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Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

de plenitud, todo lo que es posible de los cuerpos celestes, en general, celestes. Si bien, como hemos dicho, el movimiento anual del Sol des- gularidades como las retrogradaciones, en que solo cumplían un rol de
es o será el caso en cada uno de ellos (Aristóteles, 1990, IX, 8). Nada crib a una doble espiral, este pod a ser explicado anali ándolo como re- ajuste y correcci n de errores. A este mismo n se emplearon las lla-
a aroso ocurre en los cielos; la nica descripci n de su naturale a es sultado de la composición de dos movimientos circulares de velocidad madas exc ntricas , c rculos en los que el centro de la rbita básica no
completa y no da lugar a entrecruzamientos de factores pertenecientes constante (un c rculo diario y uno anual, la ecl ptica). La explicaci n coincidía con el centro de la Tierra, y los “ecuantes”. No es importante
a esferas distintas. El movimiento celeste es tan irrevocable como el de los movimientos de los planetas sería análoga: se comprenderían aqu entrar en detalles acerca de estos ltimos. Lo esencial es distinguir
pasado. Nada podemos hacer para impedir la ocurrencia de uno o del mediante la combinación de movimientos circulares. los epiciclos mayores de los epiciclos menores y otros recursos. Los
otro. En otras palabras, la física celeste es “determinista”. primeros cumplían una función cualitativa (dar cuenta del porqué de
La explicaci n de las retrogradaciones supon a un grave problema: los las retrogradaciones); los ltimos, cumpl an una funci n de ajuste y
Hemos señalado antes que los movimientos y cambios de la región su- planetas parecen detenerse y retroceder, y eso parecía ser una clara vio- precisión cuantitativa (respondiendo no ya a por qué, sino a los detalles
blunar son producidos por los movimientos en el ámbito celeste. Al lación de los dos principios que acabamos de mencionar. Por otra parte, del cómo). Veremos, luego, que la propuesta de Copérnico permitió
haber sostenido la necesidad y regularidad de estos ltimos, podr a pre- ¿qué podría cambiar su estado de movimiento si se suponía que nada hay eliminar los epiciclos mayores (también conoceremos por qué), pero
guntarse por su relación con los primeros. ¿Cómo puede convivir lo en los cielos fuera de estrellas jas y planetas Es decir: ¿por qu acelera- que, además, necesitó de una serie de recursos adicionales (epiciclos
necesario con lo contingente (lo que podr a ser de otro modo) ¿C mo r an o disminuir an su velocidad cuando nada se interpon a en su camino menores y exc ntricas) para dar cuenta con precisi n de las observa-
pueden interactuar dos mundos sin que azar alguno se transmita hacia ciones. Veremos, asimismo, que a partir del trabajo de Kepler, podrá
los cielos o el orden se imponga en la Tierra Sabemos, por ejemplo, En el siglo II antes de nuestra era, los astrónomos Apolonio (c.262 a.C.- prescindirse de los epiciclos menores, obteniéndose así una descripción
que cuando el Sol se encuentra en cierta posición, las temperaturas son c.190 a.C.) e Hiparco (c.190 a.C.- c.120 a.C.) elaboraron el modelo de cualitativamente aceptable, cuantitativamente precisa y bastante senci-
más cálidas y los días más largos. Pero no todos los ejemplos concebi- epiciclos y deferentes. Este modelo era una variaci n, signi cativa, de lla, desde el punto de vista matemático- astronómico.
bles son de este estilo. La relación entre ambos mundos, entre ambas la explicaci n dada al movimiento del Sol, pero en esencia consistente
naturalezas o entre ambas físicas, puede ser problemática. En cualquier con ella: ambos supon an la explicaci n de un movimiento aparente-
caso, estas ideas daban un marco cosmológico y físico a la astronomía mente anómalo en un movimiento regular a partir de la combinación de El mecanismo de Anticitera: tecnología en la Antigüedad
Por Christián C. Carman
ptolemaica que presentaremos a continuación. Asimismo, y fundamen- movimientos circulares. Los planetas se hallaban montados en un círcu-
talmente, el carácter necesario de los fenómenos celestes y el contin- lo cuyo eje estaba jado a la esfera que describ a su rbita original (Fi- A principios de 1900, un grupo de buzos griegos concluía su temporada de pesca en el norte
de África y regresaba a su hogar. Sin embargo, en el camino de vuelta fue sorprendido por
gente de los fenómenos sublunares, dentro de los cuales se inscribe toda gura 12). El movimiento de los planetas, así, era un movimiento com-
una fuerte tormenta mientras atravesaba el canal entre Citera y Creta y debió hacer costa en
la actividad humana, justi caba desde el punto de vista epistemol gico puesto: el planeta se mov a en un c rculo super cial llamado “epiciclo una pequeña isla llamada Anticitera. Una vez concluida la tormenta, comenzaron a bucear y
la división del universo en dos. Los objetos de estudio del universo (que justamente quiere decir, en griego, “círculo-apoyado-encima”), y hallaron un barco hundido lleno de tesoros. Se trató del primer naufragio arqueológico y, hasta
sublunar y supralunar eran en esencia distintos y, por ello, correspondía el epiciclo se desplazaba a lo largo de la circunferencia llamada “defe- ahora, el más importante. Los tesoros encontrados actualmente llenan varias salas del Museo
Arqueológico Nacional de Atenas: bellísimas estatuas de bronce, joyas, armas, muebles, pero
que se los estudiara por separado. Este marco es el que comenzaría a rente”. El centro del epiciclo estaba siempre sobre el deferente y este
también rescataron fragmentos de lo que parecía ser un aparato de navegación, hoy conocido
destruirse a partir del trabajo de Copérnico. tenía su centro en el de la Tierra. Al variar los tamaños de los epiciclos,
como el mecanismo de Anticitera. El naufragio ha sido datado cerca del 70 a.C., mientras que
se podían reproducir retrogradaciones de distintas magnitudes; cuanto el mecanismo probablemente haya sido fabricado entre el 100 y el 150 a.C.
más grande el epiciclo, mayor la retrogradación. El mecanismo ten a aproximadamente el tamaño de un diccionario grande, estaba protegido
por una caja de madera que tenía una puerta adelante y otra atrás. Tenía más de 30 engranajes

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de bronce y, al menos, 7 relojes señalando distintos eventos. El aparato se manejaba dando


1.5. La astronomía antigua
vueltas con la mano a una manija, que ponía en funcionamiento toda la cadena de engranajes.
En los apartados 1.2 y 1.3 se han descripto los fenómenos celestes vi- Girando en un sentido se podría avanzar en el tiempo y, girando en el otro, retroceder.

sibles a simple vista y presentado dos modelizaciones alternativas. En


En el frente, había un gran reloj con dos escalas concéntricas. La interior estaba dividida en
el apartado 1.4 desarrollamos esquemáticamente la cosmología y físi- 12 zonas con 30 marcas cada una, en cada zona estaba escrito el nombre griego de un signo
ca aristot licas. Nos dedicaremos de aqu en más a las explicaciones del od aco y serv a para ubicar sobre el fondo de estrellas jas la posici n del Sol, la Luna y,
ofrecidas por la astronomía antigua de los movimientos celestes en el probablemente, los planetas conocidos en la poca. La exterior estaba dividida en 365 marcas

denominado “universo de las dos esferas”, el cosmos aristotélico. que correspondían a los días del año. En el centro de estas escalas había al menos dos punteros,
uno para el Sol y otro para la Luna que giraban cada uno a su propio ritmo. El del Sol daba
una vuelta por año y, así, señalaba en la escala interna la posición del Sol en el zodíaco y, en la
Que la Tierra era esférica, como ya hemos dicho, jamás estuvo en dis- Figura 12. El sistema de epiciclos
externa, el d a del año.
puta dentro del ámbito cient co. Esta idea era apoyada por numerosas
observaciones: cuando un barco se aleja de un puerto, lo ltimo que De este modo, se ofrec a una explicaci n cualitativa, general, de las El puntero de la Luna daba una vuelta por mes y mostraba la posición de la Luna en el zo-

desaparece es su mástil; cuando nos alejamos de una montaña lo ltimo retrogradaciones. Pero para dar una explicaci n detallada de los fen - díaco. Este puntero contaba con dos mecanismos realmente asombrosos por su ingenio y

que desaparece de nuestra vista es su pico, etc. La esfera celeste, a la menos observados era necesario introducir mayores precisiones: no era simplicidad: para señalar las fases de la Luna, poseía una pequeña esfera, mitad pintada de
negro y mitad de blanco, que giraba a lo largo del mes (sinódico) mostrándose, por lo tanto,
que hemos hecho referencia en la sección 1.4, rodeaba la terrestre te- idéntica la retrogradación de Marte que la de Venus, por ejemplo. Lo
parcialmente blanca y parcialmente negra o totalmente de uno u otro color, representando las
niendo en su super cie a las estrellas que vemos durante la noche. más importante, sin embargo, fue que a partir de esta teorización pudo fases de la Luna. El segundo lograba dar cuenta de las irregularidades en la velocidad de la
aumentarse enormemente la exactitud de las observaciones, comparan- Luna haciendo que el puntero de la Luna no se desplazara a una velocidad constante, sino

Los principios fundamentales de la astronomía antigua eran dos: la cir- do los datos reales con las predicciones ofrecidas por el sistema teórico. que acelerara en los momentos que la Luna aceleraba y desacelerara cuando la Luna lo hacía.

De este modo, el modelo explicativo, además de recoger la evidencia En general, la astronomía que está detrás, inspirando la construcción del aparato, es la de
cularidad de los movimientos y la constancia de su velocidad. Dicho Hiparco, el astrónomo griego anterior a Ptolomeo más conocido.
de otro modo, las trayectorias atribuidas a los cuerpos celestes debían de observaciones previas establecía predicciones de observaciones nue-
tener forma circular –o poder conformarse a partir de la combinación de vas, predicciones cuya determinación requería nuevas y más precisas En la cara posterior había dos grandes relojes ubicados verticalmente y algunos relojitos subsi-
círculos, como veremos más adelante– y las velocidades de los cuerpos observaciones. Fueron Ptolomeo (100-178) y sus sucesores quienes se diarios en su interior. El reloj de arriba consistía en un complicado calendario luni-solar, basado

siguiendo en esas trayectorias debían ser siempre las mismas –los cuer- encargaron de esa tarea. en el ciclo met nico que a rma que 19 años son exactamente 235 meses lunares. La escala
constaba de 235 celdas (cada una representando un mes) ubicadas en cinco vueltas en forma
pos no podían acelerarse ni desacelerarse. Estos principios se encon- de espiral. Como cada ciudad griega poseía su propio calendario, el nombre de los meses allí
traban en perfecta armonía con la concepción aristotélica del cosmos y Sin embargo, el progreso trajo consigo nuevos desafíos; para dar cuenta
presentes nos permite concluir que el mecanismo fue hecho para ser utilizado en Corinto o en
sustentando asimismo el modelo explicativo geoc ntrico y geostático. de los datos obtenidos a partir de las observaciones más precisas posi- alguna de sus colonias. Incluso, podría provenir de Siracusa, donde vivió el gran Arquímedes,

Por otra parte, estos principios ofrec an la explicaci n más sencilla para bilitadas por la teoría y ajustar a ellos las predicciones, fueron necesa- quien, seg n cuenta Cicer n en su Rep blica, construy un aparato muy similar.

el movimiento diario de las estrellas jas, que constituyen la abrumado- rios nuevos epiciclos. Se incorporaron entonces los llamados “epiciclos
El calendario luni-solar constaba de dos relojitos subsidiarios: uno giraba una vuelta cada 76
ra mayor a de las luces que se observan en los cielos. Las estrellas jas menores”, que servían para eliminar pequeños desacuerdos entre teoría
años e indicaba cuándo hab a que omitir un d a extra al calendario met nico (una ve cada
se mueven a velocidad angular constante, en órbitas circulares cuyo y observación. Estos epiciclos menores, círculos montados sobre los cuatro ciclos) para corregirlo. El segundo, uno de los más asombrosos, daba una vuelta cada
tamaño depende de su ubicación con respecto al polo Norte y al Sur epiciclos previos, se distinguían de los antes mencionados (conocidos cuatro años y estaba dividido en cuatro celdas: en ellas se indicaban qué juegos panhelénicos
como epiciclos mayores) cuya funci n era la de explicar grandes irre- se jugarían ese año: las Olimpíadas, los juegos de Nemea, etc.
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El de abajo estaba dividido en 223 celdas (también correspondiendo cada una a un mes sinó- A su vez, el aparente retraso diario del Sol con respecto a las estrellas se cierta hora a través suyo se vea una determinada estrella y suponiendo
dico) distribuidas en cuatro vueltas de un espiral. La mayoría de las celdas están vacías, pero
debería a la traslación terrestre: cada día que pasa, la Tierra se ha movido que la Tierra tuviera un movimiento de traslación anual alrededor del
en los meses en los que habría un eclipse, la celda indicaba que lo habría detallando si sería
solar o lunar, a qué hora sucedería y si podría o no verse. Los eclipses se repiten cada 223 me- un poco hacia el oeste, lo cual genera la apariencia del avance paulatino Sol, luego de un tiempo, la estrella debería dejar de verse a través del
ses, por eso, ese puntero servía para predecir eclipses in aeternum. En realidad, de un ciclo a del Sol hacia el este. Y lo mismo, en general, con el movimiento normal tubo. Para poder seguir observando esa estrella, sería necesario ajustar
otro, la aparición de los eclipses se desplaza 8 horas. Ésa es la razón por la que el mecanismo de los demás planetas. Con respecto a la cuestión de las estaciones del el ángulo con el cual se j el tubo, dependiendo la cantidad de ajuste
poseía un relojito subsidiario con un puntero que giraba muy lentamente (una vuelta cada 54
año, los equinoccios y los solsticios, que eran explicados por el movi- necesario, de cuánto variase la posición relativa de la Tierra con respec-
años) indicando si había que sumar 8 ó 16 horas o ninguna al valor que aparecía en la celda.
Si bien es el nico aparato de este tipo que conservamos (el siguiente instrumento astron -
miento del Sol en la eclíptica y la inclinación de la eclíptica respecto del to a la estrella (ver Figura 14).
mico con engranajes es 1400 años posterior y muchísimo más simple), para muestra basta un polo Norte celeste de aproximadamente 23 , ahora era explicado como
botón: el desarrollo tecnológico en la Antigüedad había llegado mucho más lejos de lo que consecuencia de una inclinación en el ecuador terrestre (el paralelo 0 en
habitualmente pensamos. nuestros mapas) y desplazamiento de los polos Norte y Sur terrestres
Para más informaci n: Carman, Christian (2011), El mecanismo de Anticitera. Una computadora astro- con respecto al plano de traslación terrestre (ver Figura 8).
nómica analógica de la antigüedad, en Ciencia Hoy, 21 (n 123, pp. 29-34). Disponible en: http://www.
cienciahoy.org.ar/ch/ln/hoy123/Anticitera.pdf
La principal virtud del sistema copernicano, sin embargo, consiste en la
explicaci n cualitativa de las retrogradaciones de los planetas. De acuer-
do con la visión copernicana, la Tierra es el tercer planeta a partir del Sol.
1.6. El pensamiento de Copérnico Más cercanos al Sol se encuentran Mercurio y Venus, y más lejanos, Mar-
Ya en tiempos de Ptolomeo, la astronomía se había constituido como te, J piter y Saturno. A cada uno de los seis planetas le corresponde un
una disciplina autónoma con respecto a la física y a la cosmología. Pero círculo cuyo centro está en el Sol. La Luna tiene un círculo aparte, cuyo
estas ltimas constitu an un marco necesario para ella, ya que pese a centro coincide con el de la Tierra. De este modo, las retrogradaciones
su independencia metodológica y disciplinar, eran conceptualmente de- son meramente las apariencias generadas por el movimiento relativo de
Figura 14. El problema de la paralaje. El ángulo alfa es el llamado ángulo de la paralaje, dependiente de
pendientes: los movimientos de los astros debían ser física y cosmoló- los distintos planetas alrededor del Sol (ver Figura 13). la posici n terrestre y de la distancia de las estrellas jas a la Tierra.

gicamente posibles. En tiempos de Copérnico, doce siglos más tarde,


las cosas eran semejantes. Así, tanto su gran obra, Revolutionibus Or- Pero lo cierto es que cuando se reali aban tales experiencias, no se ob-
bium Caelestium, como la de Ptolomeo llamada Almagesto, comenza- servaba que la estrella cambiase su posición (sí a lo largo del día, por
ban presentando el marco cosmológico y físico en el cual se inscribirían supuesto, pero no a lo largo del paso de los meses). Es decir, continuan-
sus trabajos y cálculos astronómicos. Ambos libros, de este modo, se do con el ejemplo del tubo, es posible seguir viendo la misma estrella a
iniciaban argumentando acerca de la posición de la Tierra en el cosmos, la misma hora en el mismo sitio sin necesidad de ajustes. Esto suponía
su movilidad o inmovilidad y su relación con respecto a las estrellas. un argumento contundente en contra del movimiento de la Tierra. Co-
Empezaremos por allí. Figura 13. Explicaci n coperni- p rnico introdujo una propuesta extremadamente auda para responder
cana de las retrogradaciones a este inconveniente.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

Al igual que sus predecesores, Copérnico aceptaba que el universo era Estas ideas no solo permitían a Copérnico dar cuenta de las retrograda- Hemos dicho que el ángulo de la paralaje, el ángulo de ajuste que habría
esférico y que esa era la forma de la Tierra y de los demás astros; que los ciones de un modo cualitativo, también permitían calcular los tamaños que imponerle al tubo para que siguiera apuntando al mismo objeto,
movimientos de los cuerpos celestes eran circulares y su velocidad uni- de las órbitas planetarias, a partir del tiempo que demoraban los plane- dependía de la variación de la posición relativa de la Tierra respecto
forme. De tal manera, los primeros cuatro capítulos de su libro, compar- tas en recorrerlas dando una vuelta, y el hecho de que los planetas inte- de la estrella en cuestión. Pero la magnitud de ese cambio de posición
ten plenamente las ideas de sus colegas de la antigüedad. En el capítulo riores (ubicados entre el Sol y la Tierra) planteaban más retrogradacio- depende de cuán lejos estén las estrellas. Es decir, en función de qué
quinto, sin embargo, comienza a argumentar a favor del movimiento de nes al año. También, por qué nunca aparecían en el Zodíaco alejados de la tan grande sea la esfera de las estrellas jas. El ángulo a en la Figura
la Tierra, o sea, que la Tierra se mueve. Sus argumentos, que no son de posición proyectada del Sol (fenómeno que no mencionamos antes, pero 14 varía mucho, porque la estrella se encuentra cercana de la Tierra. Si
ning n modo concluyentes, mani estan dos caracter sticas fundamenta- que tiene cierta relevancia). Venus y Mercurio nunca se oponían al Sol, se encontrara mucho más lejos, la variación sería menor. Si se hallara
les. En primer lugar, para justi car dicho movimiento, Cop rnico esta- es decir, nunca ocurría que la Tierra quedara en medio del Sol y Venus, extremadamente lejos, podr a ocurrir que la variaci n fuese tan peque-
blece una analogía entre la Tierra y los demás cuerpos celestes: al tener ni entre el Sol y Mercurio (cosa que s ocurr a con los planetas externos). ña que resultara indetectable. Y eso fue lo que sostuvo Copérnico, que
la misma forma, podrían convenirles los mismos movimientos. Veremos, la esfera de las estrellas jas estaba extremadamente lejos, de modo tal
luego, que las observaciones de Galileo profundizan esta observación El sistema de Copérnico, no obstante, distaba de ser perfecto, especial- que el movimiento de la Tierra alrededor del Sol era despreciable. El
cosmológica y siguen la misma línea: la Tierra es solo un astro más. En mente a la hora de dar una explicaci n matemática precisa de los movi- universo, argumentó, era mucho más grande de lo que se había imagi-
segundo lugar, Copérnico adhiere a la idea aristotélica de los lugares na- mientos celestes. Esta precisión es lo que requerían los astrónomos. Y nado. Tanto, que la variación de posición de la Tierra con respecto a las
turales y procura conservar el marco físico aristotélico con una diferencia, tenían razón. Copérnico logró eliminar los epiciclos mayores, pero nece- estrellas jas exist a pero no era observable. Ptolomeo hab a considera-
nada sutil, pero razonable: cambiar el centro del universo por el centro de sitaba hacer uso de los epiciclos menores y de las exc ntricas. Con ello do también esta posibilidad pero la había descartado por absurda.
cada planeta (incluida la Tierra) como lugar al que tienden los graves (los su sistema resultaba tan complejo como el ptolemaico y con una gran
cuerpos que caen). En el caso de una Tierra inmóvil, la tendencia natural desventaja: era poco intuitivo desde el punto de vista físico. Si la Tierra
de los cuatro elementos a buscar su posición con respecto al centro del gira sobre su eje cada día y, además, se mueve miles y miles de kilóme- La polémica planetaria
universo, coincidía con la tendencia natural a buscar el centro de la Tie- tros alrededor del Sol, ¿cómo es que no salimos disparados por la fuerza De acuerdo con los argumentos de Copérnico, la Tierra sería “un planeta más”, de la misma
rra. Al a rmar que la Tierra está en movimiento, Cop rnico debi atribuir centr fuga que genera su giro , ¿c mo es que los pájaros en el cielo, que categoría que Marte o Venus. Posteriormente, como veremos luego, las observaciones tele-
scópicas de Galileo darían un fuerte apoyo a esta hipótesis, mostrando nuevas similitudes
las tendencias naturales de los elementos a su centro, como marco de no están aferrados a nada, no se quedan atrás (como quien salta de un tren
entre la Tierra y los otros astros errantes. Esto supuso un cambio en la noción de “planeta”,
referencia y punto al que caían los graves. en movimiento) ¿C mo es que si soltamos un objeto de una torre, cae al un cambio conceptual.
pie de esta, aunque la Tierra haya girado una importante distancia
La explicaci n de los movimientos celestes ofrecida por Cop rnico con Para los antiguos, como ya hemos apuntado, el universo se dividía espacial y materialmente

respecto a las estrellas jas y al Sol, consiste en asignar a la Tierra los Por otra parte, exist a un problema de naturale a más astron mica que en dos ámbitos: el de los fenómenos terrestres y el de los celestes. Hasta aquí, hemos utili-
ado el t rmino planeta para referirnos exclusivamente a Mercurio, Venus, Marte, J piter y
movimientos que la astronomía antigua le había atribuido hasta ese en- física, el problema de la paralaje. Si la Tierra se moviese, razonaban por
Saturno. Pero dentro del ámbito de los cielos, las luces que vemos, que se suponían cuerpos
tonces al resto del universo. Así, las rotaciones diarias de la esfera de entonces, las posiciones relativas de las estrellas jas deber an cambiar. esf ricos, sol an ser clasi cados en dos grandes conjuntos: por un lado, las estrellas jas,
las estrellas jas y el Sol (de este a oeste) se deben a una rotaci n de la Del mismo modo que si caminamos por una habitación, las posiciones cuerpos que no cambian sus posiciones relativas a lo largo del año; por otro, los “astros
Tierra sobre su propio eje en dirección contraria (de oeste a este) que de- relativas de los objetos que nos rodean cambian (aunque las reales no lo errantes” o “planetas”, todos los demás cuerpos que se observan en los cielos y varían sus
posiciones noche a noche y día tras día. El concepto de planeta se refería entonces tanto a
mora 23 horas 56 minutos (acorde con la explicaci n del apartado 1.3). hagan). Por ejemplo, si en enero jo un tubo hueco de manera tal que a
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los cinco mencionados como a la Luna y el Sol. Luna, Sol, Mercurio, Venus, Marte, J piter que las utilizadas hasta ese entonces por ptolemaicos y copernicanos y al decir, con las ideas principales de Kepler, podr amos explicar, tanto la
y Saturno eran siete planetas que giraban alrededor de la Tierra, de una naturaleza diferente.
mismo tiempo adecuada a las precisas observaciones con las que contaba. situación de nuestro sistema solar, en el que las órbitas de los planetas
A partir de la propuesta de Copérnico, el concepto de planeta sufre un cambio radical. En Finalmente, estos compromisos lo llevarían a romper con las dos ideas son elipses no circulares y cuyos planetas, en consecuencia, tienen una
primer lugar, el Sol pasa a ocupar el lugar de cuerpo privilegiado, centro de los movimientos, rectoras de la astronomía antigua que Copérnico había conservado: mo- velocidad que no es constante, como la relativa a otros sistemas plane-
y deja de ser pensado como un errante. En segundo lugar, la Tierra pasa a ser un planeta más vimientos circulares y velocidades uniformes. tarios posibles. Con estas dos leyes, Kepler pudo predecir y sintetizar
junto a Mercurio, Venus, Marte, J piter y Saturno. En tercer lugar, la Luna tambi n cambia
los movimientos celestes, planetarios, estelares y solares, prescindien-
su estatuto, dejando de ser un planeta y convirtiéndose en un satélite, un cuerpo que gira
alrededor de un planeta (idea que abría la posibilidad de que otros planetas tuvieran también
En primer lugar, Kepler observó que los epiciclos menores utilizados do incluso de los epiciclos menores y dando al copernicanismo la carta
sus lunas, lo cual posteriormente fue observado por Galileo). Los planetas ahora eran seis para explicar la aparente diferencia de velocidad del movimiento apa- del triunfo como teoría astronómica.
y aparecía la noción de satélite. La distinción espacial y material del mundo antiguo en dos rente del Sol en algunas épocas y de los planetas en general, se podían
ámbitos entraba así en una crisis profunda. Ptolemaicos y copernicanos, al referirse a plane- evitar abandonando la idea de que los planetas recorren órbitas circu- Finalmente, Kepler formuló una tercera ley, que vinculaba los períodos
tas no solo estaban pensando en palabras que se aplican a conjuntos de cosas diferentes (no
lares. La llamada “Primera ley de Kepler”, enuncia su alternativa: los de los planetas (cuánto tardan en dar una vuelta alrededor del Sol) con
solo se trataba de cambiar el Sol por la Tierra), los conceptos antiguos y moderno de planeta
eran solo el signo de un cambio profundo en la concepción del cosmos. Dos cosmovisiones
planetas se mueven en órbitas de forma elíptica (elipses) estando el Sol sus distancias al Sol. A rm que hab a una ra n constante entre esos
contrapuestas. En alg n sentido, unos y otros viv an en mundos distintos. en uno de sus focos (ver Figura 15). períodos y sus distancias al Sol. Los planetas más lejanos se mueven
más lento, en tanto que los más cercanos lo hacen más velozmente. El
signi cado de esta ley, de acuerdo con Kepler, era que revelaba una
armonía profunda acerca, ya no de los planetas con relación al Sol, sino
1.7. La astronomía de Brahe y de Kepler
del sistema solar como un todo, expresando una proporci n en la forma
El sistema copernicano permit a simpli car conceptualmente la expli- general del sistema solar y la ubicación de sus órbitas.
Figura 15. Órbitas elípticas y
cación de las retrogradaciones de los planetas. Los llamados epiciclos órbitas circulares. Primera ley
mayores ya no eran necesarios, porque el movimiento anómalo de los de Kepler
1.8. El aporte galileano
planetas era interpretado como consecuencia de que el observador en la
Tierra también estaba en movimiento, como ya mencionamos. Sin em- Galileo Galilei (1564-1642) fue el otro gran copernicano del siglo XVII.
bargo, desde el punto de vista astronómico, que requería precisión pre- ¿Qué es una elipse? Su obra otorgó plausibilidad física y cosmológica a las idea de una tie-
dictiva y no solo una explicaci n cualitativa, el sistema de copernicano rra móvil. Desde el punto de vista cosmológico, sus principales aportes
Una elipse es a un c rculo lo mismo que un paralelogramo ( gura de cuatro lados con lados
resultaba tan inadecuado como el ptolemaico y no menos complicado. opuestos paralelos, como el rectángulo y el rombo) a un cuadrado. Es decir, una elipse es una a las ideas copernicanas provinieron de las observaciones realizadas a
Esta inadecuaci n se hi o especialmente mani esta como consecuencia categoría más general. Los círculos son elipses, del mismo modo que los cuadrados son parale- partir de 1609 con el telescopio, tecnología que, aunque era conocida,
de las nuevas y más precisas observaciones incorporadas como eviden-
logramos. La diferencia en ambos casos es que tanto los círculos como los cuadrados son más no hab a sido empleada antes con nes astron micos. Galileo combin
simétricos. Las dos diagonales de un cuadrado se cruzan en su centro y dan lugar a cuatro trián-
cia astronómica por los hermanos Tycho (1546-1601) y Sophie Brahe nuevas observaciones sobre los fenómenos celestes con un espíritu y
gulos iguales. Lo mismo pasa con dos líneas que se crucen en el centro de un círculo, lo dividen
(1556-1643). Ser a Johannes Kepler (1571-1630) quien dar a una ex- en cuatro porciones iguales (piensen en una pizza). Ahora bien, si se hace esto con un rectángulo,
habilidad de propaganda enormes. No solo realizó observaciones como
plicación astronómica que gozaba tanto de precisión como de sencillez. o con una elipse que no es un círculo, dos líneas que se cruzan en el centro darán lugar a dos trián- cient co profesional o astr nomo, sino que las divulg a la opini n
Para ello debería poner en cuestión las dos ideas fundamentales de la gulos más grandes y dos más pequeños. Un círculo es una elipse con un solo foco, un solo centro. p blica. Las principales conclusiones que extrajo de sus observaciones

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astronomía antigua: que todos los movimientos celestes se basan en fueron que la Tierra no es más que un astro como tantos en el univer-
recorridos circulares y que las velocidades de los astros son constantes. so, semejante a los demás planetas y que incluso en los cielos nada es
Tycho Brahe fue, junto con Copérnico, el mayor astrónomo del siglo eterno, ni perfecto (como se sostenía en la cosmología de Aristóteles).
XVI. Su aporte crucial a la Revolución copernicana fue la incorpora-
ción de un conjunto enorme de nueva evidencia, observaciones precisas 1.8.1 Galileo y el telescopio
de los fenómenos celestes y, particularmente, los movimientos de los
planetas. La evidencia recogida por los Brahe sería fundamental para Galileo contempl con gran detalle el paisaje de la super cie de la Luna,
las discusiones posteriores, no tanto porque favoreciera al copernica- notó allí montañas y valles muy semejantes a los de la Tierra e incluso,
nismo o a sus críticos, sino porque pondría en crisis a ambos sistemas. Figura 16. Ilustración de la Segunda ley de Kepler, la ley de áreas
viendo cómo variaban las sombras de las montañas lunares, calculó su
Hasta ese entonces, el con icto entre copernicanos y ptolemaicos se en- altura (el mismo método era utilizado para determinar tales alturas en
La ”Segunda ley de Kepler” pone en cuestión la velocidad constante las montañas terrestres). Esto iba en contra de la idea aristotélica de que
contraba en una especie de “empate técnico”: los copernicanos podían
de los planetas. En su lugar, propone una regularidad distinta: los pla- la Luna era una esfera perfecta de éter, y de que había una diferencia
aducir que no necesitaban epiciclos mayores, pero se comprometían
netas no van a velocidad constante sino que barren áreas iguales de la cualitativa entre la Tierra y las entidades del mundo supralunar.
con el movimiento de la Tierra sin una justi caci n f sica consistente;
elipse en tiempos iguales (ver Figura 16). Esta ley es también conocida
los ptolemaicos, tenían la tradición de su lado y una cosmología sólida
como “Ley de áreas”. Imaginen que trazan una línea que une al planeta En segundo lugar, además de observar numerosas estrellas que sin el
detrás, pero carecían de una representación de los movimientos pla-
con el foco de la elipse en el que se encuentra el Sol. Al comparar las telescopio no eran visibles, constató que su tamaño aparente no varia-
netarios cualitativamente sencilla; ambos, copernicanos y ptolemaicos,
posiciones correspondientes a dos momentos distintos, habrá quedado ba por utili ar este instrumento y argument a favor de su casi in nita
deb an en cualquier caso utili ar un n mero enorme de artilugios mate-
recortada un área de la elipse. Es posible, desde luego, realizar varias lejanía. Sin embargo, sus principales descubrimientos astronómicos no
máticos para dar cuenta de los fenómenos con alguna precisión. Las ob-
observaciones en distintos momentos, obteniendo por resultado distin- fueron esos sino los siguientes tres. Galileo observó, en tercer lugar,
servaciones de Brahe mostraron de nitivamente que ambas concepcio-
tas áreas recortadas. Kepler a rma que si esas áreas tienen la misma que J piter tiene lunas, al igual que la Tierra, e incluso que tiene más,
nes, tal como estaban planteadas, no se adecuaban a la evidencia. Tanto
magnitud, el tiempo empleado por el planeta para recorrer la parte de cuatro, lo cual mostraba fuera de casi toda duda que había movimientos
copernicanos como ptolemaicos deb an incorporar un gran n mero de
la elipse que las cubre debe ser el mismo. Si aplicamos esta ley a un cíclicos, cuyo centro no era el centro de la Tierra, ni del universo, ni
correcciones a sus ya complejos sistemas para poder dar cuenta de las
cuerpo que recorre una trayectoria circular, la ley de áreas implica que tampoco del Sol. Por otra parte, la estabilidad del movimiento de esas
observaciones de Brahe.
el cuerpo va a una velocidad constante. Aplicada a otras elipses, la idea lunas alrededor de un planeta que se suponía en movimiento, constituía
implica, que cuando los planetas están más cerca del Sol, su velocidad una fuerte razón para aceptar la estabilidad física de una Tierra móvil:
Kepler, discípulo de Brahe y heredero de sus observaciones, dio un nuevo
es mucho más rápida y que cuando están lejos, su velocidad es menor. si las lunas de J piter pod an acompañar su movimiento y no quedaban
giro a la astronomía. El mismo resolvería el llamado problema de los pla-
netas y lo de nir a a favor de la posici n copernicana. Las fuentes de su atrás, lo mismo valdría para nosotros en la Tierra y los pájaros en el aire.
Estas dos leyes fueron las principales innovaciones respecto de la as-
pensamiento fueron dos: por un lado, una creencia casi mística y fanática
tronomía antigua. Ambas son aceptadas en la actualidad, pero hoy no En cuarto lugar, observó que Venus mostraba fases como la Luna y que,
en las armonías matemáticas y las proporciones; por otro, un compromiso
son consideradas leyes relativas solo al movimiento de los planetas co- al igual que la Tierra, tambi n re ejaba la lu del Sol de forma variable
profundo con la evidencia disponible. Ambas fuentes combinadas, lo lle-
nocidos por Kepler alrededor del Sol, sino como leyes universales. Es seg n su posici n respecto de aquel. Esto no podr a explicarse desde la
varon a buscar una explicaci n matemáticamente más sencilla y elegante
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

propuesta ptolemaica en la que los planetas internos nunca se encontra- Evidentemente, esto ltimo no pasa. Cuando jugamos al f tbol, no re- impedía descartar la idea por absurda. Y no se necesitaba más, ya que
ban detrás del Sol. Finalmente, observó los anillos de Saturno, lo que paramos en si estamos pateando la pelota en la dirección del movimien- ahora abundaban evidencias tanto cosmológicas, a favor de la semejan-
también contribuía a descartar la idea de que todos los astros son esferas to terrestre o en la direcci n contraria. Si disparamos una echa con una za de la Tierra con otros astros, como astronómicas, vinculadas con que
o tienen una forma esférica (idea que incluso Copérnico aceptaba). fuerza determinada, sabemos que cae a la misma distancia, no importa la mejor (más elegante y más precisa) descripción astronómica suponía
en qué dirección apuntemos. Así, hay dos posibilidades: o la Tierra no que la Tierra giraba alrededor del Sol recorriendo una elipse.
1.8.2 Galileo y la relatividad del movimiento se mueve, o algo en la explicaci n que acabamos de presentar está mal.
Los f sicos que se opon an al movimiento de la Tierra, con ados en esa 1.9. Epílogo: Newton
Hasta aquí nos hemos concentrado en los desarrollos astronómicos y clase de explicaciones, descartaban las ideas copernicanas con argu-
cosmológicos vinculados a la denominada Revolución copernicana. mentos basados en la física. Galileo, quien adhería al copernicanismo, Llegamos ahora al nal de nuestra historia. Los trabajos de Kepler so-
Estos pudieron ser su cientes para quebrar por completo el esquema tuvo que encontrar una nueva explicaci n f sica para la ca da de los bre los movimientos celestes permitieron a la astronomía de base co-
aristotélico ptolemaico y abandonar la idea de que la Tierra es un astro cuerpos y la indiferencia que existe entre las distintas orientaciones de pernicana prescindir ya, no solo de los epiciclos mayores, sino también
privilegiado que se encuentra en reposo en el centro del universo. La nuestros disparos (con echas, balas de cañ n o pelotas de f tbol). El de los menores (pudiendo explicar as incluso las precisas observacio-
simplicidad de las explicaciones astron micas de Kepler que supon an modo en que formuló esta idea fue el principio de relatividad del mo- nes de Brahe). Los argumentos de Galileo y sus observaciones con el
una trayectoria bastante simple para los cuerpos celestes, la Tierra y los vimiento, que sería uno de las bases de la “Ley de inercia”, enunciada telescopio dieron plausibilidad a la idea cosmológica de que la Tierra
otros planetas eran un argumento demasiado elocuente como para ser posteriormente por Isaac Newton. es un astro semejante a los otros planetas. Finalmente, su análisis de la
ignorado. El sistema de Kepler, a diferencia del propuesto por Copérni- inercia y relatividad del movimiento, permitía dejar de lado los argu-
co, era indiscutiblemente superior a cualquier otro sistema astronómico Galileo argumentó razonablemente lo siguiente: cuando estamos en un mentos físicos en contra del movimiento de la Tierra. Serían Gottfried
nunca antes conocido. Por otra parte, la virtud propagandística y la ar- barco (podría haber dicho en un tren, pero no había trenes en ese enton- Leibni (1646-1716), Robert Hooke (1635-1703) y, en ltima instancia,
gumentación convincente de Galileo puso al alcance de la burguesía y ces), actuamos del mismo modo que cuando estamos en nuestras casas. Isaac Newton (1642-1727) quienes dar an la forma nal al nuevo uni-
la sociedad educada (que sabía leer y escribir), la idea de que la Tierra El hecho de que el barco se esté moviendo no hace que las cosas se nos verso. Resumiremos a continuación sus principales rasgos.
era un astro no muy distinto a los demás (idea que no era nueva, ya caigan detrás. Nosotros, al igual que las cosas en el barco, compartimos
Leonardo da Vinci y otros pensadores la habían sostenido). Un capítulo el movimiento del barco, y no experimentamos su velocidad. Al estar El espacio y el tiempo (de los cuales no hemos hablado hasta aquí de-
más, sin embargo, nos queda por recorrer: el camino que va desde la en un barco cerrado, en la cabina de un barco, no podríamos saber si masiado) son concebidos matemáticamente y sin propiedades físicas
idea de “lugar natural” de Aristóteles (apartado 1.4. La ciencia aristoté- se encuentra avanzando en alguna dirección o quieto con respecto a un perceptibles. Todos los puntos del espacio son iguales, no hay un centro
lica, cosmología y física) hasta la idea de una física inercial. puerto cercano. No hay ning n experimento que pudi ramos reali ar del universo, ni con nes, ni lugares naturales para las cosas. Solo se
dentro del barco que nos permitiera establecer si este se mueve o no. Y distinguen físicamente dos puntos del espacio por los cuerpos que los
Supongamos que estuviéramos en un tren muy largo que va en línea lo mismo ocurre con la Tierra. Como estamos sobre ella compartimos ocupan y dos momentos en el tiempo por la diferencia de las posiciones
recta a una velocidad constante en una zona llana (por ejemplo, 60 su movimiento, llamémosle movimiento inercial, y, por eso cuando sal- relativas de los cuerpos en ellos.
km/h) y tuvi ramos un arco y dos echas. Disparamos una en direcci n tamos, no caemos atrás, pese a que en el segundo en que estuvimos en
a la locomotora y la otra en la direcci n contraria. ¿Qu observaremos el aire, la Tierra se ha movido varios kilómetros respecto del Sol. Via- La idea galileana de la relatividad del movimiento y la inercia son enun-
Arist teles dir a: observaremos que las echas caen. l no dar a más jamos en la Tierra como en un barco, sin notarlo. ciadas como uno de los principios más básicos de los cuerpos físicos:

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

precisiones ni las necesitar a. Su explicaci n causal es satisfactoria: Veamos ahora c mo explica Galileo el experimento de las echas. Re- todo cuerpo conserva su estado de movimiento a menos que sea some-
¿por qu han ca do Porque son graves, su constituci n es más densa pasemos, el tren va a 60 km/h y la echa en la misma direcci n (120 tido a fuer as externas. Esto es más fuerte y general que lo que hemos
que la del aire que las circunda y buscan su lugar natural en el centro km/h), cae luego de 1 minuto, la echa ha recorrido una distancia de dicho antes sobre Galileo y el movimiento compartido, pero también
de la Tierra. Ahora bien, si quisiéramos calcular las distancias a las 2 km. En ese tiempo, el tren ha avan ado 1 km. Para recoger la echa fue enunciado parcialmente por él y tiene un antecedente en los princi-
que caen, Aristóteles no tendría mucho que decir, no era el tipo de pro- tenemos que caminar 2 km. ¿Por qu Porque al ser disparada, la echa pios de la astronomía antigua. Así, si un cuerpo estuviese moviéndose a
blemas a que originalmente se enfrentaba. Él pretendía responder a la ya compartía el movimiento del tren de 60 km/h. Esa cantidad de movi- 10 km/h respecto de un punto del espacio, seguiría el movimiento en la
pregunta: ¿por qu la echa cae y no a: ¿c mo es que cae o se mueve miento es un extra, as que la echa ha avan ado 2 km por el disparo y 1 misma direcci n inde nidamente. Esta idea desaf a las ideas antiguas,
la echa ; mucho menos a: ¿c mo podemos describir matemáticamente km por su movimiento inercial inicial compartido con el tren. La echa e incluso las de Copérnico, ya que supone que un cuerpo puede estar en
la trayectoria de la echa disparada en la dirección contraria, se alejará, en su minuto en el aire, equilibrio y moviéndose al mismo tiempo (un cuerpo cualquiera inclu-
2 km de nosotros. En ese tiempo, el tren ha avanzado 1 km. Sabemos so uno terrestre), cuando para Arist teles el nico punto de equilibrio
Los físicos posteriores a Aristóteles y anteriores a Galileo, más intere- que tendremos que caminar 2 km para recogerla. ¿Por qu Porque al era el de reposo (para los cuerpos del universo sublunar). Y supone
sados en este tipo de problemas, hubieran respondido probablemente ser disparada, la echa ya compart a el movimiento del tren de 60 km/h. tambi n un espacio in nito, ya que si el universo tuviera una esfera
del siguiente modo: si el tren va a 60 km/h y la echa en la misma Esa cantidad de movimiento contraria a la del disparo se resta, así que la exterior que lo contuviera, un cuerpo no podr a continuar en su estado
dirección (por ejemplo, a 120 km/h) y cae luego de un minuto, esta ha echa se ha alejado hacia el fondo del tren en 2 km por el disparo, pero de movimiento inde nidamente; en alg n momento chocar a con los
recorrido una distancia de 2 km. En ese tiempo, el tren ha avanzado 1 por su movimiento inercial inicial compartido con el tren en ese tiempo, límites del universo.
km. Por lo tanto, para recoger la echa solo tendremos que caminar también ha avanzado un kilómetro en la dirección en que avanza el tren,
1 km dentro del tren, ya que mientras ella avanzaba 2 km, el tren nos compensando el movimiento que realizó el tren mientras ella estaba en Newton propuso, además de la “Ley de inercia , otras dos: la llamada
acerc 1 km. La echa tirada en la direcci n contraria, dir an los f sicos el aire. Considerado desde alguien que ve el tren pasar desde una esta- “Ley de acción y reacción” y la “Ley de la fuerza”. La primera sostiene
postaristotélicos y pregalileanos, se alejará en un minuto en el aire, 2 ci n, la echa disparada en direcci n a la locomotora se ha movido tres que siempre que un cuerpo A ejerce una fuerza en una dirección sobre
km de nosotros. En ese tiempo, el tren ha avanzado 1 km. Por lo tanto, kil metros alejándose de la estaci n; la echa disparada hacia atrás se un cuerpo B, una fuerza de igual magnitud y sentido opuesto es ejercida
para recoger la echa tendr amos que caminar 3 km dentro del tren, ya ha movido un kilómetro acercándose a ella. Desde nuestro punto de vis- por el cuerpo B sobre el cuerpo A. Un ejemplo de esto puede experi-
que mientras ella avanzaba 2 km, el tren nos alejó 1 km más. ta, en el tren ambas echas se han movido 2 km con respecto a nosotros. mentarse disparando un fusil. Una fuerza es ejercida por la bala al dejar
el fusil, lo que hace que sintamos la “patada”, un golpe sobre nuestro
Imaginemos que la explicaci n reci n presentada fuera correcta. Pense- La idea de una fuerza tal, que hace que compartamos el movimiento hombro. Lo mismo ocurre cuando saltamos: ejercemos una fuerza con-
mos, ahora, que en lugar de viajar en un tren a 60 km/h, lo hacemos en de la Tierra, era novedosa, y el principio de relatividad del movimiento tra el piso, pero en ese instante, el piso ejerce una fuerza igual y en
nuestro planeta a 60.000 km/h. Si disparamos la echa en la Tierra en la junto a ella son, desde el punto de vista cient co, los mayores aportes sentido opuesto. Al combinar esto con el principio de relatividad del
direcci n del movimiento terrestre (hacia la locomotora), la echa avan a- de Galileo a la física. Nuestro viaje en la Tierra es como cualquier otro movimiento, podemos pensar que lo nico objetivo es el m dulo de la
ría los mismos 2 km. En ese tiempo, la Tierra habría avanzado 1000 km. viaje. Estamos en la Tierra como en un navío. Si estas ideas eran co- fuer a existente entre nosotros y el piso. La segunda, o ley de la fuer-
Seg n el ra onamiento anterior, la echa tendr a que caer 998 km detrás de rrectas, ya no había problema alguno en una Tierra móvil. La quietud za, establece que las fuerzas ejercen un cambio en la velocidad de los
nosotros. En caso de apuntar la echa en la direcci n contraria, por análogo y la movilidad de la Tierra eran indistinguibles desde el punto de vista cuerpos, una aceleración que depende en parte de la masa del cuerpo.
ra onamiento, la echa caer a a 1002 km detrás de nuestra posici n. físico. Esto, desde luego, no probaba que la Tierra se moviera, pero sí Esto signi ca que, si conocemos la masa de un cuerpo y la aceleraci n
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

que experimenta, podemos calcular la fuer a a la que está sometido; si El mundo newtoniano era completamente distinto a aquel planteado Existe una explicaci n alternativa que no necesita apelar al diseño de
sabemos la fuerza a la que está sometido, y su masa, podemos calcu- por Aristóteles, cuya forma de pensar había dominado por siglos en ninguna entidad sobrenatural, arquitecta de esta estabilidad. Newton no
lar la aceleración que dicha fuerza producirá en él; si conocemos qué la comunidad cient ca de Oriente y de Occidente. Seg n Arist teles, plantea esta solución (tal vez nunca se le haya ocurrido) que hoy se
aceleraciones producen distintas fuerzas sobre él, podemos calcular su el mundo estaba formado por sustancias, y estas incluían constitutiva- encuentra a mano, de modo que cualquiera de ustedes podría llegar a
masa. Al combinar la ley de acción y reacción con la ley de la fuerza, mente nes y metas intr nsecas. Los cuerpos supralunares ca an porque descubrirla. ¿Cómo es que los planetas van justo a la velocidad a la que
podemos determinar cómo dos cuerpos de masas muy diferentes inte- ten an un lugar natural, ten an el n de reposar en un lugar del universo. no caen al Sol ni se escapan de la fuer a gravitatoria de este
ract an (intercambian fuer as). Las aceleraciones en uno y en otro se- Las explicaciones más adecuadas, de este modo, eran aquellas que re-
rán iguales solo si sus masas lo son. Es decir, si tenemos un cuerpo A y mit an a nes. Lo mismo ocurr a para explicar los cambios de los orga- El tipo de respuesta que hoy consideramos más adecuada a este proble-
uno B y A ejerce una fuerza de cierta magnitud sobre B, B ejercerá una nismos vivos. La razón por la que una semilla se transformaba poco a ma ejempli ca un nuevo modo de pensar inaugurado por la Revoluci n
fuerza igual pero en dirección opuesta. Si ambos tienen masas iguales, poco en un árbol de determinada especie, tenía que ver también con un darwiniana, que veremos en la segunda parte de esta unidad.
las aceleraciones producidas en A por B y en B por A serán iguales, pero cambio natural dirigido hacia un n. El crecimiento de una planta y la
si uno de ellos tiene más masa que el otro, el que tenga menos masa caída de un cuerpo constituían casos de movimientos naturales.
experimentará una mayor aceleraci n que el que tiene mayor masa. En Seg n lo desarrollad o hasta aqu , a n de integrar y sinteti ar los contenidos, les
proponemos responder:
concreto, si un tren choca de frente con un pájaro, la fuerza ejercida El mundo de Newton estaba formado por átomos. Los átomos no tienen
por el pájaro contra el tren y por el tren contra el pájaro son iguales, sin ning n tipo de n. Todo lo que ocurre con ellos se explica a partir de la a. ¿Cuáles son los fen menos que buscaba explicar la astronom a antigua Consi-

embargo, la aceleraci n que producirá el pájaro sobre el tren es n ma, forma en que son afectados por las diferentes fuerzas. En este sentido, no deren, especialmente, aquellos descriptos por los siguientes conceptos:
estrellas jas, estrellas errantes (planetas), ecl ptica y retrogradaci n.
porque el tren tiene una masa mucho mayor, en tanto que la aceleración hay lugar en f sica para ninguna explicaci n que evoque a ning n tipo
b. ¿C mo se explican estos fen menos seg n el llamado “universo de las dos esferas
producida por el tren en el pájaro, será enorme (porque el pájaro tiene de n. Las cosas se mueven y cambian su estado de movimiento porque c. ¿C mo se explican las retrogradaciones a partir del sistema de epiciclos y deferentes
muy poca masa). Es decir, el pájaro saldrá volando mientras que el tren fuer as act an sobre ellas. Por otra parte, el universo no es pequeño y no d. En términos de Aristóteles, ¿en qué consisten las diferencias entre el universo
ni se inmutará (como cuando un automóvil atropella una mariposa, o ocupamos un lugar central en él. No ocupamos ni siquiera un lugar cen- sublunar y supralunar
una ciruela cae sobre la Tierra). tral en nuestro sistema solar y, además, este es uno de los in nitos siste- e. La concepci n de Cop rnico y la ptolemaica: ¿qu comparten y en qu di eren
mas que conforman el universo, y tampoco ocupa un lugar especial en él. f. ¿C mo se explican las retrogradaciones en el sistema de Cop rnico
Las leyes de Newton poseen un carácter muy general: no nos dicen qu g. ¿En qu consiste el problema de la paralaje ¿Qu respuesta ofrece Cop rnico
h. ¿Cuáles son los aportes de Kepler a la Revoluci n copernicana
tipo de fuer as hay, ni precisan si alg n cuerpo se mueve inercialmente, El xito del marco newtoniano y sus desarrollos durante los siglos
i. ¿Qu es lo relevante de las observaciones reali adas por Galileo con el telescopio
ni cuál es la fuerza ejercida por un cuerpo sobre otro. Pero si agregamos XVIII y XIX fueron arrolladores. Los efectos de la visión y concepción
j. ¿C mo explica Galileo que no percibamos el movimiento de la Tierra
estos datos, nos permiten calcular adecuadamente algunas cosas. Con- modernas trascendieron con mucho el ámbito espec co de la f sica. k. Suele decirse que una de las razones más fuertes para que se terminara aceptando
siguientemente, Newton complementa sus leyes considerando algunas Nada es perfecto, sin embargo, y el universo newtoniano distaba de ser la teor a de Newton está vinculada con su capacidad uni cadora. ¿C mo se explica
fuerzas y modelos particulares. En especial, la fuerza gravitatoria. En el ltimo cap tulo de la f sica. Con el tiempo, la teor a de Newton ser a dicha capacidad
ese caso, lo que a rma Newton es que existe una fuer a que act a a reemplazada, a comienzos del siglo XX, por otras propuestas novedo-
distancia que depende de las masas de los cuerpos y de sus distancias. sas. En particular, por las teorías formuladas por Albert Einstein.
La misma, llamada “fuerza de gravedad”, es proporcional a la masa de

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

los cuerpos (es mayor cuanto mayores son las masas de los cuerpos) y Mencionaremos solo un problema cosmol gico discutido por Newton 2. Segunda parte
disminuye en su intensidad como el cuadrado de sus distancias. Resu- en su correspondencia con Richard Bentley (1662-1742). En ese con- La Revolución darwiniana
midamente, cuando más cerca están dos cuerpos, la intensidad de su texto, la discusi n parece teol gica y está destinada a probar la exis-
atracción crece muchísimo. La idea de que una fuerza actuara a distan- tencia e intervenci n de Dios en el mundo f sico (Newton, 2004). El De manera semejante a como los aportes de Copérnico, de Kepler, de
cia hubiera sido inaceptable para Aristóteles, y de hecho fue objetada dilema que plantea Bentley a Newton es el siguiente: existe solo un Galileo y de Newton revolucionaron la f sica aristot lica, la publicaci n
por muchos cient cos y l sofos de la poca y posteriores. conjunto exacto de condiciones iniciales (distancias y velocidades iner- de El origen de las especies de Charles Darwin (1809-1882) cambi
ciales de los cuerpos celestes) de acuerdo con el cual el universo es drásticamente la forma de abordar y comprender la vida, en sus m lti-
Al hacer uso de estas leyes, con los datos adecuados para comenzar, estable; con velocidades iniciales o n mamente menores o posiciones ples manifestaciones. Parte de ese relato que nos transmiten las princi-
Newton pod a explicar la ca da de los cuerpos y la aceleraci n que ex- más cercanas, la fuerza de gravedad haría que todo el universo colapsa- pales instituciones educativas a las que asistimos, al que se hacía refe-
perimentan al caer, las trayectorias de proyectiles, como las que dis- ra hacia alg n centro haci ndose compacto cada ve más velo mente; rencia en la introducción a la materia, nos cuenta que los seres humanos
cutimos al nal del apartado anterior, y especialmente, aceptando la con velocidades iniciales ligeramente mayores o estando los cuerpos somos tan solo una más de tantas especies que habitan este planeta. Al
primera ley de Kepler y precisando los datos de los planetas, que podían algo más alejados, el universo se desintegraría. Esto mismo puede ser igual que el resto de los seres vivos, nuestro desarrollo y crecimiento se
explicar el resto de las leyes de Kepler. Lo importante, lo fundamental, planteado con el movimiento de la Tierra alrededor del Sol. Con una encuentran en parte codi cados en nuestro ADN, hemos evolucionado
es que con las tres leyes de Newton, la f sica pose a un marco general velocidad media ligeramente menor, la fuerza de gravedad atraería a a lo largo de millones de años a partir de formas de vida diferentes,
desde el cual tratar el problema del movimiento, tanto de cuerpos sobre la Tierra hacia el Sol, la cual comenzaría un recorrido en espiral cada sin ning n tipo de direcci n pre jada. Puede a rmarse que la obra de
la tierra como de astros. Ese fue el principal aporte de Newton: ofrecer vez más veloz hasta chocar con el Sol. Con una velocidad media lige- Darwin El origen de las especies es uno de los grandes responsables
una nueva teoría general del movimiento desde la cual la física terrestre ramente mayor, la Tierra empezaría a distanciarse describiendo una es- de que hoy asumamos como esencialmente correcto este aspecto de la
y la celeste pudieran ser tratadas del mismo modo. piral que se alejar a del Sol hasta perderse en los con nes del universo. historia que nos cuentan. Si bien Darwin no fue el primero en defender
Esto es cierto en relación con cada uno de los planetas, y en cuanto a una teor a evolucionista a la hora de explicar la aparici n de rasgos en
Otro fen meno, que no hemos mencionado hasta aqu , pero que Newton las lunas de los planetas con respecto a ellos. Planetas y satélites van, los seres vivos tan delicadamente ajustados al entorno en el que viven;
también pudo incorporar dentro de su esquema, es el fenómeno de las de todas las numerosas posibles velocidades a las que podrían ir, justo ciertamente, puede pensarse que su teoría de la evolución por selección
mareas. Cualquiera que ha ido al mar sabe que, a ciertas horas, el agua a la velocidad a la que no caen al Sol ni se alejan de él. Si arrojáramos natural fue la primera en ofrecer una explicaci n adecuada del aspec-
sube sobre la costa y, en otras, se retira y que esto pasa más de una vez azarosamente objetos al espacio, ¿cuán bajas serían las probabilidades to adaptativo de la evoluci n, seg n veremos y, al mismo tiempo, fue
al d a. Newton tuvo la habilidad de anali ar este fen meno consideran- de que justo se organi aran en un sistema estable capaz de ensamblar un conjunto de evidencias empíricas originalmente
do la relaci n entre la Tierra, el Sol y la Luna. El Sol ejerce su in uencia inconexas, proveniente de diversas áreas cient cas, tales como la pa-
por su gran tamaño, pese a su distancia, y la Luna por su cercanía, pese ¿C mo se explica la estabilidad del universo Newton no dud en ad- leontología, la cría de animales, la embriología, etc.
a su relativamente pequeño tamaño. Las posiciones relativas de ambos mitir que Dios es quien había dispuesto el sistema de este modo estable,
astros oponiéndose o contribuyendo entre sí, son los responsables de las e incluso, que cada tanto intervenía, como un relojero que hace peque- Esta segunda parte se divide en cuatro apartados. En el apartado 2.1, re-
mareas observándose un máximo cuando ambos astros están alineados ños ajustes para mantener el buen funcionamiento de su obra. pasaremos brevemente los supuestos los cos subyacentes de las con-
y un mínimo cuando se hallan en oposición. cepciones denominados “creacionistas” en su intento por dar cuenta de
las adaptaciones y de la diversidad de los seres vivos, respectivamente.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

En el apartado 2.2, revisaremos algunas de las propuestas evolucionis- desde el punto de vista aristotélico, un dálmata, un caniche y un collie La nalidad de la vida, que en Arist teles era intr nseca a las sustancias
tas anteriores a Darwin, as como algunas de las respuestas que estas compartirían una esencia que los hace ser perros, pero se diferenciarían que conformaban en el mundo, fue reinterpretada como una nalidad
recibieron por parte de ciertos autores creacionistas. En el apartado 2.3, en las propiedades accidentales que caracterizan a cada una de estas extr nseca, dependiente de los objetivos conscientes del creador: Dios.
en primer lugar, nos detendremos a examinar algunas de las distintas variedades: tamaño, patrón del pelaje, largo del pelo, etc. Las diferentes entidades que poblaban el mundo se volvieron artefac-
fuentes de conocimiento que in uyeron en el pensamiento de Darwin. tos, cuyo n depend a de las metas que el arquitecto les hab a otorgado
En segundo lugar, trataremos el enfoque darwiniano acerca de la evo- Aristóteles desarrolló su teoría de las esencias como un intento de me- en el plan de creación. En el siglo XIX, esta visión, que había sido
lución, principalmente su teoría de la evolución por selección natural y jorar la teoría platónica de las ideas de acuerdo con la cual cada entidad desterrada de la física y la astronomía en la Revolución copernicana,
su teor a del ancestro com n. En el apartado 2.4, veremos algunas de terrestre era una copia imperfecta de un ejemplar ideal o forma que seguía imperando en los estudios acerca de la vida.
las consecuencias los cas que acarre el planteo de Darwin, tanto en exist a eternamente en el mundo de las Ideas. Si bien este mundo de
la concepci n del hombre como en cuanto al tipo de explicaci n que es abstracciones, tal como lo concebía Platón, no era visible, era accesible Desde esta concepción, el origen de los diferentes rasgos de los organis-
posible y deseable elaborar en la ciencia. por medio de la mente de manera independiente de la experiencia. As mos que les permiten estar adaptados a sus ambientes para asegurar su
como se consideraba que un geómetra razonaba y probaba teoremas supervivencia en el lugar en que viven, era explicado tambi n, apelando
2 1 El creac on smo su uestos los cos subyacentes acerca de las propiedades que poseen formas como el círculo y el trián- al plan de creación divina: ¿cómo los colibríes adquirieron el pico justo
gulo, tambi n exist an formas o ideas para la jirafa y el hipopótamo del tamaño que necesitan para comer el n ctar de las ores ¿C mo los
Mucho tiempo antes de que Darwin publicara El origen de las especies, que las ciencias intelectivas de la naturaleza debían indagar. Asimismo, peces adquirieron la forma óptima para nadar en el agua con la menor
los naturalistas tenían una gran cantidad de información acerca de los del mismo modo en que ning n c rculo terrenal, a n elaborado con el resistencia posible ¿C mo los pájaros adquirieron huesos huecos y livia-
seres vivos y hab an logrado sistemati arla exitosamente. Dos hechos máximo cuidado, jamás podr a ser el c rculo perfecto de la geometr a nos, que les posibilitan el vuelo La respuesta siempre apela a los planes
les llamaban profundamente la atención: por un lado, las adaptaciones euclidiana, ning n hipop tamo en la naturale a pod a manifestar per- del creador. Dios los diseñó de ese modo para que pudieran subsistir en
de los organismos. Al respecto, David Hume [1711-1776] señalaba, en fectamente la esencia o idea de hipopótamo (Dennet, 1995). sus hábitats naturales. Así, por ejemplo, William Paley (1743-1805) ante
su obra de publicaci n p stuma: “Todas esas variadas máquinas y a n la pregunta: “¿Por qu existen adaptaciones , respond a: “Porque Dios
sus partes diminutas, se encuentran ajustadas entre sí con una precisión Las concepciones de Plat n y de Arist teles, no solo in uyeron en la las cre . Para dar cuenta de las adaptaciones exhibidas en los diferentes
tal que genera una gran admiración entre aquellos que las contemplan” manera en que los naturalistas anteriores a Darwin –como Linneo– sis- seres vivos, argumentaba que de la misma forma en que al ver cómo
(Hume, 1779, parte II). Por otro lado, la gran diversidad de seres vivos, temati aron y clasi caron la informaci n acerca de los seres vivos, sino funciona un reloj atribuiríamos el diseño de su estructura a un relojero, al
literalmente millones de tipos distintos de plantas y animales. que, también, dejaron su huella en el tipo de preguntas y respuestas observar el funcionamiento de las distintas adaptaciones biológicas debe-
consideradas valiosas a la hora de investigar los fenómenos naturales. mos atribuir su complejo diseño a un Dios creador:
Las adaptaciones y la diversidad llamaban la atención de los naturalis- Aristóteles distinguía cuatro preguntas básicas acerca de cualquier en- Al examinar la estructura del reloj hallo en l que las partes de que se compone
tas, pero a n más llamativos eran los patrones que pod an identi carse tidad (Dennet, 1995): han sido hechas unas para otras y con determinado objeto; que ese objeto es el
dentro de esa diversidad. Las incontables variaciones de organismos movimiento; y que ese movimiento se dirige a señalar las horas […]. Veo que está
que encontramos en la naturale a eran pasibles de ser clasi cadas, pues, 1.¿Cuál es su materia o causa material (es decir: ¿de qu está proporcionado el calibre de estas ruedas a que en tiempo determinado se muevan

si bien exist an mam feros y pájaros que nadaban como peces, ninguno hecho ) las manecillas con perfecta regularidad sobre la carátula; que las ruedas son de un

tenía branquias, si bien había perros de distintos tamaños y formas, nin- 2.¿Cuál es su causa formal (es decir: ¿con qu forma, metal que no oxida, los muelles de un material muy elástico . For oso es que
esta máquina sea obra de uno o de muchos art ces, que estos art ces existiesen

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

guno tenía escamas. Los diferentes rasgos de los organismos no se en- estructura o con guraci n se presenta ) antes de fabricarla; y que al fabricarla se propusiesen el resultado de ella que estoy
observando […] Toda observación hecha […] respecto al reloj puede ser repetida
contraban repartidos de manera aleatoria, sino que era posible encontrar 3.¿Cuál es su causa e ciente (es decir: ¿cuál es su origen, c mo
con propiedad, en relación al ojo, a los animales, respecto incluso a todas las partes
un sistema, basándose en los patrones en los que tales rasgos se presen- comen a existir, qu lo puso en movimiento ) organizadas de los dominios de la naturaleza. (Paley, 1802, 1-3)
taban. Esto permit a reali ar clasi caciones. Para la poca de Darwin, 4.¿Cuál es su causa nal (es decir: ¿cuál es su prop sito,
los grandes naturalistas, como Carlos Linneo (1707-1778), ya habían su meta o n ) Antes que Darwin publicara sus investigaciones, el creacionismo era una
logrado sistematizar una gran cantidad de información. A partir de esa de las concepciones más aceptadas acerca del origen de los seres vivos.
Aquí nos interesa detenernos particularmente en la causa nal aris- En el siglo XVII, se encontraba fuertemente establecida la creencia de
sistemati aci n y de los patrones identi cados, desarrollaron la clasi-
tot lica. Por cientos de años, tanto cient cos como l sofos se han que la Tierra solo ten a unos pocos miles de años de antig edad y se ex-
caci n de los seres vivos, dando lugar as a las denominadas “taxono-
dedicado a buscar respuestas por la causa nal, a las que se ha dado plicaba tanto el origen de nuestro planeta, como la existencia de los seres
m as . Reali aron esta tarea adoptando y corrigiendo las clasi caciones
en llamar explicaciones teleológicas (el nombre proviene de la palabra
antiguas de Aristóteles. Estos patrones que presentaba la diversidad de vivos que lo habitaban, apelando a Dios, que había creado a cada uno de
telos, que en griego quiere decir “ n ). Una explicaci n teleol gica es
los seres vivos permitieron a Linneo llevar a cabo una clasi caci n je- los antepasados de dichos organismos de manera directa, de acuerdo con
aquella que da cuenta de la existencia u ocurrencia de algo apelando a una idea (Platón) o esencia (Aristóteles). De esta manera el idealismo
rárquica que distinguía entre reinos (por ejemplo, animal); cada uno de
alg n prop sito u objetivo que la entidad cumple. Por ejemplo, si uno platónico, de la mano del esencialismo y la teleología aristotélicos, en su
esos reinos, a su vez, se encontraba dividido en clases (por ejemplo,
se pregunta por qu existen los martillos, la respuesta más obvia, segu- reinterpretaci n teol gica, con guraron una manera de abordar la natura-
mamíferos) que, también, podían ser divididas en órdenes (por ejemplo,
ramente consistirá en una explicaci n teleol gica: los martillos existen
carnívoros), familias (por ejemplo, canidae), géneros (por ejemplo, ca- leza en la que la diversidad de los seres vivos podía ser sistematizada por
porque alguien los inventó con un propósito, en este caso para marti- medio de una clasi caci n que en ltima instancia re ejaba las ideas o
nis) y especies (por ejemplo, lupus). Por su parte, las especies podían
llar (Dennet, 1995). Cualquiera que conviva con niños pequeños habrá esencias en la mente de Dios, que había creado a cada una de las diferen-
ser subdivididas en subespecies o variedades (por ejemplo, canis lupus
notado una característica de las respuestas a las preguntas por qué: es tes especies con los rasgos (adaptaciones) que las caracterizaban.
familiaris – pastor alemán).
posible repreguntar, y repreguntar interminablemente, para cualquiera
de las causas aristotélicas.
Si bien Linneo reali importantes modi caciones a la taxonom a de Hacia mediados del siglo XVIII fue cobrando importancia un movi-
Arist teles, su manera de clasi car a los seres vivos, manten a muchos miento que no se conformaba con los argumentos esbozados por la teo-
Aristóteles ofreció una manera de hacer frente a este problema de las logía natural a la hora de dar cuenta de la diversidad de seres vivos y sus
de los supuestos fundamentales de la losof a de Arist teles. Para Aris-
explicaciones teleol gicas: la repetici n de “por qu terminaba en el adaptaciones. Las motivaciones que condujeron a muchos naturalistas
tóteles todas las cosas, y no solo los seres vivos, tenían dos tipos de
primer motor inmóvil. El primer motor inmóvil, para Aristóteles, es la a cuestionar al creacionismo no eran solo intelectuales sino también
propiedades: esenciales y accidentales. Si una propiedad esencial de un
causa nal y e ciente de los movimientos naturales. El mundo aristot -
objeto cambiaba, cambiaba la naturaleza del objeto. En tanto las propie- ideol gicas y pol ticas. En gran medida la losof a de la Ilustraci n,
lico, sin embargo, es eterno. No fue creado ni diseñado por nadie. Esta que proponía al poder de la razón como principal fuente de conoci-
dades accidentales eran aquellas que podían variar entre individuos u
idea aristot lica fue modi cada cuando sus obras fueron reinterpretadas miento, cuestion la autoridad de la Iglesia a la hora de dar explica-
objetos que comparten las mismas propiedades esenciales, sin que cam-
en el marco de la teleología cristiana durante el Medioevo. En esta re- ciones satisfactorias respecto de los principales fenómenos del mundo
bie su naturaleza. La idea es que, en el caso de los seres vivos, estos po-
interpretaci n, el primer motor inm vil fue, por supuesto, identi cado natural, y con ello, a los resabios de pensamiento antiguo adoptados
drían agruparse en especies, por ejemplo, debido a ciertas propiedades
con el dios de los cristianos. Pero, este dios, a diferencia del primer mo-
esenciales en com n, mientras que las diferencias que permiten agrupar por las concepciones monoteístas. De este modo, este movimiento co-
tor inmóvil, habría creado el mundo, así como todos sus componentes. men a formular explicaciones que no involucraban entidades divinas
en variedades a los organismos de una especie serían accidentales. Así,
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

de estos fenómenos, muchas de las cuales, como veremos, apelan a un individuos de una especie son transmitidos a sus descendientes (conocida como la Más allá de la evidencia provista por el registro fósil y los animales mo-
“ley de la herencia de los caracteres adquiridos”).
proceso de transformación de organismos más simples a organismos mi cados, las ra ones de Cuvier para recha ar el evolucionismo eran a n
cada vez más complejos (una forma de evolucionismo) que entra en De acuerdo con este enfoque, los rasgos adquiridos por el uso o desuso, más profundas, radicaban en una concepción acerca de los organismos di-
franco con icto con la cosmovisi n imperante en el creacionismo de durante la vida de un individuo, podrían ser transmitidos a la descen- ferente a la de Lamarck. Cuvier compartía con Aristóteles la idea de que los
la poca. Este con icto se genera dado que ni las formas plat nicas, ni dencia, de manera tal que, como resultado de este proceso, se produci- seres vivos se caracterizan por tener partes que, al igual que una máquina,
las esencias aristotélicas en su reinterpretación teológica como ideas en ría la adaptación de la especie al cambio en el entorno. En el célebre cumplen un prop sito espec co. A su ve , cada parte de un ser vivo se
la mente de Dios, se diferencian entre sí en términos graduales. Pues, ejemplo de la jirafa, el cuello largo de este animal es el resultado de correlaciona con otra de manera tal que cada componente necesariamente
como veíamos, si bien las diferentes formas pueden cambiar en sus pro- que sucesivas generaciones de jirafas lo fueron estirando para alcanzar depende de otros componentes dentro de ese organismo. Entonces, si la
piedades accidentales, el cambio de forma, al cambiar alguna propiedad las hojas de los árboles cada vez más escasas a bajas alturas. A estas con guraci n biol gica de una determinada especie fuera alterada más allá
esencial, no es gradual. Dado que no hay gradación entre las formas o dos leyes, Lamarck agregaba la existencia de una tendencia a la com- de ciertos límites, su todo armónico se desorganizaría tanto que el orga-
esencias, la evolución gradualista constituye una imposibilidad lógica plejidad inherente a la forma en que los organismos evolucionaban. La nismo sería inviable. Por ejemplo, si el corazón de un ser vivo se redujera
en la concepción platónico-aristotélica (Mayr, 1959). noción de evolución lamarckiana tenía, en consecuencia, una tendencia demasiado en tamaño esto afectaría el funcionamiento de otros órganos
progresiva y dirigida, que, como veremos, será discutida por Darwin. vitales, tales como el cerebro, los pulmones, etcétera. De manera que esta
En el pr ximo apartado nos detendremos a revisar algunas discusiones Al apelar a estos tres factores, era posible explicar la evoluci n de los concepción acerca de la necesaria correlación entre partes que caracteriza
previas a las ideas de Darwin, que in uyeron fuertemente sobre su pensa- organismos vivos. Seg n Bowler y Morus, Lamarck: a los ejemplares de cada especie lo condujo a rechazar la hipótesis evolu-
miento. El resultado de estos debates condujo al debilitamiento del esen- cionista, especialmente si esta presuponía un cambio gradual (Ruse, 1979).
Aceptaba la generación espontánea, recurriendo a la electricidad como fuerza
cialismo y del idealismo creacionistas, hecho que dio lugar a la acepta-
capaz de dar vida a la materia inerte, pero presuponía que sólo podían
ción de que las especies eran producto de un proceso histórico y de que producirse de ese modo las formas de vida más simples. Los animales superiores
En sinton a con este enfoque, Richard Owen (1804-1892) propuso que
la creación de Dios podía ser comprendida de mejor manera por medio habían evolucionado a lo largo del tiempo gracias a una tendencia progresiva que detrás de la aparente diversidad de especies y de la complejidad de la
de leyes naturales que dieran cuenta de su accionar. Como veremos en el volvía cada generación ligeramente más compleja que la de sus padres. Lamarck naturale a, deb a existir alg n tipo de principio ordenador que permi-
apartado 2.3, estos debates hicieron efecto en el pensamiento de Darwin. creía que, en teoría, esa progresión generaría una escala lineal de organización tiera organizar la multiplicidad de seres vivos a la manera de las “ideas
animal –de hecho, una cadena del ser con los humanos como productos nales
platónicas” o de las “esencias aristotélicas”). Es decir, quería mostrar
superiores–. Obsérvese, no obstante, que este modelo de “escalera” de la evolución
2.2. El debate entre evolucionistas y creacionistas antes de no inclu a rami caci n, pues hab a muchas l neas paralelas que ascend an cómo todos los organismos vivos se derivaban de un mismo plan (Ruse,
Darwin partiendo de distintos episodios de generación espontánea. Lamarck negaba la 1979, y Bowler y Morus, 2005).
osibilidad de extinci n y la realidad de las especies. En su opini n, la escala era
Si bien muchas de las posiciones que se propusieron para enfrentar absolutamente continua, sin huecos que separaran las diferentes especies (los
Este principio ordenador, o “arquetipo”, eran los prototipos o modelos
huecos que vemos se debe a que no se disponía de información; los eslabones que
al creacionismo, antes del enfoque darwiniano, podr an denominarse con los que Dios había creado a los distintos seres:
faltan están ah , en alguna parte). (Bowler y Morus 2005, 170)
“evolucionistas”, no todas ellas fueron capaces de ofrecer una descrip-
El arquetipo no restaba importancia a la idea de progreso: los peces primitivos eran
ción detallada de este proceso clave, y las que lo hicieron, brindaron las modi caciones más sencillas; los seres humanos, los más complejos. Para
una concepción acerca de la evolución bastante diferente de la que lue- A esta “avan ada de enfoques que se propon an explicar la diversidad
Owen, esto propon a una forma mejor del ra onamiento basado en el diseño porque
go propuso Darwin. Por ejemplo, Denis Diderot (1713-1784) cuestion de la vida y las adaptaciones de los seres vivos al entorno en el que se daba a entender que, bajo la abrumadora variedad de especies diferentes […] había

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la creencia de que las especies fueran constantes, al mismo tiempo que desarrollan sin apelar a explicaciones sobrenaturales de ning n tipo, le un principio ordenador que sólo podía surgir de la mente del Creador.
Owen entendi que las sucesivas expresiones del arquetipo constitu an un patr n
defendió la idea de que el mundo natural consistía en una secuencia siguieron una serie de réplicas creacionistas.
progresivo que se extend a a lo largo del tiempo, algo que lo acercaba
de transformaciones que continuamente alteraban las estructuras físi- peligrosamente al transformismo, aunque él siempre insistía en que cada especie
cas sin ning n tipo de plan o prop sito pre jado, conjeturando que la Sin embargo, el análisis cada vez más detallado del registro fósil llevó era una unidad bien diferenciada en el plan divino. (Bowler y Morus 2005, 173)
naturaleza engendraba monstruosidades, seres con nuevos rasgos, que a que, a n, los naturalistas más conservadores de la poca se vieran im-
lograban sobrevivir, dando lugar a una nueva especie. De la misma ma- pulsados a considerar a las especies actuales como la ltima etapa de un En la noci n de “arquetipo planteada por Owen es posible observar
nera, Georges Louis Leclerc (1707-1788), conde de Buffon, ridiculiza- proceso histórico y, además, a que tuvieran que incorporar un elemento la in uencia ejercida por el platonismo. Para Owen el arquetipo repre-
ba la b squeda del plan divino de la creaci n por parte de Linneo y sos- de cambio sin respaldar a la evolución como proceso que engendraba senta la “idea divina” platónica a partir de la cual se ha construido la
ten a que las especies deb an ser lo su cientemente exibles como para nuevas especies. Por ejemplo, Georges Cuvier (1769-1832) estableció estructura ósea de todos los vertebrados. Esta forma no era algo real
poder adaptarse a las nuevas condiciones que imponía un mundo en que el orden de la naturale a de su poca era tan solo el ltimo de una de este mundo, ni un antepasado com n en el que se uni can todos los
constante cambio. Seg n Buffon, las especies que pod an ser agrupadas larga secuencia, defendiendo la idea de que la Tierra había pasado por descendientes como plantear a luego Darwin, sino una entidad extra
bajo un g nero moderno descend an de un antepasado nico, de forma diversas eras geológicas con sus respectivas poblaciones de animales y mundana abstracta a n más aut ntica que las conocidas por medio de
tal que el león y la pantera no eran consideradas como dos especies dis- plantas. Por otro lado, se opuso fuertemente a la teoría de Lamarck, sos- los sentidos. En el marco de su teor a del arquetipo, Owen sosten a que
tintas sino más bien variedades de una misma especie. Sin embargo, ni teniendo que las catástrofes geol gicas hab an exterminado totalmente exist an dos fuer as contrapuestas que operaban en la formaci n de los
Buffon ni Diderot se encargaron de elaborar una teoría detallada acerca las poblaciones de los continentes, posibilitando que una población to- cuerpos de los vertebrados. Por un lado, una fuerza que generaba la
de cómo ciertas especies se transformaban para dar lugar a otras espe- talmente nueva emergiera luego del desastre (Bowler y Morus, 2005). similitud existente entre las distintas especies, repetici n de partes y
cies, en parte quizás porque ambos pensaban que la materia orgánica Si bien las brillantes investigaciones de Cuvier acerca del registro fósil patrones de organización. Por otro lado, un “principio organizador es-
podía producir seres vivos complejos mediante generación espontánea, se ajustan hasta cierto punto a la aparición progresiva de los organis- pec co al que tambi n llam fuer a de “adaptaci n que da lugar a las
es decir, que la materia inerte podía producir de manera directa organis- mos, él se opuso férreamente al evolucionismo lamarckiano. En sus adaptaciones espec cas que hacen que un organismo sea miembro de
mos complejos (Bowler y Morus, 2005). estudios paleontológicos puede observarse que los reptiles y peces apa- una especie y no de otra (Ruse, 1979). Este punto de vista le permitió a
recen antes que los mamíferos. Los mamíferos primitivos tienen formas Owen de nir el concepto de homología: Las homologías eran órganos
Jean-Baptiste Lamarck (1744-1829), en cambio, ofreció una descrip- extrañas mientras que las formas siguientes se parecen más a las actua- o estructuras que mostraban un parecido estructural (ver Figura 17).
ci n espec ca de c mo ocurr a la evoluci n adaptativa, es decir, de les, y no parecen existir f siles humanos. Sin embargo, Cuvier argu- Habría, entonces, dos tipos de similitudes entre organismos de diferen-
cómo los rasgos de ciertas especies se transformaban para dar lugar mentó que la ausencia de formas intermedias entre las distintas especies tes especies: las que tienen que ver con rasgos adaptados a cumplir la
a otras variedades más adaptadas al ambiente. Lamarck explicaba las entraba en con icto con el evolucionismo lamarckiano. Para Cuvier si misma funci n (como la que existe entre las alas de una mariposa y las
adaptaciones a través de dos leyes (Lamarck, 1809, cap. VII): los organismos evolucionaran deberían observarse formas intermedias alas de un pájaro, o la forma hidrodinámica que tienen los peces y los
entre los diferentes grupos de organismos. La ausencia de esas formas del nes), y aquellas que involucraban parecidos estructurales (como la
- Primera ley: durante la vida de los animales, estos ejercitan ciertos órganos
intermedias permitiría rechazar de plano cualquier forma de evolucio- que existe entre la aleta de la ballena, el ala de un murci lago y nuestra
mientras que otros entran en desuso. Los más utilizados se ven fortalecidos y
desarrollados mientras que los menos usados se van debilitando (com nmente se nismo gradual. Asimismo, hizo especial hincapié en el hecho de que los mano, en los que se pueden encontrar parecidos entre la cantidad de
la conoce como “ley del uso y desuso de los órganos”). animales momi cados tra dos de Egipto eran id nticos a los actuales, huesos y sus posiciones relativas).
- Segunda ley: los cambios pequeños y graduales que experimentan en vida los
como prueba de la inadecuación del evolucionismo (Ruse, 1979).
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li aban como factor explicativo la apelaci n a cantidades enormes de organismo dependía del hábito que servía de insumo para el uso y desuso
tiempo. La Tierra, en consecuencia, era muchísimo más antigua de lo –como en el caso del esfuerzo de las jirafas por alcanzar las ramas más
que se pensaba hasta el momento. Por otra parte, el ambiente cambiante altas de los árboles–. ¿C mo explicar la adquisici n del color de piel de
de la geología de Lyell implicaba directamente la necesidad de que los las cebras que le permiten camu arse de sus enemigos, o que ciertas se-
organismos mismos cambiaran para no perecer: millas tengan “ganchos” para lograr ser esparcidas (como los abrojos), o
Figura 17. Homo-
Darwin ju g necesario explicar la distribuci n y las adaptaciones de los animales el sabor de las frutas, o la forma y color de las ores para atraer a insectos
logías entre los
miembros anteriores y las plantas en términos lyellianos: la situación actual había de ser el resultado de con el n de polini arse, etc. En ninguno de estos casos el origen de la
de varios animales2 cambios lentos producidos por causas naturales […] el razonamiento de Paley no modi caci n pod a deberse al uso o desuso de ning n rgano.
era válido en un mundo de cambio gradual si la geolog a está modi cando
continuamente el entorno al elevar y destruir montañas, las especies debían o bien
Si bien Owen consideraba que las especies pod an sufrir modi caciones Para elaborar una explicaci n que permitiese dar cuenta de c mo las es-
emigrar en busca de condiciones en las que sobrevivir o bien extinguirse de manera
importantes, rechazaba el evolucionismo lamarckiano, no solo por razo- gradual. (Bowler y Morus 2005, 180) pecies se hab an modi cado hasta poseer las caracter sticas que exhiben
nes los cas, vinculadas a su platonismo, sino tambi n por la evidencia en la actualidad, Darwin se vio fuertemente in uenciado por dos fuentes:
En cuanto las observaciones reali adas por el mismo Darwin, fue de- la cría de animales y la teoría de las poblaciones de Malthus. La primera
provista por el registro fósil. Las especies eran para él entidades bien di-
cisivo el viaje realizado alrededor del mundo en su juventud. En par- le permiti observar el fen meno de la variabilidad y la selecci n arti -
ferenciadas, y si bien los “arquetipos” producirían una secuencia de espe-
ticular, su paso por la Patagonia argentina y su expedici n a las islas cial (la selección realizada por criadores de parejas reproductoras con el
cies relacionadas por homologías anatómicas, él creía que estas relaciones
Galápagos. En las costas de Punta Alta, al sur de la provincia de Buenos n de lograr ciertas caracter sticas en ciertos animales). La segunda le
representan un patrón subyacente del pensamiento divino, esto es, la crea-
Aires, encontró fósiles de roedores enormes que claramente se encon- permiti atender a la disparidad existente entre la cantidad de individuos
ción progresiva de especies conducente a un aumento de la complejidad
traban relacionados con los roedores actuales. En las islas Galápagos, y la cantidad de recursos disponibles para la supervivencia.
que culmina en la humanidad. Owen argument que el registro f sil de los
Darwin tuvo la oportunidad de observar que las diferentes islas ten an
grandes reptiles, para los que acuñó el nombre de “dinosaurios”, contra-
distintos tipos de pinzones con características diversas. Por ejemplo, De la cría de animales, pudo constatar que en todas las poblaciones es
dicen las ideas de transmutacionales progresivas de Lamarck porque esos
los pin ones mostraban picos signi cativamente diferentes, adaptados posible hallar diferencias individuales, es decir que ning n organismo
reptiles eran más so sticados que los reptiles del mundo actual.
a maneras distintas de b squeda de alimentos, algunos más anchos, que es id ntico a otro. Esta variaci n, que no parece responder a ning n
utilizaban para abrir nueces, otros más delgados y puntiagudos, que tipo de patrón ni propósito obvio, era utilizada por los criadores al esco-
Como puede verse, si bien muchos naturalistas presentaron una fuerte
utilizaban para cazar insectos, etc. (ver Figura 18). A la vuelta de su ger el puñado de individuos que variaban en la dirección deseada –por
resistencia a abandonar las principales tesis creacionistas, gradualmen-
largo viaje, al conversar con un ornitólogo sobre sus observaciones, ejemplo, escoger nicamente aquellos perros y perras que poseen una
te comen aron a admitir que las especies actuales constituyen la ltima
este le dijo que en realidad cada variedad de pinzón debía ser conside- contextura f sica que les permite correr más rápido– y, de esta manera,
fase de un proceso hist rico, y que la nalidad de Dios podr a ser desci-
rada una especie diferente. Esto lo llev a re exionar: era inadmisible generar descendencia solo a partir de los animales seleccionados. Por
frada de mejor manera apelando a leyes o regularidades naturales que a
sostener que Dios había creado cada una de estas variantes de pinzones su parte, la c lebre tesis de Malthus seg n la cual la capacidad que tiene
una creación milagrosa. Por ello, puede decirse que los trabajos de Di-
de manera independiente, para que cada una de ellas habitara una de una población para reproducirse siempre es superior a las provisiones
2
Gegenbaur, Carl, Grundzüge der vergleichenden Anatomie. 2. umgearb. Au age. Mit 319 Hol schnit- aquellas islas diminutas, sobre todo teniendo en cuenta que las islas de alimentos disponibles, le permiti atender a la lucha por la existencia
ten. Leip ig, Verl. von Wilhelm Engelmann, 1870. 892, g. 223. P. 692. Extra do de http://es.wikipedia.
eran de reciente formación. Mucho más razonable parecía creer que que tales recursos limitados propiciaba.
org/wiki/Archivo:Gegenbaur_1870_hand_homology.png

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derot, de Buffon y de Lamarck –entre otros– contribuyeron de manera habiendo emigrado desde Sudamérica se habían establecido y cambia- De esta manera, Darwin propuso que la variabilidad podr a ofrecer a
signi cativa a allanar el terreno para que la concepci n evolucionista de do para adaptarse al nuevo entorno. Si la transformación podía generar algunos individuos una ventaja en la lucha por los recursos necesa-
Darwin fuera mejor asimilada por los cient cos de la poca. nuevas especies, ¿por qu no podr a tambi n, con tiempo su ciente, rios para la supervivencia, de manera tal que solo sobrevivirían aque-
generar nuevos g neros, familias o clases : llos individuos cuyos rasgos les permitían acaparar esos recursos. Al
En el pr ximo apartado, nos detendremos en la propuesta evolucionista Al considerar el origen de las especies es completamente lógico que un naturalista, reproducirse estos individuos con los rasgos más ventajosos trans-
de Darwin, pero antes revisaremos algunos conocimientos cient cos re exionando sobre las a nidades mutuas de los seres orgánicos, sobre sus mitir an tales caracter sticas a su descendencia. Darwin llam a este
de la poca que in uyeron fuertemente en su pensamiento. relaciones embriol gicas, su distribuci n geográ ca, sucesi n geol gica y otros proceso “selecci n natural en analog a con la “selecci n arti cial
hechos semejantes, pueda llegar a la conclusión de que las especies no han sido
de parejas reproductora realizada por los criadores. Este proceso de
independientemente creadas, sino que han descendido, como las variedades de
2.3. La Revolución darwiniana selección natural, repetido a lo largo de innumerables generaciones,
otras especies. Sin embargo, esta conclusión aunque estuviese bien fundada, no
sería satisfactoria hasta tanto pudiese demostrarse cómo las innumerables especies ser a el responsable de modi car rganos y hábitos dando lugar a la
Bowler y Morus (2005) identi can al menos cuatro fuentes de informa- que habitan el mundo se han modi cado hasta adquirir esta perfecci n de aparición de nuevas especies:
ci n clave que in uyeron fuertemente en el pensamiento de Darwin: la estructuras u esta adaptación mutua que causa con justicia nuestra admiración.
Cómo es que las variedades que he llamado “especies incipientes” quedan
propuesta geológica de Charles Lyell (1797-1875), sus propias investi- (Darwin, 1859, 11)
transformadas nalmente en buenas y distintas especies, que en la mayor parte de
gaciones en las islas Galápagos, la cría de animales y el aporte de Tho- los casos di eren claramente entre s mucho más que las variedades de la misma
mas Malthus (1766-1834) a la economía política. Lyell es propulsor de especie […] Todos estos resultados […] son consecuencia de la lucha por la vida.

una metodolog a que Darwin asumir a: el actualismo y el uniformismo. Debido a esta lucha, las variaciones, por ligeras que sean y cualquiera que sea la
causa de que proceden, si son en alg n grado provechosas a los individuos de una
De acuerdo con el actualismo, los fenómenos geológicos del pasado
especie en sus relaciones in nitamente complejas con otros seres orgánicos y con
deb an ser explicados en funci n del mismo tipo de causas que pueden sus condiciones físicas de vida, tenderán a la conservación de estos individuos y
observarse en la actualidad. Acorde con el uniformismo, los fenómenos serán, en general, heredadas por la descendencia.
geológicos del pasado no serían solamente del mismo tipo que los ac- La descendencia también tendrá así mayor probabilidad de sobrevivir […] Este
principio, por el cual toda ligera variaci n, si es til, se conserva, lo he denominado
tuales, desde una perspectiva cualitativa, sino también cuantitativamen-
yo con el t rmino de selecci n natural. (Darwin 1859, 80)
te hablando: las causas de antes no eran más violentas que las actuales
(Ruse, 1979). De este modo, seg n Lyell, los accidentes geográ cos En la sexta edici n de El origen de las especies, Darwin muestra el
como la cordillera de los Andes no se habían formado como resultado modo en que la selecci n natural act a apelando al ejemplo del estira-
de una nica catástrofe, sino que hab an ido ascendiendo gradualmente miento del cuello de la jirafa:
en el transcurso de un extenso per odo de tiempo. Lyell consideraba Figura 18. Diferentes pin ones. De la obra de Darwin The voyage of the Beagle
En la naturaleza, en el origen de la jirafa, los individuos que comiesen más alto y
que, en contra del catastro smo, los accidentes geográ cos solo se po- que pudiesen durante los períodos de escasez alcanzar aunque sea una pulgada o
d an explicar apelando a causas que todav a hoy act an (como la ero- Darwin aceptaba las primeras dos leyes lamarckianas –no as la idea de
dos por sobre los otros, serían frecuentemente preservados […]. El que los
que exist a alg n tipo de direcci n evolutiva hacia la complejidad, ni de
sión, los terremotos, el avance de los glaciares, etc.). Esta metodología individuos de la misma especie muchas veces di eren un poco en la longitud
ning n tipo–. Sin embargo, la capacidad explicativa de tales leyes resul- relativa de todas sus partes, puede comprobarse en muchas obras de historia
implicaba una novedad que in uir a sobre Darwin, as como tambi n,
taba demasiado limitada. Solo eran aplicables cuando la modi caci n del natural en las que se dan medidas cuidadosas. Estas pequeñas diferencias en las
sobre la ciencia posterior en general: las explicaciones lyelleanas uti- proporciones, debidas a las leyes de crecimiento o variación, no tienen la menor
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

importancia ni utilidad en la mayor parte de las especies. Pero en el origen de la las diferentes poblaciones de organismos depende de contingencias del especies, cuanto más recientemente compartan un antecedente com n,
jirafa debe haber sido diferente, considerando sus probables hábitos de vida; pues
medio ambiente. Esta es una de las principales diferencias que separan a más estrechamente emparentadas estarán y, por lo tanto, compartirán
aquellos individuos que tuviesen alguna parte o varias partes de su cuerpo un
poco más alargadas de lo corriente, hubieron en general de sobre vivir. Se habrán Darwin de Lamarck, para quien la evoluci n consist a en una secuencia más rasgos, es decir, serán más parecidas. Las homologías no repre-
cruzado y dejado descendencia que habrán heredado las mismas peculiaridades de pasos predestinada desde lo más simple a lo más complejo. La comple- sentan una unidad de estructura tal como Owen las conceb a, sino que
corpóreas, o la tendencia a variar de nuevo en la misma manera, mientras que los jidad aumenta a medida que avanza la evolución, no en virtud de que la constituyen rasgos similares por haber evolucionado de un mismo rasgo
individuos menos favorecidos en los mismos aspectos, habrán sido más propensos
selección natural favorezca inherentemente la complejidad, sino por el he- pose do por un antecesor com n. Las similitudes estructurales entre las
a perecer. (Darwin, 1872, 270)
cho de que en su inicio la vida es simple. En otras palabras, la complejidad alas de los murciélagos, las aletas de las ballenas, las patas delanteras de
Básicamente, hubo un tiempo en que las jirafas no exhib an el alar- aumenta debido a las condiciones iniciales, no a propiedades intrínsecas un perro y nuestros brazos, por ejemplo, se deben a que todas provienen
gamiento exagerado de sus partes que actualmente presentan, pero de la selecci n natural. Por otra parte, la selecci n natural act a sobre va- de modi caciones sobre un mismo rasgo pose do por el pequeño mam -
había variación respecto a la longitud de esas partes, que traía como riaciones llamadas habitualmente “aleatorias”. Esto no implica que sean fero de cual todas estas especies provienen.
consecuencia variación con respecto a la efectividad con la que se al- a arosas estrictamente, Darwin no conoc a la causa por la que aparece una
can aban las ramas más altas de los árboles. Las jirafas que exhib an nueva variante de una población. El punto es que no es necesario que las En este apartado nos hemos abocado a analizar las fuentes adoptadas por
partes más alargadas, ten an más xito que las otras al alimentarse, variaciones apare can porque podr an ser tiles para el organismo en el Darwin a la hora de elaborar su teor a. Tambi n nos hemos detenido en
de modo que dejaban más descendencia que, a su vez, heredaban sus que se mani estan. La selecci n opera sobre las variaciones disponibles. dos de sus tesis centrales: la evolución por selección natural y el ancestro
rasgos, mejorando su supervivencia. Puede observarse aquí en fun- com n. En el pr ximo apartado, veremos cuáles fueron las consecuencias
cionamiento la estructura explicativa novedosa propuesta por Darwin. Hasta aquí nos hemos centrado en el mecanismo de la selección natural los cas que acarre la publicaci n de El origen de las especies.
para caracteri ar el evolucionismo darwiniano. Pero existe otra caracte-
Vale la pena recalcar que Darwin conceb a a la lucha por la existencia r stica de la evoluci n darwiniana, igualmente relevante, e independiente 2 Las consecuenc as los cas de la teor a de Dar n
en sentido amplio, es decir, incluyendo la dependencia de un ser vivo de la selecci n natural: la teor a del ancestro com n. Seg n esta teor a
toda la vida que existe en la actualidad, as como todos los f siles, tienen Darwin evit hablar de los humanos en El origen de las especies. No así
respecto de otro, involucrando no solo su vida sino tambi n el xito a
su origen en uno o unos pocos progenitores originarios. De acuerdo con en su obra posterior: El origen del hombre. En dicha obra, muestra una
la hora de dejar descendencia. En este sentido, puede entenderse a la
Darwin la evidencia a favor del ancestro com n puede hallarse, sobre serie de argumentos muy fuertes con respecto a la relación entre los hu-
selección natural como un poderoso mecanismo capaz de perfeccionar
todo, en aquellos rasgos semejantes no adaptativos que permanecen en manos y los simios, además de intentar mostrar que las diferencias entre
las estructuras biológicas adaptándolas al entorno, incesantemente, a lo
ciertas especies. Por ejemplo, los humanos y los monos poseen un coxis las diversas ra as humanas son meramente super ciales y se deben a la
largo de extensos per odos de tiempo:
y los fetos humanos tienen hendiduras branquiales. Ambos rasgos cons- selecci n sexual. El párrafo nal de esta obra resulta elocuente y bello:
Metafóricamente puede decirse que la selección natural está buscando día por día y
tituyen evidencia a favor de un ancestro com n debido, justamente, a su Se puede excusar al hombre por sentir un cierto orgullo por haberse elevado,
hora por hora por todo el mundo las más ligeras variaciones; rechazando las que
inutilidad (Sober, 2009), pues su parecido no se debe a la acción de la aunque no por su propio esfuerzo, a la cumbre misma de la escala orgánica; y el
son malas; conservando y sumando todas las que son buenas; trabajando silenciosa
hecho de haberse elevado de esta manera, en lugar de haber sido colocado allí
e insensiblemente, cuando quiera y dondequiera que se ofrece la oportunidad, por selecci n natural modi cándolas para ambientes semejantes, sino a que
originalmente, puede darle esperanza de un destino todavía superior en el distante
el perfeccionamiento de cada ser orgánico en relación con sus condiciones el rasgo fue heredado de un mismo antepasado. futuro. Pero aquí no nos conciernen las esperanzas ni los temores, sólo la verdad
orgánicas e inorgánicas de vida. Nada vemos de estos cambios lentos y progresivos
en la medida en que nuestra razón nos permita descubrirla; y he presentado las
hasta que la mano del tiempo ha marcado el transcurso de las edades; y entonces,
pruebas de la mejor manera que he sabido hacerlo. Sin embargo, hemos de

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

tan imperfecta es nuestra visión de las remotas edades geológicas, que vemos sólo De manera que, en lugar de describir a la teor a darwiniana como evo- reconocer, seg n me parece, que el hombre, con todas sus nobles cualidades, con la
que las formas orgánicas son ahora diferentes de lo que fueron en otro tiempo. simpat a que siente por los más envilecidos, con la benevolencia que extiende no
lución por selección natural como habitualmente se hace, podemos, si-
(Darwin, 1872, 106) s lo a los demás hombres sino al más insigni cante de los seres vivos, con su
guiendo al l sofo de la biolog a Sober (2009) describirla como ances- intelecto divino, que ha penetrado en los movimientos y la constitución del sistema
Como se puede apreciar, la selecci n natural de Darwin es capa de tro común más selección natural. Mientras la selección natural, como solar... Con todas estas capacidades enaltecidas, el hombre todavía lleva en su
explicar los dos fen menos centrales indagados por la teolog a natural: vimos, es capaz de dar cuenta de los fenómenos de la adaptación y de estructura corporal el sello indeleble de su humilde origen. (Darwin, 1872, 816)

las adaptaciones y la diversidad. De acuerdo con la teor a de Darwin, la diversidad, la hip tesis del antepasado com n es capa de explicar
En la actualidad, la resistencia generada por la obra de Darwin en su
la selección natural es la responsable de que las estructuras biológicas por qué los seres vivos pueden ser agrupados en términos de géneros
momento a n posee sus resabios en ciertos ámbitos religiosos, en los
que pueblan la naturaleza se encuentren tan asombrosamente adapta- y especies. De esta manera, el sistema propuesto por Linneo, que per-
cuales perturba el intento de ofrecer una explicaci n estrictamente na-
das al entorno. Asimismo, la presión ejercida por entornos cambiantes mitía agrupar a los organismos en variedades, especies, géneros, fami-
turalista, que descarta todo tipo de causa sobrenatural a la hora de expli-
sobre los rasgos de los distintos organismos produce como resultado la lias, etc., era bajo la perspectiva darwiniana un árbol geneal gico (ver
car el origen de los seres vivos y del hombre. De la misma manera, una
conformación de distintas poblaciones de organismos con rasgos dife- Figura 19). Por ejemplo, que diferentes especies se agruparan bajo un
teoría que nos relaciona profundamente con el resto de los seres vivos
rentes, es decir, adaptados a entornos distintos. mismo g nero, implicaba un origen com n de todas ellas, es decir, que
en m ltiples dimensiones, en la que se intenta defender cierto grado
todas ellas eran descendientes de un antepasado com n.
de continuidad entre las facultades mentales de los simios y los seres
En este sentido, metafóricamente, podría pensarse que la selección na-
humanos –en tanto comparten un antepasado com n–, siempre fue vista
tural constituye el relojero al que acud a Paley para explicar las adapta-
ciones. Con la diferencia de que la selecci n natural no persigue nali- como una amenaza que afectaba a la credibilidad en una alma inmortal,
dad ni propósito alguno, y en consecuencia, ha sido comparada con un Figura 19. Ilustración y, por ende, compromet a nuestro estatus exclusivo en la creaci n, po-
de El origen de las niendo en riesgo, supuestamente, la estabilidad del orden social. Pero
relojero “ciego”: especies, en la que
se muestra como de
las in uencias de la Revoluci n darwiniana han sido mucho más ex-
El argumento de Paley se encuentra elaborado con sinceridad apasionada y está
antepasados surgen por tensas que las señaladas, pues han provocado cambios profundos en la
informado por el mejor conocimiento académico de esa época, pero es incorrecto,
rami caci n nuevas
gloriosa e incómodamente incorrecto. La analogía entre el telescopio y el ojo, entre forma en que nos concebimos y de nuestro lugar en el mundo, seamos
especies, algunas se
el reloj y el organismo vivo, es falsa. A pesar de que parece todo lo contrario, el extinguen y otras vuel- religiosos o no. Pues la concepción de que no somos más que animales
nico relojero en la naturale a son las fuer as ciegas de la f sica, aunque ven a diversi carse, implica una serie de dilemas éticos interesantes, por ejemplo, al respec-
desplegadas de una manera muy especial. Un verdadero relojero tiene previsión: hasta llegar al tiempo
presente.
to del trato que brindamos a otros animales.
diseña sus engranajes y resortes, y planea sus interconexiones, con un prop sito
futuro en su mente. La selección natural, el proceso ciego, inconsciente y
automático que Darwin descubri , y que ahora sabemos que es la explicaci n de la La Revoluci n darwiniana tambi n conllev cambios en relaci n con
existencia de todas las formas de vida y de su aparente nalidad, no tiene ning n el modo de hacer ciencia. Como veíamos, la Revolución copernicana
propósito en mente […] No tiene plan para el futuro. No tiene visión, ni previsión, Asimismo, la teor a del ancestro com n permite explicar las homolo- hab a tra do ciertos cambios en el tipo de explicaciones brindadas. En
ni vista de ning n tipo. Si puede decirse que juega el papel del relojero en la
g as descubiertas por Owen. El hecho de que las mismas combinaciones particular, la Revolución copernicana había eliminado de la física las
naturale a, es el de un relojero ciego. (Dawkins, 1986, 5)
seas se encuentren en distintas especies puede ser explicado apelando explicaciones nalistas o teleol gicas, que apelaban a alg n tipo de n
La selección natural es un proceso carente de propósito preconcebido, al modelo rami cado de evoluci n propuesto por Darwin. Dadas dos intr nseco en los objetos, al modo aristot lico. En el siglo XIX, tales ex-
pero, además, la dirección en la que la selección conduce la evolución de
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

plicaciones seguían subsistiendo en la historia natural (que actualmente Kant (1724-1804) sostenía haber realizado la Revolución copernicana g. Elaboren un cuadro sinóptico indicando de qué manera Paley, Linneo, Diderot,
llamamos “biología”). Pues, como mencionamos, los organismos vivos de la losof a. Darwin, al comparar la selecci n natural con la mecáni- Buffon, Lamarck, Owen y Darwin explican, tanto la adaptaci n de la estructura a la
función como la diversidad de los seres vivos.
exhiben estructuras que tienen ciertas funciones. Tambi n subsist a la ca clásica, evidentemente, se pone en el lugar de su descubridor. Esto
h. Realicen una red conceptual que permita enlazar las principales contribuciones
idea aristot lica de explicaci n esencialista. Es decir, el bi logo deb a constituye, además, un intento por legitimar la biología (la historia na- de Lyell, las investigaciones de Darwin, las de Malthus y el m todo de cr a de ani-
encontrar los rasgos esenciales y necesarios para de nir las especies, tural) no tan respetada por entonces. males a la Teor a de la evoluci n por selecci n natural de Darwin.
por detrás de las diferencias accidentales. Ambas cuestiones fueron ra- i. ¿En qu consisten las in uencias metodol gicas y los cas de la Revoluci n
darwiniana
dicalmente revertidas con el darwinismo. Por una parte, si bien la bio- En uno de los art culos de la ltima compilaci n de los escritos de Ste-
log a utili aba y sigue utili ando explicaciones funcionales (tambi n phen Jay Gould, Acabo de llegar, el autor señala otra cuestión interesante
las utilizan otras disciplinas como la psicología o la sociología), las al respecto del fragmento arriba citado (Gould 2002, 309-330). Al nal Síntesis del capítulo
mismas no implican ni que existan nes intr nsecos en la naturale a, del libro, es el nico lugar en que Darwin utili a el t rmino “evoluci n . En la primera parte de este capítulo nos dedicamos a la Revolución
como pensaba Arist teles, ni que existan un diseñador o un arquitecto Para referirse a lo que hoy llamamos “evoluci n , sol a emplear la expre- copernicana. La primera sección, 1.1. Astronomía, cosmología y física,
del mundo, como pensaban los teólogos naturales. La selección natural si n de “descendencia con modi caci n , “transformaci n o semejan- apuntó a delinear las tres disciplinas principales involucradas en esa
permite explicar c mo surgen nes y prop sitos en el mundo natural tes. Esto se debe a que la palabra “evolución” en el lenguaje natural (no revolución y sus interrelaciones. En 1.2. Los fenómenos celestes, de-
sin necesidad de apelar a ning n diseñador inteligente. Por otra parte, en el lenguaje técnico de la biología evolutiva actual) incluye, además de sarrollamos algunas de las regularidades observadas en los cielos y su
el esencialismo aristotélico implicaba buscar los rasgos esenciales y la idea de cambio, la idea de despliegue de posibilidades o progreso. Y relación con fenómenos terrestres, como la sucesión de la estaciones y
necesarios por detrás de la variación contingente. Las divergencias y esto es lo que seg n Darwin no existe en la historia de la vida. En el párra- de los d as y las noches. En 1.3. Dos máximos modelos del mundo, se
diferencias dentro de una especie debían ser dejadas de lado para co- fo nal del libro, “evoluci n permite hablar entonces del despliegue de presentaron los dos modelos explicativos de los fen menos celestes: el
nocer los rasgos esenciales, aquellos que de nen a la especie frente a posibilidades de la vida. Darwin contrapone tal despliegue a la constan- modelo geocentrista y el modelo heliocentrista. En 1.4. La ciencia aris-
las otras especies del mismo g nero –llevado a su máxima expresi n cia del girar del planeta, generando una contraposición entre los estudios tot lica, cosmolog a y f sica, se expusieron las ideas aristot licas sobre
por Linneo–. El darwinismo implica un nuevo tipo de explicaci n y de de los dos fenómenos. El fragmento incluye entonces una defensa de la la naturaleza de la materia, el movimiento, los lugares naturales y la
pensamiento que suele llamarse “poblacional”. La clave de la evolución hoy llamada “biolog a frente a la f sica. Seg n Darwin, el fen meno que estructura del cosmos. La sección 1.5., La astronomía antigua, presentó
darwinista se encuentra en el estudio de eso que en otros marcos deb a estudia, es más complejo e interesante. las ideas ptolemaicas, que rigieron la explicaci n de los fen menos ce-
dejarse de lado: la variación, sin la cual, la selección natural no podría lestes hasta la modernidad. Luego, en 1.6. El pensamiento de Copérni-
actuar, y que constituye, en consecuencia, la clave de la evolución. Pero, además, resulta en una incitación a buscar belleza y sentido en este co, se plantearon las ideas de Copérnico, su hipótesis de la Tierra móvil
nuevo y enorme mundo, en donde además de no ser más que un estadio y cómo se daba cuenta, a partir de esta hipótesis, de los movimientos
En este sentido, puede considerarse a la Revoluci n darwiniana como evolutivo, lo somos de una evoluci n que no tiene ninguna meta de - de los astros. En 1.7. La astronomía de Brahe y de Kepler, se discutie-
continuadora y conclusiva de la Revolución copernicana. El siguiente nida ni ning n carácter progresivo. Si uno conoce algo de la biograf a ron algunos de los problemas astronómicos del sistema copernicano
fragmento, escrito por Galileo, resulta sumamente ilustrativo: de Darwin, esta incitaci n resulta heroica. Su posici n acomodada no y cómo, a partir de las observaciones de los Brahe y de los desarro-
No deja de asombrarme en gran manera, e incluso ofender a mi intelecto, oír que se pudo evitar que Annie, una de sus hijas, muriese luego de un extremo llos matemáticos de Kepler, el sistema copernicano logró superar, en
atribuye como gran nobleza y perfección a los cuerpos naturales e integrantes del sufrimiento el 23 de abril de 1851 a sus tempranos once años y ocho años simplicidad y capacidad predictiva, al sistema ptolemaico. La sección
universo ese ser impasible, inmutable, inalterable, etc., y por el contrario que se antes de la publicación de El origen de las especies. Imposible no leer en 1.8., El aporte galileano, estuvo dedicado a presentar los dos principales

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

considera una gran imperfección el ser alterable, generable, mudable, etc. este fragmento la tensi n entre las expresiones “guerra de la naturale a y n cleos de trabajo de Galileo vinculados a la Revoluci n copernicana:
Por mi parte, considero a la Tierra nobilísima y admirable por tantas y tan diversas
el “sinfín de las más bellas y hermosas formas han evolucionado y siguen las observaciones celestes con el telescopio y el principio de relatividad
alteraciones, mutaciones, generaciones, etc., que se producen incesantemente en
ella. (Galilei, 1990) evolucionando”. Es a la “guerra” de la naturaleza, que nos causa tantas del movimiento. Finalmente, en 1.9. Ep logo: Newton, se present la
desdichas, a la que debemos nuestra existencia, nos dice Darwin. Es la forma que adquiriría la física con el enunciado del principio de inercia
Arist teles ha sido el l sofo y cient co más in uyente e importan- tensi n en la que el mismo Darwin viv a, y sirve de ejemplo, tambi n, y las demás leyes de Newton as como el problema cosmol gico que
te de la antigüedad. Sin su labor, probablemente, la ciencia no sería de la tensión de los tiempos que corren. Todavía no hemos digerido sus planteaba, llegando al nal de la Revoluci n copernicana.
la misma. Sin embargo, en conjunto, las revoluciones copernicanas y consecuencias ticas y los cas, ni los cambios que trae sobre nuestra
darwinianas se dedicaron a eliminar de la ciencia los estándares eva- concepción de mundo, religiosa o no. La ola generada por la Revolución En la segunda parte abordamos la Revoluci n darwiniana. En el apartado
luativos y la concepci n metaf sica aristot lica, y a su xito debemos la darwiniana –continuaci n de la copernicana– todav a no rompi . 2.1. El creacionismo: supuestos los cos subyacentes, se señal breve-
concepción actual de la ciencia. mente cómo Paley y Linneo intentaron dar cuenta de las adaptaciones y
de la diversidad de los seres vivos, apelando a un Dios que había creado
En conclusión, el pequeño y confortable mundo geocentrista fue agran- Les proponemos responder algunas preguntas acerca de la Revoluci n darwiniana: a los distintos organismos vivos de manera directa de acuerdo con ciertas
dado hasta el in nito durante la Revoluci n copernicana, el microscopio a. Diferencie n las interpretaciones del árbol de la vida (el sistema en el cual los “ideas” o “esencias”. En el apartado 2.2. El debate entre evolucionistas
mostr que el in nito se encontraba tambi n dentro de nosotros, y que organismos pueden agruparse en especies, géneros, familias, etc.) por parte de Lin- y creacionistas antes de Darwin, se revisaron algunos de los enfoques
cada gota de agua constituía un pequeño universo, la geología mostró neo y de Darwin.
anteriores a la teor a de Darwin que dieron lugar, de una manera u otra,
b. ¿En qué consisten las homologías y cuál es la interpretación que de estas daba
que también el tiempo debía ampliarse hasta puntos inconcebibles, ahora, a alg n tipo de proceso hist rico involucrado en el surgimiento de los
Owen ¿Cuál es la interpretaci n evolutiva de las homolog as dada por Darwin
con Darwin, ni siquiera ocupamos un lugar especial en nuestro pequeño, c. ¿Cuál es la in uencia que tuvo en Darwin la propuesta geol gica de Lyell distintos seres vivos. Allí nos detuvimos en los aportes de transformis-
viejo y alejado mundo: somos uno más de sus habitantes. d. ¿En qu consiste la importancia de observaciones de Darwin hechas en Galápa- tas como Diderot y Buffon, pasando por evolucionistas (obviamente no
gos, en particular aquellas que involucran a los diferentes picos de los pin ones darwinianos) como Lamarck, incluyendo a naturalistas teol gicos como
e. ¿De qu modo se interrelacionan la selecci n arti cial (la selecci n reali ada por
Y, sin embargo: Cuvier y Owen quienes, si bien consideran que el registro f sil pareciera
criadores) con la lectura del texto de Malthus en el descubrimiento de la selecci n
De la guerra de la naturaleza, del hambre y la destrucción, resulta directamente la natural evidenciar un proceso histórico previo al surgimiento de las distintas es-
cosa más elevada que somos capaces de concebir, es decir, la producción de los f. Lean el texto de Darwin de la bibliograf a de la materia y respondan el siguiente pecies, no admiten ning n tipo de transformaci n en ese proceso hist ri-
animales superiores. Hay grandeza en esta concepción de la vida, con sus muchos cuestionario: co. En el apartado 2.3. La Revoluci n darwiniana, anali amos los aspec-
poderes, habiendo sido alentada en unas pocas formas o en una; y que, mientras
1. Seg n dice Darwin en el pr logo, “si bien uno puede estar convencido de la evoluci n, tos principales de la teor a de la evoluci n darwiniana, centrándonos en
este planeta ha ido girando de acuerdo a las leyes jas de la gravedad, de tan
de todos modos no puede considerarse satisfecho hasta explicar un hecho clave . ¿En qu los diversos conocimientos de la poca que in uyeron en su pensamien-
simple comienzo, un sinfín de las más bellas y hermosas formas han evolucionado
radica este hecho
y siguen evolucionando. (Darwin, 1859, 490) to, tales como la geolog a de Lyell, su excursi n a las Islas Galápagos, la
2. ¿Qu es la lucha por la existencia y qu signi ca que debe ser considerada en
sentido amplio
cría de animales y la economía política de Malthus.
Este es el párrafo nal de El origen de las especies. Lo primero que se
3. En la introducci n, a comien os del cap tulo III y en el cap tulo IV, Darwin
puede notar en dicho fragmento es el intento característico de los si- expone la selecci n natural. ¿En qu consiste Dentro de los principales aportes reali ados por Darwin, se destaca-
glos XVIII y XIX por legitimar el discurso al compararse con Newton. 4. ¿En qu consiste la selecci n sexual ¿Cuál considera, Darwin, que es la ron la tesis de la evolución por selección natural y la hipótesis del
Hume se comparaba con el Newton de la mente humana, Immanuel relaci n entre la selecci n sexual y la natural
ancestro com n. De acuerdo con la primera, dado que los recursos na-
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

turales necesarios para la supervivencia son escasos, es decir, existen Bibliografía


más organismos que recursos que les permitan mantenerse con vida, Primera Parte
se produce entre los distintos organismos una lucha por la subsisten-
aRiSTóTeleS (1952) The Works of Aristotle (Vol. I), Oxford, Clarendon Press,
cia. Como consecuencia de esa lucha, solo aquellos que tienen rasgos [Edición de W. D. Ross]: Part A. Physics (Physica); Part B. On the Heavens
más óptimos, que les permiten acaparar recursos, sobreviven y se re- (De caelo), Part C. On the Generation and Corruption (De Generatione et Capítulo II
producen, transmitiendo dichas características a sus descendientes. En Corruptione).
cambio aquellos que no tienen esos rasgos, perecen. De esta manera aRiSTóTeleS (1990), Metafísica, Madrid, Gredos, [Edición de V. García Yebra].
newTon, iSaac (2004) [1692-3], Philosophical writings, Cambridge, Cam- Por Sabrina Haimovici
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bridge University Press.
aquellos que poseen rasgos cada vez más ajustados a su entorno, que les caRman, chRiSTian (2011), El mecanismo de Anticitera. Una computadora
permiten tener acceso a los recursos necesarios para la supervivencia. astronómica analógica de la antigüedad, en Ciencia Hoy, 21 (nº123, pp. 29- Introducción
As , la Teor a de la evoluci n por selecci n natural permiti a Darwin 34). Disponible en: http://www.cienciahoy.org.ar/ch/ln/hoy123/Anticitera.pdf
cohen , i. BeRnaRd (1989), El nacimiento de la nueva física, Madrid, Alianza. En el capítulo anterior presentamos las revoluciones, copernicana y
explicar los fen menos planteados por varios de los te logos naturales
copéRnico, nicoláS (1997 [1543]), Sobre las revoluciones, Barcelona, Altaya. darwiniana. En este cap tulo, presentaremos una introducci n a la l -
vistos en el apartado 2.2; entre ellos, la adaptación de la estructura a las evanS, jameS; Carman, Christian C. y Thorndike, Alan S. (2010), Solar Ano- gica y, en particular, a la lógica proposicional simbólica. El término
funciones biol gicas, la diversidad. Asimismo, la tesis darwiniana del maly and Planetary Displays in the Antikythera Mechanism, Journal for the
“l gica es usado con diferentes sentidos, en distintos contextos. En
ancestro com n permiti dar una nueva interpretaci n a las homolog as History of Astronomy, XLI ( pp. 1-39).
KoyRé, alexandRe (1980 [1966]), Estudios Galileanos, Madrid, Siglo XXI. la vida cotidiana se lo suele utilizar con el sentido de “razonable”, en
halladas en el registro f sil y a la clasi caci n en g neros y especies
Kuhn , ThomaS S. (1978), La Revolución Copernicana, Barcelona, Ariel. a rmaciones como, por ejemplo, “Es l gico que est s nervioso, si estás
ofrecida por Linneo. Por ltimo, en el apartado 2.4 revisamos algunas
Rioja, ana y Ordóñez, Javier (1999), Teorías del Universo. De los pitagóricos empezando un nuevo trabajo”.
de las consecuencias los cas que acarre el planteo de Darwin, tanto a Galileo (Vol. I), Madrid, Síntesis.
en la concepci n del hombre, como en cuanto al tipo de explicaci n que
En tanto disciplina, la lógica estudia los razonamientos. Cabe aclarar
es posible y deseable elaborar en la Ciencia. Segunda Parte
que no se trata del estudio de cómo se realiza el proceso del razona-
BowleR, peTeR j. y Morus, Iwan Rhys (2005), Panorama general de la cien-
miento en tanto proceso de naturaleza psicológica. Dicho de otro modo,
En el pr ximo cap tulo, abordaremos algunas nociones básicas de l - cia moderna, Barcelona, Crítica.
daRwin , chaRleS (1859), On the origin of species by means of natural selec- la lógica no se ocupa de estudiar las características psicológicas de los
gica que, junto con los desarrollos ofrecidos en este, nos permitirán
tion, London, John Murray. procesos mentales de razonamiento, sino cuándo un razonamiento es
aproximarnos con mayor profundidad a algunas de las propuestas epis-
daRwin , chaRleS (1992, [1872]), El origen de las especies (6ª. ed.), Barcelo- “correcto . Qu entiende la l gica por ra onamiento y espec camente
temol gicas más signi cativas del siglo XX en los cap tulos III y IV. na, Planeta Agostini. por razonamientos correctos será el tema de este capítulo, así como qué
daRwin , chaRleS (2009, [1871]), El origen del hombre, Barcelona, Crítica.
propiedades de los ra onamientos estudia la l gica y c mo los clasi ca.
dawKinS, RichaRd (1986). The Blind Watchmaker: Why the evidence of evolu-
Para ampliar tion reveals a universe without design, New ork, W.W. Norton. También, presentaremos algunos de los procedimientos que desarrolla
denneT, daniel (1995), Darwin’s Dangerous Idea. Evolution and the Mea- la lógica denominada proposicional simbólica para su análisis.
Con el n de enriquecer las ideas presentadas en la primera parte, La
nings of Life, Touchstone, Simon and Shuster, Nueva York.
Revoluci n copernicana, pueden consultar un excelente y clásico texto Galilei, Galileo (1990), Diálogo sobre los dos máximos sistemas del mundo
de historia de la Astronomía: ptolemaico y copernicano, Madrid, Alianza.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

Toulmin, STephen y Good eld, June (1963), La trama de los cielos, Gould, STephen jay (2002), Acabo de llegar, Barcelona, Crítica. 1. Razonamientos
hume, david (1779), Dialogues Concerning Natural Religion, London.
Buenos Aires, Eudeba.
lamaRK, jean-BapTiSTe (1809), Philosophie Zoologic, Paris. Un razonamiento es un conjunto de proposiciones (dos o más) en el que
Además, para conocer aspectos aquí no discutidos sobre la cosmología mayR, eRnST (1959), Darwin And The Evolutionary Theory In Biology, en se pretende que una de ellas, llamada “conclusión”, esté fundada en las
contemporánea, previa y posterior al período estudiado, cuentan con Meggers, Betty J. (Ed.) Evolution And Antrophology: A Centennial Apprai-
otras, llamadas “premisas”. Las premisas proporcionan los elementos
una entretenida y erudita obra: sal, The Anthropological Society of Washington, Washington D. C.
paley, william (1802), Natural Theology, London, Rivington. de juicio sobre los cuales se a rma la conclusi n.
Rioja, ana y Ordóñez, Javier (2006), Teorías del universo (Vols. II y RuSe, michael, (1983, [1979]), La revolución Darwinista, Madrid, Alianza
III), Madrid, Editorial Síntesis. Universidad. Por ejemplo, si no podemos recordar quién escribió El sueño de los
SoBeR, ellioT (2009), ¿Escribi Darwin el Origen al rev s , Teorema: Re-
En relación con los contenidos de la segunda parte, La revolución héroes, si Borges o Bioy Casares, pero estamos seguros de que fue al-
vista Internacional de Filosofía (Vol. XXVIII, Nº2).
darwiniana, existen varios libros muy buenos y de simple lectura so- guno de los dos, y alguno de nosotros a rma que Borges no lo escribi
bre biología evolutiva. Son particularmente interesantes los escritos por (podría, por ejemplo, recordar que Borges no escribió ninguna novela y
Stephen Jay Gould: que El sueño de los héroes es una novela, de modo que no puede haber
sido escrita por Borges), entonces podemos inferir con seguridad que lo
-El pulgar del panda (1980), Barcelona, Crítica; tiene que haber escrito Bioy Casares.
- La vida maravillosa (1989), Barcelona, Crítica;
-La sonrisa del amenco (1985), Barcelona, Crítica; Si simpli camos el ra onamiento (quitando la explicaci n de c mo lle-
-Un dinosaurio en un pajar (1995), Barcelona, Crítica; gamos a a rmar que Borges no escribi El sueño de los héroes), que-
-Ocho cerditos (1993), Barcelona, Crítica; daría algo así:
-Acabo de llegar (2002), Barcelona, Planeta; etc.
El sueño de los héroes fue escrito por Borges o por Bioy Casares.
Borges no lo escribió.
Tambi n, es recomendable el famoso texto de Richard Dawkins (1993,
Por lo tanto, tiene que haber sido escrito por Bioy Casares.
[1976]), El gen egoísta, Barcelona, Salvat Editores.
Se puede acceder a todos los textos escritos por Darwin en http:// Para comenzar con el análisis de los razonamientos, es preciso introdu-
darwin-online.org.uk. cir ciertas nociones con las que trabaja la lógica. Llamaremos “proposi-
La bibliograf a sobre Darwin es numeros sima, incluso en castellano. Al- ciones a lo que las oraciones expresan. Por ejemplo, la oraci n “Bor-
gunos textos aconsejables son: de Michael Ruse (2008), Charles Darwin, ges escribió Ficciones” es distinta de la oración “Ficciones fue escrito
Buenos Aires, Katz Editores; de Niles Eldredge (2009), Darwin, Buenos por Borges”. La primera está en voz activa mientras que la segunda
Aires, Kat Editores; de Janet Browne (2006), La historia del origen de está en voz pasiva. No nos interesan aquí estas diferencias, sino algo
las especies de Charles Darwin, Bogotá, Debate. que ambas oraciones tienen en com n. Diremos que ambas oraciones
“expresan la misma proposici n . Al identi car proposiciones, además,
debemos reponer aquello que muchas veces en las oraciones se omite y
se entiende por contexto (como los sujetos, que pueden ser tácitos, o los
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

referentes de los pronombres). Por ejemplo, en el razonamiento presen- Todos los razonamientos que tienen esta forma son válidos. Siempre de las inferencias que realizamos, las premisas brindan solo un apoyo
tado, la oraci n “Borges no lo escribi expresa la proposici n “Borges que formulemos ejemplos de esta forma con premisas verdaderas, la parcial a la conclusión.
no escribió El sueño de los héroes”. conclusión tendrá que ser verdadera. Si se sustituye “A” y “B” por Por ejemplo:
ejemplos de proposiciones de modo que por lo menos una de las pre- Galileo arrojó una piedra de un kilo de la torre de Pisa y cayó con una aceleración

Las proposiciones que dan apoyo a la conclusión son las “premisas” del misas resulte falsa, la conclusión puede resultar verdadera o falsa. Por de 9,8 m/s 2.
Galileo arrojó una pelota de madera de 500 gramos de la torre de Pisa y cayó con
razonamiento. Para marcar cuál es la conclusión en lógica, se la escribe ejemplo, sustituyendo “A” por “Borges era ciego” y “B” por “Borges
una aceleración de 9,8 m/s 2.
debajo de una raya, como se muestra a continuación. escribió Ficciones” obtenemos un ejemplo con una premisa falsa y con- Galileo arrojó una pelota de madera de 800 gramos de la torre de Pisa y cayó con
clusión verdadera. El razonamiento completo sería el siguiente: una aceleración de 9,8 m/s 2.
El sueño de los héroes fue escrito
Galileo arrojó un perro de 1 kilo y medio desde la torre de Pisa y cayó con una
por Borges o por Bioy Casares. Premisa 1 Borges era ciego o escribió esta premisa es verdadera, si entendemos
aceleración de 9,8 m/s 2.
Ficciones. la “o” como “y/o”
(varios casos más)
Borges no escribió. El sueño de los héroes. Premisa 2 Borges no era ciego. esta premisa es falsa
Todos los objetos caen con una aceleración de 9,8 m/s 2.
Bioy Casares escribió. Conclusión Borges escribió Ficciones. la conclusión es verdadera
El sueño de los héroes. Por un ra onamiento de este estilo, Galileo in ri esta conclusi n (en reali-
En relación con la forma de razonamiento que venimos analizando, dad esto no es históricamente correcto porque al carecer de relojes adecua-
existen ra onamientos que tienen: dos, Galileo deb a hacer experimentos más complejos, pero no nos importa
1 1 La noc n de val de y una clas cac n de los ra onam entos para el ejemplo). El razonamiento mencionado no garantiza la verdad de la
Premisas verdaderas y conclusi n verdadera
conclusi n, es decir que esta ltima no se in ere con certe a de las premisas,
Existen distintos tipos de ra onamientos. En el caso del ejemplo presen- Al menos una de las premisas falsa y conclusi n verdadera
ya que en la conclusi n se hace referencia a todos los objetos existentes y
tado en el apartado 1, si las premisas son verdaderas la conclusión tiene (como el anterior)
que existirán, y las premisas se re eren solo a determinados casos particula-
que ser verdadera. Si sabemos que El sueño de los héroes fue escrito por Al menos una de las premisas falsa y conclusi n falsa
res. La inferencia que va de un conjunto pequeño de casos a un conjunto de
Borges o por Bioy Casares, y que no fue escrito por Borges, podemos
Por las propiedades que tiene la forma de este razonamiento, nunca casos in nito o mayor al mencionado en las premisas no puede ser válida.
inferir con total seguridad (deducir) que lo escribió Bioy Casares. Es
encontrarán un ejemplo de esta forma con ambas premisas verdaderas y Entonces, este razonamiento no asegura que la conclusión sea verdadera,
decir, si la premisa “El sueño de los héroes fue escrito por Borges o por
conclusión falsa. Esto es así, precisamente, porque se trata de una forma pero de todos modos parece un razonamiento adecuado. Normalmente, en
Bioy Casares” es verdadera, y la premisa “Borges no escribió El sueño
de razonamiento válida. estos casos, se dice que las premisas incrementan la probabilidad de la con-
de los héroes” también, la conclusión tiene que ser verdadera. ¿Podrían
clusión. Es decir, que a mayor cantidad de casos observados, mayor será
ser verdaderas las premisas y falsa la conclusi n De nitivamente no. A continuación presentamos un ejemplo de premisas falsas (o alguna
la probabilidad de que la conclusión sea verdadera, pero la conclusión no
falsa) y conclusión falsa:
puede inferirse con total certeza a menos que se observen todos los casos (lo
Si una de las premisas fuese falsa, la conclusión podría haber sido falsa.
Colombia está en Europa o en Asia. esta premisa es falsa cual en el ejemplo dado es imposible) . A estos razonamientos en los que las
1

Por ejemplo, si de hecho El sueño de los héroes hubiese sido escrito por
Colombia no está en Europa. esta premisa es verdadera
Cortázar, la Premisa 1 sería falsa y la conclusión, también. Pero si am- 1 La idea de que la cantidad de casos positivos observados aumenta la probabilidad de que la con-
Colombia está en Asia. la conclusión es falsa clusi n sea verdadera ha sido objeto de debate en losof a de la ciencia. Presentaremos las distintas
bas premisas son verdaderas, es decir, si es verdadero que “El sueño de
posturas al respecto en el capítulo III: Conceptos, hipótesis y contrastación.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

los héroes fue escrito por Borges o por Bioy Casares” y que “Borges no Los razonamientos válidos transmiten la verdad de las premisas a la premisas no garanti an la conclusi n, pero brindan alg n apoyo parcial a la
escribió El sueño de los héroes”, la conclusión, “Bioy Casares escribió conclusión, es decir que si sus premisas son verdaderas, la conclusión misma se los llama “inductivos”. Estos razonamientos son inválidos, ya que
El sueño de los héroes” tiene que ser verdadera. En este tipo de razo- necesariamente será verdadera. la verdad de sus premisas no garantiza la verdad de la conclusión, es decir,
namientos, si ambas premisas son verdaderas, la conclusión necesaria- puede darse el caso de que sus premisas sean verdaderas y su conclusión
mente también lo será. Si alguna de las premisas es falsa, la conclusión Un razonamiento que no transmite la verdad de las premisas a la con- falsa. Por eso, cuando son adecuados, se los llama “correctos”.
podría ser verdadera o falsa. clusión, es decir, que puede tener premisas verdaderas y conclusión fal-
sa, es inválido. Por ejemplo: El hecho de que un razonamiento sea correcto depende de varios fac-
A este tipo de razonamientos se los llama “deductivos”. Los razona- Colombia está en América esta premisa es verdadera
tores. Algunos de ellos son la cantidad de casos observados, y el hecho
mientos deductivos son válidos, se caracterizan por transmitir la verdad del sur o en Asia. de que la muestra sea representativa del total. Por ejemplo, en el caso
de las premisas a la conclusión. Es decir que si sus premisas son verda- del ra onamiento de Galileo, en el que se pretende hacer una a rmaci n
deras, la conclusión tiene que ser verdadera. Si alguna de las premisas Colombia está en Asia. la conclusión es falsa sobre todos los objetos, una muestra representativa implicaría variar en
es falsa, la conclusión puede ser verdadera o falsa. los materiales y los pesos de los objetos, si se tiraran solo pelotas de
En este razonamiento de una sola premisa, la premisa es verdadera y la madera de 2 kg el razonamiento brindaría menos apoyo a la conclusión,
El ejemplo presentado es un ra onamiento válido. ¿Por qu Se podr a conclusión es falsa. Su forma es la siguiente: pues la muestra no sería representativa. Esto implica que no se pueda
intentar justi car su valide de un modo informal, esto es, sin apelar a examinar la adecuaci n de un ra onamiento inductivo por el mero exa-
Ao B
lenguajes arti ciales ni a demostraciones t cnicas, de la siguiente ma- B
men de la forma, a diferencia de lo que ocurre con los razonamientos
nera: si es verdadera una de dos alternativas, y no es la primera, nece- deductivos. La lógica que estudia los razonamientos inductivos se lla-
Esta forma no garantiza la verdad de la conclusión, ya que puede haber
sariamente tiene que ser la segunda. As , para justi car la valide de ma “Lógica inductiva”. Los razonamientos inductivos, a diferencia de
casos en los que la premisa sea verdadera y la conclusión falsa. Si una
este caso no es necesario apelar a la literatura argentina ni a ning n los deductivos, son ampliativos, es decir, agregan información en la
forma de razonamiento puede llevar de verdad a falsedad, es inválida.
hecho particular del mundo, no es necesario averiguar si de hecho Bioy conclusión que no estaba en las premisas. Esto es lo interesante de estos
En funci n de si son válidos o no, se pueden clasi car los ra onamien-
Casares escribió El sueño de los héroes o no, sino que se debe analizar razonamientos, pero también es lo que los hace más débiles. Los razo-
tos en dos grandes grupos: los deductivos, que son válidos, y los no
la forma del razonamiento. Para cualquier razonamiento, el análisis de namientos deductivos, por ser válidos, son más fuertes, pero a cambio
deductivos, que son inválidos. En los razonamientos deductivos si las
su validez no depende de si sus premisas y conclusión son de hecho de no agregar nueva información en la conclusión.
premisas son verdaderas, la conclusión necesariamente será verdadera.
verdaderas en el mundo o no, sino de la relación de inferencia entre
El ejemplo de razonamiento sobre Borges y Bioy Casares, antes citado,
ellas, es decir, de si la verdad de las premisas garantiza la verdad de la En s ntesis, existen dos tipos de ra onamientos, aquellos deductivos
entonces, es deductivo. En este tipo de razonamientos la verdad de las
conclusión o no. Esto depende de la forma del razonamiento. o válidos, en los que la conclusión es implicada lógicamente por las
premisas garantiza la verdad de la conclusión. En los razonamientos no
premisas, es decir, que si sus premisas son verdaderas la conclusión
La forma del razonamiento del ejemplo es la siguiente: deductivos, en cambio, las premisas no brindan un apoyo absoluto a la
necesariamente es verdadera también; y aquellos no deductivos, que
conclusión, ya que, aunque las premisas sean verdaderas, la conclusión
Ao B no garantizan la verdad de la conclusión. Entre los razonamientos no
No A puede ser falsa. Algunos razonamientos de este tipo, sin embargo, resul-
deductivos o inválidos se encuentran los inductivos, que, si bien no
B tan muy tiles, tanto en la vida cotidiana como en ciencia. En muchas
garantizan la verdad de la conclusión, permiten inferirla con cierta pro-
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

babilidad. Así como hay distintos tipos de razonamientos, hay distintos dentista y “Juan es pescador a cionado , unidas con la A continuación, se presentan algunas de las conectivas principales y sus
tipos de lógicas que se dedican a estudiar cada uno de ellos. Las lógicas conectiva “y”. correspondientes símbolos.
deductivas se ocupan de los razonamientos deductivos, mientras que las “Juan no es dentista” también es una proposición compuesta, ya
lógicas inductivas se ocupan de los razonamientos inductivos. que “no” es una conectiva. 2.1.1. Conjunción

Al trabajar con esta lógica, la unidad mínima es la proposición simple. Lo más parecido en el lenguaje natural (el que hablamos todos los días)
Existen muchas l gicas deductivas (la más antigua de todas fue con- a la conjunción lógica, es la “y”. Pero también cumplen esta función
Esto quiere decir que la estructura interna de las proposiciones simples
cebida por Aristóteles). En el punto 2 veremos una de ellas, la Lógica el “pero” y el “sin embargo”. En castellano el uso de “pero” y “sin
no se analiza (no se analizan, por ejemplo, las propiedades lógicas que
proposicional simbólica. embargo incluye un mati adversativo, por ejemplo, al a rmar “Hab a
dependen de la estructura de sujeto y predicado de las oraciones). Así,
identi caremos proposiciones simples y proposiciones compuestas y, un embotellamiento, sin embargo, llegué temprano” o “Me invitaron
En el apartado 1 explicamos que, dependiendo de si son válidos o no, los ra ona- en el caso de las proposiciones compuestas, analizaremos su estructura a una esta, pero tengo que estudiar . Sin embargo, al anali ar la es-
mientos se pueden clasi car como deductivos o no deductivos. El objetivo de la tructura lógica de estas oraciones, se representa su forma proposicional
actividad que proponemos a continuación es aplicar esa distinción a algunos razo-
interna en función de las proposiciones simples y las conectivas lógicas
como una conjunción y el matiz adversativo no forma parte de la for-
namientos, a partir de un análisis informal. Para cada uno de los razonamientos: que las conforman.
ma proposicional. Desde el punto de vista de la lógica proposicional
a. identi quen las premisas y la conclusi n;
b. determinen si son razonamientos deductivos o no deductivos.
simbólica, la oración “Había un embotellamiento, sin embargo, llegué
2.1. El lenguaje de la lógica proposicional simbólica
temprano expresa la conjunci n de dos proposiciones simples, “hay
Los primeros dos enunciados se presentan resueltos a modo de ejemplo.
Uno de los objetivos de la lógica proposicional simbólica es determinar un embotellamiento” y “llego temprano”. De la misma manera, la ora-
1. Si hay una crisis económica, sube el desempleo. Hay una crisis económica. Por lo ci n “Me invitaron a una esta, pero tengo que estudiar , expresa una
si los razonamientos son válidos o no, es decir, si transmiten o no la
tanto, sube el desempleo.
verdad de las premisas a la conclusión. Como presentamos en el apar- conjunci n entre dos proposiciones, expresa la misma proposici n que
a. En este caso la conclusión es: “Sube el desempleo”. Las premisas son “Si hay una
crisis económica, sube el desempleo” y “Hay una crisis económica”. tado 1, los razonamientos son válidos si en caso que sus premisas sean “Me invitaron a una esta y tengo que estudiar .
b. Se trata de un razonamiento deductivo, ya que, si las dos premisas son verda- verdaderas, la conclusión es necesariamente verdadera. En la lógica
deras, la conclusión también lo será. En este caso, las premisas brindan un apoyo proposicional simbólica la validez de los razonamientos depende del Por otra parte, al extraer la forma l gica, tambi n se omiten las dife-
de nitivo a la conclusi n. Si la primera premisa es verdadera, no puede pasar que
signi cado de las conectivas. Por ejemplo, es posible deducir de “Juan rencias en los tiempos verbales, y se considera que, por ejemplo, las
haya una crisis económica y, a la vez, no suba el desempleo. Así, si es verdadero
que en caso de una crisis económica sube el desempleo, y es verdadero que hay una es dentista y pescador a cionado que “Juan es dentista pero no es oraciones “Llegué temprano”, “Llegaré temprano” y “Llego temprano”
crisis económica, entonces necesariamente sube el desempleo. posible deducirlo de “Juan es dentista o pescador a cionado . As , el expresan la misma proposici n.
2. La mayoría de los humanos les tiene miedo a las víboras. Carlos es un humano. ra onamiento “Juan es dentista y pescador a cionado, por lo tanto, Juan
Usaremos para la conjunción el símbolo “.”.
Por lo tanto, Carlos les tiene miedo a las víboras. es dentista” es válido. No es posible que, siendo verdadera la premisa,
a. En este caso la conclusión es: “Carlos les tiene miedo a las víboras”. Las premisas son es decir, siendo verdadero que Juan es dentista y pescador a cionado, Por medio de la conjunción se unen dos proposiciones; por ejemplo, “A . B”.
“La mayoría de los humanos les tiene miedo a las víboras” y “Carlos es un humano”. sea falsa la conclusión, esto es, que Juan es dentista. En cambio, si la
b. Se trata de un razonamiento no deductivo, ya que puede ser que sus premisas Para escribir la forma lógica de las proposiciones, utilizaremos el len-
sean verdaderas y, a n as , su conclusi n falsa. Supongamos que es verdadero que premisa fuera “Juan es dentista o pescador a cionado , y la conclusi n
guaje de la lógica proposicional simbólica. Para esto, como primer paso
la mayoría de los humanos les tiene miedo a las víboras y, también, es verdadero “Juan es dentista”, el razonamiento sería inválido. Por más que esta
que Carlos es un humano. Esto no garantiza que la conclusión sea verdadera, ya
debemos especi car qu letra proposicional asignaremos a cada pro-
premisa fuera verdadera, esta no garantiza la verdad de la conclusión.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

que Carlos podría no formar parte de la mayoría de los humanos que les teme a las La diferencia entre estos razonamientos radica en la conectiva de la posici n simple. Llamaremos “diccionario a la especi caci n de qu
víboras. Es decir que, en este caso, la verdad de las premisas no garantiza la verdad
premisa. En el primer caso, es una “y” y, en el segundo, una “o”. letra asignamos a cada proposición.
de la conclusión.
Por ejemplo, para la proposición “llueve y hace frío”, el diccionario será:
3. Doblo a la izquierda o a la derecha. No doblé a la izquierda. Por lo tanto, doblé
En este apartado presentaremos las conectivas principales. Las conec-
a la derecha. p: llueve
tivas se de nen por c mo resulta el valor de verdad de una proposici n
4. Si hay sequía, suben los precios de los productos agrícolas. Hay sequía. Por lo q: hace frío
tanto, suben los precios de los productos agrícolas.
compuesta en la que guran, dado cierto valor de verdad de las propo-
siciones simples. Por ejemplo, ¿en qué casos será verdadera la proposi- Y la proposición se representa “p . q”.
5. La mayoría de los humanos son diestros. Patricio es un humano, de modo que
Patricio es diestro. ci n “Juan es dentista y pescador a cionado Solo si es verdadero que
Como se mencion , las conectivas se de nen por c mo resulta el valor
Juan es dentista y es verdadero que Juan es pescador a cionado.
6. Algunos inviernos nieva en Buenos Aires. Podemos concluir entonces de verdad de la proposición compuesta dado cierto valor de verdad de
que este invierno nevará en Buenos Aires.
las proposiciones simples. Por ejemplo, ¿cuándo es verdadera la pro-
Al introducir cada una de las conectivas, presentaremos también los sím-
7. Si la temperatura desciende a 0ºC entonces se forman cristales de hielo en la posici n “llueve y hace fr o Cuando llueve y, además, hace fr o. Si
atmósfera. Si se forman cristales de hielo en la atmósfera, entonces nieva. De allí bolos del lenguaje de la lógica. El lenguaje de la lógica proposicional
lloviera y no hiciese frío, o si no ocurriera ninguna de las dos cosas, la
podemos concluir que si la temperatura desciende a 0ºC, entonces nieva. simb lica es arti cial, en el sentido de que es un lenguaje diseñado, en
proposici n ser a falsa. Esto es lo que de ne a la conjunci n, pues una
8. Coloco un tubo de cobre en un horno a 300 y observo que se expande. el cual se especi ca un conjunto de signos y un conjunto de reglas que
Coloco un anillo de oro en un horno a 300 y observo que se expande. Coloco una conjunción solo es verdadera cuando las dos proposiciones que la for-
permitirán construir expresiones en ese lenguaje. El lenguaje de la l gica
bombilla de acero en un horno a 300 y observo que se expande. De aqu se sigue man son verdaderas.
proposicional simbólica también es formal porque, para escribir la forma
que todos los metales se expanden con el calor.
de las proposiciones, a cada conectiva se le asigna un símbolo, y a cada
Se suele presentar la de nici n de las conectivas utili ando una tabla
proposici n simple una letra proposicional. Utili aremos para esto ltimo
2. Lógica proposicional simbólica de verdad que representa cuál es el valor de verdad de la proposición
min sculas de imprenta, empe ando por la letra p: p, q, r, s, etc.
La lógica proposicional simbólica es una de las lógicas deductivas. Se compuesta para cada posible combinación de valores de verdad de las
llama proposicional porque toma como unidad mínima a la proposición proposiciones simples que la componen.
El uso de un lenguaje formal en lógica tiene determinadas ventajas. Per-
simple. Hay dos tipos de proposiciones. Las simples (o atómicas) y las mite, por un lado, eliminar las ambigüedades que presenta el lenguaje
compuestas (o moleculares). Las simples son las que no tienen conecti- La tabla de verdad de la conjunción es la siguiente:
natural (el que usamos cotidianamente para comunicarnos) y, por otro
vas mientras que las compuestas se forman a partir de incluir conectivas lado, permite extraer la forma l gica de las proposiciones y de los ra- p q p . q
en las simples. Las conectivas son expresiones l gicas que permiten zonamientos y escribirlas sin hacer referencia a los hechos particulares v v V V v
formar proposiciones compuestas a partir de simples. Por ejemplo: que se mencionan en cada proposición. Como presentamos en el apar- f v F F v
v f V F f
tado 1, la validez de los razonamientos no depende de si sus premisas y
“Juan es dentista” es un ejemplo de proposición simple. f f F F f
conclusión son de hecho verdaderas, sino de la forma del razonamiento,
“Juan es pescador a cionado es otro ejemplo de proposici n simple.
es decir, de si, dada una forma determinada, es posible que sus premisas
“Juan es dentista y pescador a cionado es una proposici n Esta tabla representa que cuando “p” es verdadera y “q” es verdadera,
sean verdaderas y su conclusión falsa. Mediante un lenguaje formal, se
compuesta que se forma a partir de las proposiciones “Juan es “p . q es verdadera (primera la). Cuando una de las dos es verdadera
facilita la abstracción y el análisis de la forma de los razonamientos.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

y la otra falsa, “p . q es falsa (segunda la y tercera la). , cuando las Puesto que en las actividades de este capítulo, los ejemplos de proposiciones y razonamien-
p q p q
tos no se presentan con el contexto su ciente como para determinar si se trata de disyun-
dos son falsas, “p . q es falsa (cuarta la). Como se observa la tabla tiene v v v V v
ciones inclusivas o exclusivas, establecemos por convenci n que se interpretarán todas las
cuatro las. Esto se debe a que dichas las re ejan todas las combina- disyunciones como inclusivas. De modo que en este cap tulo trabajaremos nicamente con la
f v f V v

ciones posibles de valores de verdad entre dos proposiciones simples. disyunción inclusiva, cuyo símbolo y tabla de verdad se presentaron en 2.1.2. v f v F f
f f f V f
Cada una de las las de la tabla representa una de estas combinaciones.
Puede ocurrir que las dos proposiciones seas verdaderas, que la primera Como se muestra en la tabla de verdad, una proposición condicional es
sea falsa y la segunda verdadera, que la primera sea verdadera y la se- 2.1.3. Negación
falsa si su antecedente es verdadero y su consecuente falso. En cual-
gunda falsa o que las dos sean falsas. Esta conectiva en lenguaje natural equivale a “no”, pero también a “es quier otro caso, es verdadera.
falso que”, “nunca”, “no se da el caso que”, “no es cierto que”. El sím-
A continuación, presentamos en detalle la estructura de una tabla de verdad: Hay distintos modos de expresar el condicional en castellano. Por ejem-
bolo para representarla es “~”.
plo, las tres oraciones que se presentan a continuaci n expresan la mis-
p q p . q r r s nta cada la Por ejemplo, para la proposición “no llueve”, con el diccionario:
ma proposición:
p es v y q es v, la conjunción es V
v v v V v p: llueve
f v f F v p es f y q es v, la conjunción es F. “Si llueve, entonces hace frío”.
la forma es “~ p”.
v f v F f p es v y q es f, la conjunción es F. “Si llueve, hace frío”.
f f f F f p es f y q es f, la conjunción es F. Cabe destacar que la negación no une dos proposiciones, sino que es “Hace frío si llueve”.
una conectiva que se agrega a una proposición para negarla. Por tal
Las tres expresan la misma proposici n porque todas expresan una pro-
motivo, la tabla de verdad es más simple:
Esta columna muestra el resultado de la posición condicional que tiene como antecedente la proposición “llue-
conjunción para cada combinación.
p ~ p ve” y como consecuente la proposición “hace frío”. ¿Cómo sabemos
v F v cuál es el antecedente y cuál el consecuente Por el uso de “si para se-
En las primeras columnas se representan los posibles valores de verdad de las proposiciones
f V F
simples. Cada la muestra una combinaci n posible. El uso de estas columnas es opcional, ñalar al antecedente. El antecedente es el que está después del “si”, y no
pueden escribirse directamente los valores de verdad debajo de cada letra proposicional, necesariamente aparece primero en las oraciones en lenguaje natural.
como se muestra en la 3º y en la 5º columna. La negación lo que hace es invertir el valor de verdad de la proposición.
Esto es, si “p” es verdadera, “~ p es falsa (primera la de la tabla), Con este diccionario:
mientras que si “p” es falsa, “~ p” es verdadera. p: llueve
2.1.2. Disyunción inclusiva
q: hace frío
Esta conectiva suele aparecer en lenguaje natural como “o” o “y/o”. El 2.1.4. Condicional
símbolo con que se representa es “v”. La forma proposicional de todas estas oraciones anteriores sería “p q
En el lenguaje natural, el condicional equivale a “si […] entonces […]”;
La forma de “Llueve o hace fr o , seg n el diccionario: y el s mbolo para representarlo es “ . En cambio, “Hace fr o, entonces llueve expresa otra proposici n, ya
que tiene a “hace frío” como antecedente y a “llueve” como consecuente.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

p: llueve Esta conectiva lógica establece una asimetría entre las proposiciones Con el mismo diccionario, su forma proposicional sería “q p
q: hace frío que conecta, que no cumplen la misma función dentro de la proposición
condicional. En lógica, una de ellas cumple la función de “antecedente” 2.1.5. Bicondicional
se representa “p v q”. La tabla de verdad de la disyunción inclusiva es:
y la otra, la función de “consecuente”. Por ejemplo, en:
p q p . q En lenguaje natural, el bicondicional no es utilizado frecuentemente. En
“Si le cortaron la cabeza, entonces está muerto.” matemática suele aparecer como “si y solo si y sirve para dar de nicio-
v v v V v
nes. El símbolo es “ ”.
f v f V v
el antecedente es “le cortaron la cabeza” y el consecuente es “está muerto”. La tabla de verdad de esta conectiva se representa de la siguiente manera:
v f v V f
f f f F f No es lo mismo decir: p q p q

Una disyunción inclusiva es falsa solo si ambas proposiciones compo- “Si le cortaron la cabeza, entonces está muerto.” v v v V v
nentes son falsas. que decir,
f v f F v
v f v F f
F f f V f
“Si está muerto, entonces le cortaron la cabeza.”
Disyunción inclusiva y disyunción exclusiva
Estas dos oraciones expresan proposiciones distintas. En este ejemplo, Por ejemplo, para la oraci n “Una gura es un triángulo si y solo si posee
La disyunci n puede usarse en lenguaje natural con dos signi cados distintos: el de la disyun-
la primera oración es verdadera, mientras que la segunda no lo es nece- tres lados”, con el diccionario:
ci n inclusiva o el de la disyunci n exclusiva. La disyunci n inclusiva, como se present en
2.1.2., es verdadera cuando una de las proposiciones alternativas es verdadera y cuando ambas sariamente, pues se puede estar muerto con la cabeza en su lugar. p: la gura es un triángulo
son verdaderas. La disyunci n exclusiva, en cambio, es verdadera solo en los casos en que una
sola de las proposiciones alternativas es verdadera (pero no si las dos son verdaderas). En cas- Por esta razón, es importante distinguir las dos proposiciones que co- q: la gura tiene tres lados
tellano ambas pueden expresarse con el mismo t rmino “o . necta el condicional en términos de antecedente y consecuente: la forma proposicional es “p q”.
En la mayor a de los casos de uso de disyunci n en lenguaje natural, el contexto permite de- en “p q”, p es el antecedente y q es el consecuente.
terminar de qu tipo de disyunci n se trata. Por ejemplo, si en un men en un restaurante dice:
¿Qu expresa la oraci n “Si le cortaron la cabe a, entonces está muerto 2.2. Las formas proposicionales
“Incluye plato principal y postre o caf , claramente se trata de una disyunci n exclusiva, pues
se entiende que el men incluye postre o caf , pero no ambos. Para probar la valide de un ra onamiento, es necesario extraer su
Si la proposici n expresada por esa oraci n es verdadera, no puede ocu- forma lógica, es decir, partiendo de un ejemplo de razonamiento en
En cambio, si leemos en el subterráneo: “este asiento está reservado para embarazadas o dis- rrir que le corten la cabeza y siga vivo. Es decir que no puede ocurrir lenguaje natural, es necesario representar su forma en el lenguaje de
capacitados , ¿qu ocurre si sube alguien que cumple con las dos condiciones ¿Qu ocurre
que el antecedente sea verdadero y el consecuente falso. Por este moti- la l gica proposicional. El primer paso consiste en extraer la forma
si sube una discapacitada embara ada Por supuesto tendrá derecho a sentarse. En este caso,
vo, la tabla de verdad del condicional es la siguiente: de las proposiciones que conforman el razonamiento. Esta tarea pue-
la “o” debe entenderse como inclusiva.
de ser compleja, pero trabajaremos con ejemplos sencillos.
Para evitar esta ambig edad, en algunos casos se especi can la disyunci n inclusiva con “y/o
y la disyunci n exclusiva con “o bien o bien . En l gica se simboli an con distintas
conectivas, ya que tienen distinto signi cado.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

Comencemos con algunos casos. La tabla que se presenta a continuación b. El diccionario para este ejemplo es: estructura de premisas y conclusión del razonamiento, es decir que debemos
extrae la forma de una serie de proposiciones. Anali aremos cada una de p: Kepler inventó el telescopio identi car cuáles son las premisas (o la premisa, recuerden que puede haber
ellas, utilizando el siguiente diccionario: q: Kepler propuso que los planetas describen órbitas elípticas ra onamientos con una nica premisa) y cuál es la conclusi n. Luego se con-
fecciona el diccionario, identi cando las proposiciones at micas, y por lti-
p: llueve Y la forma lógica es:
mo se extraen las formas proposicionales de la/s premisa/s y de la conclusi n.
q: hace frío p.q
Existen ciertas expresiones en los ra onamientos presentados en lengua-
r: hay nubes
3. Si mañana es feriado, entonces no programo el despertador. je natural que sirven de indicadores de lo que funciona como conclusión
Proposición Forma Observaciones a. Esta proposición es compuesta, ya que se encuentra constituida por más de una propo- y como premisa. Por ejemplo, las expresiones “por lo tanto , “en conse-
sición y de una conectiva lógica. La conectiva principal es el condicional, que conecta el cuencia”, “por consiguiente”, se encuentran precedidas por premisas y
1 No llueve y hace ~p.q En este caso la negación afecta
antecedente, “mañana es feriado”, con el consecuente –“no programo el despertador”. El
frío solo a p. anteceden a la conclusi n. Otras expresiones como “dado que , “ya que
consecuente es, a su vez, una proposición compuesta, ya que es una negación de “programo
2 No es cierto que ~ (p . q) La conectiva principal es la
el despertador”. o “porque” funcionan del modo inverso: antes que ellas se encuentra la
llueva y haga frío negación. Se niega una conjun-
conclusión y, después, las premisas. Veamos un ejemplo:
ción (que llueve y hace frío). b. El diccionario para este ejemplo es:
3 Ni llueve ni hace ~p.~q “ni […] ni […]” equivale a
p: mañana es feriado “Si la Argentina se encuentra en América del Sur, entonces se encuentra en el
frío “no […] y no […]”.
q: programo el despertador hemisferio sur. Por lo tanto, la Argentina se encuentra en el hemisferio sur,
4 Si llueve y hay (p r q La conectiva principal es el
dado que se encuentra en América del Sur.”
nubes, entonces condicional. El antecedente es Y la forma lógica es:
hace frío una proposición compuesta, es
p q En este caso, la conclusión es “la Argentina se encuentra en el hemisferio
una conjunción.
5 Llueve y si hace frío p (q r La conectiva principal es la 4. Si llueve o nieva, no salimos.
sur . ¿C mo nos damos cuenta La expresi n “por lo tanto indica que lo
entonces hay nubes conjunción. anterior es una premisa y lo que sigue la conclusión. Y en este caso, también
a. Se trata de una proposición compuesta. La conectiva principal es el condicional,
6 Llueve, hace frío y (p . q) . r o p . (q . r)
y en el lenguaje natural lo reconocemos por la expresi n “si . En este ejemplo, la
se usa la expresi n “dado que para señalar que lo que sigue es otra premisa.
hay nubes
coma está en lugar del “entonces”. De modo que “llueve o nieva” es el antecedente Podemos escribir el razonamiento encolumnado del siguiente modo:
7 Llueve, hace frío o (p v q) v r o
y “no salimos” es el consecuente.
hay nubes p v (q v r) Tanto el antecedente como el consecuente son, a su vez, proposiciones compuestas.
8 Llueve o hace frío, (p v q) . r La conectiva principal es la Si la Argentina se encuentra en América del Sur, Premisa 1
El antecedente es una disyunción –“llueve o nieva”– y el consecuente una negación
pero hay nubes conjunción. –“no salimos”. entonces se encuentra en el hemisferio sur.
9 Llueve o no, pero (p v ~ p) . q La conectiva principal es la La Argentina se encuentra en América del Sur. Premisa 2
hace frío conjunción.
b. El diccionario para este ejemplo es:

p: llueve La Argentina se encuentra en el hemisferio sur. Conclusión


Observen que el signi cado cambia rotundamente en todos los casos q: nieva
de acuerdo con la colocaci n de los par ntesis, excepto en el sexto y en r: salimos
el séptimo. Cuando hay varias conjunciones (“.”) o disyunciones (“v”) Observen que en la reconstrucción del razonamiento, no aparece “por lo
y la forma lógica es: tanto”. En su lugar, está la línea que separa las premisas de la conclusión.
seguidas, es posible asociarlas con paréntesis de diversos modos sin
(p q r Tampoco aparece “dado que”, sino que directamente ubicamos la propo-

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

modi car el valor de verdad de la proposici n compuesta. No se da la Observen que, en este caso, es necesario utilizar paréntesis para señalar que el an- sici n que le sigue como la premisa dos. Esas dos expresiones no forman
tecedente es la disyunci n. Sin los par ntesis, no quedar a claro exactamente qu
misma situación con combinaciones de conjunciones y disyunciones. parte propiamente de las premisas ni de la conclusión, sino que sirven
proposiciones une cada conectiva.
para conectarlas en el lenguaje natural.
En todos los casos, como primer paso, antes de extraer una forma, hay 5. La Luna orbita alrededor de la Tierra.
que confeccionar el diccionario donde se indica cómo se utilizará cada 6. J piter tiene sat lites.
letra proposicional (p, q, r, etc.). All se explicita qu letra proposicional 7. La Luna orbita alrededor de la Tierra y J piter tiene sat lites. A continuación, confeccionamos el diccionario:
se le asigna a cada proposición simple, nunca se anotará una conectiva. 8. Los pulpos tienen ocho brazos y pueden cambiar el color de su piel.
p: la Argentina se encuentra en América del Sur
La disposición de las letras que simbolizan las formas proposicionales 9. Vamos en subte o en colectivo.
q: la Argentina se encuentra en el hemisferio sur
puede variar de acuerdo con el diccionario que se haya elegido. 10. Juan es actor.
11. Juan no es famoso. La forma del razonamiento es la siguiente:
12. Juan es actor y no es famoso.
En el apartado 2.1 se presentó el lenguaje de la lógica proposicional simbólica y en el 13. Si llueve, entonces se suspende el partido.
p q
2.2 c mo extraer la forma l gica de las proposiciones. Esta actividad propone aplicar p
14. Si no llueve, riego el pasto.
lo presentado en 2.1 y en 2.2. Para cada una de las siguientes proposiciones:
15. Voy al cine o al teatro.
q
a. Indiquen si es simple o compuesta. En caso de ser compuesta, señalen la conecti-
16. Si tengo tiempo, voy al cine o al teatro.
va principal.
b. Extraigan la forma l gica de la proposici n. Para esto, no olviden primero con- 17. Si un elefante ve un ratón o se asusta, entonces corre. El objetivo de esta actividad es poner en práctica lo visto en el apartado 2.3. Dados
feccionar el diccionario. 18. Inauguran en enero, si terminan la obra a tiempo y consiguen la habilitación. los razonamientos, resuelvan las siguientes consignas:

Los primeros cuatro enunciados se presentan resueltos a modo de ejemplo. 19. Una gura es un cuadrilátero si y solo si sus ángulos interiores suman 360 . a. Escriban el razonamiento encolumnado como se muestra en los ejemplos, identi-
cando cada una de las premisas y la conclusi n.
1. Galileo observó con su telescopio que la luna tenía cráteres. 20. Francia está en Asia o en África.
b. Extraigan la forma l gica del ra onamiento, indicando el diccionario utili ado.
a. Se trata de una proposición simple, ya que no tiene conectivas lógicas. 21. No es cierto que Francia está en Asia o en África.
Los dos primeros enunciados se presentan resueltos a modo de ejemplo.
b. El diccionario para este ejemplo es: 22. Si Newton uni c en una nica teor a los halla gos de Cop rnico, Galileo y Ke-
pler entonces el sol es el centro del sistema solar, la luna tiene cráteres y los planetas 1. Si el sistema ptolemaico es correcto, entonces J piter no tiene sat lites.
p: Galileo observó con su telescopio que la luna tenía cráteres describen órbitas elípticas. J piter tiene sat lites. Por lo tanto, el sistema ptolemaico no es correcto.
Y la forma lógica es: 23. No llueve ni nieva. a. La expresi n “por lo tanto es la que relaciona las premisas y la conclusi n. Las
24. No es cierto que si no sentimos el movimiento de la Tierra, entonces la Tierra oraciones que guran antes expresan las premisas y la que gura despu s expresa la
p
está en reposo. conclusión. Las premisas y conclusión son las siguientes:
2. Kepler inventó el telescopio y propuso que los planetas describen órbitas elípticas.
Si el sistema ptolemaico es correcto,
a. Esta oraci n expresa una proposici n compuesta, ya que es una conjunci n de 2.3. Las formas de los razonamientos entonces J piter no tiene sat lites. Premisa 1
dos proposiciones simples: “Kepler inventó el telescopio” y “Kepler propuso que J piter tiene sat lites. Premisa 2
los planetas describen órbitas elípticas”. Como presentamos en el apartado 1, los razonamientos son conjuntos de pro- El sistema ptolemaico no es correcto. Conclusión
Observen que cada una de estas proposiciones simples puede tener un valor de ver-
posiciones. La extracci n de la forma l gica de los ra onamientos combina
dad independiente de la otra. En este caso, es falso que Kepler inventó el telescopio,
pero es verdad que propuso que los planetas describen órbitas elípticas. tareas presentadas en los apartados 1 y 2. Primero, debemos determinar la b. Para extraer la forma del ra onamiento, en primer lugar, se identi can las proposicio-
nes simples y se elabora un diccionario. En este caso, las proposiciones simples son dos:
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

p: el sistema ptolemaico es correcto la proposición “llueve o hace frío, y no hay nubes”, toma esta forma Se completa la tabla de verdad utili ando las de niciones de las conec-
q: J piter tiene sat lites
proposicional: tivas para analizar, en primer lugar, los paréntesis más internos. A con-
La forma lógica es: tinuación, se presenta a modo de ejemplo la tabla de verdad de la pro-
(p v q) . ~ r
p q posición “(p v q) . ~ r”, detallando su correspondiente procedimiento.
q Mientras que la proposición “llueve, o hace frío y no hay nubes”, toma
Dado que la proposición “(p v q) . ~ r” tiene tres proposiciones simples,
~p esta otra forma:
armamos una tabla de verdad de 8 las y distribuimos los valores de
2. Si Antonio se va de vacaciones, entonces Gerardo trabaja horas extras o el pro- p v (q . ~ r) verdad de las proposiciones simples tal como se mostró en el segundo
yecto se atrasa. Antonio se va de vacaciones pero el proyecto no se atrasa. De modo
que Gerardo trabaja horas extras. Ahora bien, para confeccionar la tabla de verdad de “(p v q) . ~ r”, se paso, es decir, completamos los valores para cada proposición simple
a. La expresi n “de modo que es la que relaciona las premisas y la conclusi n. Las en las primeras columnas y los copiamos para cada una de sus aparicio-
seguirán tres pasos, que mencionamos a continuación.
oraciones que guran antes expresan las premisas y la que gura despu s expresa nes en la proposición compuesta.
la conclusión. Las premisas y conclusión son las siguientes: Primer paso
Si Antonio se va de vacaciones, entonces Se identi ca la cantidad de proposiciones simples que aparecen. En el p q r (p v q) . ~ r
Gerardo trabaja horas extras o el proyecto se atrasa. Premisa 1 ejemplo que se está analizando hay tres: p, q y r. v v v v v v
Antonio se va de vacaciones pero el proyecto f v v f v v
no se atrasa. Premisa 2 v f v v f v

Gerardo trabaja horas extras. Conclusi n Resulta irrelevante si alguna proposición aparece dos o tres veces. La f f v f f v

tarea consiste en identi car esas proposiciones simples o at micas in- v v f v v f


b. En este caso, las proposiciones simples son tres. El diccionario es el siguiente: f v f f v f
dependientemente de su cantidad de apariciones (por ejemplo, en la
v f f v f f
p: Antonio se va de vacaciones proposición “p . ~ p” hay una sola proposición simple: “p”). f f f f f f
q: Gerardo trabaja horas extras
r: el proyecto se atrasa Segundo paso Para determinar el orden en el que completaremos los valores para
Para extraer la forma l gica, recuerden que “pero expresa una
Si hay solo una proposici n, la tabla de verdad tendrá nicamente 2 cada conectiva, analicemos la estructura de la proposición. Se trata de
conjunción. La forma lógica es: las; si aparecen dos proposiciones, tendrá 4 las; si aparecen tres, una conjunción. En este caso, la conjunción conecta una disyunción
tendrá 8; si aparecen cuatro, tendrá 16, y así sucesivamente. La regla –“(p v q)”– y una negación –“~ r”. Para poder resolver la conjunción,
p (q r
p.~r para determinar la cantidad de las necesarias es la siguiente: 2n, don- debemos primero obtener el valor de verdad de cada una de las propo-
q de n es la cantidad de proposiciones simples que aparecen. siciones compuestas que conecta.
Una ve que se haya determinado la cantidad de las de la tabla, se distri- En la tabla de abajo, primero resolvemos la disyunción –“(p v q)”. Ob-
3. Laura es periodista y trabaja en una radio. Por lo tanto, Laura trabaja en una radio.
buyen los valores de verdad tal como se muestra en las tablas más abajo servamos que en la primera la, la casilla marcada con un c rculo co-
4. Guadalupe estudia inglés o francés. No estudia francés. Por lo tanto, Guadalupe
estudia inglés. (el objetivo es encontrar fácilmente todas las combinaciones posibles). rresponde al valor de verdad de “(p v q)” cuando “p” es verdadera y “q”
5. Los murciélagos utilizan la vista o el oído para orientarse. No utilizan la vista. De
es verdadera. Si buscamos en la tabla de verdad de la disyunción in-
modo que utilizan el oído para orientarse. clusiva, veremos que le corresponde verdadero. La disyunción es falsa

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

6. Si la Tierra describiese una órbita alrededor del Sol, entonces debería observarse un A continuación, se presenta la asignación de los valores de verdad a solamente en los casos en los que ambas proposiciones son falsas, que
ligero cambio periódico en la posición de una estrella cualquiera con respecto a la esfera
las proposiciones simples para casos de una, dos y tres proposiciones es el caso de las las 4 y 8 (marcadas con un cuadrado).
estelar. Se observa un ligero cambio periódico en la posición de una estrella cualquiera con
respecto a la esfera estelar. De manera que la Tierra describe una órbita alrededor del Sol. simples, respectivamente:
p q r (p v q) . ~ r
7. Si los caracteres adquiridos son heredables por la descendencia, entonces La- Asignación de valores de verdad para tablas con una sola proposición simple: v v v v v v v
marck tenía razón. Lamarck no tenía razón. De modo que los caracteres adquiridos
f v v f v v v
no son heredables por la descendencia. p v f v v v f v
8. Subieron los precios de los productos agrícolas. Ya que si hay sequía, suben los v f f v f f f v
precios de los productos agrícolas. Y hubo sequía. f v v f v v v f
9. La Tierra no se mueve, pues si la Tierra se moviera entonces los cuerpos serían f v f f v v f
despedidos de la super cie de la Tierra. Pero los cuerpos no son despedidos de la Asignación de valores de verdad para tablas con dos proposiciones simples: v f f v v f f
super cie de la Tierra. f f f f f f f
p q
10. Si no hace frío, entonces dejo las ventanas abiertas. Si dejo las ventanas abiertas,
v v
llega mucho ruido de la calle. Podemos concluir que si no hace frío, entonces llega Esta columna muestra el resultado de la disyunción.
f v
mucho ruido de la calle.
v f
11. Dejo las ventanas abiertas si y solo si no llueve. Llueve, por lo tanto, no dejo las Cuando en una tabla hay muchas conectivas, es importante observar
f f
ventanas abiertas. qué valores de verdad se deben tener en cuenta para cada conectiva.
12. Si París es la capital de España, entonces París está en Europa y está en el he- Algo que se puede hacer para evitar confusiones es ir tachando los va-
misferio norte. París no es la capital de España. Por lo tanto, no es cierto que París Asignación de valores de verdad para tablas con tres proposiciones simples:
lores de las columnas que ya no va a ser necesario consultar. En este
está en Europa y está en el hemisferio norte.
p q r caso, podemos tachar las que consultamos para resolver la disyunción:
v v v
2.4. Tablas de verdad con más de una conectiva f v v p q r (p v q) . ~ r
v f v v v v v v v v
Del mismo modo que podemos averiguar el valor de verdad de la propo- f f v f v v f v v v
v f v v v f v
sición “p . q” cuando “p” es verdadera y “q” es falsa utilizando la tabla de v v f
f v f f f v f f f v
verdad que de ne la conjunci n, tambi n se puede averiguar el valor de
v f f v v f v v v f
verdad de las proposiciones más complejas usando dichas tablas. Será ne- f v f f v v f
f f f
cesario entonces tomar en cuenta la presencia y ubicación de los paréntesis. v f f v v f f
f f f f f f f
Por ejemplo, noten que la proposición “llueve o hace frío, y no hay
Tercer paso
nubes” es distinta a la proposición “llueve, o hace frío y no hay nubes”.
Para completar la tabla se debe respetar la estructura de las proposiciones compuestas. Luego resolvemos la negación de “r”. Recuerden que la negación in-
Al utilizar el siguiente diccionario:
Se comienza, al igual que en matemática, dando prioridad a los parén- vierte el valor de verdad de la proposición. Si “r” es verdadero, “~ r” es
p: llueve falso y viceversa.
tesis, luego a los corchetes y después a las llaves (si los hubiera) y, por
q: hace frío
r: hay nubes ltimo, al resto de la forma proposicional.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

p q r (p v q) . ~ r
1- Cuando para algunas combinaciones de valores de verdad de las propo-
v v v v v v f v p q (p q) . p siciones simples la proposición general resulta verdadera y para otras
v v
f v v f v v f v falsa, se trata de una “contingencia”. Esto ocurre, por ejemplo, con la
v f v v v f f v f v
proposición “(p v q) . ~ r” que analizamos más arriba, en el apartado
f f v f f f f v v f
f f 2.4. En estos casos, no es posible saber su valor de verdad por su forma.
v v f v v v v f
f v f f v v v f
Esto sucede también con la proposición “en Las leñas está nevando”.
2-
v f f v v f v f
p q (p q) . ~ p p: en Las leñas nieva
f f f f f f v f
v v
p
Resultado de “~ r” f v
V
v f
F
Como ya mencionamos, no se pueden obtener los valores de verdad de f f

la conjunción sin antes haber resuelto la disyunción y la negación. Una La tabla de verdad de una proposición simple es siempre una contingencia.
3-
vez que obtuvimos esos resultados, podemos resolver la conjunción.
p q [(p q) . p] q
Para resolver el primer valor de la conjunción, será necesario tener en v v Una tautología es una proposición que es verdadera para todas las
cuenta qu valores de verdad se deben considerar en cada la. Al averi- f v combinaciones posibles de valores de verdad de las proposiciones
guar el valor de la proposici n general en la primera la, marcada con v f simples que contiene.
un círculo en la tabla que sigue, fíjense que las proposiciones que están f f
Una contradicción es una proposición que es falsa para todas las com-
en conjunción son, por un lado, “p v q” y, por el otro, “~r”. El valor de binaciones posibles de valores de verdad de las proposiciones simples
verdad de dichas proposiciones en esa la está señalado con cuadra- 4- que contiene.Una contingencia es una proposición que es verdadera
dos. Para resolver los valores de la conjunción, tomamos entonces los p q [(p q) . ~ p] ~ q para algunas combinaciones posibles de valores de verdad de las pro-
resultados de la disyunción “p v q” y de la negación “~r”. ¿Qué ocurre v v posiciones simples que contiene y falsa para otras.
f v
cuando una de las proposiciones de una conjunción es falsa (en este
v f
caso “~r es falsa) La conjunci n, tambi n, es falsa.
f f
2.6. Prueba de validez de razonamientos por condicional asociado
Como verán, el resultado de la tabla de verdad está en may sculas. Se
encuentra debajo de la conectiva principal de la proposición, es decir, 2.5. Tautología, contradicción y contingencia Como presentamos en el apartado 2.5, las tablas de verdad permiten deter-
aquella que se encuentra fuera de todo paréntesis. minar si una proposición es tautológica, contradictoria o contingente. Por
¿Para qu sirve hacer una tabla de verdad Las tablas de verdad nos per-
esta característica, nos brindan un método para establecer la validez de los
miten determinar el valor de verdad que tendrá una proposición dadas
razonamientos, dado que permiten determinar si el condicional asociado a
todas las combinaciones posibles de valores de verdad de las proposi-
un razonamiento es tautológico, contradictorio o contingente. El condicio-
ciones simples que la componen. En consecuencia, las tablas de ver-
nal asociado de un razonamiento es el condicional que tiene como ante-

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

p q r (p v q) . ~ r dad nos permiten distinguir entre verdades lógicas, falsedades lógicas y cedente la conjunción de las premisas y como consecuente, la conclusión.
v v v v v v F f v proposiciones contingentes. La proposición “en Las Leñas está nevan- A continuación, se presentan algunos ejemplos de formas de razona-
f v v f v v F f v do ¿es verdadera o falsa Para averiguar su valor de verdad hay que mientos y sus condicionales asociados.
v f v v v f F f v buscar la informaci n en el diario o llamar por tel fono a alg n lugar
f f v f f f F f v orma d l ra o- ond c onal asoc ado
y averiguar, es decir, hay que evaluar su valor de verdad en función de namiento
v v f v v v V v f
f v f f v v V v f
lo que sucede en el mundo. Pero, ¿qué pasa con la proposición “en Las p q [( p q p q
p
v f f v v f V v f Leñas está nevando o no está nevando ¿Podr a ser falsa No, y para q
f f f f f f F v f saber esto solo es necesario observar su forma, no necesitamos saber p q [( p q (q r (p r
q r
cómo está el clima en Las Leñas. Veamos qué ocurre si hacemos la tabla
p r
Esta columna muestra el resultado de la de verdad, utilizando el siguiente diccionario: pvq [( p v q ) . p q
conjunción para cada combinación. Representa
el valor de verdad de la proposición general para ~p
cada caso y nos referiremos a ella como el p: está nevando en Las Leñas q
resultado de la tabla de verdad.
p q {[( p q ) . (~ q r)] . p } r
La forma proposicional de este ejemplo es “p v ~ p”. q r Recuerden que para escribir la conjunción de tres premisas, “(A . B)
En términos generales, podemos señalar una serie de pasos para resol- p . C” es equivalente a “A . (B . C)”. Por esta razón, en este ejemplo,
el condicional asociado tambi n se puede expresar as :
ver las tablas de verdad. Primero, debemos resolver: p p v ~ P r {( p q ( q r p } r
v v V f V
las negaciones de proposiciones atómicas (por ejemplo, “~ r”; “~ q”); f f V v F Una vez establecido el condicional asociado se realiza su tabla de ver-
las proposiciones contenidas por los paréntesis más internos (por dad. Si el condicional asociado resulta ser una tautología, entonces el
El resultado de la tabla de verdad (indicado con letras may sculas), en
ejemplo, “(p . q)”; “(p v q)”; “(p q)”). razonamiento es válido. Analicemos por qué. Como presentamos, en la
este caso, es siempre verdadero. Es decir, asuman el valor que asuman las
proposiciones simples, la proposición general siempre será verdadera. A tabla de verdad del condicional, el nico caso en el que es falso es aquel
Después, debemos pasar a las proposiciones contenidas por corchetes y
este tipo de proposiciones se las llama “tautologías” o “verdades lógicas”. en el que el antecedente es verdadero y el consecuente falso. En el con-
luego por llaves, si hubiera.
dicional asociado a un razonamiento, el antecedente es la conjunción
La conectiva principal de una proposici n siempre es la ltima que se de las premisas y el consecuente es la conclusión. Si la tabla de verdad
Cuando todos los resultados son falsos, es decir, si para todas las com-
resuelve. del condicional asociado da por resultado una tautolog a, esto signi ca
binaciones de valores de verdad de las proposiciones simples la pro-
posición general resulta falsa, la proposición es una “contradicción” que el condicional no es falso en ning n caso. O sea que no hay ning n
o “falsedad lógica”. Este es el caso de, por ejemplo, “p . ~ p”. En este caso en esa tabla en el que el antecedente del condicional asociado sea
Las tablas de verdad proporcionan una herramienta que permite determinar si un
ltimo caso, sabemos que la proposici n es falsa por su propia forma. A verdadero y el consecuente falso. Esto quiere decir que no hay ning n
razonamiento es válido o no, como desarrollaremos en los apartados 2.5 y 2.6. La
actividad que se presenta a continuación tiene por objetivo ejercitar la resolución continuación, se muestra la tabla de verdad. caso en el que todas las premisas sean verdaderas y la conclusión falsa.
de tablas de verdad. recuerden que, como explicamos en el apartado 1, esta es precisa-
Para poner en práctica lo visto en el apartado 2.4 y teniendo en cuenta las tablas de p p . ~ p mente una propiedad de los razonamientos válidos. Por eso siempre
verdad de cada una de las conectivas vistas en el apartado 2.1, resuelvan las siguien- v v F f v
tes tablas de verdad: que el condicional asociado sea tautológico, el razonamiento es válido.
f f F v f
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

En cualquier otro caso, es decir, si el condicional asociado es contingente Una vez resuelta la negación, podemos resolver el condicional que está entre parén- a. El condicional asociado a este razonamiento es:
tesis, tomando como valores del antecedente los de p y como valores del consecuen-
o contradictorio, el ra onamiento es inválido. ¿Por qu Porque para que p (q v r (p r } q
te los del resultado de la negaci n, indicados con echas:
haya alg n caso en el que el condicional asociado sea falso, la conjunci n
La tabla de verdad, en este caso, tendrá 8 las, ya que hay 3 proposiciones simples:
de las premisas tiene que ser verdadera (o sea que todas las premisas tie- p q [(p ~ q) . q] ~ p
nen que ser verdaderas) y la conclusión tiene que ser falsa. v v v f f v v v p q r {[p (q v r)] . (p . ~ r)} q
f v f v f v v f v v v v v v v v v
v f v v v f f v f v v f v v f v v
Los cuatro ejemplos que guran en el cuadro anterior son formas de ra o- f f f v v f f f v f v v f v v v f
namientos válidas. Los condicionales asociados son todos tautológicos.
f f v f f v f v f
Valores del consecuente del condicional.
En síntesis, si el condicional asociado a un razonamiento es tautológico, v v f v v f v f v
Resultado del condicional entre paréntesis.
ese razonamiento es válido. En cambio, si el condicional asociado es Valores del antecedente del condicional. f v f f v f f f v
contradictorio o contingente, ese razonamiento es inválido. v f f v f f v f f
Ahora, podemos resolver la conjunción entre corchetes, teniendo en cuenta, en cada
f f f f f f f f f
la, el resultado del condicional y el valor de q, señalados con echas:

Tomen cada una de las formas de razonamiento a las que arribaron en la actividad Para poder resolver el condicional principal, debemos primero resolver el antece-
3 y apliquen el método del condicional asociado para evaluar si son válidas o no. p q [(p ~ q) . q] ~ p dente que se encuentra entre llaves. La conectiva principal es una conjunción, que
A modo de ejemplo, les ofrecemos estas consignas resueltas para los dos primeros v v v f f v f v v conecta al condicional entre corchetes “[p (q v r)]” y la conjunción entre parén-
enunciados de la actividad 3. f v f v f v v v f tesis “(p . ~ r )”. Resolvamos la primera parte de la conjunción. Para poder resolver
v f v v v f f f v el condicional entre corchetes, se debe primero resolver su consecuente: (q v r).
1. Si el sistema ptolemaico es correcto, entonces J piter no tiene sat lites. f f f v v f f f f
J piter tiene sat lites. Por lo tanto, el sistema ptolemaico no es correcto.
Como presentamos en la actividad 3, el razonamiento encolumnado es: El resultado de la conjunción muestra el p q r {[p (q v r)] . (p . ~ r)} q
valor del antecedente del condicional v v v v v v v v v v
Si el sistema ptolemaico es correcto, principal para cada la. f v v f v v v f v v
entonces J piter no tiene sat lites. Premisa 1
v f v v f v v v v f
J piter tiene sat lites. Premisa 2
Con los valores de la conjunción, queda resuelto el antecedente. Para poder resol- f f v f f v v f v f
El sistema ptolemaico no es correcto. Conclusión ver el condicional principal, falta resolver la negación del consecuente:
v v f v v v f v f v

f v f f v v f f f v
Diccionario: p q [(p ~ q) . q] ~ p
v f f v f f f v f f
v v v f f v f v f v
p: el sistema ptolemaico es correcto f v f v f v v v v f
f f f f f f f f f f
q: J piter tiene sat lites Resolvemos la disyunción, teniendo
v f v v v f f f f v
en cuenta los valores de q y r.
f f f v v f f f v f
Forma lógica:
p q Invertimos el valor de verdad de p para cada la.
q
~p

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

a.El condicional asociado a este razonamiento es: Por ltimo, resolvemos el condicional principal, tomando como valor del anteceden- Una vez resuelta la disyunción entre paréntesis, se puede resolver el condicional
[(p q q p te el resultado del corchete y como valor del consecuente el resultado de “~ p”: entre corchetes. Los valores del antecedente son los de “p” y los del consecuente,
los del resultado de la disyunci n, indicados con echas:
Antecedente: conjunción Consecuente: conclusión p q [(p ~ q) . q] ~ p
de las premisas v v v f f v f v V f v
f v f v f v v v V v f p q r {[p (q v r)] . (p . ~ r)} q
La tabla de verdad de este condicional tendrá 4 las, ya que hay dos proposiciones simples:
v f v v v f f f V f v v v v v v v v v v v v
p q [(p ~ q) . q] ~ p f f f v v f f f V v f f v v f v v v v f v v
v v v v v v Valores del antecedente del condicional principal. v f v v v f v v v v f
f v f v v f El resultado de la tabla muestra que el condicional es verdadero f f v f v f v v f v f
para todos los casos. Se trata de una tautología.
v f v f f v v v f v v v v f v f v
Valores del consecuente del condicional principal.
f f f f f f f v f f v v v f f f v
Esta forma de razonamiento es válida, ya que su tabla de verdad muestra una tautología. v f f v f f f f v f f
Para poder resolver el condicional, primero debemos resolver el antecedente y el
f f f f v f f f f f f
consecuente. En el antecedente la conectiva principal es una conjunción, que co- 2. Si Antonio se va de vacaciones, entonces Gerardo trabaja horas extras o el proyecto se
necta al condicional entre paréntesis y a “q”. Entonces, para poder resolver el an- atrasa. Antonio se va de vacaciones pero el proyecto no se atrasa. De modo que Gerardo
tecedente, primero debemos resolver el condicional que está entre paréntesis. Este trabaja horas extras.
Como presentamos en la actividad 3, este razonamiento encolumnado quedaría: Para resolver la otra parte de la conjunción “(p . ~ r )”, debemos primero resolver
condicional, tiene en su consecuente una negación.
la negación de r:
Si Antonio se va de vacaciones,
De modo que lo primero que vamos a resolver es esa negación:
entonces Gerardo trabaja horas extras p q r {[p (q v r)] . (p . ~ r)} q
o el proyecto se atrasa. Premisa 1 v v v v v v v v v f v v
p q [(p ~ q) . q] ~ p
Antonio se va de vacaciones pero f v v f v v v v f f v v
v v v f v v v
el proyecto no se atrasa. Premisa 2 v f v v v f v v v f v f
f v f f v v f
f f v f v f v v f f v f
v f v v f f v Gerardo trabaja horas extras. Conclusi n
v v f v v v v f v v f v
f f f v f f f
Diccionario: f v f f v v v f f v f v
Invertimos el valor de verdad de q en cada la. p: Antonio se va de vacaciones v f f v f f f f v v f f
q: Gerardo trabaja horas extras f f f f v f f f f v f f
Cada vez que resolvemos una conectiva, podemos ir tachando los valores de las r: el proyecto se atrasa
columnas que ya no va a ser necesario consultar. En este caso:
Forma lógica:
p q [(p ~ q) . q] ~ p p (q v r) Una vez resuelta esa negación, se puede resolver la conjunción del paréntesis, to-
v v v f v v v p.~r mando los valores de “p” y los del resultado de la negación:
f v f f v v f
v f v v f f v q
f f f v f f f
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

3.1.1. Modus ponens Si reemplazamos en esta forma cada letra por una proposición simple, sería:
La forma de este razonamiento es: p q
p q r {[p (q v r)] . (p . ~ r)} q A B ~q
v v v v v v v v v f f v v A
f v v f v v v v f f f v v ~p
v f v v v f v v v f f v f B
f f v f v f v v f f f v f Al escribir esta forma, empleamos letras de imprenta may scula (A, B, Con el diccionario:
v v f v v v v f v v v f v
etc.), en lugar de las letras que usamos para nombrar a las proposiciones p: le cortan la cabeza
f v f f v v v f f f v f v
simples (p, q, r, etc.). Como presentamos en el apartado 2, las letras pro- q: se muere
v f f v f f f f v v v f f
f f f f v f f f f f v f f
posicionales se utilizan para nombrar proposiciones simples. Las letras
de imprenta may scula, en cambio, pueden representar proposiciones el razonamiento sería:
Ahora, podemos resolver la conjunción entre llaves, tomando el resultado del condi- tanto simples como compuestas. Si le cortan la cabeza, se muere.
cional entre corchetes y el resultado de la conjunción entre paréntesis:
Por ejemplo, podemos reempla ar cada una de las letras de imprenta may s- No está muerto,
cula de la forma de razonamiento presentada por una proposición simple: por lo tanto, no le cortaron la cabeza.
p q r {[p (q v r)] . (p . ~ r)} q
p q A continuación, se presentan otros ejemplos de razonamientos con esta forma:
v v v v v v v v f v f f v v
f v v f v v v v f f f f v v
p
p q
v f v v v f v v f v f f v f
q ~q
f f v f v f v v f f f f v f
v v f v v v v f v v v v f v Si tomamos el siguiente diccionario: ~~p Observen que las negaciones se pueden acumular
f v f f v v v f f f f v f v
v f f v f f f f f v v v f f p: le cortan la cabeza ~p q
f f f f v f f f f f f v f f q: se muere ~q
el razonamiento sería: P La doble negaci n se puede simpli car, por lo que esta forma tambi n
Por ltimo, resolvemos el condicional principal, tomando como valores del antece- es un Modus tollens.
dente los del resultado de la conjunción entre llaves y como valores del consecuente Si le cortan la cabeza se muere.
los valores de “q”. Le cortan la cabeza, (p q ( r v s)
por lo tanto, se muere. ~(r v s)
~(p.q)
Otros ejemplos de razonamientos con esta forma, en los que A y B se
reemplazan por proposiciones compuestas son: En todos los casos de Modus tollens, en una premisa se presenta una
proposición condicional, en la otra premisa se niega el consecuente de
ese condicional y en la conclusión se niega su antecedente.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

p q r {[p (q v r)] . (p . ~ r)} q p q


~p En el apartado 3.1 se presentaron dos formas de razonamiento válidas: el Modus
v v v v v v v v f v f f v V v
ponens y el Modus tollens. Demuestren su validez por medio del método del con-
f v v f v v v v f f f f v V v
~q dicional asociado.
v f v v v f v v f v f f v V f
f f v f v f v v f f f f v V f
(p q r
v v f v v v v f v v v v f V v 3.2. Falacias formales
(p.q)
f v f f v v v f f f f v f V v Hay in nitas formas de ra onamiento válidas e in nitas formas de ra-
v f f v f f f f f v v v f V f r zonamiento inválidas. En algunos casos, la invalidez de un razonamien-
f f f f v f f f f f f v f V f
to resulta evidente simplemente al leerlo o escucharlo. Por ejemplo,
p
Valores del antecedente resulta evidente que “Enero tiene 31 días. Por lo tanto, los protozoos
del condicional principal.
p (q v r )
El condicional principal es verdadero en todos los casos.
son organismos unicelulares” es un razonamiento inválido. Teniendo en
Se trata de una tautología.
(q v r ) cuenta el siguiente diccionario:
Valores del consecuente
del condicional principal. Todos estos ejemplos tienen la forma del Modus ponens. En todos ellos p: enero tiene 31 días
en una de las premisas se presenta un condicional, en la otra premisa se q: los protozoos son organismos unicelulares
El razonamiento es válido, ya que su condicional asociado es tautológico.
Ahora, resuelvan la consigna para las formas de razonamientos obtenidas en la Ac- a rma el antecedente de ese condicional y en la conclusi n se a rma su
La forma de este razonamiento es: p
tividad 3, teniendo en cuenta estos dos ejemplos. consecuente. Cabe aclarar que no es necesario que la primera premisa
q
sea condicional, sino que el condicional puede aparecer en la segunda
3. Algunas formas de razonamiento importantes premisa (como en el tercer ejemplo). El orden de las premisas no resulta
Esta forma no resulta engañosa, no hay nada que sugiera que la propo-
Algunas formas de razonamiento válidas y algunas inválidas son uti- relevante, siempre y cuando una sea un condicional y la otra a rme su
sición simple q se sigue de la proposición simple p. Si realizan la tabla
lizadas con tanta frecuencia que se les ha dado un nombre. No son las antecedente. Se pueden armar in nitos ejemplos de ra onamientos con
de verdad, verán que se trata de una contingencia. Este razonamiento es
nicas formas válidas e inválidas, ya que existen in nitas formas de esta forma, reemplazando el antecedente y el consecuente del condicio-
inválido, es decir que es no deductivo.
ra onamiento, ni tampoco son las nicas que tienen nombre, pero estas, nal por proposiciones distintas, repitiendo el antecedente en la segunda
por diferentes motivos (que veremos más adelante, en el capítulo III) premisa y el consecuente en la conclusión.
Si bien en este capítulo no nos ocupamos de los criterios de corrección
son muy tiles, y es necesario nombrarlas para poder hacer referencia de los razonamientos no deductivos, podemos observar, intuitivamen-
a ellas fácilmente. 3.1.2. Modus tollens te, que este caso no es correcto. Resulta evidente que el hecho de que
El Modus tollens es otra forma de razonamiento válida. La forma es la enero tenga 31 días no ofrece razones para concluir que los protozoos
3.1. Modus ponens y Modus tollens siguiente: son organismos unicelulares, es decir, la premisa no aporta información
A continuación, presentamos dos formas de razonamiento válidas muy A B pertinente para extraer la conclusi n pretendida.
comunes: el Modus ponens y el Modus tollens. ~B

~A
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

Hay algunos casos de razonamientos que, a diferencia de este ejemplo, A B 3.


(p v q r
resultan engañosos, puesto que, o bien parecen deductivos, a pesar de B
(p v q)
ser inválidos, o bien parecen correctos a pesar de no serlo. A este tipo
A r
de ra onamientos se los llama falacias. Las falacias se pueden clasi car
4.
en dos grupos, de acuerdo con la característica que las hace persuasivas. Reemplazamos las letras de esta forma de razonamiento por proposicio- (p q r r
En este sentido, se llama falacias formales a aquellos razonamientos nes simples y el razonamiento tiene la siguiente forma: r
que, por su forma lógica, parecen válidos, pero son inválidos; y falacias (p q r
p q
no formales a los razonamientos no deductivos que por su contenido re-
q 5.
sultan engañosos y parecen correctos, pero no lo son, ya sea por un uso
(p < > q (p q
ambiguo de los términos en el razonamiento o por la presentación de p
~ (p . q)
premisas que no resultan pertinentes para la conclusión que se preten-
Con el diccionario: ~ (p < > q)
de establecer. En este libro nos ocuparemos nicamente de las falacias
formales, en particular de la falacia de negación del antecedente y la p: le cortan la cabeza 6.
falacia de a rmaci n del consecuente, que se presentan a continuaci n. q: se muere p.r
(p r q
el razonamiento sería:
3.2.1. Falacia de negación del antecedente q

La forma de este razonamiento es la siguiente: Si le cortan la cabeza, se muere.


7.
A B Está muerto,
(p q vr
~A por lo tanto, le cortaron la cabeza. (p q vr (p v r)

~B Este razonamiento puede parecer válido, pero su conclusión no está ga- ~ (p v r)


ranti ada por sus premisas. Claramente, podr a estar muerto por alg n
Con el diccionario otro motivo. A continuación, se presentan ejemplos de razonamientos
p: le cortan la cabeza con esta forma: 3.3. Un ejemplo de uso de Modus tollens y falac a de a rma-
q: se muere ción del consecuente
~p q (p q r
el razonamiento sería: ~q r El uso de las cuatro formas de razonamiento presentadas en los aparta-
Si le cortan la cabeza, se muere. ~p (p . q) dos 3.1 y 3.2 es muy frecuente. En el capítulo III: Conceptos, hipótesis
No le cortaron la cabeza, y contrastación, veremos su función en la puesta a prueba de hipótesis
En todos los casos de razonamientos con esta forma, en una de las pre- cient cas y, en este apartado, presentaremos un ejemplo cotidiano en
por lo tanto, no está muerto.
misas se presenta un condicional, en la otra premisa se a rma el conse- el que podríamos aplicar algunas de estas formas de razonamiento para
Antes de llevar a cabo un análisis de su forma, este razonamiento puede cuente de ese condicional y, en la conclusi n, se a rma su antecedente. encontrar la causa de un problema.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

parecer válido, pero no lo es. Nótese que podría estar muerto por otros Supongamos que en una casa a la noche, se corta la luz. En esa situa-
motivos, que a alguien no le hayan cortado la cabeza no quiere decir En el apartado 3.2 se presentaron dos formas de razonamiento inválidas: la falacia ción, probablemente primero se nos ocurra intentar establecer si se trata
de negaci n del antecedente y la falacia de a rmaci n del consecuente. Demuestren
que esté vivo. su invalidez por medio del método del condicional asociado. de un problema en la casa o de un corte generalizado. Es decir, inmedia-
tamente se nos ocurren dos explicaciones posibles para el corte de lu :
La forma es la siguiente:

p q El Modus ponens, el Modus tollens, la falacia de negación del antecedente y la hay un problema con la electricidad en la casa;
~p falacia de a rmaci n del consecuente no son las nicas formas de ra onamiento hay un problema con la electricidad en la zona.
con nombre, pero su uso es muy com n y reconocerlas resulta de utilidad. Pues-
~q to que el Modus ponens y el Modus tollens son formas de razonamiento válidas,
cualquier razonamiento que tenga alguna de esas dos formas será válido. Así, se Fácilmente podemos poner a prueba la segunda opción. Simplemente,
Otros ejemplos con esta forma son: puede conocer la validez de un razonamiento que tiene la forma del Modus ponens miramos por la ventana o salimos a la calle. Si vemos luces encendidas
o el Modus tollens, sin necesidad de recurrir al método del condicional asociado o
(en las casas vecinas, en los semáforos o en las esquinas), entonces no
p q a otros m todos formales. De la misma manera, se puede a rmar la invalide de un
ra onamiento que tenga la forma de la falacia de a rmaci n del consecuente o de se trata de un problema con la electricidad de la ona. ¿Por qu Porque
~~p negación del antecedente. si hubiera un problema en la zona, los semáforos deberían estar fuera
~q Indiquen si las siguientes formas de razonamiento corresponden a Modus ponens, de funcionamiento, las luces de la cuadra apagadas, etc. Supongamos
Modus tollens, falacia de a rmaci n del consecuente, falacia de negaci n del ante- que miramos por la ventana y vemos luces encendidas y los semáforos
cedente o a ninguna de las cuatro formas presentadas. En caso de que corresponda a
p q funcionando. Podemos concluir, entonces, que no hay un problema con
alguna de las cuatro, indiquen si se trata de una forma válida o inválida. Los prime-
p ros dos enunciados se ofrecen resueltos a modo de ejemplo. la electricidad de la zona. Un modo de formular el razonamiento que
1. nos permite llegar a esta conclusión es el siguiente:
~q (p q r
~r
Si hay un problema con la electricidad en la zona, entonces las
(p q (r v s) ~ (p . q) luces de la cuadra están apagadas.
~(p.q) La forma de razonamiento corresponde al Modus tollens: una premisa es un con- Las luces de la cuadra no están apagadas.
dicional, la otra premisa es la negación del consecuente de ese condicional y la
~(rvs) conclusión es la negación de su antecedente. Esta forma es válida. No hay un problema con la electricidad en la zona.
En todos estos casos, en una premisa se presenta una proposición con- 2. Con el siguiente diccionario:
dicional, en la otra premisa se niega el antecedente de ese condicional (p q v (r s t
(p q v (r s p: hay un problema con la electricidad en la zona
y, en la conclusión, se niega su consecuente.
~t q: las luces de la cuadra están apagadas
3 2 2 alac a de a rmac n del consecuente Esta forma de razonamiento corresponde a la falacia de negación del antecedente:
Este razonamiento falaz tiene la siguiente forma: una premisa es un condicional, la otra premisa niega el antecedente de ese condicio-
nal y la conclusión niega su consecuente. Esta forma es inválida.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

la forma del razonamiento es: que atribuía a un cortocircuito en el televisor la causa del corte de luz. En los razonamientos no deductivos, en cambio, la verdad de las premi-
p q Nos queda entonces probar si la heladera fue la causante del corte de sas no garantiza la verdad de la conclusión, es decir que aunque tengan
~q luz. Hacemos otra prueba: desenchufamos el televisor, enchufamos la premisas verdaderas la conclusi n puede ser falsa. Entre estos ltimos se
heladera y vemos qué pasa. Supongamos que en este caso sí salta la encuentran los razonamientos inductivos, que permiten inferir con cierta
~p
llave térmica. Pensamos, entonces, que encontramos el desperfecto probabilidad la conclusión, pero no garantizan su verdad. Así como hay
Esta forma corresponde al Modus tollens, de modo que sabemos que es eléctrico de la casa. Sin embargo, al analizar la forma lógica del razo- distintos tipos de razonamientos, también hay distintos tipos de lógicas y
válida. As , este ra onamiento nos permite descartar una de las explica- namiento, veremos que esta conclusión es apresurada. trabajamos con una de ellas en particular: la lógica proposicional simbóli-
ciones. Dado que hay luces encendidas en la cuadra, no se trata de un ca. Puesto que la validez de los razonamientos depende de su forma lógica,
El razonamiento es:
problema con la electricidad en la zona. explicamos c mo extraer la forma l gica, en primer lugar, de las propo-
Si la heladera está en cortocircuito y la enchufamos, entonces siciones y, en segundo lugar, de los razonamientos. Para esto trabajamos
Una vez descartado que el corte de luz se deba a un problema con la
salta la llave térmica. con un lenguaje arti cial y presentamos las principales conectivas l gicas.
electricidad en la zona, probablemente iremos a ver el tablero eléctrico
Salta la llave térmica.
de la casa, para ver si saltaron el disyuntor o la llave térmica. Suponga-
También, vimos un método para determinar la validez de una forma de
mos que nos encontramos con que saltó la llave térmica. En ese caso, La heladera está en cortocircuito y la enchufamos.
razonamiento: el método del condicional asociado. El condicional aso-
se nos podr a ocurrir como explicaci n que alguno de los artefactos Con el diccionario: ciado a un razonamiento es, como su nombre lo indica, una proposición
enchufados en ese momento esté en cortocircuito, provocando que salte
condicional que tiene como antecedente la conjunción de las premisas
la llave térmica. Lo que podríamos hacer entonces es desenchufar todos p: la heladera está en cortocircuito
del razonamiento y como consecuente, la conclusión. Al confeccionar
los artefactos que estén conectados e ir probando enchufar y encender q: enchufamos la heladera
una tabla de verdad para el condicional asociado, podemos determinar
uno a uno para intentar establecer si alguno de ellos se encuentra en cor- r: salta la llave térmica
si el razonamiento es válido o no: si el resultado es una tautología, el
tocircuito. Para simpli car un poco el ejemplo, vamos a considerar que razonamiento es válido; en cambio, si el resultado es una contradicción
la forma del razonamiento es:
en ese momento en la casa solo estaban enchufados una heladera y un
o una contingencia, el razonamiento es inválido.
televisor. Entonces, empecemos por el televisor. Pensamos lo siguiente: (p q r
si el televisor está en cortocircuito y lo enchufamos, entonces saltará la r
Por ltimo, presentamos algunas formas válidas de ra onamiento de
llave térmica. Hacemos la prueba y la llave térmica no salta. Podemos (p . q) uso frecuente, el Modus ponens y el Modus tollens, y dos falacias for-
concluir luego, que el televisor no está en cortocircuito. males, la falacia de a rmaci n del consecuente y la falacia de negaci n
Este ra onamiento tiene la forma de la falacia de a rmaci n del con-
El razonamiento sería más o menos así: del antecedente, que parecen válidas a simple vista, pero son formas de
secuente y, por lo tanto, es inválido. Entonces, ¿podemos a rmar la
razonamiento inválidas.
Si el televisor está en cortocircuito y lo enchufamos, entonces verdad de su conclusi n No. Repasemos la forma de esta falacia. Una
salta la llave térmica. premisa es un condicional, otra premisa a rma el consecuente del con- En el capítulo III: Conceptos, hipótesis y contrastación, estas herramien-
No salta la llave térmica. dicional y la conclusi n a rma su antecedente. Por más que el conse- tas servirán para realizar y analizar una reconstrucción lógica de la puesta
cuente del condicional sea verdadero, esto no nos permite a rmar que a prueba de las hip tesis cient cas.
No es cierto que el televisor esté en cortocircuito y lo enchufamos.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

La conclusión que este razonamiento nos permite establecer no es di- su antecedente es verdadero. Pensemos que en este ejemplo, la llave Para ampliar
rectamente que el televisor no está en cortocircuito. Veamos por qué térmica puede haber saltado por otros motivos. Podría haber sucedido,
copi, iRvinG (1972), Introducción a la Lógica, Buenos Aires, Eudeba.
analizando la forma lógica de este razonamiento y, después, cómo ha- por ejemplo, que el momento en el que enchufamos la heladera coin-
Hay m ltiples ediciones. Les recomendamos el cap tulo 1 para profun-
cemos para concluir a partir de aquí, que el televisor no es el causante cidiera con una suba de tensión (debida a causas ajenas a la casa) que
dizar en las nociones de razonamiento y validez y el capítulo 8 para
del cortocircuito. provocó el salto de la llave térmica.
lógica proposicional simbólica.
Con el diccionario: ¿Esto signi ca que no podemos extraer ninguna conclusi n a partir de díez, joSé (2002), Iniciación a la Lógica, Barcelona, Ariel.
las pruebas que hicimos en este caso No exactamente. Si al dejar la l.T.f. GamuT (2002), Introducción a la Lógica, Buenos Aires, Eudeba.
p: el televisor está en cortocircuito
heladera desenchufada, la luz no se vuelve a cortar, y al enchufarla se Les aconsejamos el capítulo 2, de lógica proposicional.
q: enchufamos el televisor
corta nuevamente, podemos pensar que es muy probable que la helade-
r: salta la llave térmica
ra esté en cortocircuito. Es decir que podemos llegar a esta conclusión
la forma lógica del razonamiento sería: recurriendo a un razonamiento no deductivo. Lo que resultaría erró-
neo es considerar a esta conclusión garantizada deductivamente. Como
(p q r
veremos, la forma en que testeamos hipótesis en la vida cotidiana es
~r
análoga al modo en que los cient cos testean hip tesis en sus prácticas
~ (p . q) habituales. En el capítulo III, veremos en detalle todos los elementos
de la puesta a prueba de hip tesis cient cas, as como los desaf os que
Este razonamiento, al igual que el anterior, tiene la forma del Modus
genera su estructura lógica. Como presentamos con este ejemplo, uno
tollens, de modo que es válido. Dados un condicional y la negación de
de los problemas de la puesta a prueba es que, por la forma lógica, po-
su consecuente (premisas 1 y 2), podemos concluir la negación de su
demos probar la falsedad de determinadas hipótesis, pero no demostrar
antecedente. En este caso, en el antecedente teníamos una conjunción,
su verdad. En los capítulos III y IV veremos las respuestas de distintos
“enchufamos el televisor y el televisor está en cortocircuito”, por eso,
l sofos de la ciencia a esta cuesti n.
esta forma nos permite concluir la negación de esa conjunción.

Hasta aquí establecimos, por medio de un razonamiento válido, que Síntesis del capítulo
no es cierto que el televisor está en cortocircuito y lo enchufamos. Re-
cordemos que una conjunción es falsa en caso de que alguna de sus En este capítulo nos ocupamos de algunas nociones y herramientas de
partes o las dos sean falsas. Es decir que por lo menos alguna de las lógica. Vimos que un razonamiento es un conjunto de proposiciones, en
dos partes de esta conjunción debe ser falsa. Puesto que en este caso el cual se pretende que una de ellas –la conclusión– se siga del resto –las
estamos asumiendo que efectivamente enchufamos el televisor, pode- premisas– y que, dependiendo de si son válidos o no, los razonamientos
mos asumir que la parte falsa de esta conjunción es “el televisor causa pueden ser deductivos o no deductivos, respectivamente. Los razona-
un cortocircuito y, en consecuencia, podemos descartar la explicaci n mientos deductivos transmiten la verdad de las premisas a la conclusión,
es decir que si sus premisas son verdaderas su conclusión también lo es.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

contrastación. Este tema lo estudiaremos bajo el nombre de “holismo En muchos casos en ciencia, se utili an conceptos clasi catorios intro-
de la contrastación”, y con él cerraremos esta serie de problemas que se ducidos mediante lo que se conoce t cnicamente como una “clasi ca-
evidencian cuando hacemos un análisis lógico de la puesta a prueba de ci n . Una clasi caci n de un ámbito de objetos establece conjuntos
Capítulo III las hip tesis cient cas. a partir de los objetos de ese ámbito de modo que ninguno de esos
conjuntos sea vac o, ning n objeto de ese dominio pertene ca a más de
1. Tipología de conceptos uno de esos conjuntos y todo objeto del dominio pertenezca a alguno
Dentro del lenguaje utilizado en la ciencia, es posible encontrar tres tipos de los conjuntos. Esto es lo que en teoría de conjuntos es llamado “esta-
Por Mariela N. Destéfano
de términos: los que provienen del lenguaje natural y son empleados se- blecer una partición” en cierto dominio de objetos. En algunos casos, se
g n el sentido com n (por ejemplo, “verde , “mesa , “caliente ), los que establecen jerarqu as taxon micas, clasi caciones que se enla an entre
Introducción proceden de las ciencias formales (como los que nombran a los n meros sí formando jerarquías de clases de distinto nivel de generalidad, como
naturales, o los propios de la geometría) y se usan en un sentido técnico, ocurre en el caso de la clasi caci n de los animales vivos en la que se
En el capítulo II: Nociones básicas de lógica, hemos conocido las he-
y aquellos que, aunque a veces provienen del lenguaje natural (como ocu- ordenan en especies, géneros, familias, órdenes, etc.
rramientas de la lógica proposicional, las cuales comenzaremos a uti-
lizar para abordar uno de los temas fundamentales que se ha tratado en rre en el caso de “fuerza”), fueron propuestos en el seno de teorías cientí-
cas y adquieren su signi cado en este marco te rico, es decir, expresan Frente a cierto ámbito de objetos es posible realizar numerosas cla-
la Filosofía de la ciencia: la contrastación de hipótesis. En un sentido
un concepto distinto al que poseen en el lenguaje natural. si caciones distintas. En de nitiva, cuál elijamos dependerá de cuán
general, una hip tesis es una idea que tiene un cient co respecto de
fruct fera sea tal clasi caci n a la hora de explicar y predecir el com-
determinado aspecto en el mundo. Pero la tarea del cient co no con-
No nos interesa hablar de t rminos, sino de los conceptos que expre- portamiento de los objetos de ese ámbito. Distintas teorías con respecto
siste solamente en proponer hipótesis sino que consiste, por sobre todas
san. Dos t rminos distintos pueden expresar un mismo concepto, por a esos objetos usan, frecuentemente, aunque no necesariamente, dis-
las cosas, en “poner a prueba” o, lo que es lo mismo, “contrastar” esas
ejemplo, dos términos en distinto idioma, como “lluvia” y “rain”. A ve- tintas clasi caciones de objetos. As , dentro de la f sica aristot lica era
hipótesis, es decir, evaluar si esas hipótesis pueden ser aceptadas o, en
ces, una palabra puede expresar conceptos diferentes, como ocurre con esencial la clasi caci n de objetos en supralunares y sublunares, los
su defecto, han de ser rechazadas.
“banco”. Qué cosa sea un concepto es una cuestión fuertemente dis- que estaban más acá y más allá de la órbita de la luna, pues estos tenían
cutida en la losof a desde sus or genes. No nos adentraremos en ello. comportamientos absolutamente distintos. Con el abandono de la física
Las hip tesis, en tanto ideas que tienen los cient cos acerca del mun-
aristot lica, esta clasi caci n fue abandonada.
do, están expresadas en enunciados los cuales, a su ve , están cons-
tituidos por conceptos. Por esta razón, antes de estudiar de lleno en Tambi n hay que distinguir el concepto de su referencia o su extensi n.
La referencia o extensi n de un concepto es el conjunto de entidades a Actualmente, existen discusiones muy fuertes en el área de la losof a
qu consiste una hip tesis cient ca y las particularidades que tiene su
las que se aplica. Así, bajo el concepto de seres humanos se incluyen de la biología (pero es una discusión que también se da al interior mis-
contrastación, tendremos que comenzar haciendo algunas distincio-
distintos individuos: Sócrates, Franz Kafka, Charly García, etc. La ra- mo de la biolog a) acerca de cuál sea la clasi caci n de los organismos
nes respecto de los diferentes conceptos que aparecen en el lenguaje
n por la cual no hay que confundir el concepto con su extensi n con- vivos más adecuada.
t cnico de los cient cos y, tambi n, respecto de los distintos tipos de
enunciados que estos manejan. siste en que, en muchos casos, puede ocurrir que dos conceptos distin-
tos tengan la misma extensi n. Por ejemplo, el concepto expresado por
la expresi n “Presidentes peronistas de la Argentina de 2003 a 2015 y

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot.

Solo una vez que hemos comprendido las tipologías de conceptos y enun- el concepto de “Presidentes de la Argentina de 2003 a 2015” coinciden 1.2. Conceptos comparativos
ciados cient cos, estaremos listos para embarcarnos en el análisis l gico en extensi n aunque sean distintos (uno es más general que el otro).
Estos conceptos, más complejos que los cualitativos, permiten estable-
de la contrastación de hipótesis. Veremos que en la puesta a prueba, no Dos expresiones pueden no ser sin nimas y, sin embargo, aplicarse a
cer un orden de más y de menos en cierto dominio. El conjunto que
solamente puede identi carse el enunciado que expresa la hip tesis que las mismas cosas. Es decir, dos t rminos pueden ser coextensivos y no
determina un concepto cualitativo no tiene estructura alguna. Los con-
se pretende evaluar, sino que también intervienen una serie de elementos expresar el mismo concepto.
ceptos comparativos, en cambio, permiten ordenar el ámbito de objetos
subsidiarios como: las condiciones iniciales, las hip tesis auxiliares, las
al que se aplican, y no solo clasi carlo. Son conceptos comparativos,
cláusulas ceteris paribus, además de las consecuencias observacionales. Cuando queremos mencionar una palabra y no de aquello a lo que se re-
entre otros: más alto, más bajo, más viejo, más joven, más abajo, más
El objetivo de esta parte del presente capítulo es entrenarnos para, por un ere, se utili an comillas. As , si queremos decir que la palabra perro no
arriba, más duro, más claro, etc.
lado, reconocer los enunciados que expresan estos elementos que acom- lleva acento, entrecomillamos “perro”: “Perro” no lleva acento. Cuando
pañan a la hipótesis principal y, por el otro, entender las relaciones lógi- queremos decir algo del concepto, por ejemplo, que el concepto de perro
Si uno aplica, por ejemplo, el concepto de más alto a un grupo de per-
cas que entablan estos enunciados entre sí. es cualitativo, entonces lo aclararemos: El concepto de perro es cualitati-
sonas, estas quedarán ordenadas de mayor a menor altura. En biología
vo. Cuando queremos hablar del perro, simplemente: El perro tiene rabia.
evolutiva, se suele hablar de “ xito reproductivo diferencial . Este con-
También, estudiaremos la reconstrucción lógica que puede hacerse de la
cepto se determina, a veces, a través de la cantidad de descendencia
situación en la que la hipótesis evaluada resulta ser rechazada o, desde Todo esto puede parecer algo confuso al comienzo, pero estas distincio-
que tienen los organismos en una poblaci n. As , el que mayor xito
un vocabulario más técnico, resulta ser “refutada” o “falsada”. En este nes son tiles a la hora de hablar del lenguaje de la ciencia. Entonces,
reproductivo experiment es el que más descendencia dej , y el de me-
caso, pensar amos que el cient co tiene que abandonar la hip tesis, pero un t rmino expresa un concepto. Se dice entonces que el concepto de-
nor xito, fue el que menos descendencia tuvo. Este ser a un ejemplo
notaremos que en los casos de refutación, todavía tiene la posibilidad termina la referencia o la extensi n del concepto, que es el conjunto de
de concepto comparativo. Establece un orden entre los individuos de
de hacer uso de “hipótesis ad hoc” para salvar a la hipótesis que no ha las cosas que abarca ese concepto.
la poblaci n que va del que más al que menos xito reproductivo tuvo.
superado la instancia de puesta a prueba. La reconstrucción lógica de la
situación de aceptación de una hipótesis será estudiada con detenimiento. Podemos ahora hacer una tipolog a de conceptos (t cnico-cient cos)
Pues, veremos que en estos casos es difícil sostener que la hipótesis en pero que también se aplica a conceptos del lenguaje natural. Entre estos 1 3 Conce tos cuant tat vos (o m tr cos
cuesti n fue “veri cada . En esta situaci n, los l sofos se dividen entre pueden distinguirse: conceptos cualitativos (o clasi catorios), compa- Estos conceptos asignan n meros, pero no para representar un mero
aquellos que consideran que la hip tesis fue “con rmada y aquellos que rativos y cuantitativos (o métricos). orden, sino para representar ciertas propiedades espec cas de los ob-
consideran que la hipótesis fue “corroborada”. Tendremos como objetivo jetos, denominadas “magnitudes”. Dicha asignación permite el uso de
estudiar las diferencias y algunos problemas que plantean las nociones de 1 1 Conce tos cual tat vos (o clas cator os operaciones matemáticas de un modo emp ricamente signi cativo. Son
“veri caci n , “con rmaci n y “corroboraci n . ejemplos de conceptos cuantitativos: longitud, tiempo, precio, tempe-
Clasi car es la forma más sencilla de subsumir objetos a un concepto.
ratura, etc. Los conceptos cualitativos son funciones que a determinado
Más allá de sus diferencias, tanto en la situación en que la hipótesis es La extensi n de un concepto clasi catorio es un conjunto simple. As ,
objeto le asignan un valor numérico.
rechazada, como en la situación en que es aceptada, surge un proble- son conceptos clasi catorios: perro, humano, mesa, rojo, pa s, árbol. Un
ma com n que se relaciona con la imposibilidad l gica de señalar cuál objeto es o no un árbol, es o no un país. Un concepto cualitativo se aplica ¿Qué significa “realizar operaciones matemáticas de un modo
fue el elemento concreto que nos ha llevado al xito o al fracaso de la o no a cierto objeto. Si se aplica, este objeto forma parte de su extensi n. emp ricamente significativo
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

Supongamos que establecemos un orden entre un grupo de diez perso- clásica (la teor a de Newton) trata de predecir o explicar los movimien- Es importante resaltar que enunciados que tienen una forma lógica gene-
nas a través del concepto comparativo “ser más alto que”. Supongamos tos de las partículas, como planetas que se mueven en el espacio u ob- ral son en realidad singulares en el sentido expuesto, por ejemplo, “Todos
que una ve establecido este orden, repartimos n meros entre esas per- jetos que caen en la super cie terrestre. Para explicar estos fen menos los presidentes de la Argentina hasta el momento miden menos de dos
sonas, otorgándole 10 al más alto, 1 al menos alto y los n meros co- es necesario usualmente postular entidades que no son observables. En metros , que se re ere a un conjunto no muy grande de objetos. Por otra
rrespondientes a los intermedios. Esto es claramente una asignación de el caso de la gen tica, si queremos explicar por qu cuando cru amos parte, enunciados que parecen singulares, como “El agua se congela”, se
n meros que no permite hacer operaciones interesantes. Por ejemplo, una planta de arvejas verdes con una de arvejas amarillas, todos los des- re eren en realidad a una clase universal de cosas (a toda el agua) y, por
sumar el 1 del más bajo con el 2 del siguiente más bajo, no tiene nada cendientes son amarillos, se postulan genes, que son entidades que en lo tanto, son generales. los enunciados existenciales, tambi n, pueden
de interesante. Si tratamos con el concepto cuantitativo de altura, en el momento que se propusieron no eran en absoluto observables. A las hacer referencia a una clase universal y, por ende, ser generales en este
cambio, podemos saber a través de una operación matemática que dos entidades (como rasgos, planetas) o propiedades (como verde o calien- sentido; por ejemplo, “Existen humanos resistentes al c lera .
personas, una de 1,70 m y otra de 1,65 m, una sobre los hombros de la te) que se observan directamente, se las llama “entidades observables”.
otra, pueden superar en altura a una más alta de 1,90 m. A las entidades que se postulan para explicar el comportamiento de las Hecha esta diferencia, al introducir ambas distinciones, podemos dife-
entidades observables se las llama “entidades teóricas”. renciar entre tres tipos de enunciados que nos interesan especialmente:
Suele sostenerse que la ciencia contemporánea, posterior a la Revolución enunciados básicos, generalizaciones empíricas y enunciados teóricos.
copernicana concluida en el siglo XVII, tiene como característica esen- En base a esta distinción, podemos establecer subsiguientemente otra
cial y novedosa matematizar el mundo. Esto no es cierto por dos razones. distinción pero entre términos. A los términos (palabras) que nombran 2.2.1. Enunciados básicos
Por una parte, existen teor as cient cas anteriores al siglo XVII que uti- a las entidades observables, los vamos a llamar “términos observacio-
lizan conceptos cuantitativos. Por otra, no toda teoría actual los emplea. nales”; a los que mencionan a las entidades teóricas, “términos teóri- Son enunciados singulares, ya que se re eren a uno o a unos pocos
Muchas teorías no tienen conceptos cuantitativos. Así, por ejemplo, las cos”. Por ejemplo, “perro” es un término observacional a diferencia de objetos, y son observacionales, es decir, solo tienen términos obser-
leyes descubiertas por Arquímedes utilizan conceptos cuantitativos, y la “neutrón” que es un término teórico. Ha de tenerse en cuenta que, en un vacionales además de los lógico-matemáticos. En estos se dice que
teor a de la selecci n natural, descubierta por Charles Darwin, no lo hace. sentido general, los t rminos observacionales re eren a entidades a las cierto objeto observable tiene determinada propiedad, también, obser-
que accedemos empíricamente bajo cualquier modalidad sensorial (tac- vable. Por ejemplo, “Esta arveja es verde”. La particularidad de tales
to, gusto, audición, vista, olfato). Así, términos como “ruido”, “agrio”, enunciados es que parecer a posible veri carlos y refutarlos a partir
Ya sabemos en qué consisten los conceptos cualitativos, comparativos y cuantitativos de la experiencia. Más adelante veremos que esto ha sido problema-
o métricos. Ahora determinen a qué tipo de conceptos (cualitativos, comparativos, “rugoso ser an observacionales bajo la clasi caci n presentada.
cuantitativos) corresponden los siguientes términos:
tizado. Además, son enunciados básicos enunciados como “Todas las
arvejas de esta lata son verdes” aunque su forma lógica sea general,
más duro que 2.2. Distinción entre tipos de enunciados
oro puesto que tambi n se re ere a un grupo pequeño de cosas de manera
peso La distinción teórico-observacional fue propuesta hace tiempo, y en el particular. Ocurre lo mismo con un enunciado como “El treinta por
velocidad en kilómetros por hora capítulo IV vamos a ver que es sumamente problemática. Pero en un ciento de las arvejas de esta lata es verde”. Conviene aquí aclarar que
murciélago comienzo permite establecer ciertas diferencias interesantes entre enun- utili aremos los t rminos “veri car y “refutar de un modo t cnico:
más gordo que
ciados cient cos que nos permitirán comprender algunas cuestiones
más agudo que
edad
acerca de la contrastación de hipótesis en la ciencia. En una primera

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot.

2. Tipología de enunciados instancia, nos permite distinguir entre enunciados observacionales o “Veri car un enunciado signi ca mostrar que ese enunciado es
empíricos y enunciados teóricos. Tengamos en cuenta, de manera preli- verdadero sin lugar a dudas.
En este capítulo, el foco está dirigido hacia la ciencia empírica o fáctica
minar, que todos los enunciados, sean observacionales o teóricos, tienen “Refutar un enunciado signi ca mostrar que ese enunciado es falso
dejando de lado la re exi n sobre la ciencia formal. La ciencia emp rica
términos lógico-matemáticos. Si bien estos términos no van a ser el foco sin lugar a dudas.
está constituida por disciplinas como la física, la química, la psicología,
de nuestro análisis, podemos caracterizarlos como aquellos términos (o
etc., y la ciencia formal está conformada por disciplinas como la lógica,
palabras) que sirven para estructurar el enunciado. Son típicamente los 2.2.2. Generalizaciones empíricas
la matemática, etc. Lo importante del caso es que la ciencia empírica, a
términos lógicos que designan las conectivas lógicas que estudiamos en
diferencia de la formal, relaciona de alg n modo sus a rmaciones con Son, también, enunciados que están formados solo por términos obser-
el capítulo II: Nociones básicas de lógica (“y”, “o”, “pero”, etc.), térmi-
la experiencia. Es, en este sentido, que a rmamos que los cient cos vacionales, además de los lógico-matemáticos. Pero, en este caso, no es
nos que suelen denominarse “cuanti cadores (“todos , “algunos , etc.),
someten sus hip tesis a contrastaci n emp rica. Cuando los l sofos cierto que se puedan veri car y refutar directamente por una experien-
pronombres de todo tipo (“este”, “esa”, “aquí”, etc.), entre otros. Son
comen aron a anali ar c mo es que las hip tesis se contrastan, exist a cia, ya que no hablan acerca de una entidad observacional nica, sino
t rminos matemáticos los n meros naturales, por ejemplo.
la confusión de pensar que la forma en que se contrastaban las teo- de clases enteras de ellas.
rías y las hipótesis aisladas era la misma. Es decir, se pensaba que este
Lo que nos importa en este contexto es que los enunciados observa-
m todo permit a contrastar teor as cient cas, pero la contrastaci n de Entre estos se pueden encontrar enunciados observacionales universa-
cionales o empíricos son los que solo tienen términos observacionales
teor as es mucho más compleja. Pues las teor as cient cas, a diferencia les, como “Todos los cuervos son negros y existenciales como “Exis-
(además de los lógico-matemáticos) y los enunciados teóricos son los
de las hip tesis cient cas, son marcos mucho más complejos con los ten cuervos negros”. Los enunciados empíricos universales pueden re-
que tienen alg n t rmino te rico.
que los cient cos tratan los fen menos del mundo y merecen un aná- futarse, pues si encontramos un cuervo que no es negro sabremos que
lisis diferente que estudiaremos en el capítulo IV: Estructura y cambio el enunciado “Todos los cuervos son negros” es falso; pero no pueden
Por ejemplo, “Este perro tiene espuma en la boca” y “Todos los gatos
de teor as diferentes perspecti as los cas. En el presente capítulo veri carse, pues se re eren a toda la clase de los cuervos, entre los cua-
blancos son sordos” son enunciados observacionales, pues todos los
abordaremos nicamente c mo se contrastan las hip tesis cient cas y les se encuentran los que ya murieron en el pasado y los que todavía no
términos no lógico-matemáticos que aparecen en ellos son observacio-
las complicaciones que esto acarrea. Como las hipótesis son enuncia- nacieron. Los enunciados emp ricos existenciales, al contrario, pueden
nales. En cambio, “Este perro tiene rabia” y “Todos los gatos blancos
dos, tendremos que comenzar con una distinción entre diferentes tipos veri carse, pues si observamos un cuervo negro sabremos que el enun-
tienen genes recesivos para el color del pelaje” son enunciados teóricos,
de enunciados en ciencia de acuerdo con los conceptos que en ellos ciado “Existe un cuervo negro es verdadero, pero no podemos refutar-
ya que en ellos aparecen términos como “rabia” y “genes” (la rabia no
aparecen. Esto permitirá, más adelante, presentar un análisis de la con- lo. Para saber que el enunciado es falso deberíamos, otra vez, recorrer
se observa directamente, sino que se determina a partir de síntomas sí
trastación de las hipótesis más claro. toda la clase de los cuervos, lo cual, como veíamos, no es posible.
observables directamente).

2.1. Distinción teórico-observacional Por otro lado, es posible distinguir entre enunciados singulares y ge- También, son generalizaciones empíricas los enunciados estadísticos o pro-
nerales. Llamaremos “enunciado singular” a un enunciado que habla babilísticos que no tienen términos teóricos, como “El ochenta por ciento
Las teor as cient cas sirven para explicar y hacer predicciones acerca
acerca de una cosa o de unas pocas cosas, por ejemplo, “J piter tiene de los cuervos son negros” o “Dos de cada tres cuervos son negros”.
de eventos observables. Por ejemplo, la gen tica permite predecir o ex-
anillos ; y nombraremos “enunciado general a uno que se re ere a una
plicar la forma en que se heredan caracteres observables, la mecánica
clase universal de cosas, por ejemplo, “Los planetas giran en elipses”.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

2.2.3. Enunciados teóricos 13. El 20 % de los que ingresaron esta mañana al hospital tiene ebre. siempre considerar condiciones iniciales que, en este caso, son los pa-
14. El 20 % de los que ingresaron esta mañana al hospital se encuentran infectados sos experimentales descriptos por enunciados básicos. As , de nuestra
Son aquellos que tienen al menos un término teórico. Estos no se pue- por el virus de la varicela.
hipótesis, (H1), “Los gusanos pueden generarse espontáneamente a
den veri car o refutar directamente. Puesto que en ellos aparecen t r-
partir de la materia inerte , y de la condici n inicial del experimento
minos teóricos, deben ser testeados a través de inferencias o utilizando 3. Contrastación de hipótesis (CI1), “Se coloca carne fresca en el frasco 1” y la (CI2), “Se cierra el
instrumentos.
Hemos llegado al punto central de este capítulo. Comencemos nuestro frasco 1 con papel X”, se deduce un enunciado básico que llamaremos
análisis a partir de un ejemplo que suele aparecer en los manuales de “consecuencia observacional” de H1 (CO1), “En el frasco 1 habrá gu-
Algunos enunciados teóricos solo contienen términos teóricos, además
historia de la biología. Es sabido que en la materia inerte como, por
1 sanos”. Esto es lo se espera que pase a la luz de H1. Recuerden que
de términos lógico-matemáticos. Denominaremos a estos enunciados,
ejemplo, en la carne podrida aparecen gusanos y otros organismos. He las consecuencias observacionales describen cosas que podrían llegar a
enunciados teóricos puros. Otros combinan términos teóricos y obser-
aqu la posibilidad de plantear un problema cient co simple: ¿c mo se pasar asumiendo la hipótesis principal.
vacionales. Por este motivo, los denominaremos enunciados teóricos
mixtos. Un ejemplo de enunciado te rico puro es “La rabia es un virus . explica la aparici n de estos seres vivos en la materia inerte Muchos
cient cos del siglo XVII sol an asumir la hip tesis de la generaci n Luego, hay que reali ar las observaciones y experiencias pertinentes.
espontánea para dar cuenta de este problema. Podemos expresar la hi- Seguimos a Redi en los pasos de su experimento. En la pr xima secci n
Ahora bien, uno puede preguntarse: ¿cómo puede un enunciado, que
pótesis de la generación espontánea de la siguiente manera: estudiaremos ambas alternativas que pueden sucederse luego de colo-
solo habla de relaciones entre objetos inobservables, ser informativo
car la carne en los frascos y taparlos con papel.
acerca de lo observable La respuesta es simple: es necesario que haya
enunciados que conecten estos enunciados puramente teóricos con lo H1: Los gusanos pueden generarse espontáneamente a partir de la
observable. Este es el papel de los enunciados mixtos como “Los perros materia inerte. 3.1. Asimetría de la contrastación
con rabia tienen espuma en la boca”. Este enunciado conecta la rabia Notemos qué ocurre si la consecuencia observacional CO1 es falsa. Vi-
con ciertos síntomas y permite que conceptos teóricos, como rabia, se ¿C mo hacemos para contrastarla emp ricamente Este enunciado es
mos informalmente que la consecuencia observacional se deduce de la
vuelvan explicativos y permitan reali ar predicciones. Por eso, los enun- una generalización empírica, es decir, es un enunciado general y no
hipótesis. Es decir, si la hipótesis es verdadera, entonces la consecuen-
ciados te ricos mixtos eran llamados por los l sofos de la concepci n contiene términos teóricos. En adelante, debemos tener en cuenta que
cia observacional debe ser verdadera. Este enunciado tiene la forma de
clásica, “reglas de correspondencia”, porque conectan lo teórico con lo las hip tesis cient cas con las que estudiaremos el tema de la contras-
un condicional material.
observable. Volveremos sobre esta distinción en el capítulo IV. taci n tienen esta estructura relativamente simple. Trataremos nica-
mente la contrastación de enunciados universales. No vamos a estudiar H1 CO1
la puesta a prueba de las hipótesis que tienen la estructura de genera-
Si es cierto que los gusanos pueden generarse espontáneamente a partir
En esta sección, hemos trazado algunas distinciones que problematizaremos recién li aciones emp ricas existenciales o probabil sticas. La contrastaci n
en el siguiente capítulo: Estructura y cambio de teorías: diferentes perspectivas de la materia inerte, entonces en el frasco 1 habrá gusanos.
de este tipo de enunciados tiene complicaciones adicionales que no es
los cas. La primera tiene que ver con los términos observacionales y teóricos (no
necesario abordar en este capítulo. Si la consecuencia observacional resulta falsa, podemos negar H1. Es
observacionales). Esta primera distinción nos permitió trazar la segunda distinción
que clasi ca tipos de enunciados. A grandes rasgos, podemos distinguir, por un posible obtener la negación de la hipótesis por un Modus tollens, una
lado, los enunciados observacionales o empíricos, que solamente tienen términos forma de razonamiento válida:
observacionales, además de los términos lógico-matemáticos y los enunciados teó- 1 Ver Rostand (1966).

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot.

ricos, que tienen al menos un término teórico. Dentro de los enunciados empíricos Lo que debemos preguntarnos entonces es qué consecuencia que poda- H1 CO1
están los enunciados básicos, que son singulares, y las generalizaciones empíricas,
mos observar podría tener esta hipótesis. Podemos inferir de ella que la ~ CO1
que son generales. Dentro de los enunciados teóricos, están los enunciados teóricos
puros, que solamente tienen t rminos te ricos, y los enunciados mixtos, que tienen materia inerte que no toma contacto con agentes externos (por ejemplo, ~ H1
términos teóricos y observacionales. moscas que pongan huevos de los que las larvas surjan) generará gusa-
nos. Sin embargo, el enunciado: Es decir, si H1 implica a CO1, y CO1 es falsa, H1 tiene que ser indefecti-
Términos observacionales Términos teóricos Términos teóricos
y observacionales blemente falsa. Así, si alguna de las consecuencias observacionales de una
Singular enunciados básicos enunciados enunciados mixtos
“La materia inerte que no toma contacto con agentes externos genera- hipótesis resulta falsa, y la consecuencia observacional se deduce solo de la
teóricos
General generalizaciones enunciados enunciados mixtos rá gusanos” es también una generalización empírica y presenta, por lo hipótesis, entonces la hipótesis se refuta o falsea concluyentemente.
empíricas teóricos
tanto, las mismas di cultades que nuestra hip tesis original (H1). Lo
Veamos ahora el caso en que la consecuencia observacional es verda-
En cada uno de los enunciados que guran a continuaci n: que cualquier bi logo har a es un experimento. Por ejemplo, en el siglo
dera. Supongamos que en el frasco 1 no aparecen gusanos, ¿podemos
a. De los términos subrayados, señalen cuáles son teóricos y observacionales. XVII Francesco Redi puso a prueba H1 de la siguiente manera. Colocó
a rmar que H1 es verdadera
b. Determinen si se trata de enunciados generales o singulares. trozos de carne en varios frascos de boca grande, cubriéndolos con un
c. Determinen si se trata de enunciados teóricos o empíricos (u observacionales).
papel herméticamente atado y sujeto. Si respondi ramos a rmativamente, nuestro ra onamiento tendr a la
d. Determinen si se trata de enunciados te ricos puros o mixtos, las generali acio-
nes emp ricas existenciales y generales, y los enunciados básicos. siguiente forma:
e. Finalmente, respondan: ¿c mo adquieren signi cado emp rico los enunciados Al haber procedido como Redi, podemos encontramos con dos posibles
te ricos puros H1 CO1
situaciones. La primera situación posible es que aparezcan gusanos en
los frascos que fueron tapados. Esta situación parece acomodarse a la CO1
1. Los virus infectan células y producen viriones para difundir sus genes.
2. La varicela es una infección viral causada por un herpesvirus del género Varice- idea expresada por H1 de que los gusanos se generan por la sola presen- H1
llavirus y la subfamilia Alphaherpesvirinae. cia de la materia inerte. Pero hay una segunda situación que consiste en ¡Pero esta forma de ra onamiento es inválida! Es una falacia de a rma-
3. Las personas infectadas con el virus de la varicela exhiben manchas rojizas y pla- la posibilidad de que no aparezcan los gusanos en los frascos tapados. ción del consecuente. Si H1 implica a CO1 y CO1 resulta verdadera, no
nas, que van tomando relieve poco a poco hasta convertirse en ampollas o vesículas. En este caso, parecería que fallaría la idea de la generación espontánea podemos a rmar con total seguridad que H1 sea verdadera. Dicho de
4. Carlos tiene varicela.
planteada en H1. otro modo, veri car una consecuencia observacional de una hip tesis
5. Carlos tiene manchas rojizas en su cuerpo.
no veri ca la hip tesis, as como s sucede que falsear una consecuencia
6. Las manchas aparecen en todo el cuerpo, especialmente en el tronco y en el cuero
cabelludo. Lo que acabamos de ver es bastante intuitivo y constituye una descrip- observacional de una hipótesis también falsea a la hipótesis.
7. Todos los pacientes de esta habitación tienen manchas en la piel y ebre. (Consideren ción informal de una contrastación de hipótesis. Sin embargo, para po-
que la ebre es detectada a trav s del contacto de la mano con la frente del paciente) der establecer con claridad y precisión en qué consiste una contrasta- Una consecuencia interesantísima de este análisis es la llamada “asimetría
8. Existen casos en los que aparecen llagas en la boca, los párpados y las vías respiratorias. ción, conviene reconstruir su proceso lógicamente. de la contrastación”:
9. La probabilidad de transmisión del virus de la varicela entre los niños que asisten
al mismo centro escolar o entre los miembros de la familia supera el 90%.
Lo que debe hacerse para contrastar una hipótesis cualquiera es dedu- s m tr a d la contrastac n: aunque es lógicamente posible refu-
10. El 80 % de las personas que tienen ebre tienen dolores musculares.
cir de ella un enunciado básico. Recordemos que un enunciado básico tar una hipótesis a través de sus consecuencias observacionales me-
11. Si un niño tiene ebre, pierde el apetito.
12. Esta mañana ingresaron 20 chicos al hospital con ebre y falta de apetito.
es un enunciado singular sin términos teóricos. La deducción supone diante un Modus tollens es l g camente mpos ble er carla a part r
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

de la er cac n de sus consecuenc as obser ac onales pues ello Es la conjunción de H1, CI1 y CI2 lo que implica CO1. Dado que la generales hipótesis derivadas. La presencia de hipótesis derivadas nos
tendr a la forma de una falac a de a rmac n del consecuente primera premisa es algo más complicada, la conclusión también lo será. muestra la posibilidad potencialmente in nita de deducir enunciados
Recordemos que el Modus tollens permite negar en la conclusión el generales (y no solamente consecuencias observacionales) a partir de
Por este motivo, no se puede sostener de ninguna hipótesis general de antecedente de la primera premisa, y el antecedente en este caso es una una hipótesis principal. De esos enunciados generales, algunos tienen
toda la ciencia actual que sea verdadera sin lugar a dudas, ni que esté conjunción. La forma del razonamiento refutatorio sería en este caso: mayor relevancia cient ca que otros, pero lo que debemos destacar
demostrada, ni que est veri cada, ni nada por el estilo. La ciencia es es que este tipo de enunciados se contrapone a las hip tesis auxiliares.
falible. Las hipótesis pueden ser en cualquier momento refutadas por la (H1 . CI1 . CI2) CO1 Aunque hip tesis derivadas y auxiliares son enunciados generales, las
experiencia. Todos los xitos que hayan tenido al hacer predicciones en ~ CO1 primeras se siguen de la hipótesis principal y las segundas son indepen-
el pasado no implican que seguirán teniendo xito en el futuro ni que dientes de la hipótesis principal.
~ (H1 . CI1 . CI2)
sean verdaderas ciertamente. Por otro lado, esto no debe ser desalenta-
dor. En esta fragilidad radica la fuerza de la ciencia, en el hecho de que Lo fundamental aquí es notar que “~ (H1 . CI1 . CI2)” no es equivalen- 3.2.2. Cláusulas ceteris paribus
somete sus juicios al examen de la experiencia. te a “~H1 . ~CI1 . ~CI2”. En el segundo caso se dice que cada uno de
los enunciados son falsos, mientras que en el primero se dice que los Existe, nalmente, un tipo de hip tesis presupuesto en toda contrastaci n
Por otra parte, si es posible lógicamente mostrar que una hipótesis es enunciados en cuestión no pueden ser todos verdaderos. Esto resulta que a rma algo como “No hay factores relevantes no tomados en cuenta .
falsa (si bien, ahora pondremos algunos peros a esta cuestión). De he- evidente si se comparan las tablas de verdad (vistas en el capítulo II) de
cho, la materia inerte que es privada del contacto con agentes externos “ (p q r “ p q r” Supongamos que cuando reali amos la experiencia con los tro os de
del modo planteado por Redi, no genera gusanos, pero ¿implica esto carne, sin querer hemos tomado frascos contaminados con una sustan-
que, sin lugar a dudas, la hip tesis en cuesti n es falsa Discutiremos La primera proposición niega que toda la conjunción sea verdadera, cia que evita la proliferación de gusanos. En este caso, si observáramos
esto más so sticadamente en el siguiente punto. mientras que la segunda a rma que cada una de las proposiciones pues- que en el frasco 1 no hay gusanos, no deberíamos poner en cuestión la
tas en conjunción son falsas. Si “ (p q r “ p q r” fuesen hipótesis principal, ni las condiciones iniciales, sino la cláusula ceteris
equivalentes, los valores de las tablas de verdad coincidirían. paribus, pues existir a un factor relevante que no ha sido tomado en
Los elementos de la contrastación que hemos estudiado hasta ahora son los siguientes: cuenta al realizar la deducción de la consecuencia observacional, la pre-
El Modus tollens nos dice, entonces, que H1 es falsa, que CI1 es fal- sencia de la sustancia que evita la aparición de gusanos.
Hipótesis: es un enunciado ofrecido por el cient co para explicar un fen meno
cuyo valor de verdad todavía no está determinado. sa, CI2 es falsa o que todas lo son. Pero, entonces puede ocurrir que
la falsedad de la consecuencia observacional no se deba a la falsedad 3.3. Contrastación con todos los componentes señalados
Condiciones iniciales: son enunciados singulares que se presuponen en la con-
trastación para poder deducir las consecuencias observacionales de la hipótesis. de hipótesis (H1), sino a la falsedad de las condiciones iniciales (CI1
Reconstruyamos la contrastación presentando, en este caso, las hipótesis
y CI2). Es decir, puede ser que sea cierto que los gusanos pueden
Consecuencias observacionales: son enunciados singulares deducibles de la hi- subsidiarias presupuestas y explicitando los medios de experimentaci n:
generarse espontáneamente a partir de la materia inerte, pero que no
pótesis (en conjunción con ciertas hipótesis subsidiarias como las condiciones
iniciales), los cuales expresan los hechos que deber an esperarse que sucedan a sea cierto que, por ejemplo, se haya cerrado el frasco con papel de la H1: Los gusanos pueden generarse espontáneamente a partir de
partir de la admisión de una hipótesis. manera correcta. Al no cerrarse correctamente el frasco 1, la carne materia inerte.
no estaba en las condiciones de aislamiento necesarias como para CP: No hay factores relevantes no tomados en cuenta.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot.

Al tomar en cuenta la siguiente hipótesis: sostener que los gusanos pueden generarse espontáneamente a partir HA1: El papel X no deja pasar moscas.
“Las dietas a base de hidratos de carbono producen un incremento en el peso”,
de la sola materia inerte. HA2: Los gusanos surgen de huevos dejados por moscas.
es posible extraer la siguiente consecuencia observacional: “Juan incrementará su
peso”, si se presupone la siguiente condición inicial: “Juan come pastas todos los CI1: Se coloca la carne en el frasco 1.
días”. Esto tiene una consecuencia important sima que explica ciertas cuestiones CI2: Se cierra el frasco 1 con papel X.
Del mismo modo, pero tomando en este caso en consideración la hipótesis: “Las habituales de la práctica cient ca. Frente a un resultado adverso, en una CO1: En el frasco 1 habrá gusanos.
dietas con a car provocan caries , respondan las siguientes consignas:
contrastaci n los cient cos pueden salvar la hip tesis principal culpan-
a. Extraigan una consecuencia observacional de la hip tesis en cuesti n. Recuerden La HA1 no es una condición inicial, como vimos, porque es un enun-
do de la refutación a la no ocurrencia de las condiciones iniciales. Sin
que debe ser un enunciado singular observacional que se deduzca de las hipótesis. ciado general. Noten que en este caso se trata de una hipótesis que ni
Tengan en cuenta, tambi n, que no se debe describir el resultado del experimento o embargo, si seguimos explicitando los presupuestos de la contrastaci n
siquiera pertenece a la biolog a. Siempre hay hip tesis auxiliares acerca
la observación, sino que se debe describir lo que se esperaría que ocurriera en caso del ejemplo visto, vemos que la situación es todavía más compleja, ya
de que la hipótesis fuese verdadera. del material utili ado en la experimentaci n, o acerca de los instrumen-
que hay otras hipótesis involucradas en el proceso. Llamaremos “hipótesis
b. Señalen alguna condici n inicial presupuesta para extraer la consecuencia obser- tos utilizados en la observación. Todas estas condiciones se relacionan
vacional extra da en el punto anterior (a.). Recuerden que las condiciones iniciales subsidiarias” a todos los enunciados presupuestos en la contrastación. Re-
con las cosas que hace el cient co para llevar a cabo el experimento.
son singulares. pasaremos, a continuación, distintos tipos de hipótesis subsidiarias. Hasta
Estas son condiciones iniciales experimentales, aunque tambi n hay
ahora hemos estudiado solamente un tipo de hipótesis subsidiarias, que
condiciones iniciales no experimentales que no tendremos en cuenta
3.2. Hipótesis subsidiarias que intervienen en la contrastación son las condiciones iniciales. A ellas, debemos sumarles las que siguen.
en este capítulo. La reconstrucción de una contrastación es una tarea
Al extraer la forma de la contrastaci n en el punto anterior, no tomamos ardua, pues son muchas las hip tesis subsidiarias presupuestas, y expli-
3.2.1. Hipótesis auxiliares citarlas todas resulta a veces difícil. Con las hipótesis consideradas, el
en cuenta las condiciones iniciales. Estrictamente, la forma de la con-
trastación es algo más complicada. Habíamos dicho que el razonamien- Además de enunciados singulares, existen enunciados generales que razonamiento de la refutación sería, entonces:
to de la refutación era así: llamaremos “hip tesis auxiliares . Las hip tesis auxiliares son enun- (H1 . CP . HA1 . HA2 . CI1 . CI2 ) CO1
ciados generales que pueden provenir de la misma o de otras discipli- ~ CO1
H1 CO1
nas cient cas. En el ejemplo que estamos utili ando, hemos dado por
~ CO1 ~ (H1 . CP . HA1 . HA2 . CI1 . CI2)
hecho varias cuestiones, por ejemplo, que los gusanos surgen de hue-
~ H1 vos dejados por moscas, el método empleado para tapar los frascos es Si la consecuencia observacional resultara falsa puede ser que la refuta-
efectivo, que el papel X no deja pasar moscas, etc. Lo que las distingue ción se deba a que la hipótesis H1 es falsa, o que alguna de las hipótesis
Pero en realidad, la primera premisa es distinta, está algo simpli cada,
de las condiciones iniciales es su generalidad. “La carne utilizada en auxiliares sea falsa, o alguna de las condiciones iniciales presupuestas,
porque estrictamente CO1 no se deduce solo de H1 sino de la conjunción
el experimento es de pollo ser a una condici n inicial, puesto que es lo sea. Como veremos en la pr xima secci n, un cient co que se en-
de H1 y las condiciones iniciales. Es decir, para deducir de la hipótesis
singular, mientras que “Los gusanos de moscas pueden vivir en la carne cuentre convencido de la hipótesis de la generación espontánea podría
“Los gusanos pueden generarse espontáneamente a partir de la materia
de pollo ser a una hip tesis auxiliar, puesto que es general. dudar de alguna de las otras hipótesis intervinientes.
inerte”, la consecuencia observacional “En el frasco 1 habrá gusanos”,
es necesario presuponer las condiciones iniciales CI1, “Se coloca carne De la hipótesis principal, junto con estos enunciados generales que lla-
fresca en el frasco 1” y CI2, “Se cierra el frasco 1 con papel X”. mamos hip tesis auxiliares, pueden obtenerse nuevas hip tesis genera-
les en un proceso de deducción. Llamamos a este género de hipótesis
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

Supongamos que la hip tesis auxiliar y las condiciones iniciales de p rnico introdujo una hip tesis ad hoc extremadamente auda . Hasta el
Hemos visto que las hipótesis contrastadas no solamente están acompañadas por las nuestra contrastación estuvieran bien establecidas, pero que, pese a momento no había razones para considerar que las estrellas, que tanto él
condiciones iniciales; también están acompañadas por:
ello, alg n bi logo deseara sostener, a toda costa, la correcci n de H1. como los ptolemaicos cre an engar adas en la esfera de las estrellas jas,
Hipótesis auxiliares: enunciados generales utilizados conjuntamente con la hipó- Serían ejemplos de hipótesis que podrían utilizarse para salvar de la estuviesen lejos de la Tierra. Para salvar la hipótesis, Copérnico sostuvo
tesis contrastada, cuya verdad no depende de la contrastación en la que participan,
refutación a H1: que la esfera de las estrellas jas estaba extremadamente lejos, de modo
pues se suponen verdaderos a los nes de la contrastaci n que se está llevando a
cabo. tal que la modi caci n de la posici n de la estrella no era perceptible.
Hah1: El papel X deja pasar a las moscas.
Hipótesis ceteris paribus: a rma que no existen factores relevantes que no est n Hah2: El frasco 1 no ha sido correctamente cerrado con el papel X.
¿Qué razones tenía Copérnico para considerar que el universo era enor-
siendo tomados en cuenta. Hah3: En el frasco no se ha colocado carne.
me, más grande de lo que nadie hubiera considerado hasta el momento
a. Consideren la siguiente hipótesis: “Las dietas ricas en sal elevan la presión san- En realidad, es posible salvar a la hipótesis “culpando” a cualquiera de las nicamente que las posiciones relativas de las estrellas no se modi ca-
gu nea . Indiquen las condiciones iniciales y las hip tesis auxiliares necesarias
para deducir la consecuencia observacional “El tensiómetro aplicado a Carla marcó hip tesis subsidiarias presupuestas, explicitadas o no. Además, es posible ban. A la larga, la conjetura de Copérnico resultó correcta. Los cambios
170/100 en su indicador”. Noten que, tal vez, sea necesario indicar hipótesis au- “culpar” a la ceteris paribus, señalando alg n factor no tomado en cuenta, de la paralaje fueron determinados por primera vez en el siglo XIX.
xiliares al respecto de las comidas ricas en sales, que marquen la relaci n entre el por ejemplo, “Existe un factor relevante no considerado, se han usado fras- Pero en el siglo XVI: ¿qué era más racional, considerar que la Tierra
tensiómetro y la presión.
cos contaminados con una sustancia que evita la generación de gusanos”. estaba quieta o considerar que el universo era enorme No hay una
b. Señalen alguna hip tesis auxiliar presupuesta que acompaña la hip tesis princi-
pal propuesta en la Actividad 3. respuesta clara. Lo interesante al respecto es que se trata de una pro-
Sería ideal poder establecer cuándo una hipótesis ad hoc es adecuada y blemática con la que se enfrentan los cient cos todo el tiempo y que
cuándo no. Lamentablemente, no existe un criterio que pueda cumplir estuvieron discutiendo por siglos sin llegar a un acuerdo.
Un buen ejercicio para practicar la identi caci n de las hip tesis subsidiarias que
con esta función. En los casos citados es posible idear formas inde-
acompañan a la hipótesis principal de una investigación consiste en apelar a la his-
toria de la ciencia y estudiar algunos de los casos de investigación más resonantes pendientes de contrastar la hip tesis auxiliar de manera independiente 3.5. Holismo de la contrastación
de la ciencia empírica. Una de estas investigaciones pertenece al área de las ciencias a esta contrastaci n (idear un experimento para ver si el papel X deja
médicas. Con su trabajo relativo a la viruela, el médico inglés Jenner fue uno de los
pasar o no a las moscas) y evaluar la verdad de las condiciones inicia- Para concluir, si en el caso de investigación que estamos desarrollan-
primeros en desarrollar el principio básico que subyace a la creación de las vacunas. do observáramos que en el frasco 1 no aparecen gusanos, resultando
Lean el caso de investigaci n e identi quen:2 les (por ejemplo, si el frasco se encuentra bien cerrado o no). De este
modo, se eval a la adecuaci n de las hip tesis ad hoc propuestas. Es falsa entonces la consecuencia observacional considerada, no se refuta
a. El fen meno a explicar. una consecuencia observacional particular aislada, sino la conjunción
b. La hipótesis contrastada, condiciones iniciales, consecuencias observacionales e deseable, por lo tanto, que siempre se utilicen hipótesis ad hoc que sean
hip tesis auxiliares. contrastables independientemente del experimento en cuesti n. Pero de la hipótesis a contrastar y las hipótesis subsidiarias. Esto habilita
esto no siempre es posible. la posibilidad de salvar la hipótesis con hipótesis ad hoc. En un caso
En el siglo XVIII la viruela se había convertido en una tremenda plaga que
positivo, por otra parte, no favorece a una hipótesis aislada tampoco,
amena aba tanto a Europa como a Am rica. Fue el m dico ingl s Edward
Jenner quien, estando de visita en una granja, descubrió la manera de de- Existen casos hist ricos en los que se han utili ado hip tesis ad hoc que sino al mismo conjunto de hipótesis. Se ha llamado a esto “holismo de
tener el avance indiscriminado de esta enfermedad. Jenner prestó especial la contrastación”.
en el momento no podían ser testeadas. Al retomar algunas cuestiones
atenci n a los comentarios de los campesinos seg n los cuales las muje-
res ordeñadoras de vacas, que solían contraer la viruela bovina, transmitida del capítulo I: Historia de la ciencia. Dos revoluciones, uno de los más
2 Basado en Moledo y Magnani (2009). famosos es el de la hipótesis ad hoc introducida por Nicolás Copérnico

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot.

de manera directa de las ubres de la vaca al ordeñador, no desarrollaban la para explicar que el ángulo de la paralaje no se modi cara con el mo- Hol smo d la contrastac n: nunca pueden contrastarse enuncia-
peligrosa viruela humana. Tomando en cuenta esta creencia popular Jenner
vimiento de la Tierra. Generalmente, se simpli can las controversias dos de manera aislada. Dado que las consecuencias observacionales
consideró que la presencia de pequeñas dosis del agente de la viruela bovi-
na en un organismo podría inmunizarlo en relación con la viruela humana. cient cas del pasado (Thomas Kuhn dice cosas muy interesantes al siempre se deducen de un complejo de hipótesis, la refutación, así
Para poner a prueba esta idea, procedi de la siguiente manera. Tom uido respecto, como veremos más adelante, en el capítulo IV) subestimando como la con rmac n o corroborac n s empre apuntan a este com-
linfático de la mano de una lechera infectada con viruela bovina y lo inoculó la inteligencia o poniendo en cuesti n la buena voluntad de los cient - plejo de hipótesis y no a uno de sus componentes en particular. En
en el brazo de un niño sano de ocho años llamado James Phipps. El médico
introdujo el material infectado, a trav s de una serie de cortes super ciales cos que se opusieron a lo que luego resultó un cambio progresivo. Así, caso de refutación, lo que se refuta es el conjunto de hipótesis que se
hechos en el brazo del niño. A pesar de que a las dos semanas James mani- se suele presentar a los geocentristas (los que consideraban que la Tierra utilizaron en la contrastación, pero no podemos saber cuál o cuáles de
fest algunos s ntomas leves de ebre y dolor corporal, el niño nunca mani- se encontraba inmóvil en el centro del universo), como retrógrados, con- ellas han sido las responsables.
fest la enfermedad de la viruela humana. La experiencia con el joven James
parecía dar aval a la idea de Jenner de que el suministro de pequeñas dosis
servadores, etc. Pero cuando Copérnico propuso su sistema heliocentris-
de uido infectado con viruela bovina generaba la inmuni aci n del organis- ta, con el Sol en el centro del universo, realmente había buenas razones
mo para el caso de la viruela humana. Esta constituiría la primera práctica para no aceptar este cambio. Una de ellas tenía que ver con lo siguiente: Para los cient cos que pueden ser reacios a abandonar las hip tesis que proponen
de vacunación en la historia de la ciencia, aunque Jenner no tenía idea del como soluci n a un problema, existen formas de salvar a la hip tesis contrastada:
si la Tierra se moviera, razonaban por entonces, las posiciones de las es-
agente causal de la enfermedad ni del mecanismo por el cual se producía la
inmunización. trellas jas, con respecto a alg n punto en la Tierra, deber an cambiar. Es Hipótesis ad hoc: son hip tesis cuyo nico objetivo es salvar de la refutaci n a
decir, si en enero se jaba un tubo a trav s del cual se ve a cierta estrella, una hipótesis que ha tenido un resultado negativo en la contrastación. La hipótesis
ad hoc culpa del resultado negativo a alguna de las hipótesis subsidiarias.
a los seis meses, a la misma hora, si la Tierra se movía, la estrella debería
dejar de verse a trav s de dicho tubo (ver gura 2). Dada la siguiente hipótesis, “Las plantas no requieren de sol para sobrevivir”:
a. Propongan una manera de contrastar tal hip tesis. Expliciten todas las hip tesis
subsidiarias involucradas en la contrastación.
b. ¿Qué hipótesis ad hoc podría salvar esta hipótesis en el caso de que el resultado
fuera negativo
Figura 1. La viruela bovina o los
maravillosos efectos de la nueva Figura 2. Lo que se debería observar si la Tierra
inoculación. Caricatura de James cambiara de posici n seg n los geocentristas. En el siguiente caso de investigación sobre el comportamiento de los gorriones: 3

Gillray de 1802
a. Enuncien el fen meno a explicar.
b. Identi quen la hip tesis contrastada, al menos una hip tesis auxiliar, las condi-
ciones iniciales y la consecuencia observacional.
c. Reconstruyan el razonamiento mediante el cual se refuta la hipótesis.
3.4. Hipótesis ad hoc d. Formalícenlo.
e. Propongan al menos una hipótesis ad hoc para seguir sosteniendo la hipótesis
Las hipótesis ad hoc son hipótesis que, en un caso negativo en una con- principal.
trastación particular, son utilizadas al solo efecto de salvar de la refuta- Cuando en la poca de Cop rnico se reali aban tales experiencias, no se
ción a la hipótesis a contrastar, negando alguna de las otras hipótesis o observaba que la estrella cambiase su posición (sí a lo largo del día, por Los gorriones melódicos y los pantaneros son dos especies norteamericanas que es-
tán muy pr ximamente relacionadas pero que, a pesar de ello, cantan melod as muy
condiciones iniciales presupuestas en la extracci n de la consecuencia supuesto, pero no a la misma hora en días distintos). Esto implicaba una
diferentes. La pregunta que surge es cómo es que estas especies llegan a cantar de la
observacional en juego. refutación contundente del movimiento de la Tierra. Sin embargo, Co- 3
Basado en Cheney y Seyfarth (2007).
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

manera en que lo hacen. Bajo la idea de que la conducta animal se produce cuando el produjera, mecánicamente, una hip tesis basada en el concepto de un mar de aire La idea de que es posible comprender el funcionamiento de la ciencia
organismo aplica ciertas restricciones mentales mínimas sobre un estímulo ambiental [...] No hay, por tanto, «reglas de inducción» generalmente aplicables por medio de
prestando solo atenci n al contexto de justi caci n, será puesta en duda,
adecuado, muchos etólogos han sostenido que los gorriones melódicos y pantanosos las cuales se puedan derivar o inferir mecánicamente hipótesis o teorías a partir de los
aprenden a cantar mediante la experiencia, es decir, gracias al contacto con otros datos empíricos. La transición de los datos a la teoría requiere imaginación creativa. por ejemplo, por autores como Kuhn. Pero sin entrar en estas críticas de
gorriones adultos cuyas canciones constituyen los estímulos ambientales adecuados Las hip tesis y teor as cient cas no se derivan de los hechos observados, sino que Kuhn (que desarrollaremos en el capítulo IV) queda claro que, asumien-
para desarrollar el canto de cada especie. Contra esta idea Marler y Peters diseñaron se inventan para dar cuenta de ellos. Son conjeturas relativas a las conexiones que se do la distinci n entre contextos, la inducci n no servir a para descubrir
el siguiente experimento. Tomaron un grupo de pichones de gorriones mel dicos y pueden establecer entre los fenómenos que se están estudiando, a las uniformidades
pantaneros y en condiciones de aislamiento en un laboratorio les hicieron escuchar hip tesis, pero podr a tener todav a un papel al justi car hip tesis des-
y regularidades que subyacen a éstos. Las «conjeturas felices» de este tipo requie-
grabaciones que registraban el canto de los gorriones de ambas especies. Si la expe-
ren gran inventiva, especialmente si suponen una desviación radical de los modos
cubiertas por otras vías. Esto ha generado una polémica importante res-
riencia es la que rige la adquisición del canto de los gorriones, entonces, en el caso pecto al funcionamiento de la inducci n en el contexto de justi caci n.
corrientes del pensamiento cient co, como era el caso de la teor a de la relatividad
de estos pichones melódicos y pantaneros criados en las condiciones de cautiverio
o de la teor a cuántica. El esfuer o inventivo requerido por la investigaci n cient -
presentadas, deberían desarrollar, ambas especies, los mismos cánticos dado que es-
tán expuestos a las mismas condiciones de experiencia. Además cabe mencionar que ca saldrá bene ciado si se está completamente familiari ado con los conocimientos Anteriormente, vimos que si consideráramos veri cada a una hip te-
ambas especies tienen las mismas habilidades cantoras en el sentido de que ambas propios de ese campo. Un principiante dif cilmente hará un descubrimiento cient co
sis cuando una de sus consecuencias observacionales resulta verdadera,
especies pueden producir las mismas notas. Sin embargo, pese a que este grupo de de importancia, porque las ideas que puedan ocurrírsele probablemente no harán más
pichones de ambas especies está expuesto a los mismos est mulos ambientales y pue- que repetir las que ya antes habían sido puestas a prueba o, en otro caso, entrarán en cometer amos una falacia de a rmaci n del consecuente. Como men-
de producir los mismos cantos, los pichones melódicos del grupo adquieren el canto colisión con hechos o teorías comprobados de los que aquél no tiene conocimiento. cionamos, esto implica que las hip tesis no son veri cables a trav s
de los gorriones melódicos y los pichones pantaneros del grupo adquieren el canto (Hempel, 1998, pp. 31-32) de la experiencia. Pero, ¿podemos saber algo sobre la verdad de una
de los gorriones pantaneros. Este experimento parece mostrar que no es cierto que el
hip tesis muy exitosa al reali ar predicciones Aqu se produjo una po-
canto de los gorriones mel dicos y pantaneros se desarrolle por la sola experiencia. Los l sofos que propusieron todas las categor as de análisis que he-
lémica dentro de la Filosofía de la ciencia.
mos desarrollado en este cap tulo consideraban que no exist a ning n
tipo de inferencia que permitiera descubrir hipótesis. Por tal motivo, en
este marco se hi o la distinci n entre “contexto de descubrimiento y Para algunos, entre los cuales se encuentran Carnap y Hempel, la ve-
“contexto de justi caci n . La idea básica sobre la que se construye tal ri caci n de consecuencias observacionales, si bien no veri caba una
distinci n consiste en señalar que existen dos problemáticas completa- hipótesis, la volvía más probable por medio de un razonamiento induc-
tivo. Es decir, cuantas más consecuencias observacionales resultaran
mente distintas con respecto a una hip tesis cient ca particular. Una,
verdaderas, más probable sería la hipótesis. Se suele decir que una con-
Figura 3. Gorrión melódico (izquierda) y gorrión pantanero (derecha) .
c mo el cient co la descubri , otra c mo justi c tal hip tesis. Cuestio-
nes acerca de c mo se llega a pensar una hip tesis cient ca tienen que secuencia observacional “con rma una hip tesis, para expresar la idea
ver con lo que com nmente se conoce como “contexto de descubrimien- de que la veri caci n de una consecuencia observacional incrementa la
4. El papel de la inducción en la ciencia probabilidad de la hipótesis, y a los autores que consideraban que esto
to de la hip tesis. Cuestiones acerca de la justi caci n de las hip tesis
era posible se los suele llamar hoy “con rmacionistas . Seg n estos,
Exist a en siglos precedentes, la presunci n de que el m todo caracte- son conocidas como cuestiones acerca del “contexto de justi caci n de
si bien es cierto que las hip tesis actuales no están veri cadas (no está
rístico de la ciencia era el inductivo. De allí que las ciencias que hoy se las hipótesis. En el período clásico, no solo se suele sostener la idea de
que tales contextos son diferenciables, sino además, que la losof a no se probada su verdad a partir de la experiencia), están fuertemente con r-
caracterizan como fácticas eran denominadas en el siglo XIX, habitual-
ocupa del contexto de descubrimiento y s del de justi caci n. madas (son muy probables dado su xito emp rico).
mente, como “ciencias inductivas”. Es necesario aclarar, sin embargo,
que la inducción (razonamiento no deductivo que permite inferir por

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot.

medio de la generalización de enunciados singulares, enunciados ge- Podemos dar un ejemplo, probablemente falso: que a Isaac Newton se le Existen otros autores, de los cuales el más famoso es Popper, que con-
nerales) no puede funcionar como método de descubrimiento de las ocurriera la ley de la gravitación universal al caérsele una manzana en la sideraban que la inducci n no juega ning n papel en ninguna etapa de
hip tesis cient cas más interesantes. Pues, la mera generali aci n no cabe a durante una siesta bajo un árbol, pertenecer a al contexto de des- la investigaci n cient ca. Popper se opon a a la idea de que existieran
permite introducir nuevos conceptos, mientras que las leyes cient cas cubrimiento. Corresponder an al contexto de justi caci n los procedi- lógicas no deductivas. Por lo tanto, que las consecuencias observacio-
usualmente lo hacen (en la mecánica clásica, por ejemplo, se introduce mientos por los cuales Newton valid esta ley. La primera cuesti n puede nales se cumplan, no implicar an ning n incremento en la probabilidad
el concepto de fuerza, o en la genética clásica, el de gen). Veamos, so- ser abordada, bajo estos supuestos, por alguno de los otros estudios me- de la hipótesis. Cuando una consecuencia observacional de una hipó-
bre este tema, el siguiente texto de Karl Hempel: 4
tacient cos disponibles (psicolog a, historiograf a, etc.); la losof a solo tesis dada se cumple, lo nico que podemos a rmar, seg n Popper, es
podr a ocuparse de lo relativo al modo en que se justi can las hip tesis. que en esta oportunidad la hipótesis no se ha refutado, es decir, que ha
La inducción se concibe a veces como un método que, por medio de reglas aplicables
sido “corroborada”. A los autores que consideran que las hipótesis ni
mecánicamente, nos conduce desde los hechos observados a los correspondientes
Detrás de esta idea, está el recha o a que existan l gicas del descubri- se veri can ni se con rman se los conoce como “falsacionistas . De
principios generales. En este caso, las reglas de la inferencia inductiva proporcio-
nar an cánones efectivos del descubrimiento cient co; la inducci n ser a un pro- miento, y el presupuesto de que la losof a de la ciencia solo se ocu- acuerdo con ellos, lo nico que podemos saber de una hip tesis es que
cedimiento mecánico análogo al familiar procedimiento para la multiplicación de pa de encontrar la l gica de la investigaci n cient ca. Leamos, como no ha sido refutada todavía. Distinguimos entonces entre:
enteros, que lleva, en un n mero nito de pasos predeterminados y reali ables me- ejemplo, el siguiente párrafo de Karl Popper:
cánicamente, al producto correspondiente. De hecho, sin embargo, en este momen- Veri car: Mostrar que una hip tesis es verdadera.
to no disponemos de ese procedimiento general y mecánico de inducción; en caso Eliminación del psicologismo Con rmar: Mostrar que una hip tesis es más probable a trav s de
contrario, difícilmente estaría hoy sin resolver el muy estudiado problema del origen He dicho más arriba que el trabajo del cient co consiste en proponer teor as y en
sus predicciones exitosas.
del cáncer. Tampoco podemos esperar que ese procedimiento se descubra alg n d a. contrastarlas. La etapa inicial, el acto de concebir o inventar una teoría, no me parece
Corroborar: Mostrar que una hip tesis no ha sido refutada en una
Porque -para dar s lo una de las ra ones- las hip tesis y teor as cient cas están que exija un análisis l gico ni sea susceptible de l. La cuesti n acerca de c mo se le
usualmente formuladas en términos que no aparecen en absoluto en la descripción de ocurre una idea nueva a una persona —ya sea un tema musical, un con icto dramático contrastación particular.
los datos emp ricos en que ellas se apoyan y a cuya explicaci n sirven. Por ejemplo, o una teor a cient ca— puede ser de gran inter s para la psicolog a emp rica, pero
las teorías acerca de la estructura atómica y subatómica de la materia contienen tér- carece de importancia para el análisis l gico del conocimiento cient co. Este no se
minos tales como «átomo», «electrón», «protón», «neutrón», «función psi», etc.; sin interesa por cuestiones de hecho (el quid facti de Kant), sino nicamente por cues- Cuando contrastamos una hipótesis intuitivamente creemos que solamente pueden
embargo, esas teorías están basadas en datos de laboratorio acerca de los espectros tiones de justi caci n o valide (el quid juris kantiano); sus preguntas son del tipo pasar dos cosas: o la aceptamos o la rechazamos. Pero hemos hecho un análisis
de diversos gases, trayectorias de partículas en las cámaras de niebla y de burbujas, siguiente: ¿puede justi carse un enunciado ; en caso a rmativo, ¿de qu modo ; ¿es los co seg n el cual podr a decirse que la hip tesis fue refutada, veri cada, con-
aspectos cuantitativos de ciertas reacciones químicas, etc., todos los cuales se pueden contrastable ; ¿depende l gicamente de otros enunciados ; ¿o los contradice qui á rmada o corroborada. Este es un escenario más complejo que el de la mera acep-
describir sin necesidad de emplear estos «términos teóricos». Las reglas de induc- Para que un enunciado pueda ser examinado l gicamente de esta forma tiene que tación o rechazo.
ci n, tal como se conciben en el texto citado, tendr an, por tanto, que proporcionar habérsenos propuesto antes: alguien debe haberlo formulado y habérnoslo entregado a. Completen los siguientes enunciados:
un procedimiento mecánico para construir, sobre la base de los datos con que se para su examen l gico. En consecuencia, distinguir netamente entre el proceso de
Refutar: mostrar que una hipótesis…
cuenta, una hip tesis o teor a expresada en t rminos de algunos conceptos comple- concebir una idea nueva y los m todos y resultados de su examen l gico. En cuanto
Veri car: mostrar que una hip tesis
tamente nuevos, que hasta ahora nunca se habían utilizado en la descripción de los a la tarea de la lógica del conocimiento —que he contrapuesto a la psicología del
Con rmar: mostrar que una hip tesis
datos mismos. Podemos estar seguros de que ninguna regla mecánica conseguirá mismo—, me basar en el supuesto de que consiste pura y exclusivamente en la in-
Corroborar: mostrar que una hipótesis…
esto. ¿Cómo podría haber, por ejemplo, una regla general que, aplicada a los datos de vestigación de los métodos empleados en las contrastaciones sistemáticas a que debe
que disponía Galileo relativos a los límites de efectividad de las bombas de succión, someterse toda idea nueva antes de que se la pueda sostener seriamente. (Popper, b. ¿Las hip tesis que son aceptadas en el seno de la ciencia son hip tesis veri ca-
1971, pp. 30-31) das Justi quen su respuesta.
4 Extra do de: http://es.wikipedia.org/wiki/Melospi a_melodia y http://es.wikipedia.org/wiki/
En los ejercicios que quedan vamos a integrar todas las nociones que hemos apren-
Archivo:Swamp_Sparrow.jpg ( ltimo acceso, 6 de junio de 2015).
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

dido hasta aqu : hip tesis, hip tesis auxiliares, condiciones iniciales, consecuencias a. ¿Cuál es el fen meno que quer an explicar Spallan ani y Jurine El descubrimiento de la penicilina 8

observacionales, hipótesis ad hoc, cláusulas ceteris paribus… ¿qué otras nociones b. Identi quen la hip tesis que Spallan ani puso a prueba en el segundo experimen- La penicilina es un género de antibióticos empleado profusamente en el tra-
recuerdan to. Identi quen tambi n las condiciones iniciales y la consecuencia observacional. tamiento de infecciones provocadas por bacterias. Su descubrimiento fue
c. Reconstruyan el tercer experimento (el de Jurine). Identi quen la hip tesis, las con- uno de los grandes acontecimientos cient cos del siglo XX que cambi de
diciones iniciales, la consecuencia observacional y, por lo menos, una hip tesis auxiliar. manera de nitiva a la medicina. Fue Fleming quien por casualidad revel
Lean el siguiente caso de investigación5 y, luego, trabajen con las consignas que d. ¿Veri ca el hecho de que la consecuencia observacional resulte verdadera, la al mundo los poderes de la penicilina en el año 1928. Por aquella época, el
están a continuación: hip tesis en cuesti n investigador estudiaba cultivos bacterianos de Stapylococcus aurehus en el
e. Si repiti ramos el experimento de Jurine y la consecuencia observacional resulta- laboratorio del Hospital de St. Mary de Londres. Luego de ausentarse por un
Los conceptos sociales y el cerebro ra falsa, ¿necesariamente deber amos abandonar la hip tesis ¿Por qu mes del laboratorio, al regresar observó que muchos de sus cultivos bacteria-
Amistad, justicia, honor, lealtad, son algunos ejemplos de conceptos sociales nos estaban contaminados con hongos, razón por la cual tiró la mayoría de
los cuales incorporan información que adquirimos en nuestro contacto con la ellos. Sin embargo, no los tiró todos y al observar con mayor detenimiento
sociedad ¿Qué parte de nuestro cerebro activamos cuando usamos este tipo a los cultivos contaminados que a n le restaban se percat que alrededor
de conceptos En 1922 Von Kleist formul la hip tesis de que los conceptos Lean el siguiente caso y, luego, respondan las preguntas que están a continuación: 7

del hongo contaminante se había creado un halo de transparencia, lo que


sociales están representados en los lóbulos anteriores temporales superiores indicaba la destrucción de las bacterias del cultivo. El hongo presente en
a partir de la evidencia que aportaban los pacientes con lesiones cerebrales Spallanzani y sus “animálculos”
Los primeros trabajos de Spallan ani (1765-1776) se re eren al origen de los estos cultivos era el Penicillium notatum y la observación inmediata parecía
en la Primera Guerra Mundial. La evidencia sugería que los pacientes que te- indicar que la sustancia procedente de este hongo, denominada penicilina
animálculos en las infusiones. Hacía ya cerca de cien años que habían sido
nían dañada la región de los lóbulos temporales anteriores eran incapaces de por Fleming, eliminaba al Stapylococcus aurehus. Este suceso hizo pensar
de nir, describir y ejempli car diferentes conceptos sociales. Muchos años descubiertos por Leeuwenhoek y a n no se hab a llegado a ning n acuerdo
sobre su origen. Había dos posturas predominantes: la de los partidarios de a Fleming en la idea más general de que la penicilina produce el retroceso
después, Zahn y sus colegas retomaron la hipótesis de Kleist y la pusieron a de las infecciones bacterianas. Fueron Florey y Chain quienes, pocos años
prueba de la siguiente manera. Tomaron un grupo de 26 personas y, por un los gérmenes, quienes sostenían que los animálculos se originaban a partir de
gérmenes presentes sobre la materia en descomposición o en el aire; y la de más tarde, pusieron a prueba esta idea. A diferencia de Fleming, estos inves-
lado, les pidieron que hicieran juicios sobre las relaciones de signi cado que tigadores lograron extraer, ltrar y puri car del hongo Penicillium notatum
partidarios de la generación espontánea, quienes sostenían que los animálcu-
hay entre pares de conceptos sociales (e.g. honor-valentía, etc.), mientras grandes cantidades de la penicilina mediante un sistema a contracorriente y
que por otro lado, les pidieron que emitieran juicios sobre las relaciones de los se generaban espontáneamente a partir de la materia inerte.
Los partidarios de la generación espontánea atribuían el origen de los ani- extracci n por amil acetato. Habiendo librado a la penicilina estudiada de
signi cado que hay entre pares de conceptos no sociales (e.g. nutrici n- til, todo resto de impureza la inyectaron en un grupo de ratones que estaban
málculos a la descomposición de la materia infusa que libera moléculas or-
etc.). En el primer caso, la tarea exige que el sujeto use conceptos sociales, infectados con Streptococcus. Observaron que la infección bacteriana de los
en el segundo caso, en cambio, la tarea no exige que el sujeto use conceptos gánicas. Un sacerdote irlandés llamado Tuberville Needham alegaba en favor
de esta opini n un experimento preciso y pretendidamente crucial (1745). ratones disminuía, lo cual indicaba que la hipótesis propuesta por Flemming
sociales. Los investigadores registraron la actividad cerebral de los sujetos era acertada. Gracias a estos hallazgos en el año 1945, Fleming, Florey y
mientras que se desempeñaban en dichas tareas a través de imágenes por re- Habiendo colocado jugo de cordero en un frasco cuidadosamente tapado,
lo mantuvo durante media hora en brasa caliente con objeto de destruir a Chain recibieron el premio Nobel de medicina.
sonancia magnética funcional (MRIf). La MRIf es un procedimiento clínico
los gérmenes que —en la hipótesis antiespontaneísta— podrían encontrarse
y de investigación que permite mostrar en imágenes las regiones cerebrales
que se activan cuando un sujeto se desempeña en una determinada tarea. Si en la super cie, en el aire interior del frasco, o en el propio l quido. A pesar
de esta precaución, el jugo de cordero se había poblado de animálculos en
la hipótesis de Zahn es correcta, entonces las MRIf deberían revelar primero,
poco tiempo, los que, seg n Needham, s lo pod a provenir de una g nesis
la activación de los lóbulos temporales anteriores cuando los sujetos emiten
juicios de relaci n de signi cado de pares de conceptos sociales y segun- espontánea. El experimento caus mucha sensaci n. ¿No era sta la soluci n
al tan debatido problema Era la reedici n de la famosa experiencia de Redi,
do, la no activación de los lóbulos temporales anteriores cuando los sujetos
emiten juicios de relaci n de signi cado en el caso de pares de conceptos no pero en el terreno de la vida microscópica: el calentamiento del frasco había
sociales. Debido a que las MRIf arrojaron este resultado puede decirse que la reemplazado al papel con el que Redi sellaba los frascos. Esta vez sin em-
bargo, para satisfacci n de los espontane stas, la exclusi n voluntaria de los
hipótesis de los investigadores era correcta. Figura 4. Sello de las Islas Feroe en honor de Alexander Fleming 9
gérmenes no había impedido que la vida se manifestara.
Toda la cuesti n se reduc a a saber si el ingenioso experimento de Needham 8 Basado en http://en.wikipedia.org/wiki/Penicillin. ( ltimo acceso 6 de junio 2015).

Basado en Zahn et al (2007).


5 7 Adaptado de Rostand (1966). 9 Extra do de: http://en.wikipedia.org/wiki/Alexander_Fleming. ( ltimo acceso 6 de junio 2015).

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot.

a. Enuncien el fen meno a explicar. era correcto. Para asegurarse de ello Spallanzani se propuso reproducirlo Las relaciones sociales de los monos babuinos 10

b. Identi quen la hip tesis contrastada, al menos una hip tesis auxiliar, las condi- aplicando con más rigor los procedimientos de exclusi n de los g rmenes, es Entre los monos babuinos las relaciones sociales están fuertemente basadas
ciones iniciales y la consecuencia observacional. decir, utilizando frascos mejor tapados y un calentamiento más prolongado. en las jerarquías que ocupan los integrantes de un grupo. La jerarquía que
c. Reconstruyan formalmente con los elementos identi cados en la contrastaci n, la En estas nuevas condiciones, el resultado fue completamente diferente, los tiene un individuo en un grupo de babuinos se mantiene por años y está en
falacia de a rmaci n del consecuente que se cometer a si se pensara que el resultado animálculos no aparecieron en absoluto. la base de las alianzas, amistades, enfrentamientos, etc. ¿Sería una forma
positivo de la contrastaci n veri ca la hip tesis. Una prolongada discusi n se estableci entonces entre ambos experimen- de antropomor smo creer que los babuinos tienen un conocimiento social
tadores. Needham sosten a que, modi cado de este modo, el experimento so sticado mediante el cual reconocen cuál es el lugar social que ocupan
perd a su signi cado, puesto que el calentamiento excesivo practicado por sus compañeros Silk ha mostrado mediante un interesante experimento que
Lean el siguiente caso y, luego, respondan las preguntas que están a continuación : 6 Spallanzani tenía, por un lado, el efecto de destruir la «fuerza genésica» o esta no es una a rmaci n antropomor sta y que, efectivamente, los babuinos
«vegetativa» de las infusiones y, por el otro, el de producir en el aire interior reconocen el rango jerárquico que ocupan los otros individuos de su grupo.
La orientación de los murciélagos de los frascos una alteración que imposibilitaba la vida de los animálculos. El babuino A no sólo reconoce que es subordinado respecto de B y dominante
Los primeros estudios sobre la capacidad de orientación de los murciélagos Needham se encontraba en un completo error por lo que se refería a la gé- respecto de C, por ejemplo, sino que también reconocería, por ejemplo, que
datan de nes del siglo XVIII, cuando el naturalista italiano Lá aro Spa- nesis espontánea, pero sus objeciones no eran desde luego absurdas y, en el B es dominante respecto de D, y C es subordinado respecto de E.
llanzani (1729-1799) y el médico y zoólogo suizo Louis Jurine (1751-1819) estado en que se hallaba entonces la ciencia, era casi imposible realizar un Para entender el experimento de Silk habr a que presentar algunas cuestiones
reali aron una serie de experimentos con estos animales. En 1793, Spallan- experimento susceptible de anjar la cuesti n disipando todo equ voco. previas. El experimento toma en consideraci n ciertos tipos de vocali acio-
zani encerró a una lechuza y a un murciélago en una habitación, en la que nes que emiten las hembras. La mayoría de las vocalizaciones de los babui-
había dispuesto una serie de hilos cruzados de lado a lado, de los que colga- a. Enuncien el problema a resolver (es decir, el dato observacional que quiere ser nos son distintivas en el sentido de que no solamente permiten a sus com-
ban campanillas, de forma que sonaran si los animales chocaban con ellos. explicado) y las dos hip tesis en competencia para su explicaci n. pañeros extraer informaci n de lo que está ocurriendo, sino que tambi n les
En la penumbra ambos animales eran capaces de volar, pero cuando se hizo b. Reconstruyan el experimento de Needham como refutatorio de la hip tesis de permiten identi car qu status jerárquico tiene quien emite la vocali aci n.
la oscuridad total en la habitación, Spallanzani comprobó que la lechuza se que los animálculos provienen de gérmenes dejados por otros animálculos. Señalen El experimento apela a dos tipos particulares de vocali aci n: los gruñidos y
desorientaba y chocaba con los hilos y contra las paredes, mientras que el la hip tesis que pone a prueba Needham, las hip tesis auxiliares, las condiciones los gritos de miedo. Cuando una hembra de menor jerarquía se acerca a una
murciélago mantenía intacta su capacidad de volar. La conclusión lógica fue iniciales y la consecuencia observacional. hembra de mayor jerarqu a la ltima suele emitir un gruñido que indica su
que la lechuza simplemente tenía una visión más sensible que la del hombre, c. Enuncien las hipótesis ad hoc con las que Spallanzani salva a la hipótesis que carácter dominante. El gruñido es un tipo de vocalización que indica a los
pero que el murciélago debía de tener alguna capacidad adicional que no de- parecía refutada por Needham. demás monos de manera precisa que quien lo emite es un miembro de mayor
pend a de la iluminaci n. A n de excluir completamente la visi n, Spallan- d. Reconstruyan el experimento de Spallan ani como refutatorio de la hip tesis de jerarquía en el grupo. Frente al gruñido de la hembra de mayor jerarquía la
ani reali un segundo experimento: quem los ojos de los murci lagos para que los animálculos se generan espontáneamente. Identi quen hip tesis, hip tesis hembra de jerarqu a inferior suele proferir gritos de miedo que mani estan su
cegarlos completamente, y los liberó en la habitación. No solo comprobó que auxiliares, condiciones iniciales y consecuencia observacional. sumisión. El grito de miedo, por su parte, es un tipo de vocalización que indi-
estos murciélagos ciegos volaban con igual facilidad, sino que, capturándolos e. Enuncien la hipótesis ad hoc con la que Needham salva a la hipótesis espontaneís- ca a los babuinos de manera no ambigua que quien lo emite es una hembra de
unos d as más tarde y examinando el contenido de sus est magos, hab an sido ta de la refutación. ¿A qué hipótesis presupuesta en la contrastación, culpa Needham menor jerarqu a. El experimento de Silk fue diseñado tomando en cuenta lo
capaces de cazar insectos al igual que sus congéneres con vista. del resultado negativo que los psic logos llaman la violaci n de las expectativas--. La l gica de
Spallanzani comunicó sus resultados a Jurine, quien ideó una tercera prueba: los experimentos de violaci n de la expectativa es la siguiente. Si se quiere
tapó los oídos de los murciélagos con bolas de cera y los liberó en una habita- saber si un organismo sabe p, se le presenta evidencia de que p es verdadero
ci n que, al igual que en los primeros experimentos, conten a hilos con cam- En los siguientes casos de investigación: y en este caso el organismo no demuestra sorpresa alguna. Luego, en un test
panillas. Observó que la capacidad de los murciélagos de evitar obstáculos se que sea lo más similar posible al anterior, se le presenta evidencia de que p
deterioraba notablemente. Spallanzani fue capaz de replicar los hallazgos de a. Identi quen el fen meno a explicar. es falso, y en tal caso el organismo debería responder con sorpresa porque la
Jurine, insertando pequeños tubos metálicos en las orejas de los murciélagos. b. Identi quen la hip tesis contrastada, al menos una hip tesis auxiliar, las condi- evidencia presentada varía respecto de lo que él considera verdadero.
Ambos concluyeron que el sentido del oído, y no la vista, era fundamental ciones iniciales y la consecuencia observacional. Bajo esta perspectiva Silk reali la siguiente experiencia. A 18 hembras se
para que los murciélagos volaran y cazasen. c. Respondan: ¿qu ocurre con la consecuencia observacional y ¿cuál es el resul- les hizo escuchar a través de parlantes grabaciones con dos tipos de secuen-
tado de la contrastaci n cias de vocalizaciones. En el primer tipo de secuencia de vocalizaciones se
d. En el caso de que se trate de una refutación, propongan al menos una hipótesis ad
6 Adaptado de Seco Granja y Jiménez Ruiz (2006). hoc para salvar la hipótesis principal. 10 Basado en Cheney y Seyfarth (2007) (Último acceso 6 de junio 2015).
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

escucha primero que la hembra A, de menor jerarquía, gruñe, segundo, que la que la luz se propague siempre a la misma velocidad en el vacío, una idea de la refutación a una hipótesis que ha tenido resultados negativos en la
hembra B, de mayor jerarquía grita de miedo, y tercero, que la hembra C, de fundamental en la teoría de la relatividad de Einstein.
contrastación, culpando a alguna de las hipótesis subsidiarias. Este tipo
una jerarquía superior a la de la hembra B, gruñe. Esta secuencia de sonidos
es normal en tanto que es consistente con las relaciones de dominancia de de estrategias ponen en evidencia que cuando se contrasta una hipótesis
estas hembras. Es una situación concebible que la hembra B grite de miedo nunca se lo hace de manera aislada, sino que se la contrasta en conjunto
demostrando su sumisión respecto de la hembra C. En el segundo tipo de con todas las hipótesis subsidiarias. Esto es lo que denominamos ho-
secuencia de sonidos sólo se escucha el gruñido de la hembra A, y el grito
de miedo de la hembra B. Esta secuencia de sonidos es anormal dado que lismo de la contrastación. Este holismo no nos permite distinguir con
plantea un escenario poco frecuente en el cual una hembra de menor jerar- claridad cuál fue el elemento en concreto que nos ha llevado a una con-
qu a pro ere sonidos amena antes para con una hembra de mayor jerarqu a secuencia observacional falsa: ¿la hip tesis misma , ¿las condiciones
y la ltima responde con un grito de subordinaci n. Lo que deber a esperarse
cuando las hembras estudiadas escuchan estas secuencias de sonidos es que,
iniciales , ¿las hip tesis auxiliares ...
en el primer caso, no presenten sorpresa alguna, y que, en cambio, en el se-
gundo caso evidencien sorpresa frente a una secuencia anormal de sonidos. Por ltimo, indagamos cuál es el estatus de la inducci n en el momento
Figura 5. Interferómetro de Michelson 12 .
Efectivamente, las hembras babuino presentaron estos patrones de conducta.
de poner a prueba las hip tesis cient cas. Vimos que para los l sofos
Cuando se les presentaron las secuencias de sonidos normales apenas pres-
taron atención a los parlantes, pero cuando se les presentaron las secuencias Síntesis del capítulo que han estudiado el tema de la contrastación de hipótesis, las hipótesis
de sonidos anormales permanecían más tiempo mirando los parlantes, lo cual son producto exclusivo de la imaginaci n del cient co. La creaci n de
signi ca que estaban sorprendidas. Esto indicar a que las hembras testeadas Hemos llegado al nal del presente cap tulo y es hora de hacer una rá-
una hip tesis no es un proceso inductivo de ning n tipo. Sin embargo,
reconocen cuál es la jerarquía que ocupan otros integrantes del grupo. Por pida retrospectiva de lo que hemos aprendido. Vimos que las hipótesis
eso cuando escuchan vocalizaciones que no parecen corresponderse son el ¿tiene la inducci n alg n papel cuando, una ve que la hip tesis ha sido
cient cas son enunciados que ofrece un cient co para explicar un fen -
status social de quien la emite se muestran sorprendidas. propuesta, tiene que someterse a prueba Aqu surgen dos posibles enfo-
meno del cual no sabemos su valor de verdad. Por eso suele decirse que
ques: el con rmacionismo (que le da un papel importante a la inducci n
Sobre la existencia del éter 11
las hip tesis son enunciados conjeturales. Todo el objetivo del cient co
Una de las principales a rmaciones del enfoque helioc ntrico era que la Tie- en la contrastaci n de hip tesis) y el falsacionismo (que no le da ning n
es determinar cuál es el valor de verdad de dicho enunciado y es por eso
rra se movía y que lo hacía a través de un elemento sutil y ligero que era el papel a la inducción en la contrastación de hipótesis). Si bien, ninguno
éter. Aunque ésta era una hipótesis fuertemente sostenida por el heliocentris-
que somete a su hipótesis a un proceso arduo de puesta a prueba.
de estos enfoques admite la posibilidad de que las hipótesis contrastadas
mo hubo que esperar hasta nes del siglo XIX para ponerla a prueba. Mi-
chelson y Morley imaginaron un experimento que tomaba en cuenta ciertas
y aceptadas sean veri cadas (por las ra ones expuestas en el tema de la
Para anali ar los camente la instancia de puesta a prueba de una hi-
cuestiones respecto de los pulsos de lu . Lo cierto es que a n del siglo XIX asimetría de la contrastación), ambos proponen dos maneras diferentes
pótesis, además de las herramientas de la lógica que hemos presentado
las teorías físicas de la luz habían cambiado profundamente gracias a los de entender la situaci n en que una hip tesis pasa exitosamente la situa-
aportes de Maxwell. Maxwell sugiri que la lu era una onda electromagn - en el capítulo II, necesitamos de manera preliminar introducir una serie
ci n de contrastaci n. Para los con rmacionistas, en este caso la hip tesis
tica, es decir, una serie de campos eléctricos y magnéticos que vibraban y se de distinciones entre tipos de conceptos que constituyen un enunciado,
perseguían. En aquella época parecía difícilmente concebible que una onda resulta con rmada, es decir, la hip tesis es más probable a trav s de sus
y tipos de enunciados cient cos (enunciados básicos, generali acio-
(electromagn tica o de cualquier tipo) se propagase en el vac o sin ning n predicciones exitosas. Para los falsacionistas, la hip tesis resulta ser co-
medio material que hiciera de soporte. Por ejemplo, para que una onda sono- nes empíricas y enunciados teóricos). Estas distinciones nos permitirán
rroborada, es decir, no ha sido refutada en una contrastación particular.
ra se propague se necesita de un medio físico que puede ser el aire o el agua. analizar la forma en que se contrastan las hipótesis; aunque solamente
Maxwell ra on que lo mismo suceder a con la lu , de manera que postul analicemos la contrastación de hipótesis no probabilísticas.
que la luz es una onda electromagnética que podría estar propagándose a Todos lo visto en este capítulo nos permitió analizar pormenorizada-
12 Extra do de: http://museovirtual.csic.es/coleccion/da a_valdes/ chas/da a9.htm. ( ltimo acceso 6
11 Basado en Moledo y Magnani (2009). de junio de 2015).
mente la contrastación de hipótesis no probabilísticas (la contrastación

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot. Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot.

través del éter. Pero el éter no sólo sería el medio a través del cual se propaga Notamos que para contrastar una hip tesis el cient co ten a que de- de hipótesis probabilísticas es bastante más compleja). Pero es impor-
la luz sino que también sería el elemento que atraviesa la Tierra cuando se
ducir de la misma una o más consecuencias observacionales, donde tante señalar que el conocimiento cient co no está formado por hi-
traslada.
Tomando en cuenta todo lo anterior, Michelson y Morley pensaron de la si- entendimos por consecuencia observacional un enunciado singular y p tesis aisladas, sino por teor as cient cas. Las teor as cient cas son
guiente manera. En aquel entonces era ampliamente aceptada la idea de que observacional que se sigue de la hip tesis y que expresa los hechos que entidades más complejas que las hipótesis. En los enfoques más clá-
a medida que avan aba la Tierra se generaba un viento de ter que choca deberían esperarse que sucedan a partir de la admisión de una hipótesis. sicos, como el de Popper o el de Hempel, la contrastación de teorías
contra ella de la misma manera que el aire choca contra un auto que avanza a
toda velocidad por una ruta. Si la Tierra se mueve a través del éter generando Pero la hipótesis no está sola en la deducción de las consecuencias ob- se llevaba a cabo del mismo modo que la contrastación de hipótesis.
un viento de éter y se proyecta la onda de luz A en contra de la dirección del servacionales. A ella la acompañan una serie de enunciados que hemos Como veremos, esta idea será puesta en duda más adelante. La manera
viento de éter así como también se proyecta la onda de luz B en la misma di- denominado “hipótesis subsidiarias”: las condiciones iniciales, las hi- clásica de entender la noci n de “teor a cient ca es en tanto conjunto
rección del viento de éter, entonces, el viento de éter retrasará la propagación
de la onda de lu A mientras que no habrá ning n retraso en la propagaci n
p tesis auxiliares, las cláusulas ceteris paribus. Las condiciones inicia- de enunciados deductivamente relacionados entre sí. Pero esta no ha
en la onda de luz B. Para entender por qué en el primer caso habría retraso les son enunciados singulares en los que se expresa el estado de cosas sido la nica forma de entender a las teor as. En el pr ximo cap tulo:
y en el segundo caso no, imagínese una persona caminando en contra de un en el mundo que debe darse para que, asumiendo la hipótesis puesta a Estructura cambio de teor as diferentes perspecti as los cas, ana-
fuerte viento y a otra caminando a favor de dicho viento. Es evidente que
prueba, tenga lugar la consecuencia observacional. Por el contrario, las li aremos los pormenores del análisis que los l sofos han hecho de
mientras que la primera persona tendrá di cultades para avan ar, la segunda
podrá hacerlo sin di cultades. Por ra ones parecidas, la onda de lu A, que va hip tesis auxiliares son enunciados generales cuya verdad no depende esta nueva unidad de análisis, que es la teor a cient ca.
en contra del viento de éter generado por la Tierra cuando se mueve, tendrá de la contrastación en la que participan, pues se suponen verdaderos a
di cultades en su propagaci n cosa que no sucede con la onda de lu B que
los nes de la contrastaci n que se está llevando a cabo. Las hip tesis Para ampliar
avanza junto con el viento de éter. El interferómetro era el instrumento que
los investigadores utilizaron para medir el supuesto retraso de la luz que se ceteris paribus son enunciados en los que se a rma que no existen fac-
propaga en contra del viento de éter. Su funcionamiento se basa en la división tores relevantes que no estén siendo tomados en cuenta. Para profundizar en el tema de la contrastación de hipótesis, es reco-
de un nico rayo de lu en dos haces para que recorran caminos diferentes y mendable leer Díez y Moulines (1997). Aunque la temática está presen-
luego converjan nuevamente en un punto. El recorrido de uno de los rayos tada de una manera ligeramente diferente, también es interesante leer
era a favor del viento de éter y el del otro era en contra del viento de éter. Al tener presentes todos estos elementos, vimos que la situación en que
Ambos rayos se re ejaban en espejos con el objetivo de que vuelvan a un una hipótesis resulta ser refutada puede reconstruirse lógicamente como un texto clásico sobre el tema como lo es Hempel (1998). Aunque sigue
mismo punto. Lo esperado era que el rayo cuyo recorrido estaba a favor del un Modus tollens. En este caso, es correcto a rmar que la hip tesis fue algunas de las categorías de Hempel (1998), que no hemos desarrollado
viento de éter llegaría antes que el otro. del todo en este capítulo, Destéfano (2010) también puede servir como
Sin embargo, Michelson y Morley no observaron retraso alguno, a pesar de
refutada debido a que la consecuencia observacional fue refutada. Sin
las repetidas veces que reali aron la experiencia. Ambos rayos de lu llega- embargo, el caso inverso presenta problemas desde el punto de vista de la bibliografía ampliatoria sobre el tema.
ban al mismo tiempo lo cual parecía indicar que no es cierto que la Tierra lógica, razón por la cual la contrastación es asimétrica. En el caso en que
se mueva a trav s del ter. Dicho más expl citamente, si no hay retraso, no Para tener ejemplos de investigaciones en el campo de la medicina, se pue-
la hip tesis resulte exitosa, es incorrecto a rmar que debido a la veri ca-
hay viento de ter que lo produ ca, si no hay viento de ter, no existe el ter
ci n de la consecuencia observacional tambi n la hip tesis queda veri - den ver los documentales Pioneros de la medicina, http://www.encuentro.
y si no hay éter no puede decirse que la Tierra se mueve a través de este
elemento. El experimento de Michelson y Morley es el experimento fallido cada, puesto que se cometer a una falacia de a rmaci n del consecuente. gob.ar/sitios/encuentro/programas/detallePrograma rec_id=117887 don-
más famoso de la física, porque, a pesar de las intenciones originales de los de se recorren hitos de la medicina como la invención de la anestesia, el
investigadores, parecía indicar cosas totalmente innovadoras. Por un lado,
Tambi n, vimos que los cient cos disponen de estrategias ad hoc para halla go de remedios a trav s de la autoexperimentaci n, etc. All se en-
parec a indicar que el ter no existe, pues si lo hiciera habr a un viento de
éter y el viento de éter quedó descartado dados los resultados que arroja el salvar a una hip tesis de la refutaci n. Disponen más espec camente cuentran algunas de las investigaciones médicas más representativas con
interfer metro. Por otro lado, el experimento parec a abrir la posibilidad de de las hip tesis ad hoc que son hip tesis cuyo nico objetivo es salvar las que se pueden trabajar las categorías desarrolladas en este capítulo.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

Otro caso de investigación con el que se pueden trabajar las nociones de Probablemente, en esta caracter stica se encuentre parte de su xito en
este capítulo está en la película del director George Miller (1992), Un cuanto a resultados obtenidos. En 1929 el grupo se dio a conocer con
milagro para Lorenzo. Lorenzo sufre una enfermedad llamada ALD, Capítulo IV la aparici n de un mani esto que titularon “La concepci n cient ca
que además de sordera, ceguera y di cultades para tragar y comunicar- del mundo. El C rculo de Viena . En el Mani esto queda claro que los
se, causaba la muerte. La pel cula cuenta la odisea cient ca y personal objetivos del grupo no son meramente académicos, sino también de
que médicos y familiares de Lorenzo vivieron para descubrir la cura de naturaleza política. La consideración de tales objetivos, como veremos,
esta enfermedad. permite comprender mejor sus tesis los cas respecto a la ciencia.
Por Santiago Ginnobili
La orientación política de sus investigaciones queda plasmada en el
Bibliografía siguiente fragmento del Mani esto:
Introducción
cheney , doRoThy y Seyfarth, Robert (2007), Baboon Metaphisics.The Con el transcurso de los años se formó en torno a Schlick un Círculo cuyos miembros
Evolution of a Social Mind. Chicago, CUP. En el capítulo III: Conceptos, hipótesis y contrastación, llevamos a unieron distintos esfuer os en la direcci n de una concepci n cient ca del mundo.

deSTéfano, maRiela (2010), La frontera de lo cient co marcada por cabo un análisis pormenorizado de la forma en que se contrastan hipó- A través de esta concentración se produjo una fructífera estimulación mutua. […]
Ninguno de ellos es de los as llamados l sofos “puro , sino que todos han trabajado
el método hipotético-deductivo, en Pedace, Karina y Riopa, Christian tesis cient cas sencillas. Sin embargo, el conocimiento cient co no es
en alg n ámbito cient co particular. Ellos provienen, más precisamente, de diferentes
(Eds.), Cuestiones epistemológicas. Una introducción a la problemática un simple c mulo de hip tesis aisladas. Ni Ptolomeo, ni Cop rnico, ni ramas de la ciencia y originalmente de distintas posiciones los cas. Con el transcur-
cient ca, Buenos Aires, Buenos Aires, Universidad Nacional de Luján. Lamarck, ni Darwin formularon meras hip tesis. Propusieron marcos so de los años, sin embargo, apareció una creciente unidad; esto también fue el efecto

díez, joSé a. y Moulines, Carlos U. (1997), undamentos de losof a de conceptuales complejos con los cuales tratar los fenómenos de los que de la orientaci n espec camente cient ca: “lo que se puede decir en lo absoluto ,
pretend an dar cuenta. Los cient cos suelen llamar a estos conglome- se puede decir claramente (Wittgenstein); en las diferencias de opini n es nalmente
la ciencia, Barcelona, Ariel.
posible, y de all que se exija, un acuerdo. Tambi n se reconoce un acuerdo nota-
hempel, KaRl (1998, [1973]), Filosofía de la Ciencia Natural, Madrid, rados de conocimiento “teorías”.
ble en las cuestiones de la vida, aun cuando estos asuntos no estuvieron en el primer
Alianza Editorial. ¿Qu es una teor a cient ca plano de los temas discutidos dentro del Círculo. No obstante, esas actitudes tienen
moledo , leonaRdo y Magnani, Esteban (2009), Diez teorías que con- una a nidad más estrecha con la concepci n cient ca del mundo de lo que pudiera

movieron al mundo. De Copérnico al Big Bang, Buenos Aires, Capital Esta pregunta es central para la Filosofía de la ciencia y por supuesto parecer a primera vista desde un punto de consideración puramente teórico. Así mues-
tran, por ejemplo, los esfuerzos hacia una nueva organización de las relaciones econó-
Intelectual. tiene una diversidad de posibles respuestas. En parte, los debates y di-
micas y sociales, hacia la unión de la humanidad, hacia la renovación de la escuela y
poppeR, KaRl (1971), La l gica de la in estigaci n cient ca, Madrid, Tecnos. ferencias entre perspectivas los cas acerca de la ciencia, tienen su la educaci n, una conexi n interna con la concepci n cient ca del mundo; se muestra
RoSTand , jean (1966), Introducción a la historia de la biología, Ma- eje en el modo en que interpretan o en el signi cado que asignan a la que estos esfuer os son a rmados y vistos con simpat a por los miembros del C rculo,
drid, Ediciones Península. noci n de “Teor a cient ca . En este documento se propone un reco- por algunos también activamente promovidos. (Hahn, Neurath y Carnap, 2002)

Seco G Ranja , feRnando y Jiménez Ruiz, Antonio (2006), Visión rrido por algunas de las perspectivas más importantes del siglo XX,
Con el ascenso del nazismo, muchos de los miembros habían comen-
ultrasónica de los murciélagos, Seminario de Sistemas Inteligentes destacando aspectos fundamentales de cada una de ellas y recuperando
zado a tener problemas por sus posiciones políticas o por su origen
SSI2006, Libro de actas, Universidad Rey Juan Carlos, Madrid. en algunos tramos las voces de sus propios representantes.
judío y algunos terminaron emigrando, por ejemplo, a Estados Unidos
zahn , RaineR et al. (2007), Social concepts are represented in the supe-
(entre ellos, Carnap). Allí, se consolidó una perspectiva, sin las aristas
rior anterior temporal cortex, PNAS 104, (nº 15, pp.6430-6435).
pol ticas y los debates te ricos y los cos caracter sticos del grupo de

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

Comenzaremos presentando la concepción del Empirismo lógico, en origen, pero heredera indiscutible de los estudios iniciados en ese mar-
la que surge la noci n cl sica de teor a cient ca, entendida como un co. Esta se volvió hegemónica en los países anglosajones entre 1940 y
conjunto de hipótesis de cierto tipo, unidas por relaciones deductivas. 1960 y es conocida como Concepción heredada o estándar o Concep-
Veremos, luego, una serie de críticas que se hicieron a este enfoque. ci n clásica de las teor as cient cas. 1

En los años sesenta aparecen planteos que se opusieron al tipo de aborda- 1 1 r nc ales n uenc as sobre el Em r smo l co
je predominante hasta el momento. Tales autores opinaban que los l so- El Empirismo lógico es una posición que dialoga y discute con posicio-
fos de la ciencia debían darle más importancia a lo que de hecho ocurría nes los cas anteriores, en particular la de los l sofos empiristas y
en historia de la ciencia. Kuhn ha sido el autor más in uyente de ese pe- la de los l sofos logicistas.
ríodo, y nos detendremos especialmente en su concepción de la ciencia y
del cambio cient co. Finalmente, de todos los enfoques que actualmente En relación con el empirismo, es necesario remitirse a una antigua dis-
son sostenidos en la Filosofía de la ciencia, veremos la concepción del cusión en Filosofía respecto al fundamento y el origen lógico del co-
Estructuralismo metate rico. Se trata de un enfoque que re ne en su seno nocimiento. Los empiristas consideran que el conocimiento proviene y
muchas de las características de las perspectivas anteriores. se fundamenta en la experiencia sensible. Por su parte, los racionalistas
consideran que todo conocimiento proviene de y se fundamentaba en la
1. Empirismo lógico razón. El acceso al conocimiento se da a través de mecanismos indepen-
dientes de la experiencia, como el recuerdo o la intuici n. Estas ser an
El Empirismo l gico es uno de los movimientos los cos más in u-
posiciones extremas, pues en general, la mayor a de los autores aceptan
yentes del siglo XX tanto por las adhesiones como por los rechazos
alguna posici n intermedia entre estos dos extremos. A los empiristas
provocados. En el centro de este movimiento se encontraron los l so-
lógicos puede considerárselos como los principales representantes del
fos y cient cos que conformaron el denominado “C rculo de Viena ,
empirismo contemporáneo. En muchos aspectos son herederos claros
responsables principales del a an amiento de la losof a de la ciencia
de la losof a del escoc s David Hume (1711-1776). Como empiristas
como actividad profesional autónoma.
consideraban que todos los conceptos que uno poseía provenían de la
experiencia y, además, que no era posible conocer del mundo a tra-
El C rculo de Viena surgi en 1922 organi ado por el l sofo alemán
vés del pensamiento puro. Sin embargo, como Hume, y a diferencia de
Moritz Schlick (1882-1936). Los miembros más famosos del Círculo
otros empiristas como el l sofo ingl s John Stuart Mill (1806-1873),
fueron Rudolph Carnap (1891-1970), Otto Neurath (1882-1945) y Kurt
consideraban que las verdades matemáticas no se justi caban a partir
Gödel (1906-1978), pero se trataba de un grupo numeroso con interés
de la experiencia.
en la re exi n acerca de la ciencia. Una de las particularidades de los
miembros del Círculo de Viena, frente a la forma de trabajo individua-
1 Para acceder a la historia de la losof a de la ciencia durante el siglo XX y las in uencias que la
lista de los l sofos más tradicionales, era que trabajaban en equipo.
política tuvo sobre ella, puede leerse el libro de Reisch (2009).
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

En relación con el logicismo, parte de la novedad de la concepción la que se presentara una ciencia uni cada. El ideal de la ciencia uni cada no segundos, en cambio, s ten an signi cado emp rico. La ciencia pod a
constituye el lugar principal que se le asigna a la lógica. Por un lado, debe relacionarse con pretensiones reduccionistas (la idea de que toda la permitir proveer los medios más adecuados para conseguir cierto obje-
bajo la in uencia de pensadores como Bertrand Russell (1872- 1970) y ciencia se reduce a alguna de sus disciplinas, o que en el futuro así será), tivo, pero nunca podría permitir determinar cuáles son los objetivos a
Ludwig Wittgenstein (1889-1951), conceb an que la tarea principal de sino con la posibilidad de crear un lenguaje com n a toda la ciencia que seguir. En los discursos de la ética o la política, entonces, solo tendrían
la losof a consistiera en clari car los conceptos del lenguaje cient - facilitara el diálogo entre cient cos de diferentes ramas y de cient cos signi cado cognoscitivo los juicios instrumentales, no los absolutos.
co. Al seguir a estos pensadores, en un comienzo, los empiristas lógicos con el resto de la sociedad. El modo de llevar adelante el ideal de la cien-
sosten an que esta clari caci n se reduc a al análisis l gico (meramente cia uni cada tambi n fue variando a lo largo de la historia del empirismo Todo este largo rodeo nos ha permitido acercarnos a la caracterización
sintáctico). Sin embargo, posteriormente, se vio la necesidad de recu- lógico, pero en un comienzo tuvo que ver con la adopción de un lenguaje que los empiristas lógicos hacían de la metafísica. Un enunciado era me-
rrir al análisis semántico (que tiene en cuenta el signi cado y no solo al que llamaban “ sicalista , en el sentido de lenguaje de los eventos del tafísico, bajo su punto de vista, cuando aunque no siendo contrastable
la forma lógica de los enunciados) y pragmático (que tiene en cuenta mundo físico, al cual todo el lenguaje de las diversas ciencias pudiese ser con la experiencia ni siendo anal tica, se lo utili aba como si expresara
cuestiones relacionadas con el uso de esos enunciados). traducido. Posteriormente, la traducibilidad de teor as cient cas entre s hechos del mundo. Es decir, una oración sería metafísica si careciendo
y la traducibilidad a un mismo lenguaje fue fuertemente atacada por los de signi cado cognoscitivo se la utili aba como si lo tuviera. Oraciones
La fuerte importancia que la lógica asumía en sus puntos de vista tiene l sofos historicistas, como veremos especialmente cuando tomemos en como “Dios existe , “Dios no existe , “El absoluto es perfecto , “La
que ver con que la lógica moderna (como la lógica proposicional sim- consideración las ideas de Thomas Kuhn. realidad está constituida por dos tipos de sustancias, la material y la
bólica que fue presentada en el capítulo II) era de reciente elaboración pensante”, “El motor inmóvil es la primera causa”, “Todo fenómeno
y se mostraba como una herramienta poderosísima. Esta lógica había A manera de los empiristas del siglo XVII (como el ya mencionado tiene una causa”, “El sabio es el que persigue el bien”, “Las cosas sen-
sido desarrollada por Gotllob Frege (1848- 1925) y Bertrand Russell, Hume o John Locke), los empiristas lógicos tenían una fuerte tendencia sibles son copias imperfectas de las ideas del mundo suprasensible”,
entre otros, en su intento de mostrar que la matemática no era más que antimetafísica. Para que el lenguaje universal pudiera cumplir con el rol “Pienso, luego existo y otras oraciones de la losof a tradicional, al ser
una rama de la lógica. El programa de reducción de matemática a la pretendido de facilitar la comunicación de la ciencia, debía encontrarse usadas por el metaf sico como expresi n de hechos del mundo, y no ser
lógica, conocido como “logicismo”, resultaría fallido. libre de metafísica. ni anal ticas ni contrastables con la experiencia, eran metaf sicas.

¿En qu consiste la metaf sica seg n estos pensadores


12 cerca de “la conce c n c ent ca del mundo y sus Maliciosamente, Carnap caracteriza a los metafísicos como “poetas sin
Los empiristas l gicos consideraban que los nicos enunciados con sig- ritmo (en su mente tiene un lugar especial el l sofo Heidegger, de ah
objetivos
ni cado cognoscitivo (es decir, que constitu an conocimiento) eran los que su ejemplo favorito de enunciado metafísico sea una frase suya: “la
El objetivo principal del Círculo de Viena, como decíamos, consistió que proporcionaba la ciencia fáctica, es decir, aquellos que podían rela- nada nadea ). Vean el siguiente fragmento del Mani esto:
en la clari caci n del lenguaje cient co, que implicaba, por un lado, la cionarse de alg n modo con la experiencia, y los enunciados anal ticos El metaf sico y el te logo creen, incomprendi ndose a s mismos, a rmar algo con sus
eliminación de la metafísica –tal como ellos la concebían–, y, por otro, de las ciencias formales, como la matemática o la lógica. Un enunciado oraciones, representar un estado de cosas. Sin embargo, el análisis muestra que estas
la elaboraci n de un lenguaje universal arti cial diferente del lenguaje es anal tico si su verdad depende del signi cado mismo de los concep- oraciones no dicen nada, sino que s lo son expresi n de cierto sentimiento sobre la
vida. La expresi n de tal sentimiento seguramente puede ser una tarea importante en la
natural o cotidiano. tos que guran en l, como en el caso de las de niciones (“los solteros
vida. Pero el medio adecuado de expresi n para ello es el arte, por ejemplo, la l rica o
no están casados”) o bien en virtud de su propia forma, como en el caso la m sica. Si en lugar de ello se escoge la apariencia ling stica de una teor a, se corre
de las tautologías. Los enunciados de las ciencias fácticas además de un peligro: se simula un contenido teórico donde no radica ninguno. Si un metafísico o

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

Como dec amos antes, la clari caci n del lenguaje cient co no era un signi cado cognoscitivo, ten an signi cado emp rico. Si bien, la forma un teólogo desea retener el ropaje habitual del lenguaje, entonces él mismo debe darse
cuenta y reconocer claramente que no proporciona ninguna representación, sino una
n en s mismo, pues en realidad se trataba de un medio para alcan ar en que estos enunciados se vinculaban con la experiencia fue variando
expresi n, no proporciona teor a ni comunica un conocimiento, sino poes a o mito. Si
objetivos pol ticos. La meta ulterior de la clari caci n del lenguaje de con el tiempo, se puede resumir y simpli car la posici n señalando un m stico a rma tener experiencias que están sobre o más allá de todos los conceptos,
la ciencia era colaborar, tanto con la comunicaci n entre cient cos, as que solo tienen signi cado emp rico aquellos enunciados que es po- esto no se lo puede discutir. Pero l no puede hablar sobre ello; pues hablar signi ca
como con la comunicación de la ciencia a la sociedad. Pues, el conoci- sible contrastar con la experiencia. El resto de los enunciados o eran capturar en conceptos, reducir a componentes de hechos cient camente clasi cables.

miento cient co ser a aquel que llevar a al progreso social y econ mico. anal ticos o bien carec an de signi cado cognoscitivo.
El recha o a la metaf sica ha pasado a la historia de la losof a como la
Veamos cómo se presenta esta cuestión en el siguiente fragmento del faceta más conocida del Círculo. Independientemente de las personas
As , el criterio de signi cado cognoscitivo brindado por los empiristas
Mani esto: a las que se dirigiese este ataque, y a lo justo que tales ataques fuesen,
lógicos sería el siguiente:
La concepci n cient ca del mundo no se caracteri a tanto por sus tesis propias, como el hecho de que la ciencia no pueda resolver unívocamente discusio-
más bien por su posición básica, los puntos de vista, la dirección de la investigación. Un enunciado tiene signi cado cognoscitivo si es anal tico o nes éticas ni estéticas es aceptado hoy casi universalmente. Tampoco
Como objetivo se propone la ciencia uni cada. El esfuer o es aunar y armoni ar los contrastable con la experiencia. se considera que existan medios independientes de la experiencia de
logros de los investigadores individuales en los distintos ámbitos de la ciencia. De esa
conocer el mundo. En esto, el movimiento empirista fue convincente.
aspiración se sigue el énfasis en el trabajo colectivo; de allí también la acentuación de Que un enunciado no tuviera signi cado cognoscitivo no implicaba que
Muchos estiman ofensiva y equivocada, sin embargo, su consideración
lo aprehensible intersubjetivamente; de all surge la b squeda de un sistema de f rmulas careciera de signi cado en absoluto, pues seg n ellos exist an otros tipos
neutral, de un simbolismo liberado de la escoria de los lenguajes históricamente dados; de que detrás de autores, como los l sofos alemanes Martin Heidegger
de signi cado, como el emotivo. Frases como “El universo de esta no-
y de all tambi n, la b squeda de un sistema total de conceptos. Se persiguen la limpie a o Georg Wilhelm, Friedrich Hegel, hubiera cierta deshonestidad en el
che tiene la vastedad del olvido y la precisi n de la ebre , en este sen-
y la claridad, rechazando las distancias oscuras y las profundidades inescrutables. discurso, que detrás de sus discursos complejos no hubiera más que una
En la ciencia no hay “profundidades , hay super cie en todas partes: todo lo experi- tido, no tendr a signi cado cognoscitivo, pues, no ser an contrastables
simulaci n de signi cado. Finalmente, cabe aclarar que el uso de “me-
mentable forma una red complicada no siempre aprehensible en su totalidad, sino que por medio de la experiencia. Su objetivo no es describir un hecho del
a menudo sólo comprensible por partes. Todo es accesible al hombre y el hombre es
taf sica como un adjetivo negativo no es el habitual entre los l sofos,
mundo, sino expresar las emociones de la persona que la emitió. Pero
la medida de todas las cosas. […] muchos de los cuales llaman “metafísica” al área en que trabajan.
tambi n ocurrir a lo mismo con las re exiones ticas y pol ticas que ni
Para la concepci n cient ca del mundo no hay enigmas insolubles. La clari caci n
de los problemas los cos tradicionales nos conduce, en parte, a desenmascararlos pueden ser decididas por la experiencia ni se encuentran constituidas
Aunque es com nmente aceptado que el Empirismo l gico ha sido su-
como pseudo-problemas y, en parte, a transformarlos en problemas empíricos y de allí por juicios analíticos (como aquellas posiciones políticas defendidas
perado y abandonado, es interesante destacar que contin a siendo do-
a someterlos al juicio de la ciencia de la experiencia. En esta clari caci n de proble- por los empiristas l gicos mismos en el Mani esto). Consideraban, en
mas y enunciados consiste la tarea del trabajo los co y no en el planteamiento de minante la idea de que una tarea importante de la losof a de la ciencia
este sentido, que exist an dos tipos de juicios de valor: los absolutos y
enunciados “ los cos propios. consiste en la clari caci n del lenguaje de la ciencia, si bien esta no sea,
los instrumentales. Los juicios de valor absoluto eran aquellos en los
tal como ellos pensaban, la nica tarea que la losof a puede reali ar
Como se a rma en el texto precedente, los objetivos señalados y un que se a rmaba la deseabilidad de cierto valor u objetivo –por ejem-
genuinamente, ni se realice a través de la eliminación de la metafísica
acuerdo básico y general respecto a los medios, era lo que uni caba las plo, “la sociedad debe tender hacia una mejor distribución”– mientras
y la confecci n de un lenguaje universal. La clari caci n del lenguaje
posiciones de los diferentes miembros del Círculo. que los juicios de valor instrumental a rmaban los medios para obtener
de la ciencia sigue constituyendo una de las tareas fundamentales del
tales objetivos –por ejemplo, “para lograr una mejor distribución, los
l sofo de la ciencia. A continuaci n, se presenta el m todo de clari -
La tarea de la clari caci n del lengua e de la ciencia, era concebida por impuestos deben ser progresivos –. Los primeros carec an de signi -
cación, que Carnap denominó “elucidación”.
ellos como la traducción de toda la ciencia a un lenguaje universal en el cado emp rico, y por no ser anal ticos, de signi cado cognoscitivo. Los
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

tual. “Elucidar no es lo mismo que “explicar . Los problemas a explicar lógicas, si es lógico). Este requerimiento, tal vez, podría ser medido
Como vimos, una parte esencial de la creación del lenguaje universal que permitiría por los cient cos suelen estar enunciados de manera exacta –por ejem- también por la cantidad de problemas o pseudoproblemas, malenten-
la comunicaci n de la ciencia, seg n los empiristas l gicos, consist a en la elimina-
ci n de la metaf sica. En esta tarea cumpl a un rol esencial el criterio de signi cado plo, “¿por qué los cuerpos caen con una aceleración de 9,8 m/s2 –. didos o desacuerdos acerca de la ciencia que pueda solucionar o di-
cognoscitivo. Pero tal criterio no permitía, por sí mismo, distinguir entre enunciados La explicaci n consiste habitualmente en la subsunci n a leyes genera- solver la elucidación.
metaf sicos y no metaf sicos, sino entre enunciados con signi cado cognoscitivo y les. Reiteramos, el concepto a elucidar no está dado en t rminos exac- Simplicidad: sin poner en jaque a ninguno de los requisitos anterio-
enunciados sin signi cado cognoscitivo. Los enunciados metaf sicos eran pensados
como un subtipo de enunciados sin signi cado cognoscitivo.
tos, si lo estuviera no sería necesaria la elucidación. La intención no es res, que son más importantes que este, la elucidación debe ser lo más
De acuerdo con los criterios del Empirismo l gico, identi quen y justi quen si los si- explicar por qu ocurre un fen meno, sino la confecci n de un lenguaje simple posible. A igualdad de los otros requisitos, es preferible la elu-
guientes enunciados tienen signi cado cognoscitivo o no, y, posteriormente, si son anal ti- más claro y preciso. cidación que formule el explicatum de modo más simple. Por supues-
cos, si tienen signi cado emp rico o emotivo. ¿Alguno podr a ser considerado metaf sico
to, la medida de la simplicidad es siempre una cuestión compleja,
1.“Hay vida en Marte”. El c dac n clar cac n de un concepto ago amb guo o mprec so
puesto que cierto explicatum puede ser más simple por utilizar menos
2.“Los dinosaurios y los homo sapiens convivieron en el pasado”. en términos más exactos. Debe distinguirse de la explicación, que es
conceptos, o por ejemplo, por emplear una lógica más sencilla. Si
3.“4 – 1 = 3 . lo que hacen los c ent cos en sus tareas hab tuales con los fen me-
4.“La vida es el valor supremo”. bien tales formas distintas de simplicidad pueden entrar en con icto,
nos de la naturale a amb n debe d st ngu rse de la de n c n que
5.“He de fusionar mi resto con el despertar, aunque se pudra mi boca por callar”. esto no pone en duda el hecho de que sea preferible buscar la mayor
intenta encontrar un sinónimo. Pues en la elucidación se busca reem-
6.“Dios, que es acto puro y no tiene nada de potencialidad, tiene un poder activo simplicidad posible en todos los aspectos.
in nito sobre las demás cosas . plazar un concepto oscuro por uno más claro.
7.“Los países con pena de muerte no tienen tasas de homicidios intencionales más bajos”. En general, los requisitos que in uyen en las discusiones entre diferen-
8.“La pena de muerte es un medio adecuado para bajar los índices de homicidios”. Una cuesti n signi cativa para señalar consiste en que, si bien se parte tes elucidaciones son los dos primeros. Supongamos que proponemos
9.“Es importante bajar la tasa de homicidios”.
de que el concepto a elucidar, el explicandum, es inexacto, esto no quie- para elucidar el concepto de “mesa , la expresi n “objeto con cuatro
10.“El mundo está compuesto por entidades físicas con propiedades físicas y no
existen entidades supranaturales .
re decir que no haya que hacer el esfuer o de expresarlo del modo más patas”. Evidentemente el criterio de similitud no está siendo cumplido
claro posible, señalando, por ejemplo, que lo que se pretende elucidar es por dos razones diferentes. Por un lado, casos de mesas que no son du-
el uso de cierto concepto en cierta teor a o en cierto contexto, y poniendo dosos en los usos cotidianos, como el de mesas con solo una pata cen-
1.3. Elucidaciones conceptuales
la máxima informaci n respecto al modo en que es utili ado. Seg n Car- tral, o mesas colgadas de la pared, dejan de ser mesas. La elucidación
Seg n los l sofos del C rculo de Viena la tarea primordial de la lo- nap, este es un requisito que violan con frecuencia los l sofos cuando es demasiado restrictiva, pues se pierden casos que queremos retener.
sofía era el análisis del lenguaje de la ciencia. Carnap (1950) propuso formulan preguntas como “¿qu es la justicia . Para que sea posible Además, objetos que de ninguna manera consideraríamos mesas, como
llamar a la operaci n por la cual se clari ca un concepto de la ciencia: realizar la elucidación, el explicandum debe estar dado en los términos una bañera antigua con patas, caerían bajo el explicatum. La elucida-
“elucidación”. La meta que se busca en una elucidación es reemplazar
2
más claros posibles, a través de la utilización de ejemplos de uso y apli- ción en este caso sería demasiado permisiva. Ambas críticas atacan la
un concepto ambiguo, vago o poco claro, por uno que no lo sea. Se caci n, explicaciones informales, etc. Esto todav a no constituye la elu- similitud. Por otro lado, también es posible criticar la elucidación por
suele llamar explicandum al concepto dado (o al término usado para cidación, por supuesto, sino la correcta formulación del problema. poco exacta. Dado el signi cado ambiguo de “pata no queda claro si
designarlo) y explicatum al concepto (o al término propuesto para de- los perros caen o no bajo el explicatum.
2 “Elucidación” es la traducción habitual para explication. En inglés se propone este término de raíz En cuanto a los criterios de adecuación de las elucidaciones, lo primero
latina para oponerlo a explanation. La idea es distinguir las explicaciones que dan los cient cos, de los a señalar es que por la esencia de la tarea misma en la que no se exige
análisis que hacen los l sofos.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

signarlo) que se elige para ocupar su lugar. Si bien lo que tenían en una soluci n exacta a un problema exacto, no existe una elucidaci n co- Dejando de lado la posible exageraci n de los empiristas l gicos al ma-
mente era la elucidaci n de conceptos del lenguaje cient co, es posible rrecta o errónea en términos absolutos, sino que habrá elucidaciones más nifestar que la nica tarea de la losof a es la clari caci n del lenguaje
proponer elucidaciones de conceptos del lenguaje natural. Supongamos satisfactorias que otras. Carnap ofrece criterios que debe cumplir una por medio de elucidaciones, es interesante destacar que las elucidacio-
que queremos elucidar el concepto de “mesa”. Por supuesto, sabemos buena elucidación y cuya satisfacción, en mayor o menor grado, pueden nes conceptuales siguen tomando una parte central en la losof a en ge-
usar ese concepto (del mismo modo en que los cient cos saben em- permitirnos evaluar la adecuación comparada de distintas elucidaciones. neral y de la ciencia en particular y es una de las tareas que más pueden
plear los conceptos que utili an). La idea es explicitar las reglas impl - servir a la práctica cient ca misma. La aclaraci n de los conceptos en
Criterios de adecuación de las elucidaciones:
citas que se utili an al aplicarlo, volvi ndolo menos vago o más exacto. los que se plantean los desacuerdos entre cient cos suele ser suma-
Considérese como propuesta de elucidación del concepto de mesa, el Similitud: no puede exigirse a una elucidaci n una coincidencia com- mente fructífera. Y, efectivamente, las elucidaciones también son im-
explicandum, y el explicatum más exacto “tabla de cuatro patas que pleta entre explicatum y explicandum. Puesto que el primero debe portantes, como los empiristas lógicos pretendían, a la hora de comuni-
sirve para apoyar cosas”. Es fácil mostrar la inadecuación de esta elu- ser más exacto que el segundo, diferirán en, al menos, alguna de sus car y enseñar ciencia. De hecho, todo el aparato conceptual brindado en
cidación, pues hay objetos que consideramos “mesas” que no cumplen aplicaciones. Pero, por supuesto, tiene que haber alguna relación de el capítulo III de esta publicación permite elucidar mucho del lenguaje
con estas características (no toda mesa tiene cuatro patas, por ejemplo). similitud, puesto que la idea no es reempla ar un concepto inexacto utili ado en la práctica cient ca habitual. Palabras como “contrastar ,
Discutiremos, a continuación, la naturaleza de las elucidaciones para por uno exacto que no tenga nada que ver con el primero. La idea, “probar , “experimento , “observaci n , “veri caci n , “explicaci n ,
después pasar a los criterios de adecuación. entonces, es conservar la mayor a de los usos del explicandum, o tal aparecen constantemente en las publicaciones especializadas y en la
vez, conservar los usos no dudosos. Así, por ejemplo, si queremos oralidad de los cient cos, a veces, utili adas ambigua y vagamente. El
Lo primero que hay que tener en cuenta para comprender en qué con- elucidar el concepto de “pescado” en sus usos en el lenguaje natural, análisis lógico de la contrastación que vimos puede permitir presentar
siste una elucidaci n es que no se trata de una “de nici n del concepto debemos conservar sus usos no dudosos. Los peces que se encuentran estas cuestiones de manera más prolija y adecuada. Por otra parte, en
a elucidar. En el caso de la de nici n se busca la sinonimia, es decir, en venta en la pescadería deben seguir siendo pescados. El concep- este capítulo, en las discusiones que veremos, se encontrarán involu-
igualdad de signi cado, entre el t rmino a de nir y la expresi n que lo to parece requerir una elucidación ya que si se consulta a diferentes crados todo el tiempo los criterios brindados. Discutiremos, además
de ne. En este caso, esta no es la meta, puesto que buscamos el reem- personas acerca de su utilización acordarán todas con respecto a este de c mo es el cambio cient co, cuál es el mejor modo de elucidar
pla o de un concepto poco exacto por uno más exacto, es decir, por uno ltimo punto, pero no lo harán en cuanto a si es l cito llamar pescado conceptos como “teor a , “revoluci n cient ca , “experiencia , “ob-
distinto. Es interesante señalar que los cient cos en sus discusiones a peces muertos en el mar o a peces capturados vivos en peceras. servación”. Tales conceptos, utilizados normalmente de manera vaga
habituales acerca de los conceptos que utilizan, en muchos casos están El explicatum debe decidir esos casos confusos para ser más exacto, y ambigua (incluso en el capítulo I: Historia de la ciencia. Dos revo-
tratando de realizar una elucidación pero describen esa tarea como la pero debe retener los usos no dudosos del concepto. luciones), serán fuertemente discutidos a lo largo de este trabajo. Por
b squeda de una de nici n. Un ejemplo de esto es el intento por parte Exactitud: el explicatum debe encontrarse caracterizado de la manera otra parte, los trabajos elucidatorios cumplen un rol fundamental en las
de los bi logos de de nir el concepto de “especie . Como los criterios más exacta posible. Las reglas de su uso deben encontrarse explici- losof as especiales de la ciencia. En este caso, no se intenta elucidar
de adecuaci n de una de nici n y de una elucidaci n son distintos, esto tadas (una de las formas en las que se puede lograr esto es mediante los conceptos con los que los cient cos hablan de su práctica, sino los
puede acarrear innumerables malentendidos. de niciones, pero, en algunos casos, puede que no sea posible). propios conceptos cient cos. Conceptos como “gen , “part cula , “es-
Fertilidad: la elucidación debe ser interesante y fructífera. Carnap pecie”, “clase social”, etc., son utilizados a veces de manera ambigua.
Otra diferencia importante es que la tarea realizada al elucidar conceptos señala que esto se mide a través de la cantidad de leyes universales en Es un rol de la losof a especial de la ciencia (reali ada por l sofos o
es diferente de la tarea reali ada por los cient cos en su práctica habi- por cient cos) elucidar tales conceptos.
las que el concepto aparece (empíricas, si es un concepto no lógico, o
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

El tratamiento de Carnap de la elucidación tiene por objeto a los con- fácticas, ya que estas no son sistemas meramente formales sino que de los problemas que enfrentó esta concepción de teoría que terminó
ceptos. Pero es posible dar un tratamiento similar a la clari caci n de pretenden hablar de ciertas porciones del mundo. Una cuestión que ha siendo reemplazada por concepciones distintas.
teor as cient cas. En este caso, se suele hablar de “reconstrucci n más sido fuertemente discutida es, justamente, cómo las teorías fácticas ad-
Ejemplo de presentación estándar de una teoría
que de “elucidaci n . Una buena reconstrucci n de una teor a cient ca quieren semántica emp rica, c mo adquieren signi cado fáctico.
Teor a celular simpli cada reconstruida informalmente
debe cumplir criterios semejantes. La reconstrucción de teorías cien-
t cas fue la tarea que los empiristas l gicos se pusieron como meta. Para la solución de este problema dentro del Empirismo lógico, es cen- Vocabulario extral gico te rico:
Veremos, en el punto siguiente, su concepci n de las teor as cient cas. tral la distinción ya vista en el capítulo anterior- entre términos ob- - Célula
- x procede de y y de z por unión celular
La elucidaci n de conceptos cient cos suele presuponer, además, la servacionales y teóricos. Los términos observacionales son aquellos
- x e y proceden de z por división celular
reconstrucción de las teorías en las que estos aparecen. que nombran entidades directamente observables (por ejemplo, “rojo”, - x en el tiempo y está compuesto por z células
“perro”, “más alto que”, etc.). Los términos teóricos son aquellos que
Vocabulario extral gico observacional:
nombran entidades no observables directamente (“átomo”, “gen”, “va-
Los l sofos del C rculo de Viena ten an una actitud bastante intolerante frente a la - Tejidos de organismos vivos
lencia”, etc.). Esta distinción permite caracterizar a los enunciados - Instantes temporales
losof a tradicional. Consideraban que gran parte de esta carec a de signi cado cog-
noscitivo, es decir, no constituía conocimiento. Tal actitud fue fuertemente criticada básicos, a las generalizaciones empíricas y a los enunciados teóricos - x está compuesto por y
desde diversos ámbitos, y esta faceta intolerante es la que suele presentarse como puros y mixtos. Los enunciados te ricos mixtos tienen una funci n es- - El volumen de x es y
distintiva del grupo, olvidando la tarea que se proponían y los objetivos que se per- pecial en la teoría y posibilitan dar respuesta a la cuestión de cómo las - x es un organismo vivo
seguían: la confección de un lenguaje universal claro que permitiera la comunicación
teorías adquieren semántica empírica, pues son ellos los que permiten Enunciado teórico:
de los cient cos entre s y la comunicaci n de la ciencia a la sociedad. Independien-
temente de lo injustos que fuesen con respecto a otras áreas de la losof a al a rmar dar signi cado emp rico al cálculo axiomati ado. Por eso, se los ha - Toda célula proviene de otra célula por la fusión de otras dos células o por la división
que la nica tarea con sentido de la losof a consiste en el análisis y clari caci n de llamado “reglas de correspondencia”. Un enunciado teórico puro como de una célula en dos.
los conceptos cient cos, no cabe duda de que la elucidaci n conceptual constituye
“La rabia es un virus adquiere signi cado emp rico y permite, por lo Reglas de correspondencia:
una de las tareas interesantes de la losof a. De hecho, gran parte de la losof a de la
ciencia sigue dedicándose a eso, a elucidar conceptos y a reconstruir teorías y méto- tanto, realizar predicciones empíricas gracias a reglas de corresponden- - Los tejidos de los organismos vivos están compuestos de células.
dos de la ciencia. En parte, fue esto lo que se hizo en el capítulo III de este libro, al cia como “Los perros con rabia tienen espuma en la boca”. - Todo aumento de volumen de los tejidos de los organismos vivos se debe a la duplica-
presentar el modo en que se contrastan las hip tesis cient cas. ción de las células que lo componen.
El método utilizado, entonces, es el de la elucidación conceptual. En base a la pre-
sentación realizada de la elucidación, resuelvan las siguientes cuestiones: Además, a través de estas reglas de correspondencia es que podemos Esta teor a permitir a explicar, por ejemplo, el crecimiento de una planta.
deducir enunciados básicos que describen fenómenos observables.
a. Estable can diferencias entre elucidar, de nir y explicar.
b. Consideren los criterios de adecuación y señalen los diferentes motivos por los cuales
De este modo, las teor as permiten explicar fen menos observables,
las siguientes elucidaciones de conceptos del lenguaje natural serían inadecuadas: y, también, es así como es posible contrastarlas. La idea es que de las
El ascenso del nazismo provocó que varios de los miembros del Círculo emigraran
Gato: objeto peludo con cuatro patas.
teorías se deducen consecuencias observacionales del mismo modo que
y algunos de ellos, como Carnap, terminaron en los Estados Unidos. Allí, la concep-
Gato: animal que ma lla. de las hip tesis se lo hace. As , la contrastaci n de teor as no di ere en ción de teoría que proponían (aunque no los objetivos socialistas que perseguían)
Elefante: mam fero terrestre bastante grande. este enfoque en nada de la contrastación de hipótesis. Basta con poner se volvió dominante. En este libro, al comienzo del capítulo III, se establece una
Silla: objeto de madera que sirve para sentarse. distinción entre diferentes tipos de enunciados en base al vocabulario no lógico que
en lugar de la hipótesis, a la teoría a contrastar y todo el análisis reali-
los constituye y su alcance. Así, se distingue entre enunciados teóricos puros (cuyos
zado se conserva. t rminos no l gicos son todos te ricos), enunciados te ricos mixtos (cuyos t rmi-

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

c. Expliquen por qu las siguientes elucidaciones de conceptos metate ricos son Una teor a cient ca está compuesta, entonces, por un cálculo axio- nos no lógicos son de los dos tipos, teóricos y observacionales), generalizaciones
inadecuadas: emp ricas (cuyos t rminos no l gicos son todos observacionales, pero se re eren
matizado formado por, además de conceptos matemáticos y lógicos,
a clases enteras de entidades observables) y enunciados básicos (cuyos términos
Consecuencia observacional: enunciado básico sin t rminos te ricos. conceptos te ricos (que se identi can en esta concepci n con los no no l gicos son observacionales, pero se re eren a un grupo pequeño de entidades
Ley cient ca: enunciado veri cado a trav s de la observaci n y de la experimentaci n. observacionales) y estos son interpretados parcialmente a través de re- observables o a una sola). Estas distinciones fueron introducidas en el capítulo III
glas de correspondencia que tienen, aparte de conceptos matemáticos de esta publicación por su relevancia para la contrastación de hipótesis. Las reto-
maremos porque son vitales para la concepción de teoría del Empirismo lógico. Las
2. Concepción clásica de teoría y lógicos, los dos tipos de términos, observacionales y teóricos. Estas teor as cient cas, seg n esta concepci n, son un conjunto de enunciados te ricos
reglas de correspondencia conectan a algunos de los términos teóricos unidos por relaciones deductivas, que adquieren signi cado emp rico de manera in-
Parte del marco conceptual brindado por los empiristas lógicos en su con la experiencia (ver Figura 1). directa a trav s de enunciados mixtos que los conectan con enunciados observables,
clari caci n del lenguaje cient co, incluye una noci n de teor a cien- las reglas de correspondencia.
Entre los siguientes enunciados básicos que podrían pertenecer a una presentación vaga
t ca. Si bien, no es posible sostener que todos compartieran dicha po-
y clásica de alguna área de la biología molecular, distingan enunciados teóricos puros,
sición, fue en el seno de este grupo en donde surgió la concepción que mixtos, generali aciones emp ricas y enunciados básicos. Justi quen la elecci n.
llamaremos “concepción clásica de teoría”.
1. Las proteínas son biomoléculas formadas por cadenas lineales de aminoácidos.
2. Las proteínas son imprescindibles para el crecimiento del organismo.
Tradicionalmente se había tratado a las teorías matemáticas a partir de 3. Las proteínas se sintetizan dependiendo de cómo se encuentren regulados los
la noci n de sistema axiomático, es decir, básicamente, como conjuntos genes que las codi can.
de formas proposicionales (en el sentido visto en el capítulo II: Nocio- 4. Las enzimas son proteínas que provocan que una reacción química transcurra a
mayor velocidad.
nes básicas de lógicas del presente trabajo) unidos por la deducción.
5. Para que se produzca la melanina, sustancia que da color a la piel y al pelo, tiene
Presentar un sistema axiomático, consiste en presentar un lenguaje (t r- Figura 1. Representaci n de componentes de una teor a cient ca. Los cuadrados representan t rminos que ocurrir una serie de reacciones enzimáticas en las que es fundamental la enzima
minos y reglas de formación de fórmulas a partir de esos términos) y observacionales, los círculos términos teóricos. Las líneas no punteadas que unen los términos teóricos
tiroxinasa
establecen una red de relaciones entre los t rminos te ricos. Esta red representa al cálculo axiomati ado.
ciertas formas proposicionales fundamentales: los axiomas. El sistema 6. Los individuos en los que la en ima tiroxinasa no funciona son albinos, por falta
Las relaciones son establecidas a trav s de los enunciados te ricos. Finalmente, el cálculo axiomati ado
de melanina.
axiomático está formado entonces por esos axiomas y por todo lo que interpreta parcialmente, a través del contacto de alguno de sus términos teóricos con la base empírica, a
través de reglas de correspondencia, representadas por líneas punteadas. 7. Uno de cada cuatro hijos de una pareja de un albino con un no albino, será albino.
se deduce de ellos (los teoremas). Pero es una estructura meramente 8. Existe aproximadamente un albino por cada 17.000 habitantes.
formal, sin signi cados atribuidos. En un comien o se consider que Esta concepción de teoría pasará a ser dominante hasta los sesenta en 9. El m sico brasileño Hermeto Pascoal es albino.
tal herramienta ser a til tambi n para pensar las teor as cient cas. Un los países anglosajones y es conocida como la Concepción estándar (o 10. Existen albinos en todos los animales.
componente central de las teor as cient cas seg n los empiristas l - 11. Todos los hijos de Carlos y María son albinos.
heredada o clásica) de las teor as cient cas. Dentro de esta concepci n,
gicos es, consecuentemente, un cálculo axiomati ado, un conjunto de se suele llamar a los axiomas “leyes fundamentales y a todos los enun-
formas proposicionales unidas por la deducci n. Sin embargo, existe 3. Problemáticas acerca de la base empírica
ciados que se deduzcan de ellas, “leyes derivadas”.
una diferencia fundamental entre las teorías formales y las fácticas. Las Como se mencion más arriba, para con rmar, corroborar o refutar
teor as matemáticas podr an identi carse nicamente, en una primera No es fácil presentar ejemplos de reconstrucciones de teorías reales a una hip tesis o una teor a, es necesario veri car o refutar un enuncia-
instancia (porque esto es discutible) con sistemas axiomáticos forma- partir de este marco, pues los intentos de reconstruir teorías llevaron al do básico, es decir, un enunciado singular empírico. ¿De qué modo se
les, pero esto no se puede pensar de ning n modo acerca de las teor as abandono de la Concepción estándar. Más adelante, veremos algunos veri can o refutan los enunciados básicos La respuesta más sencilla
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

parece ser que tal veri caci n se reali a a trav s de la experiencia o de cero Tampoco ser a agua, puesto que esta se congela a los 0 grados. 3.3. Carga teórica de la observación
la percepción sensorial de que ocurra o no lo que el enunciado básico ¿Qu pasa si la calentamos a nivel del mar y hierve a los 50 grados
En el apartado anterior presentamos la tesis de que los enunciados bá-
describe. En los apartados anteriores, dimos por supuesto que es posible Tampoco sería agua. Es decir, cuando decimos “Este vaso tiene agua”,
sicos con los que describimos nuestras experiencias están cargados de
veri car los enunciados básicos a trav s de la experiencia. Pero hubo, estamos asumiendo varias cosas: si lo calentamos, su contenido hervirá a
teor a. En este caso, lo que se sostiene es que las experiencias mismas
y sigue habiendo, un fuerte debate al respecto. Por otra parte, como ve- 100 grados (a nivel del mar), si lo enfriamos, se congelará a 0 grados, si lo
no son del todo con ables o puras. La observaci n misma está cargada
remos más adelante, algunos sostienen que no es posible establecer una ponemos a la luz será transparente, si lo probamos, no tendrá gusto, si lo
de teor a, tal como ha sostenido el l sofo estadounidense Norwood
diferencia ni tajante, ni clara, entre términos teóricos y observacionales. olemos, no tendrá olor, etc. Además, estamos diciendo que cada vez que
Russell Hanson (Hanson, 1977).
Distinción que, como decíamos, resulta clave en la Concepción están- volvamos a repetir estos “experimentos seguirá comportándose de este
dar de las teor as cient cas. Pasemos a plantear la discusi n. mismo modo. Nada de esto surge solo de una experiencia directa. Nuestro aparato perceptivo impone formas a las sensaciones que recibi-
mos. Esto fue descubierto por una escuela psicológica llamada Gestalt.
3.1. Fundacionismo De manera general, lo que sostiene Popper es que en los enunciados
básicos aparecen necesariamente universales (términos que nombran a
Podemos caracterizar como fundacionistas las posiciones que conside- clases –como “agua”, “cuervos”, etc.– y no a individuos –San Martín,
ran que existe la posibilidad de establecer la verdad de los enunciados la Argentina, etc.–), cuya aplicabilidad supone comportamientos lega-
básicos a trav s de la experiencia. Esto brindar a una base emp rica liformes, es decir, que los objetos en cuestión se comportan de cierto Figura 2. Figura de dos dimensiones que con guramos como un cubo.
fuerte que podr a servir para con rmar o corroborar, y refutar las hip - modo siempre. Aplicar tales conceptos a una entidad particular presu-
tesis y teor as cient cas. En general, los empiristas modernos (como pone asumir hipótesis en cuanto al comportamiento de esa entidad e im- Al mirar el dibujo de la Figura 2, por ejemplo, que en realidad es una
Hume o Locke) eran fundacionistas. Pero hubo una fuerte discusión en plica predicciones con respecto a sus reacciones ante ciertos estímulos gura de dos dimensiones, vemos, inevitablemente un cubo. Dif cil-
el interior del Empirismo lógico con respecto al estatus de la base empí- en el presente y en el futuro. Seg n esta cr tica, entonces, los enunciados mente podamos ver ese dibujo como un conjunto de segmentos que se
rica, de modo que sería injusto caracterizarlos como fundacionistas. Por básicos dicen mucho más de lo que vemos en la experiencia, y por lo tanto, no tocan en sus extremos, es decir, la gura de dos dimensiones.
otro lado, todav a hoy existen autores fundacionistas con posiciones pueden ser veri cados por esta.
más so sticadas. Sin embargo, son com nmente aceptadas las cr ticas
Otro ejemplo es el que aparece como Figura 3. Aqu hay dos guras
que trataremos en los siguientes puntos. Cualquiera que hoy quiera sos- Otra forma de exponer la cr tica es a trav s de la idea de “concepto dis- distintas, una anciana y una joven. Si ven una primero, probablemente
tener que la observaci n es fundamento ltimo de ciertos enunciados, posicional”. Un concepto es disposicional si no nombra una propiedad tarden un poco en ver la otra (la nariz de la anciana es el mentón de la jo-
tiene que proponer una posición que ponga límites a estas críticas. que tiene un objeto en acto, sino cierta propiedad de reaccionar del objeto ven). Como se puede notar, una ve que aprendieron a ver las dos guras,
ante ciertos estímulos. El ejemplo típico es “frágil”. Decir que un objeto ven una u otra. Lo que revelan estas imágenes es cómo en la percepción
La posición fundacionista más simple consiste en sostener que los es frágil es sostener que frente a ciertos estímulos reaccionará de deter- misma se imponen formas. Difícilmente pueda describirse esto como una
enunciados básicos, por ser singulares y no contener términos no obser- minada manera, por ejemplo, que se romperá ante un golpe de ciertas observación pura y una posterior interpretación. Como señala el mismo
vacionales (te ricos), pueden ser veri cados o refutados en un n mero caracter sticas. Es com nmente aceptado que los enunciados con concep- Hanson, solo hay un acto de ver. Uno ve la anciana o ve la joven.
nito (no muy grande) de observaciones. Las cr ticas a esta idea son tos disposicionales no son veri cables por la experiencia directa, puesto
conocidas, en general, como críticas a la distinción teórico/observacio- que, si bien parecen singulares (“el vaso es frágil”), en realidad suponen

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

nal o, también, como la tesis de la carga teórica de la observación. Pero, comportamientos legales (cada vez que golpeemos el vaso, se romperá).
como veremos, es necesario separarlas en dos críticas distintas. La tesis de Popper puede resumirse en la a rmaci n de que los conceptos
que aparecen en los enunciados básicos son disposicionales.
3.2. Carga teórica de los enunciados básicos
Analicemos el siguiente enunciado, claramente básico: “La remera es
Seg n la posici n fundacionista ser a posible veri car enunciados bá- roja”. “Rojo” es un ejemplo clásico de término observacional, sin em-
sicos porque son enunciados singulares que solo tienen términos ob- bargo, cualquiera que haga compras habitualmente sabe que existe un
servacionales. No podr amos veri car por la experiencia un enunciado factor perturbador del color que puede hacer que nos compremos una
como “Todos los cuervos son negros”, porque al estar hablando de la remera con un color equivocado: la luz con la que está iluminado. Una Figura 3. Figura reversible (esta imagen puede
clase completa de los cuervos, no podríamos observar todos los casos remera es roja si al iluminarla con una luz blanca provoca cierta sensa- con gurarse de dos modos diferentes, como una
involucrados en ninguna experiencia concreta directa. Tampoco podr a- ción de color. Si la iluminamos con una luz distinta puede parecer de anciana o como una joven) 3 .

mos veri car por la experiencia “Este cuervo tiene ADN dentro de los otro color. Pero entonces, no es distinto al concepto de frágil. ”Rojo” Del mismo modo que aprendemos a ver ciertas cosas en estas imágenes,
n cleos de sus c lulas , porque, si bien es un enunciado singular, tiene es un concepto disposicional acerca de cómo reaccionan las cosas rojas los cient cos aprenden a ver ciertas cosas en las imágenes con las que
el t rmino te rico “ADN . Pero s podr amos, en principio, veri car frente a un estímulo lumínico de cierto tipo. trabajan. Aprenden a leer radiografías, o a reconocer organelos de la célula
“Este cuervo es negro”. con un microscopio. Ven formas en donde el lego ve solo manchas. De ahí
As , los conceptos que aparecen en los enunciados básicos clasi can las que sea posible que a veces vean cosas que no están y que la observación
Karl Popper (1902-1994) en su libro La lógica de la investigación cien- entidades que componen al mundo, y esta clasi caci n es te rica. Son no sea tan able como puede parecer en una primera instancia.
t ca (1971), propuso una crítica bastante fuerte y convincente a esta posibles muchas clasi caciones distintas. La base emp rica, siguiendo
posici n. Seg n l, los enunciados básicos están cargados de teor a. a Popper, no es indubitable ni veri cable. Puede parecer un escepticismo los co exagerado, como el del que
duda de que exista el mundo externo o cosas por el estilo, pero existen
Del mismo modo que no es posible veri car “Este cuervo tiene ADN Popper sostiene que para refutar una teor a cient ca la comunidad cient - algunos hechos en la historia de la ciencia que solo se entienden si
en sus células” porque, como mencionamos, dice mucho más de lo que ca debe aceptar convencionalmente ciertos enunciados básicos, y que tal se toma en cuenta esta carga teórica. Por ejemplo, se suele hablar de
podemos ver, tampoco podr amos veri car un enunciado singular que acuerdo se logra casi siempre porque la convención no es arbitraria, sino marcianos, y no de venusianos, porque por mucho tiempo se pensaba
solo contuviera términos observacionales (además de los términos ló- que está guiada por la observaci n. Pero esta observaci n no veri ca ni jus- que en Marte hab a canales arti ciales (ver Figura 4). Se les hab a
gico-matemáticos). ti ca los enunciados básicos. Puede ocurrir, por supuesto, que el acuerdo puesto nombre, y los astrónomos aprendían a verlos. Ni qué decir que
no se logre, en cuyo caso el enunciado básico no sería aceptado. Los enun- no solo no hay canales en Marte, sino que además, no hay nada que
Consideremos el ejemplo del mismo Popper: “Este vaso tiene agua.” ciados básicos son discutibles y revisables, y no ofrecen, seg n Popper, un se les pare ca. En los libros de astronom a de nales del siglo XIX,
Este es un ejemplo de enunciado básico. Sus términos no lógicos son fundamento ltimo indiscutible, sino, un fundamento convencional solo lo todavía siguen apareciendo ilustraciones de tales canales.
observacionales y es singular. Sin embargo, ¿qué ocurre si probamos el su cientemente rme como para permitir sostener el edi cio de la ciencia.
contenido del vaso y resulta amargo Evidentemente se trata de otra cosa. 3 Tomado de Wikipedia. http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/a/a7/Gestalt_Principles_

¿Qué pasa si enfriamos tal contenido y se congela a los 10 grados bajo Composition.jpg. Último acceso 22 de diciembre de 2014.
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al preformacionsimo, el “epigenismo”, podría haberse visto refutada,


puesto que predecía que no veríamos una pequeña persona. Noten que en
este caso es posible introducir una nueva posible hipótesis ad hoc, que tiene
que ver justamente con la validez de la consecuencia observacional misma.

3.4. Consecuencias

En conclusión, tanto porque en nuestras descripciones lingüísticas de


la observación hay conceptos universales que dicen más de lo que se
Figura 7. Dibujo de la Luna realizado por el mismo Galileo 7
observa en la experiencia, como porque la observaci n misma no es del
Tanto para Popper como para Hanson, el enunciado “La luna tiene cráteres” no es
todo able, muchos consideran que las consecuencias observacionales indubitable. ¿Qu diferentes ra ones dar a cada uno de ellos
Figura 4. Mapa de Marte publicado por el astrónomo Schiaparelli en 1888 4
no pueden ser veri cadas, es decir, no se puede comprobar, sin lugar a
c. Los cient cos aristot licos podr an haber recha ado (y, de hecho, lo hicieron)
dudas, que sean verdaderas o falsas. las observaciones de Galileo. También rechazaban el uso del telescopio, pues,
concebían que permitía acercar visualmente objetos lejanos, pero en el mundo
Otro ejemplo tiene que ver con una polémica antigua en cuanto a sublunar. Recuerden que para ellos, la física sublunar y la supralunar no coincidían.
De ser cierto, esto no invalida todo el análisis de la contrastación de
cómo se formaba un organismo a partir del líquido seminal. Algunos Esto implicaba no aceptar hip tesis auxiliares que Galileo aceptaba. Es decir, frente
hipótesis que vimos. Pero sí habilita otro modo de defender la hipótesis a una contrastación del geocentrismo que implicara la consecuencia observacional
sostenían que en el huevo había una materia informe que a la larga
principal sometida a contrastación, diferente de la introducción de de que en el telescopio la luna se debería ver como una esfera perfecta, se podría
tomaba la forma de la gallina, sin embargo, no podr an explicar
hipótesis ad hoc que culpen a las condiciones iniciales o a las hipótesis utilizar una hipótesis ad hoc en contra de la hip tesis auxiliar de que el telescopio
bien cómo ocurría esto. Otros sostenían que en el huevo había permite realizar observaciones astronómicas. Sin embargo, ahora, dada la carga
auxiliares. Tambi n, es posible retener la hip tesis, en un caso de una
una gallinita muy pequeña y que la formación de la gallina adulta teórica de la observación, la cuestión es más compleja. ¿En qué sentido la carga
predicción que no se cumple, dudando justamente de que no se haya teórica de la observación habilita desacuerdos con respecto a la interpretación de los
se daba nicamente por crecimiento. Estos ltimos eran llamados
cumplido, es decir, dudando del enunciado básico en cuestión. Así, en resultados de un experimento
“preformacionistas”. Se podría pensar que esta polémica acabó con
el caso de la polémica entre ptolemaicos y copernicanos en la época de
la invención del microscopio. No obstante, vemos el dibujo de uno de
Galileo, además de estar en desacuerdo acerca del tamaño del universo, 4. Concepción kuhniana de la ciencia
los que sostenían el preformacionismo que observó un espermatozoide
también diferían con respecto a ciertas observaciones realizadas sobre
bajo el microscopio (ver Figura 5). Thomas Kuhn (1922-1996) es el autor más in uyente de los l sofos de
la presencia o no de cráteres en la luna.
la ciencia que en la década de los años setenta se opusieron a los enfoques
anteriores, como el de Popper o como el de los empiristas lógicos, dando
Independientemente de que exista o no un fundamento ltimo para
una mayor importancia a la historia de la ciencia. Por esto se ha llamado
la ciencia, tema que sigue en discusión, no se puede negar que para
a este período “fase historicista”. Efectivamente, los primeros trabajos
comprender ciertos debates cient cos de la historia de la ciencia y
de Kuhn fueron sobre historia de la ciencia. Su primer libro es acerca de
de la actualidad, es necesario considerar estos dos sentidos en que la
4 Tomado de Wikipedia. <http://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Karte_Mars_Schiaparelli_MKL1888. 7 Tomado de Wikipedia. <http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Galileos_Original_Moon_
observación puede estar cargada de teoría.
png> (Último acceso 6 de junio de 2015). Drawings_(3053656871).jpg> ltimo acceso 6 de junio de 2015.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

Como veremos más adelante, además, las críticas a la carga teórica de la Revolución copernicana. En sus estudios de historia de la ciencia notó,
la observación fueron minando también la concepción clásica de teoría. por un lado, que la noción de historia de la ciencia popperiana, como una
Este tipo de análisis, en particular el reali ado por el l sofo de la sucesi n de conjeturas y refutaciones, era demasiado simpli cada y, por
ciencia Hanson, result muy in uyente sobre la posici n de Kuhn, que otro, que la noción de teoría de la Concepción heredada era inadecuada.
veremos en el siguiente apartado. Trataremos, a continuación, estas dos cuestiones.

1 odelo de camb o c ent co


En la tercera parte de este capítulo se comienza a discutir la distinción teórico/
Figura 5. De Essai de dioptrique de Nicolaas Hartsoeker (publicado en París en 1694)5
observacional. Recuerden que tal distinción estaba presupuesta en la noción clásica Kuhn fue originalmente un historiador de la ciencia. Su punto de vista
de teor a cient ca. Los dos autores que se tratan en este punto son Popper y es que el marco conceptual brindado por Popper y los empiristas lógicos
¿C mo interpretar este hecho ¿El que reali el dibujo estaba mintiendo
Hanson. Ambos proponen argumentos en contra de esta distinción. Popper sostiene no era su ciente para captar la complejidad del cambio cient co. Por
al respecto de lo que ve a Ser a extraño, puesto que los microscopios que no es posible describir la observación sin trascenderla. Es decir, declara que los
enunciados básicos están cargados de teor a y, por lo tanto, no pueden veri carse la misma época -en los años sesenta-, otros autores realizaron planteos
también estaban disponibles para los que sostenían el enfoque contrario.
por la experiencia. Hanson a rma que la observaci n misma puede encontrarse semejantes (el epistemólogo austríaco Paul Feyerabend [1924-1994], el
La explicaci n más adecuada parece ser que, efectivamente, los
in uenciada por las teor as que sostenemos. pensador ingl s Stephen Toulmin 1922-2009 , el matemático y l sofo
cient cos aprenden a ver ciertas cosas en su formaci n. Si uno quiere En base a lo visto al respecto, respondan las siguientes preguntas:
de la ciencia h ngaro Imre Lakatos 1922-1974 , etc.). En este trabajo,
ser un biólogo molecular tiene que aprender a ver células, cromosomas, a. En la Figura 6 puede verse una radiografía de los pulmones de una persona con neumonía:
elegimos a Kuhn como el más representativo e in uyente de estos. La
mitocondrias, etc., en imágenes muy confusas. Cualquiera que haya
estructura de las revoluciones cient cas (Kuhn, 1971) es su texto más
observado por un microscopio en un comienzo debe haber sufrido la
in uyente.
decepción de no ver las cosas que supuestamente debería haber visto.
Del mismo modo que el biólogo molecular aprende a ver esas cosas, Algunas críticas de Kuhn a la metodología popperiana son las siguientes:
los cient cos que hicieron los dibujos anteriormente citados (Figuras
4 y 5) aprendieron a ver ciertas cosas en las imágenes proyectadas por Las teor as conviven desde su nacimiento con casos refutatorios
los instrumentos que utilizaban. Luego de horas y horas frente a un (que Kuhn llama anomalías) y no por eso son abandonadas por los
microscopio o a un telescopio, la verdad es que podrían terminar viendo cient cos, a diferencia de lo que el falsacionismo estricto de Popper
casi lo que quisieran, como quien busca formas en las nubes.
Figura 6. Radiografía de los pulmones de una persona que padece neumonía. 6 aconsejaría.
¿Qué diferencias hay entre lo que ustedes ven, lo que ve el médico que hizo el
El abandono de una teor a y la aceptaci n de otra no se efect a porque
Esto tiene consecuencias epistemológicas importantes. Una posible diagnóstico y lo que vería un niño de tres años en esta imagen, en términos de lo se haya hecho un experimento que corrobora una y refuta la otra. La
sostenido por Hanson cuestión es mucho más compleja, como se verá más adelante.
consecuencia observacional del preformacionismo podría haber sido que
si se mira un espermatozoide por el microscopio, se vería una persona b. Una de las cosas que Galileo observó con su telescopio que no coincidía con la La historia de la ciencia no puede ser vista como una sucesi n de
visión aristotélica del mundo fue que la luna tenía cráteres y montañas. En la Figura 7 conjeturas y refutaciones. Seg n Popper, toda la historia de la ciencia
pequeña. Si consideráramos la observación infalible, la posición contraria puede verse uno de los dibujos que realizó:
podía ser pensada como la proposición de teorías que, una vez
5 Tomado de Wikipedia. <http://en.wikipedia.org/wiki/File:HomunculusLarge.png> ( ltimo acceso 6 6 Tomado de Wikipedia. <http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Neumonia.JPG> ( ltimo acceso 6 refutadas, resultan reemplazadas por nuevas teorías. Sin embargo,
de junio de 2015). de junio de 2015). señala Kuhn, en la historia de la ciencia notamos que hay dos tipos de
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cambio esencialmente distintos: cambios conservadores, en los que Reglas acerca de qu entidades pueblan al mundo. Seg n distintos importancia porque afectan a partes centrales del paradigma, o porque
no se abandona el marco con el que se viene pensando la realidad ni paradigmas, las entidades que conforman al mundo son diferentes. existe una necesidad social acuciante relacionada con estas y persisten
las leyes con las que se la investiga, y cambios revolucionarios, en Seg n la f sica aristot lica, el mundo estaba compuesto de substancias, en no ser solucionadas, el fracaso de la aplicación de las reglas del
los que hay una suerte de “borrón y cuenta nueva”. Por ejemplo, una conformadas a su vez por materia y forma. La forma podría tenerse en paradigma lleva a que este entre en “crisis . Los cient cos comien an
cosa son los cambios que se vienen reali ando dentro del darwinismo acto o en potencia. La actualización de la forma era lo que impulsaba a los a “perder fe” en el paradigma.
hace décadas, y otra, la revolución que supuso reemplazar marcos movimientos naturales, como la caída de un cuerpo en el mundo sublunar.
jistas o creacionistas por el darwinismo. Estos dos tipos de cambio Compromisos relacionados con la actividad cient ca; por ejemplo, Las anomalías cobran relevancia:
no pueden ser vistos ambos como rechazo de teorías y adopción de uno com n a diversos paradigmas consiste en el mandato de que los
si afectan a los fundamentos mismos del paradigma;
nuevas teorías, pues son cualitativamente diferentes. cient cos deben extender la precisi n y el alcance del paradigma. Pero
si son importantes con respecto a alguna necesidad social apremiante;
algunos compromisos metodológicos pueden diferir entre distintos
si se incrementa la cantidad de intentos de solucionarla y/o la cantidad
paradigmas. Por ejemplo, aquellos en los que se privilegia cierto tipo
Kuhn considera, por lo tanto, que el aparato conceptual brindado por de cient cos dedicados a eliminarla en vano;
de explicaci n por sobre otra. En la f sica aristot lica, por ejemplo, el
Popper y por los empiristas l gicos no es su cientemente rico, la ciencia si aumenta la cantidad de anomal as distintas.
hecho de que el mundo estuviera conformado por sustancias, y que estas
es un fenómeno más complejo. Por esto propone un concepto más
tuvieran nes intr nsecos, implicaba un privilegio de las explicaciones En la poca de crisis, algunos cient cos (generalmente j venes, quienes
amplio que el de teoría, que es el de paradigma o matriz disciplinar.
nales, aquellas que explican un fen meno indicando su meta o n. no tienen tan incorporado el paradigma dominante en sus modos
Una teoría, como recordarán, es en la Concepción heredada un conjunto
La revolución copernicana, como vimos en el capítulo I, quitó de la de pensar el mundo) empiezan a trabajar en perspectivas nuevas e
de enunciados de distinto tipo. El paradigma incluye más cosas además
escena de la f sica a la causa nal. Los paradigmas pueden diferir, en incompatibles con las anteriores. La existencia de nuevas escuelas con
de leyes: indicaciones de cómo y en dónde estas leyes se aplican,
consecuencia, en los distintos tipos de m todos explicativos utili ados. formas de trabajar incompatibles recuerda al período preparadigmático,
indicaciones acerca de los instrumentos que hay que utilizar y cómo
sin embargo en el per odo de crisis sigue existiendo un paradigma
utilizarlos, modelos de solución de problemas que son los que deben ser
Época preparadigmática: las primeras etapas de desarrollo de una dominante. Estas prácticas incompatibles con el paradigma gobernante
estudiados por los alumnos de la disciplina en cuesti n, a rmaciones
disciplina muestran una gran cantidad de escuelas en competencia y la son llamadas por Kuhn “ciencia extraordinaria . Son ejemplos de ciencia
acerca de los constituyentes ltimos del universo, etc. El paradigma
ausencia de una comunidad cient ca homog nea. Hay cient cos pero extraordinaria, los trabajos de Kepler y de Galileo durante el per odo de
sirve de guía a toda una comunidad de investigación durante una época.
no comunidad cient ca, dice Kuhn. Escuelas diferentes no comparten crisis del paradigma ptolemaico. Tambi n, es un cient co extraordinario
Los cambios revolucionarios son cambios de paradigma; los cambios no
casi ninguna de las reglas presentadas anteriormente. Esto hace que Darwin. Si alguna de estas perspectivas parece tener xito en los campos
revolucionarios son los cambios dentro del paradigma. Un ejemplo de
no pueda haber un progreso acumulativo, pues los cient cos se pasan en los que el otro paradigma era problemático y promete resolver otras
paradigma es, por ejemplo, el paradigma ptolemaico. El agregar o cambiar
discutiendo cuáles son los modos en los que se debe hacer ciencia, cuáles cuestiones que ni siquiera aparecían como problemáticas en la agenda
la forma de los epiciclos para dar cuenta de la posición de un planeta
son las leyes generales que hay que aceptar, cuáles son los instrumentos anterior, se comienza a instaurar un nuevo paradigma. Esto aumenta la
sería un ejemplo de cambio normal, en el que no se revisan los marcos
adecuados, etc. Un ejemplo en astronomía podría estar constituido por crisis del paradigma antiguo. El grueso de los cient cos comien a a
conceptuales ni las leyes más generales del paradigma. El reemplazo del
el per odo presocrático. Pues en ese momento cada l sofo propone pasarse al nuevo paradigma que les permite dejar atrás la sensación de
paradigma ptolemaico por el newtoniano, en el que se revisar aspectos
una cosmología diferente, reglas distintas para hacer ciencia, leyes inutilidad de su trabajo bajo el otro paradigma. Se produce una revolución
esenciales del paradigma, sería un cambio revolucionario.
diferentes, diferentes componentes ltimos del universo, etc. cient ca cuando el nuevo paradigma reemplaza por completo al anterior.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

De este modo, el desarrollo de la ciencia no es acumulativo sino Es interesante señalar que Kuhn, seg n el mismo relata, tom La historia de la ciencia de una disciplina particular seg n Kuhn puede
discontinuo. Hay momentos en que los cient cos no se cuestionan conciencia de la existencia de paradigmas cuando pas , al empe ar ser representada en una l nea temporal seg n el grá co de la Figura 8.
para nada la verdad de las teorías en las que creen, seguidos por a trabajar en historia de la ciencia, del departamento de física al de
irrupciones de revoluciones que rompen con el curso de investigación humanidades. Seg n Kuhn, las ciencias sociales se encontrar an en el
cient ca anterior. Para entender la concepci n de Kuhn, es necesario período preparadigmático. Tal vez esto sea un juicio inadecuado, no
ir presentando otros conceptos. En particular, aquellos que permiten necesariamente el progreso en la física es igual al progreso en otras
señalar las diversas etapas en las que se puede dividir la historia de una disciplinas, como muchos críticos de Kuhn han señalado. Volveremos
disciplina cient ca particular: más adelante sobre este punto.

Ciencia normal: es la etapa en la que los cient cos dedicados a un Cr s s y revoluc ones c ent cas: durante la época de ciencia normal
Figura 8. Representación en una línea temporal de los diferentes períodos señalados por Kuhn en la
tipo de problema realizan sus tareas bajo la guía de un paradigma. El no se espera encontrar ninguna novedad teórica importante. Este historia de la ciencia
paradigma les dice cuáles son los problemas a resolver y cuál es la forma período está caracterizado por la resolución de rompecabezas. De
de resolverlos. En este per odo la comunidad cient ca considera que hecho, y en esto hay una fuerte in uencia de Hanson, los cient cos Inconmensurabilidad y progreso: esta visión de la ciencia tiene
este tipo de problemas tienen solución asegurada dentro del paradigma. que en el período de ciencia normal se enfrentan a novedades teóricas consecuencias importantes y para algunos indeseables. Una de ellas es
Tales problemas no son percibidos como poniendo a prueba el paradigma que no siguen las leyes del paradigma, pueden llegar a no percibirlas la inconmensurabilidad que seg n Kuhn puede haber entre diferentes
dominante, sino como poniendo a prueba la astucia de los cient cos que en absoluto (como parecía ocurrir durante la dominación del paradigma paradigmas. Seg n Kuhn, el abandono de uno de los paradigmas y
trabajan en ellos. Por este motivo Kuhn los denomina “rompecabezas” aristotélico, en el que no se detectaban las novas –estrellas nuevas en la adopci n de otro no puede explicarse en funci n de argumentos
(puzzles). En el per odo de ciencia normal la tarea de los cient cos el rmamento–). Si un cient co propone una soluci n exitosa a un concluyentes fundados en la l gica o en la experiencia.
consiste principalmente en resolver rompecabezas, es decir, en articular rompecabezas, se amplía la aplicabilidad del paradigma a la realidad, si
Diferencias que puede haber entre paradigmas seg n Kuhn:
los fenómenos con las teorías proporcionadas por el paradigma. no logra conseguir una soluci n exitosa, entonces el paradigma no suele
Tipos de reglas (usualmente no expl citas) proporcionadas por los paradigmas: ser el desacreditado, sino el cient co mismo (noten que la oposici n Cada paradigma puede considerar al mundo constituido por entidades
al falsacionismo popperiano, seg n el cual los cient cos deben evitar distintas. Para Newton el mundo está formado, no por sustancias,
Reglas que identi can los rompecabe as (lo que cuenta como
salvar a teorías que han sido refutadas, es muy fuerte). Pero cuando sino por átomos afectados por fuerzas.
problema) y restringen las posibles soluciones. Ejemplo: en el
persisten problemas que debieran ser resueltos, estos problemas pueden Pueden resultar relevantes distintos tipos de problemas y distintas
paradigma ptolemaico, en el cual todos los planetas e inclusive el
pasar de ser conceptualizados, ya no como “rompecabezas”, sino como formas de solucionarlos. En la astronom a newtoniana ya no es
Sol giraban en torno a la Tierra que se hallaba quieta en el centro del
anomalías. El cient co se enfrenta a una anomal a cuando se reconoce necesario reconstruir las órbitas de los planetas a través de círculos.
universo, todo movimiento planetario debía ser solucionado a partir
que la naturale a viola las expectativas creadas por el paradigma. Los defensores de paradigmas rivales pueden ver el mundo de diferente
de combinaciones de órbitas circulares con movimiento uniforme.
En realidad, hay anomalías desde la fundación del paradigma. Kuhn forma. El cient co que quiera cambiar de paradigma tendrá que, en
Reglas que determinan qu instrumentos se pueden usar, c mo y en
rechaza de lleno el falsacionismo. Los paradigmas son irrefutables, ese caso, reeducar su percepción, tendrá que aprender a ver el mundo
qué medios. No fue fácil para Galileo introducir el uso de telescopios
en un sentido que ampliaremos más adelante. Pero cuando aumenta como lo ven los que pertenecen al otro paradigma. La in uencia de la
en la astronomía. La astronomía simplemente se hacía de otro modo.
el n mero de anomal as, o bien, cuando se les empie a a dar más carga de la observación de Hanson, aquí, es clara.
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Si bien el nuevo paradigma incorpora gran parte del vocabulario del 4.2. La estructura del paradigma Los ejemplares:
paradigma anterior, los t rminos pueden resultar rede nidos. As ,
Seg n lo visto en el punto anterior, esta visi n de la historia de la ciencia ¿C mo aprenden los cient cos a aplicar generali aciones simb licas
el término “masa” se mantiene en la física relativista, pero cambia
es fuertemente incompatible con la que plantea Popper. Ahora veremos con tan poco contenido emp rico O, replanteemos una pregunta clásica:
su signi cado, pues esta ya no se conserva, sino que var a seg n la
qué consecuencias tiene esta visión para la concepción clásica de las ¿cómo adquieren semántica empírica los conceptos que aparecen en las
velocidad. O bien, en el caso de la revolución copernicana, el término
teor as cient cas. leyes fundamentales (recuerden que en la Concepci n heredada, esto
“planeta” se sigue utilizando, pero para los ptolemaicos la Luna y el
se conseguía mediante el papel de las reglas de correspondencia). La
Sol eran planetas, y la Tierra no, mientras que para los heliocentristas,
En el epílogo de su obra, incluido en ediciones posteriores, Kuhn señala respuesta de Kuhn es completamente distinta. En ambas respuestas tiene
la Tierra pasa a ser un planeta, el Sol deja de serlo y la Luna se
con más claridad cuáles serían los componentes del paradigma. Entre un rol fundamental otro de los elementos esenciales del paradigma: los
convierte en un satélite.
estos, habría dos elementos centrales, cuyo análisis trae repercusiones ejemplares o ejemplares paradigmáticos. Un ejemplar es un caso de
Por estos motivos, los paradigmas pueden ser inconmensurables: en estos para la concepción de teoría: aplicaci n exitosa del paradigma reali ada en el pasado. Como se dijo
casos no existe ning n argumento l gico ni emp rico que demuestre antes, las reglas que proporciona un paradigma son implícitas. ¿Cómo
Las generali aciones simb licas:
que un paradigma es superior a otro de manera concluyente, pues “no son adquiridas por los nuevos cient cos Seg n Kuhn, los cient cos
hay ninguna base com n o neutra absoluta desde la cual medir ambos Kuhn cita, como ejemplo de generalización simbólica al segundo hacen ciencia como los hablantes de una lengua hablan un idioma.
paradigmas . Los cient cos de distintos paradigmas subscriben a principio de la mecánica de Newton: Siguen reglas, pero no necesariamente las pueden explicitar. Uno puede
distintos conjuntos de normas. Puede ocurrir entonces que, seg n las hablar perfectamente un idioma, es decir, aplicar perfectamente la
F=m.a
normas del paradigma A, el paradigma superior sea el A y, seg n las gramática de ese idioma, sin poder listar las reglas que sigue. De hecho,
normas del paradigma B, lo sea el paradigma B. Los distintos paradigmas Si aplicamos una fuerza a un objeto, este se acelerará de acuerdo con su aprendemos el idioma no a partir de que alguien nos cuente las reglas
son formas incompatibles de ver el mundo y de hacer ciencia. masa. Cuanto más grande sea su masa, menos se acelerará. establecidas por la gramática, sino a través de ejemplos. Aprendemos
a usar la palabra “perro” a partir de casos de perros (de ahí que sea tan
Además, tambi n puede ocurrir en estos casos que los cient cos
Este principio, tal como señala Kuhn, es sumamente abstracto y dif cil proponer de niciones de tales conceptos). Lo mismo ocurrir a con
utilicen las mismas palabras pero con distinta signi caci n (como en el
general, y no puede ser abandonado sin abandonar el paradigma al cual los cient cos bajo un paradigma. En un libro de texto no se encuentra
caso de “planeta” antes mencionado). La comunicación entre ellos sería
pertenece. Seg n Kuhn, las generali aciones no a rman casi nada del expl cita cuál es la forma de solucionar rompecabe as, es decir, cuál es
solo parcial estableciéndose una barrera en la comunicación.
mundo, pero sirven de guía para la confección de leyes especiales que la forma de aplicar la generalización simbólica. Se muestran ejemplares
Esto tiene consecuencias sobre la versi n del progreso cient co, pues si permiten encontrar soluciones a los diversos rompecabezas de los que de cómo se ha aplicado la generalización simbólica en el pasado. En el
no hay forma objetiva de decir que cierto paradigma es superior a otro, se ocupan los cient cos que trabajan bajo un paradigma. Por ejemplo, examen de estos ejemplares, el cient co se hace experto en el área, del
por ejemplo, que el heliocentrismo es superior al geocentrismo, no hay el segundo principio de Newton sirve para explicar el movimiento de mismo modo que un niño, con el tiempo, se vuelve un experto hablante
forma objetiva de a rmar que la ciencia progresa. Seg n Kuhn, la ciencia los proyectiles en la Tierra; la aceleración de los objetos en caída libre; de una lengua. Son estos ejemplares los que cargan de signi cado
progresa, pero tal progreso no es ni acumulativo ni se dirige hacia la verdad. los movimientos de los planetas alrededor del Sol y de los satélites empírico a los conceptos que aparecen en las leyes fundamentales.
alrededor de los planetas; el movimiento de un péndulo; la forma en que
Muchos de sus contemporáneos lo atacaron fuertemente por esta idea Esta concepci n, además, permite explicar por qu la historia de la
chocan dos bolas de pool; etc. Pero para que un principio tan abstracto
de que diferentes paradigmas pueden ser inconmensurables. Pues, se ciencia que aparece en los libros de texto cient cos (nos referimos a los

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

lo acusa de relativista, irracionalista, etc. Sin embargo, para ser justos dé cuenta de tales fenómenos, es necesario agregar contenido a dicho manuales utilizados en las carreras de ciencia para enseñar la disciplina)
con Kuhn, que no haya razones concluyentes independientes de los principio, es necesario especi car las fuer as que se encuentran en suele presentarse tan des gurada. La ra n no es distinta de por qu la
paradigmas para la elección entre paradigmas, no implica que no juego en cada aplicación. Esta información no se encuentra incluida en historia de la fundación de un país que se enseña en los colegios (o al
haya razones en absoluto. Como el mismo Kuhn señala, estas razones la generali aci n simb lica. Las leyes especiales seg n las que se tratan menos se enseñaba) es tambi n des gurada. Pues, en ambos casos, la
no son absolutas porque dependen de los valores brindados por los estos casos requieren que se establezcan parámetros que en el segundo función principal no es aprender historia, sino generar en los estudiantes
mismos paradigmas. Es posible establecer una comparación entre dos principio no se encuentran establecidos (cantidad de fuerzas en juego y ciertos tipos de valores y a an ar ciertos comportamientos. Los puntos
paradigmas acerca de la capacidad predictiva de sus leyes. Pero esto naturale a de estas fuer as). Son leyes más espec cas que se aplican a en los que la historia se deforma son varios: por un lado, siempre se
solo resultará convincente a los cient cos de ambos paradigmas si la menos casos que la generali aci n simb lica, pero a rman más de estos muestra a los cient cos del pasado, aunque tuvieran concepciones
capacidad predictiva es un valor compartido por ambos paradigmas. casos que la generalización simbólica, que es sumamente abstracta. absolutamente incompatibles con los puntos de vista actuales, como
Puede ocurrir, y ha ocurrido en la historia de la ciencia, que paradigmas si estuvieran trabajando en los mismos problemas que trabaja la
Esto tiene una consecuencia interesante que va en contra de las
distintos tengan valores distintos. Por otro lado, en muchos casos pueden comunidad cient ca bajo el paradigma actual. As , no hay problema en
concepciones anteriores en las que se suponía que la contrastación
compartir cierto valor, como la simplicidad, y, sin embargo, diferir en atribuir al naturalista austríaco Gregor Mendel (1822-1884) enfoques
de teorías era equiparable a la contrastación de hipótesis. Pues, si las
su aplicación. Por ejemplo, otra vez si se considera a la Revolución que nunca sostuvo, o en deformarlo para que aparezca como un
leyes especiales tienen más contenido o más información que la ley
copernicana, puede pensarse que la utilización de elipses es más simple genetista actual (lo mismo con Cop rnico, Darwin, etc.). Por otro lado,
fundamental, entonces aquellas no pueden deducirse de esta. En la
que las combinaciones de círculos, porque se usa una elipse en lugar se muestra a la historia de la ciencia como si estuviera protagonizada
Concepción heredada las leyes especiales son hipótesis derivadas que
de muchos círculos, pero puede parecer también que el círculo es una por unas pocas personas (cuales próceres de la historia de un país),
se deducen de las leyes fundamentales y de las hip tesis auxiliares.
gura más simple que la elipse. y no por comunidades de cient cos. Finalmente, existen buenos y
Pero no es a trav s de hip tesis auxiliares, que la fuer a abstracta de
malos, la historia de la ciencia de manual es maniqueísta, hay por un
la que se habla en el segundo principio asume la forma de la fuerza de
Los paradigmas, por lo tanto, se pueden comparar, pero en relación lado cient cos que luchan para que la ra n se imponga, que tienen
gravedad en el principio de gravitación universal. Siendo este el caso, la
con valores que no son objetivos, sino que son intraparadigmáticos. que luchar contra sujetos que no se apegan al m todo cient co, que
generali aci n simb lica no es refutable por la experiencia. (Recuerden
En algunos casos, tales valores son compartidos por paradigmas en persiguen nes oscurantistas. De esta deformaci n, sostiene Kuhn,
que en el enfoque clásico las consecuencias observacionales falsas refutan
competencia, lo cual simpli ca la cuesti n. En otros, los valores no es que surge la idea de la ciencia como una acumulaci n de xitos,
a las leyes de las que se deducen, justamente porque se deducen de ellas).
son en su totalidad compartidos, como tal vez haya ocurrido en las y la idea de que el progreso es acumulativo y lineal. La realidad es
revoluciones más radicales, como la copernicana y la darwiniana. En síntesis, las generalizaciones simbólicas no implican lógicamente a seg n Kuhn completamente distinta. Kepler es mejor comprendido
las leyes especiales, por lo tanto, si alg n p ndulo no se comportara como si se lo piensa como un pitagórico. Se comprende mejor a Mendel
nconm ns rab l dad dos paradigmas son inconmensurables si dicta la ley de los péndulos de la mecánica clásica, esto no refutaría al si, en lugar de ser considerado el padre de la genética, lo pensamos
no existen razones concluyentes ni empíricas ni teóricas para señalar segundo principio, puesto que esta ley especial de los péndulos no se como el ltimo de los hibridadores (aquellos que estudiaban la
que uno es superior al otro. Es decir, si no existe una base ni empírica deduce de este. El segundo principio sirvió de guía para confeccionar esta posibilidad de que surgieran especies estables a partir de cruzas entre
ni teórica común para compararlos. ley, pero no la implica l gicamente. Seg n Kuhn, las leyes fundamentales, especies diferentes [Lorenzano, 1997]). La intención de la historia
si bien no en todos los casos son formalizadas y matemáticas como en el de la ciencia presentada en los manuales, entonces, consiste en
caso del segundo principio, tendrían esta característica de ser irrefutables. presentar una serie de ejemplares con la meta de que los estudiantes
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adquieran la forma de ver el mundo determinada por el paradigma (y no, por ejemplo, el murciélago). La razón por la cual Kuhn utiliza el
1. Lean atentamente el siguiente texto de Kuhn:
en consideración. término “paradigma” para referirse a la matriz disciplinar compartida
por una comunidad cient ca tiene que ver con la idea de que lo que esos Al examinar los documentos de la investigaci n del pasado desde el punto
El siguiente texto de Kuhn al respecto es más que elocuente: de vista de la historiografía contemporánea, el historiador de la ciencia
cient cos comparten es un conjunto de casos paradigmáticos de c mo
Si se considerase como algo más que un acervo de anécdotas o como algo más que mera puede sentir la tentación de proclamar que cuando cambian los paradigmas,
se hace ciencia (los ejemplares). Cada vez que, actualmente, el término el propio mundo cambia con ellos. Guiados por un nuevo paradigma, los
cronología, la historia podría provocar una transformación decisiva en la imagen de
“paradigma” es utilizado en el lenguaje natural como constelación cient cos adoptan nuevos instrumentos, miran en lugares nuevos y, lo
la ciencia que ahora nos domina. Dicha imagen ha sido extra da inicialmente, incluso
de creencias compartidas, como cuando se dice el “paradigma que resulta más importante, durante las revoluciones ven cosas nuevas y
por los propios cient cos, sobre todo del estudio de los logros cient cos acabados
diferentes cuando miran con instrumentos familiares en lugares en los que ya
tal como se registran en los clásicos y, más recientemente, de los libros de texto en los surrealista”, o el “paradigma neocapitalista”, se utiliza la palabra con el
antes habían mirado. Parecería más bien como si la comunidad profesional
que cada nueva generaci n cient ca aprende la práctica de su o cio. Sin embargo, desplazamiento conceptual que Kuhn le imprimió. hubiese sido transportada repentinamente a otro planeta en el que los objetos
es inevitable que el objetivo de tales libros sea propagandístico y pedagógico, de familiares se viesen bajo una luz diferente, estando además acompañados por
manera que la idea de ciencia que de ellos se desprende no tiene más probabilidades otros que no resultan familiares. Por supuesto, no ocurre nada por el estilo; no
¿Por qu este libro de Kuhn fue tan in uyente En cuanto a su
de describir adecuadamente la empresa que los ha producido de lo que las tiene la hay ning n traslado geográ co y fuera del laboratorio los asuntos ordinarios
imagen de la cultura nacional extra da de un folleto tur stico o de un manual del in uencia dentro de la losof a de la ciencia, si bien ha habido contin an normalmente como antes. Con todo, los cambios de paradigma
idioma. Este ensayo trata de mostrar que hemos sido engañados por ellos en aspectos muchos discutidores de lo adecuado de la “pintura” que hace Kuhn de hacen que los cient cos vean de un modo distinto el mundo al que se aplica
fundamentales. Su objetivo es bosquejar el concepto totalmente distinto de ciencia la historia de la ciencia, es indiscutible que el marco conceptual que su investigaci n. En la medida en que su nico acceso a dicho mundo es a
que puede surgir de los registros históricos de la propia actividad investigadora. trav s de lo que ven y hacen, podemos estar dispuestos a a rmar que tras una
ofrece ha sido muy fructífero. Los que lo discutieron lo tuvieron que revoluci n los cient cos responden a un mundo distinto.
Con todo, ni siquiera la historia nos proporcionará ese nuevo concepto si los datos
hist ricos siguen buscándose y examinándose principalmente para responder a las
hacer apelando a sus conceptos. Antes que Kuhn, muchos fenómenos Las demostraciones conocidas de los cambios en la Gestalt visual resultan
de la historia de la ciencia carecían de nombres y conceptos para ser muy sugerentes en cuanto prototipos elementales de estas transformaciones
preguntas planteadas por el estereotipo ahist rico extra do de los textos de ciencia.
del mundo de los cient cos. Lo que antes de una revoluci n eran patos en
Por ejemplo, a menudo tales textos han parecido dar a entender que el contenido de claramente comprendidos. De hecho, es importante distinguir entre el mundo del cient co, son conejos despu s de ella. La persona que antes
la ciencia queda ejempli cado exclusivamente por las observaciones, leyes y teor as el marco conceptual propuesto por Kuhn y las a rmaciones que ve a el exterior de una caja desde arriba, ve luego su interior desde abajo.
descritas en sus páginas. Casi con la misma regularidad, se han interpretado esos mismos
él mismo hace con ese marco conceptual. Por ejemplo, como ya Las transformaciones de este tipo acompañan com nmente al proceso
libros en el sentido de que los m todos cient cos son sencillamente los ejempli cados de aprendi aje cient co, por más que en general sean más graduales y
por las t cnicas de manipulaci n utili adas al recoger los datos del texto, junto con adelantamos, consideraba que las ciencias sociales se encontraban
casi siempre irreversibles. Al mirar las curvas de nivel, el estudiante no
las operaciones lógicas empleadas para relacionar esos datos con las generalizaciones en el período preparadigmático. Es posible discutir este punto con ve más que líneas sobre un papel allí donde el cartógrafo ve una imagen
te ricas del propio libro de texto. El resultado de ello ha sido un concepto de ciencia con Kuhn, y de hecho, existen intentos fruct feros de análisis de diversas del terreno. Al mirar una fotografía de una cámara de niebla, el estudiante
profundas implicaciones acerca de su naturaleza y desarrollo. sólo ve líneas discontinuas y confusas, mientras que el físico ve un registro
disciplinas de las ciencias sociales en base a la propuesta kuhniana
Si la ciencia es la constelaci n de hechos, teor as y m todos recogidos en los textos de sucesos subnucleares familiares. Es preciso pasar por algunas de esas
(por ejemplo: Minhot, 2003). Lo mismo ocurre con la idea de Kuhn transformaciones de la visión antes de que el estudiante se convierta en un
al uso, entonces los cient cos son las personas que, con xito o sin l, han intentado
aportar un elemento u otro de esa constelaci n concreta. El desarrollo cient co se de que en una disciplina no pueden convivir paradigmas. Solo habitante del mundo del cient co, capa de ver lo que ve el cient co y capa
convierte así en el proceso gradual mediante el cual esos elementos se han sumado, habr a un paradigma cuando la comunidad cient ca completa se de responder como él. Con todo, el mundo al que tiene entonces acceso el
estudiante no está jado de una ve por todas ni por la naturale a del medio,
uno a uno y en combinación, al acervo siempre creciente que constituye la técnica y el encuentra bajo su guía. Este requisito parece inadecuado, puesto por una parte, ni por la naturaleza de la ciencia, por la otra. Más bien está
conocimiento cient cos. (Kuhn, 1971, pp. 23-24)
que existen áreas (como en las ciencias sociales, en la psicolog a, en determinado conjuntamente por el medio y por la particular tradición de
la biología) en las que los paradigmas parecen convivir, con todas ciencia normal en la que el estudiante ha sido entrenado. Por consiguiente, en
Esta situación resulta vital. Pues, no hay área en la que haya tantos tiempos revolucionarios, cuando cambia la tradición de la ciencia normal, la
mitos como en la historia de la ciencia (Colón descubrió que la Tierra las características señaladas por Kuhn (salvo el monopolio de la percepci n que tiene el cient co de su medio ha de reeducarse; en algunas

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era redonda, Darwin es el primer evolucionista, etc.). Por otra parte, investigación). Es posible aplicar las nociones de Kuhn a tales áreas situaciones familiares, ha de aprender a ver una nueva Gestalt. Una vez
que lo haya hecho, el mundo de su investigación parecerá ser aquí y allá
la ciencia que se estudia y se divulga generalmente se encuentra de manera genuina.
inconmensurable con aquel que habitaba antes. Ésta es otra de las razones por
desconectada de su historia, y se presenta, a veces, como un conjunto de las que las escuelas guiadas por paradigmas diferentes siempre se enfrentan a
resultados, sin ninguna consideración respecto a cómo esos resultados Por otro lado, en cuanto a in uencias por fuera del ámbito de la losof a algunos malentendidos. (Kuhn, 1971, pp.193-195)
surgieron. Con esto se pierde la re exi n metodol gica, que es esencial de la ciencia, la historia de c mo los cient cos cambian de creencias 2. Resuelvan las siguientes consignas, teniendo en cuenta este fragmento y la parte
a la educaci n cient ca. está fuertemente relacionada con cómo cada uno de nosotros en la vida del capítulo correspondiente:
cotidiana cambia de creencias. La inconmensurabilidad entre paradigmas a. Hanson ha in uenciado profundamente sobre las concepciones de Kuhn.
Por ltimo, existe otra diferencia con la Concepci n heredada en todo cient cos tiene ciertos rasgos similares con la inconmensurabilidad que, Describan tal in uencia en el fragmento citado.
este enfoque. Seg n esta, no hab a re exi n los ca posible acerca del a veces, existe entre personas de diferentes clases, pa ses, religiones, b. Al anali ar las posiciones de cient cos que trabajaron en paradigmas diferentes
da la sensación de que habitaran mundos distintos. Esto conduce a Kuhn a pensar que
contexto de descubrimiento. Aqu , la cuesti n es diferente. Es esencial etc., en una misma sociedad. El marco kuhniano, sin pretenderlo, resulta los paradigmas son inconmensurables, ¿en qu consiste esta inconmensurabilidad
para la comprensión del funcionamiento del paradigma el papel de los til y esclarecedor de muchas problemáticas de la vida cotidiana, y la
ejemplares, y lo que los ejemplares indican es, justamente, el modo lectura de La estructura de las re oluciones cient cas, por lo tanto,
1. Lean detenidamente el siguiente texto:
en que deben solucionarse los rompecabezas. Los descubrimientos resulta fuertemente reveladora de los modos en que categorizamos y
Hacia nes del s. XIX, dos posiciones encontradas comen aron a surgir y a
cient cos son, en etapa de ciencia normal, soluciones en base a tales pensamos el mundo cotidiano. Es un ejercicio interesante preguntarse,
competir. Una de ellas inscripta dentro de la concepci n creacionista y jista
ejemplares. Toda esta re exi n es, por lo tanto, en parte, acerca del cuando uno se encuentra inmerso en un debate acerca del tema que (creación divina de las especies vivientes e inmutabilidad posterior de ellas)
descubrimiento. No es posible separar la cuestión de la forma en que fuere, si no existe alg n tipo de inconmensurabilidad en las posiciones. fue sostenida por varios autores, aunque el más famoso de ellos fue George
los conceptos adquieren semántica empírica (cuestión que caía en el Por ejemplo, suele ocurrir que en los debates que suelen darse en la Cuvier, joven y reconocido cient co franc s de origen alemán, autor de la
teor a conocida como Catastro smo.
enfoque clásico en el contexto de justi caci n) de temáticas acerca sociedad, se utilicen los mismos términos con sentidos muy diferentes. Cuvier postulaba que debido a una serie de cataclismos, la mayor parte de los
del descubrimiento. De este modo, se rompe la distinción tajante entre O puede ser que las normas evaluativas o los valores presupuestos sean organismos vivos hab an sido extinguidos sucesivamente, repoblándose el mundo
contexto de justi caci n y descubrimiento, y parece que la losof a distintos. El punto es entender que, en estos casos, la toma de conciencia a partir de aquellos organismos que se habían salvado de la destrucción (algunos
autores más extremistas postulaban una extinci n total y un repoblamiento a partir
de la ciencia no puede dar respuesta a los interrogantes que se plantea de tal inconmensurabilidad puede guiar a discusiones estancadas hacia de sucesivas creaciones divinas). Como evidencia habían quedado las conchas
restringi ndose solo a cuestiones de justi caci n y de l gica. caminos más fructíferos. lejos de los actuales mares y los enormes huesos de animales antediluvianos. La
ltima y mejor conocida de las catástrofes fue el diluvio b blico.
La concepción kuhniana resulta sumamente productiva para pensar la Cuvier tuvo un gran contrincante, Lamarck, quien se opuso a la teoría
3 n uenc as catastro sta, argumentando que muchas conchas f siles que aparec an en
historia de la ciencia. perfectas condiciones (íntegras y a veces aun unidas entre sí, a pesar de su
La estructura de las re oluciones cient cas (Kuhn, 1971) ha sido fragilidad), muy lejos del mar, difícilmente podrían haber resistido intactas
El objetivo de las actividades que se presentan a continuación es que
probablemente el más in uyente de los escritos que surgieron del los cataclismos propuestos por su colega.
aprendan a utilizar algunos de los conceptos del marco conceptual La disputa entre los dos investigadores pasó al plano personal y Cuvier ejerció
ámbito de la losof a de la ciencia. Esto se explica por el despla amiento
de Kuhn (paradigma, ciencia normal, ciencia extraordinaria, crisis, toda su in uencia cient ca y pol tica, am n de sus grandes condiciones como
conceptual que ha sufrido el concepto de paradigma. En el lenguaje orador para ridiculizar las teorías opuestas a las suyas, sostenidas por Lamarck.
revolución, anomalía, rompecabezas, inconmensurabilidad, etc.) para
natural originalmente un caso paradigmático de una clase es un caso La teoría evolucionista sostenida por Lamarck fue la primera coherentemente
interpretar casos de historia de la ciencia. presentada y apoyada en hechos comprobables a diferencia de algunos
representativo de la misma. Así, un mamífero paradigmático es la vaca
intentos de explicaciones especulativas acerca del transformismo expresadas
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

por autores como Erasmus Darwin, abuelo de Charles Darwin. La teor a fue llamó a este enfoque “preformacionismo”.
presentada en el libro Filosofía zoológica, aparecido en 1809. Allí Lamarck A partir de esta época, y aunque no se conociese todavía el huevo de los Recordemos los casos históricos vistos en el capítulo I. Tengan en cuenta, primero,
planteaba c mo los diferentes lugares del mundo di eren entre s por el clima, los mamíferos (sólo será descubierto en 1827), se suponía gracias a los trabajos la Revolución copernicana.
suelos, etc. Pero, éstos, además van cambiando lentamente por sucesivos cambios de Stenon, y sobre todo de Regnerus de Graaf, que todos los animales, incluso
a. Consideren el período del siglo XVII cuando Kepler y Galileo realizaron sus
ambientales. Los cambios son tan lentos que no son percibidos claramente por los vivíparos, engendran por medio de huevos. Siguiendo su tendencia muy
investigaciones. Seg n el enfoque de Kuhn, identi quen y describan cuáles son los
los hombres, quienes consideran al ambiente como estable. Dichos cambios natural, los preformacionistas tomaron el huevo en primer lugar como germen
dos paradigmas en pugna en aquel momento.
ambientales provocan cambios en los animales que viven en cada lugar. universal; es en el progenitor hembra, en la madre, donde es¬tablecerán esas
b. Señalen lo que Kuhn caracterizaría como anomalías y como rompecabezas del
Mediante la formulación de dos leyes fundamentales del transformismo, miniaturas de animal sin lo cual no conciben explicaci n alguna del fen meno
paradigma geocentrista. ¿Qu diferencia hay entre estos dos conceptos
Lamarck intenta fundamentar su teoría: de la reproducción. En cuanto al papel que desempeña el progenitor macho, el
c. Kepler y Galileo son cient cos que reali aron actividades extraordinarias por
padre, queda reducido a poquísima cosa, sin atribuir a la simiente otro efecto
Durante la vida de los animales, stos ejercitan el uso de ciertos rganos y fuera de lo determinado por el paradigma dominante. ¿En qué etapa piensan que se
que el de estimular el crecimiento del animalito preformado que contiene el
entran en desuso otros. Los usados se ven fortalecidos y desarrollados; en cambio encontraba el paradigma dominante Justi quen.
huevo.
los desusados se van debilitando (Ley del uso y desu¬so de los órganos). d. ¿Cuándo dir an, seg n lo expresado en el texto, que se ha instaurado el nuevo
La doble autoridad de Malpighi y de Swammerdam otorgaba un cr dito
Los cambios pequeños y graduales que experimentan en vida los individuos paradigma y ha concluido la revoluci n
considerable a esta tesis «ovista»; pero pronto se produjo el descubrimiento
de una especie son transmitidos a sus descendientes (Ley de la herencia de e. La Revoluci n copernicana, relatada en el fragmento de texto, fue de nitivamente
de los animálculos espermáticos (los espermatozoides), lo que provocó una
los caracteres adquiridos). una revolución muy lenta. ¿Qué razones podría argumentar Kuhn sobre la tardanza
grave disidencia entre los partidarios del preformacionismo germinal.
de los cient cos en decidirse a cambiar de paradigma
Lamarck consideraba que la causa, motor o mecanismo de los cambios es un Leeuwenhoek no vacil , en efecto, en considerar a estos animálculos como
f. ¿En qu sentido di eren en sus concepciones con respecto al mundo En ambos
sentimiento interior de los animales que los induce a cambiar sus hábitos. verdaderos gérmenes de los animales. […] Sea lo que fuere, era necesario,
paradigmas, ¿cuáles son los m todos adecuados para estudiarlo
Ya es clásico el ejemplo acerca de la jirafa que utilizó Lamarck. Dice Lamarck: tanto para unos como para otros, explicar el origen de los g rmenes
g. ¿Por qu motivo la frase “Los planetas giran alrededor del Sol no signi ca lo
“La jirafa, el más alto de los mamíferos, vive en el interior de África, en lugares preformados; y también aquí dábanse libre curso las preferencias gratuitas.
mismo en cada uno de los dos paradigmas en pugna
donde hay poca hierba, por lo que se alimenta de las hojas de los árboles. El Érase partidario de la «diseminación» o partidario del «encaje» y, como
permanente esfuerzo por alcanzarlas ha hecho que sus patas delanteras sean mucho cada una de ambas tesis podía conciliarse tanto con el ovismo como con
más largas que las traseras, y que su cuello se haya estirado notablemente”. el animalculismo, aparecieron cuatro maneras diferentes de pensar sobre la
Vuelvan sobre la Revoluci n darwiniana.
Sin embargo, la teoría de Lamarck no fue considerada seriamente e incluso fue cuestión de la generación: ovismo con encaje, ovismo con diseminación,
ridiculizada por Cuvier, quien reparando en la ceguera de Lamarck, insinuaba animalculismo con encaje, animalculismo con diseminación. a. Distingan entre el paradigma de la teolog a natural y el darwinista, señalando:
que él mismo era el mejor contraejemplo de su ley de uso y desuso: el uso Seg n los partidarios de la diseminaci n, todos los g rmenes de los animales se
diferencias entre las formas que explicaban el fen meno de la adaptaci n;
de los ojos para leer debería haberlos desarrollado y no cegado. Asimismo se encuentran desde siempre esparcidos por todos los lugares, pero sólo se desarrollan
diferencias en las concepciones metaf sicas acerca del mundo y las diferencias
cuestionaba la herencia de los caracteres adquiridos mencionando el hecho a condición de encontrar en la naturaleza matrices adecuadas o cuerpos de una
con respecto a la metodología aceptable en ambos paradigmas;
de que los niños judíos nacían con prepucio a pesar de miles de años de misma especie, que sean capaces de fomentarlos y de hacerlos crecer.
los diferentes tipos de rompecabe as que se dedicaban a resolver.
circuncisión. Respecto a los cambios evolutivos en general, Cuvier había En resumidas cuentas, seg n la tesis diseminacionista el animal obtiene sus
b. Un caso interesante de un mismo t rmino con signi cados completamente
estudiado momias egipcias de ibis (un ave) y comprobó que no diferían de gérmenes de fuera: los recibe por la respiración o la alimentación, y sólo
distintos en el marco creacionista y en el darwiniano, es “homolog a . Expliquen
los actuales ibis. Las críticas hechas al transformismo de Lamarck hicieron debe su propia fecundidad a una como infestaci n ex gena. Tales g rmenes
por qu tal t rmino, como “planeta o “masa , puede servir para ejempli car una de
que esta teor a fuera descali cada durante medio siglo (aunque sigui siendo existen desde siempre, o cuando menos desde el momento de la Creaci n; se
las formas de la inconmensurabilidad kuhniana.
sostenida por autores como Geoffroy de Saint Hilaire).8 encuentran en todo lugar, puesto que no hay sitio alguno de la tierra en que
(Flichman, Paruelo y Pissinis,2004, pp. 165-167, fragmento levemente modi cado con nes didácticos )
un animal no pueda adquirir la fecundidad; su n mero es inmenso, aunque
tal ve no sea in nito, por lo que bien pudiera ocurrir que las especies se
Aunque las posiciones de Popper y de Kuhn resultan difícilmente conciliables,
8 La disputa de la que trata el texto es anterior a la publicaci n del El origen de las especies de Darwin, en extinguieran por agotamiento de la provisi n inicial.
ambos comparan sus puntos de vista con los de Darwin. Seg n Popper:
donde se presenta la Teor a de la evoluci n por selecci n natural, que nalmente fue aceptada, y contin a si n- Si, debido al estupor que acaban de motivar los primeros descubrimientos
dolo, por la comunidad cient ca. Finalmente, ninguno de los puntos de vista de los que trata el texto termin microscópicos, la tesis del encaje de los gérmenes y, generalizando más, la de Quizá podamos responder ahora a la pregunta acerca de cómo y por qué
siendo aceptado. Pero, por supuesto, s es aceptada unánimemente entre los cient cos, la evoluci n. En esto la preformación, encontraba en muchas mentes un terreno propicio, en otras aceptamos una teoría con preferencia a otras. Ciertamente, tal preferencia no
tenía razón Lamarck, aunque no en el mecanismo por el que esta ocurre.

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

2. Respondan las siguientes consignas: no dejaba de suscitar vivísimas resistencias. se debe a nada semejante a una justi caci n experimental de los enunciados
Estas ltimas recha aban pura y simplemente la noci n de g rmenes que componen una teoría´[…]. Elegimos la teoría que se mantiene mejor en
a. Identi quen y describan los dos enfoques en competencia.
preformados, que traía consigo tan escandalosas consecuencias. Resistiéndose la competición con las demás teorías, la que por selección natural muestra ser
b. Consideren la situación en la que se encuentra la disputa, ¿en qué período histórico
a admitir que un animal en miniatura pudiera alojarse en un huevo o en un más apta para sobrevivir; y ésta será la que no solamente haya resistido las
de los relatados por Kuhn les parece que se ubican estos autores
animálculo espermático, permanec an eles a la idea de la epig nesis, y contrastaciones más exigentes, sino que sea, asimismo, contrastable del modo
c. Señalen las anomalías mencionadas de cada uno de los enfoques.
sostenían que el animal se constituye poco a poco por sucesivas agregaciones. más riguroso. (Popper, 1971, p. 103)
d. ¿Qu motivos podr a aducir Kuhn para explicar por qu Cuvier y Lamarck no
[…]
lograron llegar a un acuerdo Alguna de las ra ones esgrimidas por los participantes Seg n Kuhn:
Así, por un lado, los partidarios de los gérmenes —ovistas o animalculistas—,
en la disputa, ¿podr a considerarse, seg n Kuhn, concluyente
que tienen en cuenta hechos precisos pero mal interpretados, de los cuales El aspecto más dif cil y perturbador de la teor a darwinista era la creencia en que
e. En el marco kuhniano, ¿podría sostenerse como “refutatorio” (en sentido estricto)
extraen consecuencias fantásticas; por el otro, los epigen ticos, quienes, la selección natu¬ral, provocada por la mera competencia entre los organismos
del enfoque de Lamarck, la observaci n de que los ibis momi cados no comportan
chocados por la extravagancia de dichas hip tesis, s lo saben oponerles la en aras de la supervivencia, pudiera haber producido al ser humano junto con
cambios con respecto a los actuales
burda doctrina de la mezcla seminal. los ani males y plantas superiores. ¿Qu habr an de sig ni car evoluci n,
As , los preformacionistas pod an explicar c mo se desarrollaban los desarrollo y progreso en ausencia de una meta espec ca Para muchas
organismos, pero no pod an explicar con xito el origen de los g rmenes. Por personas tales términos se mostraron de pronto como autocontradictorios.
1. Lean atentamente el siguiente texto: otro lado, las observaciones no los favorecían. Los epigenistas se ajustaban Es fácil llevar demasiado lejos la analogía que conecta la evolución de los organismos
más a lo observado pero no pod an explicar c mo una materia sin forma con la evoluci n de las ideas cient cas, pero por lo que respecta a las cuestiones
A comienzos del siglo XVI sólo se tenían sobre el mecanismo de la generación
adquiere la forma de un organismo vivo. planteadas en este cap tulo nal resulta casi perfecta. El proceso descri to en el
animal ideas muy vagas y completamente dominadas por lo que se creía sólo
de la generación humana. De manera general, se seguía la opinión de los Esta polémica se sostuvo hasta que, en el siglo XX se impuso en toda la capítulo XII como la resolución de las re¬voluciones es la selección mediante el
comunidad cient ca la gen tica clásica que brindaba una respuesta mucho con icto dentro de la comunidad cient ca del modo más apto de practicar la ciencia
antiguos (Hip crates), seg n la cual el embri n se forma por la me cla de dos
más elaborada del proceso de formación del organismo vivo, que ni futura. El resultado neto de una sucesión de tales selecciones revolu¬cionarias,
simientes respectivamente producidas por ambos padres.
Descartes (1596-1650), por ejemplo, aunque admita que «siendo la simiente preformacionistas ni epigenistas podrían haber imaginado. (Rostand, 1994, separadas por periodos de investigación normal, es el conjunto maravillosamente
pp. 17-26, fragmento levemente modi cado con nes didácticos ) adapta do de instrumentos que llamamos conocimiento cient co moderno. Los
de las plantas dura y sólida puede tener dispuestas y situadas sus partes de tal
forma que no podrían cambiarse sin ser inutilizada», hace derivar el embrión sucesivos estadios de di¬cho proceso de desarrollo están marcados por un aumento
2. Respondan las siguientes preguntas:
animal de la «mezcla confusa de dos licores. Sirviéndose mutuamente de en la articulación y la especialización. Además, todo este proceso puede haberse
levadura, se calientan de tal manera que algunas de sus partículas adquieren a.De acuerdo con lo leído, y siguiendo a Kuhn, ¿a qué período de la ciencia produ¬cido, tal como suponemos ahora que ocurrió con la evolución biológica, sin
la misma agitación que si estuviesen en el fuego, se dilatan y empujan a las (preparadigmático, ciencia normal, crisis) pertenecería la polémica entre epigenistas recurso a una meta es tablecida, a una verdad cient ca ja y permanen te, de la
demás y, de esta manera las disponen poco a poco del modo que la formación y preformacionistas que cada estadio del desarrollo del cono cimiento cient co constituye una imagen
de los miembros requiere.» b.¿Cuáles son los diferentes enfoques en cuesti n mejor. (Kuhn, 1971, pp. 287-288)
Era natural que explicaciones de este g nero —que fuesen mecanicistas a la c. ¿Puede sostenerse que tales enfoques son paradigmas
d.¿Qu motivos metate ricos podr a aducir Kuhn para explicar por qu Tengan en cuenta ambos fragmentos y lo ya le do sobre Darwin. Luego expliciten
manera de Descartes—, no pudieran gozar de un crédito muy duradero.
preformacionistas y epigenistas no lograron llegar a un acuerdo ¿Alguna de las qu aspectos de su enfoque pretenden aclarar con la analog a y, exactamente, con
A medida que el estudio de las estructuras orgánicas, revelaba, gracias al
ra ones esgrimidas por los participantes en la disputa podr a considerarse, seg n qu rasgo de la teor a de Darwin se hace tal analog a.
microscopio, que poseían una mayor complejidad, se fue precisando más
la di cultad de comprender c mo se forma, mediante la generaci n, un Kuhn, concluyente
nuevo ser orgánico, lo que condujo a tratar de evitarla, suprimiéndola, e.¿C mo catalogar an el paso de esta disputa al a an amiento de la gen tica 5. El problema de la teoricidad
pura y simplemente. Para ello, se dará por supuesto que el nuevo ser no se clásica en el marco kuhniano (es decir, a qué período de los señalados por Kuhn
forma, sino que está ya completamente formado, que preexiste enteramente corresponder a) Una de las cuestiones que más discusi n provoc en la losof a de
y en pequeñ simo estado como corp sculo organi ado o germen. En tal
la ciencia respecto a los supuestos de la Concepción heredada es la
hip tesis, la generaci n propiamente dicha ya no existe, y s lo hay un mero
agrandamiento del germen, una ampliación, una dilatación que lleva a lo supuesta división entre términos observacionales y teóricos. En el
visible a un animal hasta entonces tan min sculo que escapaba a la vista. Se enfoque clásico, la distinción entre términos observacionales y teóricos
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

se hacía en base a la observabilidad directa o no de las entidades a las acerca del fenómeno del que la teoría da cuenta; este otro vocabulario estará accesible fuerte de la Concepción heredada que señala Hempel: su concepción
y entendido antes de la introducción de la teoría, y su uso estará guiado, al menos
que los t rminos re eren. Seg n los defensores de la carga te rica de de ley fundamental y que la forma en que adquiere semántica empírica
inicialmente, por principios que son independientes de la teor a. Re rámonos a l como
la observación esta distinción es imposible en estos términos, puesto el vocabulario prete rico o antecedente Va relativo a la teor a en cuesti n. Un fen meno a través de leyes de correspondencia es inadecuada para reconstruir
que la observaci n está cargada de teor a. Kuhn, in uenciado por estos que ha sido examinado y del cual una teor a da cuenta, ha sido concebido a veces como teor as cient cas reales.
cr ticos, dej de lado la re exi n con respecto a posibles distinciones descrito, o por lo menos describible, por medio de un vocabulario observacional, esto
es, por un conjunto de términos que representan individuos particulares o atributos
entre los conceptos de una teoría. La distinción hempeliana va en la dirección correcta, pero tiene
generales los cuales bajo condiciones convenientes son accesibles a la observaci n
directa por observadores humanos. Sin embargo, se ha encontrado que esta concepci n
un problema vital. Para saber si un concepto está disponible con
Hubo un grupo de l sofos de la ciencia cuyas cr ticas se centraron es inadecuada en varios aspectos importantes. anterioridad o no, es necesario tener alguna concepción de sinonimia
en otros problemas de la distinción, que resulta interesante repasar en La distinción que he sugerido entre vocabulario teórico y vocabulario antecedente entre conceptos. Por ejemplo, como se adelantó antes, el término “masa”
este apartado. La intuición detrás de estas críticas es que detrás de la no descansa en la anterior suposición. Los términos del vocabulario antecedente no se encuentra tanto en la mecánica clásica como en la relativista. Por esta
necesitan y no deberán ser concebidos como observacionales en el estrecho sentido
distinci n te rico/observacional existen dos distinciones me cladas. La ra n, ¿el concepto de masa es prete rico en la mecánica relativista
que acaba de ser esbozado, ya que el vocabulario antecedente de una teoría dada
teórico/no teórico, por un lado, y la observacional/no observacional, contendrá generalmente términos que fueron introducidos originalmente en el
No necesariamente, dado que en muchos casos un mismo término
por el otro. Surgía entonces el problema de caracterizar la “teoricidad” contexto de una teor a anterior y los cuales no son observacionales en un sentido tiene varios signi cados. Pero entonces, para aplicar la distinci n
independientemente de la “observabilidad”. intuitivo estrecho. (Hempel, 1970) historiográ ca de Hempel, son necesarias nociones semánticas de las
que este carece. La distinción, como veremos, es superada por una,
Las teor as proponen nuevos conceptos para explicar el comportamiento
Repasemos la situación. Intuitivamente es posible separar en dos grupos que en la misma dirección, soluciona este problema, en el marco del
de las entidades que caerían bajo conceptos disponibles con anterioridad.
los conceptos no l gicos de una teor a cient ca, por ejemplo, en la Estructuralismo metateórico.
De esta manera, en la genética clásica se propuso el nuevo concepto
gen tica clásica claramente existe una diferencia entre el concepto de
de gen para explicar lo que ocurr a con la herencia de los rasgos. El
gen y el de rasgo. La respuesta clásica a la cuestión, consiste en señalar
concepto de rasgo y también el de herencia exist an previamente a la Con las críticas de Popper, de Hanson y de Kuhn, entre otros, se comenzó a descreer
que los rasgos (pelaje blanco, semilla rugosa) son observables mientras
gen tica clásica. Hempel llamaba a los t rminos que expresan conceptos de la distinción teórico/observacional. El problema es que la distinción poseía una
que los genes (gen para el color de pelaje blanco, o gen para la super cie función importante en el enfoque clásico, que tenía que ver con salvaguardar la
propuestos por una teoría T: “términos teóricos de T” y a los términos independencia de la base emp rica con la que las teor as cient cas se contrastan. Si
de la semilla rugosa) son teóricos, es decir, no observacionales. En los
que expresan conceptos disponibles con anterioridad a T: “términos el tribunal de la base empírica no es independiente, entonces, la contrastación tiene
ejemplos que acabamos de citar, la distinción parece funcionar. Sin
preteóricos o antecedentes a T”. Se notará que, a diferencia de la propuesta la forma de una autojusti caci n.
embargo, si nos percatamos de que también puede ser un rasgo, por Algunos autores comenzaron a sospechar que el problema de la distinción teórico/
clásica, la distinción es relativa a una teoría particular. El concepto de gen
ejemplo, el tipo sangu neo (que se re ere a ciertas propiedades de los observacional mezcla dos distinciones diferentes; teórico y no teórico, y observacional
clásico es teórico en la genética clásica, pero podría ser preteórico para y no observacional. La clave para solucionar el problema se encontraría, en este
glóbulos rojos que no son observables directamente), comienzan a
teorías más nuevas. caso, en dar una buena elucidación de la primera de las distinciones, sin apelar a la
surgir problemas. Debe existir otro modo de elucidar esta distinci n distinción observable/no observable, que se había mostrado problemática.
entre estos conceptos. Esta distinción es interesante, pues además de permitir elucidar estas 1. En Sobre la “concepción estándar” de las teorías, Hempel abandona la concepción
diferencias intuitivas entre los conceptos de una teoría, salvaguarda la tradicional de teor a cient ca mostrando nuevos caminos por los que se deber a
En 1970, Carl Hempel (1905–1997) escribió un artículo señalando todos
independencia de la base empírica que se había visto complicada por trabajar para elaborar nuevos enfoques al respecto. Considerando lo visto hasta
los problemas de la Concepción heredada que el mismo había defendido aquí, respondan las siguientes preguntas:
los críticos de la carga teórica de la observación. Si, efectivamente, la

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

tiempo atrás: “Sobre la concepción estándar de teoría” (Hempel, 1970). base empírica de una teoría está cargada teóricamente por esa misma a.¿Cuáles son las diferencias y las semejanzas entre la distinción propuesta por
Hempel y la clásica
En este artículo, señala varios problemas que a esa altura le parecían teor a, existe el riesgo de que la teor a en cuesti n se autojusti que.
b.¿En qu sentido se puede a rmar que la distinci n te rico/observacional es
insuperables, por los cuales era necesario abandonar esta concepción de El problema de la autojusti caci n, tambi n, puede señalarse con absoluta, mientras que la nueva distinci n planteada por Hempel no lo es
teoría. Al comienzo del artículo, plantea una distinción para reemplazar respecto a la concepción kuhniana de paradigma. El hecho de que los
2. Consideren el ejemplo de teor a seg n la Concepci n estándar presentado en el
la clásica entre conceptos teóricos y observacionales. Dado que la paradigmas se autojusti quen constituye uno de los sentidos en los que apartado 2 de este cap tulo. ¿En qu sentido se podr a a rmar que el concepto de
distinción observacional/no observacional era cuestionable, propone, Kuhn sostiene que paradigmas diferentes pueden ser inconmensurables. célula es teórico en la teoría celular, pero tejido es parte del vocabulario antecedente
o disponible con anterioridad
entonces, enfocarse en la distinci n te rico/no te rico. Seg n Hempel, Lo que señala correctamente Hempel es que, si bien es cierto que los
la diferencia entre los conceptos no lógicos de una teoría consiste en conceptos con los que se describe la base empírica están cargados 3. Consideren si los siguientes conceptos son teóricos en el copernicanismo o no, y
justi quen:
que ciertos conceptos son propuestos por la teoría, mientras que otros de teoría, no necesariamente lo están de la misma teoría que se está
se encontraban disponibles con anterioridad a la misma y, por lo tanto, contrastando. La descripción que se hace del comportamiento de las a. Satélite
b. Retrogradación
eran comprensibles independientemente de la teoría. entidades que se pretenden explicar con cierta teor a se halla, por
c. Planeta
decirlo de alg n modo, cargada de teor a de “otras teor as. La “base d. Esfera de las estrellas jas
La distinción es presentada por Hempel a través del siguiente fragmento:
empírica” en cuestión no necesariamente es observacional, ni objetiva,
La formulación de una teoría puede consistir en la enunciación de proposiciones pero al menos, es independiente de la teoría considerada. El problema
de dos tipos; para abreviar permítasenos llamarlas principios internos y principios
6. Síntesis desde el Estructuralismo metateórico
de la autojusti caci n se encuentra parcialmente solucionado.
puente. Los principios internos sirven para caracterizar el ambiente o escenario
El Estructuralismo metateórico surge como un intento de continuar el
te rico: especi can las entidades básicas y los procesos propuestos por la teor a, as
como las leyes teóricas que se asume que los gobiernan. Los principios puente, por Esta nueva distinción entre conceptos propuestos por una teoría ideal reconstructivo del Empirismo lógico pero sintetizando varios
otra parte, indican las maneras en las cuales el escenario está relacionado con los y conceptos disponibles con anterioridad, tiene una consecuencia de los resultados de los estudios realizados en cuanto a la estructura
fen menos ya examinados previamente y que la teor a pretende explicar.
sumamente interesante, que el mismo Hempel señala. Consideremos, y a la dinámica de las teor as cient cas. Si bien podr an establecerse
Si I y P son los conjuntos de principios internos y puente por medio de los cuales relaciones con las corrientes que llevan el nombre de “Estructuralismo”
otra ve , la ley fundamental de la mecánica clásica de Newton: F= m.a. Si
una teoría T es caracterizada, entonces T puede ser representada como una pareja
aplicamos la distinción, no quedan dudas de que el concepto de fuerza en antropología o en psicología, en este apartado no nos referimos a ellas.
ordenada de dichos conjuntos:

(1a) T = (I, P)
fue propuesto por su teoría, el concepto de masa podría ser discutible
ya que podría pensarse que aparece en teorías anteriores como la Por supuesto, la losof a de la ciencia actual es extremadamente
o de manera alternativa y apelando a n más a lo intuitivo, T puede ser representada
como el conjunto de las consecuencias lógicas de la unión de los dos conjuntos: mecánica del choque, sin quedar duda que el concepto de aceleración heterogénea y no hay unanimidad con respecto a casi ninguna cuestión.
se encontraba disponible con anterioridad a tal teoría. Era posible medir La opci n de exponer en estas páginas al Estructuralismo entre todos
(1b) T = c(IUP)
aceleraciones antes de la existencia de dicha teor a. Sin embargo, la los enfoques disponibles tiene que ver con su carácter de síntesis de las
En la formulación de los principios internos se hace uso generalmente de un vocabulario
ley fundamental de la teor a cient ca que, aunque refutada, es tomada cuestiones que hemos venido desarrollando que, como veremos, toma
teórico Vt, esto es, de un conjunto de términos no empleados en anteriores descripciones
y generali aciones acerca del fen meno emp rico que T pretende explicar, sino que más como ejemplo de teor a cient ca genuina, es lo que en la Concepci n características de todos los autores que ya hemos presentado.
bien han sido introducidos espec camente para caracteri ar el escenario te rico y sus clásica se caracteri a como un “enunciado mixto , “puente o como A diferencia de los l sofos clásicos que casi no lo hicieron, los
leyes. Evidentemente, los principios puente contendrán a ambos, es decir, los términos
una “regla de correspondencia”: un enunciado que tiene los dos tipos estructuralistas han reconstruido muchas teorías de las más diversas
de Vt y los del vocabulario usado en las descripciones y generalizaciones originales áreas de la ciencia. Al hacer esto, han aprendido que las teorías son más
de conceptos, teóricos y no teóricos. Este, tal vez, sea el problema más
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

complejas y son diferentes al modo en que eran consideradas por los riguroso de aplicaci n. Además, este ha sido aplicado exitosamente a lo tanto, la forma en que la teor a adquiere signi cado emp rico, es a
clásicos (como Kuhn, también, lo había notado). Para dar cuenta de las muchas teorías de todas las disciplinas. trav s de los casos de aplicaci n de la teor a. El examen de aplicaciones
teorías y sus complejidades, los estructuralistas han ido desarrollando exitosas de una teor a permite entender de qu habla la teor a. Esto
y contin an, un sistema conceptual elaborado y fruct fero que es lo que 6.2. Leyes fundamentales pertenece al campo de la pragmática, es decir, al uso que se hace de la
veremos de manera general e informal en este trabajo. teoría. El campo de aplicación de una teoría no se conoce de antemano,
En cuanto al señalamiento de Hempel de que las leyes fundamentales suelen
esto es algo que surge a partir de la investigaci n emp rica (Darwin
tener tanto conceptos T-teóricos como T-no teóricos, los estructuralistas
No podremos ver en funcionamiento el enfoque porque requeriría no estaba seguro de la extensi n del campo de aplicaci n de la teor a
han notado que esto es una característica de todas las leyes fundamentales.
acceder al lenguaje formal presupuesto en el Estructuralismo, tema que de la selecci n natural; Mendel no conoc a la extensi n del campo
excede los l mites de este texto. La idea es, entonces, ver los conceptos de aplicación de la genética que proponía). El campo de aplicaciones
De esta manera, la forma de la ley fundamental de la genética, que
generales de manera informal y las modi caciones introducidas a las pretendidas es borroso, es decir, no tiene l mites jos, y puede ir
normalmente no se presenta de manera expl cita en los libros de texto
concepciones anteriores. cambiando con el tiempo (por ejemplo, ahora, la selección natural tiene
de biología, tendría más o menos la siguiente forma:
como ámbito de aplicaciones pretendidas a la evolución de los virus,
6.1. Distinción T-teórico/T-no teórico “Existen genes que se heredan de tal y tal forma que explican la forma que ni siquiera eran conocidos en la poca de Darwin).
en que se distribuyen los rasgos”.
Seg n Hempel, la distinci n te rico/observacional clásica confunde dos
distinciones diferentes: la distinción teórico/no teórico y la distinción Esto es, obviamente, un esbo o que simplemente re eja la presencia 6.4. Leyes especiales
observacional/no observacional. Al igual que este, los estructuralistas de los dos tipos de conceptos. El concepto de rasgo, que puede ser Otra diferencia fundamental con el enfoque clásico, producto del
consideran la distinción teórico/no teórico y dejan de lado la de determinado independientemente de la genética clásica (podemos examen de teor as cient cas, tiene que ver con la relaci n entre
observacional/no observacional. Además, como la distinción hempeliana determinar si un conejo es blanco o no independientemente de la la ley fundamental y las leyes especiales. También podemos notar
y a diferencia de la clásica, esta distinción no es absoluta, sino relativa genética) y, por lo tanto, es un concepto no teórico en la genética, y el aqu una in uencia kuhniana. Las leyes fundamentales no se aplican
a una teoría. Lo que puede funcionar como teórico en una teoría, puede de gen, que solo podemos determinar utilizando la genética clásica, y, directamente al mundo. De hecho, las leyes fundamentales casi
funcionar como no teórico en otra. Pero, la forma a través de la cual por lo tanto, es teórico para la genética clásica. no hacen ninguna a rmaci n emp rica que permita contrastarlas
se establece la distinci n es diferente. No tiene que ver con ning n directamente. Piensen en el segundo principio de la mecánica
tipo de estudio historiográ co de qu teor a propuso qu concepto. La Las leyes fundamentales, entonces, tienen la característica de que en clásica que hemos venido utilizando como ejemplo. Si tuviéramos
distinci n fue propuesta en un texto que se considera fundacional del ellas aparecen los conceptos principales de la teoría y que, además, que parafrasearlo en lenguaje natural, tendríamos que decir algo así
Estructuralismo metateórico, escrito en 1971 por Joseph Sneed (n.1938). algunos de ellos serán teóricos y otros no. como: existen fuer as que provocan aceleraciones en las part culas de
acuerdo con su masa.
Presentaremos esta distinción apelando otra vez al segundo principio de 6.3. Campo de aplicación Noten que no se a rma ni qu fuer as, ni cuántas, ni el modo en que
la mecánica clásica: F= m.a. act an. El principio solo a rma que para cualquier aceleraci n de un
Lo anterior conlleva a que la forma en que se relacionan las teorías con el
mundo sea diferente a la concebida por los clásicos. Pues seg n ellos, las cuerpo deben actuar sobre él, fuerzas. Pero no se establece nada con
Recuerden que este principio permite explicar ciertos movimientos de
teor as se encontraban constituidas por un sistema axiomático te rico que respecto a esas fuer as. Esta, si bien es una a rmaci n acerca del
muchos cuerpos. La idea es que los cuerpos se aceleran de acuerdo con

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

la fuerza que se les aplica, dependiendo de su masa. Al aplicar este se relacionaba con el mundo a través de reglas de correspondencia. Si las mundo, no es una a rmaci n por s misma falsable. Pues parece que
principio se puede dar cuenta de los movimientos de los planetas, de leyes fundamentales ya tienen esta caracter stica de enunciados mixtos, podemos postular fuerzas a nuestro antojo de manera que el principio
los péndulos, de la forma en que caen los cuerpos en caída libre, del por tener términos teóricos y no teóricos, la forma en que se relacionan las se cumpla.
movimiento de cuerpos que chocan, etc. teorías con el mundo debe ser diferente. Entonces, ¿cómo adquiere una
teor a semántica emp rica, si no es a trav s de leyes de correspondencia Para aplicar este principio, es necesario, por lo tanto, encontrar leyes
¿Cuáles son términos teóricos y cuáles no teóricos en la mecánica especiales que incrementen su contenido empírico, que digan más
clásica De los tres conceptos que se incluyen en el segundo principio La respuesta de los estructuralistas es similar a, y está basada en, la acerca del mundo. Así, por ejemplo, en la ley de gravitación de los
de manera intuitiva, se puede decir que los conceptos de masa y de propuesta kuhniana. Las teorías tienen un campo de aplicación. Por planetas, una de las leyes especiales de la mecánica clásica, se establece
fuerza permiten explicar los movimientos de los cuerpos, que aparecen ejemplo, la teoría de la selección natural se aplica a la forma en que que la fuer a en juego es la de gravedad y esta act a sobre las masas
conceptualizados a través de aceleraciones en esta teoría. El criterio los organismos vivos evolucionan adaptativamente. Dentro del campo de los planetas de cierto modo. En la ley de los péndulos, se establece
que proponen los estructuralistas para determinar esto con mayor de aplicación, puede distinguirse entre un campo de aplicaciones que las fuerzas en juego son: la de gravedad, la del rozamiento del aire
claridad es el que describiremos a continuación. Los términos no pretendidas, aquellos lugares del mundo en donde la teoría se pretende y el objeto que cuelga, la del rozamiento del clavo con el hilo, etc.
teóricos en una teoría son los que pueden ser determinados o aplicados aplicar, y un campo de aplicaciones exitosas, aquellos lugares en donde Estas leyes especiales, que guardan una forma similar siempre con la
en prescindencia de esa teoría. En este caso, la aceleración de un la teor a se ha aplicado con xito. As , son parte del campo de aplicaci n ley fundamental, s hacen a rmaciones más ricas acerca del mundo,
cuerpo puede ser medida sin utilizar la ley fundamental, el segundo exitoso de la mecánica clásica, por ejemplo, la forma en que se mueven pues ellas establecen los tipos de fuerzas en juego y la proporción que
principio. Pero, ¿c mo determinamos cuál es la fuer a que act a sobre los péndulos y la forma en que se mueven casi todos los planetas hay que tomar en cuenta con las masas y las aceleraciones. Las leyes
un cuerpo, por ejemplo, la fuerza de gravedad con la que la Tierra (pues tuvieron problemas con Mercurio). Pero el campo de aplicación fundamentales, entonces, solo se aplican a través de leyes especiales.
afecta los cuerpos en ca da libre Para esto debemos apelar al principio. pretendido normalmente, sobre todo en los orígenes de la teoría, es La función de las leyes fundamentales es servir de guía para la
Podemos, por ejemplo, tomar un cuerpo y, a partir de las masas del mucho más amplio que el de aplicaciones exitosas. Por ejemplo, se construcción de leyes especiales que permitan que estas se apliquen en
cuerpo y de la Tierra, determinar cuánto se acelera en caída libre. Es pensaba que la mecánica clásica iba a explicar el comportamiento de nuevos sectores del mundo.
decir, siempre es necesario utilizar la fórmula del segundo principio. los fotones (las partículas de las que está formada la luz), pero esta
¿C mo determinamos la masa de un cuerpo (recuerden que lo que idea con el tiempo se abandonó. Es decir, el movimiento de los fotones La ley fundamental y las leyes especiales forman una red, que es llamada
pesa la balanza es el peso y no la masa, al pesar un mismo objeto una estaba en el campo de aplicaciones pretendidas de la mecánica clásica, por los estructuralistas “red teórica”, que elucida el sentido más habitual
misma balanza, en la Tierra y en la Luna da resultados diferentes, pero pero nunca pas al campo de aplicaciones exitosas, y a la larga, se de teor a cient ca (cuando se sostiene que la mecánica de Newton, la
la masa del objeto sigue siendo la misma). Otra vez, debemos aplicar al eliminó del campo de aplicaciones pretendidas. teoría de la selección natural o la genética clásica, son teorías).
cuerpo alguna fuer a determinada y ver cuánto se acelera. Esto signi ca
que, para poder aplicar fuerza y masa, es necesario suponer la mecánica ¿C mo saben los cient cos cuál es el campo de aplicaciones pretendidas Hay una gran diferencia entre este punto de vista y el enfoque clásico.
clásica, mientras que para aplicar el concepto de aceleración, no. de una teoría, si no hay reglas de correspondencia que lo determinen Recuerden que la idea clásica de cómo se contrastaba una teoría consistía
de manera clara Bueno, la respuesta de los estructuralistas (basada en en la deducci n a partir de leyes fundamentales puras y mixtas de leyes
Esto brinda una caracterización independiente de la de observable/no la idea de ejemplar de Kuhn) involucra a las aplicaciones ejemplares. derivadas hasta la obtención de consecuencias observacionales. Esto,
observable, evitando todos los problemas que trae, y tiene un criterio La forma en que se aprende el campo de aplicación de la teoría, y, por por supuesto, cuando se utili an hip tesis auxiliares. Los estructuralistas,
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

como anteriormente lo había hecho Kuhn, han notado que esta estructuralista En ese caso, deberemos exigir que las consecuencias
descripción no es adecuada. Pues las leyes especiales no se deducen de observacionales sean singulares y que todos sus términos no lógico- Hemos visto la posición del Estructuralismo metateórico. Por supuesto, este es
uno de los muchos enfoques que está vigente en la losof a de la ciencia pero
la ley fundamental. En las leyes especiales, se precisan ciertos conceptos matemáticos, sean no teóricos con respecto a la hipótesis a contrastar. resulta interesante porque conserva puntos diferentes de todas las perspectivas
que en la ley fundamental no estaban especi cados. En el ejemplo que En de nitiva, al carecer de una base emp rica absoluta e indubitable, lo que estuvimos viendo en este documento: los objetivos reconstruccionistas
ve amos, en la ley fundamental se dice “existen fuer as y en la especial que hay que salvaguardar es la independencia de la aceptación o no de del Empirismo lógico, muchas de las elaboraciones de Kuhn y la distinción de
T-teoricidad puede ser considerada una elaboración de la propuesta por Hempel
“existen tales y tales fuer as . Conceptos que aparecen sin detallar la consecuencia observacional, y esto es asequible en este marco. (si bien Sneed no conoc a el texto de Hempel al reali ar su propuesta). De ah que
en la ley fundamental, aparecen especi cados en las leyes especiales. resulte interesante repasarlo aunque sea breve y esbozadamente en este trabajo.
Pero esto no es una deducción, pues la deducción, como veíamos en el Ejemplo de reconstrucción estructuralista informal y esbozada
Respondan las siguientes preguntas:
capítulo II de esta publicación, no es ampliativa, no agrega información. La Teoría de la selección natural de Darwin9
a. ¿Qu hereda el Estructuralismo de Kuhn
La ley fundamental no permite deducir leyes especiales, sino que sirve Como es bien sabido, lo que Darwin quiere explicar con la Teor a de la selecci n natural (en b. ¿En qu consiste la distinci n en base a la T-teoricidad
de guía para encontrar leyes especiales de estructura similar a ella. Esto adelante, TSN), es cierta adecuación o ajuste de los organismos al medio ambiente. c. ¿Qu diferencias hay entre esta distinci n estructuralista, la clásica y la hempeliana
tiene una consecuencia importante. Si no se cumple una consecuencia Por ejemplo:
La jirafa, con su gran estatura, sus muy largo cuello, patas delanteras, cabeza y lengua, tiene
observacional, se refuta la conjunción de todo lo utilizado para deducirla.
su estructura bellamente adaptada para comer en las ramas más altas de los árboles. Puede por Regresemos al texto presentado en la Actividad 7. Existe otra ley propuesta por
En este caso, como las leyes especiales no se deducen de la ley
eso obtener comida fuera del alcance de otros ungulados que habitan el mismo lugar; y esto Lamarck que no se expone en el texto en análisis. Seg n Lamarck, para explicar
fundamental, las leyes fundamentales no son refutables, pues de ellas por debe ser una gran ventaja durante períodos de escasez. la evolución de los organismos vivos de los más simples a los más complejos, no
sí mismas no se deducen consecuencias observacionales. Darwin, Charles (1872), El origen de las especies (6º ed., p.178). alcanzan las dos leyes propuestas, sino que es necesario postular en la evolución
una tendencia constante a la compleji aci n. Tenemos entonces un dato a explicar
La forma en que Darwin explica la jaci n de este rasgo en la poblaci n de jirafas es la siguiente:
que es que los organismos vivos a lo largo de su historia evolutiva van cambiando
Por supuesto, puede ocurrir que una ley fundamental pierda todas sus En la naturaleza, en el origen de la jirafa, los individuos que comiesen más alto y que pudiesen, los rasgos y adquiriendo nuevas partes y mayor tamaño y, para explicar esto, se
aplicaciones. Se podría considerar a esta ley como refutada, pero no en durante los períodos de escasez, alcanzar aunque sea una pulgada o dos por sobre los otros, postula una “tendencia hacia la complejidad”.
serían frecuentemente preservados […]. El que los individuos de la misma especie muchas Consideren los t rminos “rasgo y “tendencia hacia la complejidad en este contexto,
el sentido clásico en el que una ley está refutada cuando no se cumple
veces di eren un poco en la longitud relativa de todas sus partes, puede comprobarse en muchas y tomando en cuenta que el rol de ambos términos en la teoría es diferente:
una de las consecuencias observacionales que se deducen de ella. obras de historia natural en las que se dan medidas cuidadosas. Estas pequeñas diferencias en
a. Determinen, seg n la concepci n clásica, si son t rminos te ricos u
las proporciones, debidas a las leyes de crecimiento o variación, no tienen la menor importan-
observacionales.
cia ni utilidad en la mayor parte de las especies. Pero en el origen de la jirafa debe haber sido
6.5. Validez del análisis clásico de la contrastación b. Determinen, seg n la concepci n hempeliana, si son t rminos propuestos por la
diferente, considerando sus probables hábitos de vida; pues aquellos individuos que tuviesen
teoría o términos disponibles con anterioridad.
En el cap tulo III, presentamos un extenso análisis de la contrastaci n. alguna parte o varias partes de su cuerpo un poco más alargadas de lo corriente, en general
c. Determinen, seg n la concepci n estructuralista, si son t rminos T-te ricos o T-no te ricos.
habrán sobrevivido. Se habrán cruzado y dejado descendencia que habrán heredado las mismas
Luego de las críticas de la teoricidad y de las propuestas kuhnianas,
peculiaridades corpóreas, o la tendencia a variar de nuevo en la misma manera, mientras que
hempelianas y estructuralistas, podemos preguntarnos cuál es la los individuos menos favorecidos en los mismos aspectos, habrán sido más propensos a perecer.
Retomemos, ahora, el texto presentado en la Actividad 8. Respondan las consignas:
vigencia de lo visto. Hay varios sentidos en los que el análisis debiera (Darwin, 1872, p.178)
complicarse, pero aquí nos importa señalar solo dos. Por una parte, a. ¿Cuáles son los conceptos fundamentales del preformacionismo No tomen en
Si consideramos, con los estructuralistas, que la ley fundamental de TSN es aquel enunciado cuenta las diferencias internas al preformacionismo.
al retomar lo ya dicho, es importante resaltar que la contrastación de en el que aparecen los conceptos fundamentales de esta teor a relacionados, podemos extraer b. Reconstruyan informalmente la ley fundamental del preformacionismo.
teorías no es equivalente a la de las hipótesis. Las teorías, como veíamos, Recuerden que en las leyes fundamentales deben aparecer relacionados todos los
9 Basado en Ginnobili (2010).

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

tanto para Kuhn como para los estructuralistas, no son refutables en el una aplicaci n de TSN a partir de la explicaci n citada: conceptos involucrados.
Las jirafas con cuello, patas delanteras, cabeza y lengua de mayor longitud son más efectivas c. El concepto de “hom nculo ¿es te rico o no te rico (seg n la distinci n
mismo sentido en el que las hipótesis lo son. De esta manera, lo que
al alimentarse de las ramas más altas de los árboles, mejorando su supervivencia y mejorando, estructuralista) en el preformacionismo
contrastaríamos, en caso de que una teoría se encuentre en juego, es en consecuencia, su xito reproductivo diferencial. (Darwin, 1872, p.178) d. Señalen alg n concepto no te rico para el preformacionismo en la ley tal como la
que tal teoría se aplica en tal fenómeno “empírico” de cierto modo. Por reconstruyeron.
Por abstracción de este enunciado, nos vamos acercando a lo que consideramos que es la ley
ejemplo, contrastaríamos la hipótesis “El sistema Tierra/Luna es un caso
fundamental de TSN:
de la mecánica clásica a través de ciertas leyes especiales –en este caso, 7. ¿Existe un único método en la ciencia?
la de la gravedad y la de la inercia–, tomando en cuenta ciertas masas y Los individuos con rasgos que cumplen con mayor efectividad cierta función, mejoran su
supervivencia mejorando su xito en la reproducci n diferencial. Hasta el momento, hemos analizado la forma de las leyes y las
ciertas fuerzas”. Pero un caso negativo de tal contrastación no refuta la
La ley fundamental de TSN tendría al menos tres componentes: teor as cient cas, el modo en que adquieren signi cado y c mo se
mecánica clásica. Refuta, tal vez, que la mecánica clásica se aplique a
contrastan con la experiencia. Explicar un hecho, en este sentido,
este caso de esta forma particular (todavía puede encontrarse un nuevo El rasgo que cumple de manera más adecuada una funci n.
El xito reproductivo diferencial, que tiene que ver con alguna medida de la cantidad de consiste en subsumirlo a leyes generales o probabilísticas. No se puede
modo de aplicarla). Recuerden la idea kuhniana de lo que se pone en
descendencia fértil dejada por los organismos. a rmar sencillamente, sin embargo, que este sea el objetivo de todos
juego en la resoluci n en rompecabe as es la astucia del cient co pero
La conexi n del rasgo adecuado y el xito reproductivo, que llamaremos “aptitud . En los cient cos o de todas las disciplinas cient cas, o que este sea el
no el paradigma. También, puede ocurrir que se tome la decisión de este caso se debe a una mejora en la supervivencia, pero no siempre es así.
nico m todo a lo largo de toda la ciencia. Con respecto a este tema,
que esa deje de ser una aplicación pretendida de la mecánica clásica
Se puede obtener la red te rica de TSN a partir de las diferentes especi caciones del concep- existi una pol mica bastante fuerte en el siglo XIX en relaci n con la
(como pasó en el caso de los fotones). Otro ejemplo, si decimos: “Los
to de aptitud. As , si se espec ca la aptitud como capacidad de atraer parejas, entonces con la unidad de método de las ciencias fácticas. Así, algunos autores, como
movimientos de Marte se explican con la teor a ptolemaica, utili ando selecci n natural es posible explicar tanto el origen de los espolones de los gallos, utili ados
el pensador francés Auguste Comte (1798-1857), consideraban que las
un epiciclo de tal tamaño y un deferente de tal tamaño que giran a tal para luchar contra otros gallos por las hembras, como el de la cola del pavo real, con la que
ciencias sociales deb an seguir el mismo m todo de experimentaci n y
velocidad , y al extraer consecuencias observacionales estas resultan los pavos atraen a las hembras (esta versión de la selección natural es conocida normalmente
como “selecci n sexual ). Si se lo especi ca como capacidad de fecundar, entonces se puede subsunci n a leyes universales que tanto xito hab a tenido en lo que
falsas; lo que se refuta es esa hipótesis de cómo se aplica (en conjunción
aplicar la selecci n natural al color con que las ores atraen a los insectos, etc. As quedar a respecta a las ciencias naturales, mientras que otros autores, como el
con las hipótesis presupuestas), pero no la teoría ptolemaica. Puede
armada la red teórica de la Teoría de la selección natural: l sofo alemán Wilhelm Dilthey (1833-1911), consideraban que las
encontrarse otra solución al movimiento de Marte en esa teoría. Los
ciencias sociales, por tener un objeto distinto, debían tener un método
estructuralistas llaman “aserción empírica” a la hipótesis de que cierta
diferente. Esta discusión perduró ya iniciado el siglo XX y todavía hoy
teoría se aplica a cierto caso de cierto modo. Lo que se contrasta de la
sigue teniendo repercusiones.
manera vista en el capítulo III, es esta aserción empírica.

Suelen presentarse, como diferencias entre ciencias sociales y naturales,


El segundo sentido en que el análisis de la contrastación debe
tres distinciones relacionadas entre sí:
so sticarse es que tal como fue presentada la contrastaci n, lo que debe
deducirse de la hipótesis es una consecuencia observacional. Y estas se 1. omot ticas e ideogr cas: esta es una clasi caci n entre tipos
presentaban como enunciados singulares y observacionales. Es decir, de ciencias establecida por el l sofo alemán neokantiano Wilhelm
este procedimiento descansa sobre la distinción teórico/observacional. Red te rica de la teor a de la selecci n natural darwiniana. En los textos de Darwin pueden Windelband (1848-1915), entre ciencias que buscan leyes y que,
encontrarse más especializaciones, estas serían solo algunas.
¿Qué ocurre si uno reemplaza esta distinción por la de la T-teoricidad además, buscan comportamientos universales en objetos del mismo tipo,
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

las nomotéticas, y ciencias que se centran en lo particular, irrepetible y El tab que proh be sacri car y comer carne de vaca puede ser un producto de la La puja entre cuál debe ser el método de las ciencias sociales se vuelve
selección natural al igual que el pequeño tamaño corporal y la fabulosa capacidad
biográ co, las ideográ cas. algo pueril frente a la lectura de ambos libros. Resulta claro que el
de recuperaci n de las ra as ceb . En pocas de sequ a y escase , los agricultores
2. Explicar y comprender: los objetos de las ciencias sociales tendrían están muy tentados a matar o vender su ganado vacuno. Los que sucumben a esta fenómeno de la conducta religiosa es mejor entendido a partir de ambos
una subjetividad interna que el investigador debe comprender, de la que tentaci n rman su propia sentencia de muerte, aun cuando sobrevivan a la sequ a, enfoques en conjunto, pues los diferentes puntos de vista re ejan
carecerían los objetos de la ciencia natural. puesto que cuando vengan las lluvias no podrán arar sus campos. Incluso voy a ser aspectos distintos del mismo fenómeno complejo. No es necesario optar
más categ rico: el sacri cio masivo del ganado vacuno bajo la presi n del hambre
3. Causa y razón: frente al intento de las ciencias naturales de dar con por uno de los dos enfoques, es posible adoptar una posición pluralista
constituye una amenaza mucho mayor al bienestar colectivo que cualquier posible
las causas de los eventos, la intención sería dar con las razones, es decir, error de cálculo de agricultores particulares respecto a la utilidad de sus animales en
aceptando que no hay métodos privilegiados y que la riqueza de la
consideraciones del pensamiento que pueden llevar a ciertas acciones. tiempos normales. Parece probable que el sentido de sacrilegio indecible que comporta ciencia consiste en la pluralidad de formas de estudiar los diferentes
el sacri cio de vacas, est arraigado en la contradicci n intolerable entre necesidades fenómenos que constituyen al mundo.
Si bien estas distinciones son interesantes para distinguir entre diversos inmediatas y condiciones de supervivencia a largo plazo. El amor a las vacas con
objetivos y métodos entre las diferentes disciplinas, es necesario aclarar sus símbolos y doctrinas sagrados protege al agricultor contra cálculos que sólo son
En este apartado, desarrollaremos, aunque sea sucintamente, en qué
que no es adecuado pensar que permiten diferenciar los métodos de «racionales» a corto pla o. A los expertos occidentales les parece que «el agricultor
indio pre ere morirse de hambre antes que comerse su vaca». A esta misma clase de
consiste esta “comprensión” basándonos en los trabajos fundacionales
las ciencias sociales y los de las naturales. Es posible, por ejemplo,
expertos les gusta hablar de la «mentalidad oriental inescrutable» y piensan que las de Dilthey. Es este l sofo quien introduce la palabra Verstehen,
encontrar explicaciones hist ricas (que no necesariamente apelen a
«masas asiáticas no aman tanto la vida». No comprenden que el agricultor preferiría traducida habitualmente como “comprensión”, para referirse a la tarea
leyes) en biología, como en la descripción del curso evolutivo (Gould, comer su vaca antes que morir, pero que moriría de hambre si lo hace. (Harris, 1980, de reconstruir la dimensión subjetiva de la acción humana y social. A
1999), y, por supuesto, es posible hallar explicaciones que apelen a pp.15-25)
diferencia de “explicar , que consistir a en reducir lo estudiado a leyes
leyes en diversas partes de las ciencias sociales (Perot, 2010).
El segundo fragmento pertenece al libro Lo sagrado y lo profano del generales, esta operación implicaría ponerse en lugar de los sujetos
antropólogo rumano Mircea Eliade (1907-1986): estudiados. Pero ¿qu signi ca “ponerse en el lugar , por ejemplo, de
7.1. Explicación vs. comprensión alg n sujeto del pasado y ¿c mo se hace esto
La sacralidad de la naturaleza y la religión cósmica
Como hemos señalado, algunos han sostenido que las ciencias sociales Para el hombre religioso, la Naturale a nunca es exclusivamente «natural»: está
tienen la característica peculiar de tratar con la subjetividad humana, y siempre cargada de un valor religioso. esto tiene su explicaci n, puesto que Seg n Dilthey, la comprensi n de la subjetividad se reali a a trav s
esta puede ser, “comprendida”. Insistimos, esto no implica ni que no
el Cosmos es una creación divina: salido de las manos de Dios, el Mundo queda de sus manifestaciones visibles. A partir de la interpretación de los
impregnado de sacralidad. No se trata nicamente de una sacralidad comunicada por productos de la cultura o de la acción, es que se accede a los sentidos
haya áreas de las ciencias sociales que explican a trav s de leyes y de los dioses, por ejemplo, la de un lugar o un objeto consagrado por una presencia
teorías, ni que no haya estudios comprensivistas por fuera de las ciencias buscados. Lo que debe hacer el investigador es proponer hipótesis
divina. Los dioses han ido más allá: han manifestado las diferentes modalidades de lo
sociales. Independientemente de que no sea adecuado considerar que
10
sagrado en la propia estructura del Mundo y de los fenómenos cósmicos. y testear su coherencia con respecto a la totalidad de las obras
estas diferentes tareas permiten distinguir entre los métodos de las analizables. La capacidad de realizar hipótesis interpretativas del
El Mundo se presenta de tal manera que, al contemplarlo, el hombre religioso
ciencias sociales y de las naturales, lo cierto es que existen cient cos investigador dependerá de su imaginación y de su capacidad de acceder
descubre los m ltiples modos de lo sagrado y, por consiguiente, del Ser. Ante todo,
que frente a ciertas conductas se proponen comprender sus motivaciones el Mundo existe, está ah , tiene una estructura: no es un Caos, sino un Cosmos; empáticamente a los estados internos de otros sujetos.
reales y subjetivas y no intentan explicarlas subsumi ndolas a leyes. por tanto, se impone como una creación, como una obra de los dioses. Esta obra
divina conserva siempre cierta transparencia; desvela espontáneamente los m ltiples Surge aquí un problema que preocupaba a Dilthey: ¿cuál es la objetividad
10 Algunos estudiosos del Comportamiento de los primates piensan que cierta comprensión es necesa-
aspectos de lo sagrado. El Cielo revela directamente, «naturalmente», la distancia
ria (de Waal, 2002).
que puede tener un análisis basado en la empat a Si la comprensi n

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

Comparemos dos fragmentos de estudios sociales distintos. El in nita, la trascendencia del dios. La Tierra, asimismo, es «transparente»: se presenta supone la recreación de un estado mental de otro en nosotros, esta
como madre y nodri a universal. Los ritmos c smicos ponen de mani esto el orden,
primero es del libro Vacas, cerdos, guerras y brujas del antropólogo capacidad de recreación, que depende de la imaginación, puede variar
la armonía, la permanencia, la fecundidad. En su conjunto, el Cosmos es a la vez un
estadounidense Marvin Harris (1927-2001): organismo real, vivo y sagrado: descubre a la vez las modalidades del Ser y de la de persona en persona. ¿Cómo pueden valorarse y validarse estás
La madre vaca sacralidad. Ontofan a y hierofan a se re nen. hip tesis acerca de la subjetividad de otros sujetos Un m todo es un
Siempre que se discute acerca de la in uencia de los factores prácticos y mundanos en conjunto de reglas y procedimientos pasible de control intersubjetivo.
En este capítulo trataremos de comprender cómo se presenta el Mundo a los ojos
los estilos de vida, estoy seguro de que alguien dirá: «¿Pero, qué opina de todas esas
del hombre religioso; más exactamente, c mo la sacralidad se revela a trav s de las ¿Existe esto para la comprensi n
vacas que los campesinos hambrientos de la India reh san comer » La imagen de un
propias estructuras del Mundo. No hay que olvidar que, para el hombre religioso, lo
agricultor harapiento que se muere de hambre junto a una gran vaca gorda transmite
un tranquilizador sentido de misterio a los observadores occidentales. En innumerables
«sobrenatural» está indisolublemente ligado a lo «natural», que la Naturale a expresa El método que Dilthey propone y elabora para la interpretación
siempre algo que la trasciende. Como hemos dicho ya, si se venera a una piedra sagrada
alusiones eruditas y populares, con rma nuestra convicci n más profunda sobre c mo de las objetivaciones o manifestaciones de la subjetividad es la
es porque es sagrada y no porque sea piedra; la sacralidad manifestada a través del
la gente con mentalidad oriental inescrutable debe actuar. Es alentador saber -algo “hermenéutica”. La hermenéutica se refería hasta el momento a la
modo de ser de la piedra es la que revela su verdadera esencia. Así no puede hablarse
así como «siempre habrá una Inglaterra»- que en la India los valores espirituales son
de «naturalismo» o de «religión natural» en el sentido dado a estas palabras en el siglo interpretaci n de los textos. Dilthey ampliará la aplicaci n de esta
más apreciados que la vida misma. Y al mismo tiempo nos produce tristeza. ¿Cómo
XIX, pues es la «sobrenaturaleza» la que se deja aprehender por el hombre religioso a noción a otras objetivaciones de la subjetividad.
podemos esperar comprender alguna ve a gente tan diferente de nosotros mismos La
través de los aspectos «naturales» del Mundo. (Eliade, 1992, pp.101-102)
idea de que pudiera haber una explicaci n práctica del amor hind a las vacas resulta
más desconcertante para los occidentales que para los propios hind es. La vaca sagrada En la discusi n acerca de la interpretaci n de los textos, ya se hab a
Los enfoques de estos antropólogos no pueden ser más dispares.
-¿de qu otra manera puedo expresarlo - es una de nuestras vacas sagradas favoritas. comenzado a hablar del famoso círculo hermenéutico. Este círculo
Harris, de herencia marxista, considera que existen ra ones econ micas
consiste básicamente en el proceso por el que se interpreta un texto en
Los hind es veneran a las vacas porque son el s mbolo de todo lo que está vivo. Al subyacentes que sustentan ciertas conductas en apariencia irracionales,
igual que Mar a es para los cristianos la madre de Dios, la vaca es para los hind es el que el sentido de las partes depende del todo, pero la comprensión del
por detrás del signi cado subjetivo que los propios actores le dan. De
la madre de la vida. As , no hay mayor sacrilegio para un hind que matar una vaca. todo depende de la comprensión de las partes. La comprensión de los
Ni siquiera el homicidio tiene ese signi cado simb lico de profanaci n indecible que
manera convincente, muestra que la conducta de considerar a las vacas
detalles está condicionada por la comprensión del todo y viceversa.
evoca el sacri cio de las vacas. sagradas constituye una estrategia adaptativa que podría encontrar su
[…] origen en las leyes de la selección natural o cultural. Por otro lado, la Para poner un ejemplo algo simplista, alguien comien a a a rmar: “El
Nadie puede negar que el amor a las vacas moviliza a la gente para oponerse al intención de Eliade es completamente distinta. Consiste en comprender banco” –nos preguntamos si estará hablando de un banco de madera o
sacri cio de las vacas y al consumo de su carne. Pero no estoy de acuerdo en que
la forma en que el hombre religioso sacraliza lo natural. En este un edi cio en el que se guarda plata– “fue construido por un carpintero
los tab es que proh ben sacri car y comer la carne de vaca tengan necesariamente
un efecto adverso en la supervivencia y bienestar del hombre. Un agricultor que libro se esfuerza “por ponerse en los zapatos” del hombre religioso y –seguramente se trata de un banco para sentarse de madera, pero todavía
sacri ca o vende sus animales viejos o decr pitos, podr a ganarse unas rupias de más comprender la forma en que lo sagrado y lo profano juegan un papel en no podemos estar seguros– “y desde entonces ofrece descanso a los
o mejorar temporalmente la dieta de su familia. Pero a largo plazo, esta negativa el modo en que participa del mundo. ancianos que visitan la plaza” –se trata de un banco de plaza de madera-.
a vender al matadero o sacri car para su propia mesa puede tener consecuencias
Solo podemos estar seguros del signi cado del t rmino cuando tenemos
ben cas. Un principio establecido del análisis ecol gico a rma que las comunidades
Estos diferentes enfoques de los antrop logos citados, ejempli can dos la frase, pero llegamos al signi cado de la frase a partir del signi cado
de organismos no se adaptan a condiciones ordinarias sino extremas. La situaci n
pertinente en la India es la ausencia periódica de las lluvias monzónicas. Para evaluar modos (no necesariamente los nicos) en que los cient cos trabajan. de los términos. Esta circularidad se da entre término y frase, pero
el signi cado econ mico de los tab es que proh ben sacri car vacas y comer su El primero pretende “explicar (entendiendo por esto subsumir a leyes), también entre frase y capítulo, entre capítulo y obra, etc. El fracaso en
carne, debemos considerar lo que signi can estos tab es en el contexto de sequ as y mientras que el segundo pretende “comprender” la mentalidad religiosa. este proceso se pone de mani esto cuando quedan algunas partes que no
escaseces periódicas.
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

se comprenden en absoluto a partir del sentido del todo. Esto obliga a una este caso, la cuestión levemente diferente, y no supone necesariamente La discusión acerca de formas genuinas y no genuinas de hacer ciencia
nueva determinación del sentido del todo que contemple a esas partes. encontrar un criterio de signi caci n cognoscitiva. El punto es es complejísima y en muchos casos la realidad misma nos lleva a tener
Este proceso debe seguir hasta que no queden partes sin comprender. establecer un criterio que nos permita señalar que ciertas supuestas que debatirlas (por ejemplo, en los Estados Unidos durante las discusiones
teor as cient cas en realidad no lo son. El de dictaminar que ciertas en juzgados en los que se pretendía enseñar el Creacionismo a la par
El problema de Dilthey es cómo volver a este, un procedimiento objetivo teor as son en realidad pseudoteor as, ser a un rol de la losof a de la del Darwinismo). En cualquier caso, resulta sensato a rmar que el
y cient co. Esta comprensi n solo podr a convertirse en un proceso ciencia fuertemente normativo (no meramente descriptivo) y, también, establecimiento de un criterio de demarcación entre ciencia y pseudociencia
técnico que permita alcanzar un grado controlable de objetividad, cuestionado por muchos. presupone un conocimiento de cómo la ciencia, de hecho, funciona. Un
cuando la manifestaci n de la vida est jada de manera que podamos riesgo que se corre en este tipo de disputas es basar tales criterios en
volver una y otra vez sobre ella. Si nos basamos en gestos y palabras Popper tal vez haya sido el autor que tuvo más pretensiones normativistas concepciones discutibles o antiguas de la naturaleza de la ciencia (como
son escasas las posibilidades de alcanzar esta objetividad. Dilthey llama sobre el tema. Seg n l, una teor a es cient ca si es “falsable . es ocurre con el criterio de falsabilidad de Popper, que estrictamente deja
“interpretación” a esta comprensión técnica de las manifestaciones de falsable si es posible imaginar un enunciado básico incompatible con fuera del terreno de la ciencia a casi toda la ciencia interesante).
la vida jadas en forma permanente. Solo entonces es posible adquirir ella, es decir, un enunciado básico que, de ser verdadero, refutaría la
un cierto grado de objetividad. De ahí, la importancia de la literatura teoría. Así, el enunciado “Todos los cisnes son blancos” es falsable, El presupuesto detrás de todas estas discusiones, tanto de aquellas que
para la comprensión de la vida espiritual. La hermenéutica será porque podemos imaginar el enunciado “Este cisne es violeta”. Pero versan acerca de la unidad de método en ciencias sociales y naturales,
aquella disciplina que nos proporcione las reglas para la interpretación si no es posible imaginar un enunciado básico incompatible con una o dentro de las ciencias naturales mismas, como de los criterios de
haciendo que la comprensión se vuelva intersubjetiva y corregible. Pero teor a, entonces esta no es cient ca. Entre teor as no falsables, seg n demarcación y de la falsabilidad, se encuentra el concepto de ley
en Dilthey la hermen utica no se restringe a los textos escritos, sino que Popper, encontraríamos algunas que son pseudoteorías, que no tendrían cient ca. A continuación, analizaremos brevemente esta cuestión.
se aplica a otras manifestaciones permanentes, como obras de arte, etc. ning n valor, y otras que en realidad no ser an falsables por ser teor as
Estas re exiones acerca de la comprensi n fueron retomadas por muchos metafísicas, pero que cumplen un rol importante en la guía de ciertas 7.3. Leyes fuera de la física
te ricos de las ciencias sociales posteriores, como Max Weber (alemán, investigaciones (Popper las llamaba “programas metafísicos”). La
1864-1920), Hans Georg Gadamer (alemán, 1900-2002), Paul Ricoeur palabra “mefaf sica para Popper, a diferencia de los l sofos del Suele considerarse que solo es posible dar una explicaci n cient ca
(francés, 1913-2005), Anthonny Giddens (británico, n. 1938), etc. C rculo de Viena, no involucraba ninguna connotaci n negativa. Seg n apelando a leyes universales. Pero, ¿qu es una ley universal Es importante
Popper, ser an pseudoteor as, o teor as pseudocient cas, la astrolog a, señalar que no hay una manera meramente sintáctica de caracterizar a las
Dilthey también fue el que, frente a la idea del Positivismo del siglo leyes universales. Pues, existen enunciados de forma universal (“Todos los
el marxismo y el psicoanálisis. Pero, tambi n lleg a considerar
XIX que defendía una unidad de método (que hay que diferenciar del x son y ) que claramente no son leyes cient cas. Estas son las llamadas
infalsable, aunque un programa metafísico de investigación fructífero, a
Positivismo del Círculo de Viena), distinguió entre ciencias del espíritu “generalizaciones accidentales”, como “Todos los perros en esta casa son
la selecci n natural darwiniana. Por supuesto, todas estas a rmaciones
y ciencias naturales. Seg n Dilthey, la comprensi n ser a el m todo dálmatas” o “Todas las personas en la habitación son argentinas”. Estos,
han sido ampliamente discutidas y fuertemente criticadas.
caracter stico de las ciencias del esp ritu, mientras que la explicaci n claramente, aunque son enunciados de forma universal, no son leyes
como subsunción a leyes era el método de las ciencias naturales. cient cas, pues parecen describir hechos accidentales.
El criterio de Popper presenta varios problemas. Como hemos visto al
Insistimos en que, si bien este punto de vista del l sofo alemán se
presentar las ideas de Kuhn y del Estructuralismo metateórico, las leyes,
comprende como una reacción al Positivismo del siglo XIX, no es
en realidad, no suelen ser refutables por la experiencia, y lo que Popper

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posible considerarlo actualmente correcto. Los ejemplos internos a la consideraba un signo de no cienti cidad, la irrefutabilidad, es com n El problema principal, entonces, consiste en diferenciar las
antropología, citados en el apartado anterior (Harris y Eliade), sirven a todas las leyes fundamentales de las teorías más interesantes cuando generalizaciones accidentales, como “Todas las monedas que tengo en
de ejemplo de que ambos métodos son utilizados dentro de las ciencias se las tiene en cuenta aisladamente. No es nuestra intención tratar esta el bolsillo son de $1”, de leyes universales estrictas como “Todos los
sociales. La ciencia es sumamente compleja y los diferentes métodos que cuestión aquí, sino resaltar el espíritu normativo de ciertas disputas de cuerpos caen con la misma aceleraci n . Hempel propuso, con este n,
se utilizan la atraviesan transdisciplinariamente. En este documento nos la losof a de la ciencia, que tienen pretensiones de dictaminar qu es que toda ley universal debe ser un enunciado universal irrestricto.
hemos enfocado pormenori adamente en el análisis de la explicaci n ciencia y qué no. Porque tales pretensiones son las que a veces se ven
por leyes y teor as pero no porque consideremos que esto es lo nico mezcladas con las disputas acerca de método. Para que un enunciado general sea irrestricto, debe cumplir dos requisitos:
que de hecho se hace en la ciencia. Además, es necesario aclarar que
1. No debe tener indicaciones acerca de ning n objeto particular, ni a
las explicaciones mediante leyes y la comprensi n hermeneuta, no Tal ve , cono can los ataques del l sofo de la ciencia argentino
ninguna región espacio-temporal determinada.
necesariamente son los nicos dos m todos que podemos encontrar. Si Mario Bunge (n. 1919) al Psicoanálisis, que es un ejemplo claro de
2. No debe ser equivalente a una conjunción de enunciados singulares.
bien muchos han intentado defender la unidad de método en las ciencias, este esp ritu normativista. Pero no son solo l sofos de la ciencia los
o bien en disciplinas particulares, esto no parece haberse logrado. que caen en estas discusiones (repetimos, los cient cos discuten todo Estos requisitos son bastante fuertes, puesto que existen ciertas leyes,
Veremos algunas de estas cuestiones en los siguientes apartados. el tiempo acerca de cuestiones los cas acerca de la ciencia). Existe como las de Kepler (“Los planetas giran alrededor del Sol en elipses”),
mucha bibliografía que ataca al Psicoanálisis por cuestiones de método, que hacen referencia a objetos particulares, y que normalmente son
7.2. Ciencia vs. pseudociencia escrita por cient cos. aceptadas como leyes cient cas.

Es interesante que la discusión metodológica con respecto al alcance de Hace unos años, Alan Sokal (n. 1955), f sico de la New ork University, Por otro lado, se asume que toda ley tiene forma general (“Todos los x
la explicaci n como subsunci n a leyes se haya visto reproducida en el envi un art culo titulado Transgressing the Boundaries: Toward a son y). Pero, como vimos antes la ley fundamental de la mecánica clásica
interior de las ciencias naturales. Pues, se ha sostenido que este método Transformative Hermeneutics of Quantum Gravity (La transgresi n parece un enunciado mixto, es decir, con existenciales y universales.
no es aplicable tampoco, por ejemplo, en la biología. Detrás de esta de las fronteras: hacia una hermenéutica transformativa de la gravedad Los intentos de caracteri ar adecuadamente las leyes cient cas han sido
discusión puede estar en juego, a veces, la legitimidad de la ciencia en cuántica, Sokal,[1996]) a la importante revista de estudios sociales numerosos. No veremos aquí esta larga discusión. Es interesante señalar
cuesti n. Desde los comien os de la losof a de la ciencia, ha existido Social Text. El artículo era un acopio de sinsentidos en los que se que al carecer de un buen análisis de lo que son las leyes cient cas, o
una discusión en cuanto a si es posible o no enunciar un criterio de mezclaba lenguaje de la física, de la psicología y de la sociología. al menos, uno aceptado unánimemente entre la comunidad de l sofos
demarcación que distinga ciencias de pseudociencias (disciplinas que La intención de Sokal era denunciar el estado de “charlatanería” que de la ciencia, algunos autores han señalado que ciertas disciplinas
en realidad solo aparentan ser cient cas, o simulan serlo, aunque en atribuía a ciertos estudios sociales. La revista publicó el artículo. Este carecen de ellas. Por ejemplo, en el espíritu de la propuesta hempeliana,
realidad carecen de todo rigor). hecho causó un revuelo importante. Este es un ejemplo de las aristas se ha señalado que las leyes de la genética están restringidas espacio-
políticas de estas disputas de método. Sokal, en su libro Imposturas temporalmente a la Tierra, puesto que hablan de especies de animales
Como recordarán, los empiristas lógicos diferenciaban los discursos con intelectuales (Sokal y Bricmont ,1999) deja en claro que su “ataque” no ubicadas en esta (no pretenden aplicarse a otras especies extraterrestres,
signi cado cognoscitivo de los discursos sin signi cado cognoscitivo, es a esa revista en particular, sino a formas que considera inadecuadas por ejemplo). En general, estas a rmaciones son muy discutibles
dando particular importancia a la caracterización de los discursos que de hacer ciencia. (Lorenzano, 1998).
sin tener signi cado cognoscitivo, simulaban tenerlo: la metaf sica. En
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

El Estructuralismo metateórico, por ejemplo, señala ciertas para profesiones de tipo industrial y mercantil en mayor proporción que los católicos, muy diferente, y se basan en distintos aspectos de la actividad acerca de la cual la
quienes pre eren en su mayor a los estudios humanistas. (Weber, 1979) decisión –ciencia o no ciencia– se debe tomar […].
caracter sticas sintomáticas de las leyes cient cas (sintomáticas porque
Para evitar controversias contemporáneas irrelevantes, consideraré la astrología en
no funcionan ni como condiciones necesarias ni su cientes, sino que Sin embargo, la investigación no se encuentra completa para Weber hasta señalar por lugar, digamos, del psicoanálisis. La astrología es el ejemplo más frecuentemente
solo suelen encontrarse en diferentes leyes de distintas teorías): qué el protestantismo es más afín al capitalismo que otras religiones, por ejemplo, citado como pseudociencia por Sir Karl. Él dice: “Haciendo sus interpretaciones y
el catolicismo. En este caso, el autor apela a otro tipo de señalamientos. profec as su cientemente vagas ellos los astr logos son capaces de explicar cualquier
- en ellas se relacionan todos o casi todos los conceptos fundamentales cosa que podría funcionar como refutación de la teoría si ésta y sus profecías fuesen
Fragmento 2 más precisas”. […]. En la historia de la astronomía durante los siglos en los que era
de la teoría;
La causa de tan disímil conducta habremos de buscarla no solo en una cierta intelectualmente respetable, existieron muchas predicciones que fallaron. Ni siquiera el
- son altamente abstractas permitiendo obtener por especialización situación histórico - política de cada confesión, sino en una determinada y personal astrónomo más convencido niega tales fallas. La astrología no puede ser barrida de la
leyes especiales; característica permanente. Antes que nada habría que dilucidar la problemática, ciencia por la forma en las que son tratadas sus predicciones.
- proponen conceptos con nes explicativos (que suelen ser T-te ricos). investigando cuales son o fueron los elementos de las características confesionales Tampoco pueden ser barridas de la ciencia por la forma en que sus practicantes
que actuaron o act an, en parte, en la direcci n de referencia. Podr amos intentar la explican las fallas. Los astr logos señalan, por ejemplo que la predicci n del futuro de
Bajo esta caracteri aci n, se han encontrado leyes cient cas en todas las explicaci n de la ant tesis, desde un punto de vista super cial y moderno, a rmando un individuo es una tarea inmensamente compleja, demandante del mayor cuidado y
que el mayor “distanciamiento del mundo” católico, el cariz ascético peculiar de extremadamente sensible a errores menores en los datos relevantes. La con guraci n
disciplinas de las ciencias sociales y de las naturales. Este tipo de enfoque, sus más altos ideales, tiene que ejercer su in ujo en el esp ritu de sus eles con de las estrellas y los ocho planetas están en constante cambio; las tablas usadas
de todos modos, es más funcional, pues supone que una ley cient ca respecto a un despego ante los bienes terrenales. En tal explicaci n podr a hallarse para computar la con guraci n del nacimiento de un individuo son notoriamente
se constituye como tal si cumple cierto rol en una teor a cient ca. Por la coincidencia con el popular esquema que sirve en la actualidad para juzgar las imperfectas; pocos saben el instante de su nacimiento con la precisión requerida. No
dos confesiones. En cuanto a los protestantes, estos se valen de dicha concepción es sorprendente que la astrología falle. […]. Argumentos similares son regularmente
lo tanto, es más naturalista o descriptivo y, en consecuencia, no tiene la
para censurar el idealismo ascético, real o supuesto, de la vida del católico, a lo utili ados para explicar las fallas, por ejemplo, en la medicina o en la meteorolog a.
meta de permitir distinguir entre teor as y pseudoteor as cient cas ni cual este responde reprobándole el espíritu materialista, que podría tomarse como . No hay nada acient co en la explicaci n de las fallas de los astr logos.
las pretensiones normativas de otras propuestas. resultado de la campana de instrucción laica de toda la compilación vital llevada a Sin embargo, la astrología no es una ciencia. […].Compare la situación de un astrónomo
término por el mundo protestante. Nos valemos de la formula lograda por un escritor con la del astrólogo. Si la predicción de un astrónomo falla y sus cálculos son chequeados,
moderno cuya intenci n fue dar, precisamente, la explicaci n acerca de la conducta entonces, puede esperar corregir la situación. Tal vez los datos son los que están en falta:
Las re exiones de los dos ltimos puntos ponen de mani esto que observada, opuestamente, en la vida industrial de ambas confesiones: “El católico observaciones antiguas pueden reexaminarse, nuevas mediciones pueden hacerse .O
el esp ritu normativo que, a veces, pretende darse a la losof a de la […], siendo el más tranquilo, el menos dotado de afán adquisitivo, tiene preferencia tal vez la teoría necesite un ajuste. […]. El astrólogo, en contraste, no se enfrenta con tales
por una vida bien asegurada aunque los ingresos en ella sean de menos cuantía que los rompecabe as. La ocurrencia de las fallas puede explicarse, pero las fallas particulares no
ciencia, como capaz de generar un tribunal que pueda detectar casos
que pudiera redituarle una vida de incesantes peligros y exaltaciones tras los honores dan lugar a rompecabe as de investigaci n, dado que ning n hombre, capacitado como
de pseudociencia, está lejos de cumplirse. La actitud del l sofo de la y las riquezas adquiridos eventualmente. Si analizamos el refrán que reza: comer bien esté, puede intentar revisar la tradición astrológica. Aunque la astronomía y la astrología
ciencia, en este sentido, debería ser más tolerante y pluralista. Lo mismo y dormir tranquilo, vemos que el protestante es quien se decide por lo primero, en fueron regularmente practicadas por la misma gente, incluyendo Ptolomeo, Kepler y
ocurre con los ataques que muchas veces cient cos de una disciplina tanto que al católico le gusta más dormir tranquilo. (Weber, 1979) Tycho Brae, no hubo nunca un equivalente astrológico a la resolución del rompecabezas
de la tradici n astron mica. sin rompecabe as, capaces primero de desa ar y despu s
realizan sobre otras disciplinas, pues, en muchos casos, se juzga a otras Señalen en qu sentido puede considerarse al primer fragmento como explicativo y de avalar la ingenuidad del practicante individual, la astrología no podría volverse una
disciplinas bajo los estándares de la disciplina propia (olvidando la al segundo como comprensivista. ciencia incluso aunque las estrellas de hecho controlaran el destino humano.
inconmensurabilidad existente entre diferentes enfoques). En breve, aunque los astrólogos hacen predicciones testeables y reconocen que
tales predicciones, a veces, fallan, no pueden encarar la clase de actividades que
normalmente caracterizan a todas las ciencias reconocidas. (Kuhn, 1975, pp. 8-11)
En el presente documento se hace referencia a la discusión entre Popper y Kuhn
Esta parte gira en torno a la cuestión de los alcances de lo estudiado durante la con respecto a la naturaleza de la ciencia. El desacuerdo gira en torno a dos Respondan las siguientes preguntas teniendo en cuenta el fragmento y lo visto al
cursada. Es importante resaltar que todo lo desarrollado no debe ser considerado cuestiones relacionadas. Por una parte, si bien Popper concede que pueden existir respecto en el presente capítulo:
como un análisis del método de la ciencia, pues, la idea de que todas las disciplinas períodos de lo que Kuhn llama “ciencia normal” (aunque no considera que esto

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tienen un nico m todo es sumamente discutible. A modo de ejemplo de esta ocurra tan a menudo y en todas las disciplinas), para él estos períodos tienen una a. ¿En qu consiste el criterio de demarcaci n de Popper
cuesti n, se menciona, frente a la forma de explicaci n por subsunci n a hip tesis in uencia negativa en la ciencia. Por otra parte, Kuhn y Popper di eren y discuten b. ¿Qu cr tica hace Kuhn a tal posici n
o teor as cient cas, que es lo que estuvimos viendo a lo largo de la materia hasta el acerca de las razones por las cuales se puede considerar a ciertas actividades como c. ¿En qu consiste el criterio de demarcaci n propuesto por Kuhn
momento, el ideal de la comprensi n. Si bien no es ra onable a rmar, como se dice pseudocient cas. Veamos ambas cuestiones.
d. ¿Qu cr ticas se podr a hacer a la propuesta de Popper desde el Estructuralismo
en este documento, que la comprensión es característica de las ciencias sociales, Lean detenidamente el comentario de Popper en relación con la ciencia normal
mientras que la explicaci n por leyes lo es de las ciencias naturales (pues las ciencias kuhniana: e. ¿Qué diferencia hay entre el criterio de demarcación de Popper y de Kuhn, y el
naturales a veces apelan a la comprensi n, y las ciencia sociales tambi n explican criterio de signi caci n cognoscitivo del Empirismo l gico
con leyes), parece claro que esta es una de las cosas que hacen los cient cos para Bajo mi punto de vista el cient co “normal tal como Kuhn lo describe, es una f. ¿Qué posición toma el autor del presente capítulo en cuestión con respecto a la
dar cuenta de ciertos fenómenos. persona acerca de la cual uno debería sentir pena. […] Yo creo, con muchos otros, que
capacidad de la losof a de la ciencia de establecer un criterio de demarcaci n entre
la enseñanza en el nivel universitario (y si es posible en niveles más bajos) debería
ciencia y pseudociencia
En La ética protestante y el espíritu del capitalismo, Weber intenta dar cuenta del entrenar y alentar el esp ritu cr tico. Al cient co “normal , tal como es descripto por
siguiente problema: Kuhn, se le ha enseñado mal. Se le ha inculcado un espíritu dogmático: es víctima del
adoctrinamiento. Se le ha enseñado una técnica que puede aplicar sin preguntar la razón
Si alguien perteneciente a la civilización moderna europea se propone indagar alguna Síntesis del capítulo
por qu . Como consecuencia, se ha vuelto lo que podr a llamarse un “cient co
cuestión que concierne a la historia universal, es lógico e inevitable que trate de aplicado en contradicci n con lo que yo llamar a un “cient co puro . Es, tal como lo
considerar el asunto de este modo: ¿qué serie de circunstancias ha determinado que En el capítulo III: Conceptos, hipótesis y contrastación, vimos cómo
dice Kuhn, alguien que resuelve “rompecabezas”. La elección de este término parece
sólo sea en Occidente donde hayan surgido ciertos sorprendentes hechos culturales indicar que Kuhn intenta señalar que no son problemas fundamentales para los cuales el se contrastan las hip tesis cient cas y en el presente enfocamos en las
(ésta es, por lo menos, la impresión que nos producen con frecuencia), los cuales cient co “normal está preparado: sino más bien, problemas de rutina. El xito de teor as cient cas y el modo en que cambian. Para discutir esta cuesti n
parecen señalar un rumbo evolutivo de valide y alcance universal (Weber, 1979) un cient co “normal consiste enteramente en mostrar que la teor a gobernante puede
hicimos hincapié en las concepciones generales del Empirismo lógico,
ser aplicada satisfactoriamente para solucionar el rompecabezas en cuestión. […]
En esta explicaci n, se puede notar que hay interrelaciones complejas entre m todos de Kuhn y del Estructuralismo metate rico. Estas no son las nicas
Admito que esta clase de actitud existe; y que existe no s lo entre ingenieros, sino
explicativos y comprensivistas. La tesis de Weber es que el protestantismo es una
condición de posibilidad para el capitalismo. En sus investigaciones comienza entre personas entrenadas como cient cos. S lo puedo decir que veo un importante posiciones al respecto, pero se han elegido como representativas de
peligro en esta actitud y que la posibilidad de que se vuelva normal (así como veo como muchas otras, por su in uencia e importancia. Tratamos el ideal de
relacionando el fenómeno con hipótesis estadísticas. Consideren el siguiente fragmento:
un gran peligro en el incremento de la especialización, que también es un innegable
hecho histórico): un peligro para la ciencia, y, también, para nuestra civilización. Y
reconstrucci n y aclaraci n del lenguaje cient co caracter stico del
Fragmento 1
Al disponernos a examinar las estad sticas profesionales de pa ses en los que existen esto muestra por qu veo el nfasis en la existencia de esta clase de ciencia como Empirismo lógico, y cómo este se relacionaba con sus objetivos políticos.
credos religiosos, sobresale con mucha frecuencia un fenómeno, motivo de vivas importante. (Popper ,1975, pp. 52-53) En el seno del Empirismo lógico surgió la concepción estándar de las
controversias en la prensa y la literatura católicas, así como en congresos de católicos
Respondan las siguientes preguntas teniendo en cuenta el fragmento y lo visto al
teor as cient cas, en las que se piensa a las teor as como conjuntos
alemanes: es la ndole por excelencia protestante que se distingue en las propiedades
y empresas capitalistas y, también, en las esferas superiores de las clases trabajadoras, respecto en el el presente capítulo: de hip tesis te ricas puras y mixtas que guardan entre s relaciones
sobre todo del alto personal de las empresas modernas, con más experiencia t cnica
a. ¿En qu acuerda Popper con Kuhn en este fragmento
deductivas. En esta concepción ocupa un lugar central la distinción
o comercial. Dicho fen meno se re eja en cifras de las estad sticas confesionales, teórico/observacional. Tal distinción, como vimos, sufrió muchas
b. ¿En qu cuestiones Kuhn estar a en desacuerdo con respecto a las a rmaciones de Popper
allí donde las diferencias de confesión coinciden con las de nacionalidad y, por
consiguiente, con el distinto nivel de desarrollo cultural (de la misma manera que
críticas. En particular, nos detuvimos sobre las críticas de Popper y de
en la Alemania oriental acontecía con alemanes y polacos), como, por lo regular, Hanson. Las críticas de Hanson son especialmente interesantes porque
allí donde el progreso capitalista en el periodo de su mayor apogeo tuvo poder para En el siguiente fragmento, Kuhn compara el criterio de demarcación propuesto
por Popper con el suyo propio. Curiosamente, coinciden en señalar candidatos a
in uyeron fuertemente sobre el enfoque de Kuhn. La posici n de Kuhn,
organizar la población en clases sociales y profesionales, a medida que las requerían.
pseudociencia (marxismo y psicoanálisis, por ejemplo): crítica de Popper y del Empirismo lógico, ofrece un aparato conceptual
El mundo protestante es más exitoso econ micamente que el mundo cat lico. Puede
notarse que los protestantes participan en la posesión del capital mucho más que los para pensar la historia de la ciencia. Repasamos los puntos centrales de su
La línea de demarcación de Sir Karl Popper y la mía frecuentemente coinciden. La
católicos. También sus estadísticas señalan que los protestantes acuden y estudian
coincidencia se da, sin embargo, sólo en los resultados; el proceso de aplicación es libro más in uyente, La estructura de las re oluciones cient cas, donde
Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones. Teorías de la ciencia. Primeras aproximaciones.

propone un concepto más complejo que el de teoría, el de paradigma, caRnap, Rudolf (1950), Logical Foundations of Probability, Chicago, peRoT, m. d. c. (2010), El regreso del naturalismo metodológico: pasado
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de la metateoría estructuralista: Problemas y discusiones, Bernal poppeR, KaRl (1971), La l gica de la in estigaci n cient ca, Madrid,
En el resto del capítulo, por una parte, establecimos los límites de los (Buenos Aires), Universitata Rovira i Virgili Coordinación General de Tecnos.
temas abordados hasta el momento, intentando mostrar cómo el ideal de Investigación y Posgrado Universidad Nacional de Quilmes. ReiSch, G eoRGe a. (2009), mo la guerra fr a transform la losof a
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otra parte, intentamos señalar cómo las discusiones en el ámbito de la eliade, miRcea (1992), Lo sagrado y lo profano, Barcelona, Labor. RoSTand , jean (1994), Introducción a la historia de la biología,
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de Carnap (1992). En ella se cuenta la historia del Círculo de épocas
la losof a de la ciencia atrones de descubrimiento n estigaci n de
posteriores, de manera amena y clara. El libro de Reisch (2009)
las bases conceptuales de la ciencia, Madrid, Alianza.
acerca de las in uencias de la pol tica sobre el destino de las ideas y
haRRiS, maRvin (1980), Vacas, cerdos, guerras y brujas, Madrid, Alianza.
objetivos del Empirismo lógico es sumamente interesante. Para acceder
hempel , caRl G. (1970), Sobre la concepción estándar de las teorías
a artículos del puño y letra de algunos de los empiristas lógicos, puede
cient cas, en Rolleri, Jos Luis (Comp.), (1986), Estructura y
leerse el art culo “Sobre el carácter de los problemas los cos de
desarrollo de las teorías (141-166), M xico, UNAM.
Carnap, cuya traducción se incluye en un libro sobre el autor (Cirera,
iBaRRa, andoni (2002), Presentaci n de Pseudorracionalismo de la
Ibarra y Mormann, 1996, pp. 25-43). Tambi n, el texto de Neurath en
falsaci n . La cr tica de Neurath a la metodolog a falsacionista, REDES

Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot Ginnobili, Destéfano, Haimovici, Narvaja, Perot

el que “arremete” contra las ideas de Popper: “Pseudoracionalismo de 10 (nº19, pp.85-102), Buenos Aires, Universidad Nacional de Quilmes.
la falsación” (1935), publicado en la revista Redes, acompañado de un Kuhn, ThomaS S. (1971), La estructura de las re oluciones cient cas.
texto de Andoni Ibarra (2002). M xico, Fondo de Cultura Econ mica.
Kuhn, ThomaS S. (1975), Lógica del descubrimiento o psicología de la
Sobre la in uencia de la teor a sobre la observaci n es conveniente investigación, en Lakatos, Imre y Musgrave, Alan (Eds.), La crítica y
conocer el trabajo audiovisual preparado por César Lorenzano, que el desarrollo del conocimiento, Barcelona, Grijalbo.
además de ser un importante l sofo de la ciencia de la Argentina, su LAKATOS, IMRE y Musgrave, Alan ( Eds.), (1975), La crítica y el
formación original es sobre diagnóstico por imágenes (Lorenzano, 2008). desarrollo del conocimiento, Barcelona, Grijalbo.
loRenzano , céSaR (2008), Experiencia y teoricidad en el diagnóstico
Es recomendable también, la obra central de Kuhn, La estructura de por imágenes, disponible en:
las re oluciones cient cas (1971). Para ampliar sobre la posición http://www.youtube.com/watch v=Nq gwjh81WE,
de Kuhn, pueden acudir al libro de Ana Rosa Pérez Ransanz (1999). http://www.youtube.com/watch v=qjV p1tDcI4,
Lakatos y Musgrave (1975) ofrecen un buen panorama del “revuelo” http://www.youtube.com/watch v=DE8hekHcTm4.
armado por las ideas de Kuhn en la comunidad los ca as como la [Último acceso 6 de junio de 2015].
lectura de otros autores con posiciones semejantes a la de Kuhn. loRenzano , paBlo (2004), Filosofía de la ciencia, Bernal (Buenos
Aires), Universidad Nacional de Quilmes.
El manual más importante del Estructuralismo metateórico es Una loRenzano , paBlo (1997), Hacia una nueva interpretación de la obra
arquitectónica para la ciencia (Balzer, Moulines y Sneed, 2012). Pero de Mendel, en Ahumada, J. y Morey, P. (Eds.), Selección de trabajos
se trata de una obra predominantemente técnica. Para presentaciones de las VII Jornadas de Epistemología e Historia de la Ciencia (pp.220-
introductorias puede recurrirse a Lorenzano (2004), Díez y Lorenzano 231), Córdoba (Argentina), Facultad de Filosofía y Humanidades,
(2002) y a Díez y Moulines (1997). Estas obras permiten ampliar Universidad Nacional de Córdoba.
todos los temas de este documento. Para una presentación más general, loRenzano , paBlo (1998), Sobre las leyes en la biología, Episteme.
aunque informal, de la Teoría de la selección natural en términos Filoso a e Hist ria das Ciencias, Revista 3 (nº7, pp.261- 272).
estructuralistas, cuentan con el texto de Ginnobili (2010). minhoT, leTicia (2003), La mirada psicioanalítica. Un análisis kuhniano
del psicoanálisis de Freud,Córdoba (Argentina), Editorial Brujas.
Bibliografía neuRaTh, oTTo (1935), Pseudo-Rationalismus der Falsi kation,
Erkenntnis 5:353-365 (Versión castellana de Ibarra, Andoni [2002],
BalzeR, wolfGanG; Moulines, Carlos U. y Sneed, Joseph D. (2012),
Pseudorracionalismo de la falsación, REDES 10 [nº19, pp.85-102],
Una arquitectónica para la ciencia. El programa estructuralista,
Buenos Aires, Universidad Nacional de Quilmes).
Bernal, Universidad Nacional de Quilmes.
péRez RanSanz , ana RoSa (1999), Kuhn el cambio cient co, M xico,
caRnap, Rudolf (1992), Autobiografía intelectual, Barcelona, Paidós.
Fondo de Cultura Económica.

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