Se denomina enroque a un movimiento defensivo que se desarrolla en una
partida de ajedrez cuando la torre y el rey del mismo bando cambian su posición de forma simultánea. Se trata de la única jugada que permite mover dos piezas (torre y rey) a la vez.
Para desarrollar el enroque es
necesario que el rey y la torre no hayan sido movidos con anterioridad; que el rey no se encuentre en jaque; que los escaques (casilleros) que están entre las dos piezas estén desocupados; y que ninguno de los escaques por los cuales el rey pasará y se quedará se encuentre bajo ataque. Existen dos clases de enroque. El enroque corto se lleva a cabo con la torre ubicada más cerca del rey, mientras que el enroque largo se concreta con la torre más alejada del rey. Es importante tener en cuenta que, a diferencia de lo que ocurre con el rey, la torre seleccionada sí puede estar bajo ataque. El rey, por otra parte, pudo haberse encontrado en jaque en otro momento precedente. El enroque puede realizarse en cualquier momento del juegoaunque, por las reglas mencionadas, no hay posibilidad de concretarlo antes del cuarto movimiento (ya que primero se deben quitar el alfil y el caballo del trayecto, algo que además requiere el desplazamiento de un peón). Es importante señalar que el ajedrez es uno de los juegos más populares de la historia, y que se considera extremadamente difícil de dominar. Esto parece contradictorio con la aparente sencillez de sus reglas: cualquier persona puede aprenderlas con un poco de paciencia y dedicación, pero sólo unos pocos pueden convertirse en grandes jugadores. Una de las razones de tal dificultad reside en la necesidad de armar una estrategia, algo que, por su parte, exige una gran dosis de paciencia y atención. Para conseguir vencer a un buen jugador de ajedrez necesitamos pensar bien cada una de nuestras jugadas, evaluando con antelación todas las alternativas que se nos ocurran para evitar errores fatales. Antes de dar un paso, debemos imaginar que haría nuestro contrincante en respuesta, e incluso qué posibilidades nos daría su potencial jugada, hasta llegar al límite de nuestro intelecto. El enroque no es un movimientocomplejo en sí mismo: como bien se expresa en los párrafos anteriores, tiene una serie de reglas que nos impiden ejecutarlo en cualquier momento, pero no se trata de una jugada reservada a los genios del ajedrez. Sin embargo, como casi todas las otras, de nada sirve forzarla o usarla de forma sistemática y predecible, ya que no nos asegura la victoria. Precisamente, lo peor que podemos hacer durante una partida de ajedrez es exponer nuestra estrategia mediante movimientos predecibles. Claro que conseguir un estilo aparentemente espontáneo y que se adapte a las diferentes situaciones creadas por los contrincantes no es fácil, en especial a causa de la rigidez de las reglas del propio juego, que dota de una serie muy limitada de posibilidades a los jugadores. Las convenciones establecen que el enroque se debe usar lo antes posible, dentro de los límites de las reglas, pero esto también puede derivar en que las jugadas se vuelvan predecibles; por eso, lo ideal es sorprender al contrincante con jugadas originales, que lo despisten y le impidan saber cuándo o si lo usaremos. En el lenguaje coloquial, por otro lado, la idea de enroque refiere a un intercambio de posiciones. Si el director técnico de un equipo de fútbol decide, sin reemplazar jugadores, ubicar a un delantero como mediocampista, haciendo a su vez que un mediocampista pase a jugar como delantero, puede decirse que ha realizado un enroque.
Existen dos clases de enroque: el
enroque corto (que se simboliza con 0-0 en las anotaciones de las partidas) y el enroque largo (que se ). En el enroque corto la torre se sitúa en la casilla del alfil de rey, y en el largo en el escaque de la dama. Por tanto, el enroque corto es el que se realiza en el "flanco de rey" y el enroque largo es el que se realiza en el "flanco de dama". El enroque sólo se puede hacer si se dan todas las condiciones siguientes: Que no se haya movido el rey ninguna vez (si el rey se ha sacado del escaque de origen y ha vuelto, tampoco se puede enrocar). Que la torre en cuestión no haya realizado aún ningún movimiento (si se ha movido y luego vuelve al escaque de origen, ya no se puede enrocar). Que no haya ninguna pieza entre el rey y la torre, ya sea propia o contraria. Que en el momento de hacer el enroque no este en jaque y que ni el cuadro al que se mueve el rey al final del enroque, ni los cuadros por los que ha de pasar el rey, estén atacados por piezas contrarias. Observación: hace falta recalcar que sí es posible realizar el enroque si la torre está amenazada por una pieza adversaria o si la torre tiene que pasar por un escaque amenazado por una pieza contraria, siempre y cuando dicho escaque no sea una de aquéllas por las que ha de pasar también el rey durante el enroque. Esto es importante durante el enroque largo o enroque del flanco de dama (0-0-0). El enroque es una jugada muy frecuente. Esto se debe a que el rey es muy vulnerable a ataques enemigos si permanece en el centro, al realizar el enroque, el jugador lo protege tras la línea de peones. Además, el movimiento centra la torre enrocada, lo que establece una relación directa entre ambas torres (en caso de no haber piezas). Normalmente se utiliza el enroque corto debido a que deja al rey más cerca del borde del tablero, más resguardado. Ambos enroques son por lo general realizados al principio de la partida. Sin embargo, no suele ser conveniente cuando el juego está llegando a su final, porque en los finales el rey debe dirigirse hacia el centro y ganarle la posición al rey adversario, de lo contrario el oponente llevaría una pequeña ventaja de espacio. Con el enroque al final es claro que el rey adversario tiene el centro y, por ende, lo puede llevar fácilmente a la victoria.
Es importante tener en cuenta especialmente en términos de partidas oficiales,
para realizar el movimiento del enroque, debe moverse primero al rey y luego a la torre utilizando la misma mano, con la que además luego debe pulsarse el reloj. De realizar primero el movimiento de la torre, el rival puede reclamar que su adversario al tocar primero la pieza de la torre, debe realizar una jugada con la torre y no puede hacer el enroque.