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ATAQUES DE PÁNICO

Para leer los ataques de pánico, recomendamos la lectura de “Las Bases


Teóricas de la Terapia Cognitiva”

LOS ATAQUES DE PANICO

Elaborado por la doctora Luzmaya Colina y la licenciada Sophia


Behrens, con la colaboración de la doctora Sonia Siso.
Inspirado en la lectura de Coping with Depression, de A. Beck y R.
Greenberg y The causes of Ansiety and Panic Attacks, de R. Rapee, M.
Craske y D. Barlow.

En la Depresión la emoción básica es la tristeza, en los Trastornos


por Ansiedad es el miedo.
El miedo es una emoción que se presenta de forma natural en el ser
humano y en los animales cuando evaluamos una situación como
amenazante o peligrosa. Si pensamos que algo malo nos va a suceder y
es una amenaza real, por ejemplo un asaltante que nos amenaza, un
terremoto etc., se nos produce el miedo. Pero en los Trastornos por
Ansiedad (Ansiedad Generalizada, Ataques de Pánico y Fobias) vamos a
sentir miedo por situaciones que el sentido común nos dice que no hay
razones para temer pues son producto de cogniciones.

Las preocupaciones en los Ataques de Pánico están referidas al área


de la salud, y están referidas al bienestar físico y mental. Las
preocupaciones en esta área se relacionan con la anticipación de
peligro que hace la persona respecto a la a) salud física: "me va a
dar un ataque cardíaco y no voy a encontrar la ayuda necesaria", "me
voy a asfixiar", "me voy a morir"; y b) al control psíquico: "voy a
perder el control", “me voy a volver loco y a cometer disparates”,"voy
a matar a alguien".

Respuesta fisiológica ante el miedo


Tanto en el humano como en los animales, cuando percibimos un estimulo
que lo evaluamos como amenazante, se producen en nuestro organismo
cambios importantes que tienen la finalidad de "prepararnos para la
acción”. Supongamos que vamos por una selva y nos sale al encuentro
un tigre; inmediatamente evaluamos la situación como amenazante. El
cerebro envía mensajes al sistema nervioso autónomo, cuyas dos ramas,
el sistema nervioso simpático y el sistema nervioso parasimpático,
están destinados a controlar los niveles de energía y a preparar el
cuerpo para la acción.
El sistema simpático es el que prepara el organismo para la defensa
ante el peligro. Su acción es protectora y los cambios fisiológicos
que provoca no son, por sí mismos, peligrosos para la salud.
Por su parte, cuando desaparece la amenaza, el parasimpático es el
sistema restaurador que devuelve al organismo su estado normal.
El sistema simpático actúa mediante dos sustancias llamadas adrenalina
y noradrenalina; el sistema parasimpático actúa mediante la acción de
la acetilcolina.

Si observamos a un gato frente a un perro, vemos que sus pupilas están


dilatadas, el pelo se le eriza, si le tocáramos el pecho nos damos
cuenta de que su corazón palpita aceleradamente y la respiración se
hace entrecortada, tal vez el gato tiembla. Una vez que el gato deja
de ver al perro, porque sale corriendo o por que el perro desaparece,
se normaliza todo. Como dijimos es un sistema de defensa que prepara
a las personas y a los animales para la acción y aparte de que es
sumamente desagradable, no involucra daño físico.
Acción del sistema simpático
El corazón aumenta el ritmo de los latidos (taquicardia) para bombear
más sangre de lo habitual mediante la fuerza y ritmo de sus
contracciones. Este mayor flujo de sangre llega a los músculos para
preparar al individuo para la acción motora. La piel se enfría y luce
pálida y las mucosas se secan (se siente resequedad en la boca) porque
hay en ellas menor cantidad de flujo sanguíneo debido a que hay
vasoconstricción, esto trae como consecuencia que si se producen
heridas, sangraremos menos.
Efectos respiratorios: Los bronquios se dilatan y la respiración se
hace más rápida y entrecortada para oxigenar mejor la sangre.
Efectos en el tracto digestivo: Disminución de los movimientos
intestinales de manera que si hay heridas hay menos posibilidad de
hemorragias. .
Efectos en el tracto urinario: Contracción del esfínter de la vejiga,
lo cual impide el sangramiento y su vaciamiento.
Otros efectos: La pupila se dilata para aumentar el campo visual.
Puede haber piloroerección (carne de gallina) y sudoración. La
sudoración dificulta a los depredadores a agarrarnos.
Otros síntomas que pueden presentarse son mareos y sentimientos de
irrealidad, por disminución del flujo sanguíneo en el cerebro. El
sentimiento de irrealidad es atribuido erróneamente a la idea de
volverse loco o a perder el conocimiento.

Una vez que desaparece la amenaza:


Acción del sistema parasimpático
Sistema cardiovascular: El corazón bombea menos sangre porque
disminuye la fuerza y el ritmo de las contracciones. Se produce
vasodilatación y aumenta el flujo sanguíneo en mucosas y piel, por lo
que desaparece la palidez y la resequedad en la boca.
Sistema respiratorio: Los bronquios se contraen porque ya el organismo
no necesita gran cantidad de oxígeno y la respiración se normaliza.
Efectos en el tracto digestivo: Los movimientos del tracto digestivo
aumentan, por lo que puede haber náuseas, vómitos, cólicos y
diarreas.
Tracto urinario: Se relaja el esfínter de la vejiga y provoca ganas
inminentes de orinar.
Otros efectos: Contracción de la pupila.

Los cambios producidos por el sistema simpático son transitorios, dado


que tanto la adrenalina como la noradrenalina son destruidas en el
organismo. Por otra parte, la acción del sistema sistema parasimpático
devuelve el organismo a la normalidad, sin dejar secuela.
Cada persona tiene una forma individual de reaccionar al miedo. En
algunas, los síntomas cardiovasculares son más manifiestos; en otras,
pueden ser los síntomas respiratorios, otras a volverse loco y así por
el estilo.

La respuesta conductual varía de acuerdo con la intensidad del miedo,


la cual depender de la relación que hagamos entre la proporción de
amenaza inherente a la situación, por una parte, y nuestros recursos
para defendernos de ella, por la otra. El miedo es menos intenso si
el que amenaza es un gato que si se tratara de un tigre. Si el miedo
no es muy intenso y pensamos que podemos actuar, nos defenderemos; si
es más intenso, tenderemos a huir de la situación y, si es muy
intenso (pánico o terror), entonces tenderemos a paralizarnos.

ATAQUES DE PANICO
Si después de haber sentido algún malestar físico o psíquico, has
presentado una súbita aparición de miedo intenso o pánico, porque has
pensado que te vas a morir repentinamente por alguna causa, como por
ejemplo de un ataque cardíaco, de un paro respiratorio, o que vas a
estar expuesto a un sufrimiento o dolor insoportable o bien que te vas
a volver loco y a cometer locuras, es probable que estés sufriendo un
ataque de pánico. Las cogniciones pueden ser “Me voy a morir y nadie
me va a socorrer” o “Me voy a volver loco y voy a cometer locuras”

Los síntomas más comúnmente experimentados durante un ataque de pánico


son: Sensación de ahogo, palpitaciones, dolor o sensación de desagrado
en el pecho, mareo, vértigo, sentimiento de irrealidad (como si mi
cabeza no fuera mía), cosquilleo en los miembros, escalofríos,
sudoración, sensación de desmayo, temblores, etc.

El mecanismo de retroalimentación es un uno de los factores


fundamentales en la persistencia y en aumento de los ataques de pánico
y, como ya señalamos, consiste en que la persona presenta uno o más
síntomas fisiológicos, focaliza la atención en el síntoma y lo
magnifica, piensa que esto es indicativo de que va a morir de un
ataque del corazón y no va a encontrar ayuda, por ejemplo, o puede
pensar que va a perder el control, volverse loco y cometer
disparates. Con este tipo de pensamientos la persona entra en pánico.
En nuestra observación clínica hemos encontrado que el ataque de
pánico esta precedido de cogniciones amenazantes que el paciente
suele no recordar.

¿QUE HACER?

Si estas cosas te están sucediendo, especialmente si tienes los


síntomas descritos en los Ataques de Pánico, lo más conveniente es que
consultes a un psiquiatra o psicólogo. Si haz consultado a
especialistas (internista, cardiólogo, neumonólogo u otro de acuerdo a
las circunstancias) y te dicen que lo que tienes es nervioso o te dice
que puede deberse a un Ataque de Pánico, él te recomendará consultar
con un psiquiatra o un psicólogo.

Debes tratar en lo posible de decatastrofizar esos síntomas: NO


FOCALIZAR TU ATENCIÓN EN LO QUE ESTÁS SINTIENDO, ya que estos
síntomas no representan peligro físico alguno, sino que son naturales
cuando se siente miedo o ansiedad, piensa que sólo se deben a los
síntomas fisiológicos ante el miedo.
Debes tener presente que el miedo por sí mismo no hace daño, es cierto
que es muy desagradable, pero no te causará ningún daño físico. Lo
peor que hay que hacer con el miedo, es tenerle miedo. Recuerda que
las personas que han sufrido accidentes en los que han sentido pánico
y en aquellas que se han visto expuestas a miedos intensos y
prolongados, como en las guerras, lo único que puede haberles quedado
es el efecto psicológico, esto sólo si tienen predisposición a
trastornos por ansiedad o a otros trastornos mentales. Los Ataques de
Pánico deben ser tratados pues producen mucho sufrimiento y
disminución en las funciones normales de quien lo padece.

Cuando sientas miedo trata en lo posible de no huir de la situación,


siente el miedo y recuerda estas líneas, en la medida en que te quedes
en la situación, tu miedo disminuir a la vez que te "inoculas" contra
él.
Si "tolerar" el miedo te resulta difícil, trata de distraerte viendo
con atención las cosas que están a tu alrededor, haciendo una llamada
telefónica a un amigo, conversando sobre algo que no tenga que ver con
tu miedo, etc. De esta manera, vas a disminuir considerablemente tu
ansiedad o tu miedo, porque se rompe el mecanismo de retroalimentación
que señalamos anteriormente.
Una vez que hayas aprendido a no centrarte en lo que sientes y hayas
disminuido el miedo, trata de encontrar la idea amenazante que pasó
por tu mente antes de que se produjera la reacción de ansiedad o
miedo, o si hubo una situación específica que la produjera (una
llamada telefónica, oír una ambulancia, una conversación, etc.). Para
esto puedes hacer un repaso de lo que ocurrió horas antes, puedes
ayudarte representándote mentalmente todas las áreas de tu dominio y
dándote cuenta de cuál o cuales de ellas crees que están amenazadas
(relación de pareja, hijos, amistades, vecinos, trabajo, prestigio,
propiedades, economía, salud, etc.). También puede ocurrir que
estuvieses recordando algo desagradable del pasado y pensaste que
pudiera volverte a ocurrir.
Al principio es necesario que hagas mucha introspección para que te
des cuenta de tus cogniciones amenazantes.
Las personas que presentan ansiedad y sobre todo las que sufren de
ataques de pánico tienen dificultad en darse cuenta de sus
cogniciones, porque tienden a recordar sólo la situación y el
malestar.

Situación Pensamiento Afecto


Siente palpitaciones Tengo un ataque Pánico
cardíaco y no voy a
encontrar ayuda

Ejemplo:
Luis relata que en dos oportunidades sintió palpitaciones e
inmediatamente pensó que se trataba de un infarto y que iba a morir.
La idea de muerte inminente le produjo pánico. Luis relató que
momentos antes de uno de los ataques él se encontraba en un club con
su padre. Mientras su padre iba a las oficinas del club, Luis caminó
alrededor de la piscina y se dirigió hacia el salón de juegos para
encontrarse con algunos amigos. Al abrir la puerta del salón sintió
las palpitaciones y entró en pánico. No recordaba ninguna cognición
amenazante, ni haber sentido miedo antes de las palpitaciones.

Sucedió esto:

Situación Pensamiento o Afecto.


cognición
Entro a la sala de “no lo recuerda” Pánico
juegos y siento
palpitaciones

Con técnicas cognitivas, Luis recordó que en el momento de abrir la


puerta sintió una corriente de aire. Al preguntársele que significaban
para él las palpitaciones, dijo que significaban un ataque cardíaco.

Lo que sucedió fue esto:

Situación Pensamiento o Afecto


cognición
Entro a la sala de Las palpitaciones son Pánico.
juegos y siento indicadores de un
palpitaciones. ataque cardíaco.
Como ya señalamos, en nuestra observación clínica hemos encontrado, a
través de técnicas cognitivas, que previo al ataque de pánico las
personas tienen cogniciones amenazantes que están estrechamente
asociadas con la aparición del miedo y sus respectivas respuestas
fisiológicas. La madre de Luis era muy ansiosa y siempre le prevenía
acerca de los peligros de las corrientes de aires, le decía que las
corrientes de aire eran muy peligrosas y que si se exponía a ellas
podía enfermar gravemente. Luis había sufrido de una enfermedad y
delante de él los padres se culpabilizaban unos a otros.

Lo que realmente le sucedió a Luis fue esto:

Situación Pensamientos o Afecto


cogniciones
Entro a la sala de Siento palpitaciones. Pánico.
juegos y siento En la terapia:
palpitaciones. Recuerdo lo que mi
madre me decía acerca
de las corrientes de
aire.

Una vez que el paciente decatastrofice sus síntomas fisiológicos y


pueda tolerar el miedo, debe reconocer las cogniciones amenazantes que
le produjeron los primeros síntomas pregúntate conocida la cognición
amenazante, que evidencias tienes para pensar así y cual es la
probabilidad real de que, lo que estas pensando, suceda.

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