Sunteți pe pagina 1din 26

Universidad Nacional de Ingeniería

Facultad de Ingeniería Química y Textil

ESTADISTICA Y METODOS PARA MEDIR, UBICAR Y RESOLVER LA


POBREZA

PROFESOR : ROMERO CIEZA JOSE


CURSO : BEF01A
ETICA Y FILOSOFIA POLITICA
INTEGRANTES:
 HERNANDEZ SERNA HEIMER RICARDO 20171307H
 MEJIA CANO JUAN ALDAIR 20171595C
INDICE
Medicion de la pobreza .................................................................................... 3
¿Cuál sería la situación de este hogar: no pobre, pobre o pobre extremo? ..... 4
Métodos de medición: ventajas y limitaciones ............................................... 4
El método de las necesidades básicas insatisfechas (NBI) ............................. 5
Limitaciones y ventajas del método de las necesidades básicas..................... 5
El método de medición integrado ................................................................... 6
Métodos más usados por los países de américa latina y el caribe .................. 8
Métodos que utilizan los organismos internacionales2.2.1 banco
interamericano de desarrollo (BID) ................................................................ 9
Comisión económica para américa latina y el caribe (CEPAL) ..................... 9
Banco mundial .............................................................................................. 10
Ubicación de la población en la pobreza ...................................................... 11
Combinación de los espacios: pobreza multidimensionaL ........................... 13
Agregación .................................................................................................... 15
Medición de la pobreza (2010-2012) ............................................................ 18
Soluciones para la pobreza en el mundo ...................................................... 25
Bibliografia...................................................................................................... 26
ESTADISTICA Y METODOS PARA MEDIR, UBICAR Y RESOLVER LA
POBREZA

MEDICION DE LA POBREZA
En la bibliografía sobre el bienestar y los niveles de vida, el término pobreza no tiene una
definición clara y universal debido a que, en el análisis de este fenómeno, se tiende a
relacionarlo con muchos aspectos de la condición humana. Como estos aspectos se refieren
no solo a la privación de bienes y servicios, sino también a cuestiones de tipo valorativo y
moral, que cada individuo sopesa de manera diferente en un momento determinado,
difícilmente podría tenerse un criterio único para definir o medir la pobreza. Por ello, es que
mientras algunos asocian la pobreza con la capacidad de las personas para satisfacer sus
necesidades básicas de alimentación, otros utilizan criterios relacionados con la salud,
vivienda, educación, ingresos, gastos, o con aspectos más amplios como la identidad,
derechos humanos, participación popular, entre otros, llegando con ellos a diferentes
magnitudes de pobreza. Es decir, es posible tener tantas definiciones, y cuantificaciones de
ella, como aspectos o criterios existan para medirla.
De una manera general, y a pesar del carácter multidimensional y complejo que puede tener,
se dice que la pobreza es una condición en la cual una o más personas tienen un nivel de
bienestar inferior al mínimo necesario para la sobrevivencia. Esta definición general de
pobreza es prácticamente la premisa básica para iniciar el proceso de su medición, cualquiera
sea el método a utilizar. Es decir, son los indicadores del "nivel de bienestar" y los criterios
para determinar el "mínimo necesario" los que hacen diferente un método de medición de
otro.

CRITERIOS UTILIZADOS PARA MEDIR POBREZA


Definir la pobreza como un estado objetivo susceptible de medición, es muy complejo. No
existe consenso a nivel internacional que permita obtener un único método de medición. Y
es que la pobreza está relacionada con las distintas condiciones de insatisfacción y privación
del ser humano. Por ejemplo, la capacidad adquisitiva o el gasto en consumo de las personas
por debajo de un mínimo requerido, podría ser un criterio de medición. El no acceso de un
hogar a un servicio básico de agua o de luz, las limitaciones en el acceso a los servicios de
salud y educación, también podrían ser considerados como otros criterios de medición.
Las distintas situaciones de pobreza no se dan necesariamente de manera concurrente, es
decir todas ellas a la vez, sino que en la vida real se presentan varias posibilidades.
Dependiendo de los criterios de medición que se utilizan, un mismo hogar podría ser
catalogado en diferentes categorías, por ejemplo:
-Se dispone de los datos de un hogar ubicado en la Sierra del Perú. El cual tiene seis
miembros, dos de los cuales se encuentran ocupados. Su vivienda tiene paredes de adobe y
piso de cemento y consta de tres habitaciones. Como sistema de eliminación de excretas
utiliza el pozo ciego. El jefe de este hogar ha aprobado hasta el cuarto de primaria. Tiene tres
hijos entre seis y doce años, todos los cuales van a la escuela. El ingreso mensual de este
hogar es de S/.312 y tienen un gasto de consumo mensual de S/.528.

¿CUÁL SERÍA LA SITUACIÓN DE ESTE HOGAR: NO POBRE, POBRE O


POBRE EXTREMO?

De acuerdo al ingreso este hogar sería calificado como pobre extremo. De acuerdo al gasto
de consumo del hogar sería catalogado como pobre no extremo. Y como no tiene Necesidades
Básicas Insatisfechas, este mismo hogar sería considerado como no pobre.
Este mismo hogar, ha sido catalogado en tres condiciones diferentes dependiendo del criterio
de medición empleado: el ingreso, el consumo o las necesidades básicas insatisfechas. Este
ejemplo, muestra la necesidad de conocer los aspectos sustantivos de los métodos para una
adecuada interpretación de los resultados.

MÉTODOS DE MEDICIÓN: VENTAJAS Y LIMITACIONES

Existe consenso entre los investigadores en que para la medición de la pobreza es necesario
definir un concepto simple y observable, y para ello generalmente se parte de la premisa de
que existe pobreza en una sociedad cuando una o más personas muestran un nivel de bienestar
inferior al mínimo necesario para la sobrevivencia. Desde el punto de vista estadístico, el
problema consiste entonces en definir una variable que refleje el bienestar, y en determinar
el mínimo necesario para la sobrevivencia, en términos de esa variable. Los que estén por
debajo de ese mínimo serán considerados como pobres y la proporción de ellos con respecto
a la población total será la tasa de pobreza en la sociedad en estudio.
Para cuantificar la pobreza generalmente se consideran tres métodos de medición,
internacionalmente reconocidos: el de la línea de pobreza, el de las necesidades básicas
insatisfechas y el integrado, que combina las dos anteriores.

EL MÉTODO DE LA LÍNEA DE POBREZA (LP)

El método más utilizado internacionalmente, a pesar de sus limitaciones es el método de la


línea de pobreza, el cual utiliza el ingreso o el gasto de consumo como medidas del bienestar,
estableciéndose un valor percápita de una canasta mínima de consumo necesario para la
sobrevivencia, es decir, una canasta de satisfactoria esenciales, el cual permite la
diferenciación de los niveles de pobreza. La línea de pobreza extrema corresponde al valor
percápita de la canasta que contiene sólo rubros alimenticios. La línea de pobreza total
comprende el valor percápita de los rubros alimenticios y no alimenticios.
Con este método son considerados pobres extremos quienes tienen ingresos o gastos
percápita por debajo del valor de la canasta mínima alimentaria. Pobres no extremos quienes
tienen ingresos o gastos percápita por arriba de la línea de pobreza extrema, pero por debajo
de la línea de pobreza total; es decir cuando pueden financiar el costo de una canasta mínima
de alimentos, pero no el costo de una canasta mínima total. Se considera no pobres a quienes
tienen ingresos o gastos percápita por arriba de la línea de pobreza total.

EL MÉTODO DE LAS NECESIDADES BÁSICAS INSATISFECHAS (NBI)

El método de medición de las Necesidades Básicas Insatisfechas toma en consideración un


conjunto de indicadores relacionados con necesidades básicas estructurales (Vivienda,
educación, salud, infraestructura pública, etc.) que se requiere para evaluar el bienestar
individual. Este conjunto de indicadores puede variar de país en país. A diferencia de la Línea
de Pobreza este indicador se refiere a la evolución de la pobreza estructural. La principal
característica de este método es que no es sensible a los cambios de la coyuntura económica
y por lo tanto ofrece una visión específica del comportamiento de la pobreza. Con este
método se considera población en pobreza a aquella que tiene al menos una necesidad básica
insatisfecha y como pobres extremos a los que presentan dos o más indicadores en esa
situación.

LIMITACIONES Y VENTAJAS DEL MÉTODO DE LAS NECESIDADES


BÁSICAS INSATISFECHAS

Este método presenta las siguientes limitaciones: (a) todos los indicadores utilizados tienen
el mismo peso, (b) considera igualmente pobre a un hogar que indistintamente tiene uno, dos
ó tres NBI, (c) considera igualmente pobre a un hogar en donde hay 1 ó más niños que no
asisten a la escuela y (d) por facilidades de medición se privilegia a los indicadores de
vivienda. Asimismo, la utilización de indicadores de servicios para el área rural presenta
problemas conceptuales. En la medida de que el área rural es en mayor proporción un ámbito
casi natural, utilizar los mismos indicadores del área urbana, estaría sobreestimando la
pobreza de este ámbito.
Este método tiene la gran ventaja de que permite la focalización de la pobreza y la elaboración
de mapas de pobreza a nivel distrital cuando se utiliza como fuente de información los Censos
Nacionales.

EL MÉTODO DE MEDICIÓN INTEGRADO

El tercer método, denominado Método Integrado de medición de la pobreza, combina los


métodos de la línea de pobreza y necesidades básicas insatisfechas.

Con este método se clasifica a la población en los siguientes cuatro grupos:

a) Pobres crónicos que son los grupos más vulnerables porque tienen al menos una NBI e
ingresos o gastos por debajo de la línea de pobreza.

b) Pobres recientes, es decir, aquellos que tienen sus necesidades básicas satisfechas pero que
sus ingresos están por debajo de la línea de pobreza.

c) Pobres inerciales, que son aquellos que tienen al menos una necesidad básica insatisfecha,
pero sus ingresos o gastos están por encima de la línea de pobreza.

d) Integrados socialmente, es decir los que no tienen necesidades básicas insatisfechas y sus
gastos están por arriba de la línea de pobreza.
VENTAJAS Y LIMITACIONES DEL MÉTODO INTEGRADO

Este método presenta la ventaja de reconocer segmentos diferenciados entre los pobres para
definir las políticas económicas y sociales. La población objetivo identificada por el método
de la línea de pobreza (individuos con ingresos o consumos insuficientes) requiere de
políticas salariales, de empleo, de generación de ingresos; es decir, de políticas económicas.
Por su lado, la población objetivo identificada por el método de las necesidades básicas
insatisfechas requiere políticas que permitan el acceso a servicios de agua, educación,
viviendas adecuadas, etc, es decir, de políticas sociales. Asimismo, en la medida que los
indicadores utilizados por ambos métodos (NBI y LP) tienen comportamientos diferentes a
lo largo del tiempo, podría identificarse situaciones de pobreza estructural (bajo el enfoque
del método de las NBI) y de pobreza coyuntural (bajo el enfoque del método de la línea de
pobreza).
La principal limitación de este método es que el porcentaje total de pobres siempre resulta
mayor que el que proporciona cualquiera de los dos métodos que integra.

De lo expuesto, cada método proporciona una magnitud diferente de la pobreza de un país,


por cuanto se refiere a contenidos, conceptos e interpretaciones distintas. Por tanto, es
conveniente que el país disponga de resultados a través de todos estos métodos, con el
cuidado de no hacer comparaciones de datos entre métodos diferentes. El análisis de
tendencia debe realizarse con resultados obtenidos en un mismo método.
MÉTODOS MÁS USADOS POR LOS PAÍSES DE AMÉRICA LATINA Y EL
CARIBE

Dos son los métodos usuales de medición de la incidencia de la pobreza en América Latina:

1. El método de la línea de pobreza (LP)


2. Y el de las necesidades básicas insatisfechas (NBI)
Los métodos de LP y NBI, como se aplican usualmente en América Latina:
a) Parten de conceptos diferentes de pobreza.
b) Resultan en distintas mediciones de pobreza tanto por el total de hogares (o población)
pobre que identifican, como por los hogares específicos identificados, y por la evolución de
la población pobre resultante.
c) Deben concebirse más como métodos complementarios que como métodos alternativos.
Esto es así por el énfasis que el método de LP pone sobre el consumo privado corriente y el
NBI sobre la inversión (pública y privada) y el consumo público.

Otro aspecto que impide la comparación es que, para un mismo conjunto de indicadores, se
están considerando puntos de corte diferentes. Por ejemplo, en Bolivia se considera que hay
hacinamiento cuando hay 2.5 o más personas por cuarto. En Paraguay, cuando hay tres o más
personas por cuarto, y en Perú cuando hay cuatro o más.
MÉTODOS QUE UTILIZAN LOS ORGANISMOS INTERNACIONALES2.2.1
BANCO INTERAMERICANO DE DESARROLLO (BID)

El Banco Interamericano de Desarrollo, compara el ingreso con la línea de pobreza para


definir la magnitud de la pobreza. Para ello toma en cuenta el costo percápita diario expresado
en dólares, define el valor de la línea de pobreza, y el valor de la línea de pobreza total, y
luego califica a los hogares como pobres extremos cuando el ingreso del hogar está por
debajo de la línea de pobreza extrema; como pobre no extremo cuando el ingreso percápita
supera la línea de pobreza extrema, pero es inferior a línea de pobreza total. Finalmente
califica como no pobre al hogar cuyo ingreso percápita supera a la línea de pobreza total.

COMISIÓN ECONÓMICA PARA AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE (CEPAL)

Compara también el ingreso con las líneas de pobreza, haciendo algunas transformaciones
en los datos con el fin de establecer cierta comparabilidad. Parten de una línea de pobreza
extrema metropolitana que corresponden al valor de una canasta básica de alimentos
metropolitana. La línea de pobreza extrema del resto urbano es asumida como el 95% de la
línea de pobreza extrema metropolitana y la línea de pobreza extrema rural equivalente al
75% de la misma. La línea de pobreza total urbana es asumida como el doble de la línea de
pobreza extrema, y la línea de pobreza extrema total rural es igual a la línea de pobreza
extrema aumentada en 75%. Los hogares son calificados como pobres extremos, pobres no
extremos, o no pobres con los mismos criterios que sigue el BID, con relación a la línea de
pobreza.
BANCO MUNDIAL

A diferencia de las anteriores instituciones, compara el consumo con las líneas de


pobreza. Con el fin de tener comparaciones válidas los datos de los países son
ajustados a dólares percápita diarios en términos de precios internacionales, según
la paridad del poder adquisitivo. Define una línea de pobreza internacional y a
aquellos cuyo valor ajustado estén por debajo de esta línea, los considera como
pobres, y a los que la supera, como no pobres.
UBICACIÓN DE LA POBLACIÓN EN LA POBREZA
Según Sen (1976) toda metodología rigurosa de medición de pobreza debe resolver dos
problemas básicos: el de identificación y el de agregación. La identificación se refiere a los
criterios para determinar si una persona es pobre o no. La agregación radica en establecer un
conjunto de indicadores poblacionales que permitan conocer el número y porcentaje de
personas pobres y determinar su nivel de pobreza.
La metodología se basa en el enfoque de derechos sociales para la identificación de las
personas en situación de pobreza. Este enfoque está asociado a la existencia de garantías
fundamentales, inalienables, insustituibles e interdependientes, por lo que, desde esta
perspectiva, la pobreza constituye, en sí misma, una negación y una violación de los derechos
humanos.
La metodología toma en cuenta dos espacios analíticos: el espacio del bienestar económico
(ingreso) y el espacio de los derechos (carencias sociales). El espacio del bienestar
económico, medido por el ingreso corriente total per capita, y el espacio de los derechos
sociales, que da cuenta de seis carencias sociales enunciadas en la LGDS (rezago educativo,
acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social, calidad y espacios de la vivienda,
acceso a los servicios básicos en la vivienda y acceso a la alimentación), sirven para
identificar a la población en situación de pobreza. Esta metodología toma en consideración
el contexto normativo de México. No obstante, sin pérdida de generalidad puede utilizar
distintas dimensiones, indicadores y umbrales.
Espacio del bienestar económico: En esta subsección se describe la metodología empleada
para identificar si una persona presenta carencia en el espacio del bienestar económico y se
puntualiza la forma en que se construyeron los umbrales de esta dimensión a partir de dos
canastas. Una canasta alimentaria y otra canasta que incluye, además de la alimentaria, un
conjunto de bienes y servicios de consumo básico (canasta completa). El valor monetario de
la canasta alimentaria constituye la línea de bienestar mínimo y el valor monetario de la
canasta completa la línea de bienestar.
Se dice que una persona i es carente en el espacio del bienestar, si el ingreso per capita del
hogar (h) al que pertenece es inferior a la línea de bienestar (L), y no lo es cuando el ingreso
es igual o superior a dicha línea. En símbolos:

 i)La persona es carente (Pi = 1) si el ingreso per capita del hogar al que pertenece (Yi), es
tal que Yi < L, es decir cuando (Yi - L) < 0.
 ii)La persona no es carente (Pi = 0) si Yi ≥ L, de modo que Pi = 0, o bien, (Yi - L) ≥ 0.para
identificar a las personas carentes en el espacio del bienestar económico se elaboraron
cuatro canastas con los datos de la ENIGH del año 2006, una alimentaria y otra no
alimentaria, en los contextos rural y urbano. El método para la construcción de la canasta
alimentaria se fundamenta en la propuesta metodológica de la CEPAL (2007), que se basa
en los patrones de gasto de los hogares para aproximarse a los valores de consumo de
energía y micronutrientes.
La metodología ubica un estrato poblacional de referencia cuya aproximación de consumo
coincide con la recomendación nutricional. Para ello, las cantidades compradas por cada
hogar de los diferentes alimentos en un periodo determinado (mensual, semanal o diario) se
transforman en consumos de nutrientes de acuerdo con tablas de aportaciones nutricionales
de los alimentos. Se suman las cantidades consumidas de nutrientes y se comparan con el
requerimiento de consumo de cada hogar, según su composición por edad y sexo, para
determinar si el hogar alcanza el consumo requerido de los mismos o no. El procedimiento
consiste en ordenar los hogares por su ingreso; con base en esta ordenación se identifica el
conjunto de hogares que logran satisfacer el consumo requerido. La lista de alimentos que
requieren los hogares del estrato de referencia, la frecuencia de compras, la participación en
el gasto y las aportaciones nutricionales, permiten construir la canasta alimentaria (Coneval,
2010 y 2012).
Para la determinación de los rubros del gasto no alimentario se utilizó la metodología
propuesta por Hernández (2009), la cual considera las preferencias de bienes no alimentarios,
frecuencia de su consumo y participación de éstos en el gasto total para determinar el
contenido de la canasta básica no alimentaria. Este análisis combina información proveniente
de la ENIGH y de una encuesta nacional realizada en 2008 sobre percepciones de la
población acerca de la necesidad de los distintos bienes y servicios no alimentarios. Los
bienes y servicios de la canasta no alimentaria se determinaron a partir de los siguientes
cuatro criterios: i) que los bienes y servicios mostraran una elasticidad-ingreso menor a uno,
es decir, que fueran bienes necesarios; ii) que 50% o más de la población considerara que el
bien o servicio es necesario; iii) que la participación del gasto en el bien con respecto al gasto
total en el estrato de referencia fuese mayor a la media de todos los bienes, la cual fue de
16%, y iv) que el porcentaje de los hogares que consumieron el bien o servicio en el estrato
de referencia fuese mayor a 20% (Coneval, 2010 y 2012).
Espacio de los derechos sociales: La metodología considera las siguientes carencias
sociales: rezago educativo (C1), acceso a los servicios de salud (C2), acceso a la seguridad
social (C3), calidad y espacios de la vivienda (C4), acceso a servicios básicos en la vivienda
(C5) y acceso a la alimentación (C6). Para determinar si una persona es carente o no en el
espacio de los derechos sociales es necesario referirse a los indicadores o variables que lo
conforman y a sus respectivos umbrales (véase Apéndice). Los umbrales de los indicadores
del espacio de los derechos son análogos a las líneas de bienestar en el ámbito económico.
No obstante, éstos se determinaron tomando en cuenta los siguientes criterios:
i) Se aplicaron las normas legales si existían.
ii) En caso de que no las hubiese, se recurrió a los criterios definidos por expertos de
instituciones públicas especialistas en los temas relacionados con el indicador.
iii) Si los criterios anteriores no eran concluyentes, se emplearon métodos estadísticos para
determinarlos y, en último caso.
iv) La determinación la hizo la comisión ejecutiva del Coneval (2010).
En la agregación de carencias en este espacio subyacen dos operaciones, una lógica y otra
estadística. La primera, la lógica, se expresa en el operador “O” (o unión) que lleva a calificar
como carente a una persona que presente al menos uno de los perfiles señalados en
el Apéndice respecto a cada carencia. La operación unión aplicada a las carencias en cada
una de las variables se sustenta en que los derechos sociales son indivisibles e indisolubles.
La otra operación (la estadística) sirve para determinar los umbrales cuyo nivel mínimo de
medición debe ser ordinal, a menos que la variable sea dicotómica, como es el caso del
suministro de energía eléctrica. Por ejemplo, las variables acceso al agua, tipo de drenaje y
el combustible que se usa para cocinar son ordinales y, por tanto, se pueden dividir en dos,
la parte que está por debajo del umbral (que identifica a los carentes) y la que empieza en el
umbral (la parte superior de la variable) donde se ubican los no carentes.
Se dice que una persona i es carente en el espacio de los derechos sociales si presenta alguna
carencia j, en que j = 1, …, 6. La identificación de las carencias sociales toma en
consideración que los derechos son indivisibles e indisolubles, de modo que basta con que la
persona i presente por lo menos una carencia (Cj) para ser clasificada como carente. La
primera de estas propiedades permite asignar a la carencia j de la persona i el valor de 1 (Cij =
1) y en caso contrario el valor de 0, (Cij = 0). Como no hay jerarquía entre los derechos no
cabe la posibilidad de asignarles ponderaciones distintas, por lo que se pueden agregar por
simple suma. La suma de las carencias (Ci,j) de la persona i (número de carencias) es su índice
de privación social y se expresa de la siguiente manera:

En la ecuación anterior d simboliza el número de dimensiones consideradas, que en este caso


es igual a 6. Toda persona i será considerada carente si su índice de privación social es mayor
o igual que 1, ya que para ser clasificado en esa condición basta con que presente carencia
en uno o más de los indicadores. De acuerdo con Gordon (2010) y Gordon y Shailen (2012),
para construir un índice de privación social es necesario verificar que el índice sea válido,
confiable y aditivo. Estas tres condiciones fueron verificadas al construir el índice antes
descrito.
COMBINACIÓN DE LOS ESPACIOS: POBREZA MULTIDIMENSIONAL:
Si B(Pi) y D(IPi) denotan dos conjuntos definidos de la misma población, en que el primero
las clasifica como personas con ingreso inferior a la línea de bienestar, y el segundo de
acuerdo con su número de carencias, entonces se puede definir la función Im que expresa
sintéticamente la definición de pobreza multidimensional:

en la que Pim es una variable dicotómica (indicador) que asume el valor de 1 si la persona
genérica i es pobre según la medición multidimensional y 0 si no lo es.
Una persona se encuentra en situación de pobreza multidimensional cuando tiene una o más
carencias sociales y, simultáneamente, sus ingresos son insuficientes para adquirir los bienes
y servicios que requiere para satisfacer sus necesidades básicas (Coneval, 2010). La
metodología utiliza el criterio de intersección y no de unión de las dimensiones para
identificar a la población en pobreza. Esta es una característica particular de la metodología
desarrollada por México.
Al tener dos espacios analíticos diferentes, la identificación de la persona pobre obedece tanto
al diagnóstico de su situación económica como al número de carencias sociales que presenta.
En el eje vertical de la Gráfica 1 se representa el espacio del bienestar económico, el cual se
mide por medio del ingreso de las personas. La línea de bienestar permite diferenciar si las
personas tienen un ingreso suficiente o no.

Gráfica 1: Identificación de la pobreza multidimensional

En el eje horizontal se representa el espacio de los derechos sociales, medido mediante el


índice de privación social. Es preciso señalar que, a diferencia de la presentación usual en las
gráficas cartesianas, la población ubicada a la izquierda de este eje tiene más carencias que
la situada a la derecha. Asimismo, puesto que son consideradas carentes las personas que
presentan al menos una carencia social, el valor del umbral de privación es 1. A partir del
umbral de privación es posible diferenciar las personas con carencias de quienes no las tienen.
Así, las personas que se ubican en el eje horizontal a la izquierda del umbral de privación son
aquellas que experimentan al menos alguna carencia; quienes se encuentran a la derecha son
quienes no padecen carencia en alguna de las seis dimensiones sociales.
Gráficamente los pobres multidimensionales se representan en el cuadrante I de la Gráfica 1.
En este cuadrante se encuentran aquellas personas que presentan una o más carencias sociales
y cuyos ingresos son inferiores a la línea de bienestar. Las personas localizadas en el
cuadrante II se califican como vulnerables por carencia social: no son carentes en la
dimensión del bienestar pero sí lo son en el índice de privación social. En el cuadrante III se
localizan los vulnerables por ingreso: las personas cuyos recursos económicos son inferiores
a la línea de bienestar y que no tiene carencias. En el cuadrante IV se incluye a la población
que no tiene carencias sociales ni de ingresos.
En el espacio del ingreso se puede distinguir a la población cuyo ingreso es inferior a la línea
de bienestar mínimo (LBm) la cual equivale al valor de la canasta alimentaria. De manera
análoga, en el espacio de los derechos sociales se puede determinar un número C* que divide
a la población en dos grupos, uno formado por los que tienen más carencias y otro por los
que tienen menos. El primero está constituido por todas las personas que tienen un índice de
privación social tal que

y el otro grupo incluye a los que tienen un índice de privación menor que C*,

Estas nuevas definiciones permiten identificar dos tipos de pobres: los extremos (cuadrante
Iʹʹ) y los pobres moderados (Gráfica 2). La persona i es pobre extremo (Pi, me) si tiene
simultáneamente un ingreso inferior a la línea de bienestar mínimo (Yi, < LBm), y tres o más
carencias sociales (mayor o igual que C*). Según esta definición, el individuo i es o no pobre
extremo de acuerdo con lo siguiente:

Gráfica 2: Identificación de la pobreza multidimensional extrema y moderada

Se genera así una variable que asume el valor de 1 para toda persona que satisfaga la
definición de pobre extremo y de 0 en caso contrario. Por otra parte, serán considerados
pobres moderados (Pi, mm) aquellas personas que, de acuerdo con la medición
multidimensional, son pobres pero no pobres extremos.
AGREGACIÓN:
Una vez identificadas las personas pobres, es necesario contar con una serie de medidas que
indiquen la magnitud y estado de la pobreza de la población. Las medidas agregadas de
pobreza deben satisfacer un conjunto de propiedades, como por ejemplo, asegurar la
comparación de las mediciones de pobreza nacional, estatal y municipal, y a lo largo del
tiempo; permitir valorar la contribución de los estados y los municipios a paliar la pobreza
nacional; posibilitar el conocimiento de la participación de cada una de las dimensiones, y
cumplir algunas cualidades analíticas.
Esta metodología emplea tres tipos de medidas agregadas de pobreza: la incidencia, la
profundidad y la intensidad. Para calcular la incidencia de la pobreza multidimensional se
divide el número de personas en esta condición entre el total de la población (n).
La incidencia de la pobreza multidimensional (Hm) se define como:

De modo análogo, la incidencia de la pobreza multidimensional extrema (Hme) se expresa de


la siguiente forma:

La incidencia de la pobreza multidimensional moderada (Hmm) se formula de la siguiente


manera:

en la que qm es el número de personas en situación de pobreza multidimensional, qme denota


el número de personas en situación de pobreza multidimensional extrema y qmm representa el
número de personas en situación de pobreza multidimensional moderada.
Las medidas multidimensionales de incidencia de la pobreza no son sensibles a la cantidad
de carencias que tiene la población en pobreza, excepto por la transición entre pobreza
moderada y pobreza extrema (un pobre moderado con dos carencias sociales y un ingreso
inferior a la línea de bienestar mínimo pasaría a clasificarse como pobre extremo si padeciera
de una carencia adicional).
Las medidas de profundidad se presentan tanto para el espacio del bienestar económico como
para el de los derechos sociales. En el primero, un estándar general para medir la pobreza
unidimensional por ingreso o por gasto, es el índice de Foster, Greer y Thorbecke (FGT).

El dominio de la suma (q0) representa a las personas carentes por ingresos (es decir, aquellas
para las que Y < L). FGT0 mide la incidencia de la pobreza; FGT1(α = 1) cuantifica la brecha
o profundidad de la pobreza, y FGT2 , la brecha cuadrática, es sensible a la desigualdad de la
pobreza además de la profundidad en el espacio del bienestar (Foster, Greer y Thorbecke,
1984).
La expresión (L - Yi) es una medida de la profundidad de la carencia de ingreso: mientras
mayor sea la brecha entre el ingreso y la línea L, mayor será la profundidad de su carencia de
bienestar. Si esta diferencia se pone en relación con la línea de pobreza [(L - Yi)/L], el
resultado es una medida relativa de la brecha, pero esta vez normalizada en unidades de línea
de pobreza.
En el espacio de los derechos sociales, el índice de privación social se mide de la siguiente
manera:

en la que q es el número de personas pobres multidimensionales (extremos o moderados).


Esta expresión cuantifica el promedio de carencias que sufre la población pobre. Además, al
ser una combinación lineal del índice de privación social de cada individuo, es posible
calcularla para los subconjuntos poblacionales que se definan de manera tal que la suma de
las partes reconstituyen el total.
La profundidad en el espacio de los derechos se puede medir por la proporción de
dimensiones en que la persona i presenta carencias. La privación será más profunda cuanto
mayor sea dicha proporción. Si se simboliza el número total de dimensiones consideradas en
el espacio de los derechos por d se tiene que:

La profundidad en el ámbito de las carencias se define como la proporción media de


carencias. Si hay d dimensiones, entonces la profundidad de las carencias en el espacio de
los derechos está dada por

A se puede calcular tanto para la pobreza multidimensional como para la pobreza


multidimensional extrema -dependiendo de cómo se defina q-. En el primer caso se simboliza
por Am y en el segundo por Ame.
Alkire y Foster (2007) propusieron una medida de intensidad de la pobreza que consiste en
multiplicar la incidencia por la profundidad. Los indicadores de intensidad de la pobreza
multidimensional son casos particulares de dicha propuesta, con la diferencia en que, de
acuerdo con la concepción teórica del Coneval, no se considera pertinente incluir el ingreso
en el cálculo de las medidas de profundidad. De conformidad con el marco conceptual, se
definió la intensidad de la pobreza multidimensional (Im),

Del mismo modo, la intensidad de la pobreza multidimensional extrema se obtiene de la


siguiente forma:
La intensidad de la pobreza multidimensional moderada se obtiene mediante la expresión:

Los numeradores de Im, Ime e Imm cuantifican el número total de carencias de los conjuntos de
los pobres multidimensionales, multidimensionales extremos y los moderados, y los
correspondientes denominadores nd expresan el número total de carencias que puede
experimentar la población, de modo que los Im miden la proporción de carencias
multidimensionales en la población respecto al máximo posible de privaciones que podrían
existir en la población.
FGT0 , el índice de privación social, los índices de intensidad y de la incidencia de la pobreza
multidimensional, multidimensional extrema y moderada tienen la propiedad de ser
agregativos o desagregables por subgrupos poblacionales. Esto quiere decir que la suma
ponderada de los valores calculados en las particiones de la población arroja como resultado
el valor del índice total. A partir de esta propiedad se puede cuantificar la aportación de cada
elemento de la partición a la pobreza total.
Con estas medidas es posible calcular también la aportación que hace cada dimensión a la
intensidad de la pobreza ya que se trata de combinaciones lineales definidas sobre
particiones. Las medidas de intensidad destacan el papel que desempeñan las carencias en la
medición multidimensional de la pobreza, información que resulta útil para orientar la
política social.
La metodología adoptada para medir la pobreza multidimensional hace posible estimar la
contribución de diversas particiones de la población a la pobreza global, pero no permite
separar los efectos “bienestar” y “privación”. Esta propiedad sí la cumplen las
aproximaciones que combinan linealmente ambos espacios como, por ejemplo, el índice
propuesto por Foster (2010), que otorga el peso “un medio” a la dimensión ingreso y el otro
medio se reparte por igual entre las dimensiones restantes. En este mismo sentido, el MMIP
asigna pesos diferentes en sus distintas versiones (Boltvinik, 2010), pero lo hace al costo de
atribuir ponderaciones que suelen ser objeto de disputas, pues los criterios para dirimirlas
suelen estar ausentes. De esta manera, los pesos asignados a cada dimensión son subjetivos
y poco claros.
MEDICIÓN DE LA POBREZA (2010-2012)
De acuerdo con la definición oficial, son pobres quienes tienen al menos una carencia social
y un ingreso inferior a la línea de bienestar. En 2010 México tenía 52.8 millones de personas
en condición de pobreza (46.1%). Entre ellos, había 39.8 millones de personas que vivían en
pobreza moderada y 13.0 millones en pobreza extrema. Las carencias sociales que más
afectaban a la población y, por tanto, contribuían más a la pobreza eran la carencia por acceso
a la seguridad social (60.7%), la carencia por acceso a los servicios de salud (29.2%) y la
carencia por acceso a la alimentación (24.8%).
Los datos de la medición para 2010 muestran que, en el rubro de ingresos, 19.4% de la
población carecía de ingreso suficiente para adquirir la canasta de alimentos y que poco más
de la mitad de la población (52.0%) no podía satisfacer sus necesidades alimentarias y no
alimentarias por falta de recursos económicos.
La metodología facilita evaluar los cambios entre diferentes mediciones en el tiempo. A
manera de ejemplo se presenta los cambios entre 2010 y 2012 (Cuadro 1).

Cuadro 1: Porcentaje, número de personas y carencias promedio por indicador de pobreza,


México, 2010-2012
FUENTE: Estimaciones del Coneval con base en el MCS-ENIGH 2010 y 2012.
* P < 0.05 (pruebas de hipótesis de diferencias 2010-2012 de una cola).
Entre 2010 y 2012 la proporción de personas en pobreza en el país pasó de 46.1 a 45.5%. Si
bien el cambio demostró no ser estadísticamente significativo, esto implicó que la estimación
puntual del número de personas en pobreza pasara de 52.8 a 53.3 millones de personas, como
resultado del crecimiento poblacional. La pobreza extrema, por su parte, pasó de 11.3 a 9.8%,
lo cual implicó la disminución (estadísticamente significativa) en casi millón y medio de
personas (13.0 a 11.5 millones), 13.2% menos que el nivel registrado en 2010. Cabe señalar
que el número de carencias promedio de la población en pobreza y pobreza extrema
disminuyó, en el primer caso de 2.6 a 2.4 carencias y, en el segundo, de 3.8 a 3.7 carencias.
Los resultados ayudan a identificar las entidades donde hubo mayor variación (disminución
o aumento estadísticamente significativo) en el porcentaje de personas en condiciones de
pobreza: Tabasco, Zacatecas, Querétaro, Campeche y Chiapas registraron descensos respecto
de 2010; por su parte Quintana Roo y Nayarit tuvieron incrementos en ese periodo (Cuadro
2). Por lo que respecta a la pobreza extrema, las pruebas de significación estadística muestran
que a nivel nacional y en siete entidades (Campeche, Chihuahua, Durango, el Estado de
México, Querétaro, Veracruz y Zacatecas) disminuyó el porcentaje de personas en esta
condición.
Cuadro 2: Porcentaje de la población en situación de pobreza y pobreza extrema según
entidad federativa, México (2010-2012)
FUENTE: Estimaciones del Coneval con base en el MCS-ENIGH 2010 y 2012.
* P < 0.05 (pruebas de hipótesis de diferencias 2010-2012 de una cola).
La metodología permite valorar los cambios tanto en los aspectos relacionados con el ingreso
de las personas como en las carencias sociales asociadas a la educación, salud, seguridad
social, vivienda y alimentación. Por ejemplo, en el Cuadro 1 se muestra que cinco de las seis
carencias sociales presentaron una disminución estadísticamente significativa en ese periodo;
la única excepción fue la carencia por acceso a la seguridad social que pasó de 60.7 a 61.2%,
aunque el cambio no fue estadísticamente significativo. La disminución más notoria fue la
de la carencia por acceso a los servicios de salud, que pasó de 33.5 a 25.3 millones, es decir,
una disminución de más de ocho millones de personas, lo que representa 26.3% menos que
en 2010. La carencia por acceso a la alimentación disminuyó 6.1% respecto a 2010 al pasar
de 24.8 a 23.3% (28.4 a 27.4 millones de personas).

Gráfica 3: Cambio en el número de personas en pobreza, México, 2010-2012


FUENTE: Estimaciones del Coneval, con base en MCS-ENIGH, 2010 y 2012.
Gracias a la desagregación de la información es posible ubicar áreas específicas de
intervención. Por una parte, al tener el diagnóstico de la situación económica de las personas,
el Estado puede instrumentar políticas, si fuese el caso, que ayuden a la creación de empleo
y la mejora de los ingresos de las familias. Por otra, la identificación de las carencias sociales
que afectan a la población también ayuda a definir instrumentos de política pública
específicos para atender, por ejemplo, la falta de servicios básicos en las viviendas de un
estado o un municipio, el rezago educativo en cierto grupo de población o la carencia por
acceso a la alimentación en una determinada comunidad.
Respecto a las medidas agregadas, en el Cuadro 3 se registra el índice FGT1 (Foster, Greer y
Thorbecke, 1984), medida asociada a la carencia de ingresos. Esta medida representa la
distancia promedio entre el ingreso y la línea de bienestar económico de la población carente
en este espacio. Se puede observar que conforme aumenta el número de carencias sociales
por individuo, la profundidad también se incrementa.

Cuadro 3: Profundidad de la pobreza en el espacio del bienestar económico a escala


nacional, según número de carencias sociales, México (2012) (Precios de agosto de 2012)
FUENTE: Estimaciones del Coneval con base en el MCS-ENIGH, 2012.
a
La medida de profundidad toma en cuenta a la población con ingreso inferior a la línea de
bienestar.
En el espacio de los derechos sociales, la medida de profundidad es el número promedio y la
proporción promedio de carencias. En el Cuadro 1 se registra el número promedio de
carencias que presentaron en 2010 y 2012 algunos grupos seleccionados de población, la
información específica para las entidades federativas se presenta en el Cuadro 4.
Cuadro 4:Profundidad de la pobreza en el espacio de los derechos sociales: Número
promedio de carencias sociales de la población, según entidad federativa, México (2010-
2012)
FUENTE: Estimaciones del Coneval con base en el MCS-ENIGH, 2010 y 2012.
En cuanto a la intensidad de la pobreza multidimensional se considera, a manera de ejemplo,
la descomposición de la medida global sobre la partición de las entidades federativas y las
dimensiones en el ámbito de las carencias, desagregación que permite observar entidad por
entidad con cuánto contribuye cada carencia social a la intensidad de la pobreza.
Las aportaciones de las carencias sociales a la intensidad de la pobreza permite identificar,
por cada entidad y para todo el país, cuáles son las carencias que más contribuyen en su
composición. En la Gráfica 4 se observa que en todas las entidades del país el acceso a la
seguridad social es el rubro que más contribuye en esta medida de pobreza.
SOLUCIONES PARA LA POBREZA EN EL MUNDO:
Sabemos que la búsqueda de las soluciones para la pobreza en el mundo hace que muchas
personas se planteen qué consecuencias podría tener para el nivel de vida de las personas de
los países ricos.

Las soluciones para la pobreza pasan por entender que actualmente el 20% de la población
rica consume el 80% de los recursos mundiales llevando a miles de personas a la pobreza
extrema y devastando el medio ambiente.

La pregunta que realmente deberíamos hacernos al buscar cómo erradicar la pobreza si existe
un modelo alternativo de desarrollo que permita que todas las personas alcancemos un nivel
de vida adecuado.

Actualmente existen mecanismos tecnológicos y económicos suficientes para encontrar este


nuevo modelo acabando con la pobreza mundial y logrando un modelo de desarrollo que sea
verde, justo y equitativo.

Lo que está impidiendo desarrollar las soluciones para la pobreza es la falta de voluntad
política y la presión que las élites ricas y poderosas ejercen sobre la toma de decisiones de
los gobiernos.

Las soluciones para la pobreza en el mundo pasan por acabar con la desigualdad en el acceso
y en el uso de los recursos naturales.

• Acabar con la desigualdad: Necesitamos localizar los focos de pobreza extrema. Muchos
de los programas que buscan soluciones para la pobreza se han centrado en erradicar la
pobreza allí donde era menos extrema. Sin embargo es importante trabajar con los grupos
para los que las consecuencias de la pobreza son peores: mujeres, discapacitados, minorías
étnicas, tribus o castas. Acabar con la desigualdad será clave para erradicar la pobreza en el
mundo.

• Poner límites planetarios: los patrones de consumo de los países ricos están limitando
directamente la capacidad de acceso de los países pobres a estos recursos e incidiendo en
el cambio climático. Para acabar con la pobreza a nivel local, la gobernanza y los derechos
sobre los recursos naturales son cruciales para asegurar que la población que vive en pobreza
y pobreza extrema pueda acceder a los recursos de su país. Mientras en algunos lugares crece
la pobreza, vemos cómo muchos países ricos y empresas están intentando controlar el acceso
a recursos como el agua dulce, los bosques, la pesca, los minerales y los combustibles
fósiles. Acabar con esta situación es una de las soluciones para la pobreza.
BIBLIOGRAFIA
 Beccaria, Luis, y Alberto Minujin (1985), Métodos alternativos para medir la
evolución del tamaño de la pobreza, Perú-Lima, INDEC (Documento de Trabajo, 6)
 Atkinson, Anthony (2003), “Multidimensional Deprivation. Contrasting Social
Welfare and Counting Approaches”, Journal of Economic Inequality, vol.1, pp. 51-
65.
 Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CDESC) (2001), Cuestiones
sustantivas que se plantean en la aplicación del Pacto internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales: la pobreza y el pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales, Ginebra, ONU (recuperado de http://www.un-
hchr.ch/tbs/doc.nsf/c12563e7005d936d4125611e00445ea9/e2a09b7dd45155d3c125
6a53004078d1/$FILE/G0142014.pdf) (2007, 18 de junio).
 Damián, Araceli (2003), “La pobreza de tiempo, una revisión metodológica”,
Estudios Demográficos y Urbanos, núm. 52, pp. 127-162.
 Feres, Juan Carlos, y Xavier Mancero (2000), “El método de las necesidades básicas
insatisfechas (NBI) y sus aplicaciones en América Latina”, Taller 5: La medición de
la pobreza: métodos y aplicaciones, Programa para el mejoramiento de las encuestas
y la medición de las condiciones de vida en América Latina y el Caribe (MECOVI),
CEPAL.

S-ar putea să vă placă și