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Análisis de cultura, subcultura, contracultura y marginalidad.

Desde que el ser humano, comenzó a desarrollar su inteligencia individual y


colectiva, comenzaron a crearse las sociedades humanas, y con ello las distintas
particularidades que caracterizaban esas sociedades y las hacían diferente al resto de
ellas: las culturas. La cultura es como el código genético de una sociedad, una
memoria colectiva de vivencias, costumbres, entre otras cosas, las cuales van pasando
de generación en generación a lo largo de los años; sin embargo, a lo largo del
tiempo, ha habido choques entre las culturas de las distintas sociedades en el mundo,
y no sólo eso, sino también choques culturales dentro de una misma sociedad, lo que
vendría creando a las subculturas y contraculturas.

Un ejemplo claro podría ser la implementación de la Harina P.A.N. en la


sociedad venezolana. Está en la cultura venezolana, comerse la “arepa de cada día”,
pero la forma tradicional que se utilizaba para prepararlas (elegir el maíz, molerlo,
hacer la masa y montarla en el budare), se estaba haciendo muy engorrosa para la
época en la que se estaba viviendo y el avance tecnológico que se estaba teniendo;
por lo que un grupo de personas tuvieron la idea de crear un producto que facilitara la
preparación de dicho alimento: harina de maíz molida. Esto creó un choque en la
sociedad, puesto que la utilización de dicho producto hizo que algunos no la vieran
tan confiable, puesto que era algo nuevo. Pero al paso del tiempo, más personas
utilizaron esta idea, es decir, aprendieron de la subcultura que representó la Harina
P.A.N. y la volvieron una cultura, permitiendo el avance de esta sociedad.

En cambio, una contracultura significa el rechazo a una nueva subcultura, ya


que representaría una amenaza a la cultura como tal. En muchos casos puede ser
cierta dicha amenaza, ya que puede ser un peligro para las personas, pero muchas
veces también puede significar la pérdida de una oportunidad de que una sociedad
avance, aislándola así a una posible prosperidad. Además de que crearía una
población marginada, es decir, personas que apoyan esta contracultura a pesar de que
la corriente principal o la cultura no lo haga.
Volviendo al ejemplo de la Harina P.A.N., esto nos demuestra que muchas
veces las subculturas pueden representar una pérdida de tradición, es verdad, pero
tampoco significa que se pierda por completo, simplemente se está modificando un
poco para la comodidad de las personas. Es como que se cambian las vértebras pero
la columna vertebral sigue intacta, ya que hoy en día, en Venezuela todavía es muy
común el comer arepas; solo que con un tiempo de preparación menor al que antes se
usaba.

Lo mismo sucede internacionalmente, las diferentes culturas luchan entre si,


para mantenerse a flote y no ser erradicadas. Y muchas veces unas se convierten en
subculturas y hasta a veces en contraculturas de otras. Es hasta a veces una guerra
mediática, como bien lo dice el libro, en ver quién atrae más masas de gente a su
bando mientras algunas intentan destruir a las otras.

Pero, si una sociedad hiciera de esas culturas, subculturas, en vez de


contraculturas, el avance que obtendría en diferentes ámbitos sería bárbaro. Y
obviamente, sin perder las costumbres que la caractericen como cultura y a su vez
como sociedad. Podría facilitar la vida de las personas que integran dicho grupo
social y disminuiría los conflictos internos con los marginados, y también disminuiría
en gran parte los conflictos externos con las demás sociedades. Hacer una
retroalimentación cultural. Como vendría siendo el caso de Japón, el cual aprendió y
adaptó diferentes costumbres de muchas culturas en el mundo en la suya,
permitiéndole así un avance en su sociedad que ni la primera potencia mundial ha
podido superar en varios ámbitos.

No simplemente hay que cerrarse en el círculo que existe, y volver las nuevas
ideas y costumbres en contra, porque simplemente esto traería un retraso como
sociedad muy grande y consigo la extinción de dicha cultura y hasta de una sociedad,
como se ha visto en distintos casos a lo largo de la historia, y como posiblemente se
verá en un futuro quizás lejano o cercano; como es el caso de Corea del Norte, quien
al cerrarse a solamente su ideal y su cultura, condenó la misma a su extinción.

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