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2. Cepillo de madera
Este tipo de cepillo te ayuda a tener tu cabello ordenado sin
perder la forma natural, no genera estática, no rompe ni
quiebra el cabello y son muy fáciles de limpiar. Los hay de
forma redonda, plana y cuadrada se recomiendan para
cabellos rizados y para cabelleras voluminosas.
3. Cepillos desenredantes
Las cerdas de estos cepillos están distribuidas de manera que
desenredan sin estirar, funcionan en cabello húmedo y seco.
Son recomendados para cabellos muy lacios y ondulados.
Las formas varían algunos son ergonómicos, planos y
cuadrados.
4. Cepillo acolchado
Este tipo de cepillo se recomienda para mujeres con el
cabello fino y lacio, ya que en otro tipo de cabello puede
provocar frizz. El tipo de dientes que tiene estimula la
circulación en el cuero cabelludo, se puede utilizar con el
cabello mojado o seco.
5. Cepillo paleta
Igual que el cepillo acolchado está diseñado para que lo
utilicen las chicas con cabellos lacios. Este estilo es
perfecto para desenredar puntas, ya que puede coger
mayor cantidad de cabello y facilitar el secado.
6. Cepillo de burlas
Este cepillo delgado es muy útil para crear volumen de manera
natural y sin dañar el cabello. Su punta delgada ayuda a trazar el
partido del cabello, y a alisar hasta el pelo más rebelde. Se
utiliza para detallar los acabados de peinados.
PRODUCTOS UTILIZADOS EN CEPILLADO
Para pelo rizado: si tienes el pelo difícil de peinar y muy encrespado, coloca un
poco de este aceite a la hora de peinarte. ¡Verás como será más fácil domarlo!
Para las puntas abiertas: si notas que tu cabello está algo maltratado y tiene las
puntas abiertas, no tienes que cortarlo. Solo aplica aceite de argán todos los días
en las puntas para ver cómo al cabo de poco tiempo tiene un aspecto
visiblemente más sano.
Para la caspa: si tienes el cuero cabelludo seco puedes sufrir de caspa, picor o
irritación, pero si echas un poco de aceite de argán en el pelo antes de acostarte y
lo lavas al día siguiente notarás una gran mejoría con el paso de los días.
Una vez hemos terminado con el lavado con jabón y hemos aclarado el pelo
correctamente, es hora se usar nuestro mejor acondicionador natural de aceite de
Argán. Al utilizar este producto, conseguimos sellar la cutícula e hidratarlo
profundamente, obteniendo un pelo brillante, nutrido y menos encrespado. Cuando
terminemos con el acondicionar, aclararemos el pelo con abundante agua, dejando que
esta corra libremente, de modo que no frotaremos el pelo en ningún momento.
Le da forma, elimina los restos de suciedad, le aporta volumen, potencia el brillo, activa
el riego sanguíneo… en definitiva, el cepillado de pelo actúa a modo de revitalizador
de la estructura y el tono capilar, de ahí que esta técnica resulte imprescindible para
mantener el cabello en condiciones. Sin embargo, y pese a su aparente simplicidad, es
muy importante saber cómo cepillar el cabello adecuadamente, ya que ni todos los
peines y cepillos valen ni sirve la misma técnica para las distintas tipologías capilares.
Estos cinco consejos básicos que ofrecemos a continuación dan una idea de cómo sacar
todo el partido a este hábito tan cotidiano.
1. El cepillado del pelo es un gesto que hay que realizar a diario, no sólo para
mejorar el aspecto del pelo sino para retirar de él el exceso de grasa, el polvo, los
restos de productos de styling y otras partículas que se adhieren a la cutícula a
lo largo del día. Además, realizándolo tanto a favor como en contra de la
dirección del cabello, conseguimos activar la circulación sanguínea.
2. ¿Los dos secretos del cepillado de pelo “ideal”? Pasadas suaves y realizadas
con el peine o cepillo adecuado. Los cepillos ideales para estos casos son
aquellos cuya púa tiene terminación redondeada o en forma de bola.
3. Lo primero es elegir un peine o cepillo de calidad. El material viene
determinado por el tipo y el estado del pelo. Por ejemplo, para el cepillado del
cabello rizado lo más recomendable son los peines de púas anchas, mientras que
para alisar mediante la técnica del brushing, la mejor opción son los cepillos de
cuerpo de cerámica, que concentran más calor y consiguen un liso más duradero.
4. La forma del peine o cepillo debe elegirse en función de la longitud del
cabello y de su calidad. Para los lisos y largos, la mejor opción para el cepillado
de pelo son los cepillos planos y con púas protegidas, que peinan y desenredan
sin dañar. En el caso del cepillado del cabello corto hay que utilizar peines y
cepillos de púas compactas. Si se llevan extensiones, se deben usar cepillos de
púas blandas y largas y cepillar únicamente la extensión, evitando pasar por el
clip, adhesivo o entrelazado que une la extensión con el cabello de la persona.
5. También es importante adaptar la técnica de cepillado de pelo a cada
tipología. Así, por ejemplo, el cabello rizado no es recomendable cepillarlo en
seco, a no ser que se vaya a lavar posteriormente. Lo ideal para este tipo de
cabello es cepillarlo con el acondicionador puesto, utilizando un peine de púas
gruesas y, mientras se aplica agua para eliminar el producto, seguir pasando el
peine para evitar que se enrede.
¿Cómo saber cuál es la forma de mi cara?
Antes de decidirte por un
También puedes usar una cinta métrica de coser para calcular la proporcionalidad de tus
rasgos. A partir de ahí, estas son las posibilidades más comunes de tipos de caras.
+ Los rostros ovalados llaman la atención por la armonía de sus rasgos. Tienden a ser
alargados, ya que más o menos es 1 y 1/2 veces más larga que ancha. Sin embargo, las
+ En el caso de las caras alargadas, el rostro tiende a ser estrecho. Más o menos, los
+ Tienes la cara redonda si tu frente, mejillas y barbilla tienen una longitud más o
menos similar. En este caso, la cara describe un círculo o una curva en la que
estrechando conforme se acerca al mentón, quedando los pómulos a medio camino entre
hace que los rasgos parezcan más duros. Además, la frente y la mandíbula tienden a ser
anchas.
+ En el caso de los rostros con forma de diamante, los pómulos son más amplios que
sienes son estrechas mientras que la zona de las mejillas tiende a ser más ancha.