En el desarrollo de la Teoría de la Enfermedad única, Pichon-
Rivière señala, dentro de el “Principio de Policausalidad” lo
siguiente:
La génesis de la conducta y sus posibles desvíos, estarían en
la articulación sucesiva y evolutiva de distintos elementos que ya enunciara Freud al hablar de las “Series Complementarias”. En este proceso configuracional intervienen: los factores genéticos, hereditarios -aquí Pichon, añade a lo expresado por Freud, que hay dos aspectos: lo genotípico (o sea, lo que viene dado por la herencia genética) y lo fenotípico (que serían las experiencias vivenciadas desde un código biológico, por parte del feto, en el transcurso del embarazo. Las alternativas del contexto en que ese embarazo se desarrolla, la significación del mismo para los futuros padres, los incidentes económico-sociales, etc.)- Una vez nacido el niño, aparecen las experiencias vinculadas con el grupo familiar en el cual se inserta, la calidad del triángulo (padre-madre-hijo) y esa constelación de experiencias que se viven en los primeros años de vida (los primeros cinco años), dará lugar a lo que Freud denominó el “Factor Disposicional” (con qué se "dispone" interiormente para enfrentar y asumir una conducta en la vida).