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DIAGNOSTICO

Los médicos realizan muchas pruebas para detectar o diagnosticar el cáncer. También
realizan pruebas para averiguar si el cáncer se ha diseminado a otras partes del cuerpo
desde el lugar donde se inició. Si esto sucede, se denomina metástasis. Por ejemplo, las
pruebas por imágenes pueden mostrar si el cáncer se ha diseminado. Las pruebas por
imágenes muestran imágenes del interior del cuerpo. Los médicos también pueden hacer
pruebas para determinar qué tratamientos podrían funcionar mejor.

En la mayor parte de los tipos de cáncer, una biopsia es la única manera segura para que
el médico determine si un área determinada del cuerpo tiene cáncer. Durante la biopsia, el
médico toma una pequeña muestra de tejido para hacerle pruebas en un laboratorio. Si no
se puede realizar una biopsia, el médico puede sugerir que se lleven a cabo otras pruebas
que ayuden a establecer un diagnóstico.

Esta lista describe opciones para el diagnóstico de este tipo de cáncer. No todas las
pruebas mencionadas a continuación se utilizarán para todas las personas. Su médico
puede considerar estos factores al elegir una prueba de diagnóstico:

 Tipo de cáncer que se sospecha

 Sus signos y síntomas

 Su edad, su estado de salud general y sus antecedentes familiares

 Los resultados de pruebas médicas anteriores

Si un médico sospecha que una persona tiene cáncer de páncreas, primero preguntará
sobre los antecedentes médicos, los antecedentes familiares y examinará a la persona
para determinar si hay signos de la enfermedad. Un diagnóstico adecuado y oportuno es
muy importante. Si es posible, las pruebas se deben realizar en un centro que tenga
experiencia con la enfermedad. Las pruebas mencionadas a continuación pueden
utilizarse cuando se sospecha que hay cáncer de páncreas. Sin embargo, el diagnóstico
debe confirmarse con una muestra de tejido del tumor extraída durante una biopsia, una
aspiración con aguja fina o cirugía.
Pruebas generales

 Examen físico. El médico examinará la piel, la lengua y los ojos para ver si están
amarillos, lo cual es un signo de ictericia. La ictericia puede ser causada por un
tumor en la cabeza del páncreas que bloquea el flujo normal de una sustancia
denominada bilis que es producida en el hígado. Sin embargo, muchos pacientes
con cáncer de páncreas no tienen ictericia al momento del diagnóstico del cáncer.
El médico también palpará el abdomen para comprobar si el cáncer produjo algún
cambio. Sin embargo, dado que el páncreas está detrás de la parte superior del
abdomen, con frecuencia no es palpable. La acumulación anormal de líquido en el
abdomen, lo que se denomina ascitis, puede ser otro signo de cáncer.
 Análisis de sangre. El médico puede extraer muestras de sangre para controlar
los niveles anormales de bilirrubina y otras sustancias. La bilirrubina es una
sustancia química que puede alcanzar niveles altos en los pacientes con cáncer
de páncreas debido a la obstrucción del conducto colédoco por un tumor. Existen
muchas otras causas no relacionadas con el cáncer que explican la presencia de
un nivel elevado de bilirrubina, como la hepatitis, los cálculos biliares o la
mononucleosis.
El antígeno de carbohidrato 19-9 (carbohydrate antigen 19-9, CA19-9) es un
marcador tumoral. Un marcador tumoral es una sustancia producida por un tumor
que se puede encontrar en niveles más altos si hay presencia de cáncer y se
puede medir en la sangre. A menudo, los niveles de CA19-9 aumentan en las
personas con cáncer de páncreas, aunque algunos pacientes tienen niveles de
CA19-9 normales. A menudo, los niveles de CA19-9 son más altos a medida que
el cáncer crece o se disemina. El CA 19-9 no debe usarse como la única prueba
para diagnosticar cáncer de páncreas, dado que los niveles altos de CA 19-9
también pueden ser un signo de otras afecciones. Por ejemplo, otros tipos de
cáncer, como el cáncer colorrectal, hepático y esofágico pueden aumentar el
CA 19-9. Afecciones no cancerosas, como pancreatitis, cirrosis hepática y
obstrucción no cancerosa del conducto biliar común también pueden aumentar el
CA 19-9.

Pruebas por imágenes

Las pruebas por imágenes permiten a los médicos determinar dónde está ubicado el
cáncer y si se ha diseminado desde el páncreas hacia otras partes del cuerpo. Las
pruebas por imágenes también pueden utilizarse para controlar si el cáncer está
creciendo. El cáncer de páncreas a menudo no se desarrolla como una sola masa tumoral
grande, lo que significa que, en algunos casos, puede ser difícil visualizarlo en las
imágenes. Sin embargo, los escáneres de tomografía computarizada más nuevos
(consulte más abajo) producen imágenes de más calidad y más claras que pueden
facilitar la detección de un tumor. Un radiólogo es un médico que se especializa en
interpretar pruebas por imágenes.

 Exploración por tomografía computada (computerized tomography, CT o


CAT). Una exploración por CT (en inglés) toma imágenes del interior del cuerpo
utilizando rayos X que se toman desde diferentes ángulos. Una computadora
combina estas imágenes en una imagen detallada tridimensional que muestra las
anomalías o los tumores. Se puede usar una exploración por CT para determinar
la localización y el tamaño del tumor y si este se ha diseminado a los ganglios
linfáticos o a otras partes del cuerpo. Generalmente, antes de la exploración se
administra un tinte especial denominado medio de contraste, a fin de obtener
mejores detalles en la imagen. Este tinte se puede inyectar en una vena del
paciente o puede administrarse en forma de líquido para tragar. Muchos centros
oncológicos utilizan un método especial de exploración por CT llamado CT con
protocolo para páncreas. Este método se concentra en tomar imágenes del
páncreas en diferentes momentos después de la inyección intravenosa (i.v.) del
medio de contraste para determinar exactamente dónde se encuentra el tumor en
relación con los órganos y vasos cercanos. Los resultados de esta prueba pueden
ayudar a decidir si el tumor se puede extirpar con cirugía.
 Tomografía por emisión de positrones (positron emission tomography, PET)
o exploración por PET-CT. Una PET generalmente se combina con una
exploración por CT (vea arriba), lo cual se denomina exploración por PET-CT (en
inglés). Sin embargo, es posible que escuche al médico hablar de este
procedimiento como simplemente una PET. La PET es una forma de crear
imágenes multicolor de los órganos y los tejidos internos del cuerpo. Se inyecta en
el cuerpo del paciente una pequeña cantidad de una sustancia azucarada
radiactiva denominada marcador. Esta sustancia azucarada es absorbida por las
células que utilizan la mayor cantidad de energía. Debido a que el cáncer tiende a
utilizar energía de manera activa, este absorbe una cantidad mayor de la sustancia
radiactiva. Luego, una exploración detecta esta sustancia para generar imágenes
del interior del cuerpo. La combinación brinda un panorama más completo del área
que se evalúa. Las PET se realizan regularmente en algunos centros oncológicos
para el diagnóstico y la determinación de estadios del cáncer de páncreas, pero no
en todos ellos. Sin embargo, aún no se consideran una prueba estándar para
detectar el cáncer de páncreas. Una PET sola nunca debe utilizarse en lugar de
una tomografía computarizada de alta calidad.
 Ecografía. Una ecografía utiliza ondas de sonido para crear una imagen de los
órganos internos. Existen 2 tipos de dispositivos de ultrasonido: transabdominal y
endoscópico.
o Se coloca un dispositivo de ultrasonido transabdominal sobre la parte
externa del abdomen y se lo mueve lentamente para producir una imagen
del páncreas y las estructuras circundantes.

o El dispositivo de ultrasonido endoscópico (endoscopic ultrasound, EUS) es


un tubo delgado iluminado que se introduce a través de la boca y el
estómago del paciente hacia el intestino delgado. Se mueve lentamente
alrededor del área a fin de obtener una imagen del páncreas. Este
procedimiento es altamente especializado y requiere de la presencia de un
gastroenterólogo que posea capacitación específica en esta área. El
gastroenterólogo es un médico que se especializa en el tubo digestivo, que
incluye estómago, intestinos y órganos similares. Por lo general, en el EUS,
se aplican sedantes al paciente para que duerma durante todo el
procedimiento. También puede realizarse una biopsia (consulte más abajo)
en el mismo momento que este procedimiento.

 Colangiopancreatografía endoscópica retrógrada (endoscopic retrograde


cholangiopancreatography, ERCP). Este procedimiento es realizado por un
gastroenterólogo. El médico coloca un tubo delgado e iluminado
denominado endoscopio en la boca, que pasa por el estómago hasta llegar al
intestino delgado. Luego, se pasa un tubo pequeño, denominado catéter, a través
del endoscopio y hasta el interior de los conductos biliares y pancreáticos. Se
inyecta un tinte en los conductos y el médico luego toma radiografías que pueden
mostrar si un conducto está comprimido o se ha estrechado. Con frecuencia,
durante la ERCP puede colocarse una endoprótesis o “stent” de plástico o metal
en el conducto biliar obstruido para aliviar la ictericia. Durante este procedimiento,
pueden obtenerse muestras del tejido que, en ciertos casos, ayudan a confirmar el
diagnóstico de cáncer. Durante este procedimiento, se administra al paciente un
sedante suave. Por lo general, la ERCP se usa para colocar endoprótesis de
conductos biliares y no se usa con frecuencia para diagnósticos.
 Colangiografía percutánea transhepática (percutaneous transhepatic
cholangiography, PTC). Para realizar este procedimiento de radiografías, se
inserta una aguja delgada a través de la piel y hacia el hígado. A través de esta
aguja se inyecta una tinción para que los conductos biliares se vean en las
radiografías. Al examinar esas radiografías, el médico puede decir si los conductos
biliares están obstruidos.
Biopsia y análisis de tejidos
 Biopsia. Una biopsia (en inglés) es la extirpación de una pequeña cantidad de
tejido para su examen con microscopio. Otras pruebas pueden indicar la presencia
de cáncer, pero, en casi todos los tipos de cáncer, solo una biopsia permite
formular un diagnóstico definitivo. Luego, un patólogo analiza la(s) muestra(s). Un
patólogo es un médico que se especializa en interpretar pruebas de laboratorio y
evaluar células, tejidos y órganos para diagnosticar enfermedades. Para el cáncer
de páncreas, el patólogo puede generalmente tener experiencia específica en
analizar muestras de biopsias de cáncer de páncreas. Hay diversas maneras de
extraer una muestra de tejido:
o Una técnica se denomina aspiración con aguja fina (fine needle aspiration,
FNA). La FNA usa una aguja delgada que se introduce en el páncreas para
succionar las células. Generalmente esto se realiza con un EUS (consulte
más arriba) o a través de la piel, lo que se denomina por vía percutánea,
guiado por una exploración por CT.

o En otro método se usa una biopsia con aguja gruesa o una aguja Tru-Cut
para extraer una porción más grande de tejido. Una porción más grande de
tejido puede ser útil para las pruebas moleculares o genéticas del tumor.
Sin embargo, una biopsia con aguja gruesa tiene mayor riesgo que una
FNA, incluido el riesgo de presentar pancreatitis y sangrado. Debe
realizarla un gastroenterólogo que haya sido capacitado específicamente y
que tenga experiencia en realizar EUS.

Si el cáncer se ha diseminado hacia otros órganos, es posible que se necesite


hacer una biopsia de 1 de estas otras áreas, como el hígado. Nuevamente, se
puede hacer a través de la piel, como se explicó anteriormente o, con menos
frecuencia, mediante cirugía. Este tipo de cirugía se puede hacer a través de una
incisión más grande en el abdomen, denominada laparotomía. O bien, la biopsia
quirúrgica puede llevarse a cabo mediante incisiones más pequeñas a fin de
realizar aberturas para una cámara diminuta y los instrumentos quirúrgicos, lo que
se denomina abordaje laparoscópico.

En casos infrecuentes, una biopsia puede mostrar que no hay células cancerosas
en el área evaluada aunque las haya. Esto se denomina resultado de la prueba
“negativo falso”. Esto puede ocurrir porque el área contiene inflamación y/o fibrosis
(tejido tipo cicatrizal), que puede hacer que sea difícil encontrar las células
cancerosas. En general, antes de que un paciente comience el tratamiento, se
hace todo lo posible para confirmar que hay presencia de cáncer, incluso si esto
requiere la realización de varias biopsias. La excepción es para los pacientes que
tienen una masa ubicada en un área del páncreas que se puede extirpar con
cirugía incluso si no se realiza una biopsia o si la biopsia no muestra células
cancerosas.

 Pruebas moleculares del tumor. Es posible que su médico recomiende análisis


moleculares adicionales sobre una muestra tumoral, a fin de identificar cambios en
genes específicos y proteínas. Algunas pruebas moleculares pueden realizarse en
su laboratorio local del hospital. Para otras pruebas, es posible que sea necesario
enviar la muestra a un laboratorio independiente para ser analizada.
Para el cáncer de páncreas , se deben realizar pruebas de inestabilidad de
microsatélites alta (high microsatellite instability, MSI-high), que también se puede
denominar deficiencia de reparación de desajuste o un cambio genético específico
denominado fusión NTRK. Estas pruebas pueden ayudar a los médicos a
determinar sus opciones de tratamiento. Sin embargo, estos cambios genéticos
no son frecuentes en los tumores pancreáticos.
Este enfoque “personalizado” es un área de creciente interés y foco científico. Es
útil averiguar el tipo y la cantidad de muestra de tumor necesaria para estas
pruebas y si están cubiertas por su seguro médico. Es posible que sea necesario
realizar otra biopsia para obtener una muestra de tejido suficientemente grande
para realizar pruebas más extensas. Sin embargo, a veces, un análisis de sangre
puede proporcionar información sobre las características moleculares o genéticas
de su cáncer.

Para obtener más información, consulte al médico. Los pacientes que se someten
a cirugía pueden decidir donar partes del tumor que no sean necesarias para las
pruebas diagnósticas, a fin de que las muestras puedan utilizarse para investigar
aún más el cáncer de páncreas.

Después de realizar estas pruebas diagnósticas, su médico revisará todos los resultados
con usted, incluido el tipo exacto de cáncer que tiene, cuánto ha crecido y se ha
diseminado el cáncer (lo que se denomina estadio) y las opciones de tratamiento.

La siguiente sección de esta guía es Estadios. Explica el sistema que los médicos
usan para describir el alcance de la enfermedad. Use el menú para elegir una sección
diferente para leer en esta guía.

La determinación del estadio es una manera de describir dónde está ubicado el cáncer, si
se ha diseminado o hacia dónde y si está afectando otras partes del cuerpo. Los médicos
usan pruebas de diagnóstico para averiguar el estadio del cáncer, por lo que tal vez no
pueda determinarse el estadio hasta que se hayan realizado todas las pruebas. Conocer
el estadio ayuda al médico a decidir cuál es el mejor tratamiento y puede ayudar a
predecir el pronóstico de un paciente, es decir, la probabilidad de recuperación. Existen
diferentes descripciones de estadios según los distintos tipos de cáncer. Es importante
que la estadificación se efectúe en un centro médico con experiencia en la estadificación
del cáncer de páncreas.

Los médicos usan varios sistemas para determinar el estadio en que se encuentra el
cáncer de páncreas. El método empleado para determinar el estadio de otros tipos de
cáncer, que se denomina clasificación de tumor, ganglio, metástasis (Tumor, Node,
Metastases, TNM), generalmente no se utiliza para el cáncer de páncreas. No obstante,
con el objeto de lograr una mejor comprensión, se explica este método a continuación.

El método más frecuente para clasificar el cáncer de páncreas es dividirlo en 4 categorías,


según la posibilidad de extirparlo con cirugía y las partes a las que se ha diseminado:

Extirpable

Este tipo de cáncer de páncreas puede extraerse quirúrgicamente. A menudo, la cirugía


se realiza enseguida después del diagnóstico. A veces, se puede recomendar un
tratamiento adicional antes de la cirugía. El tumor puede estar ubicado únicamente en el
páncreas o extenderse más allá, pero no ha crecido hasta afectar arterias o venas
importantes del área. No hay evidencia de que el tumor se haya diseminado a otras áreas
fuera del páncreas. Entre el 10 % y el 15 % de los pacientes, aproximadamente, reciben
el diagnóstico en este estadio.

Extirpable límite

Esta categoría describe un tumor que posiblemente será difícil, o imposible, de extirpar
quirúrgicamente, cuando se lo diagnostica por primera vez, pero si la quimioterapia y/o la
radioterapia pueden reducir el tumor en primer lugar, es posible que se extirpe en el futuro
con márgenes negativos. Esto significa que no quedarán células cancerosas visibles.

Localmente avanzado

Este tipo aún está ubicado únicamente en el área alrededor del páncreas, pero no se lo
puede extirpar quirúrgicamente porque ha crecido hasta afectar arterias, venas u órganos
cercanos. Esto significa que no se puede extirpar con cirugía porque el riesgo de dañar
estas estructuras cercanas es muy alto. No hay signos de que se haya diseminado a
ninguna parte distante del cuerpo. Entre el 35 % y el 40 % de los pacientes,
aproximadamente, reciben el diagnóstico en este estadio.

Metastásico

El tumor se ha diseminado más allá del área del páncreas y a otros órganos, como el
hígado, los pulmones u otras áreas alejadas del abdomen. Entre el 45 % y el 55 % de los
pacientes, aproximadamente, reciben el diagnóstico en este estadio.

Al clasificar los diferentes tipos de cáncer en una de estas categorías, el equipo de


atención médica puede planificar la mejor estrategia de tratamiento.

Sistema TNM de determinación de estadios

Los médicos utilizan con frecuencia una herramienta llamada “sistema TNM” para
determinar el estadio de otros tipos de cáncer. En general, los médicos clasifican los
tumores durante la cirugía, y muchos pacientes con cáncer de páncreas no se someten a
intervenciones quirúrgicas. Por lo tanto, el sistema TNM no se emplea tanto con el cáncer
de páncreas como con otros tipos de cáncer.

En el sistema TNM, los médicos usan los resultados de las pruebas de diagnóstico, las
exploraciones por imágenes y la cirugía para responder a las siguientes preguntas:

 Tumor (T): ¿qué tan grande es el tumor primario? ¿Dónde está ubicado?
 Ganglio (Node, N): ¿el tumor se ha diseminado a los ganglios linfáticos? De ser
así, ¿a dónde y cuántos?
 Metástasis (M): ¿el cáncer se ha diseminado a otras partes del cuerpo? De ser
así, ¿a dónde y en qué medida?
Los resultados se combinan para determinar el estadio del cáncer de cada persona. Hay
5 estadios: el estadio 0 (cero) y los estadios I a IV (1 a 4). El estadio es una forma
frecuente de describir el cáncer, de manera que los médicos puedan planificar de forma
conjunta los mejores tratamientos. Aquí le mostramos más detalles sobre cada parte del
sistema TNM para el cáncer de páncreas:

Tumor (T)
Mediante el sistema TNM, se utiliza la “T” más una letra o número (0 a 4) para describir el
tamaño y la ubicación del tumor. El tamaño del tumor se mide en centímetros (cm). Un
centímetro es aproximadamente igual al ancho de una lapicera o un lápiz estándar.

El estadio del tumor ayuda al médico a desarrollar el mejor plan de tratamiento para cada
paciente. A continuación, se incluye información sobre los estadios específicos del tumor.

TX: no se puede evaluar el tumor primario.


T0 (T más cero): no se encontró presencia de cáncer en el páncreas.
Tis: se refiere al carcinoma in situ, que es el cáncer muy precoz que no se ha diseminado.
T1: el tumor solo se encuentra en el páncreas y mide 2 centímetros (cm) como máximo.
Este estadio puede a su vez dividirse en T1a, T1b o T1c en función del tamaño del tumor.
T2: el tumor solo se encuentra en el páncreas y mide más de 2 cm pero no más de 4 cm.
T3: el tumor mide más de 4 cm y se extiende más allá del páncreas. No compromete las
arterias o venas importantes cercanas al páncreas.
T4: el tumor se extiende fuera del páncreas, hacia las arterias o venas principales que se
encuentran cerca de él. El tumor T4 no se puede extirpar por completo con una cirugía.
Ganglio (N)

La “N” en el sistema TNM corresponde a la abreviación para ganglio linfático. Estos son
órganos minúsculos con forma de frijol ubicados en todo el cuerpo que, al formar parte del
sistema inmunitario del cuerpo, ayudan a combatir las infecciones y las enfermedades. En
el cáncer pancreático, los ganglios linfáticos regionales son los que están cerca del
páncreas y los ganglios linfáticos distantes son los que están en otras partes del cuerpo.

NX: no se pueden evaluar los ganglios linfáticos regionales.


N0: no se encontró presencia de cáncer en los ganglios linfáticos regionales.
N1: el cáncer se diseminó a 1 o 3 ganglios linfáticos regionales.
N2: el cáncer se diseminó a 4 o más ganglios linfáticos regionales.
Metástasis (M)

La “M” del sistema TNM indica si el cáncer se ha diseminado a otras partes del cuerpo, lo
que se conoce como metástasis a distancia.

M0: el cáncer no se ha diseminado a otras partes del cuerpo.


M1: el cáncer se ha diseminado a otras partes del cuerpo, incluidos los ganglios linfáticos
distantes. El cáncer de páncreas se disemina con mayor frecuencia al hígado, el
revestimiento de la cavidad abdominal llamado peritoneo y los pulmones.
Agrupación de los estadios del cáncer

Los médicos asignan el estadio del cáncer combinando las clasificaciones T, N y M.

Estadio 0: se refiere al cáncer in situ; el cáncer aún no ha crecido fuera del conducto en
el que se originó (Tis, N0, M0).
Estadio IA: el tumor mide hasta 2 cm o menos y está en el páncreas. No se ha
diseminado a los ganglios linfáticos u otras partes del cuerpo (T1, N0, M0).
Estadio IB: el tumor que afecta al páncreas mide más de 2 cm. No se ha diseminado a
los ganglios linfáticos u otras partes del cuerpo (T2, N0, M0).
Estadio IIA: el tumor mide más de 4 cm y se extiende más allá del páncreas. No se ha
diseminado a las arterias, las venas, los ganglios linfáticos u otras partes del cuerpo (T3,
N0, M0).
Estadio IIB: el tumor, de cualquier tamaño, no se ha diseminado a las arterias o venas
cercanas. Se ha diseminado a 1 a 3 ganglios linfáticos regionales, pero no a otras partes
del cuerpo (T1, T2 o T3; N1; M0).
Estadio III: cualquiera de estas situaciones:
 Un tumor, de cualquier tamaño, que se ha diseminado a 4 o más ganglios
linfáticos regionales, pero no a las arterias, las venas u otras partes del cuerpo
cercanas (T1, T2 o T3; N2; M0).

 Un tumor que se ha diseminado a las arterias y venas cercanas y es posible que


se haya diseminado a ganglios linfáticos regionales. El cáncer no se ha
diseminado a otras partes del cuerpo (T4, cualquier N, M0).

Estadio IV: cualquier tumor que se ha diseminado a otras partes del cuerpo (cualquier T,
cualquier N, M1).
Recurrente: cáncer recurrente es el cáncer que ha vuelto a aparecer después del
tratamiento. Si el cáncer regresa, se realizará otra serie de pruebas para obtener
información sobre el alcance de la recurrencia. Esas pruebas y exploraciones a menudo
son similares a aquellas que se realizan durante el diagnóstico original.
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