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Pregunta Nº 1

Situación Problemática 1 (40 puntos)


A) Determine la relación existente entre los fundamentos dados, para hacer lugar al pedido del co-demandado
titular registral, en el caso: Carrasco de Lucero, Nilda c/ prosdocimo, segundo Bernardo y otro - acciones
posesorias/reales- reivindicación y el punto de la unidad 5 del módulo 2 referido a "Protección de las
Relaciones de Poder" Sistema del Código Civil y Comercial.

A) La relación que hay entre los fundamentos dados en el caso y la unidad 5 del módulo 2, es que
ambos tienen su respaldo en el Código Civil y Comercial. Los fundamentos planteados en el caso se
sustentan de las protecciones de las relaciones de poder, por un lado la parte actora acciona su
“protección” en una acción real como lo es la reivindicatoria la cual defiende la existencia de un de
un derecho real ante la lesión de desapoderamiento o despojo; y por el otro uno de los co-
demandados sostiene su defensa en el art. 2255 C.C.Y C. “Legitimación pasiva. La acción
reivindicatoria debe dirigirse contra el poseedor o tenedor del objeto, aunque lo tenga a nombre del
reivindicante…..” y como vimos el Sr. Maad sólo es titular registral no teniendo la posesión del
inmueble en cuestión. Por lo tanto se da lugar al recurso de apelación del co-demandado y se
obtiene como resultado que no puede admitirse la demanda reivindicatoria contra quien no se tiene
la certeza de que esté poseyendo el inmueble reivindicado; siendo la consecuencia el rechazo de la
demanda en contra de Maad.

Se hace lugar al pedido del co-demandado (Jorge Maad) en virtud de:

-La jurisprudencia ha dicho que el dominio se acredita con la respectiva escritura o testimonio
auténtico, siendo insuficiente a tal fin un informe o certificación registral, porque de éste no
surge quiénes materializaron la transmisión, ni la forma en que ella se realizó, ni si se hizo efectiva
la tradición. El juez jamás podrá basarse para considerar la titularidad y hacer proceder una acción
reivindicatoria solamente en la titularidad registral.
No obstante, aun cuando la publicidad registral concuerde con la realidad jurídica, es decir que se
publicite la propiedad por parte de quien efectivamente fuera su titular, ello no implica que el
propietario se encuentre en posesión efectiva del inmueble.
Para poder deducir válidamente que quien efectuó el avance era Maad debería haberse probado
que es poseedor del fundo contiguo, no que era titular registral, no que era titular del derecho de
dominio, sino que era poseedor. (Art. 2270.- Independencia de las acciones. En las acciones
posesorias es inútil la prueba del derecho real, más el juez puede examinar los títulos presentados
para apreciar la naturaleza, extensión y eficacia de la posesión.)

-Nada impide que, pese a tener Maad derecho al inmueble contiguo al del actor, otra persona lo
posea y que por tanto ella sea el sujeto pasivo de la reivindicación. Incluso la sentencia condena a
otra persona, Prosdócimo, que no recurrió, por lo que a su respecto la condena quedó firme, a
quien el a quo consideró poseedor, y sin embargo él no tiene título alguno.

-No puede confundirse la posesión con el derecho de dominio; así, mientras la primera otorga
acciones posesorias (ya sea para mantener o para recuperar la cosa), la segunda otorga acciones
reales (como lo es la reivindicación en este caso); la primera puede ejercerse sin la existencia de
derecho ni de causa jurídica alguna, mientras que la segunda es un derecho y requiere de una causa
jurídica válida
-En el caso, el sujeto pasivo de la reivindicación debe ser poseedor, ello debía probar el actor (Art.
2255)

-Por el contrario, se demanda por reivindicación a Prosdócimo, lo que implica afirmar que éste
posee, y de hecho Prosdócimo es condenado, sin que esa parte de la sentencia haya sido recurrida,
y como no se alegó ni probó que sean co-propietarios se aplica el Art. 1913.- Concurrencia. No
pueden concurrir sobre una cosa varias relaciones de poder de la misma especie que se excluyan
entre sí. Si Prosdócimo es condenado porque es poseedor, entonces ello implica que Maad no
posee, al margen de que pudiera tener derecho a la posesión.

-no puede admitirse la demanda reivindicatoria contra quien no se tiene la certeza de que esté
poseyendo el inmueble reivindicado.

Relaciones de Poder: El nuevo Código Civil y Comercial denomina tanto a la posesión como a la
tenencia como las relaciones de poder del sujeto con una cosa.
En el caso planteado se realiza un recurso de apelación que resolvía hacer lugar a la acción
reivindicatoria impetrada por la actora respecto de desposesión por parte del titular del terreno
colindante, atento a la existencia de un cerco vivo con alambre que avanza sobre dichos lotes. Se
trataba de un caso de posesión, por la cual la parte actora buscaba desposeer a la parte demandada
que se encontraba afectando los límites de su lote. Pero, se da lugar al recurso de apelación del co-
demandado y se obtiene como resultado que no puede admitirse la demanda reivindicatoria contra
quien no se tiene la certeza de que esté poseyendo el inmueble reivindicado.

POSESION: Existe posesión cuando una persona (por sí o por medio de otra) ejerce un poder de
derecho sobre una cosa (tiene el corpus), comportándose como titular de un derecho real, lo sea o
no (Art. 1909). Es decir, que tiene el animus domini y lo exterioriza. Se debe ejercer el poder sobre
la cosa, es decir que se debe evidenciar esa posesión mediante actos posesorios exteriorizables en
forma material (Ejemplo: percibir los frutos, hacer mejoras, excluir a terceros, etc. (Art. 1928).

Actos posesorios sobre la cosa: son conductas que tiene una persona sobre la cosa, que consisten
en actos materiales que demuestren una dependencia física de ella hacia dicha persona.

Elementos de la posesión: Savigny habla de dos elementos necesarios para adquirir la posesión, y el
Cód. adhiere a ello:

-el corpus: (elemento físico objetivo) es la posibilidad de disponer físicamente de la cosa (regalarla,
venderla, prestarla) en cualquier momento (no necesita estar en contacto físico permanente con la
cosa) y defenderla de acciones extrañas; dicha posibilidad debe ser querida.

-el animus: (elemento subjetivo) consiste en que la persona que posee la cosa se sienta dueño de
ella, es decir que no reconozca en otra persona un derecho mejor sobre la cosa. Aunque no sea el
dueño, mientras se comporte como tal, basta.
Fundamento de la protección posesoria: al poseedor se lo protege, a través de las acciones
posesorias, de los ataques de terceros o del mismo dueño de la cosa.

Tanto las acciones posesorias como las acciones reales son defensas que tienen los titulares de una
relación de poder (acciones posesorias: de despojo, de mantener) o de un derecho real (acciones
reales: reivindicatoria, negatoria, confesoria y de deslinde) cuando sufren un ataque a sus
contenidos. Pueden realizarse en forma extrajudicial (ya sea civil o penal) o en forma judicial (por
medio de las acciones posesorias)

Forma Judicial: son las defensas judiciales que realiza el poseedor o tenedor de un mueble o
inmueble a través de acciones posesorias o interdictos cuando le atacan su posesión o tenencia
mediante turbación (cuando no se lo excluye totalmente) o desapoderamiento (cuando se lo
excluye totalmente).

Acciones posesorias: Son aquellas realizadas sobre muebles, muebles registrables o inmuebles y que
se utilizan para mantener (ante la turbación) o recuperar (si hay desapoderamiento) el objeto sobre
el que se tiene una relación de poder (posesión o tenencia). Hay dos clases:

-De mantener: es usada para mantener la posesión o tenencia contra la turbación a su derecho de
poseer, sobre una cosa o una universalidad de hecho.

-De despojo: es usada por el tenedor o poseedor para recuperar la posesión o tenencia contra el
desapoderamiento de una cosa o universalidad de hecho, realizado por el despojante, sus herederos
y sucesores particulares de mala fe.

Acciones Reales: son los medios de defender en juicio la existencia, plenitud y libertad de los
derechos reales contra ataques que impiden su ejercicio. Una de ellas es la Reivindicatoria, la cual
persigue recuperar la cosa de manos de quien la tenga, ya sea en su totalidad o en parte material.

B) ¿Qué argumento resulta determinante para la procedencia de la acción en el caso: Martínez, Marcelo
Fabián c/ salvador Leiva-nulidad-reivindicación"?

B) En el caso planteado, se rechaza la apelación del demandado, y se confirma la sentencia.


Se funda en que la realidad jurídica que impone la compra venta de automóviles sobre los cuales
recae un régimen propio de transferencia, establecido en el art. 1° del decreto ley 6582-58,
reemplaza a la tradición como "modo" de constitución del derecho real, por la inscripción registral
lo que le hace adquirir a la misma la calidad de constitutiva, en tanto reza "...la transmisión del
dominio de los automotores deberá formalizarse por instrumento público o privado y sólo producirá
efecto entre las partes y con relación a terceros desde la fecha de su inscripción en el Registro
Nacional de la Propiedad del Automotor". De ese modo, ha quedado fehacientemente acreditado
que el Sr. Martínez nunca ha sido titular registral; además que el art. 2° del citado decreto ley
expresa ".... la inscripción de buena fe de un automotor en el Registro confiere al titular de la misma
la propiedad del vehículo y el poder de repeler cualquier acción de reivindicación, si el automotor
no ha sido hurtado ni robado.
Pero a pesar de ello la corte, después de evaluar la nulidad de la inscripción registral, admite la
legitimación activa del accionante para solicitar la reivindicación; fundándose en una excepción de
falta de acción.
Esta referencia se presenta como necesaria, pues constituye jurisprudencia de nuestros Tribunales
el que se reconozca a la "Excepción de falta de acción", solamente relacionada a la carencia de
legitimación sustancial activa, esto sería, la ausencia de una condición que hace a la calidad de
accionante y no a la legitimidad del derecho por él ejercido como titular inobjetable de una relación
jurídica.
El boleto de compraventa, es considerado suficiente para legitimar al accionante a demandar la
reivindicación del automotor adquirido en virtud del principio de la cesión implícita.
Además el demandado, luego de tomar conocimiento de la existencia de una denuncia de venta
anterior del automotor en favor de otra persona, prosiguiendo el trámite de inscripción sin
persuadirse de la veracidad y autenticidad del otorgamiento del formulario 08 por el titular registral
como de la certificación notarial, esta basada en un proceder negligente dentro del contorno de
circunstancias que rodean al negocio jurídico.
Con la denuncia de venta opera una especie de ficción legal a través de la cual se presume la
circunstancia de que se ha hecho tradición del automotor por parte del titular registral, colocando
a otro adquirente anterior en condiciones de poder efectuar por sí solo la inscripción registral a su
nombre. Situación de hecho que por la publicidad registral produce efectos jurídicos, e ingresa como
apariencia formal en el tráfico jurídico.
De tal suerte, el Sr. Leiva no puede ampararse en la buena fe, pues, frente a la denuncia de venta a
favor de otro adquirente, debió por lo menos persuadirse de la autenticidad de la suscripción del
formulario 08 que le fuera entregado por un Sr. Vargas como de la posesión del rodado por parte
del mismo. Con ello basta para tener por no configurada la protección del adquirente en los
términos del art. 2 del decreto ley 6582/58, desde que, si bien la buena fe se presume, ella no es
compatible con una actitud negligente.

Teniendo el demandado, que teniendo a su favor una inscripción que fue declarada nula, debe
restituir la cosa a su verdadero propietario.

Art. 2254. Objetos no reivindicables en materia de automotores. No son reivindicables los


automotores inscriptos de buena fe, a menos que sean hurtados o robados.

Tampoco son reivindicables los automotores hurtados o robados inscriptos y poseídos de buena fe
durante dos años, siempre que exista identidad entre el asiento registral y los códigos de
identificación estampados en chasis y motor del vehículo.

Art. 2255. Legitimación pasiva. La acción reivindicatoria debe dirigirse contra el poseedor o tenedor
del objeto, aunque lo tenga a nombre del reivindicante.

El tenedor de la cosa a nombre de un tercero puede liberarse de los efectos de la acción si


individualiza al poseedor. Si no lo individualiza, queda alcanzado por los efectos de la acción, pero la
sentencia no hace cosa juzgada contra el poseedor.

Cuando se trata de un automotor hurtado o robado, la acción puede dirigirse contra quien lo tiene
inscripto a su nombre, quien debe ser resarcido en los términos del régimen especial.
Art 2257. Prueba en la reivindicación de muebles registrables. Respecto de la prueba en la
reivindicación de cosas muebles registrables, robadas o hurtadas, cuando la registración del
demandado es de mala fe, se deben observar las reglas siguientes:

a) se presume la mala fe cuando no se verifica la coincidencia de los elementos identificatorios de la


cosa de acuerdo al régimen especial y tampoco se constata la documentación y estado registral;

b) el reivindicante debe probar su derecho con el certificado que acredita su inscripción en el registro
respectivo. El demandado debe justificar de igual manera el derecho que opone;

c) si el derecho invocado por el actor no está inscripto, debe justificar su existencia y la rectificación,
en su caso, de los asientos existentes. Si el derecho del demandado carece de inscripción, incumbe a
éste acreditar el que invoca contra el actor;

d) si el actor y el demandado presentan antecedentes que justifican la inscripción registral,


emanados de un autor común, es preferida aquella que acredita la coincidencia de los elementos
identificatorios registrales exigidos por el régimen especial;

e) si el actor y el demandado presentan antecedentes que justifican la inscripción registral derivados


de personas distintas, sin que se pueda decidir a quién corresponde el derecho controvertido, se
presume que pertenece al que lo tiene inscripto.

Art. 2261.- Sentencia. Si se admite la demanda, el juez debe ordenar la restitución del objeto, parte
material de él o sus restos. En cuanto a las reglas de cumplimiento de la sentencia, se aplican las
normas del Capítulo 3 del Título II de este Libro.

Si se trata de una cosa mueble registrable y media inscripción a favor del vencido, debe ordenarse la
rectificación del asiento registral.

Determine la relación existente entre los fundamentos dados por la mayoría y el punto de la unidad 7 del
módulo 4 referido a Régimen especial de los automotores: Caracteres

CONCLUSION:

-Si se trata de automotores no hurtados ni robados y la inscripción es de buena fe: se aplica el art.
2°, Dto. 6582/58 “La inscripción de buena fe de un automotor en el registro confiere al titular de la
misma la propiedad del vehículo y el poder de repeler cualquier acción de reivindicación, si el
automotor no hubiese sido hurtado o robado”.

-Si se trata de automotores hurtados o robados y la inscripción y posesión son de buena fe: se aplica
el art. 4°, Dto. 6582/58: “El que tuviese inscripto a su nombre un automotor hurtado o robado, podrá
repeler la acción reivindicatoria transcurridos DOS (2) años de la inscripción, siempre que durante
ese lapso lo hubiese poseído de buena fe y en forma continua” (Prescripción adquisitiva de 2 años)
y art. 2254 C.C. y C.

-Si se trata de automotores no hurtados ni robados y la posesión es de mala fe: se aplica el art. 1899,
3º párr. “También adquiere el derecho real el que posee durante diez años una cosa mueble
registrable, no hurtada ni perdida, que no inscribe a su nombre pero la recibe del titular registral o
de su cesionario sucesivo, siempre que los elementos identificatorios que se prevén en el respectivo
régimen especial sean coincidentes”. (Prescripción adquisitiva de 10 años)

-Si se trata de automotores hurtados o robados y la posesión es de mala fe: se aplica el art. 1899, 1º
párr. “Prescripción adquisitiva larga. Si no existe justo título o buena fe, el plazo es de veinte años”.
(Prescripción adquisitiva de 20 años)

Situación problemática 2 (20 puntos)


A) Determine los fundamentos dados, para rechazar la acción reivindicatoria y admitir la acción de
escrituración, en el caso: Illescas, Daniel Eduardo c/ Godoy, Cornelio y otro. Reivindicación

Fundamentos para rechazar la acción de reivindicación y admitir la acción de escrituración:

La cuestión queda situada en el cuadrante de la preferencia mediando sucesivas ventas sobre el


mismo bien, cuestión que ha de resolverse a favor de Godoy, quien ha recibido la posesión en mérito
a un título anterior, por sobre la compraventa celebrada entre Federico e Illescas con posterioridad
a aquella tradición.
En el supuesto de mediar un poseedor por boleto de fecha anterior, el posterior comprador por
escritura pública nunca ha adquirido realmente el dominio al no poder hacerse efectivamente de la
posesión, que con anterioridad detentaba un tercero.
Siendo pues, que la compraventa celebrada entre Federico e Illescas es inoponible a Godoy, ha de
estarse por el rechazo de la acción reivindicatoria intentada.

Godoy tiene a su favor el boleto de compraventa, el cual tiene valor y efectos sólo entre partes y el
modo (tradición, es decir la entrega efectiva de la cosa plasmada en la posesión), por lo tanto se
debe rechazar la acción reivindicatoria que propone Illescanas y hacerse efectiva la escrituración a
nombre de Godoy.

Todo ello con su respaldo en el C.C. y C.:


Art. 750.- Tradición. El acreedor no adquiere ningún derecho real sobre la cosa antes de la tradición,
excepto disposición legal en contrario.

Art. 756.- Concurrencia de varios acreedores. Bienes inmuebles. Si varios acreedores reclaman la
misma cosa inmueble prometida por el deudor, son todos de buena fe y a título oneroso, tiene mejor
derecho:
a-el que tiene emplazamiento registral y tradición;
b-el que ha recibido la tradición;
c-el que tiene emplazamiento registral precedente;
d-en los demás supuestos, el que tiene título de fecha cierta anterior

Art. 1892.- Título y modos suficientes. La adquisición derivada por actos entre vivos de un derecho
real requiere la concurrencia de título y modo suficientes.
Se entiende por título suficiente el acto jurídico revestido de las formas establecidas por la ley, que
tiene por finalidad transmitir o constituir el derecho real.
La tradición posesoria es modo suficiente para transmitir o constituir derechos reales que se ejercen
por la posesión. No es necesaria, cuando la cosa es tenida a nombre del propietario, y éste por un
acto jurídico pasa el dominio de ella al que la poseía a su nombre, o cuando el que la poseía a nombre
del propietario, principia a poseerla a nombre de otro. Tampoco es necesaria cuando el poseedor la
transfiere a otro reservándose la tenencia y constituyéndose en poseedor a nombre del adquirente.
La inscripción registral es modo suficiente para transmitir o constituir derechos reales sobre cosas
registrables en los casos legalmente previstos; y sobre cosas no registrables, cuando el tipo del
derecho así lo requiera.
El primer uso es modo suficiente de adquisición de la servidumbre positiva.
Para que el título y el modo sean suficientes para adquirir un derecho real, sus otorgantes deben ser
capaces y estar legitimados al efecto.
A la adquisición por causa de muerte se le aplican las disposiciones del Libro Quinto.

Art. 1893.- Inoponibilidad. La adquisición o transmisión de derechos reales constituidos de


conformidad a las disposiciones de este Código no son oponibles a terceros interesados y de buena
fe mientras no tengan publicidad suficiente.
Se considera publicidad suficiente la inscripción registral o la posesión, según el caso.
Si el modo consiste en una inscripción constitutiva, la registración es presupuesto necesario y
suficiente para la oponibilidad del derecho real.
No pueden prevalerse de la falta de publicidad quienes participaron en los actos, ni aquellos que
conocían o debían conocer la existencia del título del derecho real.

Prueba del derecho real en la reivindicación de inmuebles: en el caso en cuestión se aplica la


siguiente regla:

Si hay diferentes antecesores, y si el título del reivindicante (Illescas) es posterior a la posesión del
demandado, y ellos es insuficiente para realizar la demanda, aunque el demandado presente título.
(Fecha de adquisición de Godoy: 17-01-91 – Fecha de adquisición de Illescas: 03-07-98). En este
caso aunque la posesión del demandado no tenga causa o título que los legitime, el actor no puede
tener la relación posesoria con el objeto, ya que nunca pudo hacer la tradición de la misma (que es
el modo suficiente), de manera que no hubo adquisición definitiva (no puede haber 2 posesiones
iguales sobre el mismo objeto). Es decir que se da privilegio al que primero tuvo la posesión.
Pregunta Nº 3
Situación problemática 3 (40 puntos)
A) El Sr. Pedro González es propietario de una casa en un barrio alejado de la ciudad.
A los efectos de evitar saqueos se la prestó en forma verbal al Sr. Roberto Quintana en el año 1990. Este
último se instaló con su familia y, en forma inmediata, como no tenía instalación de agua caliente ni gas
natural realizó tal mejora, además construyó dos habitaciones para los hijos mayores y un baño. También
plantó frutales e hizo una mensura para luego colocar un cerco perimetral. El Sr. González continuó pagando
los impuestos que llegaban a su domicilio ubicado en el centro de la ciudad.
En enero del año 2013, cuando el propietario pretendió ingresar al inmueble, el Sr. Rogelio Pérez se lo
impidió.
Responda fundadamente los siguientes interrogantes: 1) ¿Que acción debería iniciar el Sr. Pedro
González para recuperar el inmueble? 2) ¿Que defensa puede oponer el Sr. Roberto Quintana? 3) ¿Qué
resultado puede llegar a tener el pleito a iniciar para recuperar el inmueble?

A)

1-El Sr. Pedro González deberá iniciar una acción de reivindicación sobre el inmueble que de buena
fe prestó al Sr. Quintana. Esta acción debe dirigirse contra el poseedor del objeto, aunque lo tenga
a nombre del reivindicante. En este caso, al momento en que el Sr. González quizo recuperar su
inmueble se encontraba en posesión ilegítima del mismo el Sr. Pérez.

2- El Sr. Roberto Quintana deberá probar que ya no posee el inmueble en cuestión. (Art. 1931 inc.
e). La demanda debería iniciarse en contra del Sr. Pérez, quien es el poseedor actual. Se le puede
adjudicar al Sr. Pérez una posesión ilegítima de mala fe viciosa.

Además, no puede admitirse la demanda reivindicatoria contra quien no se tiene la certeza de que
esté poseyendo el inmueble reivindicado.

3- El resultado que puede llegar a tener el pleito es que se haga lugar a la acción de reivindicación,
teniendo el Sr. Pérez que restituir el objeto en cuestión.

Por otro lado, el Sr. González ha hecho varias mejoras en el inmueble, por lo tanto puede reclamar
se le reintegren dichos gastos. Podría en su caso iniciar una adquisición por prescripción adquisitiva
de dominio, pero no se haría lugar a la misma ya que el Sr. González siguió pagando los impuestos.

B) Compare las situaciones fácticas dadas en el caso Illescas, Daniel Eduardo c/ Godoy, Cornelio y otro.
Reivindicación y en el punto A de esta situación problemática y establezca las diferencias en cuanto a la
adquisición del derecho real de dominio.

En el caso llescas, Daniel Eduardo c/ Godoy, Cornelio y otro. Reivindicación no se hace lugar a la acción
de reivindicación, ya que quien la inicia ha celebrado un contrato de compraventa por boleto a
nombre del demandado y además le ha otorgado la posesión, es decir hay un traspaso del dominio
a nombre de la persona contra quien se quiere intentar la acción.

En el caso planteado en el punto A) el actor tiene el título del inmueble y ha prestado el inmueble a
persona distinta que es quien no lo deja ingresar al inmueble; pero a pesar de ello no se ha
extinguido su derecho de dominio, el cual es perpetuo. (Art. 1942 C.C. y C.). Además no se observa
por parte del Sr. González el ánimo de abandonar la cosa ya que siguió pagando sus impuestos.

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