Misioneras Siervas del Espiritu Santo

NOVENA DE PENTECOSTÉS

Preparada por:

PROVÍNCIA BRASIL NORTE

1
 Novena de Pentecostés

Oración Inicial (para todos los días)

D: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Canto: Veni Creator o Secuencia del Espíritu Santo (así como hacemos cada día)
D: En un momento de silencio, traemos presente nuestras intenciones y la gracia
que queremos pedir al Espíritu Santo en esta Novena de Pentecostés.

L1: Divino Espíritu Santo,

tú que eres el amor que une al Padre y al Hijo
en la unidad de la Trinidad, ven en auxilio
de nuestra Iglesia, de nuestra Congregación, de
nuestras comunidades y de cada uno de nuestros
hermanos y hermanas.
L2: Que podamos, inspiradas por ti, encontrar el camino
de la unidad, de la solidaridad, del amor, del respeto
y de la reconciliación. Ayúdanos a superar todas las
situaciones que nos separan y que nos alejan del
proyecto del Reino de Dios que es la verdadera
comunión.
Todas: Deseamos ardientemente un nuevo tiempo y una vida
nueva. Por eso, convierte nuestros corazones,
transforma nuestros conflictos, dificultades y
sufrimientos en señal de esperanza y condúcenos por los caminos de la paz.
Amén.
_____________________________________________________________________

Oración Conclusiva (para todos los días)

Divino Espíritu Santo, derrama sobre nosotras tus dones de sabiduría, entendimiento,
ciencia, fortaleza, piedad, consejo y temor de Dios para que podamos, iluminadas por tu
gracia, descubrir cuál es la voluntad del Padre y asumir con mayor empeño la misión que
Jesús nos confía. Con confianza agradecemos todo lo que has realizado en medio nuestro
y nos comprometemos a caminar contigo, abriendo nuestros corazones para ser
transformadas por ti, y acoger la nueva vida de unidad y comunión que deseas construir
con nosotras. Amén.

D.: El Señor nos bendiga y nos proteja.

Todas: Haga resplandecer su rostro sobre nosotras y nos conceda su misericordia y su
paz.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

2
 PRIMER DÍA
¿Quién es el Espíritu Santo para nosotras?

Oración inicial (página 2)

D: Todas somos llamadas a vivir en profunda unión con Dios Uno y Trino y dejarnos
conducir y guiar por la acción del Espíritu Santo.
T: Conforme al deseo de la Madre Josefa, nuestra cofundadora, la invocación "¡Ven,
Espíritu Santo!" debe ser para nosotras tan natural como el respirar en nuestra vida
(Const. SSpS 405.4). (Const. SSpS 405.4).

Canto: de invocación al Espíritu Santo…

PALABRA DE DIOS

D: El Espíritu Santo es el intérprete que Jesús

resucitado nos envía para que comprendamos la verdad
que Él quiere comunicarnos. Aclamemos el Evangelio:

Canto: Canto de aclamación a elegir

Lectura: Jn 16, 12-15

Interiorización de la Palabra:
D: Vamos a releer el Evangelio en silencio, y dejar que el texto penetre en nuestros
corazones. Después cada una podrá repetir la palabra o la frase que más le tocó.

REFLEXIÓN Y COMPARTIR:

¿Quién es el Espíritu Santo para mí?

¿Cómo me relaciono com Él?

ACCIÓN DE GRACIAS
D: Hermanas, agradecemos a Dios con alegría por el don de nuestra vocación. Porque Él
nos llamó a ser sus misioneras, digamos:
Todas: Gracias, Señor, por tu infinito amor. (Repetir después de cada oración)
• Gracias, Señor, por el don de tu Espíritu que habita en nuestros corazones.
• Gracias, Señor, por el Espíritu de la Verdad que nos enseña a discernir lo que es bueno.
• Gracias, Señor, por las personas que pones en nuestro camino. Que sepamos apreciar
sus dones y el bien que nos hacen.
(Continuar con oraciones espontáneas de agradecimiento)

3
 ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
Ven, Espíritu de luz, ilumina, aclara, concientiza. Haznos penetrar en el interior de las
cosas, detrás de las apariencias. Sin tu presencia, todo es sin sentido y la historia sin
rumbo. Que en tu luz veamos la luz.

Ven, Espíritu transformador, despierta, dinamiza, multiplica las energías escondidas de

tu pueblo. Sin tu fuerza, todo está parado, estancado, desintegrado. Ven, transforma la faz
de la Tierra.

Ven, Espíritu creador, renueva, construye, reinventa el

futuro del cual somos responsables. Sin tu coraje, somos
incapaces de actos nuevos, de acción liberadora. Ven, crea
la nueva humanidad abierta al Espíritu.

Ven, Espíritu unificador, arráncanos de nuestra soledad.

Enséñanos a compartir, a dividir, a solidarizarnos, a no
renunciar. Sin tu ayuda, somos egoístas y orgullosas.
Enséñanos la sabiduría en la intimidad.

Ven, Espíritu consolador, sana, consuela los corazones

afligidos, nuestras llagas ocultas. Sin tu apoyo, todo es
triste, sin vida. En tu presencia, júbilo sin fin.

Ven, Espíritu pacificador, une los pueblos, las razas, las

comunidades, las familias divididas. Danos tu perdón. Sin
tu amor, sólo hay lucha y pelea. Ven, Espíritu de paz.

Ven, Espíritu de urgencia, apresura los tiempos, quema las etapas. Cristo está a la puerta
y golpea. Ven, encamina la historia al Reino. Amén.

Canto final a elegir

Oración conclusiva (página 2)

4
 SEGUNDO DÍA
Los Frutos del Espíritu Santo

Oración inicial (página 2)

D: Somos invitadas a vivir según el Espíritu. Pero ¿cómo sabemos si es realmente el

Espíritu de Dios quien nos guía y nos conduce?

T: El árbol se conoce por sus frutos. De un árbol bueno sólo podemos cosechar frutos
buenos (Mt 7, 18). De la misma manera reconocemos si lo que hacemos viene de
Dios por los buenos frutos que producimos.

D: El principal fruto del Espíritu Santo es el amor. La Beata María Helena, cofundadora
de nuestra Congregación, tenía una gran preocupación por el amor fraterno. En la
Crónica de 1893 ella escribió:

T: "Confieso que consideraría como uno de los mayores males que podría sobrevenir a
nuestra Congregación es, si nosotras, Hermanas, no nos amamos sinceramente."

PALABRA DE DIOS
D: San Pablo, en su Carta a los Gálatas, nos ayuda a identificar lo que viene de nuestro
propio egoísmo y lo que es acción del Espíritu Santo. Escuchamos con atención la
Palabra de Dios.
Lectura: Gal 5, 16-26
Interiorización de la Palabra:
D: Vamos a releer el texto en silencio y dejar que la Palabra de Dios penetre en nuestros
corazones.
Reflexión y compartir

A partir de esta lectura, ¿cuáles son las obras de nuestros

instintos egoístas que percibimos en nuestro medio?
¿Cuáles son los frutos del Espíritu Santo que experimentamos
en nuestra comunidad?

5
 ORACIONES DE LA COMUNIDAD

D: Hermanas, presentemos nuestras intenciones espontáneamente ante Dios y

supliquemos al Espíritu Santo que nos ayude a producir frutos de amor y de bondad,
cantando:
Estribillo: Espíritu Santo, ven, ven (2x) u otro conocido.

ORACIÓN PARA ALCANZAR LOS FRUTOS

Espíritu Santo, amor eterno del Padre y del Hijo, dígnate
concedernos tus doce frutos.

El fruto de la caridad: que nos una enteramente contigo

por el amor.

El fruto de la alegría: que nos llene del santo consuelo.

El fruto de la paz: que produzca en nosotros la

tranquilidad del alma.

El fruto de la paciencia: que nos haga sufrir todo por el

amor de Jesús y María.

El fruto de la benignidad: que nos lleve a socorrer de buena gana las necesidades de los
que sufren.

El fruto de la longanimidad: que nos haga esperar con paciencia en cualquier ocasión.

El fruto de la mansedumbre: que nos haga soportar con toda mansedumbre lo que el
prójimo tiene de incómodo.

El fruto de la modestia: que nos ayude a vivir con sencillez.

En fin, los frutos de la continencia y de la castidad: que conservan puros nuestros

corazones y transparente nuestra mirada.

Espíritu Santo, haz de nosotras tu morada,

templo sagrado donde habitas.

Quédate con nosotras durante nuestro viaje en la tierra,

para que podamos vivir contigo eternamente

en el Reino de la Gloria. Amén.

Canto final a elegir

Oración conclusiva (página 2)

6
 TERCER DÍA
Discernir la acción del Espíritu Santo
en nuestra vida

Oración inicial (página 2)

D: Hermanas, dejémonos guiar por el Espíritu Santo en el transcurso de nuestra vida
misionera, creciendo cada vez más en una íntima comunión de vida y misión con el
Señor (Const. SSpS 421).
T: Así "seremos mensajeras de alegría y signo de esperanza" (Const. 421).
D: El Espíritu Santo es el amor entre el Padre y el Hijo que desborda de la Trinidad
Santa e inunda nuestros corazones.
Canto: Si yo no tengo amor, yo nada soy Señor (2x)

PALABRA DE DIOS
D: En la Primera Carta a los Corintios, San Pablo nos presenta este bellísimo himno al
amor:
Canto: Si yo no tengo amor, yo nada soy Señor. (2x)
Lectura: 1Cor 13, 1-8a
Interiorización de la Palabra:
D: Vamos a releer el texto en silencio y dejar que la Palabra penetre en nuestros
corazones. Después podremos repetir las frases que más nos tocaron.

REFLEXIÓN Y COMPARTIR

¿Cuáles son los criterios de discernimiento que este texto nos

presenta para saber si nuestras acciones son realmente
inspiradas por el Espíritu Santo?
¿El discernimiento ha sido una práctica en mi vida?
¿De qué forma?

ORACIONES DE LA COMUNIDAD
D: Hermanas, elevemos nuestra alabanza a Dios Uno y Trino que por amor nos creó y
nos llamó a participar en la plenitud de su vida.
Cantemos: Te alabamos, Señor, y bendecimos tu Nombre. (repetir entre las oraciones de
alabanza - u otro estribillo)

7
 • Señor, Dios Padre y Creador, te alabamos y te bendecimos por las maravillas de
tu creación.
• Señor, Jesucristo, Hijo del Dios vivo, te alabamos y te bendecimos por haber
venido al mundo y convertirte en nuestro hermano.
• Divino Espíritu Santo, Dios del amor y de la comunión, te alabamos y bendecimos
por derramar en nosotras tus inmensos dones.
(Continuar con oraciones espontáneas de agradecimiento.)

ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

De San Agustín

Respira en mí, oh Espíritu Santo,

para que sea santo mi pensar.
Impúlsame, oh Espíritu Santo.
para que sea santo mi actuar.
Atráeme, oh Espíritu Santo.
para que yo ame lo que es santo.
Fortaléceme, oh Espíritu Santo.
para que yo proteja lo que es santo.
Protégeme, oh Espíritu Santo.
para que jamás pierda lo que es santo.

Canto final a elegir

Oración conclusiva (página 2)

8
 CUARTO DÍA
El Espíritu renueva todas las cosas

Oración inicial (página 2)

D: Hermanas, nuestras Constituciones nos invitan a tributar especial amor y veneración
al Espíritu Santo y a vivir de su fuerza: "Pidamos con insistencia, que renueve en
nosotros la gracia de la Confirmación". (Conf. Const. 405)
T: “Nos entregamos a su acción para que pueda transformarnos en Cristo” (Const. 405).

Canto: Envía tu Espíritu, Señor, y renueva la faz de

la tierra. (bis)
Bendice, alma mía, al Señor:
¡Dios mío, qué grande eres!
Cuántas son tus obras, Señor;
la tierra está llena de tus criaturas.
Les retiras el aliento, y expiran
y vuelven a ser polvo; envías tu aliento,
y los creas, y renuevas la faz de la tierra.
Gloria a Dios para siempre,
goce el Señor con sus obras.
Que le sea agradable mi canto,
y yo me alegraré con el Señor.

PALABRA DE DIOS
D: El Espíritu Santo, presente en la Creación, es la fuerza transformadora que renueva
todas las cosas. Es Él quien recrea el universo y hace de nosotras nuevas criaturas.
Preparémonos para oír la Palabra de Dios, cantando:
Canto: A elegir
Lectura: Ap 21, 1a. 3-7
Interiorización de la Palabra:
D: Vamos a releer el texto en silencio y dejar que penetre en nuestros corazones y nos
renueve.
ORACIÓN DE LA COMUNIDAD
D: A partir de la lectura del Libro del Apocalipsis, presentamos en forma de oración
todas las situaciones que nos gustaría que fueran transformadas por el Espíritu Santo
en una nueva realidad, en una nueva vida. A cada pedido vamos a cantar:
Estribillo: A elegir.

9
 REFLEXIÓN Y COMPARTIR

¿Realmente deseamos una nueva vida en nuestra comunidad,

en la Iglesia y en el mundo en que vivimos?
¿En qué podemos colaborar para que esa la transformación suceda?

ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

Ven, Espíritu Santo:
necesitamos de ti como del aire que respiramos
porque tú eres el aire que nos da la vida.
Ven, danos la fuerza para luchar
por la verdad, la justicia y el amor,
luz para comprender a todos,
ayuda para servir, profundidad para amar.
Haznos mujeres nuevas, fraternas y solidarias,
generadores de vida y de comunión.
Sin ti no comprendemos
que nuestra felicidad está
en confesar que Dios es Padre y Madre
de todos y en vivir en la confianza como
hermanas y hermanos.
Ven, Espíritu del Padre, que nos libera y salva de la
comodidad y del desánimo, de la falta de coraje para
luchar y de la desesperanza.
Ven, Espíritu del Hijo hecho hombre,
a recordarnos que Dios ama la condición humana,
y sufre y espera en cada persona que sufre, y se alegra en
cada persona que se alegra.
Ven, Espíritu Santo,
para que nuestro esfuerzo dé frutos de amor,
para que la fidelidad nos abra a un futuro nuevo,
y nos impulse en la tarea de cada día;
para que nos libres del cansancio y de la desilusión
y nos lleves al Reino del Amor.
Ven, Señor y dador de vida,
¡ven a alegrar nuestro mundo tan sombrío!
¡ven y renueva la faz de la Tierra!
Ven y bendice nuestro encuentro, ven y envíanos
como misioneros y testigos de tu poder transformador. Amén.

Canto final: Una canción que invoque o hable de paz.

Oración conclusiva (página 2)

10
 QUINTO DÍA
El Espíritu Santo renueva mi ser

Oración inicial (página 2)

D: Hermanas, "El Espíritu Santo nos ayuda a orientar

progresivamente nuestra vida hacia Dios. Bajo su
dirección descubriremos más claramente la voluntad del
Padre en el acontecer diario, la cumpliremos con mayor
generosidad y seguiremos más radicalmente a Cristo en
el camino de la cruz”. (Const. SSpS 414).
T: “Esto exige de nosotras una constante renuncia al hombre
viejo y renovación espiritual de nuestra mentalidad.”
(Const. SSpS 414).

PALABRA DE DIOS

D: En la Carta de San Pablo a los Colosenses vamos a profundizar la acción del Espíritu
Santo en nuestro ser, transformándonos en nuevas criaturas, a la imagen de Cristo,
nuestro Señor. Acojamos la Palabra de Dios cantando:
Canto a elegir o:
Amadas por el Padre, apasionadas por Cristo, somos llamadas:
a ser mujeres discípulas misioneras,
comprometidas con la vida; en la fuerza del Espíritu Santo.
Lectura: Col 3, 9b -15
Interiorización de la Palabra:
D: Vamos a releer el texto en silencio, colocándonos dentro de él, permitiéndole hablar
directamente a cada una de nosotras (si es posible, poner un fondo musical suave y
dar el tiempo necesario).
D: Todavía en silencio, vamos a perguntarnos:

REFLEXIÓN Y COMPARTIR

¿Qué todavía existe en mí de la persona vieja que

necesita ser transformada por el Espíritu Santo?

¿Cuál es mi disposición para dejarme guiar y

transformar por el Espíritu?

11
 ORACIÓN DE LA COMUNIDAD
D: Hermanas, presentamos con toda confianza nuestro ser ante el
Espíritu Santo para que Él transforme en nosotras todo lo que
aún no es conforme a la imagen de Cristo. En cada intención,
cantemos:
Canto: Elegir un estribillo.
• Divino Espíritu Santo, transforma em mí...
(Continuar espontaneamente)

INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

(Misioneras Siervas del Espíritu Santo)
Espíritu Santo,
que rezas silenciosamente
en lo profundo de mi ser, hazme
transparente y pequeña,
para ser capaz de entrar en el silencio
de tu oración.
Espíritu Santo,
que aleteas silenciosamente
sobre las aguas desde el principio
de la creación, puríficame en la fuerza
del agua de mi bautismo, para que
sea capaz de vivir el silencio de la paz.
Espíritu Santo, que hablas silenciosamente
en la armonía del universo,
dame la capacidad de acoger a mis hermanos y hermanas en mi silencio interior.
Espíritu Santo,
presente en la sabiduría silenciosa de las estrellas, abre mi corazón a la contemplación,
para que yo pueda comulgar las interpelaciones de Dios.
Espíritu Santo, en el que el amor es presente,
ven a traducir en mi corazón tu amor por la oración.
Dame el coraje de interrumpir mis actividades
para traerlas a ti, en la oración.
Enseñame a rezar, a dialogar con el Señor, o parar delante de Él. Ayúdame a mantener
la ofrenda de mi pobreza,
a salir de mí para rezar por los demás, por la Iglesia.
Espíritu Santo, Tú, que transformas tantas personalidades
ven y conviérteme a Dios. Amén.

Canto final a elegir.

Oração conclusiva (página 2

12
 SEXTO DÍA
El Espíritu renueva nuestras relaciones

Oración inicial (página2)

D: "Por medio del Espíritu Santo, el amor de Dios se derrama en

nuestros corazones. Él quiere transformarnos, compenetrar
nuestra oración y acción, capacitarnos para la entrega y moldear
nuestras comunidades". (Prólogo de las Constituciones SSpS,
página 18).
T: “Testimoniamos su presencia en el mundo cuando nos abrimos
a Él y a su acción en nosotras”. (Prólogo de las Constituciones
SSpS, página 18).

PALABRA DE DIOS
D: Acojamos la Palabra de Dios recordando a la Beata Madre
Josefa que siempre se empeñó en construir relaciones
fundamentadas en el amor y la entrega:
Estribillo: Pronto está mi corazón, oh Dios (2x)
(Canción de la Hna. Berta – ARM)
Lectura: Fil 2, 1-6
Interiorización de la Palabra:
D: Vamos a releer el texto en silencio y dejar que él hable con nosotras. Después
podremos repetir una palabra o una frase que nos tocó.

REFLEXIÓN Y COMPARTIR

¿Nuestras relaciones corresponden al deseo que San Pablo

expresa a la Comunidad de los Filipenses? ¿Por qué?
¿Cómo podemos crear relaciones nuevas, generadoras de vida,
entre nosotros?

ORACIÓN DE LA FRATERNIDAD
Señor, te pido
que nos conozcamos siempre mejor en nuestras aspiraciones
y nos entendamos más en nuestras limitaciones.
Que cada una de nosotras sienta y viva las necesidades de la otra.
Que nuestras discusiones no nos dividan,
sino nos unan en la búsqueda de la verdad y del bien.
Que cada una de nosotras, al construir su propia vida,
no impida a la otra de vivir la suya.
Que nuestras diferencias no excluyan a nadie de la comunidad.
Que miremos a cada una, Señor,
con tus ojos y nos amemos con tu corazón.
Que nuestra fraternidad no se cierre en sí misma
sino esté disponible, abierta, sensible a los deseos de los demás.

13
Que al final de todos los caminos, sobre todas
las búsquedas, y al final de cada discusión,
y después de cada encuentro, no haya "vencidos"
y "vencedores", sino solamente hermanas.

INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

D: A partir de lo que reflexionamos, presentemos al Espíritu Santo todo lo que está en
nuestros corazones, sea en forma de oración, alabanza o súplica. Él conoce los
desafíos que enfrentamos y el deseo que tenemos de una vida nueva para cada una
de nosotras, para nuestra comunidad y para toda la Iglesia. Esta nueva vida sólo es
posible a través de nuevas relaciones, fundamentadas en el amor y el perdón. Pidamos
entonces que el Espíritu Santo nos transforme.
Estribillo: Envía tu Espíritu, Señor, y renueva a faz de la tierra.
(Siguen oraciones espontáneas y la comunidad responde cantando el
estribillo)

Padre Nuestro, Ave María y Gloria al Padre.

Canto final: a elegir
Oración conclusiva (página 2)

14
 SÉPTIMO DÍA
El Espíritu revela el proyecto del Padre

Oración inicial (página 2)

D: Hermanas, "realizamos la acción misionera en una

creciente comunión de vida con el Señor bajo la
dirección del Espíritu Santo". (Prólogo de las
Constituciones SSpS pag. 19)
Canto: Va, Sierva del Espíritu Santo, ser la fuerza
femenina, Evangelio vivo en medio del pueblo. Va,
a anunciar a Jesucristo, dar su vida al servicio de los
que están oprimidos.

PALABRA DE DIOS

D: Dios nos llama para participar en el proyecto de su reino

de amor, paz y misericordia. Acojamos la Palabra de Dios cantando:

Canto: (Canto de invocación teniendo en cuenta la lectura)

Lectura: Lc 4, 14-21

Interiorización de la Palabra:

D: Vamos a releer el Evangelio en silencio y dejar que la Palabra de Dios toque nuestros
corazones.

REFLEXIÓN Y COMPARTIR

¿Cuál es el proyecto del Padre que Jesús,

en la fuerza del Espíritu Santo, revela para nosotros?
Nosotras, que somos misioneras, ¿cómo estamos asumiendo este proyecto?

Canto: Buscar uno que hable en lo posible de la lectura: “El Espíritu del Señor está
sobre mí”.

15
 ORACIÓN A NUESTROS SANTOS Y SANTAS
Dios, Padre de amor, Tú llamaste a Arnoldo y a José a seguir a tu Hijo, el Verbo Divino,
para proclamar el Evangelio a todos los pueblos.
Ardientes de amor por Él y llenos de su Espíritu, se dedicaron totalmente a la obra de la
propagación de tu reino de amor y de paz.
Que el testimonio de estos santos continúe inspirándonos hoy, así como inspiró tantas
generaciones de misioneros y misioneras, en muchos lugares del mundo.
Como a ellos, inflama nuestros corazones de amor ardiente por Jesús, que nos llamó a la
misma misión. Enséñamos a construir comunidades donde se aprenda el diálogo y se
creen relaciones generadoras de vida.
Que la entrega de tu Hijo en la Eucaristía sea ejemplo para nuestra vida en comunidad,
para que nos convirtamos en señales del amor infinito que tienes por el mundo.
Enséñanos a experimentar la alegría en la diversidad de los pueblos y transforma nuestro
mundo en un solo corazón vivificado por el Espíritu de Jesús. Amén.

Arnoldo, José, María Helena, Josefa e Mártires Verbitas

rueguen por nosotras y ayúdennos em nuestras actividades apostólicas.

Canto final a elegir

Oración conclusiva (página 2)

16
 OCTAVO DÍA
El Espíritu Santo nos fortalece en nuestra misión

Oración inicial (página 2)

D: Hermanas, el prólogo de nuestras Constituciones dice: "Cristo nos llamó a esta
Congregación para seguirlo en la fuerza del Espíritu
Santo, alabar al Padre y llevar a los hombres a la
plenitud de la vida".
Canto: Sea conocido, amado y glorificado, por todas las
personas, Dios Uno y Trino, la omnipotencia del
Padre, la sabiduría del Hijo y el amor del Espíritu
Santo.

PALABRA DE DIOS

D: Los mismos discípulos de Jesús que tras su muerte se

encerraron por miedo a los judíos, después del día de
Pentecostés se lanzaron con coraje al anuncio de la
Buena Nueva. Es el Espíritu Santo quien les dio fuerza,
incluso para arriesgar su propia vida. Acojamos la Palabra de Dios cantando:
Canto: Apropiado según la Lectura.

Lectura: Hch 4, 23-31

Interiorización de la Palabra:
D: Vamos a releer en silencio este pasaje de los Hechos de los Apóstoles y ubicarnos en
el lugar de los discípulos, dejando que la Palabra de Dios dialogue con nosotros.
Canto: Puede ser el mismo que se cantó antes de la Lectura.

REFLEXIÓN Y COMPARTIR

¿Cómo percibimos la fuerza del Espíritu Santo que actúa

en el mundo, en la Iglesia y en nuestra comunidad?

ORACIONES DE LA COMUNIDAD
D: Hermanas, presentemos ante Dios nuestros pedidos, especialmente por todos los
misioneros y misioneras que a ejemplo de los apóstoles anuncian la Palabra de Dios
sin temor:
Canto: Tu vida, Señor, es nuestra vida, tu misión es nuestra misión.
El Evangelio será nuestra medida y nuestra fuerza será la comunión.

(Repetir luego de cada oración)

17
 TESTIGO DEL ESPÍRITU SANTO

Espíritu Santo, ven,

hazme un testigo,
testigo de paz y resurrección,
de bondad y perdón.
Hazme un testigo de amor
y justicia, de resurrección y alegría.
Espírito Santo, ven,
derrama sobre los que has creado
la fuerza renovadora de tu Espíritu
e inflama con tu ternura a los que son incapaces
de amar.
Revigoriza a los débiles y derrumbados que no pueden levantarse.
Envía tu soplo de vida a los que ya envejecieron.
Restaura con tu fuego la confianza
de los que no pueden confiar.
Anima a los que viven oprimidos y no consiguen liberarse.
Espíritu Santo, ven, hazme justa y solidaria
con los que, olvidados y excluidos, luchan en la esperanza,
de un día celebrar en el compartir, la fuerza de la fraternidad.
Ayúdame a escribir la historia recreando la vida.
Espíritu Santo, ven, haz renacer
del suelo de mi vida una nueva alianza,
un nuevo vigor y una nueva respuesta de fidelidad.
Enciende la llama de mi amor.
Ilumíname y hazme un testigo
en la misión de hacerte, cada vez más,
conocido, amado y glorificado
por todos los pueblos. Amén.

Oración conclusiva (página 2)

18
 NOVENO DÍA
El Espíritu Santo nos envía

Oración inicial (página 2)

D: Hermanas, hoy estamos concluyendo nuestra

Novena de Pentecostés y queremos agradecer al
Espíritu Santo por todas las gracias que Él nos ha
concedido durante esta novena.
Estribillo: A elegir (algo de gratitud)
D: Además de agradecer, queremos también asumir
nuestro compromiso y dejarnos enviar por el
Espíritu de Dios, pues es Dios quien nos llama a ser
sus discípulas misioneras y es Él también quien nos
forma y guía a lo largo de toda nuestra vida. Esta
acción divina exige nuestra respuesta personal.
(Const. SSpS 509).
Todas: “Cada una de nosotras es la principal responsable de mantener viva la propia
vocación, a través de la oración y la fidelidad, en el día a día” (Const. SSpS
509).
PALABRA DE DIOS
D: Vamos a alabar a Dios, al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo en su misterio de amor
que nos llama a ser sus hijas y a participar del Reino de Dios, cantando:
Canto: Algún canto breve que alabe a la Trinidad (2x)
Lectura: Ef 1, 3 -14
Interiorización de la Palabra:
D: En actitud de acción de gracias, vamos a releer el texto en silencio y dejar que la
Palabra de Dios pueda resonar en nuestro corazón. Después podremos repetir las
frases que más nos tocaron.

GESTO DE COMPROMISO

Después de profundizar la Palabra de Dios

y compartir nuestra vida durante toda esta novena,
¿qué compromiso queremos asumir personal
y comunitariamente como expresión de la vida nueva
que el Espíritu Santo nos ofrece?

La comunidad decide cuál es el gesto concreto que va a asumir y prepara un cartel o un

mural para colocar en un lugar bien visible para recordar su compromiso.

19
 CONSAGRACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

Oh, Espíritu Santo, Dios de la luz,

de la fuerza y del amor, que estás presente, actuando en la historia
y en cada una de nosotras, a Ti me consagro,
comprometiéndome con la verdad y la vida.
Confírmame en la confianza en Ti,
en la apertura a los demás y en la autenticidad en vivir
el Evangelio de Jesucristo.
Confiada me coloco bajo tu acción,
con todo lo que soy y tengo.
Te entrego mis capacidades y talentos,
y todo mi ser en su fragilidad humana.
Penetra en mí, oh Espíritu de Amor
y conviérteme en testigo auténtico de Cristo,
comprometida con la construcción de su Reino
de justicia, fraternidad y paz.
Oh, Espíritu Santo,
fuerza evangelizadora y guía de la Iglesia,
revitaliza y revigoriza la fe de todos los cristianos,
para que así todos los pueblos puedan experimentar
el amor del Padre y la felicidad de ser todos
hermanos y hermanas en Cristo Jesús. Amén.

Canto final: A elegir

Oración conclusiva (página 2)

20