Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Miguel Ángel Rodríguez Albarrán, Abogado, con domicilio en calle Barros Arana
Nº 492, oficina 61, sexto piso, Concepción, actuando en nombre de doña Susana
Verónica Vergara Moscoso, dependiente, domiciliada en Camino del Bosque Nº 3623,
Lonco Parque, Chiguayante, Concepción, a US. I. con respeto digo:
Antecedentes de hecho:
2.- Es del caso indicar SS. Iltma., que la póliza contratada con las recurridas, cubre
siniestros como: daños materiales, responsabilidad civil por daño emergente, por daño
2
moral y lucro cesante, robo de vehículo, pérdida total, daños a terceros por la carga,
riesgos de la naturaleza, granizo, sismo, huelga y terrorismo, actos maliciosos, robo de
accesorios, daños por propia carga, asistencia vehicular, VDR 45 días.
3.- Que el día 14 de marzo del año en curso, alrededor de las 12:47 horas, la
recurrente Sra. Vergara Moscoso, sufrió un siniestro, consistente en que ingresando a
cargar combustible al Servicentro Petrobras, de sociedad Covimar limitada, ubicado en
calle San Martín 1084, de Concepción, mientras el vehículo se encontraba estacionado,
pidió a uno de los bomberos de dicho Servicentro le cargara bencina de 95 octanos, y
éste bombero, con negligencia o malicia, le cargó diesel, lo cual le provocó daño al
vehículo generando una falla mecánica.
3.- De esta forma, siguiendo en este sentido las normas establecidas en el Código
Civil; en específico el artículo 565 el cuerpo de leyes indicado señala que son cosas
incorporales las que consisten en meros derechos; luego, el artículo 576 expresa que
tales son derechos reales o personales. Y el artículo 578 expone que estos son los que
sólo pueden reclamarse de ciertas personas, que, por un hecho suyo o la sola disposición
de la ley, han contraído las obligaciones correlativas. Por último, el artículo 583 expone
que sobre las cosas incorporales hay también una especie de propiedad.
5.- Ahora bien, el artículo 512 del Código de Comercio expone que en el contrato
de seguro, el asegurador toma sobre sí el riesgo de pérdida o deterioro sobre una cosa,
obligándose, mediante una retribución convenida, a indemnizarle la pérdida o cualquier
otro daño estimable que sufran los objetos asegurados”.
4
6.- Del mismo lado, el artículo 1545 del Código Civil expone “Todo contrato
legalmente celebrado es una ley para los contratantes, y no puede ser invalidado sino por
su consentimiento mutuo o por causas legales”, de modo tal que el marco contractual ha
quedado fijado por el contenido propuesto y que la recurrente aceptó.
7.- Así las cosas, el actuar de las recurridas es arbitrario e ilegal porque,
consiste en privar a mi representada de la indemnización que legítimamente le
corresponde por concepto de gastos causados a consecuencia del siniestro y que la
aseguradora debe pagar, la cual está lejos de reparar el daño causado ocasionado por el
siniestro, siendo su actuación contraria a lo establecido en el artículo 529 Nº 2 del Código
del ramo cuando señala que es obligación del asegurador: “2) Indemnizar el siniestro
cubierto por la póliza..”
ejecución del acto, por haber cambiado las circunstancias y, en definitiva, si así lo hace,
habrían de primar las consecuencias jurídicas de la primera conducta, debiendo
rechazarse la pretensión que se invoca, apoyada en una nueva tesis o idea, por envolver
un cambio de conducta que no se acepta”.
10.- No olvidamos tampoco que se trata de un contrato de adhesión y dirigido, en
que la igualdad de las partes para acordar y convenir las cláusulas de la póliza son
limitadas, quedando solamente la voluntad del contratante en cuanto a suscribir el
documento o no hacerlo. De la misma forma, la recurrente también es una consumidora y
como tal, ha visto vulnerados sus derechos en cuanto a la información plena y veraz por
parte de las recurridas, observando de parte ella un actuar abusivo, en cuanto a
excederse en las facultades que le fueron conferidas en la póliza, usando su posición
dominante ante una recurrente que, para todos los efectos legales, se encuentra en una
posición desfavorecida.
11.- Ssa., Ilustrísima, a mayor abundamiento no debemos olvidar que todo acto o
contrato requiere como elemento esencial para su existencia jurídica no sólo la
manifestación de voluntad y un objeto, sino que también una causa y que requiere para la
validez del mismo que sea lícita.
que se obligó (año en que se contrató el seguro) no tendría causa, desde el momento en
que la recurrida se niega a cumplir su obligación.
Otrosí: Ruego a Ssa. I. se sirva tener presente que en mi calidad de abogado habilitado
para el ejercicio profesional patrocino el presente recurso, y que señalo como domicilio el
ubicado en calle Barros Arana Nº 492, oficina 61, sexto piso, Concepción.