Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
than fourteen extant Bible Translations belong to the period between 1200
and 1500».
(En comparación con las extensas literaturas en francés antiguo e italia-
no, la cantidad de materiales disponibles en español antiguo es exigua. Sin
embargo, las traducciones vemáculas de la Biblia constituyen una notable
excepción. Sobrevien no menos de catorce traducciones que pueden datarse
en el período comprendido entre 1200 y 1500).
Pese a ello, la Iglesia se mantuvo, por cuestiones doctrinales, fiel a la len-
gua sagrada.
Los protestantes esparioles hicieron, desde luego, meritorios esfuerzos
como el de Casiodoro Reina , autor de la popularmente llamada Biblia del
Oso (1569 Ed. 1987) , que desemperió un papel marginal en Esparia. Su influ-
jo léxico y estilistico se deja sentir en la primera edición ecuménica de la
Biblia en español (Santa Biblia 1992). Es muy peculiar, por ejemplo el uso
retiterado de «día de reposo» en vez de «sábado», sentido explicado una y
otra vez en notas a pie de página.
Las traducciones espariolas de la Biblia, en ediciones de divulgación
amplia, son, consiguientemente, un fenómeno bastante reciente y el conoci-
miento profundo de este texto no forma par-te, en lineas generales, de la for-
mación de los españoles, influidos más bien, hasta hace bien poco (en térmi-
nos históricos), por la doctrina encapsulada de los catecismos. Este hecho lo
han descrito, con sensibilidad y humor, Miret Magdalena y Javier Sádaba
(1998) en su prólogo a la reedición de los catecismos de Ripalda y Astete, que
van seguidos de un Catecismo Socialista ariadido, tal vez, para equilibrar la
sátira.
Frente a este poco poblado territorio, el mundo angloparlante ofrece una
profusa colección de traducciones bíblicas que han servido no solo para la
instrucción de los fieles, sino que han contribuido de manera preeminente al
desarrollo de la teoría y práctica de la traducción. No es posible aquí repasar
la densa história de la traducción bíblica en lengua inglesa, que por otra parte
cuenta con revisiones asequibles como la de Bnice (1979).
Los traductores han buscado, ante todo, la autenticidad de un testimonio
religioso. Asi lo reflejan los grandes maestros del siglo XVI Tyndale y
Coverdale que, siguiendo el impulso de Lutero aun sin asumir toda su doc-
trina, sientan las bases para esa situación de via media de la que la Iglesia
Anglicana todavía se precia.
Las traducciones bíblicas han estado presididas, en general, por el princi-
pio de la pertinencia, de modo que sus enseñanzas de fe y moral afecten a las
conductas de sus lectores-oyentes, como debió hacerlo el texto primitivo para
sus destinatarios originales. Como indican Nida y Traber (1982:27) :
1229
CARMEN OLIVARES RIVERA
« (...) the renderings must be sufficiently clear that one can understand
not merely what they must have meant to people in ancient times , but also
how they can be applied in the present-day context». ((...) las versiones deben
estar lo suficientemente claras como para que se pueda entender no solo lo
que significaron en tiempos antiguos sino también cómo pueden aplicarse en
el contexto actual).
Esta actualización o acercamento a los lectores tiene que compaginarse
ciertamente con la literalidad o fidelidad a los originales, necesitada, por otra
parte, de copiosas notas aclaratorias. Segŭn pone de relieve E. A. Gutt al
hablar de la New English Bible (Gutt 1991:60):
«Since the 1960s there has been a strong trend in translation theory and
practice to pay special attention to the target audience (...) this concern for
the impact of translation on the receptor language audience has probably
found its fullest development in circles concerned with the translators of the
Bible, though it is not limited to this enterprise». (Desde los arios 60 ha exis-
tido en la teoria y la práctica de la traducción una fuerte tendencia a prestar
atención especial a los destinatarios (...) esta preocupación por la influencia
de la traducción en los hablantes de la lengua receptora ha alcanzado quizá
su máximo desarrollo en los circulos de traductores de de la Biblia, aunque
no se limita a esta tarea.)
También en la traducción biblica espariola contemporánea prevalece esta
tendencia actualizadora. En las autorizadas palabras de Alonso Shóckel y
Zurro (1977:394) «(...) hay que actualizar en la propia lengua el acto de comu-
nicación realizado por medio del lenguaje original».
Como resumen de estas actitudes frente a la traducción resultan ŭtiles las
formulaciones de Nida, conocido especialista en la traducción biblica. El pro-
pone dos grandes modelos (Nida 1964:166): traducción de equivalencia for-
mal, orientada hacia la fuente y traducción de equivalencia dinámica , orien-
tada hacia el lector.
Como ejemplo del primer tipo menciona a la King James Bible (1611) y
del segundo a la New English Bible (1970). Ambas versiones se comentarán
en breve. El propio Nida es lógicamente partidario del segundo enfoque
como vimos en una cita previa (Nida y Traber 1982). Gentzler (1993:45) reco-
ge muy expresivamente este espiritu:
«Because of the theoretical importance the original message receives in
any translation of the Bible, the fundamental governing principle was corres-
pondingly predetermined: the communication across cultures of the spirit of
the original message is primary throughout. The particular form in which the
original message appears is superficial as long as the meaning of the messa-
ge is clear». (A causa de la importancia teórica del mensaje original en cual-
quier traducción de la Biblia, el principio rector fundamental estaba consi-
guientemente predeterminado. La comunicación intercultural del espiritu
1230
RAICES MEDIEVALES DE LAS BIBLIAS INGLESAS
del mensaje original tiene una primacía absoluta. La forma concreta en que
aparece el mensaje se considera superficial siempre que el sentido del men-
saje quede claro).
Es de destacar que estas adaptaciones contextuales han conducido a
curiosos extremos como el célebre «Reno de Dios» en lugar de «Cordero» y
que han trascendido a los ritos litŭrgicos e. g. el uso de licor de arroz o roda-
jas de plátano en la comunión. Por encima de un primer efecto chocante, no
es trivial preguntarse si Jesŭs no hubiera partido plátano en lugar de pan de
haber nacido en un país tropical. De hecho, el clamor por una liturgia autoc-
tona está hoy muy vivo en un momento en que el catolicismo languidece en
Europa y florece en Africa e Hispanoamérica. La inculturación es, sin duda,
un magno problema de la catolicidad contemporánea. Juán Antonio Gracia
(1965:310) comenta al referirse a la liturgia tras el Vaticano II: «La Iglesia no
tiene como misión latinizar a los pueblos sino cristianizarlos. La catolicidad
de la Iglesia es su aptitud para adaptarse a todas las mentalidades, a todas las
culturas, a todos los pueblos y no la imposición de una liturgia ŭnica.» Con
el paso del tiempo hemos ido viendo las dificultades que tan sensato y ambi-
cioso programa entraria.
Retomando el hilo de las versiones bíblicas, me ceriiré a tres ejemplos que
revelan el esfuerzo lingiiístico y la versatilidad intelectual de los traductores.
Cualquier historia de la literatura inglesa y de la propia lengua inglesa se
hace eco del gran acontecimiento que supuso la publicación en 1611 de la
monumental King James Bible (Authorised Version), antes mencionada. Su
redacción fue encomendada a un panel de traductores cuya cuidada prosa
llegó a constituir, en el mundo angloparlante , la auténtica Palabra de Dios.
La King James tuvo que competir con la Biblia de Ginebra (1560), adoptada
en Escocia con prefacio de John Knox, que representa una visión fuertemen-
te protestante, concretamente calvinista, expresada en sus copiosas notas. La
Authorised Version ha sido elogiada como el más notable monumento de la
prosa inglesa. Los revisores de 1881, leemos en el Prefacio a la Revised
Standard Version (Ed. 1973 : IV) «expressed admiration for its simplicity, its
dignity, its power, its happy turns of expression (...) the music of its cadences
and the felicities of its rhythm». (expresaron admiración por su simplicidad,
su dignidad, su poder, sus felices giros (...) la mŭsica de sus cadencias y los
aciertos de su ritmo).
Es decir, que se trata de un texto de gran belleza literaria que ha contri-
buido a la forja de la prosa inglesa moderna .Con todo, la aparición de nue-
vas fuentes manuscritas, el mejor conocimiento del hebreo , arameo y griego
así como el progreso de los estudios bíblicos, aconsejaron la publicación de
una nueva versión, la Revised Standard Version, 1881 en Inglaterra y 1901 en
los Estados Unidos. De este texto ha habido sucesivas reediciones con reto-
ques y enmiendas, convirtiéndose en 1973, con la adición de los Apócrifos (o
Deuterocanónicos) en la primera versión ecuménica en lengua inglesa. No
1231
CARMEN OLIVARES RIVERA
deja de ser escandaloso lo tardíamente que los cristianos han llegado al con-
senso de un texto com ŭ n, aunque no todos los Libros tengan para las distin-
tas denominaciones el mismo grado de canonicidad (tema que rebasa el
ámbito de este trabajo). La ediciones de la Revised Standard están en con-
junto «orientadas a la fuente», en términos de Nida, aunque las más recien-
tes hayan suscitado las protestas consabidas de lectores conservadores ape-
gados al lenguaje más tradicional.
Entiendo que merece una disgresión el acontecimiento que supuso la
publicación, en 1895 y tomando como base la Revised Standard, de la
Women's Bible compuesta por la pionera del feminismo Elizabeth Cady
Stanton y un comité de revisión enteramente femenino. La Women's Bible,
poco conocida excepto en círculos de teología feminista, se propone revisar
aquellos pasajes y capítulos que se refieren directamente a las mujeres o
aquellos en que las mujeres resultan conspicuas precisamente por su ausen-
cia. En la introducción, Cady Stanton (1895:7) manifiesta algo que podría ser
suscrito , aun •hoy, por cualquier sensibilidad moderadamente feminista:
«The Bible teaches that woman brought sin and death into the world, that
she precipitated the fall of the race, that she was arraigned before the judge-
ment seat of Heaven, tried, condemned and sentenced.
Marriage for her was to be a condition of bondage, maternity a period of
suffering and anguish, and in silence and subjection, she was to play the role
of a dependent on man's bounty for all her natural wants, and for all the
information she might desire on the vital questions of the hour, she was com-
manded to ask her husband at home. Here is Bible position of woman briefly
summed up».
(La Biblia enseria que la mujer trajo al mundo el pecado y la muerte, que
precipitó la caida de la raza y que fue llevada ante el estrado del tribunal de
los Cielos, juzgada, condenada y sentenciada.
El matrimonio iba a ser para ella un estado de servidumbre, la materni-
dad un período de sufrimiento y angustia y, en silencio y sujeción, tendría que
asumir un papel de dependencia de la liberalidad del hombre en lo tocante a
sus necesidades materiales y, respecto a toda la información que pudiera
desear sobre los asuntos vitales del momento, se le mandaba preguntar a su
marido en casa. Esta es la situación de la mujer en la Biblia, brevemente resu-
mida).
El ejemplo quizá más representativo de versión «orientada al lector» es el
de la New English Bible (1970) llevada a cabo también, como la King James,
por un panel de especialistas e ilustres eruditos. Este texto rompe con la tra-
dición venerable de la presentación en versiculos y acomete un proceso de
modernización gramatical y léxica. Los propios traductores, al final del pró-
logo al Antiguo Testamento describen su proceso de composición con gran
1232
RAICES MEDIEVALES DE LAS BIBLIAS INGLESAS
REFERENCIAS
Generales
Alonso Shóckel, L.A. y E. Zurro (1977) La traducción bíblica: lingŭística y
estilística. Madrid. Ed. Cristiandad.
Anglo Saxon Dictionary (1980) Supplement. Oxford Univ. Press
Anglo Saxon Dictionary (1983). Oxford Univ. Press.
Brook, G.L. (1955) An Introduction to Old English. Manchester Univ.
Press.
Bruce, F.F. (1961) The English Bible, a History of Translations. London,
Lutherworth Press.
Bruce, F. F.(1979) History of the Bible in English. Guildford and London,
Lutherford Press.
Clemente Camicero, J. (1826) Nuevo ejercicio cotidiano. Con las oraciones
que dice el Sacerdote en la Misa. Madrid. Imprenta E. Aguado.
Comprehensive Old English Dictionary, A (1982) New York & London,
Univ. Press of America.
Daly, M. (1995 (1973)) Beyond God the Father. Toward a Philosophy of
Women's Liberation London, The Woman's Press Ltd.
Dictionary of Slang (1984) Ed. por Eric Partridge London, Routledge (Sz
Paul.
1237
CARMEN OLIVARES RIVERA
Biblias españolas
Biblia de Jerusalén (1975) Bilbao, Desclee de Brouwer.
Biblia del Oso, La (1569) Ed. José M. González Ruíz 1987. Madrid,
Alfaguara.
Biblia Romanceada I. I. 8. Siglo XIII. Ed. por M.G. Littlefield 1983.
Madison.
Nueva Biblia Española (1975) Madrid, Cristiandad.
Nuevo Testamento (1963) Estella, Ed. Verbo Divino.
Nuevo Testamento Trilingŭe (1977) Ed. crítica de J. M. Bover y J.
O'Callahan. Madrid B.A.C.
1238
RAiCES MEDIEVALES DE LAS BD3LIAS INGLESAS
Biblias inglesas
Christian Community Bible (1990) Manila, Divine Word Publications.
Holy Bible (1957) St. Joseph New Catholic Edition. New York Catholic
Book Publishing C°.
Holy Bible of Wycliffe (1380-84). Ed. J. Forshall & F. Madden 1850. Oxford
Univ. Press.
King James Bible (1611) Authorised Version. New York , New York Bible
Society. Impresión sin fecha.
New English Bible, The (1970) Oxford and Cambridge Univ. Presses.
Penguin Ed. 1974
New Testament and Psalms, The (1995) An Inclusive Version. New York/
Oxford , Oxford Univ. Press.
Oxford Annotated Bible, The (1962) New York,Oxford Univ. Press.
Revised English Bible, The (1989) Oxford and Cambridge Univ. Presses.
Revised Standard Version, The (1973) Common Bible, New York/ Glasgow,
Collins.
APÉNDICE
Inglés
West Saxon Gospels (finales S.X) myltestrum
Wyclif Bible (1380-84) — hooris
King James Bible (1611) harlots
Oxford Annotated Bible (1962) — harlots
New English Bible (1970) his women
Revised Standard Version (Common Bible) (1973) -- harlots
Christian Community Bible (1990) — loose women
Inclusive Bible (1996) — prostitutes
Es de destacar el uso en las dos lengua de las palabras más incisivas en las
versiones más antiguas, ya que el Nuevo Testamento del Siglo XIII emplea
putas. También llama la atención en versiones muy modemas de la suaviza-
ción del térrnino hasta apartarlo virtualmente del original. Así leemos en la
New English Bible his women (sus mujeres, un franco eufemismo), en la
Christian Community Bible loose women (mujeres disolutas) y en la Nueva
Biblia Espariola malas mujeres. El Profesor Mateos, responsable del Nuevo
Testamento de esta Biblia, me ha manifestado (comunicación personal) que
él había considerado malas mujeres como virtual sinónimo de prostitutas, si
bien le había parecido más adecuado para lectura p ŭblica. Es motivo de refle-
xión el que la maldad de la mujer, tal como refleja la exquisita sensibilidad
ling-ŭística del Profesor Mateos, se asocie prototípicamente a lo sexual.
El examen atento incluso de una sola palabra bíblica pone de relieve el
delicado equilibrio del traductor ante un texto que es, a la vez, algo así como
una propiedad pŭblica y que también se usa en la práctica devocional más
intima.
1241