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Alumno, Padre / Madre de familia, sabemos que esta información te será de gran utilidad
aprovéchala al máximo.
El sobrepeso y la obesidad son un problema grave de salud que actualmente afecta a niñas, niños
y adolescentes en nuestro país.
Para combatirlo desde la escuela se requiere la participación permanente de todos los maestros,
alumnos y familia.
Confiamos en que estas orientaciones te sugerirán cómo ofrecerle a tu familia una alimentación
correcta.
Conversar sobre la conveniencia de tener una alimentación correcta para estar sanos y evitar
enfermedades.
mejorar todos sus hábitos alimentarios con el esfuerzo de todos sus integrantes.
Cuidar lo que comen y cuántas comidas realizan al día para estar sanos.
Organizar la preparación de comidas con alimentos y bebidas que favorezcan una alimentación
correcta.
Organizar las comidas en cinco tiempos: Desayuno, Refrigerio, Comida, Refrigerio y Cena.
Ofrecer en las reuniones o celebraciones familiares platillos como jicamas, zanahorias, pepinos,
palomitas hechas en casa, sin sal, o bien, cuidando que la sal sea solo una pizca.
Escoger alimentos o bebidas bajos en grasas, azucares y sal cuando los consuman fuera de casa.
RECUERDA:
mellitus, hipertensión, problemas del corazón, entre otras. Además, representa costos económicos
elevados para la familia y la sociedad.
¿Qué deben comer los niños y en qué cantidad para prevenir el sobrepeso y la obesidad? Cuidar la
alimentación infantil es una labor que cada vez preocupa a más padres. Siguiendo un menú
semanal infantil para prevenir la obesidad en niños podemos contribuir a un crecimiento y
desarrollo adecuado de nuestros hijos. Si los niños tienen un peso correcto en relación a su edad y
a su estatura serán niños sanos y llegarán a ser adultos sanos. Sin duda, la alimentación es uno de
los pilares principales junto a la actividad física para prevenir la obesidad infantil.
En los últimos años, existe una creciente preocupación por la obesidad infantil. El aumento en las
cifras de niños con sobrepeso y obesidad evidencian que estamos cometiendo algún error en la
alimentación infantil, que está condicionando que tengamos niños con un peso superior al
recomendado y que padezcan enfermedades impropias de esta edad (mayor número de niños
diabéticos, más niños con niveles elevados de colesterol…). Estas cifras, que se han considerado
alarmantes en algunos grupos de población, han propiciado que muchos países tengan que
intervenir, a nivel de salud pública, con diversas estrategias para evitar este aumento de la
obesidad infantil y tener una población más sana.
Ofrecer a los niños una alimentación equilibrada y variada, y que además sea agradable y divertida
para ellos, es posible y no tiene por qué suponer a las familias una gran dificultad. Y ¿cómo
sabemos si les estamos ofreciendo a los niños una alimentación correcta? A modo de resumen,
una alimentación equilibrada se basa en:
- 4 o 5 tiempos de comida
- Un desayuno completo, compuesto por: lácteos, cereales y fruta
- Un buen reparto de los alimentos a lo largo de la semana
- Tanto la comida como la cena tiene que contener: alimentos del grupo de las verduras, alimentos
del grupo de los cereales, tubérculos y legumbres, alimentos proteicos y como postre, fruta o
lácteo.
- La mejor bebida y más adecuada será el agua
- Evitar alimentos de bollería industrial, caramelos, pasteles…
Para facilitar una alimentación adecuada a los niños, debemos detectar primero errores
alimentarios en casa y en el colegio, y cambiarlos por hábitos saludables. Con un pequeño cambio
semanal en los hábitos alimentarios de los niños podemos conseguir grandes logros a largo plazo.
Poco a poco, estos cambios formarán parte de su rutina en su dieta diaria y así poco a poco
llegaremos a una alimentación correcta.
Con este menú infantil semanal, listo para imprimir, podrás realizar fácilmente un plan de comidas
semanales para cuidar de la salud de tus hijos y prevenir la obesidad. Aquí tienes un ejemplo de
menú semanal para una alimentación equilibrada, cuyo objetivo es prevenir la obesidad y el
sobrepeso en los niños.
Lunes
Martes
Miércoles
Jueves
Viernes
Sábado
Domingo
1. Lavar y pelar la pera, partirla en trozos pequeños. Pelar y trocear el plátano, reservarlo.
2. En un cazo poner a calentar a fuego medio los trozos de pera con un poco de agua. La fruta irá ablandándose y se formará una compota. Si sobra
4. Exprimir la naranja e ir añadiendo el jugo hasta que tenga la textura deseada. Si está demasiado líquido, se pueden triturar los gajos y añadir la pulpa,
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La zanahoria es una de las verduras más populares entre los niños. Resulta atractiva por su color, su sabor y la infinidad de recetas para niños que
pueden prepararse con ellas. Comerla cruda, freír, asarla...hay muchas posibilidades.
Una de las primeras formas para que un bebé pruebe esta verdura es dársela en este puré de zanahoria, que tiene muchas vitaminas, antioxidantes y
ayuda a reducir el colesterol. La zanahoria es una gran ayuda en el crecimiento sano del bebé, ¡y seguro que le encanta este puré!.
Ingredientes
½ cebolla
Agua
Aceite de oliva
Perejil
Pimienta blanca
Sal
2. Lavar y pelar las zanahoria y las patatas. Trocear de forma que queden piezas del mismo tamaño, para que se hagan por igual. Picar muy fina la
cebolla
3. Echar las verduras a la cazuela cuando el agua empiece a hervir, junto con un chorrito de aceite. Dejar que cueza durante media hora
5. Añadir la nata, una pizca de perejil, sal y pimienta al gusto. Si queda demasiado espeso, añadir unas cucharadas del caldo en el que se cocieron las
Conseguir que los niños coman verdura puede resultar un esfuerzo casi imposible, ya que tienden a rechazar cualquier alimento "verde". Por eso te
Presentado de esta forma tan atractiva seguro que los niños no se resistirán a probar una rodaja de este pastel de verduras, lleno de vitaminas y
nutrientes.
Ingredientes:
1 patata
1 calabacín
3 tomates
3 zanahorias
1 cebolla
4 huevos
Aceite de oliva
Sal
1. Lava bien las verduras, pela el calabacín y la zanahoria y corta todas en trozos pequeños
2. Pon aceite a calentar en una sartén a fuego medio. Añade la cebolla y el calabacín
3. En una cazuela aparte cuece las zanahorias y la patata hata que se ablanden, depués añádelas a la sartén junto al tomate y las espinacas.
4. Bate los huevos en un bol grande con una pizca de sal. Añade las verduras y mezcla bien. Verter la mezcla en un molde engrasado de forma
alargada.
5. Hornear a 170ºC en el horno precalentado, durante unos 30 minutos, hasta que al pinchar con un palillo salga limpio.
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Aproximadamente, un 50 por ciento de los niños menores de 3 años padece anemia infantil, una enfermedad que generalmente se trata con una
dieta destinada a aumentar el consumo de alimentos ricos en hierro, como la carne, y a aumentar su absorción combinándola con frutas ricas en
vitamina C, ya que para que el hierro se absorba mejor, necesita vitamina C en la misma digestión.
Los suplementos de hierro también están indicados, bajo supervisión médica, cuando la anemia no sea de caracter leve.
La hemoglobina es una proteína muy importante para nuestro organismo, pues es la encargada de transportar el oxígeno necesario para el buen
Cuando la cifra o el contenido de la hemoglobina se presenta más bajo de lo esperado en un análisis de sangre, significa que el niño tiene anemia.
Su causa más frecuente es la falta de hierro, un mineral necesario para la formación de la hemoglobina de la sangre. Otra causa habitual suele ser la
Algunas enfermedades también pueden causar anemia en los niños. La anemia infantil se reconoce por la palidez en el tono de la piel, el cansancio y
la falta de energía en los niños. Es posible que el niño tenga también la boca o la lengua de un tono blanquecino.
1. La deficiencia de hierro es la principal causa de la anemia infantil. Una alimentación pobre en alimentos ricos en hierro puede provocar la
anemia.
2. Una enfermedad parasitaria intestinal también puede provocar pérdidas de sangre, al consumida por los parásitos.
3. Algunas enfermedades o infecciones, como las infecciones urinarias, la tuberculosis, el paludismo, los tumores, la fiebre tifoidea y la leucemia,
4. Una ingestión de leche entera de vaca u otros animales en los menores de 1 año puede producir una pérdida de glóbulos rojos, lo que provocaría
una salida periódica de glóbulos rojos hacia la luz intestinal y con el tiempo, anemia.
5. Una exposición diaria a la contaminación ambiental que producen las fábricas de pinturas, tintes, baterías y talleres de metalmecánica. Esas
situaciones pueden llevar a una intoxicación progresiva por plomo del organismo y ocasionar una anemia severa.
6. Algunos antibióticos pueden producir anemia cuando se usan por largos periodos de tiempo. Por esta razón, cuando el pediatra recete algún
antibiótico al bebé, es importante seguir estrictamente sus instrucciones en cuanto a la dosis y al tiempo de duración del tratamiento.
Las últimas investigaciones han revelado la estrecha relación existente entre las cifras de hemoglobina y el funcionamiento del cerebro de los niños.
El hierro es necesario para que se den las conexiones neuronales, así como para el funcionamiento de los neurotrasmisores (sustancias químicas que
En el caso de los niños que padecen anemia esta alteración o deficiencia provoca bajo rendimiento intelectual, dificultades del aprendizaje, disminución
Por otra parte, los niños que tienen anemia se muestran menos afectuosos, menos adaptados al medio y presentan más trastornos de conducta.
CALORÍAS Y ALIMENTACIÓN
Es muy controvertido y hay muchas versiones sobre el asunto de la calorías de ingesta
diaria, pero si nos atenemos a lo recogido por la OMS
a
T.M.B. = Tasa de Metabolismo Basal. Cálculo basado en ecuaciones de la FAO y después
redondeados. b El el intervalo de actividad ligera a moderada, el coeficiente de variaciones de 20%.
c
Las cifras están redondeadas.
A TENER EN CUENTA: Las raciones, expresadas como ingestas diarias a lo largo del tiempo, están destinadas
a cubrir las variaciones individuales entre la mayoría de las personas normales, que viven en Estados Unidos
en condiciones de estrés ambiental habitual. Estos son igualmente validos para personas de otros países. Las
dietas han de basarse en diversos alimentos variados, con el fin de proporcionar todos los nutrientes
necesarios para cubrir los requerimientos humanos (ver la página de la dieta equilibrada.
Los pesos y alturas de los adultos de referencia, son medianas reales para la población de Estados Unidos
con la edad indicada, según lo comunicado pos la NHANES II. Las medianas de los pesos y las alturas para los
sujetos menores de 19 años de edad se tomaron de Hamils y Cols (1979). El uso de estas cifras no implica
que las relaciones entre altura y peso sean ideales.
Las calorías para ser equilibradas y saludables, según las reglas dietéticas ortodoxas,
deben estar compuestas de un 50% de Hidratos de Carbono (glúcidos) con bajo índice
glucémico (especialmente los ricos en fibra), 35% de lípidos (grasas) especialmente
monoinsaturados (aceite de oliva, aguacate, almendras, macadamia, pistachos y
anacardos) y polinsaturados (omega 3 y omega 6) y 15% de proteínas (prótidos) libres
de grasas (especialmente carnes blancas , pescado y marisco, clara de huevo,
derivados de la soja y lácteos desnatados).
Hay que primar los vegetales de hoja verde y las frutas, evitando los productos con
alto índice glucémico, optando por los ricos en fibra que ayudan a arrastrar la glúcidos
sobrantes. Los zumos, por la ausencia de fibra, aumenta la tasa de absorción de
glucosa en sangre, por lo que a pesar de ser recomendables, a la hora de regular el
peso, debemos ser moderados en su consumo.
2) Proteínas o prótidos
Carnes, pescados, marisco, huevos, lácteos, soja y derivados, legumbres, sésamo, etc...
Están formadas por aminoácidos (20), conteniendo la proteína ingestada la mayor
parte de los 9 aminoácidos esenciales ( imposibles de producir por el propio
organismo). Son los ladrillos de nuestra estructura corporal y son los materiales que
realizan el mayor número de funciones en nuestro organismo: estructura básica de los
tejidos, funciones metabólicas y reguladoras, la base de la estructura genética (ADN),
etc.. El nitrógeno es el elemento que los caracteriza.
Para la dieta diaria hay que elegir carnes magras, especialmente blancas, pescado y
marisco, clara de huevo, lacteos desnatados y derivados , productos de la soja como el
tofu y otros
3) Lípidos o grasas
Las grasas al igual que los glúcidos son reservas de energía, pero también absorben
vitaminas (las liposolubles), sintetizan hormonas y son material aislante y de relleno.
El gasto energético basal de un adulto en reposo esta entre 1000 y 1200 Kcal/día ,
siendo esta la energía mínima para hacer frente a las funciones vitales.
Hay que tener en cuenta que la cantidad y tipo de ejercicio o actividad va a influir en
nuestras necesidades calóricas.
¿Cuántas calorías se queman por ejercicio? Aquí hemos reproducido en español una
tabla de la página fatfreekitchen.com que describe cuántas calorías se queman en
cada ejercicio común. Nos podrá sorprender por ejemplo que cuando hablamos de
quemar calorías, una media hora de paseo muy rápido es más eficaz que una hora de
aeróbic (y, por qué no decirlo, mucho más barato).
Para poder calificar nuestro peso es conveniente calcular el índice de masa corporal
con la siguiente fórmula:
Delgado <18,5
Saludable 18,5-24,09
Obeso >30
Se puede consultar una tabla bien detallada de sexo, edad, complexión, estatura y
peso en el siguientes enlace:
http://www.porsusalud.com/nutricion.htm
Hay que llevar mucho cuidado con las dietas hipocalóricas pues se basan en ingerir
menos calorías de las que consumimos y de ese modo tirar de nuestras reservas.
Cuando se hacen deben de conservarse bien las proporciones de los diferentes
macronutrientes (glúcidos, prótidos y lípidos) garantizando un nivel adecuado de
micronutrientes (vitaminas, oligoelementos, etc..). Están muy de moda las dietas de
1000 calorías e incluso de 800 y menos, pero con ellas es inevitable pasar por el
hambre y la consiguiente ansiedad. Es mejor perder peso mas lentamente con una
dieta equilibrada y haciendo algún ejercicio que sufrir por el hambre y el deseo
constante de saltarte la dieta y comer.
Hay quien recomienda combinar la dieta en la Zona Cero de Barry Sears y la del grupo
sanguíneo de Peter d´Adamo, pues al parecer, juntas, tienen un efecto bastante
evidente, al margen de tratarse de una dieta hipocalórica en la que es premisa
principal no pasar hambre.
Enlace de interés:
http://www.uned.es/pea-nutricion-y-dietetica-I/guia/guianutr/index.htm
Cada niño tiene diferentes requerimientos calóricos.
girl embraces boy for the neck, aggressive defence boy image by Pavel Losevsky from Fotolia.com
Una buena nutrición es especialmente importante para los niños porque están creciendo y desarrollándose, y su cuerpo necesita calorías y nutrientes
para hacerlo correctamente. Debido a que la mayoría de los niños son muy activos, necesitan la cantidad correcta de calorías para tener la energía para
hacer todas las cosas que les gusta hacer. Dependiendo de sus niveles de actividad, los requerimientos calóricos varían ampliamente para los niños en
crecimiento, de 900 diarias para un niño de1 año de edad, a 3.200 diarias para un adolescente activo.
¿Cuántas calorías quema una adolescente por día sin realizar actividad física?
Niños de 2 a 3 años
Los niños y niñas en este rango debe consumir entre 1.000 y 1.400 calorías diarias, dependiendo de su nivel de actividad, de acuerdo con la Clínica
Mayo. Un total de 5 a 20 por ciento de sus calorías diarias deben provenir de las proteínas, 45 a 65 por ciento debe provenir de los hidratos de carbono y
del 30 al 40 por ciento de sus calorías diarias deben provenir de las grasas.
Niños de 4 a 8 años
Aquí es donde los niños y niñas empiezan a necesitar diferentes cantidades de calorías cada día, a causa de los diferentes niveles de crecimiento. Las
niñas en este grupo de edad deben consumir entre 1.200 y 1.800 calorías al día, y los chicos de este grupo necesita entre 1.400 y 2.000 calorías diarias,
dependiendo de su nivel de actividad. Para los niños y niñas, de 4 a 8 años de edad deben obtener del 10 al 30 por ciento de sus calorías diarias de
proteínas y 45 a 65 por ciento de los carbohidratos. Las grasas deben aportar 25 a 35 por ciento de su ingesta calórica diaria.
Niños de 9 a 13 años
A medida que los cuerpos de los niños se preparan para la pubertad y sus niveles de actividad aumentan a medida que se involucran más en los
deportes y las actividades escolares, sus cuerpos necesitan más combustible. Las niñas entre las edades de 9 y 13 deben consumir de 1.600 a 2.200
calorías diarias, y los chicos de este grupo necesita de 1.800 a 2.600 calorías cada día. Al igual que los niños más pequeños, este grupo de edad deben
recibir 10 a 30 por ciento de sus calorías diarias de proteínas, 45 a 65 por ciento de hidratos de carbono, y 25 a 35 por ciento de las grasas.
Debido a que los adolescentes están creciendo a un ritmo más alto y sus cuerpos están cambiando en la pubertad, necesitan más alimentos que los
niños más pequeños. Esto es especialmente cierto para los varones adolescentes, que están creciendo más rápido que cualquier otro grupo y, para la
mayoría, se dedican a la mayor actividad física. En este grupo de edad, las niñas deben tener entre 1.800 y 2.400 calorías cada día, y los niños deben
recibir 2.200 a 3.200 calorías diarias. Los porcentajes de proteínas, carbohidratos y grasas son los mismos que para los grupos más jóvenes.
Actividad física
Según la Asociación Estadounidense del Corazón, los niños con una mayor actividad física requieren más calorías. El número más bajo en las figuras
anteriores se basa en un sedentarismo con muy poca actividad. El número más alto es apropiado para los niños que reciben gran cantidad de actividad
física, como practicar un deporte durante unas horas cada día.
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Los requerimientos de calorías, proteínas, minerales y vitaminas de los niños y las niñas son iguales desde que nacen hasta los 10 años; después cuando entran en
la pubertad aumentan los requerimientos nutricionales en varones. Así, la cantidad de calorías que debe consumir un niño o niña desde el año hasta los 3 años es de
1300 calorías; de 4 a 6 años es de 1800 calorías, y de 7 a 10 años es de 2000 calorías.
En cambio, la cantidad de calorías que debe consumir un varón de 11 a 14 años es de 2500 calorías y de 15 a 18 años es de 3000 calorías. Por su parte, una niña
de 11 a 14 años debe ingerir 2200 calorías y de 15 a 18 años, 3000 calorías. Lo mismo pasa con los demás nutrientes que aumentan en la misma proporción según
sexo y edad.
Generalmente, es durante la infancia cuando se desarrollan los hábitos nutricionales, y cuando el aprendizaje se realiza en gran medida por imitación de los adultos.
Los padres deben tener presente que el apetito y los gustos del niño varían con el tiempo.
La actividad física tiene naturalmente mucho que ver con la intensidad del apetito. Los chicos más activos necesitan más calorías que los que no lo son. Además,
muchos chicos llegan a descartar una clase completa de alimentos, por ejemplo, las verduras, por lo cual puede haber riesgo de carencia de nutrientes esenciales.
Es importante entonces variar las preparaciones, hacerlas atractivas y disimular los alimentos que no son del agrado del niño dentro de otras comidas que sí lo
entusiasmen, hasta que con el tiempo desaparezcan las resistencias. Habitualmente, a los niños les gustan las frutas, y una buena ingesta de éstas puede sustituir
temporariamente el rechazo de otros vegetales y proveer los minerales y las vitaminas necesarios.
Con las carnes suele no haber problemas ni rechazos. Deben elegirse carnes magras, tanto blancas como rojas. La leche sigue siendo una de las principales fuente
de nutrientes. En caso de rechazarse la leche, recordemos que hay muchas alternativas dentro del grupo de los lácteos -quesos, yogur- que la reemplazan
satisfactoriamente.
Además, existe el recurso de "disfrazar" la leche por otros alimentos que son del gusto del niño, como postres, licuados de frutas o helados, o aun agregarla a salsas
blancas o purés. La dieta completa de un niño debería incluir por lo menos tres porciones diarias del grupo de lácteos, una del grupo de carnes, tres del grupo de
vegetales y frutas, dos del grupo de cereales y derivados, y cuatro del grupo de cuerpos grasos.
Hay que tener mucho cuidado con qué pasa en los recreos, en los entretiempos de baby fútbol y en las salidas de fin de semana, donde se adquieren grandes
raciones de grasas difíciles de eliminar (papas fritas, bebidas gaseosas, cremas, hamburguesas, salchichas, galletitas).
Conductas alimentarias
Una buena alimentación se refleja en la apariencia y se la asocia con una estructura ósea bien desarrollada, un peso armónico de acuerdo con la estatura, una
expresión alerta y despierta, pelo brillante, estabilidad emocional, buen apetito, hábitos de sueño saludables, resistencia a la fatiga, tránsito intestinal regular y
también buen humor.
En otras palabras: "Somos lo que comemos, y en función de lo que comemos hoy, seremos en el futuro."
A esta edad el niño participa en su alimentación y es libre de escoger y decidir la cantidad y tipo de alimentos que consume, aunque la familia y el colegio son
responsables de ella. Además recibe mayor variedad de alimentos y aprende a degustarlos mejor, siempre y cuando no se lo obligue a comer.
Si la falta de apetito es frecuente, es necesario verificar que las comidas intermedias no interfieran con las principales. Es habitual el consumo de las denominadas
"comidas chatarra", llamadas así por su bajo valor nutricional, pero muy apetecidas por los niños. Estas son gaseosas como las bebidas cola, refrescos, dulces,
golosinas, pasteles, paquetes industrializados, como las papas fritas, 3D, chizitos, etcétera.
La educación nutricional debe ser parte de los programas académicos de los escolares, de los deportistas, pero debe continuarse y reforzarse en el grupo familiar.