LA TEORÍA RELACIONAL DE JEAN BACKER MILLER, 1927 -2006

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El desarrollo de la personalidad va en concordancia
con los vínculos emocionales a partir de la misma
infancia del niño. La formación del concepto del YO
surge de la interacción y convivencia con otras
personas, sobre todo inicialmente de la relación con
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los padres. JEAN BACKER MILLER, 1927-2006
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 1. Infancia: El bebé se identifica con actividades de cuidado, responde a las emociones de los que le ofrecen cariño; desarrolla el
sentido de la comodidad y actúa para que la relación progrese hacia un mayor bienestar mutuo.
2. Etapa de los primeros pasos: El niño desarrolla otras habilidades, otros recursos físicos y mentales, nueva comprensión de las
relaciones, un sentido más complejo del yo y relaciones más complejas. El principal aspecto es mantener relaciones con las
personas importantes en la vida del niño.
3. Primera infancia: Desaparece el conflicto de Edipo y Electra 1; continúan las relaciones con las personas más cercanas. Si se
resalta que el padre es más valioso e importante que la madre el niño lo asimilará como verdadero.
4. Edad escolar: Las niñas muestran interés en las amistades, la familia y el aspecto emocional. Los niños en cambio, desarrollan
juegos y habilidades competitivas.

5. Adolescencia: Las niñas se apartan como respuesta a los criterios de la sociedad, según las cuales deben servir a los niños y a
los hombres y prepararse para servir a los hijos. Ellas sienten que los cambios físicos y sexuales son malos y reciben el mensaje
social de que deben ser menos activas, tanto en sus relaciones como en lo referente a ellas mismas. Los niños colocan la
autonomía muy por encima de los vínculos emocionales.
6. Edad adulta temprana: Las mujeres continúan la búsqueda de relaciones mutuas en su vida personal y laboral; escogen entre
estudiar una carrera o trabajar. En cambio los hombres jóvenes sienten que lo básico es establecerse por sí mismos en un
trabajo o en una carrera; buscan relaciones íntimas pero la gran mayoría de las veces no les dan importancia.
7. Edad adulta intermedia: Las mujeres continúan la búsqueda de la reciprocidad en las relaciones. Muchos hombres consolidan
actividades productivas; otros continúan en la búsqueda del auto crecimiento.

LAS ETAPAS RELACIONALES CONSISTEN EN:

8. Edad adulta tardía: En la mujer y en el hombre, es igual en el interés de tener una buena relación con la familia para
conservar la integridad durante la vejez.

Conclusión:

La teoría relacional de Miller indica que el crecimiento de la personalidad ocurre dentro de las relaciones con otras personas y esto lo
hace interactuando y conviviendo con las personas de su contexto que a lo largo de las distintas etapas que integran su vida, influyen
en su desarrollo.

Notas importantes de esta Teoría.

  La personalidad se forma en base a buenas relaciones partiendo desde la propia familia.
 Toma en cuenta ambos géneros.
 No toma en cuenta los aspectos negativos que pueden influir en cada etapa.
 Solo se enfoca en el desarrollo humano en óptimas condiciones, (Familias unidas)

En la actualidad, Sin embargo creemos que el aspecto económico, no ayuda favorablemente a esta teoría, para tener un buen desarrollo
humano, ya que nos encontramos en medio de una crisis, y por tal motivo en algunas familias ambos padres tienen que trabajar y
esforzarse más, para poder tener una vida de calidad, olvidando y dejando de lado a sus hijos, ya que no tienen el tiempo necesario,
para convivir con sus hijos y ayudarlos en la construcción de su personalidad.

Referencias.

Recuperado. https://prezi.com/zdqnp5bducep/jean-backer-miller-teoria-relacional/