Sunteți pe pagina 1din 12

LA MUERTE DE M'OISES

SEGUN EL TARGUM DT 34,5

El Targum Palestinense, especialmente Pseudojonatán, ofrece


una amplia descripción de la muerte y sepultura de Moisés, para-
fraseando el texto de Dt 34,5-7. Rinde así un homenaje a tan gran
personaje, superior ,a los profetas, gran maestro de Israel, pedago-
go, pastor y jef.e fiel (cf. Ps.Jon, N Gn 27,29; 40,12; Nm 3,3; 11,12).
El presente trapajo pretende analizar los datos del targum Dt 34,5,
estudiando su origen y su relación con otras tradiciones judías 1 _

l. TEXTO Y CONTENIDO

Ps.Ion El día 7 del mes de Adar había nacido Moisés, maes-


tro de Israel, y el día 7 del mes de Adar fue reunido de
en medio del mundo. Una voz celeste bajó de los cielos
y dijo así: Venid todos los que habéis entrado en el
mundo y ved los dolores de Moisés, maestro de Israel,
que ha trabajado duramente y no ha disfrutado. Pero
ha sido exaltado con cuatro coronas buenas: la corona
de la Ley es suya, porque la capturó en los altos cie-
los, cuando se Le apareció la Gloria de la sekína de
Yahweh, con dos mil miríadas de ángeles y con cua-
renta y dos mil carros de fuego. La corona del sacer-
docio fue suya en los siete días de la investidura. La
corona del reino se la dieron en posesión desde los cie-
los, no desenvainó espada ni ensilló caballo ni puso
en movimiento campamentos. La corona del buen nom-
bre la adquirió con obras buenas y con su humildad.
1 Empleamos las siguientes siglas: APJ.2 ... = amoraím palestino de
la l.', 2." ... generación: ARN = Aboth de-Rabbí Nathan; CantR = Can-
tar de los Cantares Rabba; ExR= Exodo Rabba; Fr 264/440= targum
fragmentario manuscrito n.º 264 ó 440; GnR = Génesis Rabba; LvR =
Levítico Rabba; M. = midrás o mísná: Mekh = Mekhilta; LAB = Liber
Antiquitatum Biblicarum; N = Neophytí ; Ngl = glosas de Neophyti;
NmR = Números Rabba; O= Onquelos; PRE= Pirqe Rabbi Elíezer ;
PsJon = Pseudojonatán; SDt = Sifre Deuteronomio; tg = targum; T1,2 ... =
tannaíta de la primera, segunda ... generación ... ; TC = targum de la
geníza del Cairo; TH = texto hebreo; TM = texto masorético; TP = tar-
gum palestinense.
504 A. RODRIGUEZ CARMONA

TM Y murió allí Moisés, siervo de Yahvé, en la tierra


O Y murió allí Moisés, siervo de Yahvé, en la tierra
Fr 440 Y murió allí Moisés, siervo de vahvé, en la tierra
Fr 264 Y murio allí Moisés, siervo de Yahvé, en la tierra
TC Y fue reunido allí Moisés, profeta de Yahvé, en la tierra
N Y murió allí Moisés, siervo de Yahvé, en la tierra
PsJon Así pues, fue reunido allí Moisés, siervo de Yahvé, en la tierra
TM de Moab, según la boca de Yahvé.
O de Moab, según la Palabra de Yahvé.
Fr 440 de Moab, según la orden de la Palabra de Yahvé.
Fr 264 de Moab, según la orden de la Palabra de Yahvé.
TC de Moab, según la orden de la Palabra de Yahvé.
N de Moab, según la orden de la Palabra de Yahvé.
PsJon de Moab, con un beso de la Palabra de Yahvé.

Oomo puede apreciarse, PsJon es el targum que ofrece el tex-


to más largo, especialmente con la introducción que precede la pa-
ráfrasis del texto, en 1-a que fecha la muerte de Moisés y presenta
el Midrás de la:s Coronas. Con relación a la traducción parafrasea-
1da, se pueden distinguir tres tipos de texto, '(l) Onquelos, que si-
gue de cerca el TM, según su costumbre, excepto en un caso
(boca = palabra) en que sigue a los demás targumes; (2) el grupo
Fr 440 y 264, TC, N, que traducen boca= orden de la palabra, y
(3) Pseudojonatán, que además de la introducción propia, traduce
boca = beso de la pa1abra.

II. ANALISIS DE LAS TRADICIONES

l. Moisés murió el 7 de Adar,


el mismo día que había nacido

Este dato de PsJon, atestiguado también en Dt 32,48, es una


tradición antigua 2, que ha nacido del cómputo de los datos crono-
lógicos que ofrece el mismo texto bíblico, según los cuales entre
la muerte de Moisés y el paso del Jordán, que tuvo lugar el 10 de
Nisán, transcurrieron 33 días {cf. Dt 34,5.8; Jos 1,2.11). Aplicando
después el principio de que los justos mueren el día de su curn-
pleaños, se concluye que Moisés nació también el 7 de Adar. Esta
deducción es también antigua 3, aunque posterior a la anterior, ya
que depende de ella.

2 Cf. L. Ginzberg, The Legends of tne Jetos, VI 464, n. 108; Antonio


Rodríguez Carmona, Los anuncios de la muerte de Moisés en el Tar-
gum Palestinense, en V. Collado/E. Zurro (eds.) , El Misterio de la Pa-
labra (Ed. Cristiandad, Madrid 1983) 273s.
3 Cf. L. Ginzberg, o.c., V 397, n. 44.
LA M U ER TE DE M OISES SEGUN EL TARGU M DT 34,5 505

2. Midrás de las Coronas


Se trata de un relato en el que confluyen varias tradiciones, la
de los títulos de Moisés, la de la colección de coronas y otras.
a. Títulos de Moisés. Aunque el Pentateuco describe a Moi-
sés como legíslador, intercesor, gobernante y oficiante en la consa-
gración del Tabernáculo y de los sacerdotes, sólo le da los títulos
de Siervo de Dios {Nm 12,7; Dt 34,5) y Profeta {Dt 18,18; 34,10),
de los que el primero es el más antiguo. Esta situación continúa en
el resto del AT, en que domina el título de Siervo y sólo aparece
el de Elegido en el Sal 106,23 (cf. Siervo: Sal 105,26; Is 63,11; Mal
3,22; Bar 2,28; Dn 9,11; Sab 10,16. Profeta: Os 12,13; Sal 11,1). Ec1o
45,1-5 presenta una serie de cualidades y tareas de Moisés, cuando
hace su elogio, pero no le atribuye formalmente título alguno (man-
so, fiel, taumaturgo, elegido, hombre de bien, amado por Dios y
los hombres). En el NT Moisés es fundamentalmente el Legislador
(Jn 1,17; Mt 23,23; Hch 7,38), pero junto a esto se le presenta tam-
bién como Profeta (Hch 7,37), J,efe y Juez (Hch 7,27.35), Jefe y Re-
dentor (Hch 7,35) 4, hermoso a 1os ojos de Díos (Hch 7,20; Heb
11,23) y hombre de fe (Heb 11,24). Filón es el primero que reúne
cuatro títulos de Moisés, atribuyéndole varías veces los títulos y
tareas de Rey, Legislador, Sumo Sacerdote y Profeta: "Porque Moi-
sés, por gracia de la providencia divina, ha sido a la vez Rey, Legis-
lador, Sumo Sacerdote y Profeta y en cada una de estas funciones
ha conseguido ,el primer lugar" '(De Vita Mosis II, 3 cf. además II,
187; II 292; De praemiís et paenís 54) 5•
Todo el De Vita Mosís precisamente está dedicado a explicar
estos títulos, según 1a conclusión de 1a obra: "Tal fue la vida, y
tal fue la muerte de Moisés, Rey, Legislador, Sumo Sacerdote y
Profeta, según testimonian las Santas Escrituras" (II, 292) 6• Como
puede observarse, la enumeración de Filón es parecida a la de Pseu-
dojonatán, de la que sólo se diferencia en el último titulo, y mues-
tra que ya en el s. r d.C. existían colecciones de títulos mosaicos
semejantes a La targúmíca.
b. El tema de las coronas. El AT habla con frecuencia de la
corona real y conoce el uso metafórico como expresión de alegría
(cf. corona de los esposos) y de premio. Partiendo de este último
sentido, las literaturas íntertestarnentarias, neotestamentaria y rabí-
nica hablan de corona en sentido escatológico, designando el premio
después de la muerte: corona {Sab 4,2; Ap 3,11), corona de gloria

4 Estos títulos que emplea Hechos de los Apóstoles están muy in-
fluenciados por la cristología de Lucas.
s Ed. Arnáldez/Mondes,ert/Pouilloux/Savinel, De Vita Mosis (Paris
1967) p. 193.
6 O.e. 321.
506 A. RODRIGUEZ CARMONA

(2 Bar 15,18; T. Benj 4,1; 1 P,e 5,4; Heb 2,7.9), corona de vida (Sant
1,12; Ap 2,10), corona de justicia {2 Tim 4,8), corona inoorruptibJ.e
(1 Cor 9,25). Más tarde el rabinismo afirmará que oada justo posee-
rá una corona en el Mundo Futuro (Ber 17a; Tanh pqwdy 127b; sáb
104b).
F1avio Josefo ofrece una colección de poderes (político, sacer-
dotal, profético), refiriéndose al asmoneo Hircano I, pero sin hablar
de coronas :(AJ XIII, 10, 299; BJ I, 2,68). Es en el período tannaí-
ta, cuando aparece ,el tema de la colección de corones, con dos for-
mas, una de tres y otra de cuatro coronas.
La colección de tres coronas está atestiguada en SNm 18,40;
Yoma 72b y M. Qoh VII, 2 cf. ExR XXXIV,2:
"Hay tres coronas, la de la Torá, la del sacerdocio y la de la
realeza. La del sacerdocio la consiguió Aarón, la de la realeza
David y la de la Torá está depositada para los que vienen al
mundo" (e.d., es asequible :a todos) 7.
"R. Yohanan (bar Nappaha, AP2) decía: Hay tres coronas: 1'a
del altar, la del arca y la de la mesa. La del altar la ganó Aarón
y la recibió. La de la mesa la ganó David y la recibió. Da del
arca está todavía depositada y quien desee tomarla, puede venir
y tomarla" 8.
"R. símeón b. Yo]),ai enseña: Hay tres coronas, la corona de la
Torá, la corona del sacerdocio y la corona de la realeza. Aarón
mereció la corona del sacerdocio y la recibió, David mereció la
corona de la realeza y la recibió. En cuanto a la corona de la
Torá, queda sin dueño por generaciones (e.d., puede recibirla
todo el que la merezca). Si uno consigue (la corona de) la Torá,
es como si hubiera alcanzado las tres. Si uno no ha conseguido
(la corona de) la Torá, es como si no hubiese alcanzado nin-
guna de ellas" 9.
"R. Simeon b. Yohaí decía: Hay tres coronas, la corona del rei-
no, la corona del sacerdocio y 1a corona de la Torá. La corona
del reino es la mesa de la que se dice: Pondrás alrededor una
moldura de oro fino (Ex 25,i4). La corona del sacerdocio es el
altar, del que también está escrito: Pondrás alrededor una mol-
dura de oro fino (Ex 30,3) y la corona de la Torá se refiere al
arca, de la que está escrito: Y pondrás alrededor de ella una
moldura de oro (Ex 25,11)" 10.

Como puede apreciarse, el texto primitivo es el de Sifre Núme-


ros y tiene como Sitz im Leben 1a observancia de la Ley, centro de

1 SNm 18,40, cf. ed. Kuhn, 408s.


8 Yoma 72b, cf. ed. Soncino IV, 346.
9 M. Qoh VII, 2, et. ed, Soncino VIII, 168.
10 ExR XXXIV, 2, cf. ed. Soncino III, 427. Cf. además Tanh B wyqhl
125·a.
LA MUERTE DE MOISES SEGUN EL TARGUM DT 34,5 507

interés especialmente desarrollado posteriormente en Midras Qo-


helet. El texto de Yoma ha sustituido la terna sacerdocio-realeza-
Torá por altar-arca-mesa, cambio que se explica en ExR 34,2, texto
este último que ya no tiene la Torá oomo Sitz im Leben, pues sólo
pretende justificar bíblicamente las coronas.
La colección de cuatro coronas aparece en M. Aboth IV, 13;
ARN 41; NmR IV, 13.
"R. Simeon: Hay tres coronas, la corona de la Torá, la corona
del sacerdocio y la corona de la realeza, pero la corona del buen
nombre las sobrepasa" 11.
"R. Simeon dice: Hay tres coronas, la corona de la Torá, la co-
rona del sacerdocio y la corona de la realeza, pero la corona del
buen nombre ,es superior a todas· ellas" 12.
"R. · Simeon dice: Hay tres coronas, la corona de 1a Torá, la co-
rona del sacerdocio y la corona de la realeza, pero la corona del
buen nombre es superior a todas ellas. La corona del sacerdocio,
¿qué decir de ella? Aunque uno ofreciera toda la plata y el oro
del mundo, no podría conseguir 1a corona del sacerdocio, pues
está escrito: Habrá para él y para su descendencia después de
él una alianza de sacerdocio perpetuo (Nm 25,13). La corona de
la realeza (¿qué decir de ella?) Aunque uno ofreciera toda la
plata y el oro del mundo, no podría conseguir la corona de la
realeza, pues está escrito: Y mi siervo David será su príncipe
para siempre (Ez 37,25). No es así sin embargo para la corona
de la Torá: cualquiera que desee afanarse con 1'a Torá, puede
venír y hacerlo, corno está escrito: Oh, todos los sedientos, id
por agua (Is 55,l)" B.
En esta tradición el Sitz im Lebem es similar al anterior: lo
importante no es la realeza, el sacerdocio ,o el hecho de haber reci-
bido 1a Torá en el Sinaí, sino el vivir la Torá y el buen nombre
que de ello se deriva cf. Prov 22',1; Ecl 7,1. Posiblemente esta tra-
díción, que claramente está relacionada con la ,anterior, sea poste-
rior y dependa de ,ella, pues la desarrolla al añadir un elemento
y explicitar con ello su mensaje. En cuanto ,al autor de la tradición
original debe ser Simeon bar Yohaí {T3), ya que ambas formas se
1e atribuyen (Aboth IV, 13; M. Qoh VII, 2; ExR XXXIV, 2). Yo'l).a-
nan bar Nappaha (AP2) no es más que un transmisor posterior.
c. Es curioso que en 1a colección de tres coronas se atribuye
expresamente la del Saoerdocto a Aarón y la de Ia realeza a David,
11 M. Aboth IV, 13, cf. ed. Ph. Blackman IV, 521. Otra lectura dice:
"(la corona del buen nombre) debe acompañarlas" (caz, en lugar .de
cole cal, sobrepasar).
12 NmR IV, 13, cf. ed. Soncino V, 112.
13 ARN 41, cf. ed. J. Goldin, 16'9.
508 A. RODRIGUEZ CARMONA

pero no se cite a Moisés ,con relación a la de la Torá. Es lo que


hace Pseudojonatán, adaptando ambas formas a Moisés, combinan-
delas con la tradición de los títulos mosaicos y otras y presentando
todo el conjunto como una Bath Qol, que justifica el fracaso hu-
mano del que "ha trabajado duramente y no ha disfrutado". En
el momento de la muerte 1a voz divina ofrece un juicio positivo
sobre su existencia y sugiere un futuro de gloria.
d. La Bath Qol. Como es sabido 14, en la mentalidad judía la
Bath Qol, eco o voz indirecta, tiene como finalidad ofrecer 1a inter-
pretación divina autorizada de una visión o de un hecho. Puede
aparecer unida ,a una visión (cf. N, Fr 110 Gn 22,10; Me 1,8s) o a un
hecho natural (N Gn 27,33; N, Fr Gn 38,2'5; Ngl, PsJon Nm 21,6;
Jn 12',28) o a un hecho extraordinario {PsJon Dt 28,15: conmoción
cósmíca) 15• El contenido de la interpretación es variado: consolar,
advertir, castigar, decidir, confirmar una decisión. Varías veces,
como en nuestro texto, aparece en la muerte de un personaje, ofre-
cíendo un juicio sobre su futuro o sobre la vida del difunto cf. Ber
61 b: ,en la muerte de R. Aqiba se le felicita porque ha muerto dí-
cíendo la palabra Unico y porque está destinado a la vida del Mun-
do Futuro. Git 57b: en 1a muerte de la madre de los siete hijos
mártires (cf. 2 Me 7) se afirma que ya tiene el gozo. Taianit 29a:
en .1a muerte de un romano que ayudó a Rabban Gamaliel se le
asegura que está destinado a la vida del Mundo Futuro 16•
e. Motivo "trabajar-no disfrutar". El problema de la retribu-
ción en este mundo, además de ,en el Mundo Futuro, preocupó mu-
cho en todas loo épocas del judaísmo. A pesar del premio/castigo
en el Mundo Futuro, atestiguado en los últimos libros del Antiguo
Testamento (cf. Sab, Dn, 2 Mac) , sigue siendo un escándalo el que
en este mundo "a los justos les sucede como a los pecadores y a
los pecadores como a los justos" {PsJon Ex 33,13), como consta
en 1as fuentes antiguas 17• Con relación a la prosperidad actual de
los impíos, el TP atestigua la explicación tannaíta, atribuida a
R. Aqiba en SDt 32,4: Dios justo premia ahora los mandamientos
leves que han cumplido, pero los castigará después de la muerte
por sus pecados cf. N, Fr, PsJon Gn 15,1; Fr, PsJon Dt 7,10; tg
Ecl 8,14 cf. además GnR 8,1; LvR 22,27; PRK 9; Tahn B méptym
42a y Tanh qdsym 36a. El castigo de los justos se explica como una

14 Cf. Strack/Billerbeck I, 125-134; L. Ginzberg, o.e. VI, 442.


1sTambién puede ofrecerse la Interpretación divina por medio de
un hecho extraordinario, sin Bath Qol, cf. lHen 1,3-9; 4Esdr 5,1-5;
Mt 27,51-54.
16 Mt 27,51-54 también ofrece una interpretación de la muerte de
Jesús, pero sin Bath Qol.
11 Cf. E. E. Urbach, The Sages I, 439.
LA M U ERTE DE M OISES SEGUN EL TARGU M DT 34,5 509

purificación de los pecados leves a fin de recibir el premio integro


en el Mundo Futuro, según tg Ecl 8,14, o porque era hijo de padre
impío, según Ber 7a. En el caso concreto de Moisés ya se planteó
el problema el AT, que explica su muerte y no entrada en la Tierra
Prometida como castigo por su falta de fe, al golpear dos veces la
roca {Nm 2,0,12; Dt 1,37; 3,26; 32,51). El Targum Palestinense sigue
esta explicación y la comenta con una oración, sin paralelo en la
literatura rabínica, en la que Moisés pide ser librado de la muerte
antes de entrar en la Tierra Prometida:
"Entonces abrió Moisés su boca en oración y dijo así: Señor del
mundo, te ruego que yo no sea semejante al hombre que tenía
un hijo único y éste fue hecho cautivo. Fue y le liberó con mu-
cho dinero, le enseñó la sabíduría y el arte, 1e desposó una es-
posa, montó una sala de banquetes regia, le edificó una casa para
el matrimonio, le preparó el lecho nupcial y dispuso el baldaqui-
no; le preparó los "amigos del esposo", coció su pan, mató su
víctima y mezcló su vino. Cuando llegó el tiempo de que se ale-
grara su hijo con su esposa y los amigos del esposo iban a recitar
La acción de gracias sobre el pan, (entonces) fue reclamado aquel
hombre, (llevado) al tribunal ante el rey y condenado a senten-
cia mortal, sin que retrasaran la sentencía hasta que viera el
gozo de su hijo. Así yo me he fatigado con este pueblo, le saqué
de Egipto según tu palabra, les enseñé tu ley, les construí un
tabernáculo en honor de tu nombre, y cuando llegó el tiempo de
pasar el Jordán para poseer la Tierra, yo soy condenado a muer-
te. Si agrada en tu presencia, retrasa (el cumplimiento de la sen-
tencia) hasta que pase el Jordán y vea el bien de Israel, des-
pués moriré" (PsJon 32,50}.

Junto a éste el Targum ofrece también el motivo de las coro-


nas para iluminar el final y dar un juicio positivo sobre 1a vida de
Moisés.
f. La corona de la Torá. Aquí y en el tg Sal 68,19 afirma el
targum que Moisés capturó la Torá en los más altos cielos. En
otros lugares, siguiendo la tradición común, dice que 1a recibió de
Dios, que se 1a dictó {PsJon Ex 3,5; N, PsJon Ex 34,28), cuando se
le apareció la Gloria de la s,ekina (N Ex 19,18). El motivo de la
captura procede, por analogía (gezera sawa) de Sal 68,18-19:
18 "Los carros de Dios, por millares
de miríadas (alphey ribothaim),
el Señor ha venido del Sinaí al santuario.
19 Tú has subido a la altura,
cautivaste la cautividad,
tomaste dones entre los hombres, oh Dios".
510 A. RODRIGUEZ CARMONA

La prtmera parte del v. 19 se aplica fácilmente a Moisés, del


que también se escribe "has subido" (ºlh 'l-YHWH: Ex 19,3; 24,1
cf. ExR XXVIII, 1 que explica Ex 19,3 a la luz de Sal 68,19). Ahora
bien, si el "subir" se refiere a Moisés, también se reñere el resto,
según el targum: "cautivaste la cautividad, tomaste dones". A la
luz del paralelismo cautivar es lo mismo que tomar y cautividad lo
mismo que dones, y éstos no son otros que el don fundamental, el
don de la Torá. De forma parecida traduce el tg Sal 68,19:
"Subiste al firmamento, Moisés profeta,
llevaste cautiva la cautividad;
enseñaste las palabras de la Torá,
diste dones a los hijos de los hombres".

El motivo, pues, procede del Sal 68 y es antiguo, anterior a


Ef 4,8, que también se .inspira en él 18.- La referencia al Ps 68 se con-
firma, además, porque el v. 18 habla expresamente del Sinaí y de
los carros de Dios, motivo éste que también recoge PsJon: "Se le
apareció La Gloria de la :s,ekina oon dos mil miríadas de ángeles y
con cuarenta y dos mil carros de fuego". El número de carros pro-
cede de 1a exégesis gramatical de la frase "{los carros de Dios) mi-
llares y miríadas" del Sal 68,18: el dual ribothaim, miríadas, ímpli-
oa dos veces miríadas (en plural) y para poder hablar de miríadas
hacen falta al menos dos miríadas {10.000 + l~:000 = 20;000); aho-
ra bien, el dual quiere decir que hay que doblar esta cantidad, e.d.,
40.000. Por su parte, millares, alphey, ímplícan, al menos, 2.000,
puesto que la terminación de la palabra es plural, Todo ello da
42.000. Este es el procedimiento que sigue ExR XXIX, 2, texto atri-
buido a Abdimi de Haifa, aunque éste interpreta ribothaim como
20.000. En cuanto a los ángeles del servicio, presentes en el Sinaí,
según Eleazar ben Arak '(T2) eran 60 miríadas, 600.000, uno por
cada uno de los israelitas que salieron de Egipto (Ex 12,37; Nm 11,21
cf. Ex 38,26; Nm 1,46; 3,32; 26,51), los cuales coronaron, a cada is-
raelíta oon la corona del Nombre Inefable {PRE 47,1, cf. ExR LI, 8):
"R. Eleazar ben Arak decía: Cuando el Santo, bendito sea, des-
cendió para entregar su Ley a Israel, bajaron con él seíscíen-
tos mil ángeles servidores, correspondtentes a los soíscíentos miÍ

18 En esta tradición se inspira Ef 4,8, que aplica la subida a la as-


censión de Jesús, cuyo resultado es "dar dones a los hombres": et.
M. McNamara (The New Testament and the Palestinian Targum to
the Pentateuch [Rome 1966] 80-81), que cree que el tg. Sal 68 puede
transmitir una tradición palestinense; R. Le Déaut, Liturgie Juive et
Nouveau Testament (Rome 1965) 46; A. Diez Macho, Targum y Nuevo
Testamento, en Mélanges E. Tisserant (Cittá del vatícano 196.4) 156.
LA MUERTE DE MOISES SEGUN EL TARGUM DT 34,5 511

guerreros de Israel, con espadas y guirnaldas en sus manos, y


coronaron a Israel, con la corona del Nombre Inefable" 19.

En sab 88a se dobla el número de ángeles y cada israelita re-


cibe dos coronas. Son, por tanto, 120 miríadas, 1.200.000. PsJon
sube el número hasta 2.000 miríadas, 20.000.000 ángeles, posible-
mente para expresar una cantldad incontable, y refleja una tradi-
ción posterior, en la que se van aumentando los números.
g. La corona del sacerdocio la recibió Moisés porque ofreció
sacrificios pacíficos durante siete días. Se deduce esto de Lv 8-9:
según Lv ,8 Moisés ordenó de sacerdotes a Aarón y sus hijos, ofre-
ciendo sacrificios; según Lv 9,1, el octavo día recibió la orden de
mandar comenzar su ministerio a los nuevos sacerdotes. Esto quie-
re decir que Ira ordenación y el ofrecer sacrificios, ,es decir, el mi-
nisterio de Moisés, duró siete días y que después "no ofició más
en el altar", como dice Ps.Ion Lv 9,1 cf. PsJon Nm 7,1. La tradición
es antigua y está atestiguada en SLv 8,33; ExR XXXV, 5; LvR 6;
NmR XII, 15 y OantR I, 7,3.
h. Corona del reino. Ps-Ion afirma que Moisés tuvo la corona
del reino y esto como don del cielo, justificándolo porque no actuó
como guerrero ni como jinete ni corno general, que se conquista
un reíno, La afirmación es antígua, pues ya está atestiguada en Fi-
lón (De praemiis 54), que habla igualmente del modo como ha
conseguido la realeza: "Ha negado a ser rey, no según el uso nor-
mal, con un ejército y una armada, con una infantería y una caba-
llería, sino elegido por Dios por medio del pueblo, inspirando Dios
el libre sufragio de éste" 20•
La misma atribución aparece en los autores helenistas Deme-
trio, Ezequiel el Trágioo y Justo de Tiberiades 21, y en la tradición
rabínica posterior {Mekh Ama1ek 2,55; ExR XL, 2; NmR XVIII,
2.4.10-11), que se inspiran en Dt 33,5, texto que aplican a Moisés
(cf. PsJon Dt 33,4--5; ExR II, 6) 22:
"Hubo un rey en Yesurum " (Dt 33,5)
"Los hijos de Israel decían es Moisés ...
es él, que era rey en Israel" (Ps.Ion 33,4-5).

Otra corriente de tradición, que vindica 1a realeza sólo para


David y sus hijos, la niega a Moisés {GnR LV, 6; DtR II, 7). La opí-

19 PRE 47,1, cf. ed. M. Pérez Fernández, 326.


20 De praemiis 54, et, ed. Beckaert, 68s. Sobre Moisés en Filón cf.
B. Botte, La vie de Mo'ise par Philon, en Mo'ise, l'homme de l' Alliance,
(Desclée, Paris-Tournai 1955) 58-60.
21 Cf. L. Ginzberg, o.e. V, 422 n. 143; VI, 28 n. 170.
22 Cf. H. A. Wolfson, Philo II (Cambridge 1948) 326.
512 A. RODRIGUEZ CARMONA

mon parece ser también antigua, si nos atenemos al testimonio de


GnR, que la atribuye a R. Josué, T2• Posiblemente el motivo de
la negación fue La incompatibilidad que vio un sector del judaísmo
entre el carácter único de la realeza de David, abundantemente
atestiguado por la Biblia, y una posible realeza de Moisés, que por
1a grandeza del personaje necesariamente también debería ser úni-
ca. ExR II, 6 y 'Zeb 102a parecen ser un compromíso ,entre arribas
opiniones, pues por una parte aceptan la realeza de Moisés, pero
por otra le niegan carácter sucesorio, ya que éste sólo lo tendrá
la realeza de David.

3. La muerte como "reunirse"


PsJon y TC aluden a la muerte de Moisés con la categoría "re-
unirse" 23• Se trata de una fórmula tomada de la Biblia,- que el TP
usa con frecuencia y desarrolla de diversos modos:
- "Reunirse con su pueblo" co; N, PsJn Gn 25,8; 25,17; 35,29;
49,29.33; Nm 2·0,24; 27,13; Dt 32,50; N Gn 47,30; Nm 31,2). Esta for-
mulación traduce literalmente el TH.
- "Reunirse con sus padres" {O, N, PsJon Gn 15,15; N Gn
47,30 y Dt 31,16) es una adaptacíón de la formulación anterior a
otras equivalentes hebreas, como "ír a los padres" {Gn 15,15 cf.
LAB 19,1; 2 Bar 3,2) y "dormir con los padres" (Gn 47,30; Dt 31,16).
- "Ser reunido de en medio del mundo" es la variante em-
pleada por PsJon en nuestro texto concreto y e15 muy empleada por
el TP cf. N Gn 5,5.8.11.14.17.20.27.31; 9,29; Dt 31.14; N, Fr Gn 5,8;
PsJon, Ngl Nm 11,2·6.29; N, PsJon Dt 6,4; 32,1; Fr Dt 21,18. Esta
formulación presenta la muerte como un "reunirse", sin decir oon
quién, pero el uso del mismo verbo de las formulaciones anteriores
apunta al mismo término (pueblo, padres) y, por tanto, reunirse
con los antepasados en el seol. Lo característico de la formulación
es explicitar el término a qua, que en las otras formulaciones que-
daba implícito: el mundo, este tiempo y este espacio, donde el vi-
viente actúa y se relaciona.
- "Ser reunido" es otra variante empleada en nuestro texto
por TC y Ps.Ion y que aparece también en otros lugares del TP:
Ngl, Fr Gn 50,16; Ngl Gn 5ü,24; O, N, PsJon Nm 2·0,26; 27,13; N Dt
4, 22; 10,6; N, Fr Dt 32,50; 34,7; Fr 33,1. Es una abrevíacíón de
"reunirse con su pueblo" y se inspira en la misma abrevíacíón que
hace el TH en Nm 20,26; 27,13.
En estas formulaciones, "ser reunido", .kns, aplicado ,a la muer-
te, indica que el muerto va al seol y allí se junta a sus habitantes.

23 Una amplia visión sobre el tema puede verse en A. Rodríguez


Carmona, Concepto de "muerte" en el Targum Palestinense del Penta-
teuco: Est Bibl 41 (1983) 107-136.
LA M U ERTE DE M OISES SEGU N EL TARGU M DT 34,5 513

El uso es arcaico y en la forma más antigua, "reunirse con sus


padres", probablemente significa el enterramíento del muerto en
el sepulcro familiar 24, pero como el sepulcro está vinculado al
seol, sepultar con los antepasados equivale a reunirse con ellos en
el seol. Este segundo aspecto se subrayó hasta el punto de anular
el primero, encontrándose fórmulas en las que se habla de "reunir-
se con su pueblo", incluso cuando el muerto no ha sido enterrado
en el sepulcro familiar cf. Gn 25,8; 35,29; 49,29; Nm 20,24; 27,13;
Dt 32,50. De por sí el verbo no dice nada sobre el carácter de este
"reunirse" en el seol. A la luz de la antigua concepción del seol,
que concibe a los muertos como sombras aisladas entre sí, el
"reunirse" del TH es una simple coexistencía, sin relaciones perso-
nales, pero leído a la luz de la concepción del seol que tienen algu-
nos textos targúmicos (et. P15J,on Dt 31,16), que reflejan cierta divi-
sión de lugares en el seol, según las obras de cada uno, puede hacer
referencia a una reunión con los justos, ya que el TP sólo emplea
la fórmula cuando habla de La muerte de los justos 25•

4. Murió con un beso de la Palabra de Yahvé


El TH dice que Moisés murió "de acuerdo con lo que había
dicho Yahvé", lit. "según la boca de Yahvé". Onquelos aclara el sen-
tido brevemente, escribiendo "de acuerdo con la Palabra (memra)
de Yahvé", y de forma similar proceden Fr 440 y 264, TC y N. Pseu-
dojonatán, sin embargo, entiende literalmente 'al-py y traduce "con
la boca de la Palabra (memra) de Yahvé", ,e,d., "con un beso de la
Palabra de Yahvé". Traduciendo de este modo, altamente sugesti-
vo, PsJon sigue un camino medio entre dos posturas contradícto-
rías que añrmaban la muerte y la no-muerte de Moisés, Según la
tradición mayoritaria Moisés murió, porque así lo declara explíci-
tamente la Escritura y porque todo hombre debe morir a causa del
pecado de Adán {cf. DtR IX, 8) y, más en concreto, por su falta
de fe al golpear dos veces la roca (Nm 2,0,12; Dt 1,37; 3,26; 32,51).
Según otro punto de vista, minoritario aunque antiguo (et. Filón,
De Sacr Abel 3; Fl Josefo, AJ IV, 8,48), no murió sino que fue lle-
vado al cielo. PsJon afirma la muerte, pero no por obra del ángel
de la muerte, sino por un beso de la Palabra de Yahvé, cosa que
no sucede a todos los mortales 26• E·ste punto de vista ya está ates-
tiguado en LAB XIX, 16:
24 Cf. N. J. Tromp, Primitive Conceptions of Death and Netherworld
in the Old Testament (Rome 1969) 168s; B. Alfrink, L'expression
ne'ssap et-sammaino: OTS 5 (1948) 118-131; K. J. Illman, Old Testament
Formulas about Death (Abo 1979) 43-45.
25 Cf. A. Rodríguez Carmena, Concepto de muerte, 119-123.
26 Cf. S. E. Loewenstamm, The Death of Moses: "Tarbiz" 27 (1958)
142-157; G. Vermes, La figure de Mo'ise au tournant des deux testa-
33
514 A. RODRIGUEZ CARMONA

"mortuus est in gloria, secundum os Domini


et sepelivit eum iuxta quod promiserat eí" 27•

El Midrás desarrolla ampliamente esta tradición 28: Petirat Moshe


XXV; Yalqut Simeoni wylk 11; DtR XI, 10 cf. BB 17a:
"El Santo le dijo: Estira las piernas, une la una a la otra, :Y
él las extendió. Después le dijo: Pon tus manos sobre el pecho.
Y él las puso. Finalmente le dijo: Baja las pupilas de tus ojos.
Y él las bajó. En este momento el Santo llamó el alma de Moi-
sés, diciéndole: Hija mía, yo te he fijado 120 años en el cuerpo
de Moisés, sal y no tardes, pues ha llegado el final, en que debes
salir. Enseguida ella respondió: Yo sé que tú eres el Dios de los
espíritus y de las almas y que en tus manos está el alma de los
vivos y de los muertos; tú me has creado y me has puesto en el
cuerpo de Moisés para 120 años, pero ¿quién hay que tenga un
cuerpo tan puro como Moisés? Yo no quiero salir ... Moisés: vuel-
ve, alma mía, a tu reposo, porque él Señor te ha llenado de tus'
bienes. Cuando el Santo vio esto, lo besó y tomó su alma con ú1i
beso, como está escrito (Dt 34,5)" 29.

ANTONIO RODRÍGUEZ CARMON_A

ments, en Moise, l'homme de l' Alliance (Desclée, Paris-Tournai 1955)


89s.
21 Ed. Kisch 166.
28 Cf. R. Bloch, Quelques aspects de la figure de Mo'ise da.ns·la.tra-
dition rabbinique, en Mdise, l'homme de l' Alliance (Desclée, Paris-
Tournai 1955) 130 y n. 104.
29 · Petirat Moshe XXV, ed. Meyer Abraham, 112.

S-ar putea să vă placă și