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¡Aeón!

Una vida prohibida

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Beiker López

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¡Aeón! Una vida prohibida

Beiker López

¡Aeón!
Una vida prohibida

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Beiker López

“¡Aeón! Una vida prohibida”


© Beiker López, 2017

Depósito Legal: LA2017000148


ISBN: 978-980-12-9702-4

Montaje y adaptación de portada:


Zembla Narváez

Diagramación:
Zembla Narváez

Corrección de textos:
José Santana

Impreso en:
Editorial Horizonte, C.A.
Calle 41 entre Av. Venezuela y Carrera 27 - Nº 26-72.
Teléfonos (0251) 446.2317 - 446.2324
e-mail: edt-horizonte@hotmail.com

Impreso en la República Bolivariana de Venezuela.


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¡Aeón! Una vida prohibida

Agradecimiento.... 07

Prólogo... 09

Capítulos

Capítulo 1: El recuerdo de mi vida... 11


Capítulo 2: La habitación de aquel piano viejo... 27
Capítulo 3: La magia oculta de los libros... 43
Capítulo 4: Toca para mí este piano viejo... 57
Capítulo 5: El poder de las rosas... 71
Capítulo 6: La verdadera realidad... 87
Capítulo 7: El mito, el piano y la doncella... 101
Capítulo 8: Las verdaderas ilusiones... 117
Capítulo 9: Un hechizo de sacrificio... 131
¡AEÓN! Una vida prohibida
Los nueve fantasmas del piano viejo... 151

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Beiker López

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¡Aeón! Una vida prohibida

Agradezco a mi dios por todo lo


que me ha brindado en esta vida,
a mis familiares por siempre estar
en los momentos malos y buenos,
a mis amistades que siempre me
apoyaron, a la editorial por darme
el apoyo en este proyecto, a mis
santos y a mis difuntos porque
sé que ellos también me apoyan
desde el cielo, éste es un escalón
de una escalera que aún me falta
caminar; siendo un gran logro para
mí, doy gracias a la vida por darme
tantas alegrías, a las experiencias
por enseñarme a madurar y a los
tropiezos porque de ellos aprendí
a levantarme con más firmeza,
seguiré luchando por mis sueños
hasta llegar al final de esa escalera;
sintiéndose tan orgullosos de este
humilde amante de la vida.

Redes sociales:

Instagram: beikerlopezp
Correo: beiker26lopez@gmail.com

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Beiker López

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¡Aeón! Una vida prohibida

PRÓLOGO

En medio del silencio y un grandioso hotel donde se


avivan recuerdos, Kerf Sylver hacía un repaso de su vida a ojos
cerrados, un flashback de sabor agridulce que le hacía añorar
intensamente cada instante vivido en ese mundo donde su vida
cobró plenamente un sentido, donde sus más grandes sueños
se hicieron realidad, donde conoció lo que era el valor de las
experiencias y el misterio era su guía, pero

¿podría decir sin titubear que estaba realmente


satisfecho con el final de su historia de amor?

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Beiker López

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¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 1

El recuerdo de mi vida
(En la actualidad, Biblioteca Ranhze, año 2057)

–¡Buenos días señor! Pase adelante, su público lo espera en el auditorio


principal de la biblioteca RANHZE.
–Muy buenos días, ¡gracias! Con su permiso.
Hoy es un gran día. Hace algunos años decidí escribir un libro, del cual
surgieron siete tomos más, prácticamente es un recuerdo, más que un recuerdo
es un tesoro que guardo valiosamente en mi memoria y en mi corazón. Fue
una de las experiencias más hermosas que he vivido y todo lo plasmé en
ellos; nunca lo llegué a publicar por miedos, pero hace un año decidí que
el mundo conociera esa historia y fue un gran éxito, una de las sagas más
vendidas del momento, ahora estoy en una conferencia donde el principal
invitado soy yo, ¡estoy algo nervioso! Pero es una satisfacción única saber
que existen personas que admiran tu trabajo, que quieren conocerte y ver
quién creó lo que se convirtió en un mundo de fantasías, romances, tristezas
y, sobre todo sueños para muchos.
Debo admitir que esta biblioteca es inmensa, tiene una estructura de aires
egipcios, elegante y bastante ambientada con mucha naturaleza, cada vez que
camino por los pasillos me hace recordar a un palacio de uno de mis libros.
–Ya entraré al auditorio principal de la biblioteca.
¡Vaya! cuántas personas, está lleno el lugar, cuántos aplausos, cuánta
alegría y emoción veo en los rostros de cada persona al verme caminar.
Bueno manos a la obra es momento de que el mundo conozca la verdadera
historia de mis libros, suelto un suspiro de la emoción.
Al tomar asiento me dirijo al público:
–Buenos días a todos quienes han asistido el día de hoy, mi agradecimiento
eterno por haber leído mis libros, sé cuánto le han gustado, también sé que
tienen muchas dudas y hoy se las aclararé; solo pregunten y yo les responderé;
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Beiker López

una vez más ¡gracias por su presencia! Es un gran halago y un orgullo saber
que lo que hago haya dado frutos y que a muchas personas al igual que
ustedes le hayan gustado hasta el punto de identificarse con la lectura.
Al sentarme muchas de las personas del público levantaban la mano
queriendo preguntar acerca de alguna duda que les surgió desde el momento
en que leyeron los libros; comencé a escuchar las inquietudes de esas
personas.
–Buenos días, ¿en qué se inspiró para escribir los libros?
–¿Cómo surgió la trama de los libros?
–¿En qué se inspiró para describir sus personajes?
–¿Qué significado tienen sus libros?
Escuché cada una de las preguntas, procediendo a responderlas.
–La verdad son preguntas bastante buenas, mi inspiración y todo lo
relacionado con esos libros son y serán prácticamente mi vida entera. Por
favor pónganse cómodos, que les contaré y no empezaré con el típico “Érase
una vez”; esta historia comienza distinta, porque quien la contará es su
protagonista, es el recuerdo más valioso de mi vida y que jamás olvidaré…
Respiré profundo y continué…
…Lo llevo en el corazón como un tatuaje, como una cicatriz que jamás
se borrará; esos libros que tienen en sus manos, son una parte de mí que dejé
en letras. He de suponer que todos tienen la misma pregunta y es ¿el origen
del nombre Aeón: una vida prohibida?, para eso debo presentarme y contarle
sobre mí, mi nombre es Kerf Alejandro Sylver, actualmente tengo 65 años
de edad, vivo felizmente en una casa muy cómoda con mi perro Dolge, es un
Golden retriever mi fiel compañero.
Observé cómo todos escuchaban atentamente lo que les decía; me sentía…
feliz, sí, enormemente feliz.
Este libro ha marcado mi vida no por el simple hecho de haberlo escrito,
sino que también lo vivo a diario pues como verán transformé mi casa en su
totalidad basado en lo que describo en el libro.
Continué dándoles detalles de mi hermoso hogar…
…Es blanca con un frente hecho de piedra, tiene un jardín hermoso
que yo mismo planté, tiene unos monumentos algo extraños, pero fueron
hechos e inspirados en Aeón. Allí se encuentra todo tipo de flores exóticas
como silvestres que cuando florecen dispersan un dulce aroma que ningún
perfume pudiese tener; uno que te hace suspirar relajando todos los sentidos.

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¡Aeón! Una vida prohibida

Es hermoso en realidad y estar allí me ayuda a pensar y sentirme en paz. En


el medio hay una fuente con agua pura, y a su lado se encuentra una plaza
donde las personas que me visitan pueden sentarse para admirar la belleza de
tan florido jardín para sentirse en santa paz.
La entrada de mi hogar comienza con una puerta de madera y vidrio,
dentro de este hay figuras de mariposas de color rojo y verde, que dan un
toque bastante elegante. A su vez, hay un balcón para durante las tardes
tomar té mientras Dolge reposa a mi lado. Al entrar encontrarán una sala
con muebles grandes y acolchados que dan comodidad y elegancia al mismo
tiempo, entre ellos está una pequeña mesa con recuerdos hechos por artesanos
inspirados también en Aeón, yo mismo les fui dando instrucciones de cómo
hacer sus diseños; en las paredes ubiqué cuadros pintados con paisajes de
aquella tierra, la cual amo con toda mi alma.
Siempre adorno mi casa con muchas flores del jardín para que así mi
hogar tenga ese dulce aroma que las flores ofrecen y en el medio de la sala,
una lámpara hecha de cristal que ilumina toda esa área.
Era impresionante ver cómo ellos imaginaban mi casa, así que decidí
darles más detalles.
En la sala conseguiremos una escalera de madera, en su borde lleva unas
enredaderas que son hechas y pintadas a mano que a simple vista parecen
reales. Pues sí, como pueden ver soy amante de la naturaleza, aprendí a
amarla y llevarla en mi vida.
Al lado de la escalera se encuentra otra pequeña sala, que para mí es la
parte que más significado tiene en mi corazón; en ella se encuentra un piano
blanco de cola que brilla como si quisiera ser tocado, es hermoso, cada vez
que lo veo siento admiración por él, su color blanco brillante y cada una
de sus piezas, a veces lo toco pero la verdad solo sé tocar una canción. Al
tocarlo me lleva a otro lugar y ustedes ya se imaginarán cuál es. En dicha sala
solo está el piano con dos cuadros muy llamativos; en uno está un individuo
tocando piano y el otro es de personas vestidas elegantemente danzando un
vals, esa área está exclusivamente inspirada en el vals y todo allí es en blanco
y negro para que haga juego con el piano, me enorgullece tener ese espacio
donde puedo expresarme sin hablar.
Hacia la derecha se encuentra una puerta que lleva a la cocina, adornada
al igual que la escalera, es hecha de madera con las mismas enredaderas. Al
subir las escaleras se encuentra mi cuarto.
–Mi habitación es toda de madera al igual que la escalera y la cocina, mi
closet tiene la misma estructura, mi habitación a diferencia de todo mi hogar,

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en toda la pared está dibujado un paisaje que está hecho de vidrio, es realmente
un espectáculo, en el centro están dos personas tomadas de la mano como si
fueran a bailar, vestidas de traje, como si estuviesen muy enamoradas una de
la otra, a los lados están muchas flores y rosas como simbolizando el amor
que se tienen, el dibujo tiene mariposas de color dorado y al final de éste un
Pegaso con sus alas abiertas, el vestuario de los que están allí pintados es rojo
con dorado, rojo que simboliza el amor y el dorado representa la luz viva en
ello. ¡Es hermoso! Cada día que pasa al ver tan creativo diseño, me siento…
aun más feliz y no les miento… más enamorado de la vida.
Escucho una voz entre los espectadores
–¡Señor Kerf! ¿Representan algo para usted los personajes de ese cuadro?
Sonreí con esta pregunta, y procedo a responder.
Una de las personas que están pintadas soy yo y la otra efectivamente quien
fue y seguirá siendo mi gran amor, la persona de la cual me enamoré total
y ciegamente sin dudar ni un segundo. Era un amor único de esos escasos,
pero que no es imposible encontrar. Vivimos en un mundo tan materialista y
diferente que yo termino viéndolo de una perspectiva muy propia, es decir,
de experiencias que he tenido que vivir.
–A veces no nos damos cuenta de lo felices que somos con lo que tenemos
y desperdiciamos el tiempo en cosas sin valor.
–Aunque la verdad, les confieso que llegué a ser una persona que no creía
en el amor y estaba decepcionado del mundo y de la sociedad, por tanto
egoísmo, ansias de poder, odio y hasta llegué a tener rencor por todo lo que
me rodeaba, actualmente vivo solo con Dolge.
Otra voz del público habló:
–¿Por qué está solo Señor Kerf? ¿Dónde está esa otra persona?
–¿Por qué estoy solo? la vida es una corriente que puede cambiar su curso
en cualquier momento y siempre para un bien, si lo ves desde ese punto de
vista. La misma decidió enseñarme de una manera fuerte y dura, pero a su
vez hermosa a aprender a amar lo que me rodea; si estoy solo es porque así
la vida lo quiso. De quien me enamoré solo les puedo decir que está en algún
lugar lejano, ahora solo vivo de su recuerdo.
Respiré profundo…
–Ahora sí les voy a ir explicando el inicio y hasta la actualidad de esa
lectura que llevan en sus manos.
Desde pequeño me di cuenta que tenía un don muy particular, cada
vez que dormía, soñaba con un lugar diferente al que conocemos. En los

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sueños hablaba, exploraba y siempre estuve seguro que todo era parte de
mi imaginación. Con el paso del tiempo comencé a buscar en el mundo real
cosas parecidas a todo lo que soñaba y conocí finalmente el mundo de los
videojuegos.
Cuando tenía veintidós años de edad, me encontraba en mi cuarto
concentrado en esos juegos de internet que terminan robando tu atención
completamente y te abstraen del mundo, llegando a pasar horas y horas sin
permitirte hacer otras cosas, hasta convertirse incluso en un vicio muy fuerte.
Vicio que convirtió mi día a día en solo estudiar y jugar.
Mi madre por su parte, fue una mujer luchadora, toda una dama a la cual
admiré y amé con todo mi ser. Blanca, de estatura algo pequeña, ojos pardos
y cabello castaño. Era de las que poseen carácter cariñoso, pero a su vez
fuerte, en general, una mujer muy pacífica que adoraba tomar sus tiempos
de descanso.
Madre de tres hijos, incluyéndome. Ama de casa y guerrera que luchaba
por cada uno de nosotros y le doy más mérito al darme cuenta que cuidar de
un hijo especial no es fácil y ella con amor y cargada de paciencia se encargó
de hacerlo hasta el último minuto de su vida.
Me regañaba por ser un muchacho que no salía de su cuarto, estando
siempre al frente de un computador. Yo trataba siempre de ayudar en las
tareas del hogar, como preparar el almuerzo, y en las noches solía conversar
con ella de cosas cotidianas, aunque en algunas ocasiones ella terminaba
contándome experiencias y anécdotas de su adolescencia. Amaba oír sus
historias, una de ellas era cómo conoció a mi padre.

(Unión azul, Año 1985)


Me contaba que tenía diecisiete años en aquella época y estaba estudiando
quinto año de bachillerato, el último antes de entrar a la universidad. Un día
cualquiera, ella iba apresurada camino a sus clases; corría a toda marcha
a través de la avenida “unión azul” llamada así, por los árboles que allí
florecían con tonos azules y largas ramas que al unirse con los árboles del
frente, formaban un gran túnel natural en plena avenida. En ese transcurrir
casi violento, tropezó con un joven y ella cayó al suelo… ¡ese joven era mi
padre!
Asombrado, mi padre pidiendo disculpas le ayudó a levantarse y al
encontrarse sus ojos ambos quedaron sin palabras, como si hubieran detenido
el tiempo por un corto plazo. Él reaccionó y le preguntó que si estaba bien, y
se excusó diciéndole que iba de prisa a tomar un café para no llegar tarde al
trabajo. Ella le pidió que no se preocupara pues también había sido culpable

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Beiker López

por no ver hacia donde iba. Ambos rieron y con sus manos agarradas, mi
padre preguntó cuál era su nombre.
Ella perdida en la mirada de mi padre le contestó:
–Soy Elena Vázquez, es un gusto para mí conocerlo, caballero.
Un poco apenada, pero con mucha curiosidad, también preguntó su
nombre.
Y él encantado con su educación y modales sonrió diciéndole:
–Soy Alexis Sylver y déjeme decirle señorita que es un placer conocerla.
Con una tímida sonrisa mi madre se disculpó diciéndole que llegaría tarde
a sus clases. Mi padre por su parte le dijo que no le haría perder más tiempo
sin embargo antes de marcharse se dirigió a ella una vez más.
–Acepta tomar un café mañana un poco más temprano, por favor, como
disculpas por haberte tropezado.
–Claro y muchas gracias por la invitación, caballero.
Alegremente aceptó.
Él respetuosamente le pidió que no le dijera más caballero, que solamente
le llamara Alexis. Y soltándole la mano, mi madre siguió su camino para
luego voltearse y espontáneamente decirle una última frase.
–Llámame Elena.
Al día siguiente más temprano mi madre se vistió y se perfumó muy
entusiasmada. Salió de casa con la bendición de mi abuela y con ansias intactas
de volver a ver a Alexis. Justo en la esquina de la avenida se encontraba él;
la sonrisa de mi madre era grande, no podía ocultar la felicidad que brotaba
por saber que él estaba allí. Con una nostalgia feliz mi madre me contó lo que
pasaba por su mente en ese preciso momento.
–¡Qué emocionante y extraño es todo esto!, jamás me había sentido
tan atraída por un hombre, ¿estará mal? ¿Cómo puede estar mal algo tan
agradable?, el solo mirarlo en la esquina debajo de esas flores azules me
parece mágico.
Mientras caminaba a encontrarse con mi padre, observó un aviso que
decía; “unión azul, un paraíso para ti”. ¡Qué irónico! Pensó ella.
Él la recibió con un buen día, y ambos sonrientes fueron a buscar el
prometido café en una panadería llamada “Azalia” que se encontraba allí
cerca. En el lugar había una terraza con pequeños árboles de flor azul. Mi
madre siempre mencionaba lo increíble de esos momentos y decidieron hacer
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¡Aeón! Una vida prohibida

de ese momento una rutina. Cada mañana se veían en la misma esquina para
tomar café en la terraza de Azalia hasta quedar plenamente enamorados.
Mi padre era un hombre alto y según cuentan todo un galán de piel morena.
Era graduado en comercio, convertido en un exitoso comerciante con tan
solo veintidós años. Un año más tarde mi madre se graduó de bachiller y al
poco tiempo, al año siguiente, se casó con mi padre.
A los diecinueve años, mi madre dio a luz a mi hermano Karl Sylver en
el año 1987, cinco años después en el 1992 yo nací y finalmente luego en el
año 2000 nació mi hermanito Karfer Sylver un niño especial con déficit de
atención.
Al paso del tiempo, fuimos creciendo como una gran familia unida, mi
madre nos fue educando como fue educada ella con valores muy pulcros y
correctos; a medida que fue pasando el tiempo mi hermano y yo crecimos con
diferencias de comportamientos yo era más correcto y él era todo lo contrario
a mí, no nos llevábamos bien en nada, discutíamos mucho y yo empecé a
encerrarme en mí mismo, porque es obvio, en algunos casos el hermano
mayor siempre quiere ser el que manda y este era el mío, mi hermano tenía
una personalidad muy imponente, era robusto y muy masculino, de esos
hombres que piensa que entre más masculino eres mucho mejor.
“La vida es para disfrutarla porque existe una”. De esta forma se expresaba
mi hermano, era muy parecido a mi padre en sus aspectos físicos y yo pues
era más a lo de mi madre, hasta en eso éramos diferentes, yo era pelo castaño
oscuro, ojos café claros, piel blanca, de baja estatura y era muy creyente en
la fantasía e imaginación. Gracias a mi madre creía en lo imposible y más
en esas historias que ella me contaba; creí más en eso que “lo imposible se
hace posible y lo posible nunca es imposible”. Eso siempre decía mi madre.
Mi hermano solo me reprochaba que si no vivía en la realidad no conocería
lo bueno de ella, un pensamiento tan errado que muchas personas tienden a
tener, yo fui creciendo de manera tranquila, aunque discutía mucho con Karl,
él no podía soportar que fuera diferente y pensara diferente a él, menos hacer
lo que me gustara que era estar en mi cuarto y ver televisión.
Cuando cumplí los diecisiete en el 2009 para ser exacto, me inscribí
en un colegio nuevo para cursar mi último año de estudio para así ir a la
universidad; en ese momento tenía mucho miedo, ya que a esa edad yo debía
ser muy sociable, pues resultó todo lo contrario, era muy tímido, callado y
solo vivía en mi mundo creado en mi cabeza, por mis fantasías y mi forma
de ver la vida desde otro punto de vista diferente a los demás. Mi primer día
de colegio efectivamente fue algo muy incómodo por no conocer a nadie,
más que eso por mi timidez y el miedo a no congeniar con ninguno de mis
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Beiker López

otros compañeros siempre lo tenía presente, a las semanas todo era igual al
llegar al colegio, entraba a mis clases sin hablar con nadie, al terminar me
iba a mi casa, pero un día todo cambió; de camino a casa como de costumbre
una chica morena, alta y con una personalidad muy alocada se me acercó
diciéndome:
–Tú, ¿por qué no hablas? ¿Te han comido la lengua los ratones?
Solo le sonreí y me fui, ella quedó muy asombrada por mi reacción, me
preguntaba a mí mismo cómo esa chica se me acercaría sin saber quién era
y solo me pregunté, ¿con qué intensiones me hablaría? Nuevamente escuché
por parte de ella:
–¡Espérame!
Pues sí, la misma chica que se me acercó diciéndome que si mi lengua fue
comida por ratones, se me presentó.
–Hola de nuevo, discúlpame por no presentarme fui mal educada, soy
alocada y mi nombre es May Castell, es un gusto. Extendió su mano hacia
mí y con algo de temor, hice lo mismo.
Con una sonrisa en su cara, cabello alborotado y ojos negros comenzamos
a caminar juntos, también me presenté y se creó una conversación entre los
dos, contando nuestros gustos, hobbies y lo que soñamos.
–Yo sueño con ser una diseñadora de modas muy famosa y ¿tú?
Le contesté que aún no lo sabía, pero que deseaba mucho en algún
momento ser reconocido y famoso por alguna cosa que fuera útil para las
personas, ella sonrió contestándome
–Ya verás que sí, yo sé que mis diseños serán los mejores y tú serás
famoso por algo que tú no sabes qué es, pero lo serás.
Cada minuto que pasaba con ella sentía una confianza plena y su
entusiasmo era único; le pregunté por sus familiares y solo me dijo que su
familia era muy especial, que vivía con sus padres y dos hermanos, pero
luego de algunos minutos me dijo que no quería hablar de eso, yo le pregunté
que si no le inspiraba confianza, a lo que ella respondió:
–Soy chica de bajos recursos, aunque no me da pena decirlo, me siento
orgullosa de mi familia, pero a las personas les importa mucho el estatus
social y te discriminan por no tener mucho.
Sonreí diciéndole que no me importaba su estatus social, me importaba
era seguir hablando con ella, que me agradaba mucho la idea de seguir
conversando locuras, ella también me contestó que deseaba seguir teniendo
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¡Aeón! Una vida prohibida

muchas conversaciones juntos. Al pasar el tiempo nos convertimos en lo que


somos actualmente ¡los mejores amigos!...
Al pasar los meses, May y yo seguíamos fortaleciendo nuestra amistad
contándonos nuestras experiencias diarias; al año llegó la graduación, mi
mamá estaba muy orgullosa al igual que mi padre de verme llegar hasta ese
punto y poder ser más adelante alguien en la vida. Mamá se dirigió a mí, me
abrazó y con orgullo en sus ojos me dijo:
–Hijo estoy muy orgullosa de ti, ahora te vas a encontrar con lo que
realmente puede ser la vida.
Mi padre también me abrazó. Fuimos juntos al acto de graduación a
recibir el título, al llegar al acto, todos mis compañeros cargaban consigo su
mejor traje de gala y en sus rostros la mayor alegría que se puede tener en
esos momentos, pasamos a donde se efectuaría la entrega de diplomas, aún
sin creer que ya me había graduado; empezaron a llamar a cada estudiante
para hacerle entrega de su diploma entre aplausos y flash por las cámaras, no
podía esperar escuchar mi nombre, llamaron a May primero que a mí. Me
paré aplaudiendo fuertemente, pero para mi mayor alegría el siguiente que
fue llamado a recibir diploma fui yo. Me sentí tan feliz que solo pensaba: ¡lo
logré!... Al terminar el acto salí corriendo a abrazar a May y en el oído le dije
las palabras:
–Lo logramos amiga, gracias por el tiempo que has alegrado y cambiado
mi vida.
Una nueva etapa había comenzado, etapa por la cual todos pasamos
alguna vez y se llama universidad. Tomé la carrera de comunicación social
cursando un año de ella en el 2010, pero no consideré que fuera para mí; en
el año 2011 busqué otra carrera universitaria con la cual yo me identificara,
en ese momento conocí la psicología en el 2012; cinco años más tarde me
gradué obteniendo el título de licenciado. Invité a la familia de May a cenar
en mi hogar, nuestros padres nos hicieron una cena deliciosa y con mucha
felicidad. Terminamos la cena entre conversaciones, risas y anécdotas, May
se levantó mirando a todos en la mesa, haciendo una propuesta hacia mi
persona:
–Te propongo Kerf que hagamos un viaje, a un pueblo llamado Lirio de
Luna, allí se celebra un gran festival y quisiera conocerlo.
Sin pensarlo dos veces acepté la propuesta de que nos fuéramos de viaje,
ya que sería un regalo para mí por mi graduación, continuamos celebrando en
mi casa; a las dos de la mañana salí hacia el patio trasero de mi casa, mirando
el cielo despejado y lleno de mil luciérnagas llamadas estrellas, cerré los ojos

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Beiker López

y en mi mente se encontraban imágenes las cuales son recuerdos de todo el


trayecto que había vivido desde que comencé el colegio, hasta terminar la
universidad, acompañado de suspiros abrí los ojos; en ese momento llegó
May.
–¿Te pasa lo mismo que a mí? ¿Sientes esa expectativa de cómo será la
vida desde ahora en adelante? Pues la verdad no importa mucho el cómo
será, siempre y cuando vivamos felices.
La miré diciéndole:
–¡Tienes razón! Prometamos ser felices a cualquier costo.
Sonreímos y ambos miramos al cielo. La semana entrante partimos muy
temprano al pueblo, May emocionada solo decía que quería conocer aquel
festival de Lirio de Luna, contándome que en él había un mito muy famoso.
–Kerf, se dice que en ese festival mientras bailas, a las doce cuando la
luna está brillando pides un deseo cerrando los ojos.
Yo comencé a reír y le dije que, si creía en esas cosas, contestándome.
–Siempre creo en lo imposible.
Pues tienes razón, aquel que no crea hacer lo imposible nunca llegará a
hacer cosas posibles.
Pasó la semana, al montarnos en el autobús, un expreso de color azul,
me quedé pensando cómo nos pudiese ir, qué cosas nos depararía todo
el viaje, nos sentamos en la parte izquierda en el séptimo par de puestos,
casi al final del expreso. Pasamos las horas hablando y contándonos cosas
hasta imaginarlas, riendo de todo; el autobús hizo una parada para echar
combustible en un lugar llamado “El encuentro”.
A los minutos se montó un muchacho de piel blanca, alto, de ojos verdes,
cabello castaño claro y con lentes. No pude evitar verlo dejándome un poco
distraído, May al mismo tiempo vio mi reacción y con su brazo derecho me
empujó, al acto reaccioné y le pregunté por qué ese empujón.
–Pues te vi como distraído y no precisamente por pensar.
Solo agaché la mirada diciendo que no pasaba nada, May mirándome con
una sonrisa pícara me dejó tranquilo y seguimos conversando de aquellas
cosas tontas que dos adolescentes en una nueva aventura pueden hablar.
El chico que me distrajo lo fui observando hasta que se sentó en la parte
derecha al octavo puesto del expreso sin percatarse de que su presencia
me intimidó. Al pasar de las horas después de la estación “El encuentro”
llegamos al punto de llegada, el pueblo “Lirio de Luna”.

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¡Aeón! Una vida prohibida

Al bajarnos de aquel expreso y contemplar el lugar, tanto May como yo


quedamos encantados al observar cada parte de aquella estación que se hacía
llamar “Encanto de viaje”.
Una estación totalmente limpia, en cada parte se encontraban decoraciones
de lunas, flores de cualquier tipo, un lugar donde abundaban las rosas
amarillas, blancas y rojas, una organización y distribución del lugar tan
perfecta que no había obstáculos de tráfico ni de personas. Al bajarnos May
solo me comentaba lo emocionada que se encontraba.
Yo en un momento esperé ver que aquel chico se bajara del expreso,
el mismo que de un momento a otro atrapó mi atención con tan solo su
presencia, efectivamente al bajarse no pude evitar seguir viéndolo y ver
hacia qué camino tomaba: se dirigió a un puesto muy adornado con rosas,
donde vendían bebidas, compró un agua pagó y se fue caminando hacia las
afueras del establecimiento de expresos. Al irse le comenté a May:
-–La verdad fue algo extraño, pero me gustó sentir eso, primera vez que
siento que una persona atrape mi atención de esa manera, pero basta de
sentir ese sentimiento.
May solo sonrió al hacerrle tal comentario; nos fuimos en busca de un lugar
donde pasar la noche ya que era tarde y ya iba a anochecer. Caminábamos
sin saber a dónde dirigirnos, después de tanto caminar May vio un cartel
donde había una publicidad de una posada con un número local de teléfono,
sin pensarlo dos veces hicimos la llamada desde mi celular, nos contestó una
señora mayor de una voz muy dulce y cálida:
–Muy buenas noches, Posada Luz de Luna, ¿qué se le ofrece?
Enseguida preguntamos si había disponible alguna habitación para dos
personas pues necesitábamos pasar la noche en algún lugar, respondiendo:
–Se encuentran dos habitaciones disponibles, necesito seguridad de que sí
aceptan quedarse por esta noche aquí.
Sin pensarlo mucho decidimos que sí, preguntamos el nombre de quien
nos respondió la llamada:
–Soy Lidia Osbel, es un gusto poder serviles.
Tan a gusto nos sentimos al poder hablar con la señora Lidia, que aun
sin conocerla en persona se sentía la calidez humana en su voz delicada;
le pedimos la dirección donde se encontraba la posada a lo que ella nos
respondió:
–Se encuentra en la avenida lucero es la avenida principal del pueblo,

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Beiker López

al tomar un taxi díganle que van a la Posada Luz de Luna ya que es muy
conocida en el pueblo, de seguro el taxista sabrá traerlos hasta aquí.
Dándole las gracias, colgamos el celular un poco aliviados al saber que ya
teníamos un hospedaje, nos dirigimos a buscar un taxi que pudiera llevarnos
directo a la posada, ya que nos encontrábamos muy cansados de tantos
kilómetros recorridos para llegar hasta el pueblo. En ese momento buscando
algún transporte nos topamos con un anciano dirigiéndose hacia nosotros.
–Hola chicos, ¿necesitan algún taxi que los lleve a algún lugar?
May al escucharlo me miró como si la buena suerte estuviera de nuestro
lado.
–Sí, necesitamos llegar a la Posada Luz de Luna.
A lo que él contestó:
–Perfecto, yo sé dónde queda, puedo llevarlos si así lo desean.
La suerte estaba de nuestro lado, el anciano nos pidió que lo siguiéramos
hasta su carro, era una camioneta antigua algo deteriorada, color verde opaco,
sin embargo, no nos detuvo a continuar e ir a nuestro destino.
Ya casi el sol se estaba ocultando, quedarnos solos de noche no era una
opción para nosotros dos. El anciano muy contento, sonriente como aquel
abuelo feliz de ver que sus nietos lo visitan, nos miraba preguntándonos:
–¿Qué fue lo que les hizo tomar la decisión de quedarse en esa posada?
Me da mucha alegría saber que se quedarán en ella.
Nosotros un poco curiosos les respondimos que si era que a ella no iban
muchos turistas a quedarse, a lo que contestó:
–Hace muchos años era muy visitada, era una de las mejores posadas de este
pueblo, las personas venían cada año al festival, que dura aproximadamente
dos semanas, el cual consiste en un baile donde personas pueden estar sin
temer a ser juzgadas ya que, es para cualquier género. Mientras se baila con
la persona puedes transmitir sentimientos sin hablar y expresarlos como si
tuvieras el don de la telepatía, cuando sientas que esa persona con quien
bailas es la indicada, miras a la luna brillante que con su resplandor ilumina
como la plata mientras posa sobre el medio del cielo estrellado, deberás pedir
un deseo cerrando los ojos seguido de una oración la cual es:
“Que el deseo de este corazón puro se haga realidad como el brillo
plateado de la luna que posa sobre el mar, mar de cada corazón que baila en
este festival, eres la luz de los deseos más puros y fuertes déjame bailar para
siempre con la persona que iluminas hoy para mí”.
22
¡Aeón! Una vida prohibida

Después deberás abrir los ojos, podrás ver cómo sin hablar esa persona
con quien bailas sonríe, así fue como conocí a mi esposa en ese festival,
tenemos cuarenta años de casados. Déjenme presentarme me llamo Jhoel
Osbel es un gusto conocerlos.
May encantada con la historia le preguntaba el por qué actualmente no
venían turistas a este pueblo por el festival, observamos que el pueblo estaba
apagado y se veía un poco desolado a pesar de que en pocos días el festival
iba a dar inicio. Nos parecía extraño que casi nadie vendría a un festival tan
bonito, a Jhoel se le entristecieron los ojos contándonos.
–Hace algunos años en pleno festival llegaron unas personas a robar
las pertenencias de todos los que se encontraban allí, los de seguridad se
enfrentaron a ellos y a consecuencia hubo muchos muertos, se corrió el
acontecimiento por muchas partes, desde entonces cada año vienen menos
personas, les asusta el hecho de que vuelva a ocurrir tal atrocidad y este
pueblo está siendo olvidado cada año que pasa.
A las personas que habitan aquí también se les ha olvidado una leyenda
del porqué se realiza el festival, ya nada es como antes de lo sucedido y por
más que muchos pongamos de nuestra parte para realizar el festival, no es
lo mismo.
Entristecida, May se quedó callada, pero a mí me llamó la atención
aquella leyenda y también que el señor Jhoel era del mismo apellido que la
señora Lidia que nos contestó al llamar a la posada.
–Disculpe señor Jhoel ¿es una molestia si le pido que me cuente sobre la
leyenda de este pueblo, y qué relación tiene con el festival?
Como por arte de magia los ojos de Jhoel que se habían apagado volvieron
a brillar, comenzando a contar esa leyenda que existía.
–Cuenta la leyenda que este pueblo es lo que queda de un mundo llamado
Aeón; el festival que ustedes conocen en realidad era conocido como “el vals
de las mil mariposas” en esa nación, mis padres me contaban que ese baile
contenía magia pura y se realizaba para venerar la nación por su naturaleza
tan abundante y a una diosa que se le llamaba “Esmeralda reina de las
rosas”, una diosa que nadie pudo ver nunca pero que existía, al igual en ese
baile como en este festival, se bailaba con la persona que creías que era la
indicada o como se dice que te enamorabas a primera vista. Mientras la luna
posaba en el medio llegaban mil mariposas para danzar, la verdad no sé qué
paso a lo largo de los años y pues aún se hace ese festival en honor a aquella
nación que ya no existe por alguna razón que desconozco, pero amaba que
mi padre me contara sobre esa leyenda, me supongo que tiene más que contar
sobre ella y más cosas de las cuales no las sé pero lo que siempre he pensado
23
Beiker López

es que sí existió esa nación, creo en ella más que nadie y si no creyera no
estuviera casado con mi esposa; porque me enamoré a primera vista y ella
también de mí, bailamos y henos aquí en la actualidad después de cuarenta
años juntos.
La leyenda también cuenta que ese festival se hacía para que la nación
prosperara en su abundante naturaleza, además para que la diosa los
protegiera de un caos y una guerra, mi padre hablaba sobre siete guardianes
que controlaban a siete bestias elementales de ese mundo. Me hubiese
gustado saber más sobre ella ¿suena interesante no?...
Podía imaginarme todo lo que el señor Jhoel nos estaba contando,
generándome querer indagar en si ese mundo existió
–Señor Jhoel ¿no hay más sobre ese mundo que usted habla llamado
Aeón? quisiera saber más sobre ello, captó toda mi atención ese mundo.
Al señor Jhoel parecía que le brindamos un grano de aliento al escuchar
las ganas de querer saber más sobre este pueblo y de ese mundo llamado
Aeón.
En el camino solo podía pensar que fue una buena idea haber ido a ese
pueblo pues qué iba a imaginar que me conseguiría con un misterio tan
fantástico y parecido a mis pensamientos imaginarios.
–Señor Jhoel es un placer conocerlo y gracias por contarnos sobre este
pequeño pueblo, yo soy Kerf Sylver, ella es mi mejor amiga May Castell
estoy seguro que nos encantará este pueblo.
Él solo me miró por el retrovisor con una sonrisa y murmurando dijo:
–Estoy seguro que sí.

(En la actualidad, Biblioteca Ranhze, año 2057)


Todos los que estaban en el auditorio tenían una cara de que disfrutaban la
historia y a uno de ellos le surgió una duda la cual me preguntó:
–¿Señor Kerf que pasó luego de conocer al señor Jhoel?
La verdad lo que pasó luego fue una de las aventuras más grandes,
espectacular, extraña y maravillosa de mi vida. A veces lo que menos creemos
que nos hará cambiar es lo que más hace un cambio en nosotros.
Todas las personas tenemos un sueño, una fantasía, un anhelo y una
ilusión. Para mí ese pueblo era el comienzo de todo ello, aunque yo no lo
sabía, para May era el comienzo de su búsqueda amorosa.
A todas estas les seguiré contando qué pasó luego de conocer al señor
Jhoel.

24
¡Aeón! Una vida prohibida

(En el pasado, Lirio de Luna, año 2016)


Mientras el señor Jhoel conducía hacia la posada, nosotros solo
observábamos el pueblo con detalle, las calles eran totalmente limpias como
si no existieran personas que pudiesen ensuciar, en cada esquina había un
árbol muy grande el cual estaba adornado, esos adornos brillaban con la luz
del sol y en las noches con la luz de la luna.
Nuestras caras eran de gran impresión al ver tantas cosas bonitas, las
estructuras de cada casa, aunque eran pequeñas y otras muy grandes, parecían
ser como castillos hechos de madera, piedras y lo más impresionante no solo
era eso, era que en cada casa una enredadera envolvía las paredes con flores
de color: rosadas, amarillas y rojas.
Las personas eran muy cálidas y al ver que había turistas sus caras
brillaban de felicidad, nos saludaban al pasar en el carro como si fuéramos
unas personas importantes para ellos.
La mirada del señor Jhoel había cambiado mucho desde nuestra llegada,
desde ese entonces su mirada era algo opaca, pero al estar con nosotros
brillaba.
–Veo que les gusta mucho el pueblo, sus caras tienen algo de nostálgicas
pero llenas de curiosidad y alegría o ¿me equivoco?
Dirigí mi mirada hacia él y respondí:
–La verdad nunca había visto muchas caras de felicidad por unos simples
turistas, es extraño ver cómo nos saludan y sonríen, ¿por qué sucede eso?
–Como anteriormente les comenté luego de pasar el acontecimiento en
el festival, los turistas dejaron de venir por miedo a que sucediera de nuevo,
cada año que se hace el festival asisten menos personas a este pequeño
pueblo, disminuyen cada año, nosotros somos famosos por nuestra artesanía,
vivimos de los turistas y ver cómo cada año vienen menos para nosotros es
tristeza.
May también le preguntó:
–Es decir, que nosotros los turistas que venimos y que anteriormente
venían al festival ¿para ustedes era ingreso de dinero?...
–Así es May, hacemos el mayor esfuerzo por sacar este pueblo adelante,
cada año son menos turistas, menos recursos y sin embargo la esperanza de
que algún día este festival vuelva a ser el mismo late en cada corazón de cada
persona que vive aquí.
25
Beiker López

Solo observé al señor Jhoel por medio del retrovisor, mientras más nos
contaba su mirada iba perdiendo brillo y se inundaba de tristeza, al mismo
tiempo me di cuenta de que debía cambiar de conversación y no generar más
ese sentimiento que se notaba en su mirada.
De momento miré hacia la ventana del vehículo y observé que en un
puesto donde vendían revistas se encontraba aquel muchacho que robó mi
atención al subir en el expreso.
–¡May! Mira hacia el puesto de revista rápido.
May asombrada miró y respondió enseguida:
–Es el mismo chico que abordó el expreso, de seguro vino al festival
también.
En mi mente decía que el pueblo no dejaba de sorprenderme, cada calle
que recorría era cada calle que me sorprendía.
–Chicos ya casi llegamos a la posada, al final de este camino está la
entrada.
Miramos al final una especie de muro gigante hecho de piedra con un
portón de madera muy grande, en la parte de arriba estaba un escudo y
alrededor de ese escudo había una figura de un animal que daba semejanza
a un elefante, que, de sus cuernos hacía formar un árbol, en el escudo había
solo una corona, pero estaba tan vieja la estructura que no se distinguía muy
bien.
–Kerf, ¿observaste ese escudo? Parecía un elefante lo que estaba alrededor
del escudo.
–Sí May, también me llamó mucho la atención, ¿señor Jhoel podría
hablarme de ese escudo y qué representa?
El señor Jhoel sonrió y solo contestó:
–No soy el indicado para decírtelo. Pronto sabrás qué significado tiene.
Luego de que el señor Jhoel me contestara de esa forma, nuevamente vi
ese brillo y esa sonrisa que solo significaba alegría, pero para mí significaba
un nuevo misterio.

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¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 2

La habitación
de aquel piano viejo
(Biblioteca Ranhze, año 2057)

Para mí todo se estaba convirtiendo en un misterio, todo parecía normal,


pero a su vez ver tantas cosas diferentes y no tener respuesta se me hacía
algo extraño. El señor Jhoel parecía esconder muchas cosas en su interior,
pero quiénes éramos nosotros para afirmar tal cosa, ver ese escudo con un
diseño peculiar, las personas felices por nuestra llegada, ese chico extraño
del expreso; ya en mi mente me hacía imaginar cosas que quizás eran ciertas
o lo más probable que no…
–¡Señor Kerf! qué sucedió, luego del muro de madera.
Diría que más misterios de lo que creía, déjenme seguir contando.

(Lirio de Luna, año 2016)


Mientras pasábamos aquel muro de madera donde se encontraba un
escudo, había un sendero bastante largo, muchos árboles muy extraños
que nunca había visto pero suponía que eran autóctonos del pueblo, May
observaba con detalle cada parte del camino al igual que yo y la verdad nos
parecía bastante interesante ver tanta naturaleza diferente.
Los árboles eran altos, en su tronco se encontraban unas enredaderas las
cuales colgaban de las ramas y en el medio hacían una especie de cinturón,
hacían ver esos árboles diferentes a los que ya conocía; algo bastante
increíble. Las ramas tenían un color verde esmeralda y en cada una de ellas
brotaba una flor en forma de rosa, pero a diferencia de la rosa, en su centro
una flor más pequeña sobresalía.
En todo el camino un pasto verdoso cubría cada parte del suelo, las flores
de todos los colores no podían faltar, creando un arcoiris floral ante nuestros
ojos. Lo que más nos asombraba era ver cómo el viento creaba ráfagas de
polen que brillaban con la luz del sol de ese atardecer.

27
Beiker López

May Castell: ¿Cómo no enamorarme de este lugar? Es hermoso ¿no lo


crees Kerf?
Yo no podía explicar esa sensación, es parecido a ese sentir cuando ves a
alguien que adoras.
Kerf Sylver: Es increíble, nunca había visto algo así.
Jhoel Osbel: ¡Veo que les gusta! Les presento el sendero del paraíso. Todo
aquel que visitaba esta posada quedaba muy impresionado por su belleza.
Kerf Sylver: ¿Cómo es posible que las personas olvidaran este lugar?
May Castell: Tampoco lo entiendo, es fantástico.
Jhoel Osbel: El temor de las personas les hizo olvidar la grandeza de este
pueblo.
Nos miramos y dimos nuestra opinión.
May Castell: Nosotros estamos encantados de haber venido.
Kerf Sylver: Cierto.
Seguimos observando el lugar mientras llegábamos a la posada que se
encontraba al final del sendero, de un momento a otro pude apreciar un árbol
muy alto, tenía una forma muy diferente a los que se encontraban allí, sus
ramas daban una forma de ángel. Al pasar al frente de ese árbol me percaté
de que había una plaza y en el medio de ella una estatua de un elefante.
Kerf Sylver: Oye May ¡mira eso!
May Castell: Ese árbol es muy diferente a los otros, creo entender que esa
misma estatua es la que representa el escudo, en este pueblo deben venerar
a ese animal.
Jhoel Osbel: Bueno chicos estamos llegando a la posada, pueden
observarla desde esta distancia.
Una mansión hecha de roca con madera asemejándose a un castillo, en
su entrada había dos árboles muy grandes. Ya el sol estaba muy próximo a
ocultarse sin embargo su luz era fuerte y se podía seguir detallando el lugar
tan espectacular que personas olvidaron y que ni la imaginación de un ser
humano hubiera podido crear.
Jhoel Osbel: Chicos fue un placer para mí traerlos y un gran gusto
haberlos conocido, especialmente tú Kerf veo que tu curiosidad es grande
pero no te preocupes podrás conocer todo lo que quieras en esta posada.
Espero verlos pronto.

28
¡Aeón! Una vida prohibida

May Castell: Gracias señor Jhoel fue muy amable, me podría decir
¿cuánto es su tarifa por traernos hasta aquí?
Jhoel Osbel: Hoy es su día de suerte puesto que no les cobraré, tenía
tiempo que no me sentía feliz de ver personas que les guste el pueblo y creo
que eso no tiene precio alguno, tómenlo como un detalle de este humilde
viejo.
Kerf Sylver: Estamos sumamente agradecidos, fue un gran gusto también
para mí conocerlo, no sabe cuánto amo las historias fantásticas, espero verlo
pronto para seguir conversando o mejor dicho seguir preguntando más cosas
de este pueblo tan interesante.
Jhoel Osbel: Así será Kerf, te lo prometo; hasta luego chicos.
Kerf Sylver: Hasta luego.
Al bajarnos de la camioneta con las maletas el señor Jhoel se retiró,
caminamos hacia la entrada de la posada, antes de poder tocar la puerta, se
abrió sola y detrás de ella se encontraba una señora de cabello blanco, vestida
muy elegante, ojos verdes, morena y de alta estatura, verla nos sorprendió ya
que su mirada era tan fuerte que nos intimidó al instante, automáticamente
supimos que era la dueña de la posada por su forma de vestir: un vestido de
color verde oscuro y al final de la cadera caía una falda no muy ancha que
tocaba el piso, en sus manos cargaba guantes del mismo color y en su cabello
un cintillo con una piedra en el medio…
Lidia Osbel: Buenas noches chicos, ¡los estaba esperando! Pasen adelante
ya tengo lista su habitación.
May Castell: Qué señora tan elegante y fina, se nota que es la dueña.
Kerf Sylver: Sí, la verdad mucho.
Lidia Osbel: Espero les guste mi posada, tenía tiempo que no recibía a
huéspedes, para mí es un halago recibirlos con la mejor atención posible,
discúlpenme si soy muy formal pero para mí ustedes son mis invitados
de honor en estos días, por ende me visto de esta manera ¡como si llegara
alguien de la realeza!
Nos sentimos muy agradados al ver cómo tanta gente nos ha tratado de
maravillas, todo era tan diferente al mundo que conocemos con personas no
tan educadas, nunca pensamos que existiera un pueblo tan hermoso, pero a
su vez lleno de misterios.
Entramos en la posada y nos sorprendimos aun más, era otro mundo
dentro de esa mansión, mientras caminábamos veíamos como había unos

29
Beiker López

muros que daban una fijación a una especie de jardín, pareciera que fuese el
corazón de la posada, en el medio de ese jardín una estatua; se trataba de un
elefante pero no era uno cualquiera, su forma era muy diferente al animal
que conocemos, sus cuernos eran muy grandes pero de ellos floreaban rosas
y ramas, en su espalda se encontraba una diosa mirando el cielo y sus manos
señalaban hacia arriba sosteniendo una piedra en forma de luna.
De momento me detuve para contemplar aquel monumento.
Kerf Sylver: May es la misma estatua que estaba de camino acá, pero
ahora la puedo detallar, estoy seguro que es la misma.
La señora Lidia me escuchó y respondió a lo que había dicho.
Lidia Osbel: ¿Te refieres a la diosa Esmeralda? Es el orgullo de este
pueblo ¿lo saben o no?
May Castell: El señor Jhoel nos comentó un poco sobre ella, pero que era
una diosa de otro mundo creo que se llamaba algo como Aeón.
Lidia Osbel: ¿Señor Jhoel?
May Castell: Sí, fue él quien nos trajo hasta aquí.
Con un tono sarcástico dijo:
Lidia Osbel: Vaya, vaya, no sabía que mi esposo hacía de transportes
hasta mi posada, luego le preguntaré qué tal le va.
May me miró como incómoda, pero yo me había supuesto que eran
esposos al escuchar que el señor Jhoel nos dijo su apellido, nuevamente la
curiosidad surgió en mí y procedí a preguntarle a la señora Lidia:
Kerf Sylver: ¿Señora Lidia me podría contar más sobre esa diosa por
favor? Sería tan amable.
Luego de esa pregunta, la señora Lidia caminó hacia un muro y se sentó
acomodándose para ver el anochecer, ya el cielo estaba más oscuro, algunas
estrellas ya habían aparecido en el cielo, ella miro hacia arriba como aquella
diosa y suspiró con una sonrisa en su rostro, en el lugar un aire fresco soplaba
haciendo sentir una paz con cada roce de él en nuestra cara.
Lidia Osbel: Es el símbolo que representa el respeto en este pueblo,
representa la belleza, la naturaleza, la unión y la esperanza, ella es conocida
como la diosa de las rosas, su nombre proviene de una de las piedras más
bellas del mundo: “la esmeralda”. Se decía que ella caminaba entre los
bosques y era adorada por los animales, daba vida a las grandes montañas
verdes y a su fauna, se desconoce cómo es que nadie pudo verla, pero se
cuenta que es una mujer muy hermosa. Existió una gran guerra, utilizando

30
¡Aeón! Una vida prohibida

sus habilidades pudo vencer junto con muchos animales que ella comandaba,
al final de esa guerra, ella agarró una piedra y se la ofreció a la luna como
símbolo de agradecimiento por haberle prestado su poder diciendo: “cada
cierto tiempo haré un baile para ti, luna que duras en el cielo nocturno por
mucho tiempo, alumbrando cada rincón de tu vista extensa, bailaré al brillo
vivo de tu luz plateada venerando tu inmenso poder, te pido que siempre
des abundancia junto a la prosperidad de mi pueblo y que aquellas guerras
que vengan no sean desatadas para que la paz siempre viva en cada uno de
nosotros”.
May Castell: Es decir que el baile que ustedes efectuarán dentro de poco
¿es el mismo del que nos está contando?
Lidia Osbel: ¡Así es! Es el mismo baile, pero hay algo más, este baile
también simbolizaba el amor puro y sincero, es por ende que las personas
que bailen en él tienden a encontrar el amor de su vida. Se cuenta que
Esmeralda en uno de esos bailes cuando la luna posaba resplandeciente en
el cielo estrellado comenzó a bailar y un caballero la tomó de la mano para
danzar junto a ella, fue amor a primera vista, Esmeralda le volvió a agradecer
a la luna por regalarle ese amor jurando que cada vez que bailaran le diría a
su caballero lo mucho que lo amaba.
Kerf Sylver: ¿Cómo es posible que un baile pueda hacer tanto?
Lidia Osbel: Cuando Esmeralda bailaba en honor a la luna, cerraba
sus ojos, le recitaba a la luna un poema que le dictaba el corazón, la luna
escuchó lo que sus latidos decían, la bendijo diciéndole que no estaría más
nunca sola, escuchando cada palabra que la luna le transmitía, una persona
agarró sus manos, Esmeralda al abrir los ojos vio a un hombre hermoso y
no podía describir lo que en ese momento sentía y nosotros lo conocemos
como “la magia del amor”, ambos bailaron toda la noche enamorándose
cada segundo. Cuentan las personas que juntos cuidan el bosque y su amor
es reflejado en las rosas.
May Castell: Tiene su lógica.
Kerf Sylver: Usted cuenta esa historia como si hubiese vivido en esos
momentos.
Ella al oír mi comentario, solo sonrió y me dio una respuesta.
Lidia Osbel: Cuando nuestro interior ama algo con toda sinceridad,
siempre vas a investigar, indagar y conocer todo lo que deseas, con la pasión
que pongas; será tu motor a seguir y ese vacío que encuentres dentro de ti se
llenará con cada gota de amor puro y con cada parte de lo que buscas en lo
que amas.
31
Beiker López

Me pareció muy bonito lo que había dicho; al terminar solo se levantó y


caminó hacia nuestro frente.
Lidia Osbel: Bueno chicos es momento de que conozcan su habitación,
en este lugar les esperan sorpresas.
Fuimos camino a la habitación, en los pasillos se encontraban muchas
cosas diferentes a lo que conocíamos, tanto estatuas como adornos,
estructuras extrañas, hasta las lámparas, observamos todo lo que nos rodeaba
de camino hasta la habitación que nos correspondía, pero hubo una voz que
hizo que me detuviera.
¿?: Kerf, Kerf.
Kerf Sylver: May, creo haber escuchado a alguien que me llamó ¿tú lo
oíste?
May Castell: No escuché nada, creo que es tu imaginación.
Kerf Sylver: Lo más probable es que lo haya imaginado.
No sabía si era mi imaginación que me hizo escuchar a alguien llamarme o
todo lo contrario, desde que llegué a este pueblo vi tantas cosas inimaginables
que podíamos esperar cualquier cosa de él. Al mirar hacia la derecha había un
pasillo oscuro, pero con una habitación iluminada al final, llamó mi atención
al instante, pero seguí caminando.
Llegamos a un pasillo donde se encontraban cinco puertas, Lidia nos
indicó que la segunda a la derecha era la habitación donde pasaríamos la
noche.
Lidia Osbel: Espero se sientan cómodos y felices en su estadía con
nosotros, nos veremos luego.
Entramos a la habitación, verla nos gustó mucho, se encontraban en ella
dos camas muy cómodas, su diseño era pintado de blanco con verde pero en
sus paredes se encontraban dibujadas ramas de árboles, había una ventana
que daba vista al patio donde se encontraba una laguna, era de noche por
ende la luna ya se había asomado reflejándose en sus aguas, un guarda ropas,
en el medio de toda la habitación una lámpara extraña, su forma era muy
parecida a un panal de abejas pero la verdad iluminaba muy bien y debajo de
ella un espejo hecho de madera.
May Castell: Qué habitación tan cómoda y sencilla, Me gusta mucho.
Kerf Sylver: Sí, es muy bonita, pero mira hacia arriba.
May Castell: Qué increíble.

32
¡Aeón! Una vida prohibida

Un vitral donde cada cristal tenía dibujadas letras en un idioma que


desconocíamos, también había dibujado un elefante y a su lado se encontraba
una silueta de una mujer.
Kerf Sylver: ¿Quién será esa mujer? Creo que es la diosa Esmeralda.
May Castell: Lo más probable, observa el otro dibujo.
Otro dibujo era un círculo con siete coronas y en el medio de las siete un
escrito con las mismas letras extrañas.
May Castell: Qué dirán, me da mucha intriga saberlo.
Kerf Sylver: Yo también quisiera saber, cada vez este pueblo me pone
como un niño curioso.
Tocan la puerta, May se dirigió hacia la puerta y al abrirla, se trataba de
la señora Lidia para decirnos que tenía la cena lista, May le agradeció la
hospitalidad diciendo que ya nos dirigíamos al comedor para cenar, la señora
Lidia se retiró, luego de eso desempacamos y al terminar May se fue a la
ducha.
Kerf Sylver: Intentaré dormir cinco minutos mientras te duchas. Cerré
mis ojos y rápidamente fui conciliando el sueño, pero la misma voz
nuevamente pronunciaba mi nombre.
¿?: Kerf, Kerf, Kerf…
¿?: Kerf, ¡es la hora!, Kerf…
Estaba más dormido que despierto, pero en mi conciencia pensé que era
May la que me llamaba.
Kerf Sylver: ¿Qué quieres?
¿?: Es la hora. ¡Al fin!
Abrí mis ojos para ver si en realidad era May la que me estaba diciendo
eso, pero al abrirlos me fijé que May estaba aún en la ducha, me sentí muy
extrañado por un momento pensaba que era solo mi imaginación o el mismo
sueño.
Kerf Sylver: Habrá sido mi imaginación, seguramente es el mismo sueño
que tengo que me hace oír cosas donde no existen, pero ya había sentido una
presencia al llegar a esta habitación. Mi cuerpo está erizado, qué significará
todo esto; este pueblo, estas escrituras y esa voz que me susurra que es la
hora. ¿La hora de qué?
Alguien tocó la puerta dándole solo dos toques.

33
Beiker López

Me dirigí a abrirla para ver de quién se trataba, al abrirla no había nadie,


me asomé para ver los pasillos ¡mi cuerpo se encontraba muy erizado! Mi
corazón estaba tan acelerado que mi cuerpo temblaba, no comprendía todas
esas sensaciones que sentía en ese momento, pero de algo estaba seguro, no
era bueno.
Kerf Sylver: ¿Qué es esto?, estoy temblando, siento miedo y mi cuerpo
se eriza, no lo entiendo por qué presiento todo sintiendo que hay algo que me
está observando, mejor cierro la puerta y me acuesto.
Antes de cerrar la puerta algo me empujó dejándome fuera de la
habitación, me golpeé la cabeza al impactar contra la pared de aquel empujón
desconocido, por unos segundos quedé desconcertado e intenté abrir la
puerta, pero estaba cerrada totalmente, de pronto me percaté que alguien se
encontraba en el pasillo y poco a poco fui moviendo mis ojos hacia allí, pero
estaba oscuro.
Kerf Sylver: ¿Quién eres?, ¿QUIÉN ERES?
¿?: ¡LLEGÓ LA HORA!
Kerf Sylver: ¿LLEGÓ LA HORA?, ¿DE QUÉ ESTÁS HABLANDO?
Vi una persona totalmente cubierta de negro, solo se podía observar a
la vista una cara blanca con una sonrisa malévola, mi cuerpo temblaba, me
sentía aterrorizado era primera vez que me sucedía algo así y llamé a May
desesperado.
Kerf Sylver: ¡MAY ABRE LA PUERTAAAA, ÁBREMEE!
Con una carcajada malvada, me habló:
¿?: !No Te escucharán!
Cerré los ojos al escuchar esa voz tan tenebrosa, una risa que hacía temblar
todos mis sentidos, el ambiente se tornó oscuro, frío y aterrador, al intentar
abrir mis ojos para mi mayor sorpresa, aquel personaje diabólico estaba al
frente de mí y al verlo solo grité cerrando mis ojos.
Sentía como si me golpeara y de pronto desperté.
May Castell: Despierta, tranquilo, Kerf fue solo un sueño, tranquilízate.
Estaba muy sudado y mi corazón parecía que se iba a salir de mi pecho.
Kerf Sylver: Solo fue un sueño, ¡gracias a Dios!
May Castell: Estás temblando, estás sudando frío, ¿qué fue lo que
soñaste?

34
¡Aeón! Una vida prohibida

Kerf Sylver: Fue horrible, primera vez que sueño algo tan real, sentí
susurros de algo y de pronto tocaron la puerta, al abrirla no había nadie y me
asomé para ver si estaba alguien en el pasillo, algo me empujó tan duro que
me golpeé la cabeza contra la pared y en el fondo había una persona vestida
toda de negro y solo se le podía ver su nariz, una sonrisa muy malévola. Mi
cuerpo no respondía, intenté llamarte, me sentí aterrorizado por completo, al
cerrar mis ojos cuando los abrí, tenía a esa clase de espectro en frente con una
sonrisa tan maquiavélica y unos ojos totalmente rojos como la sangre. Me
decía que ya era la hora, antes de llegar a la habitación también lo escuché
decir lo mismo, por eso te pregunté que si también habías escuchado; este
lugar me está dando miedo.
May Castell: La verdad esta posada es muy extraña.
Luego de unos minutos de calmarme de aquel extraño sueño, me dirigí a
ducharme para luego ir a cenar, al entrar al baño abrí los grifos del lavamanos
y esperé que se llenara para lavar mi rostro, había sudado, estaba un poco
agitado por aquel sueño, al momento de mojar mi cara y verme en el espejo
detrás de mí estaba parado un hombre parecido al del sueño pero esta vez su
vestimenta era de color blanco, su rostro lo cubría una máscara. Al instante
volteé y no había nadie.
Kerf Sylver: Tengo que calmarme, aún estoy alucinando cosas por el
sueño, es solo mi imaginación que está jugando conmigo.
Me adentré en la ducha sintiendo cómo las gotas frías tocaban mi cuerpo
y hacían que se relajara poco a poco, aún sin embargo mi mente no podía
dejar de pensar en lo sucedido en el sueño. Al terminar de ducharme me vestí
para ir a cenar.
Kerf Sylver: Estoy listo, vamos, muero de hambre.
Salimos de la habitación con un poco de nostalgia de solo pensar que todo
lo que soñé era muy real y que todo había pasado al salir de la habitación, al
ver el pasillo estaba iluminado con lámparas y dentro de ellas había velas.
May Castell: Qué extraño, al llegar ¿no había otras lámparas?
Kerf Sylver: Pensé lo mismo cuando las vi; qué está pasando con este
lugar.
Seguimos adelante, al caminar sentí la misma presencia que anteriormente
había sentido, mi piel se volvió a erizar y comencé a temblar.
Kerf Sylver: De nuevo siento lo mismo ¡QUÉ ES ESTO!
No me podía mover, mi cuerpo no reaccionaba en lo más mínimo, solo
podía hablar.
35
Beiker López

Kerf Sylver: ¡MAY! Responde, no me puedo mover, me estoy asustando.


De momento pude mover mi cabeza para ver por qué May no respondía,
cuando observé May estaba igual que yo petrificada del miedo, su cuerpo
temblaba, de alguna manera mi cuerpo se había liberado y lo pude mover,
pero cuando fui a ayudar a May noté que en el pasillo hacia la habitación
estaba parado el mismo hombre que vi en mi pesadilla.
Kerf Sylver: Esto no puede estar pasando, no es una pesadilla, es real.
Aquel tenebroso hombre solo sonreía de manera malévola, caminó hacia
nosotros, a cada paso que daba las velas de las lámparas se apagaban, tenía
mucho miedo y traté de que May se moviera, pero era imposible, su cuerpo
estaba frío y su piel estaba blanca.
Kerf Sylver: Despierta, muévete por favor, DESPIERTA.
Escuché cómo una risa que erizó cada parte de mi cuerpo resonaba en
todo el pasillo, volteé para ver si se acercaba aquel espectro y para mi mayor
sorpresa había solo dos perros negros acercándose con ojos rojos llenos de
rabia.
Kerf Sylver: NOO, REACCIONA, POR FAVOR.
Con lágrimas en mis ojos, la frustración era demasiada de no poder hacer
absolutamente nada en ese instante, de momento sentí una mano fría tocando
mi espalda y solo escuché un susurro en mis oídos.
¿?: Llegó la hora de poseer tu alma y tu espíritu, te esperé toda una
eternidad y será él quien gobierne Aeón ¡NO TÚ!
Sentí cómo mi cuerpo perdía la fuerza y todo se volvió oscuro, hasta
desmayarme. Cuando pude abrir mis ojos veía borroso, pero podía ver a
alguien observándome.
Kerf Sylver: ¿Quién eres, qué quieren de mí? yo no he hecho nada,
¿dónde está May? no le hagas daño.
Pude visualizar mejor, era el mismo hombre que se me apareció en
el espejo del baño, me extendió la mano para poder levantarme, pero no
hablaba, se sentía un ambiente muy cálido, mi cuerpo estaba relajado, una
paz interna llenaba mi mente y mi corazón, pues era totalmente extraño pasar
de estar en un momento de terror a estar en un ambiente tan cálido.
Kerf Sylver: No eres el mismo hombre tenebroso, ¿qué quieren de mí?
Por qué me suceden este tipo de cosas.
Fui detallándolo, estaba vestido con una capa con capucha blanca y
dorado, unos guantes de metal parecían estar hechos de plata, una máscara

36
¡Aeón! Una vida prohibida

con marcas de oro, unas botas del mismo material que sus guantes. Me hizo
seña que lo siguiera, pero recordé que May también estaba mal, al buscarla
me percaté que no estaba en el pasillo. Aquel caballero seguía diciéndome
por medio de señas que lo siguiera, dándose la vuelta caminó, en su capa
tenía un escudo muy parecido al que vimos en la entrada de la posada, pero
diferente, no sentí algún miedo en seguirlo, al contrario, me sentía muy
seguro de estar a su lado a pesar de que no sabía si era bueno o malo, solo
caminé hacia donde él iba
Kerf Sylver: ¿Dónde me llevas? Puedes decirme quién eres, por favor.
No respondía a mis preguntas, solo caminaba por los pasillos hasta llegar
donde por primera vez escuché esa voz extraña. El caballero me señaló la
habitación que había observado a lo lejos de ese pasillo, que había captado
mi atención.
Kerf Sylver: Es la misma habitación que vi hace unas horas y al verla
escuché que pronunciaron mi nombre ¿fuiste tú?
Respondió un sí con su cabeza moviéndola hacia arriba y hacia abajo, con
su mano señaló la habitación
Kerf Sylver: ¿Quieres que entre?
Fui hasta la puerta, el lugar estaba oscuro, pero mientras caminaba cada
lámpara que estaba apagada se encendía, la puerta era diferente a como la
había visualizado, parecía de oro y con una figura muy elegante y procedí
a entrar llevándome una gran sorpresa. La puerta se cerró dándome un
susto, pero seguí observando la magnificencia de la habitación, sus cortinas
eran grandes, grises y rotas, sus ventanas iguales, se podía observar la luna
claramente, en un rincón había un piano negro viejo y abandonado, hacia
su derecha una chimenea antigua muy sucia, arriba de ella un cuadro con
una pintura muy deteriorada. Me acerqué para detallarla bien, en esa pintura
había como una mujer y un hombre, ambos parecían tomar de la mano un
bastón, dando a entender como si fueran unos reyes, continué para seguir
viendo las cosas tan antiguas que había en ese lugar.
Kerf Sylver: Parece una habitación de la antigüedad, tiene que ser la más
vieja de aquí, pero siento como si alguien ya vivió dentro de ella.
Repisas llenas de adornos oxidados, floreros, cuadros llenos de paisajes
que nunca había visto, adornaban cada rincón de la habitación, de pronto
comencé a oír cómo el piano era tocado y busqué dónde se encontraba para
ver quién lo estaba tocando.
Kerf Sylver: ¿Quién toca el piano? Si no hay nadie solo yo, pero esta
melodía qué hermosa es.

37
Beiker López

Cerré los ojos escuchando cada tonada del piano aun sin ver quien lo
tocaba, era una hermosa melodía que hacía que mis sentidos se relajaran, mi
corazón se aceleró latiendo fuertemente. Abrí mis ojos para observar quién
generaba esa hermosa melodía de manera tan entregada, pero al mismo
tiempo también sentía una tristeza en ella, sin embargo, no podía dejar de
disfrutar. Se trataba de aquel hombre enmascarado quien tocaba el piano,
pero al intentar hablarle no pude, solo podía a través de mis pensamientos.
Kerf Sylver: Qué hermoso tocas, pero siento que intentas decirme algo.
Entendí que la única forma de poder hablar con él era por medio de mis
pensamientos ya que no podía hablarle verbalmente. Tocaba el piano de una
manera que nunca había oído, cada tonada me generaba muchos sentimientos,
estaba entendiendo que él quería que sintiera lo mismo que sentía en su
interior y pude comprender que la única forma de hablar que tenía yo era por
mis pensamientos, él me hablaba a través del piano, de pronto unas inmensas
ganas de llorar surgieron en mí haciendo que las lágrimas recorrieran mis
mejillas.
Kerf Sylver: ¿Por qué este sentimiento tan triste? ¿Guardas esa tristeza
en tu interior y me lo estás diciendo?
Seguía tocando el piano sin parar y mientras más lo tocaba miles de
sensaciones florecían en mí, era como una especie de magia musical que no
tenía una explicación, dejó de tocar para dar inicio a otra melodía y esta vez
sentí cómo una alegría recorría todo mi ser.
Kerf Sylver: Esta inmensa alegría que siento, es una felicidad que tienes,
pero ¿por qué la siento?
No podía dejar de verlo tocar, era fantástico escuchar cada melodía,
mi corazón estaba unido a sus tonadas y mi mente se dejaba llevar por los
sonidos del piano. Un viento sopló en toda la habitación, la luna lanzaba un
rayo de su luz plateada hacia el piano, iluminando a aquel hombre que se
entregaba de una manera pasional al instrumento.
Kerf Sylver: Nunca llegué a pensar que pasaría por algo así.
Mientras él tocaba, en la habitación comenzaron a encenderse las lámparas
una por una, ya que cuando entré a la habitación se encontraba oscura, podía
observar el lugar con más claridad, parecía una habitación de un palacio,
pero vieja y abandonada.
Kerf Sylver: Es una habitación de un palacio, ¿tú vives aquí?
Dejó de tocar aquel piano viejo de color blanco que emanaba una hermosa
melodía, en mi mente solo pensaba “que no importa lo mal que se puedan

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¡Aeón! Una vida prohibida

ver las cosas siempre hay algo bueno en ellas”, de vivir una escena tan
tenebrosa y pasar a ver algo tan bello como lo que estaba viviendo en ese
momento. El hombre encapuchado levantó su mano y con un chasquido hizo
que la habitación que parecía destruida y antigua cambiara su aspecto. Todo
Cambió, las cortinas a un color verde con blanco y entre ellas unas franjas
en dorado las hacia brillar con la luz lunar, las ventanas rotas se restauraron.
La magia apareció en la habitación y aquellas cosas oxidadas se convirtieron
en oro, la chimenea se encendió desapareciendo el polvo, en el suelo una
alfombra roja con detalles en blanco cubrió todo, en el retrato se pudo
observar a dos reyes, una lámpara muy grande en el centro iluminó el lugar
dándole una elegancia y sin darme cuenta tenía razón, era una habitación de
un palacio real.
Kerf Sylver: ¿Esto es magia? Cómo es posible.
Las ventanas abrieron paso a otra ráfaga de viento que traía consigo hojas,
ramas, tierra y algunas piedras también; las ramas hacían como un esqueleto
humano, las hojas cubrían las ramas haciendo semejanza al tejido, las piedras
los músculos y la tierra daba forma a un cuerpo humano, yo no me había
movido desde que entré en la habitación solo observando todo el espectáculo
que nunca había presenciado en mi vida. Los muñecos que semejaban a un
humano, caminaron al lado de la chimenea acomodándose, el caballero dejó
de tocar levantándose para darle paso a uno de esos muñecos para que tocara
el piano, caminó hasta estar frente de mí y solo lo observé fijamente.
Kerf Sylver: No entiendo por qué todo esto, ¿qué quieres de mí?
Sin darme cuenta mi ropa había cambiado también, era parecida a la del
caballero, pero con la diferencia que la mía era totalmente blanca. Con su
dedo índice me dijo que hiciera silencio, miré hacia arriba como admirando
la lámpara y aquellos muñecos de la nada tenían instrumentos musicales,
caminó alrededor de mí hasta llegar de nuevo a estar en frente, el muñeco
que había dejado en el piano empezó a tocar de una manera diferente que
el mismo caballero y todos los demás muñecos lo acompañaron creando un
hermoso vals.
Kerf Sylver: ¿Un vals?
Hizo una reverencia tomando mi mano, estaba temblando nunca había
bailado un vals menos con alguien que no conocía, no sabía si iba a bailar
con un hombre o una mujer, sin embargo, el vals atrapó mis sentidos, me
dejé llevar cerrando mis ojos y comencé a bailar. La música sonaba en toda
la habitación, sentía como si estuviera volando, como si estuviera en el cielo,
la calidez de este ser humano que bailaba conmigo era sorprendente, hacía
que olvidara mis mayores preocupaciones y mi corazón latía fuertemente, un

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Beiker López

paso hacia delante, un paso hacia atrás, un giro corto, un paso otra vez, un
giro completo, un paso hacia adelante, dos giros más y así sucesivamente me
dejaba llevar.
Kerf Sylver: No sé quién eres, no sé por qué bailo contigo, no sé por
qué lo hago, ni por qué te sigo, respóndeme una sola vez por favor, quiero
oírte hablar, quiero que me digas quién eres y a dónde quieres llegar, pero no
me respondas de una vez terminemos de bailar el vals, siento que estuviera
volando contigo y la verdad no quiero parar.
Mientras más bailaba, más quería seguir, era como una droga que tomaba
mis sentidos, como el viento en un huracán que arrastra todo a su paso
pero en mi caso arrastraba mis sentimientos, abrí los ojos y observé aquella
máscara que tapaba el rostro de la persona detrás de ella, sentía como si esa
persona estaba sonriendo de verme bailar y al mirar alrededor me asombré
más al ver cómo muchos fantasmas de personas bailaban a nuestro alrededor,
he de pensar que era parte de él que con su magia hacía ver todo irreal pero
a su vez era real.
Kerf Sylver: ¿Tú no perteneces a este mundo cierto? te sientes solo y por
eso la tristeza que me transmitiste, pero al estar yo tenías felicidad de tener
al fin alguien que pudiera bailar contigo.
La música estaba deteniéndose lentamente, el caballero hizo la reverencia
de finalizar aquel baile tan majestuoso, los demás fantasmas al terminar
desaparecieron y con su dedo tocó mi frente y sentí como mi cuerpo se iba
adormeciendo, mientras yo perdía el conocimiento veía aquel caballero que
se desvanecía.
May Castell: ¡DESPIERTA!
Poco a poco fui abriendo los ojos y no podía creer que todo lo que
había pasado era un sueño, desperté en la habitación donde me había
quedado dormido desde un principio, le pregunté a May si habíamos salido
anteriormente a lo que me contestó:
May Castell: Nunca salimos de la habitación, yo estaba en la ducha y tú
te quedaste dormido, no te quise despertar, así que también me fui a dormir.
Caminé hacia la ventana para ver si eso era la verdad, ya había amanecido,
me sentí como un loco mirando a May muy desconcertado.
Kerf Sylver: Qué está sucediendo con este lugar.
May Castell: No está pasando nada, lo más seguro es que tuviste una
pesadilla. Arréglate para desayunar tengo mucha hambre, recuerda que no
cenamos.

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¡Aeón! Una vida prohibida

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Me vestí para ir a desayunar, les confieso que fue un sueño y una noche
bastante tenebrosa, pero a la final terminó siendo uno de los sueños más
hermosos que he podido tener en toda mi vida, esa habitación, esas melodías,
los muñecos y más que nada ese caballero dejaron en mí una huella.
–Señor de verdad ¿ese lugar tenía un misterio?
Todo tiene una razón y un porqué en esta vida, si no existieran los
misterios no hubiera motivos para la curiosidad, Así como ustedes ahora
sienten curiosidad de saber qué sucedió después, pero tranquilos que les
contaré y si pensaron que fue mágico déjenme decirles que lo que viene lo
es aun más…

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Beiker López

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¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 3

La magia oculta de los libros


(Lirio de Luna, año 2016)

Salimos a desayunar, estaba muy predispuesto a que sucediera algo en los


pasillos de la misma forma que en mi sueño, de igual manera también tenía
que entender que fue solamente una pesadilla ligada a un sueño hermoso.
Observaba todo detalladamente y mientras caminaba le conversaba a May
cómo había sido ese sueño, todo lo que había acontecido en él, llegamos
hasta donde aquel caballero me guió hasta la habitación de aquel piano viejo
y abandonado.
Kerf Sylver: En este lugar fue donde aquel tenebroso sueño se transformó
en uno muy bonito, el caballero que apareció me guió hasta la habitación,
dentro de la cual estaba un piano viejo y abandonado. Todo lo que se
encontraba allí se transformó en algo mágico.
May Castell: ¿Piensas que esa habitación tal vez no fue solo un sueño?
Kerf Sylver: No sabría responder esa pregunta en este momento.
Mi curiosidad era inmensa del solo pensar que pudiese existir esa
habitación no solo en mis sueños, más aun que al ver aquella misma puerta
por la cual entré y experimenté un momento mágico al bailar un vals.
Kerf Sylver: Entraré en esa habitación y veré si fue un sueño nada más.
May solo me observó respondiéndome:
May Castell: Está bien, solo intenta no hacer algo indebido. Te esperaré
aquí.
Al llegar noté que la puerta no era la misma, tenía una manilla oxidada,
una madera deteriorada, al entrar y observar todo, se trataba de una biblioteca
abandonada.
Kerf Sylver: May ven a observar esto.
May Castell: ¿Una biblioteca? Parece abandonada, mira la cantidad de

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Beiker López

polvo y tela de araña que cubre este lugar, lo más impresionante es ver que
todos los libros están intactos.
Kerf Sylver: Cada vez estoy más seguro que esta posada es muy extraña,
ya había notado algo en general, la felicidad de nuestra llegada y más aun
¿por qué?
Sentimos que alguien nos observaba a través de los libros y
automáticamente nos puso alerta.
May Castell: ¿Quién anda allí?
Solo escuchamos que nos mandaron a hacer silencio.
¿?: Shhhhh
Resonó en toda la habitación haciendo que nosotros saliéramos asustados.
Kerf Sylver: ¿Tú también lo escuchaste, cierto?
May Castell: Sí también lo escuché ¿no sería alguien más que se hospeda
en esta posada jugándonos una jugarreta?
Kerf Sylver: No lo creo, Esta posada está embrujada de eso estoy seguro,
los símbolos de nuestra habitación, mis sueños y ¿ahora esto?
May Castell: Mejor vámonos a desayunar.
Nos dirigimos al comedor, pero yo seguía mirando hacia la puerta de esa
biblioteca un poco asustado, sin embargo, en mi mente solo podía pensar en
qué ocultaba todo este lugar con tantos misterios que surgían uno tras otro.
Al caminar por los pasillos me percaté de que no escuchamos a ninguna
persona, ni veíamos a huéspedes en la posada que circularan en ella.
Kerf Sylver: ¿No te has dado cuenta que somos los únicos que estamos
hospedados aquí?
May Castell: Lo he estado pensando desde que llegamos aquí, pareciera
que nos esperaban, pero pensándolo bien, el señor Jhoel llegó justo a nosotros
cuando buscábamos taxi, también pude notar de camino hacia acá que él te
miraba mucho y murmuraba cosas, aparte en el pueblo tampoco vi muchas
personas, las que estaban solo nos miraban como si fuéramos los únicos en
tanto tiempo.
Nuestras mentes crearon muchas incógnitas, tal vez era alguna especie
de trampa o secuestro. Antes de llegar al comedor al cruzar hacia un pasillo
nos tropezamos con aquel muchacho de piel blanca al cual no podía quitarle
la mirada.
¿?: ¡Buenos días! Que hacen por estos pasillos solos.
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¡Aeón! Una vida prohibida

May Castell: ¡Buen día! Exploramos el lugar y tú ¿quién eres?


Se presentó como Ransus Cruz, pero a mí él todavía me generaba una
sensación extraña, nos presentamos, pero nos observaba como detallándonos
lentamente.
Ransus Cruz: Parecen estar nerviosos ¿pasó algo?
Kerf Sylver: A nosotros no nos pasa nada, creemos que en esta posada sí
pasan cosas extrañas, al parecer somos los únicos hospedados en ella.
Ransus Cruz: De hecho, somos los únicos que estamos hospedados.
Nuestras sospechas eran acertadas y todo se englobaba en un solo misterio.
Kerf Sylver: ¿Cómo sabes que somos los únicos en este lugar?
Ransus Cruz: Cómo explicas que no hemos encontrado más personas
¿aún lo dudas?
May Castell: Tú eres el mismo chico del expreso ¿a qué vienes a este
lugar?
Ransus Cruz: Yo también los recuerdo a ustedes, vengo al festival,
pero al explorar un poco noté que somos los únicos en este lugar, me puse a
investigar sobre ello, pero aún no consigo respuestas; ¿han escuchado algo?
Kerf Sylver: Solo nos comentaron que es lo que queda de un mundo
llamado Aeón.
Su mirada generaba más esa sensación extraña, no sabía si era alguna
nostalgia o para ser sincero una atracción, solo tenía que tener cuidado con
él. May solo decía que quería desayunar.
Ransus Cruz: Puedo guiarlos hacia el comedor, esta posada es muy
grande y pueden perderse.
En mi mente solo surgían pensamientos sobre Ransus, quería saber más
de él y por qué me sentía extraño cuando estaba cerca, me distraje tomando
otro rumbo diferente al de los chicos, al darme cuenta de que estaba solo
intenté devolverme y así alcanzar a May y Ransus, pero me perdí
Kerf Sylver: ¿Ahora qué hago? Estoy perdido.
No encontraba el camino nuevamente al comedor, caminé por varios
minutos encontrándome con una sala pequeña con la esperanza de que
hubiera alguien que me ayudara. Sentí cómo nuevamente mi cuerpo se erizó,
era igual a lo que sentí en ese sueño, sentí una presencia de una dama que se
encontraba a mi espalda, sin poder voltear veía cómo un humo parecido al
del cigarrillo recorría el lugar, me paralicé al instante tragando fuerte y solo
cerré los ojos esperando que no fuese a pasar algo malo nuevamente.
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Beiker López

¿?: ¡Mi querido! Bienvenido a mi sala. No es necesario que cierres los


ojos, al contrario puedes abrirlos sin miedo y poderme escuchar, lo que me
sorprende es que tengas ese susto. Naciste con un don muy particular ¡no
temas!
Mi cuerpo se encontraba paralizado aun más al escuchar la voz de una
dama, en mi mente solo quería que se fuera.
Kerf Sylver: Quien seas que eres, vete.
¿?: ¿Irme? te equivocas querido yo vivo aquí, fuiste tú que llegaste hasta
mi sala aunque ya te había visto en mi biblioteca anteriormente.
Kerf Sylver: ¿Fuiste tú quien nos mandó a hacer silencio?
¿?: ¡Qué cómico fue verlos salir corriendo! fui yo, en las bibliotecas se
hace silencio.
Kerf Sylver: ¿Quién eres?
¿?: Muy pronto sabrás de mí querido, solo ten paciencia. No entres a mi
biblioteca ¿entendiste?
Kerf Sylver: ¡Sí!
¿?: Ya puedes irte querido, considero que no le digas a nadie que hablaste
con un fantasma te creerán loco, el pasillo hasta el comedor está al final de
esta sala luego cruza hacia la izquierda y luego hacia la derecha y encontrarás
una puerta que es la que buscas. Me retiro ¡que tengas feliz día querido!
Abrí los ojos notando que no había nadie, no podía entender lo que
estaba pasando conmigo ni esas apariciones que ya no eran solamente en mis
sueños. Hice caso a las indicaciones y efectivamente encontré la puerta que
da al comedor.
Kerf Sylver: No era mentira, me sentía confundido con todo esto.
El comedor era gigante, parecía un comedor de un palacio, una mesa en
forma de rectángulo gigante en todo el medio hecha de madera y sus asientos
eran como de reyes, sobre ella había cubiertos, platos, cucharas, tenedores,
cuchillos y arreglos florales. El comedor aparte de ser gigantesco era un
espectáculo, en el medio aquella mesa rectangular, del lado derecho había
una chimenea con un cuadro de la señora Lidia y el señor Jhoel, la señora
Lidia estaba sentada en una silla mientras que el señor Jhoel se encontraba
detrás de ella con la mano en su hombro, caminé observando detalladamente
cada rincón de todo el lugar, era inevitable hacerlo, era como si un niño
entrara a una habitación llena de juguetes.
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¡Aeón! Una vida prohibida

Kerf Sylver: Hay muchas cosas hermosas en este comedor tan grande,
siento como una nostalgia, pareciera que ya conocía este lugar, pero lo más
extraño, es que siento una emoción muy grande que recorre mi cuerpo.
Cada centímetro que observaba era cada centímetro de suspiros, suspiros
que llenaban cada vacío que pudiese tener en mi corazón, era extraño, muy
extraño sentir ese sentimiento, era la primera vez que estaba en un lugar
así, sin importar que fuese un comedor, su grandeza era increíblemente
hermosa, las lámparas de cristales, el color rojo combinado con el blanco en
sus cortinas lo hacía ver más suntuoso, sus paredes tenían un tapiz verde con
dorado, cada detalle, cada adorno era literalmente hermoso. La luz del sol se
reflejaba entre las ventanas y daba brillo a todo lo pulcro de ese lugar.
Kerf Sylver: Siento como si no estuviera solo aquí ¿será que hay otro
fantasma? Cerraré los ojos, tal vez me hable.
¿?: ¿Te sientes bien?
Al escuchar esa voz se me hacía familiar y le respondí.
Kerf Sylver: Me encuentro bien.
En ese momento sentí una mano en mi hombro y del susto abrí los ojos,
se trataba de la señora Lidia que había entrado al comedor. En mi mente solo
me preguntaba por qué había sentido lo mismo que en la sala como lo era el
erizarse mi cuerpo.
Lidia Osbel: ¿Te sucede algo Kerf? Por qué tenías los ojos cerrados
¿estás mareado o algo?
Kerf Sylver: No me sucede nada, solo olfateaba el aroma de la comida.
La señora Lidia estaba muy elegante al igual que cuando nos recibió,
pero la diferencia era que la combinación era roja con negro. Me dirigí al
asiento del lado izquierdo para desayunar, pero antes de sentarme la señora
Lidia me detuvo.
Lidia Osbel: Espera un momento, deberías sentarte en la silla principal.
Kerf Sylver: ¿Está segura señora Lidia? ¿No debería estar sentada usted
en ella?
Lidia Osbel: Muy segura, eres nuestro invitado especial junto con tu
compañera, ¿dónde se encuentra? ya vamos a desayunar.
Antes de responderle tanto Ransus como May entraron por la puerta.
May Castell: ¿Kerf? cómo llegaste primero que nosotros.
Kerf Sylver: Tomé un atajo.
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Beiker López

Lidia Osbel: Por favor tomen asiento los dos y comencemos a desayunar.
Yo me seguía sintiendo extraño como si hubiera personas observándome,
sin embargo no presté atención a lo que sentía; comenzamos a comer, la
mesa estaba repleta de comida tanto como copas, vino y cubiertos. Seguimos
degustando cada plato hasta satisfacernos, al terminar de comer observé
que la señora Lidia se quedó mirando hacia abajo como si mirara al plato
y de repente soltó una carcajada, parecía que alguien le contó un chiste, la
miramos sorprendidos.
Lidia Osbel: Disculpen chicos, solo recordé un momento de mi esposo
que me causa gracia.
Kerf Sylver: ¿Dónde se encuentra el señor Jhoel en estos momentos?
Sentí cómo una suave voz me habló al oído.
¿?: Está sentado al lado de ti.
Miré hacia el asiento de al lado, pero estaba vacío.
Kerf Sylver: ¡DEJÉNME EN PAZ!
Todos me miraron al gritar.
Ransus Cruz: ¿Por qué gritas, quién te debe dejar en paz?
Kerf Sylver: No, nadie, discúlpenme.
May Castell: Estás actuando muy extraño desde que llegaste a Lirio de
Luna, me estás preocupando Kerf.
Me sentí avergonzado, pero al mismo tiempo sentía que estaba
volviéndome loco, escuchar voces, sentir presencias y hablar con apariciones,
todo era muy extraño.
Lidia Osbel: ¿Te sucede algo?
Sentía que tenía que contar todo.
Kerf Sylver: Señora Lidia desde que llegué he sentido cosas muy extrañas,
he escuchado voces, he tenido pesadillas, he sentido como si me observaran,
he sentido presencias que me erizan toda la piel y hasta he hablado con una,
¿esta posada está encantada?, no creo estar loco.
La señora se tornó muy seria dando un suspiro, puso sus manos juntas y
codos en la mesa poniendo su boca en sus manos cerro los ojos y con otro
suspiro nos contó un mito.
Lidia Osbel: Hay un mito en esta posada de que habitan fantasmas,
algunas personas que se han hospedado aquí dicen exactamente lo mismo

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¡Aeón! Una vida prohibida

que tú has dicho Kerf, que sueñan, que oyen voces y hasta los han visto.
Pensé que era solo excusa de los huéspedes para irse hasta ahora.
May Castell: Entonces lo que dice Kerf ¿es cierto?
Lidia Osbel: No sabría decirles si es verdad, siempre es una persona
que los escucha, los ve y los siente, pero aquellos que se quedaban aquí solo
comentaban y otros simplemente se iban sin darnos algún por qué. Ahora
todo tiene sentido y algo fuera de lo lógico.
Estaba asustado de pensar que en este lugar hubiera fantasmas, más aun,
que yo pudiese sentirlos y hasta escucharlos. No sabía qué hacer si regresarme
a mi hogar o seguir hospedado, toda esta experiencia era nueva para mí, así
como era nueva, también era aterrador el hecho de pensar que en donde me
encontraba habitaban fenómenos paranormales.
Lidia Osbel: ¿Han leído sobre la percepción extrasensorial?
Kerf Sylver: No señora Lidia ¿de qué trata?
Lidia Osbel: Deberías ir a la biblioteca, lo más probable es que allí
consigas mejor información de la que yo te pueda aportar. Bueno espero les
haya gustado el desayuno me retiro, con su permiso.
Estábamos desorientados luego de escuchar el mito que había en este
lugar, yo solo me quedé desconcertado y bastante asustado de saber que
podía sentir esas presencias, pero me generó la duda de qué era la percepción
extrasensorial.
Kerf Sylver: Debo ir a la biblioteca a investigar sobre la percepción
extrasensorial.
Me levanté y me fui hacia la biblioteca que había encontrado junto con
May, caminando por los pasillos intentaba recordar dónde se encontraba,
caminé en dirección recta y luego crucé hacia la izquierda y estaba la puerta
de la biblioteca, estaba seguro que era esa pero no entendía el por qué esta
vez no me perdí.
Kerf Sylver: Qué extraño la encontré fácilmente, debo investigar sobre
la percepción extrasensorial es posible que en algunos de esos libros que
tiene esa biblioteca se hable sobre ese tema.
Intenté abrir la puerta, pero al hacerlo sentí nuevamente una presencia,
pero nada me iba a detener para saber un poco más sobre la percepción
extrasensorial, abrí la puerta y entré a la biblioteca sucia y llena de tela de
araña.
Kerf Sylver: Qué suciedad, ¿la señora Lidia es incapaz de limpiarla?,
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Beiker López

ahora no sé por dónde empezar a buscar, qué libro debería leer o cuál deberá
contener esa información.
Sentí la presencia de un fantasma, pero no tenía miedo.
¿?: ¡Querido! ¿Se te olvidó lo que conversamos hace unos minutos?
Al escuchar la voz de la dama recordé al instante que me advirtió que no
entrara a su biblioteca y comencé a responderle a través de mis pensamientos.
Kerf Sylver: ¡Discúlpame! No recordé, pero tengo que investigar algo
que se encuentra en alguno de estos libros.
¿?: Te advertí que no entraras a mi biblioteca, no me gusta que husmeen
en ella.
Su voz cambió de ser una voz dulce a una seria, una corriente fuerte de
aire levantó todo el polvo rodeándome, cerré mis ojos para que no cayera
sucio en ellos, por arte de magia no sentí más el viento y al abrirlos me
encontraba afuera de la biblioteca.
¿?: ¡Querido! No intentes entrar nuevamente si no quieres que te vuelva
a echar.
Dejé de sentir su presencia, pero persistí en volver a entrar, pero no
funcionó. La puerta estaba cerrada.
Kerf Sylver: ¿Por qué no me dejas entrar?
En ese momento Ransus llegó con May y ambos me preguntaron qué
estaba pasando, les comenté lo que había sucedido y que no entendí el por
qué pasó eso, era extraño que ese espíritu no quería que entráramos a su
biblioteca.
Ransus Cruz: Tengo entendido que los espíritus son celosos con sus
pertenencias, quizás sea eso Kerf, no quiere que entremos en su biblioteca,
piensa que tal vez la vamos a hurtar.
Kerf Sylver: Solo quiero investigar sobre la percepción extrasensorial,
no hurtar.
May Castell: Pero tendrás que dejarlo para después, te vinimos a buscar
para ir al pueblo a conocer, el señor Jhoel nos está esperando a las afueras
de la posada.
Kerf Sylver: Está bien, pero entraré quiera o no a la biblioteca. Espero
me hayas escuchado espíritu.
Nos fuimos hacia las afueras de la posada donde el señor Jhoel nos esperaba
para dar un recorrido por el pueblo, mientras May me preguntaba cómo era
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¡Aeón! Una vida prohibida

esa sensación de sentir espíritus cerca, la verdad era difícil de describir ya


que, era primera vez que sentía eso, le comenté que solo lo sentía. May solo
me observó mientras caminaba quedando pensativa, mientras Ransus solo
caminaba firme como si ya conociera ese sentir.
Kerf Sylver: Ransus no has dicho nada desde que vinimos de la
biblioteca, ¿te sucede algo?
Ransus Cruz: Estaba pensando, si esos fantasmas solo los sientes tú y
solo los oyes tú, cuál es el motivo que tienen ellos contigo. Yo también noté
cosas extrañas al llegar al pueblo.
En nuestra mente se generó la misma duda. De repente sentí cómo mi
cuerpo comenzó a temblar, mi cabeza parecía que fuera a explotar y mis ojos
me ardían mucho.
Kerf Sylver: ¿Qué está pasando? Qué le pasa a mi cuerpo, tengo miedo,
siento como si perdiera la fuerza ¡Ayúdenme!
Pasaron unos minutos y poco a poco se me fue pasando ese malestar,
cuando sentí que no tenía ardor en mis ojos, los abrí.
Kerf Sylver: ¡Qué es esto! ¿Dónde estoy?
Me encontraba en medio de un bosque y era de noche, solo la luna
iluminaba la inmensa oscuridad que se encontraba allí, había muchos
arbustos, ramas y árboles grandes sin salida alguna.
Kerf Sylver: No puede ser ¿otro sueño?, pero siento cómo una energía
extraña fluye en este lugar, podría hasta correr millas.
Descubrí que detrás de aquellos arbustos donde me encontraba existía
una laguna, entre los arbustos y la fauna silvestre que se encontraba era casi
imposible al ojo humano ser vista, sin embargo, había como cierta energía
que emanaba detrás de todas esas ramas que llamaba a mis oídos y a mi
curiosidad. Me adentré entre los matorrales intentando no ser estropeado ni
caerme, era de noche, pero no era oscuro, la luna posaba majestuosa con un
brillo espectacular que alumbraba la noche y los árboles, al caminar muchas
luciérnagas brotaban de esos árboles que la luna iluminaba.
Kerf Sylver: Qué espectáculo, parecen estrellas esas luciérnagas.
Todas brillaban haciendo un camino de luz, marchaban una tras otra a un
solo destino. Las perseguí.
Kerf Sylver: ¿A dónde se dirigen? Quizás me estén indicando la salida
de este bosque tan extraño, espero sea así. Sea o no sea un sueño no quisiera
quedarme solo en este lugar.
51
Beiker López

Al final de aquel bosque donde las luciérnagas me guiaron, se encontraba


un lago muy grande y circular, sus piedras brillaban en el fondo, la luna en
todo su centro se reflejaba en el lago como si fuera la lámpara de un castillo,
solo me preguntaba si era ella quien hacía brillar las piedras y si era ella
quien hacía que aquellas luciérnagas marcharan hasta el lago.
Kerf Sylver: ¿Puede existir un lugar así? Estoy impresionado, es hermoso
este lugar.
Impresionado de esa belleza natural nocturna que admiraba, al lado de un
árbol veo una silueta de una mujer, al observar más detalladamente una mujer
de un cuerpo muy estilizado con una venda en sus ojos, cabello amarillo
como el sol, se encontraba parada a la orilla del lago mirando a la luna.
Kerf Sylver: ¿Qué hace esa mujer desnuda aquí? al parecer tiene una
venda en sus ojos.
Dio un paso al agua, pero no se hundía, caminaba por el agua como si
fuera sólida, no lo podía creer, con mi mano derecha me tocaba mis ojos para
ver si en realidad estaba viendo bien. Aquella mujer caminó hasta donde el
reflejo de la luna posaba en el medio del lago, con su mano derecha hizo una
reverencia tocando su corazón, del lago comenzaron a salir como burbujas
que al reventar generaban una especie de vals con el cual empezó a danzar,
pareciera que volara sobre el agua, una danza como el baile con movimientos
tan delicados asemejándose a un cisne.
Kerf Sylver: ¿Qué clase de melodía generan esas burbujas al explotar?;
siento una paz en todo mi cuerpo, lo más increíble es verla bailar; es como si
calmara mis temores.
Con cada movimiento que ella hacía, el agua del lago respondió a su
danza creando como dos serpientes que movía a su antojo y al ritmo de su
danzar delicado, las serpientes cubrieron parte de su cuerpo y las luciérnagas
que brotaban de los árboles fueron hasta donde se encontraba, junto con el
agua creando una estela en cada movimiento de ella.
Kerf Sylver: Mi corazón late fuerte. Es hermoso.
Ya cubierto todo su cuerpo, el agua se le convirtió en un vestido, terminó
haciendo la misma reverencia como comenzó y al poner su mano en su pecho
del lado donde está su corazón, el agua hizo un estallido junto a las luciérnagas
convirtiéndose en un hermoso vestido azul con plateado que brillaba con la
luz de la luna. No podía creer lo que veía, nunca había imaginado ver algo
así, me sentía impactado por ver tanta belleza que no encontraba la exacta
emoción que sentía en ese momento, solo me sentía muy atraído como por
unas fuertes ganas de ir hasta ella y ser su más ferviente súbdito.
52
¡Aeón! Una vida prohibida

Kerf Sylver: Quiero ir hasta donde está. ¿Por qué?


Ella miró a la luna con sus ojos vendados y se fue sumergiendo en el agua
hasta no quedar rastro de ella, pensé que se iba a ahogar y salí corriendo
asustado de que fuera así, me lancé al agua fría a buscarla pero nunca la
encontré, no había rastro de ella.
Kerf Sylver: ¿Qué está pasando? no la encuentro, ¿dónde está?
Al salir del lago todo empapado y muy agitado por no haber encontrado
rastro de aquella mujer, la voz de aquel fantasma me susurró al oído:
¿?: ¡Querido! Es hora de que vuelvas, pero a mi biblioteca.
Al escucharla en el lago se hizo un remolino convirtiéndose en un géiser,
el agua me cayó encima arrastrándome hacia el lago y mientras más quería
salir de él, más sentía que me hundía, pedía auxilio desesperadamente y sentí
que no podía respirar.
Kerf Sylver: ¿Moriré de esta manera?
Perdí el conocimiento. A los minutos la misma voz del fantasma me
llamaba.
¿?: Despierta querido. Basta de dormir.
Una mujer cabello corto rojizo, con lentes cuyos bordes eran de zafiro,
su forma de vestir era un sobretodo negro con mangas de color rojo, una
falda larga, tacones y una camisa blanca, su piel era blanca y una sonrisa que
emanaba calidez.
Madrean Deian: ¡Al fin me conoces querido!, me llamo Madrean Deian,
soy la que cuida esta biblioteca.
Al levantarme noté que me encontraba en la biblioteca, pero esta vez no
estaba sucia ni con tela de araña, estaba limpia, el lugar se encontraba muy
colorido y los libros intactos.
Kerf Sylver: Por qué ahora la biblioteca se encuentra limpia y ¿dónde
están los demás?
Madrean Deian: No te preocupes querido están bien ellos, jamás te fueron
a buscar, fui yo quien hizo esas ilusiones para que pudieras caminar hasta el
pasillo, creo que jamás te diste cuenta de que en él había una pintura de un
lago y un cisne; esa pintura se llama ¡el cisne desnudo y el lago escondido!
Es hermosa y quise llevarte a ella porque me caes bien.
Kerf Sylver: No lo entiendo ¿por qué lo hiciste? Pensé que iba a morir
ahogado.

53
Beiker López

Madrean Deian: Tienes un don natural Kerf, eres un chico prodigio,


tienes la bendición de Kherbion, no tienes que investigar sobre la percepción
extrasensorial; no es más que lo que se denomina sexto sentido, no te quise
dejar pasar a mi biblioteca porque quería estar segura de que en verdad eres
tú quien tiene esa bendición. Muchos han venido aquí y han sentido nuestra
presencia, pero salen corriendo, tú eres diferente se te nota en tus ojos.
Kerf Sylver: ¿Kherbion? No entiendo de lo que hablas.
Madrean Deian: No te preocupes con el tiempo lo sabrás, esta es mi
biblioteca aquí encontrarás todo tipo de información que quieras saber, eso
sí no juegues con ellos, ellos sienten tus sentimientos.
Kerf Sylver: Son solo libros con letras, no pueden sentir.
Madrean Deian: ¿Estás seguro de ello? Te invito a leer el que tú quieras.
Fui a leer un libro agarrando uno que se titulaba “Aeón”. Al abrirlo vi
que no tenía absolutamente nada escrito, estaba en blanco, tomé otro llamado
“una vida prohibida” y también se encontraba en blanco. Madrean Deian
apareció como humo detrás de mí riéndose.
Madrean Deian: Querido ningún libro que se encuentre en esta biblioteca
mostrará lo que lleve escrito si tú crees que son simplemente libros comunes,
estos libros contienen magia pura, mientras tú no domines ese don que tienes
y no cambies ese pensar, ellos jamás se mostrarán ante ti.
No podía creer que ningún libro tenía algún contenido, estaban en blanco
y comencé a abrir uno por uno. Madrean Deian solo se sonreía y aparecía en
todos lados.
Madrean Deian: Soy uno de los nueve fantasmas del piano Kerf, todos
en esta posada vivimos aquí por mucho tiempo, en busca de un ser humano
que nos libere de este mundo.
Kerf Sylver: ¿Nueve fantasmas del piano? No entiendo nada, explícame
por favor.
Madrean Deian: Te explicaré luego de que aprendas a dominar tu don
querido, te dejaré pasar a mi biblioteca solo a ti, si entras con otra persona te
sacaré, es hora de que regreses a la realidad.
Kerf Sylver: Estoy soñando ¿cierto?
Madrean Deian: Mucho mejor que lo pienses así, nos volveremos a ver
querido.
Haciendo un círculo de polvo sobre mí, riéndose, volví a las afueras de
la biblioteca sosteniendo la manilla de su puerta, como si hubiese estado

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¡Aeón! Una vida prohibida

dormido de pie y por pocos segundos, nuevamente había experimentado


otro momento extraño, ahora más que Madrean Deian se reveló ante
mí diciéndome que tenía “la bendición de Kherbion”. Solo en mi mente
resonaba ese nombre; ahora más que nunca quería conocer más sobre este
lugar, una posada encantada y una biblioteca sobre la cual me preguntaba
cuál era la magia oculta entre los libros
Kerf Sylver: ¿Kherbion? Quién será…

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Beiker López

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¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 4

Toca para mí este piano viejo


(Biblioteca Ranhze, año 2057)

Todo era un misterio, pero al mismo tiempo algo tan fantástico, parecía
que estaba viviendo en un mundo de videojuego, magia, fantasmas y libros.
–¿Qué pasó después de ese momento?
Luego de eso…

(Lirio de Luna, año 2016)


En mi mente solo pensaba quien era Kherbion y por qué los libros no
contenían nada escrito en ellos, sin embargo, mi instinto me decía que yo tenía
que investigar sobre todo lo que estaba pasando, había ciertos pensamientos
en mi cabeza que aparecían una y otra vez.
Kerf Sylver: El escudo con el elefante, esas letras extrañas en la habitación
junto a los dibujos y el pueblo ¿estarán relacionados con ese tal Kherbion?
Tantas dudas en mi cabeza sin ninguna respuesta me daban ganas de
investigar todo este gran misterio.
Kerf Sylver: Será mejor que vaya a buscar a los chicos antes de que otro
fantasma quiera dormirme de nuevo.
Fui al comedor donde imaginé que se encontraba Ransus junto a May,
mientras caminaba observaba cada rincón de los pasillos, puesto que nunca
me detuve a detallar cada parte del lugar, notaba los pasillos como similares
a los de un castillo, pero todo estaba deteriorado. Cuadros, jarrones y muchos
otros adornos que a simple vista parecían de valor, pero para mí todo podía
ser algo mágico.
Kerf Sylver: Este lugar parece un castillo, los cuadros son demasiado
antiguos, quizás esos fantasmas eran personas que habitaban este lugar y eso
me hace pensar en la posibilidad de que Kherbion era el dueño de este lugar,
pero debe existir algún retrato de él.

57
Beiker López

Iba observando cada retrato de los pasillos, pero la mayoría eran paisajes
muy hermosos y llamativos, al pasar por una habitación que tenía su puerta
abierta, vi que se encontraba el piano de aquel sueño donde ese caballero con
la máscara tocó un vals, al dar varios pasos regresé para ver si era el mismo,
pero ya no estaba, la habitación estaba vacía.
Kerf Sylver: Estoy seguro de que vi el piano, ¿de nuevo estaré alucinando?
mejor seguiré no quiero toparme con otro de esos fantasmas.
Ya alejado de la habitación escuché el sonar del piano, me detuve para ver
si no era mi imaginación.
Kerf Sylver: Están tocando el piano y viene de la habitación.
Corriendo regresé para ver si había una persona tocándolo, al llegar a la
habitación dejó de sonar y no había nada, solo una habitación vacía. Estaba
seguro que se trataba de otro fantasma jugando conmigo.
Kerf Sylver: Ya sé que eres otro fantasma y que habitan en esta posada,
no intentes asustarme.
Ya no sentía miedo, de pasar por tantas cosas que había pasado al llegar
a esta posada, pero no entendía el por qué esos fantasmas se me aparecían
solo a mí. Me fui de esa habitación un poco molesto, ya me había alejado
de la habitación cuando volvió a sonar el piano pero esta vez la melodía era
la misma que tocó aquel caballero en mis sueños; me quedé impresionado
escuchándola y recordando ese momento cuando me encontraba en esa
habitación bailando junto a él.
Kerf Sylver: Es él, estoy seguro que es él, puedo sentir lo mismo que
sentí cuando lo oí tocar por primera vez, tengo que volver para hablar con él,
quiero saber quién es y por qué siento todo esto.
Al regresar a la habitación con la esperanza de poder verlo, al llegar
no había nada pero la melodía no había parado, entré buscando de dónde
provenía la música y la puerta se cerró, quedándome encerrado.
Kerf Sylver: Aunque no te vea sé que estás aquí, esa es la melodía que
tocaste para mí la primera vez que nos conocimos, dime ¿qué quieren de mí?
Sentía cómo una presencia me rodeaba con una calidez inmensa, podía
sentir cómo caminaba hasta que se detuvo delante de mí. Recordé la última
parte de ese sueño donde bailaba y al finalizar con su dedo tocó mi frente y
desperté.
Kerf Sylver: Sé que estás aquí, estoy seguro que no estoy dormido,
puedo sentirte, aunque no te vea, siento tu calidez como en mi sueño, dime
tu nombre para no decirte caballero, quiero saber quién eres.
58
¡Aeón! Una vida prohibida

Sentí cómo un viento acariciaba mi mano derecha y me la levanto poco


a poco hasta llegar al medio, luego otro estaba en mi espalda, mi mano
izquierda se levantó como si fuera a sostener a alguien y en ese momento
comprendí que él quería volver a bailar.
Kerf Sylver: ¿Quieres bailar nuevamente conmigo? intentaré seguir tus
pasos, aunque no te vea.
Me sentía muy seguro a pesar de que parecía que hablara solo, sabía que
estaba allí aquel caballero del cual aún desconocía su nombre; una suave
brisa tocaba mis ojos y era signo de que tenía que cerrarlos. Sentía una paz
en cada centímetro de mi cuerpo, al mismo tiempo visualizando la silueta de
él; sabía que era él quien me sostenía, visualicé el piano en el rincón, imaginé
la misma orquesta que en mi sueño se formó de piedras, hojas, ramas y tierra.
Se detuvo la melodía que sonaba y todo el lugar quedó en silencio por unos
segundos dando inicio a un hermoso vals.
Kerf Sylver: ¿Quién eres, por qué siempre quieres bailar conmigo?
¿?: Déjate llevar, siente cómo la música guía tus pasos liberando tu sentir,
siente como si volaras, un, dos, tres, un, dos, tres… solo déjate llevar por mí.
Estaba sorprendido de escuchar su voz.
Kerf Sylver: ¿Puedes hablar?, ¿quién eres? por qué siempre quieres
bailar conmigo, ¿eres uno de los nueve fantasmas?
¿?: Sí, Puedo hablar cuando me conecto con la música al mismo tiempo
con quien baila conmigo, pero la realidad no hablamos, son los pensamientos
que hablan por nosotros junto a los sentimientos tan fuertes que te genera la
melodía del piano, ¿amas el piano no es así?
Kerf Sylver: Siempre pensé que este tipo de cosas eran mágicas, pero
¿cómo lo sabes? Si a nadie le he contado sobre el amor que le tengo al piano,
a los valses y más que nada al amor puro y sincero.
¿?: No necesito que me lo digas, al verte entrelazando nuestras manos
para bailar puedo saber todo de ti, puedo sentir tus latidos al igual que tú
sientes los míos, es por eso que sientes una paz en todo tu cuerpo, sientes
cómo tus latidos se vuelven más fuertes en cada tonada del piano y más que
nada una armonía.
Kerf Sylver: La primera vez que bailamos me sentí seguro como si ya te
conociera, es tan extraño porque no sé quién eres, pero algo me dice que ya
nos conocemos.
¿?: Solo soy alguien que quiere cuidarte, baila conmigo esta pieza de
vals, déjame llevarte al cielo infinito al contar cada paso que das, uno, dos,
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Beiker López

tres… un, dos, tres… déjate llevar, sintiendo cómo cada parte de tu cuerpo se
entrega a esa hermosa melodía.
Al escuchar decir eso me dejé llevar con el sonar de aquella hermosa
orquesta, sentir cómo mi cuerpo se dejaba llevar por la música aun sin saber
quién era ese fantasma, no me importó en ese momento nada, estaba tan
entregado al vals como la luna se entrega al cielo y las estrellas se reflejan
en el mar.
¿?: Abre tus ojos…
Los abrí, no podía creer lo que estaba pasando, pasé de encontrarme en
una habitación desalojada a un salón de palacio donde había muchas otras
parejas bailando al igual que yo, la orquesta no eran personas hechas de tierra
sino humanos, un piano blanco brillante que desprendía un polvo que daba al
lugar la majestuosidad mientras era tocado por una persona masculina.
Kerf Sylver: ¿Qué es este lugar? Qué increíble como todos bailan, el
sonar del piano, este baile. ¿Por qué me trajiste a este lugar?
Un salón digno de un palacio real que se encontraba iluminado en cada
rincón por sus lámparas de cristal, el polvo que se desprendía del piano hacía
que todo brillara como oro, cortinas de seda pura daban elegancia al lugar,
las personas bailaban como si no hubiera un fin, todos vestían de una manera
elegante, los hombres con traje de color blanco y máscaras, las mujeres con
vestidos del mismo color. Era hermoso ver bailar a cada persona pero lo más
impresionante era observar cómo personas de su mismo género bailaban;
hombres bailando con hombres y mujeres bailaban con mujeres, era ver un
mundo sin discriminación alguna. Sin darme cuenta vestía el mismo traje
del sueño, la capa tocaba el suelo haciendo que mis movimientos fueran
más agraciados. El caballero también estaba igual a cuando lo conocí, pero a
diferencia de aquel momento en su cabeza tenía una corona y en ella talladas
las mismas letras que estaban en la habitación de la posada.
Kerf Sylver: ¿Eres un rey? Estoy confundido, jamás he visto un baile
donde también hayan parejas del mismo género bailando, ¿qué es este lugar?
¿?: Yo soy un rey y este es mi baile real, aquí no existen las diferencias,
aquí solo existe la libertad. No importa tu orientación sexual, lo que importa
es sentirte libre de expresar lo que eres sin temor a ser juzgado, tú también
quieres un mundo así. Quiero darte la bienvenida a mi mundo donde tú eres
mi invitado especial y donde quiero que junto a mi gobiernes.
Kerf Sylver: ¿Por qué yo?
El rey: Con el tiempo lo sabrás, por ahora solo disfruta este baile que es
en tu honor.

60
¡Aeón! Una vida prohibida

Así dimos inicio al baile donde me encontraba en todo el medio del salón,
mientras bailábamos cada pareja se soltaba y tomaba de mi mano para bailar
conmigo y otros tomaban de la mano a él, era un baile libre donde todos
bailaban sin parar y no importaba nada más que eso, con tan solo hacer una
reverencia con quien querías bailar bastaba, me sentía tan feliz de estar en un
lugar así. El rey se acercó hasta mí haciendo la reverencia nuevamente para
bailar conmigo.
El rey: Este es el mundo al que tú perteneces, donde realmente puedes ser
libre, quédate conmigo y sé feliz.
Miraba alrededor viendo tantos rostros felices, aun sabiendo que eran una
ilusión creada por el fantasma del rey sentía como una satisfacción enorme,
el rey con su mano derecha tocó su corazón y con la última reverencia hacia
mí culminó el vals. Me guió hasta un trono que estaba al final de ese salón,
mientras pasaban todos los que se encontraban allí y hacían una reverencia
ante nosotros, al sentarse movió su mano izquierda en forma de círculos
haciendo aparecer un anillo en mi mano, no entendía nada de lo que sucedía
solo miraba cómo todos me hacían una reverencia como si yo también fuera
un rey.
El rey: Todos te hacen reverencia porque saben que tú eres el verdadero…
Antes de que dijera quién era yo, una persona se elevó y se agarraba el
cuello como si estuvieran asfixiándola.
Kerf Sylver: ¿Qué sucede?
Las personas comenzaron a gritar, el muchacho quien estaba en el aire
dejó de moverse siendo lanzado contra la pared cayendo muerto, todos
comenzaron a desesperarse al no entender lo que estaba pasando corriendo y
tropezándose unos con otros
Kerf Sylver: Está muerto ¿ESTÁ MUERTO?
Las luces se apagaron quedando todo oscuro, entre gritos y desespero,
sólo me quedé quieto en el mismo sitio sin moverme, estaba muy asustado
por lo que sucedía, una voz muy tenebrosa y escalofriante sonó en todo
el lugar haciendo que cada parte de mi cuerpo se erizara de una manera
exagerada, un frío inigualable arropaba el ambiente quitando la calidez que
se podía sentir anteriormente.
¿?: Mi amado rey hace un baile sin invitarme. Qué cruel.
Mi cuerpo se encontraba paralizado como aquella vez en mi sueño y esa
voz ya se me hacía conocida.

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Beiker López

Kerf Sylver: Esa voz es de aquel espectro de mi sueño que estaba vestido
con un sobretodo de color negro, sus ojos eran rojos con una sed de matar y
una sonrisa malévola, no me puedo mover ¡tengo miedo!
No podía controlar absolutamente nada de mi cuerpo al escuchar hablar a
aquel personaje macabro.
¿?: Mi rey, como notaste ya maté a uno de tus invitados, pero tengo ganas
de eliminar a otro más, pero antes quiero silencio en todo el lugar para que
escuchen cómo lo estrangulo.
Un chasquido y el lugar quedó totalmente en silencio, un grito desgarrador
de una mujer que estaba siendo estrangulada, los sonidos de los huesos
sonaban en todo el lugar, solo cerré los ojos tragando fuerte queriendo no
escuchar nada, quería salir corriendo, pero mi cuerpo no cedía para poder
moverse, me sentía frustrado, los sonidos tan horripilantes resonaban en mi
cabeza haciendo que mis ojos se llenaran de lágrimas de terror, podía solo
escuchar mis pensamientos.
Kerf Sylver: Por favor, basta, no mates a más personas, BASTA…
Las lágrimas recorrían mis mejillas, la desesperación de ese momento era
inmensa, solo se podía escuchar, todo quedó totalmente en silencio, estaba
aterrado porque un asesino estaba merodeando en la oscuridad. Unos ojos
rojos venían hacia mí lentamente, esos mismos ojos rojos llenos de maldad
y sed de sangre.
Kerf Sylver: No, no, a mí no, POR FAVOR.
¿?: ¿Estás asustado? Tranquilo, no dolerá. He esperado el momento para
llevarte a donde nunca puedas volver.
Estaba totalmente aterrado nunca me había sentido así, esa sensación
que el corazón está que estalla, sin poderme mover, todo oscuro, solo ver
como unos ojos rojos en plena oscuridad se acercan lentamente hacia mí
no se compara con nada, las lágrimas brotaban como un río sin cauce y mi
cuerpo temblaba como si hubiera un terremoto. Escuché unas palabras de ese
espectro que hicieron que mis sentidos llegaran al extremo.
¿?: BIENVENIDO A MI MUNDO DONDE AEÓN JAMÁS SERÁ
TUYO…
Solo vi acercarse esos ojos rojos pero una voz que ya conocía detuvo a
ese demonio.
¿?: ESTÁS EQUIVOCADO SI PIENSAS QUE TE DEJARÉ MATARLO.
Se trataba de Madrean Deian; para mí fue un respiro a tanto terror, la
62
¡Aeón! Una vida prohibida

lámpara del centro se encendió, al visualizar me encontraba detrás del rey


junto a Madrean Deian, el espectro había desaparecido, pero todos en el
lugar se encontraban petrificados.
El Rey: ¿Dónde estás? PELEA COBARDE.
Seguía todo en silencio, las paredes llenas de sangre por un lado y por el
otro estaba tirada una mujer estrangulada.
El Rey: ¡ESE MALDITO! Usó un hechizo de petrificación, pero a mí no
me afectó ¿y tú? no te conozco, ¿quién eres?
Madrean Deian: Agradece que aparecí, de lo contrario hubiesen matado
a Kerf ¿qué clase de rey eres? que no proteges a tus súbditos, además nadie te
dio permiso de traer a Kerf a este lugar. Explícame por qué usaste un hechizo
prohibido para traerlo ¿QUIÉN RAYOS ERES TÚ?
El Rey: Veo que no soy el único que sabe sobre magia y de hechizos en
este lugar ¿así que eres bruja? Ahora entiendo por qué el hechizo tampoco te
afectó a ti. ¿Quién soy? Eso te lo pregunté primero a ti.
Madrean Deian: Soy Madrean Deian, soy la guardiana de los libros ¿cómo
es que sabes del hechizo de transportación? ¡Es un hechizo prohibido! Sabes
lo peligroso que puede ser usarlo, debiste sacrificar algo para poder hacerlo.
Te haces decir ¿que eres un rey? cuando no piensas en las consecuencias,
pero me tienes sorprendida, tienes un gran poder de lo contrario no hubieras
hecho ese hechizo. ¿Dime quién eres?
Una risa malvada resonó de nuevo en todo el salón, el piano comenzó a
sonar, pero sus tonadas eran escalofriantes, los instrumentos se tocaban por
si solos. Se trataba de ese ser maligno que sentado en el piano usaba magia
para generar música.
¿?: No quisiera arruinar tu baile mi rey, sigan bailando.
Con un chasquido de sus dedos encendió las luces de todo el salón, mi
cuerpo comenzó a moverse solo al igual que todas las personas. El demonio
solo gritaba que bailáramos al son de su melodía y nuestros cuerpos le hacían
caso.
El Rey: Ven y pelea conmigo cobarde.
Madrean Deian: Si piensas que dejaré que le hagas daño a Kerf te
equivocas…
Todos bailaban desordenadamente y eso causaba que todos se tropezaran
unos con otros, el rey solo incitaba a combatir con ese espectro, Madrean
Deian estaba pendiente de que él no fuera a hacer un movimiento atentando
63
Beiker López

contra mí; sin ellos darse cuenta me perdí entre la multitud que bailaba.
Mientras más pensaba en qué hacer menos me llegaba una solución, era
difícil combatir con algo que ni tú sabes qué es, sin embargo intentaba poder
tomar control de mi cuerpo que solo danzaba al igual que las otras personas
como si fuéramos unas simples marionetas; el vil personaje de vestir oscuro,
una capa negra que tenía incrustados diamantes de color negro, unos guantes
de color morado con oro, y en su cara tenía una máscara que solo llegaba a su
nariz pero se le podían visualizar sus ojos de color rojo como la sangre, tenía
la piel blanca y una sonrisa malvada, se levantó del piano sin dejar de sonar
su melodía, comenzó a reírse como un desquiciado y dirigiéndose hacia mí
con palabras que me aterrorizaban.
¿?: ES HORA DE QUE MUERAS COMO INVITADO DE HONOR
QUE ERES. DAMAS Y CABALLEROS, LA EJECUCIÓN DE KERF.
Levantó sus brazos como si alabara a un dios mirando a todos sonriendo,
puso su mano hacia adelante apuntando hacia mí y sentía como una fuerza
extraña que tomaba mis piernas, sentía que me iba elevando poco a poco, ya
podía hablar y moverme a mi propia voluntad mientras los demás seguían
bailando.
Kerf Sylver: AYÚDENME.
El Rey: Está claro que él tiene mucho poder y yo aún no estoy preparado
para luchar contra alguien así, te pido que uses el hechizo de transportación
y regreses a Kerf al sitio de donde lo traje, no nos conviene a ninguno de
los dos que lo asesinen y tú sabes el por qué, hazlo mientras hago tiempo
peleando con él, por favor aléjate de aquí lo más que puedas Madrean. Esto
se va a poner feo.
Madrean Deian lo miró fijamente un poco desconcertada pero solo
respondió:
Madrean Deian: No sé quién eres ni sé cómo sabes todo, pero si significa
que salvaré a Kerf de que sea asesinado lo haré, lo llevaré de vuelta.
El Rey: A su tiempo también sabrán quién soy yo, elimina el recuerdo de
esto a Kerf con uno de tus hechizos “la bengala del muerto”.
Madrean Deian: ¡Sabes mucho! Luego nos encontraremos, me encargaré
del hechizo.
El rey se quitó su capa, puso ambas manos en forma de puños y comenzó
a decir una oración con la cual las estatuas del salón y de todo el lugar que se
encontraban allí fueron cobrando vida.
El Rey: “Por el alma noble por la cual fui concebido, con el poder de
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¡Aeón! Una vida prohibida

mi padre que me fue otorgado para proteger, invoco a todos los guardianes
sellados de este castillo, ¡RESUCITEN ANTE SU REY!”.
Todas las estatuas del castillo fueron llegando una por una, estatuas de
gryphos, gladiadores, caballeros, leones y vikingos marchaban con vida
propia ante su rey, después el rey cambió su posición y puso su brazo adelante
en forma de puño y el otro igual, pero con la mano abierta, hizo aparecer una
espada diciendo otra oración más.
El Rey: “guerrero vivo que ardes como el volcán, de los siete templos
te imploro que vengas a mí, bríndame la fortaleza misma para sostener, ¡la
espada bendita de Ariel!”.
Al ver que el rey se puso serio para batallar, el ser maligno me soltó
y caí al suelo, dejó a todas las personas en libertad de su hechizo y todas
salieron corriendo fuera del salón, él solo comenzó a burlarse captando toda
su atención hacia el rey
¿?: ¡Así me gusta! Quiero divertirme un poco antes de asesinar a la única
salvación que tienen… ¡te daré un gran espectáculo!
Al igual que el rey comenzó a decir una oración, pero a diferencia del
puño sus manos hacia arriba como pidiendo al cielo.
Rey Quimera: “Al infierno voy, del infierno vengo, batallón de terror
que causa destrozos, les habla su rey quimera ¡VENGAN A MÍ! Destrocen
todo a su paso, derramen su sed, creen el caos entero gobernados por mí”.
Madrean Deian al oír Rey Quimera comenzó a temblar y sudando frío
solo dijo:
Madrean Deian: ¡No puede ser!
Yo no podía entender nada, estaba tan aterrorizado y sorprendido por lo
que estaba sucediendo.
El Rey: ¿QUÉ ESTÁS ESPERANDO? ¡HAZ EL HECHIZO Y VETE
DE UNA BUENA VEZ!
De pronto de las ventanas entraron volando como hombres vampiros
atacando a las estatuas que habían sido invocadas por el rey, al mismo tiempo
hombres lobos fueron llegando a la lucha, demonios surgían del suelo uno
tras otro, uno de esos demonios le dio una espada al Rey Quimera y ambos
guerreros comenzaron a batallar, entre espadazos se debatían mientras las
estatuas combatían a todos esos espectros oscuros que fueron invocados
creando una guerra de otro mundo.
El Rey: ¡Te juro que no dejaré que mates a Kerf! Seas quien seas no lo
permitiré.

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Beiker López

Rey Quimera: ¿Crees que podrás ganarme a mí? El elegido de ¡Layfher!


No me hagas reír.
Madrean Deian reaccionó de momento y me dio una explicación breve de
lo que tenía que hacer para irnos de allí.
Madrean Deian: Kerf necesito que cierres los ojos y digas conmigo
esta frase “de regreso a donde soy, de regreso iré, donde nada ha pasado me
encuentro, donde existo estaré”; repítelo tres veces y al final di “bengala de
los muertos”, te agarraré la mano y me apretarás fuertemente, mi otra mano
estará en tu frente. ¿Está bien?
Kerf Sylver: ¡Está bien!
Madrean Deian: ¡Comencemos!
Empecé a recitar lo que Madrean me había explicado y al final dije:
“bengala de los muertos”; sentí cómo una luz alumbraba toda mi mente, me
sentí como si me dieran anestesia y me fui durmiendo lentamente.
Madrean Deian: ¡Rey! ¿Estarás bien? Ya hice el hechizo, ya el portal
empezó a abrirse.
El Rey: ¡VETEEE NO TE PREOCUPES POR MÍ, SOLO VETEEEEE!
Rey Quimera: ¡NO LO PERMITIRÉ!
El Rey: ¡TU BATALLA AHORA ES CONMIGO!
Uno de los demonios nos fue a atacar, pero ya era tarde, un polvo de color
rojo nos comenzó a rodear rápidamente y antes de cerrar los ojos vi cómo
uno de los demonios nos atacó, pero me dormí.
Kerf Sylver: Cui-da-do…
De golpe aparecí en la misma habitación donde comencé a escuchar el
piano.
Kerf Sylver: Definitivamente estoy loco, creí haber escuchado un piano,
pero no lo veo.
En ese preciso momento llegaron Ransus y May a donde me encontraba.
May Castell: Kerf te estábamos buscando, vamos al pueblo a comprar
algunas cosas.
Kerf Sylver: ¡Sí claro, vamos! Solo que creo haber escuchado que
alguien tocaba el piano en esta habitación.
Ransus Cruz: Te equivocas, el piano no está en esta habitación, está en
la siguiente.

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¡Aeón! Una vida prohibida

May Castell: Sí, está en la otra lo acabamos de ver cuando te buscábamos.


Les dije que me guiaran hasta donde se encontraba el piano que estaba
seguro de haber escuchado que alguien lo tocaba; nos dirigimos hasta allí
antes de irnos al pueblo a comprar cosas, al llegar a la habitación abrimos la
puerta, se encontraba toda sucia y abandonada como lo estaba la biblioteca,
pero al llegar tuve un déjàvu.
Kerf Sylver: Chicos me creen si les digo que siento que estuve aquí. No
sé por qué, pero siento como si ya estuve aquí anteriormente.
May Castell: ¿Otra vez con lo mismo? De seguro lo soñaste o te lo
imaginaste, si la puerta estaba cerrada y aparte mira lo sucio que está este
lugar, ¿cómo vas a estar aquí?
Kerf Sylver: No lo sé solo digo, es extraño.
Me parecía extraño haber tenido un déjàvu en esa habitación, pero no
presté atención y comencé a ver el piano que allí se encontraba, llegué hasta
él tocándolo y sentía un sentimiento tan extraño, Ransus y May hicieron lo
mismo, pero como por arte de magia no podían tocarlo, pareciera que tuviera
una especie de capa.
May Castell: Por qué no lo puedo tocar.
Ransus Cruz: Me pasa lo mismo, no puedo tocarlo.
No entendíamos lo que sucedía puesto que yo sí podía tocarlo sin ninguna
dificultad, pero ellos no podían era como si existiera una energía que no
permitiera que ellos tocaran el piano, escuché la voz de otra mujer que decía
que nos alejáramos de ese piano.
¿?: Aléjense de ese piano ¡ya mismo!
Estaba seguro que no era de Madrean, pero no quería averiguarlo, así que
les dije a los chicos que nos fuéramos de esa habitación cuanto antes.
Kerf Sylver: Chicos vámonos de este lugar, antes de que nos arrepintamos.
Salimos lo más rápido posible de allí hacia las afueras de la posada, al
salir nos esperaba el señor Jhoel con su camioneta.
Kerf Sylver: ¡Hola señor Jhoel! ¿cómo se encuentra? No lo habíamos
visto desde que nos trajo hasta aquí.
Señor Jhoel: ¿Cómo se encuentran la dama y los caballeros? Cómo la
han pasado en su estadía aquí, bueno adelante súbanse a la camioneta que
tenemos mucho que recorrer.

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Beiker López

Al montarnos todos para partir hacia el pueblo quedé del lado derecho de
la puerta de la camionera, mirando hacia la posada viendo bien su estructura
vi que prácticamente era como una parte de un castillo, al mirar una ventana
se encontraba una mujer observándonos muy detalladamente, no podía
distinguirla bien, pero lo poco que pude ver se trataba de una mujer morena,
cabello negro corto y mirada algo intimidante, repentinamente solo se movió
de la ventana y desapareció.
Kerf Sylver: Señor Jhoel, ¿podría preguntarle algo si no le molesta?
Señor Jhoel: ¡Claro que puedes preguntarme lo que quieras!
Kerf Sylver: ¿En esta posada cuántas personas hay hospedadas?
El señor Jhoel sonrió, pero su mirada era más seria que como al principio.
Señor Jhoel: ¿Por qué lo preguntas Kerf?
Kerf Sylver: ¡La verdad! Siento que no somos los únicos que están en
esta posada, lo más extraño de todo esto es que siento que no son personas
sino fantasmas que habitan aquí, a esto me refiero que… esta posada
anteriormente ¿era de otras personas?
Señor Jhoel: Muchas personas que han venido salen asustadas de aquí,
pues sienten que ven fantasmas y les hablan, por eso son ahuyentados, lo
más seguro Kerf que a ustedes también les está pasando lo mismo que a esas
personas, la verdad desconozco si esta posada perteneció a otras personas.
May Castell: La señora Lidia nos dijo en el comedor, que muchas
personas salían de la posada aterrorizadas por supuestos fantasmas.
Señor Jhoel: ¡Así es! Lo peor de todo es que nosotros nunca hemos
sentido, presentido ni oído nada.
Kerf Sylver: Pero es extraño, entonces señor Jhoel, ¿desde cuándo
comenzaron los huéspedes a quejarse y decir que habían sido perturbados
por esos fantasmas?
Señor Jhoel: Desde que sucedió la tragedia del festival, luego de eso como
les comenté anteriormente los turistas venían poco y cuando se hospedaban
en la posada, a los días salían huyendo porque decían que habían visto
fantasmas, lo que más me sorprendió de todo es que algunos comentaban
o aseguraban que escuchaban tocar un piano y para nosotros era una gran
sorpresa puesto que nosotros no tenemos ningún piano en esta posada.
Todos nos miramos sorprendidos, no podíamos creer lo que el señor
Jhoel nos había dicho en ese momento, ¡que no tenían ningún piano!
May susurrando al oído me dijo que su cuerpo se le erizo al escuchar eso
simultánemente me estaba pasando lo mismo.

68
¡Aeón! Una vida prohibida

Señor Jhoel: ¿Les pasa algo chicos? Los veo como tensos.
Ransus Cruz: ¡No! No nos pasa nada, solo que nos asusta un poco esa
idea de que hay fantasmas en la posada.
May y yo miramos a Ransus, le hicimos seña del por qué dijo eso, él solo
nos miró como diciendo “solo síganme la corriente”.
Señor Jhoel: Bueno chicos ¿necesitan preguntar algo más?
Ransus Cruz: ¿Podría contarnos más sobre esas personas que dicen
haber escuchado tocar un piano?
Señor Jhoel: No sé mucho solo que algunos oían un piano tocar cuando
caminaban por los pasillos; según ellos era una melodía muy hermosa, cuando
iban a ver la habitación de donde provenía la melodía, se daban cuenta que
no había nada y a veces cuando llegaban hasta el sitio y el piano dejaba de
sonar, otros comentaban que cuando pasaba eso escuchaban una voz que
les susurraba “toca este piano viejo para mí” pero salían huyendo; otros
solían decir que al entrar a la habitación el piano sonaba pero no lo veían y
simplemente sentían que alguien los tocaba pero también salían corriendo
del lugar, Lidia y yo fuimos varias veces al lugar donde según esto sucedía
pero nunca nos pasaba nada ni oíamos nada.
Era increíble cómo todo lo que comentaba el señor Jhoel era exactamente
lo que yo estaba pasando, May y Ransus se sentían igual puesto que nosotros
vimos un piano viejo y ambos intentaron tocarlo, pero no pudieron, pero al
contrario yo sí pude tocarlo.
Señor Jhoel: Bueno chicos se nos hará tarde, debemos partir hacia el
pueblo.
El señor Jhoel encendió su camioneta arrancando hacia el pueblo,
mientras nosotros tres en la parte de atrás solo nos quedamos callados al
escuchar lo que el señor Jhoel nos había comentado, era sorprendente y fuera
de lo normal pero también era algo nuevo para nosotros.

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Luego de que partimos al pueblo estábamos tan impresionados de que nos
contaran lo que les sucedía a varias personas en ese lugar, cosa que nos estaba
sucediendo a nosotros; me preguntaba el por qué era yo generalmente el que
podía oír, sentir y hasta hablar con esos fantasmas como lo era Madrean
Deian.
–¿Cree que era usted que tenía que ver algo con esa posada o los que
fueron anteriormente a ella?

69
Beiker López

–Señor Kerf, ¿no pensó que el señor Jhoel sabía algo más de lo que le
comentó?
La verdad no podría decirles que pensé en ello en ese momento, estaba
tan sorprendido de ver tantas cosas extrañas que en mi vida por primera vez
estaba experimentando, era fuera de lo cotidiano, en mi cabeza solo pasaban
las escena donde me topaba con esos fantasmas, aparte de que aún no sabía
quién era Madrean Deian, el por qué los libros no tenían nada escrito o por
qué ella no me permitía el paso a su biblioteca, también estaba lo otro del
por qué esa posada parecía un castillo, todo para mí era totalmente extraño y
había mucho misterio por descubrir.

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¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 5

El poder de las rosas


(Biblioteca Ranhze, año 2057)

Para ser sincero era la primera vez en mi vida que me sucedían cosas
sobrenaturales como las que viví en ese pueblo, pero los fantasmas, los
misterios y la posada no era lo único que pude experimentar, sino también
lo hermoso que tiene la vida y no lo tomamos en cuenta o mejor dicho no
sabemos el verdadero motivo de lo que tenemos. Ya verán por qué se los
digo…

(Lirio de Luna, año 2016)


Salimos de la posada dirigiéndonos al pueblo para comprar algunas
cosas y así tener algunos recuerdos; mientras contemplábamos los diferentes
comercios que se encontraban, pasamos ese camino donde las flores eran
su principal protagonista ya que cuando el viento soplaba su polen al hacer
contacto con la luz del sol brillaba; deseaba pasar por aquella plaza donde
había un árbol gigante en forma de ángel y una estatua de un elefante.
Kerf Sylver: ¿Recuerdas la plaza que vimos la primera vez que pasamos
por este lugar?
May Castell: Sí, la recuerdo, está cerca de aquí.
Ransus Cruz: ¿De qué hablan?
May Castell: Nada sin importancia, solo que la primera vez que pasamos,
vimos una plaza que nos llamó mucho la atención.
Estaba seguro que esa plaza se encontraba cerca, pasaron pocos minutos y
la teníamos justo al frente, intentamos observarla detalladamente; a diferencia
de la primera vez, vi una mujer morena con su cabello en forma de una trenza
larga que sobrepasaba su cadera haciéndola parecer que estuviese desnuda,
intenté detallar más, pero pasamos tan rápido que no pude ver muy bien.
May Castell: Qué extraña plaza ¿cierto? quisiera verla más de cerca.

71
Beiker López

Kerf Sylver: ¿No viste a una mujer parada al frente de la estatua del
elefante?
May Castell: No vi a ninguna mujer.
Kerf Sylver: Qué me dices tú Ransus ¿la viste?
Ransus Cruz: No había nadie en ella.
Nuevamente pensé que eran cosas mías, pero en el fondo sabía que se
trataba de otro misterio, sólo me quedé tranquilo sin comentar nada.
Señor Jhoel: Esa plaza es llamada “la plaza del ángel Nhynfis”.
Kerf Sylver: ¿Podemos ir luego de ir al pueblo señor Jhoel? No habría
ningún problema ¿cierto?
Jhoel Osbel: Cómo podría decir que no.
Me encontraba ansioso de volver a esa plaza, poder verla más de cerca,
lo más probable era que consiguiera una pista de todo lo que últimamente
estaba sucediendo. De camino al pueblo recordaba ese sueño donde el
caballero tomaba mi mano mientras bailamos un vals, la verdad nunca me
había sentido de esa manera aun sabiendo que era solo un sueño, pero al
mismo tiempo lo sentí tan verdadero.
Kerf Sylver: ¿May si te cuento algo me crees?
May Castell: Claro que sí.
Kerf Sylver: ¿Recuerdas cuando te comenté de un sueño en que un
caballero me guió hacia una habitación y bailamos?
May Castell: Lo recuerdo.
Kerf Sylver: A decir verdad, ahora que lo pienso, quisiera revivir ese
sueño, fue diferente lo que me hizo sentir esa persona y el bailar con él no
tiene alguna descripción. Sé que solo fue un sueño.
May Castell: Solo fue un sueño, pero me agrada que lo recuerdes porque
son de esos sueños que te hacen querer volverlos a soñar.
Ella tenía razón, por más que lo pensara y sintiera alguna conexión
sentimental solo fue un sueño, solo bajé la cabeza volteando la mirada hacia
la ventana para poder distraerme de aquellos pensamientos que, aunque no
eran malos me afectaban en el corazón, solo me dije a mí mismo que ya
volvería a sentir lo mismo que en ese sueño. Para mí fue significativo lo que
sentí, aunque por primera vez me pasara, nunca había sentido que tomaran
mi mano de una manera entregada y no simplemente por tomarla, en mi
cabeza solo se encontraba pensamiento lo cual fue diferente en mi vida. La
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¡Aeón! Una vida prohibida

curiosidad de saber quién está detrás de esa máscara, de esos guantes, de


esa capa, de su armadura, mataba mis sentidos de una manera mágica, solo
pensar que le importaba a alguien por un momento llenaba ese vacío que
cargaba en el corazón.
Kerf Sylver: ¿Por qué siento como si me faltara algo? No lo entiendo;
si solo fue un sueño. Ya había olvidado este vacío que para todos es
incomprendido y yo solo lo siento.

(Biblioteca Ranhze. Año 2057)


Muchas noches en mi hogar en ese mundo de fantasías en el cual yo
vivía llamado “mi cuarto”, mis videos juegos, mi computadora y mi cama
eran “mi refugio” en el cual podía ser quien yo quisiera, expresándome a
mi manera podía imaginar y entender las cosas que creía observar, pensar
y creer, sentía que no podía encajar en ningún otro lado puesto que por mi
condición yo no era parte de la sociedad, para muchos era como una especie
de monstruo que los amenazaba, otros me catalogaban como una enfermedad
que se podía transmitir, pero eso no fue factor que me desmotivara, siempre
vi el mundo diferente y fantasioso. Los que me rodeaban solían juzgarme,
había noches en las cuales lloraba por tanta incomprensión de lo externo
hacia mí; hasta llegaron a llamarme loco por esa imaginación tan amplia
que vivía en mí, lo que para el mundo exterior era una locura para mí era lo
más maravilloso que me pudo dar la vida “la imaginación” creer en ella,
pensar que podía curar enfermedades con tocar a las personas, creer en un
mundo donde lo imposible se hiciera posible y creer en esos cuentos que
ya conocemos donde el amor es puro y sincero, sin miedos, sin malicia, sin
reglas, sin angustias, donde un beso arregle todos tus problemas, donde las
manos curen tus molestias, el latido del corazón sea la melodía que te dicte
lo que tus labios conversen; imaginar que al abrir los ojos sabrás que existe
ese amor, me hacía suspirar todos los días, pensar en eso me generó un sueño
tan grande de conocer ese tipo de amor, creer que una persona pensara de la
misma manera, una persona que me comprendiera y quisiera que le contara
cada imaginación que me surgiera disfrutando de ellas con una sonrisa en
su cara. No es fácil; no fue fácil, al contrario, fue tan difícil poder llegar a
ver ese sueño, conocí muchos que se atrevieron a conocerme a profundidad,
pero igual no me comprendían, no llegaron a entenderme. Un día conocí a un
muchacho que para mi sorpresa su mundo era muy parecido al mío y puedo
decir que llegué a sentir por él lo que por ninguno he sentido, hacía lo que
fuese para que estuviera feliz a mi lado, cada detalle era el plasmo de mis
pensares y estoy seguro que lo hacían feliz.
¡Es difícil! nadie sabe lo que esconde el mar en sus profundidades,
podemos ver ese mar azul, con olas calmadas y un sonido de tranquilidad,

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Beiker López

pero por dentro no sabemos cómo está la corriente, ¡así somos las personas!
Podemos observar a otras por fuera sonrientes y maravillosas, pero nadie
sabe el sufrimiento que puedan ocultar en su interior y yo era un vivo ejemplo
de ello, por más que las circunstancias estuvieran en mi contra siempre le
llevaba una sonrisa a otros y los hacía reír aunque por dentro me sintiera
como el tambor que suena por fuera y es vacío por dentro.
Estas palabras que estoy diciendo espero las puedan tomar como reflexión,
les digo a aquellas personas que se sienten identificadas:
“La vida y el amor a veces se juntan en uno solo, en ese momento llena
hasta el último rincón de una casa vieja, algunos esperamos que ese amor
toque a la puerta, pero cuando ni siquiera la puerta es tocada, pensamos que
la vida nos da simplemente incomprensión y soledad. Así el viento resuene
en la puerta deseamos que al abrirla te encontrarás con lo que esperas, pero
cuando te das cuenta de que solo era el viento, volteas y ves la misma casa
vieja y desolada. ¡Lo sé! las ganas de llorar nos arropan, pero ¡tranquilo ser
humano! El amor siempre tiende a tocar la puerta cuantas veces esos ojos
hayan derramado lágrimas y te apuesto ¿la verdad? ¡Vas a ser una persona
muy feliz!...
La sala quedó en un total silencio, solo observaba las caras del público,
unas quedaron nostálgicas y otras con una sonrisa en sus rostros y algunas en
sus ojos expresaban lo identificadas que se sentían. Para mí dar ese mensaje
fue una satisfacción, con un suspiro sonreí y proseguí contando la historia,
mi historia.

(Lirio de Luna, año 2016)


Llegamos al pueblo, me sentía de una manera como si hubiesen apretado
el botón de apagado, me sentía sin ánimos. Vi mi reflejo en la ventana de
la camioneta y mis ojos no eran los mismos, habían perdido ese brillo que
solían tener por aquellos pensares, ese sentir me iba quitando la luz, May se
dio cuenta de mi cambio y no dudó en preguntar:
May Castell: Sé que te sucede algo, no eres el mismo de hace pocos
minutos, cuéntame ¿qué tienes?
Kerf Sylver: Si te lo cuento de igual manera no lo vas a entender, ya he
intentado explicarme en muchas personas, pero no suelen entenderme así
que prefiero no hablar de ello ¿me disculparías?
Seguí viendo por la ventana y comencé a ver a las personas que se
encontraban en el pueblo, me di cuenta que todos tenían esa mirada parecida
a la mía, sin brillo y apagada.

74
¡Aeón! Una vida prohibida

Kerf Sylver: Así me debo ver, con una mirada sin rumbo.
El señor Jhoel estacionó la camioneta, nos bajamos, May estaba
emocionada ya que en toda esa avenida donde nos encontrábamos habían
puestos de todo tipo de comercios, yo solo bajé a observar viendo a todas las
personas que se encontraban allí, era increíble ver que todas tenían la misma
mirada desolada, me sentí identificado con ellos pues pensaba que sentían un
vacío al igual que yo; Ransus comenzó a decirnos a todos lo que iba a hacer.
Ransus Cruz: Yo iré un momento a ver una artesanía que está en esa
tienda, nos encontramos todos aquí ¿dentro de una hora?
May Castell: Sí, me parece excelente idea, yo iré a ver la ropa y los
accesorios de una tienda que vi al pasar.
Señor Jhoel: Bueno chicos, yo compraré la comida de la cena, ya que
almorzaremos aquí.
May Castell: Y tú Kerf ¿qué harás?
Mientras miraba a dónde podía ir a conocer o por lo menos estar sin
que nadie me pudiese molestar, vi una tienda con muchas rosas, pero lo que
realmente captó toda mi atención, la verdadera razón, es que todas las rosas
que se encontraban allí eran totalmente blancas.
Kerf Sylver: Iré a esa floristería.
Caminé despacio con la mente desordenada de tantos pensamientos,
llegué a la floristería que se encontraba al cruzar la calle, comencé a observar
que ninguna rosa o flor de esa floristería tenía colores, las tocaba para ver si
eran de esas flores falsas, pero no lo eran.
Kerf Sylver: ¡Qué extraño! No son falsas, pero ¿cómo una floristería
puede tener puras rosas o flores blancas y no tener variedad de colores?
¿?: ¿Te puedo ayudar en algo?
Se trataba de una señora mayor, cabello blanco, ojos con un color tan
claro como el amarillo, de baja estatura, piel blanca, lentes y vestía con una
bata blanca con diseños de flores.
Kerf Sylver: Disculpe, solo observaba, puedo preguntarle ¿por qué todas
las rosas y flores son blancas?
¿?: ¿Blancas? No son blancas, todas tienen su color.
Kerf Sylver: ¿De color? Las veo todas blancas.
Aquella señora quedó extrañada de que yo no pudiera ver el color de sus
rosas, ni el de las flores, suspiró y cerró los ojos, como todos en la ciudad ella
75
Beiker López

también tenía una mirada opaca a pesar de ese color tan diferente que tenía
en sus ojos, pero al suspirar y cerrar los ojos todo cambió, su mirada cambió
totalmente y llamó a su esposo.
¿?: ¡Viejo ven rápido!
¿?: ¡Sí mi amor!, ¿qué pasó?
Se trataba de un señor, alto moreno, de ojos negros, una calva y cabello
hacia los lados, vestía con una camisa blanca y unos pantalones de color
verde opaco, se veía que ellos dos tenían una gran unión y un amor de esos
que perduran para toda la vida
Carmen Darnell: ¡Hijo disculpa a esta anciana! No me he presentado,
soy Carmen Darnell y él es mi amado esposo Ilarión Darnell, somos los
dueños de esta floristería.
Ilarión Darnell: ¡Es un gusto conocerte!
Kerf Sylver: ¡Mucho gusto! Soy Kerf, no tengo nada que disculparles,
podrían decirme por qué todas las rosas y flores son blancas o eso creo ya
que, usted me dice que sí tienen color pero solo las veo blancas.
Carmen Darnell: Viejo, ¿estás escuchando? No ve el color de las rosas
ni de las flores.
A Ilarión también aquellos ojos opacos se le iluminaron, era como si
esperaban que una persona viera de color blanco sus rosas y yo no podía
entenderlo, ellos se miraban uno al otro como emocionados y solo me
comentaron el por qué veo las rosas y las flores de ese color.
Carmen Darnell: Hace mucho tiempo en este pueblo había un mito, se
llamaba “el poder de las rosas”, se contaba que aquel que no podía ver su
color y el de ninguna flor solo el blanco, tenía la magia o el don muy particular
el cual era que a través de una rosa puedes ver lo que otras personas sienten
o expresar lo que sientes tú mismo, recuerda que el blanco en una rosa o en
una flor simboliza el color de la pureza y la inocencia. Demuestran un amor
limpio.
Kerf Sylver: No lo entiendo.
Ilarión Darnell: Es decir que tú tienes una magia pura y nata, a través de
una rosa puedes transmitir lo que sientes y puedes ver lo que el otro siente
con una rosa o una flor, las personas siempre tienden a comprar flores y rosas
que más le llaman su atención, sea por su color o por su forma, es como en
ese momento se siente y es una forma de expresarlo.
Carmen Darnell: ¿Quieres entenderlo más? Quiero que tomes una rosa.
76
¡Aeón! Una vida prohibida

Kerf Sylver: Hay algo que no me queda claro, si yo las veo blancas y
ustedes sí ven sus colores, entonces cómo saben que tengo ese poder.
Carmen Darnell: ¡Allí entra la magia! A pesar de que nosotros podemos
ver el color, puedes hacer que nosotros también podamos ver todas las rosas
y flores blancas, es decir, puedes transmitirnos cómo ves el mundo a través
de esa rosa que vas a tomar.
No entendía, pero de igual manera fui a tomar una rosa, la arranqué y
comencé a observar la belleza de ella, la señora Carmen y el señor Ilarión se
tomaron de sus manos en todo el medio de la floristería.
Carmen Darnell: Ahora Kerf tienes que concentrarte muy bien y
sosteniendo la rosa con tus dos manos vas a recordar lo que más te ha hecho
feliz, pero tienes que sentir la felicidad al evocar ese recuerdo en todos los
sentidos.
En mi mente pasó un solo recuerdo, fue aquella escena donde con mi mejor
amiga antes de partir hacia este pueblo, miramos el cielo juntos observando
las estrellas de esa noche y me dijo unas palabras que me llenaron de una
felicidad inmensa “gracias por existir y ser mi amigo incondicional, que, así
como el cielo tiene millones de estrellas ¡quiero que así sea nuestra amistad!
Llena de millones de momentos, risas y años”.
Carmen Darnell: Abuelo mira la rosa que tiene en sus manos ¡está
brillando! Su color era rojo y está cambiando de color junto a todas las demás
rosas rojas.
Ilarión Darnell: No solo eso vieja, mira las flores también brillan.
En mi cuerpo sentía una alegría muy grande, para mí fueron unas palabras
que llenaron mis sentidos altamente y aunque sé que mis ojos estaban
cerrados, sentía que mi rostro expresaba total felicidad.
Ilarión Darnell: Cambiaron al color amarillo, qué hermoso toda la
floristería está brillando.
Todas las personas se acercaron para ver qué pasaba y por qué la floristería
brillaba intensamente.
Carmen Darnell: No puedo creer que el mito sea cierto, siento como
una alegría invade cada parte de mi cuerpo, tenía tiempo que no sentía esta
felicidad.
Ilarión Darnell: Yo también siento lo mismo, de tanta felicidad no puedo
contener las lágrimas, recuerdo cuando te pedí matrimonio y para mí fue la
felicidad más grande cuando tu respuesta fue un sí.

77
Beiker López

Carmen Darnell: Es el mismo recuerdo que me vino a la mente, yo


tampoco puedo contener las lágrimas, ese momento para mí fue la felicidad
en plenitud, cuando sentados en aquella plaza sacaste algo de tu bolsillo y era
un estuche, pensé que eran tus lentes y me pediste que lo abriera yo, cuando
lo abrí estaba un anillo y cuando te miré ya estabas inclinado y me dijiste
“quieres casarte conmigo” y de la felicidad solo respondí ¡SÍ! Nunca se me
olvidaría viejo.
De momento se me fue aquel vacío que sentía al llegar a esa floristería,
pero al mismo tiempo sentía cómo muchas luces se encendían a mi alrededor,
con una gran calidez abarqué todo el lugar y ya no se sentía opaco y frío.
Ilarión Darnell: Todas las personas del pueblo se están acercando y
algunas están sonriendo, otras están llorando, con que este es el mito de que
se habla en este pueblo.
Todos estaban gratamente sorprendidos, las enredaderas de las casas
comenzaron a florear y las flores brillaban intensamente, ese brillo hacía que
las personas del pueblo sintieran lo mismo que yo “Felicidad”.
Un pensamiento nuevo invadió mi mente el cual era cuidar a esas
amistades, que eran pocas, pero muy valiosas para mí ¡principalmente May!
me crearon un sentimiento de protección único hacia ellas y querer cuidarlas
siempre para que permanecieran a mi lado, dándome una seguridad de mí
mismo de poder hacerlo, el brillo de aquellas flores y rosas cambió de color
y las personas sentían esa seguridad plena.
Carmen Darnell: Mira la rosa que sostiene Kerf, brilla de color azul y
siento que puedo cuidar todo lo que quiero con seguridad y sin dudar.
Ilarión Darnell: El azul representa lo fiel que pueden ser tus sentimientos
hacia una amistad, la suerte de tenerlas eso te da la seguridad de que no estás
solo, de cuidarlas y protegerlas ¡es lo que siente en estos momentos! Kerf es
fiel a sus sentimientos cuando se refiera a una amistad sintiéndose con suerte
de tenerla, por eso todo brilla de ese color y nos lo transmite.
Era increíble como sentía cada cosa, al mismo tiempo era extraño, estaba
tan concentrado en mis pensares y recuerdos, que no quería abrir mis ojos,
cada luz brillando a mi alrededor me daba la visión de que, aunque no
estuviera viendo podía percibir que las personas sentían lo mismo que yo.
Recordé aquellas manos cálidas que en mi sueño llegaron a tomar las
mías, el piano que tocaba la melodía que hacía que mis sentidos sintieran lo
que nunca había sentido, aunque no podía ver su rostro y estuviera tapado
con una máscara, podía sentir su belleza interna sin contemplar su mirada,
ese sueño en el cual por primera vez bailé un vals con un hombre, ver que mi
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¡Aeón! Una vida prohibida

mundo de fantasía se hacía realidad y ver cada cosa mágica que sucedía allí
y sentir la libertad misma de ser quien era sin temor a ser juzgado.
Kerf Sylver: Mi corazón está latiendo fuertemente por ese sentimiento
que me generó ese momento, amo este sentir, quiero que permanezca
siempre, aunque no lo conozca quiero saber más de él.
Carmen Darnell: ¡Abuelo te amo! Gracias por todos estos años junto a
mí.
Ilarión Darnell: ¡También te amo! Siempre estaré junto a ti pase lo que
pase.
Todas las personas decían en voz alta lo que amaban, las flores comenzaron
a esparcir su polen en todo el lugar haciendo sentir el amor mismo en sus
corazones.
Ilarión Darnell: Todas las rosas están brillando de rojo, las rosas y flores
de color rojo representan el emblema de aquellos que viven las pasiones
más intensas, evocando un sentimiento romántico sincero, Kerf debe estar
recordando un momento donde sintió todo eso.
Todos querían comprar flores de todo tipo y rosas, todo el lugar se tornó
de ser melancólico a ser un lugar de alegrías y sentimientos.
Solo dejé llevarme por mis recuerdos que me hacían sentir algo diferente
en cada uno, al abrir mis ojos veo a todas las personas, comprando, viendo
cada rosa y cada una de las flores, al mirar la rosa que tenía en mis manos ya
no era blanca, sino que era totalmente roja y al mirar cada una de las flores
tenían su color pero más impresionante aun era ver a las personas tan felices
y diferentes a como venía observándolas camino hasta el pueblo; Carmen
e Ilarión se acercaron hasta mí y me abrazaron como si fuera parte de su
familia sentí que me abrazaban ¡como si fuera su nieto!
Carmen Darnell: ¡Gracias Kerf! por hacernos sentir lo que no habíamos
sentido en tanto tiempo ¡mira a las personas! tenían tiempo que no venían
a ver las flores ni las rosas de este establecimiento, tienes un don hermoso.
Solo sentí la calidez de ese abrazo, aunque no comprendía el porqué me
sentía ¡feliz!
Kerf Sylver: Pueden decirme qué sucedió mientras tenía los ojos
cerrados, ya puedo ver los colores de las rosas y flores ¡son hermosas! Tomen
esta rosa es de ustedes.
Ilarión Darnell: No, ¡quédatela! Es tuya después de hacer el mito una
realidad, creo que ni lo material puede pagarte toda esta gratitud que tenemos

79
Beiker López

hacia ti, nunca te sientas mal ¡que esa luz propia que tienes brille por
siempre!
Carmen Darnell: Sucedió que pudiste usar el don “El poder de las rosas”
todo lo que sentiste nosotros también lo sentimos, las personas vinieron al
ver que cada flor brillaba al reaccionar con tus sentimientos y al estar cerca
de ti todas sintieron lo mismo que tú sentías.
Para mí era algo totalmente irreal lo que había pasado, no podía creer
que yo fuese capaz de revivir un mito y convertirlo en realidad, no creía
posible hacer que las personas sintieran algo que yo solo siento al recordar
esas escenas que solo mi mente y corazón guardan como un tesoro
Kerf Sylver: Fue un placer para mí conocerlos, gracias a ustedes por
hacerme sentir de la manera que me siento, tengo que retirarme, debo conocer
más de este pueblo tan extraño pero que tiene cosas tan hermosas como esta
rosa y personas tan agradables como ustedes ¡hasta luego!
Me retiré a ver las cosas maravillosas que pudiera encontrar en el pueblo.
Salí con una sonrisa plasmada en mi cara y sintiéndome muy feliz, seguro y
enamorado, nunca olvidaré a Carmen e a Ilarión.
Carmen e Ilarion Darnell: ¡Dios te cuide Kerf! Quizás esta es la última
vez que nos veremos, sé que eres un muchacho fuerte ¡todo un hombre! y
de un gran corazón noble, donde quiera que vayas te protegeremos, cumple
tus sueños sin perder esa forma de ver el mundo, ¡te llevamos en el corazón!
Gracias por hacernos sentir estos momentos tan gratos. ¡Te amamos querido
nieto!
Al caminar viendo todo lo que se encontraba en el pueblo, estaba totalmente
cambiado, había flores en todas las casas en las enredaderas que las cubrían,
las personas se sentían como más felices, yo solo observaba la rosa que me
dieron esos abuelos, comencé a explorar cada tienda y probar dulces de allí
muy deliciosos, sin darme cuenta se hizo la hora de ir a almorzar y fui hasta
un restaurante que se encontraba en esa calle, al entrar May, Ransus y el
señor Jhoel se encontraban allí, entre risas, comentarios y comida pasamos
un buen rato.
May Castell: Volviste a ser el mismo, me alegra mucho.
Kerf Sylver: Gracias a unos abuelitos que son dueños de la floristería que
me regalaron esta rosa.
Ransus Cruz: Qué bella es.

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¡Aeón! Una vida prohibida

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Todos se encontraban felices, May comentaba que compró muchas cosas
para su madre, padre y hermanos asegurando que estarían muy felices con
esos detalles, Ransus compró algunas cosas de artesanía de ese pueblo y el
señor Jhoel todo lo necesario para hacer una cena digna de reyes y yo pues
una sencilla rosa pero creo que fue el detalle más valioso que me han podido
regalar.
No se trata de ir por la vida pensando que todo es malo, hay muchas cosas
buenas que te pueden cambiar tu ánimo en cuestiones de segundos, la vida es
así siempre te dará lo necesario para hacerte ver que todo lo de ella es bello.
–Señor Kerf, qué pasó luego del restaurante.
(Lirio de Luna, año 2016)
Kerf Sylver: May, cuando lleguemos a la posada recuérdame que antes
de acostarme debo orar por mis abuelos, esos viejitos me hicieron recordar a
mis abuelos que ya fallecieron.
May Castell: Sí claro, yo te hago recordar ¡no te preocupes!
Señor Jhoel: Bueno chicos es hora de regresar a la posada, Lidia nos
debe estar esperando.
Kerf Sylver: Señor Jhoel recuerde que se detendrá en la plaza.
Caminamos hasta la camioneta entre risas y conversaciones, nos
montamos y nos fuimos de regreso a la posada; al pasar por el pueblo me di
cuenta de que la floristería no estaba y comencé a buscarla como loco, pero
había desaparecido.
May Castell: ¿Qé te sucede? Por qué estás tan agitado.
Kerf Sylver: ¡Estoy seguro! de que la floristería de los abuelos estaba allí
en ese lugar y no está.
Ransus Cruz: Lo más probable es que ya vendieron todo y cerraron.
Esas palabras no calmaron la impresión que tenía de saber que la
floristería no estaba pero no podía seguir actuando así, no quería que también
me tomaran como loco, dentro de mí estaba seguro que la floristería se
encontraba en ese lugar y ya no estaba. Tomando el camino hacia la posada,
iba observando la rosa y mientras más la miraba mejor me hacía sentir.
Señor Jhoel: Hemos llegado a la plaza.
Me bajé a explorar la plaza, había un sendero lleno de flores y piedras,

81
Beiker López

caminé hasta llegar a la plaza en sí, al mirar hacia abajo vi una carta que
decía “para nuestro querido nieto Kerf”.
Kerf Sylver: ¿Una carta para mí? ¿En este lugar?
La abrí y tenía un texto muy largo el cual decía lo siguiente:
“Querido nieto estamos seguros de que has crecido y madurado, de que
eres un hombre hecho y derecho, que puedes con todo lo que te propongas,
que puedes con todos los obstáculos que se te presenten ¡eres único! Nunca
cambies esa manera de pensar tan hermosa que tienes que hace diferenciarte
de los demás, sigue imaginando el mundo como te lo imaginas y sigue
soñando como lo sabes hacer, no dejes que se apague la luz de tu esperanza,
sé fiel a tus sentimientos como nos hiciste sentir, sé seguro de lo que hagas
como nos hiciste sentir y ama sobre todas las cosas lo que deseas y quieres
como nos hiciste sentir, no quisimos mostrarnos tal cual éramos porque no
ibas a comprender el motivo, pero ahora lo sabes y queremos que sepas que
¡te amamos! En donde te encuentres te vamos a cuidar, te protegeremos de
todo lo que te quiera hacer daño, lastimosamente no podemos compartir
contigo todos estos años pero siempre estamos a tu lado, aunque no nos
veas, aunque no nos sientas y aunque no puedas tocarnos, ese abrazo que te
dimos hace unas horas queríamos dártelo hace mucho tiempo, esperábamos
el momento exacto para poder hacerlo ¡sé feliz Kerf! Es lo que más deseamos
desde el cielo donde nos encontramos viendo cada paso que das; queremos
decirte también que nos sentimos orgullosos de ti y que eres la persona que
más admiramos por luchar solo contra el mundo, discúlpanos por dejarte
una tarea tan grande de luchar pero estamos seguros que vencerás todas las
guerras que se te presenten, estás hecho para ser un rey, para triunfar en
la vida, no temas al mundo que te rodea sin importar que te discriminen,
sin importar qué piensen de ti ¡sal adelante! que nosotros te apoyaremos
desde aquí, sé quien eres libremente sin dudar, sea cual sea tu orientación
sexual no te hace menos ni más que nadie en la tierra, cuida a tu familia que,
aunque no te comprendan, no te entiendan y no sepan lo que por dentro de
ti estás sintiendo ¡ellos te aman! Cuida de tus amistades por muy diferentes
que sean, por mucho que te contradigan, ¡ellos te aman! Llegarás muy lejos
nuestro amado nieto y el día que logres todos tus sueños nos verás junto
a ti celebrándolo; no viste la floristería en el pueblo porque nunca estuvo
allí, quisimos enseñarte que a veces no es bueno estar triste ni juzgarte a ti
mismo es por eso que decidimos verte nuevamente con otra identidad para
enseñarte esa fortaleza, ese don y esa virtud que tienes y que no conoces,
aprovechamos el momento para regalarte el abrazo de estos dos viejos que
te aman como a ningún otro nieto y regalarte una rosa para que siempre
recuerdes que el verdadero motivo de esa rosa que tienes en tus manos es

82
¡Aeón! Una vida prohibida

para que seas seguro, feliz y amado por todos ¡sé feliz siempre! Att: tus
abuelos ¡Carmen e Ilarión!”.
Las lágrimas no paraban de recorrer mis mejillas al leer la carta, solo
miré al cielo con los ojos empapados y solté aquel llanto que solo el corazón
conoce. El llanto era incontrolable, todos salieron corriendo a ver qué había
pasado, me encontraron arrodillado en el suelo llorando sin parar; May,
Ransus y el señor Jhoel al verme de esa manera se les hizo muy difícil
contener las lágrimas en sus ojos, pero se hacían los fuertes solo para no caer
ante mi tristeza; llorando sólo comenté:
Kerf Sylver: ¡PERDÓNENME POR FAVOR! JURO QUE NO DEJARÉ
DE SER FELIZ, LES JURO QUE SERÉ UN HOMBRE DE BIEN Y QUE
NUNCA VOY A NEGAR QUIÉN SOY, NO SENTIRÉ VERGÜENZA
ALGUNA, ¡SE LOS PROMETO! LOS AMO, GRACIAS POR DARME ESE
ABRAZO QUE TANTO NECESITABA, GRACIAS POR ENSEÑARME Y
CUIDARME DESDE EL CIELO, LOS HARÉ SENTIR ORGULLOSOS,
CUIDARÉ DE MI FAMILIA ¡SE LOS PROMETO!

(En la Biblioteca Ranhze, año 2057)


Era tan difícil dejar de llorar, ni el corazón más duro podría aguantar esa
escena, a veces las cosas nos pasan por algo y cuando aquellos que ya no
están entre nosotros nos cuidan de alguna manera ¡te lo hacen saber! Para mí
fue fuerte saber que mis abuelos ya fallecidos me abrazaron sin yo saberlo
regalándome una rosa, creo que es algo inexplicable, no espero que todos
los que se encuentran aquí me crean, pero por lo menos quiero que sí crean
en algo “la vida te enseña a caminar en direcciones que nunca entiendes,
la vida te muestra de maneras diferentes lo que es la felicidad y a veces
la vida te ayuda no como lo esperas pero eso no quiere decir que la vida
te da siempre algo malo; queridos amigos ¡al contrario! Somos nosotros
que erramos y no la entendemos y en algunos casos optamos por llevar la
contraria, tomen la vida con mayor atención y verán que ella siempre les
regala algo bonito que nosotros no lo vemos”.
Un aplauso sonó y luego muchos vinieron detrás de él.
Gracias de verdad; para continuar la historia les pediré que al salir de este
auditorio miren al cielo y den gracias por lo que tenemos hoy en día…

(Lirio de Luna, año 2016)


Luego de un rato en llanto, me levanté, sequé un poco mis lágrimas. Al ver
a los otros que habían llorado solo me disculpé, les pregunté que si podíamos
irnos, pero que quería hacer algo antes de partir de regreso a la posada.
83
Beiker López

Kerf Sylver: Señor Jhoel ¿podemos venir otro día para la plaza? No creo
que hoy sea adecuado para explorar.
Señor Jhoel: Con mucho gusto Kerf, te traeré cuando tú me lo pidas.
Kerf Sylver: Antes de irnos quiero hacer algo; ¿podrían dejarme solo un
momento por favor?
May, Ransus, Jhoel: ¡SÍ!
Esperé que se alejaran un poco y caminé hasta una piedra algo grande que
se encontraba en el sendero, me agaché y comencé a escarbar, miré la rosa
que me dieron mis abuelos y mirando el cielo dije:
Kerf Sylver: Abuelos gracias por cuidarme, sé que quieren que lleve esta
rosa conmigo pero sé que en unos días se marchitará es por eso que la voy
a sembrar aquí para que retoñe y crezcan más de ellas, así cada vez que una
rosa florezca, crecerá la felicidad, la seguridad y el amor que ustedes me
hicieron ver y así cuando cada persona llegue a este lugar y vea las rosas de
este lugar tendrá un motivo al igual que el mío y sentirá lo que sentí estando
con ustedes en esa floristería.
Terminé de sembrarla dándole un beso a sus pétalos y comencé a orar
cerrando los ojos, al terminar regresé a la camioneta montándome, miré a
todos con una sonrisa aunque mis ojos estaban hinchados de tanto llorar.
Kerf Sylver: No se preocupen por mí ya estoy bien. Gracias por todo.
Solo mirando a aquella rosa roja que resaltaba entre todas las flores que
se encontraban en el lugar, nos fuimos, May me abrazó dándome un beso
en la mejilla y Ransus toco mi rodilla como diciéndome “estoy para lo que
necesites”, el señor Jhoel me miró por el retrovisor con una sonrisa y en
mis manos tenía la carta que como por arte de magia llegó hasta mí, suspiré
muy profundo y volteé una vez más a la plaza, para mi sorpresa mis abuelos
se encontraban en todo el medio de la carretera abrazados, mi abuela me
lanzaba besos mientras que mi abuelo con su mano se despedía, las ganas
de llorar nuevamente volvieron, solo quedó decirles un “hasta pronto” en
silencio y en el corazón un…
Kerf Sylver: Gracias…
Ellos se sonrieron, fueron desapareciendo poco a poco, mientras que yo
en el camino solo lloraba mientras May me abrazaba intentando calmarme,
en mi mente recordé aquellos momentos los cuales compartí con ellos
estando vivos: risas, cuentos, comidas, días y noches los cuales para mí
fueron los mejores, disfrutando siempre su presencia, llevándolos siempre
en mi corazón como el tatuaje más atesorado por mí, su partida fue fuerte

84
¡Aeón! Una vida prohibida

pero sé que ellos estarán siempre conmigo desde el cielo en donde quiera que
me encuentre, los amé demasiado y daría lo que fuese por volverlos a tener
conmigo, abrazarlos a cada minuto como no lo hice cuando pude, decirles
lo mucho que los amo y que cuánta falta me hacen. Cumpliré lo que desean
para mí así como lo juré ante esa rosa, convertiré todo ese mundo de fantasía
en realidad y cada sueño que tenga serán mis motivos para vivir, el día que
sea el rey de ese mundo creado por mí “miraré al cielo” diciéndole a mis
abuelos “lo logré”, cumplí su deseo de verme en alto, siéntanse orgullosos
de mí, gracias por todo lo que me enseñaron y gracias por darme una familia
como la que tengo hoy en día, fueron y serán para mí un motor a seguir, para
luchar por las metas de mi vida y verlas cumplidas…

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Beiker López

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¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 6

La verdadera realidad
(Biblioteca Ranhze, año 2057)

Para mí fue fuerte ese momento puesto que jamás imaginé ver a mis
abuelos nuevamente, tantos sentimientos encontrados dentro de mí, recuerdos
y momentos únicos que hicieron que derramara lágrimas. Llegamos a la
posada, me sentía feliz pero al mismo tiempo con una nostalgia muy grande,
quería simplemente darme una ducha para relajarme…

(Lirio de Luna, año 2016)


May Castell: ¿Estás bien?
Kerf Sylver: Sí, solo quiero ducharme.
Ransus Cruz: No te sientas afligido, siéntete feliz de saber que tus
abuelos te acompañan siempre donde quiera que estés.
Señor Jhoel: Ransus tiene mucha razón en lo que dice.
Con una sonrisa los miré pero estaba ansioso por llegar, en mi cabeza
también surgían algunas dudas respecto a lo que había sucedido con mis
abuelos y entre ellas era ¿por qué pude verlos en este pueblo? y no en otro
lugar
Señor Jhoel: ¡Bueno chicos! hemos llegado nuevamente a la posada.
Observé nuevamente aquella ventana donde se encontraba una mujer que
antes de partir al pueblo nos miraba fijamente, no había nadie pero tenía la
leve sensación de que nos observaban, no hice caso a lo que presentía y sólo
entré a la posada por una ducha y descansar.
Kerf Sylver: De nuevo siento que nos observan, al parecer soy el único
que lo siente así, es mejor no pensar en eso.
Entré a la posada con el único pensamiento de llegar a bañarme; al dar
varios pasos comencé a sentir más fuerte una presencia y mientras más

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Beiker López

caminaba, mi cuerpo más reaccionaba erizándose mi piel y sintiendo un frío


que no entendía de dónde provenía.
Kerf Sylver: ¡No puede ser! ¿De nuevo esta sensación? es como la
primera vez.
Sin darme cuenta estaba al frente de una puerta, estaba seguro que algo
me guió hasta ella, era una puerta de algún salón de fiesta, me quedé en
silencio por varios segundos y pensando si tenía que entrar, me daba miedo
de no saber qué podría encontrarme detrás de ella.
Kerf Sylver: Debo entrar, de igual manera me harán hacerlo.
Empujé la puerta, al entrar se encontraba un jardín, un camino de piedra
que finalizaba con una cabaña. Al caminar observé que a mi izquierda se
encontraba la misma plaza de Lirio de Luna, siendo una sorpresa para mí.
Kerf Sylver: ¿Es la plaza del ángel Nhynfis? Pero qué hace en este lugar.
Me encontré tan impresionado de ver la plaza del ángel Nhynfis en una
habitación, a diferencia de la que se encuentra en Lirio de Luna esta era
mucho más grande pero solo decidí seguir adelante hasta la cabaña.
Kerf Sylver: Volveré luego, tengo que averiguar quién vive en esa cabaña
o qué fantasma es el que me trajo a este lugar.
Seguí caminando, al llegar y ver la cabaña más de cerca era pequeña,
hecha de madera pero fue tanta la impresión de ver la fantástica manera en
que estaba pintada, parecía un mundo de colores y paisajes tatuado en cada
una de las maderas que hacían la estructura de ese lugar; sentía como mi
corazón latía, cómo admiraba cada arte magnífico que en ella se encontraba
plasmada, describir esa sensación en una palabra “increíble”. Me preguntaba
qué artista tan complejo podría hacer semejante obra, la curiosidad comenzó
a abarcar cada centímetro dentro de mí, de querer explorar la cabaña para
seguir observando el arte que se encontraba en ella, aún asi visualizarla desde
afuera no era suficiente para mis ojos. Sin permiso entré a la cabaña con
miedo por no saber si era lo correcto, caminando me di cuenta sin duda que
se trataba de una persona que amaba el arte y la pintura con pasión y amor.
Kerf Sylver: Quien pintó este lugar debe ser alguien apasionado por
el arte, es de admirar, seguiré explorando más este lugar ya que no siento
ninguna presencia de fantasma y por lo visto tampoco hay alguien aquí.
Con una gran determinación debió pintar cada cosa que ningún ser
humano pudiera imaginarse; seguí caminando hasta llegar a unas escaleras,
estaba todo oscuro, vi una vela en una mesa y un encendedor al lado, prendí
la vela y me dirigí hacia las escaleras que daban hacia un sótano, al comenzar

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¡Aeón! Una vida prohibida

a bajar y ver hacia arriba quedé totalmente impactado de cómo estaba pintado
¡el cielo mismo! se me erizó el cuerpo entero al ver tal perfección de arte
plasmada, su forma era tan increíble, piedras brillantes, vidrios y cerámicas
picadas entre varios colores que conformaban un paraíso, sentí la admiración
más grande que he podido sentir en la vida ¡toda una obra de arte!
Kerf Sylver: ¡QUÉ INCREÍBLE! Jamás pensé que existiera algo así.
Al llegar al final estaba una puerta pintada de oro con plata y un verde
esmeralda, en toda ella unas enredaderas que conformaban un árbol, era tan
elocuente pero tan fantástico ver cada especie de creatividad, que quería
seguir viendo cada parte de la cabaña. En el centro de las hojas del árbol
había un botón de cristal, mi instinto al verlo tan brillante y llamativo fue
tocarlo; al tocarlo de repente cambió de color y comenzó a brillar, se tornó
de color rojo haciendo que las ramas comenzaran a moverse por sí solas, se
hicieron a un lado como dejando poder abrir la puerta, solo la empujé sin
saber si era lo correcto puesto que la curiosidad de saber qué espectaculares
artes podían existir detrás de esa puerta era demasiada, entré…
Kerf Sylver: ¿QUÉ ES ESTO? de nuevo están jugando conmigo.
Al pasar fue como entrar en la verdadera habitación de aquella puerta que
parecía de un salón, estaba todo apagado, cortinas rotas, ventanas sucias,
una chimenea abandonada, todo estaba tapado con tela blanca pero por la
suciedad se veía de color gris. Caminé hasta el medio con un poco de intriga
y me dirigí hasta la chimenea, arriba de ella se encontraba un cuadro de
una mujer, al mirar hacia la derecha para seguir observando el lugar, había
un sillón tapado pero encima de él habían siete peluches que parecían
abandonados, uno de un oso, dos jirafas, un elefante, una vaca, un gorila y el
séptimo era de un niño como burlón de ojos grandes de sonrisa burlista y con
mirada extraña llena de odio.
Kerf Sylver: Ese peluche me es algo extraño y no entiendo por qué todo
este lugar está tapado. ¿Quién será esa mujer de ese retrato?
Sentí cómo una presencia se posó detrás de mí; automáticamente cerré los
ojos para poder concentrarme y ver quién era.
Kerf Sylver: ¿Quién eres?
¿?: ¿Quién te dejó entrar en mi habitación? ¡VETE!
Una enorme molestia abarcaba toda la habitación, sentía cómo ese
fantasma desprendía un aura de rabia que almacenaba dentro de sí.
Kerf Sylver: Entré por equivocación, no quiero molestar.
¿?: ¡NO LO HARÁS!
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Beiker López

Una enorme y fuerte ráfaga de viento me hizo caer en uno de los sillones
que se encontraban en la habitación, por suerte no recibí un golpe tan fuerte
pero sí me afectó un poco el estómago, me encontraba tirado en el suelo y le
preguntaba a ese fantasma por qué me hacía eso sin yo haberle hecho nada
que pudiera hacerlo molestar; náuseas emergieron haciendo que vomitara
sangre, no entendía por qué aquel fantasma estaba tan enojado y el por qué
me atacó de esa manera.
¿?: ¡VETE! ¿Quieres que te mande a volar de nuevo? pero esta vez será
contra el suelo.
Escuché muy leve una risa de burla pero solo pensé que era el mismo
fantasma que lo hacía, mientras me encontraba en el suelo intentando
levantarme, algo hizo que me paralizó.
¿?: ¡FUERA DE AQUÍ!
A pesar de que no podía moverme, ese fantasma no razonaba que no
podía irme puesto que mi cuerpo no reaccionaba, me faltaba aire ya que la
ráfaga de viento me impactó con mucha fuerza haciendo que me afectara
en el estómago y ahora que me paralizo estaba seguro que luego venía otro
golpe más.
Kerf Sylver: ¡Por favor! déjame ir, yo me iré, pero déjame moverme.
¿?: ¡JA! CREES QUE TE DEJARÉ IR TAN FÁCIL LUEGO DE
ENTRAR SIN MI PERMISO A MI HABITACIÓN, NO LO CREO.
Nuevamente esa risa burlona resonó leve. Una fuerza estaba presionando
mi cuerpo era igual a la que sentí cuando recibí el golpe que me hizo volar,
era como si quisiera destrozarme los huesos, sentía poco a poco la presión
sintiendo el dolor.
¿?: ¡MAGNUS DÉJALO EN PAZ!
Escuché la voz de una mujer diferente a la de Madrean y vi cómo algo
cayó muy fuertemente entre unas cajas que se encontraban en el lugar, pude
mover un poco mi cuerpo al menos para poder intentar observar en dónde se
encontraban los fantasmas, aun cerrando los ojos solo sentía dos presencias,
pero había una tercera que no podía ubicar si estaba dentro de la habitación
o fuera de ella.
Kerf Sylver: No puedo ver nada, no puedo moverme, ese espectro me dio
un golpe muy fuerte.
¿?: ¡VETE DE AQUÍ KERF! Es muy peligroso estar aquí, no conoces a
Magnus Louis, de los nueve fantasmas él es uno, al igual que yo y Madrean,

90
¡Aeón! Una vida prohibida

pero repentinamente ha actuado de forma muy extraña ¡TIENES QUE IRTE


YA!
Magnus Louis: ¡NO LO DEJARÉ EMPERATRIZ LAWER!
Kerf Sylver: ¡EMPERATRIZ LAWER! por favor ayúdame, no puedo
moverme.
Una gran energía emanaba en todo el lugar, intentaba ver, pero se me
hacía difícil concentrarme entre el dolor e intentar moverme para lograr
escapar, no sabía quién era Emperatriz Lawer, si era buena o mala, pero tenía
que confiar en ella, no tenía otra alternativa.
Emperatriz Lawer: Te he estado observando desde lejos, eres muy terco,
pero debo admitirlo eres tú quien nos podrá liberar de esta estúpida posada.
Magnus Louis: Apártate de mi camino Emperatriz.
El piso comenzó a temblar y todos los objetos, sillones, sillas, cuadros
y las lámparas, una fuerte brisa que se semejaba a un huracán hacía que las
cortinas y todo lo que se encontraba en la habitación se movieran como si
fueran de papel.
Emperatriz Lawer: ¡MALDICIÓN, MAGNUS NO LO HAGAS!
Magnus Louis: ¡NO INTERFIERAS EN MIS ASUNTOS EMPERATRIZ!
No podía entender nada de lo que sucedía, solo podía escuchar las voces
de esos fantasmas e intentar moverme para lograr escapar de ese entorno,
fuertes ráfagas de aire y el piso temblando no ayudaba mucho y me hacía
sentir aun peor.
Magnus Louis: ¡SOY MAGNUS LOUIS, UNO DE LOS FANTASMAS
ELEGIDOS PARA LLEVAR A CABO LA MISIÓN DE KHERBION!
Emperatriz Lawer: ¡CÁLLATE! Será mejor que te retractes Magnus o
me veré obligada a detenerte.
Escuchar decir a Magnus sobre Kherbion me hizo recordar lo que
Madrean Deian me contó, que estaba bendecido por él, le grité a Magnus
que me dejara en paz no quería seguir en esa situación.
Magnus Louis: Claro que te dejaré en paz ¡matándote!
Sentí cómo mi cuerpo no dejaba de temblar, algo dentro de mí se expandía
y no podía retenerlo, entre el viento y el piso tembloroso me estaba mareando
totalmente.
Emperatriz Lawer: ¡No te lo permito Magnus! Me obligas a detenerte de
la peor forma… ¡SOY PETRA LAW, UNA DE LOS NUEVE FANTASMAS,
SOY LA DUEÑA DE LAS LEYES! Que no se te olvide nunca Magnus.

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Beiker López

Comenzó a recitar unas palabras en un idioma extraño pero del cual yo


podía entender todo, mientras ella recitaba las palabras en ese idioma yo lo
repetía en mi mente en castellano.
Emperatriz Lawer: “Ley divina creada por el dios, ley del aire que en
este lugar te encuentras, te obligo a venir a mí sin disputa, ¡YO EMPERATRIZ
LAWER! controlo las leyes del más allá y con mis manos de justicia sentencio
a quienes no respetan la paz. –DONCELLA DEL VIENTO–”.
Mi cuerpo dejó de sentir la sensación como si fuese a explotar algo dentro
de mí, el viento que se encontraba en todo lugar se posó en el medio de toda
la habitación creando un tornado junto con el polvo que se encontraba en
toda la habitación, el viento cobró vida propia transformándose en una mujer.
Magnus Louis: Nunca me ha sorprendido tu magia, crees que controlando
el viento que he formado vas a hacer que no mate a Kerf, ESTÁS MUY
EQUIVOCADA.
Al igual que Emperatriz también recitó en un idioma extraño un hechizo
el cual entendía muy bien lo que decía.
Magnus Louis: “Por el don de la creación que se me ha otorgado donde
en mis manos llevo el pincel para hacer y deshacer, pintaré lo que quiera y
a mi antojo lo reviviré, lo usaré como el arma de lucha para saciar la sed, el
rojo será la sangre y el negro el perecer”. –DEMON–.
Una gigantesca rabia recorría mis pensamientos y mi cuerpo, pasar por
tantas cosas extrañas, no entender absolutamente nada, quería desaparecer
todo el lugar para que me dejasen en paz todos esos fantasmas, estrujaba
mis dientes fuertemente de la inmensa rabia que contenía ya que no podía
moverme mucho por los golpes que llevé, comencé a golpearme contra el
suelo con mi cabeza por la impotencia.
Kerf Sylver: ¿POR QUÉ? ¡DÉJENME EN PAZ!
Sin darme cuenta al levantar mi cabeza para mirar con la furia en mi
interior, me llevé un impacto al ver a dos personas, pero no simplemente eso
era mi sorpresa sino que ya podía ver a esos fantasmas y delante de ellos una
clase de monstruos.
Kerf Sylver: ¿QUÉ DEMONIOS SON USTEDES?
Emperatriz Lawer, era una mujer de cabello negro corto hasta sus
hombros, de piel oscura, llevaba puesta una chaqueta amarilla de cuero al
igual que sus guantes, pantalones de color negro, botas de cuero y el espectro
que se encontraba delante, se trataba de una mujer hecha de polvo, pero al
poder observar la realidad su forma era totalmente diferente a la que se había

92
¡Aeón! Una vida prohibida

formado antes de poder visualizar a los dos fantasmas, parecía tener garras
y un cabello largo.
Magnus Louis: ¿Ya nos puedes ver? Mejor así ves quién te va a matar.
Emperatriz Lawer: Primero tendrás que pasar sobre mí.
Magnus Louis, se trataba de un chico alto piel blanca, de cabello liso hacia
atrás, barbudo, vestía con una camisa blanca manga larga, unos pantalones
negros y zapatos de vestir, en su mano izquierda llevaba un anillo y en su
mano derecha una especie de pincel de color dorado con plata, delante de
él estaba un demonio de color rojo con negro, cachos y unas garras muy
definidas, alas de huesos haciéndose parecer a una especie de dragón de dos
patas, Magnus con el pincel que sostenía apuntó a Emperatriz mandando
al demonio a atacar diciendo unas palabras en el idioma que anteriormente
usaron para invocar.
Magnus Louis: “Usa el color rojo para destruir y el negro para oscurecer”.
Un grito desgarrador salió del demonio saltando hacia Emperatriz,
la habitación era muy amplia y por el viento que había generado Magnus
dispersó todo lo que se encontraba molestando, haciendo que la habitación
fuera un campo de batalla, Emperatriz solo sonrió y diciendo unas palabras
con su mano derecha señalo al demonio que corriendo se acercaba a ella.
Emperatriz Lawer: “Doncella que escuchas mi voz, usa tu viento y
detén a todo el mal que yo te otorgo la ley de la gravedad”.
Magnus solo se reía a carcajadas y aplaudía.
Magnus Louis: Buenísimo Emperatriz, tú sí sabes cómo detener a un
demonio.
Moviendo su pincel pintó rápidamente en cada costado como unos
círculos grises y desvaneció a Demon, de los círculos salieron cadenas de
hierro que atraparon a Emperatriz en cuestión de segundos lanzándola al
suelo.
Emperatriz Lawer: ¡Auria! Cúbreme.
Auria era el nombre de la mujer invocada por Emperatriz, comenzó a dar
vuelta creando un remolino que nos obligó a Magnus y a mí a taparnos los
ojos por las fuertes ráfagas de viento y polvo que generaba.
Magnus Louis: ¿Crees que el viento te ayudará?
Todo en el lugar volvió a desordenarse y algunas cosas comenzaron a volar
en toda la habitación por el viento tan fuerte, los peluches que se encontraban

93
Beiker López

en el sillón volaban por el aire, al frente de mí pasó aquel peluche de niño


burlón pero esta vez era diferente puesto que sus ojos brillaban de color rojo
con una sonrisa más pronunciada y de él salió esa risa burlona, comprendí
que provenía de él, el muñeco se movió agarrándose de un sillón y volteando
la cabeza me miró diciéndome diabólicamente con una voz fina:
Muñeco burlón: Vas a morir.
Al parecer él ocasionaba que Magnus actuara de esa manera, según lo que
Emperatriz había dicho anteriormente él no actuaba así, comencé a gritarle
a Emperatriz.
Kerf Sylver: Es el muñeco que hace que Magnus esté así…
A ese muñeco le brillaron los ojos haciendo un destello y volví a sentir
dentro de mí algo como si quisiera explotar.
Muñeco burlón: Tienes que morir.
Emperatriz Lawer: ¡Con que es ese muñeco el causante de todo esto!
La Doncella de Emperatriz tomó forma de serpiente atacando a ese
peluche, no quería dejar de ver lo que sucedía, pero el dolor hacía que cerrara
mis ojos, la serpiente mordió al burlón cortándolo en dos, de adentro de
él salió una sombra negra parecida a un murciélago y antes de irse por la
ventana solo dijo algunas palabras.
Sombra Negra: Hoy fue tu día de suerte, pero en el otro mundo nos
volveremos a encontrar y juro ante el elegido de Layfher que te mataré…
Huyendo por la ventana todo se calmó, Magnus cayó al piso
instantáneamente y su pincel cayó a algunos centímetros de él, Emperatriz
salió corriendo a auxiliarlo mientras yo me levantaba, quería hacer algunas
preguntas porque no entendía nada de lo que había sucedido.
Emperatriz Lawer: Despierta Magnus…
Emperatriz comenzó a desesperarse ya que, Magnus no despertaba, yo
me levanté caminando hacia ellos aún con un poco de dolor en mi estómago,
antes de llegar a ellos vi el pincel de oro y plata.
Kerf Sylver: ¡El pincel de Magnus! es muy bonito, pero es muy peligroso,
si crea demonios como esos no quiero imaginarme qué más puede hacer.
Lo recogí para llevárselo a Emperatriz, pero al agarrarlo me transporté a
otro lugar, se trataba de la cabaña donde yo antes de entrar a la habitación
me encontraba, al ver a todos lados preguntándome por qué estaba de nuevo
allí, me fijé que en la plaza había una señora pintando un cuadro, era una
señora de contextura ancha, cabello negro, con un vestidito que le llegaba

94
¡Aeón! Una vida prohibida

más abajo de sus rodillas y con lo que pintaba era con el mismo pincel que
en mis manos tenía. Un muchacho se acercó a ella…
Magnus Louis: ¡Hola Elixa Louis! ¿Qué estás pintando?
Se trataba de Magnus que se encontraba detrás de mí, pero estaba vestido
diferente, una franelilla blanca con manchas de jirafas y unas bermudas rojas,
intenté hablarle diciéndole que cómo estaba, pero me di cuenta que era una
ilusión cuando traspasó mi cuerpo.
Kerf Sylver: ¿Una ilusión?
Elixa Louis: ¡Dime mamá! ¿Qué pintaré hoy? No lo sé, tengo en mi
cabeza una creación para ti hijo.
Me acerqué para ver lo que ella iba a pintar, el oro del pincel brillaba
y más cuando la madre de Magnus comenzó a deslizar el pincel sobre un
cuadro blanco, se fue creando un arte muy hermoso.
Elixa Louis: ¿Qué te parece? Si no te gusta lo puedo borrar.
El dibujo era de ellos dos abrazados debajo de un árbol, muy felices, hasta
a mí me gustó tanto que sonreí sintiendo una nostalgia muy grande en mí
junto a una felicidad, Magnus solo la abrazó y dulcemente le dijo:
Magnus Louis: ¡ME ENCANTA! Por eso eres mi gorda, tú y yo siempre
estaremos juntos mamá ¡lo prometo!, Aprenderé a pintar como tú.
Su madre lo abrazó y afirmándole:
Elixa Louis: ¡Siempre estaremos juntos…!
Ver la cara de ella desprendía felicidad, pero al mismo tiempo en sus ojos
sentía que había una angustia que la perturbaba, al separarse del abrazo ella
le dijo que tenían que firmar su creación y darle un nombre.
Elixa Louis: Vamos a firmar este cuadro y le pondremos un nombre ¿se
te ocurre alguno?
Magnus Louis: ¡No gorda ninguno y a ti!
Ella solo sonrió y agarrándole sus mejillas como caricias, le dijo que sí se
le ocurría un nombre
Elixa Louis: Se llamará “nunca dejes de ser feliz”. ¿Te gusta ese nombre?
Magnus Louis: Así se llamará.
Ambos tomaron el pincel firmando aquel cuadro, me acerqué para verlo
de cerca y pude leer su firma la cual era “Elixa y Magnus por siempre”
ambos sonrieron y se volvieron a abrazar.

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Beiker López

Magnus Louis: Iré a hacer el almuerzo, no tardes mucho.


Elixa Louis: Sí hijo, ve tranquilo.
Me quedé allí viendo qué hacer, cuando Magnus entró a la cabaña a Elixa
le salieron lágrimas, no sabía qué hacer, miré alrededor y vi una rosa, fui
hasta ella arrancándola pero la traspasaba, al voltear a ver a Elixa llorando
quería hacerla sonreír como diera lugar, mi corazón latió fuertemente e
intenté agarrarla de nuevo, esta vez pude tomarla y se la llevé, ella estaba
impresionada de ver cómo una rosa llegaba a ella flotando ya que no me podía
ver, quería comunicarme con ella e intenté hablarle pero no me escuchaba,
recordé que en mi mano llevaba el mismo pincel que ella, tomé una página
de su cuadro pasando la de su creación, en una página en blanco utilicé el
pincel dibujando letras las cuales decían:
Kerf Sylver: “No llores más, quiero que sonrías”.
Tomó la rosa y secó sus lágrimas, imagino que era una especie de hada y
comenzó a desahogarse.
Elixa Louis: No sé qué puedas ser, pero quiero darte las gracias por
hacerme sentir mejor, la verdad es difícil con esto que llevo por dentro y no
sé qué hacer, muy pronto partiré al cielo y no sé cómo decirle a Magnus que
pronto me iré, es tan difícil para mí esta situación.
Le volví a escribir con el pincel que me contara qué estaba sucediendo
puesto que no entendía aún el porqué de sus lágrimas. Otras lágrimas salieron
de sus ojos diciéndome.
Elixa Louis: Lamentablemente estoy sufriendo de una enfermedad que
me va a consumir, esta enfermedad apareció gracias a que sobrepasé el
poder del pincel, este pincel es de mi familia, ha pasado de generaciones en
generaciones, cuando me fue otorgado tenía que cumplir ciertas normas y
una de ellas era no darle el pincel a nadie que no tuviera mi sangre, cuando
decidí casarme el amor era tanto que le di el pincel a mi querido esposo para
que dibujara algo para mí.
Le seguí respondiendo por medio de la hoja en blanco.
Kerf Sylver: “¿Pero fue malo dárselo a él si fue por amor?”
Elixa Louis: La verdad no, pero él no lo usó con el mismo amor que yo le
tenía y eso rompió la regla, automáticamente el pincel dibujó una sentencia
la cual era que me tenía que separar de él por ese error fatal que cometí, me
separé de mi esposo y el pincel no me condenó, pero era demasiado tarde,
ya cargaba conmigo esta enfermedad y le eché la culpa al pincel, pero al
ir al médico me dijeron que era hereditario, desde entonces he pintado los

96
¡Aeón! Una vida prohibida

cuadros más hermosos para Magnus, desde que nació fue la luz de mis ojos
pero sabía que tarde o temprano esto iba a pasar y ya me queda poco tiempo.
No supe qué responder a esa situación y no seguí respondiendo, Elixa
solo secó sus lágrimas al escuchar que Magnus la llamaba y solo me dio las
gracias por la rosa y se la llevó junto con ella, yo la seguí, al entrar a la casa
me conseguí con otra escena, se trataba del cuarto de Elixa acostada en su
cama y Magnus al lado de ella arrodillado llorando suplicando que no se
fuera ir dejándolo solo en la vida.
Elixa Louis: Mi querido hijo, no te sientas mal, no llores más, no he roto
la promesa, siempre estaré contigo así no me veas a tu lado. Mi amor, ¡dame
tu mano! Este pincel siempre ha sido heredado en generaciones, esta vez te
toca a ti llevarlo, prométeme que siempre vas a ser feliz mi niño y pintarás
las cosas más hermosas del mundo con este pincel, harás que las personas al
ver tus creaciones se llenen de felicidad, regálame esa promesa.
Magnus Louis: Gorda yo no quiero que las personas vean mi arte si no
eres tú, ¡no me dejes!
Viendo esa escena un nudo en la garganta se me hacía más grande cada
vez al oírlos, mis ojos derramaban lágrimas a cada segundo y no podía hacer
nada, solo sentir y observar la tristeza que estaba en el ambiente.
Elixa Louis: ¡Hijo! recuerda el nombre del retrato de nosotros juntos
“nunca dejes de ser feliz” ¡Prométemelo! Tenlo siempre presente ¡te amo!
hi…Jo…
Al ver que Elixa se fue las lágrimas corrían como río sin cauce en mi
rostro. Quería abrazar fuertemente a Magnus que se encontraba devastado, me
acerqué a él y lo abracé por detrás llorando junto con él, automáticamente me
trasladé a otro lugar al abrir los ojos, era la sala de la cabaña, Magnus estaba
poniendo el retrato que su madre había pintado que se titulaba “nunca dejes
de ser feliz” con lágrimas en sus ojos y en los míos, él se volteó quedando al
frente de mí y no aguanté las ganas inmensas de volverlo a abrazar y lo hice
tomándolo de la mano, sentí su cálido cuerpo y sus sentimientos a flor de
piel, él quedó asombrado ya que sentía que algo lo abrazaba.
Magnus Louis: ¿Quién eres? no eres mi gorda, eres muy pequeño para
ser ella y apenas puedo verte, ¿quién eres?
Quedé sorprendido de que él pudiera verme así sea un poco, solo le dije
que quería que fuera feliz y lo abracé fuertemente, el pincel que tenía en
mi mano comenzó a brillar como el oro y solo empezó a crear peluches,
los cuales eran los mismos peluches que se encontraban en el sillón de la
habitación, fueron creados por el pincel, cada uno de esos seis peluches se
posó en el sillón, Magnus asombrado solo sonrió y secó sus lagrimas.

97
Beiker López

Magnus Louis: Gracias… por recordarme lo que es una sonrisa ¡seré


feliz!, seas quien seas te lo prometo al igual que a mi madre.
Al mirarlo a pesar de que en su rostro había lágrimas una gran sonrisa
salió de él y en ese momento el pincel brilló tanto que deslumbró mis ojos y
aparecí en donde había comenzado todo y yo con el pincel en la mano.
Kerf Sylver: ¿He vuelto? Que fue eso.
Emperatriz Lawer: Magnus no despierta ¿Qué hacemos?
Salí corriendo hasta donde estaba para ver qué se podía hacer para
despertarlo…

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Desde ese momento comencé a sentir un sentimiento muy grande por
Magnus, ver cómo trataba a su madre, para mí fue lo más hermoso que puede
existir en una persona, aunque no lo conocía de mucho no era necesario saber
qué clase de persona era, a pesar de que lo conocí de una manera tan cruel
de querer matarme eso no afectó el después, el abrazo tan cálido que le di lo
sentí en todos los sentidos habidos y por haber que puede sentir una persona
y sé que el también sintió lo que quería transmitirle, a pesar que fueron unas
ilusiones de aquel pincel y no viví esos momentos junto a él en la realidad
quise hacerme presente de alguna manera posible y lo logré poco pero lo
logré. Debe ser duro perder a quien tú amas más que nada y sobrellevar las
cosas luego de ese golpe tan fuerte que te da la vida, pero confió en el título
del retrato que creó su mamá Elixa que dice “nunca dejes de ser feliz”, él
nunca dejará de ser feliz y siempre supe que en algún momento de su vida
él lo haría, la vida es fuerte en todos sus aspectos y al menos dejé algo de
mí en él, seis alegrías que son esos seis peluches que el pincel creo que lo
acompañarían toda su vida y cuando él los viera se diera cuenta que son seis
motivos para ser feliz siendo su pasión secreta que lo impulsaría a hacer lo
que jamás ha hecho por su felicidad y creo en ese título siempre “nunca dejes
de ser feliz”.

(Lirio de Luna, año 2016)


Llegué a donde estaba Magnus, estaba tirado inconsciente, tomé su mano
diciendo que despertara, le dije que tenía que despertar por la promesa que
le había hecho a su madre “nunca dejes de ser feliz”, Magnus reaccionó
rápidamente apretando fuertemente mi mano, abriendo los ojos, me miró
fijamente con sus ojos marrones y solo me dijo:
Magnus Louis: ¿Cómo sabes de esa promesa?

98
¡Aeón! Una vida prohibida

Emperatriz Lawer: ¿Te encuentras bien?


Se sentó y fijó su mirada en el retrato de la chimenea.
Magnus Louis: Ese retrato que se encuentra arriba de la chimenea, es el
retrato que lleva ese título, es mi tesoro más preciado y ven esa rosa debajo
de ese retrato, mi mamá me la dio antes de fallecer y dijo que un ángel se la
había dado y me la obsequio a mí. Los he protegido con mi magia por eso no
fueron afectados por la batalla, ¡discúlpenme! No fue mi intención hacerles
daño.
Estaba tan sorprendido de ver la rosa que le di a Elixa en la ilusión que
no lo podía creer, ambos disculpamos a Magnus y enseguida le hice una
pregunta a los dos.
Kerf Sylver: Me pueden explicar ¿por qué siempre que entro en una
habitación pasa algo o me voy a otra dimensión o los veo a ustedes y por qué
ese muñeco me quería matar?
Emperatriz Lawer: Esa es la realidad que no pueden ver las personas
normales, tú tienes un don especial, eres bendecido por Kherbion y pues
todo lo que contenga magias en este lugar así parezca viejo, tu podrás ver su
verdadera realidad, es por ello que a veces entras en un lugar y te transportas
a otro, pero no es que vas a otra dimensión es que entras en su realidad.
Al decirme eso aún no entendía muchas cosas sin embargo para mí ya
todo era como parte de mí y tenía que entenderlo de esa manera aceptándolo,
bailé con un caballero, hablo con fantasmas, ahora veo las cosas de diferente
modo, todo era muy extraño aún pero al mismo tiempo sentía que era parte
de mí y que tenía que seguir adelante para conseguir más respuesta de lo que
estaba pasando en este lugar, este pueblo es extraño y esta posada más pero
nunca había tenido una aventura tan grande como la que tengo ahora.
Magnus Louis: Cómo sabes lo del título de esa pintura que hizo mi
mamá.
Algo dentro de mí dijo que no dijera nada y solo le respondí que cuando
pisé la habitación lo había leído y supuse que esa era su madre. Magnus solo
miraba ese retrato y suspirando dijo:
Magnus Louis: Nunca debo dejar de ser feliz, mi madre siempre reía,
siempre estábamos juntos para arriba y para abajo, éramos como la pareja
perfecta yo para ella y ella para mí, para mí fue muy dura su partida.
Solo quería abrazarlo al escucharlo solo en mi mente pasaba eso, pero no
quería ser imprudente y solo me quedaba callado sin expresarle lo que en ese
momento sentía hacia él, al ver al sillón los seis peluches intactos sentados
uno al lado del otro me hicieron sonreír.

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Beiker López

Magnus Louis: ¿Te gustan? Me hacen muy feliz, a los meses de mi madre
fallecer, estaba colgando el cuadro en mi sala y cuando volteé para irme a
mi cuarto sentí un cálido abrazo, le pregunté quién era pero nunca respondió
y recordé cuando mi madre me dijo que un ángel le había dado la rosa y no
aguanté las ganas de llorar ya que podía visualizar uno abrazándome y de
pronto aparecieron de la nada esos peluches en el sillón y entendí que era
una señal de que no tenía que andar triste porque me cuidaban ese ángel y
mi mamá.
No sabía qué responderle a Magnus, no quería decirle que fue obra del
pincel y quien lo abrazaba era yo, así que solo me sonreí diciéndole que
estaba en lo correcto y le devolví el pincel que había recogido del suelo.
Kerf Sylver: ¡Toma, esto es tuyo!
Magnus Louis: Gracias.
Tomándome fuerte de la mano para agarrar su pincel, Emperatriz me puso
su mano en el hombro y la miré; ella sonriendo me dijo en el oído:
Emperatriz Lawer: Estoy segura que tuviste algo que ver.
Solo sonreí.
Emperatriz Lawer: Bueno, es hora de hablar seriamente ya que vemos
que no somos los únicos que te estábamos esperando, así que prepárate para
escucharme y tienes que prestar mucha atención.
Así mismo caminamos a los sillones que allí se encontraban para hablar y
conversar, yo necesitaba encontrar respuesta a todas mis incógnitas…

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¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 7

El mito, el piano y la doncella


Al sentarnos en el sillón me sorprendía la idea de seguir viendo a los
fantasmas, anteriormente no podía hacerlo solo sentía su presencia, podía
escucharlos hablar o como en el caso de Madrean Deian podía verla mientras
dormía sea por lo natural o también por obra de alguna magia de ellos que
me hacía dormir.
Kerf Sylver: ¡Por favor explíquenme que está pasando con todo esto!
qué tengo que ver yo, Madrean me habló de un tal Kherbion y su bendición
pero que en algún momento yo iba a saber sobre eso. ¿Qué son ustedes y qué
quieren de mí?
Emperatriz solo se sonrió mientras que Magnus la miró emocionado, pero
al mismo tiempo con picardía.
Emperatriz Lawer: ¿Con que ya conoces a Madrean Deian? debí
suponerlo, es la más astuta de nosotros, dueña de la lectura, reina de los libros
y guardiana de la biblioteca, veo que te comentó algo sobre su majestad.
Magnus Louis: Muy pronto romperemos con esta maldición y tú Kerf
serás nuestra llave a este candado que llevamos los nueve fantasmas.
Ambos se miraban con felicidad, pero yo aún no entendía nada de lo que
hablaban y les pedí que me explicaran.
Emperatriz Lawer: Nosotros somos nueve almas que fueron maldecidas
y condenadas a estar atrapadas en esta posada por muchos años; el festival
que se realiza cada año en este pueblo trae consigo muchas personas, nuestra
esperanza es conseguir aquel elegido entre muchos para romper nuestras
maldecidas almas, muchos que se hospedaban en esta posada tenían un don
nato denominado sexto sentido, pero ninguno tenía un factor importante.
Emperatriz, sonriente, me mira con ojos brillantes, miré a Magnus como
preguntándole con la mirada qué factor es ese tan importante.
Magnus Louis: La bendición de su majestad ¡Kherbion!

101
Beiker López

Automáticamente recordé las palabras de Madrean Deian “Tienes un


don natural Kerf, eres un chico prodigio, tienes la bendición de Kherbion”.
Oírlos a ellos decirme con tanta felicidad que yo tenía esa bendición me
sorprendía.
Emperatriz Lawer: Tienes el don de poder ver lo que otras personas
no pueden, tienes poderes sobrenaturales y más importante eres bendecido
por Kherbion, puedes ser una persona sumamente poderosa, pero al mismo
tiempo puedes ser letal ¿quieres una taza de té?
Con su mano derecha haciendo un movimiento sobre una mesa que se
encontraba entre el sillón hizo aparecer una tetera llena de té caliente y tres
tazas sirviéndolas para cada uno de nosotros. Me gustaba ver esa clase de
cosas diferentes a la realidad ya que me parecía algo tan grandioso ¡magia!,
tomé la taza y tomé un poco.
Kerf Sylver: ¡Gracias! Por cierto, cómo es que fui elegido por ese tal
Kherbion, ¿ustedes no son de este mundo?
Al decir eso cambiaron sus caras automáticamente y comenzó un silencio
incómodo.
Kerf Sylver: ¿Dije algo que no debí decir?
Magnus Louis: Para nada, sí somos de este mundo en realidad fuimos
de este mundo, ahora nuestros cuerpos están en un cementerio como
corresponde.
Me sentí apenado por haber preguntado.
Kerf Sylver: ¡Discúlpenme! No fue mi intención ofenderlos, si son
fantasmas es lógico que ya estén muertos, esa maldición ¿a qué se debe?
Según ustedes solo yo puedo romperla para que descansen en paz ¿no?
Emperatriz Lawer: ¡Exactamente! Necesitamos que rompas esa
maldición para descansar en paz.
Si eso era lo que terminaría todo ese misterio yo estaba dispuesto a
hacerlo, ya era mucho con querer matarme, fantasmas y sueños raros, no
quería seguir viviendo otras novedades al pasar más tiempo en esa posada,
cuando el único motivo de estar allí era el festival.
Kerf Sylver: Yo solo vine a ver el festival, pero si puedo ayudarlos lo
haré. ¿Qué debo hacer?
Petra solo se levantó del sillón dejando la taza de té en la mesa y
caminando hasta el medio de la habitación, en todo el medio con sus dedos
índice empezó a escribir en el suelo y cada vez que hacía salían letras en
102
¡Aeón! Una vida prohibida

llamas como si las tallara, al terminar cruzó sus dedos y dijo una frase en ese
idioma extraño.
Emperatriz Lawer: “Espejo de un aprendiz”.
Las letras comenzaron a brillar y de ellas salió una luz formándose un
espejo redondo con bordes de oro.
Emperatriz Lawer: Este es el primer paso que debes dar, tendrás que
perfeccionar tus dones, usé un hechizo llamado “espejo de un aprendiz”
el cual consiste en invocar un espejo que te ayuda a la concentración y
canalización de tus dones, puedes verlo ¿no es así?
Kerf Sylver: Sí puedo verlo, ¿eso quiere decir algo?
Emperatriz Lawer: ¡Así es! Eres el elegido, una persona que no tenga
la bendición de Kherbion no puede ver los hechizos ni mucho menos hablar
con nosotros.
En mi mente solo se generaba una duda, quién era Kherbion y por qué yo
tenía una bendición de él.
Emperatriz Lawer: Este espejo te dirá qué hacer. ¡Solo ponte al frente
para reflejarte en él!
Caminé hasta estar al frente de ese espejo el cual no tenía vidrio y podía
ver a través de él, era muy llamativo por sus bordes dorados, me llamaba
mucho la atención el no tener el vidrio que refleja como cualquier otro
espejo, Emperatriz se puso al lado de él y con su mano derecha tocó el borde
de oro haciéndole un mandato.
Emperatriz Lawer: Quiero que ayudes a Kerf a perfeccionar sus
dones... por ahora puedes vernos, pero eso no durará muchos minutos, así
que prepárate.
No entendía nada de lo que iba a pasar en ese momento, pero de algo sí
estaba seguro no iba a ser nada agradable.
Emperatriz Lawer: Esa es tu misión espejo, la cual será que pueda
vernos sin ningún problema en donde sea y a donde vaya “Reflejo”.
Quitó su mano del espejo, tenía en el borde de oro cuatro diamantes
incrustados uno arriba, abajo y hacia los lados, en el medio de todo el
borde hacía como un camino que unía los diamantes, al decir “reflejo” los
diamantes comenzaron a cambiar de color comenzando por el de arriba,
se tornó rojo como el rubí y desprendió una especie de líquido rojizo que
recorrió el camino hasta el segundo diamante del lado derecho, al tocarlo
el segundo diamante se tornó azul como el zafiro, un líquido de color azul
103
Beiker López

recorriendo el camino hacia abajo hasta tocar el tercer diamante, éste se tornó
verde como la esmeralda nuevamente un líquido verde comenzó a recorrer
el último diamante de color rojo rubí, los cuatro diamantes al conectarse
cambiaron el color automáticamente brillando como la plata misma creando
el vidrio del espejo el cual no tenía cuando fue invocado.
Kerf Sylver: ¿Qué está pasando? Los diamantes después de brillar de
colores diferentes ahora brillan de un mismo color plateado.
Emperatriz Lawer: Solo observa el espejo, ¿ves ese líquido que se
desprendió de los diamantes? Al unirse a los cuatro ese líquido creará el
vidrio que hará tu reflejo y allí comenzará tu lección.
Magnus se encontraba sentado aún en el sillón, se levantó caminando
hacia nosotros muy sonriente, me observó diciéndole a Emperatriz que
estaba muy emocionado de verla usar su magia.
Magnus Louis: Tenía tiempo que no te veía tan entusiasmada con un
alumno, te ve Madrean Deian y creo que se uniría a tu labor, solo espero que
Kerf no salga huyendo de esta digamos mmm… clase, digno de ti empezar
una lección con un hechizo tan fuerte como lo es “Espejo de un aprendiz”
¡me encantará ver esto!
Los miré a ambos a pesar de estar al frente del espejo. Ya estaba a punto
de terminar de crearse el vidrio y podía visualizar mi reflejo en él.
Kerf Sylver: Emperatriz ya estoy viendo mi reflejo en el espejo, ¿ahora
qué debo hacer?
Emperatriz Lawer: No te preocupes, ya verás.
Se terminó de crear el vidrio, ya podía visualizar mi reflejo en su totalidad,
cargaba una camisa de color blanco manga larga, unas bermudas de color
rojo y unos zapatos deportivos negros, pero al ver el reflejo del espejo los
colores estaban invertidos, la camisa era roja y las bermudas blancas y mis
zapatos grises.
Kerf Sylver: ¿Por qué mi reflejo es diferente? Se supone que debería
reflejar todo tal cual y no con los colores de mi ropa invertidos.
Emperatriz solo sonrió junto con Magnus y se dirigieron al sillón
nuevamente para tomar asiento.
Emperatriz Lawer: Nos sentaremos y te vamos a observar desde lejos,
no pierdas de vista tu reflejo.
Se sentaron, Emperatriz hizo un chasquido y allí todo comenzó, seguía
observando mi reflejo y de pronto mi propio reflejo levantó su mano y me
104
¡Aeón! Una vida prohibida

saludó con una sonrisa de picardía, estaba sorprendido de ver semejante cosa
pero para mayor sorpresa mi reflejo caminó hasta acercarse mucho al vidrio,
metió sus manos dentro de él como queriendo salir del espejo y efectivamente
así estaba haciéndolo, mi reflejo comenzó a salir del espejo apoyándose con
sus manos del borde, parecía una especie de líquido que tomaba forma a
medida que iba saliendo, luego de las manos comenzó a salir la cabeza y
con la fuerza de sus brazos se empujó hacia afuera cayendo como un metal
derretido, del susto caí sentado en el suelo intentando echarme hacia atrás
con mis manos y piernas ya que el líquido había caído muy cerca de mí, al
ver el espejo ya no tenía vidrio y miré hacia atrás para observar muy asustado
a los dos fantasmas y ellos solo estaban sonriendo, al volver a mirar hacia
donde se encontraba el líquido en el suelo comenzó a tomar forma humana
pero no se parecía en nada a mí.
Kerf Sylver: ¿Qué es esa cosa?
Estaba formado sin ningún rasgo de humano solo la silueta, intentó
saltarme encima pero como pude me levanté para salir corriendo, volteé a
mirar qué pasaba y había atravesado el suelo con su puño.
Kerf Sylver: ¿USTEDES TAMBIÉN QUIEREN MATARME?
Con otro chasquido creó una barrera la cual hacía que ningún sonido se
escuchara dentro de ella, pero fuera de ella sí, solo podía ver cómo ambos
sonreían como si vieran una película de acción en su sofá; aquel líquido
que parecía un humanoide sacó su puño del suelo y volteó a ver dónde me
encontraba, pero esta vez cambiando su forma a un enorme león. El león con
un gran rugido salió corriendo hacia mí y yo comencé a correr lanzándome
atrás de un muro que allí se encontraba escuchando un gran golpe, el animal
chocó contra ese mismo muro esparciéndose por todos lados como agua;
duré un buen rato detrás del muro asustado y decidí salir ya que no escuchaba
nada, al salir vi que estaba esparcido por todo el lugar por la colisión que
tubo contra el muro, mi corazón latía fuertemente y sentía cómo mi cuerpo
estaba cargado de estrés, llevándome al cansancio, ya venía agotado de la
otra lucha con el muñeco burlón, agregando, que recibí golpes fuertes y mi
cuerpo estaba llegando al extremo.
Kerf Sylver: No sé qué quieren que haga, ya mi cuerpo no quiere
responder.
Sin darme cuenta por lo cansado que estaba, el líquido comenzó a
formarse de nuevo pero esta vez se convirtió en un insecto parecido a una
cucaracha, pero peor, por sus antenas lanzaba unas bolas que al tocar el piso
se convertían en más bichos como ese.

105
Beiker López

Magnus Louis: Ya está llegando al extremo, no calculé el cansancio


de su cuerpo por la batalla anterior, deberíamos cancelar esta lección ¡es
arriesgado!
Emperatriz Lawer: Recuerda que ese hechizo no se puede deshacer así
por así, hasta que el individuo no termine la lección es decir hasta que acabe
con él. El hechizo no se romperá ¿se te olvidó la regla?
Magnus Louis: ¡Ahora sí me estoy preocupando! Tendremos que confiar
en que lo logrará…

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Esa experiencia fue muy extrema en mi vida, en ese momento me sentía
tan agotado y más aun mis sentidos no estaban operando muy bien, ese líquido
o espejo intentaba matarme y derrotarlo era mi deber en ese momento, pero
todo estaba a favor del espejo.
¿Usar magia? Imposible para un ser humano común y corriente.

(Lirio de Luna, año 2016)


Me costaba respirar por el agotamiento, me apoyé en la pared y fui
bajando poco a poco con la mano en el pecho hasta sentarme en el suelo para
poder descansar, ya estaba casi convencido de que no le ganaría a esa cosa
que ahora tenía una forma asquerosa; estaba aterrorizado. Miré hacia donde
se encontraba y al ver que los bichos que ese insecto creó venían acercándose
hasta donde yo estaba, el pánico se apoderó de mi cuerpo haciendo que no
pudiera moverlo y aceptando que iba a morir. Algunas de esas cucarachas
fueron transformándose en cobras.
Magnus Louis: Esto ya no me está gustando.
Emperatriz Lawer: ¡Lo sé! A mí también me está preocupando, el
hechizo “Espejo de un aprendiz” refleja tus miedos y hace que cobren vida
para que puedas afrontarlos, para que Kerf tenga una mejor evolución en sus
dones, tiene que dejar sus miedos y vencerlos.
Magnus Louis: Hay algo extraño en todo esto, ese hechizo solo hace
reflejo a tus miedos más grandes, pero no ataca a la persona que se reflejó en
el espejo, he notado que el espejo ha intentado herir de verdad a Kerf ¿o son
simplemente ideas mías?
Emperatriz Lawer: ¡No lo son! También me percaté de eso, por ello
estoy preocupada y lo más preocupante aun es que no puedo desvanecer el
hechizo y si nosotros intervenimos el espejo hará forma a nuestros miedos

106
¡Aeón! Una vida prohibida

¿sabes qué monstruo puede crear? No podemos, si Kerf no pasa la lección


del espejo de alguna manera, no se desvanecerá, ¡esa es la ley! No puedo
romperla.
La cucaracha gigante también se transformó en cobra y venían hacia
mí lentamente como si fueran a comer a su presa, no tenía ya energía para
moverme así que solo podía esperar que aquellas cobras me mataran, tenía
rabia dentro de mí, tanta rabia acumulada de solo pensar por qué me estaban
pasando estas cosas simplemente a mí.
Kerf Sylver: ¡MALDICIÓN! Por qué me quieren asesinar ¿qué les hice?
Sentí un dolor inmenso en mi espalda del lado derecho, que me hizo gritar
y al mismo tiempo sentí cómo mi cuerpo comenzaba a reaccionar por sí solo
como si fuera un títere.
Magnus Louis: ¿Qué le está pasando? Parece que algo le está causando
un gran dolor.
Miré hacia donde estaban sentados los fantasmas, ambos estaban muy
sorprendidos por lo que estaba pasando, no podía detener el dolor y mi
cuerpo solo se movía por sí solo.
Kerf Sylver: ¡AHHHH! Por… qué ¿qué le pasa a mi espalda?, qué le
sucede a mi cuerpo.
Sentí que algo tapó mis ojos…
Emperatriz Lawer: Qué sucede, ¿por qué no se mueve?
Magnus Louis: Emperatriz ¡observa bien! Mira sus ojos, no son los
mismos, están de diferente color y su mirada parece sanguinaria. Mira las
cobras no se han movido desde que Kerf comenzó a gritar, desde hace rato en
el ambiente he sentido que se ha tornado frío y he sentido algo maligno, pero
pensé que eran los mismos miedos creados por el reflejo del espejo.
Emperatriz Lawer: No solo eso, la cara de Kerf ha cambiado totalmente
¡parece un demonio!
Kerf Sylver: Tu hechizo es tan débil que con solo mi presencia lo
detuve… para ser encargada de las leyes te hace falta muchísimo más poder
¡mi querida Emperatriz Lawer! Mira qué hago con tu espejito mágico.
Magnus Louis: ¡Ese no es Kerf! ¿Está siendo poseído como me poseyeron
a mí?, tenemos que detenerlo rápidamente antes de que pueda despertar el
verdadero poder que está dormido dentro de Kerf y allí sí estaremos acabados.
Kerf Sylver: “En la muerte soy el dios y en la oscuridad el terror,
matando vivo la noche y riendo en el día voy… destrozo lo que se interponga
y mi poder es la ley”.
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Beiker López

Emperatriz Lawer: ¡NO PUEDE SER! ¿Ese es dicho de Layfher el rey


de la quimera?, cuando él dice esa frase todos los hechizos se rompen.
Magnus Louis: Mira el espejo Petra, se está pulverizando y la barrera
que creaste ya no está, esta es la oportunidad, tenemos que quitar ese ente
que lo tiene poseído.
Kerf Sylver: No se preocupen solo vine a proponerles algo a ustedes
aprovechando que este cuerpo está débil para manipularlo a mi antojo, esa
misión que quieren ejecutar está errada, ahora tendrán una nueva ¿les parece?
No se preocupen será a beneficio de todos.
Emperatriz Lawer: ¿Si no aceptamos?
Kerf Sylver: ¡Claro que aceptarán! Solo escuchen mi propuesta, no tienen
otra alternativa a menos que quieran que destruya el cuerpo del bendecido,
será como partir un mondadientes.
Magnus Louis: ESPERA. ¡Está bien! te escucharemos.
Kerf Sylver: Así me gustan los fantasmas ¡OBEDIENTES!

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Solo recuerdo cuando mis ojos se adormecieron, no sé qué pasó luego
de eso, a la mañana siguiente amanecí en el sillón donde me encontraba
tomando el té junto a los fantasmas, sentía mi cuerpo muy cansado como si
hubiese recorrido un sendero completo trotando, me senté en el sillón y vi
que me encontraba solo. Aunque parezca muy fantasioso cada cosa la viví, es
la razón por la cual escribí estos libros y estoy sentado contando la historia…

(Lirio de Luna, año 2016)


No entendí qué había pasado, solo recuerdo aquellas cobras que venían
hacia mí y me di por vencido sintiendo un dolor en mi espalda, observaba
cada parte de la habitación y estaba totalmente tranquila y todo como si no
hubiese pasado nada, me encontraba solo, llamé a los fantasmas pero no
respondieron, tampoco sentía su presencia así que me levanté del sillón y fui
hasta la ventana de esa habitación, antes de llegar a ella me conseguí con una
carta que decía “para: Kerf Sylver” la cual recogí e inmediatamente la abrí
para leerla la cual decía…
“Te desmayaste toda una noche, ¡has pasado la lección felicidades!
Ya puedes vernos sin necesidad de concentrarte, nos fuimos para resolver
otros asuntos, pronto nos veremos. Otra cosa muy importante que debemos
decirte, al desmayarte nos dimos cuenta que tienes una marca en la espalda,

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¡Aeón! Una vida prohibida

para nosotros es lamentable decirte que es una maldición que poco a poco irá
acortando tu vida ¡sé que es alarmante! Pero no pierdas la cordura, hay una
posibilidad de que la rompas, pero es sumamente complicado y se necesita
determinación, esta maldición se llama “el piano viejo”. En esta posada
existe un mito de un piano que está maldito, quien lo escuche por los pasillos
tiene como previsto morir, quien lo haya visto su muerte está asegurada y la
única forma de que se rompa esa maldición es que llegues a tocarlo pero eso
no es lo complicado, lo complicado es tocar la melodía por la cual ese piano
fue maldito y que nadie sabe dónde se esconde el pergamino que contiene
las partituras de esa canción, se dice que está oculto en algún lugar de esta
posada.
La historia cuenta que el dueño del piano tocaba todos los días a su amada
para así decirle lo mucho que la amaba, un día el pianista desapareció y su
amada locamente lo buscaba para escuchar aquella melodía compuesta y
tocada por él todos los días pero al ver que nunca regresó la damisela con
lágrimas y sufrimiento de tanto amor que almacenaba, nunca se lo expresó
al pianista, no quería seguir pensando más en él pero no sabía cómo hacerlo,
pocos días después llegó una carta la cual le decía a la damisela que el pianista
estaba muerto y que dentro de aquel piano estaba la letra de la canción que le
había compuesto, salió corriendo en busca del piano buscando la letra de esa
canción y efectivamente dentro del piano se encontraban varias hojas llenas
de partituras y otra hoja la cual tenía un mensaje diciendo:
“Amada mía esta letra la compuse para ti con todo mi amor, esta letra no
es una letra cualquiera amada, contiene magia pura la cual puede transmitir
el sentimiento más sincero a quien la toque, es por ello cada vez que tocaba
esta melodía para ti sentías el amor más puro y sincero, pero debo decirte
que me tengo que ir ya que padezco de una enfermedad letal y no te la quiero
transmitir al tocarla, te pido por favor que escondas esta letra donde nadie
pueda encontrarla, quien llegue a tocarla con la maldad podría quitarle la
vida a quien desee con tan solo tocarla, confío en ti mi amada doncella te
ama tu adorado pianista”…
Con gran tristeza y dolor la damisela gritó pero una rabia interna la
consumía, porque él no confió en ella y no le dijo de su enfermedad, tomó
la canción y se sentó en el piano, comenzó a tocar la melodía con dolor,
tristeza y al mismo tiempo rabia, cada tonada que realizaba todos en el lugar
escucharon la melodía y uno por uno fue enfermando y muriendo a los días,
todo el pueblo comenzó a buscar el porqué de los difuntos pensando que
era una epidemia de alguna enfermedad que estaba atacando el pueblo, al
descubrir que era la melodía del piano que día a día la doncella tocaba con
gran sufrimiento, morían personas que la escucharan tocar, el pueblo entró
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Beiker López

a la fuerza a su casa y la tomaron para matarla ya que decían que era una
bruja que robaba las almas de quien escuchaba su tocar y antes de que se la
llevaran para ejecutarla ella los maldijo a todos incluyendo el piano, desde
entonces se dice que quien escuche el tocar de un piano está maldito por
aquella bruja que desea las almas de las personas.
En realidad, no es una bruja ni el piano, es la melodía que está maldita
de tantas veces que fue tocada por la doncella y mató a tantas personas, así
que debes recuperar esa melodía luego tocarla para revertir la maldición,
nosotros estamos buscando por nuestra cuenta ¡contamos contigo! Eres
nuestra salvación y más que eso eres nuestro amigo, otra cosa el piano tiene
una particularidad que no se deja tocar de nadie, solo aquel que ha sido
maldito puede, estoy segura que no sabes tocar ese instrumento así que te
lo diré de esta manera ¡TENDRÁS QUE APRENDER A TOCAR O VAS A
MORIR! Att: EMPERATRIZ LAWER…
Kerf Sylver: ¡No puede ser! Yo escuché ese piano, también lo llegué a
tocar… no simplemente eso, Ransus y May también lo vieron, ¡tengo que
avisarles y contarles sobre esto!
Al salir corriendo fuera de la habitación en busca de May y Ransus, mis
pensamientos solo me llevaban a una sola cosa ¡LA MUERTE!
Comencé a correr como un loco por todos los pasillos de la posada,
gritando los nombres de May y Ransus, pero mientras más corría sentía
que no encontraba salida alguna y que solo corría en círculos, me detuve un
momento para darme cuenta de que era así.
Kerf Sylver: ¡Maldición! ¿Dónde están esos fantasmas? no siento la
presencia de nadie.
Comencé a correr nuevamente con la esperanza de encontrar una salida o
encontrarme con alguno de los chicos, pero a la lejanía un sonar de un piano
se comenzó a escuchar en todo el lugar.
Kerf Sylver: ¡Esa melodía! Es el piano, debo buscarlo y romper esta
maldición antes de que sea muy tarde.
Me concentré para escuchar la tonada que generaba ese piano a la lejanía,
caminaba y caminaba, pero solo escuchaba el piano a lo lejos, de algo sí
estaba seguro el piano se encontraba dentro de la posada como estaba escrito
en la carta.
Kerf Sylver: Tengo salvación, el piano sí se encuentra aquí, ¡espera!
¿Será ese el mismo piano que Ransus, May y yo vimos, pero ellos no
pudieron tocar en cambio yo sí?

110
¡Aeón! Una vida prohibida

En ese preciso momento recordé aquel piano que pude tocar pero que los
chicos también vieron, eso me indicaba que yo no era el único que estaba
maldito por él, también Ransus y May lo estaban y eso me preocupó mucho
más y aceleré mi paso a encontrar ese piano. Mientras más rápido caminaba
menos podía encontrar de dónde provenía el tocar del piano, mi corazón latía
fuertemente y mi mente se encontraba muy saturada de tantos pensamientos
que se generaban al pensar en esa maldición, sin darme cuenta la melodía
se escuchaba más cerca y allí supe que me estaba acercando a donde estaba,
caminé siguiendo la melodía que a cada paso que daba se escuchaba más cerca
la canción, al final de un pasillo que jamás había visto donde las velas eran lo
que alumbraba el lugar, velas de color rosado y cuadros de diferentes pianos
ambientaban ese pasillo, en el fondo se encontraba una puerta de madera, fui
rápidamente a abrirla para acabar con una maldición que acechaba mi vida
cada segundo que pasaba.
Kerf Sylver: De allí proviene la melodía, este pasillo no lo había visto y
lo más extraño es que en cada vela rosada arriba hay un retrato de un piano,
eso me dice que dentro de esa puerta de madera está lo que acabará con esta
maldición.
Corrí rápidamente y abrí la puerta de golpe, al entrar a la habitación
era totalmente rosada en todas sus tonalidades, sus cortinas, el color de las
paredes, la cama, floreros, adornos y hasta la lámpara, en un rincón un piano
viejo de color rosa estaba siendo tocado por una mujer muy hermosa y a su
vez se notaba la delicadeza de su ser.
¿?: Pasa adelante mi querido Kerf, siéntate y escucha atentamente mi
melodía la cual se llama “ángel”.
Inició una serie de tonadas que hasta el corazón más duro podría volverse
blando, solo recordé la maldición y aquel mito mencionado en la carta, la
detuve al instante.
Kerf Sylver: ¡ALTO! No sigas tocando, de seguro eres la doncella del
mito que tocaba para robar las almas de las personas que escucharan tu
melodía.
Paró de tocar y volteó a mirarme, no podría describir la belleza de sus
ojos ni siquiera el brillo que emanaba de ellos, al verlos solo me hacían sentir
una paz tan grande y una tranquilidad muy fuerte que ninguna otra persona
que haya visto a los ojos podría tener.
¿?: ¿La doncella del mito, de qué hablas?
No podía dejar de verla fijamente, su cabello de lado ondulado color
castaño, ojos pardos que hacía combinación con su vestir, un vestido color
111
Beiker López

champagne, que tapaba sus pies descalzos al hacer contraste con las paredes
parecía ser rosado, en su cuello un collar con el símbolo de una nota musical
hecha en hermosas piedras.
Kerf Sylver: Lo sé, eres la que perdió al dueño del piano y escondió la
melodía ¿dime en donde está?
Solo sonrió muy dulcemente y con una voz tan delicada como el viento se
refirió a mí para aclarar el malentendido de la coincidencia que se presentaba.
Melodic Heart: Yo soy uno de los nueve fantasmas del piano viejo, estás
confundido ¡mi nombre es Melodic Heart! A petición de Magnus quiere que
te enseñe a tocar el piano, ya me contaron sobre la maldición de tu espalda y
mi misión es enseñarte a tocarlo.
Al nombrar a Magnus no podría estar mintiéndome, así que bajé la
guardia, pero había una duda en mi cabeza la cual me resonó al escuchar que
era uno de los nueve fantasmas del piano viejo.
Kerf Sylver: Dime una cosa Melodic cómo es que son fantasmas del
piano viejo, ¿si mi maldición se llama así? Es decir que ustedes son…
Melodic Heart: Nosotros fuimos víctimas de la melodía del piano,
lamentablemente andamos vagando en esta posada para encontrar a alguien
que nos libere de su maldición para descansar en paz.
Kerf Sylver: Pero cómo es que tienen magia y ¿quién es Kherbion?
Melodic Heart: En la biblioteca de Madrean Deian hay un libro llamado
“Aeón” y otro llamado “una vida prohibida” ambos libros son uno solo pero
fueron separados por una magia, Kherbion fue el que escribió esos libros, en
ambos hay un párrafo donde dice “hay un ser que yo elegí y con mi bendición
tendrá la magia de deshacer cualquier maldad existente” nosotros con la
esperanza de que algún día ese ser elegido llegara aquí y nos pudiera liberar
de este maldito encierro donde estamos, todos nosotros tomamos un libro el
cual contenía hechizos y cada uno los practicó hasta dominarlos es por ende
que tenemos magia y para nosotros es más fácil usarla por ser de energía es
decir cuando el alma deja el cuerpo se convierte en energía que se puede
materializar, nosotros materializamos nuestra energía y la canalizamos para
poder usar magia.
Muchas dudas se iban aclarando que en mi cabeza rondaban desde que
llegué a esta gran posada, llena de misterios, fantasmas, hechizos y magia.
Kerf Sylver: Ahora sí entiendo algunas cosas; dime Melodic ¿sabes
dónde se encuentra ese piano al cual están atados?

112
¡Aeón! Una vida prohibida

Melodic Heart: La verdad no lo sé, ese piano contiene magia tan fuerte
que nosotros nueve juntos no podríamos detener, solo sé que a veces en las
noches se escucha que alguien lo toca.
Me quedé un poco pensativo de esa situación, saber que podría morir
como murieron esos fantasmas me hacía temer, el simple hecho de saber el
sufrimiento de cada uno al morir por causa no natural, no podía imaginar el
sufrimiento que debieron pasar hasta llegar a tal punto de aprender magia y
esperar que una persona desconocida los pudiera salvar.
Kerf Sylver: ¡Enséñame a tocar el piano por favor!
Me sonrió dulcemente y se sentó nuevamente en el piano, acomodó sus
manos y movía su cabeza como si una melodía sonara en ella, me miró
fijamente con su mirada tan dulce pero al mismo tiempo pude darme cuenta
de su tristeza.
Melodic Heart: Presta atención, te enseñaré la magia que aprendí…
“Serenata de las ilusiones doradas”.
Con dulces tonadas comenzó a tocar, verla en el piano era como ver un
ángel tocándolo, al escuchar su melodía mis sentidos se relajaban uno por
uno, sabía que era mi debilidad y recordé aquel sueño donde el caballero
tocaba el piano y me hacía sentir todo lo que él quería que yo sintiera, no
pude evitar cerrar mis ojos como en aquella ocasión dejándome llevar por
la melodía, Melodic me hablaba con su dulce voz y me explicaba en qué
consistía su magia
Melodic Heart: Mi magia no es tan poderosa como la de los otros
fantasmas ¡mi magia es la música! Al tocar cualquier instrumento musical
puedo transmitir paz a los corazones de quien la escuché, sanar su dolor,
relajar sus sentidos y más que nada sentir una tranquilidad tan grande como
el mundo, mi único hechizo es la “Serenata de las ilusiones doradas” con
ella puedo crear hermosas melodías que toquen el sentimiento más profundo
del ser humano.
No podría explicar lo hermoso que era sentir cada parte de la música, la
melodía del instrumento llenaba cada sentido de mi cuerpo, relajaba cada
parte de mis músculos y sentía como un inmenso amor por la vida recorría
en mis sentires, nada se comparaba a eso.
Melodic Heart: Abre tus ojos.
Abrí los ojos lentamente, en toda la habitación que estaba pintada de
todas las tonalidades de rosa, cambiaba su color al ritmo del piano, un polvo
comenzó a salir del piano y el collar que Melodic llevaba en su cuello brillaba
113
Beiker López

como una estrella brilla en la noche. El polvo que el piano generaba tomaba
forma y no entendía el por qué.
Melodic Heart: Esta es mi verdadera magia, a medida que voy tocando le
transmito mis sentimientos al piano y el piano como un reflector los proyecta
a través de ese polvo llamado “Ilusiones doradas” cuando toco con tantos
sentimientos el piano lo refleja y crea ilusiones de lo que estoy sintiendo
¡observa!
Me preguntaba por qué ella me mostraba lo que sentía en ese momento,
era porque tenía que aprender a tocar el piano o quería generar confianza en
mí, me quedé observando el polvo que el piano generaba, cada forma que
tomaba era grandiosa, comenzó con una niña jugando con una muñeca en un
cuarto, la niña lanzó su muñeca al cielo y automáticamente el polvo cambió
de forma a una mujer que caminaba por un pueblo y de la mano estaba esa
niña que lanzó su muñeca, al mismo tiempo un señor con un niño también
tomado de la mano se encontraron de frente, el polvo hizo un remolino y
creando un árbol con un columpio, en él una muchacha sentada con flores
en sus piernas, de pronto un muchacho salió detrás de aquel árbol con una
rosa en su mano llegándole por detrás a ella, del árbol comenzaron a caer sus
hojas transformándose en otro escenario el cual era una plaza donde ambos
estaban sentados abrazados, el muchacho se levanta y se arrodilla abriendo
un cofrecito con un anillo dentro, le hizo una petición de matrimonio a
su amada, la muchacha saltó a abrazarlo junto con un beso, al besarlo un
corazón flotó en ellos explotando y tomando forma a un bebé en una cuna y
ambos padres viéndola, la niña creció jugando con sus padres caminando por
el pueblo, meciéndola en el columpio, viéndola en el parque jugar.
Kerf Sylver: Parece una película, con que a esto se refiere, me está
mostrando todos sus recuerdos.
Un tornado se generó y una escena la cual me generó una sonrisa, se
trataba de que Melodic era esa niña que nació del amor de los otros dos. Se
encontraba caminando por el pueblo tropezándose con un muchacho, Melodic
hizo reverencia como pidiendo disculpas y el muchacho con su sombrero
hizo lo mismo, ella siguió caminando y el muchacho parado solo la observó
irse, el polvo se dispersó por el suelo y creó un piano, en él estaba sentado
aquel muchacho con el cual Melodic tropezó, se veía que lo tocaba de una
manera entregada, detrás de él estaba una ventana donde estaba otra casa,
en esa casa Melodic estaba viéndolo tocar por una ventana, el muchacho se
levantó mirando la ventana para saludarla y ella igual a él, la ventana se abrió
y el polvo pasó por ella generando otra escena en la cual aparecían ellos dos
juntos caminando hacia el árbol donde sus papás la mecían en el columpio,
ella se sentó en él y el caballero la mecía.

114
¡Aeón! Una vida prohibida

Kerf Sylver: Me está mostrando su vida amorosa, este fue el amor que
tuviste.
Volvió el árbol a soltar sus hojas creando un baile donde ambos bailaban
entre muchas otras parejas y finalizó donde Melodic estaba sola en una lápida
llorando y la melodía del piano cambió totalmente a una melodía muy triste,
el corazón me latía fuertemente y ganas de llorar inmensas. Volteé a ver a
Melodic y ella tenía los ojos cerrados y con lágrimas en sus mejillas.
En la escena siguiente Melodic caminaba por el pueblo con lágrimas,
estando en el columpio con lágrimas y en la ventana de su casa mirando
hacia donde aquel caballero tocaba el piano para ella con lágrimas, no pude
evitar también llorar y mirándola con lágrimas la melodía dejó se sonar,
Melodic había cerrado sus ojos tocando el piano y al abrirlos el color les
había cambiado de pardos a amarillos, me observó y con su mano izquierda
los tapó soltando el llanto y diciendo “perdón”.

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


No es fácil ver a una mujer llorar, es como ver a una rosa marchitarse,
sus lágrimas son diferentes a las de un hombre cuando recorren sus mejillas,
dejan ver su transparencia en sus ojos y no obstante a eso te hacen sentir
como un ser chiquito, por eso les pido que cuiden a esas mujeres que en su
vida los acompañan porque no saben lo frágiles que pueden ser.

(Silencio en el auditorio)
Para mí fue duro ver a Melodic llorar de esa manera, no sabía qué hacer
en ese momento si ir a abrazarla o dejar que desahogara, verla en ese estado
les confieso que ni el corazón más duro y oscuro se resistiría a llorar al verla
así; caballeros que hoy están presentes aquí hay que entender como hombres
que somos guerreros fuertes con la misión de proteger aquello que adoramos
y no importa tu preferencia sexual, no importa tu estatus social, no importa
de dónde seas, siempre debemos no hacer llorar a quienes adoramos y menos
a una dama.

(Lirio de Luna, año 2016)


No sabía cómo reaccionar frente a esta situación, si irla a abrazar o
quedarme parado y verla desahogarse; cerré los ojos y suspiré, fui hasta ella
y tomé su mano. Su mirada tan tierna y su carita empapada de lágrimas, me
apretó fuertemente la mano y con eso un “gracias” bastó para sonreírle.
Kerf Sylver: No tienes que pedir perdón de nada, solo te desahogaste a
través de tu hechizo, quizás necesitabas a alguien para drenar ese sentimiento.

115
Beiker López

Se levantó y caminó hasta una repisa, en ella estaba un cofre y lo abrió,


en él se encontraba un lacito rojo, lo tomó con ambas manos colocándolas
en el pecho.
Melodic Heart: Este lacito era de mi amado, es lo único que tengo de él,
él nunca me propuso matrimonio con un anillo sino con este lazo y yo acepte,
su nombre era Christofer y lo amaba mucho.
Kerf Sylver: Lo sé, sé que lo amabas lo pude ver y sentir.
Me quedé parado viéndola con una sonrisa en su rostro y a pesar de no
entender el por qué yo me encontraba en un lugar donde todos esos fantasmas
dependían de mí, me daba cuenta de que era para un bien y no para un mal
afrontar ese lugar, liberarlos de esa maldición que los ata a estar en el mundo,
¡quiero romperla!

116
¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 8

Las verdaderas ilusiones


(Biblioteca Ranhze, año 2016)

Melodic Heart era uno de los fantasmas, mas diferente a los que había
conocido; la pureza que emanaba era como ver el mar azul sin fin y la
paz que sentía era como el sonar de las olas de ese mismo mar, no es fácil
expresar aquellos sentimientos que tienes reprimidos, que quieres expulsar
para desahogarte, las personas desahogamos esos sentires de alguna u otra
manera y ese fantasma en particular lo demostró con su magia.

(Lirio de Luna, año 2057)


Melodic sostenía el lazo de su prometido en sus manos, me percaté de
que estaba descalza y me llamó mucho la atención, sin embargo, no comenté
nada solo le pregunté qué sucedió con su amado ya que en su tonada nunca
reflejó esa parte, solo podía suponer que falleció de alguna manera por la
lápida que apareció al final.
Kerf Sylver: Discúlpame si soy atrevido al preguntarte esto, ¿qué paso
con Christofer?
Observó el lazo y levantó su cabeza recordando aquellos momentos.
–Una noche comenzó a tocar su piano mientras yo lo observaba por
mi ventana, admiraba verlo, lo disfrutaba, esa misma noche luego de unas
cuantas horas me encontraba dormida, escuché que algo tocó mi ventana y
me levanté para observar de qué se trataba, abrí la ventana y él tenía la suya
abierta, me di cuenta que había sido él quien lanzó una piedra para que yo me
despertara para asomarme, me hizo señas de que bajara y saliera de mi casa,
al salir tomó mis manos y me abrazó, en el oído dulcemente me hizo una
invitación la cual era “quieres bailar conmigo en el festival”; sin pensarlo
dos veces acepté emocionada de saber que él quería compartir un momento
tan especial como lo era esa noche.
Al escuchar la palabra “festival” recordé las palabras del señor Jhoel y
aquella historia del baile que se celebraba en el pueblo.

117
Beiker López

Kerf Sylver: ¿Ese baile no es el mismo que se celebrará?


Melodic Heart: ¡Así es! Es el mismo festival que todo el mundo espera
celebrar.
Los ojos de Melodic cambiaron drásticamente como si una rabia interna
invadiera su ser.
Kerf Sylver: ¿Te sucede algo?
Melodic Heart: Ese baile fue el causante de que Christofer muriera.
Se me erizó el cuerpo quedando sorprendido ya que en ese momento
recordé que ese baile fue el motivo por el cual muchos de los turistas dejaron
de venir al festival, algo atroz sucedió que causó la muerte de muchas
personas.
Kerf Sylver: El señor Jhoel me había comentado algo sobre eso, que
hace mucho tiempo en pleno festival delincuentes mataron a muchas de las
personas que celebraban para robarles sus pertenencias, ¡lo siento mucho!
Melodic Heart: No te dijo el verdadero motivo ¿cierto?
Me quedé pensativo en ese preciso momento, la verdad el señor Jhoel
nunca me dijo el verdadero motivo de esos actos realizados por esas personas,
Melodic caminó hasta el piano tocándolo con su mano derecha, miró hacia
arriba y volteó a verme a mí quedando al lado del piano poniendo su mano
izquierda en él.
Melodic Heart: Buscaban el piano.
Kerf Sylver: ¿El piano?
Melodic Heart: El piano por el cual ahora tú estas aquí, el piano por el
cual nosotros los fantasmas estamos atrapados y no podemos irnos… ¡ese
piano!
Mis pensamientos solo eran el por qué querían ese piano si está maldito,
qué beneficio ganaban con él, tanto así para matar personas inocentes.
Kerf Sylver: Pero no entiendo, por qué matarían a tantas personas y más
por un piano que esta maldito.
Melodic Heart: Ese piano contiene un inmenso poder, no solo el de
llevarse las almas de quien lo oiga, sino también darle un poder grande a
quien pueda tocar la melodía que se encuentra escrita en un pergamino que
nadie sabe dónde puede estar.
Ahora algo tenía sentido, lo cual era que ese piano aparte de tener una
maldición para que quien lo oyera muriera, sino que también podía otorgarle
118
¡Aeón! Una vida prohibida

un poder a quien tocara aquella melodía secreta del pianista que la doncella
del mito escondió, el problema era que nadie sabía dónde estaba oculta y yo
tenía que tocarla para no morir.
Kerf Sylver: Enséñame a tocar el piano por favor.
Con una mirada dulce sonrió y caminó hacia donde estaba el asiento del
piano, se sentó y tocó varias teclas de él.
Melodic Heart: Acércate.
Caminé hacia el piano, se hizo a un lado quitándose el collar.
Melodic Heart: Antes de empezar te pondré mi collar que contiene mi
magia, primero tengo que ver cómo reacciona este piano ante ti y qué puede
proyectar, no te preocupes todo saldrá bien.
Kerf Sylver: Pero no sé tocarlo, cómo generaré ilusiones así esté tu
magia, si no sé hacer alguna melodía con el piano.
Solo sonreía colocándome el collar.
Melodic Heart: Mientras tengas este collar podrás tocar cualquier
canción, recuerda algo cada persona tiene una melodía que tocar y esa
melodía quiere ser escuchada, sentimientos, recuerdos y pensamientos son
la melodía que cada ser humano tiene, tanto buenos como malos, así que
déjame escuchar tu melodía.
Terminó de colocarme el collar, sentía nervios, pero al mismo tiempo
estaba realizando algo que nunca esperé realizar; en mi hogar siempre amaba
escuchar la música del piano en la computadora y más que nada llegar a
tocar en algún momento ese instrumento era un sueño, pero por situaciones
de la vida nunca se me presentó esa oportunidad y pasó de ser un sueño a
una ilusión. Poder tocar el piano y que miles de personas oigan cada melodía
era algo que llenaba mis expectativas y pensamientos, así mismo como yo
he escuchado la melodía de este piano por Melodic sintiendo cada tonada,
quiero que el mundo sienta lo mismo cuando me escuchen tocar.
Melodic Heart: Cuando gustes comienzas a tocar.
Solo observé el piano y sus teclas eran brillantes, comencé a tocar una,
luego otra y así, respiré profundamente y solo me dejé llevar, en mi cabeza
rondaba una melodía y lo mejor de todo es que parecía que podía tocarla así
nunca lo hubiese hecho.
Melodic Heart: Tranquilo, déjate llevar, tienes mi collar y podrás tocar
lo que desees o te indiquen tus sentidos.
La miré y cerré mis ojos, como por arte de la magia misma llegó un
pensamiento el cual era el momento cuando por primera vez vi a ese caballero
119
Beiker López

tocar el piano con hermosas melodías, junto a ello me generó un sentimiento


muy grande recordando cuando bailé con él en ese sueño, solo me dejé llevar.
Mis manos se movían por sí solas como el viento mueve la vela de un barco
tocando la melodía que llevo dentro de mí.
Melodic Heart: Veamos qué proyectas ¡deseo verlo!

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


He de confesar que me dejé llevar por mis pensamientos, sentir que tocaba
el piano era como si una ilusión cobrara vida propia y se materializara en la
realidad, ese día toqué el piano como un experto, aunque fuese con magia,
me sentía el ser más feliz del mundo, cada nota musical que generaba sentía
como iba describiendo cada parte de mi vida interna y externa, me dejé llevar
cómo ave en el cielo azul.
Sentía cómo mis pensamientos, mis recuerdos y mis sentimientos
hablaban, era como un medio de expresarme, pero a través del piano, si
pudiera mostrarles cómo es esa magia, créanme que este auditorio sería un
teatro de hermosas escenas solo como si no hubiera fin alguno…

(Lirio de Luna, año 2016)


Dejé que mis sentidos me guiaran, el piano reflejaba sin yo saber lo que
en mi corazón sentía y en mi mente pensaba.
Melodic Heart: Tal cual como me dijo Magnus, tiene un potencial muy
grande.
Magnus Louis: ¡Lo tiene! es el elegido.
Emperatriz Lawer: ¡Al parecer todo va muy bien!
Melodic Heart: Siempre llegando de sorpresa, sin permiso de pasar a mi
habitación.
Emperatriz Lawer: Observemos qué tiene Kerf para ofrecernos.
Melodic Heart: Déjenme decirles que su manera de tocar es muy perfecta
a pesar de que no sabe nada sobre música, si no es por mi collar no lo fuera
hecho.
Magnus Louis: ¡Te equivocas! La magia corre por sus venas, de igual
manera hubiese tocado el piano sin tu collar ¿recuerdas que tu magia es la
más débil?
Melodic Heart: ¡Cállate! Mi magia es poderosa igual que la de todos.
Emperatriz Lawer: Pongan atención, ya se está dejando llevar por el
piano.
120
¡Aeón! Una vida prohibida

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Era indescriptible lo que en ese preciso momento sentía, cómo
describírselos a ustedes, es cuando comes chocolate y sientes que es lo
mejor de todo el mundo o cuando abrazas a quien más quieres y no quieres
desprenderte de esa persona ni un segundo pues era algo parecido, no quería
dejar de tocar, no quería que se acabara el momento y más aun cuando
escuchaba aquellas tonadas que salían de mis manos junto al piano me hacían
sentir único y que estaba volando al cielo, la melodía que generaba nunca se
me va a olvidar, la llevo en mis oídos a donde quiera que voy y si pudiera
tocárselas lo haría una y otra vez, es hermosa y más que nada es la melodía
que llevo en todo mi ser, esa era la magia más hermosa ¡la música!

(Lirio de luna, año 2016)


Con tonadas lentas mis manos se dejaban llevar, me estaba gustando tanto
tocar el piano así fuera con magia, era como si se estaba realizando un sueño
que nunca iba a poder cumplir, me sentía feliz de tocarlo muy feliz, abrí
mis ojos viendo que en la habitación se encontraban también Emperatriz y
Magnus observándome y pude apreciar que estaban ansiosos de ver cómo
tocaba el piano, mis pensamientos volaban uno tras otro, me concentré en
lo que mis manos tocaban y al oír la melodía que yo mismo generaba no era
más que el vals que en mis sueños tocó aquel Rey con máscara.
Kerf Sylver: Esta es la melodía, aquella que sonaba cuando él tomó mi
mano y bailamos.
Mi corazón se forjó de latidos fuertes, pero no esos latidos que te dan
cuando te asustas o como aquellos que sientes que se te va a salir, eran latidos
que te generaban paz, amor y una sonrisa única a tu rostro, la música sonaba
en toda la habitación ¡un bello vals!
Melodic Heart: ¡QUÉ HERMOSO!
Magnus Louis: ¡Indudablemente!
Emperatriz Lawer: ¡Precioso!
Sentía cómo cada uno de mis sentimientos era transmitido al piano, el
collar deslumbraba con una luz roja. Solo mi mente tenía aquel baile tan
mágico que solo en los sueños existen.
Kerf Sylver: Siento cómo cada pensamiento me hace revivir cada latido
a su lado, quiero volver a soñar, quiero bailar nuevamente con él, quiero
escuchar esta melodía una y otra vez, que nunca se acabe.

121
Beiker López

Magnus Louis: ¿Qué está pasando? Miren, el piano está cambiando de


color.
Melodic Heart: De color rojo, ¿qué está pasando? Mi magia no es esa.
Emperatriz Lawer: No solo eso, miren aparte del piano, la ropa que
carga puesta Kerf también está cambiando de color y ese polvo que desprende
el piano no solo está en Kerf, sino también en toda la habitación, ¡increíble!
Mis sentimientos y pensamientos se hicieron uno solo llevándome a crear
una magia más poderosa que la de Melodic, la magia de Melodic consiste
en transmitir los sentimientos al tocar el piano con tus manos, la melodía
que generes es la que tus sentimientos cuenten y el piano lo reflejará a quien
esté oyendo la melodía, así mismo quien esté escuchándola podrá ver las
ilusiones que solo el pianista y el mismísimo piano compenetrados uno al
otro crean haciendo que la persona pueda sentirse de diversas formas, con
mucha paz y otros sentimientos en su totalidad o el mismo sentir de quien
toca la melodía.
Magnus Louis: Creo que sí superó tu magia.
Melodic Heart: Está en el nivel de mi mentor, cuando me estaban
enseñando esta magia solo podía tocar el piano nada más, pase día y noche
practicando y aun así no logré perfeccionarla como se debía. Esta magia se
llama “rapsodia de los reyes”, cuando mi mentor me contó y me explicaba
esta magia era fascinante escucharlo, se decía que quien creó esta magia tan
potente podía dominar los sentimientos de las personas a su antojo, podía
curar, sanar y hacer que las personas tanto malas como buenas se sintieran
felices, él contaba que es una magia ilusoria, quien cree ilusiones puede
llevarlas a la realidad misma es decir, en este momento Kerf puede hacer que
cualquiera de sus ilusiones se haga realidad.
Magnus Louis: ¿Y dices que tu magia es la más débil?
Melodic Heart: Yo no me encuentro a nivel de ustedes, solo pude dominar
pocos hechizos, mi mentor la dominaba, pero no a la perfección, me enseñó
todo lo que sabía sobre esta magia y este fue el resultado que obtuve, por eso
me encuentro en un nivel más bajo que el de los otros ocho fantasmas.
Emperatriz Lawer: Al parecer, Kerf la está dominando muy fácil, digno
de ser quien creemos que es.
Me dejé llevar como nunca lo había hecho, sentía cómo la magia de
mis sentimientos llenaba cada rincón de la habitación, era indescriptible la
sensación de saber que era yo el que generaba melodía a través del piano y
aun así sabiendo que era por el collar.

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¡Aeón! Una vida prohibida

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Comprendía que el solo hecho de hacer lo que nunca pudiste creer,
iluminaba cada pensamiento único y verdadero, llevándolo a mi corazón
junto con mi mente y allí entendí que era momento de tocar la melodía que
llevo por dentro y la denominé “Las ilusiones del alma”, llené mis manos de
ese sentimiento y el piano tomó su color, mi atuendo cambió por completo
a aquel traje que usé en mi encuentro con el caballero que desconocía y sin
importarme nada me dejé llevar por él siendo el baile más hermoso, con la
persona que no pude saber quién era pero sabía que era alguien especial,
cambió todo mi atuendo transformándolo a uno de color blanco con rojo y
dorado, como de un rey; el color rojo representa para mí ese amor apasionado
por las cosas que hago, el color dorado representa el valor de ello, era mi
momento de expresar todo lo que soy a través del piano y así fue como
realicé la magia de Melodic “Rapsodia de los reyes”.

(Lirio de Luna, año 2016)


Melodic Heart: ¡Demuéstrame tus verdaderas ilusiones!
Abrí los ojos y la miré con una sonrisa, demostrándole las ilusiones de
mis sentimientos.
Magnus Louis: ¿Qué es eso brillante que desprende el piano?
Melodic Heart: ¡Polvo del ilusionista! solo una conexión grande entre el
instrumento y la persona puede generarlo, sin esa conexión no se genera eso.
Tocaba la misma canción que me tocó el enmascarado, comprendí en ese
momento que él también conocía esta magia y fue la manera que utilizó para
comunicarse conmigo o hacerme sentir lo que quería que yo sintiera.
Kerf Sylver: Entiendo, él usó esta magia para comunicarse conmigo, Las
personas, los atuendos, el lugar y aquella orquesta fueron sus ilusiones, ahora
soy yo quien quiere tocar para ti, aunque no estés, aunque no te conozca, ni
sepa quién eres ¡esta melodía es para ti!

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Por mucho tiempo creí que existía una persona o mejor dicho un hombre
que fuera diferente a los demás, en el transcurso de mi vida mucho sabía por
mi condición de ser homosexual, fui criticado, fui excluido, fui rechazado,
señalado e incomprendido. En la sociedad nosotros no encajamos porque
piensan que somos una clase de extraterrestres, pero para otros simplemente
tenemos una enfermedad y la gran mayoría no sabe que somos personas tan
123
Beiker López

normales, soñadores y creyentes en lo imposible. Un homosexual combate


contra la sociedad, contra su familia y hasta con uno mismo en este mundo
que no es fácil para nosotros, pero tampoco imposible vivir, simplemente
vivimos el día como el último e intentamos demostrarle a todos lo que
valemos como personas y en el amor es más difícil aun encontrar a alguien
que corresponda a tus verdaderos sentimientos.
En mi vida siempre pensé que el amor vivía solo en mis fantasías
apostándole a que algún día llegaría ese ser que transformaría en un momento
único a un momento indescriptible, ese día llegó cuando por primera vez
soñé con él, aunque fuera un simple sueño lo sentí real y aunque no fuera
real lo sentí verdadero.
Para mi familia fue difícil pero más para mi madre, ¡lo sé! Cada madre
sueña que un hijo le brinde una familia, cada madre ve a su hijo como un
héroe y como un futuro hombre en la sociedad con principios y valores, para
una madre no es fácil aceptar que su hijo no es como desea en su mente,
se rompe ese paradigma que existe socialmente pero el amor de una madre
es más grande que el deseo que pueda tener y mi madre me aceptó tal cual
como era ¡claro está! pasaron años para que lo entendiera y yo me encargué
de explicarle con mis acciones lo que en realidad soy, por palabras y por
medio de mi forma de ser, que me viera como el hombre que soy actualmente
amándome por sobre todas las cosas. Mi padre solo hizo caso omiso y vivió
así siempre y para mis hermanos era simplemente su hermano.
Por eso les digo que el ser humano puede ser quien es sin miedo a ser
juzgado y luchar por los sueños que guarda en su corazón…

(Lirio de Luna, año 2016)


Todo el lugar estaba lleno de un brillante polvo dorado que fue tomando
forma, el polvo cubrió toda la habitación transformándolo en el mismo lugar
de aquel en el sueño donde por primera vez bailé un vals, sabía que él no se
encontraba pero seguía tocando con mucha pasión con tan solo pensarlo, en
el medio de todo el polvo dorado se hizo una fuente que expulsaba el agua
hacia arriba, luego de eso se dispersó por todo el lugar y en cada ciertos
espacios hizo parejas todas con máscaras como si fuese un verdadero baile
de la realeza, en ese momento mientras tocaba recordé aquel sueño de nuevo
y en mi mente comencé a hablar.
Kerf Sylver: Mientras toco cada tecla de este piano, teclas que retumban
en mis pensamientos y mi corazón de ilusiones, mis oídos son sordos para
no escuchar lo que sé que me dirán, aun así, sigo tocándolas una por una
creando una escalera que me lleve a donde estés y volvamos a bailar como

124
¡Aeón! Una vida prohibida

aquellos niños que desconocen el tiempo de terminar de jugar, así mismo


quiero ser ¡para desconocer el tiempo de bailar junto a ti! Como en aquel
sueño donde te conocí. Dejaré que mis sentimientos sigan tocando las teclas
que me hagan una escalera para estar junto a ti, aunque ¡solo seas parte de
un sueño!
El polvo cubrió todo mi cuerpo haciendo una silueta de mí, al crearse
se quedó sentada tocando por mí, yo me levanté del piano caminando
cerca de la fuente que se había creado. Tenía un traje, de color rojo con
dorado, digno de un príncipe, y una capa que se arrastraba hecha de cuero
y diamantes incrustados, los fantasmas estaban tan anonadados con todo lo
que veían, ni yo mismo me conocía en ese momento dejándome llevar por
mis sentimientos, era libre; me sentía libre de expresar lo que quería y lo que
siempre había imaginado, caminando les hablé a los fantasmas.
Kerf Sylver: ¡Melodic, Emperatriz y Magnus! Esta es la melodía de mi
ser, quiero que bailen también como todas estas ilusiones que ahora toman a
su pareja de las manos y danzarán.
Al llegar a la fuente extenndí mis brazos y diciendo “que comience
el baile” todas las ilusiones comenzaron a danzar como si amaran bailar
haciendo círculos alrededor de la fuente, mientras tanto yo solo escuchaba el
piano, un aire de paz, de pasión, de felicidad recorría en todo mi ser.
Magnus Louis: ¿Desea bailar conmigo Madan?
Emperatriz Lawer: ¡Acepto caballero!
Se unieron al vals, de puro piano, que sonaba; Melodic se encontraba sola
admirando todo lo que yo había creado, le sonreí haciendo que el polvo creara
al frente de ella su amado Christian haciéndole una reverencia pidiéndole
que bailara con él, a Melodic se le humedecieron sus ojos, me miró como
diciéndome un “gracias” y yo con un parpadear de mis ojos le respondí,
todas las ilusiones de las parejas que bailaban tenían mascaras como en mi
sueño excepto los fantasmas, Christian y yo; con mi mano derecha hice un
chasquido y automáticamente generando la orquesta para hacer un baile
más completo, violín, arpa, flauta, chelo y todos aquellos instrumentos que
componen un vals.
Kerf Sylver: Solo me faltas tú para que este baile sea perfecto.
Cerré mis ojos, un suspiro salió desde el alma, me uní al vals bailando
solo, la orquesta estaba tan sincronizada que no me importaba bailar solo, era
hermoso escuchar el vals que te hace sentir que vuelas, un vals que hace que
el cuerpo se te erice e imaginando como bailaba con esa persona que anhelas.
Contaba cada uno de los pasos que daba, uno, dos, tres y un, dos, tres. Al
125
Beiker López

abrir los ojos veía que los fantasmas lo estaban disfrutando y que a pesar de
que eran unas ilusiones las parejas también se veía que disfrutaban del baile
y eso me hacía sumamente feliz, de tantas preocupaciones salió un momento
diferente que alegró mi vida.
Simplemente bailaba y me dejaba llevar por la orquesta que tocaba un
hermoso vals, abrí mis ojos, me sentía inmensamente feliz de ver a todos
disfrutando de esta gran magia que generaba mi propio ser, que corría por
todo mi cuerpo como si no hubiera un fin, una enorme sonrisa brotó en mi
rostro, el polvo generó millones de mariposas de todos tipos y tamaños que
volaban por todo el lugar bailando conmigo y los demás.
Magnus Louis: ¿Mariposas?
Emperatriz Lawer: ¡Así es! Está dejando fluir su magia, se dice que
cuando una magia es tan pura toma forma de animales representando
la personalidad de quien la usa, cada animal tiene su sentido y su razón,
las mariposas simbolizan libertad, buenaventura, unión y esos deseos que
quieres hacer realidad. Por eso las mariposas.
Melodic Heart: Parecen estrellas iluminando todo el lugar.
Ahora Siento que todo tiene un sentido y un porqué el cual era mi llegada
a este pueblo, ya veo que todo en la vida tiene una razón de ser y esta vez
la mía era darme cuenta que no es malo creer en lo que es imposible, que
no es malo pensar en las cosas inexistentes, pues la vida te lo demuestra
de alguna manera de que en realidad todo puede ser posible, me encuentro
bailando en una habitación de una posada, donde me han pasado muchas
cosas extrañas pero debo admitirme que son geniales, la magia, fantasmas,
bailes, caballeros y más que nada el piano me han dado un regalo llamado
“creer” en que todo es posible, que sí existen esas cosas irreales y no son tan
malas; ¡es hora! de realizar mi mejor magia porque la verdad solo existe un
día, un momento, una hora y un segundo es decir que solo existe ¡una vida!
y la quiero disfrutar como nunca creando el mundo que siempre quise ver.
–Quiero llevar esta magia a un nivel más alto, ¿cómo la llamaría? Ahora
que recuerdo en la biblioteca vi un libro llamado “Aeón” por qué no llamar
a mi propia magia de esa manera, esa palabra significa “ser”, “la vida”, “un
periodo de tiempo” y “eternidad” pues ahora siento que estoy dejando salir
ese ser que he ocultado siempre, ahora quiero darle a la vida algo más, este
periodo que he estado aquí me ha ayudado a comprender muchas cosas y
quiero llevar este momento tan mágico a la eternidad y si alguna vez puedo
usar esta magia para aquellos que no pueden ser quienes realmente son y
dejar de ver esa vida como prohibida. Así que mi magia la llamaré ¡”Aeón:
una vida prohibida”.

126
¡Aeón! Una vida prohibida

Al decir eso, todas las mariposas hicieron una explosión junto con los
que bailaban y miles de partículas brillantes iluminaron la habitación,
se formaron en infinitas ilusiones, cada una representaba el mundo de mi
cabeza, personas tomadas de la mano, sin ningún racismo ni rechazo, fueran
del mismo sexo o no, la libertad, montañas, animales, paisajes, arboles, ríos,
flores, infinitas ilusiones se manifestaron mientras yo bailaba sin parar.
Emperatriz Lawer: ¡Creo que el alumno superó a su maestro!
Melodic Heart: ¿Aeón: una vida prohibida? Excelente…
Magnus Louis: Creo que esta será una gran noche mágica

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Así fue como liberé una magia que se encontraba dentro de mí, desconocía
la verdadera fuente de ella, solo creí en las palabras de esos fantasmas que
me decían que yo tenía un don único y que era diferente a los demás, al tocar
el piano y sentir cómo lo tocaba era como si cumpliera un sueño que di por
perdido, tocarlo era la felicidad plena, la verdad no sé con qué compararla,
solo sé que es algo increíble.
Ese día los males se fueron como si no hubiesen existido, me olvidé del
mundo por completo y solo era yo con la magia que había descubierto, esa
noche liberé todos mis sentidos al máximo y creé diversas ilusiones que me
hacían feliz y comprendí que la felicidad siempre aparecerá en cualquier
momento así estés pasando por uno malo, la felicidad llega a tu vida en
cualquier segundo y te llena de sonrisas, te motiva a hacer grandes cosas y
sentir que eres rey o reina del mundo entero.
Lo que te apasiona, las horas, los minutos y los segundos pasan volando
sin que te des cuenta, supongo que es algo de la magia misma que acelera el
tiempo. Sin duda alguna ha sido una de las experiencias más hermosas de mi
vida, he tenido muchas en todo el transcurso de lo que he vivido, conocer ese
pueblo, conocer esa posada y conocer a esos fantasmas fue una enseñanza de
vida como tal, todo tiene una razón de ser y cada persona interpreta lo que le
sucede sea bueno o malo a su manera, pero les digo que nada es más hermoso
que sacarle el lado positivo a esas cosas, yo aprendí demasiado estando allí y
si pudiera volver a donde esté yo iría sin pensarlo dos veces, reviviendo esas
aventuras para aprender de ellas nuevamente, considero que aún me falta
mucho para comprender muchas cosas, la vida jamás es comprendida puesto
que ella tiene su propia manera de decirte o enseñarte lo que necesitas para
que veas mejor tu perspectiva.
Muchas personas creen que las cosas malas que les suceden es porque

127
Beiker López

es un castigo divino, porque se lo merecen o sencillamente le tocaba, sé que


muchos de los que están aquí han pensado de esa manera alguna vez, puedo
apostarle mucho que alguno de los que han pensado así ya han entendido
del por qué le sucedió eso, todo tiene su momento y todo tiene su lugar,
solo dejen que la vida les demuestre poco a poco y a su manera lo que es
bueno para ustedes, lo que les enseñará a vivir mejor, a pensar mejor y actuar
mejor en las circunstancias, yo no estoy aquí sentado hablando con ustedes
simplemente por hacerme un famoso escritor de muchos libros como lo es el
que tienen ahora en sus manos, para eso pasé muchas adversidades, muchas
dificultades que en ese momento nunca entendí, no las entendí y aún hay cosas
que no entiendo por qué pasaron pero puedo decirles con mucha seguridad
que gracias a todo eso puedo darles muchas reflexiones como estas.
El anterior Kerf Sylver, no sabía que la vida era tan perfecta, no sabía lo
que era creer en lo que más deseas, no sabía vivir el presente como nunca y
más que nada amar a quienes se te presentan en la vida…

(Lirio de Luna, año 2016)


May Castell: ¿Dónde estará Kerf?
Ransus Cruz: No lo sé, no lo he visto desde que llegamos aquí.
May Castell: ¡Qué extraño! Iré a ver si está en nuestra habitación
durmiendo.
Desperté abriendo los ojos lentamente, me encontraba en mi habitación,
recordé lo que había pasado esa noche y me generaba una sonrisa, pero hasta
cierto punto no recordaba por ejemplo cómo llegué a mi habitación y cómo
me dormí o cómo terminaron las cosas, solo sé que fue una experiencia
única. Al momento May tocó mi puerta.
Kerf Sylver: ¡Adelante!
May Castell: ¡Aquí estás! Dónde has estado, no te veía desde ayer Kerf,
todo el mundo está en los preparativos para el festival que es esta noche.
Kerf Sylver: ¿Es esta noche?
May Castell: Pues a mí también me pareció muy extraño, pero parece
que lo adelantaron por algún motivo.
Kerf Sylver: Tomaré una ducha y luego te contaré algo que sucedió ayer
en la noche.
Me levanté para tomar una ducha, cepillarme, arreglarme para salir y
ver en qué podía ayudar para el festival, al verme en el espejo del baño
tenía un semblante diferente al que tenía cuando llegué, mis ojos brillaban

128
¡Aeón! Una vida prohibida

y la felicidad brotaba de mí, solo me observaba y sonreía, pues en mi mente


pensamientos brotaban, particularmente uno era el que más estaba en mi
cabeza.
Kerf Sylver: Hacía mucho tiempo que no me sentía tan bien, es una
felicidad diferente no es la misma de cuando te dan un regalo, no es la
misma felicidad cuando comes lo que más te gusta, es la felicidad llamada
“amor propio” ahora entiendo, cuando te aceptas tal cual eres y te amas a ti
mismo por lo que eres, sientes una felicidad única y diferente, ayer mientras
realizaba esa magia me di cuenta de que debo ser quien soy sin miedo y
por ello esas ilusiones fueron transmitidas al piano haciéndose realidad, me
acepté tal cual como soy, en ese momento me convertí en el rey de mi propio
destino y amando la vida como debe amarse.
Sonriéndole al espejo, salí del baño observando toda la habitación, nunca
había estado tan feliz de visitar un lugar, al mirar el techo vi el dibujo de
letras desconocidas, un animal parecido a un elefante y una silueta de una
mujer.
Kerf Sylver: Aún sigue siendo un misterio toda esta posada, esos dibujos
deben significar algo.
May sentada en la cama miró hacia el techo contemplando lo mismo que
yo.
May Castell: También pienso lo mismo la verdad, debe haber un
significado en ese dibujo.
May me observó detalladamente e hizo una expresión de asombro.
May Castell: Te veo diferente.
Solté una carcajada y me fui a ponerme la ropa, May quedó extrañada de
mi carcajada.
Mary Castell: ¡Bueno! Debió pasarle algo excelente para andar tan feliz.
Fui al closet a buscar mi maleta para poder conseguir ropa y vestirme, para
mi sorpresa encontré un closet lleno de ropa, zapatos, camisas, pantalones y
accesorios de todo tipo para hombre, había una nota pegada al techo del closet
la cual decía “Kerf todo esto es para ti, agradecidos contigo de brindarnos
una felicidad y una esperanza Att: Melodic Heart” quedé sorprendido.
May Castell: ¡APÚRATE QUE NOS ESPERAN! Aparte quiero que me
cuentes qué te sucedió.
En el camino hacia el jardín le fui contando todo lo que había sucedido,
le conté sobre la maldición del piano, la historia de Melodic, la historia de
129
Beiker López

Magnus y la práctica de Emperatriz. Las ilusiones, la magia y todo lo que


sucedió, May solo sonreía y se sorprendía de la manera como se lo contaba
tan entusiasmado y tan feliz que ella se contagió de esa felicidad plena.
Kerf Sylver: Ahora falta conseguir el piano que está maldito para romper
esa maldición que tengo y que tiene preso a esos fantasmas, por cierto
¡gracias! May sé que me crees cada una de las palabras que digo por eso eres
mi mejor amiga.
May Castell: Siempre te creeré, y tranquilo ese piano lo vas a conseguir,
estoy segura que romperás esa maldición, ahora que usas magia será todo
más fácil para ti.

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


La vida siempre te brindará una persona que será tu mejor aliado para
todas tus cosas, será fiel a tus creencias y jamás te abandonará en la vida por
más difícil que parezcan las cosas.
May para mí es la persona que considero como mi mejor amiga pero más
que eso es como mi familia, para muchas personas esos aliados que nos brinda
la vida también son nuestros mismos hermanos o hermanas y para otros hasta
un animal doméstico. La verdad de todo es que la vida siempre te regalará lo
esencial para que seas feliz, en mi caso a pesar de saber que podría morir por
una maldición me sentía feliz de haber ido hasta esa posada y experimentar
cosas excepcionales de las cuales aprendí demasiado y las llevé a la realidad,
ahora yo les digo a ustedes que sé que hay muchos jóvenes aquí fanáticos de
mis libros, vivan el día a día como si fuera el más maravilloso del mundo,
no se rindan en el camino a lograr lo que más quieren, nunca dejen que
sus ilusiones mueran y jamás dejen de soñar puesto que lo más hermoso de
la vida es soñar, amar y disfrutar de esos pequeños pero al mismo tiempo
gigantescos placeres que te da la vida misma; ¡recuerda! que la vida es una
sola y siempre hay que vivirla al máximo. No importa las circunstancias que
puedan estar pasando, simplemente sonrían que eso es una enseñanza de vida
que más adelante ustedes van a pasar de generación en generación, de mamá
a hijo, de padre a hijo, de tío, de amigo, de esposo o de hermano. ¡Ser Felices
sobre todas las cosas!
–Aplausos–
Me enorgullece enormemente venir y contarles la verdadera historia de
estos libros que he escrito, la historia no ha terminado allí, aún falta contarles
sobre el famoso festival.
(Sonrisa)…

130
¡Aeón! Una vida prohibida

CAPÍTULO 9

Un hechizo de sacrificio
(Biblioteca Ranhze, año 2057)

Era el día del festival del pueblo, la razón por la cual viajamos, jamás me
hubiera imaginado encontrarme con tantas aventuras y había llegado el día
en el cual aquel mito se haría realidad. La verdad estaba emocionado, pero al
mismo tiempo estaba un poco nervioso puesto que me preocupaba un poco
el no encontrar el piano que rompía la maldición.

(Lirio de Luna, año 2016)


Caminando le contaba a May que usé mi magia por primera vez, magia
que aprendí gracias a Melodic y que hizo una noche totalmente hermosa
creando aquel sueño que tuve el primer día al llegar aquí, lo llevé a ilusiones
en toda habitación, pero solo faltaba aquel personaje que hasta el momento
desconozco su rostro, aquel personaje que hizo que mi corazón latiera
fuertemente con tan solo sostener mi mano.
Kerf Sylver: A veces pienso que estoy loco y que todo esto simplemente
son cosas que mi mente me juega, no te niego que me gusta, pero al mismo
tiempo no sé si es algo real, tú no puedes verlos ni sentirlos. ¿Qué crees tú?
May Castell: Yo también vi el piano maldito, ¡lo vimos los tres! Ransus
también lo vio e intentamos tocarlo y no pudimos, pero tú sí pudiste.
Kerf Sylver: Había olvidado que en ese momento estábamos los tres.
May tú también estás maldita y Ransus igual.
May Castell: Ahora sí me preocupé. Quiere decir que yo también voy a
morir.
Kerf Sylver: ¡Tengo que encontrar ese piano! Vamos hacia la habitación
donde lo vimos por primera vez.
Fuimos corriendo a la habitación donde se encontraba el piano que May
ni Ransus pudieron tocar; mientras íbamos caminando con mucha prisa nos

131
Beiker López

topamos con la señora Lidia quien nos preguntó hacia dónde nos dirigíamos,
la señora Lidia como siempre vestida elegantemente y con una mirada muy
determinante que intimidaba, pero al mismo tiempo se veía que ella contenía
una gran seguridad en sí misma.
May Castell: Nos dirigimos a una habitación donde está un piano que
queremos ver.
La señora Lidia nos miró como si supiera a dónde nos dirigíamos, pero
solo omitió la respuesta.
Lidia Osbel: ¡Entiendo! Pero no hay tiempo para andar jugando
en este lugar, hoy es el festival y quiero que todo salga perfecto ¡odio la
desorganización! Y más que nada que las cosas no salgan como yo espero y
organizo, así que por favor necesito que me ayuden a mover algunas cosas.
Posó su mirada fijamente en nosotros y no pudimos decirle que no y
aceptamos.
May Castell: Sí señora Lidia.
Lidia Osbel: Lo de su piano puede esperar, dejaré que los chicos del
festejo muevan las cosas, diríjanse hacia el jardín y ayuden con la decoración,
alguien está esperando por su ayuda.
Nos dirigimos para el jardín, yo la observé como diciéndole que sabía que
no quería que fuera a esa habitación y la señora Lidia solo me miró y volteó
la mirada hacia un cuadro que allí se encontraba, ya alejada de ella…
Kerf Sylver: May es mi impresión o ¿la señora Lidia no quería que
fuésemos a esa habitación?
May Castell: Yo también me percaté de eso, pero es la dueña de la posada
y nos ha tratado muy bien, no podemos decirle que no.
Kerf Sylver: Siento que hay algo raro en ella también. ¿Habrá más
secretos?
Todo indicaba que había secretos en todos los que conocía o esa era mi
impresión, de igual forma nos dirigimos May y yo hacia el jardín ya que
según la señora Lidia nos esperaba alguien para que le ayudáramos.
May Castell: ¿Quién será? Me intriga.
Kerf Sylver: ¿Te refieres a la persona que dijo la señora Lidia?
May Castell: Sí.
Miré a May y solo seguí caminando sin responder, sabía que sería otra
persona con algún otro misterio en ella o quizás era alguien común y corriente;
132
¡Aeón! Una vida prohibida

al pasar por el comedor no presté atención en él solo caminé en dirección al


jardín, pero percibí que había alguien con traje oscuro sentado en la mesa.
Kerf Sylver: ¡May espera! me pareció ver a alguien en la mesa del
comedor ¡déjame ver!
Efectivamente al regresar para ver quién estaba sentado en la mesa
del comedor, no había nadie, solo me dije que tal vez era parte de mi
imaginación, al seguir caminando por el pasillo ya casi llegando al jardín
escuché las tonadas de un piano, me paralizó de inmediato y miré a May
como sorprendido
Kerf Sylver: ¡Escucha!
May Castell: ¡Es un piano!
No pude evitar salir corriendo por los pasillos tras escuchar las tonadas
de un piano, mientras más corría, más me acercaba a donde se generaban
las tonadas, al llegar a una sala que no había visto antes, como siempre todo
viejo como si nadie hubiese vivido en ese lugar, al mirar arriba de una repisa,
estaba un radio muy viejo el cual producía esos sonidos.
Kerf Sylver: ¿Qué será esta sala? Lo más probable es que sea otro
fantasmita que quiere hablar conmigo y decirme que soy el elegido y bla,
bla, de paso no es el piano sino ese radio que da las tonadas.
Estaba cansado por haber corrido en busca de un piano que en realidad
era un radio viejo que producía la melodía de un piano.
Kerf Sylver: Esa canción la conozco, si no me equivoco es…
Antes de decir el nombre de la canción que sonaba May llegó para decirme
que nos esperaban.
May Castell: ¿Encontraste el piano? Debemos apresurarnos ya nos
esperan.
En ese preciso momento el radio dejó de reproducir la melodía, volteé a
mirar aquel radio viejo lleno de polvo pensando en qué habrá sido y el por
qué se encendió.
Kerf Sylver: Solo era mi imaginación, vámonos.
May Castell: ¿Tu imaginación? Si yo también lo escuché
Kerf Sylver: Si, pero llegué aquí y no había nada.
Nos dirigimos de nuevo al jardín para así ayudar a la persona que la señora
Lidia dijo que nos esperaba, pero al avanzar sentí una extraña sensación la
cual me estaba perturbando mucho, el cuerpo se me erizaba cada vez que
caminaba.
Kerf Sylver: Ten cuidado.

133
Beiker López

May Castell: ¿Por qué, qué pasa?


Kerf Sylver: Desde que salimos de la sala, he sentido cómo mi cuerpo se
eriza y cada vez que avanzamos la sensación es más grande y no tanto eso,
también siento frío este pasillo, así que no sé qué pueda haber más adelante
¡ten cuidado!
May solo me observó de manera un poco preocupada y seguimos
avanzando por el pasillo para ir directo al jardín donde nos esperaban,
adelante estaba el pasillo, el de la derecha era para ir hacia la cocina y el de
la izquierda hacia las habitaciones de la posada y mucho antes de llegar salió
una mujer vestida totalmente de negro, muy alta con el cabello ondulado y
su piel era pálida, aquella mujer cargaba un vestido muy elegante lleno de
piedras brillantes en color azul, tacones negros y en su cabello una tiara con
piedras negras, al salir de perfil en el medio de los dos pasillos, tenía sus
manos agarradas en el medio de su vestido, entre ellas una rosa negra, el
pasillo se tornó totalmente helado y nosotros mismos quedamos paralizados
al verla.
¿?: No sabes cuánto he sufrido, no sabes cuánto he llorado, esta inmensa
tristeza que llevo nadie me la ha podido quitar, ¿díganme cómo me la quito?
explíquenme por qué pasó, por qué todos murieron, ahora cargo una rabia
inmensa de no poderme quitar este luto pero qué van a entender ustedes si
los he observado desde que llegaron hasta aquí felices y tienen calidez en sus
cuerpos mientras yo solo cargo frialdad en el mío.
Al hablar tenía una dulce voz, pero al mismo tiempo daba mucho
escalofrío escucharla, solo observaba la rosa negra como lamentándose de
muchas cosas, pero al mismo tiempo parecía no tener sentimientos algunos.
Kerf Sylver: ¿Fuiste tú quien me hizo ir hasta esa sala cierto?
Fue mirándonos poco a poco hasta voltear totalmente su cabeza, un rostro
muy hermoso casi de porcelana, pero sus ojos eran muy vacíos que daban
miedo, al mirarnos al toque desapareció como polvo y reapareció justo frente
de mí.
¿?: ¡Sí fui yo! Ustedes son mis invitados especiales.
Me miró fijamente y luego volteó a mirar a May que se encontraba
aterrorizada.
¿?: ¿Me tienes miedo, tan tenebrosa soy?
Al decir eso desapareció nuevamente, esta vez reapareció detrás de
nosotros dándonos la espalda.

134
¡Aeón! Una vida prohibida

¿?: ¿Han escuchado la triste historia de una dama y su caballero que


le tocaba a su amada para así demostrarle lo mucho que la amaba?; un día
desapareció ese caballero y su amada locamente lo buscaba para escucharlo
tocar todos los días, esa mujer nunca le confesó su amor que llevaba guardado,
día tras día lloraba y cargaba un sufrimiento enorme por su pianista, ya no
sabía qué hacer con tantos sentimientos negativos, un día llegó una carta y
¿quieren saber que decía?.
No podía creer lo que mis oídos estaban escuchando, estaba totalmente
aterrado, pues ya sabía de quién se trataba y mi cuerpo no dejaba de temblar
ni un segundo, recordé la carta que me había dejado Emperatriz Lawer de
aquel mito del pianista y su amada, le respondí tartamudeando pues no
paraba de temblar, pero antes de yo responderle May lo hizo primero pero de
una forma muy extraña.
May Castell: Por supuesto doncella.
Al May responder de esa manera la miré y se encontraba en un estado
como de maniquí, no se movía, no pestañaba, solo miraba fijo y no había
gesto ni reacción alguna.
–Tu amiga es un amor, les contaré lo que decía la carta, en ella estaba
escrito un mensaje de aquel amado pianista para su doncella el cual decía:
“Amada mía, perdóname por dejarte sola y no avisarte el por qué, solo
te pido perdón, pero hay una razón y por eso te mandé esta carta, antes debo
decirte que apenas leas esto ya estaré muerto mi amor.
Cuando era niño yo fui abandonado por mis padres en un callejón, sufrí
mucho, pasé hambre, lluvias y rechazo por las personas, un día una mujer
se acercó a mí dándome un pedazo de pan luego de días sin comer y al yo
tomarlo me desmayé, cuando desperté me encontraba en una mansión y a
mi lado estaba esa mujer que me dio el pan, ella me adoptó y me dio un
vivir diferente al que mis padres biológicos me dieron al abandonarme, al
tiempo esa mujer me llamó y dijo que tenía que decirme un secreto que
debía guardar, el cual era que ella era una bruja muy poderosa y el por qué
me adoptó, necesitaba un aprendiz para dejar un legado y ella decía que yo
tenía un poder muy especial, me enseñó todo tipo de magia y en especial una
llamada “rapsodia de los reyes” una magia tan potente que pude dominar
y mi instrumento obviamente es el piano, practiqué mucho esta magia mi
querida pero había algo que no dejaba perfeccionarla y es que cuando tocaba
la melodía el piano generaba una melodía de rabia, frustración, odio y al
momento de tocar todos esos sentimientos me invadían y creé una melodía
maldita a consecuencia de esos sentimientos, esa melodía la llamé “la

135
Beiker López

maldición del piano viejo”; quien escuche esa canción va a ir muriendo poco
a poco, aquella mujer que me cuidó, me crió, me escuchó tocarla y a los días
murió, pensaba que ya el piano estaba maldito por tanto tocar esa melodía
pero no fue el piano el que lo estaba, era yo y lo maldije al tocar esa canción.
Aquella mujer antes de morir me dijo que la única forma de romper esa
cadena era buscar un amor único y verdadero que suprimiera los sentimientos
internos negativos y creara unos nuevos y en búsqueda de ella te conocí a
ti, gracias a ti cambié esos sentimientos negativos por unos positivos por el
amor tan grande que te tenía, pude crear una melodía tan potente capaz de
contrarrestar la que mi otro yo resentido creó, está guardada en el piano que
está en nuestro hogar, por favor guárdala y cuídala como nunca porque esa
melodía representa el amor verdadero que uno puede sentir por una persona,
objeto o cosa existente, ¡te amo con todo mi corazón! No me busques no me
podrás encontrar, la mujer que me cuidó tenía un hermano que me odió por
la muerte de su hermana y es tan poderoso que me enfrenté una sola vez a él
y casi salgo muerto de ese combate.
Hace días me amenazó con matarte si no me enfrentaba a él a vida o
muerte y prefiero mil veces morir yo que verte a ti partir, no me lo perdonaría
jamás es por eso que te he dejado sola para afrontar una realidad que venía
desde hace tiempo arrastrando. Te amo nunca lo olvides…”.
¿?: Un mensaje bastante trágico para aquella doncella ¿no creen? Que su
amado la deje por morir por ella ¡una historia tan romántica!
No podía creer lo que ella estaba contando, las últimas palabras que ella
dijo me sonaron muy sarcásticas.
Kerf Sylver: No puede ser, ¿la rapsodia de reyes es tan poderosa así?,
además cómo ella sabe lo que la carta decía.
Sentí cómo desapareció y al momento reapareció delante de mí de
espalda, caminando a los pocos pasos se detuvo y fue volteando para verme
lentamente con unos ojos llenos de furia que derramaban lágrimas y su cara
demostraba un enfado muy grande.
¿?: ¡Explícame! ¿Por qué no confió en mí? ¡Lo amaba! ¿Por qué no me
contó nada?
Mi cuerpo temblaba de una manera incontrolable, al notar quién era ella.
Kerf Sylver: ¡ERES TÚ!
Desapareció del lugar y solos sus palabras se escuchaban.
¿?: ¡ASÍ ES! Soy esa doncella que abandonaron sin dar explicación, no
sabes el sufrimiento que pasé por él, no sabes la frustración que es amar a una
136
¡Aeón! Una vida prohibida

persona y no tenerla más, no confesarle el amor, la rabia me domina cada vez


que pienso en ello, he estado esperando vengarme de quien lo asesinó ¡LO
QUIERO MATAR CON MIS PROPIAS MANOS!
Las cosas que estaban alrededor, cuadros, jarrones, lámparas y todo
objeto que se encontraban en ese pasillo se quebraban delante de la ira de
este espectro, sentía un enorme poder malévolo dentro de ella que abrumaba
con tan solo estar cerca de esa mujer, llena de malignos sentimientos de
destrucción y una oscuridad se apoderó del pasillo, me sentía aterrorizado.
¿?: ¡Mi querido Kerf! ¿Buscas mi piano para salvarte de mi maldición?
Se escuchaban pasos de tacones en todo el pasillo, intenté hacer alguna
magia, pero mi concentración no era posible.
Sandria Vermillión: ¿Magia? ¡La deseo ver! Mi nombre es Sandria
Vermillión y soy la hija de la hechicera que cuidó a mi gran amado,
¡ESMERALDA!
Kerf Sylver: ¿Eres la hija de la diosa de las rosas Esmeralda? ¿Por qué
todos me quieren matar, qué les he hecho? ¡DIME!
Aparecieron dos ojos de color rojo carmesí al frente de mí y me respondió.
Sandria Vermillión: Porque eres un elegido y no puedo permitir que
cumplas tu destino, pero ya cumplí con maldecirte con mi magia, al saber que
murió mi amado decidí aprender la rapsodia de reyes, ya tenía conocimientos
de hechicería por mi madre y maldije al piano para que quien escuche cuando
toque muera a los días, la canción la tengo yo y si quieres tomarla tendrás que
luchar contra mí con magia muy poderosa, pero ¿sabes qué? Te la daré, pero
jamás encontrarás el piano.
Desapareció con una risa macabra y la oscuridad que se había apoderado
del lugar también se iba poco a poco, me pude mover y busqué a May para
ver cómo se encontraba, para mi sorpresa estaba tirada en el suelo y en su
mano sostenía un pergamino.
Kerf Sylver: ¡Despierta!
De momento la voz de Sandria se escuchó en todo el pasillo.
Sandria Vermillión: Apresúrate en buscar el piano, adelanté la muerte de
todos para esta noche, al yo tocar el piano todos morirán lentamente, todos
van a morir.
Una agonía dentro de mí surgió al escuchar esas palabras, May no
despertaba parecía estar inconsciente y su cuerpo estaba helado sin signos
vitales. Me encontraba al borde del estrés y lágrimas salían de mis ojos
137
Beiker López

desesperadamente al solo pensar que Sandria de alguna manera le había


quitado la vida a May.
Kerf Sylver: ¡Despierta por favor! no te puedes morir así por así, por
favor no me dejes solo en esto.
May aun así no reaccionaba ni su cuerpo pálido recuperaba el color. En
ese momento llegaron corriendo Ransus y la señora Lidia muy apresurados,
al ver a May tirada en el suelo sin signos vitales y yo desesperado porque no
despertaba, enseguida me ayudaron.
Lidia Osbel: ¿Qué le pasó a May? escuchamos unos gritos y vinimos lo
más rápido
Ransus Cruz: Esto es obra de algún fantasma ¿cierto?
La señora Lidia nos miró y al instante preguntó a qué se refería Ransus
con fantasmas
Ransus Cruz: Cuando estuvimos en el comedor, Kerf le comentó que
se estaba volviendo loco por escuchar voces, soñar y sentir presencias ¿se
recuerda señora Lidia?
Lidia Osbel: Si me recuerdo muy bien, ¿te refieres a que esto fue obra de
esos fantasmas que habitan esta posada? Pero no entendería el motivo.
Kerf Sylver: Eso no importa ahora, May está muy helada parece que
estuviese muerta.
Lidia Osbel: Llevémosla a mi habitación.
Ransus y yo como pudimos levantamos a May para llevarla cargada sobre
nuestros hombros hasta la habitación de la señora Lidia.
Ransus Cruz: ¡Está muy fría!
Kerf Sylver: Si le pasa algo a May juro que no descansaré hasta destruirte
¿ME ESCUCHASTE SANDRIA?
Al gritar con ese tono de amenaza a Sandria, Ransus y la señora Lidia
parecían estar sorprendidos, pero al mismo tiempo su mirada de asombro
reflejaba miedo en ambos.
Lidia Osbel: ¿Sandria?
Ransus Cruz: ¿Dijiste Sandria?
Lidia Osbel: Tenemos que apurarnos, me preocupa mucho que May esté
en ese estado.
Al caminar noté que ambos, tanto la señora Lidia como Ransus, estaban
muy nerviosos al yo nombrar a Sandria, pero mi mente estaba más enfocada

138
¡Aeón! Una vida prohibida

en el estado en que May se encontraba en ese momento, no podía pensar en


otras cosas ni sacar deducciones donde el primer problema era cómo curar
a mi amiga.
Al caminar por el pasillo apresurados por el bienestar de May pasé por
el mismo lugar en que por primera vez vi al caballero y me detuve, me dio
mucha nostalgia pero al mismo tiempo al mirar fijamente me di cuenta que al
fondo se encontraba un piano blanco que a lo lejos se notaba que tenía algunas
figuras en dorado, al verlo comencé a temblar pues sentía una energía muy
negativa que desprendía pero al mismo tiempo sentía la presencia de Sandria
dentro de esa habitación.
Kerf Sylver: ¡ES EL PIANO!
Ransus Cruz: ¿De cuál piano hablas?
Kerf Sylver: Ransus, te encargo a May, debo ir a esa habitación, ya
mismo.
Lidia Osbel: No irás a ninguna habitación, yo estoy muy mayor para
cargar a May y Ransus no podrá solo, no deberías estar con tus supersticiones
en estos momentos.
Kerf Sylver: Señora Lidia usted no entiende.
Lidia Osbel: No tengo que entender nada, lo único es que May necesita
ayuda, así que vamos.
Era la primera vez que veía a la señora Lidia exaltada, Ransus como yo
quedamos algo sorprendidos ante su reacción, volteé a mirar de nuevo hacia
la habitación para ver si aún seguía el piano allí pero como por arte de magia
ya no estaba y solo hablaba en mi mente conmigo mismo.
Kerf Sylver: ¡Maldición! el piano se encontraba en esa habitación, de
seguro es Sandria que quiere jugar con mi mente, pero lo encontraré Sandria,
te lo juro.
Seguimos caminando hasta la habitación de la señora Lidia, May cada
vez estaba más helada pareciera que entre más tiempo pasaba su cuerpo
más se congelaba, estaba totalmente estresado ya que, había visto el piano
que podía romper con la maldición que cargábamos todo el que escuchó o
lo vio y sumándose lo que en ese momento May estaba pasando, si seguía
congelándose más su cuerpo podía morir.
Kerf Sylver: ¡May puede morir! Necesito ayudarla de alguna manera.
Ransus Cruz: No morirá, ya encontraremos una forma.
Kerf Sylver: ¡Eso espero!

139
Beiker López

Al llegar a la habitación de la señora Lidia su puerta era totalmente de


hierro y sus manillas eran de oro.
Lidia Osbel: Ya abriré la puerta.
Sacó de su mano una piedra verde parecida a una piedra de esmeralda, la
forma de esa piedra era como una estrella, la colocó sobre la puerta donde
había un hueco de la misma forma de esa piedra, la colocó allí y la puerta se
abrió, la señora Lidia la empujó hacia adelante y pudimos entrar.
Lidia Osbel: Rápido pónganla en mi cama.
La habitación de la señora Lidia era muy amplia pero lo más asombroso
es que el cuarto era más elegante que cualquier otro lugar de la posada, entre
lámparas, adornos y hasta el techo llevaban incrustados diversas piedras
preciosas, pero aun así no era gran cosa puesto que al mirar al techo estaban
los mismos cristales, dibujos y letras que estaban en la habitación donde
dormía junto a May.
Kerf Sylver: Señora Lidia qué significan esos cristales, esas letras y
quién es esa mujer.
Ransus miró a la señora Lidia como esperando una respuesta a mi
pregunta, pero la respuesta que recibí fue muy clara y concisa.
Lidia Osbel: No estamos para estar preguntando en este estado que se
encuentra May, tráeme una cobija del armario, la que veas más cálida para
calentar su cuerpo.
Ransus fue por ella y yo solo me senté al lado de May agarrando su mano
fría, el verla así me generó inmensas ganas de llorar.
Kerf Sylver: Amiga tú querías venir a este pueblo en busca de una
aventura nueva, querías venir a bailar en ese festival y pedirle un deseo a
la luna. Desconozco cuál sería, pero sé que sería lo más grandioso porque
tú eres así, desde que te conocí mi vida cambió y te convertiste en más que
una amiga una hermana ¡te prometo que saldrás de esta! Juntos bailaremos
pidiéndole a la luna de plata ¡un enorme deseo!
Corrieron dos lágrimas en mis mejillas y rápidamente con firmeza me las
limpié, Ransus tocó mi hombro dándome aliento.
Ransus Cruz: Aquí está la cobija, arrópala.
Era una cobija de lana pura, arropándola recordé a Madrean Deian y salí
corriendo a buscarla.
Lidia Osbel: ¿A dónde vas Kerf?
Kerf Sylver: A salvar a mi amiga.
140
¡Aeón! Una vida prohibida

Salí corriendo apresurado en busca de la biblioteca, sabía que en ella


había alguna manera de ayudar a May, estaba seguro que ese frío que la
cubría era por magia pura que posiblemente Sandria usó en su cuerpo.
Kerf Sylver: Espero que en la biblioteca esté algo que me ayude.
Corría en búsqueda de la biblioteca, pero mientras más corría sentía que
solo andaba en círculos, de alguna forma tenía que encontrar esa biblioteca
y recordé el retrato donde por primera vez conocí de una mujer desnuda
que caminaba sobre el agua y pensé que se iba a ahogar. Seguía corriendo
mirando en las paredes buscando el retrato de “el cisne desnudo y el lago
escondido” hasta que lo vi.
Más adelante del cuadro estaba la puerta hacia la biblioteca, al llegar
intenté abrirla, pero estaba cerrada.
Kerf Sylver: Tengo que encontrar la manera de entrar; ¡Madrean estás
allí, ábreme por favor!
Cerré los ojos para ver si sentía la presencia de ella, pero no la podía sentir,
sin embargo, intentaba de muchas maneras abrir la puerta, al visualizarla
bien me di cuenta de que era parecida a la puerta de la habitación de la señora
Lidia y en el medio de ella estaba una ruptura como de una hoja de árbol.
Kerf Sylver: Qué extraño, la primera vez que vine era una puerta vieja
con manillas oxidadas, pero estoy seguro que es aquí donde está la biblioteca,
¿esa ruptura en forma de una hoja de árbol? ¡Claro! Es la llave para abrirla
es como la puerta de la habitación de la señora Lidia, pero ¿cómo rayos
conseguiré esa llave?
En ese momento no sabía qué hacer, encontrar la llave de esa puerta era
la única opción que se me presentaba en ese momento.
Kerf Sylver: La señora Lidia tiene que saber dónde está, le tengo que
preguntar y no dispongo de mucho tiempo.
Me devolví hacia la habitación de la señora Lidia a toda prisa para
preguntarle en dónde se encontraba la llave de esa biblioteca, al momento de
pasar sobre el cuadro de “el cisne desnudo y el lago escondido” una fuerza
extraña me hizo detener justamente al frente de él y miraba a los alrededores
para ver qué era lo que generaba esa fuerza.
Me percaté de que era el cuadro que emanaba esa fuerza y al mismo
tiempo también me di cuenta que no era una fuerza como tal, se trataba de
magia, me acerqué a observarlo un poco más de cerca y en su marco estaba
tallado algo escrito.
141
Beiker López

Kerf Sylver: El cuadro ¿está emanando magia? Al parecer hay algo


escrito en su marco lo leeré: “dedicado a la reina del elemento agua, diosa
poderosa, diosa adorada, que este retrato en tu representación como cisne
tú seas venerada”. ¿Reina del agua?
Al leer eso me generó esa incógnita de quién es esa reina del agua, en la
pared más abajo del cuadro estaba tallado otro escrito.
Kerf Sylver: Qué dice este escrito: “místico portal de viento, agua, tierra
y fuego escucha mi llamado, necesito que te abras y me lleves a la verdad,
llévame al mundo mágico a buscar aquello que me de paz, ábrete portal
místico… PUERTUN AERFEW”.
Ese escrito era un hechizo el cual había activado al recitarlo, sentí cómo
un viento cubrió todo el pasillo, el polvo que se encontraba en ese lugar tomó
forma e hizo un círculo a mi alrededor, unas velas que allí se encontraban
apagadas hacia los lados del cuadro se encendieron repentinamente junto
a una chimenea que se encontraba detrás de mí, del cuadro salió agua que
corría hasta donde me encontraba, comenzó a entrar en el círculo mojando
mis zapatos, intenté salir del círculo pero me di cuenta de que no podía ya
que había una especie de barrera como si fuese de vidrio.
Kerf Sylver: No puede estar pasándome esto en un momento así, el agua
está entrando como si estuviera llenando una botella vacía y si sigue así
¿moriré ahogado? ¡MALDICIÓN!
El agua iba por la mitad de mi cuerpo y cada minuto que pasaba el agua
aumentaba, comencé a dar golpes a esa barrera mágica invisible que no
dejaba que saliera de ese círculo. El agua me tapó completamente, el agua
dejó de salir del cuadro, el fuego de la chimenea y el de las velas comenzaron
a desprenderse de ellos y se unió con el polvo, el viento se tornó más fuerte
haciendo que el polvo, el fuego y el agua se unieran para crear un tornado
donde no podía ver nada, al terminar reaparecí en aquel bosque donde vi a
una mujer desnuda y las luciérnagas danzaban hacia un lago que en cuyo
fondo sus piedras brillaban como lámparas.
Kerf Sylver: ¿De nuevo este bosque? Ahora cómo saldré de aquí, la
última vez fui ayudado.
Al ver todo oscuro solo árboles y la luna no reflejaba la misma luz que
la primera vez que estuve allí, no sabía qué dirección tomar, pero sí sabía
que debía ir al lago, pero era difícil con tanta oscuridad, en ese momento se
escuchó un ruido entre los árboles y seguido de eso un sonido de un búho.
Kerf Sylver: ¿Un búho?
Una voz muy gruesa habló.

142
¡Aeón! Una vida prohibida

¿?: ¡Así es! soy un búho.


Comencé a buscarlo en los árboles, pero era muy difícil por la oscuridad,
pero seguía hablándome.
¿?: ¿Me estás buscando? No me podrás encontrar si solo usas tu vista.
No sabía si contestarle, pero me atreví a responderle.
Kerf Sylver: ¿No te podré encontrar con mi vista?
¿?: Estoy muy cerca de ti.
Observé a mis espaldas, pero no había nada, no se podía ver nada en el
lugar, en ese momento cerré mis ojos, podía sentir la presencia de un ser
que emanaba una magia muy poderosa. Cerré los ojos en búsqueda de la
presencia de ese búho, no me sorprendía el hecho de que un animal podía
hablar, me estaba acostumbrando a las cosas sobrenaturales que pasaban en
la posada y en su entorno, al concentrarme sentí la presencia de ese animal
pero para mi sorpresa.
Kerf Sylver: ¿Cómo es posible que estés en todo el lugar?
¿?: Te daré una adivinanza, si adivinas apareceré ante ti, la adivinanza
dice de esta manera “de día estoy oculta para poder dormir, amo la noche
estrellada donde puedo nadar, soy la luz de los ojos de los soñadores y soy la
magia de la oscuridad, puedo transformar a los hombres en bestias y ser el
cupido de muchas personas que juntas me admiran por la eternidad”.
Veía todo el bosque para ver si encontraba alguna pista, pero se me hacía
algo complicado, mientras pensaba miré al cielo y me di cuenta de que la
luna no estaba.
Kerf Sylver: ¿La luna? Es la luna, de día está oculta porque sale el sol,
ama la noche estrellada porque está despejada y se ve en su totalidad, es la luz
de los soñadores que caminan en las noches y ¿es la magia de la oscuridad?
Puede transformar el hombre en bestia… ¡hombres lobos! Y ser cúpido de
las personas que te admiran ¡las parejas! ES LA LUNA.
Al decir que era la luna, de los árboles comenzaron a brotar aquellas
luciérnagas que la primera vez que llegué danzaban hacia el lago, comenzaron
a brillar dando iluminación a todo el bosque, delante de mí se encontraba el
tallo de un árbol como si fuese cortado pero en sus lados había unas flores
amarillas, las luciérnagas que brillaban hicieron un camino hacia él para mí,
caminé hasta ese tallo, al llegar miré hacia arriba de él y vi que la luna estaba
posando justamente debajo dándole una luz fuerte de su plateado resplandor.
¿?: Eres bastante inteligente y tienes una magia increíble.
143
Beiker López

Desde el cielo apareció un gran búho de plumas blancas que en sus puntas
eran de pura plata, tenía una cola larga como una tela de seda, su pico era
dorado y sus ojos blancos, en su frente llevaba una piedra en forma de luna
que reflejaba todo, sus patas eran enormes y poco a poco fue descendiendo
hasta posarse sobre el tallo.
Moonbuh: ¡Mi nombre es Moonbuh! Guardián de la luna, sabio y mago.
Estaba muy sorprendido al ver a tan semejante animal y bello al mismo
tiempo, el lugar se tornó tan fresco con una paz enorme, las luciérnagas lo
acompañaban danzando a su alrededor y hacían que sus plumas brillaran
como las estrellas.
Kerf Sylver: ¡Mi nombre es Kerf! Solo soy una persona normal.
Moonbuh: ¿Crees que eres una persona normal?
Kerf Sylver: Siempre lo he sido, en mi vida siempre me he sentido
desapercibido, tímido y un poco elocuente cuando tengo confianza, pero solo
eso, ahora me pasan este tipo de cosas, también como si yo fuera algo tan
importante para esos fantasmas o qué sé yo qué pueden ser. ¿Qué puedo tener
de especial?
Moonbuh: Todos somos especiales, tenemos cualidades que nos hacen
únicos y admirables ante los demás, pero en tu caso es mucho más que eso.
Kerf Sylver: ¿Por qué? Eres un sabio y mago, por favor dime y aclárame
todas estas dudas que tengo en mi cabeza.
Las luciérnagas comenzaron a revolotear a mi alrededor y muchas se
juntaron al frente de mí.
Moonbuh: Mira fijamente la luz de las luciérnagas.
Moonbuh lanzó un rayo de su piedra en su frente y las luciérnagas que
brillaban en un color dorado cambiaron su color a plateado convirtiéndose
en un cristal.
Moonbuh: Esto es un cristal de luna, en él puedes ver las dudas que
tengas, pero solo te podrá responder tres, lamentablemente estoy en mi forma
astral y no puedo usar mucho mis poderes.
Kerf Sylver: ¿En tu forma astral?
Al preguntarle eso el cristal comenzó a mostrarme la respuesta a
mi pregunta que es igual a una duda, el cristal me mostró una estatua de
Moonbuh en una montaña de noche llena de flores y de ramas a su alrededor.
Kerf Sylver: No entiendo, por qué de noche sale una estatua de ti en una
montaña.
144
¡Aeón! Una vida prohibida

Moonbuh: Ese es mi verdadero cuerpo, fui convertido en piedra y solo


en las noches de luna llena puedo salir de mi cuerpo astralmente es decir
como si fuera mi alma la que ahora está al frente de ti, mis poderes son más
fuertes cuando la luna llena está en el cielo estrellado y puedo salir de mi
cuerpo ya que por el hechizo que me convirtió en piedra disminuyeron mis
habilidades y mi magia.
Kerf Sylver: ¿Cómo te convirtieron en piedra siendo un mago?
El cristal volvió a brillar mostrándome la respuesta a mi pregunta.
Kerf Sylver: He vuelto a hacer otra pregunta, ya van dos veces.
Moonbuh: Ten más cuidado al hablar.
El cristal me mostró una mujer semidesnuda con muchas serpientes
debajo de sus pies y Moonbuh se encontraba atrapado por las serpientes y
ésta con un chasquido de sus dedos hizo que lo mordieran y poco a poco fue
convirtiéndose en piedra.
Moonbuh: Me atrapó desprevenido, no supe quién era esa mujer, lo que
sí sé es que era muy poderosa y domaba a las serpientes como si fueran
sus títeres, su mirada era aterradora y me encontraba muy mareado en ese
momento, de esa manera fue cómo me convertí en piedra, por esa mujer,
ahora pregunta lo que necesitas saber, solo te queda un intento.
Cerré los ojos y solo pude pensar en una sola cosa en ese momento.
Kerf Sylver: Quiero saber dónde está la llave de la biblioteca
El espejo brilló y solo me mostró una cosa, a mí y al mismo tiempo
el cristal brilló de dorado y separándose en las luciérnagas que se habían
juntado para crearlo.
Kerf Sylver: ¿Yo? Yo no la tengo ni sé dónde está.
Moonbuh: Concéntrate y materializa con tu mente la llave en tu bolsillo,
tienes magia úsala; Madrean Deian me dijo que algún día volverías a venir
a este bosque y por eso dejó el conjuro para que pudieras leerlo, ella me
encargó de darte algunas cosas para que controlaras tu magia y pudieras
usarla, pero lamentablemente ya usé mucho de mi poder haciendo el cristal.
Sólo me quedé un rato pensativo y cerré los ojos para concentrarme,
aunque en mi mente habían demasiados pensamientos que podían impedir la
concentración solo pensé en ver a May con su cuerpo helado me dio fuerzas
para intentarlo y poder salvarla de una posible muerte.
Moonbuh: La concentración no es solo tener la mente en blanco, también

145
Beiker López

puede ser un fuerte sentimiento que te genere la fuerza para lograr lo que
quieras, tienes muchos sentimientos solo elige el indicado.
El solo pensar en ayudar a May era suficiente para lograr conseguir lo que
deseaba, la llave de la puerta de la biblioteca, sentí como una cálida energía
emanaba de mi cuerpo llevándolo a moverse solo y poniendo mis manos
aferradas al frente, al abrir los ojos todas las luciérnagas estaban revoloteando
a mi alrededor hasta llegar a mi mano haciendo la llave en forma de hoja de
un árbol. Al mirar hacia el frente Moonbuh no estaba y solo escuché su voz.
Moonbuh: Me alegra, tú puedes hacer que lo imposible se haga posible,
solo cree en ti, me tengo que despedir ya casi agoto mi energía, algún día
nos volveremos a encontrar y te ayudaré en lo que pueda, ¡me dio gusto
conocerte elegido!
Comencé a buscarlo en todos lados, pero no logré verlo, de nuevo habían
pronunciado que era el elegido, me había quedado con la misma duda de
siempre ¿elegido de qué?, ahora tenía que buscar una forma de irme ya que
tenía la llave y no podía perder más tiempo.
Kerf Sylver: Tengo que irme no puedo perder tiempo, tengo que buscar
salir de este bosque, como vine aquí no se podrá, la única forma es buscando
otra salida, pero la pregunta sería ¿cómo? Intentaré usar la supuesta magia
que tengo, es la única opción que me queda.
Cerré los ojos y me concentré con el mismo pensamiento de ayudar a May,
al abrir los ojos las luciérnagas hicieron un camino hacia un árbol gigante en
cuyo tronco se encontraba una entrada, camine hacia él y entendí que esa era
la salida que buscaba, al entrar cerré mis ojos, cayendo en un vacío, al llegar
al fondo caí en el piso del pasillo al frente de la puerta de la biblioteca.
Kerf Sylver: Eso dolió, bueno no es momento de que me queje, tengo
que buscar algo que me ayude en esa biblioteca.
Puse la llave en donde debía ponerla, la puerta se abrió y entré para buscar
alguna cosa que pudiera ayudarme a curar a May de ese congelamiento; al
entrar estaba la biblioteca sucia y llena de tela de araña comencé a rebuscar
algún libro que pudiera ayudarme. Entre la búsqueda en las repisas un
hombre me habló a mis espaldas.
¿?: ¿Qué estás haciendo aquí?
Me asusté y volteé apresuradamente para ver quién era y se trataba nada
más y nada menos que de Magnus Louis.
Kerf Sylver: Qué susto me has dado, busco un libro que me ayude.

146
¡Aeón! Una vida prohibida

Magnus Louis: ¿Un libro que te ayude?, a qué te refieres.


Me detuve un segundo y mis ojos se entristecieron luego miré a Magnus
contándole lo que sucedía.
Kerf Sylver: Me encontré con Sandria, al parecer utilizó un hechizo
sobre mi amiga y cada vez que pasan los minutos su cuerpo se congela, por
eso vine hasta la biblioteca, estoy seguro que aquí está un libro de magia que
me pueda ayudar.
Magnus me observó con ojos de admiración, se acercó dándome un
abrazo diciendo unas palabras que me sorprendieron demasiado.
Magnus Louis: No te preocupes, todo va a estar bien ¡lo sé! Siempre
buscas una solución a todo y brindas una alegría inmensa, eres decidido, me
ayudaste a mí en los momentos que más lo necesitaba, me acompañaste en
mi dolor y me diste fuerzas para continuar, a pesar de que no te vi ni te sentí,
comprendí que siempre estuviste cerca de mí, me brindaste compañía en
unos peluches, desde allí supe que no estaba solo.
A cada palabra me abrazaba más fuerte y la calidez que sus abrazos
brindaban me hicieron sentir nostalgia, lo abracé fuertemente con la misma
intensidad del sentimiento que tenía en ese momento, desplomándome en sus
brazos y desahogándome de tanta presión por todo lo que me había sucedido.
Kerf Sylver: No puedo más, me siento cansado, siento que agoto mis
energías y hasta a veces me siento frustrado, ahora con esto de May estoy
aterrorizado, solo quiero llorar ¡Magnus no sé qué hacer! Si no consigo un
libro que me ayude no sé qué voy a hacer.
Se agachó tomando mi cara con sus manos y lentamente limpió mis
mejillas de aquellas lágrimas que corrían en ellas, me miró fijamente y
solo sonrió, el brillo de sus ojos era diferente, pero al mismo tiempo eran
profundos como que intentaba ocultar el dolor más grande en su interior sin
embargo se notaba que existía una felicidad por haberme dicho esas palabras.
Magnus Louis: ¡Te ayudaré! existe un libro y Madrean Deian lo tiene
resguardado, pero lo liberaré para ti.
Se levantó y caminó hacia el medio de la biblioteca, elevó sus brazos
hacia el ancho de sus hombros como si fueran alas, cerró sus ojos y recitó
palabras.
Magnus Louis: “Con la potestad de lo visible, lo imposible se
materializará, en la magia no existe lo lejano, en la magia no existirá la
soledad, un poder divino que revele el secreto de este escenario saliendo a la
realidad, un poderoso hechizo recito que rompa la ranura de la invisibilidad”.
147
Beiker López

El lugar se reveló que en todo el suelo había unas cadenas que sostenían
un libro de color champan que apareció al frente de Magnus Louis, me miró
y sonrió de nuevo diciéndome otras palabras.
Magnus Louis: Esto es por todo lo que has hecho por mí, Madrean Deian
utilizó un poderoso hechizo para mantener ese libro a salvo de intrusos, ese
libro que contiene los hechizos más poderosos y prohibidos ¡úsalo bien!
Al decirme eso desapareció. No entendí el por qué se desvaneció, pero no
iba a desperdiciar lo que había hecho por mí, caminé hacia el libro encadenado
y toqué las cadenas para desatarlo, al tocar las cadenas me generó un choque
mental dándome visiones.
Vi a un ejército de monstruos oscuros en un pueblo destruido, personas
con un tatuaje en forma de hoja brillaba y parecían enfrentarlo en medio de
una lluvia tormentosa en la noche, sangre, gritos y truenos.
Kerf Sylver: ¿Qué fue eso?
Las cadenas se desprendieron del libro formando como una copa debajo
de él sosteniéndolo, lo abrí, efectivamente tenía muchos hechizos escritos en
una tinta de color azul rey. Hechizos de invocación, creación, elementales,
mágicos y muchos otros estaban escritos en él; al pasar las hojas llegué a
una donde la tinta era totalmente roja como la sangre misma y estaba escrito
un tipo de mensaje que al leerlo me sorprendió mucho, lo que estaba escrito
decía…
“Toda magia tiene un costo, por muy pequeña que sea la magia que se
use, existen miles de hechizos pero solo un hechicero pudo superar todas
las magias, hechizos, conocerlas y usarlas, su nombre era Kherbion el
creador, también conocido como rey del mundo de Aeón y del equilibro;
usó todo para que Aeón fuera un mundo totalmente estable, todo aquel
de corazón negativo, pensamiento o sentimientos era sentenciado a estar
encerrado en la oscuridad por la eternidad, al paso de los siglos Kherbion
dejó a siete discípulos que fueron entrenados, educados y criados por él,
así descansando en paz dejó el legado que mantendría el mundo en su total
estabilidad. Cada hechizo que está a continuación son hechizos prohibidos
que solo los discípulos pueden usar o alguien con una gran fuerza mágica
puede usarlos, pero corre el riesgo de pagar un alto precio”.
Kerf Sylver: ¡Pagaré lo que sea necesario para curar a May!
Al pasar la página leí el primer hechizo el cual se trataba de salvar la vida
de una persona a cambio de un deseo oscuro.
Darchromancia phaory: Salva la vida de quien esté en peligro, pero a

148
¡Aeón! Una vida prohibida

cambio pide un deseo oscuro que alimente al ángel caído que concede tu
petición de salvar la vida, para invocar este hechizo solo recita las frases
y debes pincharte el dedo para ofrecerle la sangre a Darchro, él oirá tu
petición y seguido deberás decir el deseo oscuro.
“Ángel caído que visitas los cementerios, te invoco con esta sangre de mi
dedo, concédeme la petición de salvar una vida y a cambio te diré mi deseo
oscuro para que te alimentes del miedo creciendo de poder de las tinieblas…
DARCHROMANCIA PHAORY”.
Al leer eso en mi mente el lugar se tornó muy escalofriante y una voz me
habló en el oído.
¿?: ¿Qué esperas? Haz el hechizo o tu amiga morirá en cinco minutos,
sé que no tienes ningún deseo oscuro, pero te diré uno, di que el elegido del
mal resucite.
Kerf Sylver: ¿Quién eres? no recitaré el hechizo siento que no es de
fiarse.
¿?: ¡ESTÚPIDO! Tu amiga morirá si no lo haces.
Esa voz tenía razón si no utilizaba el hechizo May iba a morir, de momento
sentí un pinchazo en mi dedo de mi mano izquierda.
Kerf Sylver: ¡Aush! Mi dedo.
¿?: ¡Recita el hechizo!
Comencé a recitarlo ya que no tenía ninguna opción.
Kerf Sylver: “Ángel caído que visitas los cementerios, te invoco con esta
sangre de mi dedo, concédeme la petición de salvar una vida y a cambio te
diré mi deseo oscuro para que te alimentes del miedo creciendo de poder de
las tinieblas ¡DARCHROMANCIA PHAORY!
El libro se tornó negro y las páginas comenzaron a moverse rápidamente,
en la biblioteca volaban los libros, todo temblaba, viento fuerte azotaba en
toda la biblioteca y una inmensa oscuridad comenzó a cubrir todo, de esa
oscuridad una niebla se dispersaba, todo se tornaba negro y muchos ojos
rojos emergían de lo oscuro, del techo, del suelo de todos lados salieron
esqueletos arrastrándose y uniéndose para crear un trono hecho de huesos y
calaveras, la oscuridad había tapado todo y solo el trono se podía visualizar,
una risa malévola resonó en todo lo oscuro y el frío hacía que de mi aliento
saliera humo.
Me quedé paralizado al escuchar cómo unos pasos se acercaban junto al
sonido de unas cadenas, también los rugidos de una bestia y una risa algo
149
Beiker López

maquiavélica, no podía mirar nada solo el trono hecho de huesos; una mano
gigante salió detrás del trono, comenzó a hablar:
Darchro: ¿Fuiste tú quien me llamó? Humano insignificante ¡TE
ATREVISTE A DESPERTAR A DARCHRO!
Por su voz se notaba que estaba muy enojado, tragué grueso y puse mis
manos en forma de puño para controlar la ansiedad y el miedo que estaba
sintiendo, se seguían escuchando pasos y al ver hacia la derecha lentamente
estaba un perro con ojos rojos lleno de cadenas y al mirar a la izquierda
estaba otro, mi cuerpo ya no podía controlarlo, temblaba demasiado por el
miedo intenso que sentía, al mirar para arriba unos enormes colmillos y al
mirar al frente en el trono estaba sentado un hombre de cabello largo pero fui
perdiendo la conciencia poco a poco hasta desmayarme.

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Fue una experiencia bastante fuerte para mí, tenebrosa y muy terrorífica,
el experimentar la oscuridad conjunta al frío, sonidos, una voz maquiavélica
y sonido de pasos con cadenas, es algo que no tiene explicación alguna, perdí
el conocimiento al no poder controlar tantas emociones fuertes como las que
en ese momento sentía…

150
¡Aeón! Una vida prohibida

¡AEÓN!Una vida Prohibida

Los nueve fantasmas


del piano viejo

Es increíble, cómo de manera diferente suceden las cosas, todo tiene un


porqué tan escondido que a veces nunca nos damos cuenta y sencillamente
nos lamentamos, todo lo que yo pasé en esa posada fueron enseñanzas muy
grandes para mí, conocer potenciales, la fortaleza y el valor que tengo hacia
las amistades, entre muchas otras cosas más, querer salvar a May me llevó a
los límites de enfrentar miedos. Los fantasmas que habitaban en esa posada
también me pusieron pruebas nuevas para mí y descubrí que era una persona
fuerte, que cada una de las personas tenemos esa fortaleza en nosotros, solo
debemos buscarla dentro de cada uno.

(Lirio de Luna, año 2016)


Al abrir mis ojos mientras me encontraba tirado en el suelo, no me
encontraba en la biblioteca, no había oscuridad ni perros con ojos rojos, ni
cadenas ni nada terrorífico como un demonio, me encontraba en un lugar algo
tenebroso pero estaba desconcertado totalmente del solo hecho de no saber
por qué aparecí en un lugar así como lo es un cementerio, donde las tumbas
estaban hechas de pajas enterradas en el suelo, ramas de árboles tiradas por
todos lados y escuchaba muchas voces de personas que me atormentaban
mis oídos y a mi cabeza, comencé a caminar escuchando las voces que solo
decían “libérenme”, “ayúdenme”, “por qué” otras voces lloraban y no
entendía nada ni quiénes eran o de dónde provenían.
Kerf Sylver: ¿Qué son estas voces que me están atormentando? ¿Qué es
este lugar?
Seguí caminando y al ver alrededor vi una chica con una flor blanca en su
mano parada en una de las tumbas, fui hasta ella gritándole.
Kerf Sylver: ¡HEY! HOLAAA, ¿ME PUEDES DECIR QUÉ ES ESTE
LUGAR?

151
Beiker López

Al llegar a donde estaba vi lágrimas en sus mejillas, se arrodilló en el


suelo, colocó la flor y comenzó a hablar.
¿?: ¡No lo entiendo! Por qué tenía que pasar de esta manera, tantas
muertes por una guerra ESTÚPIDA, no lo comprendo, no lo entiendo, ¿tenía
que pasar de esta manera tan cruel?
Intentaba preguntarle qué había pasado y cuál era esa guerra.
Kerf Sylver: ¡Oye! ¿Qué sucedió aquí? Me podrías decir.
Las voces eran más fuertes a medida que pasaba el tiempo.
¿?: Ya no te volveré a ver más, ya no iremos más a las aventuras en el
bosque, ya no bailaré contigo en el festival de las mariposas ¿POR QUÉ?
Su tristeza era grande, así como cada lágrima que derramaba en sus
mejillas, no entendía nada, pero no quería verla triste, aunque no la conociera.
Kerf Sylver: No llores por favor.
Intenté tocarla para darle consuelo, pero mi mano traspasó su cuerpo, ella
sintió mi presencia y volteó.
¿?: Padre, ¿eres tú?
Comencé a ver mi mano un poco impresionado de no poder tocarla.
Kerf Sylver: No pude tocarla… ¿soy un fantasma? Por eso es que no me
escucha.
La chica se levantó mirando a todos lados pidiendo, con lágrimas en sus
ojos, que su padre se manifestara,
¿?: Padre por favor no me dejes sola, ven no me dejes, abrázame.
Mi corazón se aceleró y aquellas voces de lamento me comenzaron a
susurrar cosas que no podía entender, escuché la voz de un hombre.
¿?: Di “plegarias de los caídos”.
Al escuchar lo dije en voz alta.
Kerf Sylver: “¿Plegaria de los caídos?”.
La flor que se encontraba en el suelo, la cual la chica colocó en la
tumba brilló y en cada una de las tumbas salió una luz los cuales se fueron
transformando en personas, pero solo sus siluetas, al frente de la chica, la
luz de la tumba donde ella lloraba se transformó en un hombre alto el cual le
habló y la abrazó, ella impresionada de ver a su padre rompió en llanto; todas
aquellas personas caminaron hasta mí diciendo gracias, mientras el padre de
aquella chica le hablaba.

152
¡Aeón! Una vida prohibida

¿?: Hija mía no llores, no estás sola yo estaré contigo siempre, sé fuerte
mi niña que pronto llegará aquella persona que liberará a este mundo de las
catástrofes de la guerra que se avecina.
¿?: Padre, no me dejes, te lo pido, cómo sabes que llegará si cuando más
lo necesitamos no llegó.
¿?: ¡Hija! Nuestra esperanza llegó, gracias a él estoy aquí abrazándote y
puedo hablar contigo, ya pronto llegará, mi amor ¡confía en mí!
¿?: Está bien padre confiaré en ti, seré fuerte porque así somos padre,
nuestro clan es así ¡fuerte!
¿?: ¡Así es hija mía! Nuestro clan es fuerte y todos nosotros que
pertenecemos a él estamos orgullosos de ti, solo míralos a todos, no los
defraudes porque todos tenemos la fe en ti
¿?: ¿Padre quién es él? No puedo ver muy bien su rostro, pero no es del
clan, sé que está aquí puedo sentir su presencia.
¿?: Él es el que salvará a estas tierras hija mía, él fue quien pudo hacer
que habláramos, pero ya se tiene que ir y nosotros también hija, no pierdas
las esperanzas que pronto él vendrá a salvarnos.
Al decir eso se desvanecieron cada una de las almas ascendiendo al cielo,
la flor aún brillaba y la chica se acercó a mí, tomó mi mano y simplemente
dijo: gracias; caí de nuevo desmayado despertando en la biblioteca tirado en
el suelo como si nada hubiera pasado en ella.
Kerf Sylver: Qué cosas tan raras me suceden a mí, quiénes serían esas
personas que pertenecen a un clan, de seguro estaba soñando de nuevo, qué
pasó con ¿la oscuridad?, ¿el libro? Y ¿May? Tengo que ir a verla.
Salí corriendo apresuradamente hacia la habitación de Lidia preocupado
de que May hubiese muerto por el tiempo que duré inconsciente o dormido, la
verdad no sabría cómo tomarlo, pero solo en mi cabeza tenía un pensamiento
el cual era conseguir a May viva, corriendo entre pasillos llegué hasta la
habitación y al entrar desesperado no se encontraba absolutamente nadie
dentro de ella y en la cama no estaba May.
Salí nuevamente corriendo con el corazón muy acelerado de encontrarme
con la noticia que May murió y todo por la culpa de un hechizo, todo por
no poderla ayudar; corrí hasta el comedor para ver si estaba la señora Lidia
o cualquier otra persona que me diera respuesta de dónde estaba mi amiga,
al llegar encontré muchas personas arreglando cada espacio del comedor
y otras cocinando, entré agitadamente de tanto correr mientras todos me
observaban y sonreían.
153
Beiker López

Kerf Sylver: ¿DÓNDE ESTA LA SEÑORA LIDIA?


Todos me miraron asombrados por mis gritos, una de esas personas se
acercó hasta mí y simplemente me dijo que se encontraba en el jardín, sin
pensarlo dos veces salí corriendo hasta el jardín y al llegar muchas telas de
seda adornaban cada parte del jardín, luces doradas de esas que ponen en los
árboles de navidad, lámparas de cristales, adornos con rosas entre blancas y
rojas llenas de luces, en la estatua de esmeralda habían muchas rosas de todos
los colores que las personas del pueblo dejaban como honrándola a través de
ellas, la fuente se encontraba iluminada con las mismas luces que adornaban
todo el jardín a pesar de ser de día era hermoso ver cómo todas las personas
del pueblo se encontraban en la posada para ayudar con el festival, me detuve
al ver lo hermoso que estaba quedando y al ver hacia la fuente estaba May
sentada
Kerf Sylver: ¡MAY!
Al verla no pude aguantar las ganas de salir corriendo para abrazarla, la
abracé diciéndole que gracias a Dios estaba viva.
Kerf Sylver: Gracias a Dios, perdón por no ayudarte, de verdad perdón.
May Castell: No tengo nada que perdonarte, sé que hiciste un esfuerzo
para ayudarme y eso vale más, además ¿estoy viva no?
Pero en mí surgían preguntas.
Kerf Sylver: ¿Cómo te curaste?
May Castell: ¡La verdad no sé! Solo abrí mis ojos y estaba sola en la
habitación, lo único que recuerdo es que estábamos en una situación con
esa mujer llamada Sandria y me congeló diciéndome que iba a morir, tengo
recuerdos vagos y alguno de esos es cuando te escuché hablar diciendo que
me ibas a ayudar y salvar.
Solo pensaba si fue todo eso que viví antes de despertar en la biblioteca lo
que desvaneció el hechizo, era algo muy extraño, pero estaba feliz de saber
que May estaba viva y no murió por causa de Sandria mas, sin embargo, la
perturbación de aquella maldición de piano también ocasionaba en mí mucha
incertidumbre.
May Castell: No te preocupes todo estará bien.
Kerf Sylver: Eso espero…
May Castell: ¿Está quedando todo muy hermoso cierto? muchas
personas han venido del pueblo a ayudar a decorar, otras a cocinar y algunas
simplemente a observar en qué pueden colaborar.
154
¡Aeón! Una vida prohibida

Kerf Sylver: La verdad todo está muy hermoso.


Ver a una cantidad de personas ayudando cada una con una sonrisa
plasmada en sus rostros, no había una pizca de tristezas en ellas, parecía que
el festival las unía como una gran familia la cual desbordaba amor.
Kerf Sylver: ¿No te parece extraño?
May Castell: ¿Qué cosa?
Kerf Sylver: Cuando llegamos las personas de este pueblo se llenaron
de alegría al vernos como si fuéramos algo especial para ellos y ahora todas
están felices, están llenas de amor ¡míralas! como si no hubiera nada que les
impidiera ser felices, no hay tristezas ni preocupaciones, me siento como en
mi propio hogar.
May Castell: También lo creo.
Una niña de aproximadamente nueve años se nos acercó, diciéndome
unas palabras que nunca esperé, me miró fijamente y sonrió.
Sharon Nouwen: Afortunado de tener la magia de unir los corazones de
todos los que te rodean, me llamo Sharon Nouwen.
No pude evitar la sonrisa en mi cara y decirle gracias; la niña simplemente
caminó hacia la multitud de personas que ayudaban, yo me quedé con ese
sentimiento internamente cubriéndome cada espacio de cada vacío que no
pudiera entender, la sonrisa de mi cara no era la misma sonrisa que te ocasiona
un momento divertido, sino la sonrisa sentimentalmente de emoción, May
me observó tomando mi mano.
May Castell: Ven vamos a ayudar.
Ambos nos paramos para ayudar en alguna cosa que hiciera falta, al llegar
a preguntar en qué podíamos ayudar, la señora Lidia se nos acercó para
pedirnos que fuéramos al pueblo con el señor Jhoel a buscar más arreglos de
flores y en ese momento recordé la carta de mis abuelos y sin pensarlo acepté,
el señor Jhoel nos esperaba a las afueras de la posada con su camioneta verde.
La atmósfera se tornó tan diferente, el aire que soplaba era tan ligero como
la caricia de quien te quiere y te aprecia, las personas que iban llegando a la
posada llenas de flores en sus manos, sonrisas en sus rostros, nos saludaban
educadamente con cariño, sus ojos brillaban igual a los ojos de May que
observaba el lugar mientras la brisa nos envolvía cálidamente.
Nos subimos a la camioneta y arrancamos para ir al pueblo a buscar
algunas flores que nos hacían falta para la decoración de la posada para el
festival, en el camino hablábamos de todo un poco, la verdad la felicidad

155
Beiker López

nos arropaba luego de tantos percances que me sucedieron en la estadía


de la posada, aún sin embargo no dejaba a un lado aquel pensamiento del
piano viejo, pero tenía una corazonada la cual simplemente me decía “vive
la felicidad que sientes”, recordé la plaza que se encontraba en el camino
en la cual mis abuelos me dejaron una carta con la rosa que sembré allí y
al pasar por allí para mi sorpresa al ver por la ventana habían millones de
rosas, muchas personas estaban contemplando la belleza de esa magia de la
naturaleza, entró en mí una emoción gigantesca junto a una sonrisa gritándole
a May y al señor Jhoel que observaran la magia que había sucedido en ese
lugar donde por última vez vi a mis abuelos.
Seguimos rumbo al pueblo y en el camino las personas nos saludaban;
al llegar al pueblo era increíblemente grandioso las maravillas que nuestros
ojos podían ver, decoraciones, luces y hasta telas de seda de color blanco por
todo el lugar, las calles adornadas, cada edificación eran un espectáculo. A el
señor Jhoel le brotaban lágrimas.
Jhoel Osbel: Las personas decoran de esta manera muchachos, rendirle
tributo a su festival les llena de felicidad y vida, este festival que se celebra
hoy no es sencillamente algo ordinario sino extraordinario ya que todos nos
unimos en un solo lugar, unimos nuestras esperanzas, nuestro cariño y la
felicidad en una sola noche, es por ende que ven a las personas tan felices.
Me llena de alegría ¡GRACIAS!
En ese momento entendí que a veces las lágrimas no son simplemente la
tristeza que tienes en el corazón, sino que son la potestad de tus sentimientos
que avivan cada una de ellas y en este caso el señor Jhoel avivó la felicidad
y la representó en una sonrisa junto a sus lágrimas, nosotros solo sonreímos
y nos sentimos muy halagados, llegamos a la floristería y comenzamos a
cargar las flores en la camioneta, varias personas que se encontraban en
el lugar también nos ayudaron a subirlas entre sonrisas, entre felicidad y
comentarios de emoción por el festival, luego de recargar la camioneta de
infinita variedad de flores nos fuimos de regreso a la posada, en mi mente
seguía diciendo lo mismo que ya había pensado “me siento en casa” ya se
estaba acercando la noche, el sol ya estaba a punto de decir adiós en algunos
minutos.
Señor Jhoel: Chicos, observen.
May y yo nos miramos al no saber qué teníamos que ver, de pronto miles
de luciérnagas comenzaron a brillar en todo el trayecto era como ver el cielo
de noche, pero terrestre, cada segundo desde que llegamos este lugar nos
sorprendió con cada cosa por muy extraña que fuese.
Cada suceso te hace pensar, te hace entender y sobre todo valorar

156
¡Aeón! Una vida prohibida

diciéndote a ti mismo todo: tiene un porqué y una razón; al llegar a la posada


nos seguía sorprendiendo, la entrada estaba adornada con flores blancas
llenas de luces, telas de sedas que jugaban con el entorno para crear una
armonía de creación y elegancia, bajamos las flores que habíamos cargado
en la camioneta.
Señor Jhoel: Chicos no se preocupen por bajar las flores, deberían ir a
descansar un poco y arreglarse luego.
Kerf Sylver: Lo haré, me siento agotado.
Entramos, ver el jardín tan maravilloso cómo se había convertido en
un jardín extremadamente hermoso, con cada mesa, cada silla, cada cosa y
detalles, en uno de los espacios había instrumentos para tocar y poder bailar,
para mi impresión el piano que allí se encontraba era el mismo piano que
anteriormente no pude tocar por la situación en que se encontraba May, sin
embargo no quise hacer un alarde para no preocupar a nadie, pero ya sabía
que el piano se encontraba allí.
May Castell: Vamos a la habitación, necesito buscar lo que me pondré,
ducharme y luego arreglarme y sabes lleva su tiempo.
Kerf Sylver: Sí, lo sé te conozco muy bien, mientras yo iré a dormir un
rato, estoy agotado.
Fuimos a nuestra habitación, pero en el camino volví a escuchar la voz de
Sandria que resonó en mis oídos con un susurro.
Sandria Vermillión: Falta muy poco para verlos morir.
Solo disimulé, pero dentro de mí una rabia comenzaba a recorrer todo mi
ser, pero tenía que controlarme, de igual forma había algo que no dejaba de
hacerme sentir tranquilo, seguimos caminando hasta la habitación y al llegar
May se metió a ducharse para arreglarse.
Me acosté en la cama y cerré los ojos lentamente, mi imaginación
automáticamente comenzó a volar por aquellos mundos extraños, pero al
mismo tiempo extraordinarios que cada persona tiene en su mente; creé
en ese pensamiento nuevamente la escena que marcó en mí algo especial,
aunque no podía entenderlo mi mente siempre volvía a esa habitación vieja
con aquel piano lleno de polvo.
Kerf Sylver: Solo bastaron unas tonadas para voltear y verlo sentado
tocando, en un abrir y cerrar de ojos aquella habitación vieja se convirtió en
una lujosa y yo ya estaba encantado, aquellas ilusiones que bailaban junto
a nosotros, aquella orquesta que tocaba una hermosa melodía que se hacía
sentir en todos los sentidos, sus manos cálidas, su presencia y su forma de

157
Beiker López

bailar, que me hacía sentir diferente ¿ya estaba enamorado? Sin conocerlo,
aún quiero saber quién es, aún quiero conocerlo, volver a bailar uno, dos y
hasta tres valses con él, sin importarme absolutamente nada como en ese
instante, ese preciso momento y ese mismo lugar junto a él.
Abrí los ojos con esa sonrisa que te brota espontáneamente en el rostro
cuando existe un sentimiento verdadero, inexplicable también es aquella
persona que te inspira tanto sin siquiera poder estar con ella, que solo al
pensarla ya te llena los miles de sentidos que existen puesto que el amor,
los verdaderos sentimientos y los pensamientos cuando son reales te hacen
sentir cosas inimaginables.
Kerf Sylver: ¡Qué tonto soy! Me río solo, me siento diferente por solo
imaginar algo o a él.
Cerré los ojos nuevamente para dormir un poco y descansar, poco a poco
iba perdiendo contra el sueño hasta quedarme dormido.
¿?: Kerf… Kerf… KERF.
Al escuchar que gritaron mi nombre abrí los ojos y para mi sorpresa
estaba en otra habitación que no era donde estaba dormido, era totalmente
diferente y más elegante que cualquier otra habitación que haya visto de la
posada, en todo el frente había un espejo muy grande con bordes de madera,
me levanté de la cama hacia el espejo y me paré al frente de él como si fuera
un robot ya que, fue automático ir hasta él, al reflejarme no era yo sino aquel
caballero con el cual bailé, mi corazón se aceleró como nunca y solo sonreí,
mis ganas de hablarle y preguntarle muchas cosas aumentaban.
Kerf Sylver: ¿Por qué no me dices quién eres?, ¿Por qué no muestras tu
rostro ante mí?, ¿Por qué solo apareces en mis sueños, en mis pensamientos,
en mis imaginaciones y no en la realidad?, ¿dime por qué yo? ¿Qué quieres
de mí? ¿Por qué te pienso tanto? ¿Por qué me robas los pensamientos y no
lo entiendo?, te siento tan lejos pero al mismo tiempo tan cerca, apareces
y desapareces sin rastro alguno, quisiera conocerte más y ver en realidad
qué hay detrás de esa máscara que tienes en tu rostro, no necesito conocerte
de años para saber las intenciones que tienes y tus sentimientos, ¿acaso
tienes alguna cicatriz en tu cara que no te deja quitarte esa máscara? O
sencillamente no quieres que vea tu realidad, sé que algo te afecta, algo te
impide llegar hasta mí, ¿hiciste alguna magia para cautivar mis sentidos?
Porque no entiendo por qué me haces sentir así, ¡mira! estoy temblando, mi
corazón va a estallar y eso simplemente lo ocasionas tú.
El reflejo de él no se movía, visualicé bien dónde se encontraba y era el
mismo cuarto donde lo conocí, pero antes de transformarse, levantó su mano

158
¡Aeón! Una vida prohibida

derecha y con un chasquido se vio mi reflejo, estaba vestido como aquella


vez que bailé con él y el vidrio empezó a quebrarse hasta reventar hacia mí
haciendo que despertara de golpe.
Respirando rápidamente del susto, me di cuenta que estaba vestido como
en el sueño y al lado de mí se encontraba una cadena de oro con un medallón
en cuyo centro estaba dibujado un Pegaso y en sus alas nueve piedras
incrustadas las cuales eran rubí, zafiro, esmeralda, oro, plata, diamante, jade,
ónix negro y perla.
Kerf Sylver: ¿Qué está pasando? Estoy vestido como en el sueño y este
collar de quién será.
May salió vestida ya arreglada, con un vestido muy rojo pegado y muy
elegante, al verme me preguntó.
May Castell: ¿En qué momento te vestiste? Andas hermoso con ese traje,
pareces un príncipe.
Kerf Sylver: La verdad, ni yo mismo sé, solo desperté y ya estaba así.
Ya estábamos listos para ir al festival, ya se escuchaba la orquesta tocar.
May Castell: Ya no puedo esperar salir para ver el espectáculo.
Así salimos hacia las afueras de la posada específicamente hacia el jardín,
yo estaba aún algo extrañado por como desperté con ese traje blanco que
una vez tenía puesto y con ese collar que me puse, aparte era muy llamativo
y elegante a su vez, May solo me hablaba de lo emocionada que estaba por
la noche, la gran noche que tanto ella como yo esperábamos, sin embargo,
tampoco podía dejar a un lado ese pensar del no saber qué podría pasar con
la maldición.
Kerf Sylver: May no te mentiré, tengo algo de miedo.
May Castell: ¿Por qué, qué pasa?
Kerf Sylver: ¡No nada! Es hora de celebrar el festival de la luna.
May solo me observó, sabía que en mi mente pasaba algo que me
inquietaba mucho, no preguntó más, al llegar al jardín quedamos totalmente
anonadados de tantas personas que allí se encontraban.
Al llegar la señora Lidia junto al señor Jhoel caminaron hasta la estatua
de la diosa Esmeralda que estaba adornada con millones de rosas rojas
alumbradas, la señora Lidia con una copa llena de vino y vestida muy elegante
con un vestido de color verde, alzó la copa hacia la estatua pronunciando
unas palabras, uno de los meseros nos dio una copa llena de vino a May y a
mí para comenzar el brindis.

159
Beiker López

Lidia Osbel: Esta noche se celebra la unión de todos nosotros junto a la


esperanza y el amor que nunca falta en nuestros corazones, la abundancia
de todo en este pueblo se lo agradecemos a la diosa Esmeralda, la reina
de las rosas. Cada año la luna posa en el cielo estrellado en su máximo
esplendor plateado, lanzando su rayo de luz hacia nosotros y esa luz que
irradia hará cumplir el deseo más sincero de nuestros sentimientos mientras
se baila en honor a la diosa, así como ella tomó una piedra ofreciéndosela
en agradecimiento a la luna, este festival no es solo para adorarla a ella, sino
también para recordarnos que todos los que estamos aquí creemos en lo que
dicta cada uno de nuestros corazones y es por ende que el poder más grande
que podemos tener es el amor que sentimos por aquello que anhelamos, así
como la rosa es hermosa, así como la rosa florece expandiendo sus pétalos,
así mismo debe florecer ese sentimiento expandiéndose por todo nuestro ser
siendo nosotros las espinas que lo resguardan. Así con estas palabras damos
inicio a este festival conocido como el festival de la luna de plata ¡SALUD!
Todos alzaron sus copas diciendo “salud”; escuchar las palabras de la
señora Lidia que llegaron a mí en todos los sentidos me hizo sonreír; la
orquestra que allí se encontraba procedió a comenzar a tocar para que todos
los presentes bailaran para la diosa esperando que la luna diera su señal
posando sobre la estatua de Esmeralda, todas las mujeres que se encontraban
en el jardín se levantaron, todas hicieron una reverencia a Esmeralda y al son
de aquella orquesta danzaban, los hombres que las acompañaban hicieron
lo mismo luego tomaron de la mano a cada mujer con quien deseaban
bailar, por otra parte habían mujeres que deseaban bailar con mujeres y me
sorprendía tanto ver cómo las personas simplemente disfrutaban sin ninguna
discriminación, habían hombres que también danzaban uno con otro siendo
un baile libre donde lo que importaba era bailar, disfrutar y expresar quien
realmente eres, May se unió a las personas que bailaban igualmente hizo
su reverencia encontrándose con un caballero que la tomó de la mano para
poder bailar.
Kerf Sylver: Nunca había visto algo tan real como esto, nunca pensé
llegar a ver personas tan felices conviviendo una con la otra sin importar
su orientación sexual, este es el mundo que debería ser en su totalidad, un
mundo sin discriminación, donde las personas puedan ser quienes son, sin
críticas, sin miedos. Estoy feliz de haber venido a este pueblo.
La orquesta paró de tocar y las personas se detuvieron sin saber qué estaba
pasando, todos miraban desconcertados al no saber por qué paró de golpe y
fue cuando comenzó a sonar el piano.
Me sentí sorprendido de escuchar la misma melodía que me tocaba el
caballero, miré para ver quién lo tocaba pero solo era una persona de la

160
¡Aeón! Una vida prohibida

orquesta que tocaba, no pude evitar ir lentamente mientras todas las personas
me observaban y tomaban de sus manos para hacer reverencia para continuar
su baile, yo solo caminé hasta Esmeralda y con mi mano derecha hice la
reverencia correspondiente para bailar, no me importaba nada ese momento
solo con cerrar mis ojos, bailar con esa melodía me era suficiente.
Kerf Sylver: Estoy seguro, es la misma melodía que tocó, ¿cómo es
posible? Es inevitable no bailar y revivir ese momento.
Di inicio a mi baile, todos giraban en torno a Esmeralda y yo solo estaba
parado al frente de ella bailando, la luna estaba en su posición y la piedra que
sostenía aquella diosa brillaba a la luz de la luna que iluminaba todo el lugar,
eso indicaba que en ese preciso momento se debía pedir el deseo.
Kerf Sylver: No puedo evitar pensarte, no puedo evitar querer bailar
contigo una vez más, lo deseo con todo mi corazón en este momento.
Al terminar ese pensamiento, sentí cómo una persona tomó mi mano,
rápidamente al abrir mis ojos me sorprendí al ver a Magnus con una sonrisa
y una mirada profunda pero entregada, me sorprendí demasiado no solo por
ver a Magnus vestido de blanco muy parecido a mí, sino ver el lugar lleno
de luciérnagas que brillaban y bailaban al paso de cada persona que estaba
entregada entre sí.
Magnus Louis: Permíteme bailar contigo y solo déjate llevar.
Kerf Sylver: ¿Por qué tú?
Ambos danzamos mientras él sonreía, pero en mi mente se estaban creando
confusiones, ya que sentía lo mismo que sentí al bailar con el caballero,
solo me preguntaba si todo ese tiempo fue Magnus quien se me presentaba
pero no entendía por qué se tapaba su rostro con una máscara y no hablaba,
mientras miraba su rostro con una sonrisa solo dijo unas palabras.
Magnus Louis: ¡Gracias! por lo que hiciste por mí.
Kerf Sylver: Yo no he hecho nada por ti.
–Tú fuiste quien me dio aquellos peluches, fuiste tú quien me abrazó,
fuiste tú quien me ayudo a salir de la manipulación del espectro, solo quiero
poder bailar contigo esta noche, permítemelo.
Su mirada era tan profunda pero al mismo tiempo reflejaba ese brillo que
solo aquellas personas que son decididas tienen, no sabía si ese brillo era por
alguna decisión o por un sentimiento único que se había creado y forjado
sin que se diera cuenta, sin embargo yo aún tenía algunas confusiones pero
no podía evitar también sentir lo mismo que venía sintiendo desde hacía un

161
Beiker López

tiempo, bailamos esa pieza de vals que tocaba la orquesta hasta el final, al
hacer una reverencia para terminar el baile, entre mí solo pensaba una sola
cosa...
Kerf Sylver: Si pone su dedo en mi frente él es el caballero.
Esperé, pero en ningún momento lo hizo, quedando un poco extrañado
al no saber si en realidad era él, la señora Lidia anunció a todos unos
comunicados.
Lidia Osbel: Damas y caballeros denle un aplauso a Melodic Heart
nuestra pianista de esta noche
Era una total sorpresa ver a Melodic con su elegante vestido rosado, pero
era extraño, se suponía que eran fantasmas que yo solo podía ver incluyendo
a Magnus.
Lidia Osbel: Un aplauso a nuestro creador de escenografía Magnus
Louis.
Los aplausos de todos hacia ellos eran increíbles, pero aun así seguía
pensando cómo era posible que los pudieran ver como si fueran personas
normales.
Lidia Osbel: Les presento a quien organizó todo para que esto fuera
posible Emperatriz Lawer.
Se levantó de una mesa donde se encontraba sentada agradeciendo los
aplausos.
Melodic Heart: Queridas personas que asistieron a este festival, quiero
presentarles a la estrella de esta noche Kerf Sylver que nos tocará el piano.
Quedé totalmente frío al escuchar que iba a tocar el piano, por la
conmoción no recordaba que ese mismo piano era el que estaba maldito por
Sandria, las personas me gritaban y me aplaudían dándome apoyo para tocar
el piano, no podía decirles que no a tantas personas, Magnus solo me dijo “ve
y tócalo, lo harás bien”, tragué grueso y caminé hacia el piano, los aplausos
nunca terminaban, me senté al frente del teclado, Melodic se acercó y en
el oído me susurro: “solo haz lo que te enseñé” tocándome el hombro se
dirigió hacia el público y yo solo comencé, al tocar la tecla sentí cómo algo
cubrió todo mi cuerpo y en mis pensamientos salía la melodía de una canción
dejándome llevar por ella.
Kerf Sylver: Esta melodía nunca la había escuchado, es muy hermosa y
soy yo quien la toca.
La piedra que sostenía la estatua brillaba más con el sonido del piano, en
162
¡Aeón! Una vida prohibida

todo el lugar las personas tenían sus ojos cerrados como si estuvieran flotando
en el agua o en su defecto volando; al terminar de tocar miré hacia el público
que de un momento a otro hacían silencio, al verlos a todos arrodillados y
May mirándome fijamente.
Ella hizo un chasquido y en su mano derecha le apareció un tabaco, lo
fumó lentamente lanzando el humo hacia el cielo, se volteó y con su mano
izquierda hizo levitar la piedra de la estatua y la atrajo hacia sí, yo veo a
Melodic, la señora Lidia, el señor Jhoel y al igual que Magnus estaban
haciéndole reverencia a May.
Kerf Sylver: Melodic ¿qué está sucediendo, por qué todos le hacen
reverencia a May?
May se voltea fumándose el tabaco crea un humo en todo su cuerpo
haciendo aparecer su verdadera forma.
Sandria Vermillión: Es hora de que vuelvas a donde en realidad
perteneces.
Kerf Sylver: ¿SANDRIA? ¡NO PUEDE SER! ¿DÓNDE ESTÁ MAY,
QUÉ HAS HECHO CON ELLA?
Sandria Vermillión: Tranquilízate, todo tiene una explicación.
Esta vez Sandria era muy diferente a la que había conocido, ésta tenía un
aspecto más sereno, estaba vestida con un vestido muy parecido al otro, pero
esta vez era gris pero con las mismas piedras azules, sus ojos eran totalmente
grises.
Sandria Vermillión: Debes estar totalmente confundido con todo esto, es
hora de explicarte todo.
Kerf Sylver: Qué me vas a explicar, ¿que maldijiste a todos con el piano,
que intentaste matar a May con un hechizo, para cobrar venganza de tu
pasado?
Melodic Heart: Estás equivocado Kerf, ella no es todo eso que dices.
Magnus Louis: Es cierto.
Sandria Vermillión: Yo soy Sandria Vermillión, soy la descendiente de
Esmeralda la diosa, también conocida como más poderosa del gremio de las
brujas y estoy aquí como la líder de los fantasmas del piano. Kerf tú eres de
Aeón allí es a donde tú perteneces, naciste aquí en esta tierra para tu propia
protección y resguardo de aquel mundo que actualmente está devastado, los
gremios más poderosos de Aeón se unieron para llegar a un consenso para
llevarte de regreso, a tus veinticuatro años ya eres apto para luchar, la magia
163
Beiker López

es un arma muy poderosa que si se usa para el mal puede acabar millones
de personas, tú aquí en esta tierra eres simplemente Kerf Sylver, pero en
Aeón eres la esperanza de muchos pueblos, clanes y grupos que perdieron la
esperanza o algún deseo de vivir.
No entendía nada de lo que pasaba, los gremios, Aeón, qué era esa
destrucción que podía causar la magia, no entendía nada; sin embargo, aún
estaba cargado de rabia dentro de mí de no saber qué había pasado con May.
Melodic, Magnus, la señora Lidia, el señor Jhoel, Sharon y Ransus salieron
caminando de una puerta junto con Emperatriz hacia donde estaba Sandria
todos tenían una capucha de la cual salía una capa que tocaba el suelo.
Sandria Vermillión: Te presento a los nueve fantasmas del piano viejo,
así nos quisimos llamar, ya que gracias a ese piano que acabas de tocar
pudimos venir, cada uno depositó su magia en él para crear un portal hasta
aquí.
Melodic Heart: Kerf mi magia ya la conoces, creé el piano con ella.
Magnus Louis: Yo lo decoré con mi magia para que resista cualquier
hechizo, es por eso el color blanco con figuras doradas.
Emperatriz Lawer: Yo rompí la ley de espacios, es decir poder viajar
de un mundo a otro, pero solo pude usar ese hechizo en el piano, por eso el
piano nos ata acá.
Ransus Cruz: Mi magia es la manipulación de mentes, para mí fue fácil
manipular la mente de May y de cualquier persona para hacer que vinieras
aquí.
Sharon Nouwen salió como una niña y luego…
Sharon Nouwen: Mi magia es la transformación, siempre puedo
transformarme en cualquier cosa que quiera sea objeto o ser viviente, así
pude observarte y cuidarte mientras venías a este lugar. En realidad, no soy
una niña, tengo veinticuatro años.
Lidia Osbel: Mi misión era cuidar que estuviesen bien y no sospecharan
absolutamente nada, aunque no nos veías siempre estábamos cerca de ti en
forma astral, tanto yo como Jhoel.
Señor Jhoel: Siempre estuve detrás de ti.
Sandria Vermillión: Como líder mi misión era recargar la piedra luna
con tu poder para así volver a abrir el portal y llevarte de regreso, por lo cual
se necesitaba que tocaras la melodía de la luna para recargarla, esta piedra es
la que puede abrir de nuevo el portal y es aquí donde Madrean Deian como

164
¡Aeón! Una vida prohibida

estratega y guardiana de los libros de magia y hechicería entra en esta misión,


su deber es hacerte entender lo poderoso que puedes ser, sin embargo, no he
sentido su presencia desde hace algún tiempo.
En mi mente pasó toda la travesía que pasamos May y yo hasta este
pueblo, que nada fue coincidencia todo fue planeado por los fantasmas para
yo poder estar aquí y poderme llevar a donde según ellos yo pertenecía.
Kerf Sylver: Ahora todo tiene sentido, nos pareció raro a May y a mí
que nuestros padres al decirles que íbamos de viaje dijeran que sí, nunca me
pregunté cómo May se enteró de la existencia de este pueblo y este festival.
Al venir ya había visto a Ransus es decir ¿que siempre estuviste cerca de
nosotros para manipular los pensamientos de May? al llegar fuiste el primero
en bajarse e ir hasta las afueras, entonces Jhoel nos estaba esperando, la
llamada a la posada ustedes la habían previsto sabían que al ver ese cartel no
tendríamos otra opción de quedarnos aquí.
Las personas del pueblo ¡ya entendí por qué sonreían con felicidad! como
si fuéramos lo que estaban esperando y eran lo que estaban esperando, al
llegar a esta posada comencé a escuchar voces, de alguien que me llamaba, al
dormirme una especie de demonio quiso apoderarse de mí y el caballero ¿no
eras tú Magnus? en el comedor la señora Lidia soltó una carcajada luego de
eso pregunté dónde estaba Jhoel y una voz me dijo que estaba al lado de mí
¿eras tú Sharon la que me habló? Yo me había sentado en la silla principal del
comedor porque la señora Lidia me guió, es decir que en ese momento todos
ustedes estaban allí pero no podía verlos, el cuadro del lago, la biblioteca,
¿hasta mis abuelos también fueron obra de su magia?
La lección con Emperatriz y Magnus que casi muero, la carta de la
doncella ¿también es falsa esa historia? ¿Lo hicieron para que yo pudiera
aprender a tocar piano contigo Melodic?
Ninguno está maldito, ahora que recuerdo May, Ransus y yo vimos
el supuesto piano maldito. ¡CLARO! Ransus lo hizo visible para que
creyéramos que lo vimos, por dios ¿todo es mentira? ¿TODO ES UNA
MALDITA MENTIRA? ¿Dónde está May? que hicieron con ella, todo este
tiempo fue un acto dramático por ustedes. May nunca estuvo en peligro de
muerte, Sandria la congelaste y dijiste que moriría poco a poco y que todos
morirían si no tocaba el piano, hasta fui a buscar un hechizo a la biblioteca
para curar ese hechizo que lanzaste ¿POR QUÉ HICIERON TODO ESO? y
pasar un mal rato con ese libro leyendo un hechizo prohibido.
Lidia Osbel: Era la única forma que teníamos, si hubiésemos llegado
diciéndote la verdad desde un principio no ibas a creernos nada y es cierto,

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Beiker López

todo estaba planeado, siempre estuvimos cerca de ti, en el comedor todos


nosotros también estábamos, pero solo podías verme a mí.
Sharon Nouwen: ¡Sí! fui yo la que te dijo que el señor Jhoel estaba al
lado de ti.
Ransus Cruz: Siempre manipulé los pensamientos de todo aquel que
estaba cerca de ti para hacer que vinieras, siempre anduve cerca de ustedes y
la mejor forma de hacerlo fue haciéndome su amigo y efectivamente yo fui
quien hizo posible que vieran el piano.
Melodic Heart: Mi misión era enseñarte a usar la magia de la rapsodia,
la canción que acabas de tocar es la canción de la luna, solo una persona con
un poder tan grande y nato como el tuyo podía tocarla, tenía que enseñarte lo
esencial de esta magia y dimos por seguro que lo harías.
Sandria Vermillión: Espera un momento, yo en ningún momento lancé
un hechizo hacia May, hay algo extraño en lo que dices, ¿qué demonio quiso
apoderarse de ti?
Magnus Louis: Yo no soy ese caballero de tus sueños, solo hablamos
en la lección que te dimos, anteriormente a eso nunca hice algún contacto
contigo menos en sueños.
La mirada cambió y de un momento a otro gritó.
Sandria Vermillión: ¿LEISTE UN HECHIZO PROHIBIDO DE QUÉ
LIBRO?
Kerf Sylver: Sí, así es, en ese momento salí corriendo a buscar algún
hechizo que pudiera salvar a May, al llegar a la biblioteca no encontré
ningún libro y en ese momento apareciste tu Magnus y liberaste un libro
que se encontraba encadenado, me explicaste que ese libro Madrean lo
tenía resguardado muy bien de algún intruso y lo abrí, leí un hechizo que a
cambio de salvar una vida tenía que conceder un deseo oscuro, el hechizo era
“Darchromancia phaory”, no lo quería leer me daba miedo pero una voz me
decía que si no lo hacia May moriría y lo conjuré.
Sandria Vermillión: ¿Darchromancia phaory, CONJURASTE ESE
HECHIZO? Cómo es posible, es un hechizo prohibido, ¿MAGNUS POR
QUÉ HICISTE ESO?
Magnus Louis: Yo nunca fui a la biblioteca, mucho menos a liberar el
libro de DON NECRON.
Sandria Vermillión: ¡Tenemos que actuar rápido y llevar a Kerf a su
mundo lo antes posible! ¿Kerf recuerdas cuál fue el deseo oscuro que pediste?

166
¡Aeón! Una vida prohibida

Les comenté que solo recordaba todo el lugar oscuro y luego de eso perdí
el conocimiento, despertando en la biblioteca como si nada hubiese pasado,
todos estaban muy preocupados y el lugar se tornó tenso.
Sandria Vermillión: No sabes la gravedad de todo, DON NECRON
es un poderoso demonio, sus hechizos y conjuros eran tan poderosos que
podía destruir pueblos con tan solo caminar en ellos, pudimos entre cinco
líderes quitarle el libro y que no pudiese usar más hechizos tan poderosos, de
los cinco cuatro murieron y la única que sobrevivió fui yo pero con heridas
sumamente graves.
Lidia Osbel: Madrean Deian luego de estudiarlo bien encadenó el libro
con toda su magia y lo escondió donde nadie pudiera encontrarlo ni siquiera
algún subordinado de Don Necron, ella nos explicó cada uno de los hechizos
que tiene ese libro y recuerdo muy bien el Darchromancia Phaory.
Todos parecían muy asustados y nerviosos.
Kerf Sylver: No estoy entendiendo nada de lo que dicen, ¿por qué están
tan asustados? EXPLÍQUENME
Señor Jhoel: De un momento a otro en Aeón aparecieron unos demonios
llamados “Los demonios Quimeras”.
Emperatriz Lawer: Cada uno de ellos tiene una magia muy poderosa
capaz de destruir todo a su paso y han causado tantos destrozos en nuestro
mundo de una manera radical, estudiamos muy bien sus propósitos y los
cuales son buscar la manera de revivir a su rey.
Melodic Heart: No sabían la existencia de ti y aún desconocemos cómo
lo supieron, pero saben que tú tienes una gran cantidad de energía que puede
revivir a su rey, sin él no podrán encontrar las coronas de Kherbion, no
podrán controlar a los guardianes de Aeón.
Comencé a sentir un dolor fuerte en mi hombro como anteriormente me
había pasado, sentí cómo mi cuerpo se adormecía lentamente hasta perder un
poco el conocimiento.
Sharon Nouwen: ¿Qué le está sucediendo?
Sandria Vermillión: ¿KERF TE SUCEDE ALGO?
¿?: ¡Ja! Qué ilusos son, nunca se percataron de mi presencia, de antemano
les digo que no soy Kerf, ¿verdad Emperatriz y Magnus?
Sandria Vermillión: ¿QUIÉN DEMONIOS ERES Y POR QUÉ USAS
EL CUERPO DE KERF?

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Beiker López

¿?: Cierto no lo necesito más, ya tengo lo que quiero.


Lidia Osbel: ¿QUÉ LE HARáS?
¿?: Solo haré que vomite sangre en este collar y luego saldré de su cuerpo.
Emperatriz Lawer: Perdónenos, nosotros sabíamos que él estaba en el
cuerpo de Kerf, no sabíamos sus intenciones, pero no nos quedó de otra que
callarnos, nos amenazó con matar a Kerf desde el interior de su cuerpo si
no cooperábamos con él, eso fue en la lección para canalizar un poco sus
sentidos, nos propuso un trato al cual no pudimos decir que no, y consistía en
decirle en dónde estaba el libro de Don Necron y así no lo mataría.
Sandria Vermillión: ¡No puede ser! Es decir…
Aquel espectro se quitó el traje dejando despejada la espalda la cual
tenía una marca que hacía que esa parte me doliera, aunque yo perdí un
poco el conocimiento, estaba consciente aun de ver y sentir lo que estaba
pasando, arrancó el collar de mi cuello e hizo vomitarlo de sangre, en un
instante un intenso dolor en mi hombro comenzó y como un aura negra fue
desprendiéndose de mí, quedando levitando un hombre encapuchado vestido
de negro en su totalidad apareciera y yo cayendo en el piso arrodillado con
muy poca fuerza.
Adunda Dracul: Así es Sandria, no son los únicos que están en una
misión en este mundo, me presento ante la gran Sandria Vermillión una de
las hechiceras más conocidas en Aeón por la hazaña de quitarle el libro a
uno de nuestros demonios quimeras, soy Adunda Dracul el rey quimera de
los vampiros, pero no estoy solo, Don Necron también está aquí buscando
su libro, quien fue que lo liberó para Kerf haciéndose pasar por el niño
pintor de Magnus y también Dantos Death vino con nosotros. Para mí fue
un honor introducirme dentro de los sueños del gran elegido de Kherbion y
esconderme en su cuerpo para aparecer cuando era necesario, marcándolo en
su hombro con un tatuaje.
Kerf Sylver: Yo te recuerdo, eres aquel hombre parecido a un demonio
de ojos rojos, apareciste el primer día que dormí aquí y sí recuerdo que me
tocaste la espalda y aparecí con quien yo creí que era Magnus.
Adunda Dracul: Ese estúpido no me dejó manipularte en su totalidad,
pero no importó igual tenemos lo que necesitamos, para Dantos fue un placer
hacerse pasar por Sandria, por Lidia y por Ransus creando dos espectros
idénticos, no te preocupes por tu amiguita estará bien en nuestras manos, es
hora de irnos, pero necesito el cuerpo de Kerf vivo.
Sandria Vermillión: Primero tendrás que pelear contra nosotros.

168
¡Aeón! Una vida prohibida

Adunda Dracul: Crees que podrás ganarme tan fácilmente, mira hacia el
cielo, la luna está llena y eso me da más poder del que puedas tener tú.
Sandria Vermillión: Eso lo veremos.
Ambos se dispusieron a combatir entre ellos, a Sandria se le notaba que
estaba algo preocupada pero su mirada seguía muy segura, Melodic me
levantó para irnos a donde me tenía que llevar con ellos mientras Emperatriz,
Magnus, Lidia, Jhoel, Ransus, Sharon y Sandria se ocupaban de ese demonio.
Melodic Heart: Vamos Kerf tenemos que ir al santuario.
Un poco exhausto por lo que Adunda había hecho le pregunté:
Kerf Sylver: ¿El santuario?
Melodic Heart: Sí, es el que está de camino acá, donde plantaste tu rosa,
ese es el santuario de Esmeralda y de allí abriremos el portal para ir a Aeón,
esa es nuestra misión sin importar morirmos en el intento.
Adunda abrió sus alas que estaban escondidas en su traje negro de cuero,
se quitó la capucha que lo tenía escondido y mostrando su aspecto blanco,
ojos rojizos como la sangre y sus dientes de vampiro.
Sandria Vermillión: Tengan cuidado, va en serio.
Adunda Dracul: No se escaparán tan fácilmente “Sangre de aquellos
corazones no purificados, soy el demonio de la noche oscura, aparezcan con
sus alas de muerte y revoloteen por su sed de sangre”. ¡Vampiros!
Millones de vampiros pequeños se generaban en todo el lugar, pero su
fuerza era grande.
Magnus Louis: Tengan cuidado esos vampiros a pesar de que son
pequeños tienen una fuerza muy grande.
Sandria Vermillión: Encárguense de ellos y traten de que no interfieran
con Melodic que yo tengo cosas pendientes con Adunda Dracul.
Adunda Dracul: Ven ¡QUERIDA!
Sandria Vermillión: Vas a conocer mi hechicería “Libero aquel
encantamiento que tiene sujeto al poder de la noche, que la luna bendice,
que el día oculta, aparece ante tu bruja diosa y hechicera nata, CALABAZA
EMBRUJADA, ESCOBA VOLADORA, TABACO DE LOS ESPÍRITUS Y
MAGIA TORTURADORA” Ahora sí mi QUERIDO, pelearé en serio.
Adunda Dracul: Déjame decirte que con esa apariencia te ves muy sexy,
serías una buena esposa.

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Beiker López

Ambos volaron hacia el cielo a pelear.


Ransus Cruz: Primera vez que veo a Sandria en su forma de bruja, nunca
la había visto con ese sombrero de cuero, su tabaco, la escoba, las garras,
parece un demonio igual.
Por culpa de los vampiros no podíamos movernos hacia los santuarios
ya que Melodic comenzó a luchar con ellos usando su magia de creación
de ilusiones, todos peleaban con los vampiros pero era tan difícil por ser
muchos con una fuerza abrumadora; Sandria volaba hacia el cielo en la
escoba peleando en los aires con Adunda y ambos se debatían con gran
poder, mientras Sandria lanzaba unas especies de calabazas que explotaban
muy fuerte, Adunda generaba murciélagos que se azotaban contra ella.
Adunda Dracul: Peleas bien para ser una brujita.
Sandria Vermillión: ¿No te has dado cuenta? que yo obtengo más poder
por la luna llena.
Ransus solo podía controlar algunos de esos vampiros que paliara a
favor de él con su poder de controlar mentes; Emperatriz lanzaba hechizos
como detención de tiempo, mientras Magnus creaba criaturas que cobraban
vida para pelear con él, la señora Lidia usaba las rosas para contra atacar
poniéndolas como el acero, el señor Jhoel solo usaba fuerza bruta y Sharon
se transformaba en cosas que pudieran darles golpes a los vampiros.
Lidia Osbel: Me preocupa Sandria en su forma de bruja, ella no tiene
control de sí misma.
En ese momento una de sus calabazas cayó al suelo explotando cerca de
nosotros, dejando inconsciente a Melodic al recibir un fuerte golpe contra la
pared y yo quedando herido, sin embargo, Sandria no se detuvo pues su pelea
contra Dracul era de su interés en ese momento, ya estaba pasando mucho
tiempo y todos estaban agotándose hasta el mismo Dracul se estaba sintiendo
con fatiga, bajo al suelo.
Adunda Dracul: Ya me harté de tanta fiesta, es hora de llamar a los
demás.
Sus ojos brillaron y poniendo su mano en el suelo creó un hoyo negro y
para su sorpresa salió una estatua en forma de grypho y luego de eso salieron
las gárgolas que aún peleaban entre ellos, se creó otro hoyo y de allí salió
Dantos con su espada y el caballero con la suya cayendo al suelo ambos
heridos de la misma lucha que comenzaron, de ver que no estaban donde
mismo, Don apareció detrás de Dracul igual que los otros dos encapuchado
y vestido de negro, Madrean Deian apareció al lado de Sandria muy herida.

170
¡Aeón! Una vida prohibida

Madrean Deian: Sandria ¿por qué estás en tu forma de bruja?


Sandria Vermillión: ¡Vete!
Con un solo movimiento de su mano mandó a volar a Madrean hacia el
suelo dándose un fuerte golpe, pero al ver lo que estaba pasando:
Madrean Deian: REALMENTE ESTO ES UN CAOS.
Todo el lugar estaba hecho un campo de batalla entre estatuas, vampiros,
gárgolas, los demonios quimeras y los fantasmas del piano viejo; muros
caídos, fuego, bombas, todo estaba siendo destruido, el caballero vio que
yo estaba tirado en el suelo lleno de sangre al igual que Melodic que perdió
el conocimiento, salió corriendo a cubrirme ya que varios vampiros estaban
revoloteando arriba de mí, llegó y mató a todos con su espada pero para
su sorpresa Dantos apareció e intentó dar un espadazo pero él se defendió.
Magnus apareció para resguardarme al igual que ese caballero, de pronto un
grito espeluznante se escuchó en todo el lugar.
Adunda Dracul: ¿Maldición va a aparecer aquí? Pensé que duraría más.
Sandria Vermillión: Qué está pasando, a qué se refieren.
Adunda Dracul: Cuando el chiquillo que manipulaba conjuró el hechizo
del libro de Don yo me apoderé de su cuerpo, el deseo oscuro que pedí para
que revivieran a mi rey fue que Darchro viniera a este lugar a terminar con
todos ustedes, pero por su intromisión y su culpa nosotros no hemos vuelto y
si estamos aquí también nos va a eliminar.
Lidia Osbel: HICIERON QUE VINIERA AQUÍ ESE DEMONIO.
Todos se abrumaron al escuchar que el demonio Darchro vendría, tanto
así que cada uno paró de luchar para resolver esa situación.
Adunda Dracul: ¡MALDICIÓN! Tendremos que hacer una tregua esta
vez ¡QUÉ INDIGNACIÓN!
Sandria Vermillión: ESO JAMÁS, PELEA.
De momento sonó otro grito más abrumador y desgarrador.
Don Necron: ¡IMBÉCIL! ACASO QUIERES QUE TODOS SEAMOS
DESTRUIDOS ¿HASTA KERF?
Emperatriz Lawer: Pero ¿Don Necron no puedes controlar a ese
demonio?, ese hechizo viene de tu libro.
Don Necron: Cállate, aquí no tengo el suficiente poder como para
controlarlo.

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Sandria Vermillión: No queda otra alternativa, necesito que todos


sincronicen su energía, para crear un portal antes de que por esa puerta llegue
Darchro e irnos a Aeón, hasta ustedes demonios y recuerden que esto fue su
culpa.
Todos concentraron su magia en Sandria, desapareciendo las estatuas, las
gárgolas y los vampiros.
Sandria Vermillión: “Puerta que nos trajo una vez, te vuelvo a abrir,
llévame al mundo donde somos y ciérrate para que nadie pueda ir ¡Letriun
Portal!
Se creó un rayo de luz y los primeros que se introdujeron en el portal
fueron los malos sin pensarlo, todos salieron corriendo hacia el portal ya
que se escuchaban los pasos de alguien que venía dentro de la posada como
si estuviera encadenado, el caballero agarró a Melodic y se la llevó cargada
mientras Magnus me tomó a mí; al caminar hacia el portal una cadena salió
desde la puerta y antes de que Magnus y yo llegáramos la cadena atravesó
a Magnus por el estómago, Madrean salió volando hasta mí, mientras yo
gritando intentaba agarrar a Magnus que casi inconsciente botaba mucha
sangre, Madrean tomó mi mano empujándome hacia el portal y yo gritando
el nombre de Magnus con lágrimas en los ojos fui cayendo, Madrean solo
me miró mientras caía y me lanzó una “bengala de los muertos” que hizo
que perdiera el conocimiento pero antes de perderlo solo vi cómo otra cadena
atravesó el cuerpo de Madrean y el portal se cerró…

(Biblioteca Ranhze, año 2057)


Así fue como terminó esta historia, algo trágica la verdad, en ese momento
ver cómo una cadena atravesaba a Magnus fue algo que nunca olvidará mi
cabeza, sin embargo olvidé ese momento por la bengala de los muertos que
Madrean Deian me había lanzado.
Bueno creo que ya es la hora de culminar, ya ha pasado mucho tiempo
desde que inicié contándoles cómo empezó todo. Gracias por venir y
procedamos a las firmas por favor.
En mi mente pensé:
Si supieran lo que viene después de esta duraría mucho más aquí y no
sería increíble sino extraordinaria la continuación de la historia donde conocí
lo que es un amor en la guerra y el odio como lo fueron Andria y Shadel, pero
estoy feliz de haber venido y ver la felicidad en las caras de todos y más que
eso poder hacer que la imaginación de cada uno vuele por los cielos.

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De verdad me hace muy feliz… pero esta historia que llevo en mi corazón
y en mi mente no ha terminado allí, este solo fue el comienzo de esa tierra
llamada Aeón y que yo apode ¡AEÓN: ¡UNA VIDA PROHIBIDA!

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