ENSAYO: ESTRATEGIAS GERENCIALES.

UNA MIRADA
HACIA EL COMPORTAMIENTO ORGANIZACIONAL: ALCANCES ABORDADO.
DESDE LO HOLISTICO, TOMA DE DECISIONES.

Lic Maria Alejandra D`Alicandro

UPEL-RITEP

Desde que el hombre es hombre estudia su comportamiento y sus relaciones. Las

Organizaciones concebidas como un grupo de personas y medios organizados con un fin
determinado define en esencia la estrecha relación que existe entre el “conducir” y el
comportamiento organizacional. Menciona Martha Alles …” Parece casi obvio que para
conducir es preciso conocer, observar y actuar sobre los comportamientos tanto del que
conduce –desarrollando las competencias y habilidades del manager o gerente– como de
sus colaboradores o subordinados. Unos y otros tienen comportamientos contrapuestos, no
sólo en la interacción entre ellos sino –en ocasiones– incluso al interior de una misma
persona…” (2008). P-12.)*

Desde mi percepción, quien conduce una organización, es decir, el gerente o jefes que
ejercen centros de poder, y toda comunidad de trabajo se enfrenta a la interacción con
personas, muchas o pocas, son parte fundamental de la organización y ésta en el marco
de obtener resultados para lograr cubrir las expectativas del mercado que abarca o
pretende abarcar tiene que tener presente que cada una de esas personas que cumplen
un rol determinado no siempre se comportan igual en las mismas circunstancias en las que
le toque desenvolverse dentro del ámbito laboral y el contexto en las que interactúan, no
todas se ajustan de la misma manera a los cambios, ni tampoco responden a las dinámicas
exigidas en el contexto cambiante.

Una de las competencias elementales de un gerente hoy es estudiar el comportamiento de

los individuos que forman parte de la organización que dirige o de la que es parte para
establecer mecanismos para el alcance de metas y la obtención del éxito ya que al conocer
el modo en que en distintas situaciones se comportan, por qué se comportan de ese modo,
ayuda considerablemente a predecir comportamientos futuros accionar toma de decisiones
que contribuyan lograr productividad, eficiencia, mejores relaciones en el ámbito laboral,
incrementar el crecimiento personal, ir camino al logro desarrollando la cultura
organizacional que se desea en bienestar no solo de la empresa sino de la comunidad en
general.

Palabras claves: Organizaciones, habilidades gerenciales, comportamiento

organizacional, individuos, grupos, liderazgo, toma de decisiones.

*Martha, A. Comportamiento Organizacional. Ediciones Granica, Mexico. 2008.

El arte de conducir personas y administrar recursos dentro de toda organización conlleva a
la implementación de habilidades gerenciales. En este mismo orden de ideas Davis y
Newstron citados por Alles, M, mencionan que las principales fuerzas que influyen el
comportamiento organizacional son: las personas (individuos o grupos), la estructura
(puestos de trabajo y relaciones), la tecnología (máquinas, comunicaciones), el entorno
(gobierno, competencias, presiones sociales). Estos factores, a groso modo, son
concurrentes y necesarios entre sí, son los que marcan las dinámicas dentro de las formas
de comportarse y a eso se le debe agregar que cada individuo es un todo y como un todo
encierra un cúmulo de creencias, valores, actitudes, experiencias, conocimientos que
determinan su forma de ser, pensar, actuar, sentir, de interesarse, de crecer, de motivarse
de ahí la esencia de guiar hacia el logro partiendo del entender la percepción que se tengan
de las cosas es que se generan los cambios esperados, se transforma la realidad. Se
construye y fortalece el clima organizacional. (1.999-p:25)⃰
.

Todas estas características que determinan a cada ser humano son reestructuradas dentro
de una cultura organizacional cuando los individuos, en este caso, los trabajadores,
aprenden y comparten el entenderse dentro de un ambiente determinado para lograr hacer
las distintas tareas que se requieren para alcanzar las metas trazadas y obtener éxito.

Abordando a las Organizaciones de forma holística, el ser humano es un todo y en él va

intrínseco lo define como persona, pero como ser social depende, valga el señalamiento
de la socialización para establecer relaciones más o menos importantes según el nivel de
compromiso ejercido dentro de su escala de valores. Dentro de una organización moderna
el trabajo en colectivo visto desde la horizontalidad jerárquica marca el éxito en el alcance
de metas, pues son el trabajo en equipo entendido como acciones que realizan un grupo
de personas para alcanzar un mismo fin, lo que da significado al logro de objetivos
establecidos ya que nada depende de una sola persona, llámese jefe o empleado, pues el
éxito de llegar a la meta es caminar juntos hacia la misma dirección.

De ahí el impacto que generan los grupos dentro del comportamiento organizacional, el
clima laboral y el éxito gerencial dentro de una organización. Lo determinante de manejar
el trabajo de equipo, el liderazgo de grupos y la capacidad ante lo adverso de superar las
dificultades y crecer en el ámbito personal, profesional y laboral. Por su puesto esto no es
nada fácil si no se aborda desde la visión y a misión de la organización, partiendo desde
donde se está, para donde se va y con que se cuenta para ello. Si se analiza esta idea,
centra de igual forma su aspecto más relevante en los factores humanos, tal y como lo
señala Mayo, E “los factores humanos desempeñaran un papel importante y significativo a
nivel productivo a través del mejoramiento continuo dentro de las organizaciones”. Este
rumbo es determinante en la toma de decisiones que coadyuven a la obtención del logro

*Davis y Newstron citado por Alles, M. Comportamiento Humano en el trabajo. Mac Gaw-
Hill. Mexico. 1.999.
Entones definiré el arte de gerenciar como un conjunto de fundamentos basados en el
conocimiento para establecer medios que direccionan las actuaciones de un gerente y todo
ello emana de las distintas habilidades, las destrezas que abarcan el comportamiento
dentro de una organización o empresa, de las distintas actitudes que arropa las
dimensiones del ser humano en lo personal profesional y laboral, en este caso a nivel
educacional. Valdría la pena analizar cómo influye dentro de una organización el
comportamiento de su personal, tratando de entender ¿en que afecta entonces el
comportamiento de los individuos al gerenciar?

Para intentar dar respuesta a este enunciado se define Comportamiento Organizacional

(C.O) como un como un campo de estudio que trata de prever, explicar, comprender y
modificar el comportamiento humano en el contexto empresarial. Pretende analizar
comportamientos observables: lo que se conversa y cómo se trabaja, como piensan,
perciben, deciden, como son las personas a nivel personal y social, como actúan los
grupos. Rojas, M menciona que hablar de C.O, es hablar de Psicología porque se centra
en el individuo, de Sociología porque abarca a los grupos de individuos y por último, toca
la Antropología y las Ciencias Políticas porque aborda todo el sistema de organización de
una empresa. Todos estos aspectos van centrado en el entorno, en el ambiente laboral
(trabajo, equipos, políticas, valores) y no laboral (familia, amigos, sociedad), en el individuo
(edad, sexo, profesión, experiencia, personalidad, habilidades…), en la conducta (cómo
resuelve los problemas, cómo es su proceso racional, su proceso emocional,
comunicacional), que resultados arroja su labor (rendimiento, crecimiento personal,
relaciones con los demás, satisfacción). 2004.*

Uno de los retos para entender el C.O es que aborda asuntos que no son obvios. Al igual
que un iceberg, tiene una parte visible pequeña y una porción mucho más grande
permanece oculta. Lo que se observa cuando se estudian las organizaciones son
sus aspectos visibles: estrategias, objetivos, políticas y procedimientos, estructura,
tecnología, relaciones de autoridad flexibles y cadenas de mando. Pero bajo la superficie
existen otros elementos que los gerentes, los líderes necesitan entender, ya que son
elementos que también influyen en la manera de desempeñar funciones de los empleados.

Ya en profundidad, valoremos entonces la Conducta Individual de un individuo para ir

develando el entender de ciertos comportamientos en individuos. El individuo se incorpora
a la organización llevando consigo todo su bagaje psicológico, como se referencio
anteriormente, aporta al conjunto organizacional sus habilidades, destrezas, valores,
percepciones, actitudes, motivaciones, expectativas y metas que tiene, junto con otros
aspectos inherentes a su temperamento y personalidad, asimismo dentro de ella despliega
sus actitudes, inteligencia, conocimientos y competencias, las cuales pueden ser
congruentes con los objetivos de la organización o también pueden ir en contra de los
objetivos de la misma, es decir, lleva en si toda su contribución psicológica.

* Rojas, M. La conducta individual como respuesta a los factores formales organizacionales.

Revista Academia, Nº 6 Julio-Diciembre. 2004.
La conducta individual vincula por definirlo de alguna manera, el subsistema instintivo, que
no es más que sus necesidades fisiológicas o primarias, como el hambre, la sed, la
respiración, la territorialidad, etc lo cual debe satisfacer la organización para que el individuo
pueda laborar con comodidad y seguridad. Abarca también lo volitivo y motivacional, todas
aquellas motivaciones secundarias o sociales y de autorrealización que guían sus acciones
y su vida. Entre estas necesidades podemos encontrar las necesidades de reconocimiento,
de estatus, de afecto, de poder, de pertenencia, etc, los cuales tendrán que ser factibles de
ser logrados en la organización, integra lo cognitivo, el conjunto de habilidades
intelectuales, tales como la inteligencia, la creatividad, la capacidad de análisis y síntesis,
la habilidad de razonamiento, la habilidad de tomar decisiones objetivamente, que le
permiten al individuo aplicarlo y desarrollarlo, ser retribuido, ascendido y reconocido,
valorado.

La conducta individual tiene estrecha vinculación con lo emotivo-afectivo, está relacionado

con la gama de emociones y sentimientos que experimenta en sus relaciones
interpersonales con sus compañeros de trabajo, así como en el desarrollo de sus tareas y
funciones, lo cual determinara sus niveles de identificación y de satisfacción dentro de la
organización y por último lo conativo, que no es más que la expresión de sí mismo, mediante
la amplia gama de conductas con que se manifiesta el individuo dentro de la organización,
tales como sus palabras, sus gestos, sus actos y actividades laborales, lo cual se
manifestara de manera diaria y permanente en el ejercicio de sus roles, tareas y funciones.

Para comprender cómo afecta la parte gerencial el comportamiento de los individuos dentro
del ámbito organizacional se puede decir, que cada persona es única y responde de una
manera particular a las políticas, los procedimientos, las normas, los programas, las
órdenes y las tecnologías utilizadas en el ámbito organizacional, entre otras. De esta
manera, existen personas amantes del trabajo rutinario, mientras que otras prefieren tareas
retadoras; algunas gustan de una autonomía total y de la posibilidad de tomar decisiones,
mientras que otras se muestran temerosas en cuanto tienen que tomar una decisión. Hay
quienes prefieren oportunidades de ascenso mientras las hay que anhelan aumentos de
sueldo o salario, de ahí la importancia de cada percepción y valoración del entorno para
transformar la realidad y generar un cambio en el comportamiento de la comunidad
organizacional.

Pero para que se produzcan estos cambios es necesario mostrar una actitud positiva hacia
este camino de transformación. Recordemos que las actitudes son declaraciones de
evaluaciones favorables o desfavorables, relativas a objetos, personas o acontecimientos.
Reflejan cómo se siente un individuo con relación a algo, y ejerce una influencia específica
sobre la respuesta que da una persona a la gente, los objetos y la situación con que se
relaciona. La actitud tiene implicación en todo organismo social por cuanto: constituyen a
las predisposiciones hacia los aspectos del mundo. Por consiguiente, los miembros de una
institución asumen actitudes respecto a sus jefes, los sistemas de control, las normas
establecidas, las políticas implementadas y los demás factores organizacionales
pertinentes, proporcionan la base emocional de las relaciones y la identificación de una
persona hacia los demás. Por tanto, de las actitudes positivas o negativas dependen en
gran medida un ambiente cordial o de mucha hostilidad entre los miembros y están
organizadas y están cerca del núcleo de la personalidad, es decir, ciertas actitudes son
persistentes y duraderas, sin embargo, están sujetas a cambios.

Unido a ello cabe destacar que va estrechamente vinculada a la motivación que ejercen los
líderes sobre sus empleados, ese motor que mueve el deseo de hacer las cosas bien, que
satisfaga el ámbito personal, profesional y laboral. Sumando a ello los incentivos laborales
que buscan dentro de las organizaciones apreciar, enaltecer y reconocer el trabajo y las
recompensas que dan un aporte valorativo – premiativo para el desempeño eficiente y
eficaz de las funciones laborales. Este arraigado en el nivel de inteligencia emocional que
desarrollemos en el tiempo para enfrentar situaciones de presión, de estrés, de conflicto,
todas ellas necesarias para crecer y ser mejor.

Entonces a manera de conclusión, es determinante para el éxito de toda gestión dentro de

una organización comprender el comportamiento de sus miembros, para lograr transformar
la realidad y caminar hacia el éxito. Aun con habilidades gerenciales, el gerente ejercerá
toma de decisiones en condiciones de certeza, incertidumbre o de riesgo y es el liderazgo
que ejerza, la confianza ganada y la credibilidad la que permitirá reorientar acciones en
bienestar de éxito centrado en su gente, en la organización y la trascendencia de esta en
el campo a donde va dirigida. Las acciones de trabajo sean cuales sean las funciones a
nivel jerárquico, generan presión, estrés, demandan tiempo, requieren grado de
conocimiento, compromiso, entrega, lo que marca la diferencia es el conocerte para que
puedas interpretar que sientes por lo que haces, que te genera al hacerlo, que esperas de
ello, es realmente lo que quieres. Conocerte como persona abre un abanico de ventanas
para poder entender como es el otro, que esperas de él y como contribuir para lograrlo.
Gerenciar es una tarea compleja, un camino sendas obligadas a transitar, pero caminarlas
en compañía asoma un recorrido mucho más cómodo para lograr avanzar que hacerlo en
soledad sin ir a ningún lado aparente.

Lic. María Alejandra D`Alicandro

C.I 11.639.787
30 de Mayo 2019.