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La ciencia está utilizando las trampas feromónicas para el control biológico de algunas
especies. ¿Cómo funcionas las trampas feromónicas y qué beneficios proporcionan a los
ecosistemas?
Las trampas de feromonas o de captura se utilizan desde hace mucho tiempo en la agricultura
con el fin de estimar la población de una plaga dentro del periodo.
Su implementación se basa en colocar en determinados puntos del campo una trampa, en la
que antes se colocaba una hembra que emanaba la feromona. En la actualidad gracias a los
avancen en entomología se pueden sintetizar estas feromonas evitando la utilización de la
hembra. Con esto se busca crear una confusión sexual el cual busca que el macho no
encuentre a la hembra eliminando la copula y por ende la postura de huevos. También existe
el método “attract and kill” en el cual se usan feromonas en conjunto con trampas con cebos
tóxicos. La feromona actúa atrayendo al macho hacia la trampa para que entre en contacto
con el cebo toxico causándole la muerte instantánea.
Los beneficios de este método es que se evita el uso de plaguicidas que causan contaminación
de cultivos y/o eliminación de otras especies importantes animales como por ejemplo
polinizadores.
4. La cantidad de cada hormona que circula por la sangre suele ser justo la que se necesita
en ese momento, ya que la producción aumenta (hipersecreción) o disminuye
(hiposecreción) según cambian los requerimientos de cada persona. Cuáles son las
manifestaciones de la hipersecreción de prolactina en la mujer (hiperprolactinemia).
La hormona prolactina es la hormona responsable de la estimulación de la secreción de
leche por las mamas. La prolactina es secretada casi exclusivamente por unas células que
se llaman lactotropas, que se encuentran en la glándula hipófisis anterior del cerebro.
Existe un trastorno por exceso de producción y secreción de esta hormona, denominado
hiperprolactinemia, que se define como un aumento en la concentración sanguínea de
prolactina (PRL) (en mujeres, mayor de 20 ng/mL y en varones, mayor de 16 ng/mL).
En mujeres en edad fértil o premenopáusica si los valores de PLR son mayores a 50 ng/mL
se suele producir oligomenorrea o ciclos menstruales largos más de 45 a 60 días,
amenorrea o ausencia de menstruación, galactorrea o secreción por el pezón, infertilidad,
sofocos y sequedad vaginal.
En las mujeres postmenopáusicas, la hiperprolactinemia sólo se reconoce en los casos
infrecuentes en los que aparece como consecuencia de un macroprolactinoma (tumor
grande de células secretoras de prolactina) que se manifieste con dolores de cabeza o
defectos en la visión por efecto de masa del tumor sobre las estructuras nerviosas
cerebrales próximas.