecho casi nada, estabas casi virgen……. saca su
polla y yo como muerta me dejo hacer lo que el quiera, voltea mi cuerpo y me pide
que me ponga en cuatro, yo me imagino lo que se me viene encima, pero el muy
cariñosamente empieza a jugar con su lengua en mi culo, yo lo abro lo mas que
pueda para que su lengua me viole, le grito …eso es muy rico, métemele tu
polla…..nunca habia hecho eso y menos que mi marido me hubiera dado por
detras….. Le grito con tanta emoción, que el inmediatamente pone su enorme
punta sobre mi culo, e intenta metérmela y yo con mis dos manos abro al maximo
mi culo para que entre triunfal mi primer polla en mi culo, pero el dolor es
impresionante, ….me hecha casi todo el tarro de ese aceite relajante, su polla
patina en mi culo, me duele mucho, intenta meter su cabeza en mi culo que desea
como loca ser comida, pero me duele mucho, el suda demasiado y termina
rindiendose…mi culo se salvo de ser desvirgado….. Volvemos a intentarlo, yo lo
quiero asi me duela mucho, por que mi esposo nunca me lo ha hecho y quiero
vengarme por que el hace rato no me come. Como no puede metermela por el culo,
aprovecha mi panochita expuesta y me la entierra creo que toda, me hace mucho
y terminamos gritando de emoción una vez mas……. caemos en la cama y no se
cuanto tiempo, me despierta el celular, es mi esposo, el me dice, contéstele, mi
esposo pregunta como seguiste, yo le dije, estoy por la drogueria, ahi me mandaron
unas pastillas para el dolor y me dijeron que era una migraña, ya me esta pasando,
ahora salgo para donde mi mama y aya me quedo esta noche, llámame a mi casa
en una hora. Chao papi, cuídate mucho. El me dice… Mami mejorate por que lo
que creo es que algo te esta haciendo falta y esa medicina te la boy a dar tan pronto
llegue. Que tal mi esposo, prometiendome lo que hace trato no me hace…..Pero el
muy idiota no sabe que piché con otro hombre como loca en celo. como nunca en
mi vida lo habia hecho, que hice cosas que nunca habia hecho, y que todo lo que
hice me gusto y mucho, y que parte de esa emoción se la debo a el, por haberme
dado con su indiferencia esta oportunidad de conocer en mi vida una SEGUNDA
POLLA…un segundo hombre en mi vida… Les confieso, me gusto muchísimo, pero
eso hizo parte de una fantasía, de unos celos bolos con mi esposo, y por amor a
mi esposo nunca mas lo volveré hacer..
Mi esposo llega hoy de su paseo, yo ardo en ganas por tenerlo y hacerle el amor,
pero aterra algo, el me preguntará por que en muchos años vengo yo a rasurarme
y justo en su ausencia, mi vulvita? Dios mio, deseenme suerte! Los amo a todos y
sean infieles solo por una sola vez!.
La fantasia de mi esposo
Una noche de pasión y de sexo, mientras mi esposo me cojia yo encima de el, me
sorprendio con lo que dijo. "Como me gustaria que otro estuviera cojiendote el culo
asi, que tengas una doble penetracion." Y yo siguiendole el juego. "si viejo, ha de
ser emocionante, tener dos vergas para mi solita, asi tu cojiendome por delqante y
otro por atras hum, que rico ya la siento" "si vieja te quiero ver cojer con otro, quier
ver como te la meten" "que padre tener otra verga y que tu me veas" "Quieres cojer
con otro?" Si viejo, si si si , quiero que me coja otro" "Dime con quien, quien quieres
que te coja" "El que tu quieras, traemelo, que me coja, humm viej me vengo, me
vengo" "Diem, quien te coje, dime , hay yo tambien me vengo" "Si Manuel,
metemela, cojeme que mi marido me vea" Y con esto los dos nos vinimos, claro que
el nombre que mencione fue el de un amigo que trabaja conmigo pero el no lo sabe,
el nombre lo saque nomas por nomas.
Al dia siguiente, yo pense que todo fue productpo de la calentura y que todo se
habia olvidado, al menos de mi parte, ya ni me acordaba de lo dicho la noche
anterior, Esa noche fue lo mismo pidiendome que me cojiera a otro y lo mismo al
dia siguiente. Por la semana siguiente no hicimos nada por mi periodo, el no
menciono nada del otro y yo nunca le pregunte nada, total yo sabia que no se
animaba y todo era fruto de las cojidas de la calentura.
Pasaron dos semanas y una tarde sali de mi trabajo, de ahi me fui a la tienda a
comprar algo para cocinar y ahi en el super, se me acerco un joven y me comenso
a sacar conversacion, yo le contestaba y durante todo el rato anduvo conmigo, el
me pidio mi numero de telefono pero me negue no se lo iba a dar, sali de la tienda
y nos despedimos y supe que se llamaba Esteban y el me dio su numero de telefono
para que le llamara y al salir lo tire, al dia siguiente, al salir del trabajo me lo volvi a
encontrar y de nuevo conversamos un poco hasta que me subi a mi carro y me fui
y los dos dias que le siguieron me lo encontraba y la conversacion se iba haciendo
mas comoda, yo me sentia muy bien platicando con el.
Caundo llegue a la casa, mi esposo no estaba, habia salido por un momento, en el
cuarto de nosotros tenemos la computadora asi podemos revisar a los hijos para
controlarlos, me fije que estaba prendida y su direccion estaba puesto, me sente y
me puse a revisar sus correos y me fije que el tenia contacto con otro hombre, el
cual le explicaba acerca de su fantasia, le daba toda clase de detalles mios, de lo
que me gustaba, que no me gustaba, las posiciones, en fin le decia todo de mi y
ademas de eso le habia mandado unas fotos de mi que me saco un dia en la playa,
pero lo que mas me sorprendio fue que el joven que conoci en el super era el, el le
habia mandado unas fotos de el mismo desnudo y se le notaba una vergota
impresionante y una de esas fotos mostraba cuanta leche le salia, pense que la
fantasia de mi esposo iba mas lejos de lo que me imaginaba, en verdad si queria
verme cojer con otro y al parecer habia escojido a este hombre y pense que si el lo
queria hacer de verdad le daria gusto.
Al dia siguiente, de nuevo me encontre con Esteban, esta ves me invito a tomar un
trago y acepte, al fin y al cabo para eso lo habia mandado mi marido, fuimos a un
bar chico que habia por ahi, estuvimos un rato platicando y fue cuando comenso a
seducirme, yo me sentia bien por lo que me decia y es mas deje que me tocara un
poco mi cuerpo como mis piernas, como estabamos sentados muy juntos
aprovechaba y yo lo deje, en eso sono mi telefpono y era mi marido y le dije que
estaba con Manuel, tomandonos un trago y que llegaria en un rato, estuve con
Esteban un rato mas y me despedi y en cuanto llegue a casa, mi marido estaba en
la cama desnudo y con la verga bien parada, Yo andaba caliente por todo lo
sucedido y me le quite la ropa y me acoste junto a el y nos comensamos a cojer y
el me comenso a preguntar por Manuel, qu ele diera detalles de lo que habiamos
hecho y yo invente una historia. "si viejo, nos fuimso a un hotel y me cojio, hum tiene
uan vergota grande, me cojio rico" Mientras yo le seguia con mi cuento el mas se
emocionaba y me daba una buena cojida, yo disfrutaba con eso que me hacia y me
vine unas cuantas veces aantes de terminar y cuando terminamos lso dos
acostados. "guauu, viejo, en verdad te calento lo que te dije, sabes creo que ahora
si lo voy hacer, me gusta Manuel" Si vieja cojetelo y cuentame lo que te hiso.
A los dos dias me encontre con Esteban, me invito a slir con el al dia siguiente que
era viernes y le dije que si, esa noche al llegar a casa, le dije a mi marido que queria
ir a cenar al otro dia y me dijo que si.
Cuando estabamos en el restaurant, se acerco Esteban, no se quien fue mas
sorprendido si mi marido o el, yo haciendome al inocente los presente e invite a
Esteban a que se sentara con nosotros, esa noche yo me puse uan falda corta, sin
nada debajo, el se sento junto a mi, mientras cenabamos yo movia mi pierna y le
rosaba la de Esteban, y haciendome la distraida al bajar mi mano le aprete su verga
el entendio y metio una mano enmedio de mis piernas y me tocaba mi raja, el me
acarciaiba y mi marido enfrente de nosotros, cuando Esteban nos dejo un rato solos,
me le acerqeu a mi marido y le dije. "viejo, Esteban, me gusta, nos estamos
acarciando por debajo de la mesa y me gusta su verga y tengo la raja bien mojada,
quiero cojer con el. Me dejas?" Y quitandome un zapato lo puse en su verga y la
tenia bien parada, cuando regreso Esteban, pagamos y nos retiramos, nos ibamos
a ir directamente al hotel los tres, nos subimos al carro y yo me sente atras y le dije
a Esteban que se viniera conmigo y los dos ibamos atras mientras mi marido
manejaba, en cuanto arranco, ely yo nos comensamos a tocar besarnos, y
acarciarnos, yo hacia ruidos con la boca para que nos oyera mi marido, le iba
diciendo a el que queria que me tocara y que me hiciera, los dos seguimos y el se
saco su verga y yo se la comense a jalar, acxerque mi boca a su verga y se la
comense a mamar todo esto hacia mientras mi marido manejaba, se la chupe por
un rato y me monte en el, "cojeme, asi rico rico, cojeme" y me movia cojiendo con
el disfrutando de esa cojida y antes de que nos vinieramos llegamos a este hotel,
mi marido se bajo y tomo la habitacion y Esteban y yo nos quedamos en el carro,
cojeindonos y cuando mi marido llego con la llave, yo ya habia tenido varios
orgasmos, nos salimos del carro y entamos al cuarto, ya dentro los dos seguiamso
tocanonos, y caimos en la cama, mi espos se sento en una silla, mientras Esteban
y yo nos desnudabamos, el se subion ensima de mi y de un golpe me la metio me
cojio por un buen rato despues cambiamos y yo me subi en el, voltee a ver a mi
marido y uya tambien estaba desnudo y le dije que se nos uniera y le ofreci mi culo
para que me la metiera, primero se la chupe para ensalivarlo y senti cuando el la
apunto y me la comenso a meter, los tres nos moviamos al principio fue un poco
dificil pero encontramos el ritmo desde ese moemnto fue tan sabroso, sentia las dos
vergas dentro de mi, me cojian a su gusto, asi con las dos tuve unas venidas
tremendas y cuando los dos me llenaron el culo y raja de leche fue tanta que se me
salia.
Cuando terminamos yo aun no quedaba satisfecha y les mame la verga para
ponerselas dura de nuevo y lo logre, despues mi marido me cojio la raja y Esteban
el culo y cuando terminamos yo al menos estaba con mi raja y culo adoloridos,
Esteban nos agradecio y salio y nos quedamos solos mi marido y yo.
De esta ves todo fue diferente, entre nosottros pero no para mal sino que nos acerco
mas,
Esa fue la primera ves y de ahi han seguido mas y mas, pero no termino todo ahi lo
de la fantasia de mi esposo, ahora tuvo otra diferente y les contare en la siguiente
ves.

LA FANTASIA DE MI ESPOSO MI MEJOR INFIDELIDAD


Mi nombre es Aracely tengo 24 años, soy de estatura mediana, morena, muy
piernuda, nalgona y de muy buenos senos, además soy muy guapa. Hace ya casi
2 años que estoy con mi pareja, Antonio quien tiene 26 años. Mi mundo de
sexualidad experimental comenzó gracias a sus fantasías eróticas.
Hace ya tiempo, cuando estamos teniendo relaciones, él siempre habla de sus
fantasías, las repite tanto que ya se me hacían realidad, las introducía en mi cabeza
y éstas acababan convirtiéndose en una obsesión para mí. Una de ellas, era verme
teniendo relaciones con otro hombre, su favorita y la que más repetía y todo me lo
dice al oído mientras follamos, lo cual hacía que todas mis sensaciones se
multiplicasen.
Aproximándonos al día de San Valentín me preparó una noche de sexo fenomenal.
Inicio con unos suaves besos, caricias, lengüetazos, etc. Después sacó unas copas
con vino e hizo que me las bebiera, unas saboreándolas, las otras con la finalidad
de embriagarme rápido. Me llevó al cuarto donde está la computadora y nos
pusimos a ver unos videos pornos donde el esposo grababa a su esposa teniendo
relaciones con otro(s). Al verlos tocaba todo mi cuerpo, yo estaba muy caliente y me
decía al oído: mira mi amor como se la mamás, como te come y te lame, como te la
mete, como se viene en ti, cosa que me prendía aun más y más hasta que sentí
como entraron sus dedos en mí. Hizo que me tomara botella y media de vino y le
dije que ya no podía tomar más pues estaba muy mareada. Cuando le dije eso me
llevo a la cama empezó a cuestionarme sobre los hombres que conozco, sobre
quienes se me hacen guapos y con quienes me gustaría tener relaciones.
Al principio me daba pena contarle pero me insistía tanto que no pude contenerme
y le conté de un compañero de mi salón: Hans (el Boss), es alto, moreno claro, de
muy buen cuerpo, nalgas gorditas, es muy inteligente y me fascina verlo con ropa
pegadita. Le mencione que con él, aunque estuviera casada, me fascinaría tenerlo
dentro de mí, probar su pene, que se coma mi vagina, mis senos, que meta sus
dedos dentro de mí, que me penetre por todos lados, lo que lo excito más y me
pregunto que si lo que decía era verdad a lo que respondí ¡sí Hans!. Le platique a
mi esposo que yo también le gustaba (o por lo menos eso creo) porque siempre
está al pendiente de mi en la escuela, me lleva en su coche a las clínicas, me aparta
lugar, etc. Al estarle diciendo eso, mi esposo me pidió provocarlo y yo le pregunte
que si en verdad quería que hiciera eso y él me respondió que sí eyaculando dentro
de mí.
Yo no hice caso a lo que mi esposo me había pedido, la verdad no lo recordaba. En
otra noche de pasión me pregunto que si ya había empezado y le conteste que no,
no me dijo más, fantaseamos (que para ser sincera me fascina) y tuvimos una noche
de sexo fenomenal.
A la mañana siguiente le conté a mi esposo que habría un congreso en Mazatlán, y
que me gustaría ir, le dije quienes irán de mi salón, pero que ocupaba que me
patrocinara el viaje. No terminaba de contarle quienes irían de mi salón cuando se
le dibujo una sonrisa de oreja a oreja al escuchar el nombre de Hans y me dijo: te
doy todo lo que quieras y necesites para ese congreso pero con una condición, que
empieces a coquetear con tu amigo Hans y se follen en Mazatlán, a lo que conteste:
¡es un trato! Aproveche cada momento en que me veía con Hans para coquetearle,
le mandaba miraditas, mensajes por el celular diciéndole lo bueno que se veía y él
me correspondía.
A un día del congreso tuvimos un examen de cardiología y quedamos de estudiar
un grupo de amigos en mi casa; en el grupo, Hans por supuesto. Ese día por la
tarde comenzó a llover por lo que cancelaron la tarde de estudio y yo estaba vestida
con una pijama de short muy cortita. Pero resulta que llego Hans, se veía genial con
su short y camiseta desmangada mojada, pegadita a su cuerpo y le resaltaban sus
grandes músculos de los brazos. Me sentía un poco nerviosa por todo lo que había
estado pasando entre nosotros, la casa sola, además que ya no lo esperaba, sin
embargo nos pusimos a estudiar. En algunas cosas que no entendía se ponía detrás
de mí para explicarme, se acercaba demás, rosaba su rostro con el mío y comencé
a respirar más rápido de lo normal, se dio cuenta y me pregunto: ¿te pasa algo? No
le pude contestar y me dijo te voy a revisar, tomo su estetoscopio y empezó a
explorarme, sin querer al moverme, mi mano rozo su short justo donde se guarda
su pene y lo note duro. No dijimos nada me volteo, me agarro las manos y me dio
un gran beso, que me hizo me temblar. Me puse de pie y solo lo mire, él sonrío y
me abalance a su cuerpo, me tomo de las piernas, me levanto y me recargo a la
pared, a tal altura que su paquete quedo pegadito al mío donde comenzamos a
besarnos como locos, yo tocaba su espalda, sus brazos, y Hans besaba mi cuello,
y parte del escoté de mi pijama. Nos tumbamos en un sillón de la sala y empezó a
tocar mi cuerpo con sus grandes manos, toco mis senos y los saco de mi bra, los
empezó a besar con ternura lo que provoco que me mojara tanto que se me
traspasaba la humedad, yo agarraba sus nalgas y las apretaba, después metió su
mano por debajo de mi pijama y empezó a acariciar mi clítoris lo que me prendió
más, bajo uno de sus dedos y al tocar la entrada de mi vagina pegue un grito fuerte
que hizo que tuviera un orgasmo e involuntariamente junte mis piernas y su dedo
grande me penetro. Lo abrace fuerte y él me dijo que me quería mucho, nos
miramos a los ojos y nos besamos profundamente. En eso estábamos cuando se
escucha el ruido del carro en el que venía mi esposo y rápidamente nos levantamos,
Hans se fue a la mesa a seguir “estudiando” y yo me metí al baño para cambiarme
de ropa. Al salir salude a mi esposo y le dije en el oído, él es Hans y sonrío.
Llego el tan esperado congreso, tuvimos las primeras conferencias y al término de
ellas organizaron una fiesta a la que claro asistí porque ahí estaría mi Boss. Así que
me puse un vestido negro con adornos blancos, muy cortito con encaje trasparente
en el escoté, unas mayas de figuras a media pierna, una tanguita súper sexy que
mi esposo me compro para este viaje y unas zapatillas. Hans pasó por mí en el hotel
y al verme su expresión fue, mamacita, quien fuera vestido para tener tu cuerpo así
de pagadito, y yo le conteste, pues has tu luchita y quien quite te conviertas en mas
que un solo vestido.
En la fiesta bailamos de todo y aprovechábamos cada momento para darnos
nuestros repegones. De repente me sentí mareada por tantas bebidas que había
ingerido y Hans no perdió tiempo, se me acerco por la espalda, me abrazo por la
cintura besándome en el cuello y me dijo: te deseo Aracely, Aracelyyy, yo sonreí,
hice mis brazos hacia atrás tomándolo de su cabeza y empecé a moverme tratando
de sentir su paquete y la sensación fue fabulosa. Salimos del antro como a las 2:30
a.m. y me acompaño hasta mi cuarto. Después de abrir la puerta me volteo para
darle las gracias y me empuja hacia adentro, cierra la puerta, pone el seguro y me
dice: terminemos lo de ayer y le conteste, porque quieres terminarlo si podemos
empezarlo.
Me tomo la cara con sus dos grandes manos y comenzó a besarme y a decirme:
hace mucho que me gustas, quise llegarte cuando te cambiaste de salón pero como
te vi con anillo de compromiso no me acerque a ti, para respetar. ¿Eres Feliz
Aracely?, me pregunto y yo le respondí: sí muy feliz. Y me dijo ¿por qué haces esto
entonces? por amor respondí. ¿Me amas? cuestionó Hans. Y le dije: Por amor a mi
esposo. Gracias a él y al amor que le tengo es que estamos disfrutando de esta
noche y de las próximas que podamos disfrutar. Hans dice: Entonces ¿él sabe? Sí,
él sabe que estaremos juntos esta noche, porque yo también te deseo Hans, en
varias ocasiones en las que he estado follando con mi esposo he pensado en cómo
me besarías, cómo me tocarías, a qué sabrá tu pene, cómo te comerías mi vagina,
cómo me penetrarías por todos lados. Entonces sentí un fuerte apretón y me dice
Hans: pues esta noche Aracely lo descubriremos.
Bajo lentamente el cierre de mi vestido, sin quitármelo, beso toda mi espalda; mi
tanga ya estaba muy húmeda por las sensaciones que tenía. Puso sus brazos sobre
mis hombros y me quito el vestido de una forma lenta que me ponía mas cachonda,
me acaricio los brazos y las piernas besándolas hasta llegar a mis nalgas las cuales
mordía y lamía con suavidad, me desabrocho mi “bra” lo retiro y tomo mis senos
grandes acariciándolos alrededor de mis pezones sin tocarlos mientras besaba mi
cuello, después me cogió entre sus fuertes brazos y me recostó boca arriba sobre
la cama, se quito su camisa y vi ahora desnudos sus hermosos pectorales, su
abdomen, sus brazos fuertes, los cuales empecé a besar y acariciar mientras el
besaba mis senos, con sus gruesos labios, se paso al área de mis piernas, las alzo
y las reposo sobre sus hombros, con sus manos me retiro la tanga, se bajo y empezó
besar mi clítoris, mi vagina, dándome el beso negro en varias ocasiones; me sentía
en el paraíso. Se puso de pie para despojarse de la ropa que le quedaba y fue
realmente sorprendente el verle el pene blanquito y muy grande. Di un salto y me
hinque a sus pies para mamárselo. Lo introduje en mi boca y Hans grito de placer.
Lo tumbe a la cama, le quite la ropa que no deje que se sacara y bese sus fuertes
piernas hasta llegar a su pene, empecé por acariciárselo y le dije: Esta noche mi
Boss yo soy toda para ti y tú todo para mí. Tome con mis labios sus gordos testículos
y los intercambiaba por mi boca con mi lengua mientras le acariciaba el pene con
mis manos, después lamí su largo pene hasta llegar a su glande besándolo y
recorriéndolo con mi lengua. Me subí a la cama y me puse arriba de él para que él
también se deleitara con mi vagina. Hicimos un grandioso 69. Estábamos en eso
cuando Hans mete uno de sus dedos en mi colita y eso me prendió tanto que hizo
que introdujera todo su pene en mi boca lo que a él también lo prendió y se vino
dentro ella. Sentí fuertes chorros de líquidos calientitos pasar por mi garganta y yo
se le exprimía como si no quisiera que se acabase.
Me hizo para un lado para incorporarse, y empezaron de nuevo, los besos, las
caricias, y entre la calentura me dijo Hans de nuevo: te quiero Aracely, pero no solo
de una noche, y yo le conteste: amo a mi esposo, pero yo tampoco quiero que seas
solo de una noche mi Boss, te prometo que habrá más. Me movió de tal modo que
me puso en cuatro patas, me abrió poquito y empezó a mamarme la vagina, y de
repente sentí que algo grueso, caliente y largo entraba en mí, lo que hizo que
apretará las sabanas y diera un fuerte grito: ¡Haaaaaaaaaaaaaaaaans!!!. Él lo hacía
lento y rápido, moviéndose muy bien y yo le decía: no pares mi Boss, dale más, dale
más Boss!!!. Me levanto y me tomo entre sus brazos y así, suspendida en el aire me
penetro y yo me movía rápido tratando de que me penetrará lo más profundo
posible. Tumbados de nuevo en la cama las grandes bolas de Hans golpeaban mi
colita lo que me excito y sin pensarlo exclame: por todos lados mi Boss. Hans
entendió claramente y sacó su pene de mi vagina, mojo uno de sus dedos y lo
introdujo en mi culito, lo movía en círculos rápidos con la finalidad de dilatarlo bien,
lo saco, mojo su dedo de nuevo pero acompañado de otro y los metió, yo solo le
decía más mi Hans!!!, maaaaaaaaaas mi Hans!! aaaaaaaaaaaah!!!. Acerco su pene
a mi boca y se lo mame, lo retiro y me dijo: lista mi amor, para viajar a un mundo
que no has conocido? Asentí con la cabeza y la empezó a meter muy despacio, solo
sentía como se separaban mis glúteos para dar cabida a semejante majestad. Ya
con su pene adentro el espero acariciándome y diciéndome que era muy hermosa,
que le gustaban mis piernas, mis pechos, mis ojos, mi voz, mi piel y que le gusta
verme con el uniforme pues lo excito mucho, eso hizo que comenzara a moverme y
fue la señal para que Hans empezará con el vaivén. Los sonidos que se desprendían
de tal acción eran fantásticos, Me volví loca al sentirlo dentro de mí. Él me repetía
mucho: te amo Aracely, te amo mi amor, quiero estar por siempre contigo. Me lo
repitió tanto que le conteste: yo también Hans. Me sacó su paquetote, me sentó
arriba de él y lo volvió a meter por mi colita. Mientras lo metía y sacaba acariciaba
mi clítoris y mis pechos, yo sentía no tener fuerzas, parecía que me iba a
desvanecer. Gemía muy fuerte y gritaba su nombre ¡¡¡Hans!!! ¡¡¡Hans!!!
¡¡¡HAAAAAAAAAAAAANSSSS!!!, sin importarme que mis compañeros en otros
cuartos se dieran cuenta de que me estaba follando Hans. Me saco su pene y fue a
lavárselo, al regresar lo puso en mi boca y se lo mame hasta ponerlo ahora más
duro de lo que ya lo había visto. Se recostó sobre la cama y yo lo monte mirándolo
de frente, me agarro los senos y los empezó a apretar y a pellizcar suavemente,
metí su pene en mi vagina: aaaaaaaaaaaah Hans!!!!!!!!!, dale más duro, más
profundo mi Boss, máaaaas, maaaaaaaaaaasss!!! Al escuchar eso nos venimos los
dos, yo sentí como su semen caliente salía de él y chocaba dentro de mí. Al sacar
su pene me fui sobre él y se lo chupe hasta dejarlo seco. Nos quedamos recostados,
el me acariciaba, me besaba, jugaba con mi cabello y me repetía te amo Aracely,
hasta que nos quedamos dormidos.
Hace dos días que regresamos del congreso y extraño a mi Boss. Extraño tenerlo
dentro de mí y ser suya. Ya planeamos vernos este fin de semana en un motel de
Culiacán, pero ahora mi esposo Antonio nos acompañara; dice que como
espectador, a ver si lo convenzo de participar.

MI ESPOSO ME ENTREGO A MI EX-NOVIO

Por Silvia

Como suele ocurrir en muchas parejas, después de algunos años de matrimonio,


mientras teníamos relaciones íntimas, mi esposo dejaba volar su imaginación
expresándome cada vez con mayor audacia su deseo hacia otras mujeres,
confesándome cuanto le gustaba esta o aquella, o cuán incitante le parecia el
cuerpo de aquella despampanante rubia que habiamos visto en la calle o de la
sensual morena que habíamos conocido en la fiesta de dias anteriores. Al principio
me molestó y hasta me dolieron sus descaradas confesiones, pues, amo a mi
esposo y creo que mis celos estaban justificados, pero poco a poco fui
comprendiendo la necesidad de modificar mi actitud si deseaba conservarlo,
entendiendo que era hombre y no podía pretender ser la única mujer a quién vea
con deseo. De esa manera fui convirtiéndome en cómplice de sus deseos, llegando
inclusive a ayudarle con la imaginación en la búsqueda de alguien con quién echar
a volar su fantasia. En nuestras charlas de alcoba le daba mi opinión acerca de
alguna sensual mujer que habiamos visto, aprobaba su preferencia por alguna, e
indagaba acerca del deseo sexual que habria despertado en él alguna determinada
parte del cuerpo de aquellas a las dirigía su mirada. Inclusive, como forma de
aumentar su excitación, durante nuestras sesiones de amor, le estimulaba a
imaginar que hacia el amor con tal o cuál persona que sabía que le gustaba.

Hasta llegué en alguna oportunidad a propiciar un acercamiento real con una bella
morena, amiga mía, de senos turgentes y labios gruesos y sensuales, a quién me
dijo que deseaba y a la que acepté, admitiendo que se trataba de una mujer
hermosa. Es así que en una fiesta en la que coincidimos con ella y su esposo, llevé
a mi marido al lado de ella, arreglándome de alguna forma para lograr que durante
la cena se siente a su lado y después, durante el baile que siguió, animé a mi esposo
a sacarla a bailar, mientras yo distraía a su marido, conversando con él. Esa noche,
comprobé que mis celos de antes se estaban convirtiendo en algo diferente, pues,
me sentí excitada al ver a mi esposo bailando tan pegado a aquella bella mujer,
mientras que yo desplegaba todos mis encantos para que su marido no la eche de
menos y permanezca a mi lado.

Ya de retorno a nuestro hogar, mientras haciamos el amor, y yo le preguntaba qué


habia sentido al tener a aquella atractiva morena entre sus brazos y si se habia
animado a insinuarle algo más atrevido que simplemente bailar, fui sorprendida
cuando mi esposo me respondió preguntándome a su vez qué sentí yo al estar al
lado de otro hombre, con quién él habia observado que yo parecía pasar un
momento agradable, pues, me dijo que habia visto expresada mucha satisfacción
en mi rostro, viéndome conversar y bailar con él. No pude menos que admitir que
habia pasado un buen momento con el marido de mi amiga, aunque entonces sin
ninguna intensión de coquetear con él, y menos aún con propósito sexual alguno.

Desde aquella vez los papeles se invirtieron, pues, fue mi esposo quién en nuestros
momentos de intimidad se mostraba curioso de saber si me atraía la observación
de algún hombre, o si yo sentía deseos de tener una aventura o ser amada por
alguien que no sea él. Me llegó a preguntar inclusive qué sentía durante los breves
noviazgos de mi vida anterior a nuestro matrimonio, pues, aunque nunca fui una
mujer de vida ligera, él sabía que antes de conocerle tuve algunos amorios de
estudiante durante mi juventud, si bien es cierto que solo con él perdí mi virginidad.

Su insistente curiosidad fue tornardose cada vez mayor, provocando en mí primero


una reacción de molestia, y luego de desconcierto, pues, no llegaba a comprender
que mi esposo tratase de insinuar que yo deseara a alguien que no sea él. Así se lo
manifesté, recibiendo una respuesta con la que enfatizaba su amor hacia mi,
manifestándome que toda otra insinuación, de ninguna manera interferiría nuestro
matrimonio, pero admitiendo que tenía la fantasia de saber que yo tenía una relación
amorosa con otro hombre, siendo usada por él como su amante, con su
consentimiento y solo bajo condición de que le cuente en detalle nuesros encuentros
amorosos y la forma en la que era poseída por él. Concluyó diciéndome que su
mayor fantasía era aguardarme en casa después que yo haya tenido una sesión de
amor con mi amante, recibiéndome para comprobar, mientras me besaba, que tenía
la boca impregnada de su sabor, y mi sexo inundado de su semen.

Tamaña confesión me dejó aturdida y confusa. Casi con lágrimas en los ojos, le
contesté que jamás debía esperar de mí tal cosa. El calló y no dijo nada mas,
aunque al rato terminó por disculparse pidiéndome que olvide lo que me dijo.

Desde entonces pasó algún tiempo, durante el cuál no pude menos que notar que
disminuyó el calor de nuestras relaciones íntimas, las que fueron distanciándose
cada vez más, como si algo impidiera la espontaneidad y pasión de antes. Al cabo
de casi dos meses, reflexionando en el asunto, debí admitir que la causa de la
pérdida de nuestra pasión fue mi negativa rotunda a aceptar, por lo menos de
palabra, la fantasia de mi esposo, trazándome entonces el plan de volver al tema y
hasta admitir una probable relación con otros hombres, aunque solo como una
fantasía sin propósito alguno de convertirla en realidad. Fue así que comencé
nuevamente a incitar a mi marido a la contemplación de otras mujeres,
preguntándole a cuál preferiría para una loca aventura de amor, o diciéndole que en
mi opinión con tal o cuál sería mejor, pues, tenia senos grandes con pezones
sobresalientes, lindas piernas o una boca sensual con la que mi marido gozaría
mejor tanto de sus besos como del sexo oral que pudiera proporcionarle aquella
amante imaginaria. De esa manera, poco a poco, nuestra vida sexual retornó a su
normalidad, y, tal como lo esperaba, en algun momento también él comenzó
nuevamente a preguntarme con quién me gustaría tener una aventura, curioso de
saber si aquel fulano o mengano que vimos me parecia o no atractivo.

Como yo no deseaba que se repitiera nuestro distanciamiento, aún a pesar mío,


comencé a responder afirmativamente a sus insinuaciones. La primera vez que me
preguntó si me gustaría tener una aventura con otro hombre, y le contesté que sí,
él se quedó callado, pero noté que se excitó mucho, pues, con voz casi jadeante
continuó su interrogatorio, preguntando cómo lo haría, con quién lo haría, etc. para
luego hacerme el amor demostrando mas pasión que nunca, correspondiendo yo
de la misma manera. Tal vez viéndolo tan excitado, yo estaba en ese instante
igualmente llena de pasión, por lo que perdiendo mis escrúpulos y olvidando mis
principios cuando ya casi proxima a mi orgasmo, él me preguntó si realmente
deseaba ser poseída y buscar el placer con otro hombre, le respondí que sí,
llegando de inmediato a gozar de un intenso orgasmo, tan largamente como pocas
veces lo habia hecho antes, al mismo tiempo que también mi marido alcanzaba su
propio, largo y ardiente gozo que terminó por inundar mi intimidad con el abundante
y espeso semen que eyaculó.

Después, mientras reposábamos, ya mas calmados, él volvió al tema, diciendome


que lo ocurrido le habia comprobado que también yo sentía excitación al imaginarme
haciendo el amor con otro. No quise o tal vez no pude discutir sus argumentos, por
lo que decidí asentir ante sus afirmaciones. El concluyó la charla y se dio la vuelta
quedando profundamente dormido, mientras que yo permanecía despierta,
pensando en lo ocurrido y en lo que vendría después. Acudieron entonces muchos
pensamientos a mi cabeza, llegué a imaginar que conseguía un amante y que hacia
el amor con él, en mi imaginación indagué mis preferencias, decidiendo que elegiría
tener una aventura con una persona con la experiencia necesaria para hacerme
gozar, y al que solo después de satisfacerme le brindaría yo mi cuerpo para su
placer. Pensando en ello, inconscientemente llevé mis manos a mi sexo, notando
que mi clítoris estaba hinchado y mi vagina permanecia húmeda y dilatada,
expeliendo mis ardientes flujos, pues, me encontraba nuevamente muy excitada a
pesar a haber hecho recientemente el amor. Entonces me acaricié hasta gozar
largamente de un nuevo e intenso orgasmo que procuré disimular para no despertar
a mi marido. Cuando concluí, debí reconocer que la idea de tener una aventura con
otro hombre me atraía, y decidí ya sin titubeo alguno, aceptar las proposiciones que
en ese sentido me hacia mi marido.

Como es usual en estos casos, en nuestras conversaciones posteriores, al


confesarle a mi esposo mi consentimiento para buscar un amante y tener con él una
aventura, surgía la duda de no saber a quién elegiría para ello, o de no saber cómo
lograr aquello que ya era un propósito aceptado por mi ante la insistencia de mi
marido. Ninguna de nuestras amistades era considerada apropiada para este fin,
pues, a pesar de estar ambos de acuerdo en que iría hasta el final entregándome
sexualmente a alguien, yo conservaba aún ciertos escrúpulos y no deseaba
involucrarme con nadie conocido que pudiera juzgarme mal o considerarme una
simple ramera. De este modo, en la búsqueda del candidato apropiado, mi marido
me preguntó en algun momento si me hubiera gustado llegar a tener sexo con uno
de mis antíguos novios, y yo me atreví a decir que hubo uno en particular a quién
me habria gustado entregarme y gozar con él. Su nombre era Jorge, y desde que
se lo dije a mi esposo, él no dejó de acosarme con preguntas acerca de cómo era
él y cómo fue nuestro noviazgo. Me preguntaba cómo besaba y si alguna vez intentó
propasarse; queria saber qué sentía yo al ser abrazada y acariciada por él, y terminó
preguntándome si me habría gustado hacer el amor con ese antíguo novio.
Sorprendiéndome a mí misma, le respondí que sí, descubriendo que tal
pensamiento me excitaba, por lo que terminabamos haciendo el amor con su
presencia imaginaria entre ambos. Inclusive en una ocasión, mientras mi esposo mi
penetraba, llegué a musitar su nombre, repitiendo Jorge, Jorge, Jorge ..... mientras
gozaba estremeciéndome de placer al imaginar, incitada por mi esposo, que era él
quién me poseía, mientras yo alcanzaba no solo uno sino varios orgasmos
sucesivos.

Pasó de esta manera un tiempo, hasta que al cabo de algunos meses, por una
extraña casualidad, en una reunión de amigas, encontré despues de varios años a
una señora que era tía de Jorge, aquel ex-novio al que hacia tantos años que no
veía. No pude resistir la tentación de preguntarle por él, sorprendiéndome al
escuchar como respuesta que pronto llegaría a la ciudad donde yo vivía. Fui aún
más audaz, al decirle a aquella señora que me gustaría verlo. No sé si ella adivinó
mi propósito o simplemente consideró mis palabras como una mera expresión de
cortesía a alguien que ella sabía que tuvo un romance conmigo, pero el caso es que
me prometió avisarme cuando su sobrino llegue, ofreciéndose para contactarme
con él. Acepté, nerviosa, su proposición, pues, intuía que se presentaba la ocasión
a la que mi marido me había empujado y que en el fondo yo reconocía que me
resultaba incitante.

Cuando le conté a mi esposo lo sucedido, él se mostró entusiasmado con la idea, y


desde entonces empezó a trazar planes para lo que consideraba que era una
ocasión que no debería desperdiciarse. Ideaba la forma en que se produciria
nuestro encuentro. Al escucharlo, sentía mi cuerpo estremecerse, mientras mi
intimidad se humedecía, cosa que mi marido comprobaba, pues, al tocar mi sexo
mojado, no dejaba de hacerme notar que él tenía razón y que sabía que yo gozaría
al tener una aventura con mi ex-novio.

Al cabo de unos quince días, recibí una llamada telefónica de aquella señora, tía de
Jorge. Me dijo que su sobrino había llegado a la ciudad en un viaje de negocios.
También me contó que le había hablado de mí y que él se habia mostrado
entusiasmado con la idea de verme. Terminó dandome a conocer el nombre del
Hotel donde estaba hospedado, sugiriéndome que lo llame yo, pues, no habia
querido ser indiscreta proporcionándole mi número telefónico. Recibí la noticia muy
nerviosa, pero llena de excitación, dándosela a conocer a mi marido, que se mostró
mas entusiasmado que nunca, animándome a llamar a Jorge a su Hotel, para
saludarlo. Después de titubear bastante, aún muy nerviosa, llamé al Hotel y
pregunté por él, identificándome con mi nombre y calificándome como una amiga
deseosa de saludarlo. Cuando la telefonista me pasó la llamada y escuché su voz,
yo casi no podía hablar, por lo que balbuceando, sólo pude decirle: "Hola Jorge, soy
Silvia, deseaba saludarte, pues, por tu tía me enteré que estabas aquí". El me
contestó con una voz tan amable que me tranquilizó, empezando a decirme que se
encontraba encantado de saber de mí despues de tantos años. Preguntó muchas
cosas que apenas pude responder y terminó por decirme que le gustaría verme y
conversar personalmente conmigo. Mi esposo estaba a mi lado escuchando nuestra
conversación, y con la mirada y sus gestos me indicó que debía aceptar su
invitación, por lo que concluí diciéndole que también a mi me agradaría saludarle
personalmente, preguntándole cómo haríamos para encontrarnos. El, respondió
muy seguro de sí mismo, que creía que lo mejor sería que vaya a su Hotel donde
habia un excelente restaurant en el que podríamos cenar y conversar de los viejos
tiempos. Acepté y convenimos en encontrarnos a una hora determinada de esa
misma noche, después que él concluyera sus asuntos y esté libre.

De esa manera resultó concertada nuestra cita y colgué el teléfono, notando que
mis manos transpiraban y mi pecho estaba muy agitado, no solo de nerviosismo,
sino de una incipiente excitación que recorría todo mi cuerpo. Mi esposo no cabia
de contento, sonriendo pícaramente, me dijo que debía tranquilizarme,
proponiéndome tomar un baño relajante y tomarme todo el resto de la tarde para
arreglarme convenientemente y lucir seductora para la cita que esa noche tenia con
Jorge. Es más, se ofreció a ayudarme en mi arreglo personal y en la elección de la
ropa que debia lucir.

De ese modo, cuando pasadas unas horas se acercaba el momento de acudir al


encuentro de mi ex-novio, después de estar bañada y perfumada, él me ayudó en
la elección de mi ropa interior, escogiendo una de color azul y tela suave y sensual
al tacto, eligiendo despues un vestido seductor del mismo tono, que aunque no era
escandolasamente escotado, dejaba ver insinuantemente el nacimiento de mis
senos y dibujaba mi cuerpo de manera atrayente. Me ayudó a maquillarme
levemente, indicándome que debía lucir bella, pero sin exageración alguna. No dejó
de hablar durante toda esa operación, indicándome la forma en que debía
comportarme, terminando en decirme que no aceptaría que yo deje pasar esa
ocasión adoptando actitudes de rechazo a sus insinuaciones, pues, estaba
convencido, dijo, que Jorge me había citado a su Hotel con el propósito no solo de
verme sino de hacerme suya.

Llegado el momento, fue mi esposo quién me condujo en su auto al lugar de la cita


con mi ex-novio, acercándome al Hotel y diciéndome que aguardaría hasta estar
convencido de mi ingreso. De esa manera me acerqué a la Administración,
preguntando por Jorge y pidiendo que le comuniquen que yo estaba aguardándole
en el vestíbulo. Aún continuaba nerviosa, pero excitada, pues, sabia que aquella
cita tenía por propósito entregarme a otro hombre y tener una aventura sexual con
alguien que no era mi esposo. Se trataba de un caso de infidelidad consentida, y yo
estaba decidida a entregarme a Jorge, ya deseaba ser acariciada por sus manos
recorriendo mi cuerpo y palpando mis senos, planeaba en mi mente la forma en que
sería poseída, deseaba ser penetrada por un miembro diferente al de mi esposo y
ser usada de diversas maneras para despues retornar a mi casa, llena de su semen
por delante y por atrás, y con la boca aún impregnada de sus flujos, pues, eso me
habia dicho que deseaba mi esposo, y ahora eso lo que yo deseaba y mantenia mi
sexo húmedo y abierto, mis pezones duros y mi cuerpo ardiendo de excitación.

EL ESTRENO DE MI ESPOSA

Lo que les voy a contar es el relato de cómo mi esposa fue "estrenada" por otro
hombre.

Desde hacía tiempo tenía la fantasía, cada vez más fuerte, de verla follada y que
sintiera placer con otras pollas y que otros hombres sintieran el placer de tenerla.

No me atrevía a contarle nada pensando en que podría enfadarse, pero las


continuas visitas a páginas de parejas, cornudos etc. y las conversaciones que
mantenía con distintos individuos me fueron calentando cada vez más.

Empecé a sacarle fotos desnuda que mostraba a otros hombres y con las cuales
algunos se masturbaban diciéndome cosas de ella y como se corrían con ella. He
de confesar que aquello me ponía a mil.

Un buen día me decidí a sondearla y mientras le mostraba paginas con fotos de


locales liberales y de anuncios de parejas me atreví a sugerirle que me gustaría ir
con ella a un lugar de esos y probar las salas oscuras etc. Ella me pregunto si no
me importaría que lo hiciera con otros, a lo que yo le dije que no me importaría que
tuviera sexo con otro.

Mi sorpresa fue que aceptó ir un día a probar.

A través de Internet contacté con distintos hombres hasta dar con un candidato
adecuado. Era un chico de 30 años, con experiencia, con lugar de residencia
cercano, y lo mejor de todo, bien dotado. Pude comprobar que su miembro era
grande (según él unos 23 cms.) y además grueso. Perfecto.

Le estuve enseñando fotos de ella y le gustó muchísimo, decía que nada más
mirarla se le ponía dura y que estaba deseando follarla. Trazamos un plan para
quedar el día que fuéramos a ir al local y que coincidiésemos allí como si no
estuviera preparado, además de darle algunos consejos sobre cosas que a ella la
ponen caliente que le hagan.

Por fín llegó el día y ella se puso muy sexy. Ella tiene 40 años, media melena de
color castaño, unos pechos muy bonitos y algo puntiagudos con pezones grandes
y unas caderas anchas que uffff. Ese día se depiló el vello negro de su sexo hasta
dejarse solamente una fina tirita de vellitos muy cortos. Se puso la mejor lencería
que tenía y un vestido negro, muy ligero y algo cortito, con aberturas al lado de los
muslos.

Ya en el local, mientras tomábamos algo en la barra se acercó mi contacto y


empezamos a charlar y tomar copas. Mi esposa con más de dos ya se pone muy
alegre.

El preguntó de ir a bailar a lo que yo le contesté que no, pero la animé a ella a que
fuera con él.

Con la música ligera ella se puso delante de él con las piernas abiertas y algo
flexionadas, moviendo sus caderas a un lado y otro. Yo observaba y pensaba en el
calentón que estaría sufriendo él. Al poco él se arrimó a ella introdujo una pierna
entre las de ella de modo que con el baile la pierna de cada uno frotaba el sexo del
otro. Aquello empezaba bien. Cuando más tarde pasaron a la música lenta el la
cogió por la cintura pegando su pelvis contra la de ella y ella le echo los brazos
alrededor del cuello. Así bailando observé que el frotaba su paquete abultado contra
ella mientras empezó a decirle cosas al oído y pasarle la lengua por el cuello y sus
labios mientras con una mano le apretaba el culo y con la otra una teta. Después
separó su mano y tomando la de ella la puso sobre el bulto de su miembro que ella
empezó a acariciar suavemente.

Cuando ambos estaban a tope nos fuimos a la zona reservada para tener sexo. Allí
la empecé a besar en la boca y a levantarle el vestido para, echándole a un lado el
tanga; meterle un dedo en su coño ya húmedo.

Cuando empezó a gemir retiré mi mano y abriéndole aun mas las piernas le hice un
gesto a Dani (así se llamaba) para que siguiera. Empezó a besar a mi esposa en la
boca, cuello y orejas mientras le acariciaba el clítoris y metía algún que otro dedo
en ella. Pronto se sacó su polla que estaba totalmente erecta y llevo una mano de
ella hacia su miembro. Mi esposa se puso a masturbarlo con deseo y estaba tan
caliente que se separó, lo tumbó y se la metió en la boca mamándosela como una
loca mientras yo desde detrás le tocaba el coño y me masturbaba.

Ella misma se desembarazó pronto de su ropa y casi arrancó la de él de caliente


que estaba y agarrándole la polla se la introdujo un poco en su coño para después
dejarse caer sobre toda ella, clavándosela bien dentro.
La cabalgada que le dio fue espectacular, dando saltos sobre su polla, con sus tetas
bailándole y gritando de placer:

- Mmmmmmmm, que bien follaaasss!!!! Que pedazo de polla me estàs metiendo


cabrón! Debía estar pasándolo muy bien porque nunca antes se había comportado
así.

El le decía te gusta putita? Follas de maravilla y tu coño es tan calido que tengo
ganas de llenarlo de leche.

Mientras, yo al lado me estaba haciendo la mejor paja de mi vida. Cuando ella


empezó a decir que se iba a correr pedí que él se la sacara para metérsela yo
mientras ella se corría y que en pleno orgasmo se la mamara a Dani. Me excitaba
mucho la idea de que alguien se corriera en su boca ya que a mi no me dejaba
hacerlo y siempre se la sacaba cuando eyaculaba. Previamente le había pedido a
Dani que no avisara cuando se fuera a correr de manera que al menos el primer
chorreón le entrara.

Mi mujer en pleno éxtasis de orgasmo le chupaba y masturbaba su polla


rápidamente mientras yo desde debajo no perdía detalle. Así pude observar como
llegó el gran momento, como cerró los ojos inclinando su cabeza hacia el techo,
emitió un AAAHHHGGG! y le sacudió una descarga de semen caliente y espeso en
su boca. Ella durante una fracción de segundo hizo gesto como de sacársela, pero
para mi sorpresa siguió chupándosela mientras recibía una descarga tras otra de
semen que le llenaba la boca, le salía por los labios y alguna gota que otra caía
sobre mi.

Ahí ya no pude más y ante tanto placer descargué toda mi leche dejándole bien
lleno el coño.

Es la relación sexual más placentera que he tenido y por fin pude ver cumplido mi
sueño de que ella y otros sintieran el mismo placer.
Mi sueño probrar otra verga extrañan

Hola Tengo 23 años, dos hijos y un esposo bueno y amoroso, me siento feliz en mi
matrimonio, mi idea era serle fiel a mi esposo toda mi vida independientemente de
si el lo era o no, pero con el tiempo me di cuenta de infidelidades de mis vecinas,
ademas con los relatos de mis amigas, y el hecho de que un dia le ayude a una
amiga a verse con otro hombre a escondidas, lo cual hice sin querer fueron
despertando en mi curiosidad, a la que se fue agregando poco a poco el morbo.
Nunca me imagine combertirme en adultera, me empezo a dar curiosidas de que se
sentiria una verga diferente a la de mi esposo, la idea la fui digiriendo poco a poco,
aun asi era solo fantasia nunca pense hacerlo pero un dia....
Tuve que buscar un abogado para cobrar un dinero que me debia una persona, el
abogado se encargo de arreglar el problema y todo termino muy bien, pero cuando
ya me tenia que despedir de el por que estabamos cerrando el trato sin darme
cuenta el abogado me estaba viendo los senos, yo no me habia dado cuenta que
sin querer se los estaba enseñando ya que me habia agachado un poco levante mi
vista y sus ojos estaban clavados ahi, asi que lo mire a los ojos y el tambien el era
guapo y tenia unos ojos coquetos y encantadores asi que no pude evitar sonreir y
el tambien. (juro que no erea mi intención pero dije entre mi (que puta me vi)
despues me despedi de el y el se despidio de mi normal por que era un caballero.
pero al levantarse pude ver una especia de lanza en su zona del cierre del pantalon.
Me fui de ahi y apartir de ahi ya no pude dejar de pensar en el abogado, me
imaginaba que me besaba los pechos y me repegaba su verga, asi estuve mucho
tiempo piense y piense queria alejar de mi esos pensamientos, pero cuando pense
que estaba superando eso me sucedio que como al tercer dia soñe que estaba
besandole su verga. Con todas mis fantasias e inquietudes que ya traia aunado con
el abogado que en ese entonces era el unico hombre al que yo le abia zorreado en
que sea un poco, se me metio en la cabeza combertirme en toda una puta con el,
si tenia que seducirlo o por lo menos conocerlo y poco a poco ver que me decidia el
destino. (En el fondo solo pensaba en juguetear al coqueteo solamente pues amaba
a mi esposo) pero un dia me arme de valor y fui a verlo con el pretexto de que una
amiga tenia problemas legales y que me diera su telefono para darselo a ella, lo
cual era un invento mio obviamente, me fui en una minifalda siempre le sonrei aun
que con mucha timidez y nerviosismo y talvez exitación el se veia que era caballero
pero me parece que se dio cuenta de que lo que buscaba era verga, asi que me dijo
muchos piropos y me pidio mi numero de cel, disque para preguntarme por su
amiga. me marche y me despedi con un beso en la mejilla. al salir de la oficina mi
corazon latia a mil por hora y mi cabeza no concebia a que habia ido me sorprendia
a mi misma mi audacia, si cada dia me estaba deciendo mas, me estaba
combirtiendo poco a poco en una ramera y me estaba gustando.
al dia siguiente el abogado me hablo con mil pretexto de el y mios tambien nos
vimos, me subi a su carro, luego de tanta platica y coqueteos ya muy audaces de
parte del quien debe haber notado mi extacion y nerviosismo asi que paso lo que
tenia que pasar nos dimos unos besos en la boca muy sensuales por mucho tiempo
y el agasajo no se hizo esperar me apreto mis tetas hasta que se canso, eso hizo
que me volviera loca y sin poder contenerme hice lo que jamas pense y como toda
una puta mi mano fue a su encuentro con su verga, el abogado ya no aguanto mas,
quito mi mano de su miembro que yo agarraba por encima de su pantalon y dirigio
a su carro a un hotel, yo le rogaba que no, estaba bien exitada, bien mojada pero
no queria engañar a mi marido ya que no se lo merecia, llegamos al Motel yo no
queria bajar del auto asi como yo le rogaba por que nos fueramos el me insistia,
poco a poco con besos, su labia y manoseos de el en mis hermosas tetas mi
resistencia fue acabando cuando me introduje a quella habitacion el seguia el
manoseo... cuando sono mi celular, era mi suegra yo conteste aun con mi brasier
mal acomodado y un peson de fuera, me decia que a que hora llegaria ya que se
tenia que ir y mis hijos no se podian quedar solos ya que eran pequeños. le dije que
estaba con unas amigas que me esperara unos cuarenta minutos mas. (eso me dio
mucho remordimiento) el abogado al ver que colgue se fue nuevamente a mamarme
las tetas y que me dice: no sabia que fueras casada, con razon te resistias ( le Habia
inventado excusas al abogado para no acostarme con el ya que me daba pena)
pero si que te calentaste, no te preocupes solo te dare placer.) siguio mamandome
las tetas y sin dejar de hacerlo me fue desvistiendo hasta que logro meter uno de
sus dedos en mi vagina, la cual estaba super mojada y caliente, el abogado se sintio
feliz me dijo "hai mamita ya querias verga, te querias hacer puta y yo te voy a
combertir en so en mi puta, te voy a dar verga y lechita y te encantara tanto que me
pediras mas y cuando no me veas a mi querras las de otros, pues a partir de hoy la
verga estara primero para ti. no se como pero adivino todo y me sentencio el me
inicio de puta, en vez de repelar, solo hia haaaaaaaaa, haaaaaaaaa ya sin ropa el
abogado abrio mis piernas y se puso a comorme mi conchita que besos y chupadas
me estaba dando en la vagina que antes era solo de mi marido, yo dirigia su cabeza
con mi mano para animarlo a mamar mas, lamia metia sus dedos succionaba que
salieron de mi boca unas palabras que nunca me imagine"""hhhaaaaaa ya
licenciado por favor mi lic. quiero su verga demela saquela para que me la meta
quiero sentirlo todo dentro de mi , vamos lic. quiero devorar su verga con mi vagina
hhahaha hagalo ya. el abogado parecia que me obedecia y rapido se desvistio su
verga estaba mas grande que la de mi marido y sobre todo mas dura si durisima y
la enfilo pero cuando parecia que me la meteria se desvio hacia mi boca, adivine su
pensamiento y como si de iman se tratara me la lleve a mi boda, que barabara como
mame ese dia, succione fuerte, pase la lengua, le di muchos golpes con mi lengua
y mis tetas, mame y mame y nuevamente suplique,"hahaha yaaaa lic. ahora si
metemela por favor, cumple lo que dijiste combierteme ya en tu putaaaaa el
abogado saco un condon de su cartera, se lo quite y lo avente, le dije no mi lic.
quiero ser puta completa metemela y habientame tu semen en mi interior quiero
sentirme completamente tuya, el me dijo tienes razon quiero que cuando estes
diciendole a tu marido que te tardaste con tus amigas tengas adentro de tu vagina
mi semilla, asi que me coloco su miembro sin batallar ya que yo ya estaba ansiossa
con las piernas abiertas, me la metio de un solo golpe que rico yo tenia
contracciones en la vagina debido al agazajo previo y mucho liquido y el la tenia
durisima asi que que rico senti que me iba a llegar un orgasmo el cual ya tenia
mucho que no sentia uno con mi esposo asi que mi placer era mucho me volvi bien
puta si queria mas verga asi que asi con la verga dentro de mi bien agarrada debido
al perrito que lo agarro fuerte, perrito que ese dia no sabia que existia, me voltee
penetrada quedando encima de el, asi que lo cabalgue, la cama se hundia ya que
empujaba hacia bajo, no se de donde saque fuerza en las piernas para cabalgar tan
fuerte, si era yo la que estaba cojiendome al lic. el casi no podia actuar o decir
palabras ya que mi accion era clavarme fuerte, puta y putisima estaba feliz de
estarme comiendo esa verga, por haber yo provocado la situacion, el abogado el
unico movimiento que deje que hiciera es apachurrarme mis pechos y yo feliz de
estar siendo bien clavada y mis pechos apretados fuertemente que deria mis esposo
si me viera, mis piernas tal vez ya no podian mas pero mi vagina queria vergaaaaa,
hhhaaaaaa que gemidos, metemela lic. siento como me clavo yo solita sou tu
putaaaaa asi tuve tres orgasmos deliciosos hasta que el ya no pudo mas y me
avento todaa su leche espesa y caliente en mi interior cuando ya solo le salian
escasas gotas del final se sentia delicioso la forma en que su verga latia aun dentro
de mi, no queria desperdiciar ni una sola gota de leche, queria que me escurriera
en mi tanga al irme para mi casa, por suerte no quede embarazada esa vez. al
terminar no ubo en mi mas remordimiento estaba feliz, me sentia llena, sabia que
apartir de ese momento algo iba a cambiar permanentemente en mi, iba a buscar
mas seguido al abogado y que le abriria mas facilmente las piernas al primero que
me cachonderara cosa que hice mas rapido de lo que pense lo cual ya sera historia
de otro relato.la putona que estaa dormida ha despertado, a partir de ese momento
la verga y el semen se combirtieron en mi vicio.
MI ESPOSA QUIERE COGER CON OTRO HOMBRE

Hola que tal pues lo siguiente que les voy a contar es como mi esposa se dejó
manosear por un desconocido y eso la puso súper caliente.
Nos habían invitado a una boda de unos parientes de mi esposa ella llevaba puesto
un vestido largo elegante con un escote muy cachondo una tanguita sin sostén se
veía deliciosa cuando llegamos al salón de fiestas nos sentamos en una mesa de al
fondo y aun lado de nosotros unos primos de mi esposa con unos amigos de ellos
en eso note que uno no le quitaba la vista de su escote de mi mujer ella es 34c se
la comía con la mirado mi esposa se daba cuenta pero no le hacia caso después de
un rato el tipo invito a bailar a mi esposa ella ya estaba un poco mareada volteo a
verme y le dije que si cuando el tipo este estaba bailando con ella ponía su mano
en la cintura de ella y con sus dedos alcanzaba a tocarle sus nalgas eso si sin perder
detalle de las tetas de mi mujer ya que al momento de estar bailando se movían de
un lado para otro como si se quisieran salir. Pasaba el tiempo mi esposa con los
tragos mas se desinhibía el tipo continuaba sacando a bailar a mi mujer pero notaba
que bailaban mas cachondamente el tipo le repegaba su verga a mi mujer y esta le
arrimaba mas el culo yo tenia la verga bien parada cuando mi esposa se sentó a un
lado mío me acerque mas a ella y le di un beso le dije que se veía hermosa al
momento que metía mi mano por debajo de su vestido le toque la tanga y estaba
mojada sabia que se estaba calentando con el tipo este eso me prendió aun mas
estaba por tocarle las tetas cuando se acercó el tipo ese y de nuevo la invito a bailar
nuevamente pero ella dijo que no me pidió las llaves del coche para ir a sacar unas
pastillas se las di vi que salio del salón y note que el tipo salio después de ella en
seguida me levanté de mi lugar y salí hacia el estacionamiento pero con la
precaucion de no ser visto estaba oscuro vi mi coche y vi a mi esposa que estaba
empinada buscando no se que cuando veo que se le acerca el tipo por atrás y le da
un arrimon de verga a mi esposa ella su reacción es de decir hay amor que haces
nos van a ver pensando que era yo el tipo la tomo por sus enormes tetas y comenzó
masajearlas bajo una mano hacia su panocha de mi esposa le alzo el vestido y
comenzó a meterle el dedo en su vagina yo estaba escondido con la verga bien
tiesa disfrutando de los gemidos de mi mujer pero a la vez con un poco de celos
total que seguí dispuesto a ver que sucedía. Mi esposa ya estaba con una teta de
fuera gimiendo de lo cachonda que es cuando de repente voltea para darle un beso
al tipo pensando que era yo que le suelta una cachetada al tipo y le dice que que le
sucedía se acomoda su vestido y se mete corriendo al salón el tipo ese le dice que
si no le había gustado y ella lo manda a volar le dice que era una mujer casada y
que le iba a decir a su esposo cuando ella entra me busca ven la mesa pero no
estaba me meto al salón igual y me dice que donde estaba le dije que fui al baño
la veo y esta toda roja de la cara le pregunto que tiene y me dice que se siente mal
que nos vayamos le digo que si nos despedimos de todos y nos fuimos en el carro
ella iba muy callada le digo que si se siente muy mal me dice que ya se le estaba
pasando en eso le empiezo a acariciar sus piernas y le digo lo buena que esta subo
mi mano a sus tetas y las siento bien duritas sus pezones estaban igual y le digo
que por que están asi si acaso anda cachonda ella me sorprendió con su repuesta
me dice si tengo muchas ganas de que me cojas ella rápidamente me baja el cierre
y comienza a tocar mi verga luego luego se puso erecta se agacha y comienza a
mamármela de una manera que no le conocía la note muy editada comiéndose mi
verga. Llegamos a la casa estacione el coche y subimos rápido a el cuarto la llevaba
abrazada por la espalda agarrándole sus tetotas tal como la tenia el tipo de la fiesta
comienzo a quitarle el vestido dejándola en pura tanga ella se inca a seguir
chupndome la verga y me dice quiero que fantasees papi en ese momento sabia
que le había editado mucho como se la cachondeo el tipo de la fiesta me quedo
callado un momento y le pregunto con que quieres que fanteseemos ella se saca
mi verga de su boca y me dice con lo que a ti te gusta amor cuando me dices que
me esta cogiendo otro por poco y acabo en su boca de lo editado que estaba y
después lo dije eso quieres quieres que otro venga y te coja ella me responde si
amor quiero probar otra verga quiero que me veas como me comporto como una
puta con otro quiero saborear otra verga que me hagan gemir como la puta que soy
yo estaba sorprendido de ver a mi esposa asi la subí a la cama la puse en cuatro
patas y comencé a cogermela estaba toda llena de sus fluidos estaba bien mojada
le metía la verga con fuerza ella me pedia mas me decía cojeme amor cojeme dame
mas pito que sabroso lo metes de lo editado que estaba se me ocurrió decirle si
quieres otra verga quieres la verga de el tipo con el que bailabas te gusto que te
agarrara la panocha ella se quedo callada se quito y me miro de frente me dijo viste
lo que paso le dije que si me dio un beso de lengua sabroso y me dijo te gusto a lo
que le conteste que si ella me dijo pues si si me gusto ese wey me puso bien caliente
otro poco y dejo que me coja en el coche me acoste en la cama ella se subió y
comencé a cogermela me decía que le había tocado la verga al tipo que cuando
estaban bailando se la había acercado a sus nalgas que quería sacarsela y
chuparsela que por eso estaba asi de caliente yo continuaba cogiendomela ella me
decía que si me exitaba verla asi de caliente que si me había querido verla coger en
el estacionamiento verla chuparle la verga a otro yo le decía que si que desde
cuando se lo había pedido que bien sabia yo que era bien puta para coger de lo
caliente que es sabia que tarde o temprano se dejaría coger por otro en eso ella
gimiendo me decía que estaba a punto de venirse apretó mi verga y sentí delicioso
como me mojaba los huevos con sus fluidos ella me decía que si iba a terminar que
terminara el sus tetas le meto la verga otro rato hasta que se acomodo para que
acabara yo nos abrazamos un rato volvimos a coger como 3 veces mas y nos
dormimos a la mañana siguiente hablamos del tema y ella acepto coger con otro
pero que fuera un desconocido
Por venganza comencé a ser puta, y me gustó
Yo soy Laura, mi esposo es Manuel, y ya llevamos varios años de casados, la mayor parte de ellos,
evitando tener hijos, porque según mi marido, apenas y podemos mantenernos nosotros, mucho
menos podemos criar un hijo, lo que para mí es toda una exageración, ya que ambos trabajamos y
ganamos buen dinero.

Bueno Manuel y yo fuimos invitados a una fiesta que dio la compañía para la que él trabaja, a la que
a Manuel le convenía mucho asistir, por aquello de relacionarse con el presidente y la junta de socios
de la empresa. Lo malo de todo eso que yo no tenía un traje que me gustase con que asistir a la
fiesta, por lo que le pedí dinero para comprarme uno, y su respuesta fue. Eres una despilfarradora,
tienes un sin número de vestidos que te quedan de maravilla, pero lo que tú quieres es gastar, gastar,
y gastar.

Entenderán que con esa visión de mi marido, no pude comprar nada, así que de la rabia que me dio,
pensé en ponerme lo primero que agarrase. Además de la rabia que sentía, por el sin número de
veces que él se satisfacía rápidamente, y me dejaba viendo el techo de nuestro cuarto, sin alcanzar
un mísero orgasmo, contando los adornos, y eslabones, de la lámpara que cuelga del techo.

No tuve que buscar mucho, lo primero que saqué fue una vieja minifalda en patente roja bien
llamativa, que de paso me quedaba bien ajustada. Como blusa tomé una bastante viejita, casi
transparente, la que decidí usar sin sostén alguno. Un par de zapatos, de punta y tacones súper altos
en patente negro, y desde luego que un par de medias de maya del mismo color. Nada más de
caminar se me subía la falda, así que daba dos pasos y me detenía a jalarla ligeramente hacía abajo,
ya que se me veía las nalgas fácilmente.

Encima de todo si me puse un abrigo sencillo, para que él no se diera cuenta hasta que ya fuera muy
tarde, o sea apenas llegásemos a la fiesta. Aparte de una mini cartera de juguete, imitación barata
de piel de leopardo, hecha en plástico, que dejó una sobrinita mía en casa. Para joder más a mi
marido, me maquillé de manera algo exagerada. La idea era hacer que Manuel se sintiera mal, por
mi manera de vestir, y cuando me fuera a reclamar decirle, que era lo único que tenía para asistir a
su fiesta tan importante.

Apenas llegamos, y mi esposo, cuando dentro del ascensor me quité el abrigo, él vio como andaba
vestida. Por poco que le da un ataque cardiaco, se puso rojo como un tomate, seguramente la presión
le debió haber subido, bien molesto me dijo. Anda vete a casa, que pareces una verdadera puta así
vestida. Desde luego que no me quedé callada, y le respondí. Si yo parezco una puta, entonces tu
eres un cabrón, que esto es lo más decente que encontré en mi closet. Manuel se metió la mano
dentro del bolsillo de su pantalón y sacando unos cuantos billetes me los entregó muy enojado
diciéndome, toma un taxi y regresa a casa, y no me esperes despierta, que mañana hablamos sobre
tu ropa.

De paso yo tampoco tenía muchas ganas de estar en esa aburrida fiesta, así que le arranqué el
dinero de la mano, y me quedé dentro del ascensor, después que él salió echando pestes y
maldiciones. Apenas él salió y yo me quedé llorando, sin darme cuenta el ascensor siguió subiendo,
y cuando volvió abrirse la puerta, entró un señor muy mayor vestido de manera bien elegante, y
perfumado, que de seguro se me quedó viendo, y apenas se cerró la puerta del ascensor me
preguntó en un tono bien preocupado. Jovencita le pasa algo malo, yo estaba que no podía contener
mis lágrimas, pero de la rabia que tenía con Manuel. Por lo que seguí llora que llora, nuevamente
ese señor me volvió a preguntar que me sucedía, en un tono de voz tan amable y comprensivo, que
de inmediato sin conocerlo comencé a decirle que mi esposo me había dicho que parezco una puta,
aun sollozando continué diciéndole que yo bien molesta le había dicho a mi marido, bien si yo
parezco una puta tú eres un cabrón.

El anciano no pudo evitar que se le escapase una pequeña sonrisa, para decirme que se había
sonreído de mi rápida ocurrencia. Ya más tranquila, apenas llegamos a la planta baja del edificio, le
escuché decirme, en las condiciones en que se encuentra ahora, lo que más le conviene es que
alguien como yo que no la conoce, la escuche, y no la juzgue, sin importar lo que diga o haga, así
que le ofrezco que suba a mi apartamento y me siga contando todo lo que le ha sucedido con su
esposo.

Yo de momento dudé, en aceptar su amable propuesta, pero de inmediato continuó diciéndome. No


tenga miedo, que lo único que hará es descargar toda esa rabia que lleva dentro de sí y que le puede
hacer mucho daño, mientras que yo como le dije no la voy a juzgar, a lo sumo le puedo dar algún
consejo o consuelo, ¿qué dice, acepta mi ayuda?

Realmente el viejito tenía razón, el quedarme con eso dentro de mí, ya me estaba haciendo daño,
así que acepté su invitación y en el mismo ascensor subimos a su apartamento un piso más arriba
de donde se estaba realizando la fiesta.

Apenas llegamos me di cuenta de que su apartamento era tremendamente lujoso, me ofreció asiento
en un gran sofá rojo. De inmediato me preguntó si deseaba tomar algo, a lo que le respondí que si,
cuando finalmente tomó asiento, como todo un buen anfitrión, aparte de que me trajo un Cuba Libre,
diciéndome, esta es la mejor bebida para que se sienta más relajada, ya que me doy cuenta de que
está muy tensa. También me sirvió galletitas acompañadas de un delicioso queso, y caviar del
verdadero.

A medida que me fui sirviendo y probando el queso con el caviar, comencé a contarle todo y el
cordialmente me estuvo escuchando por un largo rato, lo que yo le decía sobre lo tacaño que es
Manuel, el viejo me pareció tan confiable que sin ningún tipo de vergüenza también le conté, sobre
la rabia que me daba cuando mi marido me dejaba tirada en la cama mirando el techo, sin que yo
disfrutase aunque fuera de un miserable orgasmo. Cuando finalicé, le dije, todavía llorando de la
rabia, que aun tenía mucha rabia contra mi esposo. Fue cuando el viejito me dijo. Bueno hija tienes
varias opciones, pero solo te nombraré las más lógicas. Una es que hables con tu esposo y ambos
lleguen a un acuerdo, de inmediato le dije. Ya estoy cansada de hablarle, al fin y al cabo él no me
hace el menor caso. Otra opción es que, no haces nada y te quedas con esa rabia por dentro, y te
fastidias, porque tarde o temprano te afectará física y emocionalmente. Otra es que perdones de
corazón, todo lo que tú entiendes que tu marido te ha hecho, y olvides todo. De inmediato dije. Si
eso suena, como si fuera muy fácil hacerlo. La cuarta, si la primera, la segunda, y la tercera, no te
convencen, es que tomes venganza, donde tú sabes que seguro a él más le dolería.

Rápidamente sin pensarlo mucho, le dije que quemaría la cartera de Manuel, con todo y su dinero.
Pero el señor me comentó, de seguro eso le molestaría, pero que ganarías tu, aparte del corto placer
de verlo bien bravo contigo, y que seguramente después te exija que le pagues el dinero que hayas
quemado. Ya en esos momentos el anciano me ofreció otro Cuba Libre, que sin perder tiempo me
lo tomé.

De inmediato me preguntó, ¿De qué te acusó tu esposo? Yo algo avergonzada le dije, de puta, y
nuevamente continuó preguntando, ¿Y cuando le dijiste cabrón, como te sentiste? Lo cierto es que
no me había detenido a pensar en ello, pero creo que me sentí bien, le respondí. Bueno ahí está tu
venganza, solo que no debes decírselo a él, bastará nada más con que tu lo sepas, y le puedas ver
el día de mañana la cara de cabrón.

Al principio no comprendí, hasta que de golpe entendí lo que el vejete quería hacerme entender.
Pero eso de parecer una puta por como andaba vestida era una cosa, y otra era salir a caminar por
la calle, levantar un cliente, tener sexo con ese desconocido, y finalmente cobrarle. Aparte de serle
infiel a mi esposo, le dije yo algo confundida.

A lo que él con toda la calma me respondió, bueno imaginemos que estas en la calle, y llegó yo, que
me dirías si trato de abordarte, preguntándote, ¿Cuánto cobras? Le respondí que sinceramente, ni
idea tenía de cuanto cobraba una puta, fue el viejito que diciéndome, continuemos con el juego, y
supongamos que yo saco unos cuantos billetes y te los muestro, y acto seguido sacó su cartera, y
extrajo un grueso fajo de billetes todos de alta denominación, del cual separó unos cuantos,
guardándose el resto, y aun así lo que dejó en su mano era mucho, más de lo que pagamos en el
apartamento.

¿Si fueras una puta que dirías? Que si, si es por todo ese dinero, respondí de inmediato. Él se sonrió
preguntándome, y que estaría dispuesta hacer por esta cantidad.

Nuevamente me quedé en blanco, y él sonriéndose nuevamente me dijo, a tu futuro cliente o sea yo,
debes decirle que de todo, y de todo es de todo, ¿entiendes?, pensé por unos instantes y le respondí,
o sea sexo normal o sea vaginal, anal, y oral, y terminó él diciendo y también manual. Cosa que no
entendí hasta que moviendo su mano derecha, con el puño cerrado, de arriba abajo repetidas veces,
que avergonzada comprendí que significaba eso de manual.

Si todo eso suena muy bien, y mientras yo seguí hablando él me volvió a servir otro Cuba Libre,
diciéndome de inmediato. Para después decirme, lo que pasa es que tienes miedo, primero de que
alguien en la calle te fuera a reconocer, verdad, y segundo pero no menos importante, que tu marido
te encontrase caminando, haciendo la calle como dicen. Ciertamente me di cuenta de que también
tenía miedo de eso. Cuando él me dijo, pero aquí estas bien segura, los únicos que estamos somos
tú y yo, y no voy a irle con el cuento a tu esposo al que no conozco, para decirle que me acosté con
su mujer. Así que te parece si realmente quieres vengarte de tu esposo, tan solo por esta noche, la
haces de puta conmigo.

Yo me quedé sin saber que decir por unos instantes, hasta que el viejo mostrándome el dinero me
dijo, después que te decidas es algo bien fácil, y te aseguro que no la pasaras tan mal como me has
contado que la pasas con tu marido. Entregándome todo ese dinero en mis manos, me dijo. Anímate,
y de manera automática, guardé todo el dinero en la pequeña cartera.

Pero cuando levanté la vista y vi su rostro comprendí, que desde que él me vio dentro del ascensor,
vestida como toda una puta, y llorando. Su intención era acostarse conmigo. Lo que me causó gracia,
en medio de todo, fue la manera tan astuta, en que me fue convenciendo para que me convirtiera en
puta.

Bien pude decirle que no y devolverle todo su dinero para después marcharme indignada y
sintiéndome ofendida. Pero me di cuenta de que en cierta forma o manera, al acostarme con él, por
dinero. Me vengaba en parte de mi esposo, y como viejo bien me recomendó, no pensaba contarle
nada a Manuel. Así que apenas el viejo me tomó entre sus brazos, decidí que procuraría disfrutar
tan especial venganza.

Por lo que cuando me comenzó a besar y a manosear todo mi cuerpo, yo le respondí de igual
manera, dejando que acariciara toda, sin mucho esfuerzo, ya que la ropa que tenía puesta, en cosa
de pocos minutos, ya se encontraba sobre la alfombra de la sala. Mientras que él continuaba
besándome por todas partes, e introduciendo sus manos entre mis piernas. Al tiempo que me
comenzó a decir lo buena que yo estaba, que desde que me vio con esa facha de puta, se le metió
entre ceja y ceja acostarse conmigo.

Sus palabras en alguno que otro momento me hicieron sentir, algo ofendida la verdad sea dicha,
pero en otros momentos me hicieron sentir sumamente excitada. Quizás por la cantidad de tragos
que había bebido, comencé actuar como si realmente fuera una puta cualquiera. Al punto que cuando
colocó sus manos sobre mis hombros, sin demora alguna, al tiempo en que me agachaba frente a
él, también me quite mis pantis, las sostuve entre mis dedos dándole vueltas sobre mí cabeza, y
después las tiré al piso riéndome. No había terminado yo de extraer su miembro del pantalón, que
con mi otra mano, abriendo mis piernas comencé a acariciar con fuerza mi clítoris ante sus ojos.

Al terminar de sacar su miembro bastante erecto, comencé de manera seductora a pasar mi lengua
lentamente por sobre la cabeza de verga, para al tiempo que yo seguí toqueteándome mi coño, luego
comencé a mamar su verga. Cosa que en más de una ocasión, me había causado hasta nauseas,
cuando el cabrón de mi marido, prácticamente me obligaba a que se lo mamase.

Quizás por lo morbosa de la situación, por lo bebida que estaba y por ser la primera vez en mi vida,
que yo recuerde, disfruté de un tremendo orgasmo, por estar acariciando yo misma mi coño. Pero lo
que más me sorprendió fue que el Don, a pesar de lo mucho que me esmeré al mamárselo, no llegó
a venirse.

Sino que en cierto momento me indicó, que me acostase sobre el sofá. Donde apenas me recosté,
él separó mis piernas, y nuevamente me sorprendí cuando en lugar de bajarse los pantalones, dirigió
su boca directamente sobre mi coño, con sus dedos separó algunos de los vellos de mi velluda vulva
y con gran seguridad, sin arrugar la cara se dedicó salvajemente a mamar todo mi coño, no
únicamente mi clítoris, sino que chupo y hasta mordisqueó de manera tan sabrosa los labios de mi
vagina, que en cosa de poco tiempo relativamente, disfruté de otro frenético orgasmo, ya que como
se imaginaran, Manuel nunca me ha hecho algo ni tan siquiera remotamente parecido.

No bien el viejo, terminó por dejarme sabrosamente agotada después de esa tremenda mamada,
que cuando me insinuó que me acostase sobre su sofá boca abajo, sin pensarlo dos veces le
obedecí, de inmediato sabiendo lo que me esperaba, pero a diferencia de Manuel. Sus dedos
exploraron mis nalgas, y al poco rato sentí la caliente cabeza de su verga, como se hundía dentro
de mi apretado culito. Casi al tiempo que nuevamente con algunos de sus dedos me agarraba mi
coño, apretándomelo de manera tal, que al mismo tiempo en que sabrosamente me daba por el culo,
disfruté de otro colosal orgasmo. El Don continuó clavándome su miembro, mientras que yo movía
mis caderas, como me dijo él en más de una ocasión, como toda una puta.

No fue hasta que pasó un largo rato de sentir como entraba y salía su verga de mi culo, una y otra
vez, que finalmente él se vino dentro de mí, apretándome con fuerza, y dando fuertes empellones,
contra mis nalgas. Mientras que yo sin abrir la boca me decía a mí misma, toma Manuel, esto es por
ser un hijo de la gran puta conmigo, esto por desconsiderado, esto por cabrón, y así estuve como
diría alguien, vengándome mentalmente, al tiempo que el viejo sobre mí terminaba de sacar hasta
su última gota de semen.

A pesar de lo mareada que estaba, y quedé bien molida, pero soberanamente satisfecha, pensé que
ya el viejito había dado el máximo. Pero justo cuando pensé en entrar al baño, me tomó por la mano,
y me condujo a su habitación, y en la tremenda cama que había, acostándose con todo y ropa, me
dijo, por ahora ponte un rato a jugar dados, yo como que no entendí nada, hasta que con una de sus
manos me hizo la seña de que le hiciera la paja.

Una cosa que hice mal, fue que cometí el error de pensar que el viejito ya no soplaba. Cuando
comencé a pajearlo, y voluntariamente lamiendo y chupando su verga. Vi hasta con cierto grado de
asombro, que su miembro se volvía a tonificar. Realmente no demoró mucho en clavarme su buen
pedazo de carne entre mis piernas, hasta el mismísimo fondo de mi mojado coño.

El viejo me terminó de arrancar mi sostén, y de inmediato se dedicó a mamar mis parados senos,
mientras que si mucho esfuerzo continuaba clavándome toda su verga. Hasta que nuevamente
después de un largo rato de yo estar moviendo mi cuerpo, bajo él, se vino dentro de mi coño.

Yo me quedé molida, y por espacio casi una hora, creo que hasta me dormí en su cama. De no haber
sido por él que me despertó diciéndome que tenía un compromiso y debía marcharse, fue que a
pesar de lo medio borracha que me encontraba, aproveché y me di un reparador baño, lavando mi
culo y mi coño hasta quedar como nueva. Mucho más despierta vestí, luego me acompaño hasta la
puerta del edificio donde me esperaba un taxi.

Apenas me monté y el taxista me preguntó la dirección, se la di, pero de inmediato me dijo, hermana
si no tienes con que pagarme, podemos llegar a un acuerdo. Su manera de dirigirse a mí, me dio la
impresión de que el chofer me confundía con otra mujer. Cuando le pregunté a que se refería, me
respondió, bueno nena, ya sabes si no tienes efectivo, puedo pararme en una estación de gasolina,
y después de que hable con el tipo que cuida, meto el auto en el lavado y hacemos lo nuestro.
Después te dejo donde tú quieras. En otras palabras el taxista quería acostarse conmigo, y que a
cambio, no me cobraría el pasaje.

Realmente no me hacía falta hacer eso, ya que tenía dinero, pero momentáneamente pensé en
Manuel, en lo tacaño que era y como aun estaba resentida con él, de inmediato tuve ganas de
continuar siendo una puta para seguir vengándome. Así que sin darle muchas vueltas a la cabeza,
le dije al taxista. Ok, hermano vamos hacer lo nuestro, y después me dejas donde yo te diga.

No bien dije eso el taxista detuvo el auto, y rápidamente me pasé al asiento delantero a su lado.
Donde apenas me senté él comenzó acariciar mis muslos, y entre mis piernas hasta que sus gruesos
dedos llegaron a tocar mi coño por encima de las pantis. Así estuvo conduciendo, hasta que llegamos
a una estación de gasolina cerrada, pero cuidada por un hombre mayor. El chofer del taxi, se bajó
del auto, habló con el tipo, y seguramente tras darle alguna pequeña cantidad de dinero, el cuidador
permitió que el taxista metiera el taxi donde hacen los cambios de aceite.

Apenas apagó el auto, yo volví al asiento trasero, y sin esperar a que él entrase, me comencé a subir
la falda, para después quitarme las pantis. El taxista, al abrir la puerta se me quedó viendo mi coño,
para luego decirme, oiga hermana, en confianza se puede quitar todo, que aquí nadie nos va a
molestar. Así que me despojé de toda mi ropa, incluso de hasta las medias y el sostén.

Ya completamente desnuda, me recosté en el asiento trasero, del taxi. Abrí mis piernas de par en
par, mientras que él sin quitarse o bajarse los pantalones, sacó su miembro, y de inmediato
apuntándolo contra mi coño, con una de sus manos, lo dirigió, y comenzó a penetrarme. A medida
que el taxista continuaba metiéndome su verga, sin dejar de moverme, pensaba en Manuel,
nuevamente a medida que sentía los embates de ese hombre, mentalmente me decía a mí misma,
toma Manuel por tacaño, por desgraciado, por cabrón, y por un montón de cosas más. Pero al mismo
tiempo disfrutando de todos y cada uno de los empellones que sentía sobre y dentro de mi coño.

Pero de momento noté que el cuidador de la gasolinera, nos observaba por una de las ventanas
traseras. Eso no me molestó, más bien pienso que el saberme siendo observada, por ese tipo, me
calenté muchísimo más. Ya que disfruté de un orgasmo padrísimo, segundos después de que el
taxista se había venido dentro de mi coño.

El taxista se bajó, y yo me levanté y salí del auto completamente desnuda, tal y como me encontraba,
a pocos pasos había un grifo, y sin preocupación alguna me agaché y con mis rodillas bien
separadas, comencé a lavar todo mi coño, al tiempo que estaba siendo observada por el cuidador,
que durante todo el tiempo que me estuve lavando, él nada más viéndome se comenzó a masturbar,
hasta que finalmente se vino.

Luego sin el menor remordimiento de conciencia, me comencé a vestir, pero nada más por joder,
dejé mis pantis sobre una escalera. Después de eso el taxista me dejó en mi casa.

En casa conté todo el dinero que me dio el Don, y resultó ser mucho más de lo que yo había
calculado, lo escondí entre mis cosas y bien agotada, pero enormemente satisfecha, me dormí, sin
el menor remordimiento.

Al día siguiente cuando me desperté encontré a mi marido acostado a mi lado, después de que se
levantó me preguntó que había hecho, y me dieron ganas de decirle que me puse a putear, pero me
aguanté.

Manuel sigue siendo un maldito tacaño, y en las relaciones intimas no avanzado nada, pero yo
ocasionalmente visito por lo menos una vez al mes al Don, y en ocasiones ni ganas tengo de cobrarle,
pero como él insiste en pagarle a su puta, quien soy yo para llevarle la contraria.

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