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Derecho Comparado

El derecho comparado es de suma importancia, por cuanto es útil para la doctrina,


para la jurisprudencia así como para los legisladores, y para los particulares, que
necesitan puntos de apoyo a efecto de resolver conflictos legales. Se debe acudir
al Derecho Comparado para el estudio de la institución de la reparación o
resarcimiento a que tienen derecho las víctimas de delitos, denominada daños y
perjuicios

Al respecto del Derecho Comparado, para tratar el tema de los daños causados a
las víctimas y su forma de repararlos, refiere Carlos Beristaín 1 que debe no solo
establecerse una comparación entre los viejos y nuevos modelos, debido a la
tendencia favorable al ofendido y protección a la víctima, sino también porque es
enriquecedor darse cuenta de cómo se ha fortalecido la protección a la víctima de
manera generalizada en los distintos países, encontrándose frente a un
renacimiento de la víctima. A nivel internacional, la protección a la víctima en el
procedimiento penal se encuentra frecuentemente vinculada al intento de otorgarle
un mayor espacio al resarcimiento del daño ocasionado por el delito

Argentina

En Argentina se encuentra vigente desde 1991, la Ley 23.984, Código Procesal


Penal2, siendo la forma en que está estructurado, muy similar al Codigo Procesal
Penal guatemalteco; básicamente contiene las mismas instituciones en el orden
lógico. Está comprendido de Cinco Libros, así: Libro I. que contiene las
Disposiciones generales: Las garantías fundamentales; las acciones que nacen
del delito; el juez, las partes y los actos procesales; Libro II. Instrucción: Actos
iniciales, medios de prueba, situación del imputado, sobreseimiento, excepciones,
clausura, instrucción sumarial; Libro III. Juicios: juicio común, juicios específicos;
Libro IV: Recursos y Libro V. Ejecución.

1
Beristain, Carlos Martín; “Diálogos sobre la Reparación”; San José, Costa Rica; Instituto Interamericano de
Derechos Humanos; Año 2008
2
Ley 23.984 del Senado y Cámara de Diputados del Congreso Argentino, Código Procesal Penal; año 1991
Dentro del libro I, está regulada la figura de la víctima de los artículo 79 al 81 y
está estipulado en similares condiciones a la del Código Procesal Penal
guatemalteco en el artículo 117, en donde se le conceden derechos y beneficios
sobre el proceso instruido en contra del imputado, por parte del MP y de los
órganos judiciales, tales como recibir un trato digno y respetuoso; a que se le
sufraguen los gastos ocasionados por conceptos de traslado; a que se le proteja
su integridad física y moral, así como la de su familia; a ser informado sobre los
resultados de las audiencias que se diligencien como que las personas mayores,
la mujer embarazada o enfermo grave, en caso se lleve a cabo una diligencia, se
debe realizar en el lugar de su residencia, para facilitarle el cumplir con ellas; así
también que sus derechos deben ser reconocidos por las autoridades, desde la
primera citación a la víctima.

Con relación a los derechos del agraviado, se le reconocen los derechos como
querellante particular, artículo 82 del citado ordenamiento procesal penal, el cual
se cita a continuación:

“Toda persona con capacidad civil particularmente ofendida por un delito de acción
pública tendrá derecho a constituirse en parte querellante y como tal impulsar el
proceso, proporcionar elementos de convicción, argumentar sobre ellos y recurrir
con los alcances que en este Código se establezcan. Cuando se trate de un
incapaz, actuará por él su representante legal. Cuando se trate de un delito cuyo
resultado sea la muerte del ofendido, podrán ejercer este derecho el cónyuge
supérstite, sus padres, sus hijos o su último representante legal. Si el querellante
particular se constituyera a la vez en actor civil, podrá así hacerlo en un solo acto,
observando los requisitos para ambos institutos”.3

Al igual que en Guatemala, al Código procesal penal argentino también se le han


realizado incorporaciones referidas a la constitución de querellante, como la
realizada a través de la reforma del Artículo incorporado 1° de la Ley N° 26.550 4
en la cual la pretensión de constituirse en parte querellante se formulará por

3
Código Procesal Penal de la República de Argentina; Libro I.
4
Ley No. 26.550; reforma al Código Procesal Penal; Argentina, Argentina; art. 1° de fecha 27/11/2009
escrito, en forma personal o por mandatario especial que agregará el poder, y
debe ser con auxilio profesional.

Rige también en Argentina, el mismo plazo para constituirse como querellante


adhesivo contenido en el artículo 118 del Código Procesal Penal guatemalteco,
que es antes que el Ministerio Público presente su acusación, es decir dentro de la
fase preparatoria o de investigación.

Este ordenamiento procesal, tiene bastantes beneficios para las víctimas, no solos
los derechos ya detallados, sino que la supuesta víctima, desde que se dicte la
orden de aprehensión del imputado, puede solicitar embargo de bienes del autor,
con el fin de asegurar la pretensión resarcitoria, contenido en el artículo 411 del
CPP; siendo importante que incluso hasta previo a iniciarse el debate, puede
llegarse a una conciliación con relación a la pretensión reparadora, que redundará
en beneficio de la víctima, desde el aspecto del resarcimiento a los daños
ocasionados.

Colombia

En Colombia el responsable de los daños y perjuicios dentro de un proceso, se


hace responsable a resarcirlos, y lo hace antes que el juicio finalice, esto le reduce
la posible condena, lo cual es un beneficio para él, lo cual no acontece dentro del
ordenamiento procesal penal guatemalteco, que lo único que podría equipararse
es el criterio de oportunidad o el procedimiento abreviado, pero dependiendo del
delito, en los que pueda aplicarse estas salidas alternas, puesto que si la pena de
prisión aplicable al delito es menor a los cinco años, puede convenirse con la
anuencia de la víctima, salidas alternas al proceso común. 5

Para Nelson Saray Botero6 en el Código de procedimiento penal de Colombia, Ley


906 del Congreso de la República, se refiere a los daños y perjuicios causados a
las víctimas en el artículo 92, de ese cuerpo legal, en donde la víctima directa
5
Quintero de Prieto, Beatriz. Teoría Básica de la Indemnización; Colombia; Editorial Grupo Leyer; Año 2004.

6
Saray Botero, Nelson, “La Reparación integral de perjuicios en Colombia, consideraciones legales y
jurisprudenciales; Colombia. 2010
acreditará sumariamente su condición de tal, la naturaleza del daño recibido y la
cuantía de su pretensión. También se refiere al embargo y secuestro de bienes
suficientes para garantizar el pago de los perjuicios que se hubieran ocasionado.

El Código Procedimiento Penal de Colombia, se encuentra de la forma siguiente:


primeramente tiene consignadas las garantías procesales constitucionales, pero
no forman ningún libro, sino corresponde al inicio del código. En adelante ya se
divide del Libro I al Libro VII, tiene un total de 533 artículos.

En el Libro I: están contenidos los preceptos que se aplican en el Código Procesal


guatemalteco, por cuanto inicia con las disposiciones generales, jurisdicción y
competencia; competencia para el juzgamiento de funcionarios de todas las
jerarquías; impedimentos y recusaciones; la acción penal; el comiso; medidas
cautelares, las actuaciones de los jueces; actuaciones de las partes; principios de
los actos procesales; las providencias judiciales en Guatemala, son las
resoluciones judiciales; los deberes de la Fiscalía General de la Nación, es decir el
MP para Guatemala, que contrario a nuestro ordenamiento procesal penal, tiene
facultades de investigación de manera autónoma es decir sin la presencia del juez
de garantías, porque es hasta la fase de acusación, que el proceso se judicializa;
notificaciones; recursos; el de apelación, de casación y de revisión; es de
observar, que las impugnaciones aludidas no están tan clasificadas y
desarrolladas como en el Código Procesal Guatemalteco, que tiene mayor
especialización al respecto. En las actuaciones también rigen los principios de
oralidad, publicidad y contradicción.

Libro II. Contiene la Policía Judicial, a cargo de la indagación y la investigación a


cargo de la Fiscalía General de la República, y las peritaciones técnico científicas;
y el criterio de oportunidad.

Libro III. Determina la forma de llevar a cabo el Juicio: que comprende la etapa
preparatoria, la etapa del debate que comprende la presentación del caso, prueba,
alegatos de las partes y Decisión o sentido del fallo.
Libro IV. Ejecución de la sentencia y ejecución de las medidas de seguridad y
rehabilitación

Libro V. Se refiere a la Cooperación Internacional y trata sobre la Corte Penal


Internacional, la INTERPOL y el tratamiento a nivel internacional sobre la
Extradición.

Este libro es novedoso, porque en Guatemala esas cooperaciones se tratan en


documentos independientes y no dentro del texto de la normativa procesal penal.
Al realizar un análisis a la forma en que está contemplada la legislación
guatemalteca procesal penal, y como se encuentran distribuidas todas las
instituciones que rigen el proceso penal, tiene una secuencia más ordenada y
delimitada, así también lo relativo a los medios de impugnación. El Código de
Procesamiento Penal colombiano contempla de manera muy diversa sus
actuaciones.

Se establece, que tanto el ordenamiento procesal penal colombiano como el


guatemalteco, tienen similares estructuras y que la víctima cuenta con derechos y
garantías a través de las figuras del agraviado y del querellante por adhesión, para
poder tener acceso a solicitar la reparación a que tiene derecho.

Costa Rica

Este país centroamericano se rige por la Ley número 7594 7 que contiene el
Código Procesal Penal.

Con relación a la víctima, Costa Rica también incluye dentro de su ley, todo lo
referente a brindar derechos y garantías a las personas agraviadas, así como el
Código Procesal Penal guatemalteco en sus artículos 5, 116 y 117; sin embargo
Costa Rica, aún contempla la figura de la acción civil y del actor civil, para solicitar
el daño emergente por la comisión del delito, contrario sensu en Guatemala, que
quedó derogado todo el Capítulo y títulos que se referían a la acción privada, y al

7
Código Procesal Penal de Costa Rica, Ley número 7594 del 1 de enero de 1998;
actor civil; tal derogatoria sucedió a través del Decreto 7-2011 del Congreso de la
República.8

La similitud existente entre ambas legislaciones, la guatemalteca con la de Costa


Rica, es que el procedimiento penal, la acción civil resarcitoria solo podrá ser
ejercida mientras esté pendiente la persecución penal. Un hecho preponderante
de asimilar al CPP de Guatemala, es que en la legislación costarricense aunque
se dicte una sentencia absolutoria, ello no impide que el tribunal se pronuncie
sobre la acción civil, lo cual no sucede en este país, ya que cuando se dicta una
sentencia absolutoria, el tribunal se manifiesta en el sentido que por la naturaleza
del fallo, no se pronuncia con relación a la reparación hacia la víctima.

La legislación procesal penal de Costa Rica, se refiere a los derechos y garantías


de las víctimas como las personas ofendidas directamente por el delito, al
cónyuge, a los ascendientes y descendientes; también a las personas jurídicas
que se vean afectadas por la comisión de un delito.

Las mujeres víctimas de abuso sexual o de violencia y las víctimas de trata de


personas y de hechos violentos, tendrán derecho a contar con medidas de
asistencia y apoyo, por parte del personal designado para tal efecto. Tanto en el
Poder Judicial como en el Ministerio de Seguridad y otras instituciones, a fin de
reducir la revictimización con motivo de su intervención en el proceso y facilitar su
participación en las distintas diligencias judiciales, como pericias o audiencias. 9

Las víctimas niños y niñas, tendrán derecho a que se considere su interés superior
a la hora de practicar cualquier diligencia o pericia y, especialmente, a la hora de
recibir su testimonio; para ello, el MP, el juez o el tribunal de juicio que conozca de
la causa, adoptarán las medidas necesarias para que se reduzcan los trámites y
se reciba su testimonio, en las condiciones especiales que se requieran. El
ejercicio de la acción civil procederá aun cuando no esté individualizado el

8
Reformas al Decreto 51-92 del Congreso de la República, Código procesal penal guatemalteco, Decreto 7-
2011 del Congreso de la República de fecha 28/04/11
9
Beristain, Carlos Martín; “Diálogos sobre la Reparación”; San José, Costa Rica; Instituto Interamericano de
Derechos Humanos; Año 2008.
imputado. Está regulado en esta ley procesal costarricense, que la víctima tiene
derechos de información y trato y derecho de protección y asistencia.

BIBLIOGRAFIA
DOCTRINA
Beristain, Carlos Martín. Diálogos sobre la Reparación; San José, Costa Rica;
Instituto Interamericano de Derechos Humanos, 2008

Saray Botero, Nelson. La Reparación integral de perjuicios en Colombia,


consideraciones legales y jurisprudenciales. Colombia 2010

Quintero de Prieto, Beatriz. Teoría Básica de la Indemnización. Colombia; Editorial


Grupo Leyer; Año 2004.

NORMATIVA
Código Procesal Penal de la República de Argentina.

Código Procesal Penal de Costa Rica, Ley número 7594 del 1 de enero de 1998

Decreto 51-92 del Congreso de la República, Código Procesal Penal

Decreto 18-2010 del Congreso de la República, reformas al Código Procesal


Penal

Decreto 7-2011 del Congreso de la República, reformas al Código Procesal Penal

Ley 906 del Congreso de la República de Colombia

Ley 23.984 del Senado y Cámara de Diputados del Congreso Argentino, Código
Procesal Penal; año 1991

Ley No. 26.550; reforma al Código Procesal Penal; Argentina, Argentina

Reformas al Decreto 51-92 del Congreso de la República, Código procesal penal


guatemalteco, Decreto 7-2011 del Congreso de la República de fecha 28/04/11

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