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Casos

“Una vez me maltrató un ginecólogo. Quedé tan dolida y en shock que no lo denuncié. Pero
estaba claro que el tipejo me realizó una exploración con brutalidad al enterarse de que era
lesbiana”. El riesgo de encontrar una actitud hostil hace que muchas de estas mujeres prefieran
pasar desapercibidas, e incluso no comentar aspectos que podrían ser de interés médico, por lo
que su salud puede verse perjudicada. Así continúa la informante anterior: “Al comentarlo con
alguna amistad, lesbianas, incluso me dijeron que había sido “tonta” por decir que era lesbiana”

“Me siento discriminada cada vez que acudo a los servicios de ginecología, ya sean públicos o
privados”; “Los ginecólogos no saben informar a las lesbianas”; “El espacio donde me
encuentro constantemente discriminada es la sanidad pública, especialmente en los servicios de
ginecología, ya que dan por hecho tu heterosexualidad, y por tanto hay que indicarlo
constantemente. Además, cuando lo indicas, no te informan de forma específica ni te facilitan
información sobre tu salud sexual”; “Me he sentido discriminada en una visita al ginecólogo.
Mientras me hacía una exploración a mí me dolía mucho y el ginecólogo no me preguntó ni se
interesó por el tema. Lo único que me dijo fue: esto es igual de desagradable para mí que para
ti”; “Los protocolos en ginecología para mujeres lesbianas dejan mucho que desear por
desconocimiento de los propios profesionales, que así lo reconocen”.

“Mi pareja y yo queremos tener un hijo por la Seguridad Social, y nos comentan que ya no se
puede tener hijos como mujer soltera o mujer con pareja homóloga, dicen que hay un decreto,
pero nadie nos dice cuál. A mí me inseminaron el julio pasado y estoy embarazada por la SS, y
ahora queremos empezar con mi mujer y nos dicen que ya no se puede”. Aunque la pregunta se
refería a la sanidad pública, también se ha recibido alguna queja de seguros privados: “Somos
un matrimonio de lesbianas. MUFACE nos denegó el acceso a reproducción asistida cuando, de
hecho, estábamos dentro del supuesto legal contemplado como “pareja estéril”, agotamos la vía
administrativa, solo obteniendo una serie de resoluciones administrativas a cual más insultante
que la anterior”.

“En una ocasión me echaron de una habitación de un hospital en el que cuidaba a mi suegro al
decir que era la novia de su hija. Lo hizo un médico y no supe qué hacer”; “Me he sentido
discriminado acompañando al hospital y a la comisaría a una amiga transexual a la que habían
dado una paliza en la calle por el mero hecho de ser transexual. En el hospital las enfermeras
hicieron corrillo para ver a mi amiga, cuchicheando entre ellas y riendo”; “Mi pareja y yo
hemos tenido que pedir cambio de médico por el mal trato recibido, humillante, solo por acudir
juntos a consulta”; “En una ocasión acudí a una consulta médica acompañando a mi novio y él
sufrió la homofobia del médico, aunque no ante mí, sino en el reservado donde le realizó la
exploración”; “Cambié de médico de cabecera, ya que al comentarme mis resultados de un
análisis rutinario de sangre, me dijo: “es que con vosotros nunca se sabe lo que vais esparciendo
por ahí”. Esa doctora todavía ejerce en el distrito centro de Madrid; “He recibido trato
discriminatorio en la sanidad privada, donde el médico (urólogo) me mandó muchas pruebas de
ITS después de preguntarme si había mantenido prácticas homosexuales y contestarle yo que sí.
No le importó que le dijera que nunca habían sido de riesgo, y su actitud dejó mucho que
desear”.
(...) cuando tuve hepatitis me hicieron 25.000 estudios, claro, pensaban que como era puto... (...)
la A, la común, pero me dio de una manera tan virulenta, tan agresiva, que les llamó la atención
(....) de hecho no tenía nada que ver que me preguntaran mi orientación sexual, porque era
hepatitis A, me podría haber contagiado si fuera travesti o un bebé (...) (Mendoza, gay).

(...) por ahí cuando le conté que había tenido hepatitis B, le quise comentar un poco cosas
personales y como que cambió de tema o sea como que viste, ya está, y siguió con otra cosa,
(...) obviamente que supo que yo era gay y habrá tenido miedo de que me gustara (Mar del
Plata, gay).

Eh... viste lo que yo te decía con el primer médico, él dio por descontado que yo no cogía y en
la última entrevista él dio por descontado que yo era hétero y yo no aclaré ninguna de las dos
cosas. Seguramente no se lo aclaré porque no me sentía cómodo (...) Se supone que tendrían que
preguntarte cuál es tu condición sexual, te lo tienen que preguntar, no dar por supuesto. O sea
“¿tu señora cómo anda?”, esa pregunta tan boluda no te la tienen que preguntar abiertamente
(...) (Neuquén, gay).

Cuando me hice ver el problema en el ano, el cirujano me hizo pasar una situación bastante
horrible. Viene otro y le dice, mirá, es homosexual, [le dice] al otro cirujano y eso fue terrible
para mí (...) [no hice] nada, aparte ya estaba puteando. Yo tipo era [expresión de hartazgo], que
termine esto de una vez (...) viene otro médico y me mira ahí, tipo no, una mujer, eso sí me
resultó bastante feo (La Matanza, gay).

el primer médico ... me preguntó qué hacía, yo le dije que era trabajador sexual y se piensa que
porque soy pendejo que no sé cuidarme (...) es como que me dijo ah, no te cuidaste, te agarraste
sífilis porque no te cuidaste y yo lo que le dije, agarré y le dije, no, no es que no me cuidé, me
cuidé, se me rompió el preservativo (...) me lo dijo mal, me fui, después volví y me atendió otra
persona, una médica, que me sentí re-bien porque me trató bien y me dijo, bueno, esas cosas
pasan (...) (Mar del Plata, bisexual)

Vos lo ves en las actitudes de los colegas: ponerte más lejos cuando tenés una entrevista o por
ahí no revisarlo o no tocarlo. Yo lo noto. (...) No lo dicen abiertamente pero vos notas un
rechazo. Se hacen las cosas, obviamente, pero yo creo que sí, que [rechazo] hay (médico
generalista).

Acá se utiliza un axioma que es un poco nefasto, diría yo, pero que es una realidad que es que
los pacientes homosexuales, entre comillas, siempre es una generalidad, deben tomarse como
VIH hasta que se demuestre lo contrario. Porque están asociados a conductas promiscuas. Es un
axioma del cirujano, entonces cuando operamos a un homosexual y no conocemos su origen, no
tiene una pareja estable, etc., doble par de guantes, gafas y ciertas maniobras de protección por
esto, porque en gene ral están asociados a las conductas promiscuas. (...) Entonces en las
prácticas se toman precauciones que a veces, por decirte, con los heterosexuales no se toman
(médico urólogo)
.

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