Sunteți pe pagina 1din 6

BOLSA DE VALORES EN PANAMÁ.

En 1989 surge la iniciativa por parte del sector privado de crear la Bolsa de Valores
de Panamá, S.A. (BVP), bajo el objetivo de operar un mecanismo centralizado de
negociación en donde confluyesen libremente las fuerzas de oferta y demanda de valores,
bajo los preceptos de transparencia y equidad. El 26 de junio de 1990 la BVP inicia
operaciones al llevar a cabo su primera sesión de negociación, con lo cual se inicia una
nueva etapa en el desarrollo del mercado de valores en Panamá.
Sin embargo, en el marco regulatorio del mercado de valores en panamá inicio
mucho antes de la creación de la BVP. La regulación del mercado de valores nace con el
Decreto de Gabinete 247 de 16 de julio de 1970, mediante el cual, la entonces Junta
Provisional de Gobierno establece el primer cuerpo normativo formal para regular, analizar
y fiscalizar la venta de títulos valores al público inversionista y se crea la primera Comisión
Nacional de Valores adscrita al Ministerio de Comercio e Industria, la cual tal como se
estableció gozaba de personería jurídica, autonomía en su régimen y manejo interno, sujeta
a la vigilancia e inspección del Órgano Ejecutivo y de la Contraloría General de la
República.
Este decreto surge con el objetivo de lograr la regulación de las ofertas de valores se
percibe como un elemento positivo en proporcionar seguridad a los inversionistas, y con
ello, alentar la formación de un mercado nacional de valores. Actualmente, el decreto en
cuestión constituye el marco regulatorio local a pesar de tener un alcance limitado.
Particularmente a partir de 1990 (creación de la BVP), el mercado nacional de
valores, que hasta entonces había apenas experimentados transacciones esporádicas,
empieza a ser escenario de mayor número de operaciones, muchas de mayor complejidad.
Con la creación de la Bolsa de Valores de Panamá, S.A., la compra y venta pública de
valores entra en una etapa más abierta y popular. Con la expansión del mercado aumentan
el número de intermediarios de compraventa y poco a poco resurgen las funciones
institucionales de pago, transferencia y liquidación de valores.
Debido a las realidades económicas y financieras el marco regulador vigente, en
noviembre de 1997, el Órgano Ejecutivo convoca a un grupo de trabajo para formular y
redactar una Ley marco para el Mercado de Valores de Panamá. DECRETO LEY 1 DE 8
DE JULIO DE 1999 (MARCO REGULADOR VIGENTE), con el objetivo de elaborar una
normativa moderna que expandiera la regulación a todas las facetas del mercado, asi como
introducir a través de la Ley, algunos elementos jurídicos novedosos que permitiesen
convalidar jurídica y operativamente algunas instituciones comunes en los mercados de
valores desarrollados como son la tenencia indirecta de valores, la inmovilización y
desmaterialización de títulos, elementos sin los cuales es impensable un mercado seguro y
fluido.
Ahora bien, el mercado siguió transformándose estableciendo nuevas exigencias para el
mejor desarrollo de la actividad de compra y venta de valores en el país, por lo que surge
La ley 67 de 1 de septiembre de 2011 que crea la Superintendencia del Mercado de
Valores, en reemplazo de la Comisión Nacional de Valores, y establece la figura de un
Superintendente como su representante legal y administrador, y una Junta Directiva que
actuará como máximo órgano de consulta, regulación y fijación de políticas.

FUNCIONAMIENTO DE LA BOLSA DE VALORES.


La bolsa de valores, funciona como un centro de acopio que reúne vendedores y
compradores de productos financieros de muy diversa índole. Por su complejidad e
importancia, dichas organizaciones son vigiladas estrechamente en todo lo relacionado a su
funcionamiento. Generalmente la vigilancia está a cargo de organismos públicos,
privados u organismos descentralizados, que regulan su actuación y dan fe de su
legitimidad y transparencia. La bolsa de valores, involucra en su funcionamiento diversos
actores como corredores, intermediarios, asesores y desde luego una gran variedad de
inversionistas sean individuos o complejas organizaciones empresariales.

Los instrumentos financieros que se pueden negociar en la bolsa incluyen entre


otros; acciones, bonos, obligaciones, certificados de inversión, títulos valor, futuros,
warrants etc. El requisito imprescindible para poder ofertar los valores comentados es que
los mismos deben estar inscritos en la misma bolsa. Para poder registrar y ofertar valores, la
empresa interesada debe hacer pública su información financiera y cumplir ciertos
requisitos; como obtener la certificación de la veracidad de sus cifras contables.

La Bolsa de Valores de Panamá (BVP) tiene una infraestructura que permite a las
diversas empresas, establecidas o no en Panamá, financiarse en forma de bonos o papeles
comerciales de deuda, o a través de capital accionario. Recientemente, se creó la Comisión
Nacional de Valores y se estableció una nueva Ley de Valores, lo que permitirá
mayor seguridad y protección a los inversionistas.
La función que ejerce toda Bolsa de Valores es de gran relevancia; ya que es
el mercado organizado donde convergen la oferta y la demanda de valores con el propósito
esencial de canalizar el ahorro a la inversión, y últimamente, la presencia
del Gobierno también se ha incrementado en el mercado.
Se considera que el mercado de valores es una opción viable para el que posee
fondos discrecionales y desea mejorar los rendimientos de su dinero, así como también
constituye una vía rápida para obtener financiamiento tanto de las grandes, como de las
medianas y pequeñas empresas.
Las Operaciones de Bolsas son todas las transacciones donde se lleve a cabo la
compra-venta de valores mobiliarios dentro de un lugar físico creado para tal fin. Todas las
operaciones deben ejecutarse dentro de las normas generales que hayan establecido los
organismos rectores del mercado de valores de cada país y de acuerdo con los principios y
usos del derecho comercial y en concordancia con los procedimientos y pautas que
establezca cada Bolsa de Valores en su libro de reglamento. Las operaciones bursátiles
están caracterizadas por tres elementos que se explican a continuación:

1. El intermediario: es el comerciante de la bolsa, se le conoce como agente de bolsa o


corredor de bolsa y actúa en representación de una firma miembro de la bolsa para
vender o comprar títulos valores.

2. La regulación: presupone que las operaciones que se efectúan en la Bolsa,


indistintamente de su modalidad, están reguladas por leyes, reglamentos y usos
bursátiles; no sólo por lo estipulado en sus reglamentos internos de funcionamiento
y constitución; sino también por aquellas que establezca el máximo organismo en
representación del gobierno. En nuestro país lo hacen la Comisión Nacional de
Valores, quienes deben acatar las prácticas y usos del derecho comercial.

3. La Seriación: esta característica dispone que los valores mobiliarios en su


presentación deben reunir las mismas características en cuanto a forma y
contenido; es decir deben ser homogéneas. Esto permite que sean tratados de forma
indistinta y en caso que se presente un valor que no cumpla con los requisitos que
lo identifican como tal, sea prontamente sustituido por otro regular que sí reúna
esas características en un breve plazo.

La Bolsa de Valores de Panamá le ofrece al inversionista tanto instrumentos de


deuda, como bonos y pagarés, así como acciones corporativas. En el mercado primario, es
decir instrumentos de primera emisión, los cuales en la Bolsa de Valores de Panamá
podrían ser bonos o acciones. En el mercado secundario, es decir, el mercado donde se
pueden comprar y vender títulos en circulación. Muchas de las empresas registradas en la
Bolsa de Valores de Panamá no transan sus acciones públicamente, sino
que buscan financiamiento a través de instrumentos de deuda como bonos o valores
comerciales negociables.
SUPERINTENDENCIA DE VALORES.

Mediante la ley 67 de 1 de septiembre de 2011 publicada en la Gaceta Oficial


No.26863-A de 2 de septiembre de 2011, se crea la Superintendencia del Mercado de
Valores como un organismo autónomo del Estado, con personería jurídica, patrimonio
propio e independencia administrativa, presupuestaria y financiera, con competencia
privativa para regular y supervisar a los emisores, sociedades de inversiones, intermediarios
y demás participantes del mercado de valores.

Las funciones y atribuciones de la Superintendencia del Mercado de Valores se aplicarán


sobre las siguientes actividades:

1. El registro de valores y autorizaciones de la oferta pública de valores.

2. La asesoría de inversiones.

3. La intermediación de valores e instrumentos financieros.

4. la apertura y gestión de cuentas de inversión y de custodias

5. La administración de sociedades de inversión.

6. La custodia y depósito de valores

7. La administración de sistemas de negociación de valores e instrumentos financieros.

8. La compensación y liquidación de valores e instrumentos financieros.

9. la calificación de riesgo.

10. El servicio de proveer precios sobre valores.

11. La autorregulación a que se refiere la ley del Mercado de Valores.

12. El suministro de información al Mercado de Valores, incluyendo al acopio


y procesamiento de esta.

13. Las demás actividades previstas en la ley del Mercado de Valores o que
se determinen a través de leyes, siempre que constituyan actividades de manejo,
aprovechamiento e inversión de recursos captados del público, que se efectúen
mediante valores o instrumentos financieros.
Las entidades que realicen cualquiera de las actividades señaladas en este artículo, en la
República de Panamá o desde ella, estarán sujetas a la supervisión de la Superintendencia
del Mercado de Valores, no quedarán sujetos a la fiscalización de esta entidad los bancos,
(excepto cuando sean Casas de Valores), las empresas financieras, además de las entidades
y personas naturales.

Su objetivo principal es el de fomentar, establecer y regular las condiciones propicias


para el desarrollo del mercado de valores

ESTRUCTURA DE LA SUPERINTENDENCIA DE VALORES.

Junta Directiva.
Máximo órgano de consulta, regulación y fijación de políticas generales de la
superintendencia.

 Adopta, Reforma y Revoca Acuerdos


 Recomienda al Órgano Ejecutivo reglamentación de LMV
 Resuelve Apelaciones ante la SMV Superintendente

Superintendente.
Representante legal y autoridad administradora de la Superintendencia, es responsable de la
conducción técnica y administrativa de la institución.

 Aprueba o Rechaza solicitudes de Licencia


 Supervisa y Fiscaliza
 Emite Resoluciones Sancionatorias
 Recomienda a JD adopción de Acuerdos.

Secretario General.

 Asesorar al Superintendente y al Intendente de Administración General en materias


de índole jurídico - administrativa.
 Elaborar informes en derecho en materias jurídico - administrativas que le sean
solicitados por el Intendente de Administración General y el Superintendente.
 Asesorar al Superintendente y al Intendente de Administración General en la
elaboración de manuales, instructivos y procedimientos en materias de su
competencia
 Asesorar a las Divisiones de la Intendencia de Administración General, respecto de
consultas y materias jurídico-administrativas en el ámbito de sus funciones.

S-ar putea să vă placă și