REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

UNIVERSIDAD BOLIVARIANA DE VENEZUELA
PNG: ESTUDIOS JURIDICOS
CARACAS, D.C.

CIUDADANÍA, DESIGUALDAD SOCIAL

Y ESTADO DE BIENESTAR
Ensayo Anlítico
Luis Moreno, 2003

PROF. ESTUDIANTE:
ANDRES DAVILA RAQUEL BENAVIDES
C.I. Nº. 10.383.241
MATERIA: PROYECTO
SEMESTRE:X
SECCIÓN: 4-2

Caracas, Febrero de 2018

 Ciudadanía, Desigualdad Social y Estado de Bienestar

¿Qué se entiende por Ciudadanía?

En la concepción de las modernas democracias, se comprende a la

ciudadanía a partir de la perspectiva de un conjunto de prácticas y usos que
otorga la cualidad de componentes activos a los individuos en su comunidad de
referencia; donde el orden político está legitimado por las decisiones de sus
ciudadanos responsables y libres.
Luego entonces, la ciudadanía se define como un status, conformado por
el acceso a los recursos básico bajo la premisa del ejercicio responsable de
deberes y derechos.
Dado el caso que no exista el acceso a los recursos básicos, se asumiría
que no hay condición necesaria y suficiente de ciudadanía. Esto quiere
significar que los titulares de derechos permanecen en una situación de
precariedad expresada ésta como déficit de ciudadanía.
El pensador británico, Thomas Henry Marshall (1949), expresaba su
preocupación al disertar sobre lo que significaba el moderno concepto de
ciudadanía. Para él era preocupante la dimensión social de la misma y su
evolución en el marco de las sociedades capitalistas occidentales.

Factores Constitutivos de la Ciudadanía:

Según su análisis, existen algunos factores constitutivos de lo que se

puede definir y articular sobre el concepto de ciudadanía; tales factores pueden
explicarse de la manera siguiente:

● El Factor Civil: Es aquel que está integrado por las capacidades de

ejercicio de las libertades individuales fundamentales relativas a la
vida y al desarrollo integral de las personas, de expresión y
 pensamiento, incluyendo también el sentido de propiedad privada, los
derechos contractuales y de sometimiento a los tribunales de justicia.
● El Factor Político: Conjunto de recursos de participación
democrática en el accionar político de una nación o de su comunidad,
lo cual compete al ejercicio de la elección y acceso a los mecanismos
de representación para legitimación de autoridades y del poder
político; acá los ciudadanos son tanto electores como elegibles.

● El Factor Social: Implica la garantía a una vida digna y al bienestar

social de los individuos, con acceso al trabajo remunerado y a la
previsión social en situaciones de riesgo. Tal estadio corresponde a la
consecución de unos estándares vitales básicos legitimados por el
conjunto de la ciudadanía.

Estos tres ciclos o estadios de la moderna ciudadanía corresponden,

según Marshall, a los diversos períodos de constitucionalización de los
derechos ‘civiles, visualizados en:
● Siglo XVIII: Revoluciones inglesa, norteamericana y francesa.
● Siglo XIX, con la institucionalización del liberalismo democrático y la
representación electoral)
Y también se da un tercer período que constitucionaliza luego los
derechos sociales, lo cual se articula notoriamente en el siglo XX, con la
consolidación del igualitarismo en los estados del bienestar, básicamente en las
democracias industriales occidentales.

Perspectiva Histórica en la Formación del Concepto de Ciudadanía:

Según sigue analizando Marshall (1949), para él, la época premoderna

concebía la dimensión de la civilidad, la política y el aspecto social, desde la
concepción u óptica religiosa y todas dimensiones de la vida, estaban signadas
por esa visión religiosa del mundo.
Posterior a esa época, poco a poco, el mercado toma vigencia para
transformarse en el gran regulador de la vida económica, lo cual en
consecuencia, trajo la relativa autonomía de las esferas pública y privada. . En
sentido general, el proceso de modernización en el mundo occidental comportó
el paso de los criterios de adscripción a los criterios de logro..
En las actuales sociedades democráticas avanzadas del mundo
occidental, los ciudadanos son titulares de derechos civiles, tales como los
morales de derecho a la libertad de pensamiento y de expresión, o los
materiales como el de la propiedad privada.

Implicaciones al Concepto de Ciudadanía en la Actualidad:

Actualmente el concepto de ciudadanía conlleva de forma inherente, todo

el conjunto de derechos políticos que incluyen el asociarse y participar, así
como el derecho social a la salud, a la educación, al bienestar y seguridad
social. Ese conjunto de derechos deben ser amparados por el estado que
asume la responsabilidad colectiva de tutelaje a beneficio de todos y todas,
inclusive niños y niñas.
La ciudadanía social se expresa tangiblemente a través de una política
que posibilite a comunidades más cohesionadas con ciudadanos libres y
solidarios entre sí, que procuren en conjunto la igualdad de oportunidades a
través de una mayor nivelación de recursos, minimizando las diferencias de
clase, edad, raza o género, con acceso al desarrollo de sus potencialidades.

El Estado de Bienestar:

El Estado del Bienestar es una invención europea cuya génesis

institucional se remonta a finales del siglo XIX. Su objetivo principal es la
seguridad social, para lo cual establece unos mecanismos obligatorios Y se
consolidó progresivamente en el mundo industrialmente avanzado bajo los
parámetros de una democracia compuesta y de economía mixta.
Para conseguir este estado de bienestar, el estado a través de los poderes
públicos interviene directamente en la promoción y tutela de los derechos
sociales con la activación de instituciones asistenciales, que inciden sobre
salud, desempleo, pobreza, entre otros.
El Estado del Bienestar corresponde entonces al conjunto de instituciones
estatales proveedoras de políticas sociales dirigidas a la mejora de las
condiciones de vida, a facilitar la integración de clases y grupos sociales,
nivelando e igualando sus recursos materiales.

La desigualdad Social vs. El Estado de Bienestar:

Las políticas públicas sociales son intervenciones públicas que afectan la

distribución de las oportunidades vitales de los ciudadanos, la mejora de su
calidad de vida y de su bienestar personal. En general las políticas públicas
afectan al individuo o al conjunto social por ser redistributivas y constituyentes.
Las políticas sociales son generalmente de carácter redistributivo ya que
comportan transferencias y equilibrios de recursos y capacidades entre unos
ciudadanos y otros. Se relacionan también con el aspecto educativo, para
efectos de una mayor y mejor instrucción formal de los ciudadanos, o con
aquellas que procuran una promoción de la salud o facilitan el acceso a una
vivienda.
Todas ellas son ‘sociales’ con carácter amplio. Incluso las condiciones
relativas al mercado de trabajo, como son los servicios provistos por las
empresas, por ejemplo, son importantes en la procura del bienestar de los
asalariados. Las actuaciones en estos cuatro niveles de protección social
contribuyen decisivamente al desarrollo integral de las personas en el
desenvolvimiento de su vida ciudadana.
El aspecto moral de la igualdad social para efectos del estado de bienestar
se fundamenta en la parábola del buen samaritano que apunta al ejercicio de
solidaridad hacia el otro. Implica una vinculación inherente a todos los seres
humanos que compromete a unos con otros, como una mutua obligación cívica.
Es de hecho , el concepto sociológico de empatía, o proceso interactivo por el
cual una persona se ‘identifica’ o se ‘pone en el lugar’ de otra, lo cual sirve dejar
de ser individual para transformarse en colectivo, y estableciendo en lazos
solidarios de reciprocidad.

Bases morales, Económicas y Políticas de la Vida Social Actual:

En primer lugar, desde el punto de vista neoliberal, no existen medios ni

criterios que puedan establecer una jerarquía colectiva de deberes ciudadanos
más allá del establecimiento de un marco mínimo institucional que garantice el
intercambio ‘libre’ de ideas y mercancías.
Por el contrario para el liberalismo igualitarista existe un deber u
obligación moral de la comunidad en la provisión de los medios para que éstos
cubran las ‘necesidades básicas’ de todas las personas,ya que su inexistencia
imposibilitaría el cumplimiento de los respectivos deberes individuales de los
ciudadanos en situación de precariedad.
Sintetizando ambas visiones, puede argumentarse que la existencia de
unos derechos comunitarios mínimos debería evitar que los ciudadanos fuesen
privados del acceso a los bienes básicos. El hecho de que el estado asuma la
asistencia social, no es motivo para que los individuos o ciudadanos dejen de
lado su propia obligación social en aras del bien común. Luego entonces, el
imperativo moral de acción social ciudadano, conlleva obligaciones que se
manifiestan a través de la creación libre de ONGs para minimizar la desigualdad
social que viene a ser la muestra del alto nivel de civilidad y democracia en la
sociedad de hoy.

Pobreza, Exclusión Social, vs. Redes de Protección Social:

La pobreza es un estado caracterizado por una privación severa de las

necesidades humanas básicas. En contraste con la idea de ciudadanía social,
la exclusión implica una falta de reconocimiento efectivo de derechos sociales,
los cuales a su vez inciden en un deterioro de los derechos económicos y
políticos.
El fundamento moral de la cooperación plasmado en la idea del ‘capital
social’ aboga por una reintegración de los ciudadanos precarios que posibilite el
desarrollo de sus plenas potencialidades físicas y mentales.
Las denominadas redes de protección social tienen como norte el construir
una ‘malla de seguridad’ a través de asignaciones de subsidios, o prestación
económica regular que ofrezca soporte material a pobres y excluidos, a fin de
paulatinamente puedan reintegrarse a la normalidad de la vida ciudadana con
plenos derechos y estado de bienestar.
Por último, no puede dejar de mencionarse que en la satisfacción vital de
los individuos, la familia es el tercer gran productor de bienestar colectivo.