PROYECTO 1050-EDUCACIÓN INICIAL DE CALIDAD EN EL MARCO DE LA RUTA DE

ATENCIÓN INTEGRAL A LA PRIMERA INFANCIA

SUBSECRETARIA DE CALIDAD Y PERTINECIA

Dirección de Educación Preescolar y Básica

Proyecto 1050
Educación Inicial de Calidad en el marco de la Ruta de Atención
Integral a la Primera Infancia

Documento Orientador para la construcción e implementación del

Plan de Atención Integral – PAI

Documento construido en el marco de los convenios:

SED-ICBF-CAJAS DE COMPENSACIÓN FAMILIAR
ICBF 11-0580/SED 1723/COMPENSAR 1889 y ICBF 11-0584/SED 1725/COLSUBSIDIO
para la vigencia 2018
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ORIENTACIONES PLAN DE ATENCIÓN INTEGRAL

1. INTRODUCCIÓN

El Plan de Atención Integral para la primera infancia al interior de las

Instituciones Educativas Distritales (PAI-IED) se define como la herramienta que
permite organizar de manera articulada los diferentes procesos, acciones y actores
vinculados al cumplimiento de condiciones de calidad para la educación inicial en el
marco de la Atención Integral1. En este sentido, el plan funciona como el eje de la
planeación de los procesos que se dan al interior de los componentes, facilita la
organización de la gestión, la integralidad de las acciones, hacer seguimiento a los
procesos y los actores involucrados.
Con el objetivo de establecer los parámetros fundamentales a tener en cuenta para
estructurar e implementar dicho plan, este documento se dirige a la comunidad
educativa de los colegios y de los equipos que actualmente llegan a las IED, a
fortalecer los procesos de reflexión pedagógica, gestión y cualificación que al interior
de los colegios se requieren para avanzar hacia la consolidación de una educación
inicial de calidad en el marco de la atención integral. En este sentido, el referente
principal para lograr este propósito es la ruta que traza el Anexo Técnico 2018 para
las alianzas SED – ICBF y Cajas de Compensación.
El Plan de Atención Integral debe contemplar en su estructura la definición de un
propósito general y uno institucional derivado del contexto que vive cada colegio,
describir las acciones necesarias para desarrollar los procesos estructurales que
hacen parte de la educación inicial de calidad enmarcada en la atención integral,
con un enfoque de derechos que exige una organización sistemática y colaborativa
entre los responsables de su gestión a nivel institucional.

El carácter integral del plan hace necesarios procesos de articulación entre

maestras, directivos docentes, profesional psicosocial, auxiliar de salud y nutrición,
acompañante técnico pedagógico, agentes educativos y por supuesto, las familias.
Su puesta en marcha implica compartir la responsabilidad para construirlo,
viabilizarlo y sostener los procesos a lo largo del año; las decisiones y los resultados
compartidos que se deriven de la implementación del PAI, serán la evidencia
principal de la comprensión de la atención integral.

Bajo las anteriores claridades sobre el PAI, el documento desarrolla los siguientes
apartados: el propósito del plan y el sentido de los componentes de calidad para
educación inicial desde elementos claves que de los mismos se derivan para la
puesta en marcha del PAI en las IED; claves para construcción del plan a manera
11
Este propósito es detallado en el anexo técnico 2018.
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de pistas que orienten el trabajo colaborativo y colectivo que esta herramienta exige;
una estructura, como punto de partida para el diálogo y proyección del trabajo que
se deriva de los procesos estructurales señalados en el Anexo Técnico; y
finalmente, mecanismos de seguimiento y evaluación al plan, necesarios para
orientar la permanente toma de decisiones del equipo interdisciplinario para avanzar
en la garantía de la educación inicial de calidad en el marco de la atención integral
en las instituciones educativas distritales.

2. PROPÓSITO DEL PAI

Promover al interior de los colegios el análisis, organización y articulación de las

acciones que se derivan de los componentes de calidad para la educación inicial en
el marco de la atención integral.

3. SENTIDO DE LOS COMPONENTES

Teniendo en cuenta que el PAI recoge y proyecta de manera articulada y

contextuada los procesos y las acciones que permiten avanzar hacia la
consolidación del ciclo inicial desde las apuestas por la calidad y la atención integral,
a continuación, se presentan por cada componente implicado su sentido e
incidencia, lo cual, sin lugar a dudas, será determinante a la hora de construir y
desarrollar un plan conjunto.

 Componente Proceso Pedagógico:

Este componente es el responsable de dinamizar desde el saber pedagógico la
educación inicial en el marco de la atención integral y también, es el encargado de
articular los demás componentes sobre las implicaciones metodológicas para
trabajar con los niños, niñas y sus familias. Es esta vía, desde este componente se
da lugar a experiencias intencionadas y planificadas, ambientes e interacciones de
calidad, que contribuyen al potenciamiento y promoción del desarrollo de los niños
y las niñas de manera armónica e integral.
Es así, como a través de las acciones pedagógicas se ofrecen experiencias
retadoras para impulsar el desarrollo de las niñas y los niños, lo cual se traduce en
acompañar y promover las actividades y expresiones propias de la primera infancia
que posibilitan sus aprendizajes: el juego, la exploración del medio, la literatura y el
arte. De manera complementaria, se reconoce que los momentos de cuidado donde
se satisfacen condiciones básicas de afecto, alimentación, protección e higiene,
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entre otras, llevan implícitas acciones formativas, por cuanto se constituyen en

espacios de intercambio y comunicación, es decir, en una experiencia pedagógica
que potencia el desarrollo.

 Componente Familia Comunidad y Redes:

Desde este componente se busca fortalecer el rol de las familias en el desarrollo
infantil, la crianza y el cuidado de los niños y las niñas, así como fortalecer su
participación y vinculación en los procesos educativos que se desarrollan en el
colegio.
También desde el componente se tiene como propósito promover la creación y
fortalecimiento de redes internas y externas del colegio, para trabajar de manera
articulada con actores institucionales, comunitarios y locales comprometidos con la
atención integral, con el fin de ampliar las posibilidades y generar condiciones
óptimas para el desarrollo de los niños y las niñas de primera infancia. En este
sentido, la Ruta Integral de Atenciones emerge como la oportunidad de articular la
gestión para avanzar con el cumplimiento de las atenciones definidas para 2018,
por los sectores, para el distrito.

 Componente Salud y Nutrición:

Este componente se centra en posicionar como parte fundamental del desarrollo de
los niños y las niñas, el bienestar y los hábitos de cuidado y autocuidado. Esto
implica involucrar las familias, las maestras y los demás actores del colegio que
permanecen con ellos y ellas. De esta manera, la misión del componente, en
perspectiva de la atención integral, se orienta a la promoción de estilos de vida
saludables y a la verificación del estado nutricional y de las atenciones que
corresponden a salud de los niños y las niñas en aras de identificar los niños y niñas
que requieren mayor apoyo y movilizar con el colegio y a nivel local, las acciones
necesarias para avanzar en el cumplimiento de las atenciones.
El componente aporta al PAI, información valiosa para la lectura de la realidad, (ver
documento de orientaciones para la elaboración de lectura de la realidad) sobre el
estado nutricional de los niños y las niñas, los estilos de vida de las familias e indaga
por los estilos de vida que se promueven en el colegio. Con esto, desde el
componente se pone la reflexión sobre el cuidado y la salud, como parte de la
educación inicial.

 Componente Ambientes Educativos y Protectores:

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Hace mención al diseño, construcción y adecuación de ambientes que propicien

experiencias enriquecedoras para los niños y las niñas e incentiven la exploración
del mundo físico y social, con confianza en sí mismos, en las maestras y agentes
educativos que los rodean.
Este componente es el responsable de lograr que las instituciones educativas
ofrezcan espacios protectores y estimulantes donde su curiosidad natural pueda ser
promovida por maestras y agentes educativos que se interesen por identificar y
valorar las características particulares de cada uno de ellos y ellas, así como por
brindarles condiciones de seguridad, interacciones significativas, bienestar y
protección. En el marco del PAI este componente movilizará procesos encaminados
a lograr que los ambientes se encuentren adaptados y dispuestos en relación con
las características y condiciones de las niñas y niños, de manera que les brinden
seguridad, pero que a la vez sean flexibles y les permitan desenvolverse
autónomamente en ellos.

 Componente de Talento Humano:

Se comprende como el responsable de garantizar que los servicios de Educación
Inicial cuenten con el recurso humano idóneo y suficiente para hacer posible la
atención integral en la cotidianidad de los colegios. Implica la generación
mecanismos de articulación que favorezcan los diálogos, intercambios de saberes
y el reconocimiento de las particularidades del colegio, de tal manera que actores y
roles se articulen con la identidad institucional

De esta manera, los procesos de cualificación del talento humano centrados en la

atención integral son parte fundamental de este componente, por lo tanto, el PAI
requiere contemplar espacios para el encuentro y la reflexión conjunta. Dentro de
estos, se espera promover la participación de maestras y maestros en el espacio de
Mesa Pedagógica Local como escenario permanente de diálogo y reflexión en torno
a la educación de calidad para la primera infancia.

 Componente Administrativo y de Gestión:

Este componente, en cabeza del equipo dinamizador o la instancia que haga sus
veces, es el llamado a liderar la construcción y consolidación del Plan de Atención
Integral, para lo cual deberá tener en cuenta los hallazgos de la lectura de realidad
y establecer la priorización de acciones, líderes de procesos y cronograma. Incluye
la gestión documental institucional necesaria para garantizar oportunidad y
confiabilidad en la información derivada del proceso de atención integral; para
desarrollar este proceso se recomienda que la institución genere estrategias y
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asigne responsables que garanticen la organización y acceso a la información

Finalmente, para garantizar las acciones de planeación y gestión adelantadas en el

marco de este componente, se deben tener como referencia los resultados del
Sistema de Monitoreo a las Condiciones de Calidad desarrollado durante el año
2017- para los colegios en que aplique-, en tanto allí se presenta un panorama del
estado de avance en materia de actividades, productos y procesos relacionados con
la atención integral y la calidad de la educación inicial.

4. CLAVES PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL PLAN

Consolidar equipos que comprendan, diseñen estrategias y establezcan

oportunidades de mejora en el marco de la atención integral al interior de las
instituciones educativas, es el principal desafío al abordar el PAI. Para lograrlo, es
necesario ampliar la mirada frente a las implicaciones éticas y pedagógicas que trae
consigo el ejercicio de desarrollar acciones colaborativas a favor de los niños y las
niñas.

Atendiendo a las implicaciones éticas, el ejercicio requiere “Una actitud abierta,

comprensiva, limpia de prejuicios, dispuesta siempre a poner las ideas a prueba en
la experiencia y modificarlas sólo de conformidad con la experiencia misma”
(Abbagnao y Visalberg. 1986. P.645). Esto propone, diálogos recíprocos, actitudes
que favorezcan el reconocimiento del otro, respeto por la diferencia y promoción de
ideas coherentes con las particularidades del contexto.

Lo anterior dialoga con las implicaciones pedagógicas al comprender que toda

acción que se plantee para desarrollar procesos de atención integral en los niños y
las niñas tiene como punto de partida, la reflexión y análisis sobre las infancias, la
garantía de derechos y el potenciamiento del desarrollo infantil. Ahora bien, está es
una tarea de largo aliento, razón por la cual a continuación se proponen algunas
claves para facilitar la construcción e implementación del PAI, las cuales fueron
pensadas desde las implicaciones mencionadas anteriormente.

a. La lectura de realidad como oportunidad para reconocer el contexto y trazar

acciones comunes: reconocer los niños, niñas, maestras, la familia, el colegio, la
comunidad y el territorio es el punto de partida para desarrollar procesos situados y
oportunos, en tanto implica sintonizarse con la realidad educativa a través de
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acciones de observación, escucha y diálogo constante con los actores que la

integran.2

Realizar la lectura de realidad en conjunto requiere: un trabajo articulado entre

componentes, agudizar la mirada hacia las particularidades institucionales y
finalmente hallar puntos de encuentro que permitan armonizar acciones; se espera
que todo ello se plasme en un documento cohesionado y coherente que en suma
permita iniciar acciones comunes, intencionadas, situadas y sistémicas.

b. Diálogos abiertos, plurales y propositivos: posibilitar espacios de

encuentro para concertar acciones, disertar ideas y concretar estrategias que
favorezcan los procesos de atención integral al interior de las instituciones son
acciones fundamentales para la consolidación del equipo y la construcción del plan.
Para esto, se recomienda estimar tiempos y espacios de encuentro que permitan
reconocer, articular y apoyar los procesos estructurales contemplados en el plan de
atención integral. Espacios fundamentados en el respeto a la diferencia, la igualdad
y la inclusión de diferentes puntos de vista.

c. El plan de atención integral, un desafío de todos y todas: es necesario

reconocer que el plan de trabajo tiene sentido en sí mismo cuando es desarrollado
como proyecto común. Esto implica, comprender que: garantizar la atención integral
de los niños y las niñas es responsabilidad de todos y cada uno de los actores que
intervienen en la promoción y potenciación de su desarrollo. En este sentido, es
necesario que tanto la comunidad educativa como el equipo de las cajas de
compensación se articulen como “unidad” al abordar los procesos de Atención
Integral (AI) en las instituciones educativas.

d. La revisión de los documentos institucionales, una tarea fundamental:

revisar el Proyecto Educativo Institucional (PEI), documento de acuerdo de ciclo,
manual de convivencia, plan de equipo dinamizador en los colegios que lograron
avanzar en el ejercicio entre otros textos construidos por el colegio, permite
reconocer a primera vista los horizontes de sentido de la institución, proyecciones y
oportunidades de mejora. Analizar estos documentos durante la elaboración del
plan de atención integral, permitirá proyectar acciones situadas y enmarcadas en
las particularidades del colegio al cual se llega.

e. Comprender los conceptos articuladores para otorgar sentido a cada

una de las acciones: se concibe como conceptos articuladores aquellos aspectos
que fundamentan y orientan las principales acciones de los componentes, los cuales
deben constituirse en los elementos que permitan centrar la mirada como equipo de
trabajo. En este sentido, se destacan como aspectos fundamentales los siguientes:
2
Para ampliar la comprensión de esta clave se recomienda acudir al documento orientador de lectura de
realidad.
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Atención Integral a la Primera Infancia (AIPI), Ruta Integral de Atenciones (RIA),

estándares o condiciones de calidad, transiciones efectivas y armónicas (TEAs) y
Sistema de Valoración al Desarrollo Infantil (SDVI). Es preciso mencionar que la
comprensión y reflexión de estos aspectos es de vital importancia para abordar con
coherencia y pertinencia el plan de atención integral en las instituciones educativas.

f. Reconocer los principios del Plan de atención Integral: si los conceptos

estructurales orientan y definen las acciones, los principios constituyen los
derroteros de sentido del proceso de atención integral, estos son: el enfoque de
derechos, enfoque diferencial, construcción participativa, desarrollo integral, y
mejoramiento continuo. Dicho de otro modo, estos principios son las pistas para
reflexionar sobre las acciones y estrategias desarrolladas al interior del plan.

g. Concertar tiempos y espacios pertinentes para su desarrollo: si bien

cada uno de los componentes dinamiza procesos propios de su rol, es necesario
que como equipo se definan acciones colaborativas que permitan optimizar los
tiempos de trabajo en las instituciones. La planeación conjunta inter-componentes
es una herramienta que facilita este ejercicio ya que permite desarrollar y
realimentar acciones entre varios actores en un mismo espacio y tiempo; lo que
facilita el desarrollo de los procesos y evita la saturación de acciones por parte de
los equipos en las instituciones.

h. El plan de atención integral, como un reflejo de las particularidades

institucionales: cada plan de trabajo debe caracterizarse por visibilizar las
particularidades de la institución, en este orden de ideas no podrían existir planes
iguales; ya que, si bien la estructura es la misma para todos los colegios, el
contenido debe reflejar los hallazgos encontrados por el equipo, para a partir de ello,
generar estrategias diferenciadas que le apunten a un fin común: la calidad y la
atención integral en ciclo inicial desde los derroteros señalados en el anexo técnico
2018.

5. ESTRUCTURA:

Con el ánimo de organizar en forma sistémica la implementación de la atención

integral al interior de los colegios, se construyó una estructura que da cuenta de los
propósitos, procesos, acciones, tiempos de desarrollo y evidencias que constaten
lo realizado. A continuación, se explica cada una de las categorías para de esta
manera sintonizar comprensiones que faciliten su desarrollo.

PROPÓSITO GENERAL: Hace referencia al alcance de las acciones que se espera

suceda en la cotidianidad de los colegios para garantizar la Atención Integral. Se
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propone como referencia el objetivo general del plan de atención integral contenido
en el anexo técnico.
PROPÓSITO INSTITUCIONAL: A partir del propósito general, las particularidades
y las acciones adelantadas en los colegios desde la implementación de la atención
integral, se describe el objetivo de lo que se espera suceda en cada una de las
instituciones educativas.
PROCESOS ESTRUCTURALES: Son los procesos que le otorgan identidad a cada
uno de los componentes de calidad para educación inicial y por tanto se convierten
en los derroteros para definir las acciones en el PAI. La materialización de estos
procesos en la vida institucional de los colegios es el mayor reto para alcanzar la
calidad esperada para el ciclo inicial, en tanto allí están reunidas las condiciones
consideradas fundamentales para atender integralmente a los niños y las niñas.
HALLAZGOS LECTURA DE REALIDAD: Hace referencia a la síntesis y análisis
que realiza el equipo interdisciplinar sobre los resultados de la lectura de la realidad
en relación a los procesos estructurales. Se trata del panorama general sobre el
estado del colegio en relación al proceso estructural y se convierte en el referente
para proyectar acciones pertinentes en el PAI.
ACCIONES: Son aquellas que, a manera de posibilidades concretas, permiten
avanzar hacia el fortalecimiento a nivel institucional de los procesos estructurales.
Las acciones propuestas deben dar cuenta de la articulación y otorgar sentido a la
Atención Integral en la cotidianidad en los colegios.
A QUIÉN SE DIRIGE: Teniendo en cuenta la multiplicidad de actores que confluyen
al interior de las instituciones educativas y que tienen responsabilidad en garantizar
atención integral, se invita a especificar el actor al cual se dirigen las acciones
propuestas.
EVIDENCIA DE LA ACCIÓN: Se refiere a los productos y / o soportes específicos
derivados de las acciones propuestas por proceso estructural. Estos deben guardar
coherencia con lo señalado en el anexo técnico y la ruta digital.

LIDER DE PROCESO: Si bien el plan de atención integral es una responsabilidad

colectiva, como claramente lo han señalado las claves para la construcción del
mismo, es preciso identificar un actor o actores que asuman el liderazgo de cada
una de las acciones para que sean los responsables de articular y dar cuenta de las
mismas.
CRONOGRAMA Y SEGUIMIENTO (CORTO, MEDIANO, LARGO PLAZO): El
cronograma corresponde a los tiempos de ejecución proyectados para el desarrollo
de las acciones establecidas en el PAI. El seguimiento en coherencia con los
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tiempos de ejecución mencionados y de las acciones proyectadas, se propone

realizar de manera cualitativa y descriptiva, a partir de dos categorías
fundamentales para conocer el estado de avance y tomar decisiones pertinentes y
oportunas: avances y oportunidades de mejora.

6.MECANISMOS DE SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN

El seguimiento y la evaluación deben contemplarse como parte del Plan de Atención

Integral, de manera que durante la implementación se garantice una mirada
reflexiva, crítica y propositiva sobre todas las acciones, procesos y resultados, y así
mismo lograr identificar oportunamente las opciones de mejora que sean necesarias
para garantizar una educación inicial de calidad; por tal razón, es necesario que el
equipo dinamizador o quien haga sus veces defina instrumentos, procedimientos y
responsables de verificar la pertinencia, oportunidad, continuidad e integralidad de
las acciones descritas en el plan de atención integral.
Se recomienda tener en cuenta el Informe de Sistema de seguimiento a las
condiciones de calidad (Colegios donde fue implementado) como referencia para
estructurar el proceso de seguimiento. Igualmente, organizar y asegurar las
evidencias que den cuenta de las actividades realizadas con criterios de suficiencia,
veracidad y oportunidad.
El ejercicio reflexivo de todos los actores responsables de la atención integral, la
mirada profesional de otros actores de la comunidad educativa general, así como la
escucha activa y sensible de las voces de los niños, niñas y familias beneficiados
con estas acciones, serán insumo clave para generar oportunidades de mejora
continua sobre el plan.