TEXTO CURATORIAL

“ENCUENTROS VIOLENTOS”
PhD. Yenney Ricardo

El artista Marcelo Cervantes Buitron (1973, Ibarra, Ecuador),

despliega sus destrezas en la Serie “Encuentros Violentos” 2017-
2018, que compila seis dibujos sobre tinta y son resultado del
Proyecto de Investigación La Violencia intrafamiliar en el
contexto imbabureño, de la carrera de Artes Plásticas de la FECYT.
Si bien la violencia es un fenómeno complejo que está presente de
diversas maneras en la sociedad y su representación en la Historia del
arte es legendaria, Marcelo Cervantes es la primera vez que la asume
como tema en su obra, y la circunscribe al universo familiar, a ese
microcosmos tan sui generis y vital para todos. A partir de este nuevo
discurso expositivo el artista rompe la continuidad temática sobre
asuntos religiosos; sin embargo no renuncia al argumento que ha
configurado y legitimado su obra: los conflictos humanos.
Los dibujos constituyen metáforas expresionistas que nos hacen
pensar en los efectos de la violencia, convocan a realizar una lectura
profunda de sus dimensiones y cicatrices que no pueden ser
atenuadas, sorteadas o superadas fácilmente. Las obras Infancias
robadas y Tormentos de Aula revelan el impacto de relaciones
violentas en el seno de la familia, en la etapa del crecimiento y la
construcción de la personalidad de un ser humano. Por su parte
Presiones sociales y Juegos de la mente manifiestan los desequilibrios
emocionales y desajustes que ello supone. Al mismo tiempo, las
obras Impulso y Rupturas familiares convocan a reflexionar sobre
cómo este fenómeno, naturalizado en algunos espacios, produce un
sistema de efectos que son generadores de nuevas acciones violentas
y condicionan la relación entre el individuo y el contexto social.
Desde el lenguaje plástico los niños devienen sujetos violentados
psíquicamente y sus figuras representadas a lo Naif, son
contrapuestas visualmente con las de los adultos; aun cuando están
descolocados, fragmentados en su esencia y en su armonía de
tonalidades y forma, mantienen los colores, la misma vitalidad que los
hace vulnerables. Desde el punto de vista de la composición, las
obras hablan sobre cómo se establece el poder dentro de la familia, el
cual está relacionado culturalmente con dos variables: el género y la
edad. Los formatos elegidos por el artista, también se convierten en
enunciados, son perímetros opresores, tal como puede ser un espacio
familiar agresivo.

Marcelo Cervantes, ha recreado atmósferas inquietantes como

reflejo del desequilibrio que supone la violencia familiar. Los
personajes evidencian tormentos, frustraciones, armonizadas con una
cuidada iluminación que enfatiza en las emociones. Los colores
manchados, la palpitación de las líneas fracturadas y contorsionadas,
las formas disgregadas expresan a gritos que la violencia se
multiplica, se legitima y se perpetúa. La serie “Encuentros
Violentos” Serie de dibujos sugiere evaluar las formas de pensar y
actuar frente a la violencia.