Sunteți pe pagina 1din 47

"Deficiencias legislativas en la protección de derechos de autor en software:

propuesta de creación de la Ley de Derechos de Autor en Software"

Autora : Consuelo Aldana Zepeda

ÍNDICE

INTRODUCCIÓN

Capítulo I. PANORAMA HISTÓRICO GENERAL.

1.1. La computadora y sus antecedentes.


1.2. Generaciones de computadoras.
1.3. ¿Qué es software?
1.3.1. La evolución del software.
1.3.2. Características y componentes.
1.4. Clasificaciones del software.
1.5. Características básicas actuales de la industria de programación nacional.

Capítulo II. SISTEMAS JURÍDICOS COMPARADOS EN MATERIA DE INFORMÁTICA.

2.1. Legislación francesa.


2.2. Legislación inglesa.
2.3. Legislación norteamericana.

Capítulo III. DEFICIENCIAS EN LA PROTECCIÓN DE DERECHOS DE AUTOR EN


SOFTWARE.

3.1. Los derechos de autor.


3.2. El software como obra intelectual materia de protección de derechos de
autor. 3.3. Legislación nacional aplicable en materia de programación.
3.4. El Acuerdo No. 114.
3.4.1. Contenido del Acuerdo No. 114.
3.4.2. Análisis y alcance del Acuerdo No. 114.

Capítulo IV. RESPUESTAS JURÍDICAS A TRAVÉS DE LA LEY DEL SOFTWARE:


UNA PROPUESTA DE PROMULGACIÓN.

4.1. El Capítulo IV de la Ley de Derechos de Autor: el principio de la solución.


4.2. Análisis de la importancia de promulgación de la "Ley de Derechos de
Autor en
Software"
4.3. Naturaleza jurídica en el Derecho mexicano de la "Ley de Derechos de
Autor
en Software"
4.4. "Ley de Derechos de Autor en Software": la búsqueda necesaria de una
respuesta
jurídica.

CONCLUSIONES.

BIBLIOGRAFIA.
INTRODUCCIÓN

¿Cuáles son las deficiencias existentes dentro de la Legislación sobre


Derechos de Autor que impiden lograr una adecuada y eficaz protección a los titulares
de dichos derechos en materia de Software... y cómo se podrían subsanar dichas
lagunas? Este es el punto de partida de nuestra investigación.

El mundo está en constante evolución, sin embargo nuestro Derecho aparece


como una ciencia casi estática y sumamente rezagada en comparación con las demás
ciencias. Es tanta la información y los avances científicos y tecnológicos que se
generan diariamente, que resulta virtualmente imposible para el legislador el
contemplar cada uno de los posibles supuestos jurídicos que de estos descubrimientos
se deriven.

La computación, hasta hace unos años conocida sólo por unos cuantos debido
a la complejidad de su manejo, es en la actualidad una herramienta de trabajo casi
indispensable y cuyas aplicaciones se observan en las diversas ramas de la actividad
humana. Por lo tanto, el Derecho no puede sustraerse al avance científico y
tecnológico de la época moderna, haciendo necesario un proceso de adaptación que
permita incorporar las computadoras y su regulación al Derecho.

La necesidad de que se regule en forma específica los Derechos de Autor en


Software surge de las características específicas de la materia: el vertiginoso ritmo con
el que se van presentado nuevas modificaciones que vuelven obsoletos los anteriores
adelantos en programación es sólo una de las razones por las cuales los plazos y
términos comprendidos en nuestra ley no son los adecuados.

En la tesis propuesta nos enfocaremos al estudio y análisis de la naturaleza


jurídica en el Derecho mexicano de los Derechos de Autor en Software, con el fin de
ubicar las lagunas existentes en nuestra legislación a este respecto y para esto,
además, resulta necesario analizar lo que otros países han hecho en la búsqueda de
conseguir una solución a dicho problema. En base a lo anterior, podemos encuadrar
como objetivos generales de la presente tesis los siguientes:

§ Brindar un panorama general que permita visualizar no sólo la importancia que


tiene la protección jurídica respecto a la invasión de los derechos de autor en materia
de software sino la necesidad de contemplar dicho problema específico dentro de la
Ley de Derechos de Autor.

§ Analizar la naturaleza jurídica de los derechos de autor en software en el


Derecho mexicano.

§ Comparar las disposiciones provenientes de algunos de los países que ya


cuentan con legislación específica sobre esta problemática.

§ Exponer las lagunas jurídicas concretas existentes, en México, dentro de la


regulación de los derechos de autor en materia de informática.

§ Exponer las deficiencias existentes dentro de la reforma de la Ley Federal del


Derecho de Autor publicadas en el Diario Oficial de la Federación el 19 de Mayo de
1997.

§ Proponer una reforma legal que permita subsanar las deficiencias legislativas
existentes y, de este modo, poder lograr una adecuada regulación y protección de los
derechos de autor en software.
§ Proponer la creación de dos organismos que permitirán el desarrollo de la
industria informática nacional: el Registro Nacional de Programas de Cómputo y el
Fondo Nacional de Informática.

Resulta indispensable resaltar el hecho de que debido a la complejidad de los


lenguajes de programación, la legislación propuesta debe ser tan flexible que permita
la injerencia de términos técnicos en informática para no caer en el vicio de la
denominación del objeto regulado sobre el Derecho y, con ello, asegurar que cualquier
supuesto jurídico en esta materia pueda ser resuelto jurisdiccionalmente, siendo éste el
principal objetivo de nuestra investigación: la obtención de una adecuada y eficaz
protección jurídica a los Derechos de Autor en Software, a través de la promulgación
de lo que denominaremos:

"LEY DE DERECHOS DE AUTOR EN SOFTWARE"

CONSUELO ALDANA ZEPEDA.

CAPÍTULO I

PANORAMA HISTÓRICO GENERAL

1.1. LA COMPUTADORA Y SUS ANTECEDENTES.

Algunas décadas atrás, el hablar de sistemas tecnológicos sofisticados


significaba referirse a calculadoras con funciones muy simples o a grandes monstruos
bautizados con el nombre de computadoras. Hace tan sólo 30 años, las pocas
computadoras que existían eran máquinas enormes y muy caras, usadas con fines
científicos exclusivamente; además, la complejidad y dificultad con la que siempre
había sido asociado el concepto de computación alimentaba el escepticismo del
grueso de la población que se resistía a integrar el uso de las computadoras como un
utensilio de la vida diaria.

Pero... ¿qué es una computadora? Debido a los alcances que actualmente


tiene la computación y la necesidad de irla implementando a cada vez más actividades
humanas, resulta lógico que el primer paso que debamos dar sea el definir qué es una
computadora: "una computadora es un equipo informático de tratamiento automático
de datos que contiene los órganos o elementos necesarios para su funcionamiento
autónomo"1 o en otras palabras, "es un rápido y exacto sistema de manipulación de
símbolos, organizado para aceptar, almacenar y procesar datos y producir resultados
bajo la dirección de un programa almacenado."2

Como se mencionó anteriormente, las primeras computadoras fueron hechas


para manejar números, con el fin de resolver problemas aritméticos, y es precisamente
de esa función de donde provino su denominación. "La palabra cómputo, se deriva de
la palabra cálculo, que proviene del latín calculus (piedra, guijarro) y calculi (piedras,
guijarros), haciendo referencia a las piedras que se utilizaban en la antigüedad para
efectuar cálculos".3

Durante siglos la gente vivió en la Tierra sin elaborar registros, pero cuando las
organizaciones sociales se empezaron a formar, los registros se hicieron necesarios y,
aproximadamente, en el año 3,500 a.C. los mercaderes de la antigua Babilonia
empezaron a llevar sus registros en tablas de arcilla. Este es el antecedente más
remoto de la computadora actual: el ábaco (proveniente del fenicio abak, que significa
"tabla lisa cubierta de arena") fue un original mecanismo de cálculo manual, y aunque
tiene una antigüedad de más de 2,000 años, sigue siendo muy usado.

Las técnicas manuales para asentar registros continuaron desarrollándose a


través de los siglos, con innovaciones tales como las auditorias de registros hechas por
los griegos, o los sistemas bancarios y los presupuestos a cargo de los romanos, sin
poder ignorar a las culturas prehispánicas, principalmente la maya, que se destacaron,
entre otras cosas, por el manejo de la aritmética.

Aunque las máquinas fueron introducidas en Europa hace casi 300 años para
perfeccionar la ejecución de sencillos pasos de procesamiento de datos, fue en 1614
cuando John Napier creó las tablas de logaritmos que calculan en forma sencilla
multiplicaciones y divisiones por medio de restas y sumas de logaritmos pero sin poder
escapar de tener errores. En ese mismo siglo, pero en 1633, Ougthred ideó la Regla
de Cálculo, un práctico método que, no obstante siendo menos preciso que las
tablas, fue desplazado por las calculadoras apenas tres décadas atrás.

Sin embargo, el gran salto lo dio Blas Pascal, en 1642, habiendo creado "una
máquina que realizaba sumas a través de ruedas engranadas; cada rueda se movía
dependiendo de las vueltas que daba a su vez otra rueda, cada vez que la rueda
pequeña completaba su vuelta del 1 al 9 la rueda siguiente a su izquierda se movía un
número, el cual era colocado en una especie de ventana que daba al exterior en donde
aparecía el total".4

Casi 30 años después, en 1673, Gottfried Leibniz perfeccionó el invento de


Pascal y añadió el de la Raíz Cuadrada, produciendo una máquina de cálculo que
podía sumar, restar, multiplicar, dividir y sacar raíces.

Es en 1804 cuando Joseph Marie Jacquard se acerca más a lo que hoy


conocemos como computación cuando diseñó una tarjeta perforada, generalmente de
cartón, en la cual se hacían perforaciones para determinar características específicas.
"El procesamiento de las tarjetas perforadas se basa en una idea simple: los datos de
entrada primero son grabados en una forma de código, por la perforación de tarjetas;
éstas son introducidas en máquinas que ejecutan los pasos del procesamiento".5

El inventor de las modernas técnicas de tarjeta perforada fue el doctor Herman


Hollerith quien en 1887 produjo un aparato conocido como máquina censadora y el
tiempo de tabulación con este método ocupaba sólo un octavo del requerido
anteriormente.

En 1890, Hollerith adaptó su equipo al uso de los negocios y en 1896 fundó la


Tabulating Machine Company para hacer y vender su invento; después esta empresa
se fusionó con otras para formar lo que hoy es conocido como International Bussiness
Machines Corporation (IBM). Las primeras tarjetas medían 3 por 5 pulgadas pero, en
1928, IBM mejoró la forma de esas tarjetas haciéndolas tan "pequeñas" como un dólar
antiguo y con una capacidad de 80 columnas.

En la primera mitad del siglo XIX, Charles Babbage creó la máquina analítica,
considerada por muchos como el prototipo de la computadora y que marcó el inicio de
lo que se conoce como la primera generación de computadoras ya que contaba con
características como: unidad de memoria o dispositivo interno, unidad de entrada por el
cual se le introducen los datos a procesar (en ese entonces eran las tarjetas
perforadas), un procesador capaz de decidir cuestiones simples, un control secuencial
del programa, 20 decimales de exactitud y una impresora automática para obtener
resultados que en la actualidad se denomina unidad de salida.

"En la cuarta década de este siglo surge la MARK I ó ASCC (Automatic


Secuence Controlled Calculator) producida por la Universidad de Harvard bajo la
supervisión de Howard Aiken. Esta máquina estaba formada por ruedas engranadas
operadas por switches empleando fuerza eléctrica, a pesar de lo cual era bastante
lenta."6 Las operaciones internas de esta máquina eran controladas en forma
automática con relevadores electromecánicos, que no son otra cosa que las ruedas
engranadas, y por contadores aritméticos mecánicos; por esta razón, la MARK I no es
considerada una computadora electrónica, sino electromecánica.

Para 1943 surgieron dos nuevas máquinas: la ENIAC (Electronic Numerical


Integrator and Calculator) fue la primera en usar bulbos y la primera computadora
electrónica, "podía realizar 5,000 operaciones por segundo, sin embargo se calentaba
demasiado.

La Z4 fue la gemela alemana de la ENIAC, pero a diferencia de ésta la Z4


controlaba el lanzamiento de bombas. A éstas siguió la EDVAC (Electronical Discrete
Variable Automatic Computer) cuya idea original fue tratada en un ciclo de conferencias
encabezadas por John Von Newman y que los diseñadores de la ENIAC -Echert y
Mauchly- hicieron realidad con la ayuda de la IBM entre 1945 y 1950".7

John Von Newman sugirió que los sistemas de numeración binaria fueran
usados en la construcción de computadoras, lo cual facilitó el diseño del equipo de
computación. Además, la EDVAC es la primera computadora electrónica con programa
almacenado, en base a la propuesta de Newman de que las instrucciones de
computadoras, así como los datos procesados, fueran almacenados en la máquina.

En 1951, Echert y Mauchly fundaron la Compañía Remington Rand y lanzaron


al mercado una nueva máquina llamada UNIVAC (Universal Automatic Computer) que
contenía como novedad una cinta magnética para la entrada y salida de datos, así
como el lenguaje ensamblador el cual, como explicaremos más adelante, hace posible
traducir el lenguaje de máquina en un lenguaje de Alto Nivel.

Y es en este momento cuando podríamos empezar a hablar de un enorme


avance en la tecnología ya que la UNIVAC contaba con los tres elementos clave de un
sistema de computación:

§ DISPOSITIVO DE ENTRADA: un sistema, actualmente, utiliza varios


dispositivos de entrada ya que pueden tener funciones distintas. Algunos permiten la
comunicación directa entre los humanos y las máquinas, un ejemplo sería el teclado de
una estación de trabajo conectada directamente -o en línea- con una computadora.
Otros requieren que los datos estén grabados en un medio de entrada, como es el
caso de la cinta magnética utilizada en la UNIVAC, aunque ahora son más conocidos
los dispositivos que leen datos grabados magnética- mente en cintas plásticas
revestidas especialmente (diskettes), discos plásticos flexibles o blandos y los más
recientes, los discos utilizados para CD-ROM. Pero sin importar el tipo de dispositivo
usado, todos son componentes para interpretación y comunicación entre personas y
sistemas de computadora.

§ UNIDAD CENTRAL DE PROCESAMIENTO (UCP): es el corazón del sistema y


se compone de:

1. Sección primaria de almacenamiento o memoria.

2. Capacidad de almacenamiento secundario (a veces llamado auxiliar o externo):


estos datos están frecuentemente fuera de línea, es decir, la UCP no tiene acceso
directo a ellos sin asistencia.

3. Sección aritmética-lógica, en donde todos los cálculos son "ejecutados y las


comparaciones o decisiones son hechas, ya que una vez que los datos pasan al
almacenamiento primario de los dispositivos de entrada, éstos son guardados y
transferidos conforme son necesitados, a la sección aritmética-lógica, donde tiene
lugar el procesamiento. Es importante señalar que el tipo y el número de las
operaciones aritméticas y lógicas que una computadora puede ejecutar están
determinados por el diseño de ingeniería de la UCP".8
4. Sección de control: aunque no ejecuta ningún procesamiento real de datos,
actúa como un sistema nervioso central capaz de seleccionar, interpretar y vigilar la
ejecución de las instrucciones del programa, manteniendo en orden y dirigiendo la
operación del sistema entero.

§ DISPOSITIVOS DE SALIDA: "como las unidades de entrada, los dispositivos


de salida son instrumentos de interpretación y comunicación entre los humanos y el
sistema de computadora"9, esto se debe a que los dispositivos toman los resultados de
salida de la UCP en forma de código de máquina y lo convierten a una forma que
puede ser usada a) por personas, como en el caso de un reporte impreso, o b) como
entrada para una máquina en otro ciclo de procesamiento, es decir, los diskettes,
discos blandos, CD's o, en el caso de la UNIVAC, una cinta magnética.

Como hemos visto, los medios utilizados para procesar datos han ido
cambiando a través de los tiempos: desde el ábaco hasta la computadora. Pero la
historia no termina aquí, ya que la computadora, como tal, también ha atravesado por
distintas etapas, las cuales serán analizadas más adelante. Actualmente existe una
gran variedad de computadoras que difieren entre sí en cuanto a tamaño
(macrocomputadoras, minicomputadoras y microcomputadoras, todas ellas con las
mismas unidades básicas funcionales, pero con capacidad destinada a usos
específicos), velocidad y costo.

Una vez creada, la UNIVAC sufrió un proceso evolutivo a lo largo de varias


décadas, sus componentes fueron cambiando, al igual que su estructura, las funciones
y los lenguajes de programación.

En los 90's surge la computadora personal (PC), la cual revolucionaría el


mundo no sólo de la computación, sino de los negocios y la vida de millones de
personas a nivel mundial. El PC es "un equipo que en la mayoría de los casos está
construido de forma modular. Esto quiere decir que la electrónica que controla, por
ejemplo, la unidad de disco está situada en una tarjeta de circuito impreso distinta que
la electrónica que se encarga de controlar la imagen de video que se le envía al
monitor".10 Esta característica del PC hace que reparar un fallo o reemplazar algún
componente por uno más moderno sea una tarea más fácil.

Los componentes que forman parte de un PC son los siguientes:

§ PLACA MADRE O PLACA BASE (motherboard): esta tarjeta contiene la UCP,


memorias del sistema, ranuras de expansión (slots), reloj, coprocesador e interfaz del
teclado.

§ FUENTE DE ALIMENTACIÓN.

§ TARJETA DE VÍDEO.

§ TARJETA CONTROLADORA DE LOS DISCOS FLEXIBLES Y LOS DISCOS


DUROS.

§ UNIDADES DE DISCOS FLEXIBLES: "Existen varios tipos de unidades de


discos flexibles, se clasifican por el tamaño del diskette y por su capacidad para
almacenar la información."11

§ UNIDADES DE DISCOS DUROS: "Los discos duros se clasifican por su


capacidad de
§ almacenamiento y por su velocidad de acceso."12 Por sus funciones de
almacenamiento, los CD's también se consideran unidad de disco al ser leídos en el
CD-ROM.

§ TARJETA CONTROLADORA DE LOS PUERTOS SERIE Y PARALELO.


§ TECLADO.

§ MONITOR: "es la pantalla donde se visualiza la información en una


computadora, existen diferentes tipos de monitores que varían conforme a la
resolución y al despliegue de colores. La resolución se refiere a la "nitidez de los
caracteres en la pantalla, los caracteres se componen de puntos no de líneas, y éstos
al estar compuestos de puntos más juntos tienen una mayor legibilidad".13 A estos
puntos se les llama pixeles. Los monitores son de dos tipos:

1. Monitores monocromáticos: son aquellos en los que se puede distinguir


solamente un color, pero pueden mostrarse diferentes tonos del mismo.

2. Monitores de color: pueden manejar una gama que va desde 4 hasta más de
256,000 colores".14

§ TARJETA CONTROLADORA DE OTROS PERIFÉRICOS:

1. Ratón (Mouse): "es un dispositivo para algunas computadoras, es como una


caja pequeña del tamaño aproximado de un ratón real. Se emplea en lugar del teclado
para dar instrucciones a la computadora seleccionando opciones. El usuario desplaza
el ratón sobre una superficie lo que ocasiona que se mueva un indicador luminoso en
la pantalla, llamado cursor. El cursor puede señalar a diversas figuras de la pantalla;
cada una de ellas representa un trabajo que ha de realizar la computadora. Cuando el
cursor apunta al trabajo deseado, el usuario pulsa un botón del ratón y empieza a
realizarse esta tarea."15

2. CD-ROM.

3. Módem.

4. Digitalizador (Scanner): sin duda alguna éste es uno de los más recientes
adelantos tecnológicos que ya están al alcance de los usuarios. El digitalizador es un
dispositivo periférico de entrada que permite guardar, en forma de archivo una imagen;
a través de él se pueden capturar imágenes tales como fotografías, dibujos, o bien,
capturar una página de un documento, ya sea como imagen o como texto. Le llaman
digitalizar a "la acción de transmitir imágenes a una computadora para poder trabajar
con ellas a través de paquetes específicos".16

5. Impresora: es uno de los dispositivos más comunes para dar salida a los datos.
Actualmente existen impresoras: de punto, láser, chorro de tinta.

La velocidad de las impresoras se mide por el número de caracteres


que imprime en un segundo, pero en el caso de las impresoras láser, su velocidad se
mide en páginas por minuto.

1.2. GENERACIONES DE COMPUTADORAS.

Las computadoras, para su fácil ordenación, han sido divididas en seis


generaciones:

§ PRIMERA GENERACIÓN: "La primera generación tenía bulbos de vacío


dentro de sus circuitos externos, se calentaban por lo tanto; tenían capacidad de
memoria bastante limitada y su programación era base del lenguaje de máquina,
manejando en el sistema binario (basándose únicamente en el 1 y en el 0)."17 Esta
primera generación de computadoras se dio básicamente en el período de 1954 a
1959, en el que muchas organizaciones adquirieron computadoras con propósitos de
procesamiento de datos, aunque la función por la que hayan sido diseñadas fue la de
uso científico. Estos empresarios destinaban el empleo de las computadoras como una
herramienta de contabilidad y las primeras aplicaciones fueron el procesamiento de
tareas de rutina, como las nóminas; en realidad, la mayoría de éstas fueron adquiridas
por la única razón del prestigio.

§ SEGUNDA GENERACIÓN: "Las computadoras de la segunda generación


fueron introducidas alrededor de 1954-1960 y eran pequeñas, rápidas y tenían gran
capacidad. El tubo de vacío, con su vida relativamente corta, dio paso a los
componentes de estado sólido compactos, tales como los diodos y los transistores. Y
las aplicaciones de los programas escritos en lenguaje para las máquinas dieron paso
a los lenguajes de alto nivel, más fáciles de entender. A diferencia de las primeras
computadoras, algunas máquinas de la segunda generación fueron diseñadas
pensando en usos de procesamiento no científicos."18 En esta generación, el uso de
transistores y memorias de ferritas redujeron el tamaño de las máquinas.

§ TERCERA GENERACIÓN: "La tercera generación tiene circuitos integrados


monolíticos, mismos que aumentaron considerablemente la velocidad operacional, a la
vez que incrementaron su confiabilidad y disminuyeron su costo y tamaño."19 "En
1964, IBM introdujo una tercera generación de hardware de computación, cuando
anunció su Sistema/360, familia de macrocomputadoras. Durante los años 70 muchas
compañías introdujeron nuevas líneas de equipo. Docenas de nuevas
minicomputadoras fueron presentadas y apareció la industria de la microcomputadora.
Máquinas de todos los tamaños continuaron siendo dirigidas hacia la miniaturización
de los componentes de los circuitos. El perfeccionamiento en velocidades, costos y
capacidad de almacenamiento fue alcanzado."20

§ CUARTA GENERACIÓN: El avance de la cuarta generación se da en los


circuitos integrados monolíticos, haciéndolos de menor tamaño y más condensados.

§ QUINTA GENERACIÓN: Actualmente, los avances tecnológicos nos han


llevado a la quinta generación, cuyas características parecen increíbles y que sin
embargo están a nuestro alcance. Hoy comprendemos a la computadora como "un
eficiente almacenador -recuperador-, manipulador de información, y toda disciplina
humana requiere de estos servicios en forma creciente. La constitución de máquinas
con capacidad de inferencia y conversación generalizada y la creación de sistemas de
conocimiento como instrumento de uso masivo, constituye hoy en día el objetivo a
lograr en la siguiente generación de computadoras".21 Entre los adelantos
tecnológicos característicos de esta generación se encuentran la introducción del disco
magnético, el desarrollo de la multiprogramación, la utilización de teletipos y de
terminales interactivas que dan lugar a tiempo compartido, es decir, las redes de
computadoras que no son otra cosa que la utilización simultánea de dos o más
personas de una UCP.

§ SEXTA GENERACIÓN: Hablamos de una sexta generación de computadoras


en base a los extraordinarios avances que se han venido dando en los últimos años en
el campo de la computación. Las grandes compañías como IBM, Digital equipment,
Apple y Maquintoch, por citar algunas, destinan gran parte de su presupuesto a la
creación de supercomputadoras, ya que aunque durante años éstas fueron usadas
casi exclusivamente en faenas de seguridad nacional tales como descifrar claves o
romper marcadores de bombas nucleares, en la actualidad son utilizadas para todo,
desde pruebas de choque para coches hasta el diseño de combustible para aviones.

El más ansioso consumidor de la supercomputadora es el área de los


científicos, esto se debe principalmente a que la simulación computarizada ha
reemplazado a los laboratorios de experimentación como una herramienta básica de
investigación. Pero, sin lugar a dudas, la sexta generación de computadoras se ha
caracterizado por la comercialización de los PC (Personal Computer), cuyas
características y componentes fueron estudiados en el primer punto del presente
capítulo. Sin lugar a dudas, el mayor logro de los PC es el haber propiciado que
millones de hogares y negocios alrededor de todo el mundo hagan de la cibernética
parte de su cotidianidad, convirtiendo así, a las computadoras en parte de nuestras
vidas.

Por último y a manera de preámbulo para el estudio del SOFTWARE, que es


en donde más novaciones se están dando, resulta interesante resaltar a manera de
síntesis que, en su forma más simple, como hemos visto en el primer punto del
presente capítulo, una computadora está formada por seis partes principales e
independientes: unidad de entrada, unidad de memoria, unidad aritmética-lógica,
unidad de salida, unidad de control y reloj; apareciendo éstas como constantes en
todas las generaciones de computadoras. Sin embargo, el mundo de la computación
es un área de cambios tan vertiginosos que lo que hoy es común, mañana tal vez ya
no lo sea, y a esto se agrega la gran diversidad de equipo de cómputo que existe en el
mercado, así como la enorme variedad de marcas y modelos.

1.3. ¿QUÉ ES SOFTWARE?

El software se define como "programas de instrucciones que dan a la


computadora una tarea en particular".22 Si comparamos nuestro organismo con una
compu- tadora, nos encontraríamos con que el software es el cerebro del cuerpo
humano.

En la década de los sesenta, cuando comenzó la comercialización de las


computadoras, el 70% del capital que se destinaba al desarrollo de la industria
informática era empleado en hardware, es decir, la parte física de un sistema de
cómputo, mientras que el 30% restante se invertía en software.

Posteriormente, la producción de equipos fue requiriendo de una menor


inversión y, por el contrario, la creación de programas de cómputo o software se tornó
más compleja y costosa, debido a que en buena medida son estos últimos los que
soportan el adecuado funcionamiento y carácter efectivo de las computadoras.

La programación ha tomado para su manejo el uso de claves o palabras que


en grupo se han denominado lenguajes, a través de los cuales las máquinas son
capaces de realizar procesos completos de ordenación, localización o de estudios
comparativos, sólo por mencionar ejemplos.

1.3.1. LA EVOLUCIÓN DEL SOFTWARE. El contexto en el que se ha


desarrollado el software está fuertemente ligado a las casi cinco décadas de evolución
de los sistemas informáticos. Un mejor rendimiento del hardware, una reducción del
tamaño y un costo más bajo, han dado lugar a sistemas informáticos más sofisticados.
Como hemos visto en páginas anteriores, durante los primeros años de
desarrollo de las computadoras, el hardware sufrió continuos cambios, mientras que el
software se contemplaba simplemente como un añadido. El software como producto
(es decir, programas desarrollados para ser vendidos a uno o más clientes) apenas
nacía; la mayoría del software se desarrollaba y era utilizado por la misma persona u
organización, la cual lo escribía, ejecutaba y, si fallaba, lo depuraba.

"La segunda era en la evolución de los sistemas de computadora se extiende


desde la mitad de la década de los 60 hasta finales de los 70. Las técnicas interactivas
abrieron un nuevo mundo de aplicaciones y nuevos niveles de sofisticación del
hardware y del software. Los sistemas de tiempo real podían recoger, analizar y
transformar datos de múltiples fuentes, controlando así los procesos y produciendo
salidas en milisegundos en lugar de en minutos. Los avances en los dispositivos de
almacenamiento en línea condujeron a la primera generación de sistemas de gestión
de bases de datos".23

Todos esos programas tenían que ser corregidos cuando se detectaban


fallos, modificados cuando cambiaban los requisitos de los usuarios o adaptados a
nuevos dispositivos hardware que se hubieran adquirido. Estas actividades se llamaron
colectivamente mantenimiento del software, pero estos gastos comenzaron a absorber
recursos en una medida alarmante.

La tercera era se caracteriza por la llegada de los microprocesadores y las


computadoras personales; el hardware se convierte en un producto estándar, mientras
que el software suministrado con ese hardware es lo que marca la diferencia.

La cuarta era del software está empezando ahora; las técnicas para el
desarrollo del software ya están cambiando la forma en que algunos segmentos de la
comunidad informática construyen los programas de computadora. Entre los
principales avances de esta era se encuentra la creación del software de redes
neuronales artificiales, el cual ha abierto posibilidades para el reconocimiento de
formas y habilidades de procesamiento de información al estilo de como lo hacen los
humanos.

1.3.2. CARACTERÍSTICAS Y COMPONENTES. Al buscar en un diccionario


una descripción del software, nos encontraremos con lo siguiente: "Software: (1)
instrucciones (programas de computadora) que cuando se ejecutan proporcionan la
función y el comportamiento deseado, (2) estructuras de datos que facilitan a los
programas manipular adecuadamente la información, y (3) documentos que describen
la operación y el uso de los programas".24

No hay duda de que podrían ofrecerse otras definiciones más completas, pero
nosotros necesitamos algo más que una definición formal para poder comprender el
basto mundo de la tecnología del software, para captar la importancia de la protección
de la ingeniería del software por nuestra legislación autoral.

En cuanto a las características del software y de una manera práctica,


podemos decir que:

§ El software se desarrolla, no se fabrica en un sentido clásico.

§ No se "estropea", se deteriora. La diferencia radica en que cuando un


componente de hardware se estropea, se sustituye por una pieza de repuesto; no hay
piezas de repuesto para el software, ya que cada fallo en él, indica un error en el
diseño o en el proceso mediante el cual se tradujo el diseño a código máquina
ejecutable. Por esta razón, el mantenimiento del software es considerablemente más
complejo que la del mantenimiento del hardware.

§ La mayoría del software se construye a medida, en vez de ensamblar


componentes existentes, ya que éstos no existen en materia de software. Se puede
comprar software ya desarrollado, pero sólo como una unidad completa, no como
componentes que los diseñadores puedan reensamblar en nuevos programas.

El software de computadora es información que existe en formas básicas: los


componentes. "Estos componentes se construyen mediante un lenguaje de
programación que tiene un vocabulario limitado, una gramática definida explícitamente
y reglas bien formadas de sintaxis y semántica. Estos atributos son esenciales para la
traducción por la máquina".25

Las clases de lenguajes que se utilizan actualmente son los lenguajes máquina
(representación simbólica del conjunto de instrucciones de la UCP), los lenguajes de
alto nivel (permiten al programador y al programa independizarse de la máquina) y los
lenguajes no procedimentales (en estos se especifica el resultado deseado, en vez de
especificar la acción requerida para conseguir el resultado).

"Para determinar la naturaleza de una aplicación de software hay dos factores


importantes que se deben considerar: el contenido y el determinismo de la información.
El contenido se refiere al significado y a la forma de la información de entrada y de
salida. El determinismo de la información se refiere a la predecibilidad del orden y del
tiempo de llegada de los datos".26

1.4. CLASIFICACIONES DEL SOFTWARE

Podemos clasificar al software de muy distintas maneras:

§ POR SU PROCEDENCIA.
§ POR SUS APLICACIONES.
§ POR SUS COMPONENTES.
§ POR SU ESTADO DE DESARROLLO.
§ POR SU VENTA Y FORMA DE DISTRIBUCIÓN.
§ POR SU DESTINO.

En cuanto a su PROCEDENCIA podríamos clasificar a los programas de


cómputo como nacionales e internacionales:

1. Nacionales: a aquellos creados y producidos en nuestro país.

2. Internacionales: los creados y producidos en cualquier otro país del extranjero.

Por sus APLICACIONES, en algunas ocasiones es difícil establecer categorías


genéricas que sean significativas, puesto que conforme aumenta su complejidad, es
más difícil separarlos nítidamente. Debido a su enorme variedad a continuación sólo
mencionaremos algunas de las posibilidades en áreas de aplicación:

1. "Software de sistemas: conjunto de programas que han sido escritos para


servir a otros programas.

2. Software de tiempo real: mide/analiza/controla sucesos del mundo real


conforme ocurren.

3. Software de gestión: las aplicaciones en este área reestructuran los datos


existentes para facilitar las operaciones comerciales o gestionar la toma de decisiones.

4. Software de ingeniería y científico: se caracteriza por los algoritmos de manejo


de números.

5. Software empotrado: reside en memoria de sólo lectura y se utiliza para


controlar productos y sistemas de los mercados industriales y de consumo.

6. Software de computadoras personales":27 hojas de cálculo, texto, gestión de


bases de datos, aplicaciones financieras, de negocios y personales, redes o acceso a
bases de datos externas son sólo algunas de los cientos de aplicaciones del software
que ha sufrido más innovaciones en su diseño que cualquier otro.

En cuanto a los COMPONENTES y CLASES DE ARCHIVOS del software


podemos realizar la siguiente clasificación, aunque es importante aclarar que debido a
la innumerable cantidad de programas existentes o en vías de crearse dicho listado
podría ser considerada obsoleta dentro de poco, sin embargo y a manera de
ejemplificación la veremos en seguida:

1. .COM: son archivos de comando, del sistema operativo, y en general son


extensiones al sistema operativo (MS-DOS).

2. .EXE: mejor conocidos como archivos ejecutables, que son los que realmente
con-
3. tienen el código del programa.

4. .DLL: podríamos dar una explicación simple denominándolos como archivos de


librerías dinámicas, que contienen rutinas y complementos utilizados para aplicaciones
comunes de los programas, como lo son los de video. Anteriormente tenían que
programarse íntegramente para cada programa, lo que provocó programas cada vez
más grandes.

5. .DRV: también llamados manejadores o drives, y son programas de control de


periféricos tales como tarjeta de video, impresora, tarjeta de audio, etc.

6. .SYS: o archivos de sistema, que se encargan de las variables de ejecución de


todo el equipo.

7. .XXX: básicamente son archivos de datos, que contienen el trabajo realizado


con algún software, por ejemplo .DOC, el cual es un fichero de MS Word, .SAM de
Amipro, .BMP que indica que el contenido es una imagen de mapa de bits, .DWG o
archivo de dibujo vectorial de Autocad, etc.

En lo concerniente a su ESTADO DE DESARROLLO, el software también


recibe diferentes denominaciones, pudiendo delimitar las siguientes etapas:

1. Core code: todos los programas comienzan con un código base o core code, el
cual debe ser perfeccionado hasta que efectivamente pueda ser utilizado por el usuario
para hacer cosas útiles, como puede ser proceso de palabras, etc.

2. Demoware: las primeras versiones que pueden, a veces y bajo condiciones


controladas, hacer el trabajo para lo que fueron diseñadas, se parecen ya al producto
final y son utilizadas para demostraciones por el desarrollador, son llamadas dentro de
la industria versiones demoware., puesto que su única función es la de servir de
muestra.

3. Vaporware: en relación al punto anterior, si esa versión es tomada como cuasi


definitiva y la empresa sólo se dedica a resolver los principales problemas del
programa para lanzarlo al mercado rápidamente y envueltos en una gran publicidad,
esta versión es llamada vaporware, por el resto de la industria.

4. Versiones beta: Una vez pasada esta etapa, las primeras versiones
completamente funcionales son llamadas versiones beta, y son estas versiones las que
reciben algunos distribuidores, e instituciones educativas de manera gratuita, o que al
menos eran gratuitas antes de Windows 95, para su prueba exhaustiva, por usuarios
reales, los cuales ayudaban a detectar fallas o a sugerir mejoras importantes al
producto, para el final lanzamiento al mercado.

5. Software V 1.0.0.: de esta forma se le denomina comúnmente a la primera


versión definitiva, la letra V significa "versión número...", y los números que vienen
después de dicha letra V indican el número de la versión. Resulta importante resaltar
que el cambio del primero de estos dígitos, (por ejemplo: V 2.0.0.) indicaría cambios
muy importantes en la forma de operar o en las características del programa, mientras
que una modificación del segundo numeral sería indicativo de cambios menores en el
programa, (por ejemplo: V 1.1.0) y la solución de problemas en su operación, como
trabas del programa, o funcionamiento con alguna otra impresora, tarjeta de video, etc.
se indicaría con la modificación del tercer dígito (por ejemplo: V 1.0.1.).

La VENTA y la FORMA DE DISTRIBUCIÓN del software también presenta


variables, siendo las principales las que a continuación mencionaremos:
1. Paquetes: los cuales son desarrollados por alguna casa de software, y
después distribuidos a través de canales normales de distribución, como pueden ser
tiendas especializadas, distribuidores de cómputo, tiendas departamentales, etc.

2. Freeware: de distribución completamente gratuita, a través de autorizar la


copia indiscriminada, y su colocación en los boletines electrónicos y sitios sites en
Internet. Algunos de los motivos por lo que se lleva a cabo esta forma de distribución
puede ser la promoción de una versión más completa o actualizada del material
freeware, o la esperanza de llegar a ser reconocidos por la calidad de ése producto y
conseguir un distribuidor importante para entrar en el mundo del software comercial.

3. Shareware: muchas veces confundido con el anterior, el shareware no es un


software gratuito, únicamente lo es su distribución; y su uso deberá ser pagado al
autor.

Recordemos que el software no se vende, sino que solamente se paga por la


licencia de uso, y por lo mismo es legalmente posible distribuirlo sin costo, y después
cobrar por la licencia de su uso. En teoría, uno obtiene el shareware de algún amigo, o
de Internet y una licencia de uso por tiempo limitado, usualmente 30 días, y si uno
quiere conservar el programa tendrá que pagar los derechos al autor, enviando el
dinero a la dirección que se indique en el mismo software.

Hasta ese momento, este sistema presenta muchas ventajas, lamentablemente


esto no ocurre en la práctica más que en contados casos, existiendo estudios por parte
de asociaciones de productores de shareware, que indican que solamente 2 personas
de cada mil pagarán finalmente por los derechos de un programa que efectivamente
usan.

Algunas de las fórmulas que se han intentado para tratar de elevar el porcenta-
je de usuarios registrados, y acabar en lo posible con esta forma de pirateo, son:
Distribuir gratuitamente una versión limitada del producto final, la cual se obtiene hasta
pagar los derechos al autor, esta versión se obtiene en un disquete por correo o por
medio de una clave secreta que libera las opciones limitadas en la versión shareware.

Otra muy popular es la de limitar efectivamente el uso a 30 días por medio de un reloj
contador dentro del software.

Finalmente se utiliza el llamado nag screen, que son imágenes que aparecen en el
monitor de vez en cuando durante la ejecución del programa, y que según el
vocabulario del autor puede ser muy cortés o francamente ofensiva. Esta pantalla deja
de aparecer con la introducción de un número proporcionado por el autor del programa
una vez que se registra el usuario.

El DESTINO del software también presenta innumerables alternativas, ya que


puede ser tan variado como el número de usuarios de una computadora, pudiendo
hacer una división genérica como sigue: uso doméstico, gubernamental,
entretenimiento, empresarial, etc.

Después de esta pequeña visión genérica de la industria del software a nivel


mundial; en el siguiente apartado analizaremos algunas de las características básicas
de la industria de programación en México.

1.5. CARACTERÍSTICAS BÁSICAS ACTUALES DE LA INDUSTRIA DE


PROGRAMACIÓN NACIONAL.

Los requerimientos son de dos tipos aquellos que van surgiendo como
producto del crecimiento natural de las empresas cuya transición de la mecanización
hacia la automatización es actualmente adecuada, y aquellos que son necesarios para
elevar la productividad de las empresas con un nivel bajo, y que por lo tanto corren el
peligro de ser desplazadas por las que sí lo tienen .

La comercialización consiste en conocer mejor el ámbito nacional y qué tipo de


aplicaciones pueden ser útiles en los distintos sectores de nuestra economía. Esta
labor es llevada a cabo de manera muy eficiente por las empresas transnacionales
proveedoras de programas o paquetes de aplicación; desafortunadamente no es
realizada por las empresas nacionales, quienes por falta de personal o alguna otra
razón, no han podido llevar a cabo, de una manera efectiva, la labor de penetración en
el mercado.

A este respecto tenemos que cuanto concierne a los sistemas operativos, estos
generalmente se proporcionan por los propios proveedores en equipos "macro" y "mini"
mas no en "micro" (aquí hay productos estándares no oficiales de la industria) lo que
es limitante para inversiones nacionales; por otro lado, respecto a los sistemas de
aplicación generalmente son realizados con tecnología de infraestructura obsoleta que
dificultan su adaptación en el mercado mexicano, caracterizados por un
mantenimiento costoso.

En materia fiscal, existen algunas disposiciones que regulan este aspecto,


pero son insuficientes y por tanto necesario ampliarlas, así como también crear
incentivos fiscales que fomenten el desarrollo nacional para que alcance un nivel
comparable al de los países más avanzados en esta área y que se integre al mercado
internacional con exportaciones y reducción de importaciones de programas.

En cuanto a la importación de paquetes de aplicaciones, ésta se reduciría si


existieran incentivos que hicieran atractivo el desarrollo de aplicaciones específicas,
obteniendo así un beneficio tanto económico como tecnológico.

Pero, sin lugar a dudas, es en el aspecto legal en donde actualmente se tiene


que enfocar la modernización para crear una infraestructura legal que pueda llevar al
respaldo que requiere la industria de programación nacional, para así lograr un
desarrollo científico y tecnológico que conlleve al económico.

Actualmente no se cuenta con una legislación realmente efectiva que regule la


producción de programas, asegurando aspectos de patente, reproducción de
programas, derechos de autor, confidencialidad y seguridad de datos, etc. Algunos
programas y paquetes tienen incluidos códigos que controlan el acceso a los datos
logrando así cierto control en la seguridad y privacidad en la información.

Sin embargo, previniendo el crecimiento que tendrá la computación en un


futuro muy cercano en la sociedad, es necesario desarrollar una legislación adecuada
que regule y controle los distintos aspectos de esta industria, como ya se ha hecho en
otros países y que en el próximo capítulo serán analizadas.

CAPÍTULO II

SISTEMAS JURÍDICOS COMPARADOS EN MATERIA DE INFORMÁTICA

2.1. LEGISLACIÓN FRANCESA.


Francia es uno de los países más interesados en la resolución del problema de
salvaguarda de derechos de autor en materia de software debido a su alto nivel de
informatización, habiendo creado métodos contractuales, como extracontractuales.

En lo que se refiere a métodos contractuales, éstos se manifiestan a través de


contratos tales como los de licencia de uso de programas o los contratos de persona
destinados a asegurar la protección en el marco interno de las empresas. Dentro de los
métodos extracontractuales, "se han usado figuras derivadas del derecho penal, como
es el caso de los secretos de fábrica, secretos profesionales, corrupción de empleados,
robo y abuso de confianza. Asimismo, figuras derivadas del derecho civil como la
competencia desleal y el enriquecimiento ilegítimo".1

El Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INPI) inició un proyecto para la


creación de un régimen de protección aplicable que en principio se integraría por los
elementos más valiosos de todas las figuras anteriormente señaladas y que
constituyera en última instancia una solución eficaz al problema.

Sin embargo, todas estas formas aun siendo de frecuente uso, no han podido
constituir una solución real al problema, por lo que se ha recurrido a formas de reserva
privativa derivadas de la propiedad industrial y los derechos de autor.

No obstante, en el caso de la propiedad industrial, aunque se cuenta con la ley


promulgada el 31 de diciembre de 1964, ésta tiene el defecto de ejercer un limitado
alcance en razón de que sólo se refiere a los signos externos que aseguran la
individualización del producto, como es el caso de los logotipos. En lo correspondiente
a la propiedad literaria y artística, la legislación francesa "ha sido insuficiente frente a la
magnitud del problema, por lo que se ha recurrido a la figura de los derechos de autor
y su ley respectiva del 11 de marzo de 1957, así como a su enmienda del 3 de julio de
1985... La citada enmienda menciona a los programas como soportes lógicos para
computadora (logiciel), concediendo una protección de 25 años desde la creación y
prohibiendo la obtención de copias del programa salva para respaldo (back up)".2

Resulta interesante mencionar que en la ley que entró en vigor en 1994, y a la


que más adelante haremos referencia, se duplica la protección a 50 años contados a
partir del fallecimiento del creador si es persona física, o si se trata de persona moral,
serán contados a partir de la publicación de la obra. Además ya se hace mención del
hecho que el "sólo contrato de licencia, que define los derechos de explotación,
materializa el derecho de utilizar un software".3

La anteriormente citada enmienda se encuentra contenida dentro de la ley


número 85-660 del 3 de Julio de 1985 relativa a DERECHOS DE AUTOR Y A LOS
DERECHOS DE LOS ARTISTAS-INTÉRPRETES, DE LOS PRODUCTORES Y
EMPRESAS DE COMUNICACIÓN AUDIOVISUAL se estipula en su artículo 45 que,
salvo estipulación en contrario, los programas creados por empleados en el ejercicio
de sus funciones pertenecen al empleador y a éste se le reconocen los derechos de
autor. En este artículo hace mención de la frase "salvo estipulación en contrario" ya
que se trata de crear con este artículo una norma supletoria, y no imperativa, que
puede ser cambiada por acuerdo contractual (pacta sum servanda); el precisar esto fue
necesario ya que la ley de derechos de autor es de orden público.

El artículo 46 del mismo ordenamiento trata de los derechos de adaptación y


de retracto, "salvo estipulación en contrario, el autor no puede oponerse a la
adaptación del programa, dentro del límite de los derechos que ha cedido, ni ejercer su
derecho de arrepentirse o retractarse. Atenúa significativamente de los derechos
morales del autor, en lo que Desjeux ha señalado como verdadera conmoción de las
instituciones del derecho de autor. Los derechos morales, profundamente unidos a la
personalidad del autor, no se condicen con la naturaleza del software. Por otra parte,
las adaptaciones son uno de los elementos indispensables para la explotación de los
programas, y la ley francesa acepta esta realidad, contrastando así con el enfoque más
estrecho de la ley norteamericana y las soluciones judiciales favorables a no limitar los
derechos de autor que prevalecen en los Estados Unidos".4

En esta ley, el legislador francés también se aseguró de reglamentar la


documentación del programa y su utilización ya que establece que toda reproducción,
salvo la copia de salvaguardia para el usuario, así como toda utilización de un
programa no autorizada expresamente por el autor o sus cesionarios, se considera
infracción pudiendo dar lugar a las sanciones que se establece la ley. Sin embargo, la
ley actualmente vigente doblega ese régimen al beneficio del usuario, so reserva que
su ejercicio no perjudique a la explotación normal del software y no cause un perjuicio
injustificado a los intereses legítimos del autor, otorgándole los siguientes derechos:

§ "El usuario está facultado para corregir los errores que tenga el programa,
salvo el caso que contractualmente este derecho esté reservado al autor.

§ El usuario tiene el derecho de hacer una copia de salvaguardia o respaldo.

§ El usuario puede desmontar el programa con fines de interoperabilidad, a


condición que los datos necesarios no estén ya disponibles en la documentación o
publicaciones relativas al software y que estos datos no sean utilizados para crear un
software cuya expresión sea substancialmente similar.
§ El usuario puede estudiar el funcionamiento del programa a fin de determinar
las ideas y principios de la base".5

Sin lugar a dudas, el legislador no sólo cubrió el problema técnico al tomar en


consideración la copia de salvaguardia, sino que también solucionó un problema
jurídico ya que tradicionalmente las leyes de copyright prohiben la reproducción pero
no el uso.

En lo referente al uso de los programas, está prohibida la utilización salvo


contrato. Asimismo, se prevén medidas precautorias de gran urgencia y severidad para
embargar productos, materiales y equipos en caso de reproducción ilícita. Finalmente
"bajo reserva de las convenciones internacionales los extranjeros gozan en Francia de
la protección de la ley, siempre que en sus respectivos países se proteja el software
producido en Francia o de autor francés".6

Actualmente, en Francia tiene vigor la ley promulgada el 10 de Mayo de 1994


estableciendo al derecho francés la Directiva del Consejo de las Comunidades
Europeas del 14 de mayo de 1991 concerniente a la protección jurídica de los
programas computacionales, y la ley del 5 de febrero de 1994 relativa a la represión de
la falsificación modificando el Código de la Propiedad Intelectual que rige la protección
del software. Las modificaciones que ha sufrido la reglamentación de derechos de
autor francesa precisan y refuerzan varios puntos concernientes a la definición y
derechos de utilización del software.

"Según el acuerdo del 22 de Diciembre de 1981 relativo al enriquecimiento del


vocabulario informático, el software está definido como el grupo de programas y,
eventualmente la documentación, relativos al funcionamiento de un grupo de
tratamiento de la información. La nueva reglamentación precisa que esta definición
comprende el material de concepción preparatoria (artículo L.112-2 del Código de la
Propiedad Intelectual) los cuales son definidos como los trabajos preparatorios de
concepción añadidos al desarrollo de un programa a condición de que sean de
naturaleza tal que permitan la realización de un programa de computadora a un estado
ulterior".7

En contraste con la legislación de 1985, el código precisa los derechos de


explotación específicos del autor de software, sin excluir los derechos procedentes del
régimen común de la propiedad literaria y artística, así como los derechos de
representación. El conjunto de estos derechos son enumerados en el artículo L.122-6,
y se puede atender principalmente el derecho de oposición por parte del autor: "a toda
reproducción, no obstante que sea provisoria, de su software, comprendiéndola como
la duplicación, traspaso y almacenamiento provisorio de ciertos elementos del
programa dentro de la memoria de la computadora que lo utilice, a la comercialización
de su software, bajo la reserva del respeto de las reglas en materia de concurrencia y
de libre circulación de bienes y servicios, cuando el autor introduzca este último al
mercado".8

La anterior disposición traspone el principio comunitario de consumo de


derechos según el cual "el autor que a puesto en venta su software en el mercado del
Espacio Económico Europeo no puede oponerse a la comercialización ulterior de éste
dentro del mercado, salvo por aquello que concierna al alquiler".9

Como elemento innovador, esta ley crea una seguridad específica para el
software que deberá permitir el financiamiento de las inversiones necesarias a las
actividades de búsqueda y desarrollo de los programas de computación.

Como hemos visto en este punto, resultan ser bastantes innovaciones en la


legislación francesa, pero en un campo que día a día está en continua transformación,
se requiere de una ley más inteligente que sus creadores que sea capaz de adecuarse
a cada problema que se va presentando en el Derecho dentro del campo de la
informática.

2.2. LEGISLACIÓN INGLESA.

Su Ley de Patentes de 1977 excluye la protección de los derechos del autor


del software a menos que el programa se encuentre asimilado al equipo, es decir, que
sea un componente como es el caso de los llamados chips. Cabe recordar que el
Reino Unido es signatario del Convenio de Munich, y que, por otra parte, el Reporte
Whitford de marzo de 1977 ha sugerido "una clarificación de la situación jurídica en
vías de aplicar la legislación autoral en virtud de una tendencia general favorable hacia
dicha ley".10 Sin embargo, hay autores que opinan que un nuevo tratado implicaría el
riesgo de un desvío en las posibilidades ofrecidas por la Ley de Derechos de Autor.

Como es sabido, el Derecho consuetudinario rige en Inglaterra, y es en cuanto


a la jurisprudencia, que en los años sesenta los tribunales ingleses tuvieron a bien, en
reiteradas ocasiones, pronunciarse hacia la patentabilidad directa o indirecta de los
programas.

En este sentido podemos sintetizar las directrices seguidas por la oficina


inglesa de patentes: "Una patente no puede ser acordada a un programa como tal.
Nada se opone, sin embargo, a la patentabilidad de nuevos métodos de programación,
de computadoras programadas o de invenciones creadas por computadoras para
controlar los procesos de fabricación o los métodos de análisis empleando un
programa nuevo".11

Por otra parte, en el ámbito de los derechos de autor, que es el que


propiamente nos ocupa, existe una decisión sobre los programas que negó la
protección bajo esta forma anteriormente mencionada como directriz, y otras dos que
la concedieron bajo las consideraciones de "código objeto".

El día 16 de Julio de 1985, se hizo una reforma a la LEY DE COPYRIGHT


británica, cuya vigencia daba inició a partir del 17 de septiembre de 1985. Esta reforma
sanciona penalmente la copia no autorizada, así como la fabricación, importación y
distribución de programas de computación.

Sin embargo esta disposición resulta incompleta, ya que en dicha enmienda no


se consideró necesario indicar la clase de obra que constituye el programa, ni la
duración del derecho de autor sobre los mismos, seguramente por entenderse
suficientemente dilucidadas la cuestión por la jurisprudencia precedente.

2.3. LEGISLACIÓN NORTEAMERICANA.

Es lógico pensar que el marco de los países de economía liberal, como es el


caso de los Estados Unidos de Norteamérica, atribuyen especial importancia a la
propiedad privada, además de que el avance tecnológico está ligado a los intereses de
empresas privadas, así como a los de los gobiernos mismos; lo anterior se traduciría
en el hecho de que la fuerza de un país depende de la fuerza de sus industrias.

No obstante lo anterior, la situación actual de este país respecto al problema


que entraña la protección de derechos de autor en software es aún incierta y poco
convincente a pesar de ser el primer y mayor productor mundial de programas de
cómputo. De esta forma, "los creadores de programas en este país recurren
frecuentemente a soluciones complejas y poco cómodas, ya que son más paliativo que
solución, como son aquellas derivadas de los métodos de protección técnica o del
derecho contractual".12

En el caso de Estados Unidos, al igual que en Inglaterra, también podemos


hacer una separación de métodos contractuales y extracontractuales. Dentro de los
regímenes jurídicos extracontractuales más utilizados en este país, así como la
posición oficial adoptada recientemente, podemos encontrar los siguientes:

Ü MÉTODOS DE PROTECCIÓN DERIVADOS DEL DERECHO COMÚN


(Common Law). Podemos subdividirlos en los emanados del derecho penal y del
derecho civil:

§ Derecho penal: LOS SECRETOS COMERCIALES. "Hasta la aparición de la


nueva ley norteamericana sobre los derechos de autor, la legislación de los Estados
Unidos sobre el secreto comercial era comúnmente utilizada frente al problema y la
documentación por aportar antes de entablarse una controversia respecto al punto de
partida entre las leyes federales sobre los derechos de autor y secretos comerciales y
las legislaciones estatales".13

Al respecto, cabe mencionar que inclusive los secretos comerciales eran


considerados por los tribunales de este país como el único medio de protección de los
programas antes de la clarificación de las leyes patentaria y autoral. El problema ha
sido que los secretos comerciales aplicados a los programas se han considerado
equivalentes de los derechos exclusivos autorales respecto a los artículos 102, 103,
106 y 301 de la LEY DE COPYRIGHT (Copyright Act) de 1976, lo cual ha motivado el
desplazamiento de las leyes estatales sobre los derechos comerciales respecto al
problema.

§ Derecho civil: LA COMPETENCIA DESLEAL. "Haciendo a un lado la teoría


sobre el enriquecimiento ilegítimo ya examinada y debido a la falta de referencias
precisas de esta teoría frente al problema, cabe mencionar que el recurso de la acción
de competencia desleal puede permitir en ciertos estados de la Unión Americana
obtener una protección directa contra la copia de programas en virtud de la doctrina del
uso abusivo (misappropiation) derivada de una decisión tomada en caso
internacional".14

Pero también hay que mencionar que la doctrina no es aplicable en forma general en el
territorio norteamericano; además, en sus aplicaciones más amplias, dicha doctrina
corre el riesgo de entrar en conflicto con la legislación federal sobre patentes, así como
la de derechos de autor, sin ser realmente aplicable en la cuestión que nos ocupa.
Ü MÉTODOS DE RESERVA PRIVATIVA. Por ser estos de gran importancia en la
materia que nos ocupa, examinaremos de manera más profunda estos métodos
derivados del derecho de la propiedad intelectual en sentido lato:

1. LA PROPIEDAD INDUSTRIAL. Como sabemos, el derecho marcario y el


patentario son figuras jurídicas que constituyen la propiedad industrial, susceptibles de
ser considerados con respecto al problema de la protección de los programas.

El derecho de marcas norteamericano ofrece una protección a los programas


de computación; sin embargo, dicha protección no se refiere sino al origen aparente
del programa, haciendo creer que ellos son los creadores.

En general, la protección a título del derecho de marcas no permite obtener


reparaciones en caso de copia del programa como tal en tanto no haya engaño por
parte del consumidor en función del origen del producto.

En lo concerniente al derecho de patentes, cabe mencionar que en cuanto a la


patentabilidad de los programas respecta, dos decisiones pronunciadas en 1980 por la
Suprema Corte de Estados Unidos indican claramente que las invenciones reveladoras
de un programa constituyen un objeto patentable al tenor del artículo 101 de la Ley de
Patentes, con la condición de que no sea reivindicada la apropiación global de una
fórmula o de un algoritmo matemático.

Según el artículo 101, "cualquiera que invente o descubra un procedimiento,


máquina, fabricación, composición de materia nueva y útil o todo perfeccionamiento
nuevo que le concierna, podrá obtener una patente bajo reserva de las condiciones y
exigencias de este capítulo de la ley".15

La importancia de estas dos decisiones de la Corte puede demostrarse a nivel


de tres posturas fundamentales adoptadas sobre el particular en este país:

a) "Primeramente porque la Oficina de Patentes y Marcas de los Estados Unidos


ha abandonado su viejo combate de veinte años contra la patentabilidad de los
programas, para adoptar ciertas directrices que siguen en su filosofía y aproximación
pragmática las afirmaciones de la Corte Suprema".16

b) "Acto seguido porque por primera vez la CCPA (Court of Customs and Patent
Appeals) reformó una decisión en sentido negativo de la Oficina de Patentes
aduciendo que una invención vinculada a un programa no es una máquina, una
fabricación o un procedimiento conforme al artículo 101.

c) "Y finalmente, porque la Corte Suprema hizo a un lado la postura adoptada en


dos casos célebres en los que se había dejado en statu quo las reivindicaciones para
encontrar el punto de novedosidad y verificar asimismo si dichos elementos satisfacían
las exigencias señaladas en el artículo 101. En lugar de ello, la Corte adoptó la prueba
utilizada desde hace tiempo por la CCPA consistente en contemplar la reivindicación en
bloque y a verificar si el conjunto del contenido reivindicado responde al criterio de ese
mismo artículo. La Corte Suprema aprobó en igual forma la prueba en dos etapas
derivadas de dos casos ventilados en la CCPA a fin de determinar la patentabilidad de
procedimientos o de productos".17

Estas dos etapas de la prueba que se mencionan anteriormente consisten en:

Ü PRIMERA ETAPA. Cada reivindicación de procedimiento o de producto debe


ser analizada para determinar si su objeto se refiere a un programa de cómputo; si la
reivindicación no implica directamente un programa hay que estudiar la descripción
para determinar si indirectamente esta misma reivindicación incorpora un programa o
un algoritmo.

Ü SEGUNDA ETAPA. Si la reivindicación en cuestión porta directa o


indirectamente de un programa, entonces el examinador debe analizar la solicitud en
su conjunto y determinar el objeto protegible; y en caso de que este último resulte ser
un programa, la solicitud es rechazada.

Actualmente, la sección de apelaciones de la Oficina de Patentes y Marcas


aplica sistemáticamente este examen en dos etapas conformando la negativa por
ausencia del carácter patentable en aproximadamente el 50% de los casos ventilados.
La Oficina de Patentes, de igual forma, ha pronunciado nuevas directrices de examen
que siguen estrechamente el razonamiento y las decisiones tomadas por la
Corte Suprema en los casos mencionados.

Sin embargo, frente a los problemas desatados en relación a la protección


jurídica de los programas, actualmente los Estados Unidos parecen inclinarse cada vez
más hacia la aplicación de su Ley sobre Derechos de Autor.

Ü LA PROTECCIÓN LITERARIA Y ARTÍSTICA: LOS DERECHOS DE AUTOR.


Habida cuenta de la no utilización de la técnica de los dibujos y modelos en una forma
clara en los Estados Unidos hay que fijar especial atención a la figura de los derechos
de autor, cuya importancia en este país es primordial respecto al problema que nos
ocupa.

La protección de los programas por la vía autoral es actualmente reconocida


en los Estados Unidos según una enmienda de fines de 1980 a la Ley sobre Derechos
de Autor del 19 de octubre de 1976, esta enmienda modificó el antiguo artículo 101, al
cual hicimos referencia anteriormente, para definir los programas de cómputo como "un
conjunto de indicaciones o instrucciones utilizables directa o indirectamente en una
computadora para producir un cierto resultado".18

La reforma abroga asimismo el antiguo artículo 117, reemplazándolo por uno


alusivo a que el dueño de un programa no comete una violación de derechos creando
otro ejemplar o realizando una adaptación necesaria para el uso del programa o para
fines de archivo.

Cabe señalar que actualmente la ley norteamericana de derechos de autor no


hace del fin (artístico, utilitario) o de la calidad de la obra condiciones para su
protección, es decir, "que la obra del espíritu satisfactor de la doble exigencia de
originalidad y fijación bajo una forma tangible de expresión se beneficia de la
protección bajo los derechos de autor y por esta razón la jurisprudencia se ha
pronunciado en favor de una protección de los programas bajo esta forma".19

Finalmente, cabe expresar que la postura externada por los Estados Unidos
dentro de la 2ª Comisión de Expertos para la Protección de los Programas organizada
por la OMPI en Ginebra, en el año de 1983, fue en relación a que un tratado sui
géneris no se justificaría a menos que el recurso actual a los derechos de autor o a las
patentes fuera inadecuado. En relación a lo anterior, informes presentados en
posteriores reuniones establecen que en los Estados Unidos los productores de
programas utilizan en un 78% la ley sobre secretos comerciales o contrato de licencia,
de 15 a 17% los derechos de autor, y 5% buscan una protección por la vía patentaria.
CAPÍTULO III

DEFICIENCIAS EN LA PROTECCIÓN DE DERECHOS DE AUTOR EN SOFTWARE

3.1. LOS DERECHOS DE AUTOR.

Nuestra historia no sólo se ha ido forjando a través de hechos sino también a


través de las diversas constituciones promulgadas por nuestros gobernantes, logrando
sustentar así el orden jurídico ("conjunto de normas en que reposa el bienestar común
y ante el cual ceden los derechos de los particulares"1) de nuestra nación.

"Hasta la constitución de 1917, las constituciones contenían sólo los derechos


del ciudadano frente al Estado, la división de poderes y las funciones de cada uno de
ellos. Con el Constituyente de Querétaro nace el derecho social, al establecer
disposiciones imperativas irrenunciables, -sin que queden sujetas a la autonomía de la
voluntad de los particulares- en que el Estado tiene interés en que se cumplan".2

Y es precisamente con la promulgación de nuestra actual Carta Magna que el


concepto interés social ("necesidad que tiene el Estado de que se respete y proteja a
una determinada clase desvalida, del abuso de otra"3) empieza a ejercer peso en
verdad.

En nuestro país, y emanada del artículo 28 constitucional, la Ley Federal de


Derechos de Autor es la que tiene por objeto "la protección de los derechos que se
otorgan en favor del autor como creador de una obra intelectual o artística, y del
intérprete y ejecutante, así como de la salvaguarda del acervo cultural de la nación."4

Loredo Hill define al derecho autoral como "un conjunto de normas de derecho
social, que protegen el privilegio que el Estado otorga por determinado tiempo a la
actividad creadora de autores y artistas, ampliando sus efectos en beneficio de
intérpretes y ejecutantes".5

"El concepto doctrinal de los derechos intelectuales viene suscitando una larga
y obstinada controversia que repercute en la propia denominación de la materia:
propiedad literaria, artística y científica, o Propiedad Intelectual para unos, Derecho de
Autor o Derecho Autoral, para otros, o aún, Propiedad Inmaterial o Derechos
Intelectuales sobre obras literarias y artísticas, o Derecho sobre Bienes Incorpóreos,
son algunos de los nombres que corresponden a los varios conceptos de esta rama del
Derecho Civil".6

Los derechos del autor sobre sus obras pueden agruparse en dos clases:

Ü DERECHOS MORALES, por tratarse de bienes inmateriales, son


personalísimos, inalienables, perpetuos e irrenunciables, por generarse de una norma
jurídica de orden público se transmiten por sucesión testamentaria o legítima. Estos
derechos no tienen límite en el tiempo porque la obra es intangible, y por ende son
imprescriptibles, puesto que no se pierden o se adquieren por los años; y se distinguen
por:

1. Reconocer la paternidad de la obra al autor, pues ésta es "la expresión o


exteriorización material, concreta, autónoma, integral de una idea o pensamiento, en
forma especial, original que importe una creación visible o audible, cualquiera que sea
el medio empleado para lograr un fin o cualquiera que sea la naturaleza o extensión".7

2. Dar a conocer la obra, ya que el artista necesita desarrollarse profesional-


mente en un régimen de libertad.
3. Que se respete la obra en los términos en que ésta fue concebida; ya que en
este orden de ideas, el autor puede oponerse a cualquier cambio pues, aún a título de
propietario, no se puede alterar o deformar su obra.

Ü DERECHOS PECUNIARIOS O PATRIMONIALES: estos se refieren a la


explota- ción económica de una obra, "el autor por su esfuerzo creador tiene derecho a
recibir una retribución que le permita vivir dignamente, incluso a beneficiar postmortem
a sus herederos. En vida se pueden transmitir o ceder estos derechos en forma total o
parcial, onerosa o gratuita e inter vivos o mortis causa".8 En el caso de estos derechos,
la Ley Autoral establece una limitación de tiempo.

Y es debido a su trascendencia en esta materia es necesario hacer referencia


a lo establecido por la Ley de Derechos de Autor en vigor en sus artículos 2º y 3º :

"Artículo 2º.- Son derechos que la Ley reconoce y protege en favor del autor de
cualquiera de las obras que se señalan en el artículo 1º los siguientes:
I. El reconocimiento de su calidad de autor.
II. El de oponerse a toda deformación, mutilación o modificación de su obra
que se lleve a cabo sin su autorización, así como a toda acción que redunde en
demérito de la misma o mengua del honor, del prestigio o de la reputación del autor. No
es causa de la acción de oposición la libre crítica científica, literaria o artística de las
obras que ampara esta Ley.
III. El usar o explotar temporalmente la obra por sí mismo o por terceros, con
propósitos de lucro y de acuerdo con las condiciones establecidas por la Ley".9

Las fracciones I y II, como se puede observar en base a lo estudiado,


reconocen derechos morales, y la fracción III se refiere a derechos pecuniarios,
patrimoniales o económicos.

"Artículo 3º.- Los derechos de las fracciones I y II del artículo anterior conceden
al autor de una obra, se consideran unidos a su persona y son perpetuos, inalienables,
imprescriptibles e irrenunciables; se transmite el ejercicio de los derechos a los
herederos legítimos o a cualquier persona por virtud de disposición testamentaria".10

Ahora bien, ya hemos mencionado que sin el consentimiento del autor, nadie
podrá alterar, modificar, publicar ni difundir la obra; y tampoco se podrá exponer
públicamente las traducciones, compendios o adaptaciones de la misma sin su
autorización. Lo anterior se basa en el hecho de que el autor es el titular del derecho
intelectual y principal figura en el acto de creación de la obra, por lo tanto la ley lo
protege en primer lugar.

De manera enunciativa, no limitativa, la Ley de Derechos de Autor señala las


obras protegidas en su artículo 13, y se confiere a aquellas cuyas características
correspondan a cualesquiera de las ramas siguientes:

I. Literaria.
II. Musical, con o sin letra.
III. Dramática.
IV. Danza.
V. Pictórica o de dibujo.
VI. Escultórica y de carácter plástico.
VII. Caricatura e historieta.
VIII. Arquitectónica.
IX. Cinematográfica y demás obras audiovisuales.
X. Programas de radio y televisión.
XI. Programas de cómputo.
XII. Fotográfica.
XIII. Obras de arte aplicado que incluyen el diseño gráfico o textil.
XIV. De compilación, integrada por las colecciones de obras, tales como las
enciclopedias, las antologías, y de obras u otros elementos como las bases de datos,
siempre que dichas colecciones, por su selección o la disposición de su contenido o
materias, constituyan una creación intelectual.
Las demás obras que por analogía puedan considerarse obras literarias o
artísticas se incluirán en la rama que les sea más afín a su naturaleza.".11

La protección brindada por la Ley de Derechos de Autor se otorga cuando las


obras consten por escrito, en grabaciones o en cualquiera otra forma de objetivación
perdurable y que sea susceptible de reproducirse o hacerse del conocimiento público
por cualquier medio. Sin embargo, la actual legislación protege la creación de la obra
sin importar que no se registre, ni se haga del conocimiento público, o que se
mantenga inédita, independientemente del fin a que pueda destinarse.

"Cuando la obra sea creada por varios autores, los derechos corresponden a
todos por partes iguales, salvo convenio en contrario o que se demuestre la titularidad
específica de cada uno. Para el ejercicio de los derechos se requiere el consentimiento
de la mayoría: principio democrático adoptado por el legislador".12

Resulta importante, de igual forma, hacer mención a las diversas formas de


clasificar las obras que son objeto de protección al momento de su registro, las cuales
se encuentran estipuladas en el artículo 4º de la Ley de Derechos de Autor, mismo que
transcribo a continuación:

"Artículo 4º.- Las obras de protección pueden ser:

A. Según su autor:
I. Conocido: contienen la mención del nombre, signo o firma con que se
identifica a su autor.
II. Anónimas: sin mención del nombre, signo o firma que identifica al autor, bien
por voluntad del mismo, bien por no ser posible tal identificación, y
III. Seudónimas: las divulgadas con un nombre, signo o firma que no revele la
identidad del autor.

B. Según su comunicación:
I. Divulgadas: las que han sido hechas del conocimiento público por primera
vez en cualquier forma o medio, bien en su totalidad, bien en parte, bien en lo esencial
de su contenido o, incluso, mediante una descripción de la misma.
II. Inéditas: las no divulgadas, y
III. Publicadas:
a) Las que han sido editadas, cualquiera que sea el modo de reproduc-
ción de los ejemplares, siempre que la cantidad de estos, puestos a disposición del
público, satisfaga razonablemente las necesidades de su explotación, estimadas de
acuerdo con la naturaleza de la obra, y
b) Las que han sido puestas a disposición del público mediante su
almacenamiento por medios electrónicos que permitan al público obtener ejemplares
tangibles de la misma, cualquiera que sea la índole de estos ejemplares.

C. Según su origen:
I. Primigenias: las que han sido creadas de origen sin estar basadas en otra
preexistente, o que estando basadas en otra, sus características permitan afirmar su
originalidad, y
II. Derivadas: aquellas que resulten de la adaptación, traducción u otra
transformación de una obra primigenia.

D. Según los creadores que intervienen:


I. Individuales: las que han sido creadas por una sola persona.
II. De colaboración: las que han sido creadas por varios autores, y
III. Colectivas: las creadas por la iniciativa de una persona física o moral que
las publica y divulga bajo su dirección y su nombre y en las cuales la contribución
personal de los diversos autores que han participado en su elaboración se funde en el
conjunto con vistas al cual ha sido concebida, sin que sea posible atribuir a cada uno
de ellos un derecho distinto e indiviso sobre el conjunto realizado".13

Ahora bien, en lo concerniente a lo que la legislación autoral no ampara,


dentro del artículo 18 se estipulan algunos casos, de entre los cuales resaltan:

§ El aprovechamiento industrial de ideas contenidas en sus obras, ya que esto


se rige por la legislación sobre propiedad industrial y transferencia de tecnología.

§ El empleo de una obra mediante su reproducción o representación en un


acontecimiento de actualidad, a menos que se haga con fines de lucro.

§ La publicación de obras de arte o de arquitectura que sean visibles desde


lugares públicos.

§ La traducción o reproducción, por cualquier medio, de breves fragmentos de


obras científicas, literarias o artísticas en publicaciones o crestomatías, o con fines de
crítica literaria o de investigación científica, siempre que se indique la fuente de donde
se hubiesen tomado y que los textos reproducidos no sean alterados. Particularmente
este apartado ha causado gran revuelo en últimas fechas debido a ciertos programas
televisivos, y de los que se ha cuestionado su legalidad.

§ La copia manuscrita, mecanográfica, fotográfica, fotostática, pintada, dibujada


o en micropelícula de una obra publicada, siempre que sea para el uso exclusivo de
quien la haga.

§ La copia que para su uso exclusivo como archivo o respaldo realice quien
adquiera la reproducción autorizada de un programa de cómputo.

Como punto final a este breve análisis de la legislación autoral debemos


señalar que las obras protegidas por la ley que se den a conocer deberán ostentar la
expresión "Derechos Reservados" o su abreviatura "D.R.", seguida del símbolo ©; el
nombre completo y dirección del titular del derecho de autor y el año de la primera
publicación. Estas menciones deberán aparecer en lugares visibles.

Los requisistos mencionados anteriormente son obligatorios y su omisión


puede ser sancionada por la Dirección General de Derechos de Autor, aunque esto no
implica la pérdida de los derechos de autor.

En la actualidad, intervienen en el derecho autoral normas de derecho


constitucional, internacional público, administrativo, penal y civil, lo que lo hace sui
géneris, y que más adelante analizaremos dentro del presente capítulo.

3.2. EL SOFTWARE COMO OBRA INTELECTUAL MATERIA DE PROTECCIÓN DE


DERECHOS DE AUTOR.

Resulta interesante resaltar la importancia de proteger y salvaguardar nuestro


acervo cultural dada la enorme trascendencia que este concepto encierra; en cualquier
diccionario de la lengua encontraremos que CULTURA proviene del latín cultura, y
significa "desarrollo y perfeccionamiento de las facultades morales, intelectuales y
físicas del hombre; conjunto de conocimientos y actividad espiritual de un hombre, una
nación o una época; sinónimo: civilización."14 Por lo anterior, nos atrevernos a afirmar
que la creación del software merece protección autoral no sólo por ser obra de una
persona sino también porque gracias a este tipo de inventos y adelantos tecnológicos
nuestro acervo cultural se acrecienta en beneficio de toda la humanidad.
Más no sólo podemos encontrar un fundamento analógico del porqué el
software debe ser considerado una obra intelectual digna de ser protegida por la
Legislación de Derechos de Autor, ya que en su artículo 13º, inciso XI) ya se le da un
lugar que antes no poseía dentro de nuestra legislación, al sumarse dentro de otras
ramas:

I. Literaria.
II. Musical, con o sin letra.
III. Dramática.
IV. Danza.
V. Pictórica o de dibujo.
VI. Escultórica y de carácter plástico.
VII. Caricatura e historieta.
VIII. Arquitectónica.
IX. Cinematográfica y demás obras audiovisuales.
X. Programas de radio y televisión.
XI. PROGRAMAS DE CÓMPUTO.
XII. Fotográfica.
XIII. Obras de arte aplicado que incluyen el diseño gráfico o textil.
XIV. De compilación, integrada por las colecciones de obras, tales como las
enciclopedias, las antologías, y de obras u otros elementos como las bases de datos,
siempre que dichas colecciones, por su selección o la disposición de su contenido o
materias, constituyan una creación intelectual.

Además del artículo 13º (antes 7º), el 19 de mayo de 1997 se publicó en el


Diario Oficial de la Federación la adición del capítulo IV a la Ley Federal de Derechos
de Autor que se titula "DE LOS PROGRAMAS DE COMPUTACIÓN Y LAS BASES DE
DATOS", sin embargo y como veremos más adelante, dicha regulación resulta
insuficiente al momento de su aplicación.

Además, cabe resaltar que la Legislación sobre Derechos de Autor no es la


única que regula sobre materia informática en nuestro país, como veremos a
continuación.

3.3. LEGISLACIÓN NACIONAL APLICABLE EN MATERIA DE PROGRAMA-CIÓN.

El problema de la protección jurídica de los programas de computación puede


ser analizado desde distintas ramas del Derecho:

DERECHO CIVIL: En primer lugar podríamos referirnos a los contratos, que en


esta materia serían "un conjunto de cláusulas introducidas en el contrato y alusivas a la
seguridad y protección de los programas, consignando el eventual acceso a los
mismos por personas no autorizadas, uso inadecuado, modificaciones no pactadas,
destrucción de información, etc. Todo ello implica un régimen de confidencialidad y
resguardo bajo secreto".15 Este recurso contractual es muy recurrido por algunos
proveedores pero debido a la alta tecnicidad de los componentes, resulta insuficiente
frente a la problemática que nos ocupa.

También dentro del Derecho Civil podríamos aplicar la figura del


enriquecimiento sin causa, el cual se deriva de un principio general de equidad según
el cual está prohibido enriquecerse en detrimento de otro. Dicha acción, sin embargo,
ofrece serios problemas a nivel probatorio y podría prestarse a una inapropiada
utilización y abusos por invocaciones falsas.

DERECHO MERCANTIL: Julio Téllez Valdés encuadra una posible solución en


una figura asimilable a la figura de la competencia desleal, conceptualizándola como
"aquella que reprime las acciones deshonestas entre agentes de comercio, y que
operaría bajo las consideraciones de una apropiación o sustracción dolosa de secretos
(en este caso de programas) de un competidor, a fin de explotarlo comercialmente". 16

Esta figura a la que hicimos mención fue muy utilizada durante algún tiempo, y
sirvió como antecedente a las actuales patentes y derechos de autor, sin embargo,
sólo se aplica entre comerciantes, por lo que los particulares no estarían al alcance de
dicha acción.

DERECHO PENAL: Dentro de esta rama del Derecho y en relación con la


protección jurídica de los programas de computación, podríamos considerar figuras
tales como el robo, fraude y abuso de confianza (de este último, podríamos hacer
referencia a los llamados "secretos comerciales" en el derecho americano, y a los
"secretos de fabricación" en el viejo continente). Pero por desgracia los programas de
computación no encajan claramente en los supuestos de nuestra legislación:

§ En el caso del robo, es necesario el "apoderamiento físico de una cosa


mueble", y en los términos del concepto de software, éste es un "algo"
indiscutiblemente intangible e inmaterial.

§ En el abuso de confianza se requiere la disposición de una cosa ajena mueble,


encontrándonos con los mismos problemas de la figura anterior, sobretodo a nivel
probatorio.

§ El fraude requiere de "un engaño o aprovechamiento de un error que permita


hacerse ilícitamente de alguna cosa o alcanzar un lucro indebido",17 y aunque en este
caso pudiera ser aplicable, en parte por el hecho de que no específica qué tipo de
cosa, por su misma abstracción frente al problema ofrece serios inconvenientes a nivel
probatorio en la práctica.

DERECHO PATENTARIO: Dentro del derecho de la propiedad industrial,


resalta la figura de las patentes, resultando el método más apropiado para resolver el
problema que nos ocupa. "Toda invención, para ser susceptible de atribuirle una
patente, requiere denotar una novedosidad, actividad inventiva, así como una
aplicación industrial de estos elementos. Los dos primeros son los que revisten mayor
grado de dificultad en función de la complejidad del llamado estado de la técnica, con
base en la existencia o no de anterioridades, así como que dicha invención resulte o no
evidente".18

Este último, a todas luces podría ser el más indicado para salvaguardar la
propiedad de los programas de computación, sin embargo, y debido al rígido criterio
con que se traducen los términos "novedocidad" y "anterioridades", incluso a nivel
legislativo y de jurisprudencia, se considera esta figura como inaplicable en materia de
software, ya que los cambio s que se realizan en ello no presentan caracteres
suficientes como para atribuirle una patente.

DERECHO AUTORAL: Esta sin duda, es la mejor solución posible pues el


principio de originalidad (diferente al de novedosidad en las patentes) puede
sustentarse en la existencia de un esfuerzo intelectual personalizado por parte del
creador del programa, que permite diferenciarlo de entre los demás creadores y
programas, sin importar que todos vayan encaminados a solucionar un mismo
problema.

El único inconveniente de la aplicación de este derecho a la industria de la


programación (y que se pretende solucionar a través de la presente tesis) es la
inadecuación de algunas prerrogativas como el término de duración de los derechos, el
ejercicio de los derechos de exposición, la representación pública, su divulgación, retiro
de obra, etc., como una consecuencia de la naturaleza característica de los programas
de cómputo.
3.4. EL ACUERDO No. 114.

Antiguamente, la Ley Federal de Derechos de Autor del 21 de diciembre de


1963, no hacía alusión específica a los programas de cómputo, y no obstante que el
artículo 7, en su fracción b) mencionaba a las obras científicas y técnicas, esto no
ofrecía elementos jurídicos concretos en torno a esta materia. Fue hasta la reforma
publicada en el Diario Oficial de la Federación, del 22 de diciembre de 1993, que se
adicionó una nueva fracción (actualmente "XI") en donde ya se mencionan
explícitamente los programas de computación como materia de protección de los
derechos de autor.

No obstante, antes de que se adicionara dicha fracción y como una forma de


suplir dicha carencia, se creó un acuerdo (el No. 114) con fecha del 8 de octubre de
1984, el cual estaba suscrito por el entonces secretario de Educación Pública (SEP), y
a través del cual se disponía la inscripción de los programas de computación en el
Registro Público del Derecho de Autor.

3.4.1. CONTENIDO DEL ACUERDO No. 114. Dada la trascendencia de este


acuerdo para la protección de derechos de autor en software resulta conveniente
transcribirlo, por lo que lo haremos a continuación:

ACUERDO Nº 114, POR EL QUE SE DISPONE QUE LOS PROGRAMAS DE


COMPUTACIÓN PODRÁN INSCRIBIRSE EN EL REGISTRO PÚBLICO DEL
DERECHO DE AUTOR

Jesús Reyes Heroles, Secretario de Educación Pública, con fundamento en lo


dispuesto por el artículo 5º, fracciones VI, VIII y XI de la Ley Federal de Educación; 7º,
119, fracción I, 122 y demás aplicables de la Ley Federal de Derechos de Autor; 38,
fracción XII, de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, y 5º del
Reglamento Interior de esta Secretaría, y

CONSIDERANDO

Que los programas de computación constituyen obras producidas por autores,


en los términos de las disposiciones de la Ley Federal de Derechos de Autor;

Que dichos programas de computación requieren la protección jurídica


necesaria para evitar la violación de los derechos de autor respecto de las mismas por
parte de terceros, constituyendo su inscripción en el Registro Público del Derecho de
Autor un elemento favorable para obtener la protección mencionada;

Que la producción de las obras de referencia ha tenido un notable incremento


en nuestro país en los últimos años;

Que los programas de computación tienen características propias que los


distinguen del resto de las obras susceptibles de protección por el derecho de autor,
tanto por lo que se refiere a su contenido como a los diversos soportes materiales en
que se encuentran incorporados, por lo que se presumirá la buena fe del solicitante de
la inscripción correspondiente, y

Que, de conformidad con lo dispuesto por el artículo 122 de la Ley Federal de


Derechos de Autor, toda inscripción deja a salvo los derechos de tercero, he tenido a
bien expedir el siguiente

ACUERDO Nº 114, POR EL QUE SE DISPONE QUE


LOS PROGRAMAS DE COMPUTACIÓN PODRÁN INSCRIBIRSE EN EL REGISTRO
PÚBLICO DEL DERECHO DE AUTOR
PRIMERO.- La Dirección General del Derecho de Autor procederá a inscribir
en el Registro Público del Derecho de autor los programas de computación cuyo
registro se solicite, una vez que se haya cumplido con los requisitos que para el efecto
establecen las disposiciones legales aplicables.

SEGUNDO.- Para los efectos de dicha inscripción, el solicitante podrá


presentar, a su elección, las primeras y las últimas diez hojas que correspondan al
programa fuente, al programa objeto o a ambos.

TERCERO.- En todos los casos, el solicitante deberá acompañar a la solicitud


correspondiente una breve explicación del contenido del programa de computación en
cuestión.

CUARTO.- El solicitante podrá también presentar los ejemplares del programa


de computación necesarios para el otorgamiento del registro, contenidos en cualquier
tipo de soporte material. Cuando el solicitante exhiba soportes materiales diversos a su
expresión impresa en papel, deberá acompañar a los mismos las primeras y las
últimas diez hojas impresas del programa en cuestión, las cuales se devolverán al
interesado con las anotaciones correspondientes.

QUINTO.- La Dirección General del derecho de Autor adoptará las medidas


administrativas que sean necesarias para el cumplimiento del presente acuerdo.

TRANSITORIO

ÚNICO.- El presente acuerdo entrará en vigor al día siguiente al de su


publicación en el Diario Oficial de la Federación.

México, D.F., a 28 de septiembre de 1984.- El Secretario, Jesús Reyes


Heroles.- Rúbrica.

3.4.2. ANÁLISIS Y ALCANCE DEL ACUERDO No. 114. En el acuerdo


anteriormente transcrito observamos que se establece como prioridad la protección de
los programas de cómputo o software dado el notable crecimiento de producción de las
mismas, a la vez de resaltar sus notorias diferencias con respecto a otro tipo de obras
protegidas por la legislación autoral nacional, ya sea en los que se refiere a su
contenido, ya sea a los diversos soportes materiales en que estos se encuentran
incorporados, presumiéndose en todos los casos la buena fe del solicitante de dicha
inscripción.

De igual forma, en el citado acuerdo se hace referencia al organismo


encargado de vigilar el cumplimiento de dicho ordenamiento, es decir, la Dirección
General del Derecho de Autor, a través de Registro Público del Derecho de Autor,
ambos regulados por el Capítulo VII de la Ley Federal de Derechos de Autor.

Dentro de los requisitos o procedimientos que deben cumplir los interesados


para llevar a cabo la inscripción en el mencionado organismo podemos mencionar el
hecho de que el solicitante deberá llenar la forma correspondiente, pudiendo presentar,
según su elección, las primeras y las últimas diez hojas que correspondan al programa
fuente, al programa objeto o a ambos, además debe anexar a la solicitud respectiva,
una breve explicación del contenido del programa en cuestión. Asimismo, el solicitante
puede presentar también los ejemplares del programa de computación, necesarios
para el otorgamiento del registro, que se encuentren contenidos en cualquier tipo de
soporte material. En este caso, si el solicitante exhibe soportes materiales diversos a
su expresión impresa en papel, se deberán acompañar a los mismos las primeras y las
últimas diez hojas impresas del programa, las cuales serán devueltas al interesado con
las debidas anotaciones correspondientes.
En lo correspondiente al alcance que pueda tener el Acuerdo Nº 114, resulta
importante resaltar que si bien éste representa una interesante aportación para lograr
en nuestro país una verdadera protección jurídica de los derechos de autor en
software, no es suficiente para resolver eficazmente dicha cuestión, puesto que se
debe de profundizar más bien en la búsqueda de una solución más completa y, aunque
ligada con nuestra actual legislación sobre derechos de autor, con un carácter
autónomo que permita establecer jurídicamente las peculiaridades que deben ser
amparadas por nuestra legislación.

Es conveniente mencionar que el 19 de mayo de 1997 en el Diario Oficial de la


Federación fue publicada la última reforma a la Ley de Derechos de Autor, misma que
entre otras innovaciones, comprende la inserción dentro del Título IV (DE LA
PROTECCIÓN AL DERECHO DE AUTOR) del Capítulo IV, el cual lleva por título "DE
LOS PROGRAMAS DE COMPUTACIÓN Y LAS BASES DE DATOS", estando
constituida por 14 artículos; sin embargo, y como veremos en el análisis contenido
dentro del último capítulo de la presente investigación, esta regulación aún presenta
diversas carencias que, siendo la ley perfectible, trataremos de dar solución.

CAPÍTULO IV

RESPUESTAS JURÍDICAS A TRAVÉS DE LA LEY DEL SOFTWARE:


PROPUESTA DE PROMULGACIÓN

4.1. EL CAPÍTULO IV DE LA LEY DE DERECHOS DE AUTOR: EL PRINCIPIO DE LA


SOLUCIÓN.

Formando parte del Título IV, el capítulo IV de la Ley Federal de Derechos de Autor,
tras la reforma publicada el 19 de mayo de 1997 en el Diario Oficial de la Federación,
lleva como título el de "DE LOS PROGRAMAS DE COMPUTACIÓN Y LAS BASES DE
DATOS" y se encuentra constituida por 14 artículos.

Como lo dice su título, dentro de él no sólo se regulan los programas de computación,


sino también las bases de datos; sin embargo, si los programas de computación tienen
características propias inherentes a su naturaleza, las bases de datos no son la
excepción, por lo que resulta incongruente que en tan sólo 14 artículos se quiera dar
solución a todos los problemas de protección de derechos de autor, no sólo en lo
concerniente a los programas de computación o a las bases de datos, sino a ambos.

Debido a que el principal objetivo de este trabajo es el encontrar una respuesta jurídica
a la protección de los derechos autorales en materia de software, dejaremos a un lado
el estudio de las bases de dato, es decir, no incluiremos dentro de nuestro marco legal
a los artículos 107, 108, 109 y 110, puesto que regulan exclusivamente aspectos
propios de las bases de datos.

Dentro de la Ley a la que hemos estado haciendo mención, en los artículos


comprendidos del numeral 101 al 106 se encuentran exclusivamente regulados los
programas de computación, mientras que en los numerales 111, 112, 113 y 114 se
estipulan normas no sólo de aplicación a los programas de computo, sino también a las
bases de datos.
Dada la importancia de los preceptos contenidos en el reformado Capítulo IV de la Ley
Federal de Derechos de Autor, y con la finalidad de subsanar las carencias legislativas
que pudieran existir, transcribiremos los artículos concernientes al software dentro del
capítulo de la Ley de Derechos de Autor que hemos venido mencionando:

"Artículo 101.- Se entiende por programa de computación la expresión original en


cualquier forma, lenguaje o código, de un conjunto de instrucciones que, con una
secuencia, estructura y organización determinada, tiene como propósito que una
computadora o dispositivo realice una tarea o función específica.
Artículo 102.- Los programas de computación se protegen en los mismos términos que
las obras literarias. Dicha protección se extiende tanto a los programas operativos
como a los programas aplicativos, ya sea en forma de código fuente o de código
objeto. Se exceptúan aquellos programas de cómputo que tengan por objeto causar
efectos nocivos a otros programas o equipos.

Artículo 103.- Salvo pacto en contrario, los derechos patrimoniales sobre un programa
de computación y su documentación, cuando hayan sido creados por uno o varios
empleados en el ejercicio de sus funciones o siguiendo las instrucciones del
empleador, corresponden a éste.
Como excepción a lo previsto por el artículo 33 de la presente Ley, el plazo de la
cesión de derechos en materia de programas de computación no está sujeto a
limitación alguna.

Artículo 104.- Como excepción a lo previsto en el artículo 27 fracción IV, el titular de los
derechos de autor sobre un programa de computación o sobre una base de datos
conservará, aún después de la venta de ejemplares de los mismos, el derecho de
autorizar o prohibir el arrendamiento de dichos ejemplares. este precepto no se
aplicará cuando el ejemplar del programa de computación no constituya en sí mismo
un objeto esencial de la licencia de uso.

Artículo 105.- El usuario legítimo de un programa de computación podrá realizar el


número de copias que le autorice la licencia concedida por el titular de los derechos
de autor, o una sola copia de dicho programa siempre y cuando:
I. Sea indispensable para la utilización del programa, o
II. Sea destinada exclusivamente como resguardo para sustituir la copia legítima
adquirida, cuando ésta no pueda utilizarse por daño o pérdida. La copia de respaldo
deberá ser destruida cuando cese el derecho del usuario para utilizar el programa de
computación.

Artículo 106.- El derecho patrimonial sobre un programa de computación comprende la


facultad de autorizar o prohibir:
I. La reproducción permanente o provisional del programa en todo o en parte, por
cualquier medio y forma;
II. La traducción, la adaptación, el arreglo o cualquier otra modificación de un programa
y la reproducción del programa resultante;
III. Cualquier forma de distribución del programa o de una copia del mismo, incluido el
alquiler, y
IV. La decompilación, los procesos para revertir la ingeniería de un programa de
computación y el desensamblaje.

Artículo 107.- (...)

Artículo 108.- (...)

Artículo 109.- (...)

Artículo 110.- (...)


Artículo 111.- Los programas efectuados electrónicamente que contengan elementos
visuales, sonoros, tridimensionales o animados quedan protegidos por esta Ley en los
elementos primigenios que contengan.

Artículo 112.- Queda prohibida la importación, fabricación, distribución y utilización de


aparatos o la prestación de servicios destinados a eliminar la protección técnica de los
programas de cómputo, de las transmisiones a través del espectro electromagnético y
de redes de telecomunicaciones y de los programas de elementos electrónicos
señalados en el artículo anterior.

Artículo 113.- Las obras e interpretaciones o ejecuciones transmitidas por medios


electrónicos a través del espectro electromagnético y de redes de telecomunicaciones
y el resultado que se obtenga de esta transmisión estarán
protegidas por esta Ley.

Artículo 114.- La transmisión de obras protegidas por esta Ley mediante cable, ondas
radioeléctricas, satélite u otras similares, deberán adecuarse, en lo conducente, a la
legislación mexicana y respetar en todo caso y en todo tiempo las disposiciones sobre
la materia".1

En el siguiente apartado realizaremos un análisis tanto de las ventajas y como de las


desventajas de estos preceptos.

4.2. ANÁLISIS DE LA IMPORTANCIA DE PROMULGA- CIÓN DE LA "LEY DE


DERECHOS DE AUTOR EN SOFTWARE"

Cuando la idea de esta tesis fue concebida, la Ley de Derechos de Autor aún no
contemplaba la protección de la autoría de programas de computación en un apartado
especial como lo hace ahora, sin embargo, la actual legislación sigue resultando
insuficiente ya que se dejan sin regular aspectos que, por la naturaleza propia de los
programas de cómputo es imprescindible incluir.

Actualmente, es difícil y casi imposible imaginar una gran empresa o hasta una
pequeña oficina que carezca de un equipo de cómputo, ya que gracias a la tecnología
se han agilizado las tareas que antiguamente se hacían en máquinas de escribir o en
artefactos manuales.

Los programas de computación han pasado de ser simples procesadores de datos o


de texto, a convertirse en verdaderos cerebros que permiten sustituir varias acciones
humanas por un simple comando. Los creadores de programas de cómputo son
capaces de adecuar, partiendo de un programa base, un software capaz de satisfacer
las necesidades específicas de un determinado usuario. Además de esto, el contenido
económico indiscutible de los programas ha suscitado, entre otras cosas, que dichos
bienes se constituyan en objeto de inversiones muy altas, así como de acciones ilícitas
de apoderamiento.

Cuando hablamos de protección de los derechos de autor en software, debemos


globalizar los riesgos a los que se exponen sus creadores, siendo algunos de éstos los
siguientes:

§ La copia del programa base u operativo, sin su autorización.


§ La copia del programa aplicativo, sin su autorización.
§ La modificación o alteración del programa.
§ Los daños causados a su programa por otro software.
§ El uso del programa, sin su autorización.
§ Además se necesita estimular la producción informática nacional, y por
consiguiente su consumo, y esto sólo se logra con un adecuado marco jurídico que
sirva como punto de partida.
Sin embargo, el mundo de la informática al mismo ritmo que agiliza la vida diaria,
también va transformándose y mejorando con gran rapidez; por lo que los términos
que en otras materias objeto de protección de los derechos de autor son suficientes, en
el caso del software resultan obsoletos o inaplicables debido a la naturaleza propia de
la informática.
El mundo está en constante evolución, sin embargo nuestro Derecho aparece como
una ciencia casi estática y sumamente rezagada en comparación con las demás
ciencias. Es tanta la información y los avances científicos y tecnológicos que se
generan diariamente, que resulta virtualmente imposible para el legislador el
contemplar cada uno de los posibles supuestos jurídicos que de estos descubrimientos
se deriven.

Como mencionábamos renglones atrás, la computación, hasta hace unos años


conocida sólo por unos cuantos debido a la complejidad de su manejo, es en la
actualidad una herramienta de trabajo casi indispensable y cuyas aplicaciones se
observan en las diversas ramas de la actividad humana.

El Derecho no puede sustraerse al avance científico y tecnológico de la época


moderna, haciendo necesario un proceso de adaptación que permita incorporar las
computadoras y su regulación al Derecho.

Debido a la importancia de las computadoras en nuestra vida es necesario analizar el


tema no sólo desde el punto de vista jurídico sino también económico, como veremos a
continuación.

La comercialización de las computadoras se inicia propiamente en la década de los


sesenta; en esta época, el 70% del capital que se destinaba al desarrollo de la
industria informática era empleado en hardware (componentes mecánicos, magnéticos,
electrónicos y eléctricos de una computadora, es decir, la parte física de un sistema de
cómputo), mientras que el 30% restante se invertía en software (programas de
instrucciones que dan a la computadora una tarea en particular).

Posteriormente, la producción de equipos fue requiriendo de una menor inversión y, por


el contrario, la creación de programas de cómputo o software se tornó más compleja y
costosa, debido a que en buena medida son estos últimos los que soportan el
adecuado funcionamiento y carácter efectivo de las computadoras.

En base a lo anterior, las cifras de costos de producción se invirtieron: la industria de


programación absorbe actualmente un 70% de los costos, y desgraciadamente éstas
son cantidades difícilmente amortizables, entre otras cosas, por la falta de un
adecuado régimen regulador que impida o limite las continuas actitudes de
apoderamiento ilícito en detrimento de los creadores y usuarios.

El problema de la protección de los programas no es estrictamente jurídico, sino que


denota la presencia de dos elementos fundamentales, como lo son el técnico y el
económico.

En la presente tesis nos enfocamos al estudio y análisis de la naturaleza jurídica en el


Derecho mexicano de los Derechos de Autor en Software, con el fin de ubicar las
lagunas existentes en nuestra legislación a este respecto y por consiguiente en nuestro
segundo capítulo hicimos un análisis de lo que otros países han hecho en la búsqueda
de conseguir una solución a dicho problema.

La necesidad de que se regule en forma específica los Derechos de Autor en


Software, como hemos visto, surge de las características específicas de la materia: el
vertiginoso ritmo con el que se van presentado nuevas modificaciones que vuelven
obsoletos los anteriores adelantos en programación es sólo una de las razones por las
cuales los plazos y términos comprendidos en nuestra ley no son los adecuados.
Debido a la complejidad de los lenguajes de programación, la legislación propuesta
debe ser tan flexible que permita la injerencia de términos técnicos en informática para
no caer en el vicio de la denominación del objeto regulado sobre el Derecho y, con ello,
asegurar que cualquier supuesto jurídico en esta materia pueda ser resuelto
jurisdiccionalmente, siendo éste el principal objetivo de nuestra investigación: la
obtención de una adecuada y eficaz protección jurídica a los Derechos de Autor en
Software.

A manera de preámbulo, y antes de proceder a presentar nuestra propuesta, es


importante establecer la naturaleza jurídica de la misma, misma que se tratará en el
siguiente apartado.

4.3. NATURALEZA JURÍDICA EN EL DERECHO MEXI- CANO DE LA "LEY DE


DERECHOS DE AUTOR EN SOFTWARE"

Desde el surgimiento mismo del Derecho, hace siglos, existe la clásica división de la
ciencia jurídica en Derecho Público y Derecho Privado, su separación es obra de los
Juristas Romanos basados en la doctrina del interés en juego y el criterio de la utilidad.
Expuesta por Ulpiano y recogida en las "Instituciones" se afirma que el Derecho
Público es el que mira al estado de la cosa romana y el Derecho Privado el que se
refiere al interés de los particulares. En base a esto podemos afirmar que cuando las
normas tutelan el interés colectivo son de Derecho Público y cuando velan por el
interés particular son de Derecho Privado.

"Thöm sostiene la distinción entre Derecho Público y Privado fundada en la naturaleza


de la tutela protectora de cada norma. Serán entonces de Derecho Público las
protegidas por una acción pública y de Derecho Privado las protegidas por una acción
privada. Para Maggiore, la distinción entre Derecho Público y Privado está en el
proceso de subjetivación del Derecho. La norma sólo es un concepto abstracto del
derecho y se concretiza en el sujeto, por lo que se da un proceso de subjetivación. La
concurrencia jurídica crea el mundo del derecho, distinguiendo y oponiendo lo que
tiene un valor infinito y universal a lo que tiene un valor finito y particular. En el primer
caso estamos en presencia del Derecho Público y en el segundo del Derecho
Privado".2

Otra doctrina sobre la división del Derecho en Público y Privado es la denominada


naturaleza de la relación o del plus valor. Cuando las relaciones son de subordinación
o integración jerárquica estamos en presencia de normas de Derecho Público; si las
relaciones son de coordinación o de igualdad, las normas serán de Derecho Privado.

Juan Antonio Martínez de la Serna, citando a Radbruch dice que "los conceptos del
Derecho Público y Derecho Privado son a priori, precede a toda experiencia jurídica,
precisando que son a priori cuando a cada concepto se le puede preguntar si
pertenece al Derecho Público o al Derecho Privado. En el liberalismo, el predominio es
de derecho Privado y en el estatismo o intervencionismo estatal, será en cambio el
Derecho Público el de la preminencia".3

Sin seguir profundizando en las teorías que se han elaborado en torno a esta división
del Derecho, opinamos que el Derecho Autoral, y por consiguiente la Ley de Derechos
de Autor en Software propuesta corresponden al Derecho Público, puesto que:

1. Sus disposiciones son de orden público.

2. Aunque se contempla la existencia de contratos, estos no pueden ser


contrarios a derecho, y por consiguiente, las normas no pueden ser modificadas por los
particulares.
3. Con su cumplimiento está comprometido el interés general por los fines y
actividades de este Derecho.

4. La naturaleza de sus normas son de integración y subordinación jurídica.

5. La acción del estado no se limita a la salvaguardia de los intereses


particulares, sino a la protección de una obra de ineludible importancia social y que
brindaría grandes ventajas a nuestra desquebrajada economía nacional.

6. Existe una legislación especial que regula lo relacionado con este Derecho
(Ley Federal de Derechos de Autor, y nuestra propuesta LEY DE DERECHOS DE
AUTOR EN SOFTWARE).

4.4. "LEY DE DERECHOS DE AUTOR EN SOFTWARE": LA BÚSQUEDA NECESARIA


DE UNA RESPUESTA JURÍDICA.

Como punto de partida para la creación de la Ley de Protección de los Derechos de


Autor en Software, resultaría fundamental realizar modificaciones al artículo 13 de la
Ley de Derechos de Autor, ya que la legislación propuesta en la presente tesis sería
reglamentaria de la fracción XI del citado artículo.

Y en ese orden de ideas, a continuación veremos lo que sería el artículo 13 de la Ley


de Derechos de Autor reformado para dar surgimiento a nuestro proyecto de ley. en
materia de software:

Artículo 13.- Los derechos de autor a que se refiere esta Ley se reconocen respecto de
las obras de las siguientes ramas:
I. Literaria.
II. Musical, con o sin letra.
III. Dramática.
IV. Danza.
V. Pictórica o de dibujo.
VI. Escultórica y de carácter plástico.
VII. Caricatura e historieta.
VIII. Arquitectónica.
IX. Cinematográfica y demás obras audiovisuales.
X. Programas de radio y televisión.
XI. Programas de cómputo.
XII. Fotográfica.
XIII. Obras de arte aplicado que incluyen el diseño gráfico o textil.
XIV. De compilación, integrada por las colecciones de obras, tales como las
enciclopedias, las antologías, y de obras u otros elementos como las bases de datos,
siempre que dichas colecciones, por su selección o la disposición de su contenido o
materias, constituyan una creación intelectual.
Las demás obras que por analogía puedan considerarse obras literarias o artísticas se
incluirán en la rama que les sea más afín a su naturaleza.
En lo concerniente a los programas de cómputo, estos se regirán por la ley creada al
efecto por la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial con la aprobación de la
Secretaría de Educación Pública.

Con la inserción del último párrafo a este artículo de la legislación autoral damos pauta
a la creación de nuestro proyecto de ley especial en materia de software.

Sin embargo, y previo a esto, resulta importante exponer lo concerniente a algunos de


los principales beneficios sociales que se obtendrían con la creación del ordenamiento
legal propuesto en la presente tesis, y que quedan plasmados en la gestación de las
dos instituciones siguientes:
Ü EL REGISTRO NACIONAL DE PROGRAMAS DE CÓMPUTO. La creación de
un Registro Nacional de Programas de Cómputo (RNPC) debido a que por la gran
variedad de programas de cómputo, y tomando en cuenta la trascendencia y la postura
medular de la computación en nuestros días, es necesario la creación de una
dependencia especial dentro del Registro Público del Derecho de Autor que se
encargue de llevar al día un registro de los programas de cómputo existentes y que se
encuentren protegidos por el derecho autoral.

Ü EL FONDO NACIONAL DE INFORMÁTICA. La creación del Fondo Nacional de


Informática (FNI), enfocado casi en su totalidad al fomento de la creación de dichos
programas por parte de empresas o particulares nacionales, a través de la obtención
de la tecnología necesaria y la promoción y distribución de dichos programas, logrando
ingresar así al ámbito comercial de la informática no sólo como asiduos compradores,
sino también como innovadores vendedores.

Los dos organismos anteriormente mencionados deberán estar regidos por el


respectivo reglamento, debido a que cada uno de ellos ocupa una función diferente,
aunque encaminados a un mismo objetivo dentro de la protección de derechos de
autor en programas de cómputo, y ameritaría toda una investigación aparte sobre la
forma más idónea de estructurar su administración, recursos, etc.

Una vez expuesta la naturaleza jurídica y la necesidad de la creación de una LEY DE


DERECHOS DE AUTOR EN SOFTWARE, mencionaremos que ésta sería
reglamentaria de la fracción XI del artículo 13 de nuestra actual Ley Federal de
Derechos de Autor, sirviendo como un basto complemento de la primera parte del
Capítulo IV, contenido dentro del Título IV de la multicitada legislación autoral, el cual
quedaría inactivo con nuestro proyecto.

Aclarando que el problema de la protección de los programas de cómputo no es


estrictamente jurídico, sino que denota la presencia de otros dos elementos
fundamentales como lo son el técnico y el económico; a continuación, y sin más
preámbulos, procederemos a exponer nuestra solución dentro del ámbito legal:

LEY DE DERECHOS DE AUTOR EN SOFTWARE


(REGLAMENTARIA DE LA FRACCIÓN XI DEL ARTÍCULO 13 DE LA LEY FEDERAL
DE DERECHOS DE AUTOR)

Capítulo I
DISPOSICIONES GENERALES

Artículo 1º.- Para efectos de la presente ley, se entiende por programa de computación
la expresión original en cualquier forma, lenguaje o código, de un conjunto de
instrucciones que, con una secuencia, estructura y organización determinada, tiene
como propósito que una computadora o dispositivo realice una tarea o función
específica. Tendrán igual significado y connotación, para los efectos de sistematización
del presente ordenamiento jurídico, los siguientes términos:
a) "programa de cómputo",
b) "programa de computación",
c) "programa para computadora", o
d) "software".

Artículo 2º.- La protección a los derechos de autor de programas de computación


queda sujeta a lo previsto en la presente ley. A falta de disposición expresa, se
estará a las prevenciones de la Ley Federal de Derechos de Autor.
Artículo 3º.- La protección a que se refiere esta ley, se extiende tanto a los programas
operativos como a los programas aplicativos, ya sea en forma de código fuente o de
código objeto. Se exceptúan aquellos programas de cómputo que tengan por objeto
causar efectos nocivos a otros programas o equipos.

Artículo 4º.- Para efectos de la presente ley, un programa de computadora será


considerado similar a otro cuando cumpla las condiciones siguientes:
I. Ser funcionalmente equivalente, considerando que debe:
a) Ser original y desarrollado de manera independiente.
b) Tener, fundamentalmente, las mismas características de desempeño, considerando
el tipo de aplicación a que está destinado.
c) Operar en equipo similar y en un ambiente de procesamiento similar.
II. Ejecutar substancialmente las mismas funciones, considerando el tipo de aplicación
al que está destinado y las características del mercado nacional.
III. Presentar analogías en cuanto a los parámetros relevantes, incluyendo los
numéricamente mensurables, los requisitos de memoria, tiempo de procesamiento y
capacidad de transacción entre usuarios y sistemas.

Artículo 5º.- Por lanzamiento se entenderá el momento en que el autor del programa
lo utiliza o pone a disposición de otro.

Queda asegurada la tutela de los derechos relativos a los programas para


computadora por un plazo de 25 (veinticinco) años, contados a partir de su
lanzamiento en cualquier país.

Los derechos atribuidos por la presente Ley a los extranjeros con domicilio en el
exterior, quedan asegurados siempre que el país de origen del programa mantenga
reciprocidad con México, y conceda derechos equivalentes en extensión y duración a
los establecidos en el párrafo anterior del presente artículo.

Artículo 6º.- Salvo pacto en contrario, los derechos patrimoniales relativos al programa
para computadora, desarrollado y elaborado durante la vigencia del contrato o del
vínculo estatutario, expresamente destinado a la investigación y desarrollo, o donde
esté prevista la actividad del empleado, funcionario o prestador de servicios, o que
pertenezca a la propia naturaleza de los encargos contratados, pertenecerán
exclusivamente al empleador o contratante de servicios. Salvo cláusula en contrario, la
compensación del trabajo o servicio prestado se limitará a la remuneración o salario
convenido.

Los derechos concernientes al programa para computadora creado sin relación al


contrato de trabajo, vínculo estatutario o prestación de servicios, y sin utilizar recursos,
informaciones tecnológicas, materiales, instalaciones o equipos del empleador o
contratante de servicios, pertenecerán con exclusividad al creador de dicho software.

Artículo 7º.- Cuando se estipule en contrato firmado entre las partes, los derechos
sobre las modificaciones tecnológicas y derivaciones, pertenecerán a la persona
autorizada que las haga, y que los ejercerá autónomamente.

Artículo 8º.- El plazo de la cesión de derechos en materia de informática no está sujeto


a limitación alguna; excepto en los casos en que no exista estipulación expresa, y
siendo así toda transmisión de derechos patrimoniales se considerará por el término de
5 años, pudiendo pactarse por más de 15 años cuando la magnitud de la inversión así
lo justifique.

Artículo 9º.- No constituirán ofensa al derecho de autor de un programa de cómputo:

I. La reproducción de una copia legítimamente adquirida, siempre que sea


indispensable para la utilización adecuada del programa.
II. La citación parcial para fines didácticos, siempre que se identifiquen el autor y el
programa referido.
III. La semejanza entre un programa y otro ya existente, siempre que la misma esté
causada por las características funcionales de su aplicación, por la observación de los
preceptos legales, reglamentarios o de normas técnicas o de la limitación de la
forma alternativa para su expresión.
IV. La integración de un programa, con todas sus características esenciales, a un
sistema aplicativo u operacional, técnicamente indispensable para las necesidades del
usuario siempre que sea para uso exclusivo de quien lo promovió.

Capítulo II
DE LA INSCRIPCIÓN DEL PROGRAMA DE CÓMPUTO

Artículo 10.- Los programas de cómputo serán inscritos en el Registro Nacional de


Programas de Cómputo, creado al efecto. Para llevar a cabo la comercialización de un
programa de computación, será necesaria la inscripción del programa o conjunto de
programas bajo las siguientes categorías de clasificación, las cuales deberán ser
proporcionadas por el interesado junto con el pedido de inscripción y aprobadas por el
Registro:

I. Por su procedencia:
a) Nacionales: a aquellos creados y producidos en nuestro país.
b) Internacionales: los creados y producidos en cualquier otro país del extranjero.
c) Mixto: aquellos creados en asociación de nacionales e internacionales.
II. Por sus componentes:
a) De comando.
b) Ejecutables.
c) De complemento para aplicaciones.
d) De control de periféricos o drives.
e) De sistema.
f) De datos.
III. Por su estado de desarrollo:
a) Core code o código base.
b) Demoware o programa de demostración.
c) Versiones beta o programas de prueba.
d) Software V 1.0.0. o programa comercializable.
IV. Por su destino:
a) De investigación y científico.
b) Industrial.
c) Gubernamental.
d) Entretenimiento.
e) Empresarial.
f) Uso doméstico.

Los demás programas de cómputo que, por analogía, puedan considerarse


innovadores dentro de su medio, se incluirán dentro de las clasificaciones que les sean
más afines a su naturaleza. Los procedimientos operacionales serán regulados por el
Reglamento del Registro Nacional de Programas de Cómputo.

Artículo 11.- La aprobación de los actos y contratos referidos en la presente Ley por
parte de la Dirección General del Derecho de Autor y la inscripción del programa de
cómputo, son condiciones previas y esenciales para:
I. La validez y eficacia de cualquier tipo de negocio jurídico relacionado con software.
II. La producción de efectos fiscales, así como la legitimación de pagos, créditos o
remesas correspondientes, cuando sea el caso, sin perjuicio de otros requisitos y
condiciones establecidas por ley.

Artículo 12.- La inscripción de programas de computadora quedará sin efecto, en


cualquier momento:
I. Por sentencia judicial tramitada en juzgado.
II. Por acto administrativo, cuando quede comprobado que las informaciones
presentadas por el interesado para presentar su pedido de registro no fueran verídicas.

Artículo 13.- Las acciones de nulidad del registro podrán ser intentadas por cualquier
interesado, ya sea particular o cualquier dependencia gubernamental.

Artículo 14.- Para solicitar un pedido de registro de programa de cómputo, el autor


deberá presentar las siguientes informaciones:
I. Título del programa para computadora.
II. Nombre civil, fecha de nacimiento, nacionalidad y domicilio del autor.
III. Fecha de terminación del programa para computadora.
IV. Indicación de la fecha y lugar del lanzamiento del programa.
V. En el caso de un software resultante de modificaciones tecnológicas y derivaciones,
indicación del programa que modifica o del que deriva, acompañando en este caso, el
documento de autorización.
VI. Indicación de que el programa fue desarrollado por un particular, empleado,
funcionario o prestador de servicios.
VII. Indicación de los lenguajes de programación utilizados en el desarrollo del
programa de cómputo.
Además, en cualquier caso de solicitud de registro de programa para computadora, el
requiriente deberá presentar los elementos esenciales para caracterizar la creación
independiente e identificar el programa, de manera que permita la lectura directamente
por el hombre.

Artículo 15.- No estarán sujetos a inscripción, aquellos programas de cómputo:


I. Importados por el usuario final para su uso exclusivo, en la forma de copia única.
II. Importados por el usuario final para su uso exclusivo, en asociación a máquinas,
equipos y dispositivos basados en técnica digital.
III. Residentes e integrados en máquinas, equipos y dispositivos basados en técnica
digital, siempre que esos programas no sean comercializados de manera separada de
los productos que los contengan.

Artículo 16.- Los programas de cómputo podrán ser inscritos de manera colectiva
cuando constituyan un conjunto de programas destinados a una aplicación específica,
recibiendo en este caso, un único número de orden en el Registro Público del Derecho
de Autor.

Artículo 17.- La versión de un programa ya registrado deberá ser también inscrita


cuando presente características funcionales y condiciones de comercialización
diferentes de la versión anterior.

Artículo 18.- La Dirección General del Derecho de Autor permitirá el acceso a las
informaciones de interés público que consten en el Registro de programas para
computadora; siendo dichas informaciones las que a continuación se enumeran:

a) Nombre del programa de cómputo.


b) Descripción funcional de dicho programa.
c) Nombre y domicilio del titular de la comercialización en el país.
d) Clasificaciones dentro de las que podría encuadrarse.
e) Categoría, número de orden de registro y su validez.
f) Ambiente de procesamiento
g) Plazo de validez técnica establecido por el titular de los derechos de
comercialización en el país.

Artículo 19.- Cuando la transferencia de tecnología haya sido resuelta de común


acuerdo entre las partes, se hará necesario registrar los respectivos actos y
contratos en el Instituto Mexicano de Propiedad Industrial (IMPI).

En los casos de programas de cómputo destinados a la aplicación en áreas de


relevante interés estratégico o económico, la Dirección General del Derecho de Autor
podrá condicionar el registro de los actos o contratos a la transferencia de la tecnología
correspondiente.

Artículo 20.- Con el objeto de la creación y posterior financiamiento del Fondo Nacional
de Informática (FNI), el 8% (ocho por ciento) de las erogaciones por costo de
inscripción de programas de cómputo en el Registro Público del Derecho de Autor
serán destinadas a dicho Fondo.

Capítulo III
DEL FONDO NACIONAL DE INFORMÁTICA

Artículo 21.- El Fondo Nacional de Informática (FNI) será destinado a la financiación de


programas de:

a) Investigación y desarrollo de tecnología de informática y automación.


b) Formación de recursos humanos en el área de informática.
c) Equipamiento de Centros de Investigación en Informática.
d) Transferencia y difusión de los hallazgos a la planta productiva, al sistema educativo
y a la sociedad en general.

Artículo 22.- El Fondo Nacional de Informática estará constituido por:


a) Asignaciones del presupuesto.
b) El 8% de los emolumentos por costo de inscripción de software en el Registro
Nacional de Programas de Cómputo.
c) Cuotas de contribución y derechos.
d) Donaciones de origen interno o externo.

Artículo 23.- De manera paralela a este Fondo Nacional de Informática, y como forma
de incentivo, los organismos y entidades de la Administración Pública Directa o
Indirecta, Fundaciones instituidas o mantenidas por el Poder Público y las demás
entidades bajo control directo o indirecto del Poder Público, darán preferencia, en
igualdad de condiciones, al uso de programas para computadora desarrollados en el
país por empresas públicas o privadas nacionales.

Capítulo IV
DE LA COMERCIALIZACIÓN DEL SOFTWARE

Artículo 24.- El titular de los derechos de programas de computación y de su


comercialización es responsable ante el usuario por la calidad técnica adecuada, así
como por la calidad de fijación o grabación de los mismos en los respectivos soportes
físicos, cabiendo la acción regresiva contra eventuales titulares anteriores de esos
mismos derechos.

Artículo 25.- Los soportes físicos de los programas de cómputo y sus embalajes
respectivos, así como los contratos referidos, deberán consignar de manera fácilmente
legible por el usuario, el número de orden de registro y el plazo de validez técnica de
la versión comercializada.

Artículo 26.- Durante el plazo de validez técnica de la versión respectiva, el titular de


los derechos de comercialización queda obligado a:

I. Divulgar, sin carga adicional, las correcciones de errores eventuales.


II. Asegurar a los respectivos usuarios la prestación de servicios técnicos
complementarios relativos al funcionamiento adecuado del programa de cómputo,
considerando sus especificaciones y las particulares del usuario.
III. No retirar dicho programa de la circulación comercial sin indemnizar los perjuicios
eventuales causados a terceros, y previa comunicación de dicha salida a la Dirección
General del Derecho de Autor.

Artículo 27.- Cuando un programa para computadora presente una relación de


dependencia funcional con otro programa, será necesario caracterizar claramente ante
el usuario las responsabilidades individuales de los respectivos productores o titulares
de los derechos de comercialización en lo referente al funcionamiento conjunto
adecuado de los programas.

Artículo 28.- La explotación económica de los programas de cómputo en el país, será


objeto de contratos de licencia o cesión efectuados libremente entre las partes, y en los
que se fijará la responsabilidad por los pagos respectivos en lo referente a materia
fiscal y tasas exigibles en el país. En relación a lo anterior, además, se anularán las
cláusulas que:
a) Fijen exclusividad.
b) Limiten la producción, distribución y comercialización.
c) Eximan a cualquiera de los contratantes de responsabilidad por eventuales acciones
de terceros en virtud de vicios, defectos o violación de derechos de autor.

Artículo 29.- Como excepción a lo previsto en el artículo anterior, el titular de los


derechos de autor sobre un programa de cómputo conservará, aún después de la
venta de ejemplares de los mismos, el derecho de autorizar o prohibir el arrendamiento
de dichos ejemplares. Este precepto no se aplicará cuando el ejemplar del programa
de computación no constituya en sí mismo un objeto esencial de la licencia de uso.

Artículo 30.- Queda prohibida la importación, fabricación, distribución y utilización de


aparatos o la prestación de servicios destinados a eliminar la protección técnica de los
programas de cómputo, de las transmisiones a través del espectro electromagnético y
de redes de telecomunicaciones y de los programas de elementos electrónicos, ya
sean estos visuales, sonoros, tridimensionales o animados.

Artículo 31.- Los programas, sus interpretaciones o ejecuciones transmitidos por


medios electrónicos a través del espectro electromagnético y de redes de
telecomunicaciones, así como el resultado que se obtenga de dicha transmisión
deberán adecuarse a lo establecido por la legislación mexicana.

Artículo 32.- El derecho patrimonial sobre un programa de computación comprende la


facultad de autorizar o prohibir:
I. La traducción, la adaptación, el arreglo o cualquier otra modificación de un programa
y la reproducción del programa resultante.
II. La reproducción permanente o provisional del programa en todo o en parte, por
cualquier medio y forma.
III. Cualquier forma de distribución del programa o de una copia del mismo, incluido el
alquiler, y
IV. La decompilación, los procesos para revertir la ingeniería de un programa de
computación y el desensamblaje.

Artículo 33.- La obtención de copias de un programa de computación por parte del


Registro Público del Derecho de Autor, sólo se permitirá mediante autorización del
titular del derecho patrimonial o por mandamiento judicial.

Capítulo V
DE LA COMPETENCIA

Artículo 34.- Para los fines previstos en esta Ley, corresponde:


I. A la Dirección General del Derecho de Autor decidir la forma del Reglamento Interno
del Fondo Nacional de Informática y del Reglamento Interno del Registro Nacional de
Programas de Cómputo.
II. A la Secretaría de Educación Pública:
a) Establecer normas a ser publicadas en el Diario Oficial de la Federación, que
reglamenten los procedimientos referentes al registro de programas de cómputo.
b) Decidir sobre los recursos relativos al registro de programas de computación.
III. A la unidad administrativa correspondiente de la Secretaría de Educación Pública,
resolver los recursos administrativos de reconsideración interpuestos ante las
decisiones tomadas por la Dirección General de Derechos de Autor, o dependencias
derivadas de ésta.
IV. A la Dirección General del Derecho de Autor, por conducto del Registro Nacional de
Programas de Cómputo:
a) Analizar, clasificar y decidir favorablemente sobre la inscripción de programas para
computadora.
b) Analizar y aprobar actos y contratos relativos a la comercialización de programas de
cómputo desarrollados tanto por empresas nacionales como no nacionales.
c) Analizar y aprobar proyectos de diseño y desarrollo de programas para
computadora.
d) Expresar su opinión, previamente, sobre cualquier importación de programas para
computadora.
V. Al Instituto Mexicano de Propiedad Industrial, analizar y registrar contratos de
transferencia de tecnología de programas para computadora.

Capítulo VI
DE LAS PRESCRIPCIONES

Artículo 35.- La responsabilidad civil derivada de la violación a los derechos autorales


de un programa de cómputo prescribe en 5 (cinco) años.

Artículo 36.- Prescriben también en 5 (cinco) años las acciones fundamentadas en la


falta de pago de las obligaciones respectivas, contando el plazo de la fecha:

a) Que constituye el plazo final de validez técnica de la versión comercializada.


b) De la licencia de uso de programas de cómputo.
c) De la terminación de la garantía, en el caso de software desarrollado y elaborado
por pedido.

Capítulo VII
DE LAS SANCIONES

Artículo 37.- Se impondrá prisión de seis meses a seis años y multa por el equivalente
de cincuenta a quinientos días de salario mínimo, en los siguientes casos:

I. Al que sin consentimiento del titular del derecho de autor, explote con fines de lucro
un programa de cómputo registrado.
II. A la persona que reproduzca, sin consentimiento del autor o sus causahabientes, un
número mayor de los ejemplares autorizados o de los estipulados en el contrato.
III. Al que sin autorización de la Federación, los Estados o los Municipios, comercialice
el software destinado para su servicio oficial.

Artículo 38.- Se impondrá prisión de ocho meses a cuatro años al que importe,
mantenga en depósito o exponga, para fines de comercialización, programas de
cómputo de origen externo no registrados.
Lo dispuesto en el párrafo anterior, no se aplica a los programas destinados
exclusivamente a la demostración o apreciación de mercado en ferias o congresos de
naturaleza técnica, científica o industrial.

Artículo 39.- Se impondrá prisión de uno a cinco años y multa por el equivalente de
ochenta a seiscientos días de salario mínimo, en los casos siguientes:

I. Al que modifique o altere sin autorización del creador, un programa de cómputo


registrado.
II. Al que publique compendios, adaptaciones, traducciones o modificaciones de
programas de cómputo, sin la autorización del titular del derecho de autor sobre el
programa original.
III. Al que dolosamente emplee el título de un programa que induzca a confusión con
otro publicado con anterioridad.
IV. Al que comercialice con el software de distribución gratuita, sin autorización de su
titular, además de que en este caso en específico, se deberá reembolsar las regalías
obtenidas por dicho comercializador.

Artículo 40.- Se impondrá prisión de treinta días a un año o multa por el equivalente de
cincuenta a trescientos días de salario mínimo, o ambas sanciones a juicio del juez, a
quienes estando autorizados para comercializar un programa de cómputo, no
consignen de manera legible la orden de registro y el plazo de validez técnica de la
versión comercializada del software en los soportes físicos y sus respectivos
embalajes, así como en los contratos.

TRANSITORIOS

PRIMERO.- El presente Decreto entrará en vigor a partir del día siguiente de su


publicación en el Diario Oficial de la Federación.

SEGUNDO.- Quedan revocadas las disposiciones en contrario existentes dentro de la


legislación mexicana.

TERCERO.- Se concede a los titulares de programas de cómputo que estén siendo


comercializados en el país, un plazo de 180 (ciento ochenta) días a partir de la entrada
en vigor de la presente ley, para inscribirlos en el Registro Nacional de Programas de
Cómputo.

CUARTO.- La Dirección General del Derecho de Autor contará con un plazo de 30


(treinta) días para establecer los procedimientos operacionales previstos en la presente
ley.

México, 1 de Enero de 1999.

CONCLUSIONES

Debido a que el problema de la protección de los programas de cómputo no es


estrictamente jurídico, sino que denota forzosamente la presencia de otros dos
elementos igualmente fundamentales como lo son el técnico y el económico, concluir la
presente investigación en el sentido de dar una respuesta definitiva al problema de
lograr una protección absoluta a los derechos de autor en software, sería demasiado
presuntuoso.

De manera que resulta más adecuado recalcar los aspectos fundamentales de


este trabajo bajo la forma de consideraciones finales, dejando la puerta abierta a otros
estudios que nos brinden la oportunidad de ir más allá, ya que el Derecho es
perfectible y nuestra propuesta es tan sólo un planteamiento de lo que la ciencia
jurídica puede llegar a ser.

Una computadora es un equipo informático de tratamiento automático de datos


que contiene los órganos o elementos necesarios para su funcionamiento autónomo, o
en otras palabras, es un rápido y exacto sistema de manipulación de símbolos,
organizado para aceptar, almacenar y procesar datos y producir resultados bajo la
dirección de un programa almacenado.

El software es definido como programas de instrucciones que dan a la


computadora una tarea en particular, es decir, el software es el cerebro de la máquina.
En la década de los sesenta, cuando comenzó la comercialización de las
computadoras, el 70% del capital que se destinaba al desarrollo de la industria
informática era empleado en hardware, es decir, la parte física de un sistema de
cómputo, mientras que el 30% restante se invertía en software. Posteriormente, la
producción de equipos fue requiriendo de una menor inversión y, por el contrario, la
creación de programas de cómputo o software se tornó más compleja y costosa,
debido a que en buena medida son estos últimos los que soportan el adecuado
funcionamiento y carácter efectivo de las computadoras.

Debido al impacto que actualmente tienen las computadoras en nuestras vidas,


una adecuada protección de la propiedad intelectual con referencia a programas para
computadora no sólo beneficiaría al titular de dicha obra, sino también a la sociedad en
general ya que, como mencionamos en la fundamentación de la tesis que nos ocupa,
la carencia de una normatividad adecuada no sólo es un problema jurídico, puesto que
también se proyecta en el ámbito técnico y en el económico.

Lo anterior se ve reflejado en la industria de programación nacional como


sujeto activo del problema y en los usuarios como sujetos pasivos, ya que mientras
más frecuentes sean los casos de apoderamiento ilícito de software, menores serán
los ingresos que perciban sus productores y comercializadores, viéndose obligados a
elevar los precios con el fin de recuperar de alguna forma su inversión, y a disminuir
los recursos utilizados para financiar la labor de los creadores de aquellos softwares.

Resulta interesante, además, considerar a los programas de computación


como parte de nuestra cultura, la cultura del siglo XXI, y resaltar la importancia de
proteger y salvaguardar nuestro acervo cultural dada la enorme trascendencia que este
concepto encierra, puesto que significa desarrollo y perfeccionamiento de las
facultades morales, intelectuales y físicas del hombre; conocimientos y actividad
espiritual de un hombre, una nación o una época.

Por lo anterior, nos atrevernos a afirmar que la creación del software merece
protección autoral no sólo por ser obra de una persona sino también porque gracias a
este tipo de inventos y adelantos tecnológicos nuestro acervo cultural se acrecienta en
beneficio de toda la humanidad.

El 19 de mayo de 1997 en el Diario Oficial de la Federación fue publicada la


última reforma a la Ley de Derechos de Autor, misma que entre otras innovaciones,
comprende la inserción dentro del Título IV, el Capítulo IV, mismo que lleva por título
"DE LOS PROGRAMAS DE COMPUTACIÓN Y LAS BASES DE DATOS", estando
constituida por 14 artículos.
Sin embargo, el problema de la protección de los programas, considerados
estos como verdaderos bienes (inmateriales) potencialmente susceptibles de
apropiación y en todo caso fuente de inversiones considerables, amerita una
consideración específica.

La solución está, a nuestro parecer, en la creación de un régimen particular


que tome en cuenta los elementos más aplicables de las legislaciones ya existentes
(como lo son la Ley de Derechos de Autor, convenios internacionales y leyes sobre la
materia promulgadas ya en otros países como Francia, Brasil, Inglaterra y Estados
Unidos, por mencionar algunos) hasta lograr una ley innovadora que permita rescatar
lo mejor de lo ya existente más las adecuaciones de las características propias de los
programas de cómputo.

Como preámbulo de la aplicación de la LEY DE DERECHOS DE AUTOR EN


SOFTWARE, resultaría necesario adicionar un párrafo que, tentativamente, aparecería
como el último del artículo 13 de la Ley de Derechos de Autor y que diría lo siguiente:

"En lo concerniente a los programas de cómputo, estos se regirán por la ley creada al
efecto por la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial con la aprobación de la
Secretaría de Educación Pública."

La razón por la que deberían intervenir ambas Secretarías consiste en que son
éstas las que en determinado caso tienen mayor injerencia dentro de la materia.

Con la promulgación planteada de la LEY DE DERECHOS DE AUTOR EN


SOFTWARE, en concordancia con la Ley sobre Derechos de Autor, la legislación
mexicana no sólo brindará una completa protección a los autores intelectuales de
software, sino que permitirá crear la atmósfera necesaria para que la industria de
programación nacional tenga un adecuado desarrollo técnico y económico a través de
la creación de dos organismos específicos:

Ü EL REGISTRO NACIONAL DE PROGRAMAS DE CÓMPUTO (RNPC) debido


a que por la gran variedad de programas de cómputo, y tomando en cuenta la
trascendencia y la postura medular de la computación en nuestros días, es necesario
la creación de una dependencia especial dentro del Registro Público del Derecho de
Autor que se encargue de llevar al día un registro de los programas de cómputo
existentes y que se encuentren protegidos por el derecho autoral.

Ü EL FONDO NACIONAL DE INFORMÁTICA (FNI), enfocado casi en su totalidad


al fomento de la creación de dichos programas por parte de empresas o particulares
nacionales, a través de la obtención de la tecnología necesaria y la promoción y
distribución de dichos programas.

Esta fundación permitiría reinvertir los recursos captados por las


inscripciones de Derechos de Autor en Software, en tecnología de vanguardia con el fin
de que los creadores de programas de computación tengan los medios adecuados
para continuar con sus investigaciones.

Otra innovación que se puede observar en nuestra propuesta son las


clasificaciones bajo las cuales deberán quedar inscritos los programas para su registro,
éstas se subdividen en diversas categorías debido a la enorme diversidad de
programas que pueden existir, aclarando que aquellos programas que, por analogía,
puedan considerarse innovadores dentro de su medio, se incluirán dentro de las
clasificaciones que les sean más afines a su naturaleza. Las clasificaciones serían las
siguientes:

I. Por su procedencia:
a) Nacionales: a aquellos creados y producidos en nuestro país.
b) Internacionales: los creados y producidos en cualquier otro país del extranjero.
c) Mixto: aquellos creados en asociación de nacionales e internacionales.
II. Por sus componentes:
a) De comando.
b) Ejecutables.
c) De complemento para aplicaciones.
d) De control de periféricos o drives.
e) De sistema.
f) De datos.
III. Por su estado de desarrollo:
a) Core code o código base.
b) Demoware o programa de demostración.
c) Versiones beta o programas de prueba.
d) Software V 1.0.0. o programa comercializable.
IV. Por su destino:
a) De investigación y científico.
b) Industrial.
c) Gubernamental.
d) Entretenimiento.
e) Empresarial.
f) Uso doméstico.

En cuanto a los procedimientos operacionales, estos estarían regulados por el


Reglamento del Registro Nacional de Programas de Cómputo, creado al efecto; y la
Ley Federal de Derechos de Autor se aplicaría en forma supletoria a nuestra ley.

El mundo está en constante evolución, y el Derecho definitivamente no debe


ser la excepción; con una legislación adecuada no sólo lograremos proteger los
derechos de los creadores de software, sino que también activaremos la economía de
nuestro país, logrando ingresar así al ámbito comercial de la informática no sólo como
asiduos compradores, sino también como innovadores vendedores.

CONSUELO ALDANA ZEPEDA.

BIBLIOGRAFÍA

LIBROS

ACOSTA Romero, Miguel, "SEGUNDO CURSO DE DERECHO


ADMINISTRATIVO", México, Ed. Porrúa, 1993. 984 p.

CARBALLAR, José A., "SOFTWARE Y HARDWARE DE SU PC:


CONFIGURACIÓN, ACTUALIZACIÓN Y MANTENIMIENTO", España, Ed. Ra-Ma,
1994. 453 p.

CORNER, Douglas E., "EL LIBRO DE INTERNET", México, Ed. Prentice Hall,
1995. 204 p.

CORREA, Carlos y otros, "DERECHO INFORMÁTICO", Argentina, Ed. De


Palma, 1987. 207 p.

ECHAVARRÍA, Roger E., "LA TECNOLOGÍA DE MICROCOMPUTADORES Y


SUS APLICACIONES", Argentina, Ed. Troquel, 1992. 417 p.
FERNÁNDEZ de León, Gonzalo, "DICCIONARIO JURÍDICO", Tomo II,
Argentina, Ed. Abece, 1963. 571 p.

FREEDMAN, Alan, "DICCIONARIO DE COMPUTACIÓN", Colombia, Ed.


McGraw Hill, 1994. 492 p.

GARCÍA, Eduardo Augusto, "LA DEFRAUDACIÓN EN MATERIA DE


DERECHOS DE AUTOR", Argentina, Ed. Troquel, 1969. 285 p.

GARCÍA Pelayo, Ramón, "DICCIONARIO PRÁCTICO LAROUSSE", México,


Ed. Larousse, 1983. 634 p.

JESSEN, Henery, "DERECHOS INTELECTUALES DE LOS AUTORES,


ARTISTAS, PRODUCTORES DE FONOGRAMAS Y OTROS TITULARES", Chile, Ed.
Jurídica Chile, 1970. 428 p.

LOREDO Hill, Adolfo, "DERECHO AUTORAL MEXICANO", México, Ed.


Porrúa, 1982. 144 p.

MARTÍNEZ de la Serna, Juan Antonio, "DERECHO CONSTITUCIONAL


MEXICANO", México, Ed. Porrúa, 1983. 637 P.

MORA, José Luis y Molino, Enzo, "INTRODUCCIÓN A LA INFORMÁTICA",


México, Ed. Trillas, 1980. 429 p.

PRESSMAN, Roger S., "INGENIERÍA DEL SOFTWARE: UN ENFOQUE


PRÁCTICO", España, Ed. McGraw Hill, 1996. 824 p.

SANDERS, Donald H., "INFORMÁTICA: PRESENTE Y FUTURO", México, Ed.


McGraw Hill, 1985. 398 p.

SCOTT, E.F., "MICROPROCESADORES Y COMPUTACIÓN", Barcelona, Ed.


CEAC, 1981. 285 p.

TÉLLEZ Valdés, Julio, "DERECHO INFORMÁTICO", México, Instituto de


Investigaciones Jurídicas de la UNAM, 1987. 247 p.

"DERECHO INFORMÁTICO", México, Instituto de Investigaciones Jurídicas de


la UNAM, 1991. 99 p.

"DERECHO INFORMÁTICO", México, Editorial McGraw Hill, 1996. 267 p.

"LA PROTECCIÓN JURÍDICA DE LOS PROGRAMAS DE COMPUTACIÓN",


México, Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, 1989. 223 p.

TENA Ramírez, Felipe, "DERECHO CONSTITUCIONAL MEXICANO", México,


Ed. Porrúa, 1994.

VALERO, Juan Arturo, "CIENCIA Y DESARROLLO: LA PROGRAMACIÓN


COMERCIAL Y LA TECNOLOGÍA", n. 54, año IX, México, D.F., 1984.

LEGISLACIÓN

"CÓDIGO PENAL PARA EL ESTADO DE GUANAJUATO", México, Ed.


Cárdenas, 1994. 78 p.

"LEGISLACIÓN SOBRE DERECHOS DE AUTOR", México, Ed. Porrúa, 1996


(Colección Leyes y Códigos de México). 257 p.
"REGLAMENTACIÓN DEL GOBIERNO FRANCÉS", Fuente: Página de
Internet perteneciente al Gobierno francés: http://www.pictime.fr/bsa/2reglem.htm Tr.
Mariana Méndez Duplant. Francia, 1998.

Suprema Corte de la Justicia de la Nación, "LEY FEDERAL DE DERECHOS


DE AUTOR", Compila II, CD-ROM SCJN, México, 1997 (©1997).

S-ar putea să vă placă și