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Psicología evolutiva: Adolescencia

Primer parcial

“¿Cómo actuar con un adolescente difícil?”, Nasio

Adolescencia: pasaje obligado, delicado, atormentado y creativo que se extiende desde el


fin de la infancia hasta las puertas de la madurez. El adolescente es un chico que poco a poco deja
de ser niño para convertirse en el adulto que será.
El autor define a la adolescencia según tres perspectivas diferentes pero complementarias:
Perspectiva biológica: el principio de la adolescencia corresponde a la PUBERTAD, periodo
en que se desarrollan los órganos genitales y también el cuerpo en general (altura, formas
anatómicas, cambio de voz en el hombre, menstruaciones en la niña, etc.). Entonces,
biológicamente hablando, hace hincapié en el advenimiento de un cuerpo maduro, sexuado,
susceptible de procrear.
Perspectiva sociológica: se refiere a que la adolescencia es un periodo de transición entre
la dependencia infantil y la independencia del joven adulto (esto depende de la cultura).
Perspectiva psicoanalítica: según el psicoanálisis, el adolescente es un ser envuelto en
puros contrastes y contradicciones, se encuentra como un trastornado que se precipita alegre
hacia adelante en la vida, luego de pronto se detiene, agobiado, vacio de esperanza, para volver a
arrancar inmediatamente llevado por el fuego de la acción. Es un ser que sufre.
Otra de las cosas que caracteriza al adolescente es que su mente se “inflama”, es decir,
aprende a concentrarse en un problema abstracto, a discernir lo esencial de una situación, a
anticipar las dificultades eventuales y a expandirse ganando espacios desconocidos. Conquista el
espacio intelectual, tiene nuevos intereses culturales. También conquista el espacio afectivo con el
descubrimiento de nuevas maneras de vivir emociones. Y, por último, también conquista el
espacio social al descubrir el universo de los otros seres humanos.
La adolescencia es el momento en que nos damos cuenta de lo importante que es el otro
biológica, afectiva y socialmente para cada uno de nosotros, cuanta necesidad tenemos del otro
para ser nosotros mismos.
Otra cosa que caracteriza al adolescente es su estado de desasosiego, le cuesta mucho
expresar su malestar con palabras. No sabe o no puede verbalizar el sufrimiento difuso que lo
invade. Le cuesta porque no sabe identificar bien lo que siente. Su sufrimiento es inconsciente,
esta mas expresado mediante comportamientos impulsivos que conscientemente vivido y puesto
en palabras.
El sufrimiento inconsciente del adolescente puede manifestarse de tres maneras
diferentes:
1. Forma moderada: por medio de una neurosis de crecimiento. Dice Nasio que la
adolescencia es una neurosis sana, necesaria para volverse adulto. Esta neurosis
(angustia, tristeza o rebeldía) traduce un sufrimiento inconsciente. La agitación
adolescente forma parte de esta neurosis. Es necesaria para que el adolescente
logre adueñarse de sí mismo y afirmar su personalidad. Nasio también la
denomina “neurosis de crecimiento”. Los principales síntomas de esta neurosis
saludable de crecimiento (nombrados anteriormente) son los signos anticipadores
de la futura madurez del chico o chica. Los jóvenes con los que, comúnmente, nos
relacionamos todos los días, pertenecen a esta categoría. Esta neurosis, además,
se dice que es sana porque desaparece sola con el tiempo, no hay necesidad de
recurrir a un terapeuta.
El autor agrega que, además, esta neurosis saludable es la repetición de la primera
neurosis de crecimiento que fue, alrededor de los 4 años, el complejo de Edipo
pero en la adolescencia. Se muestra convencido de que la formación de la
personalidad de un individuo se decide en su manera de atravesar estas dos
pruebas inevitables que son la neurosis sana del complejo de Edipo y, diez años
mas tarde, la neurosis sana de la adolescencia. En ambos casos se trata de
neurosis porque, en estos dos periodos de la vida, el sujeto se desgarra
interiormente, tratandod e responder a la vez a las fuertes exigencias pulsionales
de su cuerpo y a las fuertes exigencias sociales, exigencias que ha introyectado y
que se impone a si mismo. Esta guerra entre un cuerpo invadido por pulsiones y
una cabeza invadida por una moral extrema hace del adolescente un ser
íntimamente dislocado, desgarrado, que experimenta sentimientos
contradictorios respecto de si mismo y de aquellos de los que depende
afectivamente. Esto es la neurosis: sentimientos, palabtas y comportamientos
impulsivos y desfasados que engendran una insatisfacción permanente y multiples
conflictos con el prójimo.
La llama neurosis de “crecimiento” porque para crecer, todo adolescente esta
obligado a sufrir una neurosis y a deshacerse de ella.

2. Forma intensa: por medio de comportamientos peligrosos. Estos son


interpretados como la puesta en acto de un sufrimiento inconsciente.
(comportamientos depresivos, aislamiento, suicidio, poliadiccion, anorexia,
bulimia, vandalismo, etc.). Cuando Nasio habla de sufrimiento inconciente, se
refiere a que el joven no siempre lo siente y nunca nítidamente; y, si lo siente, no
llega a verbalizarlo, lo exterioriza a través de comportamientos riesgosos,
impulsivos y repetitivos. Esta ausencia de conciencia de su malestar explica por
que un adoelscente, pese a hallarse en una situación desesperada, no piensa en
pedir ayuda.

3. Forma extrema: perturbaciones mentales que revelan un sufrimiento inconciente


(esquizofrenia, TOC, fobias, depresión, desordenes alimenticios, etc.)

Nasio hace una diferencia entre “crisis de adolescencia” y “adolescente en crisis”.


Crisis de adolescencia: periodo intermedio de la vida en el que la infancia no ha terminado
de apagarse y la madurez no ha terminado de surgir.
Adolescente en crisis: joven cuyo comportamiento, que ya era agresivo o adictivo, se
convierte en inmanejable para su familia.
Lo que hace es reemplazar la expresión de “crisis de adolescencia” por la de neurosis
saludable de crecimiento.

SUPUESTAMENTE ESTO NO ENTRA

“El estadio del espejo en el niño y en el adolescente”, entrevista con Nasio, Grassi

Inconsciente y repetición.
Lo que dice nNasio acerca de la repetición del inconciente es que nuestra vida cotidiana
late al ritmo de la repetición que el inconsciente nos impone. La repetición puede ser positiva o
negativa. Es positiva cuando nos permite aprender, crear, afirmar nuestra identidad a lo largo de
nuestra existencia. Pero la repetición puede tambien mostrarse patológica cuando nos hace revivir
los traumatismos de la infancia, o nos hace multiplicar las rupturas amorossas, o aun nos hace
sufrir los ritos obsesivos compulsivos, etc. Piensa que el inconsciente esta detrás de la repetición,
dice que es una fuerza de vida que nos impulsa a repetir los mismos comportamientos felices y
fracasados.
La repetición estabiliza, estructura y permite el crecimiento. Hay repeticiones sanas que
permiten el desarrollo y repeticiones enfermas que crean situaciones de crisis en la evolución del
ser humano.
Sin embargo, hay crisis que son necesarias para el crecimiento. En el niño y adolescente
hay siete crisis que los hacen madurar. Pero lo importante no es la crisis en si misma, lo
importante es la lógica generadora de la crisis. Cada una de ellas se define como la expresión final
de tres movimientos que convergen: lo que el niño perdió, lo que el niño gano y lo que el niño
conserva. Perdida, ganancia y conservación son las tres experiencias que, cuando son simultaneas,
instlan una crisis de desarrollo.
Estas siete crisis de desarrollo son:
1. Nacimiento.
2. Destete.
3. El descubrimiento de la marcha y la aparición del lenguaje.
4. La primera escolarización.
5. El descubrimiento de la vida interior.
6. El descubrimiento del amor por fuera de la familia.
7. La salida del hogar.

Estadio del espejo y adolescencia


Nasio hace una comparación entre el Estadio del espejo de Lacan y lo que el llamo el
Estadio de la adolescencia. En el estadio del espejo se oponen dos parámetros:
1. El cuerpo real de un bebe que siente y vive la experiencia de sus propias
sensaciones internas y externas.
2. Un parámetro visual y virtual, donde el mismo bebe, desbordado por todas esas
sensaciones tumultosas, percibe una imagen global y globalizante en el espejo.
Entonces en estos dos parámetros tenemos:
a) Un cuerpo real sentido y vivido como despedazado, fragmentado.
b) Frente al cual se tiene una imagen especular, redonda, entera y unificante, que le
da al niño la posibilidad de sentirse una unidad en relación a si mismo, y una
entidad diferente de las otras personas que lo rodean.

En el caso del adolescente, tenemos un cuerpo enloquecido por las multiples e intensas
fuerzas pulsionales,e n particular sexuales y agresivas. Sufre del choque entre dos intensidades: la
intensidad de un cuerpo que vibra al ritmo de pulsiones que reclaman furiosamente convertise en
actos impulsivos e imprevisibles; y al mismo tiempo la intensidad de un superyó rigido e inflexible
que reprime las pulsiones con tanta violencia como la violencia que las anima. Entonces, frente a
estas dos fuerzas opuestas entre si, aparece una imagen en el espejo. Una imagen que es tambien
unitaria, pero con la particularidad de ser ante todo, una imagen de seducción.
La diferencia entre el estadio del espejo, donde aparecen 2 parametros, y el estadio del
adolescente, donde tenemos 3 parametros, reside sobre todo en el 3er personaje, que no aparece
en el caso del bebe: el superyó. Es el típico elemento dela sadolescencia. La presencia del superyó
es algo que marca esencialmente el periodo de la adolescencia. Es decir, la presencia del pudor o
del impudor. El superyó es el pudor, yy el adolescente vive en esa lucha entre pudor e impudor.
Esto hace que el autor agrege una diferencia mas entre el estadio del espejo y el de la
adolescencia. En el caso del bebe, el sentimiento que domina es la alegría, el jubilo de verse
reflejado en una imagen redonda y unificadora. En el caso del adolescente, el sentimiento que
domina es la vergüenza o, su contrario, la omnipotencia. El sentimiento mas importante de la
adolescencia es la vergüenza.

(Dos) Neurosis (sanas) del desarrollo.

Nasio considera a la adolescencia como una nuerosis sana en el desarrollo de un individuo.


La adolescencia es una etapa de conflicto permanente, compleja; un perioro difícil, tanto para el
adolescente como para su medio familiar. Se instala en ella lo que llamamos una neurosis. Una
neurosis es justamente una tensión dolorosa entre un cuerpo que reclama exteriorizarse y una
cabeza, uns uperyo, que inhibe, impide esa exteriorización. Esa lucha crea comportamientos
contradictorios, tanto con el como con su entorno. Entonces el adolescente esta mal primero
consigo mismo a causa de esta tensión interna, y esta incoherencia interna va a manifestarse a
través de comportamientos que son igualemnte incoherentes frente a los padres. ¿Qué es una
neurosis? Es una incoherencia de sentimientos y de comportamientos, incoherencia entre el
cuerpo y la cabeza del joven, y una incoherencia entre la relacon de el con los otros. Los otros de
los cuales depende.
El sufrimiento que conlleva, implica un desgarramiento psíquico, interno, y un conflicto
externo. El problema de la neurosis es el hecho de amar y odiar a aquel del cual dependo. Si no
hay dependencia no hay neurosis. Para que haya neurosis tiene que haber dependencia. La
adolescencia se acaba, junto con la neurosis, cuando el joven ya no vive mas en una relación de
dependencia financiera con sus padres.
Sin embargo, todo esto es indispensable para comenzar luego la nueva época de la
“juventud/adulta” de una manera mas armada y mejor vacunados contra ciertas dificultades. Por
eso dice que es una neurosis necesaria y ana. Sana porque se disipa inevitablemente sin
tratamiento psicológico ni medicamentos, se va sola.
Por otra parte, Nasio compara este periodo de neurosis sana y necesaria de la
adoplescencia con el periodo, tambien de neurosis, del complejo de Edipo. Este fenómeno
tambien es un fenómeno neurótico, porque el niño edipico tambien siente interiormente una
desunión profunda, una fuerza que lo empuja y otra que le impide tener comportamientos
transgresivos. Aca estamos entonces frente a dos neurosis sanas: una que se instala entre los 5 y
los 6 años y otra que se instala entre los 11 y los 23 azños. Son dos periodos cruciales en la
evolución del ser humano. Son sanas y necesarias a condición que la reacción del medio familiar
sea relativamente adecuada y permita al joven que las sobrepase sin heridas que cicatricen mal.

Psicopatología

Esta el caso de jóvenes cuyo transcurrir por la adolescencia va por carriles que están por
fuera de esta neurosis sana del desarrollo.
Nasio dice que el adolescente tiene dos particularidades en la manera de sentir su
sufrimiento. Primero no sabe identificar claramente el tipo de sufrimiento que lo afecta. Le es
difícil. Lo vive ese sufrimiento pero no tiene un nombre para darle. Identifdicar significa tener
conciencia. El adolescente no tiene la capacidad introspectiva de nombrar determinados
sentimientos. Diferencia 3 tiempos:
1. Identificar lo que se siente.
2. Nombrar lo que se siente.
3. Declarar lo que se siente.

Y, además, considera que hay 3 categorias de sufrimientos inconscientes en el


adoelscente.
 Moderado: afecta a la mayor parte de la población adolescente. Son los
adolescentes considerados normales. Es un adolescente con comportamientos
contradictorios, difícil, pero soportable, tanto para el mismo como para su familia.
 Severo: se manifiesta por comportamientos violentos contra si mismo y contra la
sociedad, uso de drogas duras, bulimia, anorexia, delincuencia, etc. Es el
adolescente que manifiesta su sufrimiento intenso a través de acciones.
 Extremo: se manifiesta a través de las diferentes patologías mentales propias a
esta edad. Puede ser esquizofrenia, neurosis obsesiva severa, fobias escolares,
cuadros clínicos depresivos, anorexias graves.

Duelos y creatividad
El adolescente hace duelos pero en general no son nunca duelos largos, espectaculares o
patológicos. El adolescente pierde su infancia pero no esta abrumado por la pena de la perdida. Es
importante recordar aquí que toda perdida produce dolor y pena. El adolescente se siente triste
pero no melancolico. El sume los cambios, asume su nuevo cuerpo y las nuevas exigencias
afectivas, cognitivas y sociales. Angustia, dolor y tristeza, estos tres sentimientos forman parte del
duelo propio de la adolescencia. La adolescencia es en si un duelo, un duelo de la infancia y de
todo lo que esta ligado a ella. Pero es imperativo tener que seguir avanzando, crear y responder a
las nuevas solicitaciones.

Los otros: dependencia-independencia

La adolescencia tiene dos características, la primera es la presencia del superyó, la lucha intestina
entre dependencia e independencia. En tanto que niño, el depende y quiere depender. En tanto
que joven adulto, el necesita y quiere independizarse. Es esa lucha entre dependencia-
independencia que lo carcome en el interior, lo tensiona. La dependencia es un hecho, y la
independencia una aspiración, un deseo, un ideal. Olvidan que el otro del cual uno depende es
fundamental para poder crecer.

“El entretiempo adolescente”, Grassi

Niñez y adolescencia. Nuevos paradigmas, sus nombres y escritura.

Primera parte: sobre las nominaciones “minoridad” y “niñez/adolescencia”.


A partir del siglo XX, se produjeron cambios sustanciales en relaicion a lo jurídico,
relacionado con los derechos del niño y adolescente. Los términos niñez/adolescencia
reemplazaron el de “menor”. Cada uno guarda una relación directa con dos paradigmas epocales
diferentes.
Luego, los conceptos de “niñez/adolescencia” ingresaron en la categoría de sujeto.

Sujeto y psicoanálisis
Sujeto y, desde la perspectiva de este texto, sujeto psíquico, es actividad de intercambios
entre los sistemas de la organización del…

Sujeto e historizacion
(texto)

Sujeto es función psíquica, entidad no corpórea.


¿el sujeto es cuerpo o mente?
¿Cuáles son las relaciones entre sujeto y cuerpo? El yo deriva de sensaciones corporales.
Cabe entonces cosniderarlo como la proyección psíquica de la superficie del cuerpo, además de
representar como se ha dicho, el mismo, la superficie del aparato.
El cuerpo, en su desarrollo y procesos de maduración, respeta una cronología, depende
del medio para que este lo posibilite y estimule, depende de condiciones alimentarias y
habitacionales, de la salud física como de funciones de investimento libidinal, de docnidciones
culturales. Cuerpo, psiquismo y funciones parentales se van constityendo articuladamente,
entrelazados.
Hay mojones en la constitución del aparato psiqucio:
 El proceso originario pone en marcha la actividad psíquica en relación con las
primeras inscripciones corporales, pictogramas.
 Luego, el proceso primario con la constitución de lo icc. Poco tiempo después se
pone en funcionamiento el proceso secundario y la constituicon del yo.
 El estadio del espejo y la constitución del yo como funciones que comienzan a
instalarse entre el octavo mes y el primer año de vida, y por la cual se vuelve a
pasar luego en la pubertad con las transformaciones del cuerpo puberal.
 El superyó con sus imperativos categoricos que son herencia del complejo de
Edipo hasta su sepultamiento. Su revisita con el nuevo cuerpo puberal, la
exploración del cuerpo propio y el ajeno en general.
 Las transformaciones de yo ideal en ideal del yo pripopias de lo adolescente.

“La primavera del significante”, Cordova

Introducción: los adolescentes y los significantes de su tiempo.

Fue a partir de la década del 50, acompañando los profundos movimientos sociales de
posguerra, que los priopios adolescentes comienzan a diferenciarse y a crear los signos de una
cultura propia. El contexto social epocal de los años 50 y 60 es el espacio-.tiempo en que la
juventud de posguerra toma conciencia de si misma y pone en crisis, des-ordena y cuestiona lo
socialmente establecido.
Con la creciente difusión de los entonces nuevos medios masivos de comunicación surgen
y se imponen globalmente los primeros iconos adolescentes. Se corporizan el cuestionamiento a lo
establecido y el inquietante acontecer a lo nuevo, los adolescentes portan los significantes de su
tiempo.
En este texto se habla sobre la relación sgnificante/adolescencia.

La relación significante/adolescencia. Etimologia e historia


El termino adolescencia recorrió un largo camino. El significante adolescencia arriba a la
actualidad con una notable eficacia simbolica, es decir, la capacidad potencial de producir nuevos
efectos de sentido.
Los vocablos adolescencia y adolescente tienen su raíz latina en el verbo adolescere, que
denota el principio de una acción progresiva: comenzar a crecer, estar creciendo. Significacra “el
que esta creciendo”.

Lo adolescente y las inquietantes figuras de la alteridad

El significante adolescente es un puro devenir, con sus sentidos de cambio,


transformación, aconceter y transcurrir.

Una sustracción de sentido: adolescer

El significado de adolescencia como “falta algo”, “sufrimiento”, etc., no es valido. Es un


error, una malversación lingüística que tiende a negativizar los sentidos de la voz adolescencia.

Adolescencia: la primavera del significante.


La adolescencia se trata de un momento del trabajo creativo de puesta en desorden y
apropiación de un lenguaje al que han permanecido sujetados y alienados. Esto es un modo de
intentar transcribir en lo simbolico la intima experiencia con lo real de un cuerpo, cuya imagen es
alterada por las vertiginosas trasnfroamciones. El desafio a las reglas gramaticales y la alteración
de los códigos del lenguaje adulto les confiere a ciertas expresiones un carácter poetico, a veces
dramático.
“La adolescencia es la primavera del significante” significa que sus delicadas y bellas
floraciones caerán con el tiempo, y tambien el carácter incondicional del grupo y las primeras
experiencias amorosas, exploraciones en y desde el otro, que dejaran sus poeticas e indelebles
escrituras en el cuerpo, decisivas para su subjetivación.
Apropiarse del lenguaje le permitirá intentar materializar sus deseos y decir algo en
nombre propio, dejando la impronta de su paso en el lenguaje adulto.

“Mesa redonda sobre adolescencia realizada en el contexto del IV congreso


internacional de investigadores y practica profesional de la facultad de psicología, UBA.
29 de noviembre de 2012”

Como bien dice su nombre, la Psicologia Evolutiva carga con el lastre del Evolucionismo,
que implica la determinación de los procesos psicológicos por los procesos biológicos. Destaca el
eje de la cronología y los procesos de maduración del desarrollo corporal.
Cuando se introduce el psicoanálisis en el campo e la cultura, las concepciones de cuerpo
cambian. Ya no se puede pensar al cuerpo sin articularlo con lo psíquico. Cuerpo y psiquismo son
dos caras de la pulsión. La pulsión mira simultaneamente hacia lo somatico, y hacia lo psíquico. La
pulsión no prescinde del cuerpo, como tampoco supedita lo psíquico al desarrollo corporal. Mira
simultaneamente a ambas caras, es bifronte. Las relaciones entre lo psíquico y lo somatico son
complejas, ambiguas, de idas y vueltas, rizomaticas, circulares.
El cuerpo tiene dos vértices, un vértice somatico, conformado por sus procesos del
desarrollo y la maduración, y uno psíquico, constituido por la imagen del cuerpo.
La imagen del cuerpo es la imagen que nos construimos de nuestro propio cuerpo. Y esta
representación psíquica que es la imagen del cuerpo implica procesos que comprometen al cuerpo
en su vértice biológico y al cuerpo libidinal. Es por este costado que se abre el objeto de estudio de
la Psi Evolutiva, teniendo en cuenta las transformaciones del cuerpo con sus procesos de
maduración y los investimentos libidinales del cuerpo.
Continuando con este desarrollo, los autores se formulan una serie de preguntas sobre las
relaciones entre lo inconsciente y el cuerpo. El psicoanálisis provee modelos para pensar las
representaciones (psíquicas) del cuerpo, por ej. la imagen inconsciente del cuerpo. Hay varias
líneas de pensamiento para explicar esto, pero una de ellas es que esta imagen no se produce sin
el Otro, sin el otro y sin la cultura. Lleva la marca de la relación al otro.
Retomando un poco el tema de la psicología evolutiva y el evolucionismo, Nasio dice que
imagina el cambio del adolescente, que va desde el final de la niñez a la edad adulta, con una línea
que en realidad no es ascendente, sino que hace zigzag, es decir, bajo y alto, bajo y alto, bajo y
alto. Va subiendo, pero hay bajos y altos. Lo mas interesante, es que hay un esquema que hace
que cada vez que el adolescente vuelve a la niñez, vuelve a avanzar. Quiere decir que hay el zigzag,
ascendente y además el espiral de ida y vuelta entre la adolescencia, la niñez y la vida adulta.
Además, saca el tema del estadio del espejo. Dice que en el niño hay tres cosas que
acordarse:
1. Es un bebe de 16 meses que esta acompañado, es muy importante que este
acompañado.
2. Esta acompañado por un adulto. Entonces quien sea este adulto lo pone frente al
espejo y el niño se pone muy contento de ver la imagen.
3. El bebe triunfa. Se siente triunfador, como si el dominara la imagen y se sintiera
fuerte. Y, sobre todo, el niño se da vuelta y mira al adulto para pedirle confirmar
que la imagen corresponde a el.
En el adolescente es diferente. En él no hay dicha emoción.
1. Cuando se mira lo hace solo.
2. Pasa horas mirándose.
3. Mira todos los defectos de su cuerpo. No le gusta. No esta contento. Siente
vergüenza de el mismo.
Entonces, la imagen que le viene al adolescente, no es una imagen global como en el niño.
El niño esta contento de ver una especie de bulto. En cambio, el adolescente ve una imagen
fragmentada. Entocnes, cuerpo real, imagen fragmentaria. Cuerpo real, imagen bulto en el niño.
En el niño la emoción es jubilo, y en el adolescente es vergüenza.
Otro concepto teorico que se incluye en este texto es un neologismo: corte-circuito. En
este neologismo usa un significante base: el corto circuito, que denotaba una falla en el circuito
que provocaba una descarga inadecuada, modificado por el significante corte, que es un
significante mayor en el trabajo adolescente. De modo que en la adolescencia aparecia un
mandato que obligaba al sujeto a cortar con los circuitos que estaba habituado a recorrer y se veía
obligado y a la vez deseoso de recorrer otros nuevos. El adolescente debía ahora circular por un
nuevo circuto escolar con códigos distintos en sus grupos de amigos, por un nuevo circuito en su
relación con sus padres donde el alejamiento del circuito corporal implicaba un cambio mayor y
debía construir un nuevo circuito en relación a su propio cuerpo. La coincidencia de lo antiguo y lo
nuevo provocaba muchísimos corto circuitos sea en el o en sus padres que no estaban dispuestos
a cortar con el circuito de su infancia.

“Ficha 1: guía que acompaña la lectura de ‘Tres ensayos sobre una teoría sexual’, de
Freud”, Grassi

Capitulo 1: sobre teorías de pulsiones

1) Primeras ideas sobre pulsiones y conflicto pulsional

Con “Tres Ensayos” (1905), Freud abordó el campo de la pulsión sexual y la sexualidad
infantil, patrimonio humano tabú, a partir del cual se desdibujo la frontera entre lo normal y lo
patológico. Las indagaciones sobre las perversiones sexuales, definidas como aberración-desvío
frente al parámetro de la reproducción y su objeto, inauguraron una erótica humana. S. Freud
alude, desde sus primeros escritos, a “la libido” como energía de la pulsión sexual: aspecto
cuantitativo, cuya manifestación dinámica muestra a las magnitudes en juego en conflicto con la
otra energía, la de las pulsiones yoicas y de las pulsiones de autoconsevación: el interés. El
conflicto energético en la primer teoría pulsional quedaba así definido entre: la libido sexual y el
interés.
En el escrito originario sobre los “tres ensayos”; Freud, dimensiona a la pulsión como un
concepto límite entre el soma y la psique que posee un fin, la descarga; una fuente: el cuerpo
erógeno; y objeto/s en los cuales descargar la tensión psíquica. Luego, en los escritos sobre la
metapsicología i , define a la pulsión como un empuje que representa una presión que fuerza el
trabajo psíquico del sujeto.
Analiza, S. Freud, que lo autoconsevativo se opone a la pulsión sexual y posee
características diferenciadas: “Las pulsiones sexuales nos llaman la atención por su plasticidad, la
capacidad de cambiar de vías sus metas; por la facilidad con que admiten subrogaciones,
dejándose sustituir una satisfacción pulsional por otra, y por su posible diferimiento…
Habría en las pulsiones autoconservativas, una meta prefijada, ciclo consumatorio, y un
objeto bien preciso, concepción, a nuestro entender, más ligada al concepto de instinto
(“Instinkt”) que al de pulsión.
Plantea que, originariamente, las pulsiones sexuales se apoyan en las necesidades
humanas iv .Apuntalamiento de la libido sexual en las necesidades de un cuerpo no-sexual: La
erótica se apuntala en la necesidad. Imbricación que, pensamos, es multidireccional. En el
esquema freudiano, el amor se apuntala en el hambre: a partir del acto de succionar, al
alimentarse y saciar esa necesidad, se crea la zona erógena oral. Plantea, Freud, que las pulsiones
sexuales se autonomizan, poco a poco, del precoz y mítico origen autoconservativo. Pero, hoy
sabemos que, la pulsión y la necesidad se hallan en interacción dinámica y dialéctica, se
complementan y suplementan. La fuente de la pulsión apuntala la búsqueda del objeto de la
libido, el trascendental hallazgo y encuentro con el objeto de la pulsión marca y transforma, al
interactuar, a la misma fuente erógena.
El acaecer pulsional del sujeto es fragmentario y la sexualidad pregenital infantil polimorfa.
Cada zona erógena y quehacer pulsional conforma cierta organización libidinal relativamente
predominante pudiendo delinear zonas erógenas pregenitales: oral, anal, fálica, y luego en la
pubertad, apuntalada en las pulsiones pregenitales, se erigirá la supremacía de la pulsión genital.
Es recién aquí, en la pubertad, que las pulsiones pregenitales se reorientan y subordinan en favor
de la poderosa pulsión genital.

2) El narcisismo complica la teoría

El cuerpo llega a ser, todo, en su conjunto una gran zona erógena. Sobre las bases del
cuerpo erógeno se constituirá el Yo. Sin embargo, S. Freud v en “Introducción del narcisismo”
(1914), plantea que hace falta “un nuevo acto psíquico” para que el yo sea unitario y se constituya
como instancia psíquica, teniendo como sostén al cuerpo erógeno. Pasaje del autoerotismo al
narcisismo.
La libido inviste los objetos externos y, además, los deposita en el yo mismo. Piensa,
Freud, que habría, idealmente, cierto equilibrio entre la libido del yo y la libido de objetal. Si en la
primer teoría pulsional el Yo constituía un polo defensivo en el conflicto, ahora, aparecía como
objeto sexual. Es que el abordaje de la vida amorosa muestra como, hasta el mismo objeto de
deseo, puede investirse con libido narcisista, por lo cual el amante se ama a si mismo en el espejo
del amado vi . Así, aún conservando la definición de las pulsiones de autoconservación, la nueva
dualidad pulsional se halla dentro del grupo de las pulsiones sexuales: libido yoica (sexual) y la
libido de objeto (sexual), problematizando la primera teoría pulsional.

Capitulo 2: sobre la pulsión en la pubertad

Establecemos un punto de partida, que es la pregunta por lo que sucede con la pulsión
sexual en la pubertad. Cuál es la relación entre “pubertad y pulsión sexual”, o sexualidad, si se
quiere, según la opinión popular.
1) Faltaría en la infancia.
2) Advendría en la época de la pubertad (en conexión con el proceso de maduración que
en ella se produce), siendo su meta la unión sexual (genital) o por lo menos las acciones que
tiendan hacia ello.
La introducción de los términos objeto sexual y meta sexual (la acción hacia la cual se
esfuerza la pulsión) le permite a Freud, cabalgar sobre las perversiones y la sexualidad infantil,
para iluminar el trayecto, la aventura de la pulsión sexual hasta la pubertad.
Freud sostiene que la disposición a las perversiones es la disposición “originaria y
universal”, de la pulsión sexual de los seres humanos. A partir de esta disposición y a consecuencia
de alteraciones orgánicas (esto es, el conjunto de transformaciones que experimenta el cuerpo del
púber) e inhibiciones psíquicas, se desarrolla en el curso de la maduración, la conducta sexual
normal.
Así Freud se sitúa en la niñez intentando descubrir esa disposición originaria y ahí ya
destaca la emergencia de aquello que circunscribe la orientación de la pulsión sexual. Los llama
diques morales de la pulsión: la vergüenza, el asco, la compasión y las construcciones sociales de la
moral.
Señala que la pulsión sexual es algo compuesto por muchos factores y que en la perversión
sexual éstos se disgregan en sus componentes. A partir de la pubertad, la pulsión sexual, (genital)
se dirige hacia una única meta sexual, mediante la composición de múltiples mociones de la vida
infantil, unificados.
Freud señala un destiempo en términos de la sexualidad infantil, la práctica sexual no se
desarrolla al ritmo de sus otras funciones, se discontinúa con la latencia donde la excitación sexual
no se suprime sino que se emplea para otros fines diferentes de los sexuales:
a) Para aportar los componentes sexuales de ciertos sentimientos sociales.
b) Mediante la represión y la formación reactiva edificar las ulteriores barreras sexuales.
Siguiendo con la infancia y en este pivoteo con la pubertad es preciso señalar, en el marco
de esa “no orientación pulsional” a una única meta, donde las excitaciones fluyen de diversas
fuentes y no se conjugan sino que persiguen por separado su meta (la ganancia de placer) que en
la niñez la pulsión no está centrada y al principio carece de objeto, ( o por decirlo de otro modo el
objeto es/está en el propio cuerpo) o sea es autoerótica.
Y si bien en la pubertad, se produce el primado de la zona genital, ya en la infancia
comienza a hacerse notable los genitales como zona erógena, ya sea porque como cualquier zona
erógena, engendra satisfacción ante una adecuada estimulación o porque repercute en ella la
satisfacción obtenida de otras fuentes.
Es interesante cómo el temprano florecimiento de la vida sexual infantil hace madurar
también una elección de objeto.
Tomamos en cuenta entonces las transformaciones que experimenta la sexualidad infantil
con la emergencia de la pubertad donde señalamos dos decisivas: la subordinación de todas las
fuentes originarias de la excitación sexual a la zona genital y el hallazgo de objeto. La primera, la
subordinación…se consuma por el mecanismo de aprovechamiento del placer previo, o sea, los
actos sexuales autónomos resultantes de la conjugación de excitación y placer pasan a ser actos
preparatorios para la nueva meta sexual, que él señala es el vaciamiento de los productos
genésicos (eyaculación). El logro de esta meta pone fin a la excitación sexual.
Volviendo a la elección de objeto, es guiada por los indicios infantiles renovados en la
pubertad.
Es preciso señalar también las diferencias entre placer previo y placer final. El placer previo
es lo mismo que ya podía ofrecer aunque en escala reducida, la pulsión sexual infantil y el placer
final es ya plenamente el placer de satisfacción de la actividad sexual genital.
Por último nos queda un tema que resulta de toda esta cuestión: la subordinación de
todas las fuentes al primado de la zona genital, (el gobierno de la zona genital podríamos decir) y
el hallazgo de objeto, sumado esto a la maduración de sus órganos sexuales, los genitales, nos
permiten pensar en una nueva función que aparece en el púber la: aptitud para la reproducción.
La pulsión se pone al servicio de la reproducción, “se torna altruista”.

Capitulo 3: dos corrientes de la pulsión

A la hora de considerar la pulsión (sexual) sus trabajos: transformaciones y adiciones en la


pubertad son diversas las coordenadas a tener en cuenta:
1) Cuatro elementos de la pulsión (objeto-fin ó meta-empuje y fuente).
2) Cuatro destinos de la pulsión (transformación en lo contrario-vuelta sobre sí mismo-
represión y sublimación).
Freud señala distintos destinos de la misma. No los elementos que la componen, (fuente-
fin-objeto-empuje), sino los destinos que la pulsión puede experimentar en el curso de su
desarrollo. Ellos son: la sublimación, la represión, la transformación en lo contrario y la vuelta
hacia la propia persona. A continuación añade Freud, tenemos razones para distinguir pulsiones
de meta inhibida, a saber mociones pulsionales de fuentes notorias y con meta inequívoca, pero
que se detienen en el camino hacia la satisfacción, de suerte que sobrevienen una duradera
investidura de objeto y una tendencia duradera. Freud denomina “inhibición del fin de las
pulsiones” en el momento agudo en que justamente el objeto es susceptible de posibilitar su
alcance.
3) Dos corrientes de la pulsión, que consideraremos específicamente en este apartado, a
saber: a) la corriente tierna y b) la corriente sensual.
En Metamorfosis de la pubertad, plantea Freud que la normalidad de la vida sexual es
garantizada únicamente por la exacta coincidencia de las dos corrientes dirigidas al objeto y a la
meta sexual: la tierna y la sensual.
La corriente tierna reúne en sí lo que queda del temprano florecimiento infantil de la
sexualidad, proviene de la primera infancia, se ha formado sobre la base de los intereses de la
pulsión de autoconservación. Desde el comienzo ha recibido aportes de las pulsiones sexuales,
acogiendo componentes de interés erótico, que ya en la infancia fueron más o menos nítidos.
Corresponde a la elección infantil primaria de objeto. La ternura de los padres y personas a cargo
de la crianza, que rara vez desmiente su carácter erótico (el niño es un juguete erótico) contribuye
en mucho a acrecentar los aportes del erotismo a las investiduras de las pulsiones yoicas en el
niño. Esta corriente se pone al servicio del mantenimiento y desarrollo de las relaciones afectivas
donde no interviene el erotismo. Reúne y guarda los afectos no genitalizados, (no genitalizables ó
desgenitalizados) de la historia de los vínculos del niño con sus padres, hermanos/as y todos
aquellos objetos de afecto que formaron parte de sus relaciones significativas en la infancia. Al
lado de las pulsiones libidinales de pleno efecto y de las pulsiones de autoconservación, se instalan
las pulsiones libidinales inhibidas en su fin o de carácter sublimado, derivadas de las pulsiones
libidinales (4). Hasta aquí un cierto recorrido relativo a la corriente tierna de la pulsión.
En la pubertad, plantea Freud se adiciona a la pulsión sexual, la poderosa corriente sensual
que ya no ignora sus metas (penetrar/ser penetrada) ni su objeto (genitales de sexo opuesto,
instaladas las categorías masculino/femenino). Esta corriente sensual que se adiciona en la
pubertad constituye el erotismo genital. Al parecer nunca deja de transitar por aquellos
tempranos caminos y de investir ahora con montos libidinales más intensos los objetos de la
elección infantil primaria. Pero como tropieza ahí con los obstáculos de la barrera del incesto y los
diques morales de la pulsión, construídos en la latencia, desde el sepultamiento del complejo de
Edipo a la pubertad, exteriorizará el afán de hallar lo mas pronto posible el paso de esos objetos
inapropiados en la realidad hacia otros objetos, ajenos, con los cuales pueda cumplirse una real
vida sexual. No está de más recordar que las categorías de masculino/femenino implican otras
categorías que devienen con lo puberal-adolescente.
4) Sobre la consideración de que la constitución de la sexuación tiene como fundamento
un carácter bifásico: sexualidad infantil (propia del C. de Edipo) y sexualidad adulta (caracterizada
por el hallazgo de objeto).
Ante interrogantes sin respuesta de Freud, la catedra propone lo siguiente:
1) Proponemos lo puberal –adolescente como un otro momento dentro de ese disfacismo
de la sexualidad. Momento peculiar, no tanto pre como entre de la sexuación. Con oscilaciones
entre repeticiones y diferenciaciones. Momento fundante de potencial apertura a lo nuevo: del
cuerpo erótico, de la alteridad del objeto, de lo extrafamiliar y la vincularidad.
2) En otro sentido, lo cual retomaremos en escritos posteriores, pero que queremos dejar
puntualizado, es sobre el trabajo de articulación que se plantea entre estos dos momentos o fases
en la historia y la historia de la sexualidad. Lo puberal-adolescente aparece como momento de
rehistorización de lo infantil ligándose con las inscripciones de lo nuevo. Lo puberal-adolescente,
momento bisagra de ligadura, trabajo de Eros que en sus cursos saludables, establece unidades
cada vez mayores y las conserva. Eros liga y junto a la conservación de lo ya inscripto promueve la
inscripción de lo nuevo.

La pulsión y el altruismo
Una de las posibilidades de incripciones diferenciales, como su nombre lo indica, tiene que
ver con la categoría de lo altero. Lo altero hace referencia a la alteridad y al altruismo. “…La
pulsión sexual se pone ahora al servico de la reproducción, se hace por decirlo así altruista” (9).
Aquí la reflexión se abre en tres direcciones:
1) A la complejidad de la relación autoerotimo-narcisimo-elección de objeto. Sabemos que
en la infancia, el/a niño/a (perverso polimorfo) crece entre autoerotismo, narcisismo y elección
(infantil) de objeto. Hay una orientación (hetero u homosexual) en la elección de objeto. Pero la
elección de objeto en pleno sentido, implica, sino una renuncia al autoerotismo y al narcisismo,
como a la elección (infantil) de objeto, sí a sus transformaciones y puestas en juego en una
relación de vincularidad. Se trata también además de encontrar el máximo de placer en el
orgasmo , de algo en relación al placer del partenaire. También generar placer en el otro. Este es
un sentido del hecho que la pulsión deja de ser egoísta y se vuelve por decir así altruista. La
alteridad se está constituyendo junto con el erotismo.
2) Si la pulsión se pone al servicio de la reproducción y esto entonces abre a la cuestión de
la relación del sujeto con un interés que no es (exclusivamente) “individual” sino (mas amplio) de
la “humanidad” (la humanidad para su subsistencia requiere de nuevos integrantes) también aquí
asistimos a la transformación de la pulsión hacia el altruismo: la consideración por lo altero es el
acoplarse a un interés colectivo.
3) En directa vinculación con el punto anterior, el/la progenitor/a se agrega en una cadena
generacional que lo/a enlaza de una manera muy particular al otro (altero) del nuevo ser objeto de
afecto, el hijo/a.

Capitulo 4: sexualidad, perversiones y neosexualidades: de Freud a Joyce McDougall. Un


recorrido a modo de introducción.

1-Freud comienza “Las metamorfosis de la pubertad” con la siguiente afirmación: “Con el


advenimiento de la pubertad se introducen los cambios que llevan la vida sexual infantil a su
conformación normal definitiva.” Se desliza en esta frase una opacidad de sentido que sugiere que
un sector de la vida sexual infantil, más allá de los cambios de la pubertad, continuará vigente con
su carácter polimorfo en la sexualidad genital adulta. Por otra parte el término “normal” da cuenta
de una paradoja en el pensamiento freudiano, ya que coexisten en su obra un cierto criterio
normativo epocal, junto con aportes inéditos e inquietantes para sus contemporáneos como la
existencia de una sexualidad infantil perverso-polimorfa iniciada y señalizada nada menos que por
los cuidados y significantes prodigados por el otro materno y su deseo (dimensión intersubjetiva
de la pulsión). La “normalidad sexual”, desde el pensamiento de Freud, es alcanzada aveces
mediante un trabajo de adaptación cuyo costo inevitable es la neurosis.
En el capítulo inicial de Tres ensayos, “Las aberraciones sexuales”, Freud se refiere a las
perversiones ordenándolas de acuerdo a las desviaciones de la pulsión sexual respecto a la meta y
al objeto o ambas. Pero concibiendo a su vez una etiología sexual que deberá explicarse por
ciertas fijaciones infantiles y detenciones en el recorrido de la pulsión.
Para Freud las experiencias de placer-displacer son factores constitutivos de la
subjetividad, el objeto de la pulsión es contingente, y por tanto la elección del objeto sexual y las
formas de distribución del goce que definen el erotismo y la sexuación (posicionamiento sexual)
de cada sujeto, serán el resultado de un recorrido pulsional cuyo corolario dependerá, entre otros
factores, del modo de atravesamiento del Complejo de Edipo.
2- Despues de Freud. El psicoanálisis actual, transcurridos algo más de 100 años de la
publicación de Tres Ensayos, no puede soslayar la diversidad sexual de la posmodernidad
expresada por las neosexualidades, el transgénero y las familias homoparentales entre otros
nuevos significantes que cuestionan la lógica “natural” de las polaridades masculino/femenino,
heterosexualidad/perversión, paternidad/maternidad. Nos encontramos ante profundos cambios
sociales y culturales, y nuevos paradigmas interdisciplinarios abiertos a lo complejo, que
problematizan los modos de pensar la sexualidad, las múltiples formas de expresión del erotismo,
la lógica de la sexuación, y consecuentemente también los criterios de salud y procesos saludables.

Capitulo 5: problematizando el concepto de “perversión”

Preguntar sobre la teoría de Joyce MacDougall

Capitulo 6: las transformaciones fisiológicas puberales

La palabra pubertad procede del latín “pubes”( que quiere decir pelos) y, en efecto, la
aparición del vello en el pubis, en las extremidades y en las mejillas (en el caso de los varones) es
uno de sus signos. Los cambios se suceden a lo largo de unos años e implican una enorme
transformación en el sujeto.
A partir de los 10 años y hasta los 12 o 13 años (con variaciones individuales), éstos
cambios se traducen en un mayor crecimiento y maduración destinados ambos a crear nuevas
funciones. Los cambios se dan en ambos sexos aunque con algunas diferencias; éste proceso se
pone en marcha por la acción de determinadas glándulas (hipófisis, testículos, ovarios) que, ya
maduras, segregan las hormonas que modifican los órganos para los cuales están destinadas. A
partir de estos cambios los/las jóvenes ya están en condiciones de procrear.
Talla: Aumento rápido de la talla que lleva a un crecimiento desordenado (crecen primero
los pies y las manos). El crecimiento puberal es en principio disarmónico y con sustanciales
diferencias en varones y mujeres, en comparación con la etapa anterior en la cual el crecimiento
era armonioso y similar en ambos sexos.
Cambios en la estructura ósea: Se produce en el varón un aumento del tamaño de los
hombros y dorso, y en las mujeres crece predominantemente la cintura pelviana (lo que
favorecerá el desarrollo uterino durante el embarazo).
Distribución del vello: En ambos sexos aparece el vello en la zona pubiana. La distribución
del vello pubiano en varones y mujeres es distinta: con forma de triángulo en la mujer y romboidal
en el varón. El desarrollo del vello pubiano mas los cambios genitales en el varón y en las mamas
en la mujer llevan a una clasificación de la madurez puberal. Aparece el bozo o bigote en ambos
sexos y posteriormente la barba en el varón, también el vello axilar y el aumento del mismo en
miembros superiores e inferiores.
Genitales: En el varón se produce un aumento en el tamaño del pene, primero en longitud
y luego en diámetro. Se da un aumento de tamaño en bolsas y testículos. Las erecciones se hacen
mas frecuentes y aparecen las primeras poluciones nocturnas.
Desarrollo mamario: En la mujer comienza alrededor de los 10años, con cambios a veces
unilaterales o sea desarrollo de una sola mama y que luego de unos meses se iguala con la otra. En
los varones se produce frecuentemente el aumento de tamaño de las mamas que luego
retrogradan casi siempre espontáneamente.
Otros cambios: En el varón la propulsión de la laringe hacia adelante (nuez de Adán) da
como resultado la voz mas grave, el cambio de la voz es mas neto en los varones que en las chicas
y, en éste período, le produce por momentos la voz distonal. Al final del proceso puberal el/la
jóven es núbil, con un cuerpo fisiológicamente apto para la práctica genital y la procreación, pero,
la fisiología no alcanza para explicar el cuerpo erógeno ni la exquisita complejidad de la sexualidad
humana que, desde el inicio de la vida, está atravesada por vicisitudes vinculares.

Metamorfosis de la pubertad
Con la metamorfosis de la pubertad, la sexualidad infantil se integra en la sexualidad
adulta bajo la égida del primado genital; se reorganiza lo que había y se agrega algo nuevo: el
placer final.
En la pubertad reemerge la masturbación (mas ostensible en el varón y generalmente mas
encubierta en la jóven), primero como descarga de tensión, luego como prueba, como ensayo (con
efecto de ligadura) , ésta precede lo que será el “trabajo adolescente”: la salida a la búsqueda-
creación del objeto por fuera del cuerpo propio, y por fuera del cuerpo familiar, trabajo que se
inscribe como “creación propia”(3), puesta en escena de una sexualidad que, incluyendo el pasado
historizado, satisfaga también las necesidades de ternura.

“Adolescencia: confluencia del bifasismo sexual en el entretiempo de la


sexuacion”, Cordova.

1) Introduccion

En tres ensayor freud plantea la existencia de la sexualidad infantil e introduce la


idea de un enlace en dos tiempos del desarrollo de la sexualidad, nocion que sera
conocida como el bifasismo de la sexualidad humana.
Estos dos tiempos corresponden a:
1) La sexualidad infantil: caracterizada por las pilsiones parciaes y el autoertosmo.
2) La sexualidad adulta: adviene con la pubertad, con sus decisivas
trasnformaciones que supondrán el primado de la sexualidad genital y el arribo a una
“conformación normal definitiva”.
La idea del bifasismo sexual humano implica romper con la idea de un tiempo
cronológico y una evolución lineal del desarrollo sexual.
Sin embargo, cuando señala la existencia de lo genital en la sexualidad infantil,
Freud avanza en la idea de una aproximación del desarrollo y caracterización de la
sexualidad infantil a la sexualidad adulta. Esto conduce a pensar que la sexualidad genital
adulta no es otra cosa que una extensión de la sexualidad infantil.

2) Los dos tiempos pensados a partir de la teoría de la seducción generalizada.


La teoría de la seducción generalizada abre un campo al estudio sobre la incidencia de la
sexualidad inconsciente parental en la puesta en juego de la pulsión sexual y el implante de
significantes sexuales enigmáticos en el hijo.
La sexualidad infantil, entonces, nace prematuramente, o precozmente despertada por la
sexualidad inconsciente genital y para genital parental, como consecuencia de la operatoria de
implantación de sus significantes sexuales.
Silvia Bleichmar afirma lo siguiente:
“La sexualidad humana no corresponde a dos fases de una misma sexualidad, sino a dos
sexualidades diferentes”.

3) Dos sexualidades y dos historias que confluyen en el entretiempo de la sexuacion.


Considerando la nocion freudiana de la acometida en dos tiempos del desarrollo sexual, a
partir del advenimiento de la pubertad se dara lo que definimos como “la confluencia del
bifasismo sexual en el entretiempo de la sexuacion”. Esta confluencia implica el encuentro de dos
sexualidades que se configuran como tales en forma recursiva y dialogica.
El entretiempo de la sexuacion seria una esttacion de recambio en la que se juegan los
procesos psíquicos correspondientes a los tiempos lógicos puberal, adolescente y juventud.
Grassi subraya la peculiaridad de la sexualidad humana, de constituirse en dos tiempos.
Respecto a estos dos tiempos o formas de sexuacion, aporta para el segundo tiempo la nocion de
tres momentos lógicos: puberal-adolescente-juventud que configuran el “entretiempo de la
sexuacion”, dado que la sexualidad infantil no culmina automáticamente en una “conformación
definitiva adulta”.

“Lo originario (un aporte a la conceptualización de integración


psicosomático y subjetividad)”, Grassi

Introducción
¿Cómo es la puesta en marcha de la vida psíquica? ¿Cómo es el nacimiento del aparato psíquico?

Representar-metabolizar
Funciones del aparato psíquico:
1) Representacion: el aparato psíquico tiene la función de representar. Representar, para
el psiquismo, es metabolizar; se piensa a la representación psíquica como equivalente a la
metabolización que realiza el organismo. Se incorpora, transforma, aquello que se incorpora, en
base a su propia estructura, a la vez que él mismo se modifica por este proceso. Esta actividad de
metabolización indica que existe un trabajo por parte de la estructura organica que consiste enn
incorporar elementos que son ajenos, extraños a él, y transformarlos, homogeneizarlos a su propia
estructura.
Lo que interesa, entonces, en la representación psíquica, es su trabajo para la
incorporación de lo heterogéneo y su transformación en material homogéneo. Entonces, el
aparato psíquico tiene que icnorporar elementos heterogéneos a si y transformarlos,
icnorporandolos a la propia estructura psíquica.
El aparato psíquico naciente va a tener que metabolizar, que representar, el efecto de un
doble encuentro: el encuentro del recién nacido con la madre, y el encuentro de este naciente
aparato psíquico con su propia corporeidad.

Metabolizar la madre-metabolizar el hijo

En estos primeros encuentros del bebe con la madre, hay un predominio de los contactos
cuerpo a cuerpo que pasan a ocupar el primer plano de la relación, por medio de la alimentación,
de los cuidados corporales y caricias que ella implementa. Los contactos corporales en una
primera instancia, conforman el centro de la escena destacándose entre ellos la función
alimentaria que es acompañada de palabras, susurros y cantos, que aunque no cobran avalor para
el bebe (todavía) como significados, si conforman primeros significantes. El encuentro del aparato
psíquico naciente, es con los procesos psicosomáticos que se han despertado del aparato psíquico
naciente, es con los procesos psicosomáticos que se han despertado en la madre a partir del
estado de afecto en su psiquismo de la representación hijo. Es que para la madre, el naciente es
un elemento heterogéneo a si, que tendrá que metabolizar.
El encuentro del aparato psíquico naciente con la madre, es un encuentro con los procesos
psicosomáticos maternos a partir del trabajo de metabolización, que implica tener ue representar
la repsencia de un elemento heterogéneo a ella, que es el propio hijo, y de cómo sea la relación
establecida por ell con dicha representación, que tipo de afectos (amor-odio,, placer displacer) la
acompañan. El concepto de cuerpo imaginado es el que da cuenta de cómo se inicia en la madre
este proceso de representaicon-hijo. Entonces, el autor destaca que estos primeros encuentros
bebe-madre, son con los procesos psicosomáticos despertados en la madre a partir de cómo ella
viene procesando la representación hijo en su psiquismo, lo cual el produce respuestas que se
transmiten en el cuerpo a cuerpo de la alimentación, las caricias y los cuidados corporales.

Metabolizar el cuerpo propio


El bebe va a metabolizar su cuerpo a partir de las sensaicones corporales y asi la
corporeidad propia va a aquedar representada en el psiquismo naciente.
(mas texto)

De lo simple a la complejidad
Lo que plantea el autor es que el acto alimentario y los cuidados maternos que lo
acompañan, no pueden reducirse ni a la relación boca pecho, ni a la circulación exclusiva de
alimento, lo cual plantea un modelo simple. La experiencia alimentaria y de cuidados en general y
lo que tiene de fundante para el psiquismo, si se la observa con el modelo de la complejidad,
permite destacar recorridos libidinales que mas que lineales y unidireccionales, constituyen un
sistema de entrelazamientos, de entrecruzamientos, en “red”.
Porque:
a) intervienen del lado del niño una multiplicidad de sentidos, que el modelo de “lo simpl”, reduce.
Las sensaciones corporales desde el sentido de la vista, del tacto, el oído, el olfato, la superficie de
la piel son los medios por los cuales el naciente pisuqismo incorpora el alimento, el pecho, la
madre, al padre, en un entramado que se parece mas a una red que a una línea, por todas las vías
sensoriales de comunicación entrecruzadas que intervienen.
b) la experiencia alimentaria y de cuidados al bebe, no es una experiencia que tenga una sola
dirección, es una experiencia de mutualidad, donde la dirección de lo que allí sucede, mas que
unidireccional es de circunvalación, es una experiencia “envolvente”.
c) la importancia del “cuerpo imaginado”.

En principio del placer


Para el psiquismo naciente se torna vital el contacto sensorial con la madre, el Otro
Primordial (por humanizante), porque los distintos sentidos que intervienen en esos primeros
contactos corporales de alimentación y cuidados en general, con los procesos psicosomáticos
maternos, van a informar sobre el estado afectivo del encuentro.
La presencia o ausencia del principio del placer es fundamento de la puesta en marcha del
proceso de representación. Es decir, el principio de placer es una condición de inicio de la puesta
en marcha de la actividad de representación para el proceso originario.
El principio del placer esta presente en las dos partes que integran este encuentro: en el
cuerpo del niño y en los procesos psicosomáticos maternos. Es necesaria la presencia del principio
del placer en las dos partes que integran el encuentro para que comience a trabajar el aparato
psíquico y desencadene el proceso de represerntacion. Para lo originario, las primeras
representaciones de lo corporal se denominan pictogramas, que son las marcas, la incripscion del
principio del placer en el cuerpo. Pictograma es principio de placer corporizado.

Integración psiquesoma: “el enraizamiento”.


Una entidad ya constituida (el cuerpo) sirve de apoyatura para que la otra (lo psíquico) se
constituya. El cuerpo (biológico) es, lo psi, devendrá.
Con el concepto de lo originario y su mood de representación: el pictograma, se propone
un modelo diferente para pensar la relación entre lo psíquico y lo somatico. Este concepto de
representación pictogrsamatica propone un modelo por el cual no se podría decir que lo psíquico
por constituirse se apoyara en el cuerpo ya constituido. Hay razones que jsutifican esta
cdiferencia:
a) Lo psíquico esta enraizado en lo somatico. Porque las raíces penetran y se hunden, se
expanden y se bifurcan cada vez mas arraigadas en el soma. .
b) Diferencia soma-cuerpo: se considera la subjetividad como integración psicosomática.
Al nacer un bebe, nace un soma, el soma aun no es cuerpo. Devendrá cuerpo libidinizado, cuerpo
erogenizado. No hay un cuerpo antes que espere y se preste a lo psíquico. Se diría que proceso
originario es pasaje del soma al territorio, al estado de lo psíquico, donde lo somatico termina de
tomar vida, se hace cuerpo erógeno. Ambos psiquesoma, se co-constituyen.
c) El proceso originario y su modo de representación: el pictograma, en cuanaot esta
determinado por el Principio de Placer produce un pasaje del soma al estado de cuerpo erógeno,
cuerpo psíquico. Y asi comienza la integración psicosomática. El pasar el soma a ese otro territorio
de lo psíquico, va a estar supeditado a que se cumplan ciertas condiciones relativas al principio del
placer. La presencia de este principio en el doble encuentro, es la condciopon para que el soma, el
recién nacido, pase a otro estado y quede inscripto como cuerpo erógeno.

El pictograma
La representación correspondiente al trabajo de representación de lo originario cuando
esta regulada por el Principio de Placer es el pictograma de fusión.
¿Qué fusiona pictograma?
 Lo somatico y lo psíquico, su efecto es la integración psicosomática. La
subjetividad es integración psicosomática.
 Objeto y zona. Funde boca y pecho.
 Representación y afecto: para lo originario la represenytacion es el afecto y el
afecto es la representación. Pictograma de fusión es principio de placer
corporizado.

“Mi cuerpo y sus imágenes”, Nasio.


Nasio introduce que cada uno de nosotros tenemos dos imágenes de nuestro cuerpo: la
que vemos y la que sentimos. Propoe estudiarlas y plantea que para el, la imagen del cuerpo es la
sustancia misma del yo.

1. El concepto de imagen inconsciente del cuerpo, de Dolto: nuestra lectura.


La IIC de un niño pequeño continua estando activa durante toda la vida.

La imagen inconsciente del cuerpo es una imagen de las sensaciones


La IIC es el conjunto de las primeras y numerosas impresiones grabadas en el psiquismo
infantil por las sensaciones corporales que un bebe, o onclisuo un feto, experiemnta en el
contacto con su madre, en el contacto carnal, afectivo y simbolico con su madre. Son las
sensaciones experiemntadas y las imágenes impresas ya desde la gestación y a lo largo de los tres
primeros años de vida hasta que el niño descubre su imagen en el espejo. Debemos distinguir dos
desxcubrimientos que hace el niño: el primer descubrimiento ocurre muy temprano, cuando el
lactante se cenciende de alegría a ver a silueta de su cuerpo reflejada en el espejo. . el segundo
descubrimiento de su imagen especular mas tarde, alrededor de los dos años y medio, cuando
avierte, esta vez con amargura, que su imagen no es el, que existe una distancia irreducible entre
la irrealidad de su imagen y la realidad de su persona.

“Los padres del adolescente”, Rassial


El psicoanálisis muestra que entre lkos estatutos de madre y padre hay tanto una
diferencia biológica respecto a lo sexual y también una divergencia de valor: el vinculo de la madre
con el hijo es primero real, ya que el hijo es un pedazo despegado del cuerpo de la madre, por lo
tanto imaginario, es la madre quien sostendrá para el hijo la construcción del mundo exterior y de
su yo corporal; mientras que el vinculo del padre con el niño debe ser propuesto, introducido y
sostenido imaginariamente por la madre, es un vinculo primero simoblico.
Ser padre no es una cualidad intrínseca del ser humano; primero es una función, luego una
posición ocupada en relación a otro sujeto y modificada, incluso trastornada, cuando este otro
sujeto se transfroam de niño en adolescente y luego en adulto.
La adolescencia de los hijos, que para ellos es una crisis, será también crisis, necesaria,
para la organización familiar, obligando a los padres a reinventar su lygar, ya sea en relación con
otros miembros de la familia, con su conyuge, con sus propios ascendientes, o en relación a ellos
mismos. En efecto, les será necesario apoyarse sobre su cualidad de homre y de mujer, sin poder
contentarse de su posición de padre.
Los padres, entonces, deben separarse de lo que parecía una parte de ellos mismos, deben
efectuar ellos también un trabajo de duelo.
Psíquicamente, los padres están divididos entre lo que se podría denominar los padres de
la realidad, los padres conscientes, y los padres fantaseados, los padres inconscientes, que han
permitido la estructuración psíquica del sujeto.
El adolescente se ve confrontado a la separación entre la realidad de sus padres, que el
comienza a percibir como sujetos cualesquiera, con sus conflictos, sus limites, sus deseos, y los
padres ideales o idealizados en la infiancia que durante un tiempo han encarnado ese estatuto de
adulto prometido para mas tarde. ´por su parte, el resolverá ese hiato por medio de la eventual
invención de una novela familiar, soñando un origen fabuloso, o bien por la denuncia repetida de
esos padres decepcionantes que no responden jamás como es necesario a sus reinvindicaciones
mal formuladas, o por medio de cualquier otra proyección, de forma a veces persecutoria.

Lo que son los padres para el adolescente


El primer efecto de la pubertad es que el cuerpo del niño se transforma en un cuerpo de
adulto. Ese cambio de la imagen del cuerpo tiene multiples consecuencias: por un lado, para el
adolescente, lo que llaman “signos secundarios” (cambio de voz, pilosidad, crecimeitno de senos,
etc) son tanto o mas importantes que la madurez de los órganos genitales; por otra parte, el
adolescente debe efectuar un trabajo de apropiación o mas bien, de reapropiación de la imagen
del cuerpo tal como se había construido en la primera infancia alrededor de la época llamada del
estadio del espejo. En efecto, lo que en la adolescencia ggarantiza esta imagen del cuerpo, ya no
son la mirada y la voz de los padres, en particular de la madre, sino lo que verán y diran los
semejantes del adlescente y, sobte todo, las eventuales parejas del otro sexo.
En un primer tiempo, la pubertad puede ser vivida por el adolescente como una falta,
incluso como una enfermedad, cuyos signos serian, para la niña, el sangrado de las reglas y, para el
niño, las erecciones espontaneas y las poluciones nocturas. Pero, por el hecho de esta semejanza,
también será vivida, con frecuencia en un segundo tiempo, como una competición con los padres:
cuando el adolescente se apropia de los atributos del adulto, por una parte, sus atributos ya no
aseguran a los padres un suplemento del ser, un poder de mas, y a partir de allí el se opondrá a
toda autoridad que ya no se apoye sobre esta diferencia corporal; por otra parte, esta apropiación
esta próxima a una competición con el padre del mismo sexo o puede ser concebida de ese modo.
Además, existe un carácter decepcionante de los padres porque los adolescentes dan
cuenta de que éstos no están hechos de otra materia que la de ellos mismos, y ya no pueden ser
los referentes últimos, ideales, infalibles, tendrá dos conseucencias: primeramente, modificara de
forma radical la relación del adolescente con sus padres, el alcance y el estilo de sus demandas, de
sus quejas, de sus reinvindicaciones; esto además lleva a la existencia de otro como referente
ultimo que esta vez sea infalible y pueda garantizar con eficacia y de forma duradera al
adolescente su identidad.
Otra consecuencia de la pubertad esta en que, no solo el adolescente se convertirá en
adulto, sino que se convertirá potencialmente en un padre o una madre. Jo solo los padres son
cuestionados como adultos, sino que lo son también como representantes privilegiados e la
paternidad y la maternidad.
El autor pasa a abordar ahora el estilo de interpelación de los adolescentes con respecto a
los padres. Los padres formulan con frecuencia dos quejas concernientes a sus hijos adolescentes:
son insolentes y responden: ser insolente seria afirmar su soledad, incluso reivindicarla
extrayéndose del juego social, de lo que llamamos bienestar, el hecho de comportarse bien en
sociedad.
Y, respecto a los adolescentes que responden… un hijo que responde es quel que, en lugar
de permanecer en el lugar que le es asignado por el discurso de los padres, pronuncia una palabra,
una palabra de mas. Esto para los padres es insoportable porque, por una parte, se pone de
manifiesto que hay otros discursos posibles al discurso parentalm el cual pierde entonces su valor,
y por otra parte, porque el discurso de los padres se rvela frágil.
En ese diagolo difícil entre los adolescentes y sus padres, los unos y los otros descubren el
mundo que los rodea, sus propias dependencias, y cada uno, as u manera, se siente desbordado.
Razón por la cual apelar a un tercero.
Mas alla de la insolencia, el adolescente, al dirigirse a los padres, se pone a la vez en
posición de demandar, de contradecir y de imitar. Al mismo tiempo, inventara sin cersar nuevas
demandas, buscara y atravesara las ocasiones de contradecir a sus padres y, sin darse cuenta
siempre, los imitara.
Demandar. Solicitaciones repetidas del adolescente para recibir de sus padres tal objeto o
tal autorización. Lo que para el adolescente cuenta es que su demanda y su derecho a demandar
sean reconocidos como legitimos. Esta demanda va en el sentido dell trabajo de apropiación de si
mismo y del mundo que constituye el proceso de adolescencia.
Contradecir. El sentido de la contradicción corresponde en el adolescente a su exigencia
ilusoria de un discurso sin contradicción. Asi, el subrayara frecuentemente, incluso con
inteligencia, las contradicciones internas del dirscurso de los padres, entre lo aue ellos dicen y lo
que hacen, lo que han promovido y lo que so, etc.
Imitar. Imitar rige las relaciones filiares. Hay una estrecha semejanza entre los
adolescentes y no lo que son los padres, aquello en lo que se han convertido, sino aquello que han
sido en su adolescencia, lo que han soñado ser o han reprimido de sus propios deseos.

Que viven los padres de adolescentes


Debido a que la adolescencia de sus hijos exige de su parte un cambio de lugar, los padres
pierden las referencias de su propio yo, como las que han funcionado para elos desde el fin de su
propia adolescencia.
Los padres tienen entonces necesidad de un trabajo psíquico de reconstrucción de ese yo,
apoyándose a la vez en identificaciones que podríamos denomar pre-parentales y teniendo en
cuenta una nueva realidad exterior.
Por multiples razones, los padres son remitidos a su propia adolescencia: por una parte
porque sus hijos les muestran de un modo mas o menos deformado la imagen se su propia
adolescencia, donde pueden reencontrar esos sueños, ambiciones, deseos que tuvieron que
reprimir. Por otra parte, interrogados acerca de las funciones paterna y materna, conforntados a la
desintegración de la familia ampliada, se ven confrontados nuevamente a la cuestión de la
relación con sus propios padres. Finalmente, dado que el adolescente constituye el paradigma, el
modelo de todos los cuestionamiento sulteriores del yo: si la adolescencia es el primer momento
lógico posterior al estadio del espejo, de vuelta atrás y recapitulación, de reinicicacion de una
fundación de si mismo y de la relación con los otros, las crisis de la madurez seguirán e imitaran
fácilmente la misma via.

“Conceptos contemporáneos sobre el desarrollo adolescente, y las


indiferencias que de ellos se desprenden en lo que respecta a la educación
superior”, Winnicott.

¿enfermedad o salud?

La tesis principal

Mas confusión
En la adolescencia, los éxitos y fracasos del cuidado del bebe y el niño comienzan a ser
empollados. Luego, aparecen las recompensas de modo indirecto.

Muerte y asesinato en el proceso adolescente.


En la época de crecimiento de la adolescencia los jóvenes salen, en forma torpe y
excéntrica, de la infancia, y se alejan de la dependencia para encarminarse a tientas hacia su
condición de adultos. El crecimiento no solo es una tendencia heredada, es también un
entrelazamiento de suma complejidad con el ambiente facilitador. Los mismos problemas que
existían en las primeras etapas cuando los mismos chicos eran bebes o niños mas o menos
inofrensivos aparecen en la pubertad. Los problemas son intrínsecos en las etapas posteriores a la
pubertad.
Resulta valioso comparar las ideas adolescentes con las de la niñez. Si en la fantasia del
primer crecimiento hay un contenido de muerte, en la adolescencia el contenido será de
asesinato. En la fantasia inconsciente, el crecimiento es intrínsecamente un acto agresivo.
En la fantasia inconsciente total correspondiente al crecimiento de la pubertad y la
adolescencia existe la muerte de alguien. Mucho puede lograrse en el juego y con los
desplazamientos, y sobre la base de las identificaciones cruzadas; pero en la psicoterapia del
adolescente la muerte y el triunfo personal aparecen como algo intrínseco del proceso de
maduración y de la adqusicion de la categoría de adulto.
El punto central es la inmadurez del adolescente. La inmadurez es un elemento esencial de
la salud en la adolescencia. No hay mas que una cura para ella y es el paso del tiempo y la
maduración que este puede traer.
La inmadurez contiene los rasgos mas estimulantes de pensamiento creaor, sentimientos
nuevos y frescos, ideas para una nueva vida.
Los adultos no deben abdicar y darles responnsabiliades a los adolescentes que no les
corresponden, por mas que la quieran. Ellos deben ser inmaduros. Es lo que debe perder cuando
llega a la madurez.

Naturaleza de la inmadurez

El potencial en la adolescencia
Cambios sexuales, corporales, biológicos. La responsabilidad de la fantasia personal.
Fuerte propensión a la agresión. La tensión que experimenta debido a la fantasia inconsciente del
sexo y la rivalidad vinculadacon la elección del oobjeto sexual.

Construcción, reparación, restitución.


Al adolescente no le es posible saber hasta que punto el trabajo, dado su carácter de
contribución social, alivia el sentimiento personal de culpa, y por consiguiente ayida a redurcir el
miedo interior y el grado de tendencia suicida o de propensión a los accidentes.

Idealismo
Es una de las cosas mas estimulantes de los adolescentes.

Resumen
Resulta estimulante que la adolescencia se haga oir y se haya vuelto activa, pero los
esfuerzos adolescentes que hoy se hacen sentir en todo el mundo deben ser encarados,
convertidos en realidad por medio de un acto de confrontación. Esta tiene que ser personal. La
confrontación se refiere a una contención que no posea caracrteristicas de represalia, de
venganza, pero que tenga su fuerza propia.

“El desafio de la complejidad: redes y cartografias dinamicas”, Najmanovich

Los abordajes del paradigma de la complejidad nos permite considerar y aprovechar el


modo en que las distintas areas del saber y el quehacer humanos se afectan de multiples formas
fertilizándose mutuamente. Pensar “en red” implica ante todo la posibilidad de tener en cuenta el
alto grado de interconexión de los fenómenos y establecer itinerarios de conocimiento tomando
en cuenta las diversas formas de experiencia humana y sus multiples articulaciones. La red no
tiene recorridos ni opciones predefinidas. Las redes dinamicas son fluidas, pueden crecer,
transformarse y reconfigurarse. Son ensambles autoorganizados que se hacen al “andar”.
Atraviesan fronteras, crean nuevos dominios de experiencia, perforan los estratos, proveen
multiples itinerarios, tejiendo una trama vital en continuo devenir.
El paso de la perspectiva moderna al pensamiento complejo conlleva la necesidad de
gestar nuevas cartografias, y sobre todo nuevas formas de cartografiar. Los nuevos escenarios
contemporáneos que están emergiendo nos permiten pasar de una concepción estatica y aislada
del ser hacia una perspectiva en red; interactiva, dinámica y multidimensional. Se trata de un
movimiento capaz de dar cuenta del saber y del mundo en términos de redes poieticas, capaces
de producir y crear en y a través de interacciones transformadoras.

Del ser aislado al devenir entramado


En el enfoque de la complejidad que propone la autora, todo conocimiento es una
configuraicon actual del mundo producida en la red de interacciones e intercambios. El
conocimiento ha entrado en la era de la fluidez, al igual que nuestra experiencia en el mundo. El
dinamismo no se limita al mundo sino que nos incluye. En las redes dinamicas los vínculos no son
conexiones entre entidades preexistentes, sino que los vínculos emergen simultaneamente con
aquello que enlazan en una dinámica de autoorganizacion. Lo que concebimos como sistema,
partes y enlaces desde una perspectiva dinámica no tienen existencia independiente ni previa al
acto de conocer, como suponen los objetivistas.
Las nociones de red, configuración y organización desde los enfoques dinamicos, vinclulan
infinitas formas lo que las dicotómicas clásicas habían escindido y petrificado o evaporado. La
estética de la complejodad es la de las paradojas que conjugan estabilidad y cambio, unidad y
diversidad,, autonomía y ligadura, individuación y sistema. El pensamiento dinamico es interactivo,
lo que le permite constuir categorías como ser en el devenir, unidad heterogenea, autonomía
ligada a sujeto entramado, que se caracterizan por su no dualismo. En estas categorías los
opuestos conviven enredados de multiples formas y modos en un proceso de configuraicon activa
y temporal.
El autor prosigue a destacar aquellos supuestos básicos de esta concepción dinámica de la
organización y de las redes:
a. Las partes de un sistema complejo solo son “partes” por relación a la organización
global que emerge de la interaccion.
b. En ningún nivel encontramos “unidades elementales” aisladas, sino patrones de
interaccion en red.
c. La “unidad heterogenea” formada en y por la dinámica no puede explicarse por
sus comonentes.
d. El sistema es abierto en una congiguraicon activa profucto de su intercambio con
el medio, que no es un contexto pasivo sino un entorno activo.
e. Las partes no son unidades totalmente definidas en si mismas, sino que existen
como redes dinamicas.
f. El sistema dinamico surge de la interacion en multimples dimensiones de la
dinámica de redes.
g. El universo ya no es concebido como atomos en el vacio sino como una red de
interacciones, y por lo tanto la libertad no puede concebirse como independencia.
h. Las ligaduras con el medio son la condición de posibilidad para la libertad. La
flexibilidad del sistema, su apertura regulada, le permite cambiar o mantenerse,
con relación a sus interacciones con su ambiente.
i. Al tratar con sistemas complejos dinamicos en un mundo entramado no tiene
sentido preguntarse por la causa de un acontecimiento, pues es impoisble aislar
factores o cadenas causales lineales.
j. Solo podemos preguntarnos por las condiciones de emergencia, por los factores
coproductores que se relacionan con la aparición de la novedad que no solo
genera algo nuevo sino que reconfigura lo existente en tanto modifica la trama. La
emergencia, a diferencia de la causalidad, hace lugar al aconteicmiento y al azar,
rompe con la linealidad del tiempo y da cuenta del aspecto creativo de la historia.
k. Al surgir la organización a partir de una dinámica de intercambio no hay jerarquías
preestablecidas.
(mas en texto)

“Ser o estar adolescente”, Lerner

Ser o estar adolescente


El autor aborda el concepto de adolescencia como una “transformación pubertaria”, según
la cual se la determina a partir de la pubertad. Este enfoque pone énfasis en la diversidad de las
mutaciones endocrinas y morfológicas y la variación de su aparición, que también esta regida por
agentes socioeconómicos e históricos, por lo cual implica la interaccion entre lo biológico y lo
social. Otra mirada es la que ve a la adolescencia como una etapa del desarrollo, presentándola
como una zona de transito del sujeto siguiendo una línea evolutiva. Otras veces se las presenta
como un “pasaje a la adultez”, un periodo de transición entre la infancia y la adultez.
El autor no piensa de esta forma: dice que el ser humano esta en constante
transformación y reflexión acerca de su vida. No hay un sujeto estatico, que inicia una tarea o fase
y finaliza otra, sino que cada transito abona los distintos momentos de su devenir como una
especie de telescopaje. El sujeto siempre esta inacabado.
Una atractiva proposición es la de abordar la adolescencia como producción socio-
historica. La adolescencia seria un fenómeno propio de determinadas formaciones sociales
occidentales, específicamente de las sociedades capitalistas urbanas. Tambien seria un efecto de
su modelo económico de producción y distribución del trabajo..
La mayoría de las posiciones describen la adolescencia como si este concepto abarcase la
totalidad de los casos. Deberíamos hablar de “las adolescencias”, ya que son distintos sujetos que
están en ebullición, con diferentes preguntas en torno a su cuerpo, con necesidades diversas que
pasan no solo por lo biológico o lo psicológico sino también por lo económico, con diferentes
interrogantes sobre lo afectivo y lo emocional, inserto cada cual en una cultura o subcultura que lo
determina, lo construye, lo marca. En fin, habrá tantas adolescencias como adolescentes, cada
cual con su propio trayecto identificatorio.

La adolescencia: crisis o duelo.


El adolescente se encuentra en un periodo de camibios e interrogacones a nivel físico,
emocional, afectivo y sexual, y demanda soportes y recursos psicológicos y sociales para
proponerse ciertas metas, como la elaboración y construcción de su identidad o, mejor, de su
“proyecto identificatorio”.
Se suele hablar de la crisis de identidad en la adolescencia. Concuerdo en que hay crisis en
tanto es un etapa generalmente tumultosa de la vida. En tanto producción cultural, la
adolescencia interpela explícitamente la condición de ser expresión de la cultura, escenificando el
nacimiento del sujeto adulto. Y es en esta construcción que va deviniendo, en este nacimiento,
donde hallamos a los adolescentes en crisis, porque hay cambio, hay o no oportunidades de
establecer un proyecto identificatorio que les consrtituya un ideal del yo que no repital “el
modelo” parental qaue hasta ese momento prevalecía y del cual se quieren apartar.
Hay duelo por lo que ha quedado atrás, la infancia, con sus certezas y sus figuras
parentales protectoras, que funcionaban en muchos casos como ideal del yo. Repentinamente el
sujeto se encuentra con un yo convulsionado, sus ideales tambalean y tiene que salir
imperiosamente al encuentro de otros que los reemplacen. El cuerpo también ocupa un lugar en
este terremoto de la identidad: adiós al cuerpo infantil y aparición del cuerpo adolescente.
El adolescente se halla inmerso en la interpelación de su reordenamiento biológico, que lo
lleva a una muerte y duelo de su cuerpo y de su universo infantil, pero con la expectativa de un
nuevo nacimiento y el atractivo de conquistar un universo distinto.
El sujeto es convocado a ocupar otro lugar y deberá ejecutar el pasaje doloroso, que es un
duelo. Duelo por la dimensión de perdida y de abdicación. Duelo por crecer. Y este pasaje no es
armonioso, ya que crecer y saltar a otra etpa aes romper, es desgarrar la construcción identitaria
que hasta ese momento le resultaba tan firme.
Desde el enfoque familiar, el hecho de desar de ser niño no carece de secuelas para los
padres, ya que la adolescencia entraña, entre otras cosas, la puesta en cuestión de las
identificaciones edipicas. Justamente, se buscara con pasión renovar estar identificaciones. Se
abre una brecha generacional, una fisura que aparta de manera profunda al adolescente de sus
padres.
El aislamiento en el cuarto, la incomunicación, la complicidad con los amigos, los
ocultamiento y los secretos, los amores y su busqeuda operan como factores destituyentes de los
padres como únicos referentes. Los padres dejan de ser para el niño el crentro y garantía del
universo. Las figuras parentales son removidas de su lugar y esta sustitución es dolorosa, ya que
los padres se resisten a renunciar a ceder el lugar del ideal. De ahí que las rupturas y
enfrentamientos en el seno familiar correspondan a un proceso doble: por un lado, el adolescente
precisa de destruir el podio en el que se hallaban sus padres hasta entonces; por otro, los padres
oponen resistencia a dicha destitución. Agregamos que la destitución parental, aunque necesaria,
deja al adolescente inmerso en una profunda soledad.
Otro escenario frecuente es que el adolescente cuestione la ley de sus padres, la ley
escolar y social en general; todo enunciado, norma, regla, criterio moral que se origine en el
mundo de los adultos genera en el oposición. El cambio de enfoque del adolescente en relación a
la ley tiene consecuencias en el mundo exterior, en la familia y en la escuela, en la calle, en la
cultura y en el contexto sociohistorico. La actitud central con la que el adolescente cuestiona la
ley es la trasgresión.
Todo lo descrito indudablemente trae aparejado multiples duelos. El mundo de normas y
leyes que hasta ese momento enmarcaba la vida deja de custodiar al yo, los ideal que hasta
entonces indicaban el rumbo de sus prouectos se conmocionan. La renuncia a ese mundo que se
cobijaba y establecia el marco contenedor no puede tramitarse sino como un duelo. Y aunque
duela, contingente e ineludiblemente, aunque haya crisis o la desencadene, llevara al cambio, al
desarrollo, a generar su propio proyecto.
Los adolescentes y sus familias están en un proceso de reorganización y reestructuración
de sus funciones y posiciones que gira alrededor de estas sacudidas identitarias, y con frecuencia
la sociedad y la institución escolar los abadona y no tiene respuestas para ellos, o bien responde
habitualmente con la represión violenta, que genera inhibición, lo cual tal vez genere mas
violencia y vuelva infranqueable la grietsa entre educando y educante. Esto ultimo ubica al
adolescente comovictima de un proyecto formativo que, por carecer de toda norma, lo niega o no
lo reconoce como sujeto.

El yo en la adolescencia: narcisismo, especularidad, trauma, intersubjetividad.


El yo se desarrolla, se diferencia y se amplia en un incesante suceder e inserto en un tejido
familiar, relacional y socio-historico determinado. Adquirida mayor o menor integración de
cohesion de acuerdo a como fueron sus inicios, sus comienzos, los vínculos tempranos con su
medio ambeinte.
Fue Winnicott, dice, quien advirtió acerca de la importancia de la dependencia con otro
significativo: el objeto maternante para inscribir las bases del desarrollo del yo; que aunque en
general es la madre, puede cumplir sus funciones un sustituo. Manifestó con claridad que resulta
inconcebible pensar al infante separado de la madre, y que solo se lo puede concebir en términos
de bebe-objeto maternante. En esos momentos de dependencia absoluta es donde se fundan las
bases del desarrollo del yo, de lo que devendrá ser uno, ser persona, de ir siendo uno mismo, lo
que implica una idea de continuidad, de encadenamiento, de proceso, de proyecto.
En base a las necesidades tempranas, el autor destaca fundamentalmente la necesidad de
especularidad, cuya satisfacción es esencial en la constitución del yo. La demanda de ser reflejado
estará siempre presente en la vida y cumplirá un papel central en el afianzamiento yoico y en el
desarrollo del narcisismo trofico, pero con distintos grados de “urgencia”, según como hayan sido
cumplimentadas las etapas iniciales del desarrollo en relación con esta necesidad. En los
adolescentes, la función de especularidad que antes desempeñaban los padres deja de ocupar el
centro de la escena, y hasta se rechaza lo que en este sentido provenga de los progenitores o del
mundo de los adultos en general. En este periodo, los objetos especulares se buscaran en los
pares, en los otros significativos a quienes se inviste.
Hay que pensar en la creación de la subjetividad siempre en función de la interaccion con
otro, con su contexto, o sea, en la intersubjetividad.

Identidad y adolescencia
Cuando se va disolviendo el mundo infantil plagado de certezas y se comienza a transitar
en un mundo de incertidumbres y vacilaciones, en medio de su búsqueda de identidad, el
adolescente erige su yo de un modo frágil e inestable. Y, paralelamente, esta situación lo lleva a
sujetarse a todo aquello que lo aparta de la incertidumbre. Al esfumarse las certidumbres, busca
ampararse en cualquier cosa para agenciarse una identidad, y en ello se juega toda su
subjetividad.
El adolescente tiene como faena psíquica central el rastro de su identidad o, si se quiere, el
treazado de su “proyecto identificatorio”, aunque este sea cambiante. La constitución de la
identidad contempla la idea de intersubjetividad y la concibe como una condicon para alcanzar
una subjetividad mas rica.
Agenciarse la sensación de “yo soy”, y la consecuente relación con “yo era” y “yo sere”, es
un trabajo psíquico que se despliega enlazado con el mundo.

La adolescencia en la contemporaneidad: las tribus, los ni-ni, las generaciones X, Y y Z.


En la actualidad nos topamos con lo que podría llamarse el adolescente “navegador”,
dotado de una consistencia yoica que lo habilita a trajinar por el mundo desplegando y
expandiendo diferentes potencialidades creativas. Al decir “navegar” el autor se refiere a que la
sola presencia en el mundo justifica la vida: el puerto donde se atraque no tiene mucha
importancia, el programa radica en trasladarse, buscar, indagar.

“Del cuerpo-maquina al cuerpo entramado”, Najmanovich

El texto hace referencia, justamente, al pasaje de pensar al cuerpo como limitado a lo


biológico, lo vivo a lo físico y otras cosas a lo mecanico, un pensamiento reduccionista, a un nuevo
enfoque que sienta las bases para un pensamiento dinamico capaz de dar cuenta del cambio en
sus multiples dimensiones: la complejidad.
Los mapas conceptuales del mecanicismo ya no resultan utiles. Se necesitan nuevas
cartografias y nuevas formas de cartografiar: debemos buscar otros instrumentos conceptuales y
crear nuevas herramientas que nos permitan movernos sobre territorios fluidos. En la
contemporaneidad la complejidad se enlaza con la metáfora de la red, con la idea de interaccion,
con la perspectiva de la autoorganizaicon.
Las cosas no significan nada en si mismas ni por si mismas, sino que adquieren sentido en
la corriente de la vida. Aquello que podemos pensar respecto de la corporalidad no es
independiente de nuestra experiencia humana es algo que nos ocurre y que discurre en el ámbito
social, que narramos a otros y a nosotros mismos en un lenguaje, algo que nos sucede en el
espacio-tiempo en que nos toca vivir y que cobra significado y valor únicamente en función de
nuestra historia sociocultural. El cuerpo es nuestra sede de afectación y el territorio desde el cual
actuamos. No es solamente un cuerpo físico, ni meramente una maquina fisiológica, es un
organismo vivo capaz de dar sentido a la experiencia de si mismo.

El sujeto carnal: afectos y efectos en un mundo vincular


La autora toma una perspectiva vincular, a partir de la cual el cuerpo no existe
independientemente de nuestras vivencias, creencias, experiencias, no flota inmaculado en la
eternidad, sino que es forjado en la historia humana que transcurre siempre en un ambiente
poblado de otros seres y entidades con los que estamos profundamente entramados.
El cuerpo es la indispensable condición de posibilidad de nuestro ser en el mundo, de
nuestra humanidad, de nuestra animalidad, de nuestra organización social.
La corporalidad es el territorio de nuestra autonomía, pero de ninguna manera implica
esto una independencia absoluta. Se trata de una autonomía altamente ligada, de una autonomía
en la relación. Esta forma de concebir la corporalidad supone que participar de ella implica
también pertenecer a la temporalidad, ser en el devenir, existir en y por una dinámica de
intercambios y trasnformaciones.
Desde la perspectiva vincular, el cuerpo es su propia historia.
Nuestro cuerpo se gesta en la biología, se desarrolla en el intercambio permanente de
materia y energía con su medio ambiente, se forja en los encuentros afectivos con nuestros
congéneres y otros seres, crece en un mundo sentido, adquiere los habitos de los juegos
relacionales de nuestra peculiar cultura. El cuerpo humano es aquella organización que en su
complejidad ha manifestado nuevas opciones en el mundo de la vida: la autoconciencia y el
inconsciente, la razón y la imaginación creadora, el lenguaje y la pasión. Dotar de sentido a la
experiencia es el eje vertebrante de nuestro devenir en el mundo.
Accedemos solo a lo que nuestra conformación humana en activo intercambio con el
entorno nos permite.

“Del pictograma al pentagrama”, Cordova

LO PUBERAL LO ADOLESCENTE
- Crea los materiales sobre los que trabaja lo - Desexualiza el exceso de sensualidad,
adolescente. enterneciéndolo mediante los procesos de
- Es la presencia ardiente de la sexualidad elaboración, sublimación e idealización de esas
genital que activa la interpretación apres-coup representaciones edipicas incestuosas,
de la sexualidad infantil, creando fantasias de seducción infantil creadas por
representaciones incestuosas y fantasmas de interpretación apres-coup, desde lo genital
seducción, materiales que “arden como el puberal.
viento caliente del desierto”, que queman, - Enternece el plus de sensualidad de lo
seducen y marcan ese cuerpo en transición. puberal, lo enternece.
-El cuerpo púber seduce al cuerpo todavía niño. - Expresa renuncia definitiva que posibilita
-Habita en el centro de los procesos dejar atrás las arenas calientes de una infancia
adolescentes. revisitada e interpretada, en un movimiento
-Es el exceso de sensualidad que se derrama psíquico apres-coup por la nueva sexualidad
inundando cuerpo y psiquismo, creand genmitalidad puberal.
representaciones incestuosas que dan sustento - habilita el trabajo de histrizacion de la infancia
a una intensa actividad autoerotica. y la elaboración creativa del duelo por el objeto
- En su versión originaria,e s una tendencia mendiante procesos saludables que conducen
antiseparadora por excelencia, búsqueda de la a la creación/hallazgo de objeto propuesta por
repetición de toda experiencia de Grassi.
complementariedad. - Es una fuerza separadora, promueve la
búsqueda de lo nuevo; es tendencia a la
creatividad.
- El amor adolescente requiere de cierta
coalición de la ternura y la sensualidad en un
mismo objeto.
Lo puberal y lo adolescente son procesos diferentes pero lindantes y complementarios, que
actúan de modo simultaneo.
Se juega siempre un proceso dialectico entre la fuerza fusionante de lo puberal y los trabajos
separadores de lo adolescente. Lo puberal activa el Edipo genital, lo adolescente permite su
elaboración. Lo puberal permanece cercano al yo ideal como anhelo narcisista de retorno; lo
adolescente crea las condiciones para la primacia del ideal del yo,c omo proyecto identificatorio y
horizzonte que señaliza un posible camino de salida para el sujeto adolescente.

Lo originario puberal en su expresión mas tajante

Gutton plantea la idea de una unidad narcisista originaria puberal. “su modelo es, por
supuesto, el narcisismo originario entre madre y lactante cuando intentan prolongar la simbiosis
del embarazo…”. “la pubertad, trauma narcisista por excelencia, derrumbe la omnipotencia
infantil, ofrece al mismo tiempo una solución sexual para su curación”.
En los primeros tiempos,a ntes del acceso al otro como alteridad, lo puberal por lo
originario es empuje a la búsqueda del genital complementario, a la restitución de la fusión zona-
objeto complementario, ahora en relación con el genital del otro sexo. Pene y vagina son ahora
“fusionalmente complementarios” en la fantasia como otrora lo fueran pecho y boca.
Tanto el objeto como la pulsión deberán ser excorporizados. Por el supuesto de la
complementariedad de los sexos y la búsqueda del restablecimiento de la unidad narcisista
originaria, ahora puberal, es preciso que la figura parental no se presente seductora e
inadecuadamente solicita con el hijo/a. en este caso dificultaría el desasimiento y la exploración
de un afuera que demarque un recorrido pulsional suficientemente alejado.

Los trabajos adolescentes a partir de los materiales puberales


En lo adolescente predomunan las marcas de la sublimación y la creaividad, la
desexualizacion de lo genital incestuoso y, finalmente, cierta idealización del objeto amoroso en
proceso de creación y siendo hallado.
El adolescente va creando y hallando el objeto con elementos nuevos y retazos
significantes de objetos pertenecientes a su pasado.
Es un trabajo de exploración e inscripción del otro sexo en una dimensión amorosa de
alteridad.

“Metamorfosis de la pubertad: el hallazgo (?) de objeto”, Grassi

Lo puberal-lo adolescente ante (s) (d)el hallazgo de objeto

Freud y el hallazgo
Freud dice que el psicoanálisis enseña que existen dos caminos para el hallazgo de objeto:
en primer lugar el que se realiza por apuntalamiento en los modelos en la temprana infancia y en
segundo lugar el narcisista.
Grassi agrega una mixtura de ambos, otra forma de encuentro que se adiciona a las
mencionadas “por la alteridad del objeto, por su ajenidad y extrañeza, extraño por lo que conlleve
de no conocido”.
Freud, además, aclara que el hallazgo es un reencuentro: “la pulsión tenia un objeto por
fuera del cuerpo propio: el pecho materno. Lo perdió solo mas tarde, quizá justo en la época en
que el niño pudo formarse la representación global de la persona a quien pertenecía el órgano que
le dispoensaba sastisfaccion. Después la pulsión sexual pasa a ser regularmente autoerotica y solo
luego de superado el periodo de latencia se reestablece la relación originaria. No sin buen
fundamento el hecho de mamar el niño del pecho de su madre se vuelve paradigmático para todo
vinculo de amor. El hallazgo (encuentro) de objeto es propiamente un reencuentro.

Hallazgo no es encuentro
El autor dice que hallazgo es descubrir con ingenio algo hasta entonces no conocido, por lo
cual hallazgo no es tanto la acción de encontrar. Si el encuentro de objeto es un hallazgo, lo es
porque el proceso estuvo comandado por la creatividad del sujeto.

Hallazgo y re-encuentro
“La pulsión tenia un objeto por fuera del cuerpo propio: el pecho materno. Lo perdió solo
mas tarde, quizá justo en la época en que el niño pudo formarse la representación global de la
persona a quien pertenecía el órgano que le dispoensaba sastisfaccion”.
El bebe se encuentra con un objeto exterior a si, fuera de su cuerpo, aunque el no
experimente nada aun de la exterioridad del mismo, y esa exterioridad hace al objeto “no-yo
ajeno”. Que en los comienzos, esa ajenidad esta al servivcio del bebe y de la ilusión de objeto
propio, creado, depende de que la función materna sea suficientemente adecuada. Se reduce asi
la exterioridad del opbjeto y pictograma de fusión mediante, la pulson pasa a ser regularmente
autoerotica; el objeto toma cuerpo en el niño.
Luego, y una vez que alcanza la representación del objeto por fuera de la propia
corporeidad, se producirá la elección infantil de objeto.

El cuerpo puberal
Llegada la pubertad, la sexualidad (la genitalidad) ya no puede ser diferida. Una vez
instalada la barrera de la prohubicion del incesto y los diques morales que hacen al sujeto de la
ética y la busqeuda de alteridad propia de la pulsión genital con la (im)pulsión puberal, al
psiquismo le urgen trabajos específicos. En esta búsqueda, la actividad creativa por parte del
sujeto, lo inesperado, lo no conocido, lo imprevisto, distancian de todo lo que puede remiri al
prefijo “re” a términos que aparecen ligados como la repetición, a la vuelta de lo mismo, a la
anulación de sus diferencias. Reencuentro, repetición, revuelta. La secuencia repetición-hallazgo-
creatividad-diferencia, se va estableciendo. De lo “re” del encuentro se deriva hacia lo “neo”.
Hallazgo es también encuentro inédito, producción de una combinatoria novedosa, original.
El cuerpo puberal, con sus reorganizaciones y neo organizaciones, requiere de nuevas
inscripciones y nuevos circuitos pulsionales.
Le urge el hallazgo-creatividad-encuentro de objeto exterior a si, en simultaneo con que el
objeto exterior no reduplique un rencuentro ya producido, sino que inscriba como
“acontecimiento que diferencie” lo que esta investido por el niño y la familia de lo que “deviene
nuevo” y que esta in-vistiendo como obra propia, por fuera del cuerpo y lo familiar. Le urge la
creación, re-creacion, re-presentacion de objeto y espacio transicional, la frontera, el borde.
Se reencontraran en el objeto rasgos de aquellos bocetos de infancia pero hallazgo es
fundamentalmente nueva inscripción e inscripción de lo nuevo, “creatividad propia”, por fuera del
cuerpo familiar. El cuerpo requiere de nuevas inscripciones con el objeto que es reinventado en la
alteridad, se adiciona asi el otro modo de elección por alteridad y radical diferencia subjetiva del
objeto.

Paradoja y cuerpo
Ante los cambios corporales, el sentimiento de extrañeza asociado al cuerpo puberal, la
perdida de los reparos y los limites corporales llevan al adolescente a tratar su cuerpo como un
“objeto extraño, externo”. Este cuerpo tratado como ajenidad y el uso de defensas paradojales
que supone traen resonancias en dirección de la autodestructividad y el masoquismo. En este
sentido, ha sido señalada la función del cuerpo como objeto subjetivo: pantalla donde dirigir
mociones pulsionales con sentimientos de odio y agresividad, lo que libera a las representaciones
psíquicas del objeto, los padres aun idealizados de pulsiones destructivas. Este trato paradojal del
cuerpo (erógeno) y de la yoidad inscripta en el mismo trato como ejanidad tan común en la
adolescencia abre a procesos de identificación-desidentificacion. Viejas e históricas identifiacione,
inscripciones reunidad en el cuerpo infantil-niño ideal-padres de la infancia. Idefntificados en el
cuerpo del niño, las caídas de los objetos de la infancia no se producen sin un pasaje por lo
corporal, porque las identificaciones de los objetos inscriptos en el cuerpo son procesos de
inscripciones-reinscripciones-transcripciones de lo corporal por la complementariedad zona-
objeto.
Los conceptos de originario y originario puberal abren perspectgivas donde situar la
problemática del objeto inscripto en lo corporal y sus tratos. Si los cambios corporales toman
importancia con relación al hallazgo de objeto es porque “las reestructuraciones objetales y
narcisistas encuentran su origen en las capas mas profundas del inconsciente inscriptas en la
máxima proximidad de lo somatico”. Son las inscripciones pictogramaticas.
Por el trabajo de lo originario puberal, la pulsión busca el objeto inscrpto en el propio
cuerpo erógeno.
La elaboración psíquica de lo originario puberal transforma la búsqueda de objeto
acoplado al cuerpo propio. Trabaja el autoerotismo produciendo la excorporacion del objeto. El
objeto parcial-complementario se reordena hacia el objeto exterior, lo pregenital deviene
paragenital.
Por lo originario puberal, a la hora del hallazgo de objeto, lo originario puberal repite y
busca que en el objeto se reinvista al yo y reduplique la mismidad. Su elaboración es trabajo de no
igualación, no identificación de la propia yoidad en el objeto, búsqueda de la alteridad corporal
subjetiva en el objeto.
Pero también, lo originario puberal insiste y nuevamente busca repetir los modelos vividos
ya conocidos, investidos lo largo de la historia de las identificaciones corporales, incestuosas
familiares. Elaboración de lo originario puberal de no repetición en el hallazgo de objeto, de
identificaciones infantiles familiares. Búsqueda de lo altero en un espacio extrafamiliar.

“La creación del cuerpo adolescente”, Cordova.

Introducción
Con la irrupción de la pubertad en la escena infantil, se producen transformaciones que
serán tramitadas e integradas en el entretiempo de la sexuacion. El encuentro de la psique con el
nuevo cuerpo y su genitalidad produce un trabajo de inscripción que se expresara como proceso
de crecimiento en dirección de la integración psicosomática y la subjetivación.
En cierto modo, el cuerpo infantil deviene parcialmente soma, territorio inexplorado que
impone al psiquismo su “in-corporacion” mediante trabajos de inscripción del cuerpo genital en un
proceso de integración psicosomática. Para adueñarse de este cuerpo ahora genital, el
adolescente deberá crearlo y crear-se como tal, en un trabajo de apropiacion subnjetiva,
propiciado por el encuentro intersubjetivo con el otro no familiar.

El nacimiento del cuerpo en los albores de lo originario


El autor denomina “corpsi” a la constitución del cuerpo como integración psicosomática,
como cuerpo psíquico/erógeno. El cuerpo en sus inicios es un soma, la estructura organica del
viviente.
El soma del infans es representado anticipadamente como sombra hablada. Se lo designa
con un nombre, se lo sueña y desea dotado de atributos imaginarios que aun no porta. La madre,
durante el proceso de “gestación psíquica”, va construyendo un “entramado de base”.
Antes de nacer, el viviente “anidara el psiquismo materno”, en un tejido representacional.
Luego será “in-vestido” con los primeros envoltorios corporales. El viviente advendrá a la
condición de infans a partir de ese encuentro humanizante que configura lo que Laplanche
denomino como “situación antropológica fundamental”, caracterizada por una asimetría madre-
hijo que deviene estructurante.
El infans recibe el baño del lenguaje del Otro materno, quien con sus sonidos, olores,
imágenes y texturas corporales, su voz, la mirada, las caricias, los besos, la alimentación y sus
cuidados dirarios va trazando en ese cuerpo naciente una geografía erógena y activando
libidinalmnete las superficies, territorios orificios y bordes corporales. La pulsión es convocada por
la sexualidad inconsciente de la madre, quien colabora para trazar los causes y bordes que se
ofrecerán como vías alternativas para derivar y contener la excitación que ella misma provoca.
En este tiempo fundante, el cuerpo psíquico se va constituyendo en el doble encuentro
originante con el propio cuerpo y los procesos psicosomáticos maternos. Las representaciones de
lo originario van a materializarse por medio de pictogramas, que van a inscribir la zona con el
objeto complementario, ambos fusionados, unidos.
El cuerpo es inicialmente vivenciado por el infans como fragmentado y desarticulado. La
representación narcisista unificada del cuerpo del yo se construye en un movimiento anticipatorio,
a partir de la identificación con la imagen especular del otro en el estadio del espejo. Luego,
devienen las identificaciones oriignates del o ideal y el ideal del yo a través de las operaciones
estructurantes.

La creación adolescente del cuerpo genital


Con la llegada de la pubertad, el cuerpo infantil se trandforma abruptamente en un
terrotiro invadido y fobernado imperativamente por la sexualidad genital, que estalla con la nueva
oleada pulsional en las playas de la infancia. El cuerpo erógeno se genitaliza, la sexualidad se
interconecta por sus multiples vías, algunas de ellas ya trazadas en la infancia e inhibidas en la
latencia.
El naciente cuerpo puberla late con inusitada frecuencia, entre los restos del cuerpo del
niño tomado ahroa por la sensualidad genital. El cuerpo se trasnforma en un extraño heterogéneo
para la psique. El resultado de esta mutacion es un “cuerpo-soma”, un territorio a explorar.
Lo que debe hacer el púber es entrelazar ese real corporal con las dimensiones imaginaria
y simbolica, lo que le permitirá la asunción de una imagen del cuerpo unificada y estable. El
espejo, inicialmente corporizado por la mirada significante materna, es ampliado luego por el
juego de miradas familaires, pero llegada la pubertad, el grupo familiar debe ceder su supermacia
y dar liugar a la creación de otros grupos y otros espejos.
La función del espejo generacional adquiere, entonces, una importancia decisiva. Podemos
concebirlo como un espejo versátil y polifacético que va configurando una imagen re-unificada del
cuerpo por medio de contactos corporales, miradas, gestos, modismos verbales, musicalidades,
modas y rituales, entre otras trazas significantes epocales utilizadas por los adolescentes.
Estos encuentros significantes con los otros tienen también la función de posibilitar el
trazado de un “circuito pulsional intersubjetivo”, cuyo recorrido excede el propio cuerpo y el
cuerpo familiar. Este circuito facilita la operación de des-investir genitalmente el cuerpo
incestuoso parental para poder desairse de el, enlazando la pulsión a ese circuito que favorece la
socialización adolescente del “excedente sensual puberal” que inunda el psiquismo.
El cuerpo propio genital se ira crenado en la adolescncia, mediante las inscripciones e
identificaciones resultantes de los encuentros con el “otro cuerpo” y con el cuerpo genital de los
“otros” en una dialéctica constituyva del si mismo y la alteridad.

“La pubertad y el acontecimiento adolescente”, Moreno


La pubertad es el tiempo en el que, desde cambios en el cuerpo y mutaciones del discurso
que envuelve al púber, hay verdades que comienzan a insistir por inclusión. El discurso infantil no
es capaz de incluir ni de excluir esa verdad que insiste. La pubertad es una disrupción.
El emergente perturbador es el motor de la pubertad, y con eso debe hacerse algo. Y es
difícil porque las marcas suplementarias capaces de transformar la pubertad en el acontecimiento
adolescente deben cumplir al menos con dos requisitos aparentemente contradictorios:
a. Contener algunas trazas significativas de la historia infantil, es decir, de algún
modo relatar algo de lo infantil previo.
b. Ser suficientemente diferentes de esas trazas como para que puedan
metaforizarse y generar excesos suplementarios capaces de albergar los sentidos
del sujeto adolescente que advenga.
De modo que se requiere que el elmento nuevo pertenezca y no pertenezca a lo histórico.
Que se produzca un corte pero que este no anule la posibilidad de construir una historia que tenga
cierto viso de continuidad.
La colision entre las “verdades” puberales y la estructura infantil puede producir entonces
diferentes decursos probables de los que menciona tres: lo puberal puede configurar un
“acontecimiento”, una “catástrofe” o una “detención”. Acontecimiento, catástrofe, detención: en
este orden se las analizara a continuación.
1. Acontecimiento nomina un cambio radical que no puede ser reducido a sus
antecedentes. Siempre los excede. Si esto sucede es porque lo nuevo perturbador
ha encontrado marcas efectivas capacdes de trandformar las cosas en un antes y
un después de que el acontecimiento ocurre, lo que configurara un quiere, una
discontinuidad en su historia sin que esa disrupción descalabre al nuevo estado, el
de la adolescencia que adviene. La adolescencia implica, entonces, un
acontecimiento, un cambio suplementario de la estructura que condiciona al
individuo, un cambio de discurso y de situaciones donde transcurre la sexualidad
llamada sexualidad adolescente o adulta. La verdad puberal hace agujero en el
saber infantil, y la nominación de esa verdad es el acontecimiento adolescente.
2. El segundo decurso posible de lo puberal es que su emergencia genere una
catástrofe. En este caso, la insistencia de la fuerza perturbadora no logra
inscripociones que la hagan admisible. Los intentos de suplementar no son
capaces de perdurar, simplemente destruyen en parte lo existente y producen una
caída de la estructura anterior y un invento llamado delirio con la intención de
recomponer las ruinas. Podrá pensarse el devenir catastrófico de la adolescencia
como un colapso producido por marcas que no han logrado circular en nuevas
configuraciones no delirantes, ni se han ligado con lo anterior, lo han arrasado.
Suele producirse un exceso que pretende envolver y dar cabida a los retazos de lo
fragmentado en forma delirante.
3. Tercer decurso posible del encontronazo puberal: que la irrupción de lo
perturbador detenga un genere un impasse en el proceso. En este caso, lo
emergente perturba pero al no inscribir marcas capaces de transmutar la
estructura, no produce nada radicalmente nuevo, solo genera replicas de lo
sintomático infantil apenas difeecniadas por rasgos adolescentoides. Los excesos
que insisten cargan y se alojan en lugares previamente disponibles, los propios de
lo infantil, por lo que el discurso y las significaciones infantiles perduran y obturan
las eventuales soluciones creativas.

“Los ritos del pasaje adolescentes”, Moreno


(texto)

“Condenado a explorar”, Waserman

Al autor, la exploiracion le parece un buen termino para dar cuenta del devenir
adolescente.

¿Por qué la exploración?


La exploración conduce al reconocimiento del si mismo y del mundo. En el mundo se
cruzan la expedición y la adolescencia. Dice que cuando se desata la pubertad, no es el empuje
hormonal aquello que da cuenta de todo el proceso que se inicia, no se esta solo frente a la
búsqueda de la satisfacción de la sexualidad apremiante: se esta ante la llamada del mundo.
El adolescente ya no se contenta con la casa familiar por mas comodidades que le brinde.
Busca mundo.

El contexto bibliográfico
La propia vida se edificara según los resultados de la exploración y no antes de ella o sin
ella. El proceso de investidura es conseucneica o coincide con un proceso de exploración.
El autor toma al trauma puberal como aquello que condena al sujeto a explorar. Se situan
en un mismo nivel de causa tanto el trauma como el deseo. Los dos le plantean una exigencia de
poner en movimiento su cuerpo y su mente. La exigencia exploratoria le viene tanto de la
metamorfosis de su propio cuerpo, del cual debe apropiarse, y también le viene del medio social,
que lo expulsa del protectorado donde residía bajo la protección de sus padres y lo condena a
buscar su propio cobijo en el amplio mundo, fuera del hogar paterno. El propio cuerpo se torna
insuficiente, hay que salir a explorar fuera de el.

“EL hallazgo del objeto”, Waserman

El autor diferencia dos procesos, dos campos exploratorios:


1. La búsqueda y encuentro de la cavidad excitadora de la zona genital (designado
como objeto parcial). Esta debe ser hallada en la mujer y construida su
representación. Este camino esta lleno de inconvenientes yu peligros. Este
hallazgo de objeto se hace primero ne la fantasia y allí sigue un recorrido, donde
encuentra un goce ilimitado y alucinado. Esta necesidad del hallazgo de objeto
condena al sujeto también a una exploracon del mundo, porque ese objeto no
puede ser compensado duficientemente por una parte del propio cuerpo. En ese
encuentro con el otro es donde, probablemente, se insvriba un nuevo pictograma
vinculado al nuevo cuerpo ahora re-genitalizado. Ese nuevo pictograma necesita
del mundo, de la experiencia concreta del contacto.
2. El objeto total. Freud lo ubica bajo el dominio psíquico, el objeto que se ha venido
construyendo desde la mas temprana niñez uy cuyo retorno anhela.
Freud dice que el sujeto debe hallar un objeto adecuado para sus nuevas posibilidades
sexuales. El objeto que debe buscar es el objeto perdido. Lo paradojal es que se trata de un objeto
que nunca tuvo y que nunca se dara otro encuentro. Pero es esa búsqueda, una búsqueda de lo
antiguo en lo inédito, lo que dispara, obliga, condena, al sujeto a la exploración. Como dice Grassi,
el termino hallazgo hay que pensarlo como alog que se encuentra sin buscar, al azar,
inesperadamente.
Freud afirma algo para el autor sorprendente, dice que lo que impulsa, sobre todo, al
adolescente a explorar es el peligro de la consumación del incesto. El adolescente se autocondena
al destierro. Es decir que esa exploración obligada tiene, para Freud, una parte de huida frenetica
que el mismo sujeto se impone. Buscando el objeto perdido, debe impulsarse lo mas lejos posible
de el. En ese alejamiento exploratorio es donde es posible encontrar el objeto adecuado. Esta
trayectoria exploratoria tiene un recorrido probable que depende de los procesos previos de la
primera elección objetal en el acné de l ainstalacion del Edipo.
Este recorrido explroatorio de la búsqueda de objeto tiene un momento imaginario,
masturbatorio, donde los objetos incestuosos y nuevos desfilan incesantemente y todas las formas
de la sexualidad son exploradas; y tiene otro momento exploratorio en la realidad. Los logros en el
campo imaginario no son menores, pues sabemos de los peligros de la contrainvestidura y el
desinvestir en el plano de la fantasia. Este placer alucinatorio no se abandona poir completo y
representa el remanente autoerotico que se retiene como una reserva de placer ante las
vicisitudes del vinculo real. Una parte de la sexualidad se converva autoerotica. Pero, como dijo
anteriormente, se muestra isnfuiceinte y empuja al sujeto al mundo real.
Una de las facetas del hallazgo de objeto es la adecuación sexual. Tenemos entonces
definido uno de los campos explroatorios que se disparan con la explosión puberal: el de la
búsqueda del objeto adecuado para su hallazgo. Se llega a tener de el solo un acercamiento a la
represenatividad, lo que refuerza su búsqueda continuamente.
El hallazgo de objeto viene de por si acompañado del encuentro con otros objetos que se
presentan como necesarios para el andar adolescente:
Los objetos acompañantes: la exploración adolescente es una experiencia personal e
intrasferible que se hace acompañado. La soledad y la compañía son dos experiencias
absolutamente necesarias. Estos objetos son objetos internos como los objetos narcisistas que
sostienen al yo; son los objetos transicionales a los cuales se refiere winnicott. El grupo de pares y
el objeto supuestamente complementario. Los primeros no se distinguen como objetos, son
partes del yo, mientras que los segundos son fundamentalmente valorados como objetos no-yo.
Todos ellos cumplen una función de apuntalamiento.
En su busqeuda exploratoria, el púber adolescente debe aprender a apuntalar sus
apuntalamientos.
 Objetos narcisistas. Son los que aputnalan el yo del púber, son los padres. El
narcisismo adolescente necesita para mantenerse el amor de los padres. Es ese
basamento lo que le permite al yo dedicarse a desplegar su fantasia exploratoria
en búsqueda del objeto y su acción exploratoria que se espera sea sostenida por
los padres.
 Objetos transicionales. Es una parte de el que es no yo y lo acompaña en el
mundo externo. Lo representa a el ante otros. El diario intimo, la guitarra viajera,
las zapatillas que nunca deja de usar, etc.
 Grupo de pares.
 Objeto complementario. Hallazgo de objerto sexual. Zona-objeto
complementarias.
Preguntas primer parcial Adolescencia
Grassi

Preguntas teorico:

1. Metamorfosis de la pubertad. ¿Qué logros enumera Freud? Explique la


nocion de desasimiento de los padres.

Según lo dicho por Freud, con el advenimiento de la pubertad se introducen los


cambios que llevan la vida sexual infantil a su conformación sexual definitiva.

a) La pulsión sexual halla al objeto sexual.


b) Nueva meta sexual que requerie que todas las pulsiones parciales
cooperen como una.
c) Las zonas erógenas se subordinan al primado de la zona genital y son
empleadas para posibilitar la producción del placer de satisfacción mayor.
d) La corriente tierna y la corriente sensual coinciden en la dirección hacia el
objeto.
e) La pulsión sexual se vuelve altruista, se pone al servicio de la función de
reproducción.
f) La aparición del placer final a partir del ya existente placer previo. Siendo el
primero el provocado por la excitación de zonas erógenas y el segundo
producido por el vaciamiento de las sustancias sexuales (en el caso del
hombre).
g) Se establece la separación tajante entre el carácter masculino y el
femenino.
h) Se consuma el hallazgo de objeto. Existen dos caminos para el hallazgo: el
que se realiza por apuntalamiento en los modelos de la temprana infancia,
y en segundo lugar: el narcisista que busca al yo propio y lo reencuentra en
otros.
i) El desasimiento de la autoridad de los progenitores. Este desasimiento
crea la oposición entre la nueva generación y la antigua.

FALTA LO DEL DESASIMIENTO

2. Procesos puberal y adolescente. Desarrolle.

Lo puberal y lo adolescente son dos procesos que forman parte del periodo
definido por Grassi como “el entretiempo de la sexualidad”. Lo que hacen estos
procesos es producir las transformaciones de la adolescencia incorporando,
metabolizando lo heterogéneo, re-organizando, des-ordenando lo previo; implican un
potencial saludable. Grassi lo define como “una puesta en des-orden del statu quo
promotor de neoorganizacion”.

Lo nuevo que incorporara y homogeneizara será proveniente de distintas fuentes:


a) Un campo intra-subjetivo como pueden ser los cambios corporales y las
vicisitudes de la historia corporal.
b) Un campo de inter-subjetividad que abarca las relaciones familiares, con
quienes se comparte un periodo histórico-politico-social.
c) Un campo trans-subjetivo que conecta con las generaciones precedentes.

Los distintos elementos heterogéneos a metabolizar en este periodo son:

A. Crecimiento y desarrollo que jaqeuan la identidad. Hace referencia a los


cambios corporales que producen el crecimiento del cuerpo y la aparición
de los caracteres sexuales secundarios, que imponen al psiquismo un
trabajo de simbolización. Ante estos cambios se replantea en simultaneo
las identidades enraizadas a lo somatico. Tambien se deben metabolizar
las diferencias de genero sobre el desarrollo de la identidad sexual.
La subjetividad demanda encontrar nuevos ordenamientos, re-ordenar,
des-ordenar las relaciones del cuerpo infantil con la propia historia, con los
padres de la infancia, con la infancia de los padres, con su lugar en el
circuito de deseo familiar. Se requieren nuevas organizaciones que
signifiquen, que den sentido al crecimiento y la genitalidad. La
simbolización del crecimiento del cuerpo con su naciente genitalidad
implica trabajos psíquicos en relación con el estadio del espejo y sus
categorías y del complejo de Edipo que comprometen toda la estructura del
aparato psíquico.
B. Los dos tiempos o fases de la sexuacion. Por un lado la sexualidad infantil,
que no se produce automáticamente y deviene en su conformación normal
definitiva, sino que requiere de estaciones de recambio de su identidad
infantil, de des-orden del cuerpo, del objeto familiar, del reposicionamiento
generacional. Entre re-edición y repetición, lo puberal adolescente tiene
urgencia de transformar y crear. Urgencia por la inscripción de un cuerpo
que conlleve una identidad diferenciada de lo infantil, de lo conocido y
parental, con rasgos originarios y que contenga el deseo genital ligado a un
objeto no familiar. Entre repetición de lo viejo e inscripción de lo nuevo, lo
puberal adolescente demanda un proceso identificatorio que se debate
como principio de permanencia y principio de cambio. Lo puberal-
adolescente es ese entretiempo de trabajos específicos, lugar de
transformaciones e inscripción del cuerpo pre-genital en cuerpo genital y de
objeto familiar en objeto de deseo no familiar.
C. Erotismo genital y hallazgo de objeto alteran “lo familiar”. Generalmente, en
la adolescencia se da la iniciación sexual, la cual marca un antes y un
después, un hito en los procesos de subjetivación, el cual no es sin “el
otro”. El otro, en su función de compañero sexual, en presencia con su
participación coadyuva en la inscripción del cuerpo genital. La genitalidad,
así, da una nueva vuelta por la alteridad.
El hallazgo de objeto es producción de una combinatoria novedosa,
original. El cuerpo puberal, con sus reorganizaciones y neo organizaciones,
requiere de nuevas inscripciones y nuevos circuitos pulsionales. Le urge el
hallazgo-creatividad-encuentro de objeto exterior a si, en simultaneo con
que el objeto exterior no reduplique un encuentro ya producido, sino que
inscriba como acontecimiento que diferencie lo que está investido por el
niño y la familia de lo que deviene nuevo y que esta in-vistiendo como obra
propia, por fuera del cuerpo y lo familiar. Le urge la creación, re-creación,
re-presentación de objeto y espacio transicional, la frontera, el borde, la no
repetición. Se reencontraran en el objeto rasgos de aquellos bocetos de
infancia, mascarada y semblante, pero hallazgo es fundamentalmente
nueva inscripción e inscripción de lo nuevo, “creatividad propia” por fuera
del cuerpo familiar. El cuerpo requiere de nuevas inscripciones con el
objeto que es reinventado en la alteridad, se adiciona así el otro modo de
elección por alteridad y radical diferencia del objeto.
D. La sucesión generacional y su reordenamiento. El reacomodamiento que la
adolescencia implica por sus posibilidades de fecundación y procreación
impone al psiquismo un trabajo de simbolización de un nuevo
emplazamiento generacional. El potencial pasaje de hijo y su proyección
como padre/madre, y consecuentemente el pasaje de los padres a abuelos
etc., es un corrimiento generacional cuya metabolización implica un deseo
de muerte y asesinato de los progenitores como operaciones simbólicas.
Que en la adolescencia se sobreviva al deseo de muerte y asesinato es
fundante del pasaje generacional y para llegar a un nuevo emplazamiento
se requiere que lo adolescente simbolice dicha experiencia. Este nuevo
emplazamiento generacional implica un nuevo registro de la temporalidad,
construirse un pasado va a posibilitar proyectar un futuro. El devenir en
cuanto proyecto identificatorio no es sin ligaduras con la genealogía, la
sucesión generacional, el por-venir y el azar.

Estos procesos, si bien trabajan complementariamente, ya que es lo puberal el que


crea los materiales sobre los que trabaja lo adolescente, tienen sus
particularidades:

Lo puberal hace referencia a la institución de la genitalizacion de las


representaciones incestuosas. Ejerce una presión sobre la barrera del incesto. Es la
presencia ardiente de la sexualidad genital que activa la interpretación apres-coup de
la sexualidad infantil, creando representaciones incestuosas y fantasmas de
seducción, materiales que queman, seducen y marcan ese cuerpo en transición. El
cuerpo genital puberal seduce al cuerpo todavía niño. Hay un exceso de sensualidad
creando representaciones incestuosas que dan sustento a una intensa actividad auto
erótica. Lo puberal en su versión originaria es una tendencia anti separadora por
excelencia, búsqueda de la repetición de toda experiencia de complementariedad.

Lo adolescente refiere al trabajo elaborativo concomitante o retrasado,


exclusivamente realizable sobre la base del material puberal. Utiliza los
procedimientos de la idealización, del ideal del yo y la identificación. Su fin es una
desexualizacion (sublimación) de las representaciones incestuosas, conducente a la
elección de objeto potencialmente adecuado. Atenúa la ardiente sensación puberal,
desexualizando el exceso de sensualidad, enterneciéndolo mediante los procesos de
elaboración, sublimación e idealización de esas representaciones edipicas
incestuosas, fantasias de seducción infantil creadas por interpretación apres-coup,
desde lo genital puberal. Enternece el plus de sensualidad puberal que se infiltra en el
adolescente. Este adolescente deberá dejar algo de si en el camino; en principio, el
cuerpo infantil, para lo cual se requiere un movimiento de torsión, una decisiva
maniobra de viraje para abandonar en las playas de la infancia los restos del yo ideal y
sus objetos amorosos, y poner gradualmente en funciones al ideal del yo como guía.
Aceptar que no hay forma de volver también habilita el trabajo de historizacion de la
infancia y la elaboración creativa del duelo por el objeto, mediante procesos
saludables que dan lugar a lo nuevo, que conducen a la creación/hallazgo de objeto
propuesta por Grassi, por una via diferente de la repetición sin diferencia sugerida por
el “re-encuentro” del objeto, teñdo de la melancolica y vana ilusión de volver a
enconrar el objeto perdido. Lo adolescente es una fuerza reparadora, promueve la
búsqueda de lo nuevo; es tendencia a la creatividad.

Podemos ver que siempre se juega un proceso dialectivo entre la fuerza


fusionante de lo puberal y los trabajos separadores de lo adolescente. Lo puberal
activa el Edipo genital, lo adolescente permite su elaboración. Lo puberal permanece
cercayo al yo como ideal, como anhelo narcisista de retorno; lo adolescente crea las
condiciones para la primacia del ideal del yo, como rpoyecto identificatorio y horizonte
que señaliza un posible camino de salida para el sujeto adolescente.

3. Desarrolle y articule el paradigma del psicoanálisis con los aportes de la


complejidad según, Najmanovich.

4. A partir del proceso originario planteado por P. Aulagnier conceptualice y


articule: metabolización- pictograma- cuerpo imaginado y desarrolle el
trabajo psíquico del originario puberal.

5. Explicar por qué Freud dice que se produce un reencuentro con el objeto,
detallar tipos de elección de objeto y explicar los aportes que hace Grassi
sobre el Hallazgo de objeto.

En sus tres ensayos de teoría sexual, Freud hace hincapié en el hallazgo de objeto. Lo
que plantea es que el niño, en sus comienzos de vida, poseía un objeto que se
encontraba fuera de su propio cuerpo, nos referimos al pecho materno, es un hallazgo de
objeto ligado a la nutrición. Sin embargo, cuando el niño crece y puede formarse una
representación global de la madre, pierde a su objeto. Luego de esto, la pulsión sexual
pasa a ser, regularmente, autoerotica, y solo luego de superado el periodo de latencia se
restablece la relación originaria. Es por esto que Freud indica que el hallazgo de objeto es
propiamente un reencuentro, ya que el joven, después del periodo de latencia, busca un
objeto por fuera del propio cuerpo y lo que se busca generalmente es un representante de
la madre o del padre.

El psicoanálisis enseña que existen dos caminos para el hallazgo de objeto: en primer
lugar, el mencionado anteriormente, cuyo nombre es “por apuntalamiento” en los modelos
de la temprana infancia, y en segundo lugar, el camino narcisista, que busca al yo propio
y lo reencuentra en otros.

Ante estos caminos para el hallazgo de objeto, Grassi agrega uno mas que seria una
mixtura de ambos, lo llama “hallazgo de objeto por alteridad del mismo, por su extrañeza,
conlleva lo no conocido”. Lo que dice es que al considerar los procesos psíquicos en su
vertiente saludable, destaca la impotancia de la no fijeza ni exclusividad en ninguno de los
modos, sino que la combinatoria en la elección es lo que la da sutileza al hallazgo.

6. Relacionar reencuentro-creatividad-hallazgo de objeto y alteridad.

7. Desarrolle las tres perspectivas que caracterizan a la pulsión como altruista.


Caracterice la conformación normal definitiva.

Freud dice que, con el advenimiento de la pubertad, una de las transformaciones que
sufre el púber es que la pulsión sexual se pone al servicio de la reproducción, se hace
altruista. Hay tres perspectivas que la caracterizan como tal:

1. La complejidad de la relación autoerotismo-narcisismo-eleccion de objeto. La


elección de objeto en pleno sentido implica una renuncia al autoerotismo y al
narcisismo, como a la elección infantil de objeto. Se trata también de encontrar
el máximo placer de satisfacción en el orgasmo. La pulsión deja de ser egoísta
y se vuelve, por asi decir, altruista. Al alteridad se esta constituyendo junto con
el erotismo.
2. La pulsión se pone al servicio de la reproducción y esto, entonces, abre a la
cuestión de la relación del sujeto con un interés que no es exclusivamente
individual, sino de la humanidad, la cual requiere de nuevos integrantes para
subsistir. La consideración por lo altero seria acoplarse a un interés colectivo.
3. Relacionado con el punto anterior, el progenitor se agrega en una cadena
generacional que lo enlaza de una manera muy particular al otro (altero) del
nuevo ser objeto de afecto, el hijo.

ARTICULAR CON LA RTA SOBRE SEXUALIDAD NORMAL DEFINITIVA

8. Explique las diferencias en la conceptualización de la adolescencia desde


los dos Paradigmas estudiados (evolucionismo / Psis – T. de la Complejidad)
9. Etimología e historia de los términos adolescencia y adolescente.
Consecuencias de la concepción erronea derivada de adolescer. Desarrolle.

Desde su progresiva aparición en el universo simbolico de la antigüedad, hasta


emerger con su forma actual, el termino adolescencia ha debido recorrer un largo camino.
El significante “adolescencia” arriba a la actualidad con una notable eficacia simbolica;
esto es, la capacidad potencial de producir nuevos efectos de sonido.

Los vocablos “adolescencia” y “adolescente tienen su raíz latina en el verbo


“adolescere”. Este verbo esta compuesto por el prefijo “ad” y el sufijo incoativo “scere”,
que denota el principio de una acción progresiva: comenzar a crecer, estar creciendo.
Adolescente deriva de “adolescens-entis”, participio presente de “adolescere” y significa,
esencialmente “el que esta creciendo”.

Se sostiene en trabajos sobre etimología e historia de las palabras que “adolescencia”


proviene de la raíz originaria “al-r”, que significaría acrecentar, elevar, etc.

Con el transcurrir del tiempo, “al-r” derivo en la voz latina alere. Posteriormente
“alescere”, con la unión del prefijo “ad”, dio origen a la forma verbal “adolescere”: crecer,
desarrollarse. Finalmente, el participio presente de “adolescere, adolescens-entis” en el
siglo XIII se transformo en los términos del idioma francés adolescens y adolescence. Del
francés arribo al español transformándose respectivamente en adolescente y
adolescencia.

La palabra adolescencia, además, ha sido objeto de manipulaciones linguisticas que


dieron lugar a verdaderas sustracciones etimologicas. Estas manipulaciones genearon
una falsa relación del termino “adolescencia” con “adolescer”. Adolecer significaría
carecer, faltar algo y se lo hace derivar de “dolesco”: afligir, dolerse, caer enfermo.

Esta muy difundida y errónea definición constituye una mal-versacion lingüística que
tiende a negativizar los sentidos de la voz adolescencia y contribue al malentendido, ad
desmentir el potencial transformador y creativo de los adolescentes.

El significado “adolecer” pone en juego una concepción idegologica con


consecuencias fácticas en los ámbitos legislativos, judicial, de la salud. La interpretación
de adolescencia como derivada de adolescer es el fundamento de ciertas ideologías de
corte discriminatorio y teorías evolucionistas dogmaticas, que consideran a los niños y
adolescentes como seres inacabados, imperfectos, a medio camino respecto a un ideal
de perfeccion y completud, l cual se arribaría en la adultez.

10. ¿Cómo operan la I.C.C. y la I.E. en la pubertad?

11. ¿Cuáles son los trabajos psíquicos de elaboración que realiza el


adolescente?
12. ¿Qué trabajos replantea la llegada de la genitalidad sobre la construcción de
objeto partiendo del aparato psíquico naciente?
13. Explique el trabajo psíquico que debería realizar el adolescente en relación a
su historia libidinal.

14. ¿Por qué es importante la consideración de lo originario en lo puberal


adolescente?

Preguntas practico

1) Freud plantea en Metamorfosis de la pubertad "con el advenimiento de la


pubertad se introducen los cambios que llevan la vida sexual infantil a su
conformación normal definitiva" Mencione y explique estos cambios.

Como bien plantea Freud, con el advenimiento de la sexualidad se introducen cambios


que producen un cambio de una vida sexual infantil a la “conformación normal definitiva”
de la sexualidad.

El logro de esta conformación, de este desarrollo normal, esta relacionado con dos
factores:

1. La disposición a las perversiones, una disposición originaria y universal de la


pulsión sexual de los seres humanos. Esta disposición trae consigo una serie
de inhibiciones psíquicas formadas mediante la represión y la formación
reactiva que edifica las ulteriores barreras sexuales durante el periodo de
latencia (asco, moral, vergüenza).
2. Alteraciones organicas, esto es, el conjunto de transformaciones que
experimenta el cuerpo del púber. Como puede ser, por ejemplo, el crecimiento
de las mamas en la mujer, el cambio de voz en el hombre, los cambios
tambien producidos en el tamaño de los cuerpos; la menstruación en la mujer y
las poluciones nocturnas en el varoncito, entre otras.

Para dar cuenta de esto, primero es necesario tener en cuenta los siguientes cambios
que integran: Freud plantea que, hasta entonces, la pulsión sexual era
predominantemente autoerotica, es decir que no esta centrada y carece de objeto (esta
en el propio cuerpo), además de que se dirigía hacia una única meta sexual y que luego,
con la llegada de la pubertad, halla al objeto sexual; es decir que ahora tambien es dada
una nueva meta sexual. Para alcanzarla, todas las pulsiones parciales cooperan, al par
que las zonas erógenas, para que se subordinen al primado de los genitales. Esta nueva
meta sexual consiste, por ejemplo, para el varon, en la descarga de los productos
genésicos. Entonces, es muy importante pensar la pubertad y la síntesis en el sentido de
la unificación pulsional que en ella se produce.

Entonces, las transformaciones mas importantes que experimenta la sexualidad


infantil con la emergencia de la pubertad son:

1. La subordinación de todas las fuentes originarias de la excitación sexual a la


zona genital. Esta se consuma por el mecanismo de aprovechamiento del
placer previo, o sea, los actos sexuales autónomos resultantes de la
conjugación de excitación y placer pasan a ser actos preparatorios para la
nueva meta sexual, que él señala que es el vaciamiento de los productos
genésicos, al menos en el hombre.
2. El hallazgo de objeto, que es guiado por los indicios infantiles renovados en la
pubertad. Respecto a este tema, lo que dice Freud es que existen dos caminos
para el hallazgo de objeto: primero uno por apuntalamiento, responde a un
modelo anaclitico: se apoya en la madre nutricia y el padre proveedor, es decir
que el primer objeto seria el pecho materno que se encuentra fuera del niño,
pero el pecho se pierde cuando el niño tiene una representación total de la
madre y comienza el deseo. Luego, en el periodo de latencia, el niño aprende
a amar a otras personas que remedian su desvalimiento y satisfacen sus
necesidades. El trato del niño con la persona que lo cuida es para el una
fuente continua de excitación y de satisfacción sexuales a partir de las zonas
erógenas, y tanto mas por el hecho de que esa persona dirige sobre el niño
sentimientos que brotan de su vida sexual, lo acaricia, lo besa y lo mece, y
claramente lo toma como sustituto de un objeto sexual de pleno derecho. Lo
que Freud llama ternura infaliblemente ejercerá su efecto un dia tambien sobre
las zonas genitales. Sin embargo, con la construcción de los diques anímicos
en el periodo de latencia, cuando adviene la pubertad, el púber se encuentra
con la barrera del incesto, una exigencia cultural, esto es, si bien lo mas
inmediato para el niño seria escoger como objetos sexuales justamente a las
personas a quienes desde su infancia ama, no lo puede hacer por aquella
barrera. Pero la elección de objeto se consuma primero en la representación y
su vida sexual se despliega en el espacio de las fantasias, o sea,
representaciones no destinadas a ejecutarse. A raíz de estas fantasias
relacionadas con los primeros objetos vuelven a emerger en todos los hombres
las inclinaciones infantiles y asi tambien vuelve la moción sexual del niño hacia
sus progenitories, casi siempre ya diferenciada por la atracción del sexo
opuesto: la del varon hacia su madre y la de la niña hacia su padre. Luego,
según Freud, aparece una segunda forma de hallazgo de objeto que es la
narcisista, esto es: se busca al propio yo en otros, en otros que no son los
padres, seria un objeto no incestuoso.

Esta normalidad sexual definitiva, sin embargo, solo podrá darse, según Freud, por la
exacta coincidencia de dos corrientes dirigidas al objeto y a la meta sexuales: la tierna y la
sensual. La primera reúne en si lo que resta del temprano florecimiento infantil de la
sexualidad, proviene de la primera infancia, se ha formado sobre la base de los intereses
de la pulsión de autoconservacion. Desde el comienzo ha recibido aportes de las
pulsiones sexuales, acogiendo componentes de interés erotico. Corresponde a la elección
infantil primaria de objeto. Son pulsiones de meta inhibida, inhibidas en su fin o de
carácter sublimado, derivadas de las pulsiones libidinales. corriente se pone al servicio del
mantenimiento y desarrollo de las relaciones afectivas donde no interviene el erotismo.
Reúne y guarda los afectos no genitalizados, (no genitalizables ó desgenitalizados) de la
historia de los vínculos del niño con sus padres, hermanos/as y todos aquellos objetos de
afecto que formaron parte de sus relaciones significativas en la infancia. Mientras que la
corriente sensual que no ignora sus metas ni su objeto. Esta corriente sensual que se
adiciona en la pubertad constituye el erotismo genital. Pero como tropieza ahi con los
obstáculos de la barrera del incesto y los diques morales de la pulsión, construídos en la
latencia, desde el sepultamiento del complejo de Edipo a la pubertad, exteriorizará el afán
de hallar lo mas pronto posible el paso de esos objetos inapropiados en la realidad hacia
otros objetos, ajenos, con los cuales pueda cumplirse una real vida sexual. La unión
exacta de ambas corrientes en el hallazgo de objeto da lugar a la conformación sexual
normal definitiva.

Ademas, otra de las características por las cuales la sexualidad se conformaría como
normal y definitiva es porque, luego de la pubertad, la pulsión sexual se pone al servicio
de la función de reproducción, es decir, se vuelve altruista gracias al primado de la zona
genital y al hallazgo de objeto.

Tambien se da otro cambio relacionado con lo que Freud llama “placer previo” y
“placer final”. En la sexualidad infantil todo era placer previo, es un tipo de placer que
siempre frustra; es decir, el estado de excitación sexual presenta el carácter de una
tensión y, mientras que el placer previo es el placer inequívoco que presentan la
excitación sexual, el placer final es nuevo, forma parte de la pubertad y hace referencia a
la descarga de las sustancias sexuales, es una satisfacción mayor.

Otro cambio que se da en la pubertad es la separación entre el carácter femenino y


masculino. En la infancia, la activación autoerotica de las zonas erógenas es la misma en
ambos sexos y esta similitud suprime en la niñez la posibilidad de una diferencia entre los
sexos como la que se establece después de la pubertad. La diferencia de este carácter
femenino y masculino, es tomado desde la ciencia como empleados en el sentido de
femenino como pasivo y masculino como activo. Asi, las diferencias serian que en el
hombre la zona erógena rectora se situa en el glande, sin hacer ninguna modificación
respecto a la niñez, mientras que en la mujer se da en el clítoris y solo adviene femenina
si cambia de clítoris a vagina; en el hombre se da un gran empuje libidinal, mientras que
en la mujer se da represión de restos de sexualidad infantil viril y, por ultimo, mientras que
el hombre conserva la elección de objeto (madre), la mujer cambia el objeto madre por
padre y de zona erógena.

Diferencie y explique, siguiendo las ideas de Nasio, el Estadio del Espejo en el


primer año de vida y en la adolescencia.

Nasio hace una comparación entre el Estadio del espejo de Lacan y lo que el llamo el
Estadio de la adolescencia. En el estadio del espejo se oponen dos parámetros:
3. El cuerpo real de un bebe que siente y vive la experiencia de sus propias
sensaciones internas y externas.
4. Un parámetro visual y virtual, donde el mismo bebe, desbordado por todas esas
sensaciones tumultosas, percibe una imagen global y globalizante en el espejo.
Entonces en estos dos parámetros tenemos:
c) Un cuerpo real sentido y vivido como despedazado, fragmentado.
d) Frente al cual se tiene una imagen especular, redonda, entera y unificante, que le
da al niño la posibilidad de sentirse una unidad en relación a si mismo, y una
entidad diferente de las otras personas que lo rodean.

En el caso del adolescente, tenemos un cuerpo enloquecido por las multiples e intensas
fuerzas pulsionales,e n particular sexuales y agresivas. Sufre del choque entre dos intensidades: la
intensidad de un cuerpo que vibra al ritmo de pulsiones que reclaman furiosamente convertise en
actos impulsivos e imprevisibles; y al mismo tiempo la intensidad de un superyó rigido e inflexible
que reprime las pulsiones con tanta violencia como la violencia que las anima. Entonces, frente a
estas dos fuerzas opuestas entre si, aparece una imagen en el espejo. Una imagen que es tambien
unitaria, pero con la particularidad de ser ante todo, una imagen de seducción.
La diferencia entre el estadio del espejo, donde aparecen 2 parametros, y el estadio del
adolescente, donde tenemos 3 parametros, reside sobre todo en el 3er personaje, que no aparece
en el caso del bebe: el superyó. Es el típico elemento dela sadolescencia. La presencia del superyó
es algo que marca esencialmente el periodo de la adolescencia. Es decir, la presencia del pudor o
del impudor. El superyó es el pudor, yy el adolescente vive en esa lucha entre pudor e impudor.
Esto hace que el autor agrege una diferencia mas entre el estadio del espejo y el de la
adolescencia. En el caso del bebe, el sentimiento que domina es la alegría, el jubilo de verse
reflejado en una imagen redonda y unificadora. En el caso del adolescente, el sentimiento que
domina es la vergüenza o, su contrario, la omnipotencia. El sentimiento mas importante de la
adolescencia es la vergüenza.

2) ¿A que esta condenado el yo a explorar en la adolescencia? Desarrolle los


campos.

NO BIBLIOGRAFIA POR EL MOMENTO

3) ¿Que significa "el des-orden del status quo" y sobre que temáticas se da
durante el "entretiempo"?

Grassi plantea que la adolescencia es un momento de transformaciones y cambios,


esto implica los siguientes términos: organización, reorganización y neoorganizaciones.
Reorganización implica que un orden es cambiado, transformado por reacomodamiendo,
reordenamientos, por des-orden de lo existente. La incorporación de nuevos elementos
des-ordena lo establecido dando lugar a organizaciones nuevas. El des-orden es utilizado
en este texto para destacar varios sentidos del termino. Por un lado, en lo que a
producción subjetiva y adolescencia se refiere, des-orden no es mera oposición a orden ni
dicho des-orden aparece por descuido, desgano, negativismo o rebeldía adolescente.
Des-orden no es producto de una carencia del sujeto ni deviene “evolución natural” del
desarrollo. Des-orden es meta a alcanzar mediante un esfuerzo de trabajo psíquico y su
realización comporta un redito positivo en la producción de subjetividad.
La vida psíquica encuentra distintos momentos en los cuales se trata de inscribir,
incorporar, metabolizar lo heterogéneo y asi re-organizar, re-ordenar, des-ordenar lo
previo. En su devenir, la subjetividad trabaja la adolescencia produciendo
transformaciones, este trabajo de transformaciones se denominan como “lo puberal-
adolescente”, lo cual implica un potencial saludable de cambio. Lo puberal adolescente, al
encontrar condiciones de desarrollo es una puesta en des-orden del status quo promotor
de neoorganizaciones.

Siendo que desorden, reorganización y neo organizaciones aparecen ante la


incorporación de lo nuevo, de lo distinto, de lo hetero, lo puberal adolescente trabaja para
su incorporación y homogenización, lo proveniente de distintas fuentes:

a) Un campo estrictamente intra-subjetivo como son los cambios corporales y las


vicisitudes de la historia personal.
b) Un campo de inter-subjetividad que abarca las relaciones familiares, al
conjunto de los coetáneos y un circulo mas amplio, con quienes se comparte
un periodo histórico-politico-social.
c) Un campo que, via transmisión generacional de la vida psíquica, toma una
dimensión trans-subjetiva que conecta con las generaciones precedentes.

Entonces, el des-orden del status quo implica las metas a alcanzar mediante el
esfuezo del trabajo psíquico ante las modificaciones que advienen con lo puberal-
adolescente que debe ser incorporados, metabolizados, reorganizados, etc.

Durante el entretiempo, aquel periodo que se encuentra entre la sexualidad infantil y la


adulta, estas modificaciones implican estaciones de recambio de la identidad infantil, de
des-orden del cuerpo, del objeto familiar, del reposicionamiento generacional. Lo puberal-
adolescente tiene urgencia de transformar y crear. Urgencia por la inscripción de un
cuerpo que conlleve una identidad diferenciada de lo infantil, de lo conocido y parental,
con rasgos originarios y que contenga el deseo genital ligado a un objeto no-familiar.
Entre repetición de lo viejo e inscripción de lo nuevo, lo puberal adolescente demanda un
proceso identificatorio que se debate entre principio de permanencia y principio de
cambio.

Lo puberal-adolescente es ese entretiempo de trabajos específicos, lugar de


transformación e inscripción del cuerpo pre-genital en cuerpo genital y de objeto familiar
en objeto de deseo no-familiar.

4) “La exploración es una experiencia personal que se hace acompañado"


desarrolle uno de los objetos que acompañan al joven en esta experiencia.

Waserman indica que es en el mundo donde se cruzan la expedición y la


adolescencia. El adolescente ya no se contenta con la casa familiar por mas comodidades
que le brinde, busca mundo.

NO ENCONTRE BIBLIOGRAFIA
5) Según D. Winnicott, diferenciar y caracterizar fantasía de muerte y fantasía
de asesinato.

En la época de crecimiento de la adolescencia los jóvenes salen, en forma torpe y excéntrica,


de la infancia, y se alejan de la dependencia para encarminarse a tientas hacia su condición de
adultos. El crecimiento no solo es una tendencia heredada, es tambien un entrelazamiento de
suma complejidad con el ambiente facilitador. Los mismos problemas que existían en las primeras
etapas cuando los mismos chicos eran bebes o niños mas o menos inofrensivos aparecen en la
pubertad. Los problemas son intrínsecos en las etapas posteriores a la pubertad.
Resulta valioso comparar las ideas adolescentes con las de la niñez. Ante estos problemas, los
niños y adolescentes crean ideas o fantasias y mientras que en la fantasia del niño hay un
contenido de muerte, en la adolescencia el contenido será de asesinato. Aunque el crecimiento
nen el periodo de la pubertad progrese sin grandes crisis, puede que resulte necesario hacer
frente a agudos problemas de manejo, dado que crecer significa ocupar el lugar del padre. En la
fantasia inconsciente, el crecimiento es intrínsecamente un acto agresivo.
En la fantasía inconsciente total correspondiente al crecimiento de la pubertad y la
adolescencia existe la muerte de alguien. En la psicoterapia del adolescente la muerte y el triunfo
personal aparecen como algo intrínseco del proceso de maduración y de la adqusicion de la
categoría de adulto. Esta fantasia esta relacionada directamente con el deseo de ocupar el lugar
del otro, de matar al progenitor.
El deseo de muerte y asesinato es simbolico y refiere a los padres. Winnicott dice que hay una
doble circularidad en estas fantasias. De padres a hijos es el deseo de muerte, porque los padres
compiten con los hijos, hay ambigüedad y enfrentamiento entre madre e hija y padre e hijo. Los
padres compiten porque no quieren soltar su eterna juventud, y los hijos reflejan lo que ya no son.
Y de los hijos a los padres dice que lo que sucede es que en la adolescencia el contenido de la
fantasia es de asesinato y que ese contenido es el deseo de ocupar el lugar del otro, lo que prima
es matar al progenitor. En cambio, el contenido de la fantasia de muerte en la niñez tiene que ver
con que los padres se mueran y esto es por el propio desamparo que sobrevendría el niño si se
mueren los progenitores, es miedo a la ausencia, al desamparo.

6) Según Winnicott relacionar los términos confrontar y creatividad.

Los términos “confrontar” y “creatividad” están íntimamente ligados a lo que Winnicott


llama como “la inmadurez del adolescente”. La inmadurez es un elemento esencial de la
salud en la adolescencia y contiene los rasgos mas estimulantes de pensamiento
creador, sentimientos nuevos y frescos, ideas para una nueva vida. Winnicot dice que la
sociedad necesita ser sacudida por las aspiraciones de quienes no son responsables; es
decir que si los adultos le quitan su inmadurez a los adolescentes, los hacen
responsables, el adolescente se convierte en un adulto en forma prematura y la
adolescencia pasaría a ser un falso proceso.

Otra de las características de la inmadurez adolescente es la importancia y necesidad


de que salga al encuentro del reto adolescente, enfrentar el desafio, es decir, la
confrontación. Esta se refiere a una contención que no posea características de
represalia, de venganza, pero que tenga su propia fuerza; donde existe el desafio de un
joven en crecimiento, debe haber un adulto para encararlo.

Entonces, resumiendo, ambos son carácter de la inmadurez del adolescente, tan


importante para lograr un proceso de crecimiento adolescente saludable.

7) ¿Por qué Rassial sostiene que la adolescencia de los hijos es un momento


de crisis para los padres y que se pone en juego para esto? Articular con
Winnicott.

Rassial expresa en sus escritos que ser padre no es una cualidad intrínseca del ser
humano; primero es una función y luego una posición ocupada en relación a otro sujeto y,
además, esta posición es modificada cuando el niño se transforma en adolescente y luego
en adulto.

La adolescencia de los hijos, para ellos, es una crisis tanto para ellos como para la
organización familiar, ya que obliga a los padres, como personas,a reinventar su lugar, ya
sea en relación con otros miembros de la familia, con su conyuge, con sus propios
ascendentes, o en relación a ellos mismos. Se dice que es una crisis porque los padres
deben separarse de ellos mismos, deben efectuar un trabajo de duelo; asi, los padres
están psíquicamente divididos entre: “los padres de la realidad”, “los padres conscientes”
y “los padres fantaseados”.

Entonces, la adolescencia de los hijos exige un cambio de lugar de los padres, éstos
pierden su propio yo, entonces, tienen necesidad de un trabajo psíquico de reconstrucción
de ese yo apoyándose a la vez en identificaciones que Rassial denomina pre-parentales y
teniendo en cuenta una nueva realidad exterior.

Además, los padres son remitidos a su propia adolescencia: por una parte porque sus
hijos les muestran de un modo mas o menos deformado la imagen se su propia
adolescencia, donde pueden reencontrar esos sueños, ambiciones, deseos que tuvieron
que reprimir. Por otra parte, interrogados acerca de las funciones paterna y materna,
conforntados a la desintegración de la familia ampliada, se ven confrontados nuevamente
a la cuestión de la relación con sus propios padres. Todo esto genera una crisis en ellos y
produce tambien lo que Winnicott llama como “deseo de muerte”, los padres desean,
inconscientemente, la muerte de los hijos porque los compiten con ellos, hay ambigüedad
y enfrentamiento entre madre e hija y padre e hijo. Los padres compiten porque no
quieren soltar su eterna juventud, y los hijos reflejan lo que ya no son.

A su vez, los padres deben realizar un trabajo complejo de contención con el


adolescente; ellos deben considerarlo como un futuro adulto, pero con cuidado ya que ese
adolescente tambien necesita ser protegido y contenido. Deben encontrar un equilibrio a
cada nuevo paso entre ese “contener” y ese “separarse”. Esto seria lo que Winnicott
concibe como un “ambiente facilitador”, ya que, si bien los adolescentes gustan de
alejarse de la dependencia, el crecimiento no es una simple tendencia heredada, sino,
además, un entrelazamiento de suma complejidad con el ambiente facilitador. El
adolescente es y debe ser inmaduro, solo con el paso del tiempo y de la experiencia
puede un joven aceptar poco a poco la respondabilidad por todo lo que ocurre en el
mundo, son las figuras paternas las que deben hacerse cargo de la responsabilidad.

TRATAR DE RELACIONAR CON FANTASIA DE ASESINATO Y MUERTE LUEGO


DE TENER LA CLASE

8) Rassial – Indique sus aportes sobre la reviviscencia del Complejo de Edipo


(desde la mirada de lo que le sucede al adolescente – no de los padres)

Rassial dice que los adolescentes muchas veces suelen tener la tendencia a evocar a
los padres como un todo. Ante esto dice que, entocnes, en la adolescencia existe la
reactivación del Edipo pero apunta el acento sobre la diferenciación de las generaciones.
¿Cómo es esto? Rassial dice que la prohibición del incesto se legitima a partir de una
diferencia entre los “pequeños” y los “mayores”, de modo que los padres son remitidos al
mundo de los adultos. Pero los adolescentes deben reformularse de otro modo esta
prohibición, deben distinguir a sus padres de los otros adultos y plantear verdaderas
preguntas. Esto los hace encontrarse, según Rassial, ante la primera prueba de Edipo.

NO ENTIENDO

9) ¿Por que Rassial define la crisis del adolescente como necesaria y


estructurante? Relacione con algún texto que considere pertinente.

10) Describir el termino DES-ORDEN según el texto de Adolescencia:


Reorganización…y relacionarlo con alguno de los textos puente.

Grassi plantea que la adolescencia es un momento de transformaciones y cambios,


esto implica los explicado mediante los siguientes términos: organización, reorganización
y neoorganizaciones. Reorganización implica que un orden es cambiado, transformado
por reacomodamiendo, reordenamientos, por des-orden de lo existente. La incorporación
de nuevos elementos des-ordena lo establecido dando lugar a neo-organizaciones.

Un orden organizacional puede nacer a partir de un proceso que produce desorden.


La complejidad de la relación orden-desorden-organización surge cuando se constata que
fenómenos desordenados son necesarios en ciertas condiciones, en ciertos casos para la
producción de fenómenos organizados, lo cual contribuye al incremento del orden.

El des-orden puede ser definido según distintos sentidos: por un lado, en lo que a
producción subjetiva y adolescencia se refiere, des-orden no es mera oposición a orden ni
dicho des-orden aparece por descuido, desgano, negativismo o rebeldía adolescente.
Des-orden no es producto de una carencia del sujeto ni deviene “evolución natural” del
desarrollo. Des-orden es meta a alcanzar mediante un esfuerzo de trabajo psíquico y su
realización comporta un redito positivo en la producción de subjetividad.

La vida psíquica encuentra distintos momentos en los cuales se trata de inscribir,


incorporar, metabolizar lo heterogéneo y asi re-organizar, re-ordenar, des-ordenar lo
previo.

FALTA LO DE RELACIONAR CON TEXTO PUENTE

11) Desarrolle lo originario

Lo originario hace referencia a aquel proceso que da lugar a la constitución del


aparato psíquico del bebe. Todo comienza a través de un aparato psíquico que, con sus
funciones de representación y metabolización debe incorporar elementos heterogéneos a
si y convertirlos en homogéneos. En el caso del aparato psíquico en sus comienzos, va a
tener que metabolizar a través del proceso originario el efecto de un doble encuento: el
del recién nacido con la madre y el de éste aparato psíquico naciente con su propia
corporeidad.

El encuentro del aparato psíquico naciente es con los procesos psicosomáticos que se
han despertado en la madre a partir del estado de afecto (presencia o ausencia) en su
psiquismo de la representación hijo. Es decir, para el aparato psíquico materno, el
naciente es un elemento heterogéneo a si, que tendrá que metabolizar; por lo cual
tambien hay un trabajo de metabolización en la madre, que va a implicar la puesta en
amrcha de los tres procesos psíquicos de representación.

El encuentro del bebe con la madre es une ncuentro con los procesos psicosomáticos
maternos a partir del trabajo de metabolización, que implica tener que representar la
presencia de un elemento heterogéneo a ella, que es el propio hijo, y de cómo sea la
relación establecida por ella con dicha representación, que tipo de afectos la acompañan.
Grassi destaca que estos primeros encuentros bebe-madre, son con los procesos
psicosomáticos despertados en la madre a partir de cómo ella viene procesando la
representación hijo en su psiquismo, lo cual le produce respuestas que se transmiten en
el cuerpo a cuerpo de la alimentación, las caricias y los cuidados corporales. La
representación-hijo en el psiquismo materno transmitida via “caricias-miradas-palabras” es
un elemento a metabolizar por el niño.

En este encuentro del aparato psíquico materno-aparato psíquico naciente, se


muestra la presencia o ausencia del principio del placer, el cual es fundamento de la
puesta en marcha del proceso de representación. Esto quiere decir que el principio de
placer es una condición de inicio de la puesta en marcha de la actividad de representación
para el proceso originario.

El principio de placer ha de estar presente en las dos partes que integran este
encuentro, en el cuerpo del niño y en los procesos psicosomáticos maternos. Es
necesaria la presencia del principio del placer en las dos partes que integran le encuentro
para que comience a trabajar el aparato psíquico y desencadene el proceso de
representación. Para lo originario, las primeras representaciones de lo corporal se
denominan pictogramas, que son las marcas, la inscripción del principio del placer en el
cuerpo. Pictograma es principio de placer corporizado.

Este concepto de representación pictogramatica propone un modelo por el cual no se


podría decir que lo psíquico por constituirse se apoyara en el cuerpo ya constituido.
Desde este punto de vista hay razones que justifican esta diferencia:

A) Lo pisquico mas que apoyado esta enraizado en lo somatico. No va a ser tan fácil
la delimitación de las dos entidades. Porque las racies pisquicas de la subjetividad
penetran y se hunden, se expanden y se bifurcan cada vez mas arraigadas en el soma.

B) Diferencia soma-cuerpo: al nacer, un bebe nace soma. El soma aun no es cuerpo.


Devendrá cuerpo libidinizado, cuerpo erogenizado. Existen procesos biológicos,
mecanismos neurológicos, herencias genéticas que regulan el funcionamiento somatico,
pero no hay un cuerpo “antes” que espera y se presta a lo psíquico. Se diría que proceso
originario es pasaje del soma al territorio, al estado de lo psíquico, donde lo somatico
termina de tomar vida, se hace cuerpo erógeno. Ambos, psiquesoma, se co-constituyen.

C) El proceso originario y su modo de representación “el pictograma” en cuanto esta


determinado por el principio de placer prpduce un pasaje del soma al estado de cuerpo
erógeno, cuerpo psíquico. Y asi comienza la integración psicosomática. La presencia del
principio de placer en el doble encuentro, es la condición para que el soma, el recién
nacido, pase a otro territorio, otro estado, y quede inscripto como cuerpo erógeno.

Como dijimos anteriormente, el otro elemento heterogéneo a metabolizar o


representar por parte del naciente aparato psíquico es el “propio cuerpo”. El bebe va a
metabolizar su cuerpo a partir de las sensaciones corporales y asi la corporeidad propia
va a quedar representada en el psiquismo naciente.

La representación correspondiente al trabajo de representación de lo originario


cuando esta regulada por el principio de placer es el pictograma de fusión. ¿Qué fusiona?

 Lo somatico y lo psíquico, su efecto es la integración psicosomática. La


subjetividad es integración psicosomática.
 Objeto y zona. La boca y el pecho están fundidos.
 Representación y afecto: la representación es el afecto y el afecto es la
representación. Pictograma de fusión es principio de placer corporizado.

Relacione los conceptos de rassial con el concepto de "confrontacion" de


winnicott
Rassial explica en sus escritos que los padres suelen referirse a sus hijos como
insolentes, pero el autor dice que mas alla de esta insolencia, el adolescente, al dirigirse a
los padres, se pone a la vez en posición de demandar, de contradecir y de imitar.

Con “demandar” se refiere a solicitaciones repetidas del adolescente para recibir de


sus padres tal objeto o tal autorización, pero aclara que responder directamente a la
demanda no resuelve nada. Los padres deben medir que lo que se demanda suele ser un
signo de escucha, un signo de amor o de reconocimiento. Lo que para el adolescente
cuenta es que su demanda y su derecho de demandar sean reconocidos como legitimos.
La demanda va en el sentido del trabajo de apropiación de si mismo y del mundo que
constituye el proceso de adolescencia.

Con “contradecir” se refiere a una exigencia ilusoria del adolescente de un discurso sin
contradicción. Asi el subrayara las contradicciones internas del discurso de los padres,
entre lo que ellos dicen y lo que hacen, lo que promueven y lo que son, etc. Es necesario
concebir ese placer de contradecir en paralelo con el idealismo de los adolescentes, su
anarquismo en el doble sentido de una rebelión contra toda autoridad y de una pasión por
la utopía.

Finalmente, con “imitar” hace referencia a la semjeanza que existe entre los
adolescentes y lo que han sido sus padres en la adolescencia, lo que han soñado ser o, al
contrario, lo que han reprimido de sus propios deseos.

Estos conceptos pueden relacionarse con el concepto de “confrontación” de Winnicott


debido a que determinan ciertos caracteres de los adolescentes e implican un
enfrentamiento hacia las figuras parentales.

Para Winnicott, el adolescente es y debe ser inmaduro, y una de las características de


la inmadurez adolescente es la importancia y necesidad de que salga al encuentro del
reto adolescente, enfrentar el desafio, es decir, la confrontación. Esta se refiere a una
contención que no posea características de represalia, de venganza, pero que tenga su
propia fuerza; donde existe el desafio de un joven en crecimiento, debe haber un adulto
para encararlo. Como dice Rassial, es en ese dialogo difícil entre los adolescentes y sus
padres que ambos descubren el mundo que los rodea, sus propias dependencias y se
sienten desbordados, fundando un conflicto, pero es un conflicto necesario y fundador. Y
es ahí, según Winnicott, que deben estar los adultos para contener y enfrentar el desafio.
Los padres deben realizar un trabajo complejo de contención con el adolescente; ellos
deben considerarlo como un futuro adulto, pero con cuidado ya que ese adolescente
tambien necesita ser protegido y contenido. Deben encontrar un equilibrio a cada nuevo
paso entre ese “contener” y ese “separarse”.

12) Desarrolle y articule el cambio de lugar generacional que plantea Rassial con
el concepto de confrontación que plantea Winnicott
Rassial plantea que las transformaciones que sufre el cuerpo del púber en el paso de
la niñez a la pubertad van a ser vividas, con frecuencia, como una competición con los
padres, debido a que, al crecer, éste se apropia de los atributos del adulto. Esto hace que
los padres ya no aseguran un sumplemento del ser, un poder de mas, y a partir de allí el
se opondrá a toda autoridad que ya no se apoye sobre la diferencia corporal que existía;
pero, por otro lado, esta apropiación implica que el adolescente se de cuenta de que
poseer el conjunto de los atributos de la edad no es la propiedad de ciertos humanos, sino
un estado provisional, como lo era la infancia. Entonces, desde el punto de vista de las
generaciones, el mundo esta dividido no ya entre dos especies: “los mayores y los
pequeños”, sino entre un cierto numero de estados provisionales, como puede ser: niño,
adulto y viejo. Es decir, si el niño crece, es tambien que los padres envejecen, y si el toma
posición de adulto, los desaloja un poco para empujarlos hacia la vejez. Esto hace que el
adolescente tambien de cuenta de la mortalidad.

Esto decepciona al adolescente, sus padres ya no pueden ser los referentes últimos,
ideales, infalibles, y esto tendrá dos consecuencias:

1. Modificara de forma radical la relación del adolescente con sus padres, el


alcance y el estilo de sus demandas, de sus quejas, de sus reinvidicaciones.
2. Volverá a plantear la cuestión de otro como referente ultimo que esta vez sea
infalibre y pueda garantizar con eficacia y de forma duradera al adolescente su
identidad.

Todo esto es explicado por Rassial a través del concepto de “cadena de las
generaciones”, seria que el adolescente descubre una dimensión infinita: los padres no
son los primeros, el mismo ni sus hermanos serán los últimos, descubre que esta cadena
puede prologarse después de el y descubre una nueva responsabilidad.

Asi es como el adolescente va descubriendo que existen mas discursos que el


parental, que no es el único valido, entonces las figuras parentales comienzan a perder
valor y se forman las dos características del adolescente que los padres siempre resalta:
ser insolente y contestador. En ese dialogo difícil entre los adolescentes y sus padres, los
unos y los otros descubren el mundo que los rodea, sus propias dependencias y cada
uno, a su manera, se siente desbordado. Se constituyen los conflictos, pero son
necesarios y fundadores. Los adolescentes confrontan a los padres y los padres deben
responder con enfrentamiento al desafio del adolescente. Esto se relaciona con el
concepto de “confrontar” que utiliza Winnicott en su obra “realidad y juego”: para
Winnicott, el adolescente es y debe ser inmaduro, y una de las características de la
inmadurez adolescente es la importancia y necesidad de que el adulto salga al encuentro
del reto adolescente, enfrentar el desafio, es decir, la confrontación. Esta se refiere a una
contención que no posea características de represalia, de venganza, pero que tenga su
propia fuerza; donde existe el desafio de un joven en crecimiento, debe haber un adulto
para encararlo. Los adultos deben estar para contener y enfrentar el desafio. Los padres
deben realizar un trabajo complejo de contención con el adolescente; ellos deben
considerarlo como un futuro adulto, pero con cuidado ya que ese adolescente tambien
necesita ser protegido y contenido. Deben encontrar un equilibrio a cada nuevo paso
entre ese “contener” y ese “separarse”.

13) ¿Qué trabajo debe realizar el adolescente para elaborar lo originario


puberal?

Ante todos los cambios corporales que enfrenta el púber, se genera una vivencia de
extrañamiento corporal. El sentimiento de extrañeza, asociado a este cuerpo puberal, la
perdida de los reparos y los limites corporales llevan al adolescente a tratar a su cuerpo
como un “objeto extraño”. Asi, la yoidad tambien se encuentra inscripta en el mismo trato
como ajenidad, lo que abre a procesos de identificación-desidentificacion. Viejas e
históricas identificaciones, inscripciones reunidas en el cuerpo infantil-niño ideal-padrs de
la infancia, identificados en el cuerpo del niño, las caídas de los objetos de la infancia no
se producen sin un pasaje por lo corporal, porque las identificaciones con los objetos son
tambien inscripciones corporales.

Los conceptos de originario y originario puberal abren perspectivas donde situar la


problematicas del objeto inscripto en lo corporal y sus trastos. Por el trabajo de lo
originario puberal, la pulsión busca el objeto inscripto en el propio cuerpo erógeno. La
elaboración psíquica de lo originario puberal transforma la búsqueda de objeto acoplado
al cuerpo propio. Trabaja el autoerotismo produciendo la excorporacion del objeto. El
objeto parcial-complementario se reordena hacia el objeto exterior, lo pregenital deviene
para genital.

Lo originario puberal repite y busca que en el objeto se reinvista al yo y reduplique la


mismidad. Para elaborar lo originario puberal, el púber debe hacer un trabajo de no
igualación, no identificación de la propia yoidad en el objeto, debe buscar la alteridad
corporal subjetiva en el objeto. Pero tambien, lo originario puberal insiste y nuevamente
busca repetir los modelos ya conocidos, investidos a lo largo de la historia de las
identifdicaciones corporales, incestuosas familiares. Recordemos que lo puberal es
saturación sexual genital incestuosa que pulsa por el retorno a la unidad narcisista
originaria y lo originario puberal trabaja bajo el axioma de la complementariedad de los
sexos, fantasia de reecneutnro con la pareja complementaria incestuosa que conduce
inscoenite y peligrosamente hacia la amenazante figura de la madre fusional arcaica.
Entonces, nuevamente la elaboración de lo originario puberal consiste en la no repetición
en el hallazgo de objeto, de identificaciones infantiles familiares. El púber debe hacer un
trabajo de des-identificacion del objeto con los modelos familiares, busqeuda de lo altero
en un espacio extrafamiliar.

Entonces, en lo puberal se pone en funcionamiento el modo de relación que tenia el


bebe con los objetos primarios, se vuelve a los pictogramas, causa de que predomina el
proceso originario. Se vuelve a lo mas arcaico, a lo puro, lo pulsional. El púber eligira
como objetos a los padres porque tiene inscripta la sexualidad de los padres en el cuerpo.
El cuerpo se hace incestuoso. Pero en este movimiento hacia los objetos infantiles se va a
encontrar con la barrera contra el incesto como prohibición. Entonces tendrá que buscar
su objeto por fuera de la familia y tendrá que sublimar.

A paritr de la pubertad habrá dos movimientos de sentido contrario:

Lo puberal: proceso que pulsa hacia los objetos incestuosos, hacia el objeto
complementario inscripto en el cuerpo con poca mediatización, a lo familiar conocido,

Lo adolescente: acatada la prohibición de incesto, es trabajo de simbolización, de


elaboración de lo puberal; tiende a la sublimación, a buscar objetos por fuera de la familia,
a la mediatización.

Ambos funcionan concomitantemente, se complementan de algún modo.

Por lo originario puberal, la repetición pulsa. Por la creatividad adolescente, la libido


altruista va mas alla, diferencia, crea, es hallazgo, encuentra objeto a otro, es alteridad.

14) Relacione la sig. afirmación con el concepto de alteridad en el hallazgo de


objeto:"La pulsión se pone ahora al servicio de la función reproductiva, se
hace altruista"

En “Metamorfosis de la pubertad”, Freud indica que uno de las transformaciones que


acontece al adolescente se da sobre la meta sexual, las zonas erogenas y el hallazgo de
objeto, hasta ese momento infantil. Respecto a la meta sexual y zonas erogenas, en la
infancia, como las pulsiones son parciales, hay diversas zonas erógenas en el propio
cuerpo del niño, la pulsión es autoerotica, esta centrada y, además, respecto al objeto,
aun carece de el, el pecho materno había sido el primer objeto pero, al tener un
conocimiento global de la madre, el niño lo pierde y utiliza su propio cuerpo para la
satisfacción sexual.

Con la emergencia de la pubertad, la sexualidad infantil experimenta dos


transformaciones decisivas: la subordinación de todas las fuente soriginarias de la
excitación sexual a la zona genital y el hallazgo de objeto. La primera se consuma por el
mecanismo de aprovechamiento del placer previo, o sea, los actos sexuales autónomos
resultantes de la conjugación de excitación y placer pasan a ser actos preparatorios para
la nueva meta sexual, que el señala es el vaciamiento de los productos genésicos. El
logro de esta meta pone fin a la excitación sexual. Por otro lado, la elección de objeto es
guiada por los indicios infantiles renovados en la pubertad. Y, respecto a las zonas
erógenas, la formula para su nueva función seria: son empleadas para posibilitar por
medio del placer que ellas ganan como en la vida infantil, la producción del placer de
satisfacción mayor.

De todo esto, sumada la maduración de sus órganos sexuales, los genitales, en el


púber aparece una nueva función: la aptitud para la reproducción. La pulsión se pone al
servicio de la reproducción, se torna “altruista”. Esto, además, se relaciona con una
elección de objeto “por alteridad”, como indica Grassi. Esto se explica de la siguiente
manera: lo altero hace referencia al altruismo, además de la alteridad y, si la pulsión se
pone al servicio de la eproduccion y esto entonces abre a la cuestión de la relación del
sujeto con un interés que no es exlusivamente “individual”, sino de la “humanidad”, la
consideración por lo altero es el acoplarse a un interés colectivo.

RELEER

15) ¿Cuáles son los prerequisitos para la formacion del caracter. Desarrolle.
(pregunta de practico)

Indefinido:

1) Caracterizar cada una de las operaciones psíquicas del entretiempo de la


sexuación.
2) ¿Cómo operan la I.C.C. y la I.E. en la pubertad?
3) Puntualizar cuáles son los diferentes caminos para el Hallazgo de Objeto.
4) Describa, según D. Winnicott, lo esperable de la adolescencia.
5) Desarrolle los cambios que sufre la pulsión sexual en la pubertad.

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