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La Divina Presencia.
“Estamos tan llenos de problemas que jamás escuchamos la melodía divina.
Si pudiéramos ver….si pudiéramos comprender. Si tan solo realizáramos la
presencia de Todo, que es lo que no pudiéramos hacer.”
- Ernest Holmes.
La fuente divina de toda la creación existe en cada onda y partícula del cosmos.
Esta irresistible energía es el latido de la vida de donde nacen todas las cosas, lo que
incluye todo éxito. Como tal, esa presencia necesita convertirse en una parte real y
viable de tu vida. Si desestimas esta increíble fuerza, tus sueños pueden morir de
hambre espiritual. Pero si miras a lo Divino como un proveedor de vida y co-creador de
tu existencia, forjarás tus energías con ilimitado poder y crearás una conciencia de paz
y tranquilidad que impregnará toda tu entera existencia.
Esto no lo debes ver como una simple tarea idealistica, si no como una
experiencia de corazón, un proceso donde pides y recibes todos los días la influencia
amorosa de Dios. La inherente dignidad personal en la vida humana proviene del origen
del alma, y revela la realidad natural de nuestra verdad eterna. Esta conexión
transciende todos los problemas, carencia, y preocupaciones. Trae un sentido mas
amplio de paz y constancia, un sentido que te trae siempre de regreso a tu fuente y
solución.
Para llegar a este lugar de paz, tienes que definirte primero como espíritu. En esta
definición, tu valor no se basa en lo externo, si no en tu legado divino. Tú eres santo, lo
mismo que tu vida. Si quieres caer rechaza tu sagrada identidad, la cual es la fuente
real de tu éxito personal. Tienes que ver tu valor y el valor de tu vida eterna,
finalmente, dejando ir el juicio y la auto aceptación condicional, porque esto niega
consistentemente la santidad innata de tu ser humano. La viviente presencia de la
divinidad dentro de ti, es tu máxima fuente de valor, y cuando acoges esta verdad, el
mundo te abrasará con sus bendiciones.
• Tienes que abrir tu corazón para conectarte con tu legado Divino, la fuente de
todo lo que recibes. Después de todo, la alegría del éxito, amor, y gratificación real no
puede fluir libremente hacia ti si no pueden pasar a través de ti. Una vez más, se
necesita un cambio de energía. Para acercarse a lo Divino se necesita alejarse del odio
ya sea hacia ti mismo o hacia alguien más. Una conexión abierta requiere que cambies
consistentemente tus intenciones y hagas nuevas escogencias cada día. Para abrirte
hacia Dios, deja ir el conflicto, acoge la paz, y siempre camina en dirección del amor.
El Divino Corazón
Siempre tengo una lista de oraciones al frente de mi diario, donde pongo los
nombres de las personas o situaciones que pueden necesitar cura o soluciones de
alguna manera. Todos los días hablo con Dios acerca de esos nombres, cada mañana y
cada noche, dedico cierto tiempo enviando intenciones de amor a todas estas
situaciones. Me enfoco en mis propias metas, pero también incluyo mas temas
globales, como ayuda para los desamparados, cura para los enfermos, y pacificas
resoluciones para las hostilidades.
También agrego una invocación para que una asistencia de amor sea enviada a
todos aquellos que no tienen a nadie que intercedan por ellos.
Cualquier cosa que sea por la cual ores, tus palabras y pensamientos no tienen
que ser formales o creativos, simplemente tienen que venir del corazón. Permítete abrir
los canales de comunicación cuando necesites curar o liberar, pide por lo que quieres, y
agradece por lo que consigues. Oraciones de apreciación y agradecimiento son susurros
de amor que regresas a la fuente de todos los dones maravillosos. Expresa esa