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REVISIONES

Rev Obstet Ginecol Venez 2017;77(3):212-224.

Obesidad, insulinorresistencia y preeclampsia


Drs. Jorly Mejia-Montilla1, Eduardo Reyna-Villasmil2.

RESUMEN

La prevalencia de la obesidad durante el embarazo está aumentando en forma exponencial. Alrededor del 15 - 20% de
las mujeres comienzan el embarazo con un índice de masa corporal que las definiría como obesas. Los embarazos en
mujeres obesas tienen un mayor riesgo de complicaciones como diabetes gestacional, trastornos hipertensivos, parto
pretérmino y cesárea. Existen pruebas convincentes que la obesidad aumenta tres veces el riesgo de preeclampsia
y en los países desarrollados es el principal riesgo atribuible para el trastorno. Las embarazadas obesas tienen
riesgo de sufrir hipertensión y preeclampsia por la reducción de vascularización y flujo sanguíneo placentario
mediado, por la insulinorresistencia. Adipocinas, hormonas metabólicas, perfil de citocinas e insulinorresistencia
tienen impacto directo sobre la función placentaria predisponiendo a la aparición de preeclampsia. En esta revisión
se exploran las pruebas de los fuertes vínculos entre la obesidad, la insulinorresistencia que esta produce, y su papel
en la preeclampsia.

Palabras clave: Preeclampsia, Obesidad, Insulinorresistencia.

SUMMARY

Prevalence of obesity during pregnancy is increasing exponentially. About 15-20% of women begin pregnancy
with a body mass index that would define them as obese. Pregnancies in obese women have an increased risk of
complications such as gestational diabetes, hypertensive disorders, preterm delivery and cesarean section. There
is convincing evidence that obesity increases three times the risk of preeclampsia and in developed countries is
the main risk attributable to the disorder. Obese pregnant women are at risk of hypertension and preeclampsia
due to reduced vascularity and placental blood flow mediate, in part, by insulin resistance. Adipokines, metabolic
hormones, cytokine profile, and insulin resistance have a direct impact on placental function, predisposing to the
appearance of preeclampsia. This review explores the evidence of strong links between obesity, insulin resistance
that this produces, and its role in preeclampsia.

Keywords: Preeclampsia, Obesity, Insulin resistance.

INTRODUCCIÓN asociados a la obesidad mórbida, se ha descrito aumento


en la frecuencia de otras complicaciones. De estas, la
La obesidad es una epidemia en los países desarrollados más estudiada es la preeclampsia (PE). En un estudio
que se extiende a los países en vías de desarrollo poblacional se encontró un aumento de 3 veces en el
(1, 2). La relación de la obesidad con el aumento riesgo de desarrollar PE asociada con la obesidad (3).
en la incidencia de diabetes tipo 2 y enfermedad
cardiovascular es bien conocida. No obstante, también La comprensión de los mecanismos por los cuales
tiene implicaciones importantes en las complicaciones la obesidad aumenta el riesgo de PE es importante
del embarazo. Además, de los problemas mecánicos debido a que es el principal riesgo atribuible,
presente en cerca de 30 % de los casos (3). Dado que
la cura de la obesidad, la pérdida de peso, no es una
1
Doctora en Medicina Clínica. Licenciada en Nutrición y Dietética. Catedra
de Dietoterapia. Facultad de Medicina. Universidad del Zulia. Maracaibo.
estrategia adecuada durante el embarazo y presenta
Estado Zulia. Venezuela. 2 Doctor en Medicina Clínica. Especialista en resultados variables en mujeres no embarazadas,
Ginecología y Obstetricia. Servicio de Obstetricia y Ginecología. Hospital identificar el impacto de la obesidad sobre el riesgo
Central “Dr. Urquinaona”. Maracaibo. Estado Zulia. Venezuela.
de PE podría ser muy útil.

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Esta revisión examina la relación entre la obesidad Mecanismos por los cuales la obesidad aumenta el
y el riesgo de PE. También evalúa los posibles riesgo de desarrollar preeclampsia.
mecanismos por los cuales la obesidad podría
contribuir a la fisiopatología del síndrome. La Distribución y acumulación de la grasa corporal total.
hipertensión inducida por el embarazo y las Al examinar la razón por la cual algunas mujeres obesas
enfermedades cardiovasculares tienen factores de desarrollan PE, es importante tener en cuenta que la
riesgo comunes, incluida la obesidad. Además, adiposidad parece ser el problema y que el IMC es un
estos trastornos comparten muchas características medidor imperfecto de la adiposidad. Las medidas de
fisiopatológicas, como disfunción endotelial, estrés composición corporal, incluyendo porcentaje de grasa
oxidativo y aumento de la actividad inflamatoria corporal, pueden probablemente identificar a las mujeres
(4). Por otra parte, la PE se asocia con un mayor obesas en riesgo de desarrollar PE con mayor precisión.
riesgo de enfermedad cardiovascular durante el Varias estrategias permiten determinar el porcentaje de
resto de la vida (5). Dado que la información sobre grasa corporal (11). Estos incluyen desplazamiento de
los mecanismos por los que la obesidad aumenta el agua - aire y medición de la impedancia bioeléctrica.
riesgo es limitada, con este trasfondo, se evalúan los Este último es el más práctico para grandes poblaciones.
elementos útiles que relacionan la obesidad con la Sin embargo, estas mediciones realmente determinan el
PE. agua corporal total, que está relacionada con la grasa
corporal total (12). Con todo, las relaciones entre el
Obesidad y preeclampsia agua corporal total y el porcentaje de grasa corporal
La obesidad aumenta el riesgo de todas las formas son diferentes en el embarazo y cambian a medida que
de PE. Por lo tanto, el riesgo de PE leve y severa (6) este avanza. Por lo tanto, las máquinas de impedancia
y la que ocurre en forma temprana y tardía (7) son bioeléctrica, con algoritmos basados en sujetos no
mayores en las mujeres con obesidad y sobrepeso. embarazados, proporcionan datos pocos significativos.
El hecho que la obesidad aumenta el riesgo se ha Afortunadamente, algoritmos específicos del embarazo
reportado en varias poblaciones de todo el mundo, lo ya están disponibles y son útiles para determinar el
que indica que no es un fenómeno limitado solo a las porcentaje de grasa corporal (12, 13).
sociedades occidentales (8). También es evidente que
esta relación no solo se limita a las mujeres obesas y También es evidente, a partir de la investigación en
con sobrepeso, por eso el aumento del índice de masa enfermedades cardiovasculares, que no es solo la grasa
corporal (IMC) en el rango normal también se asocia total, también la distribución de esta es importante. La
con un mayor riesgo de PE (3). Esto sugiere que la obesidad central, como marcador de la obesidad visceral,
masa grasa es importante y se apoya en hallazgos de presenta mayores riesgos que la obesidad periférica
que la pérdida de peso reduce el riesgo (9). (14). La grasa visceral es funcionalmente diferente a
la subcutánea. Produce más proteína C reactiva (PCR)
En un estudio poblacional, el riesgo de PE es 3 y citoquinas inflamatorias (15), menos leptina (16) y
veces mayor en las mujeres obesas lo que se traduce contribuye marcadamente al estrés oxidativo. Además,
en un riesgo atribuible del 30 % (3). A pesar del dado que la grasa visceral afecta directamente por el
aumento del riesgo, los valores de este aumento hígado, sus efectos sobre la función y respuesta hepática
de la obesidad solo permiten predecir alrededor de son mayores, aumentando la producción de lípidos,
10 % de la aparición de PE en mujeres obesas. A reactantes de fase aguda y citoquinas inflamatorias.
pesar de ser un factor de riesgo sustancial, 90 % Esto se refleja en el aumento de las concentraciones
de las mujeres obesas no desarrollan PE (10). La circulantes de la PCR, inhibidor del activador del
determinación de las diferencias entre las mujeres plasminógeno 1 y citoquinas inflamatorias en los
obesas que desarrollan PE y las que no lo hacen individuos con obesidad visceral (17).
podría proporcionar información valiosa.

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Otro debate abierto es la importancia de la acumulación obesos y delgados con IR equivalente, la diabetes
de grasa en la fisiopatología de la PE. Aunque en tipo 2 se desarrolla con más frecuencia en individuos
general las mujeres obesas ganan menos peso durante obesos, lo que indica que la obesidad aumenta la
el embarazo que las no obesas, la relación entre la frecuencia de patologías y complicaciones por efecto
acumulación de grasa y el síndrome no se ha investigado de la IR (17). Estudios animales han demostrado que
completamente. Varios estudios indican que existe la acumulación de grasa reduce la vasodilatación
incremento en la ganancia de peso en mujeres que dependiente del endotelio, en forma independiente
posteriormente desarrollan PE (18). De todas formas, a la IR, asociado con aumento del estrés oxidativo
el impacto de este aumento de peso está probablemente tisular / nitración de la tirosina vascular (24). De todos
relacionado tanto con la retención de líquidos (asociada modos, la IR es un elemento clave e importante para
con la PE) como con la acumulación de grasa. Por lo evaluar el riesgo, debido a que los individuos obesos no
tanto, lo ideal sería evaluar directamente la acumulación insulinorresistentes no presentaron aumento en el riesgo
de grasa corporal ya que aún no existen informes sobre cardiovascular o diabetes tipo 2. Es probable que exista
este aspecto. una relación similar entre obesidad y PE.

Cambios metabólicos asociados a la obesidad. Síndrome metabólico.


La obesidad se asocia con cambios metabólicos Fue descrito originalmente como obesidad,
marcados. El tejido adiposo no es un almacén de grasa hipertensión, IR, tolerancia alterada a la glucosa y
inerte, sino más bien un tejido hormonalmente activo, dislipidemia, aumentando el riesgo de enfermedad
que produce citoquinas, así como sustancias activas cardiovascular. Es posible que el término más
producidos en forma exclusiva por el tejido graso, las apropiado sea síndrome de IR, ya que la resistencia a
adipocinas (19). Estas sustancias refuerzan la asociación los efectos metabólicos de la insulina puede explicar
entre obesidad, inflamación, insulinorresistencia (IR), todas las alteraciones (25). La obesidad asociada al
síndrome metabólico (SM) y estrés oxidativo (17, 20). síndrome puede producir hipertensión por disminución
Aun cuando las concentraciones promedio de estas de óxido nítrico (ON), secundario al aumento de las
sustancias varían en las mujeres obesas, no se modifican concentraciones de dimetilarginina asimétrica y del
de manera similar en todas las embarazadas. Por estrés oxidativo, aumento del tono simpático y de la
ejemplo, la IR, una anomalía metabólica prominente expresión de angiotensinógeno en el tejido adiposo.
de la obesidad, está presente en solo dos tercios de las Las preeclámpticas presentan características del SM
mujeres obesas (21). Tal vez solo las obesas en valores y las mujeres con antecedentes de PE tienen más
anormales extremos son las que están en riesgo. probabilidades de desarrollarlo que aquellas con
antecedentes de embarazos normales previos (26).
Insulinorresistencia.
Es más común en las preeclámpticas (22) y puede La dislipidemia y la obesidad pueden ser relevantes.
encontrarse en mujeres con antecedentes de PE mucho La obesidad se asocia con elevación de las
después del parto (23). Está presente en dos tercios concentraciones de triglicéridos y ácidos grasos
de los individuos obesos y en alrededor de 7 % de los libres junto con disminución de las lipoproteínas de
sujetos delgados (21). Puede ser tentador considerar a alta densidad. Las concentraciones de lipoproteínas
la IR como el único cambio metabólico en la obesidad de baja densidad (LDL-C) están ligeramente
responsable de aumentar el riesgo de desarrollar PE. Sin aumentadas o normales y las partículas aterogénicas
embargo, esto no sucede con relación a las enfermedades LDL-C pequeñas-densas están elevadas (27). Los
cardiovasculares y la diabetes tipo 2 en presencia de adipocitos liberan grandes cantidades de ácidos
obesidad e IR. En los individuos resistentes a la insulina, grasos libres. El aumento de las concentraciones
existe mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, así plasmáticas de estos es especialmente relevante,
como la diabetes tipo 2. Esta relación es independiente debido a que pueden inducir estrés oxidativo y
de si el individuo es delgado u obeso. En sujetos contribuir directamente a la IR (28).

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Durante años, se propuso la hipótesis de la aterogénesis adipocito como agente de acción local (unido a la
causada por concentraciones anormales de lípidos, membrana) y como sustancia circulante secretada por
lo que acentuaba el estrés oxidativo, como principal los macrófagos en el tejido adiposo (20, 32). Puede
mecanismo de lesión vascular asociada al SM. Pero aumentar la IR, activar células endoteliales y generar
ahora, la atención se centra en la inflamación como factor estrés oxidativo. Está aumentado en la obesidad y puede
fundamental en el desarrollo de la enfermedad cardiaca contribuir a la IR. También está aumentado en la PE
coronaria (29). Es muy probable que la modificación (33), posiblemente a partir del tejido adiposo, ya que
oxidativa causada por las LDL-C pequeñas-densas las concentraciones de ARN mensajero en la placenta
sea un componente importante en la fisiopatología de no están aumentadas (34). Aunque es interesante
la lesión vascular, especialmente en la formación de como mecanismo por el cual la obesidad podría
la placa ateromatosa. Esta inflamación contribuiría al aumentar el riesgo de PE, otros estudios indican que
proceso por formación de especies reactivas del oxígeno. sus concentraciones son similares entre embarazadas
La PE presenta dislipidemia similar a la de la obesidad. obesas y no obesas (35).
Tal vez son las mujeres obesas con las concentraciones
de lípidos más alteradas la que están en mayor riesgo de Las concentraciones de interleucina 6 producida por el
desarrollar PE. tejido adiposo representan 30 % del total circulante. Las
concentraciones están elevadas en la obesidad (36) y la
Inflamación. PE (37). Se asocia con el desarrollo de enfermedades
cardiovasculares y mayor riesgo de IR (20). Es un
Es otra contribución importante de la obesidad a
estimulador importante de los reactantes de fase aguda,
la aparición de enfermedades cardiovasculares. El
con efectos sobre la función vascular y coagulación
tejido adiposo produce mediadores inflamatorios que
sanguínea. Se ha propuesto como mediador importante
pueden alterar la función endotelial. La mayoría de
de daño vascular inducido por la inflamación (38).
estos mediadores pueden ser producidos en forma más
marcada en el tejido adiposo de individuos obesos.
Por lo que, la producción no es más elevada debido Estrés oxidativo.
solamente a que existe más tejido, sino a diferencias Se ha propuesto que el origen del estrés oxidativo
propias del adipocito en la obesidad (17). es secundario al aumento de ácidos grasos libres e
inflamación (25). También se ha sugerido que la dieta
Los efectos de la inflamación en la aparición de las puede contribuir al estrés oxidativo. Los individuos
enfermedades cardiovasculares se producen por obesos tienen concentraciones sanguíneas más bajas de
aumento de estos marcadores inflamatorios. Varios de antioxidantes (39). Esto podría ser debido a la reducción
estos también se incrementan en la PE. La PCR es un del consumo de antioxidantes, pero también puede ser
reactivo de fase aguda que originalmente se consideró secundario al aumento del consumo de alimentos ricos
que solo se producía en el hígado. Estudios posteriores en especies reactivas de oxígeno. La ingesta de grandes
demostraron que también se produce en el tejido cantidades de grasas y/o carbohidratos se asocia con
adiposo. La PCR está más elevada en individuos obesos mayor generación de radicales libres por los leucocitos
y predice tanto las complicaciones cardiovasculares (25). Este patrón de alimentación es más frecuente en
como mortalidad por esta causa (17). También aumenta la obesidad y durante el embarazo en las mujeres que
en el embarazo temprano en mujeres que posteriormente desarrollan PE (40).
desarrollan PE (30). Diferentes estudios demuestran
que la PCR está más asociada con la aparición de PE Adipocinas.
en mujeres obesas que los lípidos y podría explicar
El tejido adiposo produce sustancias que afectan el
alrededor de un tercio de la relación entre el IMC y el
metabolismo. Dos de estas, leptina y adiponectina, se
riesgo de desarrollar el síndrome (31).
han relacionado con las enfermedades cardiovasculares
(41).
El factor de necrosis tumoral alfa se produce en el

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La leptina se descubrió como hormona supresora del reportan valores más elevados (51). Esta controversia
apetito que estaba ausente en ratones genéticamente aparente, aún debe ser resuelta.
obesos. Posteriormente fue reconocida por tener
capacidad de aumentar la lipólisis y la beta-oxidación Factores angiogénicos y antiangiogénicos.
(42). Las personas obesas son resistentes a la leptina.
Las concentraciones de tirosina-quinasa 1 similar a fms
Por lo tanto, la obesidad se asocia con aumento de sus
soluble (sFLT-1), que interviene en las concentraciones
concentraciones y se correlaciona con la IR. Además, es
plasmáticas del factor de crecimiento placentario
predictor de riesgo cardiovascular (43). Tiene funciones
(PIGF) y del factor de crecimiento endotelial vascular
similares a las citoquinas al activar las células endoteliales.
(VEGF), están aumentadas en las preeclámpticas hasta
Sus concentraciones se incrementan con la inflamación,
5 semanas antes de las manifestaciones clínicas (52). Se
se correlaciona con marcadores de inflamación y activa
ha propuesto que este receptor soluble es un antagonista
a los monocitos in vitro (17). También tiene acciones
de la acción de ambos factores (53). Otro antagonista
centrales al estimular el flujo simpático, por lo cual se
relevante, endoglina soluble, actúa como antagonista
ha propuesto que aumenta la presión arterial (44). La
del factor de crecimiento y transformante beta, está
placenta produce leptina con concentraciones de ARN
aumentado en las preeclámpticas y antes de la aparición
mensajero similares a las observadas en el tejido adiposo
clínica del síndrome. La obesidad se asocia con aumento
(45). Las concentraciones maternas, probablemente de
de los factores angiogénicos circulantes, incluyendo el
origen placentario, aumentan en la PE (23, 46). No
VEGF. Esto probablemente representa un aumento en
obstante, incluso en el final del embarazo, cuando las
la producción por el tejido adiposo, especialmente por
concentraciones son más elevadas, aún se correlacionan
el visceral (54).
con el IMC.
Debido a la alta concentración circulante de sFLT-
La adiponectina se produce en el tejido adiposo y
1 durante el embarazo, el VEGF está marcadamente
tiene un efecto sensibilizador a la insulina. Aumenta
disminuido en las embarazadas. En contraste, las
la oxidación de ácidos grasos libres y reduce las
concentraciones de PIGF son significativamente
concentraciones séricas de triglicéridos y glucosa,
menores en las embarazadas con sobrepeso y obesidad.
inhibe la adhesión de monocitos inducida por el factor
La explicación de esta observación no está clara y
de necrosis tumoral alfa y la expresión de las moléculas
no parece estar directamente relacionada con las
de adhesión celular. Los polimorfismos genéticos, que
diferencias en las concentraciones de sFLT-1, porque no
reducen las concentraciones circulantes, se asocian con
muestran variaciones significativas al momento en que
un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares (20,
la concentración de PIGF está disminuida.
47). La adiponectina disminuye con la obesidad, por lo
que se ha sugerido que tiene un efecto potencialmente
Factores del estilo de vida asociados con la obesidad.
aterogénico. Además, ciertas citoquinas pueden
disminuir sus concentraciones. Varios elementos del estilo de vida influyen en el riesgo
de enfermedad cardiovascular. La asociación de la dieta,
A pesar de que la IR ha sido asociada con la PE, existen trastornos del sueño y actividad física con la enfermedad
controversias sobre los valores de las concentraciones cardiovascular están bien establecidos. Existe escasa
circulantes de adiponectina. En la mayoría de los información disponible sobre la importancia de estos
estudios iniciales se reportaron concentraciones más factores en la PE. Se ha propuesto que el riesgo de
elevadas en preeclámpticas (48, 49). Posteriormente desarrollar PE de una mujer obesa también puede ser
se estableció que la adiponectina circula en varias afectado por estos factores.
formas y los más activos en la inducción de
sensibilidad a la insulina son los oligómeros de alto Dieta.
peso molecular. Existen informes que esta forma La mala nutrición es un contribuyente importante a las
se encuentra disminuidas en la PE (50), también se enfermedades cardiovasculares (55). Las dietas ricas

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en antioxidantes, frutas, verduras, vitaminas B, ácidos Los alimentos con alto contenido de azúcares refinados
grasos poliinsaturados omega-3, pescados, mariscos, pueden reemplazar a otros nutrientes de la dieta y tener
granos enteros y fibra dietética protegen contra la un papel independiente en el desarrollo de PE. De
enfermedad cardiaca coronaria. La ingesta excesiva de hecho, se ha reportado que las mujeres que consumían
grasas saturadas, ácidos grasos trans, harinas refinadas más de 25 % de la energía derivada de la sacarosa en
y dulces aumentan el riesgo (56). Después de décadas el segundo trimestre del embarazo, tenían casi 4 veces
de investigación en esta área, la dieta saludable es ahora más probabilidades de desarrollar PE comparado con
la piedra angular de la prevención de enfermedades aquellas con un consumo menor (40). Además, la
cardiovasculares. obesidad se asocia con el aumento de la ingesta de
bebidas endulzadas con fructosa (67). La fructosa
A pesar de las similitudes entre enfermedad no estimula la producción de insulina y se asocia con
cardiovascular y PE, pocos investigadores han menores concentraciones de leptina (68) y puede inducir
estudiado el papel de la dieta en la fisiopatología del la aparición de SM en animales (69). El aumento del
síndrome (57). Las vitaminas C, E y los carotenoides consumo en humanos se asocia con obesidad y SM (68).
son importantes antioxidantes fisiológicos. Se ha Toda ingesta de nutrientes que aumentan el riesgo de
propuesto que el consumo de cantidades menores a las enfermedades cardiovasculares o PE son más comunes
recomendadas de vitamina C, frutas y vegetales en el en la obesidad. Por lo tanto, el consumo de lípidos
año previo al embarazo aumentan la probabilidad de saturados y fructosa (como refrescos) es mayor (67).
desarrollar PE (58). Esto ha sido apoyado por estudios
posteriores, en los cuales las mujeres en el cuartil Igualmente, importantes son las deficiencias dietéticas.
más alto de concentraciones séricas de vitamina C, Los datos de adultos y niños sanos sugieren que las
presentaron una tasa de PE más baja comparado con las concentraciones de micronutrientes en sangre se
mujeres con menor concentración (59). Los estudios con asocian en forma negativa con el IMC y otras medidas
suplementación de vitaminas C y E presentan resultados de grasa corporal (39). En un estudio transversal en
contradictorios (59, 60). Estas inconsistencias entre sujetos sanos, las concentraciones plasmáticas de
los resultados de los estudios de suplementación con ácido ascórbico eran inversamente proporcionales a
los estudios dietéticos pueden deberse a diferencias la relación cintura / cadera (incluso después de ajustar
poblacionales, pero también pueden reflejar las el IMC), edad, uso de suplementos nutricionales,
diferencias entre ingesta de alimentos y suplementación tabaquismo y estado socioeconómico (70). Otro estudio
dietética. El folato revierte la disfunción endotelial en prospectivo de cohorte estableció que el IMC inicial
pacientes con algunas enfermedades crónicas (61, 62), podía predecir la disminución de las concentraciones
reduce el estrés oxidativo y restaura la actividad del ON séricas de carotenoides en sujetos no fumadores (71).
(63). Hasta el momento, estas asociaciones aún no han sido
probadas durante el embarazo. Es posible que estos
El pescado y los mariscos son la principal fuente de excesos y deficiencias dietéticas impulsen la potencial
ácidos grasos poliinsaturados (AGP) omega-3 en la relación entre obesidad y PE.
dieta. Las preeclámpticas tienen concentraciones más
bajas de AGP omega-3 en los glóbulos rojos (64), junto Actividad física.
con aumento de las concentraciones de ácidos grasos
La reducción de la actividad física es un aspecto
trans (65). Estudios observacionales de las dietas
reconocido y fundamental que contribuye a la
ricas en ingesta de AGP omega-3 durante el embarazo
epidemia de obesidad. Existen otras interacciones
también han producido resultados contradictorios (66).
importantes entre los diferentes elementos del estilo
La ingesta dietética de ácidos grasos trans o grasas
de vida. La asociación independiente y combinada de
saturadas no ha sido ampliamente estudiada en relación
la actividad física e IMC con marcador de enfermedad
con la PE.
cardiovascular se ha explorado en estudios específicos

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en mujeres e indican la interacción de estos factores disminución de la actividad física aumente en forma
con los componentes del riesgo cardiovascular (72, 73). significativa el riesgo de PE. Este es un objetivo
En un estudio sobre ejercicio y obesidad en mujeres, el importante en la consulta prenatal, por ello, tal vez,
sobrepeso y la obesidad se asociaron significativamente al modificar la actividad física en mujeres obesas se
con mayor riesgo de enfermedad cardiaca coronaria, reduciría el riesgo.
mientras que el aumento de los niveles de actividad física
se asoció con una reducción gradual del riesgo. Cuando Trastornos del sueño.
se realizó un análisis conjunto del IMC y actividad
La hipertensión arterial, enfermedad cardiaca
física, con mujeres con peso normal y físicamente
coronaria, enfermedades cerebrovasculares, arritmias
activas como grupo de referencia, los riesgos relativos
e insuficiencia cardiaca son más comunes en sujetos
de enfermedad cardiaca coronaria fueron mayores para
con alteraciones del sueño (77). La frecuencia de
las mujeres obesas y sedentarias. Hallazgos similares se
enfermedades cardiovasculares en mujeres aumenta con
han reportado cuando el análisis se centró en la relación
la disminución de la duración del sueño. En comparación
cintura-cadera y la actividad física.
con las mujeres que duermen 8 horas por noche, las
mujeres que duermen 5 horas por noche tienen casi el
Las similitudes entre la enfermedad cardiovascular
doble de riesgo de enfermedades cardiovasculares (78).
tardía - PE y el hecho de que el acondicionamiento físico
tenga efectos protectores sobre funciones fisiológicas
Los trastornos del sueño pueden contribuir a la
críticas, sugieren que, al igual que con las enfermedades
enfermedad cardiovascular de varias maneras. El
cardiovasculares, el ejercicio puede reducir el riesgo
efecto más directo y bien establecido es a través de la
de desarrollar PE. Los datos disponibles apoyan esta
hipoxia intermitente asociada con la apnea obstructiva
hipótesis. Incluso la actividad física ocupacional y
del sueño (79). Los individuos con esta condición
de tiempo libre al inicio del embarazo se asocia con
sufren obstrucción intermitente de las vías respiratorias
menor incidencia de PE, en comparación con mujeres
con hipoxemia secundaria durante el sueño. Esto se
menos activas (74). Un estudio en preeclámpticas
manifiesta a menudo como ronquidos. Los individuos
y embarazadas normotensas demostró que aquellas
con apnea obstructiva del sueño con IMC similar
que realizaron alguna actividad física regular durante
comparado con individuos sin este trastorno tienen
el embarazo temprano presentaron disminución de
mayor incidencia de aumento de la presión arterial
35 % en el riesgo de desarrollar PE comparado con las
diastólica y dislipidemia (80). La hipoxia intermitente
inactivas (75). Cuando se consideró el nivel de actividad,
se asocia con la oscilación del flujo simpático. En cierta
aquellas que realizaban actividades ligeras - moderadas
medida, el ciclo hipoxia - reoxigenación se asemeja al
con las que participaban en actividades vigorosas, se
síndrome de hipoxia - reperfusión y en respuesta a esto,
observó una disminución del riesgo de 54 %. Cuando se
se observa aumento de la producción de radicales libres
comparó el caminar rápido con no caminar en absoluto,
(81). De especial relevancia para la patogénesis de la
se observó reducción en el riesgo de PE del 30 % -
PE es la apnea del sueño que se asocia con evidencia
33 %. La actividad física recreativa realizada durante
bioquímica de la disfunción endotelial (82).
el año previo al embarazo, se asoció con reducciones
similares en el riesgo. Estos datos sugieren que la
No obstante, existe la posibilidad que los efectos del
actividad física regular, particularmente cuando se
sueño desordenado sean diferentes de la hipoxia
realiza durante el año previo al embarazo y durante el
intermitente. La disfunción del sueño es un factor de
embarazo temprano, se asocia con disminución en el
riesgo independiente para IR y SM (83). En forma
riesgo de desarrollar PE (76).
experimental, la IR se incrementa en los individuos
privados de sueño (84). La relación persiste luego
Es posible que la obesidad sea debida a la disminución
del ajuste por IMC y esta aumenta mientras el sueño
de la actividad física. Como con la enfermedad
es más disfuncional (85). También son relevantes
cardiovascular, la interacción entre la obesidad y la
las alteraciones autonómicas, inmunológicas y

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neuroendocrinas asociadas al sueño fragmentado (83). roncaban, comparados con solo 4 % de las mujeres
que no lo hicieron. Otra investigación, evaluó
La obesidad es el principal factor de riesgo para los preeclámpticas, embarazadas normales, con edad
trastornos respiratorios durante el sueño (86, 87). En gestacional similar, y mujeres no embarazadas
los adultos entre 30 y 69 años, 17 % tiene desórdenes normales, con monitorización nocturna del patrón
respiratorios. Se estima que 58 % de los individuos de sueño y oxigenación arterial. Las preeclámpticas
con trastornos del sueño son obesos (86). La relación presentaron duplicación del tiempo de limitación del
de SM con los trastornos del sueño sugiere una flujo inspiratorio comparado con las embarazadas
retroalimentación positiva (88). normales (91).

Muchos eventos en el embarazo normal afectan En resumen, la obesidad aumenta la frecuencia


negativamente el sueño. Entre 66 % y 94 % de las de los trastornos del sueño. Estos trastornos se
embarazadas describen cambios en el patrón de sueño. incrementan por los cambios propios del embarazo.
Estos cambios no están muy bien estudiados y es El embarazo aumenta el riesgo de apnea del sueño,
probable que exista una interacción compleja entre los la cual es más común en las preeclámpticas. Al igual
efectos de las hormonas reproductivas sobre el sistema que con las enfermedades cardiovasculares, existe
respiratorio, factores mecánicos relacionados con el una mayor frecuencia de trastornos del sueño en la
tamaño del feto en crecimiento y cambios fisiológicos PE. Es probable que los cambios fisiopatológicos
por modificaciones del volumen extracelular - edema secundarios a los trastornos del sueño contribuyan
(89). El origen de las alteraciones del sueño varía al desarrollo de la PE proporcionando un mecanismo
en cada trimestre. En el embarazo temprano se debe mediante el cual la obesidad puede contribuir con
principalmente al aumento de la frecuencia urinaria. este aumento en el riesgo.
Con el progreso del embarazo otros factores, como
dificultad en el uso de posturas habituales para CONCLUSIÓN
dormir y el reflujo gastroesofágico, pueden ser
importantes. Al final del embarazo la causa principal La evidencia demuestra que la obesidad aumenta el
parece ser la obstrucción de las vías aéreas. La riesgo de enfermedades cardiovasculares y PE. Se
apnea del sueño está presente en más del 50 % de las desconoce si la reducción de peso antes del embarazo
embarazadas, comparado con 3,2 % de los controles o la restricción del aumento de peso durante el
no embarazados. Esta es una forma de trastorno del embarazo podrían reducir el riesgo. De todas formas,
sueño especialmente relevante para el desarrollo los beneficios generales de la pérdida de peso en
de enfermedades cardiovasculares, al igual que de personas obesas justifican esta medida antes del
hipertensión y SM, dos de los elementos observados embarazo. Si estas modificaciones en la conducta
en la PE. reducen el riesgo de desarrollar PE se establecerá
con el paso del tiempo, pero es poco probable que se
La relación de los trastornos del sueño con las pruebe en ensayos clínicos controlados y aleatorios.
enfermedades cardiovasculares sugiere que la
interrupción del sueño también podría ser relevante Las similitudes entre enfermedades cardiovasculares
en la PE. Existe evidencia que apoya esta relación. y PE justifican considerar a todos estos mecanismos
Los ronquidos, que son comunes en el embarazo, como objetivos importantes de la investigación para
son aún más comunes en las preeclámpticas (90, comprender la fisiopatología. Es poco probable que
91). Los ronquidos se encontraron en 85 % de las estos factores actúen de manera independiente, sino
preeclámpticas y en 55 % de las embarazadas que probablemente interactúan entre ellos. Establecer
normales (90). En otro estudio en el que se comparó científicamente la relación de estos mecanismos con
la resultante obstétrica entre mujeres que roncaron la PE debe proporcionar elementos terapéuticos a
o no, la PE ocurrió en 7 % de las mujeres que futuro.

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