Sunteți pe pagina 1din 40

Universidad Abierta y a Distancia de México.

Modulo 3. Persona, familia, bienes y sucesiones

Docente: Ana Gpe. González Santos.


Asesor: María del Carmen Jardon Gallegos.

Grupo: DE-DEPFBS-1802-M3-005

Unidad 1 Persona y familia.

Alumno: Luis Alejandro Esquivel Rodríguez.


ES1821002238

Sesión 1. Derecho Civil

7 de octubre 2018
Índice

Introducción. ................................................................................................................................... 3
Actividad Integradora. ...................................................................................................................... 4
Conclusiones................................................................................................................................. 12
Bibliografía..................................................................................................................................... 16
Sesión 1. Actividad 1. La naturaleza del Derecho Civil ...................................................... 17
Etapas del Derecho Civil o Civil Law....................................................................................... 22
Etapa Romana ........................................................................................................................ 23
Etapa Medioeval ..................................................................................................................... 23
Período Germánico ................................................................................................................ 23
Etapas de Recepción del Derecho Romano ...................................................................... 23
Codificación del Derecho Civil .............................................................................................. 24
El Derecho Civil Mexicano .................................................................................................... 25
Sesión 1. Actividad 2. Sistema jurídico mexicano y ámbitos de validez ...................... 28
Perspectivas de comprensión de los sistemas jurídicos. ..................................................... 28
Elementos que componen al sistema jurídico. ...................................................................... 29
Definición de los ámbitos de validez y criterios de aplicación ............................................. 33
Relación del sistema jurídico nacional con el Derecho Internacional ................................ 38
Introducción.

En el presente documento, se analiza el concepto del Derecho Civil a partir de diferentes


doctrinas como son el iusnaturalismo y el iuspositivismo, se visualiza como nace y como va
evolucionando acorde las necesidades de las personas.

Este trabajo se divide en 3 partes:

Primeramente, se realiza un ensayo sobre la pertinencia de la distinción del Derecho


Privado y Público con respecto al Derecho Civil, en el sistema mexicano, el propósito del
ensayo es determinar si existe una verdadera distinción entre ambos derechos y cuáles son
sus principales características. Se analizarán desde la perspectiva del autor Ernesto
Gutiérrez y González del libro Derecho de las obligaciones.

Posteriormente se hará una conclusión del ensayo, reflexionando las principales ideas de
este autor y explicando si en realidad existe una diferencia entre el Derecho Privado o
Público o en realidad estamos ante un solo Derecho Público como él lo hace ver.

Posteriormente se realizan dos actividades más, la primera es una investigación de fuentes


confiables que nos den una idea de las diferentes corrientes que crearon el Derecho Civil,
desde el punto de vista natural y el positivista, ambas se contraponen sin embargo se
complementan, ya que en cierto grado son necesarias y verdaderas desde el punto de vista
de los autores.

Se hace una retrospección de su evolución iniciando con la era Romana como parte
esencial del derecho, a través de la historia y las diferentes épocas, tanto mundialmente
como desde su evolución mexicana.

Para finalizar se realizará la actividad número dos, la cual consiste en analizar el ámbito de
validez mexicano contestando una serie de preguntas que parten desde la definición de los
diferentes sistemas jurídicos, los elementos que la integran, la definición de los diferentes
ámbitos de validez y sus criterios, como se relaciona el sistema jurídico mexicano con el
derecho que se aplica en otros países y cuál es el procedimiento para la elaboración de las
diversas normas que se crean.
Actividad Integradora.

El ensayo versa sobre si en verdad existe una diferenciación marcada entre el Derecho
Privado y el Derecho Público apoyado en uno de los autores mexicanos más reconocidos
en el tema como lo es el Maestro Ernesto Gutiérrez y González, en su libro Derecho de las
Obligaciones, su manera tan peculiar de abordar temas difíciles, y explicarlos de una forma
sencilla es su principal cualidad de escritura, la cual nos adentra poco a poco en conceptos
que para algunos autores son escabrosos, ya que se requiere, de una gran profundidad de
conocimiento del mismo para abordarlos, sin contraponer su propio punto de vista.

El tema que analiza en este libro, comienza con la creación de personajes ficticios, como
una manera muy personal de abordar preguntas que eruditos del Derecho, aún siguen sin
tomar partido de la definición misma, la pregunta principal sería, en realidad existe una
diferenciación representativa entre el Derecho Privado y el Público, el Maestro Ernesto crea
una serie de personajes con la finalidad de que las personas como yo, que inicia en esta
carrera tan interesante, comprendamos de una manera sencilla y clara un punto de vista
personal, al contestar esta y otras preguntas referentes al tema.

El libro comienza con la historia de una abogada Antonia Contreras y Contreras a la que se
le identifica en el resto del caso como Niña Toñoñona, con la característica de que es una
abogada joven ilustre y nunca bien ponderada, en constante superación obteniendo el
grado de Doctora, sin embargo, humilde con las personas no letradas, pero exigente y
deliberadamente pedante con aquellos individuos prepotentes e incrédula en la resolución
de problemas con una característica propia de inverosimilidad propia. desde que inició sus
estudios.

En la historia aparece Don Procopio Tlachique y Acocote, un hombre con una inteligencia
natural, pero poca preparación profesional, que manifiesta un amor por el prójimo y supera
la adversidad con trabajo arduo y manteniendo siempre sus metas como su principal
motivación, su característica en el tema, es ser un hombre que le gusta arriesgar en los
negocios y tiene la facultad para vislumbrar las oportunidades y sin miedo afrontarlas, lo
cual le trae buenos dividendos ,llegando a ser un hombre rico en base a su trabajo diario y
sus buenas elecciones.

También aparece en la escena su esposa, la cual conoce en la ciudad de México de nombre


Narcisa Bella Flor maguey y Agua Miel, de la cual quedó enamorado al conocerla y contrajo
nupcias con ella y dentro de sus características principales es ser bella, inteligente y
trabajadora.

Doña Albeza Sofronisca Tlachique y Acocote, es la hermana de D. Procopio, la cual, a pesar


de ser una mujer humilde, es una mujer muy preparada y sus características es ser una
hermosa mujer y con un léxico envidiable, dominando varios idiomas entre los cuales
destacan: el francés, italiano, alemán, griego, japonés chino entre otros y claro el inglés,
pero de Inglaterra, es decir el inglés estructuralmente más completo, como todos lo
sabemos, en comparación con que el americano.

La historia comienza con una pregunta la cual debe ser resuelta por cualquier neófito del
Derecho, y es ¿El Derecho Civil es Derecho Privado?, al poco tiempo de que la ilustre
Doctora Toñoñona, abriera su despacho, D. Procopio y su bella hermana, decidieron ir a
visitarla, con la finalidad de que los asesorara en unas dudas, que a decir verdad pensaban
que la admirada y nunca bien ponderada abogada Toñoñona, tal vez no podría contestar,
debido a que existía un debate muy fuerte, entre los juristas más reconocidos del país, y
así como dicen directo y a la cabeza les soltó las siguientes preguntas:

¿Existe un Derecho privado, y en ese caso, existe también un Derecho que no sea privado
o como creo que le dicen sea Derecho público?

¿Cuál es el origen de la nominación del Derecho público y privado?

¿De existir ese ¿Derecho privado y ese derecho público, cual predomina sobre cuál? Es
decir ¿cuál es más importante?

Y para finalizar ¿El derecho civil, a cuál de los dos ámbitos pertenece, ¿es Derecho privado
o es Derecho público?

D. Procopio una vez que estructuró dichas preguntas, se posó en un sillón y en tono
burlesco le dijo si le podría resolver esas dudas.

La Abogada Toñoñona molesta por el tono le dijo seriamente, a que mi D. Procopio si sabe
bien que le voy a contestar cada una de sus preguntas, así es que déjese de rodeos y
sentándose les respondió.

Las cuatro preguntas se las contesto así, primero no existe el derecho privado, y es ilógico
hablar de derecho público. ya que al no existir el Derecho privado, no existe una razón
válida para hablar de un Derecho público, por lo tanto no puede haber predominio de uno
sobre otro, El Derecho civil o Derecho común no pertenece a ningún ámbito del Derecho
privado ya que acabo de comentarle que no existe y todo el Derecho público si no hay más
que público, pues sale sobrando el calificativo ya que no tiene que comparase con ningún
otro, y así pierde el calificativo, considerando que no hay dos cosas de una especie de un
mismo género, dejando inexistente la comparación, por lo tanto solo hay un Derecho
universal.

Sin embargo, sabiendo que las respuestas eran demasiado escuetas y muy directas
comienza a desenmarañar la justificación de estas de la siguiente manera:

Mire D. Procopio, hace ya más de 22 siglos, existió un gran jurista llamado Ulpiano el cual
era reconocido como un ser sabio dentro de su sociedad, se le respetaba y cuando hablaba
las personas daban por hecho el contenido de sus apreciaciones, dicen por ahí que un día
asistió a una fiesta dedicado al dios Dionisio, y ya entre copas sus amigos más allegados
le dijeron que les dirigiera unas palabras que pasaran a la posteridad, y sin decir va citó,

“PUBLICUM JUS EST QUOD AD STATUM REI ROMANAE SPECTAT; PRIVATUM QUOD
SINGULORUM UTILITATEM”

Traducido a nuestro idioma sería algo así:

DERECHO PUBLICO ES LO QUE SE REFIERE A LAS COSAS DE LA CIUDAD;


DERECHO PRIVADO EL QUE SE REFIERE A LOS PARTICULARES”

Y esa es la historia de esa diferenciación que aun en nuestros días permanece incluso en
magistrados y jueces, ya entrado al tema en realidad se trata de una creencia ya que no se
puede asegurar que fue Ulpiano o Justiniano emperador romano el autor de dicha frase,
aunque para ser sincero no importa quien, sino el porqué de las palabras lo que nos
interesa, vamos a dejarlo como lo cuenta la historia

Indagando en algunos textos del Derecho Romano encontré este párrafo que me pareció
apropiado anexarlo aquí:

“El texto de Ulpiano no escinde el Derecho en dos campos antitéticos u opuestos. Señala
simplemente dos posiciones de su estudio. Existe, de una parte, la comunidad; de otra, el
individuo. La norma jurídica considera, en primer término, a la comunidad, como ser
colectivo, como sujeto primario del íntegro ordenamiento; considera también al individuo,
atribuyéndole una órbita de poder merced a la cual le sea dable, en determinados casos y
dentro de fijados límites, desenvolver propios afanes y satisfacer particulares exigencias.
Mas no se piense que los derechos privados interesan exclusivamente al individuo. La
norma positiva no mira nunca al individuo en una actividad vital independiente, sino en una
actividad encaminada a la consecución del bien común. Individualidad y comunidad se
unimisman en cada norma, si bien una y otra puedan presentarse en planos de mayor o
menor prevalencia” (D. Romano,2015)

Entonces ahondando en el asunto que comenta el M. Ernesto Gutiérrez y acorde a


analizadores de sus palabras, en realidad Ulpiano no estaba contraponiendo términos o
supeditando áreas del Derecho, se limitó a considerar una ramificación de estudio entre dos
situaciones posibles que se pudieran presentar cuando existieran negocios, tratos, arreglos
entre particulares y en otro caso esas mismas situaciones entre el Estado y sus integrantes
o bien la relación del Estado con otros territorios.

Retomando el tema, fue tanto el furor de la sociedad por ese tema que como dice el propio
autor “de ahí para el real” se tomó como una máxima del tal Ulpiano, influenciando incluso
al propio emperador Justiniano y al cristianismo.

Sin embargo y con el transcurrir del tiempo ya en el siglo XIX un destacad jurista español y
considerando que la clasificación del Derecho privado y público era incorrecta describió que
el Derecho Público era el que se componía de todas aquellas normas para regular la utilidad
común e incluso entre los pueblos de ahí se desprendió una subcategoría Derecho Público
general y particular, el general era la reglamentación externa que regula los diferentes
comportamientos de diversas índoles con otros Estados, a lo que ahora se le conoce como
Derecho Internacional, y el Derecho público particular sería como un reglamento interno en
donde el Estado fija normas jurídicas para solucionar los problemas entre los particulares y
el gobierno y en la forma de gobierno Republicano entre los demás estados que la
componen como es el caso de México.(Escriche, 1863)

El mismo autor del libro Ernesto Gutiérrez concuerda con el notable Lic. D. Antonio de J.
Lozano, el cual impresionado por la obra de Escriche cita referenciando al diccionario que
no existe una división del Derecho sino más bien una clasificación en pública y privada.

A pesar de que la mayoría de los juristas enseñan a través de su docencia esta


diferenciación incluso anteponiendo al Derecho público del privado, el autor manifiesta su
contraposición en esto, asegurando que a través de la meditación y pensamientos propios
y acorde a su experiencia en el campo, se cuestionó en varias ocasiones y se convenció
por convicción de que los estudiosos que no conocen el origen del Derecho civil y sus
verdaderos principio son incapaces de comprender el Derecho privado y por ende el
Derecho público por lo que simplemente no existe y forma parte de un único Derecho
público.

Regresando a nuestra historia la ilustre Abogada Toñoñoña explicaba que en realidad


describir y explicar el Derecho público y privado, lo verdaderamente difícil es hacer entender
a todas esas personas que profesan dichos conceptos que no existe tal cosa, viven y vivirán
sumergidos en su error de apreciación y entendimiento.

Toñoñoña defiende su postura, argumentando que como es posible hablar de una


diferenciación cuando el estado con sus legisladores y tratadistas, crean las normas que
rigen la mayoría de las reglamentaciones jurídicas sea convenios particulares o bien contra
el mismo gobierno, atentando entonces contra la individualidad que debería de existir entre
aquellas negociaciones particulares, que ni al Estado ni a ninguna otra persona debiera
interesarle, teniendo así doble personalidad jurídica y asumiendo su poderío en ambos
lados

Pero no obstante y sabiendo que el D. Procopio y su distinguida y mal valorada hermana a


sabiendas que son personas preparadas expone su punto de vista con ejemplos para
sustentar la veracidad de sus ideas, haciendo una comparación entre ambas y
determinando así si en realidad existe diferenciación alguna que haga pensar que son
cosas contrapuestas.

Primero hace hincapié en que el Derecho es algo que el mismo humano crea para
autorregular su conducta y poder convivir en paz por lo tanto si hablamos de la esencia de
cualquier derecho sus raíces son las mismas, no hay diferencias para asignar diferentes
nombres, como segundo punto de vista establece que el Derecho es un producto cultural
que vas mas allá de ser interior de las personas, se establece en forma hablada o escrita y
aplica para ambos Derechos, tampoco existe diferencia, en tercer lugar el Derecho se
ocupa de regular el comportamiento humano como se mencionó antes, y tanto el derecho
público como el privado regula este comportamiento, solo que el privado lo hace entre
particulares y el privado entre el estado y sus afiliados por así decirlo y también con respecto
a otros estados, pero al final de cuenta, regula el comportamiento por lo tanto es igual para
ambos derechos.

Para finalizar hace referencia a que el Derecho lo forma el mismo ser humano inicialmente
a través de la historia se aprecia que las conductas las establece en la familia el jefe de la
misma, de un clan de un grupo, rey monarca, o el Estado en una República, se aprecia que
siempre existe un ente superior que ejerce el poder sobre otras personas, en ambos
Derechos es lo mismo, sin embargo, algo que es de considerar es que según las palabras
de Ulpiano y eso en la idea que en realidad él fue el que lo dijo, ya que en ese tiempo se
encontraban en una reunión y no eran propiamente escribas los que lo acompañaban o al
menos eso dice la lectura. El pretendió que el derecho privado era para encargarse de las
normas y derechos entre particulares y por ende, ellos deberían de crear sus propias reglas
y acuerdos por otro lado el Derecho Público tiene como responsable de hacer esas reglas
al Estado mismo ya que es la relación de el con respecto a individuos y otros órganos de
gobierno e incluso otros Estados de diferentes países, pero comenta Toñoñoña eso está
totalmente fuera de lugar y dista de la verdad ya que en la actualidad y desde el año 2000
los Códigos Civiles y normas que rigen estos acuerdos individuales las crea el Estado y no
nada más para ahí, sino que son vigentes en toda el Estado nacional e incluso en el
extranjero. Por lo que no concuerda con la máxima de Ulpiano más bien esto es una falacia.

Prosiguiendo con la historia la Abogada Toñoñoña insiste en su explicación comentando


que el pensar en un Derecho privado cuando no es privado no es posible, el Derecho
privado sería existente si los particulares crearan sus propios reglamentos y normas sin la
intervención del Estado y las cuales deberían de estar dentro de las normas
constitucionales y dio un ejemplo, muy claro para mí, Y se ve reflejado en la Familia de cada
quien, uno como Padre es responsable de la educación de los hijos y para educarlos
creamos ciertas normas de conducta que se deberán de seguir en la casa,
desafortunadamente estas normas son cada vez más flexibles y últimamente se ven
influenciadas por el Estado por sus Spots y noticieros, en donde ya también se crea un
patrón de conducta a seguir por los hijos y cada vez se deja en menor grado la forma de
educar a sus propios hijos, esto no está del todo mal, en la conclusiones abordare mi
personal punto de vista al respecto, pero en nuestra historia imagínense que el Estado
controlara todo lo que un hijo debe hacer, y nos dejaran sin la oportunidad de educar a
nuestros hijos, eso en realidad no pasa sin embargo el estado se ve inmerso en la
regulación de la filiación, los requisitos para contraer matrimonio, lo que uno debe de dar a
los hijos en caso de divorcio, las propiedades a repartir muchas veces injustas y mil cosas
más en donde el Gobierno interviene cada vez más, eso no puede provenir de un Derecho
Civil que se encuentra supeditado por el Derecho privado, ¿Privado? pero de la Libertad
me supongo yo, de ahí el nombre, ya tomando partido por el Maestro Gutiérrez.
Además de Toñoñoña, existen muchos más pensadores acorde con las ideas de que es
absurdo dividir el Derecho en esas dos ramas, dentro de ellos se encuentra el jurista y
filósofo austríaco Hans Kelsen afirma que para el hablar de una diferenciación de ambas
ramas es ilógico, ya que el Estado siempre hace la función de un ente superior en las
condicionantes de ambas ramas, teniendo una doble personalidad durante ambas
aplicaciones del Derecho, y esta se observa cuando se realiza un amparo del Código Civil
Federal acto que está regulado por el Derecho privado, ahí el Estado estaría actuando como
inferior y si aplica una ley administrativa actuaria como superior ya que se trata del Derecho
Público y esa doble personalidad que abarca ambos derechos y es ahí donde Kelsen su
libro la Teoría del Derecho como antítesis de que existe una diferenciación entre el Derecho
puro, explicando que no es posible la doble personalidad del gobierno y en donde los
juristas reconocen su teoría.

Ahora si nosotros comparamos el sistema anglo-sajón con los sistemas jurídicos latinos
estos últimos frecuentemente utilizan la teoría para encontrar la resolución de casos y en
un momento determinar los órganos que podrían dar resolución al mismo, en la parte anglo-
sajona se manejan más prácticamente, no significa que no usan la parte teórica como parte
de sus procesos, sin embargo son prácticos y buscan obtener los medios apropiados para
la aplicación de la justicia, ellos no gastan tiempo dinero y esfuerzo en encontrar una
justificación teórica, a lo que voy y creo los juristas quieren defender, es que sin la necesidad
de tener discusiones y grandes diferenciaciones se limitan a simplificar los hechos ellos solo
dividen a lo que se parece razonable el Derecho en Civil y Penal sin verse en la necesidad
de crear 20 o 30 o más ramas, y aplicando las normas sin problema alguno.

El punto por lo tanto a analizar es porque el Estado crea ambas normas y define
independencia donde no la hay, y sin sustentación sobre esa cuestión, como aceptar las
dos clases de Derecho cuando a simple vista se ve que es algo ilusorio.

Ahora no conforme con eso la creación de estas dos clasificaciones, dañan la forma de
gobernar debido a que constantemente se están creando pseudo principios, nuevos
sistemas, generando un caos por determinar de parte de quien es la responsabilidad de
arreglar o juzgar los casos, ramificando sin necesidad el Derecho, ahora bien no significa
que no debe de haber especialistas para la detección y regularización de ramas, como el
civil, el penal, laboral, entre otros, sin embargo deben de estar regidos por el mismo principio
y solo algunas excepciones como independientes.
¿Para que podría servir en todo caso suprimir dichas divisiones?

Para comenzar muchos consideran que el Derecho privado es inferior en rango al Público
y por lo tanto este último limita y se ve subyugado por él, esto es injusto ya que ambos se
sostienen de una única Ley suprema llamada Constitución y no debe de estar supeditada
a otra, por otra parte como sería posible que alguien que crea las leyes constitucionales sin
conocimiento de lo que es el Derecho civil pueda redactar el artículo 27 que hablando de la
propiedad de las tierras y como se transfieren puedan hacerlo si carecen de estudio del
Derecho privado (civil), es algo que se contrapone por sí mismo.

Como una última observación Toñoñoña explica, porque el Código civil Federal, que es
obvio de la Legislación civil, puede regir en muchos aspectos la conducta del Estado y para
ellos argumenta que siempre que se realiza un contrato independientemente del lugar
dentro de la República Mexicana le corresponde el Código civil, entonces cómo es posible
que sea Derecho privado.

En este mismo Código establece las sanciones para los ilícitos que pudieran cometer los
funcionarios en el desempeño de sus funciones, porque en este código y no en el Público
que es como debería de ser. No se puede entender cómo se mezcla este tipo de sanciones.

Todo esto podría cambiar si en lugar de dedicarse a crear ramificaciones se estudia la


fundamentación del Derecho y el origen de la verdadera clasificación y en donde el Estado
no debería de normar con su doble personalidad todos los campos del derecho, bastaría
con que las personas que realizan actos de derecho basaran sus acuerdos de la
constitución para que fuera aceptables.

La conclusión de Toñoñoña es que todo lo relacionado con normas encaja en el Derecho


puro, ya que cada norma es establecida y elaborada por el estado y por lo tanto sale
sobrando cualquier calificativo acerca de un derecho privado ficticio, no con esto no se
deben de tener especialistas en diferentes materias de derecho, como el civil, laboral, penal
entre otros, lo que está mal, es considerar y agrupar dichas divisiones y encasillarlas en
Derecho público o derecho privado.

Finalizando así la explicación les comento a D. Procopio y su fina y letrada hermana, que
tuvieran mucho cuidado de aceptar que el Derecho civil forma parte del Derecho privado y
aun peor que ellos mismos pudieran caer en esas barbaridades que son por demás
retrogradas e inaceptables.
Conclusiones

Es realmente interesante la manera de explicar un tema tan complicado e incluso


remontarte al inicio del Derecho con palabras tan sencillas y elocuentes del Maestro Ernesto
Gutiérrez González, la forma en como estructuró el tema y los distractores propios del
mismo hacen que te remontes y seas un participe de la misma obra, imaginando a dichos
personajes y situándonos en una determinada posición.

En este libro el M. Gutiérrez expone su punto de vista en particular sobre el porqué no


debería de existir una división del Derecho y expone a través de sus personajes y apoyado
en diferentes bibliografías que parten desde el mismo Digesto en su primer fragmento en
donde Ulpiano nos comenta que existe las dos clases del derecho, posteriormente el D.
Joaquín Escriche es el primero que está en desacuerdo con dichas diferencias, después el
Lic. D. Antonio de J. Lozano publica un diccionario secundando el punto de vista de
Escriche, también hace referencia de las palabras del Maestro Vicente Lombardo acerca
del nacimiento de las agrupaciones humanas como su propia debilidad y en materia de
actualidad, la opinión de Hans Kelsen en su libro Teoría pura del Derecho que aterriza el
por qué sale sobrando esta absurda clasificación, con la doble polaridad del Estado.

El documento hace referencia al mal llamado Derecho público y privado y expone razones
de peso que, sin ser un erudito de la materia se pueden observar, diferentes aspectos de
índole cultural social y jurídico por el cual se pudieran omitir de estos conceptos, existe una
discordancia muy marcada en el razonamiento del porqué de dicha clasificación y el
Maestro Gutiérrez las expone, como el dijera, a calzón quitado y sin afán de ofender, es por
demás seguir diferenciando este tipo de ramificaciones, que cada día aparecen de la nada
como el Derecho familiar y social que ya se contemplan en algunos textos actuales y que
la verdad muchas veces nos dejan que pensar y el porqué de su nacimiento.

Después de haber leído algunas fuentes de información diferentes al autor, considero que
el Derecho Público cada vez limita más al Derecho privado, parece que quiere absorberlo
como si fuera un negocio más y ahora ya nos encontramos que situaciones claras del
Derecho civil se ven reguladas completamente por las reformas de dichos órganos del
Estado, de tal forma que podemos observar como en lo laboral y aún más en lo familiar,
nos encontramos con que se requieren más y más requisitos para establecer aspectos
legales dentro de la familia y ahí tenemos diferentes casos como la regulación del divorcio,
la repartición de bienes, la manutención de alimentos, los cuales siendo parte de lo familiar
las normas se ven coaccionadas para proteger a los hijos, después a la esposa y ahora a
la amante, hasta aquí estoy de acuerdo en darle seguridad a las personas más
desprotegidas tal como lo marca la constitución, sin embargo, algunos jueces actúan
siempre a favor de la mujer muchas veces sin tener la razón, lo digo como hombre, que he
podido apreciar como las leyes en ese sentido protegen a las mujeres y sin embargo son
tendenciosos en sus decisiones, por lo que no me queda más que, estar de acuerdo con él
Maestro Ernesto, porque para que queremos el derecho privado, si en realidad las normas
estas siempre diseñadas por el Estado, no estoy tratando de decir que está mal que el
gobierno intervenga para proteger nuestros derechos, ya que estoy permite en algunos
casos mayor beneficio para los individuos, como por ejemplo en un contrato de trabajo, que
es un acuerdo privado entre dos partes, debería ser establecido entre el dueño del negocio
y su trabajador, sin embargo no es así y existe la ley del trabajo que limita el accionar de
dicho acuerdo, claro no significa que está mal, ya que un trabajador no debería laborar más
de 8 horas diarias y no tener un salario menor al mínimo establecido por esta ley, muchas
veces personas con necesidad de obtener dinero, aceptarían este tipo de trabajos con
jornadas mayores y con un salario inferior, pero como la ley lo prohíbe este no podrá
contratarse, aquí la ley se entromete en bienestar del trabajador que eso no es lo que
estamos discutiendo, sino la intromisión del Estado en todos los asuntos, que si existe un
derecho privado a este le correspondería ajustarlo, pero como es juez y parte pues no se
entiende entonces esta diferenciación.

En esta documento se definen concepto acerca del Derecho civil, se realiza un marco
teórico a través de la evolución del mismo para apreciar el origen de tal ideología,
observamos que el Derecho Civil se remonta hasta la era Romana cuando los Romanos
tenían bien identificados a sus clases sociales los Patricios y los plebeyos y el porqué de
una rama del derecho que se encargara de los asuntos particulares y los del llamado Estado
del poder, se identifican las diferentes etapas del Derecho civil internacional, y nacional,
donde se visualiza como va cambiando y adecuándose a las diferentes etapas y
sociedades, donde los individuos van generando por ellos mismos a través de revoluciones
y guerras el derecho y reconocimiento por parte de los que ostentan el poder, hasta
nuestros tiempos donde aparentemente existe igualdad de oportunidad, libertad y justicia,
aunque sabemos de antemano que sigue existiendo esa parte disfrazada de señores
feudales llamados Gobierno, que al menos en México se manifiesta abiertamente como un
pequeño grupo de individuos inmensamente ricos, los cuales mueve a su antojo la ley para
favorecer siempre sus pretensiones, tan claro como que los Gobernadores roban, asesinan,
cambian leyes para protegerse a ellos mismos, desafortunadamente esa es la realidad y
esa es mi motivación para estudiar y ser un ente de cambio en la sociedad.

En el presente documento también se distinguen los diferentes ámbitos de validez de las


normas jurídicas sus elementos y la relación entre la evolución de las adaptaciones que se
hicieron en la reforma del 2011 para de alguna manera equilibrar las desigualdades de los
derechos humanos.
Ensayo.

El Tema por tratar en este ensayo, es mediante un análisis personal del Libro del Maestro
Ernesto Gutiérrez y González, determinar si existe una diferencia marcada entre El Derecho
Privado y el derecho público.

Para abordar este tema, es necesario clarificar algunos conceptos y definir la axiología
propia del derecho, así como la concepción de este, con la finalidad de puntualizar el por
qué, quien, como y cuando surge esta clasificación del mismo.

El origen del Derecho no está definido en realidad, es decir, el Derecho nace con la misma
sociedad, donde comienzan la relaciones humanas como forma de subsistencia y
colaboración con un fin común, aplica un viejo adagio en latín que dice “ubi societas, ibi
jus”, donde hay sociedad hay derecho, desde que existe una forma de agrupación se puede
decir que se establecen ciertas normas, no propiamente Derecho, sin embargo, mediante
la misma costumbre se determinan lo que está bien y mal y se podría decir que ese serie
el origen informal de las leyes.

Se consideraba que la persona que dominaba el grupo social, era inicialmente el más fuerte,
Bibliografía.

Derecho Romano. (2015). Ideas romanas del Derecho (VII): "Ius publicum" y "Ius privatum".
2015, de Derecho Romano.es Sitio web: https://www.derechoromano.es/2015/12/ideas-
romanas-derecho-ius-publicum-ius-privatum.html

Escriche Joaquín. (1863). Diccionario razonado de legislación y jurisprudencia. 1863, de


Internet Archive Sitio web: https://archive.org/details/diccionariorazon00escr/page/546

Livia Hernández. (2012). Nociones Históricas del Derecho Civil. 2012, de Temas de
Derecho Sitio web: https://temasdederecho.wordpress.com/tag/etapas-de-la-codificacion-
del-derecho-civil/

Guerrero Mata Luis Andrés. (2016). ANTECEDENTES HISTÓRICOS DEL DERECHO


CIVIL MEXICANO. 2016, de La Ultima Ratio Sitio web: http://www.laultimaratio.com/11-
derecho-civil/80-antecedentes-historicos-del-derecho-civil-mexicano

Universidad Interamericana para el desarrollo. (2015). Teoría General del Derecho. 2015,
de UNID Sitio web:
http://moodle2.unid.edu.mx/dts_cursos_mdl/lic/DE/GD/S03/GD03_Lectura.pdf

Ministro Mariano Azuela Güitrón. (2002). El Sistema Jurídico Mexicano. 2006, de Suprema
Corte de Justicia de la Nación Sitio web:
https://www.scjn.gob.mx/sites/default/files/material_didactico/2016-11/Sistema-Juridico-
Mexicano.pdf

Víctor Duarte Iglesias. (2018). Evolución del Derecho Civil mexicano. 2018, de Doc Player
Sitio web: https://docplayer.es/86284204-Unidad-3-evolucion-del-derecho-civil-
mexicano.html

División de ciencias sociales y administrativas. (2016). Hecho, acto y sujetos de Derecho.


2016, de Universidad Nacional Abierta y a Distancia de México Sitio web:
https://unadmexico.blackboard.com/bbcswebdav/institution/DCSA/MODULOS/DE/M1_DE
HASD_2017_02/U3/S5/Descargables/DE_M1_U3_S6_TA.pdf

Sesión 1. Actividad 1. La naturaleza del Derecho Civil

Definición del Derecho Civil

Es de recordar que el Derecho, como cualquier otro objeto científico de estudio, no es


estático, ya que se transforma en el tiempo, de tal manera que su definición cambia según
la época y lugar en que se contextualiza. En el caso del iuspositivismo, en tanto una de las
corrientes de pensamiento que la estudian y cuyo máximo exponente es Hans Kelsen, se
establece la coacción como nota distintiva del Derecho, de tal manera que para que una
norma se considere parte del Derecho, ésta debe obligar a observar una determinada
conducta y en el caso de inobservancia, necesariamente debe señalar una sanción como
consecuencia. Con base en lo anterior, Kelsen define al Derecho como “un orden normativo,
como un sistema de normas que regula la conducta humana”. (Kelsen, 2015:201)

En el derecho romano, el ius civile era el derecho del ciudadano romano: engloba tanto el
derecho público como el privado, y se muestra como el derecho nacional, con reglas,
principios, instituciones, figuras y procedimientos que eran propios y exclusivos del cives
romano. Con el paso del tiempo, se fue desarrollando el ius gentium, que también era
derecho romano y se aplicaba a las relaciones con extranjeros. Y el ius civile se contrapone
al ius honorarium, creado por el pretor para completar e incluso corregir el ius civile,
adaptándolo a la realidad social. Desaparecido el Imperio romano, se conserva como
derecho civil el derecho privado, durante siglos referido al derecho privado romano, a partir
de los estudios que sobre la Compilación de Justiniano se desarrollan desde su Recepción
medieval. Con el tiempo, y finalmente en la Edad Moderna, será el derecho privado nacional
de cada estado soberano, construido en muy buena medida sobre la recepción propia y
particular del derecho romano en cada lugar. Al mismo tiempo, de ese derecho privado se
desgaja primero el derecho mercantil, y más tarde el derecho laboral, por lo que el derecho
civil queda como derecho privado general, que regula las relaciones más comunes de la
convivencia humana: se refiere a la persona en sí misma y en su relación con la familia y
con el patrimonio. De este concepto se derivan una serie de principios básicos.
-La persona como sujeto de derechos: se reconoce a todo ser humano el carácter de
persona, titular de derechos subjetivos actual o eventualmente. La porción de esta esfera
jurídica de la persona que tiene contenido económico es el patrimonio.

-La persona como destinatario de deberes jurídicos: los deberes civiles básicos son el no
dañar a otro, y el cumplir los compromisos jurídicos asumidos (obligaciones).

- El principio de la autonomía privada: es uno de los pilares en que se apoya el derecho


civil; es la base para la creación de relaciones jurídicas y para la normativización de las
mismas, respetando las normas imperativas.

- La familia, como primera proyección social de la persona, es regulada por el derecho civil,
dejando escaso margen a la autonomía privada y destacando el carácter de función. El
contenido fundamental del derecho civil está constituido por:

- El derecho de la persona, el sujeto de derecho: lo que se refiere a su capacidad,


residencia, domicilio, ausencia, nacionalidad, registro civil…

- El derecho de familia: el matrimonio como negocio constitutivo de un status, sus efectos


personales, su crisis; el régimen económico matrimonial; la filiación, la patria potestad y
relaciones paterno-filiales, la tutela.

- Las relaciones jurídicas patrimoniales, que comprenden:

a) el derecho de obligaciones, contratos, responsabilidad extracontractual, enriquecimiento


injusto.

b) el derecho de propiedad y los derechos de atribución, la ordenación de los derechos


reales y el registro de la propiedad.

- El derecho de sucesiones: la transmisión de las relaciones jurídicas de la persona a la


hora de su muerte, sucesión testada e intestada.

El derecho civil como derecho privado general, representa la unidad del derecho privado,
de la que se han ido disgregando algunas ramas, y respecto de otras se ha discutido si han
alcanzado autonomía. Esto obliga a hacer una referencia a la distinción entre derecho
público y derecho privado. Se trata de dos puntos de vista, que no debe hacer olvidar la
unidad del ordenamiento. La distinción arranca del derecho romano. Diversos criterios se
han ido barajando para ilustrar esta distinción: el derecho público se refiere al gobierno,
relaciones en que al menos una de las partes está investida de imperium, de autoridad,
existe una mayor presencia de normas imperativas, se atiende al interés general….

El derecho privado, a las relaciones entre particulares, al provecho particular, normas de


carácter dispositivo, relaciones en un plano de igualdad… De todas formas, la frontera es
imprecisa y variable, y los criterios siempre son matizables. Pues bien, el trabajo de los
glosadores y comentaristas sobre los textos romanos se refiera sobre todo a las
instituciones de derecho privado, por eso el derecho civil depurado es básicamente derecho
privado. Pero de este, se van a disgregar, sobre todo, el derecho mercantil, y luego el
derecho del trabajo. Por eso, se dice que el derecho civil hoy es derecho privado general.
Se puede completar la disgregación con O’Callaghan, etc: disgregación de ramas,
disgregación por leyes especiales con derecho civil mezclado con derecho administrativo,
y pretendida autonomía de ciertas partes del derecho privado que no terminan de ser
derecho civil, aunque mezclado con el derecho público. Y referencia a los sistemas en que
el derecho civil y el mercantil permanecen unidos.

Se dice que es derecho común o general en cuanto contiene normas que representan el
núcleo fundamental del ordenamiento jurídico, normas y principios que se aplican a la
realidad jurídica y social en su totalidad. Por eso, en el Código, y en la Parte General del
derecho civil, se estudia tradicionalmente una Introducción, que contiene los conceptos
jurídicos básicos, la doctrina de la norma jurídica, la dogmática de las fuentes del derecho
y su aplicación e interpretación y la relación jurídica. La idea de derecho común conecta
históricamente con la de un Ius commune europeo, romano canónico, a partir de la
recepción, y que, a partir de la edad Moderna, la Reforma protestante, y el advenimiento de
los estados nacionales, paulatinamente subsiste sólo como un hecho cultural. El derecho
común se relaciona con los derechos particulares de los distintos reinos, su prevalencia
radica o deriva de que constituye un sistema de derecho dotado de unos principios
informadores, mientras que los derechos de los distintos reinos contemplan particularidades
concretas. De ahí deriva una aplicación general del derecho común, con las excepciones
que con referencia a determinadas instituciones o en algún aspecto concreto de las mismas
establezca el derecho propio o particular.

El derecho civil es derecho privado común o general en un doble sentido: porque las otras
ramas del derecho privado regulan sectores muy concretos de la realidad social, y porque
en el derecho civil común se encuentran los principios jurídicos generales que las otras
disciplinas aplican al campo concreto que regulan. Por eso hay que destacar su función de
derecho supletorio.

Una de las características principales del Estado moderno es el monopolio del derecho.
Entre los fundamentos teóricos de ese monopolio, el Positivismo jurídico tiene una posición
especial. Habitualmente, los positivistas han sido vistos como autores que identifican el
derecho con la voluntad del Estado. Se supone que están interesados sólo en la
observación de los hechos acerca del origen del derecho y, consecuentemente, identifican
el derecho con el hecho del poder político. (Rodríguez, 2014:115)

La concepción del Positivismo como paradigma teórico-jurídico propio de la época que


sustituye al iusnaturalismo plantea, no obstante, un problema si lo generalizamos
excesivamente. Carpintero, (1986) afirma que:

Al aplicarlo a la situación de Alemania a principios del siglo XIX habría que considerar
positivistas a todos los autores que criticaban al iusnaturalismo moderno de corte kantiano,
dominante hasta entonces. Pero, como ha mostrado Francisco Carpintero, esta explicación
no da razón de todos los juristas que teorizan en esa época: aunque critiquen a los
kantianos, algunos defienden una justicia situada más allá de lo fáctico. Y es que, según
Carpintero, en esos años se produce una fuerte reacción contra la teoría crítica dominante
en las universidades, pero no existe una alternativa filosófica que permita fundar con
claridad la nueva tendencia de la ciencia jurídica

Un aspecto controvertido del positivismo jurídico es su relación con el


iusnaturalismo. Ha sido habitual ver en el primero una alternativa radical al segundo, que
habría dominado hasta entonces las especulaciones sobre el derecho. Esta interpretación
necesita precisiones, porque las justificaciones de la juridicidad anteriores al siglo XIX,
referidas al derecho natural, no fueron homogéneas tal y como ha estudiado Francisco
Carpintero. Para los juristas del Derecho común y teólogos como Santo Tomás de Aquino,
el derecho natural contenía tanto principios morales básicos permanentes, como exigencias
procedentes de la «naturaleza de la cosa» que podía ser mudable según las circunstancias
cambiantes de lo humano. Más adelante los escolásticos tardíos (pensemos en Luis de
Molina o Francisco Suárez) redujeron el derecho natural a un conjunto de preceptos
inmutable y ahistórico que servían de modelo para el legislador. Pero el gran cambio en las
concepciones iusnaturalistas tuvo lugar con el nacimiento de la llamada Escuela de
Derecho Natural Moderno. Sus integrantes identificaron el ius naturale con la libertad
individual existente en un estado de naturaleza previo a la vida política. Entendieron que, al
ser natural la ausencia de obligaciones heterónomas, una organización política acorde con
la naturaleza sólo podía surgir del pacto entre individuos libres e iguales. Tras el pacto, la
única entidad legitimada para establecer normas vinculantes para todos era el poder
soberano producto de la cesión de las libertades o poderes individuales. Este poder se
convierte en el administrador de los poderes individuales y, en consecuencia, en el único
autorizado para ordenar normativamente el espacio público. Como ha destacado
Carpintero, la difundida idea del derecho natural como un derecho eterno que establece
contenidos concretos de justicia no describe las pretensiones de estos iusnaturalistas
modernos.

La ruptura que supuso este iusnaturalismo moderno no fue posible sin un cambio en
el concepto de derecho. Durante siglos la formación jurídica culta era adquirida en las
universidades, donde se enseñaban el Derecho romano y el Derecho canónico, aunque la
perfección técnica del primero hizo dominante la que podemos llamar mentalidad romanista.
Esta defendía un concepto de derecho (ius) radicalmente diferente al adoptado luego por
el iusnaturalismo moderno. Los juristas del Derecho común entendían que el ius era la
solución ajustada a un determinado problema a partir de los fines expresados en la ley y de
las circunstancias y necesidades planteadas en el caso; esa solución era una interpretatio
iuris que determinaba lo justo mediante una captación racional de la justicia; por ser
racional, la interpretatio iuris no era monopolio del gobernante, sino que era ejercida
también por los juristas. Por otra parte, la atención a las peculiaridades de las relaciones
sociales para conocer lo justo dotaba a las reglas y soluciones de una estructura bastante
heterogénea que impedía la formación de un sistema normativo emanado desde una
voluntad ordenadora central. El quehacer romanista se insertó en la sociedad llamada
estamental, porque su manera tendencialmente casuística se amoldaba a una sociedad en
la que no existía ningún poder legislador central con el monopolio de la producción jurídica.
En cambio, el concepto de derecho aportado por los iusnaturalistas sí se acomodaba al
sistematismo estatalista, porque partía del poder individual entendido como cantidad
homogénea cuantificable hasta formar la suma de poderes que daba lugar al Estado. Este
razonamiento unidireccional satisfacía las exigencias de cientificidad de la época tanto
como las necesidades de unificación sentidas en un plano más pragmático. Karl Bergbohm,
crítico inclemente de todo iusnaturalismo, explicaba al respecto que el Naturrecht de los
siglos XVII y XVIII no triunfó a causa de su estatus científico –débil, según Bergbohm–, sino
gracias al fin práctico que se propuso: la transformación de las reglas y formas de la vida
política y social de su época. De esa forma, el iusnaturalismo moderno consiguió diseñar
eficazmente la mentalidad estatalista sustituyendo el concepto complejo de los romanistas
por el de libertad individual. Es preciso recordar que para este iusnaturalismo el Estado
proporcionaba un marco legal exclusivo para proteger las libertades, pero ese monopolio
no implicaba que los contenidos del derecho fueran creados por el Estado; este se limitaba
a proteger las interacciones naturales de las libertades. (p.117-121)

La identificación material entre los Códigos y el Derecho Civil resulta, hoy en día,
inaceptable de forma mayoritaria por evidentes razones. Por importantes que puedan ser
los Códigos Civiles, es obvio que el Derecho Civil no quedó petrificado en ellos, sino que la
legislación posterior y las coordenadas sociales en general han diversificado su contenido,
cuando no han roto algunos de los principios básicos en que se asentaba la regulación
codificada. Ante ello, abandonando la identificación material, la doctrina contemporánea
procura acercarse a la noción de Derecho Civil desde otras bases, aunque se encuentre
dividida en dos planteamientos diversos que se presentan como antitéticos: planteamiento
historicista y planteamiento racionalista o apriorístico. Los defensores del primero de ellos
mantienen el apego o la inherencia del Derecho civil a la evolución histórica, con lo que,
acentúan su característica de mutabilidad, de cambio o de cambio evolutivo.

Al contrario, los seguidores del planteamiento apriorístico o racionalista puro hacen hincapié
en la nota de permanencia del Derecho civil desde una perspectiva metahistórica, aunque
desde luego no lleguen hasta el extremo de negar la contingencia histórica de la mayor
parte de las instituciones civiles. La contraposición referida está dirigida a realzar las
diversas posibilidades de la conceptuación del Derecho civil en términos teóricos. En
realidad, doctrinalmente hablando, resulta sumamente difícil encontrar manifestaciones
puras y radicales de ambas posturas, lo normal son las posiciones intermedias y
sumamente matizadas. Lo que pretenden subrayar los aprioristas no es la existencia
permanente (siempre con las mismas características) de un conjunto normativo llamado
“Derecho civil”, sino la conexión de las históricas formas de este con principios que
normalmente se reconocen como tributarios del Derecho natural. A su vez, los historicistas
subrayan el aspecto más inmediato de la mutabilidad y evolución de las instituciones
jurídicas, sin que ello implique el desconocimiento o negación de las relaciones de estas
con los presupuestos o principios del denominado Derecho natural.

Etapas del Derecho Civil o Civil Law.


Etapa Romana
Este periodo, tiene como punto de partida, la fundación del Estado Romano (753 A.C.),
culminando con la compilación de Justiniano en el (534 D.C.). La característica más
relevante, reside en la Constitución y Evolución que manifestó el Derecho Civil, como una
forma de Ordenamiento Ciudadano, y que hoy en día sigue manteniendo algunas de sus
inspiraciones en completa vigencia.

Etapa Medioeval
Durante el Medioevo, se desarrolló una verdadera lucha entre el Derecho Romano,
Elementos Jurídicos Indígenas, Canónicos y Germánicos que se fusionaron en una
proporción distinta, influenciados por los profundos cambios sociales y políticos propios de
esta Época. Hay que destacar que, si la Etapa Romana proporcionó al Ordenamiento
Jurídico su base uniforme, la Edad Media le procuró algunos de sus Elementos
Diferenciales. La Etapa Medieval del Derecho Civil, se subdivide en dos períodos:

Período Germánico
Cuando las Tribus Germanas, ocuparon el territorio del Imperio Romano, adoptaron el
principio de la Personalidad del Derecho, en donde cada grupo, Romanos y Germanos, se
regían por diferentes leyes, aunque habitaran en un mismo territorio; y cuyas compilaciones
son llamadas:

Leyes Romanas (Leges Romanaes): Fueron Códigos de contenido Romano, adaptados a


las necesidades de esta Cultura y Época. Destacan la “Lex Romana Burgundionum”
(Romanos de Borgoña) y la “Lex Wisigothorum” (Romanos del Reino Visigodo).

Leyes Bárbaras (Leges Barbarorum): Recogieron antiguas Costumbres Germanas, no sin


añadir nuevas normativas exigidas por la situación del momento.

Etapas de Recepción del Derecho Romano


Aunque como demostró Karl Von Savigny, era errónea la creencia de que en los siglos XI
y XII se perdió el Derecho Romano en Occidente, por el contrario, fue en estas últimas
centurias en donde se intensifica y difunde su estudio, a la vez que se inicia en todos los
pueblos de Europa un movimiento social, encaminado a sustituir sus respectivos Derechos
Germánicos, ya obsoleto, por el Derecho Romano.

En Italia, y por razones obvias, triunfó el Derecho Romano antes que en toda Europa.
Francia es testigo de una división, el Sur (Pays de Droi Ecrit) cumple fundamentalmente el
Derecho Romano, mientras que el Norte (Pays de Coutumes), mantiene un Derecho
Consuetudinario, con una clara influencia germana. En Alemania, aunque más tardía, la
recepción del Derecho Romano, fue más intensa y radical, poniéndose en vigencia el
“Derecho Romano Justiniano”, en detrimento de las costumbres del “Derecho Germano”.
Así para el siglo XVI los diversos pueblos europeos llegaron a un estado de uniformidad,
donde el Derecho Justiniano fue entendido y adaptado por los Glosadores, a las nuevas
necesidades; convirtiéndolo en una Ley que rigió la vida jurídica europea hasta la Etapa de
Codificación Moderna, en el siglo XVIII.

Codificación del Derecho Civil


La Codificación en General

La codificación, en sentido amplio y en el campo del derecho internacional, es el proceso


por el cual las reglas del derecho se plasman, organizan y comprometen en forma escrita.

La Codificación Moderna en General

Hechos y Causas

En determinados momentos, los pueblos tienden a ordenar y agrupar todas sus normativas
jurídicas vigentes. Ello obedece entre otros, a las siguientes causas:

La necesidad de facilitar el conocimiento del Derecho, cuando este se encuentra en una


multitud de normas dispersas.

La conveniencia de sustituir normas casuísticas, por otras que establezcan principios


generales.

El deseo de unificar las Legislaciones, imperantes en un estado.

Introducción de cambios radicales derivados de una Revolución Social.

Formas de Codificación:

Las agrupaciones y ordenación de normas que caracterizan a la Codificación pueden ser


de dos maneras:

Recopilación: Es la recolección en forma de yuxtaposición cronológica de las normas.

La Codificación propiamente dicha: Consiste en reunir todas las Leyes de un sistema


jurídico, o por lo menos de una rama del Derecho en una sola Ley General.
Inconvenientes y Ventajas de la Codificación:

Inconvenientes: Kart Von Savigny, propugnaba que la Codificación favorecía la creencia


de que el Legislador es “Omnipotente”, lo que lleva a olvidar las demás “Fuentes del
Derecho”; y como la sociedad es cambiante, al poco tiempo de entrar en vigencia un
Código, este viene a ser inadecuado frente a las crecientes exigencias de la sociedad.

Ventajas: Según Thibaud la Codificación facilitaba el conocimiento y la aplicación del


Derecho, la elaboración de normas generales para sustituir normas casuísticas; daba,
además, ventajas políticas como la Unificación y la Revolución Social. Para evitar los
inconvenientes señalados por Savigny, era necesario hacer una revisión periódica del
Código y promulgar nuevas leyes escritas. (Hernandez,2012)

El Derecho Civil Mexicano


El Derecho Civil Mexicano Prehispánico

El sistema jurídico azteca comprendía la institución de la esclavitud. Aunque todo género


de servidumbre, de menoscabo de la libertad y dignidad humanas resulta insoportable, se
afirma que la conocieron los romanos, con la salvedad de los prisioneros de guerra, los que
eran irremisiblemente sacrificados, a menos que poseyeran alguna habilidad especial para
el servicio doméstico o industrial.

Entre los aztecas, la esclavitud era un accidente que podía sobrevenir, no algo que naciera
con las personas. “En realidad no era sino un género especial de servidumbre que no
invalidaba la personalidad jurídica del individuo”.

Se llegaba a la condición de esclavo, por contrato, al ser vendido al individuo por sí mismo
o por su padre, por caer prisionero en la guerra, o por haber cometido un delito que tuviera
señalada dicha pena (por ejemplo, la morosidad en el pago de las deudas era castigada
con la esclavitud temporal, en tanto no quedase saldado el adeudo).

El esclavo podía redimirse de la servidumbre pagando su precio o casándose con su ama,


cuando ello era posible; a veces obtenía la libertad por gracia de su dueño, concedía antes
de morir éste.

La familia azteca era de carácter patriarcal, estaba sujeta a la autoridad absoluta del padre,
quién tenía derecho de vida y muerte sobre sus hijos y resolvía todo lo concerniente al
núcleo familiar.
La institución del matrimonio disfrutaba del reconocimiento y de la protección del poder
público. Los jóvenes se consideraban aptos para el casamiento cuando alcanzaban la edad
de veinte años; y las mujeres, alrededor de los dieciséis. El matrimonio se concentraba por
los padres y con la anuencia de los contrayentes, haciéndose la petición de mano de la
doncella mediante la intervención de dos ancianas de la tribu, las que entregaban regalos
a los progenitores de la muchacha, quienes rechazaban invariablemente la primera petición.

Se corrían por segunda vez los trámites de la petición y se formalizaba el compromiso una
vez que se había llegado a un acuerdo sobre la dote correspondiente.

Celebrado el matrimonio con los actos rituales de rigor, se anudaban las vestiduras de los
desposados, quienes debían ayunar y hacer penitencia durante cuatro días para poder
consumar finalmente su matrimonio.

La respetabilidad del matrimonio no era impedimento para la existencia de la poligamia, la


cual era tolerada.

Según expresa Vaillant, “como sucede con frecuencia en las naciones guerreras que sufren
merma en sus componentes masculinos, prevalecía la poligamia; sin embargo, la primera
mujer tenía prioridad sobre las otras, y sólo sus hijos tenían derecho a heredar. Se permitían
las concubinas y existía, también, la prostitución”.

Nueva España y Derecho Civil Mexicano.

Desde el comienzo del siglo XVI, dos grandes corrientes se encontraron en México, y se
amalgamaron con fuerte influencia de la más adelantada. La primera era una civilización
neolítica, en su aspecto jurídico de carácter predominantemente azteca. La segunda, la
civilización hispánica, quien fusionó en su derecho restos de 120 postulados romanos,
germánicos, normas canónicas, mucha reglamentación jurídica e incluso rasgos arábigos.

En la Nueva España los conquistadores habían definido perfectamente su objetivo mandar


a España la materia prima, los bienes, la plata, el oro y otros minerales; en una palabra, la
riqueza captada en el territorio descubierto. De inmediato, se organizó un sistema de control
de nuestros indígenas, mediante la evangelización, para lo cual se contó con el apoyo de
las órdenes religiosas su pretexto de cristianizar a los indígenas, entre 1525 y 1535,
introdujeron algunas costumbres, que se contraponían con la organización interna. Más
aún, se trajo a la santa inquisición, para castigar a los herejes y controlar los actos
ciudadanos, a fin de dominar al indígena. Surgieron las castas producto del encuentro entre
españoles e indígenas.

Algunas crónicas sobre la conquista de la nueva España, refieren aspectos positivos sobre
la cristianización, en base al ejemplo e intachable conducta de los frailes que se empezaron
a hacer cargo de nuestros indígenas. No es tan exacta dicha interpretación, pues algunas
cuestiones, verbigracia el concubinato, surgió al unirse españoles (casados en su país) con
nuestras indígenas, y lo hacían únicamente por la iglesia, sin tomar en cuenta el orden civil.

La Nueva España recibió las instituciones castellanas, derivadas del Derecho Romano, y
plasmadas en el texto de las Siete Partidas. Por otra parte, los monarcas se habían
auxiliado, para sus decisiones trascendentes, de los letrados, quienes habían estudiado
Derecho Romano en las universidades, y en ese contexto, sustentaban y apoyaban los
actos de los Reyes.

Época independiente y el Derecho Civil Mexicano.

Es importante destacar la labor de algunos Estados de la República Mexicana, que


intentaron llevar a cabo los ideales del federalismo, y se dieron a la tarea de elaborar
proyectos y/o codificaciones locales. Oaxaca promulga su código civil, entre 1827 y 1829;
Zacatecas publicó, para su discusión el proyecto de código civil, en 1831, Jalisco publicó la
primera parte de su código civil en 1833; Guanajuato sólo llegó a formular la convocatoria
de un concurso para premiar al mejor código civil para el estado”

El código civil de Oaxaca es el primero en Iberoamérica, fue expedido separadamente en


tres libros sucesivos por el II Congreso constitucional de dicha entidad federativa en las
siguientes fechas: el primer libro precedido por el título preliminar, el día 31 de octubre de
1827, el segundo el 2 de septiembre de 1828 y el tercero el 29 de octubre del mismo año,
1828…promulgados por los señores gobernadores don José Ignacio de Morales, don
Joaquín Guerrero y don Miguel Ignacio de Iturribarría, el 2 de noviembre de 1827 el inicial,
el 4 de septiembre de 1828 el siguiente y el 14 de enero 1829 el último.

Entre las Leyes de Reforma, destacan en materia civil, las siguientes:

Ley de Matrimonio Civil, de 23 de julio de 1859.

Ley Orgánica del Registro Civil, de 28 de julio de 1859, que contiene la Ley sobre el Estado
Civil de las Personas.
Sesión 1. Actividad 2. Sistema jurídico mexicano y
ámbitos de validez
Identifica los siguientes puntos:

Perspectivas de comprensión de los sistemas jurídicos.


Cuando hablamos de familia jurídicas nos estamos refiriendo a la parte tradicional del
derecho, es decir, las partes que lo integran y que les asignaron sus características
particulares y a su vez lo que los diferencian de otras familias.

Se puede observar, que las tradiciones dependen de su localización geográfica, sus países
vecinos que influenciaron sus políticas y con las que de alguna manera establecen
relaciones con lo cual fue heredando ciertas características de su Derecho.

Existen diferentes formas de usar el derecho, algunos países lo hacen de forma oral otros
por escrito, la idea es determinar cuál es su diferencia y definir qué cosas son relevantes
en ambos sistemas, ya que a mi entender no existen malos y buenos, si no que cada uno
tiene ciertas ventajas que se pueden aprovechar y además en cada lugar es aplicable un
determinado tipo de Ley.

Las familias jurídicas son formadas por los sistemas jurídicos de diversas partes o lugares
que por la geografía o intereses económicos, políticos o sociales comparten con otros
estados, la familia es el género y los sistemas jurídicos la especie.

Existen dos grandes familias jurídicas, la familia neo romanista, que es integrada por los
países cuya ciencia jurídica se ha elaborado en base a los fundamentos del derecho romano
y por ende de la tradición germánica, los cuales se unificaron en el occidente de Europa en
el siglo VI. A esta familia pertenece el país de México y se caracteriza por un derecho escrito
y formalista.

Por otra parte, está la familia del common law o anglosajón, que nace en Inglaterra en el
siglo XI, después de la conquista de los normados, este derecho tiene la característica de
que se formó por decisiones judiciales, emanadas de los tribunales reales. A esta familia
pertenecen países como Gran Bretaña, Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva
Zelanda y se caracteriza por ser un sistema oral y desformalizado, cuya principal fuente es
la costumbre.
Sistema Jurídico Mexicano, es el resultado de la mezcla cultural generado en la ocupación
española durante el virreinato de la Nueva España, el primer documento legal nace en el
año 1814, entre sus colaboradores se encuentran, José María Morelos y Pavón, José María
Cos y José María Liceaga, este documento se conoce como Constitución de Apatzingán,
posteriormente, existen otros dos documentos oficiales hasta llegar a nuestra constitución
actual promulgada en 1917 por Venustiano Carranza, el cual surge del movimiento
revolucionario de 1910.

Figura 1. Diferenciación de sistemas jurídicos

Elementos que componen al sistema jurídico.

La idea de que el derecho constituya un orden, presupone la concepción de que sus


elementos (normas o disposiciones) son creadas por ciertas instancias apropiadas,
reconocidas como instancias creadoras del derecho y que son, por lo general eficaces, esto
es, que son, mayormente seguidas y obedecidas.
El orden jurídico, es supremo en el sentido de que, por un lado, la fuente de validez de sus
normas o disposiciones no proviene ni deriva de ningún otro sistema social; y es exclusivo
porque ahí donde vale un orden jurídico no puede valer ningún otro.

El derecho es un orden o sistema coactivo en la medida en que hace uso de sanciones.


Este rasgo, conjuntamente con los anteriores, permite distinguir los órdenes jurídicos de
otros órdenes sociales: Las sanciones jurídicas, son actos coactivos socialmente
inmanentes, aplicados por instituciones específicas.

Estrechamente vinculado con esta idea se encuentra la concepción, de que el derecho (y


sobre esto basan su autoridad y prestigio) es un conjunto de principios y normas conformes
con la "razón" o con la naturaleza (con la “naturaleza de las cosas”, con la naturaleza del
hombre).

Normalmente los juristas dedicados del derecho, comienzan su explicación de una


definición persuasiva o un concepto ad hoc de derecho. Una vez satisfecho, con mayor o
menor éxito este cometido, consideran que han dado cuenta, aunque sea en parte, de estos
fenómenos. Esto constituye un error. Una correcta explicación del orden jurídico,
presupone un claro entendimiento de las funciones que realiza y las entidades que lo
constituyen.

Los órdenes jurídicos deben ser considerados, como intrincadas urdimbres de actos y
materiales jurídicos interrelacionados, en los que se realizan diversas funciones entre las
cuales el facultamiento es una de tantas. ¿Cuáles son los problemas que una teoría del
orden jurídico se propone solucionar y en cuáles es relevante el concepto de facultad?

Una teoría completa del sistema jurídico se compone de las soluciones a los siguientes
problemas, existencia, identidad estructura y contenido del Sistema jurídico.

Si se observa con atención el orden jurídico, uno se percata que el concepto de facultad se
presenta como una función esencial. Esta función esencial al orden jurídico permite
identificar los diferentes elementos que forman un orden jurídico.

Clasificación del sistema normativo.


Cada una de las normas jurídicas, cimientos de todo orden legal, tiene características que
la hacen ser diferente. Con la finalidad de sistematizarlas y hacer más evidentes sus
alcances, se clasifican, entre otras formas, en atención a su jerarquía y a sus ámbitos
material y espacial de validez.

Jerarquía

Las normas jurídicas, no tienen forzosamente el mismo rango ni categoría; algunas son
superiores y otras inferiores, es decir, existe entre ellas un orden jerárquico. Esto permite
determinar cuál es la norma que resulta aplicable en caso de contradicción. Además, existe
la necesidad de que unas se apoyen en otras; toda norma jurídica se considera válida y
obligatoria porque se encuentra apoyada en otra superior, y esta otra, a su vez, porque se
encuentra sustentada en otra norma de más elevada categoría, hasta llegar a la
Constitución Federal.

Así, en México, el nivel máximo superior es ocupado por la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos. Los tratados internacionales se encuentran en segundo plano
inmediatamente debajo de ella y, en tercer lugar, se encuentran el derecho federal y el local,
con igual jerarquía. En la siguiente figura se aprecian los elementos del sistema jurídico
mexicano acorde a la pirámide de Kelsen, sin embargo, en dicha figura no aparecen los
elementos humanos u ontológicos es decir la naturaleza misma del Sistema, ya que Kelsen
no los contempla, pero son inherentes al desarrollo y creación del mismo.
Figura 2. Pirámide de Kelsen

Muchos han sido los debates sobre la jerarquía normativa y en especial, entre la
Constitución y los tratados. En la novena época de jurisprudencia, se estableció con acierto,
que tratados y leyes federales tienen la misma jerarquía, es decir, “debajo” de la
Constitución. Más tarde, en la novena época se diría que los tratados están inmediatamente
debajo de la Constitución, pero “encima” de las leyes federales. Para la décima época y
gracias a la condena internacional impuesta al Estado Mexicano en el caso Rosendo Radilla
Pacheco, cayeron varios mitos y posturas erróneas y gracias al principio pro persona,
tratándose de las normas en materia de Derechos Humanos, ya no hay jerarquía rígida,
pues se debe aplicar la norma que más favorezca a las personas, sea tratado, ley,
Constitución, reglamento, etcétera. Al respecto, el párrafo segundo del artículo primero
constitucional señala lo siguiente:

Las normas relativas a los Derechos Humanos se interpretarán de conformidad con esta
Constitución y con los tratados internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a
las personas la protección más amplia.
Este párrafo representa un cambio importante en la forma de concebir el Derecho
Internacional de los Derechos Humanos, ya que tradicionalmente los jueces mexicanos
aplicaron una jerarquía normativa muy rígida, en la que la Constitución se encontraba a la
cabeza de la pirámide normativa. De facto, los tratados internacionales se encontraban
incluso en un rango inferior que las normas nacionales, pues el aplicador jurídico,
incluyendo los jueces federales y locales, no se consideraban constreñidos más que por el
Derecho que surgía de fuentes nacionales.

Figura 3 Comparativo antes y después de reforma 2011

Definición de los ámbitos de validez y criterios de aplicación

El Derecho Civil ha comprendido las disposiciones de carácter general que de manera


expresa o en forma supletoria rigen a las demás disposiciones legales. Tradicionalmente
estas disposiciones, denominadas preliminares, en el Código Civil para el Distrito Federal
han sido las relativas a los ámbitos de vigencia de las leyes: a los ámbitos personal,
espacial y temporal, así como a la regulación de los conflictos que respecto a ellos se
suscitan los cuatro ámbitos de validez de las normas jurídicas.

Desarrollados por Hans Kelsen (1881-1973), y mencionados por Eduardo García


Máynez en su libro de "introducción al estudio del derecho", son:

 El espacial, que es la porción del espacio en que un precepto es aplicable;


 El temporal, que está constituido por el lapso durante el cual conserva su vigencia.
 El material, por la materia que regula.
 El personal, por los sujetos a quienes obliga.

Figura 4. Ámbitos de Validez de las normas jurídicas

En el primer caso, el ámbito espacial de validez, es la porción del espacio en que un


precepto es aplicable, y así, pueden ser:

a) Generales: Las que se aplican en todo el territorio del Estado, lo que equivaldría en
México a las Federales, que se aplican en toda la República; ejemplo: la ley Federal del
Trabajo.

Aunque aquí cabe hacer la diferencia, entre las federales y las estatales, pues ambas son
creadas o modificadas por el Congreso de la Unión y se aplican en todo el territorio de la
República, pero las federales van a ser aplicadas exclusivamente por autoridades federales,
en cambio, las leyes generales versan sobre materias que son de aplicación, tanto para las
autoridades federales como para las autoridades locales, es decir, son de competencia
concurrente y establecen obligaciones y facultades en cada uno de los niveles de gobierno
(Federal, Estatal y Municipal). Para ello solo basta ver el desplegado de leyes, que en la
página de la cámara de diputados se establece.

Cámara de diputados-leyes.

b) Locales (estatales): Aquellas normas que sólo se aplican en una parte del Estado o
País. Ejemplo: Código Civil del Estado de Coahuila, Código Penal del Estado de Coahuila.
Como son menos las leyes estatales que las federales, suelen estar más actualizadas.

c) Municipales: Son las aplicables solamente dentro de la circunscripción territorial del


Municipio. Ejemplo: Reglamento de faltas al bando de policía y buen gobierno del municipio
de Coahuila.

El ámbito temporal está constituido por el lapso durante el cual la norma jurídica conserva
su vigencia.

a) De vigencia determinada: Son aquellas cuya vigencia o tiempo en el que deberán


aplicarse se encuentra establecido de antemano. Cuándo comienzan a ser obligatorias y
cuándo dejan de serlo. Ejemplo: Ley de Ingresos de la Federación para el ejercicio fiscal
del 2017.

TRANSITORIOS

Primero. La presente Ley entrará en vigor el 1 de enero de 2017.

b) De vigencia indeterminada: No señalan el término durante el cual estarán en vigencia,


simplemente se limitan a decirnos el día en que entran en vigor, pero no determina su
finalización, como es el caso de la generalidad de las leyes en nuestro país, sólo pierden
su vigencia cuando es abrogada, expresa o tácitamente.

Abrogación. Es quitar a la totalidad de la ley su fuerza obligatoria.

Derogación. Suprimir solamente algunos preceptos de la ley, sea que se sustituyan por
otros o no

El ámbito material de validez se refiere a la materia que la ley va a regular.

Desde este punto de vista, los preceptos jurídicos se agrupan en normas de derecho público
y de derecho privado.
A) Derecho público. Conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones del Estado
con los particulares, o con otros Estados, cuando se encuentra provisto de su autoridad
soberana.

Soberanía. Ningún poder igual al suyo en el interior; ningún poder superior al suyo en el
exterior.

El Derecho Interno se refiere a aquellas normas que se van a aplicar dentro de los límites
territoriales de un país determinado.

Pertenecen al derecho público interno:

Derecho Constitucional: Conjunto de normas jurídicas que regulan la estructura y el


funcionamiento del Estado, a las funciones de sus órganos y a las relaciones de éstos entre
sí y con los particulares.

Derecho administrativo: Conjunto de normas jurídicas que regulan la organización del


poder administrativo (ejecutivo) y la forma de hacer promociones ante dicho poder. Ley
orgánica de la administración pública federal, ley federal de procedimiento contencioso
administrativo.

Derecho Penal: Conjunto de normas jurídicas relativas a los delitos, las penas y las
medidas de seguridad, que tiene por objetivo inmediato la creación y la conservación del
orden social.

Derecho procesal: Conjunto de normas jurídicas que regulan la actuación de los órganos
jurisdiccionales y de las partes en el seno del proceso con el fin de la aplicación del Derecho
sustantivo al caso concreto cuya resolución se solicita

Derecho del trabajo: Conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones entre
patrones, trabajador(es), asociaciones sindicales y el Estado. Ley federal de trabajo, Ley
federal de los trabajadores al servicio del Estado.

Derecho Agrario: Conjunto de normas jurídicas que regulan la solución de los problemas
derivados del reparto e inafectabilidad de tierras y aguas y de su dotación a los núcleos de
población. Ley agraria.

El Derecho Externo. Comprende aquellas normas jurídicas cuyos efectos son susceptibles
de aplicarse fuera de los límites territoriales de un Estado.
Derecho Internacional Público: Es el conjunto de normas que rigen las relaciones de los
Estados entre sí y señalan sus derechos y deberes recíprocos.

Ley sobre celebración de tratados, ley del servicio exterior mexicano.

Derecho Internacional privado: Conjunto de normas jurídica que rigen a los particulares
o sus bienes cuando, siendo nacionales de un Estado, se encuentran en territorio de otro
Estado,

Derecho Privado: El conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones de los
particulares entre sí y entre éstos y el Estado, cuando está desprovisto de su autoridad
soberana.

Derecho Civil: Conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones privadas de los
particulares entre sí.

Derecho mercantil: Conjunto de normas jurídicas que se aplican a los actos de comercio
legalmente calificados como tales, y a los comerciantes en el ejercicio de su profesión.

Ámbito personal de validez.

Desde este ámbito, se refiere a los sujetos a quienes obliga la ley.

a) Genéricas: Obligan o facultan a todos los comprendidos dentro de la clase designada


por el concepto-sujeto de la disposición normativa.

Ejemplo: Homicidio.

Artículo 123 del Código Penal del Estado de Coahuila. "A quien prive de la vida a otra
persona, se le impondrá de ocho a veinte años de prisión. Se entenderá la pérdida de la
vida en los términos de la Ley General de Salud".

b) Individualizadas: Las que obligan o facultan a uno o varios miembros de la misma


clase, individualmente determinados.

Ejemplo: Una sentencia establece la pena de veinte años de prisión a Miguel por matar a
Luis. El fundamento de la sentencia es la ley, la ley se aplicará a todos los que caigan en la
hipótesis de la ley, pero la sentencia es individualizada y se aplica a un solo individuo.

Las normas individualizadas pueden ser privadas, según deriven de la voluntad de los
particulares (los contratos y los testamentos) o públicas, si derivan de las autoridades (los
tratados internacionales).
Relación del sistema jurídico nacional con el Derecho Internacional

Las normas relativas a los Derechos Humanos se interpretarán de conformidad con esta
Constitución y con los tratados internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a
las personas la protección más amplia.

Este párrafo representa un cambio importante en la forma de concebir el Derecho


Internacional de los Derechos Humanos, ya que tradicionalmente los jueces mexicanos
aplicaron una jerarquía normativa muy rígida, en la que la Constitución se encontraba a la
cabeza de la pirámide normativa. De facto, los tratados internacionales se encontraban
incluso en un rango inferior que las normas nacionales, pues el aplicador jurídico,
incluyendo los jueces federales y locales, no se consideraban constreñidos más que por el
Derecho que surgía de fuentes nacionales.

No obstante, esta nueva organización, ten presente que no es rígida e infalible, pues, por
ejemplo, una ley local no encuentra su fundamento de validez en una norma federal,
mientras que por otra parte, una norma federal puede emanar directamente de la
Constitución.

No obstante, en las normas que no versan sobre Derechos Fundamentales o Humanos, sí


se sigue la idea de la pirámide kelseniana, es decir, que la Constitución se encuentra como
la primer norma del sistema, a la cual deben conformarse todas las normas posteriores,
podrás encontrarte con una salvedad: tanto las leyes federales, como los tratados, se
encuentran inmediatamente después de la Constitución, pues esta las rige de modo que a
pesar de que la jurisprudencia diga que las leyes federales están después de los tratados,
ello es indemostrable. Claramente el artículo 133 establece que la Constitución y las leyes,
junto con los tratados que estén de acuerdo con ella, serán la ley suprema, pero a contrario
sensu, si no están de acuerdo con la Constitución, no serán ley.

Existe una Ley Federal que regula cómo se celebran los tratados, de modo que no sería
lógico que esa ley se deba ajustar a un tratado. En materia de Derechos Humanos, la
jerarquía se rompe porque lo que se busca es dar la mayor protección a las personas, sin
importar la jerarquía formal de la fuente del Derecho.

Si bien es cierto que le asiste la razón a Kelsen al decir que la validez de una norma se
encuentra en una norma anterior y superior, hasta encontrarnos en última instancia con la
Constitución, que es “norma hipotética fundamental” (grundnorm), no tiene razón en cuanto
a que omitió los actos de aplicación de la propia Constitución (acto legislativo), que también
debe ser válido para producir una norma válida. En la teoría pura del Derecho, Kelsen omitió
decir también que toda norma es correlativa de una voluntad, pues esa teoría, como indica
su nombre, pretendía explicar al Derecho sólo desde el Derecho mismo, sin incluir
elementos políticos ni naturalistas; eso explica por qué sostuvo que una norma tenía su
“fundamento de validez” en otra norma, reduciendo todo el Derecho a explicaciones
normativas. Fue sólo hasta los años finales de su vida, que reconoció que toda norma era
correlativa de una voluntad. Bajo esta óptica reivindicada, resulta que, si la Constitución es
una norma, ésta es también correlativa de una voluntad (voluntad soberana), de modo que
no puede tener un fundamento de validez (basarse en una norma) y menos aún, una norma
supuesta (hipotética), pues ello además de ser anticientífico, es indemostrable; contrario a
la tesis de Raz en cuanto a que una norma es hecha por personas.

Procedimientos para la elaboración de normas.

En los libros tradicionales de la doctrina jurídica, la norma suele señalarse como una
proposición ideal que contrasta con la realidad, dándole el carácter de aspiración bajo la
denominación de “deber ser”, tal como fue establecido por Kelsen indebidamente
interpretado por los positivistas subsecuentes, en cuanto a que la interpretación real sobre
la idea del “deber ser” kelseniano consisten en entenderlo como una vinculación normativa
con el comportamiento humano. De esta interpretación errónea resulta la idea de “deber
ser” en oposición a “ser” alejada del ámbito lógico que el Derecho requiere para su estudio,
puesto que implica una postura axiológica o teleológica, de la que Kelsen buscó alejarse.

Las normas jurídicas consisten en una obligación que el hombre debe cumplir dentro de la
sociedad. Poco importa su voluntad, ya que es indiferente que esté o no de acuerdo en
acatarlas, pues la característica principal de estas normas es la obligatoriedad y la
posibilidad que tiene la autoridad de hacerlas cumplir por medio de la fuerza, esto es,
mediante la coacción. Las normas jurídicas se caracterizan pues, por ser heterónomas,
bilaterales, externas y por supuesto coercibles.

El comportamiento humano es objeto de enunciados jurídicos que lo interpretan


normativamente, en otras palabras, las normas establecen lo prohibido, lo permitido o lo
obligatorio, en tanto que la relación de imputación permite interpretar si el comportamiento
humano es un comportamiento debido, es decir, es un comportamiento que escapa a la
sanción normativa.

De lo anterior, se desprende que la relación de imputación tiene un carácter arbitrario puesto


que la vinculación creada entre la norma y el comportamiento humano puede transformarse
por los actos de creación normativa, de tal suerte que es necesario el estudio de la
dimensión de la norma, denominada doctrinalmente como ámbitos de validez.

S-ar putea să vă placă și