El Malestar en la Cultura

Sigmund Freud

Durante el desarrollo de este libro, Freud, manifiesta muy a su estilo, un análisis de

diversos temas, sin embargo, el presente ensayo me gustaría centrarlo sobre la
búsqueda de la felicidad y de que forma se relaciona la religión en este sentido.

Freud señaló que durante la vida habrá grandes sufrimientos, decepciones y un

conjunto de emociones que no serán fácil sobrellevar, por lo que nuestro autor en
análisis manifiesta que por esta razón y otras más, el hombre habrá de buscar la
felicidad, por lo que el ser humano verá en la religión una oportunidad para llegar a
ella, lo que implicaría que es posible asignar la felicidad a un objeto de la vida
humana a través de un sistema religioso, por lo que puedo considerar que, como el
hombre se ha impuesto a si mismo la búsqueda de la felicidad, evitando el dolor, el
displacer y por el contrario, experimentar sensaciones placenteras, encuentra
opciones en la religión que le permite llegar a esta felicidad.

Para Freud, la emoción que más busca el hombre es la felicidad, sin embargo,
busca la satisfacción de necesidades acumuladas de una forma instantánea, por lo
que nuevamente la religión, es un escape para el ser humano, lo cual, es producto
de nuestra naturaleza, no obstante, el hombre rebaja sus pretensiones, no sigue su
principio de realidad, lo que produce que un grado de felicidad se encuentre en el
hombre, sin embargo, solo ha eludido la desgracia.

De esta forma Freud, sostuvo que el hombre comúnmente rebaja sus pretensiones
en lugar de afrontar su realidad, pues se considera feliz al solo haber evadido su
desgracia, por lo que el sufrimiento pasa a segundo termino y es remplazado por la
felicidad. De igual forma realizó una clasificación de las formas en las que el hombre
busca su felicidad: El fin es la búsqueda del placer; solo busca una satisfacción
emocional de las necesidades; limita la producción de efectos desagradables; se
aleja de la realidad para en su lugar, imaginar u omitir un problema real; finalmente,
para Freud, la religió es un delirio que entorpece la búsqueda de la felicidad, aún y
existiendo un triunfo del cristianismo sobre las culturas paganas.
En este libro, también podemos analizar como Freud crítica a la religión, pues para
él, la religión, no conforme con forzar los lazos amorosos entre dos seres, obliga a
establecer enlaces amistosos con frases bíblicas como “amarás al prójimo como a
ti mismo”, pues para Freud el amor es algo demasiado preciado, el cual no debería
de ser malgastado en extraños, por lo que tampoco aplicaría para él, frases bíblicas
como “precisamente porque tu prójimo no merece tu amor, debes amarlo como a ti
mismo. Por lo que para Sigmund, la cultura no es sinónimo de perfección, siendo la
perfección un proceso que opera en la humanidad, el cual no es general ni tampoco
se da de forma inmediata,