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UNIVERSIDAD RICARDO PALMA

Facultad de Psicología
Carrera de Psicología

SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA:


ABORTO INDUCIDO

CURSO:
Consejería psicológica
INTEGRANTES:
- Arnao Machaca, Lucía
- Gallo Toscano, Javier
DOCENTE:
Woolcott Saavedra, Doris

2018-II
SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA: ABORTO INDUCIDO
La salud sexual y reproductiva implica la capacidad de disfrutar de una vida
sexual satisfactoria y sin riesgos, y de procrear de igual forma, así como, la libertad para
decidir hacerlo o no hacerlo, cuándo y con qué frecuencia. Para comprenderla,
necesitamos conocer ciertos conceptos básicos como: sexualidad, sexo, identidad,
identidad sexual, género, identidad de género, orientación o diversidad sexual, estímulo
sexual, respuesta sexual, disfunción sexual, relación de pareja, entre otros.
La sexualidad es una construcción social simbólica, hecha a partir de una realidad propia
de las personas: seres sexuados en una sociedad determinada. Como tal, es una dimensión
constitutiva del ser humano: biológica, psicológica, cultural, histórica y ética, que
comprende sus aspectos emocionales, comportamentales, cognitivos y comunicativos,
tanto para su desarrollo en el plano individual como en el social.
En cuanto a las teorías con respecto a la sexualidad se encuentran:
TEORÍA PSICOANALÍTICA: La sexualidad se entiende como una fuerza primigenia
que motiva todos los actos humanos, que está enraizada en lo biológico y que es
vivenciada como una permanente búsqueda de placer.
TEORÍA DEL APRENDIZAJE: Se ha utilizado para explicar la excitación sexual, la cual
opera en muchas ocasiones bajo estímulos condicionados tanto en hombres como
mujeres, y por esta teoría se ha tratado de entender trastornos como el fetichismo.
TEORÍA DEL APRENDIZAJE SOCIAL: Reconoce la participación de los procesos de
imitación e identificación, en el desarrollo de la identidad de género, y el desarrollo de
competencias adecuadas.
TEORÍA DEL INTERCAMBIO SOCIAL: Se utiliza el concepto de reforzamiento para
explicar la estabilidad y el cambio en las relaciones de las personas. La teoría supone que
tenemos libertad de elección y que con frecuencia nos enfrentamos a elecciones entre
acciones alternativas
TEORÍA DE LOS ESQUEMAS DE GÉNERO: la psicóloga Sandra Bem (1981), ha
propuesto esta teoría para explicar el desarrollo de los roles de género y los pensamientos
cotidianos de las personas. Se basa en los esquemas, que son estructuras mentales
elaboradas por el individuo sobre hechos o temas en particular.
La salud sexual y reproductiva es un derecho, el cual es explayado en los derechos
sexuales y reproductivos son los derechos humanos, internacionalmente reconocidos, que
garantizan el desarrollo libre, sano, seguro y satisfactorio de la vida sexual, reproductiva
y de la convivencia sexual. Las estadísticas en cuanto a salud sexual y reproductiva en
Perú, no son las más alentadoras.
Estos derechos se basan en la dignidad humana y la libertad de las personas para decidir
acerca del ejercicio de su sexualidad y reproducción.
En cuanto al aborto inducido, o interrupción voluntaria del embarazo (IVE) sabemos que
es la finalización del embarazo mediante la eliminación de un embrión o feto antes de que
pueda sobrevivir fuera del útero. El cual puede llevarse a cabo por métodos como la
succión, el uso de fármacos, inducción al parto, entre otros; depende del tiempo de
embarazo. Entre las causas se encuentran la FALTA DE EDUCACION SEXUAL, la falla
del método anticonceptivo, como la coacción o violencia sexual, ser joven y/o soltera,
tener demasiados hijos, relaciones inestables o abandono, salud física y mental de la
mujer, malformaciones del feto, problemas económicos, etc. La decisión de abortar no
depende del acceso que exista legalmente en el país, estadísticamente son muchos los
abortos clandestinos, los cuales se realizan en situaciones inseguras e insalubres.
CONSEJERIA
El asesoramiento puede ayudar u obstaculizar a las personas a tomar buenas decisiones.
Los consejeros aclaran y brindan información precisa en un entorno no emocional y
permiten que una persona piense y haga preguntas, la asesoría puede ayudar en el proceso
de toma de decisiones.
La consejería puede darse antes del aborto como después, cuando aparecen una serie de
sentimientos, entre otros ansiedad, miedo, vergüenza, culpa, etc. La decisión de
interrumpir un embarazo es una decisión difícil que una mujer tendrá que tomar. Se
necesita la capacidad de pensar con claridad mientras se sopesan todas las posibles
consecuencias. La combinación de habilidades cognitivas y estabilidad emocional a
menudo se llama competencia para tomar una decisión.
Las mujeres que están pensando en elegir un aborto para interrumpir un embarazo no
deseado deben usar sus habilidades cognitivas y prestar atención a sus sentimientos o
emociones que también se desarrollan en diferentes momentos de sus vidas.
Una de las áreas que parece ser importante para volver a regular las emociones después
de un período de disfunción es el entrenamiento de la atención plena. Aquí se enseña a la
persona a prestar atención específica a lo que sucede en el momento instantáneo en lugar
de centrarse en eventos pasados o preocuparse por el futuro
Cuando los clientes acuden por primera vez para recibir tratamiento, informan lo que
creen que es la razón por la que buscan tratamiento psicológico. Esto se llama el problema
de presentación. El terapeuta escucha el problema de presentación del cliente y obtiene
un historial del problema tal como lo ve el cliente.
Si una mujer informa que ha tenido algún problema (ya sea por tristeza, ansiedad, culpa
u otros sentimientos) después de un procedimiento de aborto, el consejero debe explorar
primero la toma de decisiones de la mujer que acompañó a un aborto. Esta exploración
implica comprender cómo se tomó la decisión de abortar. En otras palabras, ¿la mujer
pensó en su decisión durante 1 segundo, 1 minuto, 1 hora o 1 mes? ¿Repasó las ventajas
y desventajas de cada opción? ¿Cómo llegó exactamente esta mujer a la decisión sobre
el aborto?
Explorar los sentimientos de la mujer es una parte crítica del tratamiento. Es importante
no asumir que estos sentimientos solo están relacionados con el aborto. Permita que la
mujer exprese las emociones que está sintiendo actualmente, que pueden incluir permitir
que la mujer llore o se aflija si lo necesita. Mientras explora los sentimientos de la mujer,
el consejero también debe ayudar a la mujer a experimentar sus sentimientos positivos.
Estos pueden ser sentimientos positivos con respecto a su decisión de aborto u otras
fuentes de sentimientos positivos en su vida.
Los sentimientos sobre el aborto a menudo son influenciados por la familia de una mujer,
sus creencias religiosas o ambos. A menudo las mujeres quedan embarazadas y se
enfrentan a una decisión que nunca pensaron que tendrían que tomar. Su decisión está
influenciada por sus valores, creencias y una serie de prejuicios (tanto familiares como
religiosas y sociales).
Es extremadamente importante desarrollar una red de apoyo con la que la mujer se sienta
cómoda, con quien pueda hablar y en quien pueda confiar. En un ambiente grupal, los
otros miembros del grupo pueden servir como un maravilloso sistema de apoyo.
En consejería debe ayudarse a la mujer a aceptar y finalmente dejar de lado sus emociones
negativas para que pueda seguir adelante y sentirse mejor consigo misma. A veces esto
se puede hacer simplemente ayudando a la mujer a darse permiso para dejar ir y sentirse
mejor. Si la mujer todavía se está culpando a sí misma de alguna manera, entonces el
consejero tendrá que ayudar a la mujer a perdonarse. Restaurar el optimismo en la propia
eficacia puede ser parte del empoderamiento
Las mujeres que toman una decisión sobre un embarazo tienen que luchar con emociones
complejas que también afectan a las personas cercanas a ellas. Algunas personas tendrán
la suerte de tener amigos y parientes que pueden escuchar y compartir algunos de estos
sentimientos conflictivos y al mismo tiempo contener sus propios sentimientos e ideas.
Algunas mujeres tendrán sus dificultades agravadas por las reacciones de otras personas.
Los hombres pueden sentirse embarazadas emocionalmente, pero nunca pueden
experimentar el embarazo, el aborto o el parto de primera mano. Este hecho a menudo se
refuerza cuando acompañan a las mujeres para asesoramiento o consultas y el personal
no parece interesado en ellas. Cuando se excluye a los hombres de la sesión de consejería,
esto naturalmente aumenta la sensación de ser descartado. No existe un monopolio sobre
el daño y, con frecuencia, tanto hombres como mujeres se acusan mutuamente de ser
egoístas y "no estar allí" el uno para el otro.
El consejero debe:
Estar entrenado en consejería. Madurez y conocimientos académicos relacionados al
tema. Los clientes jóvenes no pueden explicar sus propios códigos de ética fácilmente
actuando bajo un complicado sistema de derechos, prohibiciones, la moral y la ética.
Tener la capacidad de enfrentarse a estrés emocional Ser resilente, empático e integral.
Se debe demostrará empatía y respeto. Aceptar incondicionalmente. El sentimiento de ser
comprendido por parte del cliente es un factor decisivo en la relación cliente – consejero,
incluso más que el método o técnica usada. Debe permitir la exploración de sentimientos
sin reaccionar o estando a la defensiva haciendo juicios o suposiciones. Si el cliente siente
que el consejero no se coloca en su lugar podría inhibirse de tomar decisiones o añadir
tensión a la sesión incrementando sentimientos de culpa o rechazo. Ser flexible de
pensamiento. No debe añadir estigma, aislamiento o ansiedad de lo que la mujer pueda
sentir. El consejero no debe asumir lo que la mujer quiere o no quiere, siente o piensa. El
entrenamiento debe ser preferentemente para aquellas personas que muestran alto nivel
de percepción y sensibilidad y que encuentren este tipo de trabajo gratificante.

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