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Demencia por infarto estratégico

Article · January 2006

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Carlos Hernández-Lahoz
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39 La demencia por infarto
estratégico

Carlos Hernández Lahoz y Sergio Calleja Puerta

FALTA CITAR EN EL TEXTO LAS REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 10, 12 y 22

■■ Infarto estratégico Neurological Disorders and Stroke-Association Internatio-


nale por la Recherché et l’Enseignement en Neuroscien-
Concepto ces), por las siglas de los organismos representados:
National Institute of Neurological Disorders and Stroke
Frente a la «demencia multiinfarto», denominación (Bethesda, Maryland, EE.UU.) y Association Internatio-
acuñada por Hachinski et al, en 1974, para identificar nale pour la Recherche et L’Enseignement en Neuros-
la demencia vascular debida a infartos cerebrales múl‑ ciences (Ginebra, Suiza)33.
tiples, grandes y pequeños, generalmente ocurridos a Los infartos cerebrales múltiples son la causa más
lo largo de repetidos episodios20, surgió el concepto de frecuente de demencia vascular. En una serie de 37 pa‑
«demencia por infarto estratégico», defendido por Tate‑ cientes con demencia a los 3 meses del infarto, en el
michi, en la década de 1990, para incluir los casos de 73 % de los casos se debía a multiinfartos, mientras
demencia vascular tras un único y muchas veces pe‑ que el infarto cerebral único era responsable sólo del
queño infarto cerebral, pero situado en un área de gran 27 % restante (11 % con un infarto cortical y 16 % con
funcionalidad cognitiva39. Se destacaba así la importan‑ otro único subcortical). Los infartos estratégicos no pa‑
cia de la localización y no sólo del volumen lesional en saban de anecdóticos37.
la demencia asociada al infarto cerebral13. El concepto de demencia por infarto estratégico tie‑
La demencia vascular es el deterioro cognitivo ad‑ ne algunas dificultades de interpretación:
quirido tras un ictus, con intensidad suficiente para in‑
terferir las actividades de la vida diaria. Se manifiesta 1. Empezando por el enunciado: estrategia es el arte de
por pérdida de memoria y alteración al menos de otras dirigir operaciones militares, especialmente durante
dos funciones cognitivas entre las siguientes: atención, la guerra, y por extensión, el arte de dirigir un asunto
orientación, lenguaje, cálculo, capacidad visuoespacial, hasta llevarlo a buen término. Los ejércitos siempre
manejo práxico, control motor, función ejecutiva, abs‑ han tratado de dominar aquellos puntos geográficos
tracción y juicio. Puede deberse a lesiones neuropato‑ desde donde se tienen las condiciones más favora‑
lógicas de tipo infarto, tanto por oclusión cerebrovascu‑ bles para la defensa o el ataque. Así se habla, por
lar, trombótica o embólica, como por hipoxia‑isquemia ejemplo, en los libros de historia, del valor estraté‑
tras parada cardíaca o hipotensión arterial grave; pero gico del Cuerno de Oro o de las Columnas de Hércu‑
también puede producirse tras hemorragias27,44. les como lugares disputados a lo largo de los siglos
Hay un infarto muy singular que, a pesar de unas y aún generadores de conflictos en nuestros días.
reducidas dimensiones, es capaz de producir un gran En el tema que nos ocupa, un título más explicativo,
déficit cognitivo, por su localización y capacidad para aunque poco práctico, sería: «infartos mínimos pero
desconectar funcionalmente una zona cerebral más ex‑ con efectos devastadores, por localizarse en áreas
tensa. Es el llamado el infarto estratégico, según la de‑ cerebrales de gran valor estratégico para la función
finición del grupo de expertos, reunido en 1991 para cognitiva y la conducta». El ataque a un punto neurál‑
unificar los criterios diagnósticos de demencia vascu‑ gico del cerebro inactivándolo sin apenas dejar huella,
lar, conocidos como NINDS‑AIREN (National Institute of hace verdad lo de que «no hay enemigo pequeño».
430 Parte III. DETERIORO COGNITIVO DE ORIGEN VASCULAR

(RMf), en sujetos normales, mientras realizan para‑


digmas neuropsicológicos.
7. En la evolución desfavorable de cualquier demencia
vascular intervienen los siguientes factores: edad
avanzada, genética, deterioro mental previo, atro‑
fia cerebral ya existente y amplio volumen del tejido
desconectado (según SPECT o PET)21,31.

■■ Déficits neuropsicológicos
por infartos corticales

Figura 39‑1  ■  TC cerebral: infartos talámicos paramedianos (hi‑ La lesión está preferentemente en la corteza, aun‑
podensidades circulares de ∼ 1 cm de diámetro a ambos lados del que los límites del tejido reblandecido no sean exclusi‑
tercer ventrículo).
vamente corticales. El infarto cortical único causa de‑
mencia con menor frecuencia que los múltiples y, sobre
2. El pequeño volumen del infarto se define, in vivo, todo, bilaterales. Las lesiones del hemisferio izquierdo,
por la neuroimagen lesional (tomografía computari‑ generalmente dominante para el lenguaje, ocasionan
zada [TC] y sobre todo resonancia magnética [RM]) más demencias que las del derecho9,38.
y post mórtem, por la anatomía patológica; pero no
hay acuerdo sobre sus dimensiones. Sólo que se Arteria cerebral media
debe a la oclusión tromboembólica de una peque‑
ña arteria cerebral. En cuanto a lesión única, puede Su territorio es el más frecuentemente afectado,
haber excepciones, como ocurre con los infartos ta‑ bien por oclusión de la arteria principal o alguna de sus
lámicos paramedianos, que son infartos dobles y bi‑ ramas, o por caída del flujo sanguíneo. Cada hemisfe‑
laterales por oclusión de un pedículo arterial común rio da una clínica diferente.
para ambos lados, en un mismo ictus18 (fig. 39‑1). Las lesiones del lado izquierdo producen afasias y
3. Los amplios efectos funcionales de algunos peque‑ apraxias. La afasia con escaso lenguaje ocurre en los
ños infartos no se entienden sin invocar el fenóme‑ infartos anteriores a la cisura de Rolando, a diferencia
no de desaferenciación, desconexión transináptica de la afasia con lenguaje fluido que se asocia a lesiones
o diaschisis, por el que una lesión estructural, en un postrolándicas. Los infartos adyacentes a la cisura de
punto del sistema nervioso central (SNC), provoca la Silvio alteran la repetición de palabras o frases (afasia
disminución o abolición de la función en otra parte de conducción), mientras que esta capacidad está con‑
alejada con la que mantiene relación sináptica. La servada cuando el área perisilviana está indemne (afa‑
hipótesis inicial se debe a Von Monakow, que la ex‑ sias transcorticales). La afasia global es el resultado de
puso en 1914 y se ha confirmado después mediante un extenso infarto por oclusión completa de la arteria
imagen isotópica, bien de tomografía computarizada cerebral media en el hemisferio dominante.
por emisión de fotón simple (SPECT) o por emisión El síndrome del gyrus angularis (GA)3 o de la circun‑
de positrones (PET), en problemas de etiología vas‑ volución del pliegue curvo izquierdo, se debe a la oclu‑
cular y traumática30. sión de la parte posterior de la arteria cerebral media
4. Los infartos estratégicos se localizan más a menu‑ izquierda (v. fig. 39‑3). Si es completo, consta de:
do en el hemisferio izquierdo (dominante) y en el tá‑
lamo, según las series. •• Afasia fluida, con dificultad para encontrar los nom‑
5. Muchas de las alteraciones cognitivas, o los trastor‑ bres de personas o cosas (anomia), produciendo
nos emocionales y conductuales asociados a estas en su lugar palabras equivocadas con parecido se‑
lesiones, pasado el primer momento, no son tan gra‑ mántico (parafasias verbales), dándose cuenta los
ves e incapacitantes como para producir demencia. pacientes, con frustración, de sus errores lingüís‑
El enunciado tradicional de este capítulo limita los ticos.
síndromes estratégicos a los de mayor gravedad y •• Alexia con agrafia.
consecuencia. •• Síndrome de Gerstmann (acalculia además de agra‑
6. Esta aproximación clásica a la representación ce‑ fia, desorientación derecha‑izquierda y agnosia di‑
rebral del proceso mental se basa en la correlación gital).
entre clínica y neuroimagen lesional y funcional. Sin •• Alteraciones constructivas, aunque no haya trastor‑
embargo, la investigación actual prefiere la interpre‑ nos visuoespaciales.
tación de patrones funcionales de activación cere‑ •• Signos motores y sensitivos en el hemicuerpo de‑
bral, obtenidos por resonancia magnética funcional recho, a veces.
39. LA DEMENCIA POR INFARTO ESTRATÉGICO 431

Los infartos de la arteria cerebral media derecha Arteria carótida interna


dan alteraciones en la entonación del lenguaje, la ca‑
pacidad para vestirse, la orientación visuoespacial y la Su oclusión suele dar mayor isquemia e infarto en
praxis visuomotora. La negligencia unilateral y la alte‑ las fronteras entre los territorios de las arterias cere‑
ración constructiva se ven en lesiones de cualquier he‑ brales anterior, media y posterior. La hemiparesia y la
misferio, pero el derecho produce una heminegligencia hemianestesia contralaterales afectan más a las par‑
mucho más marcada, referida al extremo corporal y al tes proximales de las extremidades, con relativa pre‑
espacio colindante en el lado izquierdo. servación de la cara y de la mano.
El síndrome de Balint, con apraxia de la mirada (in‑ Cuando se trata del hemisferio dominante hay una
capacidad psíquica para fijar un objeto del campo vi‑ afasia transcortical, que puede llegar a la ecolalia como
sual), ataxia óptica (incapacidad visual para guiar la única manifestación del lenguaje.
mano y cogerlo) y fijación visual adherida (dificultad En la fase aguda, los infartos de las arterias cere‑
para apartarse de una diana y mirar otro objeto) re‑ bral media y posterior derechas y las oclusiones caro‑
quiere lesiones parietooccipitales bilaterales, pero en tídeas bilaterales pueden acompañarse de confusión
los infartos unilaterales se reconocen síntomas par‑ mental y agitación psicomotora9,29.
ciales contralaterales.

Arteria cerebral posterior ■■ Déficits neuropsicológicos


por infartos subcorticales
La oclusión da hemianopsia homónima contralate‑
ral. La alexia sin agrafia es un síndrome característico Lagunas
de la oclusión de la arteria cerebral posterior izquierda
y puede ampliarse con anomia, dificultad mnéstica, de‑ Las lagunas son infartos de pequeño tamaño (meno‑
bilidad e hipoestesia contralaterales. res de 20 mm de diámetro), localizados en la sustancia
La lesión derecha a veces asocia alucinaciones vi‑ blanca cerebral, tálamo y ganglios basales. Estos infar‑
suales, palinopsia (persistencia de la imagen retirado tos lacunares se producen por la oclusión de arteriolas
el objeto), dificultades en el reconocimiento facial y de­ intraparenquimatosas (de calibre inferior a 500 µm),
sorientación espacial. principalmente ramas perforantes lenticuloestriadas de
Los infartos bilaterales, por afectación de ambas ar‑ la arteria cerebral media y ramas talámicas de la arteria
terias cerebrales posteriores, causan amnesia grave, cerebral posterior y comunicante posterior.
ceguera cortical, acromatopsia central (anomia para El hallazgo en RM de lagunas aisladas asintomáti‑
los colores), agnosia visual para los objetos y proso‑ cas o silenciosas es frecuente en personas de edad,
pagnosia (dificultad para el reconocimiento de caras sobre todo con hipertensión arterial crónica. Las sin‑
conocidas), dependiendo de la extensión y localización tomáticas dan los síndromes lacunares típicos, descri‑
de las lesiones. tos por Fisher: hemiparesia pura, hemisíndrome sensi‑
tivo puro, hemisíndrome sensitivo‑motor, disartria con
Arteria cerebral anterior mano torpe y hemiparesia con ataxia homolateral. Los
infartos lacunares múltiples (état lacunaire de Pierre
Cada una suple la parte medial del lóbulo frontal y el Marie, 1901) con frecuencia se asocian a desmielini‑
cuerpo calloso, hasta el esplenio. El infarto de ese terri‑ zación isquémica del territorio más distal de las arte‑
torio ocasiona hemiparesia contralateral de predominio riolas penetrantes.
crural, con defecto sensitivo de igual distribución. La imagen conjunta de leucoencefalopatía periven‑
Si se lesionan, en la línea media, las fibras callosas tricular (leukoaraiosis) e infartos lacunares en la sus‑
que comunican el hemisferio dominante con el opuesto tancia blanca y ganglios de la base se denomina enfer‑
se produce un síndrome de desconexión con apraxia medad de pequeño vaso. Es más frecuente relacionarla
ideomotora y anomia táctil unilaterales izquierdas (el con la aterosclerosis y supone un riesgo de demencia,
paciente no puede hacer gestos motores, como decir pero existen otras causas como angiopatía amiloide y
adiós, con la mano izquierda, o reconocer objetos al CADASIL43.
tacto, sin verlos, con esa mano).
Si se ocluye la arteria del lado izquierdo, se añade Circuitería frontosubcortical
mutismo, que suele dar paso a una afasia transcorti‑
cal motora. Si las lesiones bilaterales interrumpen los circui‑
El mutismo acinético más grave y permanente se tos frontosubcorticales motores se observa en los pa‑
debe a daño bilateral en la corteza cingular anterior, cientes: bradicinesia global, marcha insegura con pa‑
como ocurre en el vasoespasmo secundario a la ruptura sos cortos y arrastre de los pies, flojedad, hipertonía
de un aneurisma de la arteria comunicante anterior. y movilidad lenta de piernas, evocando rasgos de par‑
432 Parte III. DETERIORO COGNITIVO DE ORIGEN VASCULAR

El esquema general de los circuitos frontosubcorti‑


Corteza prefrontal cales es el siguiente (fig. 39‑2):

•• Corteza prefrontal (vía eferente excitadora, glutami‑


Estriado nérgica+) →
•• Estriado (vía eferente inhibidora, gabaérgica−) →
con dos alternativas:
Pálido externo Núcleo
Pálido interno y Pars Reticulata subtalámico –– (VÍA DIRECTA) Pálido interno / sustancia negra
(SN) pars reticulata (GABA−) →
–– (VÍA INDIRECTA) Pálido externo (GABA−) → núcleo
Tálamo subtalámico (glutamato+) → pálido interno / sus‑
tancia negra pars reticulata (GABA−) →
Figura 39‑2  ■  Circuitos frontosubcorticales.
•• Tálamo (glutamato +) →
•• Y cierre del circuito en la corteza prefrontal.
kinsonismo en la mitad inferior del cuerpo. Hay tam‑
bién facies inexpresiva, mirada fija y variable grado En la vía directa, la dopamina (el haz nigroestriado
de parálisis seudobulbar. Los reflejos de prensión es‑ que sale de la pars compacta) actúa sobre los recep‑
tán presentes. Los pacientes perciben el desequilibrio tores dopaminérgicos D1 del estriado y desde éste se
cuando están de pie como mareo, hablan con algo de proyecta una neurotransmisión de sustancia P y GABA
disartria, tosen con frecuencia al tomar líquidos y se sobre el pálido interno y la pars reticulata.
emocionan con facilidad17. En la vía indirecta, la dopamina actúa sobre los re‑
Hay una relación directa entre demencia vascular ceptores dopaminérgicos D2 del estriado y éste combina
y número de infartos localizados en la sustancia blan‑ encefalina y GABA en su proyección al pálido externo.
ca periventricular anterior y los ganglios basales, por Desde el punto de vista neuropsicológico, interesan
interrupción de los circuitos frontosubcorticales cog‑ tres circuitos11 (figs. 39‑3 y 39‑4):
nitivos. La clínica neuropsicológica se caracteriza por
una afectación frontal bilateral, con inatención, apatía 1. Circuito prefrontal dorsolateral: tiene su origen en
mental, bradipsiquia, enlentecimiento del procesado la cara externa de la corteza prefrontal (áreas 9 y
de la información y respuestas verbales lentas, difi‑ 10 de Brodmann), de donde proyecta al caudado.
cultad para cambiar de asunto perseverando en el an‑ Salen de aquí dos vías, una directa que va al páli‑
terior y alteraciones en la recuperación del contenido do interno y a la pars reticulata de la sustancia ne‑
de la memoria24. gra, y otra indirecta, que hace escalas en el pálido
En zonas estratégicas periventriculares también un externo y el núcleo subtalámico antes de llegar al
único y muchas veces pequeño infarto provoca la des‑ pálido interno y la sustancia negra reticulada. Los
conexión de la circuitería frontosubcortical cognitiva. núcleos talámicos ventral anterior y dorsomediano
Los infartos que causan demencia se localizan en: nú‑ son la escala siguiente, para cerrarse el circuito en
cleos talámicos (anteriores y / o mediales, sobre todo la corteza prefrontal original. Cuando se interrumpen
izquierdos), cualquiera de ambos caudados (derecho o las conexiones de este circuito aparece la disfunción
izquierdo), rodilla de la cápsula interna (izquierda) o hi‑ ejecutiva: síndrome caracterizado por inatención y
pocampo anterior y amígdala (izquierda)29. desconcentración, falta de fluidez verbal, déficit de
Los circuitos frontosubcorticales se componen de planificación para el desarrollo de estrategias or‑
estaciones neuronales comunicadas entre sí por me‑ ganizativas y constructivas, para el aprendizaje de
dio de señales químicas excitadoras (+) o inhibidoras programas o tareas con orden secuencial y para
(−) que liberan sus eferentes axonales en las sinapsis la toma de decisiones. Se afectan, asimismo, los
siguientes. Los diferentes componentes al servicio de subprocesos mnésticos que sirven a las funciones
la acción conjunta corrigen sus variaciones de forma ejecutivas del lóbulo frontal, como es la organiza‑
automatizada. Hay cinco circuitos de los que dos son ción semántica.
para movimientos asociados: corporales (marcha) y ocu‑ 2. Circuito orbitofrontal: con origen y cierre en la cor‑
lomotores (mirada), representados en la corteza por teza prefrontal inferolateral (áreas 10 y 11) e idénti‑
las áreas premotoras frontales (suplementaria y oculo‑ co itinerario de estaciones que el anterior, aunque
motora, áreas 6 y 8 de Brodmann, respectivamente). con diferentes puntos de conexión dentro de los
Los tres restantes intervienen en tareas cognitivas y núcleos. Las interrupciones de este circuito desco‑
ejecutivas incluyendo aspectos de personalidad y mo‑ nectan las aferencias del sistema límbico al lóbulo
tivación y están representados en la corteza por las frontal y se producen cambios emocionales y de la
áreas prefrontales. personalidad, en variable grado: desinhibición, im‑
39. LA DEMENCIA POR INFARTO ESTRATÉGICO 433

(Área 4) Corteza premotora


Corteza prefrontal (Área 6) Cisura de Rolando (área motora Corteza motora
dorsolateral Corteza suplementaria) (pierna)
(Áreas 9 y 10) prefrontal
mesial

Gyrus cinguli

GA Cuerpo
calloso
o
Silvi
ra de
Cisu
(Área 44)
Corteza
frontoorbitaria

Figura 39‑3  ■  Hemisferio cerebral izquierdo (cara externa). Figura 39‑4  ■  Hemisferio cerebral derecho (cara interna o mesial).

pulsividad, irritabilidad, hipomanía, labilidad afec‑ poperfusión (SPECT) o de hipometabolismo (PET), en la


tiva, pobreza de juicio, desatención, desinterés y parte posterior del hemisferio cerebral izquierdo2.
conducta irresponsable frente a las obligaciones fa‑
miliares y sociales. Subcorticales
3. Circuito cingular anterior: el más cercano a la línea
media. Su origen y cierre están en la circunvolución La demencia talámica puede ser el resultado de
del cíngulo (área 24), de donde parten conexiones una lesión de causa vascular1 y en la bibliografía hay
al estriado ventral (caudado medial, putamen ven‑ extensas referencias sobre las secuelas neuropsicológi‑
tral, núcleo accumbens y tubérculo olfatorio), para cas del infarto lacunar talámico5,7, pero también puede
seguir por ambas vías, como en los otros circuitos, deberse a otras causas menos frecuentes como prio‑
hasta el núcleo dorso‑mediano del tálamo y de ahí nes o tumores. El tálamo es una estructura subcortical
a la corteza frontomesial. La lesión o alteración fun‑ grande y par, ubicada al final del tronco del encéfalo, a
cional de este circuito dan lugar a trastornos neuro‑ ambos lados del tercer ventrículo. Cada uno tiene for‑
conductales, que de mayor a menor intensidad son: ma ovoidea y está compuesto por un complejo grupo
mutismo acinético, abulia y pérdida de la autoacti‑ de núcleos grises que reciben proyecciones cualitati‑
vación psíquica11. vamente diferentes. Es una estación receptora donde
hay un filtrado, con anulación o refuerzo, del estado de
vigilancia y de la información sensorial y una sincroniza‑
■■ Síndromes de demencia ción espacio‑temporal de las señales, que finalmente
por infarto estratégico se proyectan a la corteza cerebral.
La suplencia arterial (fig. 39‑5) del tálamo viene de
Corticales cuatro pedículos, que son ramas terminales, sin anasto‑
mosis funcionales8:
El síndrome del gyrus angularis del hemisferio domi‑
nante, si tiene la suficiente gravedad para dar una de‑ 1. La arteria polar, rama de la arteria comunicante poste‑
mencia postictal, es el más representativo exponente de rior, suple la parte anterior y anterolateral del tálamo.
demencia cortical por infarto estratégico, en este caso 2. Las arterias tálamo‑subtalámicas posteriores, que
situado en el área de la circunvolución del pliegue curvo proceden del primer segmento de la arteria cerebral
izquierdo (fig. 39‑3), allí donde termina el surco temporal posterior (P1 o comunicante basilar), irrigan las par‑
superior. El múltiple déficit cognitivo, antes enumerado, tes medial y posteroinferior del tálamo, a veces, con
se debe a la interrupción de un área de asociación e in‑ un único tronco para ambos lados.
tegración para funciones lingüísticas, matemáticas y de 3. Las arterias talamogeniculadas salen del segundo
praxis constructiva. Un síndrome tan florido se acompa‑ segmento de la arteria cerebral posterior (P2) y nu‑
ña a veces de una lesión tan pequeña que no se ve con tren el tálamo lateral.
TC y su identificación requiere RM, correlacionándose 4. Las arterias coroideas posteriores tienen la misma
mejor la clínica con las imágenes funcionales de las to‑ procedencia, pero salen un poco por detrás de las ante‑
mografías de emisión: una extensa área cortical de hi‑ riores para cubrir la parte posterior y el núcleo anterior.
434 Parte III. DETERIORO COGNITIVO DE ORIGEN VASCULAR

la comprensión y repetición. En la lesión del lado no


dominante hay, además, inatención hemiespacial con‑
Tálamo izquierdo tralateral. Se afecta más el núcleo dorsomediano, que
proyecta aferencias sobre la corteza prefrontal dorsola‑
1
teral y la orbitofrontal, y también el haz mamilotalámico,
2 incluido en el funcionalismo de la memoria. La desco‑
Arteria cerebral 3 4 nexión frontal debida a lesión talámica se traduce en
media izquierda
la neuroimagen funcional por hipometabolismo y en el
Comunicante electroencefalograma (EEG) por lentificación, ambos en
Arteria posterior derecha
cerebral regiones frontales homolaterales4,32,34 (fig. 39‑6).
anterior Comunicante
Arteria cerebral
Los infartos de las arterias tálamo‑subtalámicas pos‑
izquierda posterior izquierda
posterior derecha teriores o infartos talámicos paramedianos son a me‑
nudo bilaterales, en alas de mariposa (v. fig. 39‑1), a
Tronco basilar
Arteria causa de que la arteria sale muchas veces de un solo
Sifón carotídeo cerebral
izquierdo media ­pedículo, a partir de una de las anteriores comunicantes
izquierda
basilares. El territorio de suplencia se extiende también
al mesencéfalo. Cuando hay dos arterias, el infarto es
Figura 39‑5  ■  Vascularización del tálamo.
1: arteria polar. 2: arteria talámica posterior. 3: arteria talamicogeniculada.
unilateral. El cuadro clínico del infarto bilateral consta
4: arteria coroidea posterior. de los siguientes síntomas3,16,18,26:
Según Castaigne et al8.

•• Alteraciones de la conciencia, desde el estupor al


coma, que dan paso al cabo de varios días a una
marcada hipersomnia, por lesión de los núcleos in‑
tralaminares próximos a la línea media y de la for‑
mación reticular del mesencéfalo rostral.
•• Parálisis de la mirada vertical, por lesión mesence‑
fálica, que puede extenderse al III par.
•• Trastornos mnésticos por afectación del haz mamilo‑
talámico, a veces con tendencia a la confabulación,
como en el síndrome de Korsakoff.
•• Otros trastornos como inatención, abulia, desinhi‑
bición y cambios de humor, por desaferenciación o
diasquisis frontal.
•• En las lesiones unilaterales los síntomas son menos
pronunciados y puede haber asterixis contralateral.

Los infartos tálamo‑geniculados tienen poco interés


neuropsicológico. Cursan con déficit hemisensitivo con‑
tralateral, que a veces se transforma en anestesia do‑
lorosa, estando afectados los núcleos ventrales pos‑
teriores medial y lateral.
Figura 39‑6  ■  RM cerebral (T1), plano sagital: Infarto talámico Los infartos coroideos posteriores tampoco producen
(hipodensidad).
déficit neuropsicológico. Dan un defecto campimétrico
homónimo contralateral, por lesión del núcleo genicu‑
La arteria comunicante posterior, de la que sale la lado lateral.
arteria polar, o tuberotalámica, se rellena en la mitad de En todos estos síndromes, como en los ictus en
los casos a través del sistema carotídeo. La arteria polar general, puede haber mejoría de la función cognitiva
no siempre es constante y cuando falta su territorio, es afectada, en los meses siguientes15,19.
suplido por las arterias tálamo‑subtalámicas. Los infartos caudados cursan, cualquiera que sea
Los infartos unilaterales de la arteria polar cursan el lado afectado, con marcada abulia, alteraciones en
con somnolencia, apatía, pérdida de iniciativa y espon‑ la función ejecutiva, y a veces desinhibición, ansiedad
taneidad, fallo en el razonamiento, bradipsiquia, perse‑ y confusión mental, por desconexión de la circuitería
veración y déficit mnéstico. Si la lesión está en el lado frontosubcortical: los pacientes tienen apatía y desin‑
dominante, se añade una afasia transcortical motora terés, hablan y se mueven poco, y sus respuestas a
con fluidez verbal reducida, parafasias fonémicas y se‑ los estímulos son muy lentas. Tienen también disar‑
mánticas y anomia, pero sin disartria y conservando tria, pero sólo ligera hemiparesia o reducida excursión
39. LA DEMENCIA POR INFARTO ESTRATÉGICO 435

de los miembros contralaterales, sin debilidad. Puede Los infartos subcorticales que dejan abulia o pér‑
haber negligencia hemiespacial contralateral en las le‑ dida de la autoactivación psíquica y otros síntomas de
siones derechas y dificultad para nombrar objetos en disfunción frontal son: los unilaterales de cualquier lado
las izquierdas. En la mayoría de los casos existe una en el caudado y en el tálamo anterior; el del lado do‑
patología oclusiva de pequeño vaso. El caudado es un minante en el tálamo medial y la rodilla de la cápsula
núcleo alargado que recibe distintos aportes arteria‑ interna; y los bilaterales del globus pallidus35.
les, a lo largo de su trayecto: la cabeza y parte de la El síndrome amnésico ictal se produce en los in‑
cápsula interna vecina, son irrigados por el pedículo fartos izquierdos o bilaterales de la arteria cerebral
recurrente de Heubner, que sale de la arteria cerebral posterior, al afectarse las ramas temporales para el
anterior; el cuerpo, por las arterias lenticuloestriadas, hipocampo y el pedículo perforante para el tálamo y
ramas de la cerebral media; y la cola, por la arteria co‑ dañarse la formación hipocámpica, Pero también apa‑
roidea anterior6,25. rece por desconexión tálamo‑cortical, en el lado izquier‑
El síndrome de la rodilla de la cápsula interna, de‑ do, tras la oclusión de la arteria coroidea anterior, en
bido a infarto lacunar, se ha propuesto como ejemplo sus ramas inferolaterales, dando un pequeño infarto
de desconexión de la vía tálamo‑cortical. Durante al‑ subcortical medio‑temporal, en el área delimitada por
gún tiempo prevaleció, en el pasado, la idea de que las la amígdala, el hipocampo anterior y la fascia denta‑
lagunas en la sustancia blanca cerebral no producían da28. La arteria coroidea anterior, rama de la carótida
déficit cognitivo. Los pequeños infartos capsulares se interna, con salida después de la comunicante poste‑
creían capaces de producir sólo debilidad motora con‑ rior, suple un territorio que incluye también el tracto
tralateral, a veces con alteración sensitiva y ataxia. óptico, pálido medial, núcleo geniculado externo, bra‑
Posteriormente se vio que cuando eran múltiples po‑ zo posterior de la cápsula interna, cola del caudado
dían dar demencia24,41. Y también se identificó como y el plexo coroideo del ventrículo lateral. El síndrome
posible que una única laguna ubicada en la rodilla de completo produce un déficit contralateral combinado:
la cápsula interna izquierda, cuya suplencia viene de motor, sensitivo y del campo visual.
ramas perforantes de la carótida interna o de la cere‑
bral anterior, diera demencia7. Mixtos
Tatemichi estudió a seis pacientes cuyo inicio fue
un síndrome confusional agudo, con nivel de vigilia fluc‑ El mutismo acinético fue descrito por Cairns en 1941
tuante, inatención, desorientación, déficit mnéstico, res‑ como un estado de vigilia con profunda apatía, indife‑
puestas inadecuadas y evocación confusa del pasado, rencia al dolor, a la sed y al hambre y falta de iniciativa
junto a escasa o ausente debilidad contralateral. En la psíquica, verbal o motora expresada por ausencia de
fase crónica, los cinco con lesión izquierda (dominan‑ movimientos espontáneos y de respuestas a preguntas
te) hicieron un cuadro frontal de apatía e indiferencia u órdenes. Se ha descrito en tumores de línea media
frente a las ocupaciones sociales y familiares, abulia, próximos al tercer ventrículo (craneofaringioma y otros),
pobreza de razonamiento, lenguaje escaso con anomia hidrocéfalo obstructivo e infarto en los territorios de las
y parafasias semánticas, pérdida de memoria e inca‑ arterias cerebrales anteriores, con afectación bilateral
pacidad para mantener las tareas previas. El infarto se del gyrus cinguli (v. fig. 39‑4) o del circuito subcortico‑
localizó, con la ayuda de los atlas anatómicos, en los cingular, donde están más representadas la atención,
pedúnculos talámicos, sobre todo en el inferior. El EEG la emoción y la iniciativa motora.
registró un enlentecimiento de la actividad bioeléctri‑ Tanto la abulia (término introducido por Fisher) como
ca frontotemporal y la SPECT captó una hipoperfusión el déficit de autoactivación psíquica son síndromes psi‑
frontal inferomedial, todo homolateral. Se supuso una comotores menos graves, por lesión parcial en la mis‑
desconexión talamocortical sobre la corteza orbitofron‑ ma circuitería y constan de indiferencia, apatía, falta
tal y una interrupción de las aferencias que desde la de espontaneidad y pobreza de motivación, lenguaje y
corteza insular y temporal y desde la amígdala, alcan‑ movimientos16,42.
zan el tálamo, vía ansa peduncularis. El sexto paciente, La oclusión de la arteria de un solo lado produce mu‑
que tenía la lesión en el lado derecho, hizo al principio tismo acinético transitorio, quedando una afasia trans‑
la misma sintomatología, excepto el defecto afásico, cortical motora si la ocluida es la izquierda.
pero mejoró notablemente en los 3 meses siguientes, Hay también un mutismo acinético, por lesión me‑
lo cual sugería que el déficit cognitivo, para ser persis‑ sencefálica, denominado «posterior» para distinguirlo
tente, requería el lado dominante14,23,40. del primero o «anterior», donde una pequeña lesión
Si una laguna se localiza entre el putamen y el brazo vascular puede destruir gran parte de la vía dopami‑
posterior de la cápsula interna izquierda, hay hemipare‑ nérgica en su origen, el sistema reticular activador as‑
sia derecha y trastornos del lenguaje verbal, con rasgos cendente y los núcleos del III par, según hemos visto
de afasia transcortical motora y agrafia más allá de la en los infartos de arterias tálamo‑subtalámicas pos‑
dificultad de escritura por la parálisis36. teriores3,8,16,18,26.
436 Parte III. DETERIORO COGNITIVO DE ORIGEN VASCULAR

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