Sunteți pe pagina 1din 1

"Año del Diálogo y de la Reconciliación Nacional"

INSTITUCIÓN EDUCATIVA “SAN JUAN BAUTISTA LA SALLE”


“Un corazón, un compromiso, una vida”

TEJIENDO PROBLEMAS
Cansado de ser un obrero más en una gran empresa textil, Jorge decidió abrir su propio negocio.
Con los US$10.000 que iba a recibir de CTS al salir de la empresa, podía pagar la primera cuota de
una pequeña planta de seis telares que le habían ofrecido por 10 pagos mensuales de US$8.000.
Con los US$2.000 restantes pagaría el primer mes de alquiler y el mes de garantía exigidos por el
inmueble para la planta.
Gastar todo el dinero no le asustaba. Un vendedor de Gamarra quería producir 15.000 metros al
mes de telas en sus máquinas y le pagaría US$1 por metro. Recibiría US$15.000 al mes, con lo
cual podía pagar la cuota de la máquina y el alquiler, quedándole US$7.000 para él. Antes ganaba
US$500 y si bien ya no tendría seguro de salud y pensión, no era importante, pues casi nunca se
enfermaba y quién sabe si llegaría a los 65 años para cobrar la pensión. Igual con ese ingreso podía
incluso pagar un seguro privado.
Una vez embarcado en el proyecto, sus planes no salieron como los había previsto. El vendedor le
cobró por adelantado la primera cuota, pero le entregó las máquinas a los 20 días y encima debía
recogerlas. En el trayecto hacia su planta, un patrullero detuvo a uno de los camiones que
transportaba una máquina y como no tenía los papeles de la misma, se la incautaron. El vendedor
se lavó las manos: “ya te la entregué. Y tengo letras que puedo ejecutar y quitarte tu casa si no me
pagas”, le dijo.
Ya en la planta enfrentó otro problema, instalar las máquinas requería 40 días y él no tenía dinero
para pagar por ello, por el alquiler o incluso para alimentarse. Fue al banco a pedir prestado pero
todos lo rechazaron. Sin un empleo formal, no podían darle un crédito personal, y en el caso de su
empresa, no era formal y los bancos solo prestan a empresas formales que puedan demostrar con
facturas sus ingresos.
Una vez lista su planta, con dinero de prestamistas que le dieron dinero al 10% mensual, fue ante
su cliente para empezar a producir, pero este le dijo que ya no usaría sus máquinas, pues ya había
conseguido a otro proveedor. Sin cliente y endeudado, no le quedó más que devolver las máquinas,
regresar a su trabajo y laborar horas extra para poder devolver el dinero prestado. Ya en su trabajo,
se enteró que su empresa subcontrataba servicios de terceros y pagaba US$2 por metro de tela
producida, pero al igual que los bancos solo trabajaba con empresas formales. “Qué tonto fui al no
hacer las cosas en regla”, se lamentó siempre.
RESPONDE:
1. ¿Cuál fue el principal problema de Jorge?
2. El proveedor les amenazó con quitarles su casa si no le pagaban, ¿puede ocurrir lo mismo si
son empresas formales?
3. ¿Se me abrirán todas las puertas de los bancos si soy formal?
4. ¿Los policías le hubieran quitado la máquina a Jorge si la compraba de una empresa formal?
5. ¿Es muy difícil ser una empresa formal en el Perú?

EDUCACION PARA EL TRABAJO PROF. SUGEY YUFRA MAMANI

S-ar putea să vă placă și