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nAciOnAL”
CARRERA: Edificaciones
SECCIÓN: III – A
INTEGRANTES:
2. EL VIDRIO DE SEGURIDAD :
Es el vidrio fabricado, tratado, combinado y complementado con otros
materiales, de forma tal que aumente su resistencia a la rotura y que reduzca el
riesgo de lesiones a las personas en comparación con el vidrio común, hay
varios tipos vidrios laminados y vidrios templados.
CLASIFICACION DEL VIDRIO:
1. VIDRIOS PRIMARIOS:
Son los que se obtienen directamente del horno de fundición, es decir,
que solo han pasado por un solo proceso de fabricación.
VIDRIO ESTIRADO:
Proceso por la cual una máquina
estiradora levanta de la superficie del
vidrio fundido del horno la masa
viscosa, que se transforma en una
lámina. El espesor del vidrio depende
de la velocidad de estiramiento y de la
temperatura de la masa en fusión.
EL VIDRIO PULIDO:
Los materiales pasan por un horno de
fusión luego es prensado entre dos rodillos
giratorios, luego atraviesa un horno de
recocido, pasa por la máquina que devasta
las dos caras del vidrio y posteriormente
por la maquina pulidora que le da su
transparencia
VIDRIO ROLADO:
Es el vidrio que no permite el registro ni la
visibilidad de un lado a otro. Se consideran dentro
de este rubro a los vidrios que distorsionan a los
objetos que se aprecian a través del elemento.
(Como es el caso de los vidrios grabados, vidrio
alambrado y vidrio decorativo).
VIDRIO FLOTADO:
Consiste en hacer pasar una lámina de vidrio
fundido sobre un baño de estaño metálico
fundido, lo cual el vidrio flota sobre el estaño
fundido generando una lámina exacta.
2. VIDRIOS SECUNDARIOS:
Estos vidrios son el resultado de una segunda elaboración por parte de una
industria transformadora, que utiliza como materia prima el vidrio producido
por alguna industria primaria.
VIDRIO TEMPLADO:
Es un vidrio de seguridad, se produce a
partir de un vidrio flotado el cual es
sometido a un tratamiento térmico, que
consiste en calentarlo uniformemente
hasta temperaturas mayores a los 650°C y
enfriarlos rápidamente con chorros de aire
sobre sus caras, en hornos diseñados para
este proceso. Este proceso le otorga una
resistencia mecánica a la flexión (tensión)
equivalente de 4 a 5 veces más que el
vidrio primario, resiste cambios bruscos de
temperatura y tensiones térmicas 6 veces
mayo- res que un vidrio sin templar. Si se
rompiera el vidrio templado se fragmenta
en innumerables pedazos granulares
pequeños y de bordes romos, que no
causan daños al usuario.
VIDRIO LAMINADO:
Es un vidrio de seguridad, está
compuesto por dos o más capas de vidrio
flotado primario u otras combinaciones,
unidas íntimamente por interposición de
láminas De Polivinil Butiral (PVB), las que
poseen notables propiedades de
adherencia, elasticidad, resistencia a la
penetración y al desgarro. Posee
propiedades de protección contra los
rayos ultra violeta (UV). En caso de
rotura, los trozos de vidrio quedarán
adheridos al PVB, evitando la posibilidad
de producir daños al usuario. Según
requerimientos estéticos y funcionales
pueden hacerse combinaciones de los
cristales y diferentes espesores de PVB
para obtener la performance acústica,
térmica y transmisión de luz visible para
cada situación en particular.
OTROS TIPOS DE VIDRIO SECUNDRIOS SON:
VIDRIO TRASLUCIDO.
ESPEJOS DE VIDRIO.
LA INSTALACION DE UN VIDRIO:
1. VIDRIO PRIMARIO:
Todo vidrio primario deberá ser instalado necesariamente sobre marcos que lo
contengan en todo su perímetro. No se deberán instalar vidrios primarios con
entalles o muescas ya que aumentan aún más el riesgo de rotura del mismo.
2. VIDRIO SECUNDARIO:
La instalación para los vidrios catalogados como procesados, se realizará de
acuerdo a sus características y propiedades físicas y mecánicas.
VIDRIO TEMPLADO: Para este tipo de vidrio deberá considerarse los siguientes
sistemas de sujeción:
c) Con tira fones, pernos de sujeción y/o elementos tipo «arañas» en los vértices
del mismo.
VIDRIO LAMINADO: Para este tipo de vidrio deberá considerarse los siguientes
sistemas de sujeción:
CRISTALES:
1. CRISTALES:
Aunque el vidrio se suele confundir con un tipo de cristal, en realidad no posee las
propiedades moleculares necesarias para ser considerado como tal; el vidrio, a
diferencia de un cristal, es amorfo. Los cristales se distinguen de los sólidos amorfos
no solo por su geometría regular, sino también por la anisotropía de sus
propiedades, que no son las mismas en todas las direcciones, y por la existencia de
elementos de simetría. Los cristales están formados por la unión de partículas
dispuestas de forma regular siguiendo un esquema determinado que se reproduce,
en forma y orientación, en todo el cristal y que crea una red tridimensional. En un
cristal, los átomos e iones se encuentran organizados de forma simétrica en redes
elementales, que se repiten indefinidamente formando una estructura cristalina.
Estas partículas pueden ser átomos unidos por enlaces covalentes, como el
diamante y los metales, o iones unidos por electrovalencia, como el cloruro de
sodio. En otras palabras, los cristales podrían considerarse moléculas colosales, que
poseen tales propiedades, a pesar de su tamaño macroscópico. Por tanto, un cristal
suele tener la misma forma de la estructura cristalina que la conforma, a menos
que haya sido erosionado o mutilado de alguna manera.
La mayoría de los cristales naturales se forman a partir de la cristalización de gases
a presión en la pared interior de cavidades rocosas llamadas geodas. La calidad,
tamaño, color y forma de los cristales dependen de la presión y composición de los
gases en dichas geodas (burbujas) y de la temperatura y otras condiciones del
magma en el que se formen.
Uno de los usos más comunes del cristal en el tema de la construcción son los
acabados estéticos o detalles arquitectónicos que podrían ser las arañas de
cristales lámparas u otros accesorios.
2. TIPOS DE CRISTALES:
Cristales sólidos:
Excepto el vidrio y las sustancias amorfas, cuya estructura no aparece ordenada
sino desorganizada, toda la materia sólida se encuentra en estado cristalino. En
general, se presenta en forma de agregado de pequeños cristales (o
policristalinos) como en el hielo, las rocas muy duras, los ladrillos, el hormigón,
los plásticos, los metales muy proporcionales, los huesos, etc., o mal
cristalizados como las fibras de madera corridas.
Cristales luminosos:
Algunos líquidos anisótropos (ver anisotropía), denominados a veces "cristales
líquidos", han de considerarse en realidad como cuerpos mesomorfos, es decir,
estados de la materia intermedios entre el estado amorfo y el estado cristalino.
Cristales iónicos:
Los cristales iónicos tienen dos características importantes: están formados de
enlaces cargados y los aniones y cationes suelen ser de distinto tamaño. Son
duros y a la vez quebradizos. La fuerza que los mantiene unidos es
electrostática. La mayoría de los cristales iónicos tienen puntos de fusión altos,
lo cual refleja la gran fuerza de cohesión que mantiene juntos a los iones.
Cristales covalentes:
Los átomos de los cristales covalentes se mantienen unidos en una red
tridimensional únicamente por enlaces covalentes. El grafito y el diamante,
alótropos del carbono, son buenos ejemplos. Debido a sus enlaces covalentes
fuertes en tres dimensiones, el diamante presenta una dureza particular y un
elevado punto de fusión. El cuarzo es otro ejemplo de cristal covalente. La
distribución de los átomos de silicio en el cuarzo es semejante a la del carbono
en el diamante, pero en el cuarzo hay un átomo de oxígeno entre cada par de
átomos de silicio.
Cristales moleculares:
En un cristal molecular, los puntos reticulares están ocupados por moléculas
que se mantienen unidas por fuerzas de van der Waals y/o de enlaces de
hidrógeno. El dióxido de azufre (SO2) sólido es un ejemplo de cristal molecular
al igual que los cristales de I2, P4 y S8. Con excepción del hielo, los cristales
moleculares suelen empaquetarse tan juntos como su forma y tamaño lo
permitan. Debido a que las fuerzas de van der Waals y los enlaces de hidrógeno
son más débiles que los enlaces iónicos o covalentes, los cristales moleculares
suelen ser quebradizos y la mayoría funden a temperaturas menores de 100 °C.
Cristales metálicos:
La estructura de los cristales metálicos es más simple porque cada punto
reticular del cristal está ocupado por un átomo del mismo metal. Los cristales
metálicos por lo regular tienen una estructura cúbica centrada en el cuerpo o en
las caras; también pueden ser hexagonales de empaquetamiento compacto,
por lo que suelen ser muy densos. Sus propiedades varían de acuerdo a la
especie y van desde blandos a duros y con puntos de fusión de bajos a altos,
pero todos en general son buenos conductores de calor y electricidad.