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Las Fallas geológicas son estructuras muy comunes en la corteza terrestre, en Venezuela existen varias de ellas

formando complejos sistemas, sobresaliendo en importancia las fallas que constituyen el contacto entre la placa de
Sur América y la placa del Caribe.
Las fallas de Boconó, San Sebastían, El Pilar y Oca - Ancón, conforman la zona de mayor actividad
(desplazamiento) en la interacción de las placas en nuestro país convirtiéndose así en los rasgos neotectónicos mas
importantes.
En la actualidad aun no existe un consenso preciso para definir el límite exacto entre una placa y otra, pudiéndose
establecer el norte de Venezuela, incluyendo toda la cuenca del Lago de Maracaibo, en una zona de transición entre
la placa Caribe y Suramérica.
Algunos autores indican que a partir de estas fallas se puede establecer el limite de las placas, infiriéndose que el
territorio esta dividido sobre una y otra, ejemplo si consideramos esta teoría, a partir de los Llanos nos
encontramos definitivamente sobre la placa Suramericana y en la parte norte de este contacto correspondería a la
placa del Caribe.
Este conjunto de fracturas comparten su clasificación o tipo, calificándolas como fallas predominantemente de
transcurrencia (rumbo deslizantes) de tipo dextral, caracterizada por una tectónica extensiva y el desarrollo de
estructuras de tracción.
Desde otro punto de vista como en cualquier parte de la corteza terrestre, hay fallas principales y de menor rango,
siendo mas estudiadas, aquellas cuya interacción es importante con los hidrocarburos o el hombre. Sin embargo
para no extender mucho el tema, solo se citare la presencia de la falla de Valera que alcanza unos 220 a 240 Km
de extensión y la falla de Mene Grande de 25 Km de largo, y finalmente como se muestra en la imagen anterior, el
grupo quedaría completo con la falla La Victoria.

La Tectónica de Placas al Norte de Sur América

Alfred Wegener (1880-1930) observó en el mapa mundi que los continentes podían unirse como
piezas de un rompecabezas, por lo cual supuso que en épocas remotas hubo un solo continente
(Pangea).
Esta masa de tierras emergidas se conservaba aún hasta finales del Carbonífero (300 m.a. atrás).
Cuando empezaron las separaciones, América se desplazaba hacia el oeste de Africa y de Europa; la India se iba
hacia el este de Africa; la Antártida se alejaba hacia el sur junto a Oceanía, yéndose luego este último hacia el este.
De esa manera se originaron múltiples mares e islas, continuando el proceso hasta el presente.
De la teoría de la "deriva continental" surge un nuevo concepto: "la placa". Wegener no desarrolló hipótesis que
explicaran el porqué del movimiento de los continentes.
Una de sus ideas fue considerar la influencia de posibles corrientes de magma bajo el sustrato como causantes de
la separación de los continentes. La teoría de la tectónica de placas, desarrollada por otros autores, es, por
consiguiente, una continuación de las ideas expuestas por Wegener.
Se supone que los continentes son capas de roca sólida que se desplazan sobre roca fundida (el manto); dichas
capas confluyen con otras más densas como las que sustentan las masas oceánicas.
Las separaciones y choques entre estos pedazos de la corteza origina movimientos sísmicos, actividad volcánica y
rasgos fisiográficos como las dorsales y las fosas oceánicas. La litósfera terrestre permanece "rota" debido al
continuo movimiento de las placas.
Para la zona del Caribe y el norte de Suramérica se observa lo siguiente: el borde de esta placa atraviesa a
Venezuela de este a oeste en su parte norte y por la cordillera de Mérida, en dirección noreste.
Esta placa tiene un límite de subducción en la parte oeste del istmo de Panamá, donde supuestamente la placa
oceánica se introduce por debajo de la placa continental; el sentido de avance general de esta placa es hacia el
suroeste.
La Tectónica de Placas y el Territorio Venezolano

Las consecuencias del movimiento de las placas en Venezuela se reflejan en el origen de los sistemas montañosos
como: los Andes y las cadenas costeras; la existencia del mar Caribe; la separación de superficies insulares y otros
acontecimientos.
La migración de las placas hizo que el Escudo Guayanés se separara del gran escudo Pre-Cámbrico que conforma al
continente africano. En el Paleozoico, durante la Pangea, nuestro territorio se unía a la parte central-oeste de
Africa, de allí la coincidencia de que las provincias geo-estructurales de dicho continente sean un tanto similares a
las de Suramérica.
Hace 180 m.a., en el Jurásico, la América del Sur se separó de la América del Norte. Para entonces, en los
lineamientos de las dorsales atlánticas, Suramérica se apartaba de Africa en dirección noroeste.
En un período de 135 a 65 m.a. el continente suramericano estaba separado por completo tanto de Africa como de
la América del Norte.
Este desplazamiento hacia el oeste hizo que los márgenes occidentales de América se convirtieran en activos,
mientras que los orientales, en pasivos.
Los primeros son los más afectados por la confluencia de las placas, por eso se producen cinturones extensos de
levantamientos, fallamientos, plegamientos, vulcanismo, etc.
Para finales del Cretáceo, el movimiento de Suramérica hacia el noroeste pudo haber comenzado a levantar la
cordillera de la Costa hacia el lado noreste de Venezuela.
Antes de eso, seguramente el litoral se ubicaba en el borde norte del Escudo Guayanés. Los Andes primitivos
comenzaron a levantarse igualmente a finales del Cretáceo. Al final del Eoceno continuó la orogenia formadora de
la Cordillera de Mérida.
El levantamiento, tal vez muy rápido, de las cordilleras ubicadas en el Estado Falcón, hizo que el río Orinoco se
desviara hacia el lado este del país, dado que parte de los fósiles encontrados en la zona de Urumaco son propios
de dicho río, tal como lo atestiguan los restos de algunas especies de bagres, tortugas y toninas.
Si no hubiera sido tan rápido el levantamiento de esas montañas, posiblemente el Orinoco hubiese seguido
circulando hacia el norte del país.
Venezuela está comprendida entre dos placas: la Placa del Caribe y la Placa Sudamericana; la primera se mueve
hacia el oeste y su límite oriental se asocia al arco de islas antillanas. La geofractura que pasa por la costa y por la
Cordillera de Mérida comprende un borde "dudoso" entre las placas antes mencionadas. Los desplazamientos a
ambos lados de dicha geofractura indican una especie de movimiento de rotación en el borde sur de la placa
caribeña. Una de las evidencias de este contacto es la intensidad sísmica (fallas de Boconó y de El Pilar), siendo Los
Andes y las montañas costeras zonas de alta sismicidad. Estudios recientes (finales del siglo XX), a través de la
utilización de aparatos de GPS, demostraron que la Placa del Caribe, en la parte norte del estado Sucre, se mueve
a razón de un centímetro por año en dirección hacia el este.
En resumen, los efectos más recientes de la tectónica de placas han dado origen en Venezuela a los sistemas
montañosos andinos y costeros; a la par de esta orogénesis, los agentes externos han removido en los paisajes
montañosos grandes volúmenes de sedimentos que han colmatado a grandes regiones como los Llanos, el delta del
Orinoco y la depresión del lago de Maracaibo.
La inestabilidad tectónica reciente también ha sido responsable de que una parte de los Llanos (estados Anzoátegui
y Monagas) haya sido ligeramente levantada con respecto al nivel del mar, dando como resultado paisajes de
extensas mesas disectadas.
Partes de una Falla Geológica

Las Fallas Geológicas son muy comunes en la corteza terrestre, estas son el resultado de los esfuerzos que actúan
en ella; cuando la acción de las mismas doblegan la resistencia de los materiales (rocas), las rompen literalmente
hasta desplazarlas de su lugar, estos movimientos generalmente suelen dirigir en la dirección dominante a estas
masas o bloques rocosos.
La idea de esta entrada es facilitar de manera sencilla y practica las partes que constituyen a dichas "rupturas" de
los materiales con desplazamientos evidentes en la corteza. Si observamos el modelo gráfico anterior, las fallas
están constituidas por un:
Plano de falla: es la superficie a lo largo de la cual se desplazan los bloques que se separan, abandonando su
posición original antes de la ruptura.
Labio levantado: es también conocido como bloque superior por que este queda por encima del plano de falla.
Labio hundido: al contrario del caso anterior, este es el bloque que queda por debajo del plano de falla, por lo cual
también se le llama bloque inferior.
Salto de falla: es el recorrido o distancia apreciable entre dos puntos que estaban unidos antes de producirse la
ruptura y su posterior desplazamiento.
Escarpe: es la distancia entre las dos superficies de los labios, tomadas de manera vertical.
Como en el caso de Las Partes de un Pliegue, estas tienden a clasificarse bajo ciertos criterios que las definen en
"normales", "inversas" o de "rumbo", también llamadas transcurrentes. Cabe destacar que estas al estar en
conjunto (varias fallas) pueden conformar Estructuras Geológicas; siendo estas ultimas, "modificadoras" que a
través del tiempo cambian parte de la topografía en la corteza del planeta.
Amenaza Sísmica en Venezuela
RESUMEN
El norte de Venezuela es parte del límite entre las placas Caribe y América del Sur. La zona de contacto de estas
dos placas tectónicas ha generado un sistema de fallas principales activas del tipo transcurrente dextral alo largo
de un cinturón de aproximadamente 100 Km. definido por los sistemas montañosos de los andesvenezolanos, la
cordillera central y oriental, denominado sistema de fallas de Oca-Ancón-Bocono-SanSebastián-El Pilar, mientras
que el Oriente de Venezuela está caracterizado por una zona de subducción que seextiende hasta las Antillas
Menores. En Venezuela, uno de los mayores potenciales de riesgo de pérdidas devidas humanas y económicas está
representado por la actividad sismológica debido a la gran cantidad depoblación que vive en zonas de alta amenaza
sísmica. La Fundación Venezolana de InvestigacionesSismológicas (FUNVISIS), adscrita al ministerio de Ciencias y
Tecnología, es la institución oficial encargada deoperar y mantener la Red Sismológica de Venezuela, conformada
por 35 estaciones banda ancha, cuya metaes el registro y monitoreo continuo de la actividad sismológica nacional.
Los conocimientos adquiridos son unaporte valioso en los estudios y elaboración de mapas de riesgo sísmico en
Venezuela, en una mejora de lasnormas de construcción sismorresistente y en la elaboración y publicación de
trabajos científicos que podríanser incorporados en los programas de estudios de las carreras afines al tema de
riesgo, entre ellas, sismología, geofísica e ingeniería, a nivel de pregrado y postgrado.
INTRODUCCIÓN
El norte de Venezuela es parte del límite entre las placas Caribe y América del Sur. La zona de contacto de estas
dos placas tectónicas ha generado un sistema de fallas principales activas del tipo rumbo-deslizante dextrales
orientadas aproximadamente en dirección este-oeste a lo largo de un cinturón de aproximadamente 100 a 150
Km., definido por los sistemas montañosos de los andes venezolanos, la cordillera central y oriental, denominado
sistema de fallas Oca-Ancón-Boconó-San Sebastián-El Pilar. El sistema de fallas principales está seguido por un
número de fallas activas menores entre las que se encuentran: Valera, La Victoria, Tacagua – El Ávila y Urica
(Schubert et al., 1984; Grases et al., 1994). El oriente de Venezuela está caracterizado por dos regímenes
tectónicos: El primero está conformado por un sistema de fallas rumbo-deslizante dextral, dentro del cual se
destaca la falla de El Pilar. El segundo por una zona de subducción que se extiende desde el noroeste de la región
hasta el Arco de El Caribe, representado por la Antillas Menores (Schubert et al., 1984; Beltrán et. Al., 1994;
Sobiesiak et al., 2002).
La Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológica (FUNVISIS) es el organismo encargado de la instalación y
mantenimiento de La Red Sismológica Nacional, conformada por 35 estaciones banda ancha de tres componentes,
cuya función es el registro continuo de la actividad sismológica del país generado por el sistema de fallas geológicas
activas. La información adquirida por la nueva red está destinada al estudio de la sismicidad en Venezuela como
producto de la interacción de las placas tectónicas, y los resultados que se derivan de esta investigación son un
valioso aporte para la estimación del riesgo sísmico en el norte de Venezuela.
Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas, FUNVISIS
Sismicidad en Venezuela

En gran medida, la actividad sísmica del país está asociada al sistema de fallas activo predominante: OcaAncón-
Boconó-San Sebastián-El Pilar generada por el continuo movimiento este-oeste de la placa Caribe con respecto a la
de América del Sur. Este sistema de fallas ha sido el causante de los sismos más 1severos que han ocurrido en el
territorio nacional, entre los que se destacan: 1812, 1900 y 1967 entre otros (Schubert et al., 1984; Grases et al.,
1994).
Esencialmente, la sismicidad a nivel del territorio nacional es superficial y se concentra en los primeros 40 Km. de
profundidad; exceptuando la sismicidad profunda asociada a la zona de subducción en el noreste de Venezuela
entre los 20 y 120 Km. (Fernández et al., 1974; Pérez et al., 1981; Beltrán et al., 1994; Audemard and Singer et
al., 1996; Pérez et al., 1997; Audemard et Al., 1999 ; Sobiesiak et al., 2000). La sismicidad en Venezuela está
caracterizada por una alta tasa de microsismicidad (eventos de magnitud ≤ 3) y eventos de magnitud intermedia
(entre 3 y 5), aunque la historia sísmica del país revela que han ocurrido más de 130 sismos que han causado
algún tipo de daños en poblaciones venezolanas, siendo el más destructivo de todos el que ocurrió el 26 de marzo
de 1812 y que afectó seriamente ciudades importantes como Mérida, Barquisimeto y Caracas, causando más de
20.000 víctimas, es decir, un 5% de la población estimada para la época (Grases et al., 1994).
La Red Sismológica de Venezuela

Desde el año 1982, FUNVISIS ha sido el ente encargado de la instalación y mantenimiento de la


Red Sismológica Nacional. En un principio se contaba con el apoyo de sólo 10 estaciones sismológicas
de corto período cuya función era dar cobertura a todos los eventos sismológicos localizados en la Zona Central
de Venezuela. Posteriormente al terremoto de Cariaco en 1997, el gobierno nacional aprobó el proyecto
de modernización de la red sismológica con la puerta en marcha de 35 estaciones banda ancha de tres componente
(Vertical, Norte-Sur y Este-Oeste) cuya función sería dar una buena cobertura de la actividad sísmica en todo el
territorio nacional. En el año 2000 comenzó el proyecto de búsqueda e instalación de las nuevas estaciones y
actualmente la misma se encuentra totalmente operativa (figura 3). La transmisión de los datos registrados por las
estaciones a la central en Caracas se realiza en tiempo real vía satélite.
La nueva y moderna Red Sismológica Nacional ha brindado un valioso aporte en la ubicación y caracterización de la
actividad sismológica del país desde su instalación en el año 2000. Una consecuencia importante del registro
continuo de la sismicidad en todo el territorio nacional (y en algunos casos de la actividad desarrollada en países
vecinos como Colombia y Trinidad) ha sido la conformación y constante actualización de un catálogo sismológico de
gran precisión y completitud, debido a una mejora en la localización de los sismos y a que actualmente es posible
detectar eventos de magnitudes más pequeñas (inferiores a 3.0). Es importante destacar que dicha actividad es
publicada trimestralmente a través del Boletín Sismológico Nacional. Así mismo, toda la sismicidad reciente se
publica en la página web de FUNVISIS: http://www.funvisis.org.ve/
La conformación de un catálogo sismológico completo ha permitido a su vez investigaciones importantes en el área
de la sismología, la geología y la ingeniería sísmica. La evaluación de la actividad sismológica reciente e histórica y
la caracterización y ubicación de las fallas geológicas activas han permitido la estimación de las zonas de mayor o
menor amenaza en Venezuela, a través de la elaboración de mapas de Zonificación Sísmica.
El Mapa de Zonificación Sísmica (Norma COVENIN 1756-98, 2001) está presentado en función del coeficiente de
aceleración horizontal (Ao) en roca. Puede interpretarse de dicho resultado que el norte de Venezuela presenta las
zonas de mayor riesgo sísmico (siendo el estado Sucre el catalogado como de mayor riesgo).
Una consecuencia importante del mapa de Zonificación Sísmica es la elaboración, en base a sus resultados,
de Normas de Construcción Sismorresistentes (2001) adecuadas a la realidad sísmica de Venezuela. La resistencia
sísmica de una estructura desarrollada por los ingenieros siguen las instrucciones de la norma de acuerdo al grado
de amenaza de la región. Idealmente, todas las estructuras construidas en nuestro país deberían estar de acuerdo
con dicha norma. La última actualización de la Norma de Construcción Sismorresistente se llevó a cabo en el año
2001, tomando en cuenta los resultado aportados por el terremoto de Cariaco en 1997.
Por otro lado, la mejora en la localización de los sismos también ha permitido desarrollar estudios que
permitan recalcular nuestras actuales ecuaciones de magnitud y modelos de velocidad de las ondas sísmicas
(proyectos que se encuentran actualmente en progreso). Igualmente se espera poder realizar nuevos y mejorados
modelos de tomografía sísmica en toda Venezuela, cuyo objetivo será el modelaje de la corteza terrestre y marina.

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