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TEDL- Trastorno especifico del desarrollo del lenguaje.

Definición: trastorno por pérdida, deterioro o disminución de la capacidad o potencialidad comunicativa,


afectando de forma específica a los aspectos codificativos y decodificativos del lenguaje verbal y no verbal
debido a una lesión del sistema nervioso central o a una disfuncionalidad en los sistemas, áreas o redes
cerebrales implicado en el proceso lingüístico. Se halla ligado al periodo comprendido entre 0 y 6 años.
 Específico: su problema central es el desarrollo del habla.
 Desarrollo: reconoce la importancia de tener claridad sobre su presentación durante las fases del
desarrollo del lenguaje infantil y no como un trastorno adquirido.
Dimensiones del lenguaje:

 Fonología: el niño afectado puede hablar con cierta fluidez, pero la producción es poco clara y en
algunos casos puede ser inentendible. Rinde mejor en la repetición de palabras pero no en fases
largas. La comprensión es normal.
 Prosodia/dispraxia verbal: dificultades en la articulación de los fonemas y de las palabras, pero la
comprensión es normal o casi. Se caracteriza por un déficit en la programación motora del habla. Se
ve mayormente cuando las palabras son largas o poco frecuentes. Algunos niños presentan ausencia
completa del habla.
Trastorno expresivo.
 Fonologico/sintáctico: el de mayor frecuencia y más identificable. Suelen presentar errores de
pronunciación y múltiples agramatismos. La comprensión del habla es mejor que la expresión. El
niño presenta dificultades mayores cuando el enunciado es largo, complejo, descontextualizado o
emitido con rapidez. Presenta déficits en la articulación, fluidez, uso de nexos, entre otros. Su
gravedad es variable.
 Audición/verbal: trastorno grave en la comprensión y expresión del lenguaje.
Trastornos expresivos receptivos.
 Lexical/semántica: dificultades en la comprensión y expresión del lenguaje, con diferentes grados
de gravedad. Se caracteriza por la incapacidad para encontrar la palabra para evocarla. La
pronunciación es normal, y la comprensión de las palabras casi normal, no así las frases.
 Pragmática: La pragmática refiere al dominio de las reglas sociales del lenguaje y eficiencia
comunicativa. Los niños con trastorno pragmático presentan alteraciones en ambos niveles. Hay dos
subgrupos: puro (de naturaleza cognitiva y lingüística), y plus (añade al anterior alteraciones
mentalistas y sociales). Este fallo vendría originado por una incapacidad para mantener y manipular
la información compleja implicada en la interacción social, así como para actuar en función de ella.
MENTE: Es consecuencia de un fallo ejecutivo: en el funcionamiento de la memoria de trabajo que
dificulta la comprensión de mensajes largos o elaborados.
 Semántica/pragmática: los enunciados parecen bien estructurados pero el lenguaje no se adapta al
entorno comunicativo. Brindan demasiada o poca información, no respetan los turnos para intervenir,
cambian de tema a otro sin motivo, entre otros. Hay muchas dificultades en la comprensión.
Trastornos de procesamiento de orden superior.

Todo esto afecta claramente al discurso, y por lo tanto a la comunicación, verbal o no verbal. Además
están influenciados por el medio, el maltrato, estimulación, o abusos.

CEREBRO.

Puede surgir de una dominación hemisférica anormal o disfunción del hemisferio izquierdo como
responsable del fracaso en la adquisición normal del aprendizaje. También puede ser causado por lesiones
bilaterales que afectan al sistema auditivo central imposibilitando el procesamiento correcto de las señales
acústicas. Se puede dar por complicaciones prenatales y perinatales o infecciones tempranas del sistema
nervioso.
Los niños con TEDL procesan poco las señales acústicas recibidas porque sus mecanismos de aprendizaje
no funcionan de forma adecuada. No pueden elaborar sus propios conocimientos lingüísticos. El motivo es
que hay un fallo en la elaboración y representación neuronal del habla.
El lenguaje se desarrolla a partir de unos condicionantes genéticos multiples que interactúan con los factores
del entorno.
EMERGENCIA TARDIA DEL LENGUAJE.
Algunos niños presentan un retraso expresivo, mientras que otro receptivo. Muchos niños que comienzan a
hablar tarde llegan a alcanzar a sus iguales a pesar de ello, sin que se asocie con ninguna otra dificultad en el
desarrollo. Se diferencian dos grupos:
 Desarrollo lento del lenguaje: alcanzan una relativa normalidad lingüística en un periodo corto.
 Hablantes tardíos en los que el retraso continuara en el tiempo y con alta probabilidad persistirá.
SINTOMAS.

Un niño es considerado hablante tardío si a los dos años emite menos de 50 palabras significativas (lo
significativo del niño difiere del adulto), y no produce combinaciones de dos palabras, aunque no se puedan
considerar oraciones.

 Habilidades lingüísticas: el ritmo de adquisición léxico es continuo, pero no surge la explosión


(aceleración). Tiene menos intención comunicativa que el resto de sus pares. Existen dificultades en
el lenguaje receptivo, y menor uso de gestos comunicativos. El niño habla menos que sus iguales, la
estructura de sus palabras es más simple.
 Variables individuales: se encuentran diferencias en lo referente al juego simbólico, no tiene
motivación para socializar con otros niños y esto conlleva a menor necesidad de adquirir el lenguaje.
En cuanto a su conducta son negativas (llantos, berrinches).
 Variables familiares y sociales: respecto a la estimulación del lenguaje, los padres de los niños con
estos retrasos utilizan enunciados largos, responden con menos frecuencia a las intenciones
comunicativas de sus hijos. El estrés parental influye, al igual que el nivel educativo de los padres.

PREDICTORES.
 Nivel de vocabulario expresivo, numero de consonantes producidas, nivel de vocabulario receptivo,
inteligencia no verbal y uso de gestos.
 Retraso en la comprensión y expresión del lenguaje. Antecedentes familiares. Ausencia de explosión
léxica.
EVALUACION.

Requiere un enfoque integrado. Se realiza una historia clínica que cuente con datos de antecedentes
médicos, académicos, y personales, es decir, sobre el parto, embarazo, desarrollo, forma de inicio y
presentación de las dificultades lingüísticas, los síntomas, signos, y evolución. Además, las observaciones
detalladas del comportamiento, también datos obtenidos de pruebas estandarizadas. Evaluar el
funcionamiento intelectual del niño, rendimiento actual. Tipo de relación con la familia, características
afectivo-emocionales y alteraciones del comportamiento.
Algunas estrategias para trabajar con estos niños son: hablar con claridad, utilizar frases cortas y sencillas,
darles tiempo para responder, no unir palabras, corregir los errores del niño y elevar el nivel de exigencia.
Los métodos para trabajar tienen que ver con: ejercicios (dar nombre a dibujos ej) especificación de la
captación de estímulos (leer frases o relatos que pongan de manifiesto su grado de adquisición del
lenguaje) contraste (aclarar diferencias fonéticas o gramaticales) modelación/corrección, metalenguaje
(explicar correlaciones).
Además, según el tipo de trastorno:
Fonológico sintáctico: imitación elicitada (repetición literal de palabras o frases), modelado,
reformulación, o expansión.
Pragmático: entrenamiento de la comprensión verbal auditiva, favorecimiento del desarrollo pragmaico en
trabajo individual y grupal, estimulación cognitiva, intervención familiar para la funcionalidad y
generalización de los aprendizajes.

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