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Desde el punto de vista arqueológico tiene una gran importancia por haberse
encontrado restos del Paleolítico (época Solutrense) y Edad de Bronce.
El complejo subterráneo de La Cueva del Tesoro, conocida también como Cueva del
Higuerón, está formado por varias cavidades que poseen muestras de Arte Rupestre.
Centrándonos en la Cueva del Tesoro, hay que decir que tiene unas formaciones
calizas típicas de las cuevas originadas en las profundidades marinas. La acción de las
corrientes y el oleaje hace que se vayan erosionando las partes más blandas y, queden
en forma de columnas y vetas de caliza las más fuertes. Más tarde, cuando las tierras
emergieron, las filtraciones de agua dulce han creado algunas estalactitas y
estalagmitas. Sin embargo, esto es lo menos significativo de la cueva.
Estos hallazgos y otros posteriores hicieron creer a Manuel Laza que se encontraba muy
cerca del tesoro y que siguiendo la investigación alguien lo encontrará alguna vez.
Los restos aparecidos en estas excavaciones, de los que se puede observar una
muestra en el Museo Arqueológico Nacional, en Madrid, los clasificamos en los
siguientes grupos:
a) Cerámica correspondiente al Neolítico de la cueva.
b) Industria lítica.
c) Restos humanos.
d) Restos de animales incluso del Paleolítico Superior.
En relación con la Cueva del Tesoro hay una serie de leyendas y curiosidades que
forman parte de la tradición de estos pueblos marineros de la costa mediterránea. De
entre ellas destacamos la siguiente:
Según los estudios de D. Manuel Laza, se sitúa en la cueva el antiguo Santuario de la
Diosa Noctiluca. "Es razonable pensar que los colonos fenicios pusieran la ciudad que
fundaban bajo el patrocinio de la antiquísima diosa, que era adorada en estas costas..."
Esa diosa era la reina de los cielos y de la tierra. De ahí que la ciudad de Málaga fuese
llamada Malaca, es decir, reina. Ya dijimos que Festo Avieno llamó al numen protector
de estas costas Noctiluca. Es la misma diosa mediterránea adorada desde los tiempos
prehistóricos por todos los pueblos ubicados en la orilla del Mare Nostrum.
Su carácter y atributos han sido estudiados exhaustivamente. Diosa de la fecundidad,
de la vida y de la muerte. Su nombre cambia según las lenguas de los pueblos que la
veneraban. Sus templos eran las cavernas de las montañas. Su imagen en los cielos era
la luna en sus distintas fases y en la tierra su imagen era una piedra basta, un betilo.