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Centro de
Los cuentos del predicador
C E I Historias y ficciones para la reforma
Estudios Indianos de costumbres en la Nueva España
Biblioteca Indiana
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BIBLIOTECA INDIANA
Publicaciones del Centro de Estudios Indianos
Universidad de Navarra
Editorial Iberoamericana
Biblioteca Indiana, 29
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LOS CUENTOS
DEL PREDICADOR
Historias y ficciones para la reforma
de costumbres en la Nueva España
MANUEL PÉREZ
2011
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ÍNDICE
INTRODUCCIÓN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
Conclusión . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 229
Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 235
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INTRODUCCIÓN
hasta 1617 con el título: Arte o instrucción, y breve tratado, que dize las partes que a de
tener el predicador Evangelico: como à de componer el sermón; que cosas à de tratar en el, y
en que manera las à de decir.
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2 Ricard, 1947.
3 Las Casas, 1942. El título de la obra es elocuente al respecto: Del único modo de
atraer a todos los pueblos a la verdadera religión.
4 Abbot, 1996, p. 4.
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Pero el pueblo indio, aunque con sus más y sus menos, en conjunto, sin
embargo, está muy lejos de cualquier sinceridad; es totalmente ruin y ser-
vil, de ingenio romo, de escaso juicio, muy inconstante y escurridizo; des-
leales en su comportamiento, sólo ceden ante el miedo y la fuerza; apenas
tienen sentido del honor, y del pudor, casi ninguno5.
tulo once del libro primero, y considera incluso que «no es lícito hacer
la guerra a los bárbaros por causa de la infidelidad aun contumaz»7, lo
que viene a ser una afirmación sumamente beligerante frente a quienes
se proponían el dominio a cualquier precio.
Por ello parece prudente considerar que los usos selectivos de afir-
maciones aparentemente escandalosas por parte de predicadores católi-
cos en América, como hace Abbot, no hacen sino confirmar la conve-
niencia de leer los textos de acuerdo a los criterios y preceptos de la
época, pues una consideración prejuiciada de la oratoria sagrada resulta
fácil al tratarse de un arte antiguo y desprestigiado, hijo de la olvidada
retórica. Sin embargo, la predicación estuvo lejos de ser sólo instru-
mento de sometimiento; más bien fue un elemento fundamental del
complejo proceso de diseño y estabilidad de la sociedad novohispana,
donde tuvo sin duda importantes funciones: se puede hablar, por ejem-
plo, de una función cultural (en un sentido estético y en otro antropo-
lógico) y de una función política en tanto instrumento de adoctrina-
miento, pacificación y, en épocas avanzadas de la Colonia, de reforma
de costumbres.
Cabe decir, no obstante, que aunque estas funciones de la oratoria
sagrada sean ya más o menos reconocidas, para algunos estudiosos las
diferencias entre la dimensión cultural y la política no siempre aparecen
claras, pues una descripción apresurada de la cultura, en términos antro-
pológicos, podría llevar a una reducción de la misma a un simple sistema
de control susceptible de ser reproducido por la educación, lo que la
haría transitar hacia la función política, como hace Anne Cruz siguiendo
a Clifford Geertz8, en cuyo planteamiento sin duda podría caber la parti-
cipación de la predicación en la creación de tales controles, tal vez apor-
tando la interiorización de la culpa y el anhelo de virtud9.Vale la pena
aislada esta de Acosta sino cuestión de debate de largo aliento donde estaba en
juego, como se sabe, la dignidad humana y cristiana de los indios. Por ejemplo,
Francisco de Vitoria en su De indis (1532) ya defendía que los indios «son verdade-
ros vasallos del Emperador, como si fuesen naturales de Sevilla» (citado por
Gallegos Rocafull, p. 26).
8 Geertz, 1973 (citado por Cruz, 1992, pp. IX-XV).
9 Un interesante estudio sobre la función cultural de la culpa en la Nueva
España, sin las reducciones que plantea Cruz, es el de Estela Roselló, para quien
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14 Ricard, 1947, p. 450. Fueron muchos los casos en que religiosos se atrevie-
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Valentín de Céspedes era nieto del Brocense, creció entre los muchos libros del
abuelo en Salamanca de donde obtendría una regular cultura que le permitiría
escribir sobre temas varios y en diversos géneros, frecuentando la costumbre de
hacerlo con pseudónimo; Ignacio Arellano cita una de sus comedias (Las glorias del
mejor siglo) que firma como Pedro del Peso (ver Arellano, 2007).
20 López Santos, 1946, p. 364.
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Por supuesto que la cita de Suárez alude a las teorías ramistas del
Brocense vertidas en su De arte dicendi de 155624. Otros preceptistas de
la Compañía de Jesús, en la misma línea favorecedora del ejemplo, son
Pablo José de Arriaga (Rhetoris christiani partes septem), Domingo de
Colonia (De arte rhetorica libri quinque), Gerardo Montano (Compendium
rhetoricae), Francisco Pomey (Novus candidatus rhetoricae) o Francisco de
Mendoza (Viridiarium sacrae et profanae eruditionis), autores todos ellos,
por lo demás, de gran circulación en la Nueva España, como muestra
el hecho de su conservación en varias ediciones en los acervos de la
Biblioteca Nacional de México o en algunas bibliotecas conventuales.
Para el estudio de las pruebas ejemplares usadas en la obra de Juan
Martínez de la Parra se ha seguido pues un análisis retórico de las mis-
mas que ha permitido, además de su adecuada lectura en un contexto
persuasivo, su consideración como instrumento forjador de cultura y
ciudadanía pues, como se ha dicho, un estudio completo de la argu-
mentación ejemplar debe tomar en cuenta el propósito persuasivo con
el que ella se utiliza, implica formular hipótesis sobre la recepción de
los discursos y, finalmente, comprender la adecuación de los relatos
ejemplares usados como pruebas a dichos propósitos y a un auditorio
particular. Además, una justa descripción de los usos ejemplares, como
principio de cualquier análisis, precisa de una breve clasificación de los
ejemplos en cuestión, para cuyo fin la preceptiva retórica también ofre-
ce un camino viejo, probado y útil, pues aunque la taxonomía ejemplar
haya variado a lo largo del tiempo parece que en el fondo se mantuvo
entre los oradores un sentido aristotélico de la argumentación, sobre
todo en obras vinculadas de diversos modos a la elocuencia clásica,
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