Centro Cristiano Ríos de Agua Viva

Internacional
Ministerio de Educación Cristiana
Dirección de Escuela Dominical
Sede: Maracay

Guía de Estudio de:

DOCTRINA DEL ESPIRITU SANTO

Enero, 2019
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 INDICE

Contenido Página

Lección 1: Las Sagradas Escrituras. La Biblia………...………….……………. 03

Lección 2: La Trinidad de Dios………………………….………..………………... 07

Lección 3: El Hombre…………………….…………………….….……………….. 09

Lección 4: El Señor Jesucristo……………………………….…….….…………... 12

Lección 5: La Salvación………………………………………….…….…………... 16

Lección 6: El Espíritu Santo………………….……………….……….…………… 19

Lección 7: El Bautismo del Espíritu Santo……………………………………….. 22

Lección 8: Dones del Espíritu Santo…………………………………………….... 24

Lección 9: Los Ángeles……………………………………………..………………. 30

Lección 10: Satanás y los Demonios………………………..….………………… 32

Lección 11: Oración e Intercesión……..…….……………………………………. 35

Lección 12: Guerra Espiritual e Imposición de Manos……………………..…… 37

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 Lección 1: LAS SAGRADAS ESCRITURAS. LA BIBLIA.

La palabra “biblia” viene de la palabra griega biblia, que significa simplemente “libros
pequeños”. Los libros de la Biblia fueron escritos originalmente en piezas separadas de
material para escritura. Los libros individuales fueron utilizados en forma independiente por
muchos años. Luego los 39 libros del Antiguo Testamento y los 27 del Nuevo Testamento
fueron coleccionados en un solo volumen. Pasaron más de 1500 años en el proceso de
escribir y coleccionar los 66 libros del Antiguo y Nuevo Testamento de la Biblia.

La colección de los libros del Antiguo y Nuevo Testamentos llegó a conocerse por los
cristianos de habla griega con el nombre de biblia. Este término fue tomado por los cristianos
de habla latina, que usaron la palabra como un sustantivo singular.

Nuestra palabra castellana “Biblia” viene del latín biblia. Este término ya no denota
primariamente el material de escritura, sino más bien los mensajes escritos.

Revelación:

Revelación: Significa ese acto de Dios por medio del cual revela lo que el hombre no podía
hallar por sí mismo.

Las escrituras son necesarias, porque es la guía autorizada para llegar al conocimiento de
Dios, y el hombre necesita una revelación.

La revelación seria expresada en forma escrita: Porque es el mejor método de preservar la

verdad integra y trasmitirla de generación en generación, con un nivel infalible para toda la
humanidad, para que el hombre obtenga el mismo nivel o patrón de fe y conducta. 2 Ti.
3:16

Inspiración:

Inspiración: Es cuando el escritor es preservado del error al escribir esa revelación. Por
ejemplo: Los diez mandamientos fueron revelados y Moisés fue inspirado para registrarlos
en el Pentateuco. Se debe distinguir entre palabras no inspiradas y registro inspirado de
ellas. Por ejemplo: muchos dichos de Satanás están registrados en las Escrituras y sabemos
que el diablo no fue inspirado por Dios, cuando los pronunció. Pero el registro de esas
expresiones satánicas es inspirado.

Toda la Escritura es inspirada por Dios que es la influencia sobrenatural del Espíritu
Santo, ejercida sobre la mente del hombre, la cual capacito a los profetas, apóstoles y
escritores sagrados para exponer la verdad divina sin mezcla de error. El Espíritu Santo uso
las facultades del hombre produciendo un mensaje perfectamente divino que tiene las
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características de la personalidad del escritor. Es Dios que habla por medio del hombre. He.
11:1, 2 P. 1:21.

Afirman ser inspiradas: El Antiguo Testamento reclama para sí el haber sido escrito por
inspiración especial de Dios. La frase ``Y DIOS DIJO´´, o su equivalente se emplea más
de 2 mil veces. La Historia, la Ley, los Salmos y las profecías afirman que todo fue escrito
por hombres bajo la inspiración especial de Dios, Éx. 24:4; Jos. 3:9; Is. 34:16. Cristo
confirmo su verdad y autoridad Mt. 5:18; Jn. 10:35 y así también lo hicieron los apóstoles
Lc. 3:4; Ro. 3:2 y 2 Ti. 3:16. En particular, la inspiración de los evangelios está garantizada
por la promesa de Cristo de que el Espíritu traería a la memoria de los apóstoles todas las
cosas que les había enseñado y que el mismo Espíritu les guiaría a toda verdad. Por lo tanto
si el Antiguo Testamento es inspirado, también lo es el Nuevo Testamento. Pedro coloca los
escritos de Pablo a un mismo nivel con aquellos del Antiguo Testamento, 2 P. 3:15-16 y
tanto Pablo como los demás apóstoles afirman hablar con autoridad divina, 1 Co. 2:13; 1
Ts. 2:13; 2 P 3:2

Tienen toda la apariencia de inspirados: Las Sagradas Escrituras afirman ser inspiradas
y un examen de ellas revela el hecho de que su carácter sustenta esa afirmación. La Biblia
se presenta ante el tribunal por así decirlo con buen testimonio. Con respecto a sus actores,
la Biblia fue escrita por hombres cuya honradez e integridad no puede ponerse en tela de
juicio.

Demuestran ser inspiradas: La defensa intelectual de la Biblia tiene su sitio, pero el mejor
argumento es el práctico. La Biblia ha influido en las civilizaciones, ha transformado vidas,
ha traído luz, inspiración y consuelo a millones de personas. Y su obra continúa.

La Sagrada Escritura es la palabra de Dios escrita por varios hombres bajo la inspiración
del Espíritu Santo. A este conjunto de libros se le llama BIBLIA. La palabra Biblia se deriva
del griego Biblia, plural de biblion, librito.

Los Dos Testamentos.

La Biblia es una colección de 66 libros divididos en el Antiguo y el Nuevo Testamentos.

Testamento significa “un acuerdo” o “un pacto”. El Antiguo Testamento menciona varios
pactos o acuerdos entre Dios y el hombre. El pacto más significativo del Antiguo Testamento
comenzó con una promesa a Abraham (Génesis 12), y recibió una expresión mucho más
desarrollada en el monte Sinaí con la dádiva de los Diez Mandamientos.

Un pacto involucra responsabilidades de cada una de las partes acordantes. El pacto con
Abraham difiere de otros pactos en que las partes no fueron iguales en cuanto a naturaleza
y responsabilidad. Dios prometió bendecir a Abraham haciendo de él una gran nación y
dando una tierra a él y a sus descendientes. La responsabilidad de Abraham y su
descendencia era adorar al único Dios y servirle. Los Diez Mandamientos son una
descripción de los requerimientos involucrados en adorar y servir a Dios.

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El Antiguo Testamento es el relato del fracaso del hombre en vivir de acuerdo a sus
responsabilidades para con Dios y de las actividades de Dios para proveer el perdón de los
pecados del hombre.

c. Divisiones Literarias De La Biblia.

Los 66 libros de la Biblia se dividen en Antiguo y Nuevo Testamentos.

El Antiguo Testamento comprende:

Se puede dividir a los 39 libros del Antiguo Testamento en cuatro grupos. Se coloca en
el mismo grupo a los libros con la misma clase de escritura. De este modo, y salvo algunas
excepciones, el tipo de literatura en cada grupo es el mismo. Los cuatro grupos son: Ley,
Historia, Poesía y Los Profetas.

- El Libro de La Ley (Torah) o Pentateuco: Son los cinco primeros libros de la Biblia,
en los que se recogen las enseñanzas de Dios al Pueblo de Israel. Génesis (Gn.),
Éxodo (Ex.), Levítico (Lv.), Números (Nm.) y Deuteronomio (Dt.).

- Los Libros Históricos: En ellos se ve la actuación de Dios para liberar a un pueblo

que quiere hacer que sea su pueblo. Lo vemos educar a ese pueblo y dar un sentido
a su historia nacional. Josué (Jos.), Jueces (Jue.), Rut (Rt.), 1 y 2 de Samuel (1 y 2
S.), 1 y 2 de Reyes (1 y 2 R.), 1 y 2 de Crónicas (1 y 2 Cr.), Esdras (Esd.), Nehemías
(Neh.), Ester (Est.).

- Los Libros Poéticos o de La Sabiduría: Estos destacan la importancia de la

educación y del esfuerzo del individuo para llegar a ser un hombre responsable y
creyente. Job (Job), Salmos (Sal.), Proverbios (Pr.), Eclesiastés (Ec.), Cantar de los
Cantares (Cnt.).

- Los Libros Proféticos: Dios interviene en la historia por medio de sus profetas,
encargados de transmitir su palabra. Hay diecisiete libros proféticos, los cuales
son divididos en Profetas Mayores y Menores. Profetas Mayores: Isaías (Is.),
Jeremías (Jer.), Lamentaciones (Lm.), Ezequiel (Ez.), Daniel (Dn.). Profetas
Menores: Oseas (Os.), Joel (Jl.), Amos (Am.), Abdías (Abd.), Jonás (Jon.), Miqueas
(Mi.), Nahúm (Nah.), Habacuc (Hab.), Sofonías (Sof.), Hageo (Hag.), Zacarías (Zac.),
Malaquías (Mal.).

El Nuevo Testamento comprende:

Los 27 libros del Nuevo Testamento brindan el relato del Nuevo Pacto de Dios con el hombre
en el cual Dios a través de Jesucristo trata con su pueblo en perdón y misericordia.

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Los 27 libros del Nuevo Testamento se dividen también en cuatro grupos: Los Evangelios,
Los Hechos, Las Epístolas y La Revelación o Apocalipsis.

Hay también cuatro grupos literarios: Biografía, Historia, Cartas y Profecía.

- Los Evangelios: La palabra Evangelio significa Buena Nueva. Estos son los libros
en que los apóstoles de Jesús escribieron lo que habían visto y aprendido de él.
Mateo (Mt.), Marcos (Mr.), Lucas (Lc.) y Juan (Jn.).

- Libro Histórico: Los Hechos de los Apóstoles (Hch.), escrito por Lucas, el mismo
que escribió el tercer evangelio y se narran las experiencias y hazañas de los
apóstoles. Es el único libro histórico en el Nuevo Testamento.

- Las Cartas o Epístolas Paulinas: Romanos (Ro.), 1 y 2 Corintios (1 y 2 Co.),

Gálatas (Ga.), Efesios (Ef.), Filipenses (Fil.), Colosenses (Col.), 1 y 2
Tesalonicenses (1 y 2 Ts.), 1 y 2 Timoteo (1 y 2 Ti.), Tito (Tit.), Filemón (Flm.).
Estas 4 últimas son cartas personales y el resto son colectivas, escritas por Pablo a
comunidades cristianas. Difieren unas de otras por su extensión y su contenido, pero
todas tienen una característica común: La de ser escritos circunstanciales.

- Epístolas Universales: Se llaman universales porque van dirigidas no a un público

específico como las cartas de Pablo y tratan temas generales. Hebreos (He.),
Santiago (Stg.), 1 y 2 Pedro (1 y 2 P.), 1, 2 y 3 de Juan (1, 2 y 3 Jn.), Judas (Jud.).
Cartas que los apóstoles escribieron a las primeras comunidades cristianas.

- Libro de las Revelaciones o Apocalipsis (Ap.), revela acontecimientos que

sucederían en el futuro, es el último libro de la Biblia. Muchas se han cumplido y
faltan por cumplirse.

Conclusión.

LA BIBLIA es el máximo manual para la fe y la vida de todo cristiano, ya que en ella se nos
revela la verdad de Dios, su grandeza y su amor a la humanidad; al igual que nos enseña
cómo debemos llevar una vida al servicio de Dios y del prójimo; y como obtener la vida
eterna y la forma de alcanzar su Reino.

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 Lección 2: La Trinidad de Dios

Para poder comprender la persona del Espíritu Santo, se hace necesario tratar una doctrina
precedente, la cual nos explica su esencia y papel que desempeña dentro de la deidad, esa
es la Santa Trinidad. Distinción de 3 personas en una sola y única esencia, misterio infalible
de la Fe.

La Santa Trinidad.
El vocablo trinidad fue usado por primera vez por Tertuliano (165-220 d.C.), él enseñaba
que en la deidad hay tres personas que coexisten en una sola esencia eternamente.
En torno a esta colocación muchas discusiones se realizan a la luz de la palabra y en periodo
posterior a la reforma, el teólogo Karl Barth define la trinidad basándose en la revelación;

DIOS: Es el revelador
CRISTO: Es la revelación
ESPIRITU SANTO: Es la revelacidad

A pesar de que no haya una mención explícita de la Trinidad en la Biblia, hay pasajes que
nos apuntan hacia ella. En Mt. 3:16-17 vemos a Juan bautizar a Jesús (allí está una
persona), los cielos se abren y el Espíritu (allí está la segunda) desciende sobre él, y se
escucha la voz del Padre (allí está la tercera). Tres personas de la Trinidad en un lugar a la
misma vez.

En el antiguo testamento no contiene una revelación específica de la trinidad, pero, si hay

indicadores de esta, donde DIOS habla de su esencia en su palabra. (Gn. 1:26, 3:22, 11:5-
7, Is. 6:8, 48:16) ciertos pasajes del antiguo testamento sugiere que el número de personas
divinas es tres (Is. 48:16, 61:1, 63: 9-10)

En el antiguo testamento no contiene una revelación especifica de la trinidad, pero, si hay

indicadores de esta, donde DIOS habla de su esencia en su PLURADIDAD (Gn. 1:26, 3:22,
11:5-7, Is. 6:8, 48:16)

Ciertos pasajes del antiguo testamento sugieren que el número de personas divina es tres
(Is. 48:16, 61:1, 63-910)

El nuevo testamento lleva una revelación más clara en la cual se presenta la interacción
entre ellos y tres personas reconocidas y distinguidas como DIOS.

Padre (Jn. 6:27), Hijo (He. 1:8), Espíritu Santo (Hch. 5:3-4)

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Dios es uno en esencia.

Para dar una breve definición: Dios existe eternamente como tres personas: Padre, Hijo y
Espíritu Santo, y cada persona es plenamente Dios, y hay sólo un Dios

Dios es uno en cuanto a su esencia, su sustancia. La Trinidad, las tres personas, consisten
de una misma sustancia. Esa sustancia es lo que hace que Dios sea Dios. Es su deidad.
No es algún material, ni nada físico. Es Su “Dios-idad”. La más clara imagen que tenemos
en las Escrituras para entender cómo se mira la esencia de Dios es nada más y nada menos
que Jesús.

Col. 2:9 dice, “Porque toda la plenitud de la Deidad reside corporalmente en Él…”. ¿Quieres
ver la a esencia de Dios? Mira a Jesús. Esa misma esencia que hace que Jesús sea Dios
es la que hace que el Padre y el Espíritu Santo sean DIOS. También lo hallamos
presentados como un solo DIOS en Mt. 28:19, Jn. 10:30, 14:16,18 y 23, Ro. 8:9

Dios es tres Personas.

Hay algunos pasajes que nos indican que el Padre es 100% Dios (Jn. 6:7; 1 Co. 8:6; 2 Co.
1:3). Hay otros pasajes que nos indican que el Hijo es 100% DIOS (Mt. 28:9; Col. 1:16;
Rom. 1:3-4) E incluso hay otros pasajes que muestran que el Espíritu Santo es 100% DIOS
(Hch. 5:3-4; Jn. 14:16; 2 Co. 3:16-18)

Pero si tomamos en cuenta todo el consejo de Dios, también veremos que la Palabra nos
dice que Dios es uno (Dt. 6:4; 1 Sm 2:2; Ro. 3:30). Entonces, ¿qué hacemos? Lo que no
debemos hacer es tratar de racionalizar realidades complicadas para hacerlas más fácil de
tragar o explicar.

Un misterio fundamental.

A pesar de que hay cosas que no podemos entender acerca de Dios, sí podemos saber que
es totalmente posible que Él sea uno y tres a la misma vez. Él es un solo Dios, de una
esencia, que existe eternamente cómo tres personas, el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo.

La Trinidad es el misterio fundamental de la fe cristiana. Trinidad es esa palabra que

usamos para describir la naturaleza de Dios: Él es un Dios y tres personas.

Para dar una breve definición: Dios existe eternamente como tres personas: Padre, Hijo y
Espíritu Santo, y cada persona es plenamente Dios, y hay sólo un Dios

Las tres personas de la trinidad son Co-iguales en atributos, perfecciones, poder, gloria, hay
que aclarar que los nombres Hijo de DIOS no implican desigualdad (Jn. 5:18; 1 Cor 2:10-
11).

Aunque hay ciertas distinciones de prioridades y subordinación entre las tres personas,
estas diferencias apuntan a sus funciones. En la obra de la deidad, el Padre es primero, el
Hijo es segundo y el Espíritu Santo tercero

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 Lección 3: El Hombre

1. El origen del hombre:

La Biblia nos enseña la doctrina de la creación, lo cual significa que Dios hizo a cada
criatura “según su especie”. Creo las diversas especies luego las dejó que se
desarrollaran y progresaran de acuerdo las leyes de su especie o ser, La diferencia entre
el hombre y las criaturas inferiores está declarando en “Creó Dios al hombre a su
imagen”.

Teoría de la evolución: Esta teoría enseña que todas las formas de vida, nacieron
de una forma y que las especies superiores se desarrollaron de las inferiores.
Ejemplo: El Caracol se convirtió en pez, el pez en reptil, el reptil en ave hasta llegar
al mono, el cual se convirtió en hombre. La ciencia no puede explicar cómo y cuando
apareció la materia y energía. Apareció una célula viva donde residía una chispa de
vida y de esta célula nació toda la vida tanto vegetal como animal.

¿Qué es una especie? – Una clase de plantas o animales que tienen propiedades
características en un común y que puede propagarse indefinidamente sin cambiarse
esas características. Una especie puede producir una variedad o sea plantas o
animales con peculiaridades notables que no son comunes a las especies en
general, por ejemplo un tipo especial de caballos de carrera, si esta variedad se
perpetúa por muchas generaciones tenemos una raza sin embargo; poseen ciertas
características que lo sitúan como caballo. Cuando leemos que Dios hizo todos los
seres según su especie, no afirmamos que Dios los hizo incapaces de desarrollarse
en nuevas variedades, solo afirmamos que Dios hizo a las especies distintas
separadas y coloco una barrera intermedia, por ejemplo: Un caballo no podía
desarrollarse hasta transformarse en una raza de animales que ya no podrían
denominarse caballos.
Los evolucionistas busca vincular al hombre con la creación de los brutos, pero el señor
Jesucristo vino a este mundo a fin de vincular al hombre con Dios.

2. La naturaleza del hombre.

2.1. La trinidad del hombre.

De acuerdo con Gn. 2:7 el hombre está compuesto de 2 sustancias: la sustancia material
llamada cuerpo y la sustancia inmaterial que es el alma.
Sin embargo de acuerdo a 1 Ts. 5:23 y He. 4: 12 nos dice que el hombre está compuesto
de tres sustancias: espíritu, alma y cuerpo.
El espíritu y el alma, 2 partes de la sustancia inmaterial, porque el hombre es “espíritu” al
ser capaz de tener conciencia de Dios y de tener comunión con Dios; porque es “alma”
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cuando tiene conciencia de sí; porque es “cuerpo” al momento de poseer sentidos y
conciencia del mundo.

2.2. El espíritu humano.

En todo ser humano habita un espíritu dado por Dios en forma individual (Nm. 16:22, 27:16)
está en la parte interior de la naturaleza del hombre. El Salmo 51:10 nos enseña que el
espíritu es lo que nos distingue de todas las cosas creadas, es centro y fuente de la vida del
hombre y está relacionado con la cualidad de su carácter. Cuando el espíritu del hombre
está habitado por el espíritu de Dios “Ro. 8:16), se convierte en centro de adoración (Juan
4:23, 24); de oración, canciones, bendiciones (1 Co. 14:15) y servicio (Ro. 1:9; Fil. 1:27).
Aquello que adquiere dominio de su espíritu se convierte en un atributo de su carácter. Por
ejemplo: SI te domina el orgullo habrá u espíritu altivo (Pr. 16:18). De acuerdo con las
influencias respectivas que lo controlan, un hombre puede tener un espíritu perverso (Is.
19:14), un espíritu provocador, irritable (Sal. 106: 33), un espíritu de servidumbre (Ro. 8: 15)
o impelido por el espíritu de celo (Nm. 5:17). Debe por lo tanto custodiar el espíritu (Mal.
2:15) enseñorearse de su espíritu (Pr. 16:32), mediante el arrepentimiento adquiriendo un
nuevo espíritu (Ez. 18:31) y confiar en Dios para que cambie su espíritu (Ez. 1:19).

2.3. El alma humana.

La naturaleza del alma.

El alma es el principio vivificante e inteligente que anima el cuerpo humano empleando los
sentidos corporales como sus agentes en la exploración de las cosas materiales y los
órganos corporales para la expresión de sí misma y comunicación con el mundo exterior.
Es el halito sobrenatural del Espíritu de Dios. Es espiritual y viviente porque viene de Dios y
también es natural porque opera mediante el cuerpo, pero el alma no es parte de Dios
porque el alma peca. Es más correcto afirmar que es el don y la obra de Dios. (Zac. 12:1).
Deben observarse 4 distinciones:
1. El hombre, la bestia y las lanas tienen anima viviente (alma) o principio de vida, (Gn.
1:20) pero no es un alma consciente.
2. El alma distingue al hombre de los animales. El alma de los animales es terrenal, que
perece al morir el cuerpo. Ec. 3:21. El alma del hombre es vivificada por el espíritu
humano: hay un alma humana y un alma animal.
3. EL alma distingue a un hombre de otro y forma la base de la individualidad (Ex. 1:5,
Ex. 1: 14). Los ángeles son espíritu.
4. El alma establece contacto con el mundo por medio del cuerpo, el cual es el
instrumento del alma.
5. Los actos sensitivos, intelectuales, volitivos y algunos otros son actividades del alma.

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El alma y el pecado.
Cuando la carne es condenada, no se hace la referencia al cuerpo material (los tejidos
materiales no pueden pecar), sino el cuerpo empleado por el alma que peca. Es el alma la
que peca. Los impulsos pecaminosos del alma son los que se deben destruir y esa es la
obra del Espíritu Santo.
La “carne” es la suma de todos los instintos del hombre en su condición de caída. Es la
perversión de los instintos, la base del pecado. El pecado es una ofensa contra Dios.
Necesitamos la provisión de la obra redentora de Cristo y el poder del Espíritu Santo que
corrige la perversidad de nuestra naturaleza y pone en movimiento nuestro interior dando
como resultado el fruto de Espíritu Santo (Ga. 5: 22-23).
El pecado equivale a tener el alma pervertida, la justicia es rectitud de alma.

3. La imagen de Dios en el hombre

El hombre fue creado a la imagen de Dios, se lo hizo a semejanza de Dios en carácter y
personalidad, significa ser semejante Cristo que es la imagen del Dios invisible.
Algunos de los elementos que constituyen la imagen divina en el hombre:
Parentesco con Dios. El hombre es creación de Dios, pero siendo empañada por el
pecado, el hombre debe ser recreado o nacer de nuevo (Ef. 4:24) para ser hijo de Dios.
Carácter moral. El reconocimiento del bien y del mal pertenece solo al hombre
Razón. El hombre es capaz de reflexionar y razonar con respecto a la causas de las cosas.
Es capaz de inventar, puede escribir libros, música, practicar artes. La razón es un don
maravilloso.
Capacidad para ser inmortal. El árbol de la vida indica que el hombre nunca hubiera
muerto, si no hubiera desobedecido a Dios. Cristo vino al mundo para traer el alimento de
vida y ponerlo a nuestro alcance. Vivimos para siempre.
Dominio sobre la tierra. Los bendijo y dijo: Fructificad y multiplicaos, llenad la tierra y
sojuzgadla, señoread. La caída del hombre no significa que los poderes mentales y físicos
del hombre se perdieran sino que la inconciencia original y la integridad moral en la cual fue
creado comenzaron a perderse por su desobediencia. De ahí que el hombre es incapaz de
salvarse y sin esperanzas fuera de un acto de gracia que le restaurara la imagen divina.

Tarea. PARA REALIZAR EN CASA

1. De dos (2) citas que apoyen el origen del hombre como creación de Dios

_____________________________________________________________________

2. De tres (3) citas que apoyen la trinidad del hombre

__________________________________________________________
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 Lección 4: El Señor Jesucristo

1. La Naturaleza de Cristo.

Las escrituras aplican diversos títulos o nombres al Señor Jesús, cada uno de ellos apunta
a un aspecto determinado de su carácter, su misión o su gloria, lo cual nos lleva a
responder:

¿Quién es Cristo?.

1.1. Hijo De Dios.

Significa nacido de Dios. Proclama la deidad de Cristo, no es un hijo de Dios sino el Hijo
de Dios por excelencia, en sentido especial y único. Confirmaremos esta deidad.

La conciencia que Cristo tenia de sí mismo. Lucas registra que a la edad de doce años
(12) Jesús estaba consciente de dos cosas: de una relación especial con Dios a quien
describe como padre y de una misión especial en la tierra, los negocios de su padre. El Hijo
Eterno De Dios vivió la vida natural del ser humano. En el río Jordán el señor Jesús oyó la
voz del padre que corroboraba y confirmaba sus conciencia interior (Mt. 3:17). Más tarde
elogio a Pedro por el testimonio inspirado en el cielo respecto de su deidad y mesianismo
(Mt. 16:15- 17)

Las Afirmaciones de Jesús. Jesús se identificó plenamente con las actividades divinas
afirmo, “MI PADRE HASTA AHORA TRABAJA Y YO TRABAJO” (Jn. 5.17), Salí del
Padre (Jn. 16:28), como me envió el Padre (Jn. 20:21). Asumió prerrogativas divinas
omnipresencia (Mt. 18:20), poder para perdonar pecados (Mr. 2: 5-10) y poder para resucitar
muertos (Jn. 6:39, 40, 54). Insistió en la redención o sumisión absoluta de parte de sus
seguidores. Debían estar preparados para romper los lazos más queridos (Mt.10:37, Lc.
14:25-33). Jesucristo era lo que afirmaba ser El Hijo de Dios en sentido único.

La Autoridad De Jesucristo. Jesús no usó los términos “creo que- yo opino, quizás.
Jesucristo hablaba con la autoridad del Dios Todopoderoso, Jesucristo habló “DE CIERTO
OS DIGO”

La perfección de Cristo. En las palabras o hechos de Jesús hay una ausencia total de la
conciencia o confesión del pecado, tenía el conocimiento más profundo respecto de los
males del pecado y sin embargo no cayó sobre su alma sombra o mancha alguna, por el
contrario el más humilde de los hombres lanza el siguiente reto: ¿QUIEN DE VOSOTROS
ME REDARGUYE DE PECADO ( Jn. 8:46)

1.2. La Palabra (Pre- existencia y actividad eterna).

Dios se reveló a sí mismo por medio de la palabra profética, por sueños y visiones, pero el
hombre se preguntaba ¿Cómo es Dios?, la respuesta es “Y AQUEL VERBO FUE HECHO
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CARNE. (Jn. 1: 14). La palabra eterna de Dios tomó sobre si la naturaleza humana y se hizo
hombre con el objeto de recordar al eterno Dios por medio de la personalidad humana. Dios
habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los
profetas; en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo (He. 1: 1- 2). Por lo tanto a la
pregunta ¿Cómo es Dios?, el creyente responde: Dios es como Cristo, es la misma imagen
de su sustancia (He. 1:3) “Imagen del Dios invisible” (Col. 1:15).

1.3. Señor.

Es uno de los títulos más comunes de Jesucristo, ese título indica su deidad exaltación y
soberanía

Deidad: el título de señor cuando se lo colocaba antes de un nombre proporcionaba la idea

de deidad. En griego era equivalente a Jehová por lo tanto para los judíos “El Señor Jesús”,
era una atribución clara de la deidad.

Exaltación: El Hijo de Dios, por naturaleza era igual a Dios, voluntariamente se sujetó a las
limitaciones del hombre, pero sin pecado al tomar la naturaleza de hombre transformándose
en siervo de los hombres y finalmente murió en la cruz por nuestra redención, como
recompensa se le dio Señorío sobre toda criatura. La cruz se ha convertido en peldaño por
el cual el Señor Jesús asciende al lugar de soberanía sobre el corazón del hombre.

Soberanía: Salvador, Señor y Rey marchan juntos pues aquel que se convirtió en Salvador
tiene derecho a ser su Jefe. El que los redimió del pecado y la destrucción tiene derecho a
ser Señor de sus vidas. Comprados por precio, no se pertenecen a sí mismo (1 Co. 6:20)
sino que pertenecen a aquel que murió y resucito por ellos. (2 Co. 5:15)

1.4. El Hijo del Hombre (Humanidad)

Se le designa como participante de la naturaleza y cualidades humanas y lo sujeta a la

fragilidad del hombre. Al mismo tiempo ese título indica su deidad, está relacionado con su
vida terrenal (Mr. 2:10; 2:28, Mt 8:20; Lc. 19:10), con sus sufrimientos en bien de la
humanidad (Mr. 8:31), y con su exaltación y gobierno sobre la humanidad (Mt. 25:31). La
humanidad del Hijo de Dios era verdadera y no fingida. La encarnación significa que el Hijo
de Dios, verdadero Dios desde toda la humanidad, con el tiempo se hizo también verdadero
hombre en una persona, Jesucristo consistente en dos naturalezas, la humana y la divina,
el Hijo de Dios se hizo Hijo del Hombre con el objeto de que los hijos de los hombres puedan
convertirse en hijos de Dios (Jn. 1:2, 1 Jn. 3:2).

Con el objeto de líbranos del poder y culpabilidad del pecado el Hijo de Dios murió en la
Cruz realizando el sacrificio expiatorio.

1.5. El Cristo (Titulo y Misión Oficiales)

La Profecía: Cristo en griego, Mesías en hebreo significa “ungido” sobre él se centralizaba
la esperanza de Israel. Jesús afirmó ser el Mesías o Cristo prometido en el Antiguo
Testamento, se mantuvo alejado de la política eludiendo con sabiduría las trampas para
desacreditarlo ante el pueblo. El señor Jesús cumplió las profecías por ejemplo de Isaías
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que debía ser un proclamador de la verdad divina y no un agitador violento. El Mesías es
aquel a quien Dios ha autorizado para salvar a Israel y a las naciones del pecado y la muerte,
y gobernar sobre ellos como Señor y Maestro de sus vidas.

1.6. Hijo de David (Línea de genealogía real).

Unas de las cualidades del Mesías era su descendencia de David. Como recompensa por
su fidelidad se le prometió a David una dinastía eterna (2 S. 7:16) y la soberanía eterna
sobre Israel le fue dada a su casa, el padre David era humano y murió, su reino era terreno
y con el tiempo se desintegro. Pero de acuerdo a Is. 9:6-7 el descendiente de David, el rey
– Mesías, será divino y su reino será eterno. David fue padre transitorio de su pueblo, el
Mesías será un padre eterno (divino, inmortal e inmutable) para todos los pueblos.

1.7 Jesús (Obra salvadora)

El antiguo testamento enseña que Dios mismo es la fuente de Salvación, es el salvador de
Israel y liberador (Sal. 106:21; Is. 43:3). Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios
envió a su Hijo nacido de mujer y bajo la ley para que remidiese a los que estaban bajo la
ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos (Ga. 4:4) Sobre la cruz Cristo cumplió la
misión indicada por su nombre, puesto que al salvar a la gente del pecado implica expiación
y por consiguiente la expiación implica muerte.

1.8. Alfa y Omega.

El Señor Jesús es para todas las cosas. Principio y fin, el primero y el último. Ap. 1:8,11;
21:6.

1.9. Cordero.
Juan el Bautista, para señalar la persona y la obra del Señor Jesús le llamó el cordero de
Dios que quita el pecado del mundo (Jn. 1:29, 36). Veintiocho veces se llama a Cristo el
cordero en el libro de apocalipsis. Este título se relaciona su humillación y muerte en la cruz
por los pecados de todo el mundo.

2. Las Dignidades de Cristo

En La época del antiguo testamento había tres clases de mediadores entre Dios y su pueblo:
el profeta, el sacerdote, y el rey. Como mediador perfecto (1 Ti. 2:5), Cristo reúne en si las
tres dignidades o cargos. Jesús es el Cristo – Profeta que ilumina a las naciones; el Cristo
– sacerdote que se ofrece como sacrificio de las naciones; el Cristo- Rey que gobierna a
todas las naciones.

2.1. Cristo el Profeta.

El que Cristo fuera Profeta para Israel y las naciones constituye un testimonio de los profetas
(Is. 42:1) comparado (Ro. 15.8) y que Jesús era así considerado, es el testimonio de los
evangelios (Mr. 6:15, Jn. 4:19).
14
2.2. Cristo el Sacerdote.

Un sacerdote en el sentido bíblico es una persona divinamente consagrada para representar

al hombre ante Dios y ofrecer sacrificios que le asegurara el favor de divino. En el calvario
Cristo el sacerdote, se ofreció a sí mismo como sacrificio con el objeto de asegurar el perdón
ante el hombre y la aceptación ante Dios. La aceptación que hace Dios de la sangre de su
Hijo nos proporciona confianza con respecto a la aceptación de todos los que confían en su
sacrificio (Hebreos Cáp. 8 al 10)

2.3. Cristo el Rey

De acuerdo con el A.T, el Mesías iba a ser el gran rey de la casa de David que debía
gobernar a Israel y a las naciones e inician la era áurea de la justicia, paz y prosperidad (Is.
11:1-9; Sal. 72). Esto significa a la vista de Dios el Señor Jesucristo es REY, no es solo Jefe
de la Iglesia, sino también Señor de todo el mundo y de todos los hombres.

15
 Lección 5: La Salvación

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo
aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al
mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él” (Jn. 3:16-17)

En esta lección aprenderemos acerca del regalo de Dios otorgado a la humanidad que
recibe a Jesucristo como el unigénito de Dios, el cual vino al mundo para redimirlo de pecado
y ofrecerle el beneficio de la vida eterna, la cual es la esperanza del cristianismo.

Desde el concepto bíblico la salvación es “el milagro divino de la liberación espiritual del
hombre del dominio y culpa del pecado y de la muerte, trayendo como consecuencia el goce
de la vida eterna de comunión renovada con Dios”.

Según la Real Academia Española (RAE) la palabra salvación proviene del verbo “salvar”,
que significa:

 Liberar de peligro (Mt. 8:25, He 5:7)

 Evitar un inconveniente (Sal.18:3-6, Sal. 59:2)
 Vencer obstáculos (Dn. 6:27)
 Rescatar, recuperar (Lc. 15:11-32)
 Sanar (Mr. 10:52, Hch. 14:9)
 Salutación (Jn .19:3, Mt. 26:49)

A través de los tiempos, la Biblia nos presenta la necesidad de salvación para el hombre y
la promesa de parte de Dios de una esperanza eterna. Es importante mencionar que la
salvación es un don otorgado únicamente por Dios, por misericordia; el hombre no tuvo
que hacer algo para ganar ese premio, sino que al Padre le plació entregarlo aun cuando
no lo merecíamos. Es un acto creativo de Dios por lo que ninguna persona puede obtenerlo
(salvarse) por sus propios medios (Gn. 3; 2 Co. 6:2; Ro. 3; Ef. 2; 2 P. 1).

La Salvación en el Antiguo Testamento.

Dios habló de salvarnos desde la caída del hombre sin embargo sabemos que el
Todopoderoso no es un Dios improvisado, sino que su Plan destinado a bendecirnos trajo
como consecuencia que enviara a Jesucristo a la tierra para redimirnos de pecado. Es por
ello, que vemos la necesidad de salvación plasmada en todas las Escrituras:
 Pidiendo ser librado del pecado (Sal. 39:8; Sal. 51:14)
 Promesa de salvación por medio del Mesías (Jer. 23:5-6; Ez. 37:23-25; Is. 53)

16
La Salvación en el Nuevo Testamento.
En el Nuevo Testamento la salvación se hace visible por medio de la obra de Cristo:
 Su venida a la tierra (2 Co. 8:9; Fil. 2:6-8)
 Muerte en la cruz (Jn. 3:14-15; 1 Co. 1:18)
 Derramamiento de sangre (1 P. 1:18-19; Ap. 5:9)
 Resurrección (Rom. 10:9; 1 P. 1:3-5)
 Ascensión al cielo (Hch. 5:31)

Aunque muchas religiones, sectas y teorías atribuyen la salvación a hombres, objetos e

ídolos, la única fuente de salvación, comprobada en las Escrituras, es nuestro Dios:

Dios única fuente de salvación:

La salvación de Israel: Éx. 15:1-2; Sal. 27:1; Is. 12:2

Salvador del mundo (Cristo): Mt. 1:21; Hch. 4:12; Ro. 10:13; Ef. 5:23

Requisitos para obtener La Salvación.

1. Creer: El Padre envió a su Hijo para salvar a la humanidad de la muerte eterna y

reconciliar al mundo con él, pero para recibir la salvación necesitamos tener fe y
aceptar lo que dicen las Escrituras acerca del Salvador (1 Co. 1:21; Stg. 1:18)

2. Arrepentirse: El arrepentimiento genuino produce un dolor verdadero por el pecado,

acompañado de un sincero esfuerzo por dejarlo, corregir su conducta y volverse a
Dios (Mt. 3:8)

3. Nacer de nuevo: Al confesar a Jesucristo como único y suficiente salvador, con un

corazón arrepentido somos renacidos por medio de su perdón y surge en nosotros
un nuevo nacimiento (nacimiento espiritual) (1 Jn. 5:1)

4. Ser transformado: El Espíritu Santo es nuestro ayudador en la tierra, desde el

momento que confesamos a Cristo él viene a morar en nosotros y nos guía a toda
verdad. Esa Verdad nos transforma, produciendo en nosotros el dejar las costumbres
del viejo hombre y nos hace una nueva criatura que es reflejo de Cristo ante el mundo.

Un creyente SALVO:

 Anhela la venida del Señor (Ap. 22:17)

 Habla de su salvación (Jn. 9:25; Hch. 4:31)
 Cuida sus vestiduras espirituales (Is. 61:10)
 Se ocupa en su salvación (Fil. 2:12-16)
17
 Todo lo anteriormente expuesto nos permitió conocer en qué consiste la verdadera
salvación, sabiendo que para perseverar en ella es necesario practicar una vida de
santidad, alejarnos del pecado y con la ayuda del Espíritu Santo vivir conforme a la
Palabra de Dios día tras día, y que éste sea nuestro manual de conducta y estilo de vida.

TAREA.
1. ¿Eres salvo? ¿Cómo lo sabes?

2. ¿Qué necesitamos para ser salvos?

( ) Ir a la iglesia
( ) Leer la Biblia
( ) Tener fe
( ) Confesar a Cristo y apartarnos del pecado

3. ¿Qué beneficios obtengo de ser salvo?

4. ¿La salvación era para el pueblo de Israel o también para los gentiles?

5. Cómo hombre ¿qué puedo hacer para ganar la salvación por medios terrenales?

6. Además de Jesús ¿en qué otro nombre alcanzamos la salvación? Argumente su

respuesta.

18
 Lección 6: El Espíritu Santo

1. La Persona del Espíritu Santo.

Los términos usados para el Espíritu Santo en hebreo es: RUACH y en griego PNEMA, cuyo
significado son respirar, aliento.

La función de aliento está estrechamente ligada con la generación de vida, el toque final en
la obra de la creación (Gn. 2:7).

Él capacita e inspira al hombre tanto en ciencia como en las artes (Ex. 35:30-33; 1 S. 11:6,
16:13-14; 2 P. 1:21). Convence de pecado, conduciendo a toda verdad, consolando (se
traduce de dos ideas consuelo y consejo) y confortando (Jn. 14:16, 16:8,13).

El Espíritu Santo es el poder ejecutivo de la deidad, el cual trabaja en todas las esferas,
tanto físicas como morales. Por medio del Espíritu Santo, Dios creó y preserva el universo.
Por medio del Espíritu Santo “el dedo de Dios” (Lc. 11:20), Dios opera en la esfera espiritual,
convirtiendo a los pecadores y santificando y sustentando a los creyentes.

Es divino, es Espíritu Santo en el sentido absoluto de la palabra. Su deidad queda

demostrada por medio de sus atributos, las operaciones divinas como son la creación,
regeneración y resurrección (Gn. 1:2; Job 33:4; Jn. 3:5-8; Ro. 8:11.) Se le pone en el mismo
nivel de dignidad con el Padre y el Hijo (1 Co. 10:4-6; 2 Co. 13:14; Mt. 28:19; Ap. 1:4).

Las sagradas escrituras describen al Espíritu Santo como persona (Ro. 8:27; 1 Co.
11:12; Ef. 4:30). Se le atribuye actividades personales: El revela (2 P. 1:21), enseña (Jn.
14:26), atestigua (Ga. 4:6), intercede (Ro. 8:26), Habla (Ap. 2:7), ordena (Hch. 16:6-7) y
Testifica (Jn. 15:26). Se le puede contristar (Ef. 4:30), o mentir (Hch. 5:3) o blasfemar (Mt.
12:31-32).

2. Atributos y Características del Espíritu Santo.

El estudio de la persona del Espíritu Santo ha sufrido tantos abusos como negligencia de
parte de algunos sectores del cristianismo. Sin embargo debemos guardar un equilibrio
entre el basamento bíblico y la manifestación poderosa del mismo.

Deidad del Espíritu Santo.

El Espíritu Santo es una persona divina, por lo tanto es DIOS, poseedor de atributos, poder
y gloria que sólo pertenecen a la esencia divina:

El Espíritu Santo es:

Omnisciente, todo lo conoce (1 Co. 2:11-12; Sal. 139:7).

19
 Omnipotente, todo lo puede (Job 33:4; Zac. 4:6).
Omnipresente, está en todos los lugares al mismo tiempo (Sal. 139:7).
Generador de vida (Rm. 8:2,11).
Creador (Gn. 1:2; Sal 33:6; Sal. 104:30).
Autor divino de las escrituras (2 S. 23:2; Ez. 2:2, 8:3; 2 P. 1:21 y 2 Ti. 3:16).

La Personalidad del Espíritu Santo.

El Espíritu al igual que Dios e Hijo actúan como un ser personal, poseyendo:
Inteligencia (1 Co. 2:10-1; Ef. 1:17; Is. 11:2 y 1 Co. 2:13).
Emociones (Ef. 4:30; Ro 15:30).
Voluntad (Hch. 16:6-10; 1 Co. 12:11).

3. Simbología del Espíritu Santo.

El Espíritu Santo es comparado en la palabra de DIOS con algunos elementos los cuales
nos llevan a profundizar en la acción que realiza sobre el hombre.

El soplo o viento como generador de vida no se puede controlar; Es recio y envuelve el

origen de la palabra Espíritu. (RUACH y PNEMA). Gn. 2:7; Job 32:8, 33:4; Ez. 37:9; Jn. 3:8,
20:22; Hch. 2:2-3.

La paloma, animal dulce, puro, tierno. No contiende, es mensajera y representa libertad.

Lc. 3:22; Mt. 3:16. 2 Co. 3:17.

El aceite usado para separar reyes, sacerdotes y profetas encomendados con una
función. Iluminaba el tabernáculo purificaba los leprosos simbolizaba alegría. (Ex. 27:20-
21; Lv. 14:17, 8:30; Is. 61:1; Hch. 10:38; He. 1:9; 2 Co. 1:21; 1 Jn. 2:20).

El fuego, señal de poder purificador y santificado la presencia de DIOS. (Dt. 4:24; Hch.
2:3).

Agua viva fuente de vida, purificadora, se derrama. (Is. 44:3; Jn. 7:38-39).

Conclusión.

Haciendo una revisión de la obra del Espíritu Santo en la Palabra de Dios se puede percatar
que la función especial es la de completar el contacto de Dios con sus criaturas y consumar
la del Señor en todos los planos.

20
La gracia del Espíritu Santo es la que establece la conexión vital entre la redención y el alma
de la persona.

El Espíritu Santo desempeña el papel específico de purificador, esto quiere decir

santificador, aunque en el Antiguo Pacto su operación era momentánea, está siempre
conllevaba a un mismo fin: Santidad a Jehová, ya en el Nuevo Pacto se ve que convence al
no creyente de pecado para la conversión y trabaja en la vida del creyente para llevarlo a
la estatura de varón perfecto, con esta idea se comprende la representación bíblica de los
elementos ya mencionados.

Tarea

PARA REALIZAR EN LA CASA.

Buscar diez (10) citas bíblicas que muestren que el Espíritu Santo es una persona

21
 Lección 7: Bautismo en El Espíritu Santo

Hch. 1:4-5: “y estando juntos, les mando que no se fueran de Jerusalén, sino que se
esperase la promesa del padre, la cual, les dijo, oísteis de mí. Por qué Juan
ciertamente bautizó con agua, más vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo
dentro de no muchos días”.

El bautismo en el Espíritu es para todos lo que profesen la fe en Cristo, hayan nacido de

nuevo y recibido la presencia del Espíritu Santo

Jesucristo no comenzó su ministerio hasta que Dios lo “ungió con el Espíritu Santo y con
poder” (Hch. 10:38).

Uno de los propósitos primordiales de Cristo en su misión terrenal fue bautizar a sus
seguidores en el Espíritu Santo (Mt. 3:11, Mr. 1:8)

Ser bautizados en el Espíritu Santo es “investidos de poder desde lo alto” (Hch. 1:8)

El bautismo en el Espíritu Santo complementa la obra regeneradora y santificadora del

Espíritu. El día de su resurrección Cristo soplo sobre sus discípulos y dijo “recibí el Espíritu
Santo” (Jn. 20:22), indicando que los regeneraba y les daba vida nueva.

Ser bautizados en el Espíritu significa ser lleno del mismo (Hch. 2:4); sin embargo ese
bautismo fue manifestado a partir del día del pentecostés.

El hablar en lengua es señal inicial visible que acompaña el bautismo en el Espíritu Santo
(Hch. 10:45-46)

El bautismo en el Espíritu Santo producirá el valor personal y el poder del Espíritu en la vida
del creyente para hacer hazañas en el nombre de Cristo y darle eficacia a su testimonio y
predicación (Hch. 1:8, 4:31, 6:8, 1 Co. 2:4).

Resultados de un genuino bautismo en el Espíritu Santo son:

 Las declaraciones proféticas y de alabanzas (Hch. 2:17 y 1 Co. 14:2)
 Mayor sensibilidad al pecado que aflige al Espíritu Santo, mayor búsqueda de la
justifica y conciencia más profunda del juicio de Dios contra la impiedad (Jn. 16:8)
 La vida que glorifica a Jesucristo (Jn. 16:13-14, Hch. 4:33)
 Nuevas visiones (Hch. 2:17)
 La manifestación de los diversos dones del Espíritu (1 Co. 12:4-10)
 Mayor deseo de orar (Hch. 6:4, Ro. 8:26)
 Amor y entendimiento más profundo de la palabra de Dios (Jn. 16:13, Hch. 2:42).
 El conocimiento creciente de Dios como padre del creyente (Ro 8:15, Ga. 4:6).
22
Condiciones por las cuales se da el bautismo por el Espíritu Santo

Hay que aceptar por la fe a Jesucristo como Señor y salvador, apartándose del pecado
y del mundo. Eso implica la sumisión de la voluntad a Dios a los que le obedece (Hch 5:32),
es preciso apartarse de lo que ofende a Dios antes de poder ser instrumento para la honra,
santificado, útil al Señor (2 Ti. 2:21)

Se tiene que desear la plenitud. Los creyentes deben tener un profundo anhelo por el
bautismo en el Espíritu (Jn. 7:37-39).

Con frecuencia se recibe el bautismo en respuesta a la oración (Lc. 11:13, Hch. 1:14, 8:15-
17).

Es preciso esperar que Dios cumplirá la promesa de bautizar en el Espíritu Santo (Mr. 11:24)

El bautismo en el Espíritu Santo se mantiene en la vida del creyente mediante:

 La oración (Hch. 4:31)
 El testimonio (Hch. 4:33)
 La adoración en el espíritu (Ef. 5:18-19)
 La vida santificada (Hch. 20:32)

El bautismo en el Espíritu ocurre solo una vez en la vida del creyente e indica su
consagración a la obra de Dios, dando testimonio con amor y justicia.

Conclusión.

La llenura del Espíritu Santo debemos buscarla diariamente con mente renovada con la
palabra de Dios, con la adoración y alabanza, no dejarse de congregar, cuidando lo que se
ve, se oye y se hace, para no contristar al Espíritu Santo, porque somos templo y morada
de él, tener pasión por la pureza y la santidad, debemos anhelar en nuestros corazones,
beber el agua viva del espíritu y entender que dependemos totalmente del Señor.

23
 Lección 8: Dones del Espíritu Santo

Los dones del Espíritu Santo, es uno de los aspectos de la vida cristiana que más llama la
atención del creyente y a su vez es donde más difiere el cuerpo de Cristo al interpretar sus
propósitos, por esta razón se hace necesario realizar un estudio amplio y detallado del tema.

Definición De “Don” ó “Dones”.

Don, es una capacidad dada por Dios para servir en su obra y así edificar a la iglesia
(Charles C. Ryries).

La fuente de los dones proviene del Espíritu Santo (1 Co. 12:11), es por esta razón que
no funcionan a la voluntad de ningún creyente. Por ser su fuente espiritual, su manifestación
es sobrenatural a través de: visiones (Ap. 1:9-11, Hch. 8:10-12), sueños (Hch. 2:17-18),
lenguas e interpretación (1 Co. 14), revelación interior y otros (Jn. 4:16-18).

Clasificación de los Dones (1 Co. 12:8-10).

En las cartas paulinas se dan listas parciales de los dones sin clasificarlos, lo que haya en
este sentido son decisiones de los estudiosos; y es así como se ha sugerido la siguiente
clasificación:

1. Dones de Revelación.
- El Don de la Palabra de Sabiduría.
- El Don de Ciencia.
- El Don de Discernimiento de Espíritu.

2. Dones de Poder.
- El Don de Fe.
- El Don de Operación de Milagros.
- El Don de Sanidad.

3. Dones de Inspiración.
- El Don de Profecía
- El Don de Lenguas
- El Don de Interpretación de Lenguas

24
A continuación se tratarán cada uno de los dones, su definición, ministración y advertencias
sobre su mal uso a la luz de la Palabra de Dios.

1. Dones de Revelación.

1.1. El Don de la Palabra de Sabiduría. Es una revelación sobrenatural de Dios de su

mente y propósito. Este don no proviene de la sabiduría humana que se puede adquirir por
amar a Dios y estudiar la palabra. La palabra de sabiduría es una revelación divina,
instantánea y milagrosa para llenar la necesidad presentada en una situación particular, o
para responder en el instante a una pregunta particular (Hch. 27:23-26; 2 Cr. 20:12- 23).

Ejemplo: Yo sé que llueve – eso es conocimiento. Me situó debajo de un techo – eso es

Sabiduría.

La palabra de sabiduría puede manifestarse de diferentes formas:

 A través del espíritu humano.
 Es Dios mostrando el cómo, el porqué, cuando y el que de algo.
 Es la solución sobrenatural de un problema.
 Es algo que necesitan todos los líderes de la iglesia.
 Es un conocimiento aplicado por el Espíritu de Dios directo al espíritu del hombre
sin pasar por el intelecto.
 Edifica una iglesia y produce un reavivamiento.
 Viene por visión. Sueño, revelación, una voz audible y apacible.

Ejemplos bíblicos: Salomón y el caso judicial de las dos madres. 1 R. 3:23–27, Pablo a
través de este don salva su vida. Hch. 23:6–9, Por la palabra de ciencia, Pablo supo lo que
debía hacer, por la palabra de sabiduría toma la decisión correcta. Hch. 19:21–22, Pablo
supo que iba a Roma Hch. 23:11.

1.2. El Don de Conocimiento o Palabra de Ciencia. Es la revelación sobrenatural del

Espíritu Santo sobre ciertas verdades en la mente de Dios, informando los porque,
condiciones, naturaleza o pensamientos de personas, animales, lugares y cosas que no se
aprenden en forma natural. No es el Don de Ciencia, sino el Don de palabra de Ciencia, es
decir una porción o parte del conocimiento de Dios.

Los dones de palabra de ciencia y de sabiduría están entrelazados, el primero provee el

conocimiento y el segundo lo aplica. Ejemplo: Dios le muestra a un hermano por el don de
ciencia que un hermano tiene problemas estomacales, pero la sabiduría actúa en la forma
de plantear el mensaje de Dios, sin exponer, avergonzar o estremecer a la persona.

25
Se manifiesta a través de sueños, por revelación al corazón, por voz audible. Pero siempre
en forma sobrenatural. Nos proporciona un conocimiento, permitiéndonos conocer la mente,
el corazón, y la naturaleza de una persona, sus secretos, sus intenciones.

Ejemplos bíblicos: Elías recibe la revelación, del peligro para su vida. 1 R. 19:3 – 4, Elías
recibe palabra de Dios en la cueva. 1 R. 19:9, a través de la palabra de ciencia, Dios revela
a Elías como y donde se encontraría con Eliseo, que todavía no era profeta. 1 R. 19:19 –
21, el Profeta Eliseo informo al Rey de Israel sobre los planes del Ejército Sirio. 2 R. 6:8 –
14, Dios revelo a Juan la condición de las siete iglesias que estaban en Asia mayor y Asia
menor. Ap. Cáp. 2 y 3, Dijo a Ananías donde estaba Pablo. Hch. 9:11, revelo la mentira de
Ananías Y Safira a Pedro. Hch. 5:3.

1.3. El Don de Discernimiento de Espíritu. Es la manifestación sobrenatural del Espíritu

de Dios revelando que espíritu esta operación (Mr. 1:23-26, Hch. 16:16-18). Es una mirada
al mundo sobrenatural de los espíritus. Hay tres grandes clases de espíritus que se mueven
en el mundo: lo divino, lo satánico y lo humano.

Ejemplos bíblicos: La autoridad de Jesús, sobre el Gadareno y los dos mil demonios Mc.
5:1 – 13, los siete espíritus de María Magdalena. Lc. 8:2, los espíritus de adivinación de la
pitonisa. Hch. 16:16 -18, el espíritu de Barjesus también llamado Elimas el mago y falso
profeta. Hch. 13:6 -12.

Este permite juzgar los dones de: diversos géneros de lenguas, don de hablar en lenguas
(como señal1 Co. 14:22), profecías, Interpretación de lenguas. (De los diversos géneros de
lenguas)

Este don es una ayuda para: libertar afligidos, oprimidos, atormentados, posesión
demoníaca, suicidio, actos de violencia, esquizofrenia, demencia, inmoralidad, pornografía,
drogas, revela el mundo del ocultismo, pone en evidencia el corazón del hombre cuando no
es recto, revela el pecado que sea y el espíritu que está operando, desenmascara al diablo,
etc. Todo creyente debe anhelarlo.

2. Dones de Poder.

2.1. El Don de Fe. Es la manifestación sobrenatural del Espíritu de Dios, que derrama
milagrosamente la certeza de la respuesta a una operación antes que se vea. El Don de Fe
dice: TENGO, no dice: TENDRE. Es una declaración con una afirmación contundente, lo
que dices será hecho.

El Don de Fe no debe confundirse con la fe salvadora, que es la confianza del creyente

puesta en la obra redentora de Cristo (Jn 3:36), y la fe en el camino cristiano, que es creer
en el Dios viviente en todos los detalles de la vida. “Por fe andamos y no por vista” (2 Co.
5:7).

26
Hay que reconocer que el don de fe es distinto al don de operación de milagros aunque el
fruto de ambos sea casi siempre el mismo: un milagro (rupturas de ciclos naturales). Por
ejemplo: una misionera en la China le dieron a comer un pescado envenenado pero un gato
salto por la ventana y se lo comió. No hubo una ruptura de un ciclo natural, más el milagro
se manifestó.

El don de fe se manifiesta en ciertas ocasiones, es cuando el Espíritu Santo lo determina,

no al antojo del hombre, lo hace en forma secreta y silenciosa.

Ejemplos bíblicos: Daniel en el foso de los leones. Dn. 6:1 – 28, Jesús y las fieras del
desierto. Mr. 1:13, Tomaran serpientes (como promesa). Mr. 16:18, Jesús escapa de que
lo arrojen del monte. Lc. 4:29 – 30, Eliseo, los dos osos y los 42 niños. 2 R. 2: 23 -24.

En hebreos Cáp. 11 conseguimos toda clase de fe.

 Fe salvadora. He. 11: 31
 Fe general. He. 11:4; 26; 36.
 Fe milagrosa y creativa. He. 11:3.
 Fe sobrenatural. He. 11:7.

La fe sobrenatural produce poder sobre las palabras. Jb. 22:28. Una declaración con poder
va acompañado del don de fe.

2.2. El Don de Operación de Milagros. El don de operación de milagros es un poder

sobrenatural, dado por Dios produciendo señales y maravillas. Un milagro es la suspensión
de la ley o las leyes naturales; es una manifestación del poder sobrenatural.

Es obrar señales y maravillas:

 Es definitivamente en una forma sobrenatural.
 Es contrario a la naturaleza.
 Es una confirmación de Dios. Jn. 5: 36

Ejemplos bíblicos: El cruce del Mar Rojo (Ex. 14: 21-23), Josué habla al sol y a la luna
haciéndoles detenerse (Jos. 10: 12-14), La multiplicación de la harina y el aceite a la viuda
de Sarepta (1 R. 17:8-16), Elías oro y el fuego consumió al capitán y a sus cincuenta. 2 R.
1:11- 12, la transformación del agua en vino (Jn. 2: 1- 11), Cristo camina sobre el agua (Mt
14: 25-33), la resucitación de Tabita. Hch. 9:40, la resucitación de Lázaro. Jn. 11:43 –44,
Multiplicación de panes y peces. Mt. 15: 34 – 39, Pablo es liberado en Filipo. Hch. 16:25 –
40, Pedro es liberado de la cárcel. Hch. 12:6 – 11, entre otros.

2.3. El Don de Sanidad. Es el don sobrenatural de sanar las enfermedades o dolencias sin
el uso de medios naturales, como: medicinas, médicos, tratamientos, intervenciones
quirúrgicas, etc. Existen enfermedades demoniacas (reprender la fiebre Lc. 4:39) y
27
enfermedades por la falta de mayordomía (Pablo manda a Timoteo tomar vino para el
estómago 1 Ti. 5: 23). La pluralidad con que la Biblia trata este don se debe a la diversidad
de enfermedades que pueden ser sanadas.

En la biblia podemos observar diferentes propósitos por los cuales se manifestó este don,
entre estos se pueden citar:
 Para perdón de pecados. (como señal) Mr. 2:10–11
 Fortalecer la fe y salvar almas. Jn. 2:23, Mt. 9:2.
 Confirmar la palabra. Mr. 16:18.
 Para la gloria de su nombre. Mr. 2:11 - 12

3. Dones de Inspiración.

3.1. El Don de profecía. Es una pronunciación sobrenatural inspirada por Dios en un idioma
desconocido (generalmente al futuro) (Mt. 5:15, Hch. 19:12). El don de profecía puede
darse en un culto público, así como en el tiempo devocional de un creyente, cuando Dios le
quiere hablar personalmente. La profecía genuina siempre va a estar en armonía con la
Palabra de Dios, no puede contradecirse. La profecía tampoco debe reemplazar a la
predicación de la palabra de Dios, sino complementarla.

Reglas de Uso:
- La profecía habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación.
- Si habla alguno en lengua extraña, sea esto por dos o más, y por turno; y uno
interpreta.
- Si no hay interprete, calle en la iglesia y hable para sí mismo y para Dios.
- Los profetas hablen dos o tres y los demás juzguen.
- Si alguno fuese revelado a otro que estuviese sentado calle el primero.
- Los espíritus de los profetas están sujetos a los profetas.

3.2. El Don de Géneros de Lenguas. Es la manifestación sobrenatural del Espíritu de Dios

usando los órganos vocales del hombre para hablar en diferentes idiomas, sean terrenales
o celestiales.

Todo creyente bautizado con el Espíritu Santo tiene la capacidad potencial de hablar en
lenguas con un don devocional para su propia edificación (aunque no se manifieste en forma
inmediata).

En cambio, el don de lenguas para edificación no es dado a todos (1 Co. 12:11, 30). El
apóstol Pablo en 1 Co. 14:5, implica que no todos los corintios hablaban en lenguas. El don
28
de lenguas más interpretación equivale al don de profecía, y debe ser ejercido con las
mismas precauciones que este último. Puede ser también vehículo para los dones de
revelación.

El don de lenguas da descanso y reposo al agotado (Is. 28: 11–12), es un lenguaje

celestial (1 Co. 13:1), es para edificar al creyente (1 Co. 14:4), es señal a los incrédulos (1
Co. 14:22), es para glorificar a Dios (Hch. 10:46).

3.3. El Don de Interpretación de Lenguas. Es la manifestación sobrenatural del Espíritu

de Dios usando los órganos vocales, hablando en el idioma de la congregación, explicando
lo dicho por el don diversos géneros de lenguas.

Es expresar en idioma conocido lo que se habló en un idioma sobrenatural. Este don no

ofrece las palabras exactas cuando interpreta porque no es traducción. La interpretación
puede ser más larga o más corta que el mensaje en lenguas. Las lenguas que se interpretan
son aquellas que traen mensajes únicamente.

El intérprete puede hablar en lenguas y también interpretarlas en el idioma de la

congregación.

Diversos géneros de Lenguas + interpretación = Profecía.

Ejemplos bíblicos. El Espíritu Santo dió instrucciones a la iglesia. Hch. 13:2, Agabo
interpretó el mensaje que dio el Espíritu Santo a la iglesia. Hch.11: 28, Pablo recibe una
orden del Espíritu Santo Hch. 16:6 – 7, En el concilio de Jerusalén interpretaron lenguas.
Hch. 15:28 – 29.

Hay que recordar siempre, que los dones de lengua, interpretación y aun de profecía no son
para guía sino para confirmar lo que Dios ya nos ha hecho sentir en nuestro corazón y por
las sagradas escrituras.

Hay que notar que Pablo tuvo que aconsejar y establecer reglas fijas en cuanto al uso del
don de lenguas e interpretación porque son los dones más usados en la iglesia. Alguien ha
dicho que 1 Corintios 14 son las reglas parlamentarias carismáticas.

29
 Lección 9: Los Ángeles

El creyente en la actualidad está expuesto a muchos peligros, situación que lo lleva a

meditar en la protección de Dios alrededor de su vida física y espiritual. Por esta razón, se
realizara un estudio acerca del ministerio angelical y su servicio a favor de los hijos de Dios.

En el griego encontramos la palabra “ángelus”, que significa mensajeros y en hebreo “malak”

que quiere decir delegado o embajador, son seres espirituales que cumplen misiones entre
Dios y los hombres (He. 1:14, He. 1:7, Hch. 8:26).

Los ángeles en la Biblia aparecen tanto como portadores de buenas nuevas como
ejecutores del juicio de Dios. Son espíritus ministradores enviados por Dios para el servicio
a favor de los que heredamos la salvación. Según la tradición cristiana son espíritus celestes
creados por el Padre celestial para su ministerio.

He. 1:7 dice: “Ciertamente de los ángeles dice: El que hace a sus ángeles espíritus, y a sus
ministros llama de fuego”

Los ángeles poseen características que los distinguen de los demás seres espirituales:

Son muchos (Mt. 8:38), santos (Mr. 8:38), escogidos (1Ti. 5:21), no se casaran (Mr. 12:25);
tienen poder y no se cansan, la mitología griega ha difundido la idea de que los ángeles son
el resultado de la unión de los dioses con mujeres humanas de los que nacieron semi-
dioses; pensamiento herético.

Los ángeles como el ejército de Dios están organizados en rangos estos le asigna
características con su apariencia y funciones:

Seres vivientes, exaltan los atributos de Dios (Ez. 1:5, Ap. 4:6)

Serafines, dan testimonio de la santidad de Dios (Is. 6:2)

Querubines, guardaban el huerto del Edén (Gn. 3:24) proclaman el justo gobierno de Dios
(Ez. 10: 1-10)

Ángeles, seres espirituales ministradores a favor de los hijos de Dios (Ex. 23: 20, Nm. 22:
23, Sal. 91:11-12, Lc. 1: 11, Ap. 5:2)

Arcángeles, la biblia menciona solo dos: El arcángel Gabriel, mensajero (. 8: 15-17 y Lc

1: 19, 26) y el arcángel Miguel, presto para la guerra (Dn. 10: 13, 20)

*El ángel de Jehová, es una expresión que se refiere a una teofanía, es decir apariciones
de Dios (Ex. 3:2, 2 R. 1:3 y Is. 37:36)

Las funciones de los ángeles expuestas en la palabra de Dios, dan un punto de referencia
de lo que significa tanto su presencia en la tierra como en el trono de Dios.

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 Cantan alabanzas: “…una multitud de las huestes celestiales, que alaban a Dios
decían: Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz…”

Mensajeros de buenas nuevas, el arcángel Gabriel anuncio el nacimiento del Señor

Jesús. (Mt. 1:20-21), la voz del arcángel acompañará el arrebatamiento de la iglesia (1Ts.
4:16).

Conducen al pueblo, dirigiéndose el Dios Padre a Moisés le dice: “He aquí yo envío mi
ángel delante de ti para que te guarde el camino”.

Guerra espiritual, donde el arcángel Miguel lucha contra el príncipe de Persia (Dn. 10:13)
y contra el dragón de los acontecimientos finales (Ap. 12:7-9)

Protección, son enviados para cuidar a los hijos de Dios, en varias ocasiones
encontramos a los ángeles guardando la vida de Lot, detuvieron la mano de Abraham
cuando iba a sacrificar a Isaac, aparecieron a José indicándole que se fuera a Egipto para
guardar la vida del Señor Jesús y liberaron a los apóstoles de la prisión. Sal. 91:11 “Pues a
sus ángeles enviará que te guarden en todos tus caminos”.

A los ángeles no se les rinde culto, pues la palabra de Dios dice en 2 Co. 11:14 que Satanás
se disfraza de ángel de luz para engañarnos y desviarnos de la verdadera adoración a Dios
(Col. 2:18, Lc. 4:8).

31
 Lección 10: Satanás y los Demonios

Como hijos de Dios debemos caminar en la voluntad del Padre celestial; y en el propósito
por el cual fuimos llamados a formar parte del ejercito de Jesús y entender que tenemos un
en enemigo que siempre está maquinando en nuestra contra pero que está vencido, lo
venció nuestro Señor en la cruz del calvario. Él ha delegado poder y autoridad a sus hijos,
y esta lección es para conocer mejor quién es Satanás y cómo opera en conjunto con los
demonios, pero más importante es tener clara nuestra identidad en Cristo.

¿Quién es Satanás (el diablo)?

Cuando originalmente fue creado era un ángel de Dios. Un ser espiritual, igual que su
creador (Ez. 28:11-19; Is. 14:12-14). Era perfecto, santo, sabio y hermoso hasta que se halló
maldad en él. Dios no creo a Satanás, el pecado del querubín lo convirtió en ese ser
espiritual de maldad. Se reveló contra Dios y fue echado del lugar de privilegio del cual
gozaba junto con los ángeles que él engañó.

Su nombre en griego significa adversario y, en hebreo Satan y deriva del latín: Satánas.

Adversario (1 P. 5:8) – Enemigo – Acusador

También hay que tener en claro que cuando la Biblia hace alusión:
 Ángel del abismo (Ap. 9:11)
 Belcebú (Mt. 12:24, Mr. 3:22, Lc. 11:15)
 Belial (2 Co. 6:15)
 Diablo (Mt. 4:1, Ap. 20:2)
 dios de este mundo (2 Co. 4:4)
 Dragón (Ap. 12:3)
 Espíritu de mentira (1 R. 22:22)
 Espíritu que obra en los hijos de desobediencia (Ef. 2:2)
 Homicida (Jn. 8:44)
 Malo (Mt. 13:18)
 Príncipe de este mundo (Jn. 12:31)
 Príncipe de la potestad del aire (Ef. 2:2)
 Príncipe de los demonios (Mt. 12:24)
 Satanás (Job 1:6)
 Serpiente antigua (Ap. 2:2)
 Tentador (1 Ts. 3:5)

32
Es el mismo ente espiritual de maldad que se viene moviendo desde tiempo muy antiguos.

Ejército de Satanás.
Se oponen a los propósitos de Dios. Los demonios son reales y están activos pero Jesús
tiene la autoridad sobre ellos y la ha delegado a sus seguidores. A pesar de que Satanás
obra en nuestro mundo Dios tiene el control total.
Debemos ir descubriendo contra quien nos enfrentamos, no solo para defendernos sino
también para atacarles y hacerles retroceder. Con el poder y la autoridad que Dios nos ha
dado podemos mantener la victoria que el Señor alcanzó en la cruz del calvario.

Clasificación según Efesios 6:12.

 Principados.
 Potestades.
 Gobernadores de las tinieblas.
 Huestes espirituales de maldad.

El ejército de Satanás está bien organizado y sus legiones emplean un despliegue de

artimañas, debemos estar preparados para hacerle frente al enemigo y poner al descubierto
sus tácticas.
Satanás es astuto, sagaz y engañador; la palabra lo describe como padre de la mentira (Jn.
8:44). Con sus actos y palabras es el destructor de la verdad, un adversario perpetuó,
engañador del mundo y enemigo de los hijos de Dios. Satanás es fuerte pero se le puede
resistir (Stg. 4:7).

Poder y autoridad de los creyentes sobre los demonios.

Es el poder de Dios, a través de su Santo Espíritu lo que hace retroceder al enemigo pero
necesitamos tener Fe y creer que Él lo va hacer. Hay un gran poder aún en una Fe pequeña
cuando Dios está con nosotros. Debemos caminar en obediencia y santidad, y entender que
no somos nosotros en nuestra propia fuerza sino el poder de Dios obrando a través de sus
hijos (Mt. 17:14-21, Lc. 9:37-43, Mr. 9:14-28).

¿Puede un cristiano ser poseído?

La posesión es un acto de control absoluto sobre la persona (espíritu – alma – cuerpo), en
pocas palabras, Satanás reina en esa persona no creyente (Lc. 9:39). Pero en los hijos de
Dios sólo puede oprimir a través de aquellas áreas que no se hayan entregado al Señor o
cuando abrimos puertas al pecado, pero solo pueden tomar lugar o afectar al alma o al
cuerpo, porque el espíritu ha sido vivificado y regenerado a través del Espíritu Santo.

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Tenemos que pedir que nos ayude a desarrollar cada parte del fruto del Espíritu que es lo
que nos va ayudar con cada área de nuestra vida (1 Co. 6:19-20).

Conclusión.
Como hijos de Dios debemos tener un equilibrio: Pensar que en todo operan los demonios
o creer que somos a los inmunes a sus ataques, es un error. Ciertamente no debemos
ignorar sus maquinaciones pero entender que el Señor nos ha dado una posición (Ef. 2:6),
también tenemos poder (Hch. 1:8) y autoridad (Mr. 6-7); y a la medida que busquemos su
presencia en nuestras vidas y la unidad en la fe, seremos un gran ejército en Cristo capaces
de enfrentar toda obra y artimaña del enemigo porque el Señor ya no ha dado la victoria.

34
 Lección 11: Oración e Intercesión

Hay un punto muy importante en la vida del creyente y es su vida de oración y entrega a
Dios. La oración es la clave fundamental en nuestro crecimiento espiritual. La oración es la
clave en nuestra relación con Dios, teniendo en cuenta que orar es importante y que
podemos aprender hacerlo de manera eficaz también nos costará mucho trabajo hacerlo.
La oración tiene poder y a través de ella se mueve el mundo espiritual y repercute en el
mundo físico.
Hay tres niveles diferente de hablar con Dios (Oración – Intercesión – Guerra espiritual).

La Oración.
La oración es hablar con Dios, conversar, tener una relación íntima con nuestro Padre
celestial.
 En este dialogo lo más natural es:
 Alabamos y adoramos (Ex. 15:1)
 Damos gracia (Sal. 100:4)
 Pedimos perdón (1 Jn. 1:9)
 Rogamos por nuestras necesidades (Sal. 23:1)

Para un hijo de Dios la oración es:

 Un deber.
 Una obligación.
 Una necesidad.

Debemos acercarnos a Él confiadamente, Dios escucha nuestras oraciones (Jr. 29:12, Jn.
16:24). El secreto de Jesús en su ministerio fue su vida de oración.
La oración es disfrutar de ese tiempo de comunión con Dios; es humillares por completo y
permitir que Él obre en nuestras vidas conforme a su voluntad. No convencemos a Dios con
nuestras peticiones, debemos sujetarnos y aceptar su voluntad. También a través de la
oración proclamamos su santidad, soberanía, reino y su poder.

¿Qué logramos a través de la oración?

 Ser transformados a la imagen de nuestro Señor Jesucristo.
 Guía y dirección para nuestras vidas.
 Provisión, cuidado y protección.
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  Su gracia derramada en nuestras vidas (Lc. 11:24)

Debemos orar en todo tiempo, tanto particular como en grupos (1 Ts. 5:17). Cuando se nos
dice “orar sin cesar” no sería posible por nuestras responsabilidades es, más bien, vivir
conscientes de la presencia de Dios, también como iglesia (Hch. 12:5). La biblia también
nos da ejemplo de quienes oraban de forma regular: David y Daniel oraban tres veces al
día, Job oraba todas las mañanas, Pablo y Silas oraron toda una noche.

Podemos orar en todas partes. El lugar físico no debe restringir nuestra oración. La forma
en lo que hagamos no es lo importante sino nuestro corazón con Dios.

La Intercesión.
Es pararse en la brecha, venir a favor de otro o hablar a favor de otro. Ser un vigilante.
Cuidar, levantar vallado (Is. 62:6). Es ser atalaya, guarda o centinela.
La intercesión nos ata a la voluntad del Padre, cuando el Espíritu obra a través de nosotros
declara lo que el Padre quiere hacer no lo que nosotros queremos. La intercesión es el rio
sobrenatural de Dios fluyendo poderosamente a través de nosotros.
Interceder es orar en un camino de Fe total. Los intercesores plantan semillas en la oración,
pero los resultados son de Dios.
El mayor y mejor ejemplo de un intercesor lo encontramos en nuestro Señor Jesucristo que
tomo el lugar nuestro para espiar los pecados en la cruz del calvario, a fin de que fuéramos
perdonados por el Padre (Lc. 23:24, Jn. 17:19).
La intercesión es la forma más profunda, amorosa y poderosa de orar conforme a la palabra
de Dios, y es una obligación fundamental de todo creyente. Podemos orar en todas partes.
La forma en que lo hagamos no es lo más importante sino nuestra actitud y nuestro corazón.
¿Por qué nos cuesta orar?
 Orar es contrario a nuestra naturaleza.
 Para orar se necesita dominio propio, por si solo no tenemos deseo de hacerlo.
 Para nuestra naturaleza le es más fácil satisfacer apetitos y deseos físicos.
 Para la mayoría de las personas apartar un espacio para la parte espiritual es pérdida
de tiempo (Stg. 4:2).
 Ora implica que somos débiles (2 Co. 12:8-9)
 Creerse justo (Lc. 18:9-12).
 Orar no siempre guarda relación con los resultados (Dn. 10)
 Satanás siempre tratará de oponerse a la oración porque sabe que esta tiene poder
y es capaz de desatar tanto el mundo espiritual como el físico (Mt. 16:19).

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 Lección 12: GUERRA ESPIRITUAL E IMPOSICIÓN DE MANOS

Guerra Espiritual.
Cuando nos convertimos a Jesucristo pasamos a formar parte del ejército del Señor y como
tal debemos tener claro que nos veremos envuelto en una batalla constante, a tales efectos
somos enseñados, entrenados y preparados, no para alcanzar la victoria sino para
mantenerla.

Ya el Señor ganó; nos corresponde permanecer en victoria, siendo una lucha espiritual,
también nuestra armas son espirituales (2 Co. 10:4-5).

La Guerra Espiritual es la confrontación de poderes espirituales donde Dios manifiesta su

soberanía y poder por medio de la iglesia sobre Satanás y el mundo (Ef. 6:12-13).

La Guerra Espiritual es un medio por el cual la iglesia en su conjunto prepara el campo para
la evangelización a través de la oración de guerra. La biblia dice que el mundo está bajo el
maligno (1 Jn. 5:19), por eso al predicar el evangelio se produce un choque de verdades
que debe ser acompañado de un choque de poderes dado que Satanás y su ejército
controlan la mente de los incrédulos para que la luz de Cristo no resplandezca sobre ellos
(2 Co. 4:4).

En estos tiempos Dios está levantando intercesores de guerra en todo el mundo que oran y
claman por las almas perdidas. Nuestra tarea como iglesia del Señor, es rescatar a las
almas cautivas e impedir que el enemigo avance sobre nuestras ciudades.

La Guerra Espiritual es el elemento necesario para preparar el terreno y así proceder a

plantar la semilla del evangelio (Jer. 1:10).

El objetivo de la Guerra Espiritual no es destruir a Satanás y a los demonios sino rescatar

aquellos que están bajo su dominio y rompiendo todo tipo de maldiciones y ataduras (Jn.
10:10).

Lo más importante para el Señor es darle vida eterna a los hombres, no destruir al diablo
porque el enemigo ya está vencido (Ap. 20:10).

Las personas necesitan conocer al Señor para que sean verdaderamente libres, por eso
como Iglesia y cuerpo de Cristo tenemos el deber y la obligación de ayunar, orar e interceder
por las almas; y luego evangelizar y llevar las buenas nuevas de salvación para arrebatar
las almas de las manos de Satanás puedan ser trasladadas al reino de la luz admirable de
nuestro Señor Jesucristo (Col. 1:13-14).

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Imposición de Manos.
La práctica de imposición de manos en la Iglesia de Jesucristo ha sido tratada ligeramente;
en esta lección vamos a conocer y ahondar sobre esta práctica y cuáles son las condiciones
o requisitos que se necesitan para la misma a fin de evitar incurrir en errores o peligros por
desconocimiento de la misma.

La imposición de manos es el acto simbólico que consiste en colocar las manos sobre una
persona o un animal para transmitir un don, un poder o una culpa.

Condiciones para imponer manos:

 No debe llevarse a la ligera sino con oración y humildad (1 Ti. 5:22).

 Guiado por el Espíritu Santo (Jn. 16:13).

 Debe estar fortalecido por el Espíritu Santo para vencer cualquier influencia maligna
que pueda manifestarse (1 Jn. 4:4).

Imposición de manos para bendición.

Antiguo pacto: cuando el sacrificio anual del día de expiación se realizaba, el sacerdote
colocaba las manos sobre el carnero confesando sobre él las iniquidades del pueblo, o sea;
era identificar, quitar y colocar sobre otro el pecado (Lv. 1:4-5).

Moisés consagró a Josué como su sucesor dejándole el poder y la dignidad dada por
Dios (Nm 27.:18-23).

Los padres bendecían a sus hijos (Gn. 48:8-22).

Nuevo pacto: La imposición de mano siempre significa bendición.

Para sanidades (Mt. 9:18, Mr. 5:23).
Para bendecir a los niños (Mr. 10:16).
Para recibir al Espíritu Santo (Hch. 8:17, Hch. 9:17).
Apartar para el ministerio los apóstoles (Hch. 6:6, 1 Ti. 4:14)

Peligros de la imposición de manos.

La imposición de manos puede tener como consecuencia maldición, aquí debe tratarse el
término transferencia de espíritus malignos que operan para oprimir la vida del creyente.
Por esta razón debemos evitar que cualquiera nos imponga la mano, se debe conocer por
el testimonio o fruto de quien lo está realizando.

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