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Universidad Nacional de San Agustín de

Arequipa
Facultad de Psicología, Relaciones Industriales y Ciencias de la
Comunicación
Escuela Profesional de Ciencias de la Comunicación

“Habilidades del buen orador”

Estudiante:

Idme Cutipa, Mónica Rosario

Asignatura

Oratoria

Docente

Huamani Paco, Guillermo Raúl

Arequipa- Perú

2019
Contenido
INTRODUCCION .......................................................................................... 3

¿Qué es la oratoria? ........................................................................................ 4

Historia de la oratoria ..................................................................................... 5

Importancia de la oratoria .............................................................................. 6

Cualidades del Orador .................................................................................... 7

Cualidades Físicas ....................................................................................... 7

Cualidades intelectuales .............................................................................. 8

Cualidades morales: .................................................................................... 8

Modo de hablar .............................................................................................. 8

Uso de la voz ............................................................................................... 9

I. Confianza ............................................................................................10

II. Pasión...............................................................................................10

III. Sinceridad ........................................................................................10

IV. Buen humor......................................................................................10

V. Persuasión ........................................................................................11

VI. Curiosidad........................................................................................11

Principios de todo buen orador ......................................................................11

Tipos de oratoria ...........................................................................................12

Bibliografía ....................................................................................................13
INTRODUCCION

Durante toda tu vida o la mayor parte de ella


has sido persuadido y no solo por los medios
de comunicación, un ejemplo claro de ello
es cuando tu amigo “x” te ha convencido de
hacer algo que en principio de negabas, pero
con sus argumentos terminaste accediendo.
Una de las claves para hacer llegar mensajes claros y persuadir a los interlocutores se
encuentra en la oratoria. Por oratoria se entiende como el arte de expresarse ante
determinado público. Comunicarse eficazmente ante un auditorio es una destreza,
Emplear la palabra ante el público es una habilidad cada vez más necesaria. En
muchas ocasiones ha conseguido transformar sociedades y personas, Si hay algo a lo
que más temen las personas, exceptuando la muerte, es el miedo a hablar en público
un gran porcentaje de personas -de todo nivel socio-económico- experimentan
miedo, algunas veces patológico, ante la acción de exponer sus ideas y pensamientos
a través de un simple discurso en público.
El arte de la elocuencia es una actividad que considero, debe ser enseñada desde el
inicio de nuestros aprendizajes como lo es en la escuela. A los estudiantes se les
enseña a escribir, a leer y algunas veces a pensar. Casi nunca, se les enseña a hablar
con claridad y facilidad, de ahí que cuando éstos llegan a adultos se sienten
acomplejados o aterrados ante la idea de exponer sus pensamientos, conocimientos y
sentimientos ante un público numeroso y desconocido. La oratoria no es un curso
más para el hombre, es el mejor curso para la vida ya que esta se aplica en todos los
procesos comunicativos hablados, tales como conferencia, charla, exposiciones o
narraciones, una poderosa herramienta que se usa para propósitos tales como la
motivación, influencia, persuasión, información, traducción o simple
entretenimiento. “Las palabras tienen poder y los oradores deberían ser capaces de
cambiar las emociones de sus oyentes, no sólo informarlos”
En las páginas siguientes se darán a conocer la oratoria, la importancia de la misma,
evoluciona en el tiempo, tipos y características, fines de la oratoria, las habilidades
de un buen orador, y nombraremos algunos de ellos.

"Un hombre de fuerza e inteligencia extraordinaria puede no ser


más que un cero en la sociedad si no sabe hablar".
(William Channing)
¿Qué es la oratoria?
La oratoria es el arte de hablar o comunicarse oralmente son técnicas especializadas
que permiten a una persona expresarse eficazmente ante un individuo o un grupo
determinado, para transmitir sus conocimientos, con el fin de:

 Persuadir
 Orientar
 Entretener
 Motivación

Arte

La oratoria es un arte, en sus dos acepciones de la palabra.


Primera: arte es el procedimiento habitual apoyado en una regla para, realizar alguna
cosa. La oratoria no puede ser improvisada, aunque alguna persona puede tener
cualidades de elocuencia innata si no tiene conocimiento de cómo o con que norma
encausar sus cualidades se expone a lograr resultados imprevistos
Segunda: arte es la actividad espiritual por medio de la cual crea las cosas bellas (el
arte como belleza). También la oratoria es una bella arte y como tal es lírica y poética.
Como orador se necesita muchos recursos especiales para conmover el ánimo del
oyente. Entre ellos está, por ejemplo, la utilización de recursos literarios como los son
algunos elementos poéticos.

Persuadir
Es lograr que el oyente realice la práctica lo que el orador le propone. Es el objetivo
más difícil de la oratoria, por lo tanto, denota la perfección misma, además de
convencer, el persuadir requiere:
Primero: Es más profundo conocimiento del alma humano
Segundo: Un amplio conocimiento de la vida y de sus situaciones prácticas, para
prever las dificultades que habría que ayudar a superar a los oyentes
Tercera: Una gran fuerza lógica argumentativa que logre no solamente el
convencimiento del oyente, sino el entusiasmo evolutivo que lo lleve a la práctica
(fuerza de voluntad).

Conmover
La oratoria es el arte de conmover al auditorio conmover quiere decir apasionar, mover
la pación el sentimiento a través del razonamiento que el oyente no permanezca
indiferente ante la exposición de la ideas. Esto supone que tiene un mensaje interesante
que comunicar a los demás, riqueza de ideas, haber leído mucho y tener por lo menos
cierta sabiduría dela vida que se posee, además una técnica literaria para llegar al
sentimiento y la pasión del oyente, técnico que debe basarse en el conocimiento
profundo del alma humano. El resultado de este conmover, en el alma del oyente, es
la simpatía que le nace por mensaje del orador: si el orador ríe el oyente debe reír; si
el orador llora el oyente debe llorar, etc.
Lograr esta simpatía es un gran avance en el campo oratorio y prueba inequívoca de
que se es orador.
Convencer
El convencer radica en la fuerza de las ideas y sobre todo de la idea principal o tesis
del discurso. Hacer que el oyente piense como el orador requiere de una fuerza mental
y un criterio personal completamente formado, madures intelectual de alta cultura.
Para convencer debes estar convencido. Muchos adolescentes y jóvenes se desesperan
por que quisieran convencer fundamentalmente a los demás de lo que, en su ingenuo
idealismo, creen que son los dogmas del momento, sin que ellos mismo estén
convencidos: primero porque le falta madurar su criterio ideológicamente y más
adelante puedan estar en contra de lo que postulaban: segundo, porque se requiere de
práctica de la dialéctica habituarse a someter las ideas propias a la contradicción de
opiniones y la discusión de ideas.
Solo la madures intelectual puede dar esa fuerza mental necesaria para convencer a los
demás y así llegar a ser un auténtico orador.

Según (Alencar, 2005) “Conjunto de principios y técnicas que nos permiten


expresarnos, principalmente de manera oral, con claridad, facilidad y sin temores ante
un público numeroso y variado, con la intención de transmitir un determinado
mensaje”

Historia de la oratoria
La oratoria nació en Sicilia y logró desarrollarse principalmente en Grecia, es ahí
donde ganó prestigio y poder político. En esa época había unos profesionales llamados
logógrafos que se encargaban de redactar discursos para los tribunales.
Uno de los logógrafos más famosos fue Lisias. Pero es importante saber, que fue
Sócrates quién creó una famosa escuela de oratoria en Atenas, el mismo que tenía un
criterio más amplio de la misión de un orador, porque él decía que el orador no solo
debía expresarse bien sino también era necesario tener los valores éticos y morales que
todo ciudadano debe tener, y si este orador tenía aspiraciones de gobernante con mayor
razón, para así garantizar el desarrollo y el progreso de un pueblo. Es en este este tipo
de oratoria que Demóstenes tuvo notoriedad, siendo considerado uno de los mejores
oradores de la época, motivo por el cual hoy es considerado padre de la oratoria.
(Martínez Enrique Salanova, 2003)

Principios de la oratoria

La elocuencia. La elocuencia es el alma que alienta y da vida al cuerpo de la oratoria.


Elocuencia significa hablar clara y distintamente, manifestar nuestros pensamientos
por medio del lenguaje. Actualmente se ha convertido en el talento de persuadir. Sin
instrucción y conocimientos adecuados del asunto a tratar. No puede haber oratoria.
Gramática. De gran utilidad será el conocimiento de los sinónimos que permitirá
repetir o insistir en la misma idea variando con habilidad las palabras sin cansar al
auditorio.
Lógica Es la ciencia analítica de las operaciones del entendimiento humano y se ocupa
de la formación regular de las ideas, juicios y raciocinios para llegar seguramente a la
consecución de la verdad.

"El que sabe pensar, pero no sabe expresar lo que piensa, está en el
mismo nivel del que no sabe pensar"
( Pericles)
Importancia de la oratoria
Hablar en público no es algo imposible o inalcanzable, requiere como cualquier otra
facultad del hombre, cultivo y educación. Este bello arte que nos da la capacidad para
poder expresar de manera segura, coherente y elocuente nuestras palabras, tiene su
importancia. La importancia radica en que es imprescindible para poder abrirte las
puertas a mejores oportunidades de vida, a mejores condiciones socioeconómicas,
elevas tu moral, tu seguridad personal. Grandes oradores en la historia fueron
reconocidos por el poder de sus palabras, siempre fueron ejemplo a seguir y respetados
por la personalidad que tenían, entre ellos están grandes autoridades de gobierno en
diferentes países, grandes empresarios, políticos, artistas, celebridades que con la
elocuencia de sus palabras lograron conquistar el corazón de muchas personas
alrededor del mundo. Hablar en público tiene mucha importancia, ya que mediante la
oratoria creces como persona, Prepararse en ese campo constituye uno de los pilares
para el éxito profesional si bien, todo el mundo sabe comunicarse, solo unos pocos
atesoran el don de la elocuencia, lamentablemente en los primeros años de aprendizaje
en la vida no se nos enseña lo cual es un gravísimo error, ya que la comunicación entre
los seres humanos se da principalmente a través de la vía oral.
Se nos enseña a leer y a escribir, pero nunca se nos enseña a "hablar" y mucho menos
a hacerlo en público y con las técnicas apropiadas.

Un buen orador ¿nace o se hace?

Todos somos capaces de hablar, pero no todos


podemos hacer llegar el mensaje. Para ello, aparte
de un claro don innato, hacen falta técnicas de
oratoria y de hablar en público. No necesitas ser un
genio o tener talentos especiales para convertirte en
un grande orador. Hay una frase que describe
nuestro sistema de enseñanza “Todos podemos
hablar en público con éxito, pero antes debemos
prepararnos hay que dejar a un lado los complejos
y aumentar la seguridad en uno mismo, hacer
ensayos frente a personas de confianza y reforzar
nuestro lenguaje no verbal porque es realmente
importante a la hora de proyectar confianza y
transmitir un mensaje, e incluso mucho más
importante que nuestras palabras.

Por lo tanto, un orador ya tendrá mucha ventaja si tiene cierto don. Pero también puede
conseguirse a base de ensayos, técnicas de perfeccionamiento y sobretodo muchas
ganas.
Para conseguir ser un buen orador deberás conocer las funciones de la oratoria y cómo
llegar a dominar tu presentación. Algunas de las funciones de la oratoria más
importantes son:

o Preparar la exposición: si dominas el tema de la presentación tendrás más


probabilidades de conseguir una conferencia con éxito. Documéntate, practica y
actúa.
o Seleccionar el tema de la presentación: elige un tema de presentación entretenido y
que mantenga al interlocutor despierto.
o Llevar a cabo la presentación: según el tipo de público al que vaya dirigida la
conferencia deberás emplear un lenguaje u otro, intentando adaptarte a ellos de forma
fácil.
o Estar preparado para las preguntas: realiza un listado de posibles preguntas que crees
que puede hacer la audiencia.
o Establecer normas: indica si las preguntas las aceptas al final de la presentación o
durante la misma.

Cualidades del Orador


La práctica y la observación te permitirán desarrollar habilidades importantes para
hacer tus discursos atractivos para el público.
Estas cualidades implican un conjunto de características inherentes que todo orador
debe desarrollar y utilizar con eficacia.
Sean cuales fueran las tareas específicas que el orador deba realizar en una disertación
y aunque muchas de ellas puedan parecer mecánicas o rutinarias, no puede pasarse por
alto la importancia de la posición que ocupa como comunicador social y/o líder de
opinión. Por ello, en el orador no sólo se valora la aptitud para el desempeño de las
funciones como expositor sino también la idoneidad.

Cualidades Físicas
No involucra que sea hermoso o de físico impresionante, sino constituye un conjunto
armonioso y estético ante los ojos de los demás.
El aseo personal La limpieza es fundamental para la sociedad y para el bienestar con
nosotros mismos porque la limpieza transmite una agradable impresión a través del
sentido visual y olfativo, permiten un buen acercamiento de los oyentes hacia el
orador.

La actitud mental positiva Es primordial ya que todo está en la mente ya que nuestras
acciones son el reflejo de ellos. Por ello, todo orador debe estar imbuido de actitud
mental positiva para realizar sus exposiciones con entusiasmo y mucho optimismo;
ello se logra a través de la autosugestión y del correcto uso de las técnicas de
respiración y de relajamiento.

Gozar de buena salud física: Es primordial gozar de una buena salud ya que sin ella
no podrá realizar con eficacia exposiciones

Gozar de buena salud psíquica Lógicamente una persona con desbarajustes


mentales no podrá realizar a satisfacción su labor como orador, casi siempre tendrá
problemas con sus superiores, compañeros de trabajo y más aún, con el público
espectador. Una visita al psicólogo o psiquiatra es recomendable, pues a diferencia
de las enfermedades físicas estas no se manifiestan pasivamente, sino a través de un
accionar desequilibrado que perjudica el buen desempeño del orador.
Cualidades intelectuales

Memoria La memoria se ejercita a través de la observación minuciosa, la retención y


la evocación. El poder recordar nombres, rostros, situaciones y la ubicación exacta de
documentos o cosas, constituye un requisito indispensable en la labor del orador, ello
le permite evocar con facilidad, información que se necesita en lo inmediato.

Imaginación: Consiste en la facultad de reproducir mentalmente objetos ausentes; de


crear y combinar imágenes mentales de algo no percibido antes o inexistente. El
término imaginación, incluye dos características básicas: la renovación o "re
experimentación" de lo ya vivido (memoria), y la creación de imágenes mentales que
antes no existían (imaginación).

Sensibilidad: Es unas cualidades propias de los seres humanos, pero no por ello
todas los tienen desarrollados en la misma medida. Existen algunos oradores que
parecieran insensibles al dolor ajeno, dan la impresión de no interesarles para nada
los sentimientos de sus congéneres. A la larga, estas personas se hacen odiar y son
públicamente vilipendiadas. En cambio, un orador que demuestre sensibilidad en su
trato y en sus acciones se ganará el cariño y estima de las personas con las que trata.

Iniciativa: Ideal que nos mueve a realizar algo por voluntad propia sin que nadie nos
lo diga, ordene o motive. Involucra la acción de adelantarse a los demás en hablar u
obrar, es una cualidad personal que inclina a las personas a realizar acciones para
alcanzar una ventaja competitiva. En la mente de todo orador debe estar presente
siempre la frase: «la iniciativa es del interesado», si anhelamos lograr un objetivo, no
podemos confiar sólo en la voluntad divina o en la buena voluntad de las personas;
sino que, como interesados, debemos intervenir directamente para su concretización.

Dominio de la temática: Ayuda a tener confianza en nuestra presentación.

Cualidades morales:

 Honradez: Muestra una forma recta y honesta de proceder.


 Puntualidad: Ayuda a ganarnos la confianza del público.
 Sinceridad: Mentir o hablar con doble sentido acabará con nuestra carrera
como orador.
 Congruencia: Actúa según tus palabras y hablarás menos.
 Lealtad: Nunca traiciones la confianza que tus oyentes han puesto en ti. Sería
el fin.

Modo de hablar
El modo de hablar no solo influye en el orador sino también en sus receptores, el
tono, la pronunciación, el volumen de las que palabras que se usan. También
influyen el aplomo con el que hablamos, el control que tenemos de nuestros
ademanes, y el contacto ocular que mantenemos con los interlocutores o el público.

 El orador debe hablar con claridad, pero además con entusiasmo, eficacia y
persuasión. El lenguaje es su herramienta principal. Un orador debe saber
hacerse escuchar. debe lograr que el público muestre interés y sea reflexivo.
 Debe el orador tener claro el fin de su discurso. Puede ser un discurso
persuasivo, a fin de convencer al público de una opinión. Además, puede
enseñar, conmover o agradar a su público.
 La apariencia física es muy importante así como el aseo personas. El atuendo
que elige el orador debe estar acorde con las circunstancia dependiendo si es
una ocasión formal o informal.
 Un orador debe mantener una actitud positiva, estar relajado y gozar de
buena salud física y psíquica.
 Además debe poseer mucha capacidad de memoria, ya que la oratoria
requiere un 90% de habla y apenas un poco de lectura de apuntes, de ser
necesario.
 Un orador debe ser sincero y congruente, es decir, que haya relación entre lo
que un orador dice y hace. Además, debe ser leal a quien ha confiado en él o
ella.
 Un orador debe perder el miedo y los prejuicios a hablar en público, debe
tener soltura y saber estar frente a un público.

Uso de la voz

El orador se apoya en su voz y desarrolla habilidades para dominar adecuadamente


las pausas, la rapidez al hablar o leer, la entonación, la pronunciación y
la respiración. Puede ser que posea un timbre de voz estridente o agradable. De todas
formas es importante conocer que la voz es un conjunto de sonidos que
el aire expelido por los pulmones produce en la boca del hombre. Se caracteriza por
su intensidad, su altura, su timbre y su duración.
Premisa fundamental es la educación de la voz porque así es más agradable la
intervención ante el auditorio. Una voz equilibrada, bastante fuerte, pero sin matices
de gritería, proporcional a la cantidad de oyentes es lo aconsejable, porque si es
chillona molesta rápidamente y suena de un modo desagradable en los oídos, cansa y
agota a los que la escuchan.
La voz debe ser clara para que todas las palabras y sonidos sean percibidos
adecuadamente. Ella, junto a otros factores, logra despertar el interés del auditorio.
Además, si el orador la utiliza, la modela y la proyecta bien, podrá brindarle a los
oyentes un placer tan significativo que desearán escucharlo y su voz quedará grabada
en ellos.
La voz presenta defectos o limitantes. Estos problemas se dan algunas veces de
forma voluntaria e inconscientemente y también por su uso inadecuado. Por eso es de
suma importancia aprender dos cosas: su utilización fisiológica para que esta no falle
debido a un recargo de trabajo y la aplicación consciente de sus medios para lograr
determinados efectos. Con relación a estos aspectos es recomendable hablar con
la presión de aire óptima y hablar pausadamente, evitando así cansancio, agotamiento
y, por supuesto, una deficiente capacidad de expresión, la cual provoca a su vez, que
los oyentes pierdan, cedan en su capacidad de concentración.
En síntesis, las características de la voz son:
 El tono: suave, duro, dulce, seco, autoritario, etc.
 La altura: grado entre agudo y grave. El primero suele asociarse con un estado de
agitación o alteración, el segundo con climas de mesura y afecto.
 El ritmo: la velocidad con la que nos expresamos.
 El volumen: con él demostramos si permanecemos tranquilos y controlados o
hemos perdido la serenidad.
 Evitar la monotonía. La inflexión inadecuada al comenzar o terminar una frase.

Un orador debe conseguir que el público lo escuche con atención, se sensibilice con
él y lo comprenda, y, en caso de ser un discurso persuasivo, que el oyente se
convenza de lo que el orador está diciendo acerca de un tema La práctica y la
observación te permitirán desarrollar habilidades importantes para hacer
tus discursos atractivos para el público estas son:

I. Confianza

Un orador de excelencia, debe contar con una gran confianza en sí mismo y


autoestima elevada. Para impresionar como orador, la persona tiene que parecer
segura de sí misma y relajada incluso cuando esté nerviosa.
Un orador que da la impresión de estar tranquilo y en control, alentará al público
para creer lo que dice. La confianza también se percibe en el desempeño vocal de
una persona.
Un orador confiando, habla en un tono controlado, evita las pausas vocalizadas
(como "umm") y utiliza una proyección vocal suficiente.

II. Pasión
La pasión es vital para hablar en público de forma eficaz. Para inyectar en su
discurso vitalidad y energía, un buen orador necesita tener verdadera pasión por el
tema que está discutiendo.
La pasión del orador evidente animará a todos los que escuchan a hacer lo posible
para participar. También querrán obtener información sobre la causa específica.

III. Sinceridad
Para conectarse realmente con una audiencia, un orador eficaz muestra un aire
auténtico de sinceridad en su discurso. Si un orador parece adulador, entonces todo lo
que hará es hacer que los oyentes sientan que están siendo manipulados.
Un orador debe convencer a su público que le interesa lo que está diciendo y su
efecto en los oyentes.

IV. Buen humor


Para personalizar un discurso y hacerlo memorable, una inyección rápida de humor
puede hacer que éste perdure. Por esta razón buen sentido del humor es fundamental
para hablar en público.
Si un hablante utiliza ejemplos reales y anécdotas humorísticas para transmitir un
mensaje. Explicando un concepto en detalle, será mucho más fácil para el público
evaluar y recordar.
Un buen orador mantiene a la gente en estado de alerta al involucrarlos con ingenio y
humor.
V. Persuasión
Una de las capacidades más importantes que un buen orador puede tener es la
persuasión.
Un orador debe influir en su público para que comprenda su versión de la situación.
Se trata de expresar ideas con claridad y derribar argumentos para que la gente vea su
punto de vista.

VI. Curiosidad

La curiosidad intelectual es también un deber para cualquier buen orador.


Un conferencista eficaz sabe que mayor conocimiento es una gran ventaja.
Estará mejor equipado estará para contestar a fondo y de manera satisfactoria las
preguntas de sus oyentes.
Esta actividad requiere un proceso de aprendizaje que nunca termina. Para ser un
verdadero orador la persona necesita aprender más cada día.
Estas personas necesitan estar constantemente en búsqueda de nueva información.
Ya sea a través de clases, talleres o experiencias de vida.

Principios de todo buen orador

1. No abandonar el tema: La disertación debe tener un objetivo y hay que avanzar


hacia él en forma progresiva. Sin embargo, existe el peligro de que al enriquecer la
charla con ejemplos y referencias, el disertante se aparte del tema central. Es
necesario que el orador persista en su tema; evitando al mismo tiempo
interrupciones, cuando éstas deriven la cuestión hacia temas secundarios.

2. Orientación: Los aportes de los oyentes resultan muchas veces positivos y ayudan
al orador. Pero, en ciertas ocasiones, hacen que el discurso entre en un cauce trivial,
o se aparte del primitivamente propuesto. Existen procedimientos para encauzar la
conversación que puede utilizar el orador. Cualquier procedimiento empleado debe
ser cuidadosamente escogido a efectos de no ofender al oyente.

3. Ideas y temas: Las primeras surgen en función de la experiencia y de la habilidad


para manejarla. La persona que tiene ideas puede apelar a ellas en cualquier
momento. No se puede sostener una conversación si no se tiene algo que decir; todos
tienen una interesante gama de conocimientos, pero generalmente permanecen
latentes y sin utilización.
En cuanto al tema, debe ser uno sobre el que el orador tenga una posición formada,
que pueda hablar con autoridad y al mismo tiempo le apasione. De todo se puede
hablar, pero los temas debe buscarlos el orador dentro de sí mismo, más
concretamente debe recurrir a:
a) Sus experiencias
b) Sus creencias
c) Sus estudios
d) Sus proyectos
e) Sus emociones
f) Sus sentimientos
g) La experiencia ajena
Tipos de oratoria

Uno de los más importantes es a qué tipo de público nos vamos a dirigir, involucra
exposiciones especializadas, es decir, las utilizadas por personas que tienen en
común una misma profesión, arte u oficio y que en tal sentido desarrollan una
práctica oratoria que con el devenir del tiempo se constituye por derecho de uso, en
una práctica exclusiva del referido grupo humano. En ese sentido tenemos una
clasificación muy amplia que comprende los siguientes tipos:

a) Oratoria Social: Llamada también oratoria sentimental, ceremonial o augural. Es


la que tiene por ámbito propio, las múltiples ceremonias en las que le toca participar
al ser humano en general; sean estas en el hogar, comunidad o a nivel institucional,
académico o laboral.

b) Oratoria Pedagógica: Es el arte de transmitir conocimientos y cultura general a


través de la palabra hablada. Llamada también didáctica o académica. Su objeto
específico es enseñar, informar y/o transmitir conocimientos. Usada por los
profesores, catedráticos y educadores.

c) Oratoria forense: Es la que tiene lugar en el ejercicio de la ciencia jurídica. Se le


conoce también como Oratoria Judicial y es utilizada en exclusiva, en el ámbito de la
jurisprudencia para exponer con claridad y precisión los informes orales de jueces,
fiscales y abogados.

d) Oratoria Política: Su esencia es exponer o debatir todas las cuestiones


relacionadas con el gobierno de la actividad pública, pero partiendo de los principios
e ideas políticas que ostenta el orador. Es utilizada en épocas electorales para
persuadir y convencer a los votantes.

e) Oratoria Religiosa: Denominada "homilía" u oratoria "sacra”. Es el arte de


elaborar y disertar sermones a partir de la palabra de Dios, plasmada en la Biblia u
otros libros religiosos. Trata sobre asuntos de fe y religión. Usada por los
predicadores, curas, pastores y misioneros.

“Hay dos tipos de oradores: los que están nerviosos y


los que mienten”
Mark Twain
Bibliografía
Alencar, A. A. (2005). Manual de oratoria. Lima-Peru.

Martínez Enrique Salanova. (2003). Historia de la oratoria .

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