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La Biblia y las redes sociales

¿Puede un cristiano jugar video juegos y participar de Las Redes Sociales?


Introducción
Por ser la Palabra de Dios la declaración divina al hombre del plan eterno de salvación para
la humanidad es de entenderse que contiene todo lo que necesitamos para ser salvos; además
de recomendaciones en cuanto a cómo podemos vivir una vida útil y agradable para Dios y
de edificación para nuestro prójimo. Por tanto, su relevancia en cuanto a cómo debemos
conducirnos trascienden en el tiempo, sin importar ni las épocas, culturas, tecnologías, etc.
Sin embargo, por ser La Biblia un libro escrito en la antigüedad obviamente para ese tiempo
no existía una tecnología tan avanzada como la que hoy por hoy está presente en nuestros
días, por eso no encontraremos aprobaciones o prohibiciones directas en cuanto al uso de
videojuegos y redes sociales, entre otras cosas.
Esto no quiere decir tampoco, que Dios no esté detrás de dicha ciencia y tecnología.
(Pro.3.20) La Biblia no solo profetiza el aumento de la ciencia, (Dn.12:4) sino que deja bien
en claro lo infinito del conocimiento (Ciencia) de Dios (Sal.147:5). Al ser Dios el poseedor
de tal conocimiento es la fuente, de donde todo hombre la obtiene, sobre todos los que le
sirven (Ex.31:3); (2Cro.1:10-12); (Sal.94:10)
La Biblia es el único libro que mantiene su vigencia a pesar de los años, es el único cuyo
mensaje sigue siendo eficaz y oportuno para el ser humano, sin importar la época en que se
viva sus principios bíblicos se aplican aún en la actualidad.

Pensemos en esto.
Si somos creyentes, lavados y santificados por la sangre del Señor Jesucristo, con promesas
reales que nos dan seguridad de una vida eternal, ¿será que podemos vivir a nuestro modo,
sin compromiso y lealtad con aquel que nos dio a alto costo todas esas bendiciones? (Ef.5:10)
Por ser nosotros su Pueblo y Él nuestro Rey y Soberano se nos dan indicaciones específicas
y muy claras, en la Palabra de Dios en cuanto a nuestra manera de vivir, mientras nos
encontremos en esta tierra de peregrinaje, en estos cuerpos mortales, donde el Dios del cielo
y su Santo Hijo habitan por medio de la persona del Espíritu Santo, y allí se destaca todo en
general al respecto, e incluye de manera directa, sin necesidad de nombrar literalmente los
términos (Videojuegos, Redes Sociales, etc.).
A continuación, les destaco algunas, entre tantas, de esas recomendaciones.

Divisiones y aplicaciones

1- El saber discernir entre lo provechoso y lo que no lo es (1Co.6:12, 10:23);


(1Re.3:9); (Ez.44:23); (1Co.2:14)

2- El uso del tiempo. (Ef.5:15-17) La palabra enseña acerca de mayordomía. Identifica


a Dios como el dueño y al hombre como el administrador. Dios convierte al hombre
en su colaborador para administrar todos los aspectos de nuestra vida. (1Co.3:9)

3- El cuidado del cuerpo (1Co.3:17); (1Co.6:19); (2Co.6:16)

4- El caer en discusiones sobre opiniones puede causar rupturas de relaciones de


hermandad, marital y social (Ro 14:1) (1Tm1:4)

Recomendaciones para el buen uso de las redes sociales


1- Piensa antes de escribir. (St.1:19)
Debemos ser cuidadosos, decir todo lo que pensamos no siempre es necesario. Es por eso
importante que te tomes el tiempo frente al teclado y te hagas las siguientes preguntas:
¿Glorifica a Dios?
¿Por qué quiero publicar?
¿Quién quiero que lea?
¿Qué reacción espero despertar en los que leen?
¿Es necesario publicarlo?
Una vez sometas tu publicación a este filtro, quizás ya estés listo para lanzarla.

2- Evita controversias innecesarias


En ocasiones será necesario refrenar el error o corregir el engaño (Jud.1:3), pero a menudo
nos encontramos con pensamientos provenientes de una mente sumergida en la necedad;
frente a tales casos es preferible guardar la prudencia y no responder al necio conforme a su
necedad (Pro.26:4)
3- Procura promover a Cristo
Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. (1Co.10:31)

4- Cuida la conciencia de otros (1Co.8:9)


Decir todo lo que pensamos no siempre es un rasgo positivo de personalidad. Algunas
personas se jactan diciendo – Soy una persona franca, siempre digo lo que pienso y no me
importa lo que a otros les afecte

5- Evita la mentira (Ef.4:25)

Las redes sociales son un medio muy propicio para promover una personalidad que no
corresponde a la tuya en la realidad. Ten cuidado, la mentira es un pecado que tiene diversas
manifestaciones. Al querer impresionar, termines publicando cosas que no corresponden con
la realidad. Evalúa también lo que compartes, en la medida de lo posible verifica las fuentes,
existe mucha información falsa en las redes sociales: leyendas, mitos, historias falsas, y
nosotros no podemos convertirnos en partícipes de ella.

En Conclusión:
El utilizar el internet o una red social no es pecado en sí mismo, el problema está en el uso
que le demos, que bien puede ser para bendecir, para compartir y divertirnos sanamente con
otros, aún para llevar el evangelio a nuestros amigos o bien puede ser un punto débil del que
Satanás se aproveche para hacer quedar mal al reino de Dios…Usted decide.

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